Descargar

La naturaleza de la riqueza (página 2)


Partes: 1, 2

El crecimiento de la población no depende de la economía en sí misma, ni tampoco a la inversa: la economía no depende del crecimiento vegetativo. Éste depende de que la economía cumpla o no con el ciclo económico, al igual que ésta depende de que la población lo cumpla o no.

Es obvio que una tierra árida no genera las mismas posibilidades que una tierra fértil, pues se torna más dependiente del factor T, más dependiente del esfuerzo y el conocimiento de sus habitantes. Pero la realidad nos muestra que un país árido como Kuwait o tropical como Haití, incluso el planeta Marte o la luna, tienen cada uno su propio valor R lo suficientemente alto como para cumplir, mediante un T específico, con el bienestar general I de un grupo P de habitantes íntimamente relacionado a esa riqueza; esto es, permiten aplicar cada uno su propio ciclo económico.

El ciclo económico es lo único absolutamente necesario de cumplir y hacer cumplir. Con su cumplimiento nunca se llega a la disminución crítica de los "recursos" naturales. Por su intermedio se puede alcanzar el tan ansiado desarrollo o crecimiento ilimitado. A través de él se alcanza el crecimiento sustentable, sostenible, conservable, el que, como su propia etimología lo indica, sólo puede darse en forma natural.

Los servicios

Es el único sector de la economía que no genera riqueza, tampoco la destruye y le agrega un valor que se integra totalmente al factor T. Es absolutamente dependiente del poder adquisitivo de la población, por el simple hecho de no ser creador de riqueza, sino distribuidor de ella. Pero, por su propia función, es satisfactor de necesidades.

Resulta indispensable, también, por su función de distribuidor de bienes materiales e inmateriales, y por su participación directa en la generalización del conocimiento, de la seguridad, de la salud, de la justicia en general, entre otras muchas tareas.

Para el ciclo económico, por ejemplo, la comercialización de cada producto es una parte integrante de él mismo, por lo que los comercios en general forman parte del proceso productivo y no integran los servicios propiamente dichos. Otro ejemplo: el sector de la salud, un neto servicio, continuamente repone la mayor riqueza: la vida.

LLAMÈMOSLE INDEV.

Con tan solo poder observar, el comportamiento que presenta cada una de las economías en el mundo, el tan solo notar todos los cambios que han surgido con el pasar del tiempo y de los años. Se ha hecho posible la búsqueda de algún elemento o factor que solucionaría esto. Podríamos llamarlo, la búsqueda de una moneda que tenga un comportamiento ideal, de manera que pueda superar todos los defectos que han sufrido las monedas que hasta el día han existido en la realidad, se hace necesario una moneda que soporte desde la devaluación hasta los diferentes manejos de capital, se plantea esta nueva moneda ideal de forma que se establezca en el mundo, algo como un socialismo monetario, en donde los que más tengan sigan teniendo y los que no tenían nada, pues que ahora si tengan, se plantea una moneda llamada indev, de indevaluable, que pueda permanecer por mucho tiempo vigente, y que pueda soportar todo tipo de cambio hecho en lo político. Esta sería una moneda independiente de todos los cambios que sufran otras monedas, que sea como las unidades de medida de la temperatura, las cuales permitirían un diagnóstico correcto del contexto y una corrección inmediata de posibles malos rumbos; nos permitiría así la prevención de posibles crisis o cualquier catástrofe.

Con seguridad esta moneda llamada indev, solucionaría muchos si no todos los problemas económicos que han existido, mejorando los ingresos la cual permitirá vender y comprar de una manera nueva, igualmente permitiría planificar con certeza la seguridad en las inversiones, evitando así la anarquía la cual es la que causa todas las crisis económicas, derivados desde de la misma falta de definición del dinero, y de la utilización incorrecta. Claro que crearía otros problemas nuevos. Eso es tan inevitable como imposible de preverlos en este preciso momento; sólo su aplicación efectiva podrá mostrarlos.

El indev sería entonces la moneda que realiza la socialización del acceso al hasta hoy único medio de consumo utilizado. Quita la posibilidad despótica de modificar su valor a quienes siempre la han tenido. Quita, en parte, el privilegio de poseerlo a los que siempre lo tuvieron, les quita su posesión en exclusiva, para repartirlo con y entre los que nunca lo tuvieron. Los más infelices serán los más privilegiados. Pero los igualará hacia arriba, sin necesidad de quitárselo a los que hoy lo poseen.

Demostramos que un capitalista es capitalista desde antes de poseer y explotar un medio de producción, porque esa condición se la otorga la propiedad sobre el medio de consumo el capital como dinero al que usa mediante su función principal la de medio de pago, a través de la cual obtiene en propiedad ése medio de producción, al que utiliza con el único fin de seguir acumulando dinero, su función secundaria, dinero que a su vez, puede volver a usar en su función principal, y así sucesivamente. Es lo que llaman un "círculo virtuoso", al que sólo acceden unos pocos y cada vez menos. Eso también explica por qué el enriquecimiento se concentra en un grupo minúsculo, permanente y necesariamente más pequeño. Como conclusión: el capitalista es capitalista por poseer el dinero, como principio y fin de su vida, y no solamente por poseer el medio de producción.

Con la implementación del indev mejorarán los ingresos, se venderá y se comprará de una manera y un nivel nuevos, se recaudará más y se preverá el futuro mediato e inmediato mucho mejor. Pero también permitirá planificar con seguridad las inversiones; inutilizará definitivamente la acumulación o acaparamiento de mercancías y del propio dinero; y, particularmente, se evitará la anarquía causante de todas las crisis, hija de esa posesión en privado que permitía modificar caprichosamente su valor, al darle uno concreto, evitando el mal mayor: la especulación.

El artificio místico

Estemos dónde estemos, dentro de casa o fuera de ella, miremos a dónde miremos, sólo veremos dos clases de cosas u objetos: los naturales y los artificiales. Los naturales son los creados por la naturaleza, los artificiales son aquellos objetos que, generalmente basándose en otros de origen natural, el hombre los transformó a través del trabajo para su mejor uso, provecho o beneficio.

Una ventana es artificial, no existe en la naturaleza, pero está hecha de madera y vidrio, ambos derivados de cosas naturales: los árboles y la arena. En cambio, las creaciones artificiales puras, no basadas en materias naturales, son de invención exclusiva del hombre. El arte, por ejemplo, en cualquiera de sus ramas, es su acto creativo supremo. La religión, cualquiera de ellas, es otro acto creativo puramente humano, para algún superior al arte, para otros no tanto. Las creaciones de este tipo cumplen una función, un cometido que no podemos definirlo como exclusivamente económico, sino que tiene fines diferentes, ya demasiado complejos para tratarlos en este escrito. Diremos que no integran la economía, en su sentido más radical.

El dinero, en cambio, es una creación humana totalmente artificial que no ha cumplido con su objetivo, este sí, puramente económico. El hombre lo inventó para facilitar sus relaciones económicas, aunque podemos adelantar que, en última instancia, las ha dificultado. La humanidad lo ha pergeñado, ha sido su madre y él se le ha vuelto en su contra. Algo así como un Frankenstein de níquel, un monstruo de papel. No podemos siquiera imaginarnos una cifra aproximada de las vidas que se perdieron por él, desde que se inventó, aunque podemos asegurar que todas fueron vidas segadas inútilmente.

