- El espacio arquitectónico
- La teoría
- La propia encomienda o tema sugerido
- La teoría aplicada al espacio moderno
- Conclusiones
Buenos días.
Quisiera antes de encausarme en la problemática de un objeto concreto, hacer unas salvedades si se me permite a modo de嬠digamos嬠exhortación, exordio, o reclamo.
En el encabezado del TP que les he compartido en la inscripción, en el pequeño llamado a mis colegas docentes, señala en forma de cita inicial, lo siguiente:
"堭uchos repiten lo dicho casi hasta hacerse inaudible y
nosotros debemos decir algo diferente, no dicho, callado.
Estamos en condiciones?…,
y esa me parece ser la cuestión, el "estar en condiciones", "el modo de estar en condiciones", la manera en que planteamos encarar "los dichos" de esta nueva materia que viene a reparar o al menos transitoriamente, a suplir falencias que otras cursadas no han podido resolver.
A lo largo de los estos últimos 30 años, la Facultad, los docentes, los dichos y la maneras de apropiarse del conocimiento nos han traído al estadio actual, a esta necesidad tan evidente/evidenciada que ha reclamado una materia específica. Esta yuxtaposición académica propuesta por la Facultad, es también un compromiso asumido por nosotros al estar voluntariamente aquí, de hacernos portavoces de la reconstrucción como operadores de los intentos de solución a las falencias detectadas.
Entonces, nuestra presencia, aquí y ahora, es muestra de la asunción de un compromiso y una responsabilidad. Y a ese hacerse cargo del estadio de situación, es que apela el exordio, a esa responsabilidad por lo hecho, por el ser actual, y por cómo ser hacia adelante.
Se dice habitualmente que la repetición de métodos y procederes堲epiten resultados, y creo que en realidad, lo que se repite es la óptica que nos hace optar por la repetición (de métodos y procederes y resultados). Nos hemos convertido en seres de hábitos, habituales, habituados. Y esa habitualidad, que en la mayoría de los casos se transforma en una previsibilidad que serena, nos propone hasta su discurso armónico y estándar. El estar habituados, digamos a este ecosistema que subsiste en armonía, nos ha permitido "una vida serena".
Pero según creo, no estamos para un retiro acogedor ni para una óptica tranquilizadora. Estamos en la Universidad y por tanto, estamos en el centro generador de intelecto y por cierto, el desarrollo del pensamiento nunca es un lugar confortable más bien, es muy incómodo.
Se que optar por la comodidad, es tentador. Es como aquel TRABAJADOR que luego de dedicarle muchas horas diarias a su profesión, llega a su casa en busca de la calma. Quien pudiera objetar tal derecho.
Pero lo nuestro es opuesto. Hemos llegado a "nuestra casa" pero en pos de poder desmontar los estados tranquilizadores y mullidos.
Dicho con palabras prestadas, venimos a
"堼em>deconstruir una forma de estar en el mundo妱uot; (Jacques Derrida),
venimos en pos de una opción. Una opción tal, que nos permita trascender el discurso y los métodos habituales de la enseñanza de la Arquitectura.
Entonces嬠amigos嬠deberemos OPTAR OTRA ÓPTICA堼/b>debemos optar y correr los riesgos que se corren
"堼em>cada vez que un hombre se enfrenta con diversas alternativas, opta por una y elimina las otras妱uot;[1]
Fue muy elocuente la jornada de concurso de aquel diciembre, donde se puso en evidencia que la óptica actual, muy claramente expresada por una mayoría establecida de aspirantes, seguía siendo la de observar el objeto arquitectónico como eje de todo análisis, el objeto arquitectónico como punto de partida. Se buscaba desde el entendimiento del objeto materializado, la obtención de las razones que lo llevaron a ser (actitud "a posteriori" que será debida y conscientemente discutida más adelante).
Desde un entendimiento material-constructivo se buscaba explicar la teoría, pero dicho proceder es perfecto para la labor del historiador que debe liar con objetos pasados que por lo general, no tienen "abogado". También es un proceder propio del profesional, el cual decide proceder por medio del método ensayístico de prueba / error.
Pero no es para nada apropiado para la ENSEÑANZA Y FORMACION de jóvenes que han de ser provistos de herramientas pro-eyectas y no herramientas para una acción forense.
Pues bien, creo que esa es la óptica a desterrar y esa es la posición a abandonar. Deberemos pasar a trabajar en una instancia PRE-VIA, pre-proyectual, una instancia anterior donde aun carecemos de objetos, aun carecemos de necesidades y de corpus. Y pasando de instancia, nos hallamos en otro punto de vista, ante OTRA ÓPTICA. Nos hallaremos listo para un cambio de estrategia,
"que la arquitectura abandone esa cierta omnipotencia de verse a si misma asilada del restos de las bellas artes y las humanidades, aislada en su exclusividad desde donde observar el mundo, omnipotente de creer que los cambios de paradigmas del pensamiento, podrán ser absorbidos, asimilados y entendidos desde su propia especificidad."
