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Cualidades de la personalidad y motivacionales de los atletas de Lucha Greco


Partes: 1, 2, 3

  1. Resumen
  2. Introducción
  3. Fundamentación Teórica
  4. Motivación y deporte
  5. La adolescencia y la actividad física
  6. Metodología
  7. Análisis de los resultados
  8. Conclusiones
  9. Recomendaciones
  10. Bibliografía
  11. Anexos

Pensamiento"La práctica del deporte y los ejercicios físicos puede hacer por la humanidad lo que no podrían alcanzar millones de médicos

Resumen

La presente investigación ""Cualidades de la personalidad y motivacionales de los atletas de Lucha Greco Categoría 12 – 13 años de la EIDE provincial Lino Salabarría Pupo de Sancti Spíritus" tiene como Objetivo General caracterizar las cualidades de la personalidad y motivacionales de dichos atletas. Para el presente trabajo se tomó una muestra de 10 atletas donde se aplicaron métodos del nivel empírico que nos permitió identificar los aspectos que caracterizan la preparación psicológica de los atletas seleccionados y fueron los siguientes: Entrevista Semiestructurada, Técnica de los 10 deseos, Composición, Motivos Deportivos D.S. Butt, los cuales permitieron realizar una caracterización de la esfera motivacional a partir de la práctica deportiva. Además se aplicó el Test de Actitud para la próxima competencia donde se pudo apreciar particularidades perceptivas de la situación precompetitiva. Otro de los Test fueron el Inventario de la personalidad de Eysenck (variante B) el cual permite la explicación de las diferencias individuales entre los sujetos, así como las características temperamentales. El Test de Ansiedad de Spielberger donde se observaron los niveles de ansiedad reactiva o situacional y como rasgo de la personalidad. El Test de valoración de las cualidades volitivas. Al final se elaboraron una serie de conclusiones y recomendaciones tales como: Elaborar estrategias psicopedagógicas personalizadas y a nivel de equipo en función de potenciar los aspectos positivos y enmendar los aspectos negativos descritos. Continuar con esta línea investigativa en las demás categorías de la Lucha Greco a fin de buscar las regularidades psicológicas de este deporte.

Introducción

El desarrollo mundial ha traído consigo la globalización del deporte hacia todos los rincones del planeta ya hoy en día 2010 podemos apreciar resultados deportivos que verdaderamente se acercan a los concebidos limites fisiológicos del organismo humano, el soma continua influyendo pero hace tiempo que dejo de ser determinante para el logro de estos resultados. Cada vez son más similares las preparaciones físicas y técnico-tácticas de los atletas de la elite mundial. Por estas cuestiones es innegable que el fenómeno de la preparación del deportista requiere de un enfoque sistémico, visto desde el orden y ángulo de diferentes ciencias que permita un proceso investigativo integrando las propiedades de sus elementos, el desarrollo de los medios, métodos y técnicas del entrenamiento y sus interrelaciones, tal y como exige un fenómeno de carácter integro y complejo.

Ante tal situación han venido surgiendo una serie de ciencias que han tratado de ir dando solución a las situaciones cambiantes del mundo deportivo; la Psicología del Deporte es una de las ciencias llamada a integrarse de forma activa a las nuevas exigencias planteadas por este efervescente entorno mundial, no en vano desde en 1966 L.Matveiev, eminente estudioso e investigador Ruso de la esfera deportiva, plantea el fenómeno de la preparación psicológica del deportista como un componente mas dentro del entrenamiento, reconociendo el importante lugar que ocupa este factor dentro del conjunto que asegura el logro de las metas propuesta.

El entrenamiento psicológico dentro de la actividad deportiva esta llamado a propiciar que el deportista pueda desplegar todo su potencial de habilidades y capacidades que tienen como base la preparación técnico-táctica, con un sincronismo motor y motivacional óptimo. Cuando un deportista es capaz de hacer coincidir todos los elementos antes mencionados entonces ha alcanzado la llamada maestría deportiva.

Sin embargo uno de los problemas más preocupantes entre los especialistas que tratan de emplear la Psicología aplicada al Deporte hoy día, es la inagotable necesidad de reunir estudios psicológicos que nos permitan conocer y estandarizar los conocimientos psicológicos que se poseen de los deportistas, un conocimiento que adquiere un valor especial cuando lo relacionamos con la actividad es decir con el deporte en cuestión, lo cual posee un alto valor práctico y teórico para este deporte. La preparación psicológica permite la optimización y eficiencia en la formación del deportista, con el control y evaluación científico técnico de cada atleta.

La lucha Greco en Cuba no esta exento al desarrollo de la psicología del deporte, como ciencia que surge para complementar el desarrollo integrador del atleta. La Comisión Nacional de Lucha a partir del análisis valoración y proyección estratégica del entrenamiento deportivo desde el punto de vista psicológico, ha iniciado varias propuestas para lograr resultados mayores que los que se han alcanzado hasta la actualidad en materia de preparación psicológica.

