- Resumen
- Introducción
- Antecedentes de la Investigación
- Fundamentación Teórica
- Marco Metodológico
- Conclusiones
- Recomendaciones
- Referencias Bibliográficas
Resumen
El proceso educativo de los niños y niñas de Educación Primaria no es un tema que le concierne solo a la escuela y a los docentes, sino que debe integrar e involucrar a los padres y representantes. La investigación tuvo como objetivo general analizar la participación de los padres y representantes como corresponsables del proceso educativo escolar de niños y niñas de Educación Primaria. Se hizo una revisión de los fundamentos de la teoría sociocultural del aprendizaje de Vygotsky (2004) y el enfoque ecológico de Bronfenbrenner (2002), así como los referentes legales asociados. La modalidad de la investigación fue documental, tipo descriptivo y diseño bibliográfico. Empleando el método deductivo se hizo uso de la observación documental como técnica de recolección de información a través de un procedimiento metodológico que permitió el análisis de contenido, el resumen y la paráfrasis para comprender el problema. Los hallazgos de la investigación revelaron que en el marco de la corresponsabilidad familiar, la participación de los padres y representantes en el proceso educativo de los niños y niñas es vital porque son ellos los llamados a orientar procesos de formación y responsabilidad en sus hijos. Se concluyó que la participación se ve interferida por las creencias y las variables asociadas a las condiciones socioeconómicas y las características de las familias. Así, se conoció que el trabajo constituye el principal factor que resta tiempo e interés en participar en las actividades escolares.
Durante la segunda mitad del siglo XX se produjo la consolidación de los sistemas educativos regulados y financiados por los poderes públicos en cumplimiento de marcos normativos que han insistido en la obligatoriedad y gratuidad de la educación durante la infancia y la adolescencia, lo que ha dado lugar a su universalización. Esta apuesta reposa sobre la visión de que solo el ejercicio efectivo del derecho a la educación en el conjunto de la población permitirá el ejercicio de todos los demás derechos y libertades fundamentales.
El futuro político, social y económico de un país depende de la eficacia de su sistema educativo. Por ende, la educación es la base de la igualdad social y un instrumento indispensable para combatir las desigualdades de origen. Asimismo, la educación constituye un instrumento indispensable para progresar hacia los ideales de paz, libertad y justicia social.
En este sentido, las rápidas transformaciones sociales, económicas y tecnológicas plantean nuevos retos y metas más ambiciosas a la sociedad, y, en consecuencia, nuevas y mayores exigencias a los sistemas educativos. La educación como servicio de interés público se debe a la formación de las personas capaces de aprender a lo largo de toda la vida y de intervenir activamente en una sociedad democrática, con espíritu crítico y valores sólidos.
Son muchos los retos que en este siglo XXI se han de abordar desde la educación, ante los cuales la implicación de los distintos sectores de la comunidad educativa resulta necesaria. En lo que respecta concretamente a las familias, son elementos relevantes la influencia que supone el estilo de crianza, cuidado y educación de las hijas e hijos en el entorno del hogar, y la conexión que se establece con el centro escolar y otros ámbitos educativos no formales. Desde esta perspectiva, la participación de los padres y representantes en el ámbito escolar constituye un indiscutible factor de calidad, toda vez que incide positivamente sobre el rendimiento académico y sobre la mejora del clima escolar.
En Venezuela, actualmente la educación es comprendida como un fenómeno colectivo de participación e integración de los sujetos que forman parte de la vida popular. En este escenario, la formación es vista como el medio ideal donde se forjan los recursos humanos que ayudarán a promover el desarrollo socioeconómico, histórico, ético y político del país. Es por tal razón, que hoy en el Sistema Educativo Bolivariano se pretenda consolidar las relaciones entre escuela, familia y comunidad, donde la interculturalidad, el trabajo liberador y el contexto histórico social son pretextos para involucrar posibilidades pedagógicas con la finalidad de estructurar una educación que consolide un individuo crítico, participativo, reflexivo, democrático, para actuar conscientemente frente al compromiso histórico que se traza.
Por tanto, la educación busca desarrollar un sujeto activo que se reconozca a sí mismo para comprender y transformar su realidad. En esta realidad en construcción, la participación de los padres y representantes junto con la labor educativa debe ser eficiente y verdadera porque se considera un factor muy influyente en la consolidación de la calidad de los procesos educativos y un beneficio para los y las estudiantes.
En atención a esto, los basamentos legales y constitucionales que sustentan la educación venezolana están orientados a estimular la participación de los padres y representantes y la integración de la comunidad a la escuela, ya que ambos representan factores primordiales para el desarrollo integral de niños, niñas y adolescentes. Es por eso, que se hace necesario impulsar verdaderos mecanismos que ayuden a los familiares del estudiante a ser partícipes activos de su proceso formativo.
