Amoríos.
Yo te deseo actos sensuales
De por vida.
Yo te deseo amor
En eternidad.
Celeste
Membresía.
Celeste
Ambrosía.
Celeste
Viña de terciopelo.
Yo te entrego mi vida, mi vida
Te entrego.
Flor silvestre
Por vos la vida
A raudales resucita.
Amantes somos.
De Barcelona a Santiago,
De Valparaíso a Barcelona.
Celeste
Puritana
Enhorabuena.
De Chile he viajado por conocerte.
Luna de amor
Tiempo de amar, éxtasis. Eres riachuelo.
Querida desconocida, por vos el amor fluye.
Te amaría, te desearía, te contendría en éxtasis.
De mí son los apegos con hembra amada.
Te abrazo hasta exprimirte el ser; te idolatro
Hasta exterminar la separatividad.
Riachuelo de porcelana; sos
Abeja en ruiseñor. Sos mi enamorada.
Te daría el sol y sus eclipses,
Te daría cometas errantes,
Te daría mis entrañas pero…
Poeta soy de la multitud.
Amar y permanecer por siempre. Amar
Y contenerme por siempre.
Amar.
Y desear la luna por testigo.
Yo te amo y vos me amas.
Yo te deseo.
No pierdas contacto: soy eterno. Bésame.
Acurrúcate. Extiéndete.
Por poco y nada soy testigo.
Ruindad es no colapsar los corazones en barlovento.
Luz de Atardecer
Luz de Sofía, Luz de amor, vos sos
Mi querubín acechante por las noches.
Luz de Atardecer, vuestras manos
Tan delicadas
Son
Helecho,
Son
Frondosos
Eucaliptos,
Son
Sinceros amores que, cobijados, huelen a cactus.
Yo he desposado vuestro canto.
"Marido y mujer", somos,
Como el destino,
Nada de atadura entre ambos,
El viento es
Testigo,
El viento es
Nuestro sino.
Luz de membresía, por vos he deseado
El amor físico,
Por vos que aprendido el amor
Espiritual.
Te necesito cada noche;
Sé qué respiras mi nombre;
Te necesito todos los días,
Te necesito a cada instante.
Yo te daré espuma de mar tórrido.
Te daré amor.
Deseo de Amor
Acechante, espío, vuestro caracol:
Éxtasis acaracolado, yo acaricio y beso.
Me agrada vuestro caracol, es rubio, divino,
Yo me vuelvo loco besándolo, loco, loco soy.
Vos apenas contienes las palpitaciones,
Vuestro caracol es mío, le devoro.
Conforme con las reglas del éxtasis,
Toco, palpo, devotamente congénito,
Soy quien degusta vuestro caracol.
Me extasía consumirlos.
Los caracoles son apetitosos.
Vuestro caracol es progenitor, es rubicundo.
Me enamoro de las carnes. Me enamoro.
Yo he deseado la perla. Vos sos mi adorada perla.
Abanico de éxtasis: sabor de aire, gusto de océano.
Marinos son los caracoles que beso locamente.
Adoradora
Me contengo de amarte,
Solidaridad para tus ojos,
Solidaridad.
Yo estoy arrodillado: los pájaros huyen;
Yo estoy paralizado: bravas son las olas del mar.
Me contengo de desearte,
Esperanza para tu boca,
Esperanza.
Yo me desvanezco en tus atardeceres.
Yo estoy enamorado de tus pies.
Dulce agonía es tu rostro, dulce
Celosía.
Infinidad de atardecer,
Infinidad
De amor. Yo escrito tu nombre
En los aires.
Eres Luz de Atardecer.
Amador soy yo y vos, querida, sos mi Sofía de Amor.
Dulce Despertar
Yo te amo pero también te desafío a la soledad,
Yo te contemplo pero también huyes de mí.
Así son las cosas en nuestros devaneos del existir.
Por un instante, soy una florecilla del desierto.
Por islas remotas de fin de mundo yo huyo de ti.
Por mares ignotos de tiempos tránsfugas yo huyo de ti.
Soledad para Sofía, soledad para María.
Los tiempos nuestros son excluyentes.
Podría intimar con la Luna, podría amanecer desnudo
En plática con el Sol. Abetos, eucaliptos, sauces llorones, alerces;
Doy testimonio de mi verdad: vos sos mi
Adoradora.
No contemples mi cuerpo: desvanezco.
Yo he llorado como lloran los héroes antiguos: muriendo.
Hércules, Apolo, dioses paganos del Olimpo, que soñaron por vos.
Afrodita, sos mi adoradora, Afrodita humana.
Te busco en las constelaciones pues eres… luz de atardecer.
Delicia de Amar
Espectro de luz, atardecer de amor,
Yo te esclavizo a mis deseos de hombre:
Una flor, jugar con los niños, amar.
Espectro de intolerancia a la oscuridad,
Sos mi luciérnaga que exhala florecillas de numen.
Yo te deseo con amor varonil
Que nos conduzca al placer del amor en plenitud.
Yo soy quien te desea primaveralmente.
Soy quien goza de flores campestres.
Soy el macho que lava los platos.
Soy el macho que cuida de ti.
Tendré hijos por mil. Tendré una casa amada.
No olvides que, de noche, de otra de otra soy;
De ti, realmente, ya que por vos sos mil.
La sutil conozco de día, la que me acaricia el pecho,
Pero también conozco a la beligerante, la que impone preceptos.
Las doncellas están en tu lecho, las vividoras también.
Sé que besas mi sombra cuando me alejo de Edén.
Vos no comprendéis lo infiel que soy;
No comprendéis mi naturaleza.
Moraleja es recordar que por muy mujer
Eva nos fustigó por siempre.
Yo doy testimonio de Adán; que confundido canta a la luna.
Doy testimonio de fe
Yo deseo amor porque deseo comprometerme
Con la luna,
Comprometerme
Con el sol,
Comprometerme
Con tus manos.
Yo deseo condenarte a mis besos:
Esta es tu ley; la ley que impera en Padre.
Amar, acariciarnos, desearnos, mutilarnos.
Hay voces amantes en Edén, que, vigorosamente,
Esperan por vos.
De tu silueta he contraído los milagros.
Vos sos milagrosa, sos un ángel;
Yo me arrodillo y rezo por tu nombre:
De signo géminis eres y rezo; rezo en el Monde de Venus.
Yo deseo la Luz,
Deseo el clítoris serpentino de Sofía,
Deseo
El clítoris, repito,
Deseo, deseo…
Estallo como quien recuerda el caos,
Estallo y me contengo en el instante supremo de la cópula.
Por vos el universo existe,
Por vos yo he declaro mi cristiandad:
Desearnos, amar, gozarnos, esfumarnos.
¿Me crees acaso idólatra?
Yo te he penetrado mil veces;
Mil veces orando por vos.
Soy deidad en la cama; vos sos mi alma humana.
Amoríos
Días de invierno, noches de esperanza amada,
Noche
De lamentaciones,
Festín de días
Que cumplen con el ciclo de los besos.
Yo te daría mi esperanza, te daría mi luz, te daría
Mi coraza
De príncipe domesticador.
Cuentan las fábulas
Que un Hombre compuso canciones
Que cantó en tu nombre;
Sofía anhelada
Por vos el trovador ha existido
Desde siempre.
Yo soy el escribano, soy también la doncella en apuros.
Ámame, desde diciembre a septiembre, ámame.
Recoge la cítara, recoge tu corpiño: soy un demente por amarte.
Exiliado estuve en París, en una cueva.
He pintado El Louvre por vagancia; mientras Da Vinci aprendía de mí.
Amándonos planetariamente sin nacer, tan antiguo soy.
Libro Cuarto
Cuerpo de Enlace
Amor y Ensueños
Inspiración de Amor
Yo te amaba, Rumorosa Adolescente, te amaba.
Yo palidecía por ti, palidecía.
Fuiste mía como quien escarba en la tierra para encontrar oro.
Fuiste de mi espacio, de mi tiempo, de mi edad.
Rumorosa Adolescente, ronroneas mi vida, de gatito a canario,
Ya que por vos he vivido treinta años recordándote.
Fuiste de mi adolescencia, fuiste del alba, fuiste serena.
Nos amamos en mi cuarto; ya que jóvenes éramos.
Amada espectral, hoy te vi, pero ya no eres bella.
Ha muerto en ti lo divino que fuiste.
¿La cusa?
Pienso yo que la infelicidad;
Perdiste la vida olvidándome,
Perdiste mi vida
Ofendiéndome.
Muchos hombres te han conocido
Pero sólo yo te provoqué espasmo al verme denudo;
Yo y mi carne; yo y mis dieciocho años; yo y mi potencia masculina.
Ya no eres bella, lo siento; eres una sombra, eres espectral;
Dulce Rumorosa Adolescente, por vos yo habría resucitado;
Por vos habría emprendido la carrera celestial hasta Júpiter;
¡Por vos!, ¡por vos…!
Pero ya no eres tan linda.
Rumorosa Adolescente sudario de Cristo: te deseo amor y piedad eternos.
Armonía Celeste
Bendito es tu vestido, bendito.
El Padre nos ha casado. Somos completamente vírgenes.
Yo soy virgen. Sofía es virgen. Nos casamos en una iglesia
Abandonada.
Mustias flores en la florería con cardos para novia.
Anillo para novio, velo ardiente de desposada.
Los arcángeles aplauden, viva el amor de los enamorados.
Padre nos consagra. Cantemos y dancemos; las estrellas
A lo lejos; los cuásares a un millar de años luz.
Eterno sol para Sofía, eterna luna para Uribe.
He soñado y he hallado amor.
He deseado comprender y he hallado armonía.