En nuestro país se actúa de forma rigurosa al buscar los medios métodos y procedimientos idóneos para trabajar el entrenamiento deportivo. En el caso especifico de la categoría 12 – 13 años hay que tener presente que son los años de iniciación de los atletas a las EIDE donde los cuales pasaran al desarrollo, consolidación y perfeccionamiento de habilidades y capacidades. Todas y cada una de estas etapas juegan un papel fundamental en el resultado deportivo del atleta a largo plazo y de hay la necesidad y exigencia que debemos tener para crear las bases psicológicas necesarias para los atletas, las cuales le serán de vital importancia en la creciente competitividad del mundo deportivo actual. La preparación psicológica es la piedra angular de la preparación del deportista.

La planificación del entrenamiento deportivo es un proceso muy complejo ya que esta sujeto a los cambios del organismo a los cuales les será aplicado dicho entrenamiento. Todos los componentes del proceso de entrenamiento son de vital importancia, en el caso del que nos ocupa, la preparación psicológica juega un papel determinante en el logro deportivo. Conocer las cualidades de la personalidad y motivacionales de los atletas y del equipo específicamente le brinda al entrenador un conocimiento para crear y establecer metas con dichos deportistas. De ahí la importancia de nuestro trabajo que no es más que poder identificar dichas cualidades para posteriormente ofrecérselas al entrenador para un mejor conocimiento y trabajo con sus atletas. La preparación psicológica le da el colofón a cada etapa del entrenamiento deportivo y a uno de los aspectos fundamentales para los atletas, la obtención de la forma deportiva.

Los estudios en esta área han sido muy diversos, se han realizado en nuestro deporte algunas investigaciones similares a esta, pero en edades diferentes por eso nos dimos la tarea de hacer nuestro estudio en la categoría 12 -13 años ya que como se mencionó anteriormente es donde comienzan los atletas en la EIDE y estos conocimientos permite realizar un seguimiento de los mismos en su paso por las restantes categorías, tanto escolares como juveniles.

Nuestro trabajo se titula:

""Cualidades de la personalidad y motivacionales de los atletas de Lucha Greco Categoría 12 – 13 años de la EIDE provincial Lino Salabarría Pupo de Sancti Spíritus"

Problema científico

¿Cuáles son las características de las cualidades de la personalidad y motivacionales que se manifiestan en los atletas de Lucha Greco categoría 12-13 años de la EIDE provincial Lino Salabarria Pupo de Sancti Spíritus?

Objetivo general

Caracterizar las cualidades de la personalidad y motivacionales que se manifiestan en los atletas de Lucha Greco categoría 12-13 años de la EIDE provincial Lino Salabarría Pupo de Sancti Spíritus

Objetivos Específicos

1.- Sintetizar los fundamentos teóricos y metodológicos que sustentan las características de las cualidades de la personalidad y motivacionales de los atletas de Lucha Greco categoría 12-13 años de la EIDE provincial Lino Salabarría Pupo de Sancti Spíritus?

2.- Determinar el nivel de desarrollo de la motivación hacia la actividad deportiva, su papel regulador, intensidad y el estado de disposición psíquica que caracteriza las perfecciones precompetitivas en los atletas de Lucha Greco categoría 12-13 años de la EIDE provincial Lino Salabarría Pupo de Sancti Spíritus.

3.- Identificar los niveles de ansiedad reactiva, permanente y los rasgos volitivos que caracterizan la personalidad de los atletas de Lucha Greco categoría 12-13 años de la EIDE provincial Lino Salabarría Pupo de Sancti Spíritus.

4.- Determinar los niveles de Extroversión – Introversión, Neuroticismo – Estabilidad y las manifestaciones temperamentales predominantes en la personalidad de los atletas de Lucha Greco categoría 12-13 años de la EIDE provincial Lino Salabarría Pupo de Sancti Spíritus.

DESARROLLO

Fundamentación Teórica

1.1.- Características psicológicas de los deportes de combate

En este grupo se incluyen la lucha libre y greco, la esgrima, el judo, el taekwondo, el boxeo y el karate. Estos deportes son denominados también deportes individuales o deportes sin cooperación y con oposición del contrario, según A.Z. Puni, Joan Riera, A. Thomas y otros. Una de las particularidades más importantes de estos deportes es que el deportista tiene que enfrentarse directamente a un adversario con el cual interactúa prácticamente cuerpo a cuerpo, exceptuando la esgrima en que se mediatiza la relación por el arma.

