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La educación y su desarrollo en el contexto de la sociedad contemporánea

Enviado por yuliyami2000


    1. Resumen
    2. Educación y desarrollo en el esquema de las sociedades capitalistas desarrolladas y subdesarrolladas
    3. El problema de los valores
    4. La escuela tradicional
    5. La escuela nueva
    6. La escuela progresista
    7. Educación, desarrollo y nuevas tecnologías
    8. Educación y democracia
    9. Educación superior y desarrollo
    10. Bibliografía

    Resumen:

    La investigación que se muestra a continuación, aborda el comportamiento de la educación en la sociedad contemporánea, así como las exigencias que se le presentan en los inicios del tercer milenio, como uno de los elementos que ha adquirido mayor relevancia social, política y económica en el mundo. También se integran los elementos de la educación y el desarrollo, las nuevas tecnologías y su impacto educacional, la relación de la educación con la democracia, así como elementos de la educación superior.

    Los sistemas educativos en la actualidad, han de responder con sentido prospectivo a las características que han adoptado los escenarios del mundo globalizado; para lo cual se deberán diseñar estrategias que no solo se adapten a esos cambios, sino que se anticipen a las expectativas o contribuyan a crearlas

    Descriptores.

    sociedad contemporánea, relevancia social política y económica en el mundo, sistema educacional, prospectivo.

    Title: Education and its development in the context of Contemporary Society.

    Abstract: The investigation that fallows includes the behaviour of education in contemporary society, as well as the requirements that take place in the start of the third millennium, as one of the elements that have acquired the uppermost social, political and economical relevance in the world. Besides, we also have the elements of education and development, the new technologies and their educational impact, the relationship between education and democracy, plus the elements of the universitary education and democracy, plus the elements of the universitary education.

    The current educational systems should respond with a prospective sense to the characteristics, taken by the globalized world scenes; so, some strategies should be designed, not only to be suitable for these changes, but also to anticipate and contribute in the creation of expectations.

    Descriptors:

    contemporary society, uppermost social, political and economical relevance in the world, educational systems, prospective.

    I. INTRODUCCIÓN

    En los inicios del tercer milenio uno de los elementos que ha adquirido mayor relevancia social, política y económica, es lo referente a la educación. El análisis del proceso educativo trasciende los límites de la escuela por su orientación temporal que rebasa los límites de una edad determinada en los sujetos que aprenden. Otro punto de análisis se refiere al desarrollo de capacidades individuales para el desenvolvimiento de los hombres como seres sociales. El tercer punto a debatir y en el que centraremos la atención, lo constituye la relación entre educación y desarrollo, abarcando los planos económicos, político y social.

    Los sistemas educativos en la actualidad, han de responder con sentido prospectivo a las características que han adoptado los escenarios del mundo globalizado; para lo cual se deberán diseñar estrategias que no solo se adapten a esos cambios, sino que se anticipen a las expectativas o contribuyan a crearlas.

    II. DESARROLLO

    Educación y desarrollo en el esquema de las sociedades capitalistas desarrolladas y subdesarrolladas.

    Las relaciones entre educación y desarrollo tienen sus bases en la creciente necesidad de los sistemas económicos de impulsar el empleo y la introducción nuevas formas de obtención de ganancias y de hacer eficiente los procesos productivos.

    En sentido inverso, los sistemas educativos siempre tratarán de conducir sus prácticas, en función de cumplir las exigencias impuestas por dichos sistemas económicos.

    El análisis de la relación existente entre educación y desarrollo permite reconocer el carácter interdependiente de estos procesos en la sociedad contemporánea. Se manifiesta también la existencia de un paralelismo entre la organización empresarial y de los servicios con los sistema educativos, con lo cual se justifican las desigualdades en las formas de distribución de las riquezas, el control del acceso a los puestos de dirección y a los empleos.

    La educación como fenómeno social debe ser dirigida y orientada por el estado. Su desarrollo en América Latina ha estado marcada por la introducción de orientaciones que han evolucionado desde posiciones donde el estado ejerce un total control de las prácticas educativas, en función de todos los sectores que componen la sociedad.

