Desprenderme de los ligamentos del organismo físico se tornaba asunto resuelto, así no sea fácil en el campo de la consciencia pura. Inconscientemente, millares de seres dejan el cuerpo todas las noches y deambulando por el mundo de los Espíritus, empero conscientemente y en pleno conocimiento, son pocos quienes identifican esa situación; se complacen en esperar la caída de la noche para sumergirse en el otro lado de la vida. Vagan a cálculo o buscan deliberadamente determinados locales donde satisfacen sus necesidades o pasiones.
En aquella noche, estábamos citados para una visita especial.
Eleuterio fuera designado para acompañarme. Me preocupaba últimamente el desenlace final o la vuelta al mundo Espiritual y, percibiendo tal vez mi inquietud los amigos de planos superiores me atendieron el justo deseo de aprendizaje.
Percibí que Eleuterio vestía ropaje de tonalidad verde oscuro al contrario de la túnica luminosa de los Espíritus superiores. Era en la realidad como yo, una persona normal. Nada indicaba que el viniese de esfera diferente.
__ vamos, me dice el mensajero. Como debe saber recibí órdenes de acompañarlo y orientarlo en este lado de la vida. Quiero cumplir fielmente mi misión!
Diciendo eso sonrió significativamente.
__ Hoy visitaremos algunos amigos que sufren el dolor de las pasiones sin remedio.
Observe a Eleuterio sorprendido.
__ ¿Cómo?, aquí también hay pasiones sin remedio
__Si, aquí es donde las pasiones no tienen remedio, dice el. Aquellos que se quieren desesperadamente, buscan encontrarse a cualquier precio y generalmente se encuentran cuando vibran en la misma faja vibratoria. Es más fácil vencer las convenciones Sociales.
__ Entonces, vamos ¡– manifesté alegremente. Hay mucho deseo por conocer aquellos que viven una vida diferente.
Alzamos vuelo silencioso con el simple deseo de partir. En realidad deslizamos en el espacio. Las cosas quedaron atrás sin que les percibiésemos detalladamente. Nos parecía
Un filme que se desenvolvía en nuestra mente.
En breve penetramos en agitada avenida de la Capital bandeirante, suntuoso edificio palacete de Ricos, y buscábamos la alcoba de respetable matrimonio; .en el lecho, dos cuerpos reposaban y su respiración anhelante mostraba que algo especial estaría ocurriendo con ellos.
__ Nos sintieran la presencia ___ explicó Eleuterio y por eso, se afligen debido a nuestra aproximación. Matrimonio relativamente joven. Ella con unos treinta y cinco años y el con 45 aproximadamente.
__ Busquemos al marido primero__ esclareció el guía.
Observé que diciendo eso, Eleuterio tomaba en las manos con mucho cuidado un hilo oscuro que partía de la cabeza ligada a otro que salía del ombligo del hombre.
Los examinó y dijo:
__ Sigamos en esta dirección. Lo acompañe intrigado.
Alcanzamos en breve extraño burdel, repleto de humo y bebidas donde criaturas decaídas se sumergían en el desvarío de las pasiones más infelices.
En una mesa, sentado con una mujer horrible, el hombre se entregaba a las más bajas y torpes actitudes.
Me asusté al verificar sus fases desfiguradas y decadentes. Los ojos un poco cerrados, las carnes del rostro flácidas, en fin, en completa y suprema decadencia moral. La mujer era una de esas infelices que aparecen en las calles de parís mendigando un poco de amor.
¿Esta viendo ¿ __ Preguntó Eleuterio. Ese desdichado pasa la vida de esa manera. Durante el día es figura decente y respetable de la Sociedad Paulista, en pero en la noche busca lugares como este para dar vía libre a su anhelo o deseos de desórdenes.
Nos aproximamos a los dos para escuchar lo que hablaban.
__ Como usted sabe, __ decía el hombre __ mi vida con ella es muy desdichada. Es una mujer buena, mas no me ama ni me comprende. Durante toda mi juventud, después del matrimonio que se efectuó hace más de diez años, me negó el cariño, y afecto.. En los primeros tiempos reaccioné mucho y me esforcé por mantener una actitud compatible con mi posición social. Sin embargo el hambre de sexo me conduce poco a poco a estos lugares, donde de alguna manera encuentro el placer y la alegría que ella me niega. ¿Que hacer yo? traicionarla públicamente no puedo. Me falta coraje para desafiar a la Sociedad. Aún allá respeto a los hombres. Huyo, pues, para esta región donde las mujeres como usted me satisfacen los anhelos de la animalidad.
Vi. que el hombre lloraba, talvez tocado por las vibraciones de nuestra presencia. La mujer, mentalmente más inferior, no comprendía bien el drama del hombre y respondió:
No lo hace mal, déjala allá! Yo estoy aquí para consolarte y darle aquí lo que necesitas!
Parece que en lo íntimo del hombre se reveló con la naturaleza de la mujer porque la apartó con un gesto brusco y salió de allí tambaleante por la puerta hacia fuera.
___ Volvamos __ habló Eleuterio. El ahora buscará la casa y retornará a las fajas del cuerpo físico.
No demoró y retornamos al interior del Palacete donde la señora dormía en paz, silenciosamente. El hombre retomó el cuerpo con violencia y despertó asustado como quien presintiese a alguien en el cuarto, mas no tubo coraje de despertar a la esposa. La observó y retomó el sueño, en adelante menos agitado.
___ ¿y ahora que ocurrirá con el? __ Interrogué.
___ Nada, quedará en el propio cuerpo hasta despertar en definitivo___ explicó el amigo espiritual; todavía, mi estimado, busquemos conocer los caminos de la mujer. Dijo eso y salimos.
CAP, II
Ella
En breve alcanzamos una zona más escampada, en lo alto de pequeña colina, se erguía majestuoso edificio, antiguo colegio de monjas carmelitas, que pasaran la vida encarceladas en silenciosos cubículos olvidadas del mundo.
Extrañé el lugar. Eleuterio, sin embargo me alertó.
_ Aquí aún permanecen muchos Espíritus de monjas que continúan practicando el ayuno el celibato y los sacrificios inútiles, aliados a una renunciación, ahora incomprensible para todos. Se prenden a formas de pensamientos estereotipados por la voluntad de alcanzar el Cristo por la renunciación mal orientada y con eso al contrario de elevación espiritual.
Estacionan en el tiempo como prisioneras comunes que se arrestase por si mismas.. Jamás en esa pretensión alcanzaran el paraíso que sueñan.
Entramos, a nuestro paso, muchas de ellas se espantaban sorprendidas con nuestra presencia, que les parecía completamente incomprensible. Otras nada percibían, tan embebidas estaban en sus oraciones. Fases encorvadas y su piel sin color, amarillentas tal vez por el tiempo. Algunas trabajaban. Andando de un lado para el otro conduciendo objetos caseros. En el salón principal de alimentación, naturalmente, lugar animado en otrora por aquellas que eran las servidoras de las encarceladas, encontramos bella figura de mujer doblada sobre pequeño mueble que simbolizaba una mesa, vestida de blanco, con sencilla ropa de Hermana de la caridad , mantenía el pensamiento distante, tal vez en larga
Oración.
___ No esta orando, dice el benefactor. Esta meditando, preocupada por el marido.
Evidentemente la manifestación de espanto expresada en mi rostro, recordó a Eleuterio que yo necesitaba de mejores esclarecimientos.
__ Realmente, eso es verdad, confirmó ella. ¿Mas que vamos hacer si cometemos un terrible horror en nuestra vida?. Si no puedo deshacer los lazos que me ligan al hombre con quien me casé, procuro sin embargo huir de el para que no se consumen los actos indignos presididos por lo maligno!
Diciendo esas palabras, sus fases se inflamaran y sus ojos se fogueaban.
__ ¿Entonces, usted no admite la necesidad sexual de aquellos que permanecen en la carne?
__No! no, y no! __ golpeó ella con las manos y con los pies en una actitud enérgica de rechazo. No acepto!
Eleuterio volvió a la carga.
__ Mi amiga, el acto sexual entre los esposos es ley de Dios y nadie puede contrariar la naturaleza sin incurrir en penalidades rigorosas impuestas por la propia ley de evolución! usted será llamada dentro de poco tiempo, si no en esta misma vida terrena a rescatar con dolores su fuga. El sexo es sagrado y respetable. Nada hay que impida su pleno ejercicio dentro del sagrado instituto de la familia. Fue Dios quien creó el sexo para alegría de las criaturas y para que el propio hombre gestase las otras formas que deben habitar la tierra, colaborando de ese modo con la maravillosa obra de Dios. Nadie debe tomar como inmundo aquello que Dios santificó. ¿ no fueron esas las palabras dictadas al apóstol?.
Ella silenció pensativa después volvió a decir.
___ infelizmente, no puedo comprender eso. Si la virginidad y la pureza son atributos Divinos. Sexo para mi es apenas una inmundicia!
Bien, empero usted pone en riesgo la responsabilidad de su compañero, espíritu que reencarnó con determinado compromiso de elevado tenor espiritual y que por su falta de comprensión en el campo sexual podrá también en la carne volver a la compañía de antiguas amistades que yacen en el fondo de los milenios.
Despierto para otros amores podría perderse así mismo y entonces, mi apreciada, esa responsabilidad recaería sobre usted en la totalidad ya que lo abandonó a su propia suerte!
__AH!__ eso no! cada uno responde por sus propios actos. Si el practica el mal que el responda por sus propios actos. No tendré que ser yo quien venga a ser responsabilizada por lo que el hice.
