Responsabilidad social corporativa (RSC): La gestión sostenible de la empresa
Enviado por juan.casals
1.1 CONCEPTO DE RESPONSABILIDAD SOCIAL CORPORATIVA
La responsabilidad social corporativa (RSC) ha sido definida desde diversos ámbitos de modos muy distintos. A pesar de esta diversidad conceptual, en casi todos los enfoques es posible encontrar un fondo común que ha permitido llegar a un cierto consenso sobre el concepto de RSC.
Una de las definiciones más conocidas es la de la Comisión Europea: "La RSC es la integración voluntaria, por parte de las empresas, de las preocupaciones sociales y ambientales en sus operaciones comerciales y en sus relaciones con sus interlocutores".
Otras definiciones de RSC son:
"La RSC es el compromiso que asume una empresa para contribuir al desarrollo económico sostenible por medio de colaboración con sus empleados, sus familias, la comunidad local y la sociedad, con el objeto de mejorar la calidad de vida". WBCSD
"La RSC es el conjunto de prácticas empresariales abiertas y transparentes basadas en valores éticos y en el respeto hacia los empleados, las comunidades y el ambiente". PWBLF
"La RSC se define como la administración de un negocio de forma que cumpla o sobrepase las expectativas éticas, legales, comerciales y públicas que tiene la sociedad frente a una empresa". BSR
"La RSC es una forma de gestión que se define por la relación ética de la empresa con todos los públicos con los cuales ella se relaciona, y por el establecimiento de metas empresariales compatibles con el desarrollo sostenible de la sociedad; preservando recursos ambientales y culturales para las generaciones futuras, respetando la diversidad y promoviendo la reducción de las desigualdades sociales". Instituto Ethos de Empresas y Responsabilidad Social.
"La RSC se refiere a una visión de los negocios que incorpora el respeto por los valores éticos, las personas, las comunidades y el medio ambiente. La RSC es un amplio conjunto de políticas, prácticas y programas integrados en la operación empresarial que soportan el proceso de toma de decisiones y son premiados por la administración". Foro de la Empresa y la Responsabilidad Social en las Américas.
"La RSC hace referencia a la manera en que la empresa integra valores sociales básicos con sus prácticas comerciales, operaciones y políticas cotidianas". The Center for Corporate Citizenship del Boston College
Estas definiciones permiten hacernos una idea clara de lo que es la RSC. Sin embargo, hay que advertir de que la RSC es concepto dinámico y en desarrollo, por lo que es preciso caracterizarlo con algunas claves para comprender mejor su verdadera dimensión. Así, la RSC es:
– integral, es decir, abarca a un conjunto complejo de dimensiones de la empresa.
– gradual, puesto que se presenta como un camino de excelencia a seguir.
– proporcional, ya que la expectativa de su ejercicio y aplicación tiene una relación directa con el tamaño de la empresa y su correspondiente poder o capacidad de influencia en el mercado.
1.2 OTROS CONCEPTOS RELACIONADOS
Como ocurre en muchos casos, acudir a la definición negativa de RSC ayuda a comprender mejor el auténtico significado del concepto y evitar confusiones terminológicas que son habituales en el ámbito de las RSC.
Con este objetivo, comentaremos brevemente algunos conceptos que tienen relación con la RSC pero que no son RSC.
Acción social. Tal y como la define la Fundación Empresa y Sociedad, es la dedicación de recursos empresariales a proyectos de desarrollo socioeconómico que apoyan a personas desfavorecidas, principalmente en las áreas de servicios sociales, salud, educación, formación profesional y empleo.
La acción social es un complemento a las prácticas de RSC y nunca puede sustituirlas. Una empresa puede ser socialmente responsable sin hacer acción social y puede ser irresponsable aunque destine grandes cantidades de dinero a acción social. La acción social es, la guinda del pastel, el colofón a toda una serie de buenas prácticas empresariales.
Desarrollo sostenible. Idea que nace en la cumbre de Río de 1992 y que defiende el desarrollo armónico en los ámbitos económico, social y ambiental de manera que el desarrollo presente no limite las posibilidades de desarrollo de las generaciones futuras.
El Club de Excelencia en Sostenibilidad define el desarrollo sostenible como aquél que sobre la base de un crecimiento económico continuado, contribuye al desarrollo social y al uso adecuado del entorno natural, posibilitando el incremento de valor de las compañías para todas las partes interesadas.
Gobierno corporativo. Según la OCDE, "el gobierno corporativo es un elemento clave en la mejora de la eficiencia y el crecimiento económico así como aumentar la confianza de los inversores. El gobierno corporativo incluye las relaciones entre los directivos de la empresa, el consejo de administración, los accionistas y otras partes interesadas. El gobierno corporativo también proporciona la estructura a través de la cual se fijan los objetivos y se determinan los medios para conseguir esos objetivos y se controla el desempeño".
Por tanto, el gobierno corporativo es el sistema por el que las empresas son dirigidas y controladas. La estructura de gobierno corporativo especifica la distribución de derechos y responsabilidades entre los diferentes miembros de la organización, tales como el consejos de administración, directivos, accionistas y otras partes interesadas y detalla las reglas y procedimientos para la toma de decisiones sobre cuestiones corporativas.
Reputación corporativa Activo estratégico de una empresa basado en la percepción favorable de la misma que tienen las diferentes partes interesadas sobre la capacidad de una compañía para crear valor de forma permanente para sus grupos de interés.
El Foro de Reputación Corporativa (FRC) la define como el conjunto de percepciones que tienen sobre la empresa los diversos grupos de interés con los que se relaciona.
1.3 LA RSC DE MI EMPRESA
Esta aproximación al concepto de RSC nos permite abordar lo realmente crítico para la empresa: definir qué es para ella la RSC.
Toda empresa que desee implantar políticas y prácticas de RSC debe responder a estas cuestiones iniciales:
Preguntas básicas
¿Qué es la RSC para mi empresa?
¿Por qué mi empresa debe implantar la RSC?
¿Para qué implantar la RSC en mi empresa?
Esta definición propia de la RSC permite a la empresa reflexionar sobre la verdadera naturaleza de su actividad y construir una base sólida sobre la que progresar adecuadamente.
La RSC en Iberdrola
La Responsabilidad Social Corporativa constituye para Iberdrola un marco integrador de sus
políticas y actuaciones con los clientes, accionistas, empleados y todos los grupos de interés con
los que se relaciona. Ello le permite desarrollar su labor en una sociedad avanzada que plantea
a las empresas la satisfacción de nuevas y más exigentes demandas y expectativas.
1.4 MOTIVOS Y CRÍTICAS A LA RSC
El desarrollo espectacular de la RSC, el creciente interés por estos temas y la implantación de prácticas de gestión sostenible en las empresas tiene origen en una serie de causas que han impulsado este fenómeno. Algunas de los principales motivos que fortalecen el desarrollo de la RSC son:
El origen ético de la RSC
Tradicionalmente se ha pensado que el mundo de la empresa era independiente de la esfera moral y que las reglas económicas eran diferentes a las morales: "los negocios son los negocios". Sin embargo, las partes interesadas de la empresa han roto con esta disociación y exigen que la empresa haga compatible los beneficios económicos con una conducta basada en sólidos valores éticos.
