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Poemas Inmemoriales. Sueños de Fantasía (página 4)

Enviado por Mauricio Uribe


Partes: 1, 2, 3, 4, 5, 6

Por fin he ideado amor en carne espíritu.

Sofía la virginal, la que besa todo mi cuerpo.

Sangre de mi sangre, carne de mi carne.

En cruz crucificados por siempre.

 

Tornasol de labios

Labios finísimos, yo te amo tal cual eres:

Perfecta.

Labios para amar, labios que sostienen mi mirada.

Eloísa ha fallecido, nada puede, en esta tierra, ser tan espiritual.

Eloísa es espíritu, ya lo creo.

Piel transparente, piel de cedras de perla insustancial.

Eloísa murmura, no habla:

"Soy un espectro, tengo un pubis espectral".

Yo comprendo su belleza, es un ángel.

Le invito a pasar a mi aposento:

Viste blusa escotada por maravillas de colibrí.

Es realmente excitante amar a un espíritu.

Los labios luctuosos son transparentes, nimios.

"Hoy he cortado mi cabello. ¿Cómo me encuentras?"

Yo no puedo responder. Eloísa ha fallecido para mí.

 

Amanecer en Santiago

He amado a una mujer rubia:

Ojos de platinado espesor.

Yo le amo porque es tibia y tenue.

He amado a una mujer esencial:

Es delgada, taciturna, venerable.

Amadle también vos porque es virginal.

Amadle precisamente en viernes de cábala.

He amado a Sofía tiernamente:

La he amado y la he invocado desde siempre.

Amadle e invocar su carne;

Es bella, tremendamente bella.

 

Batalla Corporal

El deseo es poderoso, el deseo es amor, yo amo a Sofía, amo su carnalidad.

El deseo es potente, Cristo nos bendice, Cristo es nuestro Padrino.

Yo he amado mil veces el cuerpo de Sofía; la he amado.

Yo no me canso de embestir sus caderas, de bendecir su figura.

Amor y eternidad, tiempo y memoria cautiva.

El deseo es tibieza de manos que acarician nuestra deidad.

Manos prolongándose en los costados de las galaxias.

Amo a mi intacta doncella, en cuya ebriedad, yo he gozado.

Es una Virgen, es mi sibarita amada por eternidad.

Cuerpos que huyen por el cosmos. Que hermoso aposento para amar.

He sufrido yo el exilio del cuerpo de Sofía; exilio eterno.

 

Helio

A la manera de amarte de Séneca,

A la manera de amarte de Platón,

A la manera de amarte de Uribe.

Dosis adecuadas de amor, dosis inciertas.

Te amo locamente, te amo dócilmente.

A la manera de Plutarco,

A la manera de Pompeyo,

A la manera de Sofía de la Luz Gómez.

Seres que han existido y han amado.

Seres espirituales. Yo vivo y ardo en Séneca.

Yo vivo y ardo en Platón.

Soy admirador de Plutarco,

Y lloro por Pompeyo.

Los octaedros nos manipulan el alma; ¡Viva el amor!

 

Vislumbramiento

Ayer te vi. Ayer supe que te amaba.

Ayer fue un día sensacional:

Amor de amores. Te vi ayer en desnudez.

Supe que te amaba, ¿cuándo?, ¿dónde?, en fin.

Supe que, mía, entre tantas, serías.

Ayer te vi y te hallé espléndida.

Curvilínea las caderas. Cabello con moño.

Azucena. Ayer vislumbré un ángel.

Alondra te nombré. Te di ese nombre por patria.

Oh, deidad, oh, tierra, sos desde ayer mía.

Yo cuidaré por vos, cuidaré vuestra hortensia.

Jardinero soy de flor silvestre.

Jardinero soy.

Comeré de vuestra epifanía.

Ayer te vi. Y ya me encuentro tonto.

 

Elocuencia de Amor

Eras una muchacha tierna.

Suplicabas amor a mi adultez.

Yo intentaba oponerme, negarme.

Eras Alondra Taimada.

Alta, maciza, hermosa. Me pediste amor ilícito.

Tuve que resistir. Fuiste cruel conmigo.

Te desnudaste ante mí. Yo, pálido. Yo, incólume.

"Soy casado", dije, "amo a mi mujer".

Acaricié tus cabellos. Conversamos.

Los días transcurren pensando

En Alondra Taimada.

"¿Quieres sexo?"

Dura fue nuestra manera de amarnos.

"Me encantaría pero soy casado".

Anoche te vi. Y me arrepiento de no haberte amado.

¡Viva el amor!

¡Viva Alondra Taimada!

 

Amor Correspondido

En Barcelona, las Alondras esperan mi llegada.

Alondras vespertinas, Alondras regalonas.

Yo pronto partiré para saciar vuestros instintos.

Alondra Rumorosa Adolescente, Alondra Carmen, Alondra Rosario;

A todas amo locamente, a todas doy mis vértebras.

Anidan en mí

Los deseos de un hombre de paz.

¡Viva la esperanza!,

¡Viva el amor!

Alondras, sabed que Cupido me ha flechado;

Cupido tiene cien aristas con cien corazones.

Amad decentemente, de lunes a domingo.

Alondras sois enamoradas por siempre.

Alondras Amarillas, Alondras Morenazas;

Doy mi vida por conocer en China el amor de Confucio.

Alondras blanquecinas, Alondras cobrizas, doy mi alma por vosotras.

Sed prudentes, eso sí. Que nuestro amor anide secretamente.

No quiero que Eloísa nos descubra;

Eloísa Cantadora, Eloísa de mi corazón.

Suplico remedio por mis extravíos amorosos.

 

Amor Amantes

Las noches son profundas recordándote.

Yo en Berlín en soledad.

Tú en París en soledad.

Podríamos viajar a Chile,

Comprar una cabañita en medio del desierto de Atacama,

Pero amarnos a distancia no es recomendable,

Te amo, Alondra Francesa, te amo,

Eres tan tierna con la boquita fruncida por el francés.

Hablas un idioma bellísimo,

Desearía hacerte mí con arroz nupcial.

Francesca, adorable Francesca, yo te amo desde siempre.

Aun no nacías y ya te escribía este poema.

Yo soy un vidente y te hallo divina;

Serás una muchachita bella a los cuarenta;

Y a los veinte, te enamorarás de mí.

Ahora estoy en Berlín componiendo canciones.

Mi querida Alondra, en París estás, ¿estudiando mis canciones?

¿Habrá tregua a este dolor de separación?

Esta carta que te escribo es futurista.

Aun no has nacido, Francesca, y ya te extraño.

 

Amantes

Francesca me ama porque soy epifanía.

Francesca ama la luna, ama las estrellas.

Francesca es parábola de Francia.

Es muchacha que estudia mis textos.

Yo encolerizo si Francesca deja de pensar en mí.

Soy ególatra porque Francesca aun no ha nacido y ya me ama.

Francesca, yo me encomiendo por tu idealismo.

Bella eres. Muy bella.

Francesca ama la sutileza de las rosas.

Francesca ama la delirante sinfonía del mar.

Francesca me ama porque soy vidente, ama mis poemas; me ama.

Yo te imploro amor en décadas futuras, en elixir de existir.

 

Adorada Francesca

Eres azucena en primavera,

Eres río de cuásares,

Eres guirnalda de seda,

Eres La Fontaine.

Yo busco el crepúsculo para amarte,

Busco las piedras religiosas que en vos hay,

Eres abismal, eres mi Francesca.

Yo he dado mi vida por vos,

He dado tiempo al tiempo profetizando.

Cuando crezcas me buscarás en libros,

Yo estoy encarnado en vos desde años pretéritos,

Estoy en cada verso que brilla en vuestra alma.

Nos fusionamos mientras la luna se prosterna.

¿Sabes?, yo daría mi espiritualidad por encontrarte;

Paciencia, me digo, pronto serás en abril.

Francesca, amada taciturna lectora de mi literatura,

Preparas un doctorado en amar por futuro;

Amor de soledad.

Francesca, curvilínea azucena en París.

 

Dulce Amor

Agosto es para mí invierno,

Pero para Francesca es amor.

Yo he hallado brotes de camelia en vuestra ausencia,

He hallado armonía en suponer, que,

Camelia y Francesca,

Son de la misma manera amante.

Oh, azucena amada, oh, deseado querubín;

Francesca ha madurado; es toda una damita.

Ágilmente cabalga. París es vuestra ciudad.

Yo busco en el tiempo un retrato vuestro

(Retrato que ella me ha obsequiado).

Te amo, Uribe, toda tuya soy…

Agosto para mí es invierno,

¿Y para Francesca…?

 

Amor

Yo te amo, Francesca, amo tu carmesí,

Deseo enamorarte, que existas en mi realidad,

Que existas, repito, en lontananza; amándonos.

Francesca es una ilusión,

Es la Bienamada, es la Enhorabuena.

Francesca, esta noche he pensado en vos,

He buscado los destellos de vuestros cabellos,

Ya sé que debería esperar décadas,

Pero me complica, nuestro amor es eterno.

Yo te imploro, Francesca, te imploro amor carmesí.

 

Deseo de Amor

Es amor de adolescente nuestra pasión,

Es de talismanes y de besos furtivos,

Yo he amado vuestra complacencia,

He amado a solidaridad de vuestros actos.

En la poética existes y en mis ganas también.