Vístete de blanco: nuestros hijos nos cuidan.
Desviste de rojo: nuestro carcelario el dios Apolo
Nos conduce con Príamo.
Yo pienso que para morir solo nos falta permitirnos un instante de silencio.
Te suplico Amor, Extraña
Te doy mi vida, te doy mis instintos,
Tan bella eres: juvenil, redondas caderas, rostro sensual.
Toronjil para la pena de no amarte.
Toronjil para evitar no besarte.
No conozco tu nombre: trabajas con libros de niños.
Un balancín en nuestro lecho:
Si fuera verdad moriría. Tan joven eres. Quince, tal vez veinte.
Rostro de condesaobrera, rostro de ojos dormilones; ojos
Como querubín que inmola al poeta; lo crucifica.
Yo te deseo por lo que eres: por tu rostro, por tus caderas.
Te suplico amor del bueno, amor de amantes.
Yo sabré cuidar de tus ensueños infantiles,
Sabré cabalgar como un príncipe encantado.
Ya sé que te has dado cuenta de que te miro,
Pero no me atrevo a besarte en paz.
Pronto te marcharás con tu caravana de gitanos.
Pronto en vos pensaré: amada rubia de ojos espectrales.
Yo te adoro; mi amor es por tu aspecto de mujer combatiente;
Fiereza en la expresión, fiereza de mejillas acariciadas virginalmente.
Nos encontramos en la imaginación y nos denudaremos,
Nos amaremos ardientemente en caballito de madera,
En juegos de condesaobrera, en amores prohibidos, ya que yo soy casado.
Ritual de amarte sin conocer tu nombre. Ritual de rostros desafiantes.
Armonía para Guillermina
Yo te entrego mi vida, mi enlutada alma.
¿Qué edad tienes, Guillermina?
Eres letalmente bella y joven.
Que nadie invoque tu nombre porque eres mi concubina.
Guillermina, te deseo de cuando en cuando; florecillas en tu covacha;
Yo me pierdo, me consterno. Guillermina amada, te deseo
Entre lunes y miércoles, sin que tus voces susurren mi nombre.
Me permites preguntarte la edad. Eres jovial. Eres nupcial.
Yo te ofrezco un jade que vibra masculinamente.
Te ofrezco mis dedos, te ofrezco mi lengua.
Si tan valiente eres, permíteme intimar.
Guillermina amada, no piensen en la luna; piensa en el pecado.
Refúgiate en mis entrañas para adorarte en viernes de encrucijada.
Luz y Formas Humanas
Yo te devoro el zigzag del vientre que nos complementa,
Yo te imploro el haz de eternidad que tus ojos irradian.
Forastera de mundos paralelos, forastera del Padre.
Yo te convoco a los espejos donde amar es eterno.
Forastera de este mundo; Guillermina, hada sensual.
Yo doy mi semen por el universo que no concuerda con Padre.
Yo doy el paralelo cincuenta y ocho por recordarte etérea.
Guillermina amada… eres…
Filadelfia.
Rueda de Amor
Yo te amo en labios con jerez en Birmania.
Te escapas, Lorena de Londres. Te escapas.
Eres la frambuesa que, en diciembre, he degustado.
Eres la continencia de un licor hembril.
Lorena de Londres, tan alta, tan autosuficiente como un cactus.
Permíteme acompañarte como un caballero,
Llevarte a la recámara como novios.
Tengo ferro tórax: podrás palpar mis entrañas inmensas.
Sutil, eres volátil, eres inglesa, amada Lorena de Londres.
Yo por ti descendería por el Támesis;
Nadaría desnudo hasta la covacha donde duermes,
Te entregaría las olas del océano redentor;
Tu isla; tu país; tus vestidos manchados con sangre.
Fiesta de novios; eres virgen para mí; a tus treinta años;
Virgen; un trillón de alas de ángeles para ti.
Ayúdame a marchar; no quiero perderme entre tus piernas;
Tengo familia; tengo
Un libro por escribir.
A media noche huyo; con un cuchillo rompes mi piel; mientras duermo.
Guillermina
La soledad es para mí
Ardua. La soledad es
Fatua.
Tengo a Guillermina
De concubina.
Tres años llevo
Fornicando
Espectralmente
Con Guillermina.
Adiós a los espermatozoides.
Guillermina duerme.
Yo uso preservativos.
Guillermina es mi reina,
Dos veces a la semana.
De dos a tres de la tarde.
Este amor es sagrado.
Ya que Guillermina me ama.
Dulce néctar de dos a tres.
Enfermo estoy de calentura.
Los pájaros ya no hablan de mí,
Ni las flores florecen en mi nombre,
Guillermina ha silenciado mi amor místico.
Deseo carnal, sexo con Guillermina.
La posesa me tiene embrujado, es alta, delgada,
Su órgano de percal
Es perfumado,
Yo enloquezco en ella,
Succiono abejareinaensupanal.
Padre me ha prohibido el adulterio.
Pero no las concubinas.
Guillermina, linda consonante en un quejido.
Guillermina, deliciosa, copuladora aterrada de mí.
Guillermina, ex novia de Abel; eres dulcereinaenpanaldeensueños.
Yo podría contarte historias de amor,
Podría lamer tu Monte de Venus,
Podría conquistarte hasta exprimir tu nombre,
Podría orinar de terror por tu olvido,
Eres, mi adorada tercera esposa, eres preciosa.
Concubina, beata de las sagradas cópulas con Uribe;
Concubina; sístole mecánica de cópula enhorabuena.
Me has domesticado, de dos a tres, en racconto eterno.
Doméstico, Amor Señorial
Tengo ganas de amar a todas las hembras táctiles,
Tengo ganas de fornicar con todas las hembras dóciles.
Un beso al desayuno, un huevo frito, besos de despedida.
Las hembras gozan con un macho que las proteja
Pero yo pienso que la hembra debe proteger a su macho;
De lo contrario: los cuernos.
Canten los engañadores del orbe, canten los falsificadores:
Yo puedo hacer cantar mi guitarra. No te mentiré, te diré:
"Gozaría con besar tu Monte Pubiano".
Te sentirás halagada, ya que tu marido es un torpe.
Vengan a mí las consortes abandonadas,
Vengan a mí las adolescentes cachondas,
Yo soy capaz de enloquecer hasta una roca.
Muchas son las incapaces: frígidas, con torpes hombres.
Yo sé embrujos para que vuestro paladar vibre;
Lentamente bajaré por tus intimidades y te haré virgen del sahumerio.
Te haré vibrar hasta que grites atrocidades e improperios;
De tu marido debes desligarte; de este modo yo, te devoraré.
Apuesto que no me encuentras, Villana…
Silencio
Yo te desconozco pero te amo, te idolatro de manera tántrica.
Los deseos son en mí como un mar que cobija, un mar
Enamorado de las olas.
Yo te deseo porque sos desconocida, amo vuestra lejanía,
Amo el silencio de vuestros quietos pasos de hembra febril.
Yo te he amado en eternos rincones de amores celestes,
Te amo con la desbordante agonía del amador impenitente:
Seres mujeriles, seres de Monde de Venus, seres de pechos maravillosos.
Yo soy el poeta que boga hasta Extremadura buscando amor,
Soy el padre que fecunda hijos por los mil puertos del mundo,
¿Irresponsable soy?, sí, verdaderamente enamorado de las féminas.
Hay puertos en donde poseo tesoros de diamantes,
Ernestinas, Filomenas, Agustinas,
Nombres en vasco, en neocelandés, en iraní.
Donde voy siembro pasión, donde busco encuentro amor.
Yo no lloro por los amores perdidos.
Hermanos somos.
La hermandad nuestra es recostarnos a contemplarnos mientras dure el orgasmo.
¡Felicidad!; hoy he hallado una amante vespertina en Londres.
Amor
Me pierdo en la espesura, me pierdo
En la vida. Muerto estoy, muerto
Con ganas de amar.
Mi corazón es de espuma. Busco
Amar. Busco sentir amor.
Yo palpo tus caderas. Tan bella eres, tan
Delicada de rostro.
Sutil hembra, yo te doy amor,
Te doy lunas con nombres exóticos.
¿Cuánto amor hay en mí?
¿Cuánta dulzura?
Yo he prendido fuego a una campana
Para calmar la sed de mi corazón.
He prendido fuego a mi alma.
Yo amo, yo deseo amor eterno.
Luz de Sofía: sos mi esclava antidiluviana.
Eternidad
Claridad, Sofía, os entrego la eternidad.
Vida mía, confidente de Cristo, os entrego
Mi vida.
Yo he deseado la eternidad, adúltero he sido,
Me arrepiento, pero…
Soy como el viento; huyo de ti y me acerco a ti.
Claridad, Luz, tan tierna sos, tan delicada.
A mis amantes he fornicado en descampado;
Incluyéndote; todas fueron felices;
Soy como el viento que acaricia.
Claridad, Gómez, ¿me tienes simpatía aún?
No preguntes a cuantas he amado;
Más de cien son.
Eloísa Durán, Eloísa Jazmín,
Eloísa Francesca, Eloísa Aguirre,
Eloísa en Barlovento, Eloísa en Vespertino.
Yo he amado por doquier
Porque poeta soy, poeta enamorado.
Claridad, Sofía, perdóname, espero que estos versos no leas.
Añoranza de Almendra
Vividores de Amor
Sol de Abril
Linda muchacha, aleonada, te descubro y te marchas.
¿Habrás leído mis profecías?
Ensimismada niña, que huye por Mar del Plata.
Yo te amo desde hace mil años.
Esperándote, te busco entre las madreselvas.
Huye de mí. ¿Temor tienes?