La ética no cuestiona la rentabilidad sino la manera en la que las empresas obtienen sus ganancias. En definitiva, también en el mundo de la empresa, se aplica el principio "el fin no justifican los medios".
Esta creciente reflexión ética acerca de la actuación de las empresas y a su gestión ha alimentado con fuerza a la RSC. Un buen ejemplo son las palabras de Josep M. Lozano, "la acción humana es una acción mediada organizativamente, y por lo tanto, parece que pensar éticamente la acción humana, comporta también su especificidad, en tanto que ésta acción se lleva a cabo mediante empresas y organizaciones".
Escándalos
La serie de escándalos derivados de las malas prácticas empresariales que han saltado a la opinión pública y que han causado grandes pérdidas a pequeños inversores han sido un detonante para exigir a las empresas una conducta adecuada que permita recuperar la confianza en ellas y en las reglas del mercado.
Deterioro del medio ambiente
Los impactos ambientales de la actividad empresarial son rápida y fácilmente identificables. La demanda de un comportamiento responsable con el entorno natural es una de las primeras voces que se alzó a favor de la RSC y uno de los movimientos más potentes y organizados de la sociedad. La presión de las ONGs ha sido crítica en este ámbito, pero otros colectivos han recogido el testigo y el cuidado del medio ambiente ya no es una opción para las empresas.
Presión de los grupos de interés
Los colectivos que afectan o se ven afectados por la actividad de la empresa cobran un nuevo protagonismo al demandar y exigir a las organizaciones un compromiso con la sociedad y el medio ambiente y unas prácticas coherentes con ese compromiso. Un ejemplo claro de presión de los grupos de interés el activismo de los accionistas o las demandas de los empleados. De una forma creciente, los accionistas toman sus decisiones teniendo en cuenta, además de los resultados financieros de las empresas, su desempeño en los ámbitos social y ambiental. Además, esta tendencia se fortalece con el protagonismo que estas cuestiones están teniendo en las Juntas Generales de Accionistas. En muchas ocasiones, los empleados son los primeros que sufren la irresponsabilidad de las empresas y sus reivindicaciones han sido un fuerte impulso de la RSC y un motor de cambio hacia un nuevo modelo de empresa. Una empresa que ya no se entiende como un juego cero en el que las rentas se reparten entre el capital y el trabajo, sino como un sistema de cooperación eficiente basado en el diálogo y acuerdo como factor clave de reducción de los costes de coordinación y como potencial de innovación.
Insuficiencia del derecho
La legislación y su aparato coercitivo se han demostrado ineficaces para garantizar el cumplimiento de unas mínimas reglas de juego. La RSC va más allá del derecho al configurarse no como una obligación externa sino como una autoimposición, una exigencia propia.
Globalización
El fenómeno de la globalización ha sido posible en buena medida por la expansión de las multinacionales por todo el mundo. Esto ha hecho que operen en sociedades con distintos valores y costumbres y que acumulen un gran poder. La consecuencia ha sido desajustes entre los valores de la empresa y los de las sociedades en las que opera y una creciente petición de control de las multinacionales, a menudo más poderosas que algunos gobiernos de países en desarrollo. El desarrollo de la sociedad de la información alimenta el fenómeno de la globalización, aumenta el control de las actividades empresariales y facilita la movilización de las partes interesadas.
Crisis del estado del bienestar
La ineficiencia de la gestión pública y las previsiones de los economistas han hecho saltar las alarmas sobre la sostenibilidad del modelo de bienestar. Ante esta situación, la sociedad ha vuelto su mirada hacia las empresas, a las que se les pide que asuman su responsabilidad social y compartan con el Estado la tarea de mantener el nivel de bienestar de los ciudadanos.
Mala imagen
Las malas prácticas de algunas compañías han contribuido a crear una mala imagen de las empresas, que necesitan recuperar la legitimidad y formar parte de la comunidad. Algunas empresas han visto en la RSC el camino más corto para conseguir la licencia para operar lo que a menudo se ha traducido en una perversión de la RSC al concebirla como un medio para mejorar la imagen social de la empresa. La RSC es un fin en sí misma al conectar los beneficios empresariales con los beneficios sociales.
Regulación
Ante las presiones sociales y los escándalos empresariales, la respuesta de algunos gobiernos ha sido la de aumentar la regulación. A la tradicional regulación ambiental o laboral se ha unido la tendencia a la regulación legal de aspectos como el gobierno corporativo o la información social y ambiental. Sin duda, la capacidad coercitiva y sancionadora de la ley "estimula" algunas prácticas de RSC, pero el grueso de la RSC cae en el ámbito de lo voluntario, de la competitividad y de la gestión de las empresas. La pregunta es inmediata: ¿es posible regular la gestión de las empresas? Si lo fuera, ¿sería conveniente?
Declaraciones de RSC
El los últimos años han proliferado las declaraciones de RSC de carácter internacional o local, lo que ha contribuido a divulgar este nuevo paradigma de gestión. Estas declaraciones generales se han desarrollado en documentos de carácter sectorial para facilitar la implantación de las prácticas de RSC en función de la naturaleza de cada actividad.
Oportunidad
Los mercados son cada vez más competitivos y las empresas han visto en la RSC una oportunidad de diferenciarse y crear ventajas competitivas. La RSC se mueve en el ámbito de lo voluntario, de la competitividad. La RSC es una oportunidad para que la empresa conozca mejor el entorno con el que se relaciona y responda adecuada y rápidamente a los cambios. Por otro lado, la RSC es una eficaz herramienta de minimización del riesgo social, ambiental y reputacional de la empresa.
Empresario/directivo responsable
Un último factor que se suele olvidar es que la RSC se origina a partir de una decisión que toman los empresarios y directivos de la organización. Existe una nueva generación de directivos y empresarios que, conscientes del impacto social y ambiental de su actividad, se comprometen con una gestión responsable e implantan prácticas sostenibles. Sin duda, factores como la formación o el entorno en el que desarrollan su actividad han propiciado la aparición de estos "nuevos" profesionales.
A pesar de sus evidentes beneficios, la RSC también se enfrenta a críticas y posturas en contra. Si no fuera así, seguramente todas las empresas implantarían prácticas de RSC. Conocer estas críticas nos permite reforzar nuestros argumentos y construir un concepto de RSC más sólido, a la vez que más sutil y matizado.
La crítica más conocida es la de Milton Friedman y su célebre "the business of business is business". A pesar de ser una postura superada ya hace tiempo, y en cierta medida matizada por el propio autor, todavía tiene acérrimos defensores que se enrrocan en una idea de empresa única y exclusivamente económica, olvidando cualquier asomo de dimensión social.
