- Los comienzos
- El imperio micénico
- La caída del imperio micénico y sus consecuencias.
- El origen de la polis
- La constitución del cosmos humano
- La nueva imagen del mundo
- Bibliografía general
Los comienzos
Desde los albores del segundo milenio antes de Cristo, el mediterráneo manifiesta una fractura entre oriente y occidente. El mundo egeo y la península griega se relacionan étnica y culturalmente con el resto de los continentes asiáticos y europeos
Entre los años 2000 y 1900 A.C. Grecia es invadida por los minios, los cuales se instalan y colonizan el litoral de Asia menor, invaden el Mediterráneo y luego se encaminan en dirección al Mar Negro, llegando a construir el mundo griego como se conoce en la edad histórica.
Paralelamente, en la otra orilla del mar, los hititas se expanden a lo largo de la planicie anatolia.
Para esta época los minios se han establecido en la Grecia continental y la vida urbana se desarrollaba al pie de las fortalezas Se desarrollan fuertes lazos culturales entre los hititas, aqueos y micenios.
Los micenios dominaron Creta desde 1450 a 1400, año en el que los dorios proceden a su destrucción final. Los aqueos se apoderan del Mediterráneo y colonizan Rodas, desde donde controlan los distintos puntos de la costa anatólica.
La principal explicación del mundo procedía de las cosmogonías, fundamentalmente las derivadas de La Teogonía de Hesíodo, que eran una narración sagrada que recoge las gestas de los héroes y la vida de los dioses para servir de modelo de conducta. Desde los comienzos se recurre a la construcción del mito para explicar la realidad. (FERRATER – MORA, 1964, Pág. 649).
"El mito es la expresión cultural de una sociedad predominantemente oral, sin tradición escrita. Como tal, es una historia que relata la fundación de la sociedad y la fundación del mundo, y mediante la cual el grupo humano se reúne consigo mismo, se comunica con su ser y con el ser. Al relatar el mito, la sociedad revela a sus iniciados la ley, es decir las "razones" de la conducta social establecida, expresadas no como respuestas a posibles preguntas —inimaginables e inefables— de los agentes, sino como respuestas dadas de antemano para cerrar el paso a cualquier pregunta, para impedir a priori, con soluciones de las que no es políticamente lícito (ni quizá psicológicamente posible) dudar, la aparición del vacío creado por un problema que se presentase separado de su solución. Según una configuración simbólica descrita ya por Lévy-Bruhl, el rasgo más sobresaliente del relato mítico es que contiene en su sólo acto la interrogación y la explicación, la pregunta y la respuesta: el mito revela la existencia de un enigma al mismo tiempo que narra su resolución: respuesta sin pregunta, solución sin problema. Ya que, en efecto, "pregunta" y "problema" evocan simultáneamente un vacío, una quiebra o una grieta en la que podría instalarse la abertura del no-saber que impulsa el movimiento hacia la verdad, característico de la razón".[1]
Vernant agrega que: "fueron Homero y Hesíodo quienes fijaron para los griegos una especie de repertorio canónico de las narraciones que ponían en escena a las Potencias del más allá y relataban a través de toda suerte de desventuras su nacimiento, genealogía, relaciones familiares, desventuras, funciones y dominios respectivos. En los dos poetas estos relatos están integrados en obras literarias que ( ) prolongan una tradición de poesía oral enraizada en el pasado" (VERNANT, 1983, Pág. 177).
Continuando con la evolución histórica, fundamental para mostrar el progreso de nuestro análisis, los micenios aparecen ligados a civilizaciones del Mediterráneo oriental, integradas con el Cercano Oriente que, pese a su diversidad, construye la amplitud de sus contactos, intercambios y comunicaciones.
De la interpretación de las tablillas en lineal B[2]se resuelven ciertas cosas y se suscitan otras nuevas planteadas por la arqueología. También el número de documentos que se posee es reducido y no se dispone de verdaderos archivos, sino algunos inventarios anuales escritos sobre ladrillos crudos, que sobrevivieron al incendio de los palacios.
Hay algunas lagunas para interpretar ese dialecto, ya que por ejemplo la palabra te-re-ta, se interpreta como: sacerdote, hombre del servicio feudal, barón hombre del damos obligado a prestaciones, sirviente.