__ Usted está muy equivocada, reafirmó el guía. Su responsabilidad en ese caso es de las mayores. ¿Usted ya se olvidó de los compromisos que asumió para con el? Uno de esos compromisos justamente es el de defenderlo de las fuerzas inferiores que buscaran atraerlo para su radio de actividades pecaminosas desviándolo de los sagrados compromisos con Jesús.
Ella silenció al escuchar el nombre de Jesús.
__ está bien. Lo voy a pensar, todavía, continuo creyendo firmemente que el sexo es inmundicia!
Nos despedimos y Eleuterio golpeando levemente en mis hombros insinuó:
__ No siempre la ley que nos gobierna es la ley de Dios. Ella huye de una ley mas caerá en el dominio de otra más rigorosa. Aquellos que huyen de los compromisos de la Divina ley se precipitan vertiginosamente en los brazos del dolor que es ley de hierro
CAP. lll
Sexo
Evidentemente, yo fui despertado para el estudio del problema sexual en fase de la Espiritualización. Como sería considerado en el plano Superior y simplemente en el Plano Espiritual, ¿allí hay sexo?
Mis pensamientos me dominaban intensamente la casa mental. En la realidad, el problema de aquellos conyugues tal vez fuese apenas el problema de todos…
Eleuterio, espíritu de cierta envergadura, probablemente me leía el pensamiento. Porque, repentinamente me habló.
__ El problema sexual no se restringe solamente a la esfera de la carne o al mundo de la tierra. El va mas allá del común entendimiento humano. Sexo, en las esferas espirituales no significa apenas macho y hembra, órganos femenino y masculino, relaciones sexuales. En nuestras esferas, la palabra sexo es más significativo___ mí apreciado ___ este Espíritu es apenas la esposa de aquel hombre que visitamos. En las horas más silenciosas de la noche, deja el cuerpo y busca este recinto, donde en otrora practicó como Hermana Carmelita la mas terrible renunciación. Ahora casada no consigue aceptar al marido sexualmente, y este que le tiene, en la realidad profundo amor, empero que, por lo tanto, aún siente el hambre sexual propia de aquellos que estacionan en ciertas fajas vibratorias, busca espiritualmente los prostíbulos y se sumerge en la lama oscura de los desvíos mas terribles.
Contemplé a Eleuterio, inmensamente sorprendido
___ ¿Y ella? ¿No tiene responsabilidad Espiritual?
__Si, tiene responsabilidad Espiritual muy grande en el ministerio de evaluaciones los asentamientos relativos a ella son muy extensos. Espíritu antiquísimo, ella viene de Grecia y del Dios Orfeo y de los misterios de las más puras Sibilinas. En Roma vistió la túnica de las Vestales. De hecho posee un pasado de pureza sexual y moral de enorme respetabilidad, a pesar de todo, asumió el compromiso de ayudar espiritualmente al compañero y defenderle la honra. Y eso solo ella podría hacerlo evitando que el venga a caer en tentación en la carne perdiéndose así. A su vez, espíritu de prestigiosa fuerza de carácter forjado en los circos de Roma, y en las luchas de los ejércitos Romanos, el se mantiene en el mundo la apariencia del hombre correcto y honesto. En la noche, ya libre de los lazos que lo prenden a la carne, busca las satisfacciones más fáciles al lado de compañías despreciables
__ ¿y en el retorno a la carne?___ interrogue. ¿El no guarda recuerdos?
__ guarda vivos recuerdos. Al despertar a veces recuerda muchos pasajes de sus orgías
Nocturnas, empero lo toma como sueños ilusión o pesadillas. Es lógico que en la vida común de relación, los problemas sexuales le viene permanentemente al pensamiento y la presencia femenina siempre lo perturba un poco.
Miré la joven y nos aproximamos.
El aura le envolvía en relativa tranquilidad el pensamiento. A pesar de eso, cierta aprensión le dominaba el Espíritu.
Eleuterio y yo, no éramos percibidos, pues nos manteníamos invisibles para ella por última decisión del amigo espiritual, este le aplicó pases magnéticos.
Le habíamos dado nueva dirección a nuestros pensamientos y a las fajas vibratorias de nuestro Espíritu.
Pareció sentirse bien, mas luego enseguida identificó nuestra presencia. Eleuterio le hace un gesto significativo, y ella permaneció donde estaba, aguardando tal vez sin saber nuestro pronunciamiento.
___ querida hermana, le dice el, aquí estamos en visita fraternal.
___ pues nos respondió educadamente. No es la primera vez que benefactores de lo alto nos visitan.
Estoy acostumbrada a identificar los ángeles del Señor!
Me impresionó el lenguaje que usaba. Intentó besar las manos de Eleuterio mas este se esquivó. Ella, sin embargo insistió:
__ ¿a que debo la honra de la visita, entonces?__ quiero saber.
___ Estamos en un paseo de estudio afirmó Eleuterio. Somos aprendices de las leyes de Dios y vinimos a visitar este Colegio donde tantas hermanas practican la renunciación.
Agradeció con una mirada.
__ nos parece a pesar de todo, expresó Eleuterio, que algunas monjas llevan muy lejos la renunciación…
¿Como así? Preguntó tímidamente. ¿No somos perfectas?
___No digo eso, empero noto que algunas como usted aún permanecen ligadas a la tierra en compromisos inevitables ¡
Un conjunto de cualidades o características femeninas o masculinas, positivas o negativas, neutras, si así se puede decir y si el acto sexual se puede procesar en otro campo de vibraciones
En el resultado de transferencias el hombre común aún no conoce el campo del amor. Es natural que en la esfera de la carne ni el hombre entienda que sexo es apenas, las relaciones de macho y hembra de manera que todo termine en relaciones sexuales. Sin embargo en nuestro plano, sexo significa algo más. Buscamos la identificación de las almas y la unión de los corazones. Puede haber, en el mundo, sexo sin amor en cuanto que aquí generalmente en las mentes mas elevadas existe amor sin sexo, considerándose como sexo los órganos sexuales. Eso no quieres decir que las almas no presenten los órganos sexuales.
Por muchos milenios algunos ostentarán el emblema de Adán.
Sonreí ante la apreciación de Eleuterio: emblema de Adán: solamente espíritu de aquel quilate se recordaría de dar tal nombre a los órganos masculinos!.
CAP. IV
Avante
Las palabras de Eleuterio aún repercutían en mis oídos y mi ansiedad de saber más se tornó insoportable. Sin embargo el agregó:
__Mi hijo, la verdad debe ser dicha…fuera de eso nos arriesgaremos a establecer el desorden en la casa de Dios.
Me conformé con la enseñanza. ¿Pues que podía hacer?
__ No debemos dar más de lo que la mente humana puede contener___ esclareció el gran amigo. No solo usted o yo, empero millones de criaturas en el mundo, ansían conocer más verdades, sin embargo, aún, desdichadamente, no tienen condiciones mentales para saber
Mas… Somos obligados a guardar el futuro. El campo sexual, sobre el punto de vista espiritual, es terreno virgen, a pesar de todo, debemos ir despacio… proseguimos.
Eleuterio me convidó a visitar desagradable colonia de mujeres perdidas.
__ ¿Mas, existe eso? __ me sorprendí.
__ existe mucho más de lo que usted piensa. El mundo de la muerte es apenas el mundo de la vida. ¿No es igual? y allí como aquí los sentimientos son los mismos. Nadie alcanza la santidad por el simple hecho de haber desencarnado. La muerte solamente despoja al hombre de la ropa de la carne. La santificación es obra de cada uno. Oremos, mi hijo, la oración es señal para caminos mejores. Y pidamos a Dios no nos deje caer en tentación.
Pronunciando esas palabras Eleuterio emitía extraña luminosidad exteriorizada en pleno pecho como estrella de la mañana.
Comprendí la elevación de su pensamiento y me admire que apenas en pleno siglo humano de la astronáutica viniesen los Espíritus Superiores a instruirnos sobre sexo.
La marcha se hacia ahora por región oscura y las vibraciones que llegaban hasta nosotros eran inquietantes. Yo ya sentiría cosas semejantes y hasta peores en otra oportunidad. Por lo tanto, la naturaleza de estas nuevas vibraciones me inquietaba. A mi mente comenzaba a llegar imágenes de mujeres semidesnudas, como si mi mente fuese una pantalla de televisión…Me asusté y procuré armarme con las defensas mentales constituidas por el acerbo de sentimientos cristianos, que me animaban. Solo el Cristo sería capaz de salvarme, pues en verdad yo me sentía ligado prodigiosamente al campo sexual como si allí mi Espíritu hubiese sufrido a través de los tiempos y de las más duras pruebas.
__ yo tengo una espina en la carne que me fue dada por Satanás para bofetearme.
Eleuterio pronunció esas palabras del apóstol Pablo con la intención de instruirme. La recibí con inmensa humildad y consolación
Si Pablo sentía en la carne violentamente el Espíritu del sexo, el que fuera apóstol del Señor y si lo sentí después de haber conocido a Jesús, pues que podría esperar yo, viejo Romano de las luchas mas terribles del Imperio y Griego dedicado a la sensualidad del arte Edénico.
Es lógico que mi pensamiento aún en lucha con el sexo se armarse de la mejor buena voluntad para resistir el asedio de las sombras.
CAPT. V-
El valle
Caminábamos al margen de extenso valle limitado por una cerca aparentemente igual a los alambrados que cercan los campos de deporte, con todas las apariencias de una frontera común y natural.
