- Introducción
- Feudalismo
- Las causas de la transformación del feudalismo al capitalismo
- Desintegración del feudalismo y nacimiento del capitalismo
- El Capitalismo
- Características del capitalismo
- Surgimiento del Capitalismo
- Conclusión
- Bibliografía
Introducción
Capitalismo, sistema económico en el que los individuos privados y las empresas de negocios llevan a cabo la producción y el intercambio de bienes y servicios mediante complejas transacciones en las que intervienen los precios y los mercados. Aunque tiene sus orígenes en la antigüedad, el desarrollo del capitalismo es un fenómeno europeo; fue evolucionando en distintas etapas, hasta considerarse establecido en la segunda mitad del siglo XIX. Desde Europa, y en concreto desde Inglaterra, el sistema capitalista se fue extendiendo a todo el mundo, siendo el sistema socioeconómico casi exclusivo en el ámbito mundial hasta el estallido de la I Guerra Mundial, tras la cual se estableció un nuevo sistema socioeconómico, el comunismo, que se convirtió en el opuesto al capitalista.
Se puede decir que, de existir un fundador del sistema capitalista, éste es el filósofo escocés Adam Smith, que fue el primero en describir los principios económicos básicos que definen al capitalismo.
El Feudalismo es la denominación historiográfica del sistema político predominante en la Europa occidental de los siglos centrales de la Edad Media (Plena Edad Media, entre los siglos IX al XIII):, caracterizado por la descentralización del poder político; al basarse en la difusión del poder desde la cúspide (donde en teoría se encontraban el emperador y los reyes) hacia la base (donde el poder local se ejercía de forma efectiva con gran autonomía o independencia en la práctica por nobles de muy distintas denominaciones, basadas en las del Imperio carolingio -marqueses, duques, condes, barones, caballeros, etc.-).
Como formación económico-social, el feudalismo se inició en la Antigüedad tardía con la transición del modo de producción esclavista al feudal; a partir de la crisis del siglo III y sobre todo con la disolución del Imperio romano de Occidente (siglo V) y la formación de los reinos germánicos y el Imperio carolingio (siglos VIII y IX).
Feudalismo
Sistema contractual de relaciones políticas y militares entre los miembros de la nobleza de Europa occidental durante la alta edad media. El feudalismo se caracterizó por la concesión de feudos (casi siempre en forma de tierras y trabajo) a cambio de una prestación política y militar, contrato sellado por un juramento de homenaje y fidelidad. Pero tanto el señor como el vasallo eran hombres libres, por lo que no debe ser confundido con el régimen señorial, sistema contemporáneo de aquél, que regulaba las relaciones entre los señores y sus campesinos. El feudalismo unía la prestación política y militar a la posesión de tierras con el propósito de preservar a la Europa medieval de su desintegración en innumerables señoríos independientes tras el hundimiento del Imperio Carolingio.
El feudalismo alcanzó el punto culminante de su desarrollo en el siglo XIII; a partir de entonces inició su decadencia. El subenfeudamiento llegó a tal punto que los señores tuvieron problemas para obtener las prestaciones que debían recibir. Los vasallos prefirieron realizar pagos en metálico (scutagium, "tasas por escudo") a cambio de la ayuda militar debida a sus señores; a su vez éstos tendieron a preferir el dinero, que les permitía contratar tropas profesionales que en muchas ocasiones estaban mejor entrenadas y eran más disciplinadas que los vasallos. Además, el resurgimiento de las tácticas de infantería y la introducción de nuevas armas, como el arco y la pica, hicieron que la caballería no fuera ya un factor decisivo para la guerra. La decadencia del feudalismo se aceleró en los siglos XIV y XV. Durante la guerra de los Cien Años, las caballerías francesa e inglesa combatieron duramente, pero las batallas se ganaron en gran medida por los soldados profesionales y en especial por los arqueros de a pie. Los soldados profesionales combatieron en unidades cuyos jefes habían prestado juramento de homenaje y fidelidad a un príncipe, pero con contratos no hereditarios y que normalmente tenían una duración de meses o años. Este "feudalismo bastardo" estaba a un paso del sistema de mercenarios, que ya había triunfado en la Italia de los condotieros renacentistas.