Grito tu nombre. Te paralizas.
Estos poemas son del futuro;
Almendra Rumorosa aún no ha nacido para mí.
Por los demiurgos te conjuro:
Yo espero por ti, por tu boca, por su alma.
Por los santos te conjuro:
Yo te busco, yo te idolatro.
¿Sabrás besar?, me pregunto.
Tan joven eres,
Como yo,
Cuando incliné los ojos para no morir.
Almendra Rumorosa, culminas tus sueños:
El poeta que has buscado
A tu vida ha llegado;
Pero no huyas; recuéstate;
Tan bello tienes el cabello, tan bello.
Estoy cierto: mías serás hasta no desmayar de aliento…
Profético.
Valle Encantado
Amando te espero yo, amando,
Te deseo de pies a cabeza como un tornado, amando,
Yo soy tu amante de manera soterrada implicado en amor:
Doy testimonio de celestes encuentros, de amor de hembra,
Nada puede sostenernos en una noche de amor.
He de contar historias vuestras. Mis hijos te recordarán.
Asistir a fiestas galantes, amando-amándonos. Yo soy
Poeta. He de cantar hasta el clímax femenino, clímax
Importantísimo. De rodillas estoy elucubrando vuestro ser.
Eloísa casual, hueles extrañamente, hueles a maitén.
Eloísa española, tienes dedos en la piel, dedos amando.
Yo no soporto tanta belleza. Doy tiempo a elucubrar cada rasgo vuestro.
Tienen pies de sirena, cabello primaveral, sonrisa de barcelonesaespañola.
Vos ignoras el gentilicio, pero no ignoras mi persona.
Te rehúsas a marchar como río que devora. Te espero en mi hotel.
De tarde en tarde buscarás saciarte, Eloísa Temprana Edad; yo te amo.
Escribo estos poemas para vos; adolescente francesa de tierno amar.
Eres húmeda y fragante después de bañarnos y frotarnos y gozarnos.
Ilusión
Yo te desvisto con ansias de eternidad:
El sostén, reliquia de Venus, la diosa del amor.
El calzón, reliquia de Artemisa cazadora.
Yo no comparto la idolatría griega
Pero tienes el aspecto de una diosa del Olimpo.
Cásate conmigo; para que Troya se reconstruya;
Nuestro amor es profano: Apolo y Zeus son nuestros padrinos.
Ha declinado el sol: los tambores de la Corte furiosa del amor.
Venus, vuestro monte, allí estoy orando. Sos bella.
Te olisqueo raudamente: los vellos en mi nariz: rubia eres,
Preciosamente fragante.
¿Qué perfume usas?, me pregunto. ¡Ninguno!
Flor esencial es tu jade, flor silvestre. De Italia sos,
También de Grecia; eres peninsular: ibérica;
En vos todos los aromas que he olisqueado confluyen.
Hasta el anochecer estoy cantando en vuestro Monte de Venus;
Oh, mi dios, ¡succiono!; ¡alaridos proféticos!;
Arrodillado a vuestros pies estoy. Afrodita; también eres
Artemisa; Venus, eres una diosa de orgasmo múltiples.
Mis labios están quemados. Dos horas es mucho.
Dulce Despertar
Yo te amo, y me consuelo en no amarte.
Almendra Rumorosa, ¡dulce amor!, tienes el pubis
Madrileño,
Tienes las orejas
Castizas,
Tienes el apellido
Vasco.
Almendra Rumorosa, yo te prometo la eternidad,
Te prometo
Fidelidad.
Yo te escribo desde el aire, eres
Promesa de Padre,
Eres tan joven,
Que me avergüenzo.
Juro en manantial de rosas,
Juro en Epicuro de soledad,
Juro frente a los acantilados,
Juro ebriedad.
Yo soy poeta y como poeta he de vivir.
Almendra, te Extraño
Desde ti,
Desde mí,
Desde el sol,
Desde Barcelona.
Vos sos Almendra
Rumorosa,
Sos mi amante.
Veintitrés delicados
Atardeceres.
Almendra Rumorosa,
Ardiente
Conexión.
Deliras en mí,
Deliras en ti.
Yo soy Uribe,
Vos sos
Mi obsesión.
Yo te entrego poemas,
Vos me entregas amor.
Desde América
A tu habitación,
Desde Barcelona
A mi habitación.
Luces tan elegantes:
Denuda ante mí.
Almendra Rumorosa,
Dulce amante,
Sos mi delirio en bendición.
Ojo de Papel
Poemas a Sofía
Luz en tus Ojos
Eres otoñal pero inmensamente bella,
Eres otoñal pero
Intrínsecamente deliciosa.
Una gota de sal en mi garganta:
De este modo sos vos, amada.
Yo deliro contemplándote, tienes
Los ojos más extensos:
De la cólera volcánica
A la dulzura.
Yo te nombro amada
Hasta que Padre dicte lo contrario.
Luz en vuestros ojos, zafiro para
Sofía.
Yo te contemplo porque vos sos mía.
Ilusión
Tengo las manos de cristal: son manos
Para alimentar ilusiones.
Tengo las manos de trébol: son manos
Para desdoblarme en vos.
Yo trepo cada rasgo de vuestra alma;
Trepo por vuestro tronco humano;
Tiemblo de impaciencia; ya que el deseo en mí
Es feroz.
Tiempo de amar, tiempo de dedos como atardecer.
A pesar de la distancia:
Yo te contemplo.
Estoy recostado observado tu iris.
Tus senos son como semillas,
Tus caderas, como perlas del mar de China.
No me ofendes llamándome "marido",
No me ofendes llamándome "esposo";
La dualidad es vuestra; ya que de géminis eres;
La dualidad me agrada; de costado, de vientres y de madrugada.
Adoradora mía, tan volátil eres como mis perlas de pleamar.
Aroma
Yo tiemblo con vuestro aroma:
Dulce miel de los dedos que sucumben.
Yo huelo tus manos, huelo tu cuello, huelo
Tu cintura. Eres carnaval de aromas en la piel.
Sofía, realmente me impresiona tu saliva,
Es fruta gustosa, hueles a mandarina.
Tienes los labios sabrosos porque Padre te ha hecho perfecta.
Yo no duda de tu deidad: hueles a mil esposas.
Yo soy tu dueño porque yo sólo percibo tus aromas.
Hueles a atardecer en Santiago,
Hueles a olas del mar de Valparaíso,
Hueles a rincones ocultos para amar en Concepción,
Hueles a la niebla de Temuco,
Hueles a la helada nieve de Punta Arenas;
Todos estos olores están en ti;
En tus axilas, en tu pubis, en tu amanecer.
Me despojo de mi vida para cantar y alabar y respirar y existir en ti.
Santidad
Yo soy santo, mi santuario sos vos;
Amada esclava. Sos mi diosa, mi Sofía.
Yo deliro amándote, deliro escribiéndote.
Sos virgen y amante impenitente.
Ostento ser vuestro devoto. Sos eterna.
Yo he declarado amor carnal a una diosa.
He festejado la inmortalidad en tus pestañas.
Amargura tienes de mi comportamiento,
Ya que eres mi amante, ¡mi hembra!
De noche susurro tu nombre:
Madre del Amor, Madre del Ensueño.
"Sofía, me llamo Sofía", respondes.
Inclinas el rostro y te petrifico.
Declinas las manos y te cuantifico.
Tus ojos son
Como estrellas,
Tus dedos son
Realmente divinos.
Vos sos eterna; sos Sofía, la diosa
Fortuna.
Eternidad
Yo te propongo un trato: amarnos
Por la eternidad.
Yo sé que vos te extrañarás porque nuestro amor
No será eterno.
Recuerda que, hay mil batallas por amar.
Eres vos, sin embargo, la preferida.
Yo elijo estar en el Paraíso con vos.
Amada Dulcinea de Santiago, amada Luz de Sofía,
Por vos, giran las estrellas occipitales que conducen a Roma;
Por vos, el universo estalla en cada atardecer después de amarnos.
Vos sos, la contempladora de mis pantorrillas,
Ya que te devoro amorosamente;
Te excluyo de lo humano, ya que nuestro amor es eterno.
¿Me contradigo?
Pues bien, eterna sos en mí;
Con mis dudas, con mis batallas, con mi traición.
Vos tal vez no me comprendas, ya que por vuestra sangre
No hay deidad; hay eternidad.
Te daría mi sol, te daría mi Orión, te daría un anillo matrimonial,
Pero soy pobre;
Un poeta a mi manera; un poeta infiel.
Huyen de mí las féminas que reconstruyen mi pena por vos.
Amor Celestial
Yo provengo de un país de amor,
Provengo de tu cintura, provengo de
Tus senos.
Yo soy agricultor: vuestra semilla son los vellos;
La lentitud de la penetración de la orquilla en la tierra.
Mi vida es atemporal, ya que soy vidente.
Mis visiones son aperturas de piernas de vuestra contemplación.
Me conoces desde agosto del año cero,
Me amas desde la desintegración del átomo.
Por vos, hay designios:
Por ejemplo: entreabrir las columnas de Apolo.
Yo soy un héroe, tan eterno, como una mascada de nuez.
¿Eternos?; sí; en el regazo del Padre.
No hay dios humano; Huidobro era torcaz.
Fenómenos celestes son vuestros ojos; yo deliro
Pero…
Hay cosas que me cuestan la vida:
Tu ombligo, tu regia espalda, vuestra sonrisa.
Yo deliro y me contemplo a mí mismo olisqueando vuestras bragas.
Me detengo, soy impudoroso e impío.
Eres tan etérea, que por el mundo vas delirantemente desnuda.
