- Introducción
- Formulación del problema
- Marco teórico
- Resumen
- Glosario
- La sociedad de consumo actual, desenmascarando necesidad o vanidad
- El consumo y la naturaleza
- El utilitarismo
- Conclusiones
- Hipótesis
- Anexos
- Recomendaciones
- Bibliografía
Introducción
La presente investigación es de gran importancia no solo para mí como autora, si no para el lector que se adentre en esta monografía conociendo la manera en que el ser humano siempre ha sido consumidor; pero mientras en otras épocas procuraba consumir de acuerdo con sus necesidades naturales, en la actualidad las personas tienden a crear una serie de hábitos y modos de vida que llevan a consumir por el mero placer de consumir. Surge, de esta manera, la sociedad consumista de la cual tocaremos fondo.
A lo largo de la monografía comprobaremos que, si bien es cierto que los medios influyen en las conductas de los individuos, tanto positiva como negativamente, no hay que olvidar que los medios masivos de comunicación están hechos por hombres, y que muchas veces los intereses económicos sobrepasan a los morales, sin importarles a quienes tienen el poder monopólico las consecuencias que pueden ocasionar en su entorno. Así, pues daremos solución a la formulación del problema y observaremos que podemos hacer nosotros como estudiantes para no ser parte de esta sociedad de consumo, que nos hace veletas de la creciente globalización.
Formulación del problema
TEMA: La sociedad de consumo actual.
Pregunta: ¿Dejaremos que el mundo sea un producto más, empacado en el "carrito" hacia el abismo consumista?
OBJETIVOS
GENERAL:
Asumir una posición crítica frente a la problemática de la sociedad de consumo actual determinando los efectos que esto produce a nivel tanto individual es decir a las personas atrapadas por el circulo consumista las cuales pierden su propia identidad, al confundir lo que son, con lo que poseen; tanto a la sociedad en general que día a día va deteriorando nuestros recursos naturales. De esta manera conoceremos los efectos del consumo a nivel cultural, personal, familiar, social, regional, y global.
ESPECIFICOS:
Reconocer a través del presente, cuales son los factores que inducen la compra.
Identificar las causas y consecuencias del consumo.
Conocer las actitudes que aumentan, y reducen el consumismo.
Ser artífices de la reducción del consumismo
Conocer los factores de gasto presupuestario.
Reconocer como los medios masivos de comunicación influyen en la manipulación de las masas hacia el consumo.
Marco teórico
"La sociedad de consumo consiste en una forma de consumir impuesta por el sistema capitalista de producción, que se extiende no solo a los países desarrollados sino a todos los del planeta… El modo de producción capitalista fabrica desde Coca Cola hasta jets para uso privado. Es obvio que estos productos no se intentarán vender a los indios peruanos o los habitantes de las villas miserias, pero sí se volcarán esfuerzos para que los niños de esos lugares consuman Coca Cola en vez de leche. Lo verdaderamente importante para el sistema es que la mayoría de las personas se conviertan en consumidores irracionales, pero que a través de esta forma transfieran la mayor cantidad de recursos. Es de esta manera que la sociedad de consumo actual instaura la dictadura del producto."
Para G. Katona y W. Rostow, el consumo de masas es consecuencia del alto desarrollo al que han llegado determinadas sociedades; esto se manifiesta en el incremento de la renta nacional. A su vez posibilita que un número mayor de personas adquiera bienes más diversificados. "Queda implícito en el pensamiento de estos dos autores que los beneficios de la sociedad de consumo representan una condición del desarrollo capitalista, de posible acceso por los países que adoptan este sistema."
Los defensores de la sociedad de consumo afirman que existe una mayor igualdad entre las clases sociales.
Resumen
El consumo es algo necesario para la vida del hombre y su subsistencia. Además, una fuente generadora de empleos; pero el hecho de consumir más de lo que realmente necesitamos, con el objetivo de llenar nuestro vacios espirituales o mantenernos a tono con el desarrollo, avances y tecnología que mueven al mundo nos ha hecho caer en el "consumismo", con la colaboración de la publicidad de los medios que siempre nos sugieren ir por algo más.
El consumismo aumenta las diferencias existentes entre los países desarrollados y los países del tercer mundo, dentro de los propios países se acentúan las diferencias entre las personas, generando bolsas de pobreza. También cabe notar, que agota las reservas naturales y aumenta la cantidad de residuos produciendo un deterioro en el medio ambiente.