La vida social está centrada en torno del palacio, que tiene una función religiosa, política militar, administrativa y económica a la vez.
Poratti agrega nos resume la importancia de esta cultura en las siguientes palabras: "¿qué significa el palacio? No es la casa de lujo donde vive el rey, sino el centro de un complejo Estado Burocrático, de dimensiones no muy grandes para nosotros, que supone la concentración, a todos los niveles –material económico, político, simbólico-, en el palacio, que es la sede de la administración y de la redistribución al conjunto del territorio" (PORATTI, 2011, Pág. 6)
El sistema de la economía se denomina palatina, el Rey concentra en su persona, todos los elementos del poder y aspectos de la soberanía, a través de los escribas, dignatarios del palacio e inspectores reales. La administración real, reglamentaba la distribución e intercambio, así como la producción de los bienes.
La mansión micénica, con el Megaron y la sala del trono en el centro, era una fortaleza rodeada de muros, que domina y vigila el llano que se extiende a sus pies, esta mansión preserva a los familiares del rey, jefes militares y dignatarios palatinos, el tesoro real y las reservas cumuladas repartidas en el palacio.
El rey recibe el título de wa-na-ka, ánax. El ánax gobierna también la vida religiosa, ordena su calendario, vela por los ritos, ordena los, las oblaciones vegetales y la celebración en honor de los distintos dioses. Al lado del ánax estaba el wa-ge-tas, jefe del laós (pueblo en armas).
Existía una analogía entre los micénicos y los hititas. Finalmente con la invasión dórica (Año 1150 a.c.), se destruye todo este conjunto y rompe por muchos siglos, los vínculos de Grecia con oriente para convertirse en una barrera.
La caída del imperio micénico y sus consecuencias.
La caída del poderío micénico y la expansión de los dorios en el Peloponeso, en Creta y hasta en Rodas, inauguran una nueva edad de la civilización griega. La metalurgia del hierro sustituye a la del bronce.
Es el de la lengua el primer testimonio de las transformaciones sociales. Los pocos términos que subsisten, como basiléus o témenos, no conservan ya, una vez destruido el antiguo sistema, exactamente el mismo valor.
La desaparición del ánax parece haber dejado subsistir en forma simultánea las dos fuerzas sociales con las cuales había tenido que transigir el poder: de una parte, las comunidades aldeanas y, de la otra, una aristocracia guerrera, cuyas familias más nobles conservan por igual, como privilegio del genos, ciertos monopolios religiosos.
La búsqueda de un equilibrio, hará nacer, en un período de turbulencias, la reflexión moral y las especulaciones políticas que definirán una primera forma de sabiduría humana, que aparece desde el alborear del siglo VII y va unida a una pléyade de personajes bastante extraños que Grecia no cesará de celebrar como sus primeros y verdaderos Sabios.
Desaparecido el ánax, que, por la virtud de un poder más humano, unificaba y ordenaba los distintos elementos del reino, surgen nuevos problemas: Poder de conflicto-poder de unión, eris-phlia: estas dos entidades divinas, opuestas y complementarias, señalan como los dos polos de la vida social en el mundo aristocrático que sucede a las antiguas monarquías.
En el plano religioso: cada genos[3]se afirma dueño de ciertos ritos, poseedor de fórmulas, de símbolos divinos especialmente eficaces, que le confieren poderes y títulos de mando.
La ciudad está centrada en el ágora, espacio público en el que se debaten los problemas de interés general.
Es la ciudad misma que se rodea de murallas para proteger y delimitar en su totalidad el grupo humano que la constituye.
Este cuadro urbano define un espacio mental, descubre un nuevo horizonte espiritual. Desde que la ciudad se centra en la plaza pública, es ya, en el pleno sentido del término, una polis.
La aparición de la polis constituye en la historia del pensamiento griego, un acontecimiento decisivo. La polis conocerá múltiples etapas y formas variadas. Desde su advenimiento, que se puede situar entre los siglos VIII y VII, por ella, la vida social y las relaciones entre los hombres adquieren una forma nueva, cuya originalidad sentirán plenamente los griegos. (Ídem. 2011 Pág. 39)
Llega a ser la herramienta política por excelencia, la llave de toda autoridad en el Estado, el medio de mando y de dominación sobre los demás.