De ahí que tenga que superar no solo la fuerza física que el contrario antepone a este, sino también la táctica que el mismo utiliza, la técnica que realice en cada uno de los movimientos ofensivos-defensivos y todo ello debe hacerlo bajo un clima de alta tensión, por cuanto el deportista individualmente tiene toda la responsabilidad de alcanzar la victoria, sobreponiéndose a cualesquiera de las barreras psicológicas que le impone la situación y el contrario específicamente. Dado que en los deportes de combate las acciones se realizan con gran rapidez y dinamismo, en períodos de tiempo y espacio delimitados en su mayor parte por las reglas de competencia, con movimientos muy precisos y ajustados a las situaciones competitivas, determinados por la capacidad coordinativa del esfuerzo, muy marcado en función de las acciones que realice el contrario, dichos deportes requieren del desarrollo altamente especializado de un conjunto de percepciones, que permiten la ejecución satisfactoria de cada uno de los movimientos técnicos y de las acciones tácticas que ejecuta el deportista. Por ello es que entre las percepciones un papel importante lo tienen las percepciones de los movimientos propios al realizar las acciones técnicas. La percepción de los movimientos propios está integrado por percepciones y sensaciones tales como:

a) La percepción de la posición del cuerpo y de sus diversas partes.

b) La sensación de los esfuerzos al realizar los movimientos activos.

c) La percepción y la representación de las proporciones de los movimientos realizados (diferenciación de la posición inicial y final de los diferentes segmentos corporales)

d) La sensación de los cambios producidos en la correlación de las partes del aparato motor.

e) Las sensaciones motrices constantemente cambiantes en relación con las variaciones de la longitud de las fibras musculares.

f) Las sensaciones de pesadez del órgano motor al ejecutar movimientos de levantamiento del contrario.

La percepción y representación de la dirección del movimiento está relacionada con los cambios de posición del aparato motor en relación con todo el cuerpo, desempeñan también un importante papel las percepciones visuales, que pasan a ser las predominantes. En las formaciones de esta representación juegan un papel importante la duración del movimiento y también la representación surgida por la actividad del aparato vestibular. El conjunto de sensaciones músculo – motoras al realizar las acciones técnico – tácticas, juegan un gran papel en la elaboración de la capacidad general de dirigir el cuerpo al cumplir las más variadas tareas motrices y constituyen la base de la coordinación correcta de los movimientos, es decir, de la observancia de la correspondencia entre la posición inicial del cuerpo, la actividad del aparato neuromuscular, el grado de resistencia del medio y el carácter de los movimientos y acciones que hay que realizar. En relación con esto al aprender las diversas acciones técnicas, adquiere enorme importancia la exigencia de realizar el movimiento de la manera más completa y acabada.

Es característico en la mayoría de estos deportes la necesidad que tiene el deportista de recurrir a una exacta apreciación de la duración de los ejercicios o de los movimientos que tiene que hacer en correspondencia con lo que realiza el contrario, de ahí el desarrollo de la percepción del tiempo. De esta forma el deportista debe poseer una alta agudeza para valorar el tiempo en que transcurren las acciones así como el tiempo general en que se da el combate.

Las percepciones visuales de la sustitución sucesiva de las imágenes y objetos circundantes, ayudan también a determinar la velocidad de desplazamiento y de la ejecución correcta del movimiento en el espacio.

Durante el proceso de entrenamiento, especialmente los judokas, luchadores y esgrimistas, logran alcanzar un alto perfeccionamiento de la llamada percepción muscular. En el caso de los luchadores y judokas, este desarrollo llega a tal estado de dominio de los hábitos técnicos, que sin ver al contrario pero en contacto con el, se puede ejecutar la acción promedio de la percepción muscular. En los esgrimistas en dependencia del roce y la presión que se ejerce sobre el arma, pueden determinar las intenciones del contrario en relación con un tipo de acción defensiva u ofensiva que este pretenda realizar.

En el proceso de perfeccionamiento de la maestría de estos deportistas, tienen un importante significado el percibir y recordar las acciones técnicas más exactas y tratar de repetirlas, recordarlas y "fotografiarlas" en la memoria, es este el principio más correcto para educar la percepción muscular.

Las características altamente dinámica y los cambios bruscos de posiciones que ocurren en los diferentes deportes de combate, exigen del deportista el perfeccionamiento de las sensaciones de equilibrio, las cuales le permiten adaptarse y atemperarse a estas exigencias, que constantemente le impone el tipo de deporte. En el caso de la lucha y el judo, por ejemplo los deportistas están sometidos a la pérdida de la posición bípeda, a las caídas, a las posiciones de cubito prono y supino de manera simultánea, etc. En los casos de karate, boxeo, y taekwondo están sometidos a diferentes golpes en las distintas partes del cuerpo y sobre todo, en la cabeza, que tienden a provocar en ellos estados de mareo y por su puesto, pérdida del equilibrio, esto implica la necesidad de un alto desarrollo de las sensaciones vestibulares.