Las personas atrapadas por el círculo consumista pierden su propia identidad, al confundir lo que son con lo que poseen; estas se sienten desgraciadas al no comprar el objeto o la experiencia deseada. En suma el consumo no es la manera más adecuada o inteligente si así se piensa, de alcanzar la felicidad.
Este no sería hoy un tema de preocupación, si por su causa no estuviéramos poniendo en riesgo nuestra propia vida, y la del planeta en sí.
Frenar el consumo pudiera tal vez conspirar contra el propio desarrollo, en cuanto tecnologías y otras esferas de la sociedad respecta; pero estamos en la disyuntiva de consumir lo necesario, o enfrentarnos a un futuro llenos de incertidumbres, escasez y contaminación, de no ser capaces de encontrar alternativas, para renovar o sustituir nuestras fuentes de energía y administrar los recursos naturales con total responsabilidad.
PALABRAS CLAVE:
CONSUMO- CONSUMISMO- EMPLEO-TECNOLOGIAS- PUBLICIDAD.
Glosario
CONSUMO: s la acción y efecto de consumir o gastar, bien sean productos, y otros géneros de vida efímera, o bienes y servicios, como la energía, entendiendo por consumir como el hecho de utilizar estos productos y servicios para satisfacer necesidades primarias y secundarias. El consumo masivo ha dado lugar al consumismo y a la denominada sociedad de consumo.
CONSUMISMO: El consumismo puede referirse tanto a la acumulación, compra o consumode bienes y servicios considerados no esenciales, como al sistema político y económico que promueve la adquisición competitiva de riqueza como signo de status y prestigio dentro de un grupo social. El consumo a gran escala en la sociedad contemporánea compromete seriamente los recursos naturales y el equilibrio ecológico.
El consumismo, entendido como adquisición o compra desaforada, idealiza sus efectos y consecuencias asociando su práctica con la obtención de la satisfacción personal e incluso de la felicidad personal.
DISYUNTIVO: Situación en la que sólo existen dos posibilidades entre las que hay que elegir.
MACROECONOMIA: La macroeconomía es la parte de la teoría económica que se encarga del estudio global de la economía en términos del monto total de bienes y servicios producidos, el total de los ingresos, el nivel de empleo, de recursos productivos y el comportamiento general de los precios. La macroeconomía puede ser utilizada para analizar cuál es la mejor manera de influir en objetivos políticos como por ejemplo hacer crecer la economía, conseguir la estabilidad de precios, fomentar el empleo y la obtención de una sustentable y equilibrada balanza de pagos.
MICROECONOMIA: La microeconomía es una parte de la economía que estudia el comportamiento económico de agentes económicos individuales, como son los consumidores, las empresas, lostrabajadores y los inversores; así como de los mercados. Considera las decisiones que toma cada uno para cumplir ciertos objetivos propios. Los elementos básicos en los que se centra el análisis microeconómico son los bienes, los precios, los mercados y los agentes económicos. La gran mayoría de los modelos que se exponen en el presente artículo tienen como base la existencia de un marco económico y social de economía descentralizada, en el que existe propiedad privada.
MERCADO: en economía, es cualquier conjunto de transacciones o acuerdos de negocios entre compradores y vendedores. En contraposición con una simple venta, el mercado implica el comercio formal y regulado, donde existe cierta competencia entre los participantes.
MARKETING: Se le ha definido como el arte o ciencia de satisfacer las necesidades de los clientes y obtener ganancias al mismo tiempo. Es en realidad una subciencia o área de estudio de la ciencia de Administración.
ESTANDARIZACION: Adaptación o adecuación a un modelo, normalización.
BIEN: en Administración de la comercialización o Marketing un producto es cualquier cosa que se puede ofrecer a un mercado para satisfacer un deseo o una necesidad.
En Economía, son los bienes escasos, y por lo tanto, susceptibles de valoración económica y monetaria.
SOCIOCULTURAL: El término sociocultural viene de las palabras "social" y "cultural"; lo social según la real academia española es: lo perteneciente o relativo a la sociedad. Se define sociedad como una agrupación natural o pactada de personas que contribuyen unidad distinta de cada uno de sus individuos, con el fin de cumplir, mediante la mutua cooperación, todos o alguno de los fines de la vida. Y lo cultural es el conjunto de modos de vida y costumbres, conocimientos y grado de desarrollo artístico, científico, industrial, en una época, grupo social, etc.
