Comportamiento del componente de la capacidad incondicional fuerza en el envejecimiento
Enviado por Fernando Del Sol Santiago
- Resumen
- Introducción
- Materiales y métodos
- Análisis y discusión de los resultados
- Conclusiones
- Recomendación
- Bibliografía
- Anexo
El número de adultos mayores en la población está aumentando, y comprender las características y los efectos del ejercicio físico en este tipo de población es importante a la hora de desarrollar planes de prevención de discapacidades y de mantenimiento de la independencia. Con la edad la función músculo-esquelética empeora, y como consecuencia la calidad de vida disminuye. El ejercicio físico, en particular el entrenamiento de la capacidad física de la fuerza, es el principal método de actuación para contrarrestar este deterioro. Esta propuesta tiene como objetivo diagnosticar el estado de la capacidad condicional de la fuerza en los adultos mayores de la Casa de Abuelos "LA SONRISA FELIZ", y posterior evidenciar los efectos de un programa de ejercicios de fuerza en una población entre 65 y 85 años sana. La intervención se efectuó a lo largo de 24 sesiones repartidas en 8 semanas. Antes y después de la intervención se evaluarán: la composición corporal y la fuerza muscular; mediante una serie de test de campo que determinan la fuerza muscular en el tren inferior y superior. Se comprobará si existen cambios significativos mediante el análisis de los test aplicados.
Los cambios demográficos del siglo XXI se han visto marcados por una disminución constante de las tasas de fertilidad y mortalidad y el consecuente aumento de la longevidad, dando como resultado un envejecimiento acelerado de la población y un aumento en la esperanza de vida, de tal manera que la situación del adulto mayor es un tema relevante y emergente de la sociedad contemporánea. La explosión demográfica de este grupo ha sido tan abrupta que no ha permitido a los organismos competentes prepararse de manera idónea para satisfacer las necesidades de esta población.
Si bien estos cambios se visualizaron inicialmente en los países más desarrollados, se han ido trasladando a los países en vía de desarrollo. Se prevé que para el año 2025 la población mundial de personas mayores ronde en los 1.200 millones de habitantes, cifra que para el año 2050 ascenderá a 2.000 millones (OMS, 2002). En la región de las Américas se estima que para los años 2025 y 2050, la proporción de personas mayores será de 14% y 23,4% respectivamente (Horta et al. 2011).
En Cuba en los últimos tiempos la demografía de nuestra población ha cambiado radicalmente; en el 2010 el por ciento de envejecimiento era de un 18%, lo que representaba una población 73531 de personas con 60 años o más (ONEI, 2010). En el 2015 la población que supera los 60 o más, subió al 19% lo cual representa una población de 77055. Paralelamente a este incremento de la población anciana, ha aumentado la esperanza de vida al nacer (ONEI, 2010).
Estos cambios son consecuencia de las mejoras en los hábitos de vida y los avances científicos que han hecho posible que haya más personas que llegan a alcanzar edades muy elevadas. Enfermedades que hace unos años mataban en poco tiempo hoy se controlan y permite al anciano vivir muchos más años. Además la mortalidad infantil ha descendido de una manera radical siendo actualmente algo excepcional. Estas cifras sobre el aumento alarmante de las personas mayores nos indican que se debe actuar de forma acometedora, inmediata y en diferentes facetas para lograr que lleguen a una vejez más activa e independiente, sensibilizando a la comunidad en general y al anciano en particular.
Cabe hacer notar que la ciencia de la Cultura Física trata de reflejar esta visión, y contribuye de manera clara a reforzar la transversalidad necesaria para que el ámbito de la actividad física y el ejercicio físico cree las sinergias necesarias con otras ciencias de la Salud, la Psicología, Sociología, etc., que potencien un plan de acción sobre este grupo de población.
El deterioro con la edad de la capacidad del sistema neuromuscular para generar fuerza es uno de los principales factores que influyen en la disminución de la capacidad de vida independiente de las personas, es por ello que la fuerza máxima y la explosiva son necesarias para poder realizar muchas tareas de la vida cotidiana como subir escaleras, levantarse de una silla o pasear. (ACSM, 1998).
La evidencia científica que incumbe la baja condición músculo-esquelética con mayor riesgo para la salud, aparece en la década de los 90, posterior a esta fecha se dan a conocer hallazgos que establecieron la importancia del rol que ejerce la masa muscular en la regulación endocrina, lo que ha llevado a que actualmente la fuerza muscular tenga un importante estatus como componente de la condición física saludable. De hecho la cualidad física fuerza constituye un aspecto ponderante dentro de la prescripción del ejercicio físico, por su papel preventivo frente a la sarcopenia y su importancia en la preservación de la autonomía y la funcionalidad en esta población de personas adultas mayores.
