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La educación en valores y estrategias didácticas para mejorar su aplicación

Enviado por Yessica González


Partes: 1, 2

  1. Introducción
  2. Planteamiento del problema
  3. Marco referencial
  4. Marco metodológico
  5. Conclusión
  6. Recomendaciones
  7. Bibliografía

Introducción

En el mundo se cuestiona frecuentemente la conducta de las personas, sean buenas o malas, desde el punto de vista de cada uno de los actores de la sociedad. Estas conductas o formas de comportarse se han englobado dentro de los valores.

Los valores son guías de la conducta. Son características de las personas que guían la conducta, orientan la vida y determinan la personalidad.

Entre los valores más resaltantes se pueden mencionar: justicia, libertad, verdad, responsabilidad, honestidad, solidaridad, amor, respeto, agradecimiento, entre otros.

Algún tiempo atrás las personas en general desde niños hasta adultos practicaban en su quehacer diario cada uno de esos valores, pero desde un tiempo para acá esos valores se han ido perdiendo y día a día las relaciones interpersonales se han deteriorado poniendo en manifiesto los antivalores, estos se han evidenciado sobre todo en niños, niñas y adolescentes en edad escolar sobre todo en la II y III etapa de Educación Básica.

La Organización para la Educación la Ciencia y la Cultura de las Naciones Unidas (UNESCO, 1997) interesada en resolver la problemática mundial de los valores, afirma "la clave de la educación del futuro reside en la elección y práctica de valores humanos que pueden proyectar y sostener los derechos humanos sobre bases sólidas y duraderas". Asimismo la educación por su esencia propia es manejo de valores: los destacados tramite, los pondera, los propone, los analiza y los cultiva.

CAPITULO I

Planteamiento del problema

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1.- PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA.

En el mundo actual se ha venido suscitando una serie de cambios en todos los órdenes de la sociedad, ellos afectan específicamente al sistema educativo y con ello a los niños, niñas y adolescentes sobre todo en lo que respecta a los valores; los cuales son necesarios para tener una convivencia armónica y cívica en las escuelas, esta falta de valores se ve reflejada en su mayoría en la II y III etapa de Educación Básica.

En Venezuela se ha generado el cuestionamiento de la falta de valores en el núcleo familiar, educativo y en todos los ámbitos sociales, se ha convertido en un problema manifestado por los niños en edad escolar.

En Maracaibo se han presentado casos extremos que han alarmado a los adultos por el comportamiento que muchas veces inadecuado muestran algunos alumnos durante el proceso escolar, está conducta se observa en los distintos ámbitos sociales y niveles educativos, en opinión de los docentes y otros actores sociales, la carencia de valores es específicamente en el hogar; y en la escuela es donde más fácilmente se detecta, aunque esto afecta a la sociedad en general. La escuela, platea en que los valores son un deber de cómo comportarse en cualquier ámbito social, con responsabilidad, respeto, autonomía, responsabilizando a la familia, ya que, es allí donde se adquieren los principales valores y en la escuela se educa a los niños, niñas y adolescentes fundamentalmente basándose en el respeto, la solidaridad, la convivencia, la disciplina, entre otros.

En toda conducta humana subyace una transmisión de valores. En la sociedad son muchos los agentes que inculcan valores. Entre ellos mencionaremos: la familia, la escuela, la comunidad, etc.

Cuando hablamos de valores nos referimos a algo que nos guía en la vida. Los valores son todas aquellas cualidades que adquirimos en el hogar como las costumbres, las creencias, ideologías, es decir, nuestra manera de ser, de pensar y de actuar que de alguna manera van a influir en el desarrollo de nuestra personalidad.

En las escuelas del Municipio Maracaibo a diario los docentes son atacados en forma verbal, por los representantes que tienen niños, niñas y adolescentes con actitudes que demuestran una falta de valores, ya que, viven faltándole el respeto no solo a los docentes sino también a todo el personal en general, incluyendo a otros niños, niñas y adolescentes.

En la Parroquia Idelfonso Vásquez específicamente en la U. E. Prof. "Jesús Tapia Leal"; se ha venido presentando unas serie de situaciones que han obligado a los docentes a implementar estrategias para reformar los valores, para corregir un poco la actitud que a diario incurren estos niños, niñas y adolescentes de la escuela, llegando así a aminorar irrespeto hacia los docentes, trabajadores y hasta con ellos mismos. En años anteriores las maestras y adultos eran respetados como a sus propios padres.

Según lo antes ya expuesto se presenta la siguiente interrogación.

¿Cuáles son los valores propuestos por el estado venezolano para implementar y utilizar las estrategias adecuadas para rescatar los valores?

2.- OBJETIVOS DE LA INVESTIGACIÓN.

Objetivos de la Investigación

Objetivo General:

  • Analizar las estrategias didácticas para la formación de valores, aplicada por las docentes en la II Etapa de Educación Básica.