La sociedad de consumo actual, desenmascarando necesidad o vanidad
Desde el momento que el hombre necesita bienes para su subsistencia, salud, educación, vivienda, descanso, etc., hay que concluir que resulta imprescindible la producción y el consumo de los bienes que responden a las necesidades fundamentales de la persona humana. Sería ideal, por consiguiente, que todos los poseyeran según sus necesidades y conforme a la
Capacidad de cada uno, en orden a su desarrollo integral, de cuerpo y alma.
I. LA SOCIEDAD ACTUAL
El ser humano siempre ha sido consumidor; pero mientras en otras épocas procuraba consumir de acuerdo con sus necesidades naturales, en la actualidad las personas tienden a crear una serie de hábitos y modos de vida que llevan a consumir por el mero placer de consumir. Surge, de esta manera, la sociedad consumista, que se caracteriza por:
superproducción
creación de nuevas necesidades y nuevos lujos
predisposición a comprar
despilfarro
En este mundo de superabundancia se produce una doble paradoja: por una parte, las personas que tienen acceso a cuantiosos bienes jamás se sienten satisfecha y, por otra parte, existen seres humanos que no pueden satisfacer sus necesidades elementales.
El consumo no se define ni por el alimento que se digiere, ni por la ropa, ni por la sustancia oral y visual de las imágenes y de los mensajes, sino por la organización de todo esto. Éste absorbió al individuo en la carrera por el nivel de vida, al acosarlo de imágenes, de información, de cultura, la sociedad del bienestar ha generado una de socialización. La era del consumo liquidó el valor y la existencia de las costumbres y tradiciones, produjo una cultura nacional y de hecho internacional en base a la solicitación de necesidades e informaciones, arrancó al individuo de su tierra natal y de su estabilidad.
Lo que se consume son signos o imágenes de los objetos, es decir significaciones que se introducen desde afuera en las cosas reales. La función de estos símbolos será la de satisfacer y gratificar los deseos y ambiciones personales.
"Hablar de la sociedad de consumo es sostener que el consumo ha derivado en consumismo, es decir, en exaltación, exageración o hipervaloración mitificante. Es reconocer que, más allá de la necesidad de satisfacer la aspiración a una vida más confortable, se vive socialmente una ansiedad por poseer cada vez más. La paradoja es que esta compulsión trae una desvalorización del objeto una vez alcanzado. El producto poseído ya no interesa tanto como el que aún no se posee. De allí que el consumista es un permanente insatisfecho y el consumo se torna sinónimo de desvalorización de ideologías, mitos, ídolos, modas y, por supuesto, objetos."
Hoy en día se vive en una realidad determinada por la compulsión al consumo,la globalización y el avance tecnológico, donde los medios de comunicación son más vehículos de marketing que de información, y además se vive encerrado en un mercado y no en una sociedad.
II. EL CONSUMO
La posesión de bienes se da a través del consumo, definido como "el conjunto de procesos socioculturales en que se realiza la apropiación y los usos de los productos". Estos pueden estar a disposición en cualquier parte y pueden ser consumidos de diversas maneras. El simple hecho de su existencia, transforma a los productos en potencialmente consumibles y da a todos el derecho legítimo de aspirar a tenerlos, ya que fueron producidos con el esfuerzo de toda la sociedad.
El dinero permite el consumo, pero cada vez se necesita menos dinero. La producción en masa y la de imitaciones ha hecho posible que personas que no pertenecen a las elites puedan tener acceso a objetos similares.
El fenómeno del consumo implica relaciones de dominación pero también de imitación. El mimetismo cultural es un móvil importante para el consumo. El consumo es una elección consciente de la persona y depende de su cultura.
Las visita a los "shopping" no tiene muchas veces como objeto el consumo puro y simple de bienes concretos. Estar en él hace parte del consumo simbólico. Además, el consumo permite placer, mejorar las condiciones materiales de vida y da gratificación psicológica,
Aunque la persona no pueda comprar los bienes, la sola ilusión de que puede llegar a hacerlo, el simple consumo estético de las luces o de un televisor en una vidriera, proporciona placer y hacen que la persona se sienta partícipe de este mundo.
La búsqueda del placer es un deber desde que el consumo de bienes y servicios pasa a ser la base estructural de las sociedades occidentales.