Entonces, repito la pregunta:
" estamos en condiciones妱uot;.
http://www.plataformaarquitectura.cl/2010/12/09/the-fogo-long-studio-saunders-architecture/
Vamos a hacer un desglose para que nos sea más sencillo poder captar las diferentes dimensiones que se engloban en el tema sugerido. Por un lado veremos:
I. La teoría,
II. La propia encomienda o tema sugerido,
III. La teoría aplicada al espacio moderno,
IV. Ejemplo…
del la cual se derivarán tres temáticas nuevas y necesarias para formular un desarrollo práctico del cambio de paradigma de enseñanza enunciado. Estas son:
Qué es el espacio?,
Qué es la Modernidad?,
Qué es el espacio moderno?
V. Conclusiones.
" 嫲eatos, krea, kreas, crear, criar, criatura, creación妱uot; Devenir lingüístico.
"公 concepto de creación ha estado mucho más ligado al arte que a la ciencia o la filosofía. ¿Qué crea un pintor? Crea líneas y colores. Esto implica que las líneas y los colores no están dados, que son el término de una creación. Lo que está dado, en última instancia, podría siempre llamarse flujo. Los flujos están dados, y la creación consiste en recortar, organizar, conectar flujos, de tal manera que se dibuje o se haga una creación alrededor de ciertas singularidades extraídas de ellos."[2]
Gilles Deleuze, 2006
Según la Real Academia Española, teoría es proveniente del griego ?e???a ("observar") que significa: – Conocimiento especulativo considerado con independencia de toda aplicación.
Se plantea su significado como "especulativo" (espéculo, para observar) pues se trata de la configuraciones hipotéticas y por lo tanto provisionales hasta ser verificadas.
El término ?e???a solía utilizarse dentro del contexto de la observación de una obra teatral, lo que puede explicar porque hoy en día el concepto de teoría permite referirse a algo provisional o que no es completamente real, sino que AÚN tiene entidad de provisorio.
Tengamos en consideración, que el rol del teatro griego, como evento socio-comunicativo, abarcaba: la historia, la tradición, la declamación y la retórica trasmisible. Está de más aclarar que el teatro no era mero divertimento sino el origen de la instrucción pública y que según la temática a trasmitir, el teatro griego se dividía en: TRAGEDIA y COMEDIA.
Prosopon griegos
De todas formas, la evolución histórica del término le otorgó un sentido más intelectual y comenzó a aplicarse como:
la capacidad para entender la realidad más allá de la experiencia sensible, a través de la comprensión de estas experiencias y su expresión mediante el lenguaje.[3]
Pues bien, ya tenemos al Ho. en actitud de observación más allá de realizar experiencias sensibles y con deseo de saber. Pero a poco de ver, se da cuenta que no entiende.
Quien desconoce, no entiende.
La concepción teórica se basa en la propiedad fundamental de tener la competencia de observar (competencia innata o adquirida), que es la capacidad no sólo de "mirar", sino de "ver" y deducir.
Tener la capacidad de poder mirar (tener visión) para conseguir ver (una visión que entiende) y así poder observar (visión que entiende y deduce), tres términos que parecieran simples sinónimos pero que son la base diferenciante entre la labor profesional y la labor del consumidor.
Observa quien detalla, ve quien entiende, miran todos堠
"嬡 manipulación concreta de la dimensión temporal donde se sitúan los fenómenos estudiados; el manejo específico de las categorías de verdad y objetividad; la utilización de diversas escalas de observación de los hechos investigados; el problema de la relación teórico-metodológica entre acción individual y estructuras sociales; y las técnicas de exposición, con el relato en el centro de la discusión, componen una OBSERVACIÓN妱uot;[4]
Un concepto que es necesario no pasar por alto, es que se observa desde el punto donde uno se halla, desde un aquí y ahora que sitúa en tiempo/espacio.
Vamos a observar los actos de la modernidad, por ejemplo, desde
"嬡s nuevas condiciones cognitivas y de sociabilidad impuestas por ese fenómeno general que denominamos postmodernidad妱uot;[5]
o por ejemplo, observar cualquier acto a través de la empírea original: el poder hipnótico del fuego, llevó al Ho. al encantamiento, pero desconoció su capacidad de quemar hasta que experimento en carme propia el ardor.