En este orden de ideas, se observa que la participación de los padres y representantes en el proceso educativo escolar de sus representados es de vital importancia para el éxito escolar. Favorecer esta participación va más allá de llamados a reuniones o asistir a eventos escolares, esto pasa por una comunicación efectiva con los docentes y una participación responsable y activa en el proceso de formación de los y las estudiantes, que beneficie el éxito académico de estos.
Cabe destacar que querer participar no es suficiente si no se tienen las herramientas necesarias para acompañar a los niños, niñas y adolescentes en su proceso formativo, es por esto que los docentes están llamados fomentar la integración de los representantes a través de estrategias que beneficien el intercambio de información y provean de las orientaciones necesarias para lograr el apoyo de estos, tanto en la escuela como en el hogar, por lo que docentes y representantes deben ir de la mano en este proceso, beneficiando el rendimiento estudiantil.
Tomando en consideración lo anteriormente expuesto, son los padres y representantes las personas más idóneas para satisfacer las necesidades y canalizar las inquietudes, energías y actitudes de sus hijos; sin embargo son muchos los padres de familia que por la crisis socioeconómica carecen de un empleo fijo y no apoyan a sus hijos en las actividades asignadas porque tienen que buscar el sustento de cada día, haciéndose indiferentes en la formación de sus hijos. Éstos, en muchos casos, consideran a la escuela como el lugar en donde sus hijos pueden estar bien cuidados mientras ellos realizan otras actividades, dejando toda la responsabilidad educativa a los docentes, sin tomar en cuenta que ellos son partícipes del proceso de aprendizaje y que deben involucrarse en el mismo.
En atención a la referida problemática, se desarrolló un trabajo monográfico, que metodológicamente se trata de investigación de modalidad documental, tipo descriptivo y con diseño bibliográfico que tiene como objetivo general analizar la participación de los padres y representantes como corresponsables del proceso educativo escolar de niños y niñas de Educación Primaria.
Objetivos de la Investigación
Objetivo General. Analizar la participación de los padres y representantes como corresponsables del proceso educativo escolar de niños y niñas de Educación Primaria.
Objetivos Específicos. 1. Describir los fundamentos teóricos de la participación de los padres y representantes en el marco de la corresponsabilidad familiar. 2. Precisar los factores que inciden en la participación de los padres y representantes en el proceso educativo escolar de niños y niñas de Educación Primaria. 3. Determinar la importancia de la promoción de la participación de los padres y representantes como corresponsables del proceso educativo escolar de niños y niñas de Educación Primaria.
Antecedentes de la Investigación
La participación de los padres y representantes en el proceso educativo de sus hijos ha sido el tema central de debate tanto a nivel internacional como nacional. Previa revisión de la información, relacionada con el tema expuesto, a continuación se mencionan y analizan los trabajos de grado que guardan relación con la investigación monográfica propuesta, los cuales permiten comprender y profundizar el tema objeto de estudio.
Contreras (2011) presentó ante la Universidad del Zulia un trabajo denominado Participación de los padres en el desempeño escolar de los hijos, para optar al grado de Magíster en Orientación mención Educación, el cual tuvo como objetivo determinar la participación de los padres en el desempeño escolar de los hijos en la Escuela Bolivariana Santa Filomena, municipio Seboruco del estado Táchira. El estudio fue de campo de carácter descriptivo, con un diseño no experimental, con una población de 98 padres y 19 docentes, utilizándose para recopilar la información el cuestionario de preguntas cerradas, validados mediante el juicio de expertos y con un nivel de confiabilidad de 0,98 (cuestionario padres) y 0,98 (cuestionario docentes).
Los resultados obtenidos revelaron altas expectativas de participación en los padres, sobre todo en relación con el desempeño escolar de sus hijos; así como altos niveles de participación en lo informativo y contralor, pero un nivel bajo de participación en lo colaborativo, lo consultivo y lo resolutivo l trabajo de los padres es un factor familiar que afectar su participación, dado a sus posibilidades de tiempo; como factores escolares, existe baja motivación, poca información detallada sobre cómo participar, poca receptividad a las sugerencias y peticiones de los padres, son aspectos que afectan su participación El desempeño escolar de los hijos es regular en lo académico, y en el desempeño personal y social en la actividad de la escuela. Con base a los resultados se ofreció una serie de recomendaciones a padres, docentes y directivos dirigidos a optimizar la participación de los primeros en el desempeño escolar de los hijos.