"En las últimas décadas existe una particular intensificación de actitudes y comportamientos sociales en torno al consumo de bienes; hablar de una sociedad de consumo implica poner en descubierto que el consumo, es decir, la actitud para el mismo, ha llegado a un nivel paradigmático, afectando, definiendo y perfilando conductas, relaciones y estructuras; en definitiva constituyéndose en un valor esencial de la cultura contemporánea."
III. EL COMPORTAMIENTO DEL CONSUMIDOR
El estudio de las necesidades del individuo permite una mejor interpretación de las actitudes y comportamientos de quien es el motivo central de intercambio.
La aplicación de las estrategias de marketing sobre los deseos del individuo provoca una incentivación del consumo, una generación de demanda. Es evidente que el marketing puede exacerbar necesidades aunque preexistan, o crear deseos y provocar una demanda
La necesidad es algo que falta y que el consumidor desea con mayor o menor intensidad. La necesidad recorre toda la escala de apetencias, desde la verdadera angustia producida por la sed, hasta la más frívola que pueda experimentarse en el deseo de darse un capricho de poca importancia.
Las necesidades del consumidor van formando una escala de valores con sus apetencias y deseos.
Existen distintos enfoques que tratan de determinar si el consumidor actúa de manera racional o irracional; si está influenciado por el contexto o se da un aprendizaje por parte del consumidor:
Enfoque microeconómico: supone un consumidor lógico y racional cuyo esquema divisional se basa en dos variables: precio y cantidad.
Este enfoque supone que el consumidor sigue el principio de maximización de utilidades. Las críticas efectuadas a este enfoque se basan fundamentalmente en las dudas sobre los principios de racionalidad genérica del consumidor.
Enfoque conductista: para los conductistas solo la conducta observable proporciona elementos objetivos para una rigurosa investigación psicológica. El aula del consumidor tiene varios maestros; entre ellos se encuentran las "comunicaciones", la observación e "imitación" de otros consumidores, las experiencias personales, etc.
Enfoque sociológico: es sumamente complejo interpretar la conducta de un individuo y, más aun, hacerlo sin considerar los aspectos sociales que influyen sobre él, sus demandas y decisiones.
Hay quienes consideran que el consumidor no es quien maneja el poder de decidir si compra o no tal bien. Son los productores los que manipulan a los consumidores a través de los medios, especialmente, por medio de la publicidad. Además, la producción crea nuevos productos que a su vez determinan nuevas necesidades, es decir, los productos no satisfacen necesidades reales sino que son los generadores de las mismas.
Lo que prevalece en esta postura es la lógica capitalista que sólo busca el beneficio económico. El hombre contemporáneo es llevado a consumir irracionalmente, de forma tal que se lo juzga por lo que tiene y no por quién es; sólo se realiza a través del consumo y para ello cualquier medio es válido.
Partidarios de estas ideas son: John K. Galbraith, Erich Fromm, Vicent Packard, entre otros.
Otros consideran que el consumidor actúa racionalmente, así lo plantea Braidot en su obra "Marketing Total", no existen clientes irracionales. En la mayoría de los casos los consumidores se comportan racionalmente, pero con una racionalidad referida a sus propias realidades y a sus particulares esquemas divisionales. Para demostrar esta postura propone un ejemplo:
"Para una adolescente el valor de un zapato está en la moda. Es necesario que el calzado sea lo que se usa. El precio y la duración carecen de importancia. Para la misma adolescente, convertida en madre años después, la moda se convierte en una restricción. No comprará algo fuera de moda. Pero buscará además, y quizá con prioridad, mayor duración, menor precio, comodidad, entre otras ventajas. El zapato de gran moda es una compra racional para la adolescente, pues vestir a la moda es su mayor preocupación, ya que sus restantes necesidades de alimento, vivienda, etc., en general están a cargo de sus padres."
Y existen quienes consideran que el consumo se balancea constantemente entre el extremo de lo afectivo, que es el ámbito del deseo y la irracionalidad, y el de lo racional que está orientada a la realidad objetiva, intelectual y conceptual.
En algunos productos y para determinados consumidores preponderará lo afectivo y para otros lo racional. El deseo humano es el motor del consumo.
IV. DISPARADORES PSICOLOGICOS
Entre los motivos principales que permiten al individuo tomar decisiones de compra son:
cultural: Este es un factor que debe analizarse como el lugar a donde pertenece el individuo, su forma de pensar dentro de un grupo social específico, tradiciones y nivel socioeconómico.