Ninguna moneda del mundo tiene un valor concreto o definido. Sin embargo sus dueños cobran por su uso, y a buen precio. A esto justamente, a lo que comúnmente se le llama interés, es a lo que ellos llaman valor o precio del dinero. Aparentemente entonces, el valor del dinero estaría dado por lo que se cobra por usarlo. Así el valor de una moneda sería del 6% anual, digamos, lo que en realidad no significa nada. No define el valor del dinero. Porque no lo tiene.

Sabemos y aseguramos que ninguna moneda del mundo tiene valor en sí misma. Como ejemplo el dólar, que es la rueda cuadrada de la economía. A través de él se mide toda la economía mundial. Es más, se mide el valor de casi todas las otras monedas del mundo.

¿Qué diferencia hay, para una persona cualquiera, inocente de toda inocencia, entre un dólar en billete de origen oficial un "federal note" y un billete falso, no oficial, pero tan bien hecho como para no distinguirlo? La diferencia no está en su definición no la tiene está en su condición: uno es verdadero, el otro falso; uno está impreso en la "maquinita" oficial, el otro no. Pero ambos son lo mismo: papel entintado. Los dos representan lo mismo: nada.

Todas las particularidades del dinero actual –especialmente las negativas- son demasiado reales, demasiado crudas, como para dejarlas seguir existiendo. El indev las elimina porque con él esa necesaria ocurrencia que se nos debía ocurrir, ahora ha ocurrido. Con el indev hemos redondeado la rueda.

Dinero, maldito dinero

El dinero se podría definir, como una forma de pago y medida de valor de bienes o servicios, ante una sociedad, es decir una forma de trueque o intercambio, entre ambas partes. En tal sentido sirve como medio de intercambio, función esencial en la economía de todas las sociedades.

La Evolución del dinero; La aparición del dinero, se remonta desde la época primitiva en donde el intercambio se convirtió en un trueque directo de una mercancía por otra, los primeros intercambios era de piedras y conchas marinas hasta ganado y productos agrícolas. Luego los intercambio eran de metales preciosos tal es el caso del oro y la plata, hasta un punto donde empezaron a crear las monedas. A medida que la población crecía se complicaba cada vez el intercambio de mercancía y comenzó a evolucionar la manera de intercambio llegando a convertirse en un proceso indirecto, mediado por la existencia del dinero.

La mercancía; se puede decir que es un objeto que, al poseerlo, satisface directamente una necesidad humana cualquiera y que, a su vez, es un objeto de venta. Cambian de valor continuamente, casi siempre suben y pocas veces bajan, son requeridas y rechazadas, a veces hay abundancia y otras escasez.

El indev; representa y posee un valor especial, rígido, que es aceptado ampliamente en la sociedad como medio de pago y patrón de medida del valor de los bienes y servicios. Como medio de cobro o pago, el indev es el objeto que se transfiere entre las partes cuando se efectúa un pago o un cobro. El indev, por el contrario, facilita el comercio interior, al mantener los precios constantes durante períodos, y lo exige en el comercio exterior.

El ciclo económico; nos enseña claramente que ningún país necesita de capitales externos para posibilitar el desarrollo de su economía, La falta de capitales que sufre un país se debe, principalmente, por no considerar su propia riqueza como fuente de ellos.

Si el capital fuera un bien accesible para todos, contradiría totalmente uno de los mandamientos más sagrados: "un bien de oferta ilimitada no pasa a formar parte de los intercambios entre seres humanos El dinero exportado por los países ricos no les representa para ellos ninguna pérdida o disminución de riqueza real. Unos "exportan" capital malbaratado por haberlo importado muy caro, los otros pueden exportarlo con grandes beneficios gracias a que pueden "producirlo" a voluntad o porque han podido "importarlo" antes, muy barato En cambio, el dinero "reexportado" por los países pobres es de un costo inimaginable, inmedible, insufrible.

INDEVALUABLE, PREVISIBLE, CONSTANTE, CONSECUENTE.

Tal como cuando se utiliza una balanza como instrumento para equilibrar pesos conocidos como el peso desconocido de otro objeto, de esa misma manera es como se usa el indev. Una pesa es un cuerpo con una magnitud de masas conocida y ella misma es una representante de lo que mide es un cuerpo con peso de sí mismo. El indev es una moneda que pesa una magnitud de riqueza conocida y el mismo representa una porción de la riqueza que mide.

Es la unidad con la que se mide la riqueza de una sociedad. Para clarificar esa función de patrón de medida, compararemos su entidad con la clarificar esa función de patrón de medida, compararemos su entidad con la definición del metro, que en 1983 se definió como la longitud del espacio recorrido por la luz en el vacío durante un intervalo de tiempo de 1/299.792.458 de segundo; el indev se define como un submúltiplo del ingreso natural mínimo anual por habitante (el que hemos estado nombrando como Patrón I); se representa como una gran unidad, una unidad macroeconómica que denominamos granindev; definimos también otra unidad de uso más común de uso cotidiano o microeconomía que se representa de un granindev como la décima parte de lo que un hombre debe obtener por un día para alcanzar un bienestar mínimo.

Quizá puede parecer inapropiado el uso de la palabra bienestar en la definición dada. No se debe a imprecisiones atribuibles a esta teoría.

edu.red

No obstante, aún no definimos la magnitud de ese mínimo. Y en esta última palabra es donde pesa la precisión de tal definición. No dudamos que definir este mínimo puede llegar a parecer arbitrario, tanto como lo puede ser el intervalo de tiempo.

Así, decimos que cada habitante, sin importar diferencias de ninguna índole, debe recibir 10 indevs diarios, como mínimo para garantizarle el bienestar. Esa cantidad diaria de carácter individual se transforma en anual al multiplicar por 365, generando así aquella otra unidad ya sea de carácter social que es la utilizada para el cálculo general de la economía.

Un granindev es, entonces, el valor anual del bienestar de un ser humano. El valor deol dinero se concreta en el hombre. Si un bien cualquiera tiene precio de venta "costo de compra" de 2I al aprehender esa cifra estamos concretando el concepto de que ese bien tiene el mismo valor que el bienestar de dos habitantes. En cuanto a los montos precisos que se quieran distribuir entre la gente la última palabra la tiene la sociedad

Un indev es la décima parte de lo que un habitante debe ganar por día para alcanzar un bienestar mínimo un granindev es equivalente a 3650i, siempre sin importar la magnitud del ingreso natural diario establecido.

edu.red

Hoy en el mundo existe una enorme variedad de "bienestares mínimos" pues estos están relacionados al nivel de los precios y al poder adquisitivo de cada país al nivel de vida de cada uno de ellos.

Ese respaldo confirma su indevaluabilidad, la que asegura su estabilidad y la posibilidad de acrecentar cada ingreso natural periodo tras periodo, puesto que los módulos que componen la formula siempre va aumentando.

edu.red

Supongamos que en un país existe un agricultor que se dedica exclusivamente a producir arvejas para ser enlatadas. Por ellos ese agricultor es quien debe reponer esas arvejas extraídas a N. La última cosecha la cedió totalmente a una agroindustria dedicada a envasar diferentes productos. Según el ciclo propio de las arvejas, el industrial las envasa y las cede a diferentes comercios. De ambas maneras se aumenta el nivel de la producción.