Eres…
Vaporosamente mía;
Eres Sofía; y yo, un abracadabra;
Yo soy Uribe; el poeta vidente
Que en tu alma se refugia;
Soy…
Etéreo; magnánimo; sencillamente humano.
Ciencia Amorosa
Estoy de duelo: he deseado amarte como un caballero,
Con escudo, con lanza, con remolinos girando.
Yo soy un caballero, pero como amador soy un ilusionista.
Entierro la daga en mitad del corazón; persisto lentamente
Hasta morir.
Yo te adoro adoradoramente como un caballero que no posee armadura;
Pero, soy un caballero,
De la orden ministerial de los poetas.
Dulcinea eres españolísima, vos sos araucana.
Gómez Trueno del Fin del Mundo.
Yo te amo porque sos Luz de mi alma; yo soy un andante caballero;
Sos Sofía Gómez Trueno de Mí.
Por tu sangre hay Castilla de la Mancha;
Soy yo un Quijote
Desvergonzado.
Luz de Amor
Estoy amándote, estoy deseándote, estoy acomplejado:
Eres demasiada hembra, demasiada esposa, demasiada amante.
Yo he obrado malamente, te conquisté con mentiras.
"Poeta soy y desposado con la poética".
Yo tenía hijos y mujer.
Amada Sofía Estelar, en vos ha periclitado el universo.
Sos una diadema, sos de una pureza intensísima.
Yo te obsequio un anillo prematrimonial, te obsequio
Mi vida.
Estoy deseándote, estoy conteniéndome, estoy delirando:
Sin palabras, ebriamente te desnudé.
"Un monje soy; Cristo es mi redentor".
Me abrazaste, yo te provoqué hilaridad;
Rezaste un Padrenuestro mientras orabas colmándote de mi sexo.
¿Descarnado soy?
¡Feliz fui!
Vos sos impura, es cierto, pero en nuestras actos amorosos
Nos hemos purificado.
Vos fuiste impura; me desvanezco ahora en vuestra deidad.
Admiro el momento de amar en donde succionaste mi vida.
Sofía Gómez
Yo te deseo amor en esta eclipsada vida,
Te deseo amores que conspiran con la posesión anárquica,
Una rosa es posesa,
Un diamante proclive al sopor.
Vos estás en la constelación mágica de los dioses,
Vos posees enigmas insondables;
Posees una casa,
Posees un amante,
Adúltera eres, mi adúltera.
En Chile no existía el divorcio.
Ágata de perla y escarlata,
Ágata de setecientos mil millones de estrellas;
Vos sos mi combatiente en esta vida que periclita;
Vos sos mi regalona;
Yo convido amor porque también adúltero soy.
Sofía Gómez de la Luz: para vos la rabia del celibato nuestro.
Templanza
Sofisticada eres: un anillo prematrimonial te he obsequiado.
Reina mía, sos mi concatenación de verbos transitivos.
Tienes la piel blanquecina como un poema adorativo del Padre.
Yo te deseo bienestar en esta vida, te deseo amor en mi camastro de guerrero.
Soy el alarido de los seres que han bregado infinitamente testarudos.
Soy poeta y mis versos huyen hacia ti.
Me conformo con amarte, ya que vos sos mi tesoro.
Sofía, dulce panal con anillo prematrimonial;
Eres un volcán quemando con lava volcánica;
Sofía, ángel creador, vos sos un enigma.
Me acurruco a tus pies para cantar; ¿me amas?
Yo, continuamente, estoy elucubrando sobre ti:
¿Serás obrera?, ¿serás duquesa?, ¿serás princesa?, ¿serás profana?
No llego a un acuerdo, ya que para mí eres…
Duquesaobrera.
Hay tiempos de acopio; pero hoy es tiempo de ternuras.
Sueños de Fantasía
Eloísas Amadas
Amor en Agonía
Doy testimonio de amor, doy
Esperanza.
Yo te invoco con flores mustias, flores
Del desamor.
Te he buscado entre zafiros, entre
Liturgias de brazos y de bocas besadoras.
Yo te deseo como quien desea la luna.
Yo te imploro benevolencia en zumo de néctar.
Eloísa Elizabeth, te adoro desde las entrañas de mi vida.
En París nos conocimos y en el hotel Paraíso nos entregamos al frenesí.
¡París de las mil cópulas!, ¡París enamorado!
Yo estoy de fiesta. He deseado a Eloísa Elizabeth, he deseado
Su aroma a fresas, a sábanas sudadas.
Yo soy hombre, soy carnal, yo soy vuestro amante.
No tengo memoria pero te recordaré en estos poemas.
Separación
Tengo sueños de amanecer en vos, tengo dulzura,
He decidido abandonarte, eres bella, es cierto,
Pero tengo familia.
No eres Almendra Rumorosa.
Me miras rabiosamente. Te he quitado la virginidad.
Tierna eres, como un rosal.
Avemaría para Eloísa Elizabeth, Avemaría carnal.
Me insultas, pero tu vos es de caracol.
Me rasguñas, me quitas desesperadamente la ropa:
Soy un cardo brutal y piadoso:
Haces de mí lo que vos deseas:
Yo estoy allí contemplándote:
Virgen francesa;
Por mis manos fuiste princesa.
Yo recuerdo la Comuna de París con sus muertos;
Vos sos republicana pero yo vivo en Castilla con reyes.
Me alejo de vos para no morir. Tan bella eres.
Te deseo recuerdos piadosos; tu himen fue mío, Eloísa Elizabeth.
Eloísa Helena
Dorada miel es vuestro cabello, Eloísa Helena,
Vos sos una princesa, yo un poeta.
Escapaste a Madreperlas con este poeta.
Escapaste con una maleta llevando mis poemas.
Eloísa Elena, sos mi amada esposa: labios luctuosos.
Yo he amado vuestro cuerpo en Palacio.
He deseado amarte desde siempre. Sos eterna y bellísima.
¿Me amarás todavía?
¿Desearás amarme después de incierto tiempo no humano?
Yo te deseo. Quiero que busque en la estrella de Orión mi sexo.
Allí resido, ya que yo soy una estrella.
Helena, princesa, ¿quieres acostarte conmigo entre los cuásares?
Helena, la princesa
Te deseo, princesa, te deseo,
Tengo una diadema enorme para vos.
¿Sos casta?, ya no;
Te he secuestrado; en Palacio te buscan.
Helena, vos me excitas enormemente,
Vuestros labios son gruesos; gruesamente para amar.
Elena, vuestros senos son tamboriles;
Yo busco el sonido exacto de vuestros pezones;
Yo soy un músico, que admira vuestros senos.
Helena, vuestro jade es dorado, ya que los vellos son divinos;
Yo ausculto vuestro ser y vos te llenas de orgasmos.
¿Me amarás cuando envejezca?
-Yo estoy loca por vos.
-Pero eres princesa —replico.
-Delirantemente, te declaro rey de mi Palacio húmedo de vos.
Mi Vida Por Ti, Rocío
Yo estoy colmado de sentimientos compasivos:
Yo amo la loca manera de cimbrearse de Helena;
Ella es una aristócrata; pero en la cama es una canalla;
Me toca, me subtoca, me hiere con su lengua;
Habla dos idiomas;
Castellano de su Santa Madre Calentura;
Y habla "Mauricio";
Un idioma que me otorga orgasmos por doquier.
Yo estoy loco; ella es princesa, hija de la aristocracia;
Yo la secuestré; me la llevé a mi covacha;
Ella ahora es esclava; mi esclava.
Helena, no te conformes con amarme matinalmente;
También quiero que me busques antes de dormir;
Eres realmente exquisita; tu cabello enmarañado y dorado.
Vos sos la princesa de mi puerto donde yo no descanso por amarte.
Helena. No goces, no existas, no huyas. Soy vuestro.
Eloísa Alison
Yo te amo, observo tus pies volar por Edén,
Alison, he averiguado tu nombre,
Eres atleta, tienes cincelado el cuerpo como el mármol.
Llevo quinientos años esperando por vos.
Alison, reconozco tu sudor: hueles a fragancia
Después de cien horas de trotes por el mundo.
Alison, hueles a pétalos zurcidos por ángeles;
Yo sé que me desconoces; pero yo te he espiado
Por una eternidad.
¿Quieres casarte conmigo?; serás mi preferida;
Trotaría contigo por los acantilados;
Todos los días hasta el anochecer.
Alison, ¡hembra!, vos sos enormemente fuerte.
Te deseo, amor mío. Si me rechazas, moriré…
Alison en Desnudez
Tienes los ojos de DulceMiel: yo tengo mi sexo de DulceAmador.
Nos inclinamos. Hemos trotado durante dos horas.
Yo estoy cansado, vos deseas trotar aún más.
Un riachuelo hay. Nos sentamos. No somos novios, pero yo ardo.
—Eres muy linda.
No respondes.
—Quieres que te acaricie la espalda, tienes nudillos de terror.
—Sí, sí, pero, Mauricio, tienes tres esposas.
—No te preocupes —miento—, estoy separado; solo es un nudillo en la espalda.
Yo te enloquezco. Literalmente desmayas, te quito el calzoncillo;
Nos abrigamos en un riachuelo hasta la madrugada.
Cantan las avecillas.
—Soy virgen, no me abandones.
Yo busco acariciarte tranquilamente, para que no temas.
Busco el clítoris septentrional.
—Para mí eres fluvial, ya que acabas sin secar.
—Yo soy tu hembra, ya que en vos en sembrado mi aroma de mujer.
Nos desnudamos en un páramos; busco hacerte mía mil veces.
Alison, ¿quieres casarte conmigo?; la preferida serás…
Tengo Esposas para Amar
He amado a muchas mujeres, pero cuatro esposas tengo.