Ante nuestra expresión de asombro Eleuterio esclareció:
__ El parque está encerrado al estilo de las cercas comunes de la tierra, en cuanto que el material usado es otro. Es necesario eso, para que las mujeres que aquí habitan no intenten salir. El terror a la trasgresión de las normas de la Institución le acarrea extensos sufrimientos. Aquí como en el mundo, criaturas de ese nivel Espiritual difícilmente pueden comprender el amor. Por eso, son disciplinadas aún por el terror. En la antigüedad se decía que "el temor de Dios es el principio de toda la Sabiduría" así hoy nosotros, estemos luchando para que el amor de Dios sea el principio de toda la Sabiduría" del uno al otro la distancia es muy grande. Solo es tiempo conseguirá hacer con que la mente humana acepten las reglas de Jesús. Los Espíritus endeudados luchan siempre contra la aplicación y la vivencia de la Ley de Dios. En las fajas de los sub-mundos Espirituales, vivir la ley es aún problema complicado.
Eleuterio se cayó y nosotros comprendimos que llegaba la hora de atravesar los portones de la Institución. Allá adentro nos esperaban los Espíritus de las mujeres perdidas, recluidas allí por amor de algunos.
Aún no esbozaba bien ese pensamiento cuando vi. a una mujer desgreñada de carrera hacia nosotros. Cabellos largos desordenados sobre los hombros, vestido sucio, descalza… se agarró a la cerca y observó con miradas de fuego, lujuriosa, tan poderoso, que sentimos que sus vibraciones nos alcanzaban vertiginosamente acompañándonos, al ritmo que andábamos, agarrada a la cerca, retorciéndose en manifestaciones sensuales indescriptibles, y, de repente antes que pudiésemos prever o suponer, nos hizo un gesto grosero y violento poniendo las manos en sus órganos genitales, en una exhibición de tremenda repercusión.
Nos sonrojamos de vergüenza. Ella, sin embargo, nos sonrió como un animal desesperado que se ofrece. La furia del sexo brillaba en su mirada y el deseo más intenso se expresaba en sus manos crispadas.
Sin embargo, no tuvo el coraje de atacarnos, empero nos acompañó.
Eleuterio nos enseñó:
Mí apreciado, prepárese para lo mejor.
De hecho, una multitud de mujeres de aquel tipo asomó, surgiendo del pajonal o de los pequeños matorrales pues venían a saludarnos con demostraciones de sensualidad. Casi todas jóvenes y algunas realmente bonitas, exhibiendo piernas, senos y cuerpos capaces de despertar en el sexo opuesto, deseos desesperados. Lo que sin embargo, mas me impresionaba eran las emisiones de vibraciones, en catapulta que les partían del organismo exaltado viniendo hacia nuestra dirección. ¿Como huirle a la carga?
__Ore intensamente, aconsejó Eleuterio.
Oramos, a pesar de todo, las fuerzas de esas vibraciones eran poderosas, inmensamente poderosas. Solo Eleuterio puede impedirnos de caer en tentación, colocando sus manos luminosas sobre nuestra cabeza y nuestro corazón. Imágenes de orden Superior pasaran a brillar en nuestra mente y entonces un fenómeno de profundo significado se desencadenó en nuestra casa mental. Todas aquellas mujeres lascivas y sensuales a nuestros ojos, se transformaban como por encanto y pasamos a verlas como hermanas bien amadas.
Un extraño coraje nos dominó el Espíritu. Nos aproximamos a ellas y conversamos con aquella mujer que nos devoraba momentos antes con la mirada.
___ MI hija: le hablamos cariñosamente. Usted es tan bella y tan pura, y diciendo eso, le alisamos los cabellos desgreñados. Tal vez tomada por aquella vibración que parecía de Eleuterio y a través de nosotros, se calmó, empero respondió:
__¿Usted no me reconoce? ¿No, aún no me reconoce?
La miré confuso y ella esclareció:
__ Yo soy Zaira, la Judía que se perdió en Roma, en el reinado de Cesar Augusto, a quien
Usted recibía, muchas veces, en el palacio Imperial! Desde aquella época usted me impele!
Ya deseaba ser Santo!
Antes que yo pudiese preverla completamente loca emitió una terrible carcajada y escapó de nuestras manos:
___ ¿Santo? ¿Quien es usted para ser Santo? Todavía hoy anda detrás de ese Jesús! Que el Cesar Nerón persiguió hasta los confines del mundo! Déjese de eso, Usted no llegará a la santidad! Y Yo no quiero!
Estoy enojada! Hace milenios me rechaza el cuerpo y el alma!
Gritó tan lancinante y expresiones tan violentas nos dejaban profundamente abalados por dentro, en la profundidad de nuestro corazón! Pues que hacer! No nos recordábamos absolutamente de lo que ella decía ni los acontecimientos referidos despertaban en nosotros cualquier recuerdo.
__¿Ella? Pregunté el guía, ¿como se puede recordar en cuanto que yo no me recuerdo?
__ Esas criaturas___ me respondió el amigo Espiritual __ traen de manera aguda los acontecimientos que mas les preocupan en el cerebro. Viven día y noche rumiando el pasado. Sufren desesperadamente y se entregan a la furia sexual como tal vez la única puerta abierta capaz de contenerlas para que no se precipiten en abismos más oscuros. Tanto aquí como en el mundo el sexo funciona más allá de sus funciones normales, como freno de otras pasiones y peores violencias. Las almas incapaces de contener las fuerzas de las desgracias que las rodean, muchas veces se agarran en la satisfacción sexual con verdadero delirio y con eso, peores crímenes son evitados.
Eleuterio sonrió.
__ El sexo en esas criaturas funciona como la válvula en la olla de presión… sino tuviese la válvula la olla explotaría!
Observamos al Espíritu con admiración. Nunca pensamos que la sabiduría de Dios controlase las fuerzas desenfrenadas de los Espíritus Inferiores en parte a través del sexo qué mucha gente consideraba" patrimonio inmundo"
CAPT. VI
Más allá del valle
Ahora las mujeres continuaban siguiéndonos a la distancia.
El parque se extendía por entre los árboles matorros y pajonales verdes. Sin embargo, ellas no nos perdían de vista y de repente, note un hecho extraño: más allá de la cerca por el lado de afuera, almacigo de hombres, algunos vestidos, pero la mayoría semidesnudos se prendían a la cerca en desespero.
__ ¿Que es aquello? __ pregunté sorprendido.
__ Son Espíritus encarnados mi hijo, dice Eleuterio; que en la noche dejan el cuerpo en el mundo, y vienen desesperados hasta aquí con el ansía incontenible de encontrarse con esas mujeres…
Frente a mi admiración, Eleuterio complementó
__ Aquí, difícilmente consiguen un encuentro para el intercambio sexual de las energías, pero mas allá del valle donde no hay ningún control, ellos consiguen su objetivo. Allá, donde la vigilancia de la Espiritualidad Superior aun no puede existir, estos viven en manifestaciones realmente de bajo tenor vibratorio, ¿quiere ir mas allá del Valle?
Recibí la pregunta sorprendido e interesado.
__ ¿No vine aquí para aprender? ___ respondí.
__ Evidentemente, todo aprendizaje hoy día es patrimonio para el mañana. Y todo conocimiento hoy es tesoro para el futuro. Espero, que apenas usted pueda equilibrarse en la causa de los desequilibrios ajenos. El peligro de ir más allá del valle es el riesgo de que nosotros también caigamos en tentación… raro son los Espíritus que renaciendo en la tierra, por mas elevados que sean no se sienten tentados aquí o allí. El mundo es de pruebas y tentaciones…
Observé a Eleuterio con amor. Yo también poseía aún un cuerpo de carne que permanecía en el mundo como receptor y emisor de mis pobres energías.
Eleuterio prosiguió:
___ El cuerpo funciona a veces como ejemplificador o caja de nuestros sentimientos. Otras veces nos sirve de defensiva. En el, los sentimientos de orden terrestre vibran siempre con gran intensidad. No hay ninguna inmundicia en el sexo. Patrimonio Sagrado de los Espíritus y de la humanidad, lo que a veces existe es solamente desequilibrio. Y el desequilibrio debe ser por nosotros disciplinado con el fin de que un día alcancemos la serenidad del reequilibrio. El Espíritu retorna siempre al reequilibrio de la ley, para que Así en adelante el pueda recorrer rutas desconocidas y desconcertantes. Vivir la ley no es fácil, aquella ley que nosotros llamamos por una cuestión de entendimiento de ley de Dios
y el ser estará siempre viviendo en el dominio de una ley porque el universo se rige por leyes inexorables. Cuando salimos de una caemos en el dominio de otra. Lo que existen son leyes de equilibrio y leyes de desequilibrio. Leyes de aseso y leyes de descenso. Leyes que indican que el Espíritu sube o leyes que indican que el espíritu desciende. Leyes que muestran que el Espíritu apenas marcha durante siglos en una misma faja o leyes que nos esclarecen que el espíritu apenas estaciona en el tiempo. Leyes de integración y leyes de desintegración. El universo de Dios es un universo de leyes, o sea de hechos y fenómenos que marchan en una o en otra dirección. Una especie de grandes fuerzas vivas que orientan la marcha viva de todo lo que existe. Todo en el universo mi hijo, es ley. Nos acostumbramos a conocer por ley de Dios la ley del Amor. En la realidad todo es ley de Dios. Las fuerzas universales establecen ritmos tan exactos, precisos, inexorables, que pasó a llamar ese acontecimiento como ley.
Eleuterio se cayó y vi que su cerebro en aquella hora estaba profundamente iluminado.
Extraña admiración me tomó el alma.