El indev, la unidad de medición y cálculo cotidiana, también cumple como un medio de intercambio pero no es definitivamente, un fin en sí mismo. La cantidad que se posea de él no hará la diferencia entre personas que asumen el mismo papel de consumidor, sino que marcara la diferencia entre su rol de productor hará notar las distintas capacidades o aptitudes individuales como productores como trabajadores. Entre ellos no habrá algunos más aptos o capaces que otros y deberían ser ecuánimemente reconocidas y retribuidas esas diferencias. No existe diferencia individual entre benefactores por lo que tampoco debe existir diferencia de merecimientos económicos entre ellos.

Ejemplo para Uruguay

No es fácil dar un ejemplo concreto puesto que no accedimos a los valores reales de cada uno de los módulos que integran las ecuaciones por intermedio de las cuales se alcanzan los resultados que integran las ecuaciones, por intermedio de las cuales se alcanzan los resultados que se necesitan para una completa demostración. No obstante ellos, trataran de dar una idea aproximada con el siguiente ejemplo. Supongamos el caso de Uruguay con tres millones de habitantes y con la propuesta de otorgarle a cada uno de ellos como benefactores la cantidad de 500 dólares estadounidenses mensuales, es decir 6.000 anuales. Como I . P = T nos queda 6.000. 3:= 18.000. Esto quiere decir que Uruguay, para empezar a utilizar y respaldar al indev debe generar mediante el trabajo esos 18 mil millones de dólares anuales (que también es el "valor del trabajo" de los uruguayos), cifra con la que solamente se alcanza a cubrir el pago del ingreso individual mínimo anual. Parece ser una cifra demasiada grande.

El indev no es una mercancía pues ni se compra ni se vende; no tiene propietarios, ni se transforma mágicamente como las otras monedas en ninguna de la enorme cantidad de mercancías que existen. Así como un metro no se transforma en la tela que mide, o una pesa no se transforma en el azúcar con que se la compara, el indev no se transforma" en ninguna mercancía. Cuando ella aumenta, es posible y al principio necesario aumentar la cantidad de indevs para representarla. No obstante, ella siempre será mayor, pues cumple con un círculo virtuoso inacabable..

El ciclo económico nos indica otra cosa importante: además de eliminar definitivamente los intereses, modifica el concepto de préstamo o empréstito. Lo que antes se englobaba en una única palabra, ahora se divide en préstamo propiamente dicho y en adelanto. Cada hombre, en su papel de benefactor, auto garantiza su capacidad de pago.

Con el indev se confirma algo que siempre existió y que nunca se reconoció. Quien necesita un préstamo y lo solicita, lo utiliza para invertirlo en sí mismo, en su familia o en la sociedad: lo usa en consumo o en producción; coincidentemente, éstas son las dos maneras que se tienen de aumentar la riqueza total.

edu.red

El dinero quieto no cierra el ciclo económico: ni produce ni consume. Se consume Se confirma así que es innecesario agregarle un costo, un precio, un "interés" a los préstamos. Cualquier préstamo será devuelto con "interés" incluido cuando llegue el momento en el que se conoce cuál ha sido el resultado económico del período; cuando se cierre el ciclo económico inmiscuido en su solicitud.

El poder adquisitivo de cada habitante, su salario común y corriente o su ingreso natural, o ambos, está dado por el valor del indev, que es conocido, concreto, inmodificable dentro de tal período. Ése poder de los ingresos es lo suficientemente alto como para que el precio de toda mercancía pueda ser de un nivel alto, quizá el internacional, o tal vez –seguramente- mayor que éste.

Definida de esa manera y dentro del período establecido, la moneda en forma de billete o en otra cualquiera- que se tenga en la mano, tendrá un valor específico, firme, conciso, que no puede ser modificado arbitrariamente por nadie; porque están ahí, verificables, las cifras que se relacionaron entre la actividad del hombre y la riqueza de esa zona en ese período.

edu.red

El precio de venta de toda mercancía en verdad es costo de compra se convierte en un costo general, en el costo social de producción, que lo paga el benefactor en su totalidad, y que representa una cifra equivalente a la deuda original asumida con la naturaleza por parte de toda la cadena productiva, conjuntamente con los beneficios agregados por sus productores durante las diferentes etapas del ciclo económico que le atañe. En el momento exacto en que su consumo transforma el trabajo de toda la sociedad en vida digna para el benefactor, es que se alcanza el objeto de la economía: satisfacer las necesidades de la población Aquí es cuando se genera un balance de saldo puesto que se finaliza el ciclo en forma correcta.

Este análisis nos muestra que todos los productores del ciclo, al ser también benefactores, han recibido el ingreso natural que les corresponde. Pero también nos enseña que, mientras tanto, anterior o simultáneamente, la forma en que pierde todo sentido la acumulación o el acaparamiento de mercancías, una de las maneras más burdas de la especulación

El objetivo de esta economía es devolver a la naturaleza lo que esta nos ha prestado, y esto se logra, en parte, mediante el consumo que realiza el benefactor. Por lo tanto, el ahorro no es una virtud del ahorrista sino que es una mezquindad o avaricia de su parte, porque se opone al fin de la economía al interrumpir la concreción del ciclo económico inherente a ese beneficio.

edu.red

Llegará un momento en que se alcance el punto de saturación del ingreso, esto es, el momento en que los ingresos ya no admitirán más aumentos.

El "capital" es la riqueza

Hernando de Soto, queriendo responder a la pregunta de por qué no usamos aquellos activos que llevan además una vida paralela, como capital externo al mundo físico. Ya que, pueden ser usados para aumentar la producción, atendiendo a los intereses de otras partes como "garantía" de una hipoteca, por ejemplo, o asegurando el suministro de otras formas de crédito, así como de servicios públicos".

El capital con el pasar del tiempo ha sido una palabra que ha perdido su centro, muchas veces se confunde el capital con dinero, y por decir de manera siempre a todo el dinero lo llamamos capital, y este es el centro de este título después de muchas discusiones y análisis se ha llegado a la conclusión y el entendimiento de que el capital no es más que riquezas. El dinero puede estar presente pero sin trabajo y sin riquezas naturales no existirá un capital.

Lo que de Soto llama como "aquel" significado de capital, nosotros lo llamamos riqueza social; lo que él llama capital como sinónimo de dinero, nosotros lo llamamos indev, que es dinero, aunque categóricamente es "otro" dinero. La palabra capital implica una propiedad individual, privada, en tanto que la riqueza de un país (como conjunción de bienes naturales y artificiales más el trabajo) es social; "capital" la descartamos de nuestro vocabulario, desde ahora y por siempre, puesto que una ciencia no admite términos fundamentales inexactos.

Se ha introducido la palabra riquezas naturales y debemos conocer la definición de ella, las riquezas naturales y artificiales no es más que un sinónimo de tierra. De esta manera se da por explicito la anterior definición en la que mencionamos que la riqueza es tierra más trabajo. Esto nos llevara a un ciclo económico, donde su representante es el indev, o riqueza, o riqueza artificial.

No se necesitan capitales para la inicialización ni para el mantenimiento de cualquier actividad porque la riqueza allí está, visible, como el ladrillo de Einstein; se necesita trabajo para usarla y acrecentarla, se necesita consumo para disfrutarla y afirmarla. La riqueza de la zona su único "capital" real y verdadero, sin anfibologías está ahí, a la vista, y la sociedad lo representa en el indev y lo mide con el indev. Debemos considerar siempre que el ciclo económico empieza con la extracción, no con la reposición, por lo que ya se cuenta con el "capital inicial" que todo lo mueve; que no tiene nada de "muerto". Sin trabajo no hay dinero, sin trabajo no hay producción, sin trabajo no hay beneficios, por más "capitales" que existan. Es más, sin trabajo no existe "aquel" capital ni en el capitalismo. Y sin consumo, ni el trabajo tiene sentido.