Norte, rubia, tierna, apasionada,
Sur, eternamente Venus, delirante,
Este, sofisticada, plusvalía, princesa, españolísima,
Oeste; ¡qué el Padre nos bendiga!; es atleta en el amor.
Yo me compadezco de los hombres, que, una sola esposa tienen;
Mal comportamiento;
Tantas mujeres hay para amar
Porqué ser egoístas;
Yo tengo una sola mujer, es verdad:
Pero es tan residual, que, mil esposas son para mí;
Eloísa: esta es mi mujer.
Eloísa María,
Eloísa Helena,
Eloísa Mariela,
Eloísa Alison;
A todas amo;
Porque Eloísa es múltiple;
Es de signo géminis.
Tierna manera de amar; cuatro voces, cuatro esperanzas en…
Gómez Aravena.
Ágata, poemas de Cristal
Enamoramiento
Amor de amantes
Ágata, finura,
Yo te contemplo
En el equinoccio de las manos;
Ágata,
DuendeAmoroso de Uribe.
Sos mi verdadero amor.
Sos condesa de sangre; he de vivir
En vos, por mil años.
Ágata, entre las estrellas
Pierdo vuestra vida;
Vos sos adoradora, sos
Mi vida.
Yo te escribo poemas
Porque estoy enamorado.
Yo te busco con mis manos
Porque quiero poseerte cabalmente.
Los duendes son tus amigos,
Ya que vos habitas un país de maravillas.
Ágata, pleamar de amores insondables,
Perla de España, perla de
Chile;
Dos continentes por vuestra sangre;
¿No sabes acaso que, retozan los peces
En mi alma?
Vos sos eterna; ¡eterna!, ¡eterna…!
Ágata, búscame en miércoles de ceniza, ya que soy
Supersticioso.
Ternura
Yo te amo, yo te adoro, yo te deseo, yo te
Contengo.
Luz de mi vida, luz de mi alma,
Soy Uribe.
Ágata, elemental poema de amor, soy
Vuestro marido.
¡Casados!, por fin.
Una eternidad tuve que esperar por vos.
Vida mía, los caballos de la eternidad
Fueron nuestros testigos;
Los caballos con arcángeles celestiales;
Ágata, ternura, sos víctima de mi pleamar.
Yo te amo y te convoco cenizas,
Ya que los muertos no pueden amar;
Sabes: esto es una paradoja;
Ya que, espíritus somos; pero hombres fuimos.
Ágata, en Edén he visto tu rostro y he desfallecido;
Eres con estupor
Materialmente
Bella;
Eres un zafiro, eres un ruiseñor, eres
Eternamente mía;
¡Casados!, por fin; he contemplado Orión en vos.
Cristal de vuestros ojos; besadme antes de no existir.
Sutileza
Yo adoro la vida por que para mí la vida sos vos.
Yo adoro a Ágata, adoro sus caderas; son
Etéreas. Estoy yo enamorado de su beatitud.
Ágata, me llamas de madrugada para orar;
Por vos, me adentro en los misterios del Padre.
Nos sentamos, nos arrodillamos, somos amantes.
Toco tu cabello, ríes nerviosa.
"Yo te amo, Ágata, inclinemos el rostro para no morir".
Ágata es tan pura. Sus palabras son fonemas de cristal.
"Yo también te amo, Uribe, sos mi real poeta experiencial".
Ríos del adjetivo. Sos bella, sos inmaterial.
Ágata, por vos las hélices del dios Apolo se habrán de inclinar.
Por vos, quemarán Troya. Vuestro atuendo es de misterio;
Sos una Afrodita creyente, sos química en la eternidad.
Ágata, por vos he delirado;
Yo; que de pagano tengo la impostura;
Pero por vos he logrado consuelo en la cristiandad;
El Padre me aconseja amarte con delicadeza;
Ya que vos sos condesa.
Y la realeza rehuye el exotismo.
Yo provengo de Chile; y vos provienes de Ática;
Troya ardió por vos; no por Helena.
Luna de Percal
Adoradora, beatitud, Ágata Beatriz, zumo,
La lentitud de tus labios, lentamente,
Adoradora, pulcritud, sos elegantísima,
Yo, Uribe, te escribo poemas amatorios.
Ágata Beatriz, infinitas posesiones espirituales,
Tienes los labios etéreos y la sonrisa humana.
¿Sos mi musa?, ¿sos mi adoradora?
Yo, Uribe, deslizo los velos ante vos, para amarte.
Luna intemporal, seres diáfanos, Ágata Beatriz,
Estoy despierto, en este confín, diáfano amor en vos.
Yo, Uribe, te deseo querer eterno en manos del Padre.
Tiempo de Ágata Beatriz, en vos: alas de arcángeles,
Alas de Uribe; soñador. Sos Ágata Beatriz, la pureza en vos
Es tiempo de besos, tiempo de…
Amar.
Alejamiento
Vos eras mía de manera imaginaria,
Vos eras Ágata Beatriz, en Bolonia, en Madrid.
Yo, Uribe, te escribo sonetos para condenarte por
Amor. Nada nos convierte en enemigos, somos
Amantes. En carroza ibas con vuestra madre.
Tan enorme hembra enlutada. Yo, Uribe, te imploré amor.
Sofisticada audiencia. Soy poeta, vos sos alondra;
Enlutada en carroza para amarnos y contemplarnos.
Tuve instinto de implorar piedad, pero vos sois
Mi cautiva. Te escribo sonetos para seducirte. Vos sos
Ágata Beatriz; mi dulzura, mi eterna posesa.
Podrías escribir sonetos a vuestra delicadeza,
Pero, en vos no hay medidas humanas; vos sos
Inmortal. Ágata, por vos el Padre nos bendice con amor.
Luminosidad
Ágata Beatriz, lluvia hay en el parque,
Paseamos como sombras, eternas sombras somos:
Vos llevas una aureola de santidad; eres virgen.
Yo, Uribe, fui pecador pero he hallado rosas sin espina en vuestra compañía.
Largas manos son las vuestras: me acarician fantasmalmente;
En el parque, en mi cama, en mi afiebrada vida.
Vos sos mi adoradora, sos Ágata Beatriz; la más pura de las hembras.
Yo podría escribirte pero vos nada quieres saber de mí.
Te alejas con encaje de tu mirada, por el parque vos sos
Una sombra. Ágata Beatriz, inmoral musa, duermes en mí, pues yo
Duermo pensando en vos. Ágata, pulcra dama, permíteme sonetos
Escribir. Permíteme seguir imaginando vuestra sombra recorrer
Parques en Bolonia. Yo he secuestrado vuestra inmanencia;
Ya que soy, Uribe, el poeta perdido y hallado en un parque…
Solitario.
Duelo de Amor
Celestina, yo te amo, Celestina, adoradora,
Te he visto en el Portal, cogiendo pétalos,
Yo he enmudecido, ya que vos sos una rosa.
TembranaEdad para amarnos, mi Ágata Emperatriz.
Loco de amor, no me contento con hablarte;
Lo que yo quiero es ser tu jardinero. Vos sos
Una rosa. Sos el tallo más fémino del mundo.
Por vos yo tiemblo de impaciencia, tiempo de
Amor. Ágata Emperatriz, en mi vida has culminado.
Ten por bien merecer mi corazón. A pesar del tiempo
Nos amamos. Ha llegado la hora de resucitar.
Amémonos en un piélago de flores exóticas.
Vos, Ágata, sos mi emperatriz en este mundo residual.
Vos me ama mientras yo contemplo vuestras raíces.
Ágata Emperatriz
Vos posees un cuerpo de triángulo:
Escaleno por las formas tan intrínsecamente
Femeninas. Dual también; ya que vos sos
Espíritu ideal. Espíritu de triangulo obtuso.
Por vos, Pitágoras perdió el sentido lineal
De las proporciones; ya que vos sos perfecta:
Senos maravillosamente rectos; pleamar
En vuestras tetillas. Vos sos triangular
Como las pirámides. Me contemplo en vos
Para predicar amor ideal eterno por Ágata
Emperatriz. Vos no comprendes lo bella que sos.
No comprendes que, Uribe, el poeta, Uribe,
El amante, no es matemático, pero calcula que,
Universalmente, vos serás conocida por errática
Amante del Divino
Amor.
Ardoroso Beso en las Mejillas
Ágata Beatriz, por vos he ardido. Estaba
En casa de tu tía Elizabeth. Charlábamos.
Yo ardía de misticidad. Vos sos virgen, yo
Casado. Vos sos enormemente bella, yo
Desfigurado. Un beso vuestro en la mejilla
Arreboló de divinidad mi humanidad.
Me conocen ahora como el Divino.
Ágata Beatriz, ¿dudas de mi ardor?
Tengo mi rostro descompuesto, en casa
De tía Elizabeth; en un portal; con rosas
Por jardín. Me has besado, me has desfigurado;
Un ángel brota desde la raíz de mis mejillas;
Un ángel con pleamar. Yo, Uribe, desfallezco;
Sutilmente me despides. Hablas castellano
Castizo. "Uribe, vos sos casado, yo virginal".
Muero ardiendo ya que los ángeles sostienen
Vuestra figura. Vos sos inmemorial y totalmente
Pura.
Poema a Mariela
Ágata Mariela, sos elástica, de rostro enlutado
Por el desamor. Cabellos cortos, buscas amar, buscas
Mis entrañas. Ágata Mariela, sos eternamente
Danzante. En miércoles de resurrección encuentras
Fuego en mi alma. Yo te extraño. Eras quinceañera,
Eras temperamental como una paloma de Plaza
Yungay. Yo te deseo con el ánimo de un maduro
Poeta. Te deseo en este soneto orgásmico. Ágata
Mariela, sos inclemente. De noche te desdoblas
Para acariciarme sin mi consentimiento. Ágata
Hechicera, vos son tan temperamental como
Un trueno. ¿Qué haces allí espiándome? Te desnudas
Mientras yo duermo. ¿Sos un fantasma, sos una errante
Alma? ¿Has muerto acaso?; Ágata Mariela sos
Eterna.