Desde no hace mucho tiempo se viene poniendo especial énfasis por parte de investigadores en el análisis de la cantidad de músculo que una persona adulta mayor tiene y su asociación directa o indirecta con diferentes patologías. En este punto justamente, el deterioro natural del tejido muscular ha comenzado a ser estudiado desde otros aspectos debido a los vínculos intrínsecos que establece con ciertas patologías, en las cuales los músculos son de alguna forma controladores de la homeostasis para que éstas no aparezcan o, si se presentan, su impacto en el organismo sea menor. Un ejemplo de este deterioro se debe a la disminución de músculo en el anciano.
Desde luego, estos eventos se van dando progresivamente y, por ende, no siempre son detectados de forma oportuna. No puede soslayarse la definitiva coexistencia de enfermedades como fenómeno causal de la debilidad o pérdida de la masa muscular y ósea. Una alteración física u orgánica que con el envejecimiento lleve a una tendencia hacia lo negativo puede dar origen a deterioros muy serios que, incluso, amenacen la salud y la vida misma.
Mora, 2012 y Ávila, 2012 apuntan que el envejecimiento se acompaña de cambios multisistémicos, entre los cuales la sarcopenia, ocupa uno de los primeros lugares, y es resultante de la disminución de la actividad física que deteriora en forma progresiva el volumen y la fuerza de los músculos, de la capacidad de elongamiento, del rango de movimiento de los músculos y articulaciones y de la masa ósea.
Además del envejecimiento, existen otros factores que mejor explican la reducción en la fuerza y la masa muscular con la edad que se observa con el paso de los años en la cantidad y calidad de actividad física diaria. El resultado de todo este proceso, como si se tratase de un ciclo, origina que en la medida que disminuye la práctica de actividad física diaria, disminuye la fuerza y la masa muscular, de ahí que la interrupción de este ciclo es de vital importancia para el mantenimiento de la calidad de vida y la salud de las personas.
Individuos mayores de 90 años pueden aumentar su acondicionamiento muscular mediante el entrenamiento de la fuerza (Brown, 2008). Las más importantes organizaciones para la salud y el acondicionamiento físico como la National Strength and Conditioning Association y la American College and Sports Medicine recomiendan el entrenamiento de fuerza para esta población con el fin de mantener y mejorar la salud musculo esquelética y el acondicionamiento físico. De hecho, cuando a este grupo poblacional se le incorpora un programa de ejercicios globales que incluya ejercicios aeróbicos y de estiramiento, el entrenamiento de la fuerza ayuda a compensar el deterioro relacionado con la edad en los huesos, la masa muscular y la fuerza que a menudo dificultan las actividades de la vida cotidiana (Brown, 2008).
El factor crucial en el mantenimiento de la capacidad incondicional de la fuerza es el aumento de la masa muscular. Además, se ha observado un aumento en la actividad muscular y la frecuencia durante el trabajo muscular isométrico dinámico. Pese a la idea obsoleta de que el entrenamiento de la fuerza es innecesario o ineficaz para las personas mayores, los trabajos de investigación indican con claridad que estas personas tienen una posibilidad importante de beneficiarse con este tipo de ejercicios.
El mantenimiento de la capacidad de trabajar, la independencia, y la autosuficiencia en la vida diaria y de ocio será cada vez más importante con respecto a las próximas décadas. Un factor crucial en esto es el mantenimiento de una alta capacidad de fuerza individual (Katsiaris et al. 2005). El estilo de vida menos activo de una persona, la manifestación con relación a la edad relativa, la disminución en las habilidades motoras y la capacidad visual y vestibular son, ante todo, cambios a los cuales las personas mayores tendrán que enfrentarse (Koopman y Van, 2009).
Las alternativas de atención a las personas adultas mayores que suelen emplear los profesores de la Cultura Física, constituye una importante herramienta en la minimización de los efectos fatales del envejecimiento al permitir el mantenimiento e incremento de los niveles de la condición física saludable. En este sentido los registros de las experiencias han demostrado, que la mayoría de las veces estas alternativas se utilizan de forma empírica por el poco dominio de métodos, procedimientos, medios y postulados teóricos básicos que sustentan y garantizan la atención a los adultos mayores desde la perspectiva de la Cultura Física.