Status: este factor es uno de los influyentes más fuertes dentro de la psicología de los consumidores, ya que mediante los medios de comunicación se deja una imagen mental de lo que el individuo debe buscar como modelo de vida a seguir, por tanto, provoca que los diferentes estratos socioeconómicos aspiren a esa forma de vida causando el consumismo.
Afectivo: El disparador afectivo ataca los procesos mentales del individuo para que este prevea posibles problemas que se le podrían presentar tanto con sus seres queridos, como en sus expectativas. Es considerado como un excelente manipulador de la clientela para crear adicción y consumo de los productos.
De necesidad: este disparador se basa en mostrar lo necesario que es el consumo de un producto para la vida cotidiana.
Estandarización o Masificación: este disparador se posesiona en la mente del consumidor, haciéndole notar que el producto que se oferta es adquirido o usado por todos.
El consumo y la naturaleza
Cada vez son más los productos empacados en desechables, icopor, plástico y tetrapac, materiales que de una u otra forma contribuyen al aumento de la temperatura, contaminación de la tierra y cuerpos de agua, pues cuando son desechados contribuyen a la producción de gases de efecto invernadero y lixiviados.
Aunque existen empresas e industrias que se jactan hablando de las políticas ambientales, y patrocinados eventos para la conservación, estos no son más que paños de agua tibia ante el impacto que genera la producción de sus bienes.
Y no lo digo por decirlo, hace una semana vi en un envase no retornable de Coca-Cola de un litro (que antes venía en botella de vidrio), el anuncio: "Nuevas tecnologías amigables con el ambiente" y me dije, ¿será que este embace de plástico no contamina?, pero para mi sorpresa la nota se refería a que esa multinacional, en el 2008, "introdujo 3.300 enfriadores que usan el 30% menos de energía con el fin de ayudar a disminuir el efecto invernadero". El mensaje termina diciendo "nuestro planeta es único cuídalo".Después de leerlo me pregunte si en vez de reducir el consumo de energía con los enfriadores, que ya están en todas partes, no sería mejor si utilizaran menos envases de plástico, además de dejar de distribuir las neveras. De esta forma serían más coherentes con su política ambiental.Alguna vez le escuche a alguien decir que la fuerza que está tomando lo ambiental no obedece a un aumento de conciencia social relacionada con el medio natural, sino al aumento del impacto económico derivado del deterioro ambiental.
Reconozco que la culpa no es solo de los productores de bienes y servicios, los consumidores jugamos un papel fundamental, pues somos nosotros quienes decidimos si compramos o no, los productos que de una u otra forma contribuyen a los efectos negativos en el ambiente.Es cierto que no podemos dejar de satisfacer nuestras necesidades sino encontramos cosas que no vienen empacadas en productos que hagan parte de una política de sustentabilidad, pero también es cierto que podemos dejar de consumir muchas cosas que a veces resultan hasta innecesarias o que si bien hacemos un pequeño esfuerzo, las podemos conseguir en empaques que no contaminan tanto.
Por ejemplo, las gaseosas y jugos aún los podemos conseguir en botellas de vidrio, aunque a veces resulte difícil, aún se consiguen. Cuando vayamos a hacer mercado podemos llevar nuestras propias bolsas de tela o cajas. Cargar con un termo de agua y así evitar comprar botellas de agua, procurar comprar productos en empaques más grandes y de esta forma generar menos basura, consumir menos productos empacados, fijarnos en las especificaciones para ver si quienes las fabrican tienen alguna política ambiental. También podemos hacer un uso razonable de los recursos naturales, la energía y el agua, de esta forma contribuiremos con la mitigación de los efectos climáticos y exigiremos a los fabricantes utilizar tecnologías más sustentables.
De lo contrario seguirá imperando todo aquello que de una u otra forma nos está llevando a vivir en un planeta desértico, donde la temperatura aumenta cada día más, donde no se pueda respirar aire puro, ni disfrutar de la belleza de los árboles, el mar y las aves.
Si nos detuviéramos a pensar en lo que podemos hacer por salvar o contribuir con el bienestar de la naturaleza, seguro que lograríamos, sino disminuir, detener el calentamiento global. Creo que el consumo ineficiente de energía se podría contrarrestar si de verdad hubiese voluntad.Las tecnologías limpias, los inventos y muchos descubrimientos dan para que vivamos en un mundo sin dióxido de carbono, pero puede más la ambición y la falta de voluntad para cambiar de parecer. Seguimos utilizando combustibles fósiles no porque no haya otras alternativas de producción más limpia, sino porque las otras formas sostenibles no dan dinero.Dicen los expertos que si la temperatura aumenta más de un grado podría peligrar el delicado equilibrio de la naturaleza desde el fondo de los océanos hasta las cumbres más altas del mundo y me pregunto, entonces qué le dejaremos a las futuras generaciones y hasta cuándo la tierra soportara nuestros abusos?