Yo podría encanecer pero vos siempre mía serás.

Francesca, adorada, TiernaEdad, en mi ancianidad existes,

Francesca, idolatrada, no desmayes, destrúyeme; amándome.

Haz de mi alma una turgencia adolescente,

Haz de mí un cuerpo, que fluye

Desde siempre hasta nunca,

Un tabernáculo de vuestro encanto

Femenino.

Francesca, no culmines, no enloquezcamos.

De primavera soy; de lumbre, de tentaciones, de silencios…

Francesca…

 

Armonía para Francesa

Eres la dulce damita enamorada de un poeta,

Eres Dulcinea curvilínea enamorada de un poeta,

Eres ternura, templanza, Enhorabuena.

Me contemplo abismalmente;

Ya que vos gustáis de amar mi oscuridad.

Yo prefiero luz divina,

Prefiero observar vuestra contextura,

Conducirme por vuestra espalda,

Iridizarme en vuestras nalgas.

Sostener vuestro pubis

Rubio.

Y bendecir quedamente

Vuestro clítoris.

Yo os amo ardientemente.

Os amo como mujer.

Os deseo como nena que sos.

Francesca, vuestro ombligo es mi Norte,

Vuestras posaderas el Sur,

Vuestra pelvis mi Patria.

Yo compondré un himno eyaculado por vos.

Fiereza y delicadeza. Arder y sutileza.

 

Dulzura Enamorada

Francesca es bella como un atardecer,

Yo despierto pensando en ella, le adoro.

Francesca es ardua como un día laboral,

Sencilla como un retoño de arcilla,

Le adoro, sí, es verdad, ya nada existe para mí.

Francesca es bella como un anochecer,

Es delicada, al mismo tiempo que, evasiva.

Un mundo me costó amarla, mundo irreal.

Francesca es agria, ya que a veces me repudia.

Yo soy casado, ella es mi amante.

Francesca suele delirar en mi compañía;

Piensa que en mi lecho ha dormido Padre.

Francesca supone que yo soy eterno.

Mis poemas tal vez, pero no yo.

Francesca se extralimita;

Piensa en la posibilidad de eternidad.

Francesa es atea: su religión soy yo.

Libro de Eloísa

Belleza Eterna

Ella

Eloísa es amorosa, sensitiva, sensual.

Eloísa es cabizbaja, temperamental, taciturna.

Eloísa es matinal, trabajadora, colérica.

Eloísa es un colibrí qué madruga.

Eloísa es maternal, no sojuzga pero porfía.

Eloísa me contiene, me respeta, me adora.

¡A Eloísa el tumulto de las olas del mar!

¡A Eloísa las frágiles arenas del desierto!

¡A Eloísa la tempestad de los hielos eternos!

¡A Eloísa la fragilidad de nuestro tiempo!

Eloísa, ¿me contienes?

Nadie sabrá jamás quién sos.

 

Bienamada

A tus ojos de mármol,

A tus ojos de cantera:

Eres un girasol que contiene pureza,

Eres mi adorada Eloísa.

Un continente,

Una isla agraciada y tropical eres.

También la luna que acomete los cuerpos.

Eres sensitiva nostalgia,

Eres torbellino de amantes.

Yo te encuentro digna de un héroe,

Te encuentro razonablemente ecléctica.

Eres Alfa y Omega,

Eres una tribu bárbara de África.

Toda eres de ambrosía

Mientras yo canto, mientras yo

Te adoro…

Sé feliz con candor humano.

Tan hermosa eres.

 

Tormenta de Amor

Dulce amanecer, contenida la expresión,

Eloísa ha despertado y yo no encuentro palabras

Que no expresen amor.

Tan dulce como una camelia,

Tan digna como un ruiseñor,

Eres la Sinfonía que Beethoven no compuso, pero que admira,

Eres la Tonada que Mozart ama delirantemente,

Eres Tchaikovsky, eres Grieg

Cantando festivamente

El Avemaría.

Me acostumbro a tu nombre, tan sonoro, tan dulce,

Me dejo contener por tus lágrimas. Adorada eres, Eloísa

Primorosa.

El rutilante beso que me has obsequiado

Es de los enamorados la mácula

Por siempre.

Goethe, se contuvo de no enamorarse.

Cada Maestro ha obrado en contextura

De vuestro cuerpo,

Ya que eres divina.

Me alegro de haberte conocido.

Me alegro de haber

Poseído.

 

Alegría de Vivir

Me sonrojo de tanto amar la vida:

Son sensaciones beatíficas:

Una cadera de una bella hembra,

El sostén que se desnuda.

Yo nombro "amor" entre todo lo existente;

Amor a Juliana, a Miriam, a NostálgicaHembra.

Yo amo vuestra contextura mujeril.

Soy un poeta vividor: estoy cierto,

También vos me amas:

Yo puedo hacerte feliz

En la contextura del atardecer.

Feliz

En la nomenclatura

Del anochecer.

Deliras; y estoy cierto: ¡huyes de mí!

Amores he tenido, y frustraciones también;

Pero prevalece el amor.

Noche culminando, noches de luna acabadora.

Yo amo a Luz María, a Rebeca, a MónicaEsperanza.

He transgredido la materia.

Mis dedos son

Maestros

En el arte de amar.

Dedos paralizando el corazón,

Dedos, oh, dedos.

Pero también los codos, las uñas,

El esternón.

Yo amo y me comprometo en satisfaceros.

Amo a Luz María, a TeresaBeatitud, a JazmínAmor.

Adoro a Sofía, a CarmenPlacer, a EloísaCantadora.

He hallado esplendor en vuestras almas;

Dramatismo también y humanidad.

Doy testimonio de amor en la versatilidad de mi cuerpo.

 

Anunciación

Feliz es vivir amando, felicidad.

Soy un poeta que busca la anunciación;

Busco amar, busco transgredir.

Soy un ciudadano.

Luz hay en mí.

Cristo nos propone amarnos en hermandad.

Somos Apóstoles en apoplejía.

Sed de continentalidad,

Sed de conferir humillación.

Hoy he tenido una conversación

Con mi novia;

"Te amo, es cierto, enloquezco".

Cristo ha provocado dulzuras en mí.

Tanto goce

En mis adoradas estrellas;

Goce de prevaricar

El destino;

¡Tiempo de vivir!; ¡tiempo de coexistir!

Destino de amar, destino… de…

Enamorarnos.

 

Eloísa Amante

He amado a Eloísa DulceDespertar.

La he amado

Con estrellas que buscan la corporeidad.

Eloísa,

Es tiempo de culminar

Con la ruta del vagabundo;

Eloísa,

Yo no te comprendo,

¿Buscas escapar de mí?,

¿Buscas

Alejarte?

Las malas personas

Que mal de hablan de mí

Son hipócritas:

"Que es un fresco, que te engaña".

Es verdad,

No te voy a mentir; tengo amores;

Pero son platónicos…

Me enamoro de Jessica, me enamoro de Jazmín.

Me enamoro de RumorosaBarcelonesa.

Yo te soy infiel como el rocío a la tierra.

En mi corazón, a pesar de todo, sólo está tú.

Eloísa;

Fiel soy a Eloísa DulceDespertar.

Yo sé que ten han contado

Cosas horrendas de mí:

"Que soy pendenciero, adúltero, escéptico".

Es verdad, lo soy, porque ardo de amores

Prohibidos por ti.

Deja que ladren los buitres;

Amor, amor, amor, totalmente eres en mí.

Tu madre está convencida:

Algún día nos casaremos;

Estas cosas no importan,

Yo estoy seguro de tu amor;

Recuéstate en la pradera para descansar,

Recuéstate para amar.

Un beso.

Y nada de rumores.

Matan las víboras con rencor.

Estoy esclavizado, Eloísa Rumorosa, esclavizado en ti.

 

Poema Para Sofía Enojadísima

Te amo pero no soy capaz de expresar mi amor.

Vago por las calles pensando en vos.

Me persiguen vuestros ojos, vuestro cráneo, vuestras llagas.

Te amo pero soy incapaz de perseverar.

El vacío de nuestra muerte, el vacío de nuestra existencia.

Yo te nombro porque vos sos mi amada.

Te amo en la medida de lo irracional.

Te amo con unas tremendas ganas de inmortalidad;

De existir en vos cada día; de existir en cada amanecer.

Yo te amo en cuestiones domésticas:

Lavando las manos, tejiendo una flor.

Yo te amo en lo incongruente. Sos mi vida, sos mi ágata.

Yo te amo en las cosas que no contienen luz.

Pero también te amo en la luminosidad de una estrella.

Eres tan terca como tierna. ¡Eres Luz de atardecer!

 

Ternura para una Veinteañera

Yo soy un espiral, soy verdor.

La luz septentrional es difusa, las voces son esenciales.

Yo estoy en vos, en vuestra manera de amar,

Estoy en los acantilados, estoy en las pestaña, estoy en la madera.

Eres Eloísa DulceHembra.

Yo confío de nuestro encanto. Confío ciegamente.

Me conduelo en preferir la vida apartada campestre.

Sos joven; veintitrés años.

No nos conocemos aún pero estrella distante mía serás.

Soy un poeta antiguo, ya tengo mis años.

Pero la ternura de vuestro rostro me ha golpeado el corazón.

Eloísa DulceHembra, yaces en mi almohada mientras lloro.

No me comprendes ni yo te comprendo,

Meses faltan para que nos conozcamos.