La investigación precedente guarda estrecha relación con el presente estudio monográfico en el sentido que revela que una adecuada participación de los padres implica comprometerse, informarse, colaborar, estar atento y dispuesto a prestar apoyo en todo aquello que contribuya al éxito de la labor educativa de la formación de sus hijos. Cuando los padres participan y se desarrolla una colaboración estrecha entre ellos y la escuela, los hijos tienen un desenvolvimiento escolar más satisfactorio, tanto en lo académico como en los aspectos sociales y personales que involucra su desempeño escolar, incluyendo el desarrollo de actitudes más positivas hacia la escuela.
Igualmente, Rodríguez (2011) presentó ante la Universidad Nacional Experimental Rómulo Gallegos una investigación titulada Participación activa de la familia en el proceso educativo de los estudiantes de sexto grado de Educación Primaria. Caso: Escuela Básica Nacional "Turmero" en Turmero, estado Aragua, para optar al Grado de Magíster en Educación mención Orientación, la cual se desarrolló bajo la modalidad proyecto factible, de una investigación de campo, tipo descriptivo con apoyo documental. Para la recolección de datos se utilizaron como técnicas la encuesta y la entrevista, como instrumento se empleó un cuestionario contentivo de 11 preguntas tomando como base la escala de Likert y una guía de entrevista de nueve (9) preguntas abiertas.
Las conclusiones derivadas de esta demuestran que la participación de la familia en el proceso educativo de los estudiantes no se cumple actualmente. Esto se debe a que los padres y representantes no asisten regularmente a la escuela ni por iniciativa propia, ni cuando se le invita para conocer el proyecto que se ejecuta en el aula, así como el hecho de desconocer el desarrollo y formación de sus hijos, por esta razón, los docentes de aula, la escuela y sus responsables se deben unir como recurso educativo para el desarrollo de los programas escolares estructurados por estrategias de participación activa de los padres y/o representantes en el proceso educativo de sus hijos.
La mencionada investigación representa un antecedente del presente estudio monográfico por cuanto se estudia la participación de los padres, representantes y familia en el proceso educativo de los niños, niñas y adolescentes, debido a la deficiente integración de estos actores en dicho proceso, lo cual genera retrasos en el aprovechamiento de los educandos, apatía y bajo rendimiento académico.
Así mismo, Pernía (2012) presentó ante el Centro de Investigaciones Psiquiátricas, Psicológicas y Sexológicas de Venezuela un trabajo de investigación titulado Propuesta para optimizar la participación de los padres, representantes y responsables en la educación de niños, niñas y adolescentes de la Escuela Concentrada Rural Bolivariana "Orinoco" Núcleo Escolar Rural (NER) 291 para optar al grado de Especialista en Planificación y Evaluación de la Educación, que tuvo como propósito general fue ralizar un estudio de campo cuyos resultados permitan la incorporación plena de los padres, representantes y responsables a las actividades de la Escuela Concentrada Rural Bolivariana "Orinoco", Núcleo Escolar Rural (NER) Nº 291; municipio Montes del estado Sucre.
El estudio se desarrolló bajo un enfoque cuali-cuantitativo, centrado en un modelo holístico inductivo con un diseño de campo. La muestra del estudio estuvo representada en 50 estudiantes, 43 padres, representantes y responsables, un (1) director y una (1) Subdirectora Académica, además de 15 docentes. Se elaboró como instrumento de recolección de información una encuesta, que fue aplicada por medio de un cuestionario de preguntas abiertas y cerradas con la finalidad de comprender los parámetros que inciden en el comportamiento de los padres, representantes y responsables con respecto a su participación en las actividades y en el proceso educativo de sus hijos.
Las conclusiones derivadas de esta investigación señalan que la participación de los padres, representantes y responsables en la educación de los niños, niñas y adolescentes es prácticamente nula, dado que estos consideran que la labor educativa es responsabilidad absoluta de los docentes y de la escuela, por lo que los educandos presentan muchas debilidades en su proceso formativo.
Las referidas conclusiones constituyen un aporte significativo para la presente monografía, dada la importancia que representa la participación e integración de los padres y representantes en el proceso pedagógico de sus hijos, lo cual garantiza una educación integral y de calidad que coadyuva con el desarrollo integral de los y las estudiantes, mejorando su rendimiento académico.
En el mismo orden investigativo, Ramírez (2013) presentó ante la Universidad Nacional Experimental de Guayana un trabajo titulado Integración de padres y representantes en las actividades de la Escuela Básica Bolivariana "Villa Colombia" – 2012 para optar al grado de Licenciada en Educación Integral, el cual tuvo como objetivo general describir la integración de los padres y representantes en las actividades de la Escuela Básica Bolivariana "Villa Colombia".