Las causas de la transformación del feudalismo al capitalismo
En este apartado expondremos las causas que los autores del debate establecen en la desintegración del feudalismo y el surgimiento del capitalismo. La naturaleza de las causas que aportan son causas internas y externas al feudalismo.
¿Causas internas -causas externas?
Los diversos planteamientos giran entorno a la idea si esos cambios y transformaciones, que son evidentes los generó el mismo sistema de producción feudal o se ve derrotado por causas externas. Partiremos desde los planteamientos de dos grandes autores que abordan el tema con propiedad, ellos son: Dobb y Sweezy.
Dobb mantiene una postura firme en su discurso siempre entorno a que fueron inherentes a la estructura del régimen feudal de producción, aunque dejara una ventana abierta tras el debate con Sweezy para hablar de interacción, por lo que también se le acusará de postura acomodadiza. En el otro extremo estará Sweezy, cuyo estudio se centra en las causas externas, a la vez esto plantea un nuevo tema de debate: ¿cuales fueron esas fuerzas externas al sistema feudal y de dónde procedían? ¿Por qué llevó el desarrollo del feudalismo a la crisis, y por último al derrumbamiento?
Veremos qué autores aportan unas y otras y las críticas que suscitan.
En primer lugar veremos las causas que aduce Dobb como desencadenantes de la caída del feudalismo. Dobb cree que estas causas pueden encontrarse dentro de la propia economía feudal citando sus palabras:
"La ineficacia del feudalismo como sistema de producción, junto con las crecientes necesidades de ingresos de la clase dominante, es la causa primordial de su decadencia, dado que esta necesidad de mayores ingresos fomentó tal aumento de la presión sobre los campesinos que ésta llegó a hacerse insoportable"
Como consecuencia de esto "Se desembocó en el agotamiento y la desaparición de la fuerza de trabajo que alimentaba el sistema". Para Dobb la causa esencial del derrumbamiento del feudalismo fue la superexplotación de la fuerza de trabajo: los siervos abandonaron la tierra y para quienes quedaron la presión del señor se hizo insoportable.
Dobb en un primer momento del debate aporta las causas internas, pero tras la crítica que le hace Sweezy a su teoría, se decanta por una interacción de causas internas y externas como desencadenantes de la crisis del feudalismo. Como contrapunto las causas que indica Sweezy son causas externas al feudalismo y ataca las que indica Dobb. Pero antes veamos cuáles son los puntos que critica a Dobb.
La crítica de Sweezy es que no se puede demostrar la necesidad de ingresos que aduce Dobb Sweezy critica estos factores, porque según él existieron a lo largo de todo el período. Por otro lado es también dudoso a juicio de Sweezy que el aumento de la clase parasitaria ejerciera presión sobre la producción pues la clase servil también aumentaba.
Nosotros creemos que en este aspecto Sweezy no tiene en cuenta que el aumento de clase servil no significa que todos los individuos se dedicarán a la producción, estos individuos excluidos del sistema encontraban como formas de salida la emigración a la ciudad o formaban parte de los marginados.
También criticamos a Sweezy cuando afirma que no pudo haber un aumento de la clase parasitaria a causa de las guerras que mermaban la población parasitaria pues eran quienes podían disponer de armas, esto es así pero no en su totalidad, pues olvida que de entre la población servil los individuos excluidos de la producción que antes hemos mencionado eran absorbidos por los ejércitos como mercenarios, también olvida una de las cláusulas que conlleva el feudalismo como institución que es la obligación de los siervos de prestar sus servicios en tiempo de guerras, por lo que estos también acudirían al conflicto.
Sweezy no pone en duda, pues no disponemos de documentación para probar el aumento de las extravagancias de la clase dominante, sin embargo, numerosas desde el siglo XIII diversas disposiciones en varias convocatorias de cortes contra los gastos suntuarios y limitando el consumo de objetos y productos de lujo que tanto gustaban a las clases nobiliarias, pero afirma que este fenómeno de creciente extravagancia ocurría fuera del sistema feudal.
Entre las causas que enumera como desencadenantes de la crisis feudal, Sweezy aporta las siguientes:
-La huida de los siervos de la tierra.
-El crecimiento de las ciudades.