En cambio nosotros, evitaremos quemarnos, para lo cual debemos construir el soporte necesario del entendimiento. Qué es conocer? Qué es entender?. Secuencialmente, se conoce algo que en principio es novedoso, es un primer contacto, una presentación. Entre ambos actores, quien es presentado y a quien se le presenta, deberá existir una comunicación intelectual para producir una afinidad.
Para acercarnos a las cosas, partimos de saber que lo que tenemos en común y nos une, son una serie de presupuestos, los cuales deberán ser realizados a través de una serie de mediadores que faciliten la mutua comunicación. Éstos pueden ser: especie, códigos, conceptos, lenguaje, tradiciones, y todo tipo de mediador social que sea de la comunidad. A través de estos elementos mediadores se produce el DIÁLOGO como base de cualquier tipo de relación.
Ahora, cuando la presentación es entre dos entidades que carecen de comunidad donde dichos elementos están ausentes, éstos deberán ser creados堣reados? Si creados堼/font>
Veamos el caso en el que las dos entidades desconocidas son el Ho. y un fenómeno desconocido, y existe un interés del Ho. por conocer y entender. Éste deberá apelar al intelecto y al pensamiento para contemplar, reflexionar y en definitiva, teorizar.
Deberá darse una teoría para poder entender el fenómeno que enfrenta, la cual la podemos definir, según las palabras de Gilles Ferry[6]en cuatro niveles de complejidad posible, a saber:
"Define un primer nivel, de la práctica o del hacer. Aquí el operador no guarda ninguna distancia con el objeto, es decir, con relación a su práctica. Es pura producción empírica; sería el hacer (obras) sin reflexión teórica;
El segundo nivel se produce en el momento en que se realiza un discurso sobre el hacer que intenta responder a la pregunta del cómo hacer. Un discurso empírico que formula indicaciones Se ha producido un distanciamiento con el hacer. Este segundo grado de la escala se identifica con un nivel técnico, nivel de conocimiento técnico;
Un tercer nivel, a través del por qué hacer. Es decir, ya no se trata solo de cómo hacer sino además del para qué hacer y qué hacer. Se define como nivel praxiológico, es decir, se refiere a la praxis: "la praxis es la puesta en obra de diferentes operaciones en un contexto dado que es necesario analizar y en el que tomar decisiones referentes al plan de ejecución de lo que se hace". Y en este nivel ya podemos empezar a hablar de teoría;
Un cuarto nivel, donde se produce un corrimiento que va más allá de la acción, el nivel científico. Su objetivo es conocer y entender cómo funciona un sistema y cómo funcionan los actores de este sistema."
Así, el Ho. se crea como Teórico, se permite especular, y se intelectualiza a través de la creación de los conceptos necesarios para intervenir en el fluir de los acontecimiento. Crea toda una serie de conceptos para componer su entendimiento.
"堕n filósofo es堡lguien que crea conceptos妱uot;[7]
y a la vez,
"堣ada noción individual estará llamada a expresar y contener el mundo 妱uot;[8]
Veámoslo así, según lo plantea Deleuze en la cita de encabezado de este apartado,
"妩quest;Qué crea un pintor? Crea líneas y colores. Esto implica que las líneas y los colores no están dados,堉 Lo que está dado, en última instancia, podría siempre llamarse flujo. Los flujos están dados, y la creación consiste en recortar, organizar, conectar flujos, de tal manera que se dibuje o se haga una creación alrededor de ciertas singularidades extraídas de ellos."[9]
ahí habla de la existencia de los fenómenos en pleno fluir permanente, como si se hallaran circulando, sobrevolando en rededor del creador (o de la sociedad). Precisamente de lo que estamos hablando de del fluir de la cultura. De la cultura que es hecho cotidiano y permanente invisible y presente en la totalidad de las acción que realizamos.
O si también lo vemos en los términos de Deleuze, en el fluir de la geometría y sus elementos. Las líneas y los colores ya están dados, existentes de manera permanente y nosotros culturalmente sabemos de su existencia. La labor del creador a diferencia del hombre común que ignora el arte de combinar, es la de seleccionar ciertas líneas y cierto colores y cierta composición para determinada obra.
Esto sucede con el intelectual. Posee en fluencia todos los fenómenos de la existencia para los cuales deberá crear una red de conceptos que les permita asir dichos fenómenos, seleccionarlos y extraerlos en una teoría que de sustento a sus especulaciones.
Cuando no posee los conceptos contenedores, el intelectual, los crea con la firme convicción de poder resolver una ínfima parte de los miedos de la Humanidad.
La creación de conceptos realizada por el intelectual, nos permitirán ordenar un sistema de concepciones con la que podamos extraer del flujo permanente del pensamiento, las teorías de creación y de explicación para los hechos.
También debemos acordar que tanto las obras como los conceptos, ambos vistos como creación del intelectual y como instantes o estados transitorios de la multiplicidad, tienen la particularidad de corresponderse con su autor.