    En nuestra región las políticas de desarrollo promovidas por la CEPAL y los organismos financieros internacionales a lo largo de la segunda mitad del pasado siglo dirigen su atención fundamentalmente a la necesidad de una inversión cada vez mayor en la educación como vía para alcanzar el desarrollo. Un ejemplo de estas propuestas se esboza a partir de la a teoría del capital humano que concibe la relación entre educación y desarrollo en dos vertientes fundamentales; la primera plantea que una inversión personal en la educación promoverá mayores niveles de ingreso y una movilidad social ascendente. La segunda variante de análisis argumenta la necesidad de una inversión económica que abarque a todos los entes sociales como vía para promover el desarrollo económico del país, sin embargo los datos que a continuación se presentan ilustran una realidad diferente.

    El incremento de la desigualdad en forma de exclusión social influyó negativamente en el desarrollo de los programas educativos en los ‘80 y en los ‘90. De 1980 a 1990 los latinoamericanos por debajo de la línea de pobreza se incrementaron de 37% a 39% en el caso de la pobreza urbana, y del 25% al 34% en el caso de la rural. En 1970 la brecha entre el 1% más pobre y el 1% más rico de la población latinoamericana era de 363 veces, en 1995 aumentó a 417. Según el BID, en los ‘90 se ha producido una extensión de la pobreza a más de 150 millones de latinoamericanos, que equivale a cerca del 33% de la población que percibe menos de dos dólares diarios, mínimo necesario para cubrir las necesidades básicas de consumo.

    En 1998, pese a que el PIB creció en un 2,6%, la desocupación en la región aumentó de 7,2% a 8,4%. Junto a esto se observa un decrecimiento de los empleos en el sector formal y el hecho de que en el período 1990-1997 de cada 10 empleos que se crean, 9 de ellos pertenecen al sector informal. CEPAL, en su Panorama Social de América Latina 2000, estima que la población en condiciones de pobreza creció de 204 millones en 1997 a 220 millones en el 2000. En América Latina hoy el 5% de la población es dueña del 25% del ingreso nacional, mientras que el 30% sólo tiene el 5% del ingreso nacional.

    La no inversión en la educación en los ‘80 obedeció a la incertidumbre en cuanto a la tasa de retorno futuro de esa inversión y a otros factores. A pesar de un ligero incremento en la inversión en la última década, el Nuevo Modelo Económico (NME) que cristalizó en los ‘90 ha resultado ser un límite a la potencialidad democratizadora que implican las transformaciones educativas.

    Pese al incremento de la inversión educativa en los ‘90, esta sigue siendo muy baja. Los países de la OCDE invierten per cápita 8 veces más que los países latinoamericanos en educación. En nuestra región el gasto anual por alumno por nivel de educación en 1992 fue de $ 252 dólares, 394 y 1485 respectivamente en las enseñanzas preescolar y primario, secundario y superior, mientras que en los de la OCDE estas cifras fueron de 4.170, 5.170 y 10.030.

    En los países desarrollados el gasto público en investigación y desarrollo como % del PIB oscila entre el 3,0% en el caso de Japón y el 2,5% aproximadamente en otros países; mientras que en América Latina (salvo en los casos de Cuba y Costa Rica, que están en el orden del 1,26% y el 1,25%) no alcanza al 1%. Si en la región no se invierte al menos del 5% al 7% del PIB en educación (educación básica y media y educación superior) y no menos de un 3% en I+D, será difícil cerrar la brecha que se ensancha con respecto a los países desarrollados. Es obvio que estas cifras deben ajustarse a las peculiaridades de cada país.

    La postura neoliberal impuesta, tanto a países desarrollados como subdesarrollados, ha repercutido directamente en las condiciones de desarrollo y en los sistemas educativos. La forma que preconizan los principales centros de poder mundial ha estado encaminada a idealizar los mecanismos a través de los cuales, la educación se dirige a potenciar el desarrollo. "la propuesta escolar neoliberal tiene en cuenta los derechos de las familias y los consumidores en el campo educativo, pero subrayan más que nada los aspectos de la libertad individual y los mecanismos de progreso y desarrollo."

    Esta tendencia ha tenido un profundo impacto en los sistemas educativos de América Latina y el Caribe, tanto en las dos últimas décadas del siglo pasado, como en lo que va del presente siglo XXI.