También es frecuente asociar RSC con coste económico. Algunos autores la consideran como un autoimpuesto que supone un gasto añadido para la organización. Este argumento nace de la confusión entre RSC y acción social. La realidad es que una empresa puede ser perfectamente responsable sin dedicar un euro a acción social y, al contrario, una organización puede ser tremendamente irresponsable aunque dedique grandes cantidades de dinero a actividades filantrópicas.
Otra crítica derivada de la una idea asistencial de la RSC es que los accionistas son los dueños de la empresa y son ellos los que deben decidir si deben dedicar recursos para los colectivos desfavorecidos. Por tanto, se trata de una decisión personal que no pueden tomar los directivos de la empresa con el dinero de los accionistas. Dos cosas hay que decir a esto. Aunque los recursos dedicados a acción social generen el mismo beneficio para el destinatario procedan del accionista o de la empresa, no tienen el mismo efecto en cuanto a la creación de cultura, imagen y reputación de la empresa. Por otra parte, ¿son los accionistas los únicos "propietarios" de la empresa? Legalmente, no hay discusión, pero sin duda, los grupos de interés también reciben valor creado por la empresa y tienen cierta capacidad de influencia en la gestión de la empresa.
Una crítica muy extendida es que la RSC es una herramienta publicitaria y de relaciones públicas. Es cierto que muchas organizaciones hacen poco y dice que hacen mucho. El reto es hacer lo que dicen que hacen y asumir la RSC de una manera más integral, no como una solución cosmética y superficial. Esta perversión de la RSC se deriva de entender la RSC como un medio y no como un fin en sí misma.
Algunos directivos argumentan que no se ocupan de la RSC porque están centrados en el core businnes de la empresa. De nuevo, se entiende a la RSC como algo superficial, accesorio, de lo que se puede prescindir. Pero como hemos visto, la RSC trata de las operaciones comerciales y de las relaciones cotidianas con los grupos de interés (clientes, proveedores, empleados,…) ¿no es eso core business?
A menudo también se esgrime el argumento en contra de la RSC de que lo social es responsabilidad del gobierno y de las organizaciones sociales. Sin duda, esto es así, pero esta responsabilidad no es exclusiva y todos los ciudadanos somos responsables del desarrollo y bienestar de nuestra sociedad. La empresa, como ciudadano corporativo que es, contribuye con su actividad a la mejora de la comunidad y debe minimizar las externalidades negativas que se deriven de sus operaciones. Cada agente debe asumir su responsabilidad social desde su rol en la sociedad y cooperando con otras instituciones para multiplicar el beneficio de las acciones emprendidas. Un buen ejemplo de esto es la creciente colaboración entre las empresas y organizaciones civiles u ONGs.
Una última crítica a la RSC es que supone nuevos riesgos para la empresa. Algunos directivos ven en la RSC una exigencia de transparencia que puede desvelar algunas debilidades de la empresa. También se suele decir que la RSC estimula el desarrollo normativo de los aspectos sociales y ambientales de la gestión empresarial. En cierta medida estas apreciaciones tienen parte de verdad. Efectivamente, algunas de las empresas líderes en la implantación de prácticas responsables sienten que se han puesto en el centro de las miradas y que son las más criticadas. Esto es un paradoja que desincentiva a las empresas, pues ven que es mejor no hacer nada ante el temor a ser criticadas.
1.5 RETOS DE LA RSC
La RSC ha experimentado una progresión paralela a la evolución histórica de la orientación de la empresa. Un resumen esquemático de esta evolución puede ser:
– orientación a la producción
– orientación a las ventas
– orientación al consumidor
– orientación al cliente
– orientación a la competencia
– orientación a la sociedad
La orientación de la empresa a la sociedad a menudo a comenzado como una reacción defensiva ante la presión de determinados grupos sociales. El reto es interiorizar la RSC y que las empresas tomen la iniciativa, pasando de acciones aisladas de carácter filantrópico y de comunicación a la verdadera integración de las demandas sociales y ambientales de las partes interesadas en sus actividades de negocio.
Como dice Peter Drucker, "El administrador moderno, debe ser un activista político. Cada vez se dará mayor cuenta de que, en estos tiempos turbulentos, en adición a la gestión de su empresa, deberá convertirse en el líder e integrador de una sociedad pluralista"
En la actualidad y de una manera más intensa en el futuro, el éxito financiero ya no es la única medida por la que las partes interesadas emiten un juicio sobre las empresas. Ahora se espera de las compañías que tengan un buen desempeño en ámbitos no financieros tales como los derechos humanos, la ética de la empresa, políticas ambientales, desarrollo de la comunidad, gobierno corporativo o prácticas laborales. Tal es la importancia de estas cuestiones que el desempeño social y ambiental se ha puesto a la misma altura que el financiero. Este nuevo escenario plantea a las empresas el desafío de presentar una triple cuenta de resultados (económica, social y ambiental) y atender a las demandas y expectativas de las partes interesadas. En la nueva economía global, las empresas que lo consigan estarán mejor posicionadas para conseguir el éxito financiero a largo plazo y sobrevivir en un entorno cada vez más competitivo.
2. 1 EL COMPROMISO
La RSC tiene su origen en un compromiso voluntariamente asumido por la empresa. Es un compromiso estratégico, esto es, a largo plazo y global, y que condiciona la conducta y la cultura de la empresa.
Al ser una decisión estratégica, la alta dirección debe determinar el contenido y alcance del compromiso social y ambiental de la empresa, siendo esta tarea la primera que debe realizarse y sobre la que se construye las estrategia y prácticas de la empresa responsable.
Debe ser un compromiso que rompe con lo momentáneo y parcial para ser un compromiso auténtico que se proyecta en el futuro de la empresa y que influye en las decisiones de la organización.
Por tanto, el compromiso es una decisión íntima de la empresa, fruto de una reflexión sobre la responsabilidad que la empresa tiene y sobre los agentes ante los que es responsable. El compromiso responsable nace del interior de la propia empresa, debe ser compartido por todos y cada uno de los empleados de la organización y debe comunicarse a las partes interesadas de la organización.
El liderazgo ético
El líder de la empresa socialmente responsable sabe que la gestión ética de la empresa es la mejor gestión posible no sólo desde el punto de vista ético sino también desde el punto de vista técnico.
El liderazgo ético es imprescindible para impregnar todas la acciones de la empresa. Influye en la toma de decisiones y es responsable de las acciones de otros por la influencia y persuasión que es capaz de generar y por el clima y entorno que crea.
El líder se constituye en ejemplo para los miembros de la organización.
La misión y visión de la empresa
La misión es el propósito, la razón de ser de la empresa. La misión representa de una manera genérica la identidad y personalidad de la empresa en el momento presente y en el futuro. La misión forma parte del sistema de valores de la compañía, de su cultura y la condiciona. Por este motivo es vital que sea conocida y compartida por todos los miembros de la organización ya que tiene un importante papel de identificación y cohesión.
La dirección de la empresa debe considerar en qué medida la definición de la misión tiene en cuenta los aspectos relacionados con la mejora en los niveles sociales y ambientales y, por tanto, debe considerar la eventual reformular dicha misión o replantear aspectos de la misma para incluir dichas variables?