Que el Día del Medio Ambiente sea el propicio para empezar a reflexionar y tomar las medidas pertinentes. Sé que si cada uno de nosotros empieza con pequeñas acciones, se puede hacer algo.
HIPOTESIS SOBRE EL CONSUMO RAZONADO
Le ejercicio de repensar, sobre lo que consumimos es tan sencillo, como hacer la limpieza de las cosas que realmente no necesitamos, cuando algo sobra y cuando algo no satisface nuestras necesidades en su plenitud, es probablemente un elemento de consumo.
Ya he explicado grosso modo, el porque la gente se hace consumista, lógicamente el primer inconveniente es la sociedad misma, que se rehúsa a entender que el razonamiento es la base de la sostenibilidad.
Mientras las culturas sigan centradas en el consumismo y en el crecimiento, el alcance de los cambios políticos y tecnológicos será limitado. Para prosperar en el futuro de forma prolongada, las sociedades humanas tendrán que cambiar su cultura, de manera que la sostenibilidad se convierta en norma y el consumo excesivo en tabú
Se Hace pues necesario y preciso un cambio que permita superar la cultura del consumismo si queremos evitar el colapso ecológico. Las claves del cambio pasan por seis agentes culturales clave: la educación, las empresas, los medios de comunicación, los gobiernos, las tradiciones y los movimientos sociales.Sin un cambio cultural deliberado, que valore la sostenibilidad por encima del consumismo, ni el compromiso de los gobiernos, ni los avances tecnológicos serán suficientes para salvar a la Humanidad de unos riesgos ambientales y climáticos inaceptablemente peligrosos. El informe, se ha subtitulado "Del consumismo hacia la sostenibilidad"
El utilitarismo
En el ámbito de la ética, la doctrina según la cual lo que es útil es buena, y por lo tanto, el valor ético de la conducta está determinado por el carácter práctico de sus resultados. El término utilitarismo se aplica con mayor propiedad al planteamiento que sostiene que el objetivo supremo de la acción moral es el logro de la mayor felicidad para el más amplio número de personas. Este objetivo fue también considerado como fin de toda legislación y como criterio último de toda institución social. En general, la teoría utilitarista de la ética se opone a otras doctrinas éticas en las que algún sentido interno o facultad, a menudo denominada conciencia, actúa como árbitro absoluto de lo correcto y lo incorrecto. El utilitarismo está asimismo en desacuerdo con la opinión que afirma que las distinciones morales dependen de la voluntad de Dios y que el placer que proporciona un acto al individuo que lo lleva a cabo es la prueba decisiva del bien y del mal.
Se han realizado numerosas críticas al crecimiento, al desarrollo y, por consiguiente, a la sociedad de consumo. El eje de éstas críticas es que el desarrollo desmesurado va en contra de la calidad de vida. Es decir, que los productos entregados al hombre para consumir son cada vez más insatisfactorios y deterioran el concepto de una vida estable, de un disfrute de las condiciones reales de la existencia.
Estas críticas se relacionan con las de los ecólogos, para quienes la multiplicación industrial y otros factores falsean las relaciones del hombre con la Naturaleza (perjudicando a ésta e incluso al propio hombre).
Otras críticas provienen de las víctimas del crecimiento en Occidente: los países considerados como subdesarrollados, o de renta muy baja por persona.
El consumo de las sociedades occidentales se hace a costa de las materias primas insuficientemente pagadas y de la mano de obra barata de los países subdesarrollados. A éstos, las formas de la sociedad de consumo les llegan por la vía de los medios de comunicación y se adhieren a ellas por autocolonización (se denomina así al proceso imitativo seguido por culturas o formas de vida con respecto a otras tenidas por superiores, pero que falsean la realidad objetiva de los pueblos en los que se da ese proceso.)
Hasta ahora, los datos existentes demuestran que el crecimiento occidental se hace perjudicando a los países subdesarrollados, y que aumenta continuamente la distancia entre naciones ricas y naciones pobres.