El campo de la arkhé está sometido al arte oratorio y deberán zanjarse al término de un debate.
El arte político es un ejercicio del lenguaje y el logos. La retórica y la sofística son la que abre el camino de las investigaciones de Aristóteles y definen las reglas de la demostración, sientan una lógica de lo verdadero, propia del saber teórico.
Un segundo rasgo de la polis es el carácter de plena publicidad que se da a las manifestaciones más importantes de la vida social.
Este doble movimiento de democratización y de divulgación tendrá decisivas consecuencias en el plano intelectual. La cultura griega se constituye abriendo un círculo cada vez mayor y finalmente al demos en su totalidad.
Al convertirse en elementos de una cultura común, los conocimientos, los valores son llevados a la plaza pública y sometidos a crítica y controversia.
La supervisión constante de la comunidad ejerce sobre las creaciones del espíritu lo mismo que sobre las magistraturas del Estado. La ley de la polis exige que las unas y las otras sean igualmente sometidas a rendiciones de cuentas, éudynai. La palabra constituía, dentro del cuadro de la ciudad, el instrumento de la vida política, la escritura suministrará en el plano propiamente intelectual, el medio de una cultura común y permitirá una divulgación completa de los conocimientos anteriormente reservados o prohibidos.
Las inscripciones más antiguas en alfabeto griego que conocemos demuestran que, desde el siglo VIII, no se trata ya de un saber especializado, sino una técnica de amplio uso.
La escritura constituirá el elemento fundamental de la paideia griega. En virtud de la publicidad que le confiere la escritura, la diké, sin dejar de aparecer como un valor ideal podrán encarnarse en un plano propiamente humano, realizándose en la ley, regla común a todos pero superior a todos, norma racional sometida a discusión y modificable por decreto pero que expresa un orden concebido como sagrado.
Cierto es que la verdad del sabio, como el secreto religioso es revelación de lo esencial, descubrimiento de una realidad superior que sobrepasa en mucho al común de los hombres pero al confiarla a la escritura la expone a plena luz ante la mirada de la ciudad entera.
Los antiguos sacerdocios pertenecían en propiedad a ciertos gené y señalaban su familiarización especial con una potencia divina, cuando se constituye la polis, ésta los confisca en su provecho y hace de ellas los cultos oficiales de la ciudad. Los antiguos ídolos se convierten en imágenes sin otra función ritual que la de ser vistos.
Los sacra se convierten en una enseñanza sobre los dioses, los relatos secretos se despojan de su misterio y de su poder religioso para convertirse en las verdades que debatirán los Sabios.
El proceso de divulgación se realiza por etapas, en todos los terrenos encuentra obstáculos que limitan su progreso. Incluso en el plano político, ciertas prácticas de gobierno secreto conservan en pleno período clásico una forma de poder que opera por vías misteriosas y medios sobrenaturales (Esparta).
La laicización de todo un plano de la vida política tiene como contrapartida una religión oficial que ha establecido sus distancias en relación con los asuntos humanos y que ya no están comprometidas con las vicisitudes de la arkhé. En el terreno de la religión se desarrollan asociaciones basadas en el secreto. Las sectas y cofradías son grupos cerrados jerarquizados que implican escalas y grados.
Organizados sobre el modelo las sociedades de iniciación, a todos cuantos deseen conocer la iniciación, el misterio les ofrece sin restricción de nacimiento la promesa de una inmortalidad bienaventurada divulga los secretos religiosos. Las investigaciones de los primeros Sabios iban a continuar las preocupaciones de las sectas hasta el punto de confundirse con ellas.
Se concibe a los ciudadanos en el plano político como unidades intercambiables dentro de un sistema cuyo equilibrio es la ley y cuya norma es la igualdad. Esta imagen del mundo humano encontrará en el siglo VI su expresión rigurosa en un concepto: la isonomía (igual participación de todos los ciudadanos en el ejercicio del poder).
Las transformaciones sociales y políticas que determinan en Esparta las nuevas técnicas de guerra traducen en el plano de las instituciones aquella misma exigencia de un mundo equilibrado, ordenado por la ley, que los Sabios, hacia la misma época, formularán en el plano propiamente conceptual cuando las ciudades pasen por sediciones y conflictos internos.