Objetivos Específicos:

  • Describir las estrategias que se pueden aplicar para Educar en valores en la II Etapa de Educación Básica.

  • Indagar las estrategias didácticas más adecuadas para educar en valores.

  • Diseñar las estrategias didácticas para Educar en valores.

3.- JUSTIFICACIÓN.

Los valores son gulas de la conducta de las personas, cada hombre y mujer posee un tipo de valor que ordena su vida. Los valores son aspectos importantes dentro del desarrollo del individuo como ser integral.

Para la formación de valores existe una gran influencia tanto de la familia como de la escuela. La familia juega un papel importante dentro del establecimiento de los valores, es decir, forma parte fundamental, en este proceso. La escuela se va a encargar también de reforzar y mantener esos valores que van a hacer de la persona un ser moral, justo, laborioso, perseverante, etc.

En el sistema educativo venezolano se ha observado con preocupación la falta, la perdida de valores en los alumnos correspondientes a la II etapa de Educación Básica, razón por la cual, se hace pertinente replantearse la forma de inculcar, de mantener la educación en valores.

De ahí procede la inquietud de implementar nuevas estrategia que permita reforzar la aplicación de la educación en valores, para asó, poder formar individuos integrales aptos para desenvolverse en la sociedad.

4.- DELIMITACION.

La presente investigación se realizó entre los meses de abril a junio de 2007, en el Municipio Maracaibo Parroquia Idelfonso Vásquez, en la Escuela U. E. Prof. "Jesús Tapia Leal", este colegio está ubicado en el Barrio Ajonjolí Av. 31 – 31 baja casa No. 160 – 23.

CAPITULO II

Marco referencial

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ANTECEDENTES DE LA INVESTIGACIÓN

Para efectos de investigación se recurrió a la revisión de estudios relacionados con el problema de investigación entre los cuales se mencionan:

  • 1. Goitía Ligia: Lineamientos metodológicos para la formación en valores de los alumnos de Educación Básica a través de la Relación coordinada Docente /Comunidad. Universidad Dr. Rafael Belloso Chacín, Decanato de Investigación y Postgrado, Doctorado Ciencias de la Educación. Maracaibo, 2003. Plantea que los docentes de I – II etapa educación básica poseen poca preparación de los métodos para la formación en valores mediante la relación coordinada docente – comunidad, aún cuando señalen que observan una acentuada pérdida de valores en los alumnos.

  • 2. Sansevero de Suárez, Idaría: Valores de Identidad Nacional en la Praxis Pedagógica de Educación Básica. Tesis Doctoral (Doctorado en Ciencias de la Educación) "Urbe" Decanato de Investigación y Postgrado 2004. Plantea que la praxis pedagógica es inconsciente con relación a los resultados, pues estos le confieren características de una práctica como proceso determinante en la construcción social de significados de la realidad.

  • 3. Mestre, Alexander. La Información de Valores en las Escuelas de Educación Básica, trabajo de grado "Urbe", Decanato de Investigación y Postgrado, Maestría en Gerencia Educativa, Maracaibo, 2006.

  • 4. Padrón de Torres, Fátima. Elementos Conceptuales del Juego como Espacio para la Formación y el Fomento de Valores en el Niño. La Universidad del Zulia. Facultad de Humanidades. Escuela de Educación. Trabajo de Ascenso para optar a la categoría de Profesor Asociado. Maracaibo, Mayo de 2001. Plantea la evidencia de la relación directa que tiene el juego con la formación y el fomento de valores en el niño, sugiriéndose además, una serie de orientaciones metodológicas a considerar para el aprovechamiento máximo del juego como actividad fundamental en la etapa de la infancia y como espacio valioso en el área de los valores.

BASES TEORICAS

Para dar respuestas a la interrogante planteada como título de este tema de investigación referido a la necesidad de educar en valores y diseñar estrategias, es oportuno mirar hacia la historia, directamente a los acontecimientos pasados, con la intención de identificar en ellos, algunos elementos claves que hayan colaborado significativamente en la construcción del actual modo de vida.

Según Gómez, citado por Pereira (1999 p. 30 – 31), deben alcanzarse si se desea obtener éxito en materia de educación para el tercer milenio y provocar una transformación que contribuye el acercamiento humano a la promoción de un verdadero desarrollo de los valores para todos partiendo única y exclusivamente de los que como pueblo necesitan. Estos aspectos, son:

  • Educar en valores.

  • Utilizar los medios con fines educativos para lograr una mayor colaboración entre la familia, la escuela y los medios sociales.

  • Formar o establecer instituciones, programas y maestros que permitan un verdadero desarrollo de las personas y de los grupos: en su libertad, creatividad, responsabilidad, respeto mutuo, justicia, comunicación, espíritu, crítico capaces de transcenderse y con una conciencia clara de su destino.