La visión empresarial es la proyección futura del modelo de empresa en el que la organización desea convertirse y que le sirve de inspiración para la definición de estrategias y la toma de decisiones.
La empresa responsable debe crear una declaración de misión y visión que identifique los objetivos y aspiraciones de la organización. Suele incluir el propósito de crear valor para todas las partes interesadas.
La empresa debe compartir su misión y visión con las partes interesadas no sólo para comunicarles su compromiso con ellas sino para recibir su comentarios e incorporarlos en la medida de lo posible.
La misión y la visión deber estar integradas y ser coherentes y compatibles entre sí. Para evitar que la empresa se quede en una mera declaración debe existir un concordancia clara entre la visión y el comportamiento cotidiano de la empresa.
Por último, y a medida que la empresa y el entorno se van transformando, la organización debe revisar periódicamente su misión y visión para asegurar que se corresponde con los valores con los que se dirige la empresa.
En resumen, es necesaria de visión amplia y dinámica capaz de reaccionar a los cambios internos y externos. La empresa debe:
1. incluir en su visión empresarial el compromiso con la RSC en su dimensión interna y externa,
2. identificar los principales desafíos que enfrenta la empresa en relación con la investigación y práctica de la RSC, e
3. incorporar en el Plan Estratégico la RSC como un aspecto integrado a toda la gestión del negocio
Misión y visión de telefónica y Repsol YPF
La misión de Telefónica es "ser la operadora mundial de telecomunicaciones
que genera mayor confianza por su probada capacidad de cumplir los
compromisos adquiridos con sus clientes, empleados, accionistas
y con la sociedad de los países en los que opera"
La visión de Repsol YPF es "ser una empresa internacional petrolera y gasista
integrada, admirada, orientada al cliente y a la creación de valor"
Objetivos de RSC
Una de las mejores formas de asumir un compromiso con la sociedad y el medio ambiente es integrar consideraciones sociales y ambientales en el sistema de objetivos de la empresa.
Los objetivos de RSC son fines de carácter general coherentes con la política de RSC. Los objetivos tienen un desarrollo posterior en metas que constituyen requisitos de desempeño detallados que tienen su origen en los objetivos y que es necesario establecer y cumplir para alcanzar dichos objetivos.
Los objetivos deben reunir una serie de características:
– Correctamente definidos: quién ejecutará, acompañado de algún parámetro de valoración de tiempo y cantidad.
– Factibles de medición: posibilita de control. La RSC es medible.
– Flexibles y alcanzables: actúan como elementos motivadores.
– Coordinados: horizontal y verticalmente.
– Concebidos en forma participativa: generación y no fijación. Todas las áreas tienen que estar comprometidas con la RSC.
La política de RSC
La empresa institucionaliza y documenta públicamente su compromiso social y ambiental en la política de RSC, declaración de principios y direcciones generales de una organización relacionadas con su desempeño económico, social y ambiental.
Las políticas de RSC son fruto del desarrollo natural de las políticas de calidad y medio ambiente y de la madurez y experiencia probada de los sistemas de gestión de la calidad y el medio ambiente. Al igual que éstas, la política de RSC debe ser pública, formulada por la alta dirección, y proporcionar un marco para la acción y el establecimiento de objetivos.
No es conveniente una generalización de las políticas de RSC. Aunque cada empresa debe elaborar su propia política de RSC, es oportuno que la política haga referencia a algunas cuestiones básicas:
- Misión y visión: realizar un compromiso explícito de RSC dentro de los objetivos de la empresa. Por tanto, la integración de la RSC dentro de la misión y visión de la empresa, el plan estratégico, los documentos más relevantes y las políticas internas.
- Valores éticos: necesidad de definición de valores éticos que sean la base de un código de conducta dentro de la empresa y su aplicabilidad en el proceso de toma de decisiones. Se trata de desarrollar un código aceptado y reconocido por todas las partes interesadas.
- Lugar de trabajo: la RSC implica la existencia de trato un justo y equitativo en el lugar de trabajo. La política es un buen momento para que la empresa reconozca a sus empleados como un recurso clave, así como la necesidad de crear y cumplir con políticas de RRHH, crear condiciones adecuadas de trabajo y documentar los procesos de gestión.
- Derechos humanos: El respeto de los Derechos Humanos es un área fundamental de la RSC. La política puede incluir un compromiso de erradicación del trabajo infantil, un código de conducta, diversidad en la contratación de empleados y proveedores, o contratación de personas con discapacidad.
- Clientes: implica relaciones con los clientes basadas en la integridad, la justicia y la honestidad. Aspectos como la integridad en la cadena de producción, la definición de precios, prácticas de venta y distribución, la privacidad de los clientes y empleados o la competencia leal son aspectos que a los que la política puede hacer referencia.
- Medio ambiente: la RSC implica un comportamiento responsable con el medio ambiente. Un compromiso de ecoeficiencia, de prácticas de diseño y producción responsable y auditoría ambiental pueden recogerse aquí.
- Comunidad: la empresa responsable se implica en la comunidad en la que opera y con el conjunto de la sociedad. Un compromiso de atender a la comunidad mediante una acción social planificada haciendo compatibles los intereses públicos con los de la empresa.
- Gestión de la RSC: crear sistemas que apoyen y premien la RSC, mediante la institucionalización interna de la RSC y la integración de la RSC en el proceso de toma de decisiones.
Política de RSC de MRW
La Responsabilidad Social forma parte de la cultura empresarial de MRW y se sitúa al mismo rango que los aspectos económicos, de calidad y ambientales. Por tanto la Dirección General declara los compromisos y establece los principios de gestión siguientes: COMPROMISO DE RESPONSABILIDAD SOCIAL PRINCIPIOS DE GESTIÓN
Fuente: www.mrw.es
Conviene seguir un proceso estructurado para desarrollar una política de RSC. El primer paso es definir los parámetros de responsabilidad y el alcance de la política. Es resultado es un primer borrador que se abre a modificaciones propuestas las partes interesadas en un período de consulta. Posteriormente, el documento final debe ser aprobado por la alta dirección o un órgano que le dote de credibilidad (por ejemplo, el comité de RSC). Por último, la política debe ser comunicada a todas las partes interesadas, implantar acciones de formación y mecanismos de evaluación del cumplimiento de los compromisos.
Declaraciones de RSC
La empresa puede declarar su compromiso con la sociedad mediante la adhesión o asunción de los convenios, tratados y declaraciones relativos a la RSC.
Existen múltiples declaraciones internacionales y nacionales de carácter general que se han desarrollado posteriormente en documentos más específicos de acuerdo a las características y necedades específicas de determinados sectores de actividad.
En los últimos años han proliferado este tipo de iniciativas, siendo el Pacto Mundial de las Naciones Unidas la más relevante por su alcance y aceptación internacional.
Los diez principios del Pacto Mundial de las Naciones Unidas
- Las empresas deben apoyar y respetar la protección de los derechos humanos fundamentales, reconocidos internacionalmente, dentro de su ámbito de influencia.