"匯s conceptos son firmas espirituales,峯n también formas de vida."[10]
Tanto el filosofo como todo creador se autodefine a partir de un sistema de de conceptos que le sirven de referencia, y en ese marco referencial, la verdad siempre está subordinada al sistema de conceptos del que se dispone.
Podemos concluir que:
la teoría es una concepción del Ho. y personal,
que cada hombre con intelecto, humildad para reconocer su ignorancia y capacidad para observar más que ver, es un ser teórico,
como el Ho. quiere evitar el error por el error mismo, "piensa luego existe",
como el "luego" determina una yuxtaposición en la temporalidad, la teoría (el pensar) es una instancia anterior al actuar. La TEORIA es una fenomenización PRE – BIOS[11]
Ante la ausencia de elementos comunes y comunidad con fenómenos desconocidos, el Ho. se ha serenado a través de la creación de conceptos y de lenguajes y de teorías que la han permitido dar explicación a los hechos de su existencia.
Ha creado teorías que le han permitido una forma de estar en el mundo, una forma de habitar, una forma de estar con los otros hombres. Teorías, digamos en términos generales, las cuales también le han permitido una forma de estar con la Sociedad, con el Arte, con los Dioses, y sobre todo, una teoría que le permita estar a cada instante en la sucesión de permanente cambio del tiempo.
Y en el fondo, lo que siempre ha buscado el Ho., es una teoría que le permita 弯font>
estar con uno mismo弯em>
II-1. Para realizar ésta exposición o éste simulacro, he tomado de los temas propuestos en las "Cláusulas Particulares del llamado a Concurso para Auxiliares Docentes ACD y JTP", la unidad temática n° 6 del programa de la materia presentado dentro de la propuesta pedagógica. Dicha unidad trata sobre: – EL ESPACIO ARQUITECTÓNICO, y de la unidad 6 específicamente realizaré la aplicación de la metodología de enseñanza al ítem denominado: EL ESPACIO MODERNO, dado que me sería muy difícil actuar sobre un enunciado general o sobre una totalidad sin existir una instancia de observación particularizada sobre un ejemplo definido. II-2. En primera instancia y por vicio profesional, uno tiende a buscar imágenes y referencias gráficas que representen obras construidas del movimiento Moderno, cosa que realizaremos pero en otro momento. A esas obras construidas, procederemos a llamarlas OBJETOS ARQUITECTÓNICOS. Pues bien, controlemos la ansiedad pues vamos a realizar un recorrido diferente. De la misma manera que anteriormente habíamos hablado del libre fluir de la cultura, de la geometría, del Ho., en este caso adolecemos del libre fluir de las arquitectura, de sus concepciones, de sus principios, de sus usuarios. Deberemos reconocer cuales de los principios del pensamiento fueron los que influenciaron en el espíritu de la época y los que moldearon el intelecto, las inquietudes y los postulados que nos permitieron arribar a la modernidad. Dicho reconocimiento, nos conducirá a confeccionar toda una trama de conceptos tal que podremos detectar en medio del fluir total, los elementos justos que en tiempo/espacio recalaron en la perfomance moderna. Digamos que, en cuanto a los elementos constitutivos de un estadio del pensamiento que en algún momento de la historia se hacen evidentes y esa evidencia compone un discurso, ya están formando parte de ese fluir eterno. Hoy nos sobrevuelan los elementos de todos los pensamientos de la historia, desde los más antiguos a los más contemporáneos. Sin mucho pensemos en la presencia diaria de, por ejemplo, las antiguas religiones con base en la filosofía oriental (budismo, taoísmo, shintoismo, etc.) como las que se basan en "las religiones del libro" (en términos derridianos, la judaica, la cristiana, la musulmana) o como el paganismo. Pues bien, pasaremos a denominar a ese asedio de los elementos constitutivos de la Historia de la Ideas, como LATENCIA. Y digo LATENCIA y no SINERGIA de una manera intencional pues la SINERGIA actúa sobre la acumulación de energía concentrada en una posibilidad la cuál en determinado nivel desborda de manera independiente de la decisión y la LATENCIA, si bien también es una posibilidad, ésta quedará suspendida hasta el punto en que se decida operarla. No existe posibilidad de desborde ni de operación independiente. A una LATENCIA se la podría caracterizar por su condición de acechar al Ho. en tanto éste conozca. Una LATENCIA que queda planteada como una posibilidad. Una LATENCIA que está siempre al alcance de la mano y siempre es decisión del Ho., correr el velo del conocimiento. De más está decir que "quien ignora está a salvo". Es así que el Ho. permanentemente, vive sobrevolado por la historia, por lo que