El estudio se formuló con metodología cualitativa de tipo descriptiva, seleccionando una población intencional de padres y representantes que fueron seleccionados a través de un proceso de muestra aleatoria simple. Se aplicó la entrevista en profundidad como instrumento de recolección de información, así como la observación participante activa. El procesamiento de los datos y análisis de la data recopilada fue la reflexión calificativa.
Los resultados evidenciaron que la participación de padres y representantes es nula en función a la cantidad de estudiantes que hacen vida en la institución. Una de las causas principales por la cual los padres y representantes no se integran en las actividades y programas de la escuela es el trabajo. Se concluyó que se deben mejorar los métodos de comunicación para que las actividades escolares sean más efectivas. También, se deben promover los programas que tiene la escuela, para que así los padres y representantes estén informados y se integren en dichos programas.
La investigación anteriormente reseñada es significativa para el presente estudio monográfico ya que da cuenta que al trabajar en equipo, padres, docentes y escuela, el proceso educativo es más eficiente, eficaz y coherentes; los logros y las responsabilidades compartidas, el aprendizaje es más significativo y el estudiante, como interés fundamental, se verá beneficiado.
Por su parte, Sierra (2014) presentó ante la Universidad Católica de Colombia un trabajo de grado en servicio social comunitario denominado Corresponsabilidad de padres de familia en los procesos formativos de los niños vinculados a la Fundación Imago, para optar al título de psicóloga. El estudio tuvo como objetivo el identificar la corresponsabilidad que tienen los padres de familia que se encuentran vinculados a la Casa Cultural Imago, frente a los procesos formativos de los niños, niñas y adolescentes, esto se logró gracias al desarrollo de dos fases, la primera investigativa en la cual se realizó la revisión teórica acerca de diversos temas relacionados a la problemática principal, en donde se encontró que la corresponsabilidad es una de las principales problemáticas entres padres hijos e instituciones, además se realizaron observaciones participante, mediante visitas domiciliarias y entrevistas semiestructuradas, para identificar como los padres de familia estaban asumiendo la corresponsabilidad.
Para la segunda fase, la interventiva, se desarrollaron tres encuentros, en los cuales se abordaron temas de comunicación y pautas de crianza, mediante foros de discusión y encuentros formativos con lo que se consiguió brindarles herramientas a los padres para que se involucren en mayor medida al proceso formativo que llevan los niños, niñas y adolescentes dentro de la Fundación Imago.
El estudio reseñado se vincula con la presente monografía en el sentido que resalta la necesidad de establecer un proceso directo y constante con los padres de familia, en donde puedan exponer sus inquietudes y fortalecerse los unos a los otros como comunidad, donde se brinden oportunidades de conocimiento y orientación, mediante la capacitación a los padres y representantes que tenga como resultado una participación activa en la educación de sus hijos.
Teoría Sociocultural del Aprendizaje de Vygotsky (2004). Esta teoría establece la importancia de los contextos sociales en el aprendizaje, permitiendo la construcción del conocimiento por parte de los niños y niñas de forma progresiva. Por esta razón, es considerada relevante para el desarrollo de la presente monografía, debido a que la familia es el primer agente de socialización, donde se produce la interacción de padres – hijos–que contribuyen con el reforzamiento, construcción y enriquecimiento del aprendizaje previamente adquirido en la escuela, en el proceso interactivo docente–estudiante.
Para Vygotsky el aprendizaje supone un carácter social determinado y un proceso por el cual los niños se introducen, al desarrollarse en la vida intelectual de aquellos que les rodean (Enciclopedia Práctica del Docente, 2002 p. 283). De acuerdo con la teoría constructivista social, los niños, y niñas, adquieren el aprendizaje en el proceso interactivo familia–escuela– comunidad, es decir, de todo el contexto que lo rodea social y culturalmente con la guía de los padres y representantes, por lo que no solo basta con aprendido en la escuela, sino por medio de las relaciones con los demás de forma colaborativa.
Igualmente, distingue dos niveles en el desarrollo: el desarrollo real que indica lo alcanzado por el individuo y el desarrollo potencial que muestra lo que individuo puede hacer con la ayuda de los demás (mediación), donde la Zona de Desarrollo Próximo (ZDP) representa la distancia que existe entre el nivel de desarrollo real y el nivel de desarrollo potencial, haciendo énfasis entre lo que el estudiante es capaz de aprender solo con lo que aún no es capaz de realizar por sí mismo.
En líneas generales, tanto la teoría del aprendizaje social, como la zona de desarrollo próximo, permiten la interacción de los padres y representantes, como factores claves en el proceso de enseñanza aprendizaje de sus hijos, asegurando que estos sean capaces de construir sus propios conocimientos, lo cual ayuda a incrementar sus habilidades y potencialidades, mejorando su rendimiento académico.
Enfoque Ecológico de Bronfenbrenner (2002). Bronfenbrenner (2002) defiende el carácter social y culturalmente del crecimiento personal, donde la familia y la escuela, como instituciones, realizan en buena parte una función de mediación. Este autor estudia el desarrollo humano desde una perspectiva ecológica. La conducta humana se comprende a partir de los factores socioambientales y, sobre todo, de los sistemas y redes sociales en que participan las personas ( ) no es posible entender al ser humano al margen del análisis de los microsistemas en que participa y de las relaciones que existen entre ellos. Consecuentemente, se comprende que las perspectivas y problemas personales no serán sino un reflejo de las perspectivas y desajustes sociales.
Lo que Bronfenbrenner (2002) afirma, en definitiva, es que el desarrollo humano se produce en función de la interacción entre el individuo y su ambiente, el desarrollo no se produce nunca en el vacío; siempre está incluido y se expresa a través de la conducta en un determinado contexto ambiental.
De esta manera, el desarrollo de cualquier individuo está determinado por una serie de ambientes a los que aquel se ve sometido, bien sea un ambiente más directo o cercano (la escuela o el hogar), o bien otras circunstancias ambientales indirectas que, sin embargo, pueden incidir del mismo modo que las directas (por ejemplo, las condiciones laborales de empleo de los padres).
Además, la relación e interconexiones que se establecen entre todos esos ambientes (a los que Bronfenbrenner denomina, de más o menos directo para el sujeto: microsistema, mesosistema, ecosistema y macrosistema) determinarán igualmente el desarrollo del individuo. Más concretamente, en el mesosistema se incluiría la relación de dos o más microsistemas, como la familia y la escuela. Por tanto, una relación fuerte entre los distintos microsistemas daría como resultado, en el ámbito educativo, el desarrollo de potencialidades que favorecerían sobremanera el desarrollo de los y las estudiantes.
Bases Teóricas
Corresponsabilidad Familiar. La familia es el grupo social más importante en la vida de los seres humanos, entre otras razones porque en ella se inicia la formación de los individuos. Las actividades y relaciones familiares forman en las nuevas generaciones las primeras cualidades de personalidad y brindan los conocimientos que representan la base y condición para la asimilación del resto de aprendizajes y de relaciones sociales. Por tanto, la familia cumple una función educativa fundamental, ya que desde muy temprano influye en el desarrollo social, físico, intelectual y moral de los niños y niñas.
La corresponsabilidad permite dinamizar la relación de dos o más personas y/o instituciones, es identificada por el posible aporte que podría tener cada una de las partes, en este caso al proceso educativo de niños y niñas, esto en busca de un objetivo en común, como el adecuado desarrollo de estos.
El concepto de corresponsabilidad nace de la unificación entre responsabilidad y cooperación, entendiendo el primero como el cumplir con el deber de asumir las consecuencias de los actos, en este caso el hecho de asumir la responsabilidad de la educación de los hijos, por esto según Bejarano, Chudt y Mendoza (2012) "la responsabilidad se entiende como un ejercicio de asumir obligaciones y cumplirlas de acuerdo a lo que la sociedad exige de cada persona y/o grupo de personas" (p. 59).
Desde el ámbito psicosocial, Patera y Martínez, citados por Ortega, Rodríguez y Jiménez (2013) definen el concepto de corresponsabilidad parental, por medio de tres componentes: (a) compromiso, es decir, tiempo en interacción cara a cara con el niño; (b) accesibilidad, estar física y psicológicamente presente para atender las necesidades del niño; y (c) responsabilidad, asumir las tareas de cuidado y bienestar día a día.
Es decir, que se requieren de todos estos componentes para el ejercicio de la corresponsabilidad de los padres frente a la formación de los niños y niñas. Al pretender hacer una diferenciación entre estos dos términos es necesario resaltar que el criar implica tanto informar como formar, esto va más a ella de la educación tradicional en la cual solo se aprende y repite, sino que se forman actitudes y valores en los niños y niñas.
La corresponsabilidad de las familias en los procesos educativos implica opinar, proponer, tomar decisiones, ejecutar acciones y disentir en los procesos de gestión escolar, aprendizaje y desarrollo. La creación de vínculos positivos entre la familia y la escuela se cimienta en una relación de respeto, comunicación y corresponsabilidad. Por lo cual, es necesario impulsar prácticas sociales basadas en el entendimiento y la cooperación que hagan posible el trabajo conjunto, planificado y organizado entre la escuela y las familias para ofrecer a los niños, niñas y adolescentes las mejores condiciones escolares, familiares y comunitarias posibles para su adecuado desarrollo personal, académico y social.
Participación de Padres y Representantes en el Proceso Educativo. El término de participación aborda muchos significados. De acuerdo con Farías, Fuentes y González (2007) la participación se refiere a una "construcción social", ya que este proceso comienza dentro de una comunidad, donde hay una puesta en común, igualdad de condiciones y revalorización de la persona.
La participación educativa, como lo expresa Rodríguez (2011), es "una participación basada simultáneamente en el diálogo y en la realización de proyectos" (p. 20). Es decir, que la auténtica participación une el esfuerzo por entendernos con el esfuerzo de intervenir. Por tanto, una buena participación implica el establecimiento de estructuras de comunicación que permitan la intervención responsable de los miembros de un colectivo determinado.
Por otra parte, tal como lo asevera Ramírez (2012) la participación de la familia en los procesos de aprendizaje y desarrollo de los hijos debe ser el resultado de un trabajo compartido entre padres y figuras educativas a partir de la comunicación habitual entre ellos; la puesta en común de criterios educativos, expectativas y acuerdos; la resolución conjunta de los problemas particulares que se presenten; y el estudio de fundamentos y opciones pedagógicas, a iniciativa de la escuela, que es la institución profesionalmente preparada para ejercer la acción educativa.
Conforme a lo antes expuesto, la educación de los niños es el producto de la participación corresponsable de los padres, familiares y docentes, centrados en la búsqueda de soluciones posibles que favorezcan el aprendizaje y que a su vez contribuyan con el progreso de sus hijos, colaborando con una educación de calidad y el desarrollo integral de los niños, niñas y adolescentes.
En Venezuela, la participación es uno de los principios que definen el carácter de las líneas orientadoras del currículo del Sistema Educativo Bolivariano, a través del cual se favorece y propicia el análisis, reflexión, toma de decisiones, con la cooperación conjunta de los actores en los espacios educativos familia, escuela, comunidad. Por esta razón, la participación de los padres y representantes en el proceso educativo de sus hijos, representa un factor determinante para su rendimiento académico y su desarrollo integral.
Bases Legales
Para Palella y Martins (2012) las bases legales comprenden el apoyo de las leyes, decretos, reglamentos y normativas que dan soporte a los aspectos que se desarrollan del tema seleccionado. En este sentido, el presente estudio se fundamenta legalmente en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (1999), la Ley Orgánica de Educación (2009) y la Ley Orgánica para la Protección de Niños, Niñas y Adolescentes (2007), tal como se especifica seguidamente:
Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (1999). La Carta Magna en su Título III De los Derechos Humanos y Garantías, y de los Deberes, Capítulo v De los derechos sociales y de las familias, establece:
Artículo 75. El Estado protegerá a las familias como asociación natural de la sociedad y como el espacio fundamental para el desarrollo integral de las personas. Las relaciones familiares se basan en la igualdad de derechos y deberes, la solidaridad, el esfuerzo común, la comprensión mutua y el respeto recíproco entre sus integrantes. El Estado garantizará protección a la madre, al padre o a quienes ejerzan la jefatura de la familia.
Los niños, niñas y adolescentes tienen derecho a vivir, ser criados o criadas y a desarrollarse en el seno de su familia de origen .
Evidentemente, la familia constituye el grupo social primario, y a la vez, el espacio más próximo e importante para los niños, niñas y adolescentes; que provee a las nuevas generaciones atención, alimentación y cuidado, y representa el núcleo donde se adquieren los primeros valores, pautas de relaciones, afectos, aprendizajes y experiencias. La familia así entendida asume una doble participación en la educación: es beneficiaria de un servicio y comparte el esfuerzo responsable de generar una escuela y comunidad de calidad para todos.
Así mismo, en el Artículo 76, destaca "El padre y la madre tienen el deber compartido e irrenunciable de criar, formar, educar, mantener y asistir a sus hijos o hija". En este fragmento se puede apreciar el rol protagónico de los representantes y la responsabilidad de garantizar la permanencia de sus hijos en la escuela.
En el Capítulo VI De los derechos culturales y educativos, el texto constitucional establece en su Artículo 102 "El Estado, con la participación de las familias y la sociedad, promoverá el proceso de educación ciudadana, de acuerdo con los principios contenidos en esta Constitución y en la ley". Aspecto que resulta significativo pues cuando los padres de familia y los miembros de la comunidad se involucran en las actividades de la escuela, los estudiantes alcanzan mejores resultados, la asistencia a clases aumenta y la deserción escolar disminuye. Si los padres de familia generan expectativas claras respecto de sus hijos, apoyan con éxito su progreso en los estudios, lo cual implica que les transmiten su ánimo y aspiraciones personales con influencia en sus logros de aprendizaje
Como se evidencia, la Constitución insta a una participación directa de la gente en la toma de decisiones para la solución de sus problemas y los de su comunidad, creando una relación ciudadana que en el ámbito de los derechos sociales, desarrolla la tríada solidaria entre sociedad, familia y Estado. Particularmente, en la participación de los padres de familia se denota la importancia de la vinculación familia-escuela en la gestión escolar y los procesos de aprendizaje y desarrollo. En la misma vertiente, se efectúan acciones para fomentar la participación dinámica, colaborativa e incluyente de las familias y miembros de la comunidad, al pautar su corresponsabilidad en los procesos educativos de sus hijos.
Ley Orgánica de Educación (2009). En el Capítulo I Disposiciones Fundamentales, con relación a las competencias del Estado docente, esta ley dispone:
Artículo 6. El Estado, a través de los órganos nacionales con competencia en materia Educativa, ejercerá la rectoría en el Sistema Educativo. En consecuencia: 4. Promueve, integra y facilita la participación social: a. A través de una práctica social efectiva de relaciones de cooperación, solidaridad y convivencia entre las familias, la escuela, la comunidad y la sociedad, que facilite las condiciones para la participación organizada en la formación, ejecución y control de la gestión educativa.
Como se observa, el citado artículo hace énfasis en la participación social de la familia como una praxis dirigida al logro de valores y principios. Además, cabe destacar que en la comunidad, la escuela se une a los esfuerzos de la familia y el Estado y constituye parte esencial de la vida social, conformando una unidad social en virtud de que la familia recurre a la escuela como un medio de formación y desarrollo de niños, niñas y adolescentes; de esta manera, el Estado y las comunidades se fortalecen en el encuentro entre familias y escuelas.
En su Capítulo II De los corresponsables de la educación, la Ley establece:
Artículo 17. Las familias tienen el deber, el derecho y la responsabilidad en la orientación y formación en principios, valores, creencias, actitudes y hábitos en los niños, niñas, adolescentes, jóvenes, adultos y adultas, para cultivar respeto, amor, honestidad, tolerancia, reflexión, participación, independencia y aceptación. Las familias, la escuela, la sociedad y el Estado son corresponsables en el proceso de educación ciudadana y desarrollo integral de sus integrantes.
Como se aprecia, la L.O.E. (2009) asume y recoge la responsabilidad e importancia de la familia como una institución humana y cuerpo mediato entre el individuo y lo social, destacando la significación de la familia en el proceso de socialización primaria y la interiorización en la formación de sus hijos e hijas de los principios y valores de la sociedad en que se nace. Pero además, la validez de la misma y su corresponsabilidad en el cumplimiento de las funciones sociales de reproducción, que permite consolidar una fuerte sociabilidad, así como la transmisión intergeneracional.
Ley Orgánica para la Protección de Niños, Niñas y Adolescentes (2007). Con relación al principio de corresponsabilidad, la L.O.P.N.N.A. (2007), establece en el Título I Disposiciones Directivas:
Artículo 4-A. El Estado, las familias y la sociedad son corresponsables en la defensa y garantía de los derechos de los niños, niñas y adolescentes, por lo que asegurarán con prioridad absoluta, su protección integral, para lo cual tomarán en cuenta su interés superior, en las decisiones y acciones que les conciernan.
Como se observa, el principio de corresponsabilidad refuerza el mandato (deber y derecho) que tienen las familias de participar en el proceso educativo de los niños, niñas y adolescentes, con miras a defender y garantizar sus derechos. En lo referido a las obligaciones generales de la familia e igualdad de género en la crianza de los niños, niñas y adolescentes, la ley decreta:
Artículo 5. La familia es la asociación natural de la sociedad y el espacio fundamental para el desarrollo integral de los niños, niñas y adolescentes. Las relaciones familiares se deben fundamentar en la igualdad de derechos y deberes, la solidaridad, el esfuerzo común, la comprensión mutua y el respeto recíproco entre sus integrantes. En consecuencia, las familias son responsables de forma prioritaria, inmediata e indeclinable, de asegurar a los niños, niñas y adolescentes el ejercicio y disfrute pleno y efectivo de sus derechos y garantías.
El padre y la madre tienen deberes, responsabilidades y derechos compartidos, iguales e irrenunciables de criar, formar, educar, custodiar, vigilar, mantener y, asistir material, moral y afectivamente a sus hijos e hijas.
El Estado debe asegurar políticas, programas y asistencia apropiada para que la familia pueda asumir adecuadamente estas responsabilidades, y para que el padre y la madre asuman, en igualdad de condiciones, sus deberes, responsabilidades y derechos. Asimismo garantizará protección a la madre, al padre o a quienes ejerzan la jefatura de la familia.
Evidentemente, las ideas centrales del artículo precedente guardan relación con los objetivos planteados en esta monografía, permitiendo resaltar la significatividad que tiene la familia como núcleo de carácter natural y social que contribuye al desarrollo integral de niños, niñas y adolescentes, de allí se deriva la responsabilidad compartida de padres y madres en la formación y educación de sus hijos. Con particular referencia a la obligación del padre, de la madre, representantes o responsables en materia de educación, se tiene:
Artículo 54. El padre, la madre, representantes o responsables tienen la obligación inmediata de garantizar la educación de los niños, niñas y adolescentes. En consecuencia, deben inscribirlos oportunamente en una escuela, plantel o instituto de educación, de conformidad con la ley, así como exigirles su asistencia regular a clases y participar activamente en su proceso educativo.
Del artículo citado se desprende la relevancia de la obligatoriedad y el deber que tienen los padres y representantes en los asuntos concernientes a sus hijos, así como la responsabilidad de ejercer una participación activa en el proceso educativo, lo cual posibilita la colaboración de las familias en las actividades de los hijos, a la vez que se fomentan prácticas de respeto y corresponsabilidad en torno a la escuela y a la educación integral de los estudiantes.
En el basamento legal examinado y comentado se denota la importancia de la participación e integración de la familia en la escuela mediante la implementación de los proyectos institucionales y de aula. Además, el Estado debe brindar a la misma la ayuda necesaria para que pueda asumir sus responsabilidades y formas participación; de esta manera apoyando a la familia se estará apoyando a los niños, niñas y adolescentes, ya que los padres son los primeros responsables en velar y educar a sus hijos.
Modalidad de la Investigación. Entendiendo que la modalidad comprende el modelo de investigación que se adopta para ejecutarla, para esta monografía se ha adoptado la modalidad documental. Al respecto, la Universidad Pedagógica Experimental Libertador (2015) establece:
Se entiende por Investigación Documental, el estudio de problemas con el propósito de ampliar y profundizar el conocimiento de su naturaleza, con apoyo, principalmente, en trabajos previos, información y datos divulgados por medios impresos, audiovisuales o electrónicos. La originalidad del estudio se refleja en el enfoque, criterios, conceptualizaciones, reflexiones, conclusiones, recomendaciones y, en general, en el pensamiento del autor. (p. 20)
Tipo de Investigación. Atendiendo a los objetivos formulados en el Capítulo I y a la modalidad asumida, el tipo de investigación corresponde a un estudio descriptivo, que según Palella y Martins (2012) tiene como propósito interpretar realidades de hecho. Incluye descripción, registro, análisis e interpretación de la naturaleza actual, composición o procesos de los fenómenos.
Diseño de la Investigación. Para responder al problema, en el presente estudio monográfico se ha adoptado como estrategia de investigación un diseño bibliográfico. Al respecto Palella y Martins (2012) explican sobre este diseño:
se fundamenta en la revisión sistemática, rigurosa y profunda de material documental de cualquier clase. Se procura el análisis de los fenómenos o el establecimiento de la relación entre dos o más variables. Cuando opta por este tipo de estudio, el investigador utiliza documentos; los recolecta, selecciona, analiza y presenta resultados coherentes (p. 96).
Método de Estudio. Entre los métodos que se utilizan en la investigación documental se encuentran los métodos lógicos, que son todos aquellos que se basan en la utilización del pensamiento; los cuales son, entre otros: analítico, sintético, inductivo, deductivo, entre otros. Para efectos de este estudio, se hizo uso del método deductivo.
Según Hurtado y Toro (2001) "la deducción es un proceso mental de razonamiento que va de lo universal o general a lo particular. Consiste en partir de una o varias premisas para llegar a una conclusión" (p. 56); lo que significa que la utilización de este método permitió describir en forma general el tema objeto del estudio. De esta manera, se puede expresar que el método deductivo permite mediante el razonamiento lógico, tomar la decisión sobre el grado de certeza que posee una hipótesis o formular juicio a partir de premisas.
Técnica de Recolección de Información. Las técnicas de recolección de información constituyen las directrices que permiten obtener informaciones, datos u opiniones sobre el tema que se está investigando. Para el presente estudio, se considera como técnica de recolección de información, la observación documental como observación sistemática a través de documentos (materiales escritos e impresos, electrónicos y reproducciones audiovisuales).
Técnicas de Análisis de la Información. Considerando que el nivel de investigación es descriptivo con soporte en el método deductivo, la autora del presente trabajo desarrolló el análisis desde el inicio, con la caracterización del objeto de estudio hasta la culminación, formulando posibles alternativas de solución dentro de un contexto crítico. En particular, se hizo uso del análisis de contenido, conceptualizado por Andréu (2013) como:
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