__¿quien sería Eleuterio? Su simplicidad no indicaba creer a primera vista que era el sabio que demostraba ser.
Percibiendo mis indagaciones más íntimas prosiguió:
Mi apreciado, aún son tan grandes mis imperfecciones que permanezco caído en la tierra, junto con todos los pecados!
Comprendí la actitud de humildad del amigo y para no perturbarlo en sus más vivos sentimientos de humildad, expresé.
__ ¿Iremos más allá del Valle?
__ Iremos respondió el; Espero que nosotros los dos podamos resistir al espectáculo!.
CAPT. VII
La puerta
El camino que seguíamos conducía a pequeña puerta que nos parecía a la distancia situada sobre la cerca. Descendía ahora el terreno y oíamos cantar y susurrar las aguas de un riachuelo que corría entre el follaje.
–¿Esas mujeres reciben aquí algún tratamiento? – procuré información.
— Por ahora el tratamiento de ellas consiste en vivir en plena naturaleza apartadas un poco del mundo sexual. Es un proceso de enfriamiento… —Explicó Eleuterio. Después en instituciones más elevadas reciben tratamiento psicoterapéutico más adecuado. Quede bien claro, mi amigo, que nosotros apenas procuramos rectificar y reajustar al ser a una actividad sexual sana La Espiritualidad Superior no busca eliminar o destruir el sexo. La sexualidad es un estado necesario del alma humana en determinadas fajas del Universo. Ley de la vida, puerta abierta a la reencarnación o instrumento para la "fabricación de formas, ¿entendió? Sonreí debido a la última expresión de Eleuterio.
__ ¿Entonces Dios tiene una fábrica de formas?
__ En último análisis así es,__ afirmó el. Los mundos del tipo de la tierra exigen formas con el fin de que los Espíritus reencarnen y Dios hace al hombre y a la mujer con la posibilidad de reproducir las formas de manera a que a través de ellas reencarnen los Espíritus y pueda funcionar la ley de Amor. Más allá mi estimado, fue Dios quien hizo al sexo. No hay inmoralidad alguna en el uso de los órganos sexuales. Lo que sucede es el uso indebido con riesgo de perturbación al desenvolvimiento natural del ser. La humanidad está dejando un estado de completo atraso y va entrando en el campo científico y real de grandes conocimientos. Cuando el hombre conquista el espacio es porque ya alcanzó el derecho de libertad cósmica y evidentemente no podría continuar viviendo dentro de conceptos, muy buenos en el pasado empero que ahora no se perviertan con el avance de su inteligencia…
Caí en profundo cisma. La puerta se aproximaba y nosotros veíamos "los hombres" que estaban más allá del valle. Fisonomías trasformadas, miradas de cupidos, sensuales, muchos de ellos se agarraban a la cerca en el desespero de ver a las mujeres.
Pregunte:
__ ¿me admiro de que una simple cerca pueda impedir a las mujeres de pasar para allá, o de los hombres de venir para acá!
Eleuterio comprendió mi pensamiento y me orientó:
__ Mi amigo, no se trata propiamente de una cerca. Lo que sucede es que aquí nosotros tenemos un campo magnético diferente que las aprisiona. Son espíritus cautivos, no tienen condiciones de salir porque están sometidos a fuerzas de magnetismo que es propio de una esfera de tratamiento. La ciencia Espiritual también está muy adelantada. A pesar de eso, no se eluda, de vez en cuando algunas de ellas huyen y se pierden en medio de los hombres, más allá del valle. Transcurren días o años sin retornar. Ahí, mi amigo los hombres las persigue como fieras y hacen con ellas todo lo que quieren, hasta que cansadas, determinan volver, locas, desesperadas, para refugiarse entre las compañeras.
___ ¿y los hombres no se cansan también?
____ Es mas difícil, empero se cansan. Para ellos también existe local adecuado para tratamiento. Son criaturas más difíciles.
Comprendí la explicación. Pasamos más allá de la cerca. Vinieron ellos en carrera hacia nosotros. La mayoría semidesnudos. Eleuterio se iluminó intencionalmente, obligándolos por el temor a permanecer a distancia. Desconfiados, aterrados, nos contemplaban con curiosidad.
Muchos exhibían órganos sexuales descomunales enormes. Cargaban aquello como si fuesen pesados instrumentos que los incomodaban brutalmente, mal podían andar por sus Aberraciones. Otros mostraban millones de gérmenes o microbios de formato extraño que les cubrían los órganos
___ Son enfermos, esclareció Eleuterio. Permanecen tan fijados a través de los siglos en los asuntos sexuales que crean esas vibraciones que atraen y crían los microorganismos del sexo.
Quedé asombrado.
Jamás hubiera escuchado tal cosa. No sabía que la sensualidad por la fijación mental de la criatura crease o atrajese formaciones de miasmas y microorganismos.
__ ¿y cual es la función de esos seres microscópicos?
__ Acláreme esto.
Exaltan la sexualidad enfermiza del ser. Para liberarse de ellos el ser necesita rectificarse mental y espiritualmente durante milenios, procurando vivir el bien, la verdad y el verdadero Amor. Esto mis hijos, son aberraciones del sexo mal orientado.
Miré los hombres que ahora se constituían en millares, todos de pie, ojos fogosos como una tribu de indios de mal aspecto.
__ el tiempo que llevan para caer será la medida del tiempo que llevarán para subir o recuperarse, dice el Espíritu, el remedio siempre es el mismo: obedecer las determinaciones de las leyes morales, buscando el verdadero amor, la armonía interna, la verdad a todo costo, la renunciación y el entendimiento. Solo esas reglas permitirán al ser equilibrarse en el panorama cósmico. Fuera de eso, solo el mal nos arrastrará. El sexo no es un mal, el mal está en la orientación o conducción mala de los instintos sexuales
CAP. VIII
En el valle del mal
Aquella multitud de Espíritus dominados por el ansia sexual nos seguían a la distancia. Verdadero mar de conciencias en delirio.
Sus mentes despedían vibraciones sexuales que nosotros alcanzábamos dolorosamente. Me era difícil soportar el ambiente mental. Sentí que una fuerza oculta, desconocida, comenzaba a penetrarme en lo íntimo y verifiqué que una euforia interior despertaba de mi interior. vi. formas de mujeres semidesnudas que danzaban en mis ojos, hombres y mujeres que rodaban en la grama. Brazos sensuales que me abrazaban, labios de fuego que me besaban. El valle de repente se tornara a mis ojos llenos de belleza sensual. Por otro lado parece que yo mismo me dejaba llevar por aquellas visiones de bellezas Helénicas. Jovencitas de una belleza envolvente venían a sonreírme en el alma…
De súbito sentí fuerte choque.
__ despierte! Despierte!___ Oí poderosa voz que me llamaba. No se deje envolver por la ilusión del Valle!
Desperté. Era Eleuterio que me llamaba a la realidad. Torné a observar aquellas caras sensuales que me miraban con profunda ironía. Una de ellas gritó:
__ El de atrás no es ángel, no! es como nosotros! Vamos a arrebatarlo! Vamos a arrebatarlo!
A ese grito millares de gritos ensordecedores retumbaron por el valle y la turba avanzó hacia nosotros con las manos crispadas. Le sentí las garras feroces en los pies y en las manos. Eleuterio, sin embargo extendió la diestra y expidió fulgurantes rayos de zafirina luz que las detuvo aterrorizadas, como si la fuerza poderosa de aquellas vibraciones las inmovilizase a todas.
Respiré profundamente. Aún oí voces que murmuraban bajito:
__ Aquel no es ángel! Aquel no es ángel! Es igual que nosotras!
Comprendí mi inferioridad moral y me avergoncé de mi mismo. En verdad, lo que yo merecía era estar entre ellas, en el infierno de la sensualidad atormentada!
Eleuterio, sin embargo leyéndome los pensamientos me abrazó y dice:
___ No es verdad, usted no es uno de ellos. Usted esta buscando conducirse a través del sexo disciplinado y orientado en el casamiento y en el hogar. Ya lucha consigo mismo para no volver a las fajas Inferiores…
Este Valle, mi hijo todavía, es una de las regiones donde impera el pensamiento sensual y son pocos los que pueden atravesarlo sin sentir desmayos, atracciones de delirio…no piense que estamos estudiando apenas el sexo en su forma equilibrada. Nuestro viaje es apenas una visión panorámica de la sensualidad en el mundo Espiritual, noticia que hasta hoy los hombres nunca tuvieron. Es la primera vez que el mundo terrestre recibirá información de este tenor y nosotros nos estamos limitando a presentar apenas algunos fragmentos…
Agradecido agarré el brazo de Eleuterio y lo apreté de encuentro al pecho.
CAP IX
Las sombras del pasado
A medida que avanzábamos, nuevas figuras aparecen, y por lo regular desnudas, y en desvarió mostrando los genitales o lanzándose a nuestros pies implorando la bendición de satisfacción sexual. Una mujer de olímpica belleza, cabellos caídos sobre los hombros, ojos negros como azabaches y cejas densas y sedosas, rodó en el suelo, a nuestros pies, y clamó
Eleuterio! Eleuterio! Porque me abandonaste! Llévame de nuevo para Roma! Quiero vivir de nuevo el delirio de los bacanales!
Eleuterio le habló suavemente:
— Mi hija, busca el camino de Jesús y tu llama se aplacará. De que sirve su permanencia en el mal?