Presta especial atención a la conjunción de estos dos factores, actuando desde fuera del sistema feudal, las ciudades acogían a la población excluida del sistema feudal, los burgueses absorbían esta mano de obra que "sobraba" del sistema, son por tanto factores externos al funcionamiento feudal, pero para Dobb esta conjunción de factores representaban factores internos al orden feudal, ya que esta huida de los siervos era propiciada por la presión de los señores sobre los siervos, que no podían soportar esta situación de presión y se encontraban obligados a huir de la tierra.
Vemos por lo tanto dos versiones explicativas ante unos mismos factores.
Sweezy acepta algunas de las explicaciones de Dobb por innovadoras en la historiografía sobre el feudalismo pero no termina de aceptarlas plenamente. Le critica sin embargo que continúe con el tradicional discurso del desarrollo del comercio como causante de la crisis del feudalismo, pero apunta que la teoría de Dobb sobre la complejidad del comercio es acertada, y más complicada de lo que se había creído hasta entonces.
Uno de los puntos interesantes de debate de Sweezy es su teoría de la producción para el mercado y la producción para el uso, el sistema feudal sería una producción para el uso, que en un momento dado se yuxtapondría al sistema de producción para el mercado, pero este punto lo trataremos más ampliamente en el apartado 2.4. Cómo surge el capitalismo.
Para el autor japonés Takahashi, Sweezy tiene razón al afirmar que la acción desintegradora del comercio sobre el sistema de producción para el uso fue la causa de la crisis del fin de la Edad Media, comparando el feudalismo europeo con el japonés afirma que fue precisamente la mayor fragilidad de aquel lo que favorece la inclusión del feudalismo, pero en otro punto explica que la estructura esencial no es el comercio ni el mercado en sí; la estructura del mercado está condicionada por la organización interna del sistema de producción.
Por lo tanto está de acuerdo con la tesis de Sweezy pero no cree en el predominante papel que le atribuye Sweezy Henry Pirenne no interviene directamente en el debate pero sus tesis son seguidas desde esta obra, veamos pues cuáles son las razones que aduce para el declive del feudalismo.
Como resultado de la irrupción del Islam en Europa se produjo una desmembración del comercio internacional que durante la antigüedad había estado funcionado y fluyendo, como resultado de esta desmembración el predominio de los dominios señoriales cultivado por siervos y la producción para el consumo inmediato.
La actividad mercantil no volvió a Europa hasta que se reanudó el comercio entre las costas mediterráneas, y el comercio de artículos suntuarios fue determinante tanto de la decadencia de producción de mercancías del siglo VII como de su renacimiento en el siglo XI.
Estas causas que acusa Pirenne están ya anticuadas, nosotras al igual que Hilton creemos que la irrupción del Islam, no descabezó el comercio sino todo lo contrario, por una parte no había mucho que desmembrar tras los años de dominación de los pueblos bárbaros cuya principal actividad no era precisamente el comercio ni menos aún los grandes flujos comerciales, por otra parte los árabes sí tenían una gran actividad comercial en las ciudades y en las grandes rutas comerciales por el Mediterráneo.
Hilton opina que la vida urbana se desarrolló dentro de la sociedad feudal y no como opinaba Pirenne como resultado del impacto externo de mercaderes ambulantes.
El desarrollo del mercado interno y externo constituyó un factor importante que impulsó a los señores feudales a exigir rentas cada vez mayores era la única forma en la que podía cubrir diferencias entre ingresos y gastos.
Según Hilton:
"El progreso económico inseparable de la lucha por la renta y de la estabilización política del feudalismo estuvo caracterizado por un aumento del sobrante social total de la producción por encima de lo necesario para subsistir"
Esto fue la base para el desarrollo de mercancías y no el comercio de artículos suntuarios. Fue la interacción de varios factores internos para Hilton los causantes de los profundos cambios en la Europa feudal.