- Las empresas deben asegurarse de que sus empresas no son cómplices en la vulneración de los derechos humanos.
- Las empresas deben apoyar la libertad de afiliación y el reconocimiento efectivo del derecho a la negociación colectiva.
- Las empresas deben apoyar la eliminación de toda forma de trabajo forzoso o realizado bajo coacción.
- Las empresas deben apoyar la erradicación del trabajo infantil.
- Las empresas deben apoyar la abolición de las prácticas de discriminación en el empleo y la ocupación.
- Las empresas deberán mantener un enfoque preventivo que favorezca el medio ambiente.
- Las empresas deben fomentar las iniciativas que promuevan una mayor responsabilidad ambiental.
- Las empresas deben favorecer el desarrollo y la difusión de las tecnologías respetuosas con el medio ambiente.
- Las empresas deben trabajar contra la corrupción en todas sus formas, incluidas extorsión y soborno. Fuente: www.pactomundial.org
Otras declaraciones de RSC relevantes son la Carta de Cámara Internacional de Comercio para el Desarrollo Sostenible y las Directrices de la OCDE para empresas multinacionales.
2.2 PLANIFICACIÓN
Una vez la empresa ha determinado su fin último y su compromiso social y ambiental, necesita conocer su situación actual, el punto de partida desde el que tiene que emprender el camino hacia la excelencia.
Este diagnóstico es doble: por un lado, del entorno de la empresa, y por otro, de la propia organización. Efectivamente, los dos elementos esenciales del análisis empresarial son: 1) la comprensión del entorno en el que la compañía realiza sus operaciones; y 2) la valoración de los factores internos que favorecen su potencial competitivo.
Análisis externo
Este análisis comprende:
a) la identificación de los requisitos legales aplicables a la actividad de la empresa y de los requisitos voluntariamente asumidos
b) la identificación y evaluación de los grupos de interés y de sus demandas y expectativas
c) la identificación y evaluación de los aspectos de RSC
La herramienta de gestión más utilizada en el análisis externo es el mapa de stakeholders o grupos de interés. También es útil realizar un benchmarcking de las mejores prácticas de la competencia.
Los aspectos de RSC deben evaluarse para determinar un prioridad en función de su nivel de significación. La magnitud del impacto, la frecuencia o la capacidad de control son criterios que se utilizan frecuentemente para clasificar los aspectos.
Análisis interno
El análisis interno consiste en un diagnóstico de, por una parte, las actuales prácticas de RSC de la empresa y, por otra, de los valores, recursos y capacidades con los que cuenta la empresa para gestionarse de una manera sostenible.
Otro aspecto esencial del análisis interno es el análisis de los riesgos sociales, ambientales y reputacionales de la organización. El proceso de análisis de estos riesgos incluye la identificación de las fuentes de riesgo, la estimación del riesgo, la valoración del riesgo, y finalmente su gestión.
2.3 IMPLANTACIÓN
Estructura organizativa
La implantación de la RSC exige un soporte organizativo que asegure que se llevan a cabo las tareas planificadas y se cumplen los objetivos fijados. Por tanto, la dirección debe definir las funciones, responsabilidad y autoridad de los responsables de la gestión de la RSC.
La empresa puede optar entre varias soluciones en función de sus necesidades y características. Es usual que un departamento actual de la empresa asuma estas funciones. Departamentos como los de calidad, medio ambiente o comunicación suelen ser los elegidos. Otra opción es crear un departamento de RSC o nombrar un coordinador. Estos son modelos organizativos centralizados que tienen su alternativo en los modelos descentralizados (puros o mixtos).
Además de esto, la empresa puede fortalecer la estructura organizativa de la RSC nombrando un consejero del consejo de administración responsable de esta materia (o una comisión delegada del consejo) y creando un comité de RSC formado por directivos de las áreas de la empresa más implicadas en estas cuestiones.
Documentación
El sistema de gestión de la RSC es un sistema documentado, por lo que la empresa deberá desarrollar los documentos pertinentes que faciliten la implantación de la RSC. La documentación básica del sistema está formada por la política de RSC, el manual de RSC, los procedimientos de RSC y los registros. La política es una declaración de intenciones, directrices y compromisos. El manual describe de una manera resumida el sistema de gestión de la RSC, los procedimientos describen detalladamente los procesos, controles, y responsabilidades para la gestión de la RSC. Los registros son evidencias documentales del cumplimiento de los procedimientos.
Cultura y valores corporativos
La cultura empresarial es el conjunto de normas, valores y formas de pensar que caracterizan la conducta de los miembros de la organización en todos los niveles de la empresa, así como en la propia presentación de la imagen de la empresa.
El objetivo de la cultura empresarial es definir qué valores y normas generales son los que definen la empresa y definir espacios éticos de actuación libre y responsable con los que conseguir la capacidad de innovación, imaginación y flexibilidad que un mercado diferenciado y complejo exige. Este conjunto de valores constituyen una herramienta fundamental para la toma de decisiones en la empresa y la solución de dilemas, a la vez que permiten construir relaciones de confianza con las partes interesadas.
Entre otros valores característicos de la empresa responsable están la integridad, la honestidad, el compromiso, la lealtad o el respeto a los demás. Sin embargo, la empresa debe elaborar una cultura que responda a su carácter propio, para lo que es preciso un diagnóstico del modo en el que la empresa actúa y por el que desea ser reconocida.
El código ético es el documento que establece las reglas y principios que definen el comportamiento de la organización y que, por tanto, configuran el marco normativo y los criterios que determinan lo que es correcto o no.
Aunque suele haber códigos éticos sectoriales que la empresa puede asumir, cada organización debe redactar su código ético en el que explicite y comunique su carácter propio que la identifica y diferencia de otras empresas. Lejos de ser un libro de recetas o una lista de prohibiciones, el código ético es una presentación ante todas las partes interesadas de la conducta de la empresa.
El código ético cumple las siguientes funciones:
- Institucionaliza los valores, normas y criterios de decisión que definen el proyecto de empresa y que deben regir toda la actividad de la organización.
- Crea la cultura de la empresa y un clima ético que fortalece la identificación de los miembros de la organización con el proyecto común.
- Establece un criterio para la toma de decisiones que elimina las incertidumbres y las divergencias en las soluciones a los dilemas éticos.
- Define la responsabilidad, los derechos y las obligaciones así como el compromiso de la empresa en la satisfacción de las partes interesadas.
- Ser un instrumento estratégico para la creación, mantenimiento y desarrollo de la confianza.
- Comunicar a las partes interesadas el carácter de la empresa y crear así una imagen pública.
- Explicitar las líneas de actuación a las que la empresa se compromete respecto a sus partes interesadas.
- Generar credibilidad en la sociedad mediante la definición de su compromiso social y ambiental y las medidas a implantar para su cumplimiento.
No existe una estructura ni reglas fijas ni una única fórmula para la elaboración de un código ético. La estructura y contenido del código deben adaptarse a las características de cada empresa y a las de su entorno.