A los deportes de combate les es imprescindible desarrollar y perfeccionar la capacidad de reacción compleja a fin de poder brindarle variadas respuestas a las diferentes situaciones de ataques y defensas que ejecuta el contrario, donde la mayoría de sus respuestas son desconocidas para el deportista y en las que él debe "adivinar", es decir, anticiparse a las posiciones del contrario. De esta forma la anticipación esta precedida por el proceso de previsión de la situación técnica que ejecutar el contrario, es típico de estos deportistas la capacidad de inhibirse ante las diferentes fintas y acciones de engaño que ejecuta el contrario. En estos deportes se desarrolla un alto nivel de orientación espacial debido a que sus acciones se ejecutan y desarrollan por lo general en áreas muy limitadas por las reglas.

En tal sentido el deportista debe conocer la posición que ocupa en el área correspondiente frente al adversario, pero aun más, en el judo y la lucha, los deportistas a veces están privados de la percepción visual para determinar si está más o menos cercano o lejano de la línea límite del colchón y tienen que acudir a la capacidad de valorar con exactitud el espacio en que se encuentran y orientarse en esa dirección para tomar una decisión apropiada. De ahí que la orientación espacial sea imprescindible para la obtención de altos resultados competitivos. Saber ubicarse en el lugar adecuado, adoptar la posición correcta y estar en tiempo y forma en el momento adecuado, son los aspectos importantes en la orientación espacial. Desde luego que esta no es solo espacial sino también temporal.

La ejecución rápida y precisa de las acciones técnico – tácticas de los deportistas de deportes de combate está asociada a la capacidad que tienen para orientar de forma centralizada la atención o en su defecto distribuir esta en los diferentes componentes de su ejecución propia y de las variaciones de las ejecuciones de cada una de las acciones técnico tácticas del contrario, es por ello que en estos deportistas la concentración de la atención juega un papel importante en la penetración que el mismo hace de aquellas intencionalidades que tiene el contrario respecto a la ejecución que el mismo debe realizar, y se caracteriza también por la distribución de la atención en tanto que debe ser capaz desvalorar los diferentes puntos de acción del contrario a saber: los movimientos de los pies y sus desplazamientos, los movimientos de cadera, de cabeza, de las manos, etc. Precisamente estas características de la atención son las que le permiten a los deportistas utilizar toda la información necesaria y en consecuencia, elaborar las respuestas que más se avienen a las situaciones que el mismo presenta. Gran importancia reviste en los deportes de combate al igual que en los juegos con pelota, el pensamiento táctico del deportista, este le permite prever la situación, la capacidad para anticiparse, la capacidad para valorar lo que está ocurriendo durante la ejecución inmediata de las acciones competitivas y en consecuencia, brindar las respuestas más apropiadas, más lógicas, más racionales que den solución al problema planteado. La elección de las soluciones tácticas adecuadas para cada situación del combate está íntimamente relacionada con el pensamiento táctico.

Cuando el deportista comienza la preparación táctica para las competencias correspondientes, se apoya grandemente en toda una serie de características fundamentales que puede tener o puede presentar el contrario, entre estas características hay algunas que está n relacionadas con las capacidades físicas, la fuerza, la resistencia, la habilidad, la rapidez y otra como el temperamento y la manera de desarrollar el combate el atleta, la capacidad para mostrarse en el combate, de mantener la ventaja si la logra, o de mantenerse empatado y la posición en relación con el contrario (posición de pie, derecha, izquierda, alta, baja, cercana, media, lejana y otras de las particularidades características de la lucha competitiva). Todo ello se realiza sobre la base de la actividad dinámica del pensamiento, ahora bien no cabe duda que durante la ejecución inmediata de las acciones competitivas, todos estos deportistas operan con aquellas informaciones que de manera inmediata se presentan durante la lucha competitiva, de ahí que trabajen de forma operativa con estas, y ello está asociado directamente a lo que se llama pensamiento operativo, es decir, un pensamiento que se da en la acción, se da en la medida en que el contrario ejecuta determinadas acciones defensivas u ofensivas y en consecuencia el deportista debe actuar.

Según A.Z. Puni muchas veces cuando la acción es muy dinámica, muy rápida y no hay tiempo de realizar un programa, es decir que la expresión verbal del pensamiento no acompaña a la acción, entonces esta se le adelanta a la misma y el deportista tiene que actuar de forma "figurada" o lo que es igual, de manera intuitiva. Esta forma de actuación es muy característica de los deportes de combate.

Un aspecto muy importante de estos deportes es el desarrollo volitivo. Los resultados de alto rendimiento, lo alcanzan los deportistas combativos, personas dotadas de entereza ideológica y física y que gocen de tenacidad y de una voluntad indoblegable. La lucha por alcanzar la victoria requiere del deportista la superación de sus debilidades, vacilaciones, falta de ánimo o pusilanimidades. Es típico de los deportistas de combate el enfrentamiento directo que tiene este con un contrario que está preparado física – técnica – táctica y psicológicamente para vencer a su adversario, siempre en estos deportes el contrario resulta un obstáculo.