Si cada vez vamos a constituir una población más mayor, con mayor riesgo a enfermar y a utilizar los recursos de la salud pública, sería transcendental que el personal de la Cultura Física relacionado con la atención a través del ejercicio físico a las personas adultas mayores esté preparado y domine los principales aspectos que contempla los efectos del entrenamiento de la capacidad incondicional de la fuerza en el sistema neuromuscular donde ocurre un decrecimiento de masa y fuerza muscular y proporcionar un papel más importante a la prevención.
Diseño
Estudio transversal, prospectivo con un antes-después.
Población y muestra:
En virtud del papel activo que asumen los sujetos durante el proceso de investigación, se escogió por muestreo intencional las 25 personas adultos mayores, que estaban seminternados en la Casa de Abuelos "LA SONRISA FELIZ", y el Licenciado en Cultura Física que labora en la misma, entre los meses de octubre y mayo de 2016.
Métodos y/o técnicas de investigación empleados:
A continuación se relacionan y explicitan los métodos y/o técnicas que ilustran la lógica investigativa seguida:
Métodos y/o técnicas de nivel teórico
Análisis-síntesis
Desarticulamos el todo en sus partes constituyentes y relaciones principales y lo integramos mentalmente con la síntesis a los componentes del diseño investigativo descubriendo sus regularidades y características esenciales.
Inducción-deducción
A través de la inducción conocimos los factores que rigen el proceso de la atención al adulto mayor con los componentes de la condición física saludable, y en particular la capacidad incondicional fuerza la cual se convirtió en premisa para deducir su nueva concepción.
Enfoque participativo
Nos proporcionó la orientación metodológica general del estudio por la naturaleza de su objeto.
Métodos y/o técnicas de nivel empírico
Análisis de documentos:
Para la realización del análisis de documentos se determinaron los objetivos de éste, se estableció la muestra de documentos a estudiar para posteriormente realizar el estudio registrando y valorando la información obtenida. Se estudiaron los principales documentos que rigen el proceso de la condición física saludables en los adultos mayores.
En nuestra investigación se revisaron los documentos relacionados con los niveles de condición física saludable, a fin de determinar hasta qué punto abordan la ponderación que tiene el componente de la cualidad física de fuerza en los adultos mayores a través de la clase del ejercicio físico en el contexto de la casa de los abuelos. Se revisaron los siguientes documentos:
Efectos de un entrenamiento con sobrecarga excéntrica sobre la fuerza, la capacidad funcional y la masa muscular en personas mayores de 65 años. Santiago A. Arboleda Franco (2014).
La importancia del trabajo propioceptivo y de la fuerza en adultos mayores. Fernández Hernán (2013).
Efectos de un programa de entrenamiento de potencia sobre la capacidad funcional y la fuerza en adultos mayores sanos. Alameda-Gadea, Adrián (2014).
Programa de entrenamiento para el incremento de la fuerza muscular. Lenin Mendieta (2013).
Efectos del entrenamiento de fuerza sobre los niveles de IGF-1 y autonomía funcional de adultos mayores. Rodrigo Gomes de Souza Vale (2014).
En los diversos estudios consultados para operar en la intervención de un programa de entrenamiento de la fuerza en personas adultas mayores han señalado la importancia que tiene la percepción del estado de salud con relación a la aparición de musculatura, que favorecerá a mediano y largo plazo el mantenimiento de la motricidad, elongación y fuerza muscular.
Arboleda Franco (2014) denota en su estudio, la concepción de la intervención para el mejoramiento del nivel de la condición física-salud, en particular en la capacidad incondicional de la fuerza en los adultos mayores, donde las mejoras se producen en las extremidades inferiores fundamentalmente en los hombres.
Este programa de intervención presenta limitaciones pues no soluciona los problemas y necesidades del mejoramiento de la condición física-salud al soslayarse el aspecto del sexo femenino, develando en sí mismo su enfoque a las mujeres adultas mayores y los beneficios a las adecuaciones que pudieran realizarse a partir de este programa, no son tangibles en nuestra investigación.
Alameda-Gadea, (2014) plantea una teoría similar a la de Arboleda, direcciona el entrenamiento de la fuerza contrarrestar el deterioro músculo-esquelética y en particular la fuerza muscular en el tren inferior.
Algunos documentos analizaron la condición física saludable en el aspecto de la medición; la mayoría de los test aplicados estandarizados, presentan limitados protocolos de evaluación, ya que presentan gran variabilidad en su metodología.