Comunicación
La transparencia es una de las características distintivas de la empresa responsable que, asumiendo su responsabilidad con las partes interesadas, desarrolla una potente actividad de comunicación informando de sus actividades y de los impactos de las mismas e interactuando con su entorno escuchando las demandas y expectativas de sus interlocutores.
El diálogo abierto y sincero con las partes interesadas ofrece una serie de ventajas a las empresa:
– responde a la demanda de información de los GI
– aumenta el conocimiento del entorno
– mejora la reputación de la empresa
– demuestra una actitud proactiva
– facilita la gestión de las crisis
– mejora la posición competitiva de la empresa
– estimula la mejora del sistema de comunicación
La comunicación responsable tiene las siguientes características: veraz, accesible, comprensible, relevante, oportuna, comparable, creíble, respetuosa, bidireccional, completa, continua y contrastable.
La empresa puede realizar varios tipos de comunicación, entre los que destacan:
– comunicación social y ambiental básica
– comunicación social y ambiental de crisis
– marketing social/ambiental
En todo caso, la empresa debe elaborar una plan de comunicación social y ambiental que incluya el conjunto de receptores, tipos y acciones de comunicación debidamente ordenados y organizados. El plan abarca la comunicación interna y externa.
Receptores | Medios de comunicación |
Empleados | Informe de RSC, Informe anual, revista interna, intranet, tablón de anuncios, e-newsletter, buzón de sugerencias, charlas y campañas de concienciación, formación, negociación colectiva |
Clientes | Informe de RSC, Informe anual, página web, manual de usuario, publicidad y promoción, entrevistas comerciales, venta personal y relaciones públicas, defensor del cliente, certificados (calidad, medio ambiente, RSC) y etiquetas de producto. |
Proveedores | Informe de RSC, Informe anual, cuestionario de selección de proveedores, mailing de adhesión al Pacto Mundial, petición de ofertas. |
Accionistas e inversores | Informe de RSC, Informe anual, boletín, presentaciones, página web, notas de prensa, junta general de accionistas, oficina del accionista. |
Comunidad | Informe de RSC, Informe anual, notas de prensa, visitas a la empresa, página web, grupos adhoc para negociaciones y resolución de crisis, conferencias, jornadas, declaraciones de sostenibilidad. |
La herramienta de comunicación que más desarrollo está experimentando es la memoria o informe de RSC, informe de carácter voluntario que realizan las empresas comprometidas con la RSC atendiendo a la triple cuenta de resultados: económica, ambiental y social.
Para garantizar la uniformidad de los informes de RSC se han desarrollado una serie de estándares que establecen los principios y el contenido para la elaboración de los informes. El estándar más aceptado es el Global Reporting Initiative (GRI). El GRI fue constituido en 1997 como una iniciativa conjunta de la organización no gubernamental estadounidense CERES (Coalition for Environmentally Responsable Economies) y el PNUMA (Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente), con el objetivo de fomentar la calidad, el rigor y la utilidad de las memorias de RSC.
Los informes deben elaborarse en base a unos principios básicos:
– Transparencia. La exposición completa de los procesos, procedimientos y supuestos implicados en la elaboración de una memoria resulta esencial para su credibilidad.
– Globalidad. Toda organización informante debería, sistemáticamente, implicar a sus partes interesadas en la ayuda al enfoque y la mejora continua de la calidad de sus memorias.
– Auditabilidad. Los datos y la información presentes en la memoria deberían recopilarse, analizarse y divulgarse de modo que los auditores internos o los encargados de la verificación externa puedan avalar su veracidad.
– Exhaustividad. Toda la información esencial para la evaluación por parte de los usuarios de el desempeño económico, ambiental y social de una organización informante debería aparecer en la memoria de una forma coherente con el marco temporal, el alcance y los límites manifestados.
– Relevancia. La relevancia es el grado de importancia asignado a un aspecto, indicador o dato concreto, y constituye el umbral en el cual la información adquiere la suficiente trascendencia como para presentarse.
– Contexto de sostenibilidad. Las organizaciones informantes deberían intentar situar su actuación en el más amplio contexto de restricciones o límites ecológicos, sociales o de otro tipo, en aquellos casos en los que ese contexto añada un significado importante a la información presentada.
– Precisión. El objetivo del principio de precisión es el de conseguir que la información
presentada ofrezca la mayor exactitud y el menor margen de error posibles, para que los usuarios puedan tomar sus decisiones con un alto grado de confianza.
– Neutralidad. En toda memoria deberían evitarse los sesgos en la selección y exposición de la información, y se debería tratar de ofrecer un informe equilibrado sobre la actuación de la organización informante.
– Comparabilidad. Toda organización informante debería mantener la coherencia en lo referente a los límites y el alcance de sus memorias, dar a conocer cualquier cambio y volver a exponer la información presentada anteriormente.
– Claridad. Toda organización informante debería mantenerse al corriente de las distintas necesidades y experiencias de sus partes interesadas, y poner la información a disposición de los usuarios de manera que resulte inteligible para el mayor número posible de éstos, manteniendo un adecuado nivel de detalle.
– Periodicidad. Toda memoria debería ofrecer información con una periodicidad que se adapte a las necesidades de los usuarios y a la naturaleza de los datos.
El GRI propone la siguiente estructura para el contenido del Informe de RSC:
1. Visión y estrategia
2. Perfil de la organización
3. Estructura de gobierno y sistemas de gestión
4. Índice
5. Indicadores de desempeño
Implantación funcional de la RSC
Los elementos básicos y comunes de la implantación de la RSC (estructura organizativa, documentación, cultura y valores corporativos, y comunicación) tienen su continuidad en la implantación funcional de la RSC.
Las funciones con mayor implicación en cuestiones de RSC deben implantar prácticas específicas para gestionar sus procesos de una manera sostenible. Algunas de las funciones más comunes en la mayoría de las empresas son la producción, la gestión de los recursos humanos, comercialización, compras y financiación.
Como hemos visto, la RSC aplica a las operaciones de la empresa. Una de las principales es la producción (o prestación del servicio) de su oferta comercial. La función de producción debe tener en cuenta, entre otros, aspectos como que el diseño del producto tenga en cuenta criterios sociales y ambientales (por ejemplo, menor consumo energético), la calidad del producto, o la seguridad y los efectos sobre la salud de las personas. En definitiva, la función de producción debe considerar los impactos sociales y ambientales de todos el ciclo de vida de los productos ("de la cuna a la tumba").
La gestión de los recursos humanos es otra función esencial en las empresas. Naturalmente, aspectos básicos como el respeto de los derechos laborales son una cuestión esencial (trabajo infantil, libertad de asociación, no discriminación, …), pero no son suficientes. Asegurados los estándares mínimos aceptados por los organismos internacionales, la empresa tiene el reto de gestionar integralmente los recursos humanos con el objetivo de atraer, desarrollar y retener el talento. En este terreno, cobran protagonismo cuestiones como la formación, las condiciones de trabajo, los aspectos éticos de la selección, la promoción y carreras profesionales, la retribución, la conciliación de la vida laboral y familiar, o la evaluación del desempeño de los empleados.