    La propuesta de globalización neoliberal promueve una descentralización desmedida de la función educativa del estado, relegando la misma a las prácticas escolares de instituciones privadas y las formas no escolarizadas de educación. Esta situación, en términos de desarrollo ha significado la acentuación de la situación de subdesarrollo, la dependencia, subordinación y monoproducción de los países latinoamericanos; profundizando la disminución de la calidad de vida en general, el aumento cuantitativo de la pobreza y la imposición de un pensamiento único.

    Entre los elementos que reflejan las influencias educativas, de esa concepción que combina la ideología de mercado con prácticas propias del mundo de los negocios, y de la obtención de ganancias como objetivo esencial, se encuentran, la permanente competencia entre los profesores y los contenidos educativos, la introducción de redes electrónicas para el aprendizaje, la traducción y el adecuamiento de los principales aportes de las ciencias, la modificación de la gestión de las instituciones en un sentido menos jerárquico y formal, las políticas públicas y el mutuo enriquecimiento entre distintas modalidades de educación (pública-privada) y entre diferentes instituciones educativas (formal, informal y a distancia).

    El currículo se torna crecientemente complejo y la educación, en especial la superior, debe entrenar a los estudiantes en el manejo de las nuevas tecnologías y de varios idiomas. Por otra parte, se tiende a exigir cada vez más la rendición de cuentas acerca del manejo de los recursos y de los resultados alcanzados con relación a objetivos predefinidos.

    La virtualización de la educación tiende a desarrollarse vertiginosamente con el objetivo de expandir la educación a un menor costo, vía la educación a distancia. Internet tenderá a convertirse en la forma predominante de educación y en especial de educación superior.

    Los mismos líderes y responsables de las políticas neoliberales y de sus consecuencias, reconocen que es necesario atenuar estas políticas por sus consecuencias desastrosas para el "Estado de Bienestar" del Norte y para el "Estado de Malestar" que siempre ha prevalecido en el sur.

    El problema de los valores.

    Para el análisis de la problemática de los valores y su proyección en el contexto de la educación es preciso que se tenga en cuenta qué referente se asumirá del concepto "valor", debido fundamentalmente a que las prácticas educativas responden, como hemos visto anteriormente a un sistema político determinado que es quien rige y dicta el sistema de valores a ser trabajado en el marco de las escuelas.

    Teniendo en cuenta estos elementos encontraremos que el valor "consumo" es enfocado como valor por las sociedades capitalistas y como antivalor por las sociedades de orientación socialista. En este trabajo entendemos por valor "la significación socialmente positiva que tienen los objetos y fenómenos de la realidad para el hombre."

    En el campo educativo las distintas orientaciones pedagógicas han enfocado el tratamiento a los valores desde la óptica del sistema teórico que la sustenta, presentándose tres variantes organizativas que son las que más relieve han adquirido en la dirección del aprendizaje de los alumnos. Algunas de las características que definen estos enfoques son:

    La escuela tradicional.

    • La tendencia axiológica es el objetivismo axiológico, al aparecer como entes en sí, esenciales y objetivos, independiente de los bienes y de los sujetos que los valoran.
    • Valoración de la enseñanza humanística y de la cultura general y el conocimiento ya constituido.
    • Valorización de la organización lógica de la enseñanza (centrada en el profesor y de manera externa en el alumno, con una programación lógica de las disciplinas.
    • Valoración de la disciplina escolar como una vía de acceso a los valores esenciales del conocimiento. (poder moral que lleva a una realidad moral)

    La escuela nueva.

    • Esta propuesta pedagógica está centrada en el individuo, valorizando sus características, necesidades y actividades personales, lo cual significa un subjetivismo axiológico, ligando indisolublemente valor y valoración.
    • Valorización de la enseñanza real, la vida y las actividades humanas.
    • Valoración de la iniciativa personal, la actividad libre y la autonomía del alumno.
    • Valorización de una reforma pedagógica en detrimento de los contenidos de la enseñanza.
    • Valorización del alumno como centro del proceso de aprendizaje.