el pensamiento le tiene reservado. Podría asimilarse a la LATENCIA que existe hoy en la red de internet. Una red que está en extremo cargada de información pendiente de un download. Toda la información se encuentra transformada en bytes y alojada en esa espacialidad virtual. Entonces el conocimiento es una posibilidad al alcance. He aquí nuestro quid: "tenemos todo al alcance de la mano報ué tomamos? Por qué optamos? Sobre que premisas?" Hemos convivido en un estado o categoría del pensamiento PREMODERNO. Hemos sostenido una concepción de la actualidad basada en la repetición de "堠la perspectiva de la aprehensión colectiva de un tiempo circular y eterno, quedaba, pues, determinada firmemente por las señas de identificación fijadas en los relatos de origen, de contenido nominativo, cuya autoridad se situaba no tanto en quien lo enunciaba妱uot; a la par de la celebración del, "rito, con sus símbolos mnemónicos," que "cumpliría la función de ahuyentador mágico de las contingencias de un presente exorcizado a través de una continua referencia a la creación cósmica, realizada de una vez y para siempre妱uot;[12] Esa tranquilidad que nos propinaba el estar a resguardo de cualquier tipo de contingencia, nos refugió en la ritualización tanto de las miradas como de las respuestas. Como todo rito, se basa en la reiteración, en la repetición de ceremonias, en la dogmatización y en el repertorio. Y el rito se hizo hábito, habitual, diario, cotidiano. También, en pos de su trasmisión, el rito reglamentó sus reglas y estandarizó sus palabras. Palabras justas, apropiadas (por todos y para todos), limitantes. Palabras "marco", miradas "marco". Palabras y decires, hábitos habituales, esquema ritual, RELATO. Relato habitual, relato límite, relato marco,La propia encomienda o tema sugerido
La teoría aplicada al espacio moderno
"弥m>el relato es la autoridad en sí misma. El relato autoriza un nosotros indestructible, por encima del cual sólo hay ellos" (Lyotard, 1995: 44).[13]
Hemos coexistido con una óptica de la omnipotencia y del exclusionismo de la profesionalidad. Hemos perecido ante el fin concreto del objeto en detrimento del diálogo y la retórica. Hemos asumido la preeminencia de ser los hacedores del modus vivendi.
Bueno, asumamos también que todos nuestros orgullos son fútiles labilidades.
La realidad que convierte a la Arquitectura en una de las únicas Bellas Artes de resultado utilitario, de aplicación concreta y de funcionalidad determinada y definida, nos ha enceguecido y distanciado de la poesía. Nos ha circunscripto en un logos específico que nos ha provocado aislación.
Cómo romper esa aislación en la que se encuentra la enseñanza de la Arquitectura?
Muchas veces, el estar aislado o encerrado, parte de una decisión personal o parte de no saber ver las virtudes que poseen los que se encuentran a nuestro lado. Creemos que el mundo lo podemos crear solos y lo único que encontramos en la necedad y la miopía.
"El principio de la cura se inicia con el reconocimiento de la enfermedad" pero mientras no se la vea, la situación seguirá invariable. El estado de la arquitectura y de su enseñanza, amerita una cambio de visión y creo que la implementación de una materia como Teoría puede ser una bisagra, puesto que, si la podemos capitalizar, nos permitirá cambiar de óptica.
1- El planteo de trabajo a realizar con EL ESPACIO MODERNO como propuesta, será esclarecer la acción de la teoría como soporte pre–bio, pre–disciplinar, considerando a la teoría como un proceder anterior a la existencia del objeto arquitectónico.
Deberemos ser capaces de dilucidar la dicotomía entre la mirada PRE-PROYECTUAL y POST-PROYECTUAL.
Término a término, la dicotomía ha de ser PRE-POST, entre un antes y un después.
Nace de esta dicotomía, una geografía para cada forma de pensamiento. Todo lo que esta englobado en lo PRE, nos ubica en un sitio de neta intelectualidad ante la posibilidad que algo suceda. También, nos resguarda un espacio de acción que nos posibilitará tomar definiciones de cómo queremos que algo se proyecte. Y hablar de lo PRE-DISCIPLINAR o lo PRE-PROYECTUAL, nos permite pensar qué existe más allá de la frontera de la especificidad?.
Cuando actúo ante un hecho consumado (POST-PROYECTAL, POST- ERIOS), poca posibilidad de incidir en su estado. No tengo la posibilidad de tomar el lienzo, cubrirlo e iniciar el cuadro nuevamente. Ante el objeto arquitectónico no tenga más opción que contemplar y a lo sumo pedir disculpas.
Lo post, justifica; lo pre, fundamenta.
2- Delimitamos el campo de acción de la TEORÍA, como un campo de acción que se compone básicamente de una (1) instancia, la instancia anterior a los objetos de cualquier tipo.