La educación de las cualidades volitivas en los deportistas de combate ocurre en el proceso de superación orientada hacia un objetivo de los diferentes obstáculos, relacionados con la utilización de los esfuerzos volitivos y con la utilización de una serie de actividades especiales para el perfeccionamiento de sus componentes estructurales, de esta forma estos deportes requieren del deportista un desarrollo elevado de la decisión, del valor, la iniciativa, la independencia, la perseverancia, el autocontrol y de otras cualidades que determinan el exitoso de envolvimiento competitivo del deportista, frente a los distintos adversarios con los cuales se enfrenta.

Motivación y deporte

En el contexto de la actividad física y el deporte, uno de los campos que despierta mayor interés es el del estudio de los procesos psicológicos de motivación. Pero lo anterior no es una característica reciente en el campo de la Psicología Aplicada a la Actividad Física y el Deporte pues como afirman Marrero, G. y otros, "…la psicología de la motivación ha tenido y tiene un puesto relevante en el panorama de la psicología científica en general y de la psicología del deportista en particular". (Citado González L.G., 2004, c)(4)

Según Edgar Thill, Raymond Thomas y col., 1982 El deporte representa un espacio ideal para desarrollar, investigar y demostrar la aplicabilidad de modelos de motivación que han sido desarrollados en otros campos de la psicología general y aplicada y que la Psicología del Deporte los ha incorporados puesto que "la motivación representa, junto con las capacidades, la variable más importante que condiciona el rendimiento y el grado de eficacia del comportamiento de los deportistas." (6)

Esta ha sido precisamente la tónica de los estudios de Cantón Chirivella, E2000, sobre motivación en el ámbito deportivo. Lo anterior ha provocado que no exista un modelo teórico estructurado y unificado en lo que se refiere al aspecto motivacional en la psicología aplicada al deporte. Dentro de las distintas facetas de la actividad deportiva, el mayor volumen de investigaciones ha tomado como objeto de estudio el deporte competitivo y de alto rendimiento, también el individual y por equipos, así como el deporte infantil y juvenil.

Son muchas las razones que despiertan el interés por abordar el tema de la motivación en el deporte, como el desarrollo de actividades esencialmente voluntarias que necesitan gran cantidad de esfuerzo progresivo y constante, especialmente en el deporte de alto rendimiento. En este, el hombre despliega sus potencialidades en condiciones de elevadas cargas físicas pero también psíquicas, para responder a las exigencias agudas y extremas que imponen los entrenamientos y especialmente las competencias, por constituir un espacio especial e irrepetible para la expresión del atleta. Además, precisamente a través de las competiciones, el deporte cuenta con un componente de resultados fácilmente visibles que facilita los estudios.

Todo lo analizado hasta aquí, junto al vertiginoso desarrollo de los resultados deportivos, ha provocado la implantación de record que anteriormente parecerían imposibles de lograr. Su efímera duración como límites de las capacidades atléticas, ha convertido en objeto de interés creciente el desarrollo de estrategias motivacionales que faciliten la intervención, para una óptima preparación psicológica destinada a alcanzar máximos niveles de rendimiento en el deporte competitivo, lo que ha sido tratado por varios autores.

Por tanto, se requiere la comprensión profunda de los factores motivacionales que afectan la actividad físico – deportiva, así como de los procedimientos de intervención, para crear un clima adecuado que mejore la efectividad de los deportistas y equipos.

El desarrollo conceptual en el campo de la motivación en el ámbito deportivo se ha caracterizado por el cambio de orientación respecto al objeto de estudio. Éste ha evolucionado inicialmente a partir de un interés enfocado en el deportista y su motivación, orientándose hacia aspectos que hacen referencia directa o indirectamente al aumento del rendimiento del atleta en la competencia.

Sólo recientemente se han realizado investigaciones respecto al rol de la dimensión de placer en la actividad físico-deportiva y otras centradas en la actividad que el sujeto desarrolla, ampliándose el número de elementos a tener en cuenta en su estudio y aplicación, prestándole atención a la influencia de aspectos tales como entrenadores, compañeros de equipo, público, contrarios, árbitros, etc.

Por otra parte plantea Garcés de los Fayos, E. y Jara, P., 2003., se ha mantenido un constante interés por conocer los motivos que llevan a las personas a iniciarse en la práctica del deporte, así como a abandonarla o a cambiar de actividad. Sin embargo, escasean modelos de intervención con el propósito de aumentar la satisfacción con la actividad y prevenir el abandono de la misma. (7)

Según Bakker, Whiting y van der Brug, (1993, referido por Cantón, E., 2000) "…en la base de la práctica deportiva pueden influir diferentes motivos. En las investigaciones sobre el tema aparecen la diversión y el placer como dos de los motivos más importantes. También son referidos los motivos de afiliación, necesidad de logro y de excelencia en muchas investigaciones. Igualmente los motivos de salud y la necesidad de compensar las cargas del estudio y el trabajo juegan asimismo un cierto papel".