La mayoría de los trabajos consultados sobre la intervención de programas de entrenamiento de la fuerza muscular en adultos mayores, refuerza la teoría de ganancias de hasta un 25% en la fuerza de brazos y un 64% en la fuerza de piernas, lo que patentiza que el aumento de la fuerza está dirigido a las extremidades inferiores y superiores.
Además, la falta de concordancia en los hallazgos de los diferentes estudios que valoran la importancia de capacidad física de la fuerza como componente de la condición física saludable en los adultos mayores está dada a la multitud de métodos que se han utilizado para medir tanto la condición física saludable como la capacidad física de la fuerza.
Análisis y discusión de los resultados
En lo referente a la fuerza muscular, previo al inicio del programa de ejercicios físicos el rendimiento promedio en el test de sentarse y levantarse de la población en estudio fue de 10.8 repeticiones lo que clasifica según el protocolo de evaluación como medio alto, la que aumentó posterior al término del programa de ejercicios a un promedio de 15.16, resultando en una ganancia neta de 4.36 repeticiones (0.71% de aumento), diferencia que se evalúa de satisfactoria.
En relación al test de flexión de los brazos, el otro test que evaluó el rendimiento de la fuerza muscular, previa al inicio del programa de ejercicios el rendimiento promedio fue de 14.44 repeticiones lo que clasifica según el protocolo de evaluación como regular, al término del programa de ejercicios aumentó a un promedio de 18.84, resultando en una ganancia neta de 4.4 repeticiones (0.76% de aumento), diferencia que se evalúa de satisfactoria.
No se encontró ningún registro con respecto a la incidencia de lesiones musculo esqueléticas, descompensaciones cardiovasculares o algún otro síntoma o signo de alarma en los pacientes en estudios durante la duración del entrenamiento
Discusión
La comparación entre el rendimiento basal que se obtuvo en los test aplicados, refleja que los adultos mayores participantes en este estudio presentaban una capacidad física de la fuerza muscular bastante limitada, hecho que sumado a sus múltiples comorbilidades preexistentes determinaba una condición física saludable de nivel medio con alto riesgo de llegar a niveles bajos de independencia funcional en tareas cotidianas, niveles que fueron en aumento durante las sesiones de las clases.
Es decir, la población de este estudio aunque independiente, estaba en un constante riesgo de caer ante un eventual factor estresante, en un estado de dependencia y discapacidad. Bajo esta perspectiva surge el ejercicio como una potente y segura arma preventiva, al provocar una mejoría en uno de los principales factores de riesgo de la condición física saludable: la fuerza muscular, efecto que se constató en la mayoría en los adultos mayores con menos y con más de 80 años. Esto determina que el adulto mayor que realiza ejercicios de capacidad física de la fuerza muscular (antes de caer en discapacidad) estará mejor preparado para enfrentar situaciones que pongan en riesgo su independencia funcional (por ej. caídas, hospitalizaciones, etc.). Este concepto, acuñado en los adultos mayores seminternados en la Casa de Abuelos "LA SONRISA FELIZ", no significa más que enfocar las intervenciones de manera preventiva, permitiendo a la población intervenida estar en mejores condiciones físicas, mentales y funcionales para afrontar descompensaciones de sus comorbilidades, caídas, accidentes u hospitalizaciones, con lo cual evitamos el traspaso de la línea de la discapacidad o permitimos que tras el paso de dicho umbral, la recuperación de la funcionalidad sea rápida, evitando que se perpetúe la discapacidad.
Otro hecho a destacar es la seguridad que ofrece el realizar ejercicios físicos de fortalecimiento muscular en adultos mayores. No se evidenció ninguna lesión ni complicación de las patologías de base en el estudio, lo que sumado a la buena tolerancia y adherencias a este tipo de intervención, lo transforman en un arma indispensable en la prescripción adecuada de un entrenamiento en personas adultas mayores con una condición física saludable baja. Resultado que concuerda con la literatura científica actual, donde el ejercicio de sobrecarga ha demostrado incluso una menor incidencia de complicaciones que el ya clásico entrenamiento aeróbico.
Asociado a la seguridad del programa de ejercicios físicos en la población de adultos mayores condición física saludable baja, es importante destacar dos puntos trascendentes. Primero, la necesidad de realizar este tipo de intervención, con la infraestructura y el recurso humano capacitado (licenciado en cultura física), ya que sólo esto garantiza una adecuada evaluación y asegura la correcta realización de la intervención, con la técnica adecuada. Lo segundo es la monitorización constante de los signos vitales y la evaluación ante la aparición de síntomas de alarma.
Con estas medidas se previene en forma eficiente la incidencia de lesiones músculo-esqueléticas y/o descompensaciones cardiovasculares durante la realización de la intervención.
1. La intervención fundamentada en los ejercicios físicos de fuerza a través de las tres frecuencias semanales en la Casa de Abuelos "LA SONRISA FELIZ" del municipio de Cienfuegos, posibilitó el aumento del rendimiento promedio de repeticiones al término de la intervención.
2. Una vez diagnosticado las disminuciones fisiológicas de la capacidad física de la fuerza, que sufren las personas adultas mayores en las extremidades superiores e inferiores, se evidenció el potencial que cobra la labor, planificada y basada en conocimientos científicos, del profesor en Cultura Física en la prevención del desarrollo de las diferentes discapacidades.
1. El desarrollo de la práctica de ejercicios físicos de fuerza muscular, demuestra ser un método eficaz, no solo en la identificación de los adultos mayores más susceptibles a discapacidad, sino que son un espectro de buen rendimiento en aquellos adultos mayores que siendo independientes poseen diferentes grados de reservas fisiológicas para enfrentar las AVD.
2. Los hallazgos de la investigación con respecto a los test aplicados evidenciaron que los valores normativos para determinar con exactitud el diagnóstico de la capacidad física de la fuerza de la población anciana y así poder concretar programas de intervención para estabilizar la condición física saludable o mejorarla, no esclarecen la cientificidad de los mismos.
1. Realizar estudios experimentales que fundamenten con mayor profundidad desde la teoría la relación develada en la triada: "capacidad física de la fuerza, sarcopenia y la fragilidad.
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ANEXO.- 1
ESTADÍSTICAS DEL MUNICIPIO DE CIENFUEGOS DE LAS PERSONAS ADULTAS MAYOR POR GRUPO DE EDADES. (2014)
G/ edades | Total | Varones | Hembras | Total | Varones | Hembras | Total | Varones | Hembras | |||||
60-64 | 8 728 | 4 248 | 4 480 | 8 245 | 3 985 | 4 260 | 483 | 263 | 220 | |||||
65-69 | 7 567 | 3 580 | 3 987 | 7 171 | 3 364 | 3 807 | 396 | 216 | 180 | |||||
70-74 | 5 877 | 2 686 | 3 191 | 5 556 | 2 521 | 3 035 | 321 | 165 | 156 | |||||
75-79 | 3 910 | 1 694 | 2 216 | 3 721 | 1 581 | 2 140 | 189 | 113 | 76 | |||||
80-84 | 2 590 | 1 072 | 1 518 | 2 477 | 998 | 1 479 | 113 | 74 | 39 | |||||
85 y+ | 2 435 | 881 | 1 554 | 2 308 | 813 | 1 495 | 127 | 68 | 59 | |||||
31107 | 14161 | 16946 | 29478 | 13262 | 16216 | 1629 | 899 | 727 |
G/edades | Total | Varones | Hembras | Total | Varones | Hembras | Total | Varones | Hembras |
60-64 | 20 813 | 10 411 | 10 402 | 17 280 | 8 472 | 8 808 | 3 533 | 1 939 | 1 594 |
65-69 | 18 212 | 8 934 | 9 278 | 15 202 | 7 301 | 7 901 | 3 010 | 1 633 | 1 377 |
70-74 | 14 557 | 7 027 | 7 530 | 11 983 | 5 629 | 6 354 | 2 574 | 1 398 | 1 176 |
75-79 | 10 403 | 4 913 | 5 490 | 8 518 | 3 876 | 4 642 | 1 885 | 1 037 | 848 |
80-84 | 6 652 | 3 143 | 3 509 | 5 566 | 2 518 | 3 048 | 1 086 | 625 | 461 |
85 y+ | 6 418 | 2 873 | 3 545 | 5 310 | 2 269 | 3 041 | 1 108 | 604 | 504 |
77055 | 37301 | 39754 | 63859 | 30065 | 33794 | 13196 | 7236 | 5960 |
Autor:
Estudiante: Joise Antonio Blanco Prieto
Lic. Fernando J. Del Sol Santiago. Dr. C. y PT
Referat del Trabajo final presentado para acceder al título de Licenciado en Cultura Física