La riqueza de una zona está formada, a grandes rasgos, por dos integrantes: la riqueza natural de la zona (N), externa a la creada por el hombre aunque él la integra; la actividad transformadora y creadora de este (T), que se ejecuta sobre aquella; y la creada y repuesta por él (A). Podríamos sintetizarlas a cada una de ellas como tierra y trabajo, haciendo un paralelismo con las viejas definiciones de los economistas. Los propios economistas primitivos, cuando hablan de "factores productivos" (es decir, generadores de riqueza) nombran tres cosas, tal como si fueran independientes: hablan de la tierra, el trabajo y el capital. Los conceptos de tierra y trabajo no los tocamos ni discutimos; es más, los compartimos. Pero cuando hablan del capital como factor productivo dicen:

"Por capital se entiende el conjunto de recursos producidos por la mano del hombre que se necesitan para fabricar bienes y servicios: la maquinaria o las instalaciones industriales, por ejemplo. Conviene que esto quede claro ya que la palabra 'capital' se usa muchas veces de forma incorrecta para designar cualquier cantidad grande de dinero."

edu.red

Si miramos la fórmula por el lado derecho de la igualdad –(N+A) .T vemos los únicos dos factores productivos que en realidad existen con vidas separadas; pueden representarse también como la suma del producto de N. T (la actividad humana relacionada a la "tierra") con la del producto de A. T (los frutos de la actividad humana relacionada con la producción, los servicios, la educación y todo lo demás): así se demuestra que la riqueza no es más que "tierra y trabajo".

edu.red

La necesidad de moneda extranjera puede existir, por ejemplo, para visitar otros países o para complementar una importación; esto último es algo que no es deseable hacer: las diferencias en las "balanzas de pago" deben ser eliminadas mediante mercancías reales, materiales, tangibles, fruto del trabajo individual o social de la zona, es decir, mediante bienes con valor agregado Pero definitivamente no puede tener un tipo de cambio fijo, sin importar el fin para el que se las usará; el tipo de cambio es invariable para un fin determinado, pero será diferente para otro fin. Según para lo que la moneda extranjera sea utilizada, según en qué medida beneficie o perjudique al ciclo económico, habrá de dársele una cotización específica.

Mientras haya trabajo, producción y reposición de riqueza, habrá enriquecimiento. Mientras hay enriquecimiento hay aumento del valor intrínseco del indev, mientras hay aumento de valor de lo que la moneda representa es porque hay beneficios; Hemos visto que no se descarta el uso de bancos. Ellos seguirán cumpliendo la función principal que hoy cumplen: captación de ahorro, el servicio de administración de diferentes tipos de cuentas y lo préstamos, a las que, seguramente, se le agregarán otras funciones nuevas.

El cálculo de la riqueza total generada en una zona por el trabajo de sus habitantes, se realiza a través de una fórmula matemática: H = (N + A). T, donde no intervienen intereses particulares ni grupales, ni donde interviene el dinero. Y si se cumple responsablemente con el orden y las etapas que nos obliga a cumplir el ciclo económico única condición indispensable para lograr el desarrollo- los beneficios pueden ser alcanzados por todos, sin excepción, de una manera objetiva y científicamente probada y comprobada. Eso nos permite el ciclo económico y su representante, el indev.

El trabajo y el salario

El trabajo es un medio por el cual somos capaces de satisfacer necesidades y sueños, el trabajo es un medio de vivir. No es placentero para todas las personas debido a que muchas no son capaces de trabajar en aquello que anhelan o aspiran a pesar de que la meta de la población es establecer una forman en la que el trabajo se pueda volver placentero. Cuando trabajamos no solo estamos consumiendo horas de nuestra vida sino también produciendo de las mismas, un trabajador es un productor y también consumidor. Y de esta manera también se vuelve un benefactor interno de la sociedad.

edu.red

  • Mediante esta propuesta, el trabajo por sí mismo satisface esa necesidad vocacional individual y el fruto de ese mismo trabajo está dirigido a satisfacer las necesidades sociales.

  • La actividad humana más visible es la que llamamos trabajo: es consumidora de horas de vida y es también productora de vidas, cada hombre integra no solamente la cadena de producción social sino también y conjuntamente la del consumo social.

  • Cada uno de los hombres integra la etapa del ciclo económico. Como productor la cumple en forma directa y no automática, mediante el trabajo; como benefactor la cumple en forma indirecta y automática, al consumir o usufructuar el fruto de ese trabajo, el bien producido.

  • La humanidad tiene una doble manera social y laboral de cumplir con el ciclo económico; tiene una doble forma de reponer la riqueza natural que destruye con sus actividades. La primera, mediante la creación de nueva riqueza que no existía previamente, y la segunda, mediante la reposición de lo que ha destruido.

Por intermedio del trabajo y su conclusión (por los resultados económicos que a través de él obtiene un productor), es que recibe un salario, un beneficio económico, que lo usará indiferentemente en el consumo o como reinversión productiva en la misma u otra actividad. Ambos usos lo transforman en benefactor. Un mismo hombre mientras trabaja es un productor, pero mientras consume o usufructúa un bien (el resultado del trabajo propio o social), es un benefactor, y este es quien, de esa manera, completa la parte faltante del proceso productivo o ciclo que aquél inició.

edu.red

Un hombre puede tener una aptitud sobresaliente para una tarea específica, pero será de un nivel medio, o menor, para otra cualquiera, en tanto que otro hombre hará de ésta su tarea principal, la que desempeñará de una excelente manera. La definición que importa es que cada productor recibirá el ingreso mínimo más los beneficios que su propia actividad le genere, esto es, recibirá el ingreso natural más el salario individual derivado del provecho que le genera su actividad. Cuando definimos el ingreso mínimo, quedó establecido que es un "piso" por debajo del cual no puede ubicarse el ingreso de nadie. Los ingresos de todos están en o sobre él.

edu.red

La capacidad productiva de una zona debe estar relacionada directamente con las necesidades de sus habitantes, porque si una población es incapaz de generar la riqueza necesaria para lograr el bienestar de cada uno de ellos, no tiene razón de ser como sociedad. Esa capacidad está definida y la representamos en una cifra que llamamos el factor T., como T es una constante, nos otorga una pauta de carácter funcional. Dentro de un mismo período (usualmente se establece en un año), el valor de H lo podemos considerar también como constante, por lo que la fórmula del ciclo económico general, social, sólo la aplicaremos una vez por período. El pulso diario de la economía cambia según el factor R, hallado a través de la fórmula de la riqueza propia de la zona, R = N + A.