Pero si la nueva Esparta reconoce así la supremacía de la ley y el orden, es por haberse orientado a la guerra, la reforma del Estado obedece a preocupaciones militares. Es para la práctica de los combates, más que para las controversias del ágora, para lo que se ejercitan los kómoioi. Tampoco la palabra podrá llegar en Esparta la herramienta política que será en otras partes ni adoptará forma de discusión.
La constitución del cosmos humano
La justicia aparece como un orden enteramente natural que se reglamenta a sí misma.
A través de esta laicización tan acusada del pensamiento moral ha podido renovarse y precisarse la imagen de una virtud como la sophrosyne.
En Homero la sophrosyne tiene un valor muy genera; es el buen sentido: los dioses la devuelven a quienes la han perdido.
La sophrosyne[4]adoptaría en el clima religioso de las sectas, una coloración ascética. Es una virtud de inhibición, de abstinencia, y consiste en apartarse del mal, en evitar toda mancha. Los males que sufre la colectividad son precisamente la incontinencia de los ricos, el espíritu de subversión de los . Haciendo desaparecer lo uno y lo otro, la sophrosyne realiza una ciudad armoniosa y concorde, donde los ricos, lejos de desear siempre más, dan a los pobres lo que les sobra, y donde la masa, lejos de sublevarse en rebeldía, acepta someterse a los que, por mejores, tiene derecho a poseer más.
El futuro ciudadano debe estar acostumbrado a dominar sus pasiones, sus emociones y sus instintos.
La sophrosyne somete así a cada individuo, en sus relaciones con los demás, a un modelo común de conformidad con la imagen que la ciudad se forma del , por so contención, el comportamiento del ciudadano se aleja tanto de la negligencia, de las trivialidades bufonescas propias del vulgo, como de las condescendencias y del orgullo altanero de los aristócratas, el nuevo estilo de las relaciones humanas obedece a las mismas normas de control, de equilibrio, de moderación, que traduce sentencias como: conócete a ti mismo>.
Manifiesta Solón que la ciudad forma un conjunto organizado, un kosmos, que resulta armonioso si cada uno de sus componentes está en su lugar y posee la porción de poder que le corresponde en función de su propia virtud. No hay derecho igual a todas las magistraturas, ya que las más elevadas están reservadas a los mejores, ni derecho igual a la propiedad territorial, la ley que ahora ha sido fijada es la misma para todos los ciudadanos hasta entonces era el orgullo>, la de los rico, lo que regía las relaciones sociales.
Ahora es la diké la que fija el orden de distribución. Son las leyes escritas las que reemplazan las pruebas de fuerza en que siempre triunfaban los poderosos y las que imponen ahora su norma de equidad. La homónoia, la concordia, es una armonía obtenida mediante proporciones.
El desenvolvimiento del pensamiento moral y de la reflexión política proseguirá en este sentido: se tratará de reemplazar las relaciones de fuerza por relaciones de tipo , estableciendo en todos los dominios una reglamentación fundada en la mesura y que aspira a proporcionar, a , los distintos tipos de intercambios que constituyan la trama de la vida social.
Antes y después, la reflexión del mito.
A principios del s. Vl, en Mileto, hombres como Tales, Anaximandro y Anaxímenes, inauguran un nuevo modo de reflexión acerca de la naturaleza, una investigación sistemática y desinteresada de una historia y de la cual presentan una theoria, del origen del mundo, de su composición, de su ordenamiento, de los fenómenos meteorológicos, proponen explicaciones sobre la generación de los dioses y del mundo.
Olof Gigón, en su libro Los Orígenes de la Filosofía Griega agrega: "asistimos en Anaximandro al nacimiento del lenguaje de la Filosofía griega. Es el primero de toda una larga teoría de conceptos que, hasta con su forma, son ya expresión de la abstracción, de la liberación de cualquiera de las cosas visibles del cosmos" (GIGÓN, 1995, Pág. 67)
Si bien no se abandona el mito y las cosmologías, cuyas aventuras, luchas y hazañas formaban la trama de las génesis que narraban la aparición del mundo y la instauración del orden; los hombres, la divinidad, el mundo, forman un universo unificado, homogéneo, todo él en el mismo plano. Las vías por donde ha nacido la phisis son perfectamente accesibles a la inteligencia humana: la naturaleza no ha operado en el comienzo de modo distinto de como lo hace todavía. No hay más que una sola phisis que excluya la noción misma de lo sobrenatural, no hay tampoco más que una sola temporalidad. No es lo original lo que ilumina y transfigura lo cotidiano, es lo cotidiano lo que hace inteligible lo original, ofreciendo modelos para comprender como se formó y ordenó el mundo.