La función comercial y las relaciones con los clientes son otra área central de la gestión de las empresas. Las cuatro P’s del marketing se ven afectadas por la RSC. El producto, por ejemplo, mediante la satisfacción de necesidades de carácter social y ambiental. El precio, como un elemento que limita el acceso a los bienes y servicios y porque debe ser justo en la medida de que genere suficientes beneficios para la empresa y retribuya adecuadamente a los factores de producción. La distribución, con especial énfasis en la bondad de las técnicas de venta. Y finalmente, la promoción, considerando aspectos como la publicidad engañosa o el marketing con causa.
Bankinter y la accesibilidad a sus productos
Bankinter ha incorporado a su web un apartado específico que cuenta con videos informativos
en lengua de signos española, con el fin de acercar los contenidos y funcionalidades y hacer
accesibles los productos del portal de la entidad a las personas con discapacidad auditiva.
Este proyecto es fruto del convenio de colaboración firmado entre la entidad financiera y la Confederación Nacional de Personas Sordas (CNPS) y en el que se ratificaba el compromiso
del banco para optimizar las condiciones de accesibilidad de las personas sordas a los canales
de relación a distancia establecidos por Bankinter.
La función de compras también tiene aspectos clave relacionados con la RSC. El primero se centra en la integridad del proceso de compras, promoviendo la igualdad de oportunidades entre los proveedores o evitando sobornos o cualquier otra práctica inaceptable. Por otro lado, la empresa responsable extiende las buenas prácticas a los proveedores incluyendo criterios sociales y ambientales en la selección y evaluación de proveedores.
Por último, la función financiera debe considerar aspectos como la transparencia de los estados contables, la relación con las entidades financieras, la contabilidad ambiental o los mercados financieros de inversiones socialmente responsables.
2.4 VERIFICACIÓN
Una vez implantada la estrategia de RSC y las acciones planificadas, la empresa debe verificar los resultados obtenidos y comprobar en qué medida se cumplen los requisitos y objetivos fijados.
Los sistemas de verificación y control se componen de tres elementos básicos: una estructura organizativa dividida en áreas de responsabilidad, un proceso de comprobación (auditoría) y un sistema de información.
La verificación y control del desempeño económico, social y ambiental de la empresa exige de un sistema de información que junto con los registros financieros ofrezca, tanto en una dimensión interna como externa una información integral sobre los resultados sociales y ambientales de la empresa. El Informe de RSC es el instrumento de control fundamental, además de ser la herramienta de comunicación más potente en materia de sostenibilidad.
El proceso de control se divide en 5 etapas fundamentales:
1. Establecer objetivos y estándares
La empresa debe tener una referencia respecto a la que realizar el control. La primera son los objetivos. Adicionalmente, la organización puede utilizar como referencia los criterios y requisitos de los estándares de gestión socialmente responsable. Algunos de los más relevantes son: SA 8000, AA 1000, SGE 21, SI 10000, ECS2000, y la norma de Aenor UNE 165010 EX.
2. Medir resultados
La mejor manera de medir los resultados es utilizar indicadores de RSC. Estos indicadores deben cumplir unas características: SMART Spacific, Measurable, Achievable, Realistic, Timely.
Los indicadores además de medir el desempeño facilitan la fijación de objetivos y la comparación en el tiempo y con otras empresas de los resultados obtenidos.
Los indicadores pueden se cualitativos o cuantitativos y de gestión u operacionales, formando el conjunto de ellos el cuadro de mando de sostenibilidad.
3. Comparar resultados con objetivos y estándares
La comparación se realiza de una manera formal y sistemática mediante las auditorías de RSC. El proceso de auditoría incluye la definición del alcance, la selección del auditor, la ejecución de la auditoría y la elaboración del informe de auditoría.
4. Análisis de las desviaciones
Consiste en evaluar las desviaciones para centrarse en aquellas más significativas o sobre las que la empresa puede actuar, e identificar las causas que han dado origen a tales desviaciones.
5. Acción correctiva y acción preventiva
Por último, la empresa debe tomar acciones correctivas encaminadas a evitar la repetición de las causas que motivaros las desviaciones negativas y a potenciar las casas de las desviaciones positivas.
Por su importancia, no detendremos algo más en la auditoría. La RSC es un proceso de mejora continua hacia la excelencia, por lo que la empresa debe auditar regularmente su desempeño social y ambiental para identificar desviaciones respecto a lo planificado e implantar medidas correctoras que impulsen la mejora de la empresa.
Al igual que las auditorías financieras o de los sistemas de gestión de la calidad, medio ambiente o prevención de los riesgos laborales, la gestión socialmente responsable debe someterse a auditorías periódicas para determinar la eficacia del sistema y el grado de cumplimiento de los requisitos establecidos.
La auditoria de RSC es un instrumento de gestión en la empresa de carácter correctivo que comprende una evaluación sistemática, documentada, periódica y objetiva de la eficacia de la organización, el sistema de gestión y los procedimientos de RSC.
La auditoria de RSC es una herramienta flexible cuyo alcance está determinado por las necesidades y prioridades de cada empresa. Su realización permite conocer la situación actual de la organización, en cuanto a si se cumple o no con una correcta gestión social y ambiental, y con la legislación y requisitos, así como facilitar la búsqueda de soluciones en los casos en que no se cumpla.
La auditoría de RSC puede ser interna o externa. La auditoría externa ofrece la ventaja de la independencia de una tercera parte experta y la perspectiva desde fuera de la organización que puede detectar desviaciones sistemáticas y proponer soluciones no contempladas desde dentro de la empresa. Frente a esto, la auditoría externa implica un coste mayor que la auditoría interna.
Para garantiza la independencia y eficacia de la auditoría, deben aplicarse una serie de principios generales aplicables a los auditores y a las auditorías.
Principios aplicables a los auditores:
- Conducta ética
- Presentación ecuánime de los hallazgos
- Diligencia profesional
Los principios aplicables a las auditorías son:
- Independencia
- Enfoque basado en la evidencia
Centrándonos en la auditoría interna, el proceso de auditoría lo podemos estructurar en las etapas de planificación, desarrollo y seguimiento.
– Planificación de la auditoría
Las auditorías internas se realizan periódicamente (al menos una vez al año) y de un modo planificado. El plan de auditorías internas deben recoger, al menos, el alcance de la auditoría, el auditor interno asignado y el calendario de la auditoría. Una vez acordados los términos del plan de auditoría con los departamentos y funciones de la empresa, el Comité de RSC aprueba el plan de auditoría interna.
Es muy importante definir correctamente el alcance de la auditoría y tener en cuanta los objetivos del proceso de auditoría. Además de definir los procesos del sistema de RSC que se van a revisar, el alcance suele incluir elementos como la misión y objetivos, la respuesta de la empresa a las recomendaciones de año anterior y la identificación de prioridades realistas para el año siguiente.