Los cálculos más cotidianos para conocer el rumbo que va tomando la economía (el cálculo diario del indev, que equivale al estado actual de la riqueza), no obliga ni necesita del uso del factor T. No es necesario utilizar la fórmula del ciclo económico para hacer los frecuentes cálculos que habrán de hacerse todas las horas o todos los días o todas las semanas, sino que simplemente necesita de la suma de los módulos N y A, esto es R, el otro factor del producto.

edu.red

En esta tabla se muestran los primeros tres meses del período actual de un país hipotético. Las columnas muestran cuánto ha aumentado cada una de las riquezas que se establecen en el encabezado: Nt, At y Ra representan los aumentos del período en curso, en tanto que R" es el aumento general de la riqueza propia del país, suponiendo que la riqueza acumulada hasta el período anterior haya sido de 62 Millones. Todas las cifras dadas en este ejemplo se representan en millones de granindevs; son absolutamente arbitrarias, y sólo se muestran para explicar el cálculo cotidiano del estado en que marcha la economía. No obstante nos dicen que el primer mes la economía solamente aumentó un 0,04% en relación al año pasado; el segundo mes la riqueza subió un 1,51% con relación al primero, por lo que no fue un mes malo, lo que representa un 1,93% de riqueza acumulada en esos dos meses; la tercera nos dice que fue un mes de baja productividad, subió sólo un 0,76% en relación al segundo, haciendo que la riqueza acumulada ascendiera al 2,71%. Han sido regulares, uno bueno y dos malos, pero se ha aumentado la riqueza total, y con ella, el respaldo de la moneda.

El ciclo económico nos señala claramente que el monto del salario individual (el común y corriente, el que se recibe según los merecimientos individuales), sólo se obtiene desde el reparto de utilidades que genere la actividad que desempeñe cada habitante, puesto que el "costo" de ese salario siempre está agregado al precio final del producto, que siempre es pagado por el benefactor y nunca por el productor que hace el papel de patrón. Por ese motivo es que los salarios de los trabajadores no son "costos" para los propietarios de los medios de producción, sino que efectivamente son costos para quien realmente los paga: el consumidor. El ciclo también nos indica que los ingresos (el salario es uno de ellos) viene dado en el sentido de los beneficios, opuesto al sentido de los costos.

Existe un ingreso mínimo social, pero no existe un salario individual mínimo. Éste depende del merecimiento de cada trabajador, el que, a su vez, posee la total y verdadera libertad de decidir si lo acepta o no: cada trabajador ya tiene garantizado su ingreso natural que le permitirá no sufrir necesidades apremiantes, con tiempo suficiente para encontrar (o crear por sí mismo) el trabajo que anhela.

  • Cada sociedad debe fijar el máximo de horas de trabajo, y ese máximo debe tender a ser cada vez menor, como una de las formas sólo una más de ellas de evitar el desempleo. Pero esa no es su función principal, sino que es la de permitir que cada trabajador, cada productor, en libertad, pueda disfrutar de sus derechos adquiridos como benefactor, su otro rol fundamental. Ambos roles deben equilibrarse: trabajar para vivir y no vivir para trabajar.

  • El disfrute de las horas libres, el esparcimiento, que es la forma más común de disfrutar un ingreso mayor que el mínimo, hace que la economía humana funcione.

  • El ciclo económico indica que (para que una economía funcione correctamente) debe permitir al benefactor el acceso a todo lo producido, tanto a través de un poder adquisitivo suficiente como mediante la disponibilidad del tiempo necesario para poder alcanzarlo.

edu.red

El ciclo económico señala que los costos van en el sentido de la producción, en tanto que los ingresos vienen en el sentido opuesto, en el sentido dado por el consumo, el de los beneficios. De allí que los salarios no pueden considerarse como costos, y no los integran.

El derecho a recibir el ingreso natural consiste en el simple hecho de haber nacido, porque el hombre nace siendo un benefactor. La aparición de una nueva vida es, por sí misma, un aumento de la riqueza social; mientras vaya viviendo irá produciendo y consumiendo, lo que también irá aumentando tal riqueza. La obligación que conlleva ese derecho es la de reponer y hacer reponer la magnitud de riqueza que ha sido utilizada para darle posibilidad a esa vida y al valor de ese ingreso natural. Cada habitante nace con ese derecho y con la obligación de ejercer una actividad que reponga riqueza de algún tipo, tangible o intangible, a través de cualquiera de los módulos A o N o mediante el factor T. Esto cumple con uno de los objetivos de la humanidad, y por lo tanto de esta economía: la liquidación definitiva del desempleo. A su vez, el arribo de un extranjero lo convierte en un habitante más, en un benefactor más, mientras esté residiendo en el país del ciclo económico.

El estudio del ciclo económico nos dice que la producción de bienes tiene el objetivo de satisfacer las necesidades de consumo, las necesidades del hombre en su papel de benefactor, por lo que no es un fin en sí misma. No es la única tarea a realizar. Esa producción tampoco tiene como fin un beneficio directo y único a través de las ganancias derivadas de su venta, sino que conjuntamente lo tiene a través del propio hecho de su consumo: única actividad que genera los beneficios individuales de cada productor, los beneficios sociales generales y los beneficios a la naturaleza, derivados del benefactor mediante el pago de su precio. El mismo productor, a su vez, como benefactor, como integrante de la sociedad, está obteniendo siempre el ingreso natural que corresponde a todos.

La generación de riqueza es un logro social. Es social la obtención de sus frutos. Y la distribución de ella también debe serlo. Por ello es que todos, absolutamente todos los habitantes, tomados individualmente, tienen derecho a alcanzarla, y la sociedad en su conjunto el deber de garantizarlo, organizarlo y realizarlo.

Cada niño que nace debe tener asegurada su existencia, no ya como niño, sino que debe tener toda su vida asegurada, como niño, adulto y anciano. No hay mejor forma de proteger y hacer eficiente la economía. La sociedad deberá y podrá darle a cada habitante, desde el nacido más reciente al anciano de mayor edad, un ingreso de monto único o un ingreso variable o escalonado, según lo determine ella misma.

Cada trabajador tendrá asegurado su ingreso natural que le permitirá moverse con toda libertad para buscar y conseguir el trabajo que para él sea el mejor o el más conveniente, y a través del cual aumentará sus ingresos. Cada empleador tendrá la posibilidad de acordar con sus empleados el monto del salario que percibirán por esa actividad, también en libertad. Podrá pagarlo por adelantado desde su propio peculio o como reparto de las utilidades obtenidas al cierre del ciclo, indiferentemente.

Así, cada hombre tomado individualmente podrá dedicarse a la actividad que más quiera o que más guste, y la sociedad en su conjunto podrá dedicarse a la construcción de una civilización única, de una potencialidad hasta ahora nunca alcanzada, aunque imaginada e imaginable.

La competencia y el mercado, la oferta y la demanda

Mientras hay necesidad de mercancías, estas se ofrecerán, lo cual será establecido por a quienes llamamos benefactor, que no son otros más que la misma sociedad entera, conocido también como "mercado". El benefactor puede exigir a los demás y así mismo que se satisfagan sus necesidades, sus gustos y caprichos, ya que poseerá las herramientas apropiadas para ello: información, educación y un real poder de compra, en otras palabras, el suficiente poder adquisitivo.

El benefactor es el nuevo objeto de la economía, haciéndose así justicia con su real valer, y además por tener ahora un poder de compra necesario y suficiente, su exigencia se transforma en orden, no en falsas leyes. El productor de un bien cualquiera, como benefactor que también es, asumirá ahora una responsabilidad nueva, que antes no tenía, no sólo sobre la calidad de ese bien que produce sino también sobre su precio o costo social de producción, ya que él mismo disfrutará de este derecho como benefactor de otras mercancías.