Los filósofos jónicos, escribe Burnet[5]"han abierto el camino que la ciencia después sólo ha tenido que seguir. Seria enteramente falso buscar los orígenes en la ciencia jónica, en una concepción mítica cualquiera".
A esta interpretación se opone F.M. Cornford[6]"la primera filosofía se acerca más a una construcción mítica que a una teoría científica. La física jónica nada tiene de común, ni en su inspiración, ni en sus métodos, con lo que denominamos ciencia, ignora todo acerca de la experimentación".
Según Burnet los filósofos jonios habían descubierto la vía que la ciencia no tenido más que seguir con explicar la realidad a través de mitos. Esta idea implicaba la suposición de que el pensamiento racional "la filosofía en su forma originaria" había hecho aparición de un modo repentino, sin historia previa que investigar, como un "milagro" griego debido a las supuestas peculiaridades del espíritu griego.
Esta tesis del "milagro griego" no explicaba realmente nada y, además, mostraba un cierto eurocentrismo al no querer tampoco reconocer las influencias de los saberes babilonios y egipcios sobre los primeros pensadores griegos. Ante dicha concepción, Cornford sostuvo la tesis según la cual las reflexiones de los primeros jonios procedían de una reinterpretación y prolongación de los mitos cosmogónicos y teogónicos griegos
En la Teogonía de Hesíodo se pueden distinguir dos narraciones distintas del mito primordial. En una, el relato habla de dioses; Zeus lucha contra Tifón, el poder de la confusión y el desorden, para lograr la soberanía del universo. Este tipo de narración, del tipo de los mitos de renovación y de los llamados mitos de la realeza (parecidos a los dramas ritualizados que se representaban en Babilonia, con el principal protagonismo del rey que confirmaba, así, su dominio sobre la naturaleza y la sociedad), tuvo sentido en el ámbito de la antigua monarquía micénica. Pero la caída del imperio micénico y la expansión de los dorios por el Peloponeso, Creta y Rodas, inicia una nueva fase de la civilización griega (el denominado mundo homérico). Los ritos perdieron su función y su antiguo sentido. A esta fase corresponde la segunda versión en la Teogonía de los mitos de los orígenes: la lucha por el orden no es ahora obra de dioses, sino de principios naturales, aunque todavía con resonancias míticas: Caos, Luz, Día, Noche, Cielo, Tierra, Eros. Esta segunda versión de los mitos cosmogónicos actuó como modelo a las primitivas abstracciones de los físicos jonios: aquello que en el mito son poderes naturales personificados, en los milesios son cualidades abstractas naturales: lo que son se explica por las cualidades empíricamente conocidas, aunque pensadas abstractamente y generalizadas. De esta manera dice Cornford que "en la filosofía, el mito está racionalizado"
A partir de Cornford no se pone en duda el papel sistematizador de Hesíodo, pero no puede aceptarse que la filosofía sea simplemente una racionalización de los mitos. Para Hesíodo los orígenes de la tierra, del cielo, del océano y de todo cuanto contienen, todavía es fruto de matrimonios y de la procreación entre personajes sobrenaturales, y todavía manifiesta una excesiva proyección de la estructura social misma en los relatos míticos. No obstante, se reconoce que influyó directamente en el afán de encontrar un orden más allá del caos, y en la búsqueda de un único arkhé.
Además, se debe reconocer la influencia que ejercieron los saberes técnicos de los antiguos babilonios y de los egipcios, aunque es cierto que estos pueblos habían desarrollado técnicas eficientes, mediante un proceso de ensayo y error y mediante la búsqueda de correlaciones, pero nunca se habían preguntado por los fundamentos de dichas técnicas ya que, en sus culturas, el ámbito de las causas seguía estando dominado por el dogmatismo religioso.