    La escuela progresista

    • La tendencia axiológica es aquella que deviene en reflexiones instauradas a partir del materialismo histórico y dialéctico.
    • Valorización de los contenidos y los modelos educativos actualizados, vinculados al mundo del alumno con un valor socialmente significativo.
    • Valorización de la escuela como agencia difusora de contenidos vivos, concretos, indisolubles de la realidad social.
    • Valoración de una relación educación–sociedad crítica por un contenido histórico y político, logrando una comprensión más profunda y organizada de la realidad.

    Educación, desarrollo y nuevas tecnologías.

    El mundo contemporáneo está marcado por los efectos de una profunda revolución tecnológica: la llamada Revolución Electrónico/informática, que se traduce en cambios en las telecomunicaciones, la microbiología y otras áreas.

    Sea cual fuere la interpretación de la magnitud de los cambios que hoy está sufriendo el mundo, no cabe dudas de que el impacto de la más reciente revolución científico–tecnológica, en el terreno social, político y cultural es enorme. Uno de los blancos en el cual ha hecho impacto esta nueva revolución científica es en la educación.

    El término sociedad del conocimiento es un concepto útil para describir el paso de una sociedad fundada en la producción de bienes materiales a una sociedad de la era de la información, donde el tratamiento, almacenamiento, intercambio y producción de nuevos conocimientos predominarán. La nueva orientación producida a partir de la introducción de las nuevas tecnologías privilegia el trabajo colectivo, el aprender en grupo, la integración de conocimientos, el énfasis en el aprendizaje más que en la enseñanza, el desarrollo de capacidades para reflexionar, problematizar, integrar, clasificar, comparar y para trabajar en equipos multidisciplinarios.

    Un aspecto polémico y controvertido entre quienes vienen trabajando este tema resulta a la sugerencia de la posibilidad de ampliar las formas de acceder al conocimiento al minimizar las limitaciones relativas a espacio, tiempo, infraestructura, personal docente y por otra lado lo relacionado a las formas que ha asumido la globalización y su maridaje con la propuesta neoliberal donde se profundizan los procesos de exclusión y segmentación.

    Estas nuevas formas de producir, trasmitir y organizar el conocimiento requieren de instituciones educativas con autonomía, abiertas a las nuevas del conocimientos y a políticas que faciliten "accesos libres y gratuitos a la mayor parte de servicios relacionados con la búsqueda del conocimiento"

    Educación y democracia.

    La educación del hombre no solo contempla la dimensión económica, el tener, producir y consumir; educar es también generar vida. Este último aspecto de la educación se presenta como alternativa democrática que pretende enfrentarse a la práctica neoliberal, esta última, generadora de desigualdades, exclusión y falsa democracia.

    Si unimos, en un mismo contexto de reflexión, las palabras educación y democracia y si asumimos una posición crítica y cuestionadora de los ideales prometidos por el neoliberalismo, estaremos reconociendo la imposible neutralidad política de la escuela y su función de inclusión social y como proceso de ruptura con la pasividad y la omisión política.

    Un elemento necesario a tener en cuenta para entender la relación entre educación y democracia es la cuestión de la universalización de la enseñanza, lo que implica el acceso al sistema escolar de forma gratuita, como derecho amplio y fundamental de todos los ciudadanos. La posición adoptada en América Latina y el Caribe, reconoce que "no hay desenvolvimiento sustentable sin paz ni desenvolvimiento sin democracia, y nada de esto podremos alcanzar sin asegurar el derecho de los niños a una educación de calidad para todos."

    Posibilitar el acceso a la educación básica es una meta permanente de toda sociedad que se pretenda democrática. No obstante el acceso puede ser también instrumento de manipulación, la escuela es capaz de promover tanto ciudadanos libres como ciudadanos adaptados. "La alternativa viable ante el neoliberalismo debe potenciar en el individuo, al máximo posible, sus potencialidades de pensar, de hacer y de ser. Contribuyendo con la riqueza de su singularidad al equilibrio, bienestar y progreso del colectivo donde vive."

    Educación superior y desarrollo.

    La universidad es a la vez uno de los motores del desarrollo económico y uno de los polos de la educación a lo largo de la vida, es a la vez depositaria y creadora de conocimientos y técnicas. En las universidades se agrupan el conjunto de las funciones tradicionales asociadas al progreso y a la trasmisión del saber: investigación, innovación, enseñanza, formación, educación permanente y la cooperación internacional.