Loco! Exclamó ella, levantándose en furia y rugiendo de cólera.-, ¿y de que te sirve seguir al Cordero?! Que es lo que asta ahora el nos dio? Solo infelicidad! Aquí estoy perdida por causa de el! Si me hubiese aceptado en aquel día, cuando le ofrecí el cuerpo y la juventud en Jerusalén, El no hubiera muerto en la cruz y éramos felices! Empero no! Prefirió su Reino de humillación! Y tu cobarde! Estabas allá y no hiciste nada por mi, y ahora tampoco lo vas a hacer!
Eleuterio la observó como quien mira a terrible y peligrosa leona compadecido.
–Alina mi hija, no depende de mi hacer alguna cosa por ti! Nadie puede ayudar si no es por si misma…
Miserable! Vete! Vete con tu cordero!
Pasamos despacio y Eleuterio le lanzó una mirada piadosa y amiga.
Otra mujer, le abrazó y le dijo:
— Vamos, vamos, yo te consolaré.
Y la apartó, empero yo vi espantado que esa mujer la abrazaba con ansiedad sexual como si estuviese en la posición de un hombre. Alina la besó con pasión violenta en la boca, algo incomprensible para mí, y ellas continuaron en su idilio.
Eleuterio se agacho, y yo lo vi llorar.
Esa mujer, dijo el, tentó al Maestro en Jerusalén. El Señor, sin embargo la convidó para el banquete del Reino de Dios y ella no lo aceptó. Desdichadamente su Amor por El era algo que El no podía aceptar.
Quede en silencio debido a la revelación. Pues que decir después de lo que presenciara?
Otras criaturas se esparcían por el valle. Pequeño rió corría por entre la floresta. Y nos paramos para hacer un pequeño descanso. Niñas jugaban en las aguas despreocupadas y desnudas.
–¿Aquí solamente hay seres de un solo genero, o los dos? Interrogué.
— Los dos, estamos más allá del valle y todo se mezcla Hay hombres y mujeres, niños y niñas, viven en promiscuidad y voy hacerle una revelación:
–La mayoría aún es de Espíritus encarnados, que dejan sus cuerpos en la tierra, y durante la noche viajan para estos valles, para las sensaciones que recogen aquí. En cierta manera, les calma el ánimo cuando despiertan. Obsérvelos bien y mire el hilo fluídico que los liga a sus cuerpos.
De hecho, atendí la observación de Eleuterio y vi millares de hilos oscuros y otros menos obscuros que partían del ombligo y la cabeza de los encaminados hacia la tierra. Hilos casi invisibles, empero de excesivo movimiento. Parecían formados de millares de moléculas o células o corpúsculos. No pude distinguir bien, pues se movilizaban en altísima velocidad.
¿–Quiere decir que son criaturas vivas de la Tierra?
Así como usted puede entender, respondió el instructor. Durante el sueño buscan las regiones donde estacionan los seres que le son afines a sus pensamientos, o con su tenor vibratorio que les comparten los sentimientos y los objetivos. Atraviesan el espacio con gran velocidad por millares y millares de kilómetros o penetran tierra adentro con el fin de satisfacer los deseos inferiores. EL sexo como ya lo he dicho, es sagrado. Sin embargo, el mal uso de el, torna al espíritu desgraciado y sufrido.
Me admiré y entre en meditación profunda, Me asombraba el hecho de verificar la existencia de seres que mantenían la preocupación sexual más allá de la muerte.
–Mi hijo, Los apetitos carnales en la realidad no son propiamente de la carne, El sexo en el mundo, comienza en la mirada. Lo que vale es lo que está en la mente. La voz de Eleuterio en esas regiones me alcanza hondamente el Ama. Una extraña impresión de aislamiento me dominaba. No sentí ahora las vibraciones sexuales, y a pesar de todo, otros pensamientos me dominaban la casa mental.
El camino se tornó estrecho, dejamos al margen del rió las mozas sonriendo para nosotros y señalándonos con sus manos
–Usted mantiene vibraciones muy vivas del plano terrestre. Sus fuerzas latentes circulan a su vuelta con gran velocidad y colorido. En breve le mostrare como es que eso funciona..
Busque a mi regreso y no vi nada. ¿Donde el colorido? ¿Donde las fuerzas que circulaban?
Sin embargo mire que las mujeres me observaban con cupidez en cuanto que a Eleuterio lo respetaban como si fuese un ángel.
Era cierto que algunas se aproximaban a el y le acusaban de no haberles dado importancia en tiempos distantes, no podía negar que yo de vez en cuando era asaltado por intensas vibraciones y deseos carnales. Me era imposible vencer las hondas que venían de todas partes. A pesar de todo, confiaba en Eleuterio y en el amor a Dios. . .
CAP. X.
Lecciones desconocidas
Más allá del valle, las vibraciones se intensificaban más y yo comprendí que me esperaban nuevas experiencias. Espíritus amigos entre si, pasaban abrazados, semidesnudos en condiciones que yo no sabría decir. Labios sobre labios entrelazados corporalmente como si de hecho estuviesen en la carne. La afición en que se mostraban, nada tenia que envidiar con la intensidad de sensualidad en la tierra.
Miré que algunos exhibían cuerpos semi-animalizados. Verdaderos faunos que ostentaban pies de caprinos y miradas indescifrables. Nos miraban de manera devoradora, y sentíamos que en sus ojos lanzaban llamas.
El paisaje campestre, verde, contrastaban con el la tristeza y la alegría que se irradiaba de todos ellos.
En ese punto fijara mi pensamiento en la meditación, cuando un gesto de Eleuterio me detuvo.
–¿Que seria?, pensé en ese momento.
— Oigo voces que no son de esas criaturas, dijo el.
Agudicé el oído. Mas nada escuche. Eleuterio vibra en otra frecuencia y percibe sonidos e imágenes que yo estaba lejos de registrar. Sentí que alguien diferente iría a surgir.
De hecho, no demoró y bellísima doncella, de cabellos sueltos y sobre los hombros, esparcidos sobre su blanca y pura túnica nos apareció. Tuve la idea del deslumbramiento. Al mismo tiempo la sorpresa me frenó la palabra. ¿Como? ¿Semejante criatura en este lugar.?
Me escuchó Eleuterio las indagaciones mentales porque me respondió:
La pureza de Diana la coloca a la defensiva de ataques
Diana sonrió y me saludo.
— Ya sabia de la presencia suya aquí, pues recibí comunicado.
Miré a Eleuterio.
Aquí también existe el servicio telegráfico semejante al de la tierra, solamente que es mental…
Diana tornó a sonreír.
–Tengo la incumbencia de introducirlos en el reino del sexo, si así se puede decir. En las zonas sobre nuestra vigilancia existe talvez la mayor cantidad de casos de naturaleza sexual, y que pueden ser observados.
–¿Como? Empero aquí no estamos más allá del valle, donde no hay ningún control? – sorprendido le pregunte a Diana.
–Si Eleuterio tiene razón, esclareció Diana. No hay posibilidad de control porque estas criaturas son absolutamente libres por no someterse a ninguna disciplina ni aceptan ninguna gobierno, así sea el gobierno de Dios, empero eso no impide que aquí existan vigilantes al tanto de los movimientos.. En el valle propiamente, reciben tratamiento, y de alguna manera se someten a cierta disciplina. Aquí no hacen lo que quieren y lo que sienten. Es lógico que sin que lo sepan son gobernados por los inexorables del destino..
Trate de comprender el pensamiento de Diana, mas sentí que una confusión se anidaba en mi mente.
— No se preocupe, dice ella, la libertad que Dios concede a los seres es de cierta manera, con un tratamiento espiritual; un día las criaturas también se saturaran del libertinaje y determinan deseando la disciplina de la ley; Es lo que aquí podríamos considerar como punto de saturación muy similar con los preceptos de la ciencia de la tierra. Mis pensamientos galoparon por lo más recóndito de mi alma,"saturarse del libertinaje" ¿podría la libertad saturar a los seres?.
–Recuerde que libertad es casi apenas un concepto,- Dijo Diana. El ser está en el Universo limitado en todos los departamentos de la vida. La libertad como la entiende el hombre, en realidad no existe, pues la criatura es prisionera de todo…
Analicé la bellísima joven que me hablaba y tuve la impresión de que la sabiduría que partía de sus labios. Como perlas venia del fondo de los milenios. Libertad, libertad, ¿se puede limitar la libertad?.
Si se puede, confirmó ella. ¿En la tierra no excite lo que se denominó llamar como "libertad vigilada"? En todas partes del Universo la libertad tiene limites; .millones de leyes menores muchas beses limitan el campo que nos conceden las leyes de Dios. En verdad, pensando en términos del mundo, los preconceptos, los tabúes, las disciplinas, son limitaciones de la libertad La libertad liberada aún no puede ser concedida a seres que gravitan en ciertas fajas vibratorias, tales como la de la tierra y de estas regiones donde nos encontramos.
— Empero en el Universo entero, ¿no existen condiciones de completa libertad? . .
–Existe si! Mas solo para los "grandes espíritus" que alcanzaron las cúspides de la evolución espiritual, ellos conquistaron el derecho de la libertad sin límites, pues el sentimiento de libertad verdadera, es antes que todo, condición interior del espíritu eterno. Cuando el Espíritu alcance las más altas estancias de la espiritualidad superior, conquista la libertad amplia para pensar, de actuar, de vivir, de crear y de amar.
Diana sonreía maravillosamente y de sus ojos pendían rayos de sublime belleza e irradiaciones de profundas virtudes.
Me convencí que me encontraba frente a Espíritu bellísimo que alcanzara el clima interior de de la sabiduría y del Amor.
— Mi hijo, no piense así, dice ella… Aún tengo mis limitaciones. En breve usted verá.