De dicha anterioridad, podemos decir que los estados o el devenir del pensamiento se rigen por: – un movimiento pendular, donde sucesivamente, las ideas se profundizan en un sentido para luego retrotraerse en el sentido siguiente. Aclaremos que hablamos de un péndulo que no posee un punto fijo de oscilación sino que también éste se desplaza con una menor intensidad pero constantemente;
la construcción de un "puente conceptual" entre lo pasado, lo presente y lo futuro, donde dicho puente se plantea en términos de continuidad/discontinuidad.
Así jamás existirán dos coordenadas que sean exactamente iguales.
Es lo que se conoce como SUCESIÓN HISTÓRICA DE LA IDEA y de esas sucesión no haremos coleccionistas o rastreadores pero no convocación museística sino como investigadores de las razones que llevaron a cada forma construida.
3- Veremos cómo llega al instante presente todo un encadenamiento secuencial de los estadios del pensamiento anteriores, veremos cómo tienen un ciclo en el que crecen hasta encontrar su apogeo y luego, inmediatamente, comienzan su declive en favor del surgimiento de un nuevo estadio.
Esclarecemos cómo cada estadio apela a la huella heideggeriana, al rastro sartreano, al fenómeno husserliano, y a la differance derridiana, cómo inicia su recorrido combinando el estadio alcanzado con inmediata anterioridad más la historia del pensamiento toda más elementos actuales que actúan como detonadores de cambio. Cómo tomará particularidades propias y de su estado anterior, todo ello en el marco de un devenir histórico.
Como dijo Jacques Derrida: "弥m>cada vez única, el fin del mundo堣ada vez de vivo, vivo todas las vidas y muero todas las muertes妱uot;,
o como en textos de Jorge Luis Borges[14]
"尯sibilidad infinita del hipertexto妱uot;
Destaquemos que esta descripción procedimental se corresponde a la mutación operada durante un instante de espacio/tiempo en el espíritu de una época y donde este cambio afecta todas las esferas de la sociedad.
4- Trascenderemos los límites de lo específico de la arquitectura en pos una visión TRANS Y PRE-DISCIPLINAR y entraremos en campos anejos para tomar dimensión de las condiciones del pensamiento que llevan al Ho. a pensar de determinada manera,
"報uien confiese ser arquitecto堥s conveniente que sea ingenioso e inclinado al trabajo, pues no es posible llegar a ser un diestro arquitecto si posee talento pero carece de conocimientos teóricos, o viceversa. Conviene que sea instruido, hábil en el dibujo, competente en geometría, lector atento de los filósofos, entendido en el arte de la música, documentado en medicina, ilustrado en jurisprudencia y perito en astrología y en los movimientos del cosmos..".
Propuesta Pedagógica, 04.1.– Taller I Teoría de la Arquitectura – 2010.-
Tomo esta cita como excusa y justificativo y por lo cual, pido disculpas a sus autores por el uso intencional que daré a la misma, coincide en esencia con esta siguiente del Arq. Jorge Sarquis:
"匡 proyectualidad está condicionada por una realidad que exige abrir la disciplina a la comprensión de las finalidades externas, con la ayuda de otros saberes no sólo de carácter técnico sino sociales y humanístico妱uot;[15]
La evolución de la arquitectura no se halla en la especificidad de la técnica y la interpretación (o justificación, o excusas) del objeto arquitectónico construido. Su evolución está en una vuelta al pensamiento de las Humanidades. Un retorno o una novel incursión a la comunidad de pensamiento de donde la Arquitectura nunca debió abandonar.
5- Se buscará la red de conceptos (existentes o por crear) que permita tamizar la LATENCIA en pos de revelar los elementos que conforman un estadio, un estadio mal llamado espacio moderno el cual sólo es una ínfima parte de la modernidad.
Y también como ya fue expresado, reconoceremos que elementos en fluencia deberemos colectar para conocer y entender, puesto que hablar de concepciones modernas en arquitectura es una mera consecuencia de hablar de la Modernidad.
Conoceremos que conceptos conforman el estadio llamado Modernidad y que resultado alcanza en la visión del mundo.
Ejemplo弯b>
http://www.plataformaarquitectura.cl/2010/12/09/the-fogo-long-studio-saunders-architecture/
Habíamos adoptados unos párrafos atrás la decisión de plantear un trabajo sobre:
EL ESPACIO MODERNO,
y habíamos adoptado la actitud de actuar teóricamente en UNA instancia PRE-BIOS, PRE-DISCIPLINAR.