¿Amantes seremos? ¿O marido y mujer?

Eloísa DulceHembra, ¿me amarás?

Yo sabré seducirte con poemas, sabré

Amarte. Me prefieres de costado o de contraluz.

Eres tan bizarra, eres demoledora, eres mi bienamada.

Eloísa DulceHembra, te sostendré en estática lucidez.

 

Término Azulino

Amar los bosques en los rostros curtidos.

Amar a Eloísa en las fórmulas quijotescas.

Amar a Eloísa en la manera caballeresca.

Amar sus pies, amar sus uñas, amar su cabello.

Eres joven, estudiante; yo un poeta antiguo.

He dedicado este canto a un fantasma.

El amor es sabiduría, amar es divino.

Yo estoy de acuerdo contigo.

Nos amaremos ocultamente.

Eloísa veintitrés años, en Madrid o en Londres.

Siempre viva de escaño y posaderas potentes.

Eres como una diva, como un sol nororiental.

Eres la víbora que conquistó Jerusalén.

Eres alma en almíbar, eres barcelonesa.

De besos, de manos, de caricias, de sensualidad,

Yo vivo esperando vuestro encuentro, esperando

A Eloísa Pecadora. En la jungla nos hallamos,

En la jungla de cemento.

Yo provengo de Chile; por vuestra sangre

La conquista arábica.

Sed de libertad. Os doy mi carne.

No te aflijas, Eloísa DulceAdolescente,

Haré de vuestro altar una adormilera

Por siempre.

Haré de vos

Mi mujer.

 

Soñadora

Tan tierna eres. Dudo de mí, dudo de todo.

Tan dulce eres. Me rasco las mejillas y el cabello.

Tan insustancial eres. Soy feliz y soy andante en ti.

Tan lujuriosa sos, mi Eloísa Seminal.

Encuentro a esta mujer bellísima,

Su aroma, su rostro, su interminable juventud.

Encuentro delicioso acariciarla: el fémur, el cóccix, la tibia, el peroné.

Succiono su materia: el pubis regiamente rubio.

Eloísa es mi enamorada. Ella es cervical, es empírica.

Te adormezco con mis conversaciones. Pero taladras mi pelvis enhorabuena.

Yo imploro amor. Solaz desliz de los cuerpos.

Imploro agonía. Dulce amor en ambrosía.

Imploro sobriedad. En bochorno de célibe a desfachatado amor.

Yo te imploro pues soy juez en esta contienda.

Adorable eres. Tierna edad de los veintitrés.

Eloísa vasca o francesa. Eloísa muy pronto te conocerte.

El vaticino es verdadero,

Como mordida en vuestro bajo vientre.

 

Vaticinio a los cuarenta y dos años

Eloísa, veintitrés años, serás coetánea de las estrellas distantes,

Serás cobijada por una nube radioactiva, pero yo te reclamo,

Yo te invoco diez murmullos antes de nuestros devaneos, yo te suplico paciencia.

Eloísa a fuego lento, sos el anteparaíso de un vidente,

Sos la peculiar manera de pronunciar las vocales,

Yo te espero, yo te adoro, yo te colmo de besos pasajeros.

A cada instante, devoro el espacio que nos separa.

Eloísa, dulce amor adolescente, yo te amo, yo te adoro,

Te suplico que cuides de mi anteparaíso con todo el poder vuestro;

Poder de vocales aromáticas, poder de caminatas bajo el tiempo inmaculado;

Vos sos una Virgen y yo soy vuestro amante escudero.

Te diré que he vivido cuarenta años; para vos son muchos;

Pero para Padre, que es nuestro testigo,

Nada. Vos sos mi musa, sos mi Eloísa.

 

Adonis

He amado a Eloísa, no soy un Adonis, pero Eloísa me ama.

Dulce despertar de los sentidos. Sos una víbora, me amas pero me respetas.

Dulce miel de hombre en vuestras manos: Eloísa no da trémulo al cuerpo.

Adonis es veterano, ya no produce miel de abeja, es un maestro del silencio.

Adonis es sabio, ama a Eloísa de manera torcaz.

A cada atardecer, las ninfas gustan de amarse contemplando el sol.

Adonis ama a Eloísa, posee dedos espectrales como bólidos precipitándose.

Amar, gozar, contenernos, silenciarnos, apetecernos.

No culminando de amarnos en nuestra noche nupcial.

Ya no soy un Adonis pero amo a Eloísa Veinteañera.

 

Duros días de Amor

He deseado amarte, he deseado contenerte, pero te precipitas.

Amor; sos mi dulce despertar adolescentes; me amas y te amo.

Yo no puedo negarme, compruebo la libertad que hay en vos,

Compruebo vuestros diminutos pezones esperando por mí.

Amada; sos juvenil; sos eternamente espectral; ¡os adoro!

Yo caminaba por Barcelona; desenvuelto; AmadoraVividora;

En letanía os encuentro risueña, colmada de esmero.

Sos un atardecer para mí, sos mi musa; os deseo carnalmente.

Mientras vos reposas, diminuta y desnuda, yo enloquezco.

Te adoro; te devoraría desde la raíz de los labios hasta las caderas.

¿Deseas amar a un maestro Zen del gameto femenino masculino?

¿Deseas contener mis extrañas en un acto punitivo de amor?

¿Yo sé que fui adúltero pero también sé que estoy enamorado?

No dudes; os colmaría de rosas en un paraíso para nonatos.

 

La Bienamada

Dulce niña quinceañera,

Sos mi amada, mi quimera juvenil.

Sos agradable a mi recuerdo.

Encontré todo el amor del mundo en vos.

Yo deseaba el paraíso terrenal para vos.

Adán Uribe, Eva de Uribe.

Pero cómo todo sueño incólume…

Mal acaba.

Dulce niña de verdes ojos,

Por vos el poeta no emigró a Valparaíso;

Por vos me han confundido con proletario;

Al infierno mismo me mandaste

Aquel tremendo día del desamor.

Pero fui feliz en vos.

Te vi tan irreconocible;

Tan bella ya no eres.

Te pareces a tu papá.

 

Eternidad en Sofía Enrabiada

El más acabado amor con aves de tornasol por vuestros ojos.

Yo te encuentro bellísima, un poco torpe al amar, es verdad.

Este defecto es soslayable: tiernos son y duales vuestros ojos.

Dan fiereza al alma y procacidad al sensual acto de amar.

Yo no te comprendo. Gozas pensando en Edipo.

Al tiempo mal fabricado buenas son las odas.

En aquel día de magnificencia, yo te amé locamente.

Fueron tus amarillos ojos los que me atormentaron.

Es verdad, vos sos ardiente, pero eléctricamente torpe.

Debes aprender a componer poemas mientras cabalgas.

Haz como yo que, en maestro Zen, me he convertido.

Respirando quedamente retardo el mal humor del mal amante.

 

Sofía Contenedora

He amado vuestro atardecer,

He deseado vuestro entender,

He conformado un caos de amor,

He resentido mis nudillos por amar

.Dualidad es vuestro eclipse lunar,

Dualidad de bellas formas esVuestro espejismo;

Espejismo humano.

Yo permanezco mudo especulando

.Las cosas a veces son inciertas:

Un cabello vuestro como un maremoto,

Un instante nuestro

En desorientación humana.

Estoy cierto, eres letal pero también volcán.

 

Dual

Eres ternura, eres espesura, eres temperamental.

Los días y las noches te fascinan pero no las tardes.

Dulce Sofía, ternura de tiempo inmemorial.

Me amas, me cobijas, te silencias, me provocas

.Dulce Luz del dios Pan, habrás de amarme infinitamente.

Estoy en edad de procrear, en ocasión de amar.

Estoy en tránsito de esperar el huracán.Sofía, Luz de Eternidad,

vos sos mi caracol de diamante:

Eterno interdicto de celofán

Sos vos.

 

Espectro de Luz

 

Tu espíritu es amor, siempre hado de amor

.Tu energía corporal

Es…Dual;

Ánimo, dulzura, tempestad.

Luz de amanecer, yo te amo, yo te imploro terquedad.

Eres opalescente pues el Altísimo nos cobija;

Luna de esmeralda, no comprendo lo que nos separa.

Adiós a los cuerpos.

Yo te contemplo, yo estoy eternamente enamorado.

Sofía; ¿cuánto amor habrá entre nosotros?

Sofía; ¿has amado, has gozado, has periclitado?

Luz de atardecer, te comportas como nenúfares.

Te desnudas como tulipán; hoja medrosa sos.

Yo soy poeta y podador de cactus,

Soy melancolía de amor devorador.

Sofía; sos la templanza y esbeltez; sos mi amada.

Vuestro espíritu invoca mi cuerpo; vuestro cuerpo mi espíritu.

 

Elementos de amor

Yo te encuentro bella,

EternamenteBella.

Yo te encuentro graciosa

Como tulipán, como alelíes.

Estoy recordándote;

Te has marchado;

Yo te amo en honestidad,

Amor de amantes, amor

De atardecer boreal.

Yo encuentro dulzura en vos,

He amado a Sofía,

hePensando en Luz de Atardecer.

Yo te encuentro bella,

EternamenteGraciosa.

Espuma de mar

En vuestra cintura,

Delgadez de cometaSos vos.

Luz de Sofía,El invierno os cobija.