No culminas sin mí.
Dulce Amor
Por la campiña, amándote mi Adoradora.
Yo te proclamo mi reina, yo soy Uribe, el poeta,
Príncipe soy del ruiseñor encantado. Vos me amas
Entre las ráfagas del viento de la campiña.
Duermes entre mis brazos, sos Ágata Beatriz,
DulceAmor para los venideros eternos años.
Yo me complazco en declararme mi Adoradora;
Ya que para vos yo soy un Príncipe.
De dudas vivo: ¿me amarás en la eternidad
Ya que yo soy un ruiseñor obrero? Vos sos casta
Y eternamente aristócrata. Yo soy Uribe, el obrero.
Por la campiña vas con súbditos, yo soy Príncipe
Pero de los poeta. Escribo sonetos en los aires;
Que a escondidas vos amáis.
Amor Amar
Beatriz amada, Ágata, yo te contemplo, yo te
Adoro, yo te ofrezco el Paraíso. Yo te deseo
Guirnaldas para amar. Vos sos Ágata Beatriz.
La luna meridiana os alumbra la perdiz.
Te he amado desde aquel septiembre amado;
Vos en un carruaje, de seda vestida, de seda amada.
Vuestra madre inmoló el eterno amor que humilla
Por vos. Beatriz, Ágata, sos eterna como mis suspiros.
Yo te declaro amor intenso. Luna septentrional,
Sos tan bella, yo desconfío de mí, ya que vos sos
Mi adorable y eterna nocturnidad.
Sos virgen, ya lo sé, yo soy un poeta casto, pero…
Tanto es el amor, que de mí desconfío. Alejaos. Es tarde.
La luna brilla en los páramos desiertos. Adiós, un besos y…
Dulzura de Lepanto
Días oscuros, días de amargura, Beatriz amada,
Ágata supersticiosa, yo conversos con vos en Lepanto,
Vos sos una guerrera. Las olas colapsan, nada,
Sólo vida animal. Salvajes son los marinos en Lepanto.
Vos sabéis que no marcharé a la guerra, no perderé
Una mano. Vos sabéis que soy hombre de vos,
No del mundo. Yo vivo en Madrid; idolatría por vos
Siento. El mundo huye hacia la tragedia de perder los dedos.
Soy poeta. Escribo novelas. Soy príncipe de un castillo
En el Reino de los Cielos. Vos sos mi doncella. Sos Ágata
Beatriz. Sos eternamente Lepanto para mí.
Me han rasurado la barba. Un sable ha degollado mi mano.
El manco soy por guerrear con hombres que no aman el amor;
Aman la muerte, el odio, las riquezas. Vos sos mi alma, sos
Beatriz.
Doncella
Ágata busca su espesura, de espejo en espejo,
Su espesura es su aroma a hembra dulce y casta.
Ágata Beatriz se esfuma, huye de Dinamarca,
Se refugia en Chile, en Santiago, Ágata es eterna.
Yo estoy en Pekín dando conferencia sobre
El amor romántico. Llaman a mi teléfono. Es Ágata.
"Estoy en casa de tus padres. Cuando vos viajáis
Por el mundo apenas duermo. Eso murmuro.
Vos sos un príncipe y vuestro principado
Es mi carne". Comprendo que Ágata está malhumorada.
Mil historias se cuentan sobre mí. Cuatro esposas tengo,
Cien concubinas. "Ágata; en China viviré un lustro,
Quiero emborracharme con Li Po. Escupir ebriamente.
Olvidarme de mis deberes maritales". Li Po tuerce la nariz
Mientras contempla
Mis poemas de amor.
Liturgia
Ágata Beatriz, mi mundo son los textos sagrados:
Vos sos adorable. Escribes latín, yo parlo español.
La voz Inca que te nombra, es agua. Vos sos de cristal.
Yo he renunciado a mi nacionalidad. Español seré.
Vos sos castiza, por que vuestro nombre es Ágata, pero sos
Vasca; ya que por vuestra sangre, marcas de libertad y antigüedad hay.
Ágata Beatriz, sos tan juvenil. Con anillo de adolescente
Esperando por mí. Desnúdate. Pronto será verano boreal;
Pronto nos casaremos alegremente; pronto nos desposaremos
Celestialmente. Ágata Beatriz, observad la luna:
Fluyen los manantiales sobre vos.
Ágata, vos no tenéis nacionalidad, ya que princesa,
Princesa sos. Naciste en Chile pero te raptaron los rapsodas
En París. Sos araucana; Dante os amó; tanto como yo;
No me abandones, Ágata,
Multirracial.
Araucana Beatriz
He descendido sobre Arauco: he hallado a Beatriz
Durmiendo. La he raptado. Guerra entre hermanos.
Han fabricado una ruca de madera gigante.
"Salvad a Beatriz Río Veloz, salvadla".
Los guerreros mapuches llegan a Santiago
Con rucas de madera; yo imagino Troya ardiendo.
Un tronco sagrado mapuche estorba la vista del poeta.
Yo he Raptado a Beatriz; Troya es Santiago.
Los blancos huyen. La ciudad es devastada.
Inés de Suárez pide perdón por sus estropicios.
"Hüincas", esputa Caupolicán, "devuelvan a Río Veloz".
Contemplo las macanas y las picanas. Me entrego.
"Abro mi pecho por vos. Yo he raptado a Beatriz".
La cándida muchacha, exhalando un grito guerrero, grita:
"¡Amo a Uribe!,
¡Le amo!"
Perplejos, los araucanos lloran de desamor.
Ágata Ruiseñor
Ágata, a vos mi vida, mi vida de amor.
Ágata, a vos la templanza de Isla Negra.
Ágata, yo tengo hembra, vos serías mi…
Amante. Ágata, te deseo por Chillán, te deseo por
Arauco. Ágata, ternura, sos chilena de sepa,
Sos pequeña, dulce, rubia. Vos me pides
Piedad, pero yo os quiero dar ternura de amar.
Vos posees un departamento en Isla Negra;
Amémonos en casa de Neruda; amémonos.
Yo contemplo la luna mientras las gaviotas
Escriben sonetos orgiásticos. Vos sos casada.
Adulterio. Oh, terrible y criminal amor.
Escondidos en Isla Negra nos vence el miedo.
Beso que, besándote, en desnudez; beso que, deseándote
En desnudez.
¡Ágata!, mía; tremendamente
Mía.
Dulce Ágata
Yo estoy leyendo a Catulo: su Lesbia amada.
Vos, querida, sos como mi adorada Lesbia;
Sos rubia, tiernosa, eléctrica. Yo, Uribe, os consuelo
Leyendo a Catulo.
De tarde en tarde, pienso en vos, Ágata,
Vuestra deidad en vuestras maravillosas espaldas:
Yo trepo a vos mientras escribo libros de poemas.
Ágata; yo te contengo en esta luna menguante en Roma.
Por vos he necesitado tinta y papel a raudal.
Ágata; yo he presidido el consejo romano para nombrarte
Dama de Consorte. Dama mía, de tarde en tarde,
De lustro en lustro. Me han rechazado por loco.
He viajado a Roma para sincerarme con la realeza.
Vosotros sois escoria. Viva Ágata. Viva el amor.
Hermosa Ágata
He decidido abandonarte, eres tierna, sensitiva,
Pero, estoy enamorado del sistema planetario.
Sé que tus ojos son como Venus, tus senos como
Saturno, tus labios luctuosos como Andrómeda.
He decidido abandonarte. Quiero la estrella
Del norte adorar. La constelación de Ganímedes desear.
Plutón en pleamar. A Ágata constelada gustosamente amar.
Vos piensas que estoy delirando. Vos sos una súper
Nova. No eres humana. Eres una deidad.
Los planetas se expanden de vuestra misma blusa;
Os desabrocháis el corpiño mientras yo contemplo
La luna. Sos cuántica, sos adoradora, sos mi Ágata.
Te abandonaré. Puedo estallar en vos, puedo
Miserablemente morir. Siempre sos, sin embargo,
Mi estrella musa marital mundana.
Luminosidad
Adorable Ágata, adorable hembra, sos mi vida.
Adorable Beatriz, adorable fantasma, sos la luna.
Por vos, los arcángeles luchan amistosamente entre sí.
Por vos, las lágrimas son diademas. Vos sos mi
Princesa, ya que, Uribe, es un Príncipe.
He navegado por océanos con aromas vuestros;
Océanos que han palidecido ante la rabiosa
Embestida de vuestras caderas. Sos americana,
Sos condensaobrera, sos tan tierna, tan despiadadamente
Hermosa. Vos has roto las cadenas de mi vida,
Me has dado libertad. De obrero a Príncipe.
Ágata adorable, princesa mía. Un reino hay esperando,
Un reino de inmortalidad. Vos no conoces la constelación
Demiurga, ya que vos sos americana. Yo soy universal.
¡Viva el mundo!
Viva la vida
He deseado a Beatriz, he deseado su aroma,
Ágata Beatriz, ¿te conmueves?, soy tu Príncipe,
Tu marido celestial. Hay voces inciertas en vos,
Hay tréboles maduros que germinan en vos.
Te daría yo la vida. Te daría mi eternidad.