Una necesidad es aquello que a alguien le falta y que conjuntamente otros tienen. Es indiscutible que no haber necesidad en su acepción económica normal de algo que aun no existe. Por lo tanto ya hay una "oferta" de la mercancía que suple esa necesidad y una "demanda" suficiente como para hacerla "rentable". Si así no fuera, habría entonces un "mercado apetecible" a disposición. La producción de alimentos, de medicamentos, de viviendas, su abundancia, su súper producción, es la tarea prioritaria, hasta que se alcance a todos, sin excepción, tratando siempre de evitar los perjuicios que pueda generar su posible explotación irracional o exagerada. Para esta economía, no obstante, es mejor pecar de súper producción que de escasez: la abundancia, en todo sentido, es una de sus metas. Así ha de suceder con toda actividad humana.

La necesidad de algo que aún no existe es para esta economía y su sociedad un reto, un desafío a vencer. La "competencia" entre productores cabrá cuando ya no existan necesidades que saciar, sino solamente gustos y caprichos. Esa posibilidad se alcanza más pronto de lo que se piensa, más rápido de lo que se cree y más fácilmente de lo que se sueña. Pero el primer logro y el principal es que el benefactor no es más el rehén de esa competencia.

El desempleo no puede existir, ya que esto implica que no habrá "competencia" entre los desempleados, finalizándose con otra manera de usurpación del poder adquisitivo, que no es más que la usurpación de beneficios sin devolución ni generación de riquezas.

El concepto de Mercado para el Ciclo Económico es diferente que para la llamada economía de mercado, no posee el sentido religioso de un ente supra social, puesto que el ciclo demuestra que no existe la "ley" de la oferta y la demanda. En sentido genera, para el ciclo económico, el mercado es un sinónimo de comercio o de comercialización. El mercado queda definido como la porción de la sociedad, integrante de un Estado Nacional, que en un momento cualquiera esta intercambiando mercancías y servicios.

El mercado no posee características propias distintas a las de la sociedad que lo conforma, solo es, o podría ser una parte de ella. Esa fracción de la sociedad no tiene límites definidos, porque ella misma y sus integrantes varían continuamente. El mercado sólo puede ser tomado en un sentido general, puesto que esa condición de intercambio que lo define, siempre se está realizando.

En este tipo de economía, la demanda representa las necesidades, gustos y caprichos que tiene el benefactor y que aun no se han satisfecho. Mientras que la oferta, son los diferentes bienes que el productor ha puesto en venta. Estos términos, están generalmente relacionados con las necesidades actuales. La importancia de ambos términos solo tiene sentido si el benefactor tiene un poder adquisitivo tal que haga que estas realmente existan. Mientras haya actividad económica habrá "oferta", habrá "demanda", y habrá "mercado".

Importación y exportación

En este punto es donde se comete mayor cantidad de errores la economía primitiva, donde más se nota su origen místico. De allí que el ciclo económico se vuelve muy delicado de comprender, quizá frágil, para aquellos que conciben lo económico, por ejemplo, según la visión neoliberal. El ciclo necesita que se deje a un lado la liturgia primitiva en el tema del comercio exterior, para percibir en su debida forma varios de sus principios.

Viene al caso hacer notar la diferencia de conceptos entre valor y precio, mientras que el ciclo nos dice que:

  • El precio es el costo social de producción de una mercancía.

  • Su valor está dado por el nivel de necesidad social que de ella exista y la forma en que la satisface.

  • El valor relativiza al precio. Para los neoliberales son la misma cosa.

En el capitalismo, el valor de la riqueza está determinado por la cantidad de trabajo socialmente necesario para producirla. Para el ciclo económico también; pero agregando que el trabajo social es una necesidad colectiva, cuyos frutos han de satisfacer las necesidades del benefactor, siendo así, el valor de la riqueza está determinado por la necesidad social, productora reponedora y consumidora-reponedora.

Siempre se ha sabido que ningún país puede progresar si necesita importar lo que consume, por la sencilla razón de que, si requiere hacerlo, es necesariamente un país que no genera riqueza; pero tampoco se desarrolla si la riqueza que genera la exporta; o mejor dicho, si tiene como fin primordial el exportar su producción. El ciclo económico confirma que ningún país se desarrolla vendiendo la riqueza propia (llámese carne, café, o petróleo) y que él mismo puede estar necesitando. Aun menos si lo hace a cambio de una moneda que no es la suya, que no es un indev (dólares por ejemplo); este tipo de moneda nunca suple lo extraído, ni aumenta el valor de la riqueza social H.

Sólo puede exportarse el excedente, lo que no se necesite. Si es que lo hay. La producción excedentaria puede planificarse; puede utilizarse para importar, a cambio de ella, lo que se esté necesitando.

La necesidad de bienes o mercancías, como se ve, es lo que promueve todo el comercio, y en particular el exterior. No lo hace su precio. Se ha dicho ya que la exportación no es una meta de esta economía. Y aún más, es totalmente prescindible para el país que la utiliza. La riqueza existe en su interior (mídase en la moneda que se mida): esa riqueza es la conjunción de la que existe en su naturaleza y en la generada y transformada por la actividad de su gente; si por alguna razón estas dos variables aún no han podido colmar alguna necesidad puntual, los habitantes del país deben promover la forma para crearlas por sí mismos, sin tener que endeudarse externamente.

Para el cumplimiento del ciclo no se necesitan "divisas" que "aumenten las reservas" (como nos han dicho los primitivos), ya que aquellas no aumentan el respaldo del indev; no mejoran la riqueza del país, no integran N ni A ni, por tanto, R. En tanto, "nuestras" reservas aumentan única y solamente con la extracción de riqueza, su elaboración, su consumo y su reposición, en una unidad compacta que se obtiene y representa con el cumplimiento efectivo del ciclo económico; eso es lo único que implica un aumento verdadero de riqueza.

Recordemos que el ciclo económico tiene sólo una "puerta" de entrada y una de salida. Por eso la importación de cualquier tipo de materia prima (aunque puede no beneficiarlo) definitivamente no lo perjudica; ellas inician su propio ciclo y presuponen una "extracción".

Las materias primas abren un ciclo; si se las exporta no lo cierran. Y si no se cierra un ciclo abierto, podrá haber alguna transformación, pero no hay creación de nueva riqueza (lo que ordinariamente se le llama "valor agregado") ni reposición de la riqueza extraída en cantidad suficiente para equilibrar la extracción (faltará, por lo menos, la reposición indirecta y automática del benefactor). No se alcanza a "saldar aquella deuda" adquirida previamente con la naturaleza. Es evidente que éste perjuicio sucede si la exportación se realiza a un país con otra economía, donde no es necesario el cumplimiento del ciclo económico, y donde su población no desempeña el papel de benefactor. Si va dirigida a un país igual al "nuestro" el ciclo se cumple cómo si fuera un consumo interno. Esta diferencia tan radical se debe a que todo depende de lo que se obtiene a cambio de una exportación: entre países con indev no existe un comercio exterior regulado por otros dineros.

  • Si una mercancía de origen nacional es muy solicitada desde el extranjero, podremos intercambiarla por materias primas u otros insumos que hagan falta. O, en todo caso, por mercancías elaboradas que no puedan producirse aquí.

  • La otra posibilidad es que el otro país utilice también el mismo sistema económico que el "nuestro", caso en el cual el trueque es la única forma posible (además de ser la natural y justa), de comercio entre ambos; debemos considerar que el uso de ambos indevs como "medio de pago o intercambio" no es más que otra forma de trueque, pues ellos mismos no son más que el uso de un patrón de medida.