Me sonrojé verificando que ella me percibía los pensamientos ocultos en mi casa mental, como quien mira por una ventana abierta.
Busque a Eleuterio. Estaba cerca de mí, y me calmó..
XI
Los hombres
Un hecho diferente me impresionó el Espíritu de manera viva.
Comencé a encontrar a viejos compañeros de la carne que estacionaban allí, en el circulo de la perdición, así era llamada la zona más allá del valle. Muchos de aquellos que yo encontraba todos los días en la calle de mi ciudad terrestre, corrían entre los faunos y las ninfas y con ellos se sumergían en las ondas del sexo. Algunos se escondían de mí por detrás de los árboles o la vegetación más baja, otros sin embargo, sonreían alegremente y me señalaban con las manos convidándome a seguir con ellos al encuentro de la aventura sexual.
Exhibían todos ellos el cordón umbilical que caracteriza a los Espíritus encarnados. No siempre el cordón era oscuro, a veces de color claro y en algunos casos verifiqué que no se entregaban al sexo con la ansiedad de los demás, había menos animalidad.
Eleuterio me condujo cada vez más adentro del bosque y era común ver a grupos desnudos acostados sobre la grama, riendo en la alegría de los amantes. Me recordé de Paolo y Francisca de la Rimini y del viaje de Dante. Nunca comprendí también el drama de aquellos que mueren por el abuso sexual…
Aníbal estaba al margen del camino. Viejo amigo de la infancia que sonrió para mí.
___ ¿Usted aquí?___ dice el viejo. Viene vestido con la túnica de los Espíritus buenos…
Dijo y sonrió. Me sonroje. Me pareció que se burlaba-
___ Usted sabe que soy pecador.
Eleuterio había parado un instante para permitirme conversar con el.
Millares de Espíritus iguales a Aníbal se aproximaban a nosotros ansiosos por escuchar la conversación.
___ Se que es pecador en pero hoy está con la túnica de los ángeles, acompañando a un ángel!
___ Mi apreciado Aníbal, le hablé; siempre fuimos amigos y no comprendo porque ahora me hostiliza.
Pareció comprender pues se disculpó de eso:
___ Bobadas mías, cuando somos encontrados culpables procuramos siempre atacar a los buenos. Se que usted aún es Espíritu imperfecto mas viene luchando por espiritualizarse
Estoy herrado, mas no tengo otra solución para mi vida. Cuando mi cuerpo duerme vengo espiritualmente para acá, yo, como usted puede ver millares de seres que aquí encontramos la satisfacción sexual que nos es negada en la tierra…
___ ¿En pero y la esposa?___ Interrogué sorprendido___ Mi esposa no quiere saber nada de esto por preconcepto religioso. Combinó sexo con religión y con eso, estableció el desamor entre nosotros. Mientras mi cuerpo duerme yo busco estos sitios para satisfacerme.
Empero usted Aníbal ve que nosotros como Espíritus estamos en evolución. ¿Porque no busca el camino del progreso Espiritual?
__ No tengo condiciones. Soy muy atrasado
¿Atrasado de que manera? Todos nosotros estamos avanzando
Escuchándonos Eleuterio nos interfirió.
__ El sexo no es obstáculo a la Evolución. Por el contrario, es puerta abierta para la evolución. ¿No es a través de la Evolución que los Espíritus van alcanzando mayor progreso?. El sexo es puerta sagrada. L a extravagancia sexual es la que debilita el cuerpo físico y el Espíritu del hombre. Las fuerzas electromagnéticas de los vehículos cuerpo y peri espíritu tienden a debilitarse o a gastarse con el ejercicio de la sexualidad, simplemente es así…. Es como si una batería se descargase por es excesivo uso. El cerebro material sin la carga electromagnética necesaria, debilitado, no tiene condiciones de alzar vuelos para el pensamiento más alto. De ahí que los religiosos del pasado, caídos en la situación opuesta y absurda de intentar la castidad absoluta para mantenerse en absoluta castidad, también es necesario que el ser haya evolucionado y progresado espiritualmente. La castidad para el hombre común o igual mente para aquel que progresó mucho espiritualmente mas aún no alcanzó la beatitud, es medida perjudicial porque la criatura encarnada tiene la responsabilidad de procrear… Miré a Eleuterio y me di cuenta que el penetraba ahora en el campo secreto de los conocimientos sexuales del Espíritu y quedé amedrentado.
___ Todo en el Universo se puede espiritualizar o materializar, apenas depende de la flexibilidad de nuestra mente. Donde fijamos la mente allí colocamos el corazón y el peri espíritu pasa a adquirir menos velocidad vibratoria y con eso tiende a inmovilizarse o a tornarse rígido.
Aníbal nos contempló espantado.
___ Mi apreciado Aníbal, le habló Eleuterio, colocándole las manos en los hombros, se que usted es un gran estudioso de los problemas psíquicos y tiene hambre espiritual de Jesu Cristo, su alma se ensaya por progresar y crecer en Espíritu, solamente verifico que está demasiadamente preso al ansia sexual en las luchas consigo mismo y en un conflicto establecido por los preconceptos sociales, y por las falsa moral religiosa de nuestros tiempos. Mi hijo, sexo no es inmundicia ni inmoralidad. Es oportunidad de entendimiento entre las criaturas; es el chancee para la transfusión de fluidos. Cuando dos criaturas se aman verdaderamente, a través del sexo y del acto sexual, ellas se trasfunden a las vibraciones psico-espirituales de que son portadoras y dan y reciben energías extraordinarias para la marcha de la vida. Hay euforia y grandeza moral como espiritual. Cuando, por eso, la fijación sexual es demasiada o exagerada, la criatura puede caer en agotamiento nervioso en el desgaste y embrutecimiento peri espiritual, empero a pesar de eso, delante de Dios, no hay pecado, Dios que creó el sexo no lo hace ni moral ni inmoral, lo hizo natural y simple para alegría del hombre y de la mujer y para progreso de los Espíritus. Sexo es obra Divina y el Creador se complace en verificar que a través de el, los seres avanzan universo adentro al encuentro de las mayores posibilidades y alcanzan cada día mayor ascensión Espiritual. El sexo se sublimará a través de los tiempos y por el, los seres que gravitan en las sombras encontrarán el entendimiento mayor y se aproximarán al reino de Dios. ¿Usted no se acuerda de Pablo el apóstol?
" No os defraudéis de uno a los otros" Porque es mejor casar que abrazar"ese es problema viejo, mal comprendido por los hombres y mal divulgado por ciertos Líderes de las Regiones tradicionales, que no pudieron entender la orientación de los iniciados y la deturparon. Mas allá de eso usted no sabía acaso que Pedro tenía Suegra. Quien tiene suegra tiene o tubo esposa…
Reímos todos ante las expresiones de alegría de Eleuterio.
Aníbal lo miraba sorprendido y percibí que sus ojos irradiaban una nueva luz.
__ ¿Mas, señor y mi presencia nocturna constante aquí en este valle de perdición?
El guía respondió:
__ Aníbal, perdóneme, Señor, en cuanto a su presencia en el valle, es resultado de sus necesidades de satisfacción sexual no encontrando en casa, la comprensión de la compañera, es natural que usted la busque en algún lugar. Aquí se reúnen compañeros suyos de otras vidas y almas afines que lo quieren verdaderamente, así el encuentro sea fatal. Nosotros vivimos sometidos a leyes inexorables y a las leyes del pensamiento que aún son las más poderosas. Evidentemente, el control y la disciplina de las energías sexuales, en el campos psicofísico le dan al ser nuevas dimensiones más allá de la animalidad, mas la naturaleza no da saltos y la paciencia de los hombres a de llevarlo en el futuro, a zonas más elevadas para la espiritualización. Una cosa le puedo decir, mi apreciado, sexualidad no es crimen…
Diciendo eso Eleuterio golpeó, amigablemente en las costillas de Aníbal y esclareció:
__ ahora tenemos que andar un poco más, sin embargo le prometo que volveremos a conversar pronto.
CAPT XII
En marcha
Mi pensamiento aún vibra intensamente en torno a la exposición de Eleuterio. Diana nos acompañaba silenciosa y sonreía de vez en cuando para mí. Aníbal permanecía en mi casa mental como un ser angustiado que aún no se encontraba a si mismo. ¿Yo que podría hacer a su favor?.
–Nada respondió Diana—que probablemente registraba mis pensamientos. Nada, mi amigo en ese estado de evolución en que el se encuentra, muy poco se podrá hacer por el. La lucha sexual que lo domina es muy grande. Las energías que emanan de su ser son tan poderosas que se renovan en la satisfacción del propio sexo. Hay dos intensas y poderosas fuentes de energía en el hombre: la fuente mental, y la fuente sexual. Ambas se equilibran permanentemente. Una es la fuerza renovadora del mundo y del Universo que cerca al hombre y que se manifiesta a través de la inteligencia en las actividades de cada día, y la otra es la energía creadora de las formas físicas que buscan realizar la obra de la creación Divina para la evolución de los seres. La primera es fuerza de actividad y realización, y la otra es energía de manutención y permanencia de hombre en la tierra. Sin el sexo no habrá hombre en el mundo y no habría oportunidad de evolución, para os espíritus que vibran en la faja de los mundos semejantes a la tierra. Son mundos para la reencarnación que exigen formas físicas. Naturalmente, Dios, en su sabiduría determinó que el potencial del sexo se constituyese como extraordinario y poderosa fuerza, de manera que el hombre no se desinterese de su creación y así no quedase interrumpida la posibilidad de evolución espiritual. Por otro lado, vemos que ese hecho existe en toda la naturaleza, desde las plantas y los animales como también los incestos. Sexo es ley de la vida, ¿usted no ha oído hablar de eso?