Lefebvre cree que en esta cuestión hay que tener en cuenta la multiplicidad de factores, el factor demográfico como señala Dobb presiona a los campesinos que se ven obligado a huir a las ciudades y el comercio de estas ciudades ofrece a los señores las posibilidades de mejorar su estilo de vida. Hobswan sitúa la fase de transición iniciada por una ruptura entra la base y la superestructura de la sociedad feudal entre 1450 y 1650 siendo el siglo XVII en Inglaterra el primer momento del surgimiento de la sociedad burguesa y las relaciones de tipo capitalista, Wallerstein acompaña a Hobsbawn en cuanto a las fechas pero sitúa el surgimiento capitalista en la escala mudial lo que él llama capitalismo histórico que se constituye como una economía-mundo.
Gunder Frank, expone que los burgueses están fuera del sistema, son personas autonomas, libres para persegior unos objetivos nuevos. La clase comerciante unió los lazos feudales con una nueva politica: el resultado era la formación del Estado o nación moderna, caso de Francia e Inglaterra.
El cambio para Hindess, parece estar en relación con el efecto de variación en el modo de combinación de las relaciones de producción y las fuerzas productivas. Esta variación parece susceptible de explicar los hechos reales. Plantea una dicotomía entre economía monetaria y economía natural, cuyo resultado es que la diferencia entre feudalismo y capitalismo se reduce al predominio de una sobre otra, coincidiendo con Postan. Muchos teóricos marxistas estudiosos de la transición del feudalismo al capitalismo, consideran el desarrollo de la renta feudal en dinero como una forma que contiene el máximo de contradicciones y que, en consecuencia, conduce a la sustitución del feudalismo. En esta concepción la transición es el resultado necesario del pleno desarrollo de las contradicciones internas a un modo de producción dado, en una progresión lineal.
De las llamadas causas externas, habría dos que se dan a partir del siglo XIII: auge creciente de las ciudades y clase social surgida en su seno, la burguesía que nos sirven de punto de partida, así como principios contrarios al modo de producción feudal que también surgen: la propiedad de la tierra en diversos grados y la propiedad limitada de las personas; esto implicaba un circuito cerrado entre el producto agrícola y el consumo conjugado de las clases campesinas y feudales.
¿Qué ocurría fuera del sistema feudal? Encontramos razones para la extravagancia creciente de la clase feudal dominante: la rápida expansión del comercio a partir del siglo XI, que puso a su alcance gran variedad de mayores bienes. Dobb, reconoce la relación clase social dominante-comercio, pero no le da demasiada importancia, así sigue fiel a su criterio que la creciente extravagancia de la clase dominante se debía a causas internas del sistema feudal.
Un segundo aspecto era el problema de la huida de los siervos que caracterizó al siglo XIV. Sweezy y Hilton dicen que no es demostrable que la opresión, (causa interna), hiciera que se marcharan de la tierra, y si lo hicieron solo es porque tenían algún sitio a donde dirigirse.
Sin embargo si lo relacionamos con que ocurrió a la vez que crecían las ciudades (causa externa) para Sweezy sí tendría sentido.
Se salvaría Dobb, si demostrase que el auge de las ciudades constituyó un proceso interno del sistema feudal, pero adopta una postura ecléctica, sobre el origen de las ciudades medievales, pero reconoce su crecimiento y que fue proporcionado a su importancia como centros comerciales, a no ser también que Dobb demostrase que las ciudades surgieron gracias al esfuerzo de la clase feudal dominante.
P. Anderson hace una aportación al tema indicando que fue principalmente el sector urbano, protegido por la parcelación de la soberanía en el sistema político medieval el que se desarrolló hasta un punto en el que podía cambiar decisivamente el resultado de la lucha de clases en el sector rural. La presencia de ciudades comportaba la irradiación de las relaciones mercantiles en los campos de los alrededores, y en época de transición, las tensiones de una agricultura semicomercializada resultase mucho más grave para el armazón de la sociedad feudal, aunque ello atribuye a causa interna. Muchas ciudades apoyaron o ayudaron de una forma u otra a las rebeliones rurales, bien desde la base: simpatía popular; bien desde arriba: cálculo patricio de sus propios intereses. Es evidente que en Occidente en general las ciudades ejercieron una continua influencia sobre la relación de fuerzas sociales en el campo.
1) Hacía escapar escasos siervos descontentos, que entraban en la manufactura urbana y 2) presionaba a los nobles belicosos a recibir sus ingresos en forma monitorizada, una de las principales causas de la caída feudal.