Conclusiones
El consumo no depende del dinero de que disponga el individuo, sino más bien de su predisposición a comprar. Es decir, tanto en épocas de florecimiento económico como en épocas de recesión, los individuos y las familias tienden a mantener un nivel de consumo constante, lo cual les permite ahorrar en algunas ocasiones y les obliga a endeudarse en otras.
Los productos tienen un significado efímero: nada está hecho para durar.La aparición de nuevos materiales y nuevas tecnologías, así como la rapidez en el cambio de la moda, traen como consecuencia que las cosas duren cada vez menos, lo que supone un gran negocio, para los fabricantes.
Entre la publicidad y el sistema económico capitalista basado en el consumo, se da una relación muy estrecha. La producción masiva de bienes de consumo exige una venta también masiva de esos productos; ésta venta sólo puede realizarse con la ayuda de la publicidad.
Entre la publicidad y el sistema económico capitalista basado en el consumo, se da una relación muy estrecha. La producción masiva de bienes de consumo exige una venta también masiva de esos productos; ésta venta sólo puede realizarse con la ayuda de la publicidad.
Es el consumo cuya única finalidad consiste en demostrar que se tiene suficiente dinero para comprar cosas caras, no importando la utilidad que tenga lo que se compra, la necesidad que se pretende cubrir e incluso el buen gusto, pues lo que realmente interesa es diferenciarse de los que no pueden comprar esos o0bjetos. Esta forma de consumo lleva consigo toda una forma de vida.
Hipótesis
La sociedad de consumo seguirá existiendo, pero depende de nosotros su aumento o disminución ya que la mentalidad y el accionar consumista acarrean serias consecuencia, al llevar en detrimento nuestro planeta, como nuestro ser. El consumismo aumentara las diferencias existentes entre los países desarrollados y los países del tercer mundo, en la actualidad dentro de los propios países se acentúan las diferencias entre las personas generando bolsas de pobreza, Las personas atrapadas por el círculo consumista están perdiendo su propia identidad, al confundir lo que son con lo que poseen.
Anexos
Después de la segunda guerra mundial se produjeron fenómenos que influyeron en la sociedad al consumir.
a) El desarrollo de las grandes ciudades.
b) El enorme desarrollo de los sistemas de producción en serie.
En los países industrializados el consumo no sólo ha aumentado sino que además se ha transformado considerablemente. En la composición del presupuesto de una familia moderna podemos distinguir a largo plazo tres orientaciones del consumo.
En primer lugar se observa un campo de regresión y que se corresponde con el consumo tradicional: alimentación, vestido, sanidad, alojamiento. Es el llamado "consumo de subsistencia", que satisface las necesidades de tipo fisiológico, definidas poco más o menos sin ambigüedad, consumo universal casi rutinario y obligatorio para todos. Este conjunto representa aproximadamente los dos tercios del presupuesto de la familia media, pero disminuye a medida que la renta familiar aumenta, dado que la elasticidad de éstos gastos con respecto a la renta, generalmente es menor a 1 (alimentación, 0,3; vestido, 0,9; alojamiento, mantenimiento y energía, 0,7). El descenso de la parte destinada al consumo alimenticio no significa necesariamente un descenso del gasto total en alimentación. Esta disminución de la parte de gastos de alimentación es una aplicación de la ley de Engel (del nombre del economista Ernst Engel, 1821-1896), que estipulaba que, a medida que aumenta la renta, ésta pasa a satisfacer las necesidades sociopsicológicas.
La segunda orientación se centra en la creación de un nivel de vida. Los gastos de este tipo reflejan un orden de preocupaciones menos prioritarias que las anteriores. Las funciones a cubrir, así como las aptitudes puestas en juego, son complejas. La presión del medio ambiente influye aquí de forma considerable, pero no puede desdeñarse la aportación personal. La parte de las opciones, domina, y los presupuestos se distinguen no sólo por las cantidades o calidades consumidas, como ocurría en el caso anterior, sino por la naturaleza misma de los bienes. Estos gastos tienen una elasticidad superior a 1: su participación en el presupuesto (alrededor de un 15% de media) tiende a crecer de forma moderada: mobiliario, decoración, equipamiento del hogar.
El tercer aspecto se refiere a los gastos en actividades de tipo cultural, artístico, deportivo, educativo, de transportes, de vacaciones y tiempo libre.