El sintagma continente, ESPACIO MODERNO, lo vamos a desmaterializar en las unidades conceptuales que lo componen: – el espacio,
-lo moderno,
y a la vez, cada una de ellas, se extiende al infinito dado su nivel de generalidad. En un cierto punto, la generalidad y la latencia se equiparan, pues ambas poseen la totalidad posible y dependerá de nosotros los elementos a extraer.
Veamos,弯font>
Qué es el espacio?
Luz, estructura, materia son los elementos definitorios de espacio según la definición de Le Corbusier.
Dicha definición la colocaré en la órbita de lo estrictamente específico, pero a la cual le agregaré una serie finita de otros elementos surgidos del resto de las Humanidades.
Si pensamos en términos musicales, diría que el espacio es la distancia entre partituras y el tempo entre notas.
Si pensamos en términos psicológicos, diría que el espacio es la posibilidad autónoma de ser.
Si pensamos en términos jurídicos, diría que el espacio es la capacidad jurídica de cada persona de ejercer sus derechos..
Y si nos acercamos a la condición física del espacio, visiones que nos podrán ser de utilidad para la tarea proyectual, contrastaría las definiciones de dos intelectuales que marcaron la historia física cartesiana:
por un lado y derivada de la tesis de Isaac Newton, consideraremos al espacio como una sustancia en sí, corpórea, absoluta y con entidad metafísica,
y por otro lado me basaré en la definición de Gottfried Leibniz, de considerar al espacio en términos relativos y combinatorios, con respecto a las entidades Monádicas[16]
Como podemos ver, existe una abismal diferencia entre ambas definiciones, donde la condición newtoniana toma al espacio como un corpus integro al cual los elementos de articulación (muros, columnas, pisos, etc.) se adaptan en pos de mantener la entidad espacial inalterable. Por su parte, la noción leibniciana del espacio, es consecuencia de entidades autónomas, mínimas e inalterables.
Mientras la definición espacial de Newton rigió la espacialidad hasta fines de la Ilustración, en donde la lógica del espacio estaba supeditada a una dimensión establecida y derivada del rito o destino funcional, la lógica del espacio leibniciano, estaba supeditado a la "coexistencia infinitesimal" o a la relatividad de los términos[17]
En este sentido, Leibniz cuestiona la idea newtoniana del espacio como un ente absoluto, y considera que se trata de una "cosa ideal". Leibniz opone la relatividad del espacio y con ello su carácter lógico-geométrico, al carácter absoluto-metafísico postulado por Newton. Por lo tanto, el espacio y el tiempo no representan nada absoluto, sino que se constituyen a partir del conjunto de relaciones de orden, distancia, y coexistencia que establecen los entes entre sí.
Hagamos una visualización de lo dicho a través de un gráfico, para lo cual elijo una obra de Todd Saunders en la Isla de Fogo, Canadá, los Estudios Long.
Sobre la síntesis formal de planta, realizaré una visión newtoniana y una visión leibniciana del espacio.
http://www.plataformaarquitectura.cl/2010/12/09/the-fogo-long-studio-saunders-architecture/
En la visión de Newton, la forma del espacio es la que define sus elementos de configuración y los cuales dan nombre a las figuras geométricas. Se trata de formas tan reguladas que hay obtenido una identificación o nominación por si misma.
Los elementos que componen la figura (líneas o aristas, espacio contenido o superficie, espacio exterior o contexto) son mensurables y previsibles. Poseen una lógica que les excede en cada caso y permite su recreación aún ante la ausencia de alguno de ellos.
Así la mnemesis de la figura supera la circunstancia de la incomplenitud o de la ausencia, siendo la memoria, una prótesis a la figura de origen.
Ahora bien, si al mismo proyecto lo afectamos por una acción deconstructiva en la cual desentrañamos hasta la relación entre las mónadas mismas, estaremos ante la desconfiguración no sólo de la geometría euclidiana sino que también estaremos afectando la reserva de memoria.
La deconstrucción (la cual se lleva de maravillas con los postulados de Leibniz) llega al extremo de afectar hasta lo más íntimo de los componentes, llegando a la mínima expresión de la geometría, el punto. Pero esta acción que desestabiliza el sentido de las formas, crea espacialidades que anteriormente no reparaban. Es así el caso de la espacialidad que se produce entre cada uno de los puntos componentes de las líneas, que anteriormente componían la figura.
Habiendo sido desestructurado el concepto de figura geométrica, de unidad geométrica y habiendo llegado a la mínima síntesis que es reducir los elementos a mónadas, el espacio pasara a estar conformado por la coexistencia entre dichos elementos.
Tenemos una espacialidad que incluye la posibilidad de modificación o la tendencia a los cambios de estado pues la desarticulación y rearticulación de la forma ya no depende de una idea total de figura, sino que se recrea a partir de sus variantes.
Dentro de los espacios newtonianos, existe el germen de su propia desarticulación, existe contenida una latencia o condición subversiva con la capacidad de desarticular un discurso establecido. En esa latencia o impulso en espera reside la tendencia a pasar de un estado a otro, pues los estados sucesivos, son los lugares hacia donde tiende el impulso. Esa tendencia a transitar de un estado a otro, es lo que Leibniz llama appetitus y es la propia tendencia la que opera como RE-PRESENTADORA de los lugares infinitos.
Qué es la Modernidad?
Volvamos al sintagma de origen, EL ESPACIO MODERNO, del cual ya hemos diseccionado la noción de espacio.
Ahora, a por LO MODERNO.
La convención académica acepta que con Descartes se inicia la Modernidad. A él le atribuye la renovación metodológica de la filosofía y la definición de la agenda programática de la ciencia, somete al estricto escrutinio de la duda racional todas las fuentes del conocimiento (los sentidos y la convención), haciendo de la facultad racional que éste detenta el criterio de validación de todo conocer.
Pues bien, nuestro interés radicará en lo moderno a partir del instante de la historia de las ideas en que la Ilustración dio paso a la Modernidad, o mejor dicho, la Modernidad se abrió paso a pesar de la Ilustración. Ahora es menester someterlo a la duda de la razón.
El fundamento doctrinal de la Modernidad, cual está consignado en Descartes excluye manifiestamente lo humano que hay en el hombre dado que es a los sentidos donde se le atribuye la incertidumbre que pesa sobre el proceso del conocimiento.
La misma Ilustración con su bagaje de racionalidad, había actuado sobre la sociedad imperante haciendo retirar los años de oscurantismo medievales y sobre todo, desprendiendo el conocimiento del yugo del miedo y la iluminación.
Contra una tradición que había hecho indispensable el concurso de Dios en el proceso del conocimiento, Descartes propone una metafísica esencialmente racional que le abre paso a una nueva etapa en la historia de Occidente, una etapa en la que el conocimiento es subsidiario de la razón y no de Dios.
La pregunta de la modernidad es de cuño epistemológico, mientras que la pregunta medieval es de estricto cuño teológico.
Los conocimientos racionales se presentan como algo "seguro" al interior del contexto de la modernidad, lo que Anthony Giddens denomina con el concepto de "fiabilidad" presente en las acciones de los sujetos "profanos", es decir comunes y corrientes.
Ambas etapas, las pasadas y las por venir, siguen acompasadas por el común movimiento pendular de avance y retroceso. Y en ese avanzar y retroceder, van variando partes de la totalidad de una manera paulatina que por vía de la acumulación, llegan a un punto tal que una pequeñas chispa detona el cambio.
"Al modificar una parte, se modifica el todo". (Teoría Jurídica de los Sistemas).
Es de perogrullo decir que no existe una línea divisoria que determina un "hasta acá", sino que los cambios de época son producto de la acumulación secuencial de hechos que van produciendo una modificación en la posibilidad de observar los mismos sucesos con OTRA ÓPTICA.
El hombre moderno se sabe diferente a los animales que tienen por ley el instinto, y al hombre medieval que acepta sin más el conocimiento avenido místicamente "desde afuera". Al hacerse consciente de su situación (de soledad e indefensión en el mundo) y de su condición (no sólo instintual), el hombre moderno, se ve abocado a construir por sí mismo el conocimiento que precisa para vivir.
Se puede considerar un hecho para interpretar la afectación de un instante preciso, como puede ser el cambio de los ideales del Anciene Regimen y su paso al racionalismo, como antecesor de la Modernidad, pero no existe un límite sino un detonante.
En el caso de la Modernidad podemos decir que discurrió en tres fases:
1. Una primera fase que se extiende aproximadamente desde comienzos del siglo XVI hasta finales del XVIII,
2. Una segunda fase que comienza con la gran ola revolucionaria de 1789-90, durante la etapa denominada "a dos aguas",
3. Una tercera fase, que se da con la extensión de la modernidad al mundo en el siglo XX,
Este cambio se produce principalmente a través de una era de revoluciones, de aquellas Revoluciones que dieron por tierra el sistema monárquico, donde el Rey deja de ser depositario de Dios y se seculariza el Gobierno, las clases en ascenso de la burguesía pugnan por cambios económicos, la filosofía libera el pensamiento de la teología y razona, la ciencia inicia su camino de comprobación en detrimento de la fe, los sectores de la economía avanzan sobre las decisiones políticas, la imprenta extiende el conocimiento y la lectura abandona los claustros.
La transformación moderna, que comienza con el Renacimiento y la Reforma, coloca el mundo en tiempo y espacio, los puebla de seres humanos. El mundo ilusorio pasa a ser un mundo falso y queda el mundo físico como único real, un mundo de aquí y ahora.
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