Diana hizo una sonrisa larga y maravillosa. Ha nuestro regreso los faunos bailaban la danza del amor y los espíritus de los hombres cantaban extraños temas sensuales.
Tomamos el camino solo que conducía a una claridad donde criaturas entre quince y dieciocho años jugaban entre las flores
Me parecían pájaros de blanquísima belleza, extrañe el cambio del escenario y Diana explicó:
— Aquí se reúnen aquellos que cayeron en la tierra, en la expresión del mundo, y que buscan la satisfacción sexual.
vi. que todas ellas poseían el cordón fluídico que las ligaba a la tierra.
Nos rodeaban alegremente y me buscaban con las miradas y con las manos, pues muchas de ellas vinieron a abrazarme, y asta deseaban besarme ansiosamente. ¿Porque permitirían Diana y Eleuterio que eso sucediese?
Al principio me atemoricé después sentí placer! les dirigí sonorizas
Aplaudieron y reían. Sentí hondas de sensualidad. Que me invadían el organismo espiritual y comprendí que me embriagaba de sexo. Que hacer! Nuestros guías parecían ignorar lo que sucedía con migo, el alboroto de las jovencitas aumento asustadoramente y vi. que estaba envuelto por centenas de ellas que me arrastraban felices para un pequeño bosque. Sus manos suaves y calientes me alisaban el cuerpo y sentí el hálito de sus bocas perfumadas y juveniles. Un vértigo jamás sentido me dominó por completo y mi alma entraba a punto de perderse. Al mismo tiempo yo mismo me entregué al amor. Nada hice más allá de caricias, sin embargo eso me dejó exhausto y perturbado. Después, corrieron en gritería, y me dejaron allá caído y solito. Un gran silencio envolvió el bosque No miré más a Diana ni a Eleuterio. A mi lado apareció una criatura pequeñita y fea, que se reía de mí sarcásticamente, Era un verdadero enano y me convidó.
–¿Usted no quiere conocer el valle? ¿No vino aquí a eso?
Me sorprendí y le dije que si, y le extendí los brazos para que me ayudara a levantar
Se rió y me levanto con gran facilidad como si yo fuese una pluma y me llevó bosque adentro.
No podía entender lo que pasaba con migo. Apenas entendía que mi ser se complacía en aquellas hondas de sensualidad física que venían por todo lado..
¿Quien es Usted? pregunté.
–kuinter—respondió el. Trabaje con Wagner en la ópera Alemana. Conozco todo el valle y espero cumplir con la solicitud de Diana.
–Espantado pregunté! ¿Pedido de que?
Si, Diana prefirió que conociese el valle por mi intermedio. También presto servicio secreto en este valle.
Me admiré de la facilidad de exposición de Kunter.
–¿Servicio secreto?
Si, servicio secreto: Muchos serviciales como yo, vienen aquí aparentando diversión, pero en realidad son seres informantes para departamentos más adelantados.
Cuando registramos alguna mejoría en algún Espíritu, así como en el caso de Aníbal, comunicamos el hecho, y luego vienen en auxilio para retirarlo e internarlo en sanatorio o plantel educativo especializado. La mayoría de los Espíritus que vienen aquí, son. Dominados por el pensamiento lujurioso, y que por lo regular no encuentran satisfacciones en la tierra.
Deduje que en este caso también había una criatura bien esclarecida y talvez más savia de lo que yo juzgaba.
Caminé con el y el bosque aumentaba de tamaño a medida que andábamos. No se porque me sentí animado, a pesar de no haber vuelto a ver a Diana ni a Eleuterio. Savia que ellos no me abandonarían y que en momento oportuno estarían nuevamente con migo. Por otro lado Kunter me inspiraba absoluta confianza. Percibí que de el se irradiaba extraña fuerza de decisión y firmeza. Me di cuenta de la gran facilidad con que se movía en el valle y recorría el bosque como si estuviese en casa Tailan estaba acostado cuando Kunter fue a hablar con el. Al lado del enano surgía un verdadero gigante
–Tailan, le habló Kunter. Traigo un amigo que quiere conocer sus dominios. La figura que acababa de conocer no era asustadora, empero poseía la mirada de un felino y el cuerpo atlético como el de un deportista de olimpiadas. Me miró demoradamente y después dijo:
–¿Donde fue usted a buscar ese espécimen, Kunter?
–Viene de la superficie terrestre y viene a estudiar la sexualidad en el campo del Espíritu.
–¿Tiene orden? – quiso saber un poco desconfiado.
— Claro que si, respondió Kunter
–Pregunto porque como usted sabe, todo el mundo puede venir aquí, empero para estudiar es necesario de una orden Más allá de eso, el es protegido por el cordero y yo no quiero creencias en el Cordero ni en los Dragones.
Mi negocio es otro, y no tengo partido.
Kunter respondió.
–Comprendí, usted no quiere complicaciones…
–Usted sabe no entro en esa pelea de Ángeles con Demonios. Cuido del sexo.
Desenvuelvo mi negocio, y no busco a Dios, ni al Diablo!
Yo estaba admirado con el diálogo. ¿Entonces había aquello? ¿Podría alguien encontrarse apartado de ellos?, ¿de las leyes de Dios o de las fuerzas del Demonio?
El sin saber talvez, respondió a mis indagaciones.
— Aquí donde vivo soy neutro. Respeto al Cordero y respeto a los Dragones obedezco las leyes de Dios, y obedezco órdenes de los Dragones. Más siempre que puedo quedo libre de los dos! Sabiendo eso, ustedes pueden andar por ahí, les cooperaré. Aquí todos son libres y el sexo es lo que hay de más importancia entre nosotros. Solo cuidamos de eso Queremos vivir, queremos vivir!
Kunter con un gesto de cabeza concordó y dijo:
–¿Nos va a acompañar?
–Más tarde pueden andar a la voluntad y pueden ver lo que quisieran. Todo es nuestro y todos aman. Aquí en este bosque no hay otra cosa que el amor libre, y no hay odio de alguna especie. Todos aman, todos aman!
Tailan abrió los brazos y cantó una canción profundamente sensual, el tema se refería al cuerpo, a los órganos sexuales y de la satisfacción de la sensualidad.
La voz de Tailan era bellísima y extraordinariamente atractiva. Me recordé de las leyendas de hadas
–No se deje envolver, susurro Kinter. La melodiosa voz de Tailan y su sensualidad son fuerzas perturbadoras en este valle.
De hecho empezaron a aparecer hombres y mujeres de belleza excepcional. No eran más niñas, y si, criaturas adultas, bien formadas, y algunas venían vestidas con largos y transparentes vestidos de colores que, más que la desnudez, me impresionaba la sensibilidad sexual. Brazos rollizos y senos que me herían la acústica de los sentidos del Alma, sentí otra vez las hondas de sensualidad que venían de ellas.
Me recordé de mis Amigos Diana Y Eleuterio, a pesar de todo, no me atreví a llamarlos, Kinter me apretó el brazo y dice:
— Pasemos, pasemos!
La energía con que se expresó, me dio ánimo desconocido y atravesamos en medio de aquellas criaturas que me alisaban los cabellos y pasaban las manos por mis espaldas.
Ven, ven mi amor aclamaban ellas.
–Que hacer, una cruel angustia me embargo el Alma coloque mis pensamientos en el Cristo, y el crucificado en lo alto del calvario! Pendido en el pecho me pareció enviar su renuncia de dolor.
Esa imagen me pareció un bálsamo y las mujeres, instantáneamente se apartan y murmuran entre sí:
–El es hijo del Cordero!—y se apartaran más aún.
Se agrupaban en un pequeño montículo y me contemplaban como quien consideran a alguien muy responsable, o a un enfermo que sufre de lepra.
–Vamos, ore y pase, insistió el enano.
Ore y pasé. En nosotros quedo un perfume inolvidable de afición carnal y físico. Jesús, entonces vibraba en mi Alma como la única y última Esperanza.
CAP. XIII
Sombras del pasado
Yo había notado que entre aquellas mujeres, algunas me eran profundamente simpáticas y me parecía reconocerlas. Estaba casi cierto que no era la primera vez que las veía. El pasado vivía en mi Alma, ¿Sería las compañeras de otras reencarnaciones, perdidas y sumergidas en el tiempo de civilizaciones antiguas? Caí en silencio y profunda meditación. Tenía la impresión de haber sido profundamente amado por ellas en algún tiempo y lugar por ellas. Algunas me recordaban el Antiguo Egipto, otras el Oriente, Grecia y también Roma como la mayoría a Francia. Me perdía en meditaciones confusas. Kinter no me dejaba percibir si el interpretaba mis pensamientos.
No era Espíritu de las facultades de Diana y Eleuterio.
En la realidad, ahora yo estaba casi solito. Ni todas aquellas mujeres estaban ligadas a la tierra por lazos fluídicos. Muchas de estas ya pertenecían al mundo de los Espíritu desligadas de la carne.
Meditaba en aquel problema desconocido de los hombres en su consciencia normal; el hecho de existir en el otro lado de la vida o atrás del velo, en el invisible criaturas como aquellas que se encontraban a un amor extrafísico y casi físico. Practicaban todos los actos sexuales con los Espíritus de figura masculina que a ellas eran aficionados indiferentes a la existencia de la inmortalidad y de la Ley de evolución. Ignoraban la marcha de los astros y la grandeza del Universo Vivian felices en su manera de sentirse libres para querer a su manera de entender, Poco les importaba el Cordero y el Dragón,. Creían respetar a ambos y nada sabían de las luchas de los sabios, de los santos y de los iniciados que buscaban el camino de la verdad. Creían amar y ser amadas. Me recordé de walhala de los antiguos saxo es, del paraíso de muchas razas orientales y de las promesas de Mahóma a sus seguidores, ¿pues después de la muerte irían para un paraíso de delicias? Para el Cielo de allá!, ¿quien sabe?