Un anillo de diamante para vos. Con la inscripción:
«Casados están». El Padre festeja, ya que de,
Príncipe tenía la impostura del infiel.
Ágata Beatriz es mi amada. Yo dudo de la conspiración.
Jamás infiel seré, ya que estoy condenado a amarle.
Feliz seré por siempre. Ágata Emperatriz es mía.
Tiemblo con sus pestañas de níquel. Tiemblo a propósito
De amarnos; tan desnudos, silenciosos, etéreos, singularmente
Castos.
Separación
Beatriz, Ágata inmemorial, ternura de amar a Uribe,
Ternura de entregarte en Lepanto, después de la guerra.
Yo te admiro, Ágata, sos temperamental; sos bella;
¡Fratricida! Yo comando un buque enorme, vos sos
Una gaviota. He muerto en Lepanto pero la poesía
Prosigue. Príncipe para el Padre, obrero para vos,
Mi duquesaobrera, os deseo como un turbio anhelo
Sin culminar. Sos enormemente bella. Sos madrileña.
Para apacentar mis dudas, con mi catalejo, espío
Vuestro galeón con piratas turcos acechando.
Infieles amantes de Mahoma. Yo soy cristiano;
Adoro al Padre; pero vos sos madrileña, sos
Mi adoradora, mi Ágata Emperatriz. Amándonos
Comprenderás la mezcolanza de razas. Amándonos
En Bolonia.
Luz de Amor
Te idolatro en Verona
Luciérnaga
Amándote, estoy feliz de amar.
Deseándote, soy carne de vuestra carne.
Yo imploro piedad, ya que soy, amador.
Yo te convoco con piedras en los ojos.
Sos delicada como atardecer en Metrópolis,
Sos adorable, tierna, majestuosa en pleamar.
Tus sombras de miradas ingenuas comulgan con
Sinceros devaneos de una mariposa en madrigal.
Vos sos eterna, ya que, como poeta escribo
Cábalas. Vos has contenido a Padre en la sonrisa,
Has deseado al profeta que habita en las alturas.
Pero no hay nada más común que…
Mis palabras.
Aniversario Boreal
Almendra Rumorosa es un cisne. Yo le imploro humanidad.
Almendra Rumorosa es una reina. Yo le imploro caridad.
Somos ternura en la mirada. Somos
Caviar de aspecto obrero. Almendra Rumorosa es
Literata. Más bien, estudiante. Yo le amo.
Daría mi escolástica por contenerle;
Almendra Rumorosa, vos sos inmaterial, sos evanescente.
Espío el mundo para encontrarte, espío la luna
Buscando anillos para obsequiarte en matrimonio.
Vos llorarás, ya lo sé, llorarás de espesura…
La vida culmina en mí.
Tendencia
Tengo manos para amar, tengo soledades de barcos bogando
En lágrimas, bogando en pétalos, bogando desde Asia a América.
Yo deseo contemplar el sol, deseo contemplar el Ártico.
Vos, Ágata, sos en pleamar el escudo de un dios que conspira;
Ya que vos sos infrahumana, sos totalmente seductora, sos
Un pinar, en cuyo abracadabra, los poetas se desnudan
De pétalos sangrantes.
Tengo tijeras para cortar tu figura. Para llevarte a Barcelona…
Deseo amarte en Quinchamalí, deseo amarte siempre
En confines que comulgan con el transitivo del verbo amar.
Vos tenéis unos ojos hermosos. Barcos naufragan en vos:
No culminan de embriagarse en vuestra luminosidad;
Vos sos del Ático de mi recámara donde piratas somalíes
Raptan buques petroleros. Yo escribo historias románticas
Para vos.
Canción Fúnebre
Amémonos en algarabía. Amémonos en acechanza.
He decidido ser vuestro marido. Un cisne soy.
Alto canto de madrugada. He decidido amarte.
Un cisne soy.
Vos sois una princesa. Navegando por este lago;
Donde Príncipe soy. Vos sois una dulce dama.
Amándonos en acechanza: dulce despertar del amor.
Canto canciones helenísticas, canto ebriamente.
Vos escucháis sonrojada. Vos sos casta.
El bucanero apunta su escopeta. El mandinga
Dispara. No yerra el disparo. La princesa se horroriza.
"Bruto. Es un cisne, un cisne cantor".
Estoy a punto de ahogarme. Coros angelicales
Ante mí. En la cubierta del barco un marinero
Me contempla.
"Triste es morir de amor, pero más triste es morir
Ahogado".
La princesa se arrodilla, la princesa llora.
"Cisne cantador, por vos un amor intenso siento;
Por vos abría dado mi castidad".
De pronto sobreviene una tormenta; yo, abatido,
Despierto. "Princesa", grazno, "aferraos al mástil,
Que pronto todos morirán".
Yo tengo el cuello torcido.
Yo tengo el cuello ensangrentado;
Mirando a la princesa aferrada
Al mástil.
El barco encalla; todos ahogados;
La princesa entonces canta:
"Cisne hermoso, tierno amor en…"
No culmina la frase; la muerte le sobreviene.
Deseo de Amor
Desde niño caminaba por Ganímedes:
Yo he deseado las estrellas con mi corazón de Granada;
Uribe soy; y desvanezco por amarte en una noche de toros.
Granada mía, tan bella, como mi adorada Ágata Torbellino;
Ágata, perla de América; vos no comprendéis que, Uribe,
No pertenece al mundo.
Ágata, desliz de Chile; a vos han de coronar reina vasca;
¿Es verdad o es parodia?; vos sos araucana; yo soy el vasco.
La templanza de amar es pasajera.
Ágata, liturgia de amores venideros. España contiene
Mis poemas; pero América contiene mis raíces.
Desde siempre he deseado amarte como reina de Iberia;
Vos serás princesa; todos; hasta en Islam te recordarán;
Vos sos la más bella del orbe; sos fantasmal; no humana.
He decidido amarte en castizo por que de Granada tengo las balas.
Arpías son vuestras ropas; a vos deseo desnuda;
Arpías son vuestras liturgias; a vos deseo sencilla;
Humildad soy yo en medio de pordioseros en Santiago
De Chile. Yo he decidido marchar; a vos he de comprometerme
En matrimonio; vos sos Ágata, de curvadas pestañas;
Vos sos una quimera;
Sos la fémina universal.
He decido amar el encanto del espejo que refleja vuestro rostro.
¡Ágata ibérica!, ¡Ágata chilena!
A mi Sombra
Desde nunca, desde China, he viajado yo
A la tumba de Li Po. He visto hortensias,
He visto el hado del poeta.
He conversado con sus cenizas. "Li Po",
He dicho. La sombra de la luna ha embellecido
El pedregal donde habita la sombra de Li Po.
Yo, el poeta del extremo sur del mundo,
Conversando ebriamente con Li Po.
La luna nos cobija. Ágata tiene miedo.
Ágata me acompaña. "Li Po era ¿un ebrio?"
Yo le narro la sagrada historia de Li Po. Nos besamos.
Extrañamente Ágata huele a tabaco.
"¿Has fumado habano?" Ágata niega.
Li Po ríe. "Bésame", exclama ebriamente Ágata.
"Vos sos un necio".
Ágata ha huido de mí totalmente desnuda;
Le persigo. Hay un lago y una barca.
Ha enloquecido, pienso. Contemplando la luna
Aúlla: "Li Po ha resucitado en un ebrio beso
De alcohol". Yo me compadezco, también huelo
A cepa de vino. Li Po se estremece contemplándome.
"Saludos, hombre; y bebed por vuestra amada
Por una eternidad". Ágata cae a tierra; el bote boga con Li Po;
El fantasma huele a madreperlas universal.
Li Po, me digo; el borracho incólume.
Una voluta de ebriedad ciega mi alma. Socorro a Ágata;
Le quito el diminuto sostén; entre fantasmas borrachos;
En China; nos entregamos al deleite del sexo.
Li Po era un libertino;
"Adiós, Maestro; por vos soy lo que soy".
Ternura
He vivido en ágape, he vivido en solitario, conozco a Ágata,
Pero, yo me siento triste, pues de hembra fui parido pero a hembras deseo.
He dejado mi vida libertina: de China e huido a Valparaíso;
He viajado desde el Paraná hasta Machalí; he viajado mentalmente
Buscado abandonarte.
No he podido. Vos, Ágata, sos inmaterial. Ojos amarillos de malagueña;
Rubí de porcelana en el sexo; vasto concierto de estrellas de Santiago.
Yo soy de Recoleta, soy un obrero de la construcción. Escribo constantemente
Para alcoholizarme y no morir en el intento de poseerte en la multitud.
Yo deseo mil esposas; una en cada país; yo creo que estoy enfermo;
Ya que por vos he dado la vida.
Vos sos géminis y cuentan los astrólogos que géminis es signo dual.
Vos sos chilenaespañola, sos aire y tierra, sos luna y sol; por vos
He abandonado Ática; ya que de los griegos he aprendido el valor de amar
La totalidad; vos tenéis un cuerpo de atleta, tenéis años por amar.
Me presiento triste, cansado, ebrio. No he bebido, lo juro; sólo deseo
Amar.
Duda de Amor
Me comprometo a beber en vuestro nombre: Uribe
Es abstemio; el ebrio licor es de vos; de vuestra ánima.
Me complazco en delirar en vuestra compañía;
Sos claridad en cada acto, en cada escote, en cada corpiño.
Ágata, delicada de miembros: sos aristócrata
De un pueblo fantasmal. Sos pleamar en vuestros senos.
Yo he decidido contenerme, por derecho propio;
El licor que ha de alcoholizarme será el whisky
De vuestros encantos. Yo vivía ebrio de soledad;
Ahora vivo…
Ebrio de continentalidad.