Barrios, R (2001) refiriéndose a investigaciones de Irwin, Biddle, Ebbek y otros, comenta que entre los motivos que pueden influir en la práctica deportiva están el desafío, la salud, el perfeccionamiento de la aptitud física, la satisfacción que se experimenta, entre otros. Este mismo autor refiere que los motivos que intervienen en la incorporación a la actividad deportiva como los relacionados a la salud entre otros, pueden resultar insuficientes para sostener una participación sistemática, donde resultan más influyentes las sensaciones inmediatas de bienestar y el placer que se experimenta durante la realización de la actividad. (11)

Así mismo González, L.G. (2004, c) plantea que el origen de los motivos deportivos puede hallarse en acontecimientos, coyunturas y vivencias provenientes de familiares y amigos deportistas; así como en la existencia de una instalación deportiva cercana. De igual forma se pueden encontrar en las satisfacciones personales que provoca su práctica, como ejercitación de capacidades, perfeccionamiento estético corporal, promoción de salud y de relaciones sociales y goce por representar grupos y colectivos de pertenencia, etc. (8)

Este propio autor ha expresado que muchas de las líneas teóricas desarrolladas en el ámbito de la actividad física y el deporte -en cuanto a motivación se refiere- son provenientes de otras áreas de aplicación. La incorporación de estas teorías al contexto deportivo cobra relevancia al analizar la posibilidad de que un deportista puede hallarse intensamente motivado por su deporte (sacrificando con ello la satisfacción de otras importantes necesidades por implicarse de manera muy comprometida con la tarea deportiva, en virtud de una elaboración personal sobre sus motivaciones) y sin embargo, tener dificultades para hacer uso de las energías que tales motivos generan. A su juicio, no basta con la aplicación de un enfoque cognitivo-afectivo que descubra la tendencia orientadora de la personalidad y, con ella, la intensidad de los motivos deportivos. En el deporte se necesita la determinación de acentos motivacionales que tienen que ver con aspectos procesales, instrumentales y de contenido de la motivación.

Precisamente Cantón, E. 2000, uno de los errores que a menudo se manifiestan en el ámbito deportivo es creer que el solo hecho de dedicarse a una actividad agradable, por la cual recibe beneficios materiales en muchos casos elevadísimos, es suficiente para que el deportista esté siempre motivado. En muchos casos se considera a la motivación como una característica interna de personalidad o como un factor o variable externa, de forma excluyente. Lo anterior lleva a considerar que la conducta motivada del deportista es una función primaria de sus características internas, lo que lleva a ignorar, o a no valorar suficientemente en la práctica, la influencia a veces decisiva que ejercen los factores situacionales sobre la motivación. (9)

En este sentido, es necesaria la exploración de cualidades motivacionales como motivación de logro, carácter intrínseco vs. extrínseco, aproximación al éxito vs. evitación de fracaso y otras que favorecen un abordaje personalizado de la conducta competitiva.

Dentro del contexto deportivo una de las teorías más influyentes ha sido la Teoría de la motivación de logro de Atkinson, 1974; McClelland, 1961. Posiblemente se deba al hecho de que en el ámbito deportivo pueden apreciarse situaciones típicas de logro que llaman la atención de personas con elevados niveles de necesidad de logro, en las que es posible evaluar el rendimiento. (10)

González, L.G., 2004, c plantea en el contexto deportivo la motivación de logro parte de las investigaciones clásicas de Murray. La teoría de motivación de logro, fue definida más tarde por McClelland y Atkinson como una disposición estable a la búsqueda de la excelencia en cualquier situación que se puedan aplicar normas de evaluación. (8)

Atendiendo a lo anterior, los sujetos motivados al logro muestran inclinación por obtener un resultado significativo, a mejorar y perfeccionar las tareas. Igualmente se considerará que cuando un atleta está motivado por el logro, prefiere tareas en las que sea responsable de los resultados, no conformándose con actuaciones discretas o con ocupar lugares por debajo de sus posibilidades reales, y persistiendo en la tarea ante situaciones difíciles. De esta forma, predomina un respeto hacia la tarea deportiva y hacia sí mismo como deportista. Mientras que los atletas no motivados por el logro, tienden a preferir tareas en las que no se sientan totalmente responsables de los resultados, con un grado de dificultad sencillo. No se observa preocupación por mostrar excelencia en cada actuación, pudiendo manifestarse el conformismo cuando la actuación no responde a las potencialidades.