Cuando amamos en primaveraYo te encuentro magnífica;

De punta a cabo como DulceAmar.

 

Luz de Atardecer

He amado un colibrí, eléctrica eres.

He amado un jabalí, sutil eres

He deseado contenerme; tulipán amaranto;

He deseado ocultarme, he deseado trasmigrar.

Sueños eternos con dios Pan.

Sueños de copihue y loica romántica.

Temperamento de evanescente Eloísa;

Temperamento de majestad de ola salvaje.

Yo te adoro en la sutil beatitud de vuestro rostro,

Te amo con aparente malquerer.

Pero nos revolcaos en las olas del dios Pan.

Yo estoy despierto.

Tú estás despierta.

Nos entrelazamos.

Ritual de desnudarnos

Fantasmalmente.

Ritual de amarnos en el bosque.

Eloísa, caricias te imploro como torcazas angustiosas.

Te imploro agonía de amor cortés.

Soy aparentemente casto, pero casto de amor

Amar.

 

Dulce Beso

Me besas y comprendo que te amo locamente

.Me besas y me inclino como un caballero andante.

Eres mi adorada hembra que pernocta en un castillo

.Eres mi licenciosa hembra que pernocta en mí.

Sol de eternidad, escafandra, en la profundidad yaces.

Silueta de atardecer.

Permaneces a la deriva, acechante.

Alegoría de ríos inmortales, alegoría de vuestra desnudez.

Yo te contemplo desde tan lejos para amarte

.Zafiro, Luz de quimeras amorosas, nos delectamos.

Me besas y comprendo la totalidad.

Me besas y me contengo de amores tránsfugos.

Amarnos en rectitud, desde el clítoris hasta la eternidad.

Amarnos heroicamente, sin tregua, en descontrol.

Yo soy casto; vuestra diosa Afrodita me consagró.

Amores prohibidos besos aterradamente conspicuos.

El dolor de amar es comparable al dolor de arrebolarnos.

 

Anocheciendo

Dolor de amar, dolor de no serAmado.

Dolor de estigmas, dolor

De RumorosaApostasía.

Cuando vos nos estás

Me provoca el alma ardor.Cuando voz no estásUna caravana de ángeles

En mí se precipita.Anatema de delirio.

Eternamente me amarás pues soy dulzor.

Templanza de pies y de manos,Templanza de no existir y de no morir.

Yo estoy dispuesto a contenerte,

Estoy dispuesto a renacer.

Dolor de sostenernos,

Dolor de permanecernos,

Dolor de sentenciarnos en amor

Cuando sólo hay dolor.

RubiaAmbrosía sos vos.

Rubia elocuencia.

Yo estoy dispuesto a amar,

Estoy dispuesto a desflorar vuestro amor.

Soledad, amargura, caos.

No te comprendo, es verdad; amor y escuetas palabras.

No te comprendo, pero te adoro.

Eloísa, DulceSueño.

Eloísa, TabernáculodeAmor.

 

Dulce Amor de Sofía

Amada Luz de Anochecer, yo te amo,

Estoy desde siempre permaneciendo en ti,

Yo comprendo el zodiaco; y géminis es aterrador.

Amada Luz de Esperanza, las cosas exactas son amorosas.

Yo te imploro paciencia: no te desnudes en pavor.

Amores hay que devastan el cinismo.

Nos amamos en los bosques, en los rascacielos, en los hospitales.

Amada, Luz de Esmeralda, sos una mariposa fucsia.

Yo te imploro plenitud de amar.

Te imploro lejanías.

DulceMieldeAmor, nos reconciliamos

Pero sin contenernos y sin excluirnos.

¿Me contradigo?, pues no.

Vos sos peligrosa pero te amo.

Lunes de merienda con Eloísa amándome.

 

Estival

Amada Eloísa, estoy recordándote, estoy amándote,

Nos deseamos como Padre manda,

con risas, con abrazos.

Luz septentrional, sos la octava musa que ansía mi vida.

Yo te adoro pero vos no me contienes como Júpiter.

Desearías abrigarte en estival invierno.

Deberías Convocar vuestro aliento después de una ducha matinal.

Amada Eloísa, sobrio beso en las mejillas, yo te imploro amor.

Procuro enamorarme de vos.

Procuro desear vuestro ombligo.

Rústica concepción amorosa: boca y esternón, ternura y amor.

Yo estoy lejos de todo incierto pleamar, yo estoy en vuestra lealtad.

Madura la flor por vos ya que el jardinero soy yo,

Maduran vuestros pechos en desobediencia fantasmal.

Siempre amándonos estaremos, siempre vivo el poeta.

Alevosía de amarnos, alevosía de contenernos en rusticidad.

Dadme vuestra nostalgia.

Por siempre yo os daré mi vida.

Sos en primavera el otoño en Reino VivaelAmar.

 

Consonancia en Sofía

Amo a Sofía.

Amo su prestancia; trino de arcángeles, trino de…Arrullo

Conmovedor.

Lunas de esmeraldas, lunas de cuantificación, yo soy, yo…

¡Existo!

Fiel eres ante mí, te adoro en la totalidad de vuestro ser,

Adoro vuestra reciedumbre femenil.

Adoro vuestro

Entorno marital.

Eres hembra, te ruego comprenderme, yo te imploro desnudez.

Somos de carne.

Sos mi Quintaesencia, sos mi liberalidad.

Adoro vuestros contornos.

Adoro vuestra lealtad.

Sexo divino.

Sexo en totalidad.

Las duras penas son por vos.

Luz amada de atardecer.

Yo estoy en vuestros pliegues de andaluz.

Sangre de mi sangre, sos carne en torbellino.

Os ruego no morir, os ruego permanecer

En perpetuo tránsito.

Yo sé que me amas. También sé que

Me orgasmos provocas

Fenomenales.¡Viva vuestra dulce vulva!

 

Luz de Amor

Yo te adoro en el contorno de vuestros labios,

Yo te imploro en el contorno de vuestra expresión,

Yo te suplico acceder a desearnos de manera totalitaria,

Yo te contemplo y te escribo un poema de amor.

Dulce miel, cantarina sos y celofán de cuarenta y seis años.

Dulce despertar de anís.

Sos rutilante magnolia.

Sos un raulí. Sos una caravana de prófugos ángeles.

No puedo contener.

Yo soy torcaz.

Soy alondra.

Soy huemul.

Soy eterna lozanía amadora.

Vos sos mi adoradora.

Sos mi eterna Luz de Ámbar.

Huyes por de pronto

Como animal herido.

Huyes infinitamente universal.

Te complazco idolatrándote.Sos púnica desde un todo punto racional.

Sos tántrica. Sos medusa. Sos alocada. Sos genuina.Por vos daría yo mi eternidad. Mi sagrado fuego.

 

Delirio de Cumpleaños por Sofía Eloísa

He amado, he deseando, he proferido alaridos,

He consolidado mi vida, he contenido clamores,

He disecado mi piel en vos, he dilucidado silencio en fuego.

Me enamoro y por cierto sos mía.Águila perenne.

En concordancia en mis eternos amores.

A la más Bella, a la que me paraliza, a la tránsfuga existencial.

Sos arcángel de instantes infinitamente celestiales.

Sos adorable mariposa con alas insustanciales.

Me desnudas y me dislocas el alma.Infinitos paralelos son vuestros tiernos ojillos de Eloísa.

Sos tierna, sos amorosa. Huracán de piel por vos.

Huracán de espejismos.

Amada Rumorosa

Eloísa, la cuadratura de Júpiter radica en vos.

Amada, Sofía

PandeAmatista, sos un arrebol de tiernas épocas.

Perímetro de invierno.En vuestra DulceAlmohada

Hallarás joyas dulcísimas por vuestro destino.

Sol estival de Mayo.

Un veinte y ocho en vuestro jardín

De anís. Feliz cumpleaños.

 

Cuerpo Celeste

Amada y rutilante fantasía de amor.

Sos mi regalo ardiente procurado por Padre.

Sos Eloísa, veintitrés años,

A mi diestra quemadura irreal.

Yo te podría amar locamente,

Te podría condenar a esclavitud.

Acércate.

Y procura mantenerte en silencio.

Estoy pensando en la manera correcta de azotarte.

Amor habrá, es verdad, amor infantil.

Estoy escribiendo un cuento para vos.

Una esclava árabe sos en país cristiano.

Te reconfortas.

Yo también, de cierta manera, me esclavizo.

Padre ha profetizado.

Nos amaremos y nos aparearemos libremente.

Padre, me refugio en vos.

Padre, me atormentas con vuestro canto.

Padre, que se cumpla lo prometido,

Padre, irradia con vuestra luz.

Padre…

 

Amor Vulval

He decidido ser humano, fui nostálgico, rústico poeta vidente.

He decidido amar vulvalmente a mi amado lirio.

Ah, que regias formas conteniendo lo fluvial.

A nuestro creador convoco, lentamente, ya que soy búdico.

He amado el crisol hembril, he delirado con el tornasol.

Ah, qué regia espalda yámbica, la torcaz hembra delira.

Lentitud en los movimientos, os aseguro manjar de amor.

La mujer ha conformado de forma ingenua su delirio.

Cortes de piel en vuestros labios, la genitalidad mal entendida.

Buda ha amado la rectitud del respirar.

¡Machos!, os propongo seguidme, yo deliro pero lentamente.

Respirando, ahogándonos, con fiereza vulval.