Inmenso sismo me invadió el Alma, Una gran duda empezó a henchirme el corazón ¿No seria mejor estacionar allí eternamente?
Talvez sintiendo mi gran silencio o recibiendo la intuición de lo que pasaba con migo, Kinter habló:
— Cuidado mi amigo, con el pensamiento en estas regiones. Esas mujeres impregnan el ambiente de esas vibraciones de sensualidad que un Espiritu menos preparado puede resistir. El sentimiento sensual es como dulce y suave como la miel capas de arrastrarnos
No nos sumerjamos en meditaciónes sobre ellas porque podemos correr el peligro de perdernos!
El sexo es obra Divina, tiene los atractivos de las cosas de Dios. La sensualidad es uno de los irresistibles placeres que dominan a la humanidad. Si usted no reacciona inmediatamente, jamás saldría de aquí, quedará imantado a ellas como la limaña al imán, podrá salir empero regresará siempre!.
Debido a esas palabras que me alcanzaron fuertemente el corazón. Reaccioné violentamente y me reajusté al pensamiento superior. Una brisa suave ahora bañaba nuestra frente y pude esbozar una sonrisa leve de compasión para con migo mismo. Aún era muy frágil y terrible el camino que conduce al placer de la carne!.
Más luego encontré de nuevo a Diana y a Eleuterio Extrañé encontrarlos al frente empero no pregunté nada..El camino ahora era más oscuro con sus follajes sombríos. y Kunter pidió licencia para retirarse advirtiendo que iba a avanzar para preparar nuestra llegada. Me hice la pregunta. –¿A donde llegaremos?. Sin embargo me calmé, pues no me competía indagar. Apenas sentí que alguna cosa me sofocaba lentamente la garganta, que el ambiente cada vez se tornaba más pesado e irrespirable, y que las impresiones se tornaban diferentes a la inicial.
–El Amor y el sexo no exciten en el cuerpo y en el periespíritu dice Eleuterio—tomando un aire profesional El sexo parte del Espíritu. Mucha gente dice que la carne es débil, pues no existe debilidad en la carne. Lo que existe es mayor o menor evolución del Espíritu. Todo está en la mente La sexualidad y el amor también está en el alma y en el cuerpo.
La carne y el periespíritu son redes electromagnéticas de alto potencial, en el caso del cuerpo físico, conformadas del material de que se compone el mundo en la cual esta viviendo el ser. Eso es normal y es obra de Dios. El instinto en su necesidad de procrear, fuerza extraordinaria de la naturaleza, es quien induce al macho y a la hembra a procrear y también los coloca en la lucha sexual. No hay en esto pecado ni crimen, es la naturaleza que se expresa a trabes de la forma a preservar las mismas formas, renovándolas y recriándolas.
Sexo es potencial Divino. El uso exagerado como ya dijimos, podría llevar al hombre al embrutecimiento y a la animalidad más violenta en pero el uso controlado podrá mantenerlo perfectamente en el seno de la Creación equilibradamente; lo que puede haber en todos los Departamentos del Universo es Equilibrio y desequilibrio. Quién se desequilibra sufre para readquirir el equilibrio, esa lucha para la conquista del reequilibrio, viene del sufrimiento y del dolor. Dios no castiga a nadie. Sus leyes funcionan como el más exacto reloj y todos estamos sujetos a esas leyes frías, duras inexorables, empero perfectas.
Eleuterio dejó de hablar golpeándome los hombros amigablemente. Yo sonreí para el agradecido. Pues los apuntes eran de tal manera para hacernos meditar profundamente.
Sentí que en el silencio que se estableciera asimilábamos sobre la sabiduría de Dios
CAP. XIV
En el Valle de la muerte
Descendíamos cada vez más sobre el oscuro camino. Ahora, Diana se colocaba al frente.
Parecía un Ángel de los Abismos.
Me recordé instintivamente de Atafon Evidentemente la zona donde nos encontrábamos no era la de los Abismos pero si, la faja o mundo paralelo a continuación de la corteza terrestre hacia abajo. Sin embargo, siendo Diana un Espíritu más inferior comparado con Atafon, a pesar de eso, me parecía a un Ángel.
Aquellos recuerdos me venían a la mente, por el simple hecho de estar penetrando en zona mas sombría y fétida, desagradable, diferente al bosque que recorriéramos donde el sexo libre se combinaba con la belleza Helénica. Por instinto sentí, que ahora descendíamos a región semejante a las de los Abismos.
Eleuterio se tornó serio y Diana se tornó pálida y con aspecto grave. De súbito apareció Kinter:
–Señor, Le dice a Eleuterio, Ya todo esta preparado. Ya hablé con Deucalión.
–Aquí, mi hijo, esclareció Eleuterio, no es zona propiamente libre, Mas es una región un poco controlada.. Los Espíritus que vienen aquí, son para tratamiento Espiritual.
De hecho, en la medida que avanzábamos, de lejos divisé un edificio de torres puntiagudas que se perdía en el cielo, evocando a los antiguos palacios. Inmensos jardines con diversas entradas le caracterizaban la construcción. Y sobre esos campos verdes parecían pastar a nuestra vista, algunos animales.
En medio de nosotros y la edificación, se interponía gran distancia de aquella oscura zona de olor nauseabundo.
–Allá queda el sanatorio, habló Diana apuntando con la mano. Sin embargo tenemos que cruzar el Valle de la muerte, extenso faja donde estacionan los Espíritus que iniciaron el desgaste de la forma periespiritual por la exageración del ejercicio sexual.. Es lógico mi estimado, dice dirigiéndose a mí, que en esa primera excursión y en estas primeras noticias que enviaremos a la tierra sobre sexo, en el plano espiritual, no mostraremos ni contaremos todo. Es el mejor método pedagógico del mundo Espiritual, que toda la verdad trasmitida a la tierra sea entregada de acuerdo con las posibilidades de percepción y asimilación de aquellos que la van a recibir. No podemos decir más ni enseñar más de aquello que apenas hace parte de una medida general que la humanidad pueda recibir. Algunos discípulos o iniciados reciben en particular mucha información más adelantada, sin embargo, están limitados para hacer algunas revelaciones. Por su propio adelantamiento ellos saben que no deben hacerlo. Si diéramos más de lo que la humanidad puede asimilar estaríamos estableciendo el desorden en la casa del Padre y la perturbación en las mentes humanas.
Diana sonrió y habló para nosotros. Comprendí completamente el esclarecimiento
En diversas ocasiones ya fui alertada sobre ese hecho. Realmente en el plano Espiritual hay recomendaciones severas en referencia del envío de información a planos o criaturas que no alcanzaron aún el clima interior necesario para comprender, a veces prefieren las fuerzas Espirituales que las noticias que vienen aparentemente incompletas.
Afirman que sería mejor. De manera Paulatina y gradual transmitir nuevas noticias que vendrán a esclarecer los puntos aparentemente incomprensibles. Enseñanza poco más demorada, pero segura.
Meditábamos en las anotaciones de aquella hora cuando verificamos que atravesamos terreno extraño y más sombrío aún. Partían gemidos y lamentos de aquí y allí; miré que entre el follaje habían criaturas abandonadas por el piso. Parecían animales y sufrían. Eleuterio nos hizo un gesto y lo acompañamos. Diana espero en el camino en cuanto hacíamos la incursión. Tomamos un desvío. Kunter iba al frente sobre la orientación de Eleuterio. En determinado punto paramos y el guía nos mostró diversos espíritus que se amontonaban unos sobre otros. Noté que no tenían brazos y las piernas eran excesivamente delgadas, pues en la realidad estaban mutiladas.
Fisonomías intensamente pálidas como si hubiesen perdido toda la sangre, con una palidez marmórea. Los labios eran cerrados contraídos como la boca de los niños que chupan biberón; desagradable en realidad, nos hacían recordar a niños recién nacidos, aunque los cuerpos fuesen de adulto.
Ellos vivieron en la afición carnal de naturaleza tan inferior, hasta comenzar el deterioro del periespíritu
¿Que hicieron ellos?
Usaron los brazos y las piernas para el mal. No se limitaron a practicar dentro de un plan de pureza y comprensión, mas se entregaron al desvarío del sexo. Hemos dicho que amor y sexo son leyes de la vida, empero el vaso físico, bien sea el de la tierra o el Espiritual están sujetos a dilaceraciones y a responsabilidades que le cabrán siempre al Espíritu que se pierde en el desgaste electromagnético. Esos vehículos de manifestación de la mente y del alma como el periespíritu, son verdaderas máquinas construidas con la más absoluta precisión. Las exageradas pasiones y la cólera son descargas electromagnéticas de altísimo voltaje que pone en riesgo todo el aparato. La mente emite energías en el sentido en que nosotros la fijemos. Si nuestro pensamiento se fija en las manos para ellas se dirige la corriente vibratoria desencadenada en el cuerpo Espiritual y es lógico que ahí se concentraran violentamente las fuerzas electromagnéticas comandadas por la mente.
Si fijamos la mente en los órganos sexuales, el fenómeno es el mismo. Nos cabe dirigir sabiamente las fuerzas interiores que se mueven sobre el comando de nuestra mente
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