Dada la revolución intelectual realizada por los milesios, Anaximandro de Mileto expresa un nuevo esquema cosmológico que se caracteriza por la concepción griega del universo. Esta nueva teoría rompe con la concepción religiosa y mitológica que sostenía hasta entonces que la tierra estaba sostenida por un soporte y que algún poder o elemento o porción del mundo estaba situada en una posición predominante ejerciendo el dominio del otro elemento o porción, y estaba dado por los religiosos, era secreto los ciudadanos no tenían posibilidad de debatirlo.
Vernant agrega: "En la escuela de Mileto, por primera vez, el logos se habría liberado del mito de igual modo que las escamas se desprenden de los ojos del ciego. Más que de un cambio de actitud mental, de una mutación mental, se trataría de una revelación decisiva y definitiva: el descubrimiento de la razón" (Ídem, 1983, Pág. 334).
La diferencia de la teoría de Anaximandro, radica entonces en el contenido profano libre de mitología. Se inspira en las observaciones y métodos de los babilonios, estos se ubican en el espacio representando la organización del universo y el orden del cosmos, las posiciones las distancias, las dimensiones, y los movimientos de los astros. A la tierra la dibujan sobre un plano habitado con sus países, mares, ríos. Es a través de estas observaciones la afirmación de su teoría de esta manera: ningún elemento o porción podría dominar a los demás por ser la igualdad y la simetría de los distintos poderes que constituyen el cosmos y lo que caracteriza el nuevo orden de la naturaleza es una ley de equilibrio igualatorio y de reciprocidad constante, ejemplificando esta idea: se localiza a la tierra inmóvil en el centro del universo (sin soporte alguno), está a igual distancia de todos los puntos de la circunferencia celeste y no tiene razón para moverse por lo cual el hombre puede andar con seguridad sobre el suelo porque basta con saber que todos lo radios de un círculo son iguales, de esta manera no está sometida a ninguna dominación porque el equilibrio y la igualdad de condiciones les impones una ley común. Para poder regular las relaciones humanas también se establecen un modelo de orden igualitario a través de esta nueva concepción del espacio.
El nuevo espacio social está centrado y en relación con este centro están los individuos y los grupos que ocupan posiciones simétricas, la ciudad (polis) está en el centro y esta valorizada porque está a igual distancia de los puntos extremos de manera tal que unos con otros están en relación de reciprocidad permanente y perfecta.
El mundo se vuelve entonces comprensible, racional, ya no se trata de la voluntad divina la que maneja los entresijos del cosmos (o, mejor, del kosmos), sino que los procesos naturales pueden bastar por sí mismos para dar cuenta del mundo.
En esta relación también aparece el espacio político donde también el centro de este espacio es una institución de la mesa pública, esta mesa es un símbolo de esas relaciones con las múltiples mesas domésticas a igual distancia de las distintas familias que constituyen la ciudad el objetivo es representarlas a todas por igual sin tener preferencia por ninguna, es un espacio centrado común y público igualatorio y simétrico y también constituido para la oposición, el debate y la argumentación. Esta nueva imagen del mundo se impuso con rigor para un conjunto de filósofos presocráticos y el pensamiento médico, de este pensamiento podemos citar a Alcmeon de Crotona[7]en pleno siglo V A. C. cuando define a la salud como el equilibrio de poderes: lo húmedo y lo seco, lo frío y lo caliente, lo amargo y lo dulce; la enfermedad resulta por el contrario de un elementos de los otros, pues la dominación exclusiva de un elemento particular es destructiva.
De esta forma asistimos al origen de un pensamiento de orden racional, donde se buscaba la explicación de la naturaleza y la realidad a través del pensamiento y la reflexión ¿Implica esto que se abandona el mito? seguramente no, los filósofos Milesios los continuaron usando en sus teorías, aunque ya no de una forma explicativa. No se debe dejar de considerar la importancia y riqueza que nos han brindado los mitos y las cosmologías. El pensamiento griego fue evolucionando hacia un mayor uso de las cualidades lógicas y argumentales. El hombre griego fue aumentando su interés en el hombre hasta que Platón lo considera uno de sus problemas filosóficos fundamentales.-
Libros
ABBAGANO, N. Historia de la Filosofía. Editorial Hora S. A. Madrid. 1994
COLESTON, F. Historia de la Filosofía. Editorial Ariel. Barcelona. 1991.