Adiós, estoy harto de los textos.

Amaré a mi Musa Barcelonesa.

Por un oportuno trabajo de hombre.

Libro Tercero

Almendra Rumorosa

Canción de Amor Celeste

Nube de Ensueño

Almendra Rumorosa, recibe mis deseos, veintitrés años.

Almendra Rumorosa, querida, desde el presente al futuro.

Yo no te conozco pero sé que infantilmente me amará.

Almendra Rumorosa, convoco palabras para amarte,

Somos pioneros del futuro, somos árbol de nuestra vida.

Almendra Rumorosa, carismática,

Yo soy eterno. Y por vos no envejezco.

La vida es bellísima en alta frecuencia; la vida es amor.

Dejaré mis cosas por vuestra impertinente desvanecer en amor,

Partiré a París, a Barcelona, a Buenos Aires.

Yo te amo pues Padre nos ha iluminado.

Yo te deseo pues Padre nos ha conformado.

Luz de atardecer, espectro lumínico, vuestro nombre

Desconozco.

Compréndeme, tengo cuarenta y dos años;

El amor hechicero será.

Almendra Rumorosa, veintitrés años;

Por vos evito la mácula del invierno.

Serás mi caballeriza con mil corceles dispuestos al amor;

Serás en mi fértil vida la encantada doncellita;

Serán arrojo de héroes, serás mi eternidad.

Acompáñame, Almendra Rumorosa;

Por vos los oráculos son del Padre.

 

Fantasmal Amor

Cuarenta y dos años tengo y he contenido visiones:

Lenguas de hembras que arden, lenguas que me nombran.

Soy un poeta vidente, diez años, diez siglos llevo de malquerer.

Te acaricio desde mi remota antigüedad,

Sos mi Almendra Rumorosa raptada

En Trolla.

Sos de mi pertenencia ya que yo invadí Troya.

Denuncio a los hipócritas por tanto.

Yo te desposaré, serás eterna de dulces rumorosos.

Yo te escribiré poemas invocando amor eterno.

Yo te esclavizo pues soy amante impertinente.

Yo te idolatro, yo te libero, pues soy Uribe, el pendenciero.

Almendra Rumorosa, escuchadme calladamente,

Yo soy un poeta vejo pero enamorado.

Yo vivo rodeado de fantasmas, vivo rodeado de seres espirituales.

Nuestro Padre ha murmurado: "Bella eres como arrecife".

Diez años esperando por vos;

Diez lustros amándote a escondidas.

Pronto, muy pronto sabrás de mí…

 

Similitud

Veo las cosas tal como son, las observo incandescentes:

Almendra Rumorosa es dual; racional y Afrodita.

Me explico:

Ella estudia; pero rutinariamente se entrega en amor.

Estoy conforme:

El deseo nos provoca senectud.

Estalla todos los días;

Una flor estalla

En el pecho de Almendra

Rumorosa.

Amores he tenido; y muchos:

Mujeres insatisfechas que han gozado de mí.

Mujeres adultas, mujeres cándidas, mujeres rosadas.

Entre tanto amor

Supe distinguir un rosal de un eucalipto.

Yo soy un jardinero

Tántrico;

La lentitud de mis movimientos

Corona a mi reina demagoga.

¡Sibila sos!; pero también mandrágora; ¡musa celeste!, ¡sílfide!

Los seres mitológicos se reúnen en vos para adorarme;

Yo soy el arquetipo del buenamante; soy quimera de nostalgia.

No abuses, Almendra Rumorosa,

Te idolatro; pero como corsario en tempestad.

 

Adoración

Yo te he hallado en un paraje fantasmal,

Te he encontrado refugiada en los libros.

Hablamos necedades, me reconoces, te avergüenzas.

-¿Qué nombre tienes?

-Almendra Rumorosa.

Yo me sorprendo.

-Entonces tienes veintitrés años.

Almendra Rumorosa, boquiabierta, se desnuda.

Yo he hallado la vulva, purísima, latiendo febril.

-¿Eres virgen?

-Lo soy.

Almendra Rumorosa, veintitrés años, te conozco por fin.

 

Misticidad

Flor de estremecimiento, yo te invoco, ¡flor de anís!

Sos mi madura niña con zapatos de espuma, vagando.

Yo te encuentro perfecta, de tul y de cachemira, vagando.

Sabrás que te espero desde nunca pero te encuentro en el desierto.

¡Flor de anís!, ¡flor de mediodía!

Alumbras la tierra con tu perfección, vagando.

Alumbras Barcelonesa con tu sonrisa, yo sabré amarte y protegerte.

Vagando estamos en esta tierra, ¡anís!, ya lo he dicho, sos

Perfecta. Habita el Altísimo en vos, habita amándonos.

Te daré mi corazón, te daré mis días postreros, te daré luminosidad.

Incapaz soy de alejarme de vuestra sombra, sos mi compañera.

Vagando estamos en septiembre, vagando, pero te has enamorado,

Eres totalmente virgen. Yo soy totalmente tuyo; soy

Tu poeta.

 

Noche Nupcial

Almendra Rumorosa, toco tu frente, estás nerviosa, somos amantes,

Te desnudo, tú tiemblas, eres pura, eres santa.

Recorro con mis manos tus posaderas, tiritas, yo ardo.

Murmuro: "Padre habita este lecho, somos santos".

Me besas desesperadamente: "He soñado con vos, hazme mujer".

Temblando yo, beso cada partícula vuestra. Acabas raudamente.

Una y otra vez. Yo, sonriente, te pido explicaciones.

Vos vibras. "Penétrame, qué me deshago".

Nos entrelazamos. Yo apenas presiono para no dañarte.

Hay sangre de virgen, pero no dolor.

"Almendra Rumorosa, eres ahora completamente mía".

Llanto; llanto de Almendra Rumorosa; purísima…

 

Pureza

Yo te encuentro prístina, eres Almendra Rumorosa,

Nos refugiamos bajo la alfombra, cantando,

Somos felices.

"Almendra Rumorosa, respeta mis años, ¿quieres?;

Que yo respetaré vuestra letanía".

Un ramo de copihue para vos; rectitud,

Pureza, sobriedad. Yo te adoro desde Chile a Barcelona.

Vos son una niña y yo un poeta vidente (te conozco).

Padre me murmura secretos vuestros.

Nada me puedes ocultar. Acurrúcate;

Esta noche dormiremos bajo las raíces de los árboles.

Un cuento de hada te contaré; romances, templanzas.

Habitas en mi corazón estoicamente.

Esperando por ti, esperando que crezcas.

Flor de Atacama, flor del desierto,

Yo soy el cántaro de agua qué fertiliza.

Habrá un tiempo para amarnos por la eternidad.

Lujuria

Almendra Amadora

Sensación

Vulva de Almendra Rumorosa, su vulva es alba:

Encuentro ángeles en ella. De madrugada, pensando,

Esperando por Almendra Rumorosa. Yo ardo como un combatiente.

Los senos son casquetes de guerra, pólvora hay en mí.

Gritando consignas nos revolcamos, amantes somos.

Esta muchacha me matará.

"Eres el poeta de Chile. Sé hombre".

Yo desvanezco, empujo hasta la matriz y deshago y convoco

Estrellas. Almendra Rumorosa aúlla: "¡Te amo, Mauricio!"

Vulva bellísima, beso y contraataco hasta exterminar

La paciencia de mi hembra.

Su juventud es para mi solaz encuentro.

"Está bien, haremos el amor de madrugada".

Almendra canta con nostalgia canciones de guerra.

"Amándonos somos en esta tierra bravía".

Su voz es infantil pero su cuerpo…

Poderoso.

Almendra Rumorosa, veintitrés años.

 

Verbo

Tu espalda es como un verbo en transición,

Yo muerdo vuestro adjetivo y te socavo.

Para vos es una sorpresa. Duele, es verdad,

Pero te dejas guiar por la matriz corporal.

Verbo espalda, cabalgando, verbo desbocado.

"¿Está prohibido esto?", me preguntas.

"Nada entre amos es pecado".

Vos comprendes, que verbo amar es perfecto.

Los holocaustos son en vos. Lentamente empujo

Para no desgarrar. "Ahora eres totalmente santa".

Rezo al Padre por vuestras entrañas. Rezo.

Y acabas recitando mis poemas proféticos.

Verbo espalda, verbo amar.

Una leve quejumbre escucho cuando acabas.

 

Sinceridad

Soy para vos tu primer hombre.

Pero vos para mí eres…

Multitud.

Muchas almas he conocido…

Yo te daré mi semen hasta que muera.

Te daré mis escrotos hasta que muera.

Te daré mi saliva hasta que muera.

Flor de Atacama, de Chile provengo.

Una tierra árida y boscosa, tierra de maremotos;

Las olas son en mí, ya sabes, soy un amante sigiloso.

Amo vuestra espalda, amo vuestro pubis, amo vuestras cejas.

Te daría todo mi ser, te daría mi amada vida.

Haz de mí un esclavo, yo tengo guirnaldas para vos.

Bebe, toca, goza, desmaterialízate.

Coge mis pergaminos: espermios, eso tienes en tu alma.

Espermios de Mauricio Uribe; espermio que fertilizan

Vuestra existencia. Yo te descubrí. Diez años llevo esperándote.

Almendra Rumorosa: nada es pecado, las sustancias corporales son divinas.