Dobb no parte del auge del comercio basándose en que aunque se produjo un aumento de la economía monetaria, ello podía dar lugar a dos hechos constatados históricamente:
una intensificación de la servidumbre, que podría ser causa de la decadencia del feudalismo o un recrudecimiento de este a una segunda servidumbre en Europa Oriental. Por ello cree que los factores más importantes están dentro de la misma economía feudal, con dos cuestiones:
1) la ineficacia del feudalismo como sistema de producción
2) la creciente necesidad de ingresos en la clase dominante
Para Hilton la idea es clara, la vida urbana, como consecuencia del desarrollo de las fuerzas económicas y sociales, se desarrolló dentro de la sociedad feudal, y no, según opinaba Pirenne como resultado del impacto externo de mercaderes itinerantes o buhoneros.
Sweezy siguiendo la cronología de Dobb considera el período de crisis del feudalismo en el siglo XIV, sin embargo no se puede hablar de capitalismo propiamente hasta la segunda mitas del XVI, por lo tanto surge la siguiente cuestión:
Cómo hablar de ese período intermedio que no parece ni feudal ni capitalista. En este apartado expondremos las opiniones de diferentes autores tratando esta cuestión. Dobb expone la cuestión y plantea esta problemática pero no la resuelve, concluye diciendo que a pesar de algunos cambios en el modo de producción como eran:
Una desintegración del régimen feudal, un aumento de la burguesía comercial, el ascenso de cultivadores libres, pequeños aparceros que pagaban su renta en dinero y la contratación de mano de obra para realizar trabajos en las tierras, a pesar de todo ello los dueños de las tierras seguían siendo señores medievales, después de todo seguían siendo feudales.
Encontramos en este análisis de Dobb una contradicción respecto a sus propios planteamientos, pues en su definición de feudalismo que hemos visto en el primer apartado lo reduce casi exclusivamente a una existencia de la servidumbre, cómo entonces se sigue manteniendo el modo feudal, sin servidumbre.
En cualquier caso Dobb posteriormente denomina a esos doscientos años entre Eduardo III y la reina Isabel como de transición. Dobb es quien plantea la cuestión sobre qué clase es la dominante en ese período.
Veamos a continuación la respuesta a esta cuestión por parte de Dobb.
No puede hablarse de una clase capitalista ya que no había una producción capitalista desarrollada, si la clase dominante estaba constituida por una burguesía comercial entonces el Estado debería haber sido burgués y si esto fuera así no tendría sentido hablar de la Revolución burguesa del XVII.
Por lo tanto Dobb mantiene que la clase dominante era la feudal y el Estado seguía siendo instrumento político de su dominio. Pero con algunas observaciones. La estructura propiamente feudal que siglos anteriores se había observado estaba disolviéndose, la clase dominante mostraba interés por el comercio y se asociaba con la burguesía comercial.
Sweezy sugiere la siguiente opinión: "La forma del Estado y el sistema económico de la época de los Tudor y los Estuardo representaba algo situado a mitad camino entre el feudalismo y el capitalismo". Para exponer su tesis de que puede que no hubiere una sola clase dominante.
Desintegración del feudalismo y nacimiento del capitalismo
La baja edad media y la desintegración del régimen feudal El nacimiento de los nuevos tipos económicos de la sociedad futura ¿Cómo nace y se desarrolla la producción capitalista dentro de la estructura económica del feudalismo? El nacimiento y desarrollo de nuevas leyes del desarrollo social. La lucha de clases antagónica entre clases sociales dominantes, aristocracia feudal ² burguesía. El contenido de las revoluciones burguesas
El Capitalismo
El capitalismo es el orden social que resulta de la libertad económica en la disposición y usufructo de la propiedad privada sobre el capital como herramienta de producción.
En el capitalismo los individuos y las empresas llevan a cabo la producción y el intercambio de bienes o de servicios en forma libre dentro de la división del trabajo, con el propósito necesario del beneficio monetario para la obtención de recursos en función de cualquier orden de fines dentro del marco de una cooperación mediatizada por el mercado. La distribución, la producción y los precios de los bienes y servicios son determinados por el libre mercado, la oferta y la demanda entre productores y consumidores.
El origen etimológico de la palabra capitalismo proviene de la idea de capital y su uso para la propiedad privada de los medios de producción, sin embargo se relaciona mayormente al capitalismo como concepto con el intercambio dentro de una economía de mercado que es su condición necesaria, y a la propiedad burguesa que es su corolario previo6 como forma más acabada y coherente de la propiedad privada.
Se denomina sociedad capitalista a toda aquella sociedad política y jurídica originada en la civilización occidental y basada en una organización racional del trabajo y monetario-utilitaria de los recursos de producción, caracteres propios de aquel sistema económico. En el orden capitalista, la sociedad esta formada por clases en vez de estamentos como son propios del feudalismo y otros órdenes pre-modernos. Se distingue de éste y otras formas sociales por la movilidad social de los individuos, por una estratificación social de tipo económica expresada en un exponencial continuo de nivel de ingresos y por una distribución de la renta que depende casi enteramente de la funcionalidad de las diferentes posiciones sociales adquiridas en la estructura de producción.
El nombre de sociedad capitalista proviene del hecho de que el capital como relación de producción se convierte dentro de ésta en un elemento económicamente predominante. La discrepancia sobre las razones de este predominio divide a las ideologías políticas modernas: el enfoque liberal smithiano se centra en la utilidad que el capital como relación social provee para la producción en una sociedad comercial con una amplia división del trabajo, entendida como causa y consecuencia de la mejora de la oferta de consumo y los mayores ingresos por vía del salario respecto del trabajo autónomo, mientras que el enfoque socialista marxista considera que el capital como relación social es precedido (y luego retroalimentado) por una institucionalizada imposibilidad social de sobrevivir sin relacionarse con los propietarios de un mayor capital físico mediante el intercambio de trabajo asalariado.
Características del capitalismo
A lo largo de su historia, pero sobre todo durante su auge en la segunda mitad del siglo XIX, el capitalismo tuvo una serie de características básicas.
En primer lugar, los medios de producción —tierra y capital- son de propiedad privada. En este contexto el capital se refiere a los edificios, la maquinaria y otras herramientas utilizadas para producir bienes y servicios destinados al consumo.
En segundo lugar, la actividad económica aparece organizada y coordinada por la interacción entre compradores y vendedores (o productores) que se produce en los mercados.
En tercer lugar, tanto los propietarios de la tierra y el capital como los trabajadores, son libres y buscan maximizar su bienestar, por lo que intentan sacar el mayor partido posible de sus recursos y del trabajo que utilizan para producir; los consumidores pueden gastar como y cuando quieran sus ingresos para obtener la mayor satisfacción posible.
Este principio, que se denomina soberanía del consumidor, refleja que, en un sistema capitalista, los productores se verán obligados, debido a la competencia, a utilizar sus recursos de forma que puedan satisfacer la demanda de los consumidores; el interés personal y la búsqueda de beneficios les lleva a seguir esta estrategia.
En cuarto lugar, bajo el sistema capitalista el control del sector privado por parte del sector público debe ser mínimo; se considera que si existe competencia, la actividad económica se controlará a sí misma; la actividad del gobierno sólo es necesaria para gestionar la defensa nacional, hacer respetar la propiedad privada y garantizar el cumplimiento de los contratos.
Surgimiento del Capitalismo
Según la historiadora brasileña Christine Rufino Dabat:
El aumento de la producción agrícola propició las variaciones ocurridas a lo largo de varios siglos, y que llevarán a la disolución del feudalismo medieval y el inicio del capitalismo.
El crecimiento del comercio fue a la fuerza más importante aislada para a Desintegración del capitalismo, pues comenzaron a surgir ciudades comerciales, donde florecía un mercado permanente. A medida que el comercio se expandía, la necesidad de más manufactura y más confianza en la oferta inducía a un creciente control del proceso productivo por el capitalismo comerciante, donde se creó una fuerza de trabajo que no poseía capital y se tenía la fuerza de trabajo para vender los así como las herramientas e también la materia prima que contrataba la fuerza de trabajo pagando salario. Esas dos características marcaban el surgimiento del sistema capitalista.
¿Cómo surge el capitalismo?
Según Gunder Frank, dentro de una línea evolucionista afirma que los remanentes del feudalismo dieron lugar al capitalismo, para ello sienta las bases de una diferencia fundamental entre ambos: el primero es un sistema político económico con base en la adquisición de homenaje y servicio mientras en el segundo sistema político-económico la base es la adquisición de riqueza. Sus mismas características impedían un nuevo tipo de riqueza, ya que para el señor feudal el tipo de riqueza definido era la tierra, las mercaderías, los siervos y seguridad en el homenaje. No es un modo de producción para ganar mas, se limitaban contentos al rendimiento por siervo. Los siervos no tenían incentivos para innovar. Pero casi de forma imperceptible y mediante cambios lentos, nuevos mecanismos alteraron el paisaje casi estático, aunque no inamovible, feudal, de forma suficiente para permitir a la semilla del capitalismo a brotar y crecer. Una vez liberados del homenaje, y las rentas tomando formas en dinero, el capitalismo comenzó a desarrollarse rápidamente, él, afirma debido a su lógica interna propia, cuestión muy discutida y que se estudiará en nuestro trabajo.
Veamos algunas de las teorías que aportan los autores del libro:
Siguiendo el pasaje de Sweezy refiriéndose a Dobb, éste reconoce que la tesis que apoya sobre el camino revolucionario acerca del surgimiento de la clase capitalista desde las filas de los pequeños propietarios, a pesar de esto reconoce que hay pocos datos para ver los detalles de este proceso.
Sweezy interpreta que esta tesis surgida de Marx está mal interpretada pues él en ningún momento considera que la clase capitalista surgiera de entre los artesanos.
Dobb interpreta el proceso de acumulación originaria implicando dos fases:
Por una parte la burguesía adquiere tierras y bienes a precios muy bajos, concentrándose cada vez más propiedades en menos manos.
En segundo lugar la llamada fase de realización en la que según Dobb se venden los artículos que ha generado esta apropiación y con esta venta se empieza a adquirir maquinaria, mano de obra, medios de producción.
En conclusión Dobb demuestra que el complemento necesario de la adquisición por la burguesía no era la realización por la burguesía sino la destrucción del antiguo sistema de producción, en especial la expropiación de trabajadores agrícolas como para formar una clase dispuesta a trabajar por un salario.
Sweezy le critica a Dobb que para esta llamada fase de realización no encuentra pruebas y es difícil precisar qué clase pudo haber tenido medios para adquirir estos productos producidos por la primera acumulación, sin lugar a dudas los propios miembros de la burguesía serían sus propios clientes, nosotras creemos que a ellos habría que sumarles la nobleza.
Sweezy apunta a la cuestión sobre el motor primordial del desarrollo del capitalismo que la acumulación del capital es inherente a la propia estructura del proceso de apropiación capitalista.
G. Lefrevbre cree que un factor a tener en cuenta en el desarrollo del capitalismo es el papel del Estado, por la cantidad de pedidos que hacía tanto para gastos suntuarios de la Corte como pedidos para gastos generales y aprovisionamiento, el artesanado no podía abastecer estos pedidos masivos.
Para Takahashi los procesos fundamentales del paso del feudalismo al capitalismo son: la transformación de la forma social de existencia de la fuerza de trabajo que consiste en la separación de los medios de producción de los productores directos; la transformación del régimen social de reproducción de la fuerza de trabajo y la polarización de los productores directos o fragmentación del campesinado.
Un elemento que Takahashi considera como fragmentador del sistema feudal fue el paso de la renta en dinero, supuso unas modificaciones tales que los campesinos se encontraron en situación de productores de mercado, se produjo en un intervalo de dos siglos entre el paso de los servicios en trabajo a los pagos en dinero y la desaparición de la servidumbre hasta la fase auténticamente capitalista en la Inglaterra del XVI, pero la liberalización del pago en trabajo por parte de los campesinos no implica directamente la aparición del capitalismo como así afirma tajantemente Sweezy, pues seguían soportando el pago de la renta en dinero.
Takahashi está de acuerdo con Dobb que encuentra el germen del capitalismo industrial no en la alta burguesía sino en la clase de pequeños productores de mercancías, estos mejoraron sus condiciones y adquirieron la fuerza de trabajo de sus vecinos más pobres.
La revolución burguesa del XVII que destruyó el feudalismo significó el primer paso hacia la subordinación del capital mercantil al capital industrial.
Hay dos caminos de transición de régimen feudal:
Por un lado el productor se convierte en comerciante y capitalista, Takahashi encuentra este camino como revolucionario.
Por otro lado el camino dos el comerciante comenzó a apoderarse directamente de la producción, el comerciante se hace industrial.
Sweezy admite que a través del camino número 1 el productor se convierte en empresario capitalista en pleno sentido.
Concluyendo las palabras de Takahashi:
"La manera en que se formó el capitalismo en cada país estaba vinculada a las anteriores estructuras sociales, o sea a la intensidad interna y la organización de la economía feudal de cada país".
Conclusión
La caída del sistema feudal no se explica únicamente por una crisis ecológica sino que intervienen factores igualmente importantes, como la existencia de una burguesía, de comerciantes, banqueros, que se sumaban a las fuerzas anti feudales: integrantes de la sociedad que en los imperios hidráulicos no existían o estaban totalmente controlados. A pesar de la peste negra, el sistema feudal no se restableció porque intentó seguir maximizando sus beneficios sin reparar socialmente ni económicamente nada (al contrario de lo que ocurría en los imperios cuando al reparar el sistema hidráulico todo volvía a ser como antes); así, "se lo reemplazó por un sistema basado en la tecnología científica, la producción de máquinas, el capitalismo y la democracia parlamentaria".
El siglo XVI ha sido llamado "El amanecer del capitalismo". Es una calificación correcta: fue así en efecto.
Los ricos o burgueses aparecieron al final de la Edad Media, como nueva clase superior, contrapuesta a la feudal.
La surgente clase social burguesa afirmó su poderío rápidamente. Se había enriquecido primero con el comercio y el transporte. También con minas y astillero.
El préstamo de dinero con intereses, actividad antes despreciada, cobró una fuerza descomunal. Existían los banqueros al lado de los exportadores e importadores. A menudo los negocios se mezclaron. Se usó del crédito, de letras, de pagarés, de seguros, de papel moneda y hasta de cheques.
Algunos hombres se hicieron riquísimos. Así Carlos V podía ser el "Señor del universo mundo", como le decían. Pero como Emperador debía inmensas cantidades de oro y plata a los banqueros alemanes Fugger y Welzer. Las remesas de oro y plata enviadas desde Perú y México no fueron los suficientes para contener su quiebra ni la de Felipe II, a pesar de Potosí, la mayor mina de plata de la Historia Universal.
Bibliografía
1-Sweezy, Dobb, Hilton, Lefebvre, Hill y Takahashi : "La transición del feudalismo al capitalismo". Editorial Ayuso, Madrid 1976.
2-Bloch, Marc:"La sociedad feudal". Akal, 1986.
3-Aston y C.H.E. Philips:"El debate Brenner". Editorial Crítica.
4-Postan, M: "Ensayos sobre agricultura y problemas generales de la economía medieval". Editorial Siglo XXI, Madrid 1981.
5-Parain, Ch. Vilar, P. y otros: "El feudalismo" Editorial Ayuso, Madrid 1985.
6-Hindess, B.:"Los modos de producción pre capitalistas". Editorial Península.
7-Anderson, P. :"Transiciones de la antigüedad al feudalismo". Editorial Siglo XXI, Madrid 1.979.
8-Testart, A.:"Le communisme primitive I, Economie et ideologie".
9-Gunder Frank:"La nota explicativa" Notes for 25 and 27 February 1998, in no particular order.
10–http://www.eh.net/Archives/eh.res/may-97
11- Michel Beaud (1986). Historia del capitalismo: de 1500 a nuestros días. Traducción de Manuel Serrat. Barcelona: Ariel.
12- Daniel Bell (2006). Las contradicciones culturales del capitalismo. Alianza Editorial. ISBN 978-84-206-2195-1.
13- Eugen von Böhm-Bawerk (1978). Capital e interés. D.F.: Fondo de Cultura Económica.
14- Fernand Braudel (1986). La dinámica del capitalismo. Traducción de Rafael Tusón Calatayud. México: Fondo de Cultura Económica.
Autor:
Karla Romero