JAEGGER, W. Paideia. Los ideales de la cultura griega. Fondo de Cultura Económica (4 Tomos). México. 2001
JAEGGER. W. La teología de los primeros Filósofos Griegos. Fondo de Cultura Económica. México. 1952
GIGÓN, O. Los orígenes de la filosofía griega. De Hesíodo a Parménides. Editorial Gredos. Madrid 1995
KIRK, C; RAVEN, J. Los filósofos presocráticos. Editorial Gredos. Madrid. 1983
MONDOLFO, R. El Pensamiento Antiguo. Editorial Losada. Buenos Aires. 1942
MONDOLFO, R. Heráclito. Textos y problemas de traducción. Editorial Siglo XXI. México. 1966
PORATTI, A. Lenguaje, persuasión y política de Parménides a Platón. Seminario Intensivo de Filosofía Antigua. Fotocopiadora C.E.I.P.A. 2010
VERNANT, J. "Del Mito a la Razón. La formación del pensamiento positivo en la Grecia arcaica", Editorial Ariel. 1983.
Diccionario
AUDI, R. Diccionario Akal de Filosofía. Madrid. 1994
FERRATER, J. Diccionario de Filosofía. Editorial Sudamericana. Buenos Aires. 1964.
Glosario de Filosofía Griego
(http://terminosgriegosdefilosofia.blogspot.com/)
Artículos
Apuntes de Filosofía (http://apuntesdefilosofa.blogspot.com/):
Heráclito.
Dejando atrás al mito… o intentándolo (Mito, logos y algo sobre Tales)
GARCÍA DOMINGO, D. Historia de la filosofía. (http://filosofiajaimeferran.files.wordpress.com/2011/09/unidad-1-los-primeros-filc3b3sofos-el-paso-del-mito-al-logos.pdf)
LANZON, J. La verdad del Mito. En Diario "El País" de España. (http://elpais.com/diario/2011/04/02/babelia/1301703170_850215.html)
Instituto Nacional de Tecnologías Educativas y de Formación del Profesorado (INTEf). Apuntes para comprender a los Presocráticos. (http://ficus.pntic.mec.es/~wque0012/filantigua/presocraticos/01_apuntes.htm).
PORATTI, A. Diké y conflicto. En Revista de Filosofía Latinoamericana y Ciencias Sociales. N° 21, 1996
Escohotado: Los primeros pensadores griegos (I) (http://www.escohotado.com/genesisyevoluciondelanalisiscientifico/tema3.htm).
Los enlaces a vínculos web han sido consultados hasta fecha 21/05/2013.
Para confeccionar las respuestas solicitadas también se han tomado en cuenta los apuntes tomados durante las clases de la Profesora Concepción Rey en HISTORIA DE LA FILOSOFÍA I.-
Autor:
Maikol Chocho
1° Filosofía
22/Mayo/2013
Historia de la filosofía I
"Primera prueba parcial"
CENTRO REGIONAL DE PROFESORES SUROESTE
Colonia del Sacramento
[1] PARDO, J. La Metaf?sica. Preguntas sin respuesta y problemas sin soluci?n. Editorial Pre-Textos 2006
[2] Escritura sil?bica que expresa muy imperfectamente los sonidos del dialecto de los micenios (PORATTI, 2011, P?g. 7)
[3] T?rmino de la antigua Grecia para peque?os grupos parentales que se identificaban a ellos mismos como una unidad. La mayor?a de los gene parecen haber estado compuestos de familias nobles. (Diccionario de t?rminos griegos, v?ase BIBLIOGRAF?A).
[4] (o Sofrosine)- Salud del esp?ritu (opuesto a la hybris). Templanza. Respeto de las leyes divinas y humanas. Autocontrol. Diccionario de T?rminos Griegos.-
[5] BURNET, J. Greek Philosophy: Thales to Plato. Editorial MacMillan. Londres , 1920
[6] COMFORD, F. Los or?genes del pensamiento filos?fico griego. 1952
[7] Teofrasto, de sensu 25 s. (http://www.paginasobrefilosofia.com/html/Bachi2/Presocraticos/Apuntes%20Presocraticos/Pitagoricos/Alcmeon/textalcm.html)