El sistema que estamos proponiendo, tal como se ve, no promueve la autarquía, esto es, aislar económicamente al país que la utiliza de los demás países. Lo que busca es el cumplimiento efectivo del ciclo, de que no haya un perjuicio directo a la economía del país, ni que ningún país sea más favorecido que otro.

La importación es un comercio necesario porque "ninguna nación, ni ningún individuo, es completamente capaz de producir todos los bienes que requiere para sobrevivir", pero el ciclo nos dice que debe realizarse para suplir una falta cierta, falta que puede ser considerada como necesaria o muy necesaria para el benefactor al que está dirigida, o para el productor que la utilizará como insumo. La importación y la exportación se unifican en el criterio de "comercio exterior", cuyo resultado no debe ni puede perjudicar a ninguna de las dos partes que lo integran.

El precio se conforma para todos y cada uno de los productores integrantes del ciclo económico de dos partes, representadas cada uno en los dos círculos del diagrama siguiente: uno representa los costos y el otro los beneficios; ambos son generados, formados, concebidos, durante y por intermedio de su proceso productivo, es decir, del trabajo que lo crea: nunca en el momento de su venta; en ella ya se encuentran todos definidos. Lo que produce el bien es el trabajo, y este se mide y se paga mediante los diferentes beneficios contenidos en ese precio: la intersección de esos dos círculos es la parte que representa ese trabajo, puesto que esa misma producción es la que genera los costos necesarios y la que agrega los beneficios esperados.

El diagrama también nos indica que el costo social de producción de una mercancía (es decir, su precio), está compuesto principalmente (en un sentido cualitativo, no cuantitativo) por el trabajo social que se necesitó para producirla. No nos confirma mucho: sólo el hecho de que nada puede crearse si no es mediante el trabajo.

edu.red

Hemos dicho que los salarios (a través de los cuales se mide esa cantidad de trabajo contenido en el bien) se obtienen desde los beneficios generados por su venta, representados en su totalidad por el círculo B, completo, incluyendo la intersección con C. El círculo C nos muestra los costos totales de la mercancía. No existe contradicción, puesto que para cada uno de los productores de la cadena productiva de esa mercancía, los beneficios del productor anterior no son más, para él, que otros costos. El comprador de un insumo (una mercancía intermedia del ciclo) es una especie de consumidor, que recibe un bien cuyo precio es todo costo, por el cambio, para el consumidor final (el benefactor), los dos círculos son uno solo: es un único circulo C; para él, el precio de la mercancía es todo costo. Lo que nos ayuda a entender este diagrama es que los conceptos de costo y beneficio siempre se han caracterizado por ser relativos: dependen del punto de vista de dónde se los mire, y si los miramos desde la óptica de cada uno de los productores tendremos una manera de verlos por cada uno de ellos.

Por lo tanto, es una observación oscura y sin precisión, contraria a la rigurosidad científica. Debemos mirar desde un punto de vista fijo y claro. Para el consumidor, desde su punto de vista individual, el precio de un bien es lo que a él le cuesta comprarlo; es costo. Su valor es el beneficio que le brinda o brindará ese mismo bien, a veces al adquirirlo o poseerlo, otras al consumirlo o usufructuarlo. Son conceptos separados, casi opuestos, casi antónimos. Él es incapaz de modificar el precio; en cambio el valor del bien sólo puede ser dado por él, ya sea comparando el costo del bien con su propio ingreso o con la necesidad que tenga de ese bien, o con una combinación de ambos.

edu.red

En el aspecto social, cuando un país importa una mercancía el precio que paga por ella es todo costo; el país asume el rol de un benefactor colectivo. Si la necesidad de ella es alta, su valor (en este caso, valor social) será alto, independientemente del precio que se pague por ella.

Ningún país se enriquece exportando. Un país se enriquece produciendo riqueza, no dinero, y distribuyéndola entre los que en verdad la generaron. Un país se enriquece produciendo, no cambiando la producción por dinero, que no representa ni vale nada, y aún menos si ese dinero es una moneda que el propio país no puede manejar, dirigir, conducir.

Esta propuesta nos enseña que todo país es poseedor de una riqueza incalculable por el sólo hecho de existir, y que así puede contar con todo el dinero que representa y mide esa, su riqueza, para disfrute de la totalidad de su población.

La propiedad y otros valores

La definición del derecho humanitario de pertenencia sobre la tierra no puede darse a través de la semejanza con los mamíferos y otras especies, sino consigo mismo. Sabiendo que toda la humanidad, al igual que todos los seres vivos, de una manera u otra adquieren su apoyo principal desde el medio en general. Los hombres modernos ya no viven de la caza y la recolección sin destrucción, sino que dependen de lo que promueven otros hombres, quienes devastan y reponen lo devastado.

Dentro de los sistemas financieros de clases incompatibles que han coexistido, el derecho de pertenencia sobre cualquier bien tiene por pie primordial la propiedad sobre el patrimonio. Esta es la propiedad que sus depositarios manejan como base aclaratoria de sus exenciones. Aunque los tecnócratas no gocen de esto, se debe decir que el concepto multitudinario de capital es un claro equivalente de dinero, y es también la enunciación puntual de él en el individualismo.

Nuestro sistema, que se basa en el lapso de la riqueza, reconoce totalmente el derecho de pertenencia sobre los diferentes caudales de producción para toda persona física o jurídica que desempeñe con los requerimientos imprescindibles que él demanda.

El ciclo económico exige a toda la humanidad, por entreacto de sus directos responsables que son los aprovechadores de esos medios, a cumplir necesariamente con la renovación de la riqueza extirpada. De allí que si un medio de producción no es utilizado como tal, es un menoscabo absoluto para esa economía y por ende para esa colectividad. Un medio de producción ha de ser un medio de producción, no un paisaje terrenal.

  • La relación de productor existe cuando un hombre ejecuta un compromiso, mediante el uso de un medio de producción, que provoca y repone riqueza, la que envuelve un esfuerzo especial para conseguir la necesaria regeneración, y ese rol lo hace de una forma directa pero jamás automática.

  • En cambio, en el original de favorecedor lo logra automática e furtivamente: no necesita de un esfuerzo especial más que el de conquistarla. Es necesario que todo favorecedor alcance un buen dominio adquisitivo por el simple hecho de que éste es el que le aprueba concluir el ciclo de cualquier bien, al obtener y consumirlo o aplicarlo.

  • El individuo no conserva ni tiene derecho alguno sobre aquellos bienes no producidos por su propia mano. Solamente puede tomarlo suministrado y reponerlo, debe cumplir con el ciclo financiero que se realiza con ellos y a través de ellos.

  • Ningún derecho, ni el de propiedad ni el de comercio, está por arriba del derecho humano oriundo a una vida digna, que se logra, entre otras cosas, poseyendo, gozando y conservando lo socialmente producido.

En tanto que todo aquello que sea un medio de producción de cualquier bien que requiera ser usado socialmente, pasa a ser propiedad en provecho del productor que lo obtuvo, a circunstancia de que, con su uso, éste desempeñe con el cierre del ciclo económico, pues en ese acatamiento se basan sus derechos y sus juramentos.

El Estado

Para el indev, el Estado tiene que plasmar un rol que es cabalmente el opuesto al que proponen los neoliberales: su papel fundamental radica en el control, tanto de los precios como de los repertorios de crecimiento en los que se basa el valor de esa moneda, para evitar la eventualidad de que exista la adjudicación ilegítima de riqueza, y el encarecimiento, en fin, para eliminar la inmoralidad.