He traspasado los muros de China; Uribe es fantasma.
Vos sos mi duquesaobrera que construye la muralla
Impenetrable.
Ámame en esta estación de sombras. Sos extinguible,
Ya que vos sos de carne. Ágata, pusilánime,
Entrecoge las piernas que, he de morir por vos.
Sos dulce en amor, apacible de espíritu, sos mi amada
Ágata Emperatriz.
Amada Luz
Yo he de vivir en vos porque vos sos mi amada Luz de Sofía.
Letanías para vuestra alma. Me conformo con dulcificar
Vuestro carácter. Sos ardiente, pero también témpano.
He de vivir en vuestra compañía. El Padre recoge pétalos
Que os obsequia en mayo. Vos sos géminis, das luz opalescente.
Yo daría mi vida por arder como arden las estrellas;
Daría un anillo matrimonial por amarte. Sos mi dulce hembra.
He viajado de norte a sur, de este a oeste; y no he hallado
Hembra tan dúctil. Sos ecléctica como el planeta Urano.
Sos temperamental como el satélite X.
Sos turbia como las aguas de una galaxia indómita.
Sos alegre, es cierto, pero…
A veces vuestra electricidad quema;
Ya que sos con estallidos de pétalos
En mayo febril.
Vos has amado mi vida pero yo me he condolido de vuestra vida.
Ebrios somos. Saudade por vos.
Delicadeza de Manos
Yo sostengo vuestras manos, sostengo el universo,
Vuestras manos son
Análogas a Padre; manos de porcelana labrada en Concepción.
Adoro el Sur de Chile porque huele a manos de campesina.
Yo he amado a muchachas con manos duras, manos
Obreras. Yo he deseado un Paraíso para ellas; manos
Arreboladas. Vuestras manos son de Condesa
Que trabaja la tierra. Manos de hortelana, manos
Encendidas en el crepúsculo más bello de abril.
Yo sostengo vuestras manos, sostengo el planeta,
Vuestras manos son de greda de Quinchamalí.
Yo he vivido en Turkestán, en Tokio, en Turquía,
Lugares sagrados para vuestras manos;
Ya que vos sos universal. Sos la mujer del mujik,
Sos la hebra que taladran los obreros de Pekín.
Ámame con manos amasando pan en Lota o en Coronel.
Ámame conteniendo las manos en mazapán.
Arrebolados en atardecer de mayo
Vivo cantando en ferias clandestinas,
Vivo amando tu onomástico, querida condesaobrera.
Mayo es festín para vos, ya que recuerdas las estrellas cuásares
Tremendamente bellas, que te dieron por nacimiento.
Vos sos una estrella, química, eléctrica,
Imposible de contener. Vos sos Ágata Sofía, de contextura
Ínfima, de labios carnosos, de mira elíptica.
Tus lentes óticos te avejentan.
Yo he delirado recordándote, he vivido años en vos.
Hoy es vuestro onomástico. Un trillón de rosas son deshojadas
Por vos en Tokio. Te he invitado a vagar por China, por Japón;
Por las Islas Solitarias del Fin del Mundo; vos recorres mi espalda
Hallando civilizaciones cretenses. Vos has olvidado el mandato de Abraham;
Has olvidado las sagradas escrituras de Moisés;
Yo soy para vos, el mundo. Soy Pekín, Shangai, Islas Canarias.
De reojo observo el mundo en tu cuello de cisne.
Te invito a vagar sin conciencia en tu onomástico.
Te invito con mis dudas y con mis proezas culinarias:
Cocino bien arroz y bistec. He de llevarte a navegar por Colombia;
En el Gólgota nos casaremos, ya que ambos somos adúlteros.
Esta palabra tan fea, torpe y denigrante; adúltero sos en bienaventuranzas.
Los soles girando han hallado amor en tu cumpleaños.
Sueños de Mariposas
Dolor de Amar el Cuerpo
Amando
Amando el cuerpo en esta madrugada por vos en idolatría,
Amando vuestra ternura que cumple con amar desde siempre;
Los pechos con fonemas tiernos,
Las manos con delicada orquídea de Madrid.
Vos sos española, sos tan enormemente bella, que daría yo;
Por Almas en pedradas en el exacto ángulo del ser.
Me atrevo a contenerte, ya que vos sos mi hermana,
Sos mi adorada Ágata, la más preciada joya de mi espíritu.
Contemplando el azul de vuestra mirada, contemplando el sol,
Vos sos amadora de mis días en Madrid.
Contemplo la vida por vos bendecida, contemplo el arcoiris;
Mientras huyen los pájaros; huyen desde mi pecho por vos;
Huyen desde nunca hasta el exterminio de mi canto.
Vos has traicionado la muerte, ya que sos eterna.
Nada se extiende más allá de vuestras manos:
Abrid mi cráneo; y hallarás solamente amor;
Abrid mi boca y dientes habrán; dientes para mascar vuestra esencia.
Vos sos mi Ágata Sofía, sos la leona que cubre Roma
Desde la invasión de las flores en Septiembre.
Primavera boreal para los paganos, primavera libertaria
Para los americanos.
Yo no comprendo vuestro amor. Sos ecléctica; Mi eléctrica.
Mariposas
Deseo contemplar vuestros pechos:
Sos mi adoradora que, en lentitud, se evapora.
Una sináptica ilusión son vuestros
Delicados senos. Yo deseo contemplar la vida,
Deseo que, una mariposa, se pose en el dédalo
De vuestras orquídeas.
Vuestros pezones son dulces, son
Etéreos. Vuestros pezones encienden aromas
De hembra dúctil, hembra, que, mi cuerpo desea.
Manos temblorosas intentas por construir un nido
Para tanta belleza. Beso los aires en trueno
De pezones, que cimbran el cosmos.
Vuestra arquitectura de pechos es maravillosa.
Yo, un dédalo soy, pero vos sos…
Espléndida. He de observar la luna; vos sos más
Eterna. La luna escondida está en vuestro escote.
Os desnudo y hallo un caracol por carne,
Hallo una mariposa por pezones.
Desnuda te desvaneces. Sos una aparición, sos Ágata.
Delirio
Vuestros dedos me encantan, tienen
Dolor de haber parido, vuestros dedos son
Eternos. Yo he cimbrado vuestra materia,
Ya que por vos he de sentir amor póstumo.
Alejado estaré, pero olvidar no podré vuestros dedos.
Parir hortensias es dual; ya que vos sos
Géminis; y vuestros dedos arquean mi alma;
Contemplando yo vuestras uñas; que arañan;
De cada tajo, el universo periclita;
La Nada entonces fluye sangrientamente.
Vuestros dedos son bellos, proclives al cansancio.
Yo busco dedos que me retornen el alma;
Ya que del mundo soy pero también de la inmortalidad.
Vuestros dedos: ¡acariciadme!
He perdido la verdadera vida:
Un dedito de amapola, una uñita de celofán.
Vos no comprendéis lo mucho que os amo.
Yo deliro, deliro por vos.
Tocadme, palpadme, sometedme a vuestro encanto.
Soy hombre de hembra dúctil: secretaria de oficio;
Amante adúltera de profesión.
Vos no sabéis lo exquisito que puede ser un dedo vuestro;
Cinco dedos de marfil, diez amantes dedillos en mi cuerpo;
Tocadme, yo existo por vos en la curvatura suprema universal.
Los dedos vuestros permiten a mi ser existir en permanencia.
Exceso de Amor
Dolorida Eva, vos sos mi adorable amante;
Encontrada con una canasta en las manaos, de pronto apareciste fantasmalmente.
Eva, la adoradora. Vos posees unos turgentes senos de madre.
Enloquecí, aterrado, la canasta familiar de feria.
—¿Quién sois?, pregunté.
—Eva marital de vuestro padre Adán.
Incesto es la palabra para comprender lo que entre ambos sucedió.
—Vos sos una reina, sos madre nuestra.
—Yo sólo quiero divertirme y conocer Madrid.
Perturbado entonces me arrodillé. Temblaba. Hambre de carne.
Hambre de encontrarme danzando en discotecas madrileñas.
Durmiendo con Eva, la madre de nuestras desgracias.
—Vos sos tímido, tómame, vos sos encantador.
En ríos de esperma la luna danzó entre ambos:
Eva, la adúltera, la concisa, la pelirroja; Eva originaria,
Eva adoradora.
—Me he divorciado de mi marido; prefiero culebras.
Entre tanto yo, intento no desvanecer. Eva consigue su fin.
Muerto en vida, el sueño se precipita. Despierto hallando a Ágata dormida.
Eva es dulzura. Eva es diapasón y soltura de cuerdas vocales. Eva, es mi alucinación.
Dilema de Amar
Doy mi consentimiento a las nubes:
Vos, querida, sos Ágata de las nubes.
De amor hay una eternidad, ya que, de nubes
Vive el hombre. Nubes rodando, nubes
Conteniéndose, nubes en vuestros ojos.
Duermo pensando en vos.
Me contorsiono pensando en nubes.
Vos me amas porque, en mi cuarto, hay nubes, nubes.
Vos me adoras porque yo, contemplo vuestra nube
Etérea.
Deidad para vos, Ágata, deidad en las nubes.
Se extienden los ojos por el horizonte,
Se contienen los dedos bajo las sábanas.
¿Respiras quejosamente?; es que, el amor entre nubes es
Etéreo.
Yo te amo, Ágata, dolor y color de nube.
Yo te deseo, Ágata, contención y sabor a nube.
Yo te imploro vida, amador de Ágata, la adoradora.
Vos sos pequeña, ya que implosionas en el arcoiris,
Página anterior | Volver al principio del trabajo | Página siguiente |