El concepto de consumo cada vez refleja menos la subsistencia (lo que sirve para vivir) y cada vez más lo que transforma a los individuos, los hace expresarse y comunicarse entre ellos.
Recomendaciones
. El ser humano es un coleccionista por naturaleza. Después de haber seleccionado los nutrientes que requerimos para mantener nuestra existencia ,en ese mismo viaje hemos recogido otros objetos a los que le damos diferentes valores , entre ellos los estéticos asociados al de la utilidad y económicos .Todos ellos conllevan el factor de cuántas unidades tengo y el deseo de acumular , con lo que establezco mi tesoro .Es el deseo de guardar para establecer una riqueza reconocida por otros miembros sociales que también son coleccionistas .Si a alguno de estos objetos es apetecible para la sociedad , esto despierta en la sociedad un deseo de posición colectiva . Es decir, que esto se da cuando se establece una moda, en donde en la mayoría de los casos, la necesidad es intrascendente. Así es como nacen los lujos, los cuales en sí son innecesarios. Pero cuando la moda exige producción, entonces aquí sí que hay trascendencias ecológicas, porque hay demanda de materiales y energía para utilizar los objetos de la moda. Por otro lado, esta actividad cae en manos de la comercialización. El número de empleados en la producción del artículo de moda comienza a demandar además, energía proveniente del petróleo, y por último los esfuerzos del mercadeo con los empaques, embalajes y transporte, agravan más la dependencia energética. Activamos, bien es cierto la economía, pero ¿es la economía un sistema racional? Pareciera que lo único que le importa es su actividad, sin importarle mucho las consecuencias .Esto poco importa siempre y cuando haya ganancias .Lo que interesa, es la ganancia, la cual se reparte entre los accionistas. Pero ¿en qué la gastarían los accionistas? Pues algo de ella se usa para el ahorro preventivo, pero la tentación gana, y el gasto se va en viajes y las cosas de la moda para el bienestar familiar. Siempre, de una u otra forma, se compran cosas innecesarias que terminan siendo basura. Esta es nuestra cultura actual. Como consecuencia, hemos mal gastado la energía y otros recursos naturales en banalidades. Todo esto da basura al sé, y aquí comienzan las consecuencias. Primero que todo es que esta basura no es absorbida por el medio ambiente ,por ser en gran medida constitutiva , artículos que no se oxidan .Por otro lado contienen venenos ambientales y para la salud , contaminando el agua del subsuelo y de la superficie . Segundo, hemos extraído materia prima para fabricar los artículos de la moda, a una velocidad muy superior de la que necesita la naturaleza para reponerlos, con lo cual se entra en el ámbito de consumo de los recursos NO RENOVABLES, como es el caso del petróleo y de los minerales, o de la misma madera, con lo que la deforestación se produce en forma acelerada. Aquí comenzamos a atentar contra las otras especies de animales, y también contra la agricultura y la floresta. Miles de toneladas de agroquímicos son utilizados en el combate contra los hongos e insectos, con el fin de que toda cosecha sea para nosotros. Si bien es cierto que la población nuestra se puede multiplicar exponencialmente dado las anteriores técnicas, estas presionan al ambiente en sobre medida. Si a esto le agregamos los desperdicios provocados por la cultura de la moda, el planeta entra en crisis ambiental. Consecuencia de ello es el cambio climático, el envenenamiento del agua, la desertización acelerada, y hasta la devaluación de la moneda y junto con ella, todos nuestros valores; situación que termina provocado la inflación de nuestro sistema. Con todo esto entramos en la devaluación de la riqueza y la aceleración del tiempo .No nos cabe la menor duda de que el mundo está presionado. SEA CONSIENTE, CONSUMA RESPONSABLEMENTE.
Bibliografía
GALLLO GONZALES Gonzalo, Colombia, El sentido de la vida, 1ra edición, editorial El país, Medellín, Colombia, 2004, 160 páginas
BILLOROY, Oscar Pedro. "Introducción a la publicidad". Editorial El ateneo. Bs. As. 1993.
BRAIDOT, Nestor. "Marketing Total". EditionsMacchi.1996.
Autor:
Diana Marcela Sandoval
COLEGIO MAYOR SAN FRANCISCO DE ASIS
GRADO: 11-B
SANTIAGO DE CALI, JUNIO 05 DE 2012
LA SOCIEDAD DE CONSUMO ACTUAL, DESENMASCARANDO
NECESIDAD O VANIDAD