Si deseas amarme, desnúdate, un hijo habrá entre amos.

La dulzura de amarte vulvalmente es divina.

 

Maravilloso

Maravillosos son mis espermios para ti.

Maravillosos son los hijos en ti.

Almendra Rumorosa, yo convoco a los bosques frugales,

Convoco los ríos eternos; mi espermios son frugales.

Te daría la eternidad por socavarte

Como la madre tierra socava nuestras conciencias.

Te daría las estrellas distantes por amarte.

Yo espero por vos. Hermosa eres. Te daré mis espermios.

Selecta materia humana, selecta ambrosía.

Me cuido para vos.

Oh, calentura al máximo brotando y participando del volcán.

Oh, calentura mixtura de carne y celofán.

Oh, diapasón de mis escrotos, aúllo por amarte.

Almendra Rumorosa, por favor, no me abandones, todo tuyo soy.

Almendra Rumorosa, estoy exhausto.

Diez años es mucho tiempo esperando por vos.

Ámame, recuerda que soy un poeta austral.

Ámame. Estallo como el universo en un gigantesco big bang.

Estallo como una cometa deshaciéndose en llanto.

No me abandone; huye de mí, huye.

Mis espectros son mis espermios en Andrómeda.

 

Luciérnaga

Ámame en la rueda de Caos en la que nos conformamos.

Ámame en París con aguacero pensando en Rubén Darío.

Ámame delicadamente en lunas de percal con sabor a vos.

Sos mi Dulcinea de Barcelona cubriéndome de besos.

Sos Almendra Rumorosa, veintitrés años, en fornicio con poeta maduro.

Yo te amo, te llevo encriptada en mi alma; Padre así lo desea.

Te llevaré a mi mundo: tocatas, poemas, novelas, videncia.

Yo soy tu hombre que te llevará al altar en Roma precedido por el Papa.

Yo tengo cuarenta y dos años y te daré mi experiencia varonil.

Espérame, no te entregues a los roedores. Espérame virgen.

Padre nos ha enamorado desde la matriz misma de la creación.

Habita el Creador en ti pues yo habito en vos.

 

Celestina Amorosa

Tú me das lo que veinte mujeres pudieron.

Tú me entregas lo que cien mujeres pudieron.

Te alabo virginalmente lo que vos solamente me has dado.

Almendra Rumorosa, dulce néctar de mi madurez,

Porfía mi adolescencia por estar con vos.

Sos lapidaria en demostrarme rebeldía;

Por vos el mundo concibe lo sensual.

Camina erguida, camina de la mano.

Llegaremos a casa y te desnudarás:

El Monte de Venus es singularmente suave;

Delicados labios, rosada carne en desnudez.

Yo practico las más tiernas caricias.

Te doy mi vida porque mi vida está en tus manos.

Espermios hay por millones en tu interioridad femenina.

Vos aulláis proféticos poemas amatorios; aulláis de placer;

En cambio yo, estoy triste, abandono a Eloisa.

Padre nos ha dado este momento de tristeza, pero Padre me ha mandado amarte.

 

Anunciación

Vos sos mi ángel terrenal: posees unas curvas perfectas;

Senos maravillosos, cintura de luna transversal,

Perfectos labios, nariz curvada por oriente, nalgas en ti besadoras.

Te he mordisqueado el trasero como Neruda mordisqueaba sus albóndigas

(Es irrisorio esto, ya lo sé; pero quisiera devorarte).

Almendra Rumorosa Siempre Viva en mi memoria; eres perfecta; bilingüe;

Hablas con los ángeles mientras yo hablo con Padre.

Somos amantes, es cierto, pero pronto te desposaré;

En luna llena, bajo los Montes del Vaivén.

Vos sos maravillosa, sos la más bella de Barcelona.

Yo te poseo en casa de tus padres, en tu cama adolescente;

Vos sabrás que tengo mala reputación; pero son rumores;

Yo soy un hombre de Padre; y vos sos mi esclava;

De este modo, se cumplen las profecías; vos serás mía;

Absolutamente nuestra.

 

Ángel Mío

Vos sos mi adorada estudiante que vagabundea por Barcelona.

Amas mis poemas orgiásticos pero no imaginas que por vos son.

Te recuestas a comprender y un rayo de luna te ennoblece.

Almendra Rumorosa bienamada, daría mi vida por vos, daría mi ser.

En eternas conversaciones esperas pacientemente que se cumplan las Escrituras.

No eres mística pero hallas dulzura y cercanía en mis poemas.

Yo te digo: "Vos sos Almendra Rumorosa, vos me perteneces".

Almendra Rumorosa enfurece. "¿Quién sos vos?"

—Uribe, el escritor.

Dulce niña, vuestros labios enternecen. Sos mi gajo de uva delirando.

"¡Ámame!, ¡ámame!"; los amigos gritan en delirio.

Almendra Rumorosa me abraza. "Vos sos mi enamorada, Padre es nuestro testigo".

Estas cosas sucederán…

 

Tiempo de amar

Almendra Rumorosa, vos sos mi querida, en hoteles, en penumbras.

Vos sos una niña, yo soy un riachuelo; quiero abrasaros.

La serpentina cola de un gorrión es vuestro canto;

Sos inmensamente hermosa como un eclipse.

Yo os adoro desde la punta de la cutícula hasta vuestras dendritas;

Nada os deben los que murmuran; yo soy Uribe,

Vos sos Almendra Rumorosa de Uribe;

Los poemas que te conté te maravillaron pero es voluntad del Padre.

Fervientes hojas como Eva cubren vuestro cuerpo; Adán soy yo.

Edén es nuestro apartamento en las afueras de…

¡Edén!, ah, vos sos mi adorable serpiente.

 

Amor

Almendra Rumorosa, ¿me amarás?, ¿gozarás de mis sentidos?

Yo te he amado porque el Padre me envía a vos.

Sé que, de costado, te hallaré pensando en mí.

Me conoces y te conozco desde tiempo inmemorial.

La trampa de la edad no nos separa:

Vos tenéis veintitrés y yo cuarenta y dos.

Escribo para una generación futura.

Los días y las noches son eternos; sin ti nada es eterno.

En ti, el Padre ha conjugado la palabra amor;

Por vos, el Eterno ha conjugado la palabra amar.

Yo te conozco como quien conoce al mundo;

Yo te deseo como quien ama al mundo.

Amor y profecía; soledad y estío;

Alondra eres; de mi madrigal; de mi vida; de mi covacha.

No esperes por mí; ya que nada nos puede separar.

 

Cortejo Amoroso

Alondra Almendra Rumorosa, por vos el poeta ha cantado

Infinitamente emocionado,

Por vos el profeta ha declarado infinitamente inspirado,

Por vos somos testigos los ángeles, los arcángeles, los querubines,

Por vos el universo es vasto como un acertijo o como un ruiseñor.

Yo te adoro con la frente empapada en sudor, yo te imploro armonía.

Alondra Almendra Rumorosa, vos sos mi inspiración: yo hablo con Padre;

Por vos la vida es enhiesta, por vos la vida es pasajera.

Alondra Ardiente, espero no ofender vuestras tradiciones,

Pero yo busco una virgen que en la cama me sorprenda

Como quien es sorprendido en la selva por tigre asesino;

Vos sos mi tigresa, yo seré la presa devorada.

Aprende de mis colmillos; sos mi adorable Rocío.

 

Mirada Inquieta

Yo te amo porque sos mi alma errante,

Yo te amo por que sos mi Almendra Rumorosa errante,

Yo te adoro porque vos sos fuego, aire, tempestad.

Me animo a contenerte y a presagiar amor total.

Yo me comprometo con vos por que yo soy de vos.

Amantes seremos como estrellas distantes.

Yo te amo porque vos sos una galaxia durmiente.

Me despierto y hallo ojos azules y verdes y rosas.

En vos todas las mujeres han inclinando sus ojos.

Eres tan bella, tan dulce, tan abismal.

Almendra Rumorosa Dulcinea, vos sos mi adorada carne.

 

Dulce Amor

Yo te amo siempre, te deseo siempre, me comprometo

A amarte. Almendra Rumorosa Siempre Viva: Alondra de Europa.

Me comprometo a regalonearte en virtud de tu amor.

Te he encontrado esperando por las golondrinas,

Te he deseado por siempre en agonía de los amantes.

Sos mi dulzura ante todo cuan bella eres.

Sos mi aroma de amor en quinquenios.

Sutil hembra de colorido aspecto. Sos mi adoradora.

He amado a Almendra Rumorosa a cada instante en profecías.

He amado siempre con dolor de amor por amarte.

Almendra Rumorosa, amada, por vos los poetas cantarán.

Por vos, las estrellas danzarán.

He deseado tu dulzura en caderas preñadoras.

He deseado amarte por siempre.

Dulce néctar de amor… sos mi amante.

 

Amantes

He vivido para amarte, he vivido.

Yo soy Uribe, vos sos Almendra Rumorosa.

He vivido dulzuras, he vivido ansiedades.

Amantes somos desde tiempos paganos.

Yo, adorado era, por mis mujeres;

Vos me has quitado el paganismo.

Mujer de anchas caderas, mujer de mármol.

Vos tenéis veintitrés años y posees la vastedad de Andrómeda.

Te amo porque perteneces a mi sangre,

Te amo porque me adoras:

En silencio, en despertar, en otoño, en primavera, en juventud.