En los últimos años, el paradigma cognitivo ha ganado gran espacio en cuanto a estudios sobre la motivación se refiere, y es su principal objetivo estudiar la manera en que los individuos adquirimos, nos representamos y utilizamos el conocimiento. Dentro de esas teorías se encuentra la Teoría de la Atribución (Weiner, 1979), quien destacó el papel de los pensamientos, especialmente de las atribuciones causales, en la comprensión de la motivación.

Según Marrero y col., 2000 lo planteado en esta teoría, el sujeto puede considerar las causas de los resultados (atribuir los resultados) a sí mismo (atribución interna) o al entorno que lo rodea (atribución externa). Ambas atribuciones se agrupan en la dimensión Locus de Control que junto a la dimensión Estabilidad, a partir de la cual las atribuciones se pueden clasificar en estables o inestables, dan como resultado en su combinación cuatro categorías: capacidad (interna y estable), esfuerzo (interno e inestable), dificultad de la tarea (externo y estable) y suerte (externa e inestable).

Cantón, E (2000) ve las aportaciones más importantes de esta concepción al ámbito del deporte han sido en cuanto al éxito y al fracaso. La teoría permite constatar que las experiencias pasadas afectan de manera importante a las atribuciones causales que los atletas dan a sus éxitos y fracasos, haciendo que cuando los resultados son coherentes con las experiencias pasadas, las atribuciones tienden a ser estables. Esto ha permitido llegar a conclusiones que han repercutido positivamente como que los sujetos pueden llegar a una situación de indefensión cuando las experiencias de fracaso se repiten. (9)

Albert Bandura también le concedió un papel importante a los factores cognitivos sobre la conducta. En su teoría de la autoeficacia este autor considera relevante el papel de pensamiento auto-referente sobre la regulación del la conducta. En este sentido la concepción de autoeficacia se plantea como el conocimiento y las conciencias que tengan las personas sobre sí mismas en cuanto a sus capacidades para organizar y llevar a cabo estrategias para la acción en situaciones esperadas o para distintos niveles de rendimiento.

Este modelo cognitivo-social que explica la conducta a través de factores psicológicos, cognitivos y ambientales, propone tener en cuenta las fuentes de información que son sujetas a un complejo procesamiento cognitivo de las cuales dependen las expectativas de auto-eficacia de los individuos.

Estas fuentes de información incluyen:

  • Logros de ejecución: la información proviene de las experiencias propias de maestría. Los juicios de autoeficacia son afectadas por éstas cuando son percibidas las experiencias repetidamente como éxitos (aumentándolas) o como fracasos (disminuyéndolas). La influencia de la percepción de las experiencias de ejecución sobre la expectativa de eficacia también depende de:

  • La dificultad percibida de la tarea

  • El esfuerzo realizado

  • Cantidad de ayuda recibida

  • Patrones temporales de éxito y fracaso.

  • Experiencias vicarias: tiene que ver con la comparación social. Los sujetos se someten a un proceso de comparación con los demás para juzgar sus propias capacidades, que van a tener que ver con la experiencia de los sujetos con la situación o tarea.

  • Persuasión: la información proviene de la persuasión verbal, el diálogo interno, la imagen y otras estrategias cognitivas que serán más efectivas en la medida que las valoraciones sean realistas. El efecto de la persuasión también depende de las características que posea el experto que la emita como la credibilidad, el prestigio, la veracidad y la calidad.

  • Estados psicológicos: la valoración cognitiva de los estados psicológicos proporciona información al asociar la activación psicológica con la duda, el miedo o con el hecho de estar psíquicamente preparado para la ejecución.

Estas fuentes de información no son excluyentes y se diferencian en la intensidad de su influencia sobre el sujeto.

Bandura propuso también el abordaje de la expectativa de los resultados y la definió como la convicción de que una determinada acción producirá un determinado resultado. Ambas expectativas intervienen como actividades mediadoras entre la acción y el resultado esperado.

Esta teoría ha aportado al ámbito del deporte el establecimiento de una relación entre autoeficacia y nivel de ejecución, lo cual se comprueba en investigaciones donde los sujetos con niveles mayores de autoeficacia se caracterizaban por una mayor persistencia y un mayor esfuerzo en las ejecuciones. Por otra parte Puig y Villamaría (1995) llegaron a la conclusión en sus investigaciones de que los atletas con un nivel mayor de autoeficacia estaban más motivados intrínsecamente. (Referido por Marrero y col., 2000)

En el presente estudio están contenidas las expectativas de éxito (resultados según Bandura) y de eficacia. Las primeras se refieren a la confianza de que una determinada conducta llevará a la obtención del éxito una vez realizada; es entendida como la certeza subjetiva de que se obtendrá el éxito en la competencia. De esta forma, lo que más le interesa al atleta es ganar la competencia, y se centra en obtener el éxito.