– Implementación de la auditoría
El desarrollo de la auditoría supone:
- comunicar el plan de auditoría a las partes implicadas
El primer paso es determinar el determinar el perfil del auditor interno de RSC. Entre otros atributos, el auditor interno debe tener formación general en sostenibilidad, conocimientos del sistema de gestión de la RSC, de los procesos de la empresa y experiencia en auditorías internas.
La empresa debe formar adecuadamente a los auditores internos y, con objeto de garantizar la objetividad de la auditoría, respetar el principio por el que el auditor no audita su propio trabajo. Por tanto, la empresa debe contar con al menos dos auditores internos de RSC.
- seleccionar el equipo auditor
Los auditores pueden necesitar desplazarse, salas de reunión o cualquier otro recurso para desempeñar su función.
- proveer de los recursos necesarios a los auditores
La evaluación del desempeño social y ambiental de la empresa puede ser tan informal como preguntar al responsable de RSC cómo van las cosas o puede estructurarse en un proceso formal.
En función de las características y prioridades de la empresa la metodología puede ser más o menos sofisticada. Las técnicas de auditorías más utilizadas son la revisión documental, las entrevistas y las listas de verificación o check list. Las tres son complementarias y permiten obtener una evaluación completa del desempeño.
La revisión documental implica el análisis de los documentos del sistema (política, manual, procedimientos, registros) en busca de evidencias de la correcta implantación del sistema de gestión de la RSC. Por ejemplo, que no existen contradicciones entre unos documentos y oros, o que se cumplen los requisitos establecidos en el manual y los procedimientos.
Las entrevistas con las partes interesadas son otra fuente de información para la RSC y un complemento a la revisión documental. El auditor debe identificar a las personas o colectivos que desea entrevistas y las preguntas que va a realizar. Aquí es imprescindible aplicar el principio de materialidad para tratar con cada persona las cuestiones que son relevantes desde su punto de vista.
Por último, los check list son una herramienta muy utilizada por su simplicidad y objetividad. Son una guía de apoyo para el auditor que realiza la auditoría siguiendo los pasos indicados en este documento e, incluso, marcando sobre el mismo el resultado de sus pesquisas.
- ejecución de la auditoría
- redactar el informe de auditoría
El resultado de la auditoría se documenta en el informe de auditoría que recoja los detalles y los hallazgos de la auditoría. Este informe se comunicará a la dirección y a los departamentos y funciones auditadas como base para la propuesta de acciones de mejora.
– Seguimiento de la auditoría
El proceso de auditoría debe ser objeto de revisión para asegurar su eficacia. Entre otros aspectos, el seguimiento debe considerar:
- el alcance de la auditoría
- la idoneidad de los auditores
- el resultado del cumplimiento de los planes
- la retroalimentación del destinatario de la auditoría (dirección) y de los auditados
- los resultados obtenidos y la tendencia de la empresa y del cliente
- la conformidad con los requisitos
- las técnicas de auditoría alternativas
Otros mecanismos de control interno son los órganos de control de la empresa, principalmente el consejo de administración y las comisiones delegadas (auditoría y control, sostenibilidad) y, por otro lado, el control ejercido por las partes interesadas internas: los accionistas y los empleados.
Pero la empresa se ve sometida al escrutinio y control externo. Los más relevantes son el control de las partes interesadas externas, el control de los mercados (de bienes y servicios, factores de producción, fusión y adquisición de empresas, financieros), los monitores de RSC y los índices bursátiles y analistas de sostenibilidad.
2.5 REVISIÓN Y MEJORA
La última fase del proceso de gestión de la RSC es la revisión del sistema por parte de la alta dirección de la organización. La revisión se realiza a intervalos planificados, para asegurar la conveniencia, adecuación y eficacia continuas del sistema. La revisión es el principal mecanismo de retroalimentación y actualización del sistema.
Las revisiones incluyen la evaluación de oportunidades de mejora y la necesidad de efectuar cambios en cualquiera de los elementos del sistema (política, objetivos, estructura organizativa, cultura, etc.).
Para que la alta dirección pueda realizar la revisión necesita información sobre la organización, el entorno y el sistema de gestión de la RSC. Los inputs de información son, entre otros:
- los informes de auditoría (internas y externas) y las evaluaciones de cumplimiento de los requisitos legales y voluntarios suscritos por la empresa
- las comunicaciones relevantes de las partes interesadas
- el desempeño social y ambiental de la organización
- el grado de cumplimiento de los objetivos
- el estado de las acciones correctivas y preventivas
- el seguimiento de las acciones emprendidas como resultado de revisiones previas
- los cambios en el entorno
- sugerencias y recomendaciones de mejora
El resultado de la revisión por la dirección debe incluir todas las decisiones y acciones tomadas relacionadas con posibles cambios en los elementos del sistema de gestión de la RSC, coherentes con el compromiso de mejora continua.
3.1 DOCUMENTOS DE REFERENCIA
LIBRO VERDE DE LA COMISIÓN EUROPEA "FOMENTAR UN MARCO EUROPEO PARA LA RESPONSABILIDAD SOCIAL DE LAS EMPRESAS"
http://europa.eu.int/comm/employment_social/soc-dial/csr/greenpaper_es.pdf
LÍNEAS DIRECTRICES DE LA OCDE PARA EMPRESAS MULTINACIONALES
http://www.oecd.org/dataoecd/21/20/16975360.pdf
CARTA DE LA CÁMARA INTERNACIONAL DEL COMERCIO PARA EL DESARROLLO SOSTENIBLE
http://www.iccwbo.org/home/environment_and_energy/charter.asp
DECLARACIÓN TRIPARTITA DE LA OIT SOBRE LAS EMPRESAS MULTINACIONALES Y LA POLÍTICA SOCIAL
http://www.ilo.org/public/spanish/standards/norm/sources/mne.htm
SOCIAL ACCOUNTABILITY 8000. CEPAA/97
http://www.cepaa.org/Document%20Center/StandardSpanish2001.doc
NORMA DE FORÉTICA PARA LA EVALUACIÓN DE LA GESTIÓN ÉTICA Y SOCIALMENTE RESPONSABLE EN LAS ORGANIZACIONES
http://www.foretica.es/imgs/foretica/SGE21.pdf
3.2 ENLACES DE INTERÉS
54.200 resultados de "responsabilidad social corporativa"
1.560.000 resultados de "corporate social responsibility"
Pacto Mundial www.pactomundial.org
Fundación Empresa y Sociedad www.empresaysociedad.org
Foro de Reputación Corporativa www.reputacioncorporativa.org
Club de Excelencia Sostenibilidad www.clubsostenibilidad.org
Fundación Entorno www.fundacionentorno.org
Fundación Ecología y Desarrollo www.ecodes.org
World Business Council Sustainable Development www.wbcsd.org
Business for Social Responsibility www.bsr.org
Global Reporting Initiative www.globalreporting.org
Dow Jones Sustainability Indexes www.sustainability-indexes.com
CSR Europe www.csreurope.org
Forética www.foretica.es
Juan A. Casals Ovalle