Yo he deseado amarte, he deseado poseerte,

Te contemplas en un espejo para adormecerte.

Poeta soy pero también hombre de Padre;

Amantes somos; escrito está en el Paraíso tu nombre.

Almendra Rumorosa de Uribe, vos no comprendes como yo te comprendo.

He profetizado por vos el amor inmaterial del Padre.

 

Amándonos

Yo era para ti un extraño pero tú para mí eras Almendra Rumorosa.

No es tu nombre, vos te llamas… Dulzura, Amor, Jovialidad.

Todos estos nombres tienes. Te llamas Espiritualidad.

Querida y refinada Almendra Rumorosa, amantes somos por la eternidad.

Yo he buscado en libros de linotipia, he buscado en Bangladesh.

Amo tu dulzura, eres maravillosamente espiritual:

Tus caderas son mías, tus senos juveniles son mío, tu tórax es mío;

Desde el Mar del Plata hasta el río Mapocho: toda eres mía;

No te escondes, yo tampoco te busco; Padre es quien nos guía.

Quitaré tu corsé en casa propia, quitaré las llagas en casa vuestra.

De cada instante, el menos melodramático es el bullir;

De los aspectos esenciales, la vida; yo te poseo mientras murmuras:

"Una eternidad esperando por vos; una eternidad, amado Uribe".

Las siluetas en la diestra son vuestro festín.

Festín de Amor

Almendra Rumorosa

Tentación

Yo te amo desde mis cuarenta años.

Por revelación supe que mía entre tantas serías.

Hasta el límite de mis cien años.

Yo te amo pero no olvido a Luz de Sofía;

Acompañado estoy de su fantasma.

Amándonos a escondidas, amándonos de lunes a domingo, por escondrijos;

Toda España me conoce; cómo no reconocerte entre un millar.

A devoción os pido clemencia por nuestros besos.

Almendra Rumorosa, ruiseñor, canto humano para un ánima;

Por vos yo he resucitado de entre los profetas; por vos

Amo a Padre; que todo lo enluta por satisfacerme;

Yo estoy predicando amor en vos y en vuestras caderas;

Apenas puedo contenerme ya que amor y vicio son condenatorios.

Tu cuerpo es sagrado como un sudario; tu cuerpo es mi comarca.

Yo abrazaré a Almendra Rumorosa desde sus tiernos años hasta la senectud;

En vos seré poeta y profeta y santo amador.

No te enojes conmigo pero amor y odio no son en mí; Amor, nada más.

Aplicada eres entre las mujeres; idiomas aprendes para murmurarme: "amor".

Yo sé que me amas porque Padre así lo ha decretado; Padre es nuestro padrino.

Cien veces te explicaré: te conozco desde siempre; y en primavera.

 

Primavera de Marzo

Yo te convoco en Europa estando en América.

Yo te nombro con mis deseos de eternidad.

Canto del viudo en viudez sin muerte ni cortejo.

Yo te convoco desde Chile. Vos sos mi adorable Almendra Rumorosa.

La lluvia ha comenzado, la lluvia de otoño.

Mundos paralelos pero opuestos. Vos sos mi entrañable Almendra Rumorosa.

Yo haría con vos un jardín de abetos cantando, cantando.

Precisas de amor ¿Almendra Rumorosa?, precisas de mis ¿entrañas?

Dormirás en París en años venideros mientras yo escribo

Arte profética. Dos siglos amándonos. Yo viviré cien años y algo.

Seré fértil como un río inmenso que no colma la sed.

Amarnos y regocijarnos en virtud de un mandato divino:

«Vos, Hijo, seréis amado y vilipendiado pero adorado por vuestra hembra

Adolescente. Vos sos mi heredero».

Yo canto armonías con Padre; vos, amada, sos mi iris turquesa.

 

Añoranza

Veo que tu semblante es triste, veo que huyes, veo que amas.

Yo te traigo alegría, te traigo sensualidad.

Me amas porque yo soy vuestro poeta.

Me amas en esta galaxia muriente.

Padre es nuestro testigo. Nada malo hay en vos.

No estés triste entonces. Yo te doy mi vida, mi sangre.

Apuesto los lirios de Dinamarca por hallarte desnuda.

Doy los lirios de Sudamérica por amarte.

Nada nos contendrá si vos no me aceptas tal cual soy:

Con deseos de hombre, con clarividencias de profeta.

No huya, no corras, no llores, no me implores.

Yo te amo, yo soy Uribe, vos sos Almendra Rumorosa.

¿Importantes los designios?; pues sí;

El designio de Padre es amarnos.

Yo te amo; yo te deseo.

Habrá tiempo para conocernos.

Adorada, pusilánime, temerosa, pequeña.

 

Leyenda

Mis dedos son hábiles: tocan la sustancia y estallan vuestros sentidos.

Mi boca es hábil: yo te susurro por amarte, por desearte felicidad.

Almendra Rumorosa, por mí, vos has abandonado el abecedario; has recaído

En Cerdeña, has vivenciado el amor en tórridos encuentros.

Yo siempre soy un río, pero un río americano.

La cadencia de vuestra vestimenta: francesa española de cuño;

He amado los carruajes de la aristocracia como pulpos:

Vos sos mi condesa estudiante.

He delirado esperando que crezcas; tan niña eres.

Dulce panal de abeja, los amores nos convocan en Padre;

Los deseos nos convocan en Almendra Rumorosa. Abeja, vos sos impenetrable.

Habrá dolor, es necesario; todos los puntos cardinales

Conjugan en vos el mundo. Sos el universo en dispersión.

Amada, no me juzgues, no me implores, seré yo, vuestro duque.

Aristócratas del amor; la rancia alcurnia proyectada por Padre.

Te amo; y no hallo palabras por definirte; fuerte aliento a pétalos,

Aroma a rosas entre los dedos, cactus en tu lengua.

Mía, mía serás, por siempre.

Doy fe de que eres bella; tengo una fotografía vuestra; en celofán.

 

Adiós

Sempiterna amada, yo te consuelo deseándote paz.

Almendra, siempre joven, vos sos mi amada esposa;

Lo serás, más bien; Padre lo ha decretado…

Como si el mundo estallara y nada nos contuviera.

Amor de poemas y de caderas y de cuerpos ardorosos.

Siempre serás mi adolescente, en víspera de amar;

Por vos hay un estallido cuántico en exóticos parajes estelares;

Por vos una súper nova se contrae y forma pétalos de estrellas;

Las galaxias deberían tener tu encanto;

Ya que vos sos un cometa en mi mundo.

No te afanes en añorarme; esta es una dedicatoria;

La luna ha horadado vuestra diadema, la luna sos vos.

Yo estoy despierto; huyo por las noches a tu planeta.

En Barcelona las horas transcurren; pero yo soy quien te sorprende;

Habrá cien mil millones de segundo entre tú y yo;

Habrá un cometa errante. Acuéstate a dormir junto a mi pecho;

Estallan los aerolitos en esta despedida.

Blanca sos de caderas y de deseosas manos.

Cantos humanos

Amor y Esperanza

Amor Enamorado

Yo amo al mundo, amo sus contornos, amo a Eloísa pues Eloísa es humana.

Las sílfides caminan a su trabajo, mi Eloísa es obrera, rauda, enigmática.

Eloísa Luz de Sofía, mi amada, yo comparto años con su presencia tutelar;

Sos mi enamorada, mi dulce mujer. Yo te contagio de alegría.

Eloísa me ama pues yo soy el mundo en su pupila.

Sé que exagero, sé que hay mil culturas, pero todas me conocen

Pues soy como las estrellas. A vos dejo un papel escrito en una botella:

«Amarte con devoción, con ansia, con fineza».

Imploro por el mundo porque el mundo implora piedad.

Tantas gentes reunidas en este planeta.

Las hay chinas, vascas, ecuatorianas; las hay rubias, morenas, altas y bajas;

Yo me compadezco de las estrellas, ya que todos los enamorados se compadecen de mí.

Yo soy la estrella distante del sur del confín, soy el poeta.

Amar y desamar, condolerse y amarse en prontitud de cometa.

Por vosotros, el mundo gira, ya que el amor nos hermana.

Una fruta prohibida has de comer en sábado.

 

Eloísa Amada

Amor eres amor, dulzura,

He amado las estrellas y a vos en vespertina,

En ayuno, en agonía,

He amado a Eloísa porque yo soy poeta.

Amor en nocturno, amor entre adolescentes.

Eloísa es mi amada Luz, con escarnio de amor.

Seremos ángeles en esta vida ya que nos une el corazón.

Sutil hembra que me abraza, sutil, belleza.

Los abanicos son por vos, abanicos celestiales.

El Padre nos bendice ya que no poseemos carne.

Yo te toco y encuentro nada más que aire.

Yo te amo desesperadamente en los aires.

Sé tú mi adorada emperatriz en un imperio de besos,

Sé tú mi adorada extranjera en una tierra inhóspita.

Yo te abrazo y te cubro de anhelos; yo soy tu poeta.

Habrá tiempo para la esperanza ya que vos sos mi dulzura.

Ámame. Confianza es lo que nos pide el Padre;

Confianza en los deseos, confianza en las rosas que hay en tu jardín.

Vos tenéis un huerto; yo os deseo paz.

 

Dulzura de Eloísa

Yo he amado a la raza humana porque Eloísa es humana.