Así mismo, plantea para esta crisis y el nuevo paradigma de la realidad actual, una propuesta centrada en un proyecto pedagógico que ayude a niños, niñas y adolescentes a ser personas, que generen una cierta manera de pensar y una manera de vivir en el seno de la comunidad escolar y social, cuyas metas fundamentales giren en torno a:

  • Formar en la libertad y la unidad personal.

  • Formar en la creatividad y en los valores de imaginación.

  • Formar en los valores éticos y morales (Pereira 1999 p. 38).

En esta misma línea, Javier Dupla (1999) citado por Esclarín (1999, p. 75) plantea desde una perspectiva individual, los aspectos de una buena educación en valores debe proporcionar al que se educa, si realmente se desea generar un cambio profundo y serio desde las instituciones encargadas de la formación de los ciudadanos, que les facilite a su vez, la incorporación a la nueva dinámica de vida planteada hoy.

Los aspectos se deben considerar desde los siguientes puntos de vista:

  • 1. Habilidad Intelectual:

  • Saber entender.

  • Saber comprender.

  • Saber buscar.

  • 2. Habilidades Sociales:

  • Saber convivir.

  • Saber trabajar.

  • Adquirir una visión positiva.

  • Tener alegría de vivir.

El compromiso toca directamente en los responsables de la educación en el país, en este caso al estado venezolano, que debe facilitar las condiciones mínimas posibles que propicien el ambiente adecuado para emprender los cambios deseados y los docentes, quienes tienen en sus manos la gran responsabilidad de prepararse desde el nivel de educación inicial y escolar básico, viabilizar la transformación y el cambio que la mayoría anhela. Así mismo involucrar al resto de los actores que tienen inherencia en la educación llámese familia, medios de comunicación y comunidad en general, para juntos construir la realidad a la que todos aspiran.

Todo lo afirmado y citado hasta aquí corrobora la autentica, urgente y oportuna necesidad de una formación centrada en el individuo y fundamentada en los valores que desde temprana edad se debe generar en el ser humano; y que son inherentes al ser humano independientemente de su condición, raza, credo, que le permitan trascender y transitar de una manera digna en el camino de la vida.

El tema de los valores no es nuevo ya en la segunda mitad del siglo XIX se utiliza la denominación axiología por el economista Smith, disciplina teórica filosófica encargada de conceptuar "lo valioso desde el campo, de lo bello, estético y verdadero, como esencia y cualidades contenidas en las creaciones humanas" (Guerrero 1998, p. 14). Desde el ámbito filosófico propiamente dicho, fue el alemán Lotze en el siglo XIX el pionero en ocuparse del tema, que pronto se propagó hacia otras ciencias como la sociología o la psicología. Sin embargo, no es sino hasta fechas relativamente recientes que estuvo sumida, para emerger como una cuestión educativa de gran relevancia social, en las últimas décadas, tomando importancia y trascendencia en estos años, más que en cualquier otro tiempo.

En este sentido, Sánchez (1999, p. 52) algunos autores afirman que "los valores son aprensiones personales, producto de emociones, vivencias o estados psíquicos determinados".

1.- Fundamentación Filosófico -Epistemológica y Axiológica de la Educación en Valores.

Para Aristóteles la política formaba un continuo con la ética, la doctrina de la vida buena y justa. Su intención era mantener una conducta virtuosa entre los miembros de la Polis. La política y la filosofía práctica en general no podían alcanzar el estatus de una ciencia rigurosa, de una episteme, tenían conformarse con establecer reglas aproximaticas y frecuenciales. La facultad que pretendían cultivar, clave del carácter virtuoso, era la fronesis, una comprensión prudente de las situaciones cambiantes con vista a lo que era el deber ser.

En este momento las relaciones de la filosofía práctica con los conocimientos teóricos y productivos era distante. La teoría si podía pretender ser episteme y sólo podía suministrar los supuestos más generales del conocimiento práctico. Según Aristóteles, la vida adecuada para el hombre era una vida de acción virtuosa, para lograr ese ideal necesariamente había que cultivar un carácter virtuoso y un juicio prudente.

Evidentemente desde Aristóteles se habla de la formación moral y del cultivo de una conducta virtuosa como un ideal para vivir en comunidad.

Luego se dieron diferentes modos de ideal educativo griego (paideia) según las ciudades – estado (polis) y las épocas. A partir del helenismo se comenzaron a distinguir las funciones de la educación y las instituciones. El pedagogo instruía a los niños y jóvenes en la formación de valores, del carácter y velaba por su integridad moral. El maestro se limitaba a transmitir conocimientos instrumentales, como lectura, matemática y aritmética.

A mediados del siglo XVII la situación cambiaba. Hobbes bosquejo un programa que tomaba la conducta humana como punto de partida para una ciencia del hombre, de la sociedad y del Estado, la educación clásica en una vida buena y justa, la formación de carácter virtuoso y el cultivo de la prudencia práctica tenían que ser sustituidos por la aplicación de una teoría social de la científica, por la producción de las condiciones que condujeron a la conducta deseada de acuerdo con las leyes de la naturaleza humana.

Posteriormente surge el positivismo y dentro de este, los juicios de valores, por carecer de bases empíricas, no eran considerados conocimientos válidos. Una de las críticas contemporáneas más influyente de esta filosofía es la obra de Popper y su escuela, el "Círculo de Viena".

La crítica de Popper se basa en una concepción del sujeto del conocimiento como sujeto activo, condicionado biológica y culturalmente, situado en un proceso de desarrollo histórico del que emerge la tradición misma constitutiva de la ciencia.

Más adelante con le escuela de Frankfurt se propone sustituir la concepción analítica del racionalismo por la interpretación emergente por la lógica dialéctica; el fin del conocimiento pasa a ser la inteligencia y el conocimiento será válido si existe una consenso intersubjetivo, la función humana del conocimiento seran las ideas de compromiso y transformación social.

Dentro de este enfoque surge una teoría crítica, la cual plantea que los hombres tienen que transformar su propia vida y esa transformación humana puede lograrse si se elimina toda práctica inhumana.

Para Perdomo (1991) su negatividad en su esencia, su guía es la denuncia de la injusticia social y sólo la negatividad es verdaderamente libre.

Se cuestiona la razón, el progreso y el determinismo histórico. Se pretender superar el reino de los valores a los fines para convertirlos en necesidades de emancipación. El motivo central de esta teoría es considerar al sujeto como de reflexión.

Dentro de esta misma línea Junger Habermas declara que ya no comparte la actitud pesimista y desilusionada de sus maestros frente a la posibilidad de liberación que extraña la razón para las sociedades modernas. Propone su propia versión de la crítica a la sociedad y renovadas alternativas de superación de las controversias mediante su concepto de acción comunicativa y su ética del discurso. Cree que la ciencia puede ser instrumento de liberación.

Esta acción comunicativa, para Habermas está inscrita en una "situación ideal del habla" que entre otras cosas implica asumir criterios y normas para la discusión, reivindicando la diversidad y la divergencia de opinión, la fuerza de los argumentos, la consistencia y la congruencia de las proporciones deben ser criterios a tomar en cuenta en las decisiones. Esta es la manera de alcanzar el consenso legítimo.

Habermas pretende que los modos de decidir sobre pretensiones de validez en un primer momento se deriven de un examen crítico. Para este autor las cuestiones práctico – morales también pueden ser decididas mediante la razón, ya que son susceptibles de verdad. Así pues, la búsqueda de los principios morales también debe partir de la reflexión.

Así mismo Habermas afirma que las normas y valores deben su existencia al hecho de ser intersubjetivamente reconocidos como vinculantes o válidos. Mientras esto ocurra, poseen validez normativa frente a los actores sociales. El reconocimiento de dicha validez partirá siempre de un proceso reflexivo tendiente a examinar si los intereses en cuestión son compartidos comunicativamente, es decir, susceptibles de consenso.

La teoría de Habermas, sin lugar a dudas, ofrece una visión bastante amplia para el estudio de los valores. De allí su inclusión como fundamento epistemológico en la presente investigación. De esta forma se considerarán los planteamientos de la teoría crítica y la teoría de Habermas. Se partirá de que la supuesta neutralidad de la educación en un mito, ya que todo el que educa trasmite valores.

Ahora bien, ¿Qué valores transmitir? Aquellos valores que según la teoría de Habermas sean intersubjetivamente reconocidos como válidos, susceptibles de consenso: valores universales.

2.- Fundamentación Normativa – Legal de la Educación en Valores.

Los valores seleccionados en la Reforma Curricular están fundamentados en la Constitución Nacional de la República Bolivariana de Venezuela, la Ley Orgánica de Educación y el Reglamento General de la Ley Orgánica de Educación y la Reforma Parcial del Reglamento General de la Ley Orgánica de Educación.

En la Constitución Nacional de la República Bolivariana de Venezuela (1999) el Artículo No. 102 dice:

La educación es un derecho humano y un deber social fundamental, es democrática, gratuita y obligatoria. El Estado la asumirá como función indeclinable y de máximo interés en todos sus niveles y modalidades, y como instrumento de conocimiento científico, humanístico y tecnológico al servicio de la sociedad. La educación es un servicio público y está fundamentada en el respeto a todas las corrientes del pensamiento, con la finalidad de desarrollar el potencial creativo de cada ser humano y el pleno ejercicio de su personalidad en una sociedad democrática basada en la valoración ética del trabajo y en la participación activa, consciente y solidaria en los procesos de transformación social consustanciados con los valores de la identidad nacional, y con una visión latinoamericana y universal. El Estado, con la participación de las familias y la sociedad, promoverá el proceso de educación ciudadana de acuerdo con los principios contenidos en está Constitución y en la ley (p. 37).

En lo que se refiere a la Ley Orgánica de Educación (1980) encontramos el Artículo No. 3:

La educación tiene como finalidad fundamental el pleno desarrollo de la personalidad y el logro de un hombre sano, culto, crítico y apto para convivir en una sociedad democrática, justa y libre, basada la familia como célula fundamental y en la valorización del trabajo; capaz de participar activa, consciente y solidariamente en los procesos de transformación social; consustanciado con los valores de la identidad nacional y con la comprensión, la tolerancia, la convivencia y las actitudes que favorezcan el fortalecimiento de la paz entre las naciones y los vínculos de integración y solidaridad latinoamericana (p. 3).

Artículo No. 6 del Reglamento de la Ley Orgánica de Educación (1986) señala:

La finalidad de la educación establecida en el artículo 3º de la Ley Orgánica de Educación y la que ésta le asigne a cada nivel y modalidad del sistema educativo, deberá alcanzarse a través de los planes y programas de estudio y demás elementos del currículo (p 4).

El Artículo No. 1 de la Reforma Parcial del Reglamento General de la Ley Orgánica de Educación (1999) señala:

En los planes y programas de estudio se especificarán las competencias, bloques de contenidos conceptuales, procedimentales, actitudinales, objetivos, actividades, conocimientos, destrezas, valores y actitudes esenciales que deberán alcanzar los educandos en cada área, asignatura o similar del plan de estudios para los distintos grados, etapas y niveles de aprendizaje en regiones fronterizas y zonas indígenas.

El Artículo No. 21 de la Ley de Educación (1980) señala que la educación básica tiene como finalidad contribuir a la formación integral del educando mediante el desarrollo de sus destrezas y de su capacidad científica, técnica, humanística y artística; cumplir funciones de exploración y de orientación educativa y vocacional e iniciarlos en el aprendizaje de disciplinas y técnicas que le permitan el ejercicio de una función socialmente útil; estimular el deseo de saber y desarrollar la capacidad de ser de cada individuo de acuerdo con sus aptitudes (p. 9).

El modelo Normativo del Currículo Básico Nacional del Nivel de Educación Básica establece:

EJE TRANSVERSAL VALORES

La presencia del eje transversal valores en el Diseño Curricular del Nivel de Educación Básica se justifica por la crisis moral que caracteriza la época actual. En Venezuela es motivo de preocupación la pérdida progresiva de valores que se observa en los diferentes sectores que conforman nuestra sociedad.

En este sentido, una educación en valores debe promover cambios significativos que conduzcan a la formación de un ser humano capaz de desenvolverse en una sociedad pluralista en la que pueda, de una manera crítica, practicar como norma de vida la libertad, la tolerancia, la solidaridad, la honestidad, la justicia, el respeto a los derechos humanos y a los valores que de ellos se desprenden.

Diferentes autores, en distintas épocas, han tratado de definir qué son los valores. El tema, por ser de gran complejidad, ha sido, es y será objeto de polémica y discusión. Sin embargo, hay consenso en que los valores son realidades que permiten al hombre ubicarse a sí mismo en relación con los demás. Son tan importantes que llegan a ser condiciones inherentes al ser humano. Toda nuestra vida se encuentra impregnada de valores sean positivos o negativos.

Los valores manifiestan sus propiedades en sí mismos, de allí que se expresen mediante sustantivos (libertad, justicia,…) pero requieren de algo o alguien en que o en quien plasmarse. Por eso se ha señalado que los valores son cualidades que caracterizan a determinadas personas (un hombre tolerante); acciones (una acción solidaria); sistemas (un sistema justo); sociedades (una sociedad igualitaria); cosas (una cosa útil). (Cortina, Adela. 1996)

Los valores se distinguen entre sí por su contenido propio y comparativo. A todo valor corresponde un antivalor que es un valor de signo negativo. Esto es conocido como un "hecho" que impone una polaridad.  Para entender un valor en sus diferentes manifestaciones se requiere, por oposición, conocer el antivalor, por ejemplo: justicia/injusticia, respeto/irrespeto.

Asimismo, manifiestan jerarquías que cambian por circunstancias históricas o causales. Determinada conducta o actuación puede considerarse dentro de un grupo social o ambiente como moralmente satisfactoria, mientras que en otros, puede ser rechazada porque se juzga inmoral. Por otra parte, así como las sociedades cambian, también evolucionan los valores. El concepto de un valor trascendental como la libertad no significaba lo mismo en una sociedad esclavista que en una sociedad como la actual. También se observa que generacionalmente se producen cambios sustanciales en relación con la evaluación de actitudes, conductas, de tal modo que lo que era bueno o correcto para los adultos (abuelos, padres) ya no lo es para los jóvenes y viceversa.

Esto significa, como señala Ruth de Almea (1987), que es necesario una jerarquía para el mundo de los valores. Cada grupo social -a partir de investigaciones realizadas- debería determinar cuáles serían las metas a lograr en el orden de los valores. Estas podrían manifestarse en objetivos educativos.

Además, para los efectos de los currículos escolares debemos decir que los valores se "internalizan", es decir, se adquieren por la experiencia, pero se concientizan cuando se aprenden por la conducta. Esta constituye la primera regla.

De allí se desprende una segunda regla: "la concientización" de los valores debe partir de la consideración del "yo" para llegar al "nosotros" en la medida en que el desarrollo evolutivo de la persona lo exija. Aquí se hace necesario destacar que el aprecio por sí mismo es natural en todo ser humano, debe educarse como un valor a partir del auto respeto. El que aprende a respetarse a sí mismo e internaliza este valor, crea las bases para su éxito en la vida.

La tercera regla para propiciar la internalización de los valores es la de lograr una progresiva identificación del "yo" con el "nosotros" y con "el mundo de los otros", de manera tal que pueda ser entendida por el educando en la medida en que sus experiencias le vayan planteando interrogantes y él vaya construyendo y respondiendo hipótesis. Así por ejemplo, en el niño el proceso de socialización primario se presenta al descubrir el amor frente al desamor, el altruismo frente al egoísmo.

La cuarta regla es la búsqueda del aprecio de los valores positivos en contraposición a los antivalores. En este sentido, se hace necesario sensibilizar al educando para que diferencie unos de otros mediante la discusión y el diálogo y para que manifieste, en su comportamiento, que ha comprendido el poder creativo de los primeros frente al poder destructivo de los segundos.

La quinta regla pretende lograr el hábito de la reflexión sobre la importancia que los valores tienen en nuestra propia existencia al condicionar, estimular o entorpecer los propósitos que nos proponemos como metas que deben desarrollarse en los educandos.

Por lo antes expuesto, se precisan algunas orientaciones que pueden facilitar la planificación escolar:

  • Un estudio y análisis del contexto familiar y sociocultural en el cual se ubica, en forma tal que el educador pueda seleccionar los valores que orientarán el diseño de los proyectos de plantel y de aula y así asegurar la proyección social de la acción pedagógica.

  • Una racionalización y jerarquización de los valores con los cuales puedan establecerse relaciones sin desvirtuar objetivos y contenidos de cada área. Así por ejemplo  -tal como lo señala la Fundamentación Teórica del Diseño Curricular- el juego, tanto el simbólico como el de reglas constituyen ambientes propicios para la adquisición progresiva de valores. En el primero, la escenificación de situaciones propias de la escuela o del entorno familiar y social permiten al alumno participar en representaciones de una realidad que contribuyen a su adaptación. En el segundo, se requiere del concurso de todos y entender la posición contraria para poder actuar satisfactoriamente. Igualmente, en los juegos surgen problemas que hay que resolver de forma razonable. Esto contribuye al desarrollo moral, social y cognoscitivo del alumno. Del mismo modo, el trabajo en equipo es ocasión oportuna para que el alumno aprenda a ser responsable, disciplinado, respetuoso de las ideas ajenas, solidario, participativo…

  • Los valores se irán consolidando progresivamente. En una primera fase se enfatizará en los valores personales, sin descuidar los valores sociales y los que corresponden a la identidad nacional, los cuales se internalizarán y racionalizarán en fases sucesivas. Es decir, en esta primera fase, se pretende que el alumno vaya conformando un cuerpo de actitudes que puedan servir de fundamentos, en una etapa posterior, para la adquisición y consolidación de valores a partir de la indagación, la discusión, el diálogo y el consenso.

Conviene destacar que el desarrollo moral del niño ha sido tema de estudio de autores como Jean Piaget y Kohlberg quienes coinciden en que el ser humano, en la construcción de valores morales, pasa por estadios sucesivos hasta alcanzar un nivel de desarrollo que se manifiesta en su actuación como ciudadano (ver desarrollo socioafectivo y moral en Fundamentación del Diseño Curricular de Educación Básica).

La escuela debe ser, entonces, el complemento del hogar en la construcción sistemática del desarrollo moral y en la formación de valores. Cuando las condiciones familiares del niño no sean favorables, la responsabilidad de la escuela aumenta considerablemente. En cualquier caso, la escuela debe ser inteligentemente dirigida, celosamente cuidada y meticulosamente evaluada. El niño vive inmerso en una sociedad que lo condiciona implacablemente, por lo que el aula y el ambiente escolar deben permitirle lograr dos cosas: 

  • Un ambiente donde pueda tener espacio para sistematizar sus conocimientos, analizar su situación, meditar sobre sus exigencias, apreciar los valores, formular comparaciones y asumir opiniones críticas.

  • Una colectividad escolar que sea ejemplar en todas sus manifestaciones, pero esencialmente en la conducta de sus directivos y docentes, de sus administrativos y obreros y que ello se manifieste en sus relaciones humanas tanto dentro de la escuela como fuera de ella. La coherencia entre los valores postulados en la escuela y las actitudes cotidianas asumidas por los diferentes sectores que interactúan en ella darán validez ética a la labor educativa realizada con los alumnos y alumnas. 

Los valores que se proponen en la reforma curricular, atienden al contexto sociocultural venezolano y fundamentalmente a los consagrados en la Constitución Nacional de la República de Venezuela y en la Ley Orgánica de Educación. Se aspira lograr la formación integral del estudiante y la continuidad de nuestros valores culturales e históricos, razón  primordial de nuestra existencia como país.

Este eje transversal comprende, entonces, diez dimensiones que corresponden al cuerpo de valores seleccionados. Cada una de ellas se presenta con sus respectivos indicadores y alcances. Estos proporcionarán orientaciones al docente para la planificación del Proyecto Pedagógico de Aula o para cualquier otra actividad pedagógica ya que contribuyen a la interrelación de los aprendizajes con una visión socialmente contextualizada.

4.- ¿Para qué sirven los valores?

Los valores sirven para orientar el comportamiento de las personas, sobre todo los valores morales, que son lo que le permiten a los seres humanos convivir armónicamente con sus semejantes, sean familiares, amigos o conocidos. Los valores son necesarios para vivir y deben ser propios, cada ser humano debe formar sus propios valores fundamentados en la sociedad, defenderlos cuando estén en peligro o inclinarlos cuando no existan.

Los valores van de la mano de lo moral y la ética las acciones del comportamiento de una persona están sustentadas en los principios morales de la misma, por los que las relaciones humanas se rigen por ello llegando a establecer las diferencias entre lo bueno y lo malo, es decir, lo ético o no.

"El valor está íntimamente relacionado con la manera de ser, de actuar y de establecer relaciones humanas, así como actúa y decide desde esos horizontes de significado que son los valores y las respuestas que se den frente a determinadas circunstancias dependerán de los principios morales que se han adquirido a lo largo de la vida"

El Libro de los Valores. El Nacional 2002.

Los seres humanos no pueden vivir sin valores, ya que todo sería un desorden, el mundo de ayer, de hoy y de siempre tuvo, tiene y tendrá lineamientos preestablecidos por los cuales la sociedad debe regirse para vivir en paz, en armonía. Estos valores no son constantes, cambian de acuerdo a las épocas, a los pensamientos de las personas que se desarrollan en un momento determinado, pero muchos de ellos prevalecen en el tiempo, se exigen a cualquier persona y se desarrolla en un momento determinado, tales como la honestidad, la bondad, la paz, la responsabilidad, la tolerancia, la justicia, entre otros.

5.- Clasificación de los Valores.

La vida es el valor primordial del ser humano. Existe una clasificación de los valores desde el punto de vista de la calidad de vida, esta es:

  • Valores Sensibles: Conducen al placer, la alegría, el esparcimiento.

  • Valores Económicos: Proporcionan todo lo que nos es útil, son los valores de uso, de cambio.

  • Valores Estéticos: Nos muestran la belleza en todas sus formas.

  • Valores Intelectuales: Nos hacen apreciar la verdad y el conocimiento.

  • Valores Religiosos: Nos permiten alcanzar la dimensión de lo sagrado.

  • Valores Morales: Su práctica nos acerca a la bondad, la justicia, la libertad, la honestidad, la tolerancia, la responsabilidad, la solidaridad, el agradecimiento, la lealtad, la amistad y la paz, entre otros.

El Libro de los Valores. El Nacional (2002). 

Existe otra clasificación que va desde la individualidad del ser hasta la universidad de la sociedad.

Valores del Individuo

Todo individuo se afianza en la vida a través de sus acciones, pero siempre siguiendo esos lineamientos preestablecidos por la sociedad donde se desenvuelve. Todos los seres humanos, en diversos grados pensamos y planificamos nuestra vida aunque no lo hagamos de una manera consciente, en algún momento nos decidimos a nosotros mismos lo que queremos de esta existencia. José Bello (2004).

De ahí que todo individuo se establece unos valores propios de él, muchas veces estos valores, son tomados de las experiencias de personas ajenas y que se tienen como referentes de una buena actuación con el tiempo desde la infancia hasta la madurez, hasta llegar a adultos, esos valores van cambiando, unos se afianzan, otros se modifican de acuerdo a las necesidades de cada individuo y al espacio en el cual se desenvuelve, trayendo consigo la inclusión de nuevos valores.

Los valores individuales son la base para el establecimiento de valores grupales sociales de diversos tipos, ya que a través de ellos se establecen las afinidades con otras personas, permitiéndoles tener una relación con intereses en común.

Valores de la Familia.

"Siempre hemos escuchado que la familia es la base de la sociedad, tanto la familia como la sociedad pueden convertirse en valores en si mimos. Ello dependerá del cultivo que hagamos de la importancia que le demos, de la conciencia que tengamos del proceso de la vida en el marco de un grupo o la sociedad" José Bello (2004).

Para poder convivir en armonía familiar las personas integrantes del núcleo familiar deben establecer código, lineamientos por los cuales se van a regir y así lograr la supervivencia. Entre los valores que afianzan la unión del grupo familiar están la colaboración mutua, se ejercerá tanto a nivel familiar como social para así alcanzar fines e intereses comunes.

El acuerdo, la conciliación y la tolerancia son necesarios para lograr la efectiva convivencia familiar y se convierten en valores para mantener esa relación. Los valores formados dentro de la convivencia del seno familiar son extrapolados posteriormente a la sociedad en general.

Valores de la Colectividad o la Sociedad.

La sociedad está conformada por un grupo de personas que persiguen o no un fin común y que se desenvuelven en un espacio y tiempo determinado. Este grupo de personas establecen una serie de normas que le permiten convivir en armonía, así como también, tienen como fundamento unos valores compartidos por la mayoría que al igual que los valores familiares provienen de la necesidad de mantenerse y crecer en comunidad.

Los valores sociales van a variar de acuerdo con las sociedades, con las comunidades, no todas van a compartir los mismos valores, algunos puede que los guíen, los guíe, los oriente hacia el crecimiento y la superación y otros pueden que sean destructivos, es decir, antivalores.

De acuerdo a la convivencia y los fines perseguidos se consiguen valores grupales es decir, aquellos valores que comparten sólo un grupo y valores de toda la sociedad que independientemente del grupo en el cual esté insertado, todos los comparten.

Valores Universales de la Persona Humana.

"El ser humano además de los instintos que explican su supervivencia más primaria, posee otros recursos para defenderse, progresar y existir en el mundo. Ha desarrollado su inteligencia, su capacidad de entender los procesos a su alrededor y de dar respuesta adecuada a esas demandas del medio ambiente su capacidad de aprender" (José Bello, 2004).

El ser humano tiene necesidades primordiales, que una vez resultas lo llevan a la búsqueda de satisfacción de otras necesidad de afecto, de tener una familia o un grupo con el cual identificarse de socializarse, de realizar personalmente, entre otros, de modo tal de encontrar sentido a su existencia.

Estas necesidades no tienen un orden específico puede que haya una necesidad básica no resuelta pero no lo limita a la superación personal. Los valores cambian según las sociedades pero en todas se conserva la realización personal como un valor.

Los valores pueden ser universales aunque se desarrollen en un contexto socio – cultural distinto, es decir, se da en todas partes pero de diverso modo.

7.- Agentes Sociales Transmisores de Valores.

El ser humano desde que está en el vientre de la madre comienza su proceso de crecimiento, desarrollo y formación del potencial que como individuo trae consigo. Durante todo este proceso es indiscutible la importancia e influencia que ejerce el entorno socio – cultural en el cual se encuentra inserto, ya que los valores no aparecen espontáneamente en las personas sino que se aprenden en el que hacer diario. Dentro de ese contexto próximo, cercano y cotidiano se pueden mencionar algunos agentes claves que repercuten directa o indirectamente en la formación de los valores y la personalidad del individuo tales como: la familia, la escuela y la comunidad.

Los agentes antes mencionados forman en conjunto un sistema de lineamientos acordes con las exigencias socio – culturales que permiten mantener las relaciones entre los individuos de la sociedad.

"La familia es la gran educadora del ser humano" José Bello.

Desde este punto de vista se infiere que los individuos adquieren los conocimientos, es decir, aprenden a través de la conducta, al respecto la teoría de Ivan Paulov define el aprendizaje como un cambio relativamente permanente en el comportamiento que ocurre a través de la experiencia, es decir, los individuos adoptan el comportamiento de otras personas ya sea adecuado o inadecuado, lo internaliza y lo pone en práctica, y por lo general, este comportamiento es para toda la vida, sobre todo cuando los niños estan pequeños, porque son como especie que van absorbiendo todo lo que se encuentran a su paso de ahí la importancia del núcleo familiar.

A medida que los individuos crecen van adquiriendo las destrezas para determinar cuáles son los aprendizajes, los comportamientos que deben incorporar en su vida socio – cultural.

Partes: 1, 2
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