Cada colectividad, insuperablemente y sería lo deseable que democráticamente, podrá dar otras contingencias a su forma de Estado optada. Este podrá, o no, seguir efectuando las labores que hoy conserva en los diferentes sistemas económicos que hoy existen, y los electorales o políticos que de ellos se derivan.

Dentro de cada uno existen numerosas formas diferentes de Estados. Si observamos el capitalismo, podemos decir sin duda a cometer errores gruesos, que existe una forma de Estado por cada país. Si lográramos a investigar las formas electorales que estos tienen y que satisfacen la definición más manejada aunque no es la mejor ni mucho menos del nivel de democracia de cada país, aseveramos que hay una por cada Estado.

Es más, hay estados capitalistas con diferentes sistemas políticos: hay republicanos y monárquicos, presidentes designados y dictaduras, presidentes electos que ejecutan durante distinta cantidad de años, con reelección y sin ella, etc. Nadie, hasta ahora, puede asegurar que cualquiera de esas diferencias, tomándolas por apartado, sea mejor que la otra, sin dejar de lado de la obviedad de que sí existen algunas que no son las mejores. Nosotros, al añadir una nueva forma económica, no podemos más que ratificar.

Cada corporación se dará la forma de Estado, y sus funciones, más apropiada a sus propias exigencias. La cobranza para el mantenimiento del Estado se realiza, vaya novedad, a través del cobro de impuestos. Pero no puede existir, bajo ningún concepto, un impuesto al consumo, esto es, un impuesto al favorecedor, cuyo ingreso es definido socialmente y distribuido en forma gubernamental.

El ingreso primordial del Estado ha de ser obtenido a través del impuesto a las ganancias, a las rentas, en fin, a los beneficios que todo productor define para sí mismo, según su discernimiento individual, y otra u otras formas estatales que se consideren pertinentes, siempre sin afectar al benefactor.

Debe tender a desaparecer, cuando el desarrollo de la humanidad sea tal que permita lograrlo sin quebranto de la igualdad, la independencia, la independencia y la seguridad de todos los hombres. Recapacitamos, mejor dicho exponemos, que la concentración de esta propuesta, por sí misma, permite precipitar ese avance y aumentar considerablemente la amplitud de horizontes, incluida la posibilidad pronosticada de hacer del sostenimiento del Estado un precio social menor.

A modo de epílogo

Se da una lista de las ejecuciones primordiales a las que aprueba llegar la atención de esta teoría:

  • Toda acción económica humana desempeña y debe cumplir un ciclo manejado y dado por la naturaleza, en un orden preestablecido y estricto de: producción, mercantilización y reposición.

  • Toda fortuna procede, siempre y únicamente, de la naturaleza, como resultado de especificar el cierre de cada ciclo económico iniciado. La tarea fundamental de la sociedad es el acatamiento estricto del ciclo.

  • Toda prontitud humana reponedora y el trabajo de renovación, no es mercancía sino una forma diferente de uso de una variedad ya definida de energía natural conveniente del ser humano.

  • Cada ser humano desempeña un doble rol en la vida económica de una sociedad, el de productor de patrimonios y el de benéfico de esa sociedad y su economía.

  • Cada persona, desde el recién nacido al más anciano, sin interesar ningún tipo de diferencia, es digno de un ingreso mínimo, natural, derecho que lo obtiene por el simple hecho de haber nacido, de ser un benefactor más, con la necesidad de cumplir y hacer cumplir el ciclo económico.

  • Se permite la contingencia cierta de partir todos desde un mismo punto de partida, en libertad, equivalencia y apoyo.

  • La labor primordial y posible de la economía se debe efectuar mediante la complacencia de todas las insuficiencias, los deleites y los antojos de los hombres, en ese orden.

  • El Estado ha de practicar con una función ordenadora y supervisora del medio de consumo, la propiedad social, sin penuria de intervenir concisamente en ninguna de las fases del ciclo económico.

  • Porque la generación de tantos cambios cuantitativos generará un gran salto cualitativo.

Estos gremios proponen a ser mediadores entre los países ricos y los países pobres, para perdurar a unos en su prodigalidad, a otros en su escasez, haciéndoles pretender a los pobres que reciben asistencia, cuando en realidad recogen formidables deudas, impagables.

Conclusiones

  • 1. Decimos que toda actividad económica humana cumple y debe cumplir un ciclo regido y dado por la naturaleza, en un orden preestablecido y estricto de: producción, comercialización y reposición.

  • 2. Toda riqueza proviene, siempre y únicamente, de la naturaleza, como resultado de concretar el cierre de cada ciclo económico iniciado.

  • 3. También podemos decir que la tarea fundamental de la sociedad es el cumplimiento estricto del ciclo, por encima de la búsqueda de rentas o ganancias, porque estas se derivan directamente de la finalización de cada ciclo.

  • 4. Se han dejado de considerar los hechos sociales como hechos diferentes de los naturales. Ya no se ven como diferentes.

  • 5. Toda actividad humana –el trabajo como producción, la actividad consumidora-reponedora y el trabajo de reposición, relacionándolos al ciclo- definitivamente no es mercancía sino una forma diferente de uso de una especie ya definida de energía natural propia del ser humano, que se mide mediante el indev, en su uso como patrón, y la que, en forma individual, le da a éste su unidad.

  • 6. No obstante debemos resaltar que cada ser humano cumple un doble rol en la vida económica de una sociedad, el de productor de bienes y el de benefactor de esa sociedad y su economía, su rol económico clave, de importancia fundamental.

  • 7. Cada ser humano, desde el recién nacido al más anciano, sin importar ningún tipo de diferenciación –todas son irracionales, antinaturales, injustas-, es merecedor de un ingreso mínimo, natural, derecho que lo obtiene por el simple hecho de haber nacido, de ser un benefactor más, con la obligación de cumplir y hacer cumplir el ciclo económico.

  • 8. Todo Estado ha de cumplir con una función reguladora y controladora del medio de consumo, la propiedad social, sin necesidad de intervenir directamente en ninguna de las etapas del ciclo económico.

  • 9. El cumplimiento del ciclo permite y hace posible el crecimiento económico ilimitado, el desarrollo infinito.

  • 10. De esta manera eliminamos definitivamente la pobreza, la miseria, la escasez y todo lo que ellas implican.

  • 11. La socialización nos otorga las verdaderas y definitivas independencia y democracia. Se alcanza y se hace posible, sin cortapisas, el logro de una nueva civilización.

  • 12. Porque la generación de tantos cambios cuantitativos generará un gran salto cualitativo.

Bibliografía

  • 1. Alberto C. Sigales. (Septiembre de 2003). La Naturaleza de la Riqueza. Teoría Económicamente Complementaria. Montevideo.

 

 

Autor:

Becerra Carlos.

Rangel Bertyimar.

Reyes Luis.

Rollins Yanethsy.

Taly Renia.

Enviado por:

Iván José Turmero Astros

edu.red

República Bolivariana de Venezuela.

Universidad Nacional Experimental Politécnica.

"Antonio José de Sucre"

Vicerrectorado Puerto Ordaz.

Departamento de Ingeniería Industrial.

Cátedra: Ingeniería Financiera

Profesor:

MSc. Ing. Ivan Turmero

Ciudad Guayana, Julio del 2015

Partes: 1, 2
 Página anterior Volver al principio del trabajoPágina siguiente