    El modelo neoliberal, en lo que a las universidades se refiere, implica que la universidad contrata con el Estado, con las empresas y con los padres de familia que tienen capacidad de pagar la educación de sus hijos. Todos exigen niveles de excelencia en conocimientos y saberes útiles a los mercados, y procuran no rebasar la demanda con sobreofertas de egresados que abatirían los sueldos y empleos. Esta nueva universidad neoliberal tiene una política llamada "humanitaria" mediante la cual fundaciones públicas o privadas ofrecen becas o créditos a los estudiantes pobres que no pueden costearse sus estudios. "Si el concepto de universidad neoliberal pone el acento en lo público y en lo privado, el concepto de capitalismo universitario destaca la transformación de las actividades universitarias en mercancías".

    Se piensa en términos de mercado y esto conduce a la creación de las universidades corporativas, en función de las necesidades de las corporaciones, como fue el caso pionero (1950) de la General Motors para recuperar el carácter de proyecto democrático de la educación. Esta propuesta es incompatible con el proyecto, "Educación y conocimiento, eje de la transformación productiva con equidad" (CEPAL-UNESCO, 1992).

    Dentro de las funciones principales que en el ámbito latinoamericano se le asignan a la educación superior con una orientación neoliberal se encuentra:

    Lograr que la humanidad pueda dirigir cabalmente su propio desarrollo, haciendo que cada persona se responsabilice de su destino a fin de contribuir al progreso de la sociedad en la que vive, fundando el desarrollo en la participación responsable de las personas y de las comunidades en la perspectiva de la educación permanente, en la que la educación básica deberá dar a cada persona los medios de modelas libremente su vida y participar en la evolución de la sociedad.

    Esta orientación se dirige a eliminar la responsabilidad estatal de fomentar la educación y de garantizar el acceso de los sectores más vulnerables y de menores ingresos.

    Una segunda función tiene que ver con el hecho de establecer entre los individuos vínculos sociales procedentes de referencias comunes. Para que cada persona pueda conocer el mundo social y ayudar a su construcción, tiene primero que conocerse y comprenderse a sí mismo.

    Otra de las tareas predominantes en la educación superior lo constituye acompañar el avance de la ciencia y de la tecnología, pues es la escuela, y principalmente la universidad , el lugar donde la ciencia crece, se renueva y difunde.

    La cuarta función está relacionada con la necesidad de que la educación llegue cada vez a más personas. Así la educación de adultos y las formas no presenciales cobran mayor relevancia.

    En este ambiente no siempre se han podido cumplir estas metas:

    La creciente complejidad de los sistemas de Educación Superior –su masividad, el vertiginoso crecimiento del sector privado, el carácter de variable clave para el desarrollo de las naciones y sus limitaciones con relación a la sociedad de la información y el conocimiento– han llevado a los gobiernos a abandonar la posición de laissez faire propia de la década de los ‘80 (en la que la privatización era considerada un paliativo a la expansión cuantitativa, sin que se controlase la calidad) y a adoptar una nueva actitud con la formulación de políticas que velen por la calidad mediante la certificación y la evaluación, con el objetivo de conciliar expansión y calidad, sin interrumpir el proceso de desarrollo de las IES privadas, pero sí formulando políticas y confeccionando instrumentos para su control.

    En este cambio de los gobiernos mucho han influido los documentos y conferencias de UNESCO. Ejemplo de esto lo tenemos en la creación de Comisiones Nacionales en varios países –Argentina (CONEAU), México CONAEVA) – que, sin limitar la autonomía corporativa de las universidades, las someten a la verificación y control de pares académicos. Otros ejemplos son los procesos de evaluación conducidos en la Universidad de la República (Uruguay), en Cuba por el Ministerio de Educación Superior (MES) y en la UCV (Venezuela), todos ellos con la asesoría de UNESCO-IESALC.

    Tal vez el fenómeno nuevo más relevante en lo que respecta a las políticas educacionales lo constituya la introducción generalizada de regulaciones que establecen la búsqueda de un porcentaje de financiamiento por las universidades públicas. El Estado asigna de un 50% a un 70% de los recursos y las universidades deben obtener el resto de los recursos: competitivamente (optando por diversos fondos), a través del cobro de aranceles y del crédito estudiantil y obteniendo recursos para la investigación de fondos sacados a concurso.

    En resumen, el financiamiento de la educación superior se ha vuelto más diverso. Parece, por otra parte, haber cristalizado un consenso acerca de que la ES no puede ser considerada únicamente un bien privado supeditado a las fuerzas del mercado. Igualmente, se ha llegado a la conclusión de que las reformas inducidas desde afuera, si no se internalizan y van acompañadas de reformas desde adentro, no convierten a las IES en organizaciones emprendedoras, innovadoras, de mayor calidad y más pertinentes en cuanto a sus funciones básicas si bien es cierto que los sistemas de ES han pasado de la simplicidad y la homogeneidad a la complejidad y la heterogeneidad en la última década, no es menos cierto que del descontrol de los ‘80 se ha pasado a la formulación de políticas que controlan la calidad mediante la evaluación institucional. Es cierto que son políticas incipientes que tal vez aún no marquen una modificación sustancial en cuanto a lo que la transformación de las IES se refiere, pero es sin duda un importante cambio y el prerrequisito para lograr un verdadero cambio cualitativo.

    La orientación meramente de mercado de muchas universidades privadas, de un lado, y el concepto tradicional de autonomía corporativa, de otro, parecen ser algunos de los principales obstáculos para que se logre este cambio cualitativo. La apropiación de la universidad por una lógica corporativa es la perversión de la autonomía. La universidad deja de ser una institución de y para la sociedad, para convertirse en una institución de y para los integrantes de la comunidad universitaria.

    En resumen, desde principios de los ‘90 hasta el presente, si bien se adoptó ante la expansión cuantitativa y las restricciones fiscales un nuevo marco conceptual provisto, en gran medida, por los aportes teóricos y análisis empíricos de instituciones como UNESCO y sus redes de Cátedras UNITWIN y de los investigadores vinculados a ellas, no podemos sin embargo afirmar que estas políticas hayan modificado esencialmente las modalidades de conducción de la ES. Lo que prevalece es una tensión entre las aspectos positivos y negativos del mercado y del estado, respectivamente.

    III. Bibliografía

    Redi Santi Di Pol,. Educación, libertad y eficiencia en el pensamiento y en los programas del neoliberalismo. Revista de Educación. No. 283, 1987.

    José Ramón Fabelo. La formación de valores en las nuevas generaciones. 1995

    Sonia Aparecida. Valores en la Educación. 1998.

    Carmen García Guadilla. 1998. La educación superior en Venezuela: una perspectiva comparada en el contexto de la transición hacia la sociedad del conocimiento" Cuadernos de CENDES. No 37.

    Juan Antonio Blanco. Tercer Milenio. Una visión alternativa de la posmodernidad.

    CEPES. Tendencias pedagógicas contemporáneas. 1996.

    Eduardo R. Avila Rumayor. La educación para el trabajo en la sociedad neoliberal. Revista Contexto y Educación # 64. 2001

    MINELAD VII, 1996. educación, democracia, paz y desenvolvimiento. Recomendaciones de la VII reunión de Ministros de Educación de América Latina y el Caribe. Santiago de Chile. UNESCO.

    Odalis Bouza Betancourt .Ponencia Universidad 2000.

    Maria Egilda Castellano. Ponencia al V taller internacional sobre la educación superior y sus perspectivas. La Habana 7- 12 de febrero del 2000.

    Felipe Sánchez Linares. ¿Es ciencia la filosofía? 1988.

    Joao Arnoldo Gascho. Escuela, comunidad y democracia. Una visión crítica, UNOESC. 1998.

    Lic. Juliet Gelavert Jardines

    CENTRO DONDE LABORO: Universidad de Holguín " Oscar Lucero Moya"

    Dirección Particular: Calle 3ra N0 13. REPARTO José Díaz. Holguín. Cuba

    La autora de este trabajo es la Lic. Juliet Gelavert Jardines, Lic en Educación, especialidