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La educación a través de la instrucción. Experiencias (página 2)


Partes: 1, 2

En los Planes de Estudio de las distintas carreras en Cuba se formulan tanto los objetivos instructivos como educativos, pero con relación a estos últimos los docentes no logran las vías para desarrollarlos interactivamente. Desde luego esto presupone un gran cambio en los métodos utilizados en la educación, donde se vinculen armoniosamente un conjunto de elementos a tener en cuenta, una propuesta de los mismos se dan en el esquema 1. La libertad sin dirección es vacía, los valores no elegidos personalmente no llegan a interiorizarse y por tanto no se hacen significativos ni efectivos en la vida.

La experiencia demuestra que el proceso educativo y el instructivo se dan en una unidad dialéctica, es decir, cuando se instruye se educa y viceversa. Esto significa que el proceso educativo lleva implícito el instructivo (Álvarez de Zayas, 1996).

José de la Luz y Caballero en su tiempo expuso: "Instruir puede cualquiera, pero educar solo un evangelio vivo". Este enunciado fue retomado y enfatizado por José Martí en sus distintas obras. En la actualidad trasciende y conlleva a la siguiente interrogante: ¿Todos los docentes de la Educación Superior están motivados para convertirse en evangelios vivos?

La interrogante anterior conduce a la necesidad de que se logre la MOTIVACIÓN DE LOS DOCENTES para educar en todo momento y, sobre todo, a través de la instrucción.

En la Universidad de Pinar del Río hay distintas experiencias relacionadas con lo anterior, en este trabajo se ha seleccionado la Carrera de Geología a modo de ilustración. En la misma se ha determinado lo siguiente:

PROBLEMA: La necesidad de la prospección, exploración y explotación de los recursos del medio geológico.

OBJETO:

OBJETIVO EDUCATIVO:

Graduar un profesional de perfil amplio con características éticas, estéticas, culturales, morales, propias de un revolucionario con conocimientos de la Historia de Cuba, del Marxismo y del Pensamiento Martiano y con un alto grado de responsabilidad ante las tareas asignadas que le permitan ejercer su profesión en el marco legal, aplicando las técnicas de dirección modernas y de los fundamentos de la defensa nacional.

OBJETIVO INSTRUCTIVO:

Ejecutar los trabajos geológicos, considerando su evaluación económica y ambiental, con la finalidad de lograr una explotación racional del medio geológico en correspondencia con un desarrollo sustentable.

Es motivador considerar que el esfuerzo realizado por el colectivo de profesores para desarrollar adecuadas capacidades de abstracción y creatividad en los estudiantes, son capacidades las cuales pueden ejercerlas en la vida tanto profesional como política, cultural y en sus actividades en general (ver esquema 1).

Los docentes al dar el saber y el alumno al saber hacer logran una formación científica de las ciencias geológicas, en el camino se utilizan diversas formas, puede recordarse que "cada maestro tiene su librito", pero este proceso debe tener en cuenta:

  • Articulación de los hechos con la teoría.
  • La historia de los conceptos y las ciencias geológicas.
  • Desarrollo de hábitos y habilidades necesarias para realizar las actividades propias en el desempeño del profesional.
  • La Geología para el desarrollo.
  • Multi e interdiciplinaridad.
  • Aprendizaje significativo.
  • Desarrollo de actitudes.

Pero además es común lo que señala Lacreu (1997): "el docente e investigador universitario cuando ejerce su profesión como científico, lo hace de la manera más objetiva posible y se perfecciona para hacerlo cada vez mejor, acorde con los avances científicos y tecnológicos. Sin embargo cuando enseña su disciplina, lo hace de manera intuitiva y, por lo común, no incorpora los avances requeridos a las teorías del aprendizaje ni procura su perfeccionamiento pedagógico". También a esto se le puede añadir que por lo general tampoco se explican, clarifican y sistematizan los valores a formar dentro del proceso docente-educativo del profesional.

En todo lo expuesto desempeña un rol muy significativo LAS ACTITUDES. De las mismas son variados los criterios con relación a los distintos tipos a desarrollar en el proceso docente-educativo (Gardner, 1975; Domingo y Ambrós, 1996; Guyot, V. y Neme, A., 1997; Sequeiros, 1997; Rabadán y Martínez, 1999; Batista, 1999).

En entrevistas y debates realizados a profesores del Departamento de Geología de la Universidad de Pinar del Río, se adopta que las actitudes rectoras en el proceso docente-educativo a dirigir por el profesorado de la Geología pueden ser las mostradas en el esquema 2.

Actitud Ideológica. Su médula es formar la concepción científica del mundo y un hombre nuevo que sepa articular y enfocar los fenómenos y procesos desde el ángulo de los intereses sociales, y se prepare para ser constructor activo y consciente de esa sociedad. Está relacionada con la participación social y la orientación del hombre. Es hacerlo más comprometido con el progreso y conducirlo hacia:

  • El patriotismo. Ello significa inculcarle el amor a la Patria como sentimiento más profundo, que lo demuestre en la defensa de su integridad, pertinencia, en el sentido de su identidad. Debe manifestarlo con eficiencia y eficacia en el momento de ejercer la profesión para lo cual se ha preparado.
  • La valentía. Tiene que ver con la gallardía, arrojo, esfuerzo, vigor, aliento, ánimo. Equivale a decir, un profesional capaz de enfrentar cualquier escollo y convertir su fuerza individual en social para garantizar el desarrollo.
  • El liderazgo. Viene dado por las funciones de dirección del proceso productivo que los egresados deben llevar a cabo, destacándose por la aplicación de los conocimientos científicos en la práctica social, por sus relaciones interpersonales, por su comunicación y solidaridad.
  • El protagonismo. Este profesional será el principal ejecutor de los cambios económicos, técnicos, tecnológicos, políticos y sociales de la esfera productiva del lugar donde labore.
  • La modestia. Es la moderación y el recato en la apropiación del futuro egresado como él mismo y de las cosas que haga, la sencillez y la carencia de vanidad.
  • La solidaridad. Es el desarrollo del sentimiento de ayuda a los demás y la relación de estos para con él, ya sea en la ejecución de su trabajo como en su vida personal, el apoyo espiritual entre los seres humanos. Sequeiros (1997) señala "uno de los valores más necesarios en nuestra sociedad es el de la solidaridad" y al respecto da innumerables ideas.

Actitud Ética. Entendida como la ciencia de lo moral, debe tomarse como principio en la vida este pensamiento martiano, "Un hombre no debe mirar de qué lado está el deber". En ella debe destacarse:

La dignidad como respeto a sí mismo y a los demás. El alcance de metas siempre que no sean un obstáculo para que alcancen las suyas propias. La expresión digna refleja el merecido trato, el respeto y la ayuda necesaria

La responsabilidad como obligación que deberá sentir el alumno de responder a sus deberes sociales, es decir, convertir su fuerza individual en social. Poner los conocimientos científicos en función del colectivo. Este profesional debe actuar con justicia en la medida en que aplique los preceptos del derecho y la razón, es decir, es la cualidad de dar el derecho al que tiene la razón, la capacidad de ser imparcial, entonces se apega a la verdad. Cultivar la generosidad es hacerlo desprendido, noble, dadivoso.

Desarrollar el humanismo es dotarlo de las ideas manifestadoras del respeto a la dignidad humana, la preocupación por el bien de los hombres, por su desarrollo multilateral, por crear condiciones de vida social favorable. Un profesional con honradez es recatado, casto, decente, sin ambiciones que manchen su honra, principio básico para respetar la propiedad ajena tanto individual como colectiva.

Identificarse como dueño, poseedor, revirtiendo este sentido de pertenencia en fuerza que aporte desarrollo, participar en su accionar de forma protagónica y con amor a la profesión.

Una actitud consciente con respeto a su deber ante la sociedad, el colectivo y la familia. Que se logre convertir las normas y principios de la moral en hábitos de conducta diaria, en especial al relacionarse con el colectivo de estudio y trabajo.

El proceso docente-educativo no fabrica un ser perfecto, como hecho a mano, pero sí debe encaminarse a humanizar al hombre y dotarlo de las herramientas necesarias que le posibiliten cada día ser más útil a la sociedad.

Desde el primer año de la carrera debe hacerse fructuosa la labor del estudiante en la solución de los problemas existentes en la propia sociedad y el despliegue de acciones extrauniversitarias relacionadas con el desarrollo comunitario, es decir, atención a la comunidad aledaña a la Universidad, a las propias empresas donde se va desempeñando desde las primeras etapas de su estancia en el centro. Es poner la cultura en su acepción más amplia al servicio de la población que siente y necesita esa atención.

Actitud Estética. El amor a lo bello, la sabiduría de valorar la belleza en la naturaleza y las personas, comprender las leyes del arte, disfrutar con el goce de las obras maestras. Todo aquello que permita lo bello y desarrolle los sentimientos de hacerlo nacer en cada persona, la sensibilidad, el placer. Pero además el profesional trabajará pensando en ejecutar sus acciones con calidad, orden, limpieza y organización con el fin de facilitar la conjugación de lo estético con las restantes actitudes.

Se basa en el desarrollo de la capacidad de percibir, sentir y expresar la belleza artística y los ideales y sentimientos los cuales se manifiestan en las diversas formas del arte y la cultura en general; que permita una orientación estética en la actividad profesional. Ello constituye un recurso necesario para hacer el aprendizaje más significativo.

Actitud Intelectual. El enfoque integrador ubica en primer plano no únicamente los conocimientos y habilidades propias de la profesión, sino aquellos elementos de la cultura en su acepción más amplia sintetizada por Rodríguez (1983) en "ideas y realizaciones de la humanidad", que coadyuvan a la más certera formación. Con ello el alumno universitario se orienta por sí mismo y cree lo que pasa a formar parte de sus convicciones por un proceso de asimilación de principios e ideas. Todas las disciplinas al proporcionar conocimientos, brindarán al estudiante la verdad como reflejo fiel y auténtico de la realidad, lo cual desarrollará el pensamiento intelectual y su criterio será comprobado en la práctica.

Este profesional debe saber comunicar ciencia y cultura para hacer a otros partícipes de lo que él sabe, podrá descubrir, manifestar o hacer saber algo, conversar, persuadir y consultar sus ideas. Lograr una personalidad capaz de situarse en la realidad objetiva y tenga disposición de ceder, o acomodarse fácilmente al dictamen o resolución de otros sin cesar a sus principios, tendentes al progreso social, es la flexibilidad que se pretende lograr. Debe ver la vida con objetividad. Ser capaz de observar en la naturaleza y en la sociedad, los objetos y fenómenos, sus propiedades y relaciones, independientemente de su voluntad, pero además, situado como protagonista de los cambios que puede hacer.

Actitud Profesional. Para ejecutar las acciones laborales con eficiencia es indispensable la aplicación de la técnica para lograr el efecto deseado y obtener altos rendimientos en la producción que dirige sin dañar el medio donde trabaja. En esta nueva concepción para el desarrollo sostenible, no pueden separarse dos conceptos estrechamente unidos, la economía y la ecología. Ha de ser capaz de alcanzar estos resultados con el menor costo de los recursos empleados y a la vez observar todas las reglas para no provocar ningún tipo de desequilibrio ecológico.

Para lo anterior debe tener competitividad que es la capacidad o actitud para poner a producir los recursos empleados, con la materialización, la innovación y creatividad, interpretadas como el cambio o alteración de sus procedimientos con el uso de técnicas novedosas, de manera creadora y la introducción de lo nuevo en correspondencia con las posibilidades tanto tecnológicas, técnicas, económicas, ecológicas como sociales.

FORMACIÓN DE ACTITUDES EN ALGUNAS ACTIVIDADES DOCENTES.

Delval (en Savatier, 1997) señala: "cómo van a trasmitirse valores morales o ciudadanos sin recurrir a informaciones históricas, sin dar cuenta de las leyes vigentes y del sistema de gobierno establecido, sin hablar de otras culturas y países, sin hacer reflexiones tan elementales como se quieran sobre la psicología y la filosofía humanas o sin emplear algunas nociones de información filosófica. Y cómo puede instruirse a alguien en conocimientos científicos sin inculcarle respeto por los valores tan humanos como la verdad, la exactitud o la curiosidad. Puede alguien aprender las técnicas o las artes sin formarse a la vez en lo que la convivencia social supone y en lo que los hombres anhelan o temen". Partiendo de estos criterios se considera que el profesor debe pensar cómo proceder en cada actividad docente para contribuir con el fin del proceso; formación adecuada del estudiante para enfrentar los retos de este siglo. Así, por ejemplo, una conferencia, clase práctica, laboratorio, itinerario geológico, práctica de campo, etc. son escenarios propicios. A continuación se mostrarán algunas ilustraciones con el ánimo de motivar al profesorado y conducirlo a reflexiones.

Ejemplo 1: Asignatura. En la asignatura Petrología hay diferentes contenidos en los que es posible hablar de José Martí Pérez, Héroe Nacional de Cuba. A Martí el estudiante lo conoce como escritor ilustrísimo del país y del mundo, sin embargo, es poco conocido que también abarcó entre sus innumerables citas temas geológicos y decía: "todo es análogo en la tierra, y cada orden existente tiene relación con otro orden" (en Ponce, 1999); algunos de ellos están vinculados con la Petrología, por consiguiente es necesario ofrecer este legado en las clases; algunas citas seleccionadas son las siguientes:

  • Al referirse a la Petrografía decía: "Ciencia nueva… que arranca con miradas intensas a las piedras la leyenda de su formación".
  • Al aludir a las rocas carbonatadas coralinas, en su artículo publicado en Engineering (1884) "Formación Geológica de Cuba", realiza una interesante reseña de estas rocas que se encuentran a lo largo de la Isla y señala: "Los arrecifes están dispuestos en terraplenes a lo largo de la Isla especialmente en los lados Norte y Este. El terraplén más bajo tiene 30 pies de alto y su ancho varía de unas cuantas varas a una milla. Era claramente el arrecife que formaba la costa en otro tiempo. El segundo terraplén se eleva bruscamente desde el nivel del más bajo a una altura de 200 a 250 pies. El tercero tiene una elevación de 500 pies y el cuarto de 800. Estos terraplenes corren alrededor de toda la Isla, pero están mejor conservadas las partes que corresponden al lado occidental, donde la corrosión ha sido menos rápida, y a la cima de las colinas más elevadas. Las coralinas alrededor de La Habana y Matanzas, que alcanzan a una elevación de 200 pies, están formadas enteramente por la caliza coralífera. En la montaña El Yunque, cinco millas al occidente de Baracoa, la roca coralífera alcanza un espesor de 1 000 pies y constituye la parte superior de la misma, formando su parte inferior las rocas pizarrosas y eruptibles. En un principio el límite superior de estas rocas coralíferas debe haber estado a 2 000 pies sobre el nivel del mar. Las rocas coralíferas de Jamaica son de la misma altura, y es probable que durante su formación la región de las Antillas quedara reducida a pocas islas pequeñas".
  • Ejemplo 2: Itinerario Geológico. La práctica de levantamiento geológico a realizar por estudiantes universitarios de segundo año (según el curriculum de la Carrera de Geología en Cuba), se desarrolla en la región de la Sierra del Rosario. Esta zona es reserva de la biosfera y en ella está enclavada una comunidad pequeña denominada Las Terrazas, cuya economía se basa en la actividad forestal y el turismo ecológico fundamentalmente; también existen ruinas de cafetales franceses del siglo XVIII. El colectivo de profesores encargados de esta tarea pretende, además de lograr un sistema de habilidades, alcanzar un conjunto de actitudes al combinarse adecuadamente los rasgos geológicos de la zona y las características de la comunidad. Dentro de las actividades de la práctica están previstos varios itinerarios geológicos, uno de ellos pasa por las ruinas anteriormente mencionadas y en este caso el colectivo de profesores ofrece la siguiente orientación para el trabajo y el desarrollo de actitudes:
  • Describir y ubicar puntos de afloramientos cada 250 m. con observaciones intermedias cada 50 m. y descripción continua del suelo, según los requerimientos del mapeo.
  • Señalar y describir las deformaciones disyuntivas y aplicativas.
  • Localizar e interpretar la naturaleza de los contactos entre las formaciones geológicas mapeadas.
  • Dibujar afloramientos.
  • Ubicar y describir las ruinas cafetaleras (rocas utilizadas en su construcción, relieve, su relación con la red fluvial, tipo de suelo, etc.).
  • Visitar al historiador de la comunidad para esclarecer inquietudes.

Ejemplo 3: Componente laboral. En la carrera están presentes tres componentes laborales que responden a las diferentes esferas de actuación del profesional. La actividad vinculada con los yacimientos minerales se realiza en el cuarto año y se desarrolla en Matahambre. Esta región se encuentra al noroeste de la Ciudad de Pinar del Río, a unos 52 km. por la carretera de Luis Lazo.

Matahambre es un lugar de una amplia tradición minera y de luchas obreras por conquistar sus derechos más elementales. Durante más de 70 años este enclave minero ha formado a muchos especialistas de las Ciencias de la Tierra. El poblado y su mina constituyen de por sí solos, un valuarte de inestimable valor histórico.

En esta región existen varios yacimientos minerales del tipo sedex, se caracterizan por presentar una clara zonación. Sus menas pueden variar desde las calcopiríticas hasta las pirito-polimetálicas con oro y plata. El yacimiento Matahambre es el mayor en Cuba de su tipo. La explotación de sus menas cupríferas comenzó en 1912, constituyen la mina más profunda del país y de América Latina, alcanzan los 1553m.

Otro yacimiento similar de la región es el denominado Mella, localizado a 2.4 km. del Yacimiento Matahambre. Está constituido por dos tipos fundamentales de mineralización, una estratiforme de composición pirito-polimetálica y la otra del tipo stockwork. Existen otros depósitos como Nieves, Santa Lucía, Castellanos, entre otros. Algunos de ellos como Castellanos presentan altos contenidos de oro en su gossan, lo que ha motivado su explotación. Toda esta mineralización pertenece al distrito metalogénico Matahambre-Santa Lucía, lugar donde se ejecuta dicha práctica.

Práctica Laboral: Yacimientos Minerales.

Problema Profesional: Necesidad de ejecutar la prospección, exploración y evaluación de los recursos minerales sólidos, haciendo usos de las metodologías establecidas a tales efectos.

Objeto de estudio: El Distrito Metalogénico Matahambre-Santa Lucía

Objetivo Educativo: Lograr que los estudiantes muestren durante su trabajo una concepción científica de los procesos geológicos, haciendo uso de sus conocimientos para la prospección, exploración y evaluación de los recursos minerales sólidos, caracterizándose por el amor a la naturaleza y una correcta ética ambiental.

Objetivo Instructivo: Ejecutar investigaciones geológicas de prospección, exploración y evaluación de los recursos minerales.

Sistema de Habilidades:

  • Revisión bibliográfica.
  • Documentación geológica y muestreo de excavaciones mineras y testigos de perforación conservadas en el distrito mineral.
  • Realizar itinerarios geológicos y apoyarse de la información geofísica y geoquímica existente.
  • Aplicar las técnicas de seguridad industrial.
  • Reconocer las afectaciones producidas al medio ambiente por la actividad geólogo minera.
  • Procesamiento de los datos utilizando las técnicas automatizadas.
  • Confeccionar mapas y esquemas geológicos.
  • Realizar el cálculo de reservas de un depósito.
  • Determinar los criterios e índices de prospección para el distrito metalogénico.
  • Proyectar trabajos de prospección y exploración al distrito metalogénico, empleando la metodología de la investigación.
  • Confeccionar un informe final.

Sistema de Conocimientos: Variabilidad de los parámetros geólogo–industriales. Criterios e índices de búsqueda. Métodos de búsqueda geológicos, geofísicos y geoquímicos. Muestreo. Documentación geológica. Confección de mapas a partir de redes. Cálculo de reservas. Evaluación geólogo-económica.

Sistema de Actitudes:

  • Durante la práctica laboral los estudiantes constantemente deben demostrar una alta responsabilidad. Al realizar la revisión bibliográfica, muchos de los materiales son clasificados como confidenciales, sin embargo, ellos pueden consultarlos para su estudio y utilización. La mayoría de las excavaciones mineras son muy antiguas y el trabajo requiere del cumplimiento de normas establecidas. La documentación y muestreo deben hacerse con calidad para lograr representatividad de la realidad geológica.
  • La modestia debe estar presente en la ejecución de los trabajos, en la confección del informe final y en su exposición del mismo; lo contrario, el orgullo y la autosuficiencia, no le permite al estudiante ser un ser social aceptado por sus semejantes y reconocido por el colectivo.
  • En condiciones de campo, donde en muchas ocasiones se comparten las necesidades, condiciones naturales adversas con colinas muy inclinadas, la solidaridad es un arma imprescindible para el trabajo del geólogo. En la mayoría de las actividades se encuentran en igualdad de condiciones chicos y chicas y la caballerosidad se pone de manifiesto.
  • La colaboración entre los colegas es otra actitud que el estudiante desarrolla, al mismo tiempo se acerca a la esfera de actuación del profesional de hoy, al trabajo en equipos.
  • En la proyección de los trabajos a realizar en el distrito y en la confección del informe final está presente la ética de la profesión. En cada caso el estudiante señala cuales criterios son sus propios y los que han sido vertidos por otros especialistas, al mismo tiempo que emplea las técnicas más novedosas.
  • El amor a la naturaleza se manifiesta al reconocer las posibles afectaciones al medio ambiente por la actividad geólogo-minera y proyecta los trabajos con la mínima afectación posible.
  • Muchos pudieran ser los ejemplos a dar, pero corresponde a cada profesor buscar y adaptar los que más se acomodan a sus actividades docentes y contexto social. Las anteriores consideraciones tienen la intención de propiciar la meditación dialéctica.
  1. CONCLUSIONES
  • En cada carrera es indispensable de forma cooperativa y participativa la limitación del problema, enmarcar el objeto y definir, materializar tanto los objetivos educativos como instructivos para establecer el vínculo de naturaleza dialéctica entre el contexto social y el proceso docente-educativo.
  • Los docentes deben estar preparados para enfrentar el reto de educar e instruir. Para ello es necesario explotar de una forma más eficiente las posibilidades de las ciencias para ejercer una mayor influencia educativa mediante el fortalecimiento de la orientación y la motivación profesional, el desarrollo de la cultura humanística y de actitudes que estén acordes con las exigencias sociales.
  • Para lograr los éxitos esperados se impone la búsqueda de todos los soportes capaces de coadyuvar al nivel participativo y creativo para hacer más dinámica la interacción entre alumnos y profesores quienes aisladamente no pueden desarrollar el proceso docente-educativo.
  • Todas las formas de enseñanza son propicias para lograr la educación a través de la instrucción.
  1. RECOMENDACIONES

El presente trabajo conlleva a que el profesor deba reflexionar ante las siguientes interrogantes:

.¿ Los docentes están preparados para enfrentar el reto de educar e instruir?

.¿ Hay más preocupación por instruir o educar?

.¿ Todas las formas de enseñanza son propicias para lograr la educación a través de la instrucción?

.¿ Puede el profesor aisladamente conducir el proceso desarrollador de creación de actitudes en los estudiantes?

.¿ Tiene el estudiante la posibilidad de opinar y participar activamente en el proceso de educación e instrucción junto al profesor?

BIBLIOGRAFÍA.

  • Álvarez de Zayas, C. M., (1996). Hacia una escuela de excelencia. Editorial Academia. La Habana. p 94.
  • Batista, M, (1999). Un modelo metodológico para la formación de valores. Tesis en opción al título de Máster en Ciencias de la Educación. Universidad de Pinar del Río. Cuba.
  • Domingo, M. y Ambrós, S., (1996). Que puede aportar el conocimiento de la historia de la Geología a los profesores en formación. Enseñanza de las Ciencias de la Tierra (4.1), 13-20.
  • Freire, P., (1993). Extensión o Comunicación?. La concienciación en el modelo rural. Editorial Siglo XX, México. p 77.
  • Guyot, V. y Neme, A., (1997). Filosofía y cambio educativo. El lugar de la ética en la educación ciudadano. Alternativas. Serie: Espacio Pedagógico. Publicación Periódica del LAE. San Luis. Argentina. Año II-No 7, p 105-110.
  • José Martí, (1978). Diario de Campaña de Cabo Haitiano a Dos Ríos. Editorial Ciencias Sociales. Ciudad de La Habana.
  • Lacreu, H., (1997). Aportes de las Geociencias a la formación ciudadana. Alternativas. Serie: Espacio Pedagógico. Publicación Periódica del LAE. San Luis. Argentina. Año II-No 7, p 63-90.
  • Ponce, N. (1990). José Martí y la Geología. Boletín Sociedad Geológica de Cuba. vol. VII, No. 1. p 13-14
  • Pedro, E., Inmaculada de la Fuente, J. y Fernández, M. J., (1999). Evaluación de actitudes ambientales en la ESO. Análisis de un instrumento. Alambique. Didáctica de las Ciencias Experimentales. Vol 22, p 77-86.
  • Rabadán, J. M. y Martínez, P., (1999). Las actitudes en la enseñanza de las ciencias: aproximación a una propuesta organizativa y didáctica. Alambique. Didáctica de las Ciencias Experimentales. Vol 22, p 67-77
  • Rodríguez, C. R., (1983). Intervención en ocasión de imposición del título de Profesor de Mérito de la Universidad de La Habana, Cuba.
  • Savatier, S., (1997). El Valor de Educar. Editorial Ariel SA., p 222.
  • Sequeiros, L., (1997). Educar para la Solidaridad. Ediciones Octaedro. España. p174.
  1. Esquema 1. Elementos que intervienen en la práctica educativa.

    Esquema 2. Posibles actitudes a desarrollar por el profesorado de la Geología en el proceso docente-educativo.

  2. ESQUEMAS

 

 

Autor:

Lic. Msc. Irma de las Nieves Hernández López

Dra. Esther M. Cruz Gánez

Dr. Dámaso Cáceres Govea

Dr. Ihosvani Baños Hernández

Institución:

Universidad de Pinar del Río, Cuba.

Partes: 1, 2
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