En lo concerniente a las expectativas de eficacia, estas van a constituir una valoración subjetiva de que un buen desempeño técnico elevará la probabilidad de lograr el objetivo competitivo. Es la convicción, la confianza o estimación probabilística que el atleta tiene de que es posible realizar una determinada conducta o serie de conductas deseadas. Durante la realización de la actividad, el atleta va a tratar de lograr el mayor grado de perfección en la realización de la tarea.

Igualmente, los problemas del carácter intrínseco o extrínseco de la motivación del deportista interesan a los psicólogos del deporte. Este aspecto ha sido abordado sobre la base conceptual de la Teoría de la Motivación Intrínseca vs. Motivación Extrínseca.

Según Vallerand y otros (citados por Marrero, 2000) el deporte es una de las actividades en las cuales las personas participan motivados predominantemente de forma intrínseca, por placer, diversión etc; sin embargo es un hecho que el deporte trae consigo innumerables recompensas o estímulos ajenos como medallas, trofeos y otros premios, incluido el reconocimiento social, lo que hace pensar que las motivaciones intrínsecas no son exclusivas en la regulación del comportamiento del deportista.

En este sentido se ha podido determinar -según Deci y col. (referidos por Marrero y col., 2000 y Cantón, E., 2000) – que las recompensas extrínsecas pueden afectar a la motivación intrínseca de dos formas: disminuyéndola cuando los deportistas perciben un cambio en el locus de control de interno a externo, o incrementándola cuando proporciona información que permite aumentar el sentimiento de competencia.

Se puede afirmar que en los deportistas motivados de manera predominantemente intrínseca, el motivo está relacionado con la propia práctica deportiva. Los atletas participan en los entrenamientos y competencias por el placer que proporciona la actividad deportiva en sí misma. El deportista está centrado en la satisfacción personal por la actividad, sin interesarle o buscar de manera especial beneficios ajenos a la propia actividad. Estos atletas se sienten satisfechos con el hecho de sentirse competentes y con control sobre la actividad que enfrentan. Esta motivación es responsable de la iniciación y la persistencia de la conducta.

González, L.G., 2004, c, Por otra parte, la motivación extrínseca se deriva de las consecuencias y beneficios de la práctica deportiva. Los atletas participan en los entrenamientos y competencias para obtener satisfacciones no relacionadas directamente con la práctica por lo que la conducta no se realiza por sí misma, sino por la búsqueda de recompensas externas. (8)

Dentro de la actividad deportiva se desarrollan otras teorías motivacionales, como la teoría de la competencia percibida, la de perspectivas de metas; la de ansiedad de prueba, la de la inversión y otras, que excede el alcance de la presente investigación pero pueden ser encontradas en varios textos de la especialidad.

Al analizar lo que hasta el momento se ha referido, es posible percatarse de que no sólo la intensidad, sino la cualidad de la motivación, constituyen elementos reguladores de la personalidad del deportista. En dependencia de las peculiaridades de la actividad deportiva concreta y de sus exigencias, el éxito en el deporte depende de la posesión de cualidades motivacionales que permitan al deportista hacer un uso más eficaz de la energía y dirección de sus motivos deportivos. En este sentido, es importante la exploración de cualidades motivacionales tales como motivación de logro, carácter intrínseco vs extrínseco, aproximación al éxito vs evitación de fracaso y otras que favorecen un abordaje personalizado de la conducta competitiva. (González, L.G., 2004, b)

La adolescencia y la actividad física

Es la etapa de desarrollo entre los 11-12 años hasta los 14-15 años. Representa el paso de una etapa de la vida a otra, ya que estamos en presencia de un período donde comienza la transición entre la niñez y la adultez. Muchos autores consideran a este período como difícil y crítico, debido a la complejidad e importancia de los procesos en desarrollo. En fin, es una etapa distinta por sus características biológicas, sociales, cognitivas, afectivas, motrices y por las formaciones psicológicas adquiridas; sin menospreciar por supuesto, la coexistencia de rasgos infantiles y adultos, pero teniendo en cuenta la presencia de cualidades psíquicas más maduras con una heterogeneidad de manifestaciones, donde se encuentran algunos factores que frenan o que acentúan los rasgos adultos.

Para iniciar esta etapa de desarrollo, retomaremos dos párrafos que se destacan en el libro"Yo Adolescente" de Susan Pick de Weiss y Elvia Vargas-Trujillo:

"Cierta mañana me levanté, fui al baño a tomar una ducha para arreglarme e ir a la escuela. Ese día me di cuenta que estaba cambiando, que ya no era la misma persona, que mi cara se veía diferente, otras partes de mi cuerpo las encontré extrañas como las de los adultos, me llamaban más la atención las personas del sexo opuesto, mis ideas también cambiaban, me sentía a la vez adulto y niño, libre y atado, feliz y triste, atractivo y feo, fuerte y débil, sinceramente no sabía lo que pasaba.

Algo que me hizo ver que estaba cambiando fue que tenía mayor número de discusiones con mis padres.

Partes: 1, 2, 3
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