Yo he amado las piedras del planeta porque Eloísa ama las piedras.

Yo he amado los destellos de sol porque Eloísa es un sol.

Tiernas palabras, siempre estás en mí ya que sordo soy de otras mujeres.

Me amas a pesar de que infiel seré. ¿Me contradigo?

Estos poemas son secretos.

Oh, amada, oh, desolación, seréis mi vida por siempre, seréis

Mi luz. Adormecida estás entre galaxias. Bella entre las bellas.

Querida Eloísa Luz de Sofía, por vos yo soy poeta, por vos

He hallado témpanos de hielo en Atacama, el desierto.

Seremos primordialmente amor. Hay vastos acertijos esperando

A que yo aprendan latín y griego; sólo pronuncio tu nombre

Y ya me creo sabio entre los reyes. Yo soy un poeta

Y escucho al Padre; pero es por vos por quien muero.

Lamentos hay en esta tierra. Nos unimos por el Padre hasta el fin.

 

Sofía, la bienamada

Yo te he llevado a mundos hermosos:

Has copulado en mí con ángeles.

Yo conozco cada segmento tuyo de carne:

Cada entidad amorosa gustadora en clímax.

He deseado amarte por siempre.

El Padre sin embargo me ordena partir.

Luz de eternidad, Luz de amanecer.

Yo pronuncio tu nombre; aúllo, grito;

En parajes extraños nos amamos;

Invento cuentos donde sos mi amada princesa;

Invento canciones donde sos mi dulce amada.

Estos cantos son a tu sensualidad, a tu belleza;

Nada hay en el mundo más tierno;

Yo sé que eres eléctrica pero esta electricidad yo la devoro;

Te acuestas en fornicio con un poeta;

Yo he madurado cada gemido vuestro en mi palestra.

No te pinto ni te esculpo; te toco; y tu matriz es conquistada;

Amanecemos adoloridos; de luna a sol;

No tengo piedad con las rosas; ni de costado, ni decúbito.

 

A tu Feminidad

Yo te imploro escucharme:

Cuando desnuda te veo yo enloquezco.

Curvada, de grandes senos, pubis rubio.

Yo te imploro permitirme acariciarte:

Desde la cintura hasta la espalda; toda eres

De ámbar.

Yo he besado a muchas mujeres; las he copulado;

Todas han temido. No pronunciaré palabras.

Como un mástil que de pronto irrumpe.

Jamás he sangrado a una virgen; delicado soy.

Mis manos son expertas, relajan la espalda, los glúteos.

Yo doy testimonio por boca de Eloísa;

Podría nombrar a diez doncellas; todas ellas

Mías.

¿Cómo no recordarme de Angelina?

¿Cómo no bendecidme Rumorosa Adolescente?

María, Ernestina, Mariela, Sofía;

Vosotras habéis probado el líquido qué fluye del mar.

oro las caras de sorpresa. Soy vidente y amante singular.

 

Dulce Amor en Ti

Yo te amo porque sos mi adoradora flor de invierno.

Yo te consagro cada noche en nuestro lecho de rosas.

Me amas porque desconoces la palabra infundio,

Desconoces lo descortés de ciertas personas.

Yo te adoro de pies a cabeza como un corcel,

Te deseo eternamente con mis ansias de eternidad,

Amo el mundo pues vos sos del mundo,

Te petrifico en cada instante; yo pienso en vos, sos mi adoradora.

Intervalos de permanente delirio, yo he amado hasta no perderme,

Yo he gozado con aromas fértiles de principio y fin,

He buscado amarte y disolverme en la materia,

Vos sos la materia: Padre estalla en vuestra alma.

Conjurado los deseos de esperanza, hallamos amor,

Esperanzado en la vida, he deseado ser vuestro caballero andante.

No me niegas la eternidad; prostérnate; yo soy… poeta.

Un beso brutal hasta extasiarnos y diseminarnos sin fin.

 

Beso de Amor

Deseo amarte, deseo sincerarme,

Yo he perdido el amor por la carne,

He perdido la consistencia en vuestra carne.

Te amo inmaterialmente cabalgando en lecho de rosas.

Deseo sincerarme, caminar con vuestro espectro:

Caderas otoñales, senos maravillosamente virginales.

Vos, Eloísa, sos un riachuelo que transmigra

Desde mi tórax hasta mis rodillas.

Lindas son vuestras piernas, haced de mí un aroma

A campo nevado. Cada copo es vuestra conciencia amándome.

No ceses en desearme: yo me desnudo de la clavícula al pensamiento.

Si hombre soy es por vos.

Arraigado estoy en tierra fértil:

Vos sos la pradera donde el rinoceronte pasta.

¿Me amarás por siempre?

Yo estoy seguro: jamás te olvidaré.

 

Luna de Ensueño

Yo te invoco desde un espejo dual:

Hombre y espíritu, amor y carnalidad.

Yo te convoco desde Alaska hasta El Tamarugal.

Doncella de Chile, sos mi duquesaobrera, sos

Mi enterramiento en fósiles humanos.

Vos serás eterna. Hombres cultos habrá siempre;

Te recordarán.

Luz, Sofía, bienamada.

La luna se ciña a vuestra cintura, la luna

Es horadada por nuestros encuentros.

Amor en la cornisa de la locura, amor

En San Petersburgo.

Oriundos somos de Santiago,

Pero nuestro amor renacerá en Europa.

Yo colindo el universo en vuestras manos:

Son tersas, lumínica, caspias.

Yo procedo de Chile pero mi nacionalidad es

Ensoñación.

Nadie comprende la eternidad: cinco años llevamos

Pero los lustros nos contendrán. ¿Olvidas acaso mis poemas?

Son proféticos, ciertamente, no temas; el Padre nos contendrá.

Quince años nos amaremos por doquier en jardín del Edén.

 

Duelo por Eloísa

Ha muerto mi amada; le lloro; me habla desde el Cielo.

Cuida mis flores, que tanto amor tuvieron para mí.

Ha muerto mi amada Eloísa. Yo no sé qué hacer.

Ella me habla desde el Paraíso, habla sin cesar.

Yo quiero estar en calma, me siento solo.

—Eloísa, has muerto, y nuestro huerto se ha marchitado.

—Mauricio, hay un rosa aquí con cuatro esposas. Quiero ser la quinta.

Eloísa divaga con mis enamoradas inmortales.

Yo estoy abatido; llorar es de hombre.

Eloísa, Eloísa, ¿por qué me has abandonado?

El Padre se apiada de mí. Huyo a Madrid.

Estoy solo; una gota de rocío del Paraíso orada mis mejillas;

Al fin, Eloísa ha comprendido.

Canto a mi Amada Compañera

Sinfonía Amorosa

Amor y decepción

Árbol de tul, silueta esmaltada, vagancia.

Hemos caminado por el parque, las flores, el musgo.

Siluetas hay variopintas: un huemul, un águila, un león.

¿Hemos acaso inventado los peligros de la selva en nuestras andanzas?

Anís es el sabor de tu pubis, anís acaramelado.

Yo vivo rodeado de árboles, pero eres tan sólo un recuerdo.

Es tan corto el amor esta es mi decepción.

Certidumbre de amar en tránsito.

 

Fin de Amor

Yo te amaba. Te regaloneaba, en el parque,

En las playas solitarias. Yo te amaba.

Busco comprender la vida

Sin ti. Busco amarte

Una eternidad.

Yo soy poeta; vos fuiste mi amada.

Luna de mayo. Eres purísima, casta, sentimental.

Te digo adiós. He hallado puertos vírgenes, tierra

De semental. Te amo, es cierto, pero…

Dulce mía eres, en agonía celeste. Dulce eres.

Yo he deseado otros cuerpos, soy

Infiel. ¿Me perdonas?

Te amaré siempre. Búscame. Hay un limonero

Esperando por ti.

En mayo estás de cumpleaños. ¿Me invitas?

Te deseo buen sexo bajo mis pies;

En mayo, en fin de mundo.

 

Eternidad en tus ojos

Amada, idolatrada, deseada, vuestros

Ojos son diademas de Paraíso celestial.

Vos son una aparición, sos un ángel.

He deseado amarte sencillamente

Desde tu mirada; eres tornasol en vuestro iris.

La constelación es lumínica. Amor y deseo, volcán.

Estallas en mis brazos (yo sé que tienes mal carácter).

Ínfimos besos en la cama; de costado estás;

Yo te clavo en madero de esperanza, te clavo las manos.

Sangras. Me arrastro devotamente. Eres mi idolatría.

Canto emocionadamente. Virgen mía, de costado.

Huyo por Edén gritando tu nombre.

 

Habitación Cerrada

Las paredes son esmeraldas:

Cubículo de pasión. Te deseo

En estas cuatro paredes

El mar.

De soslayo, eres espuma.

Las paredes son exterminadas.

Estamos al desnudo.

A lo lejos, las esmeraldas de estrellas.

Tus ojos son

Esmeraldas.

Dadme de comer

Estrellas; tu vientre es

Una estrella.

Dadme de beber

Espuma;

Tu lengua es

De espuma.

¿Cómo no comprenderte?

¿Cómo no amarte?

Deseosa eres por fin.

 

Agonía de Amor

Celeste

Amanecer.

Celeste

Contención de amor.

Celeste

Vendetta.

Celestes

Partes: 1, 2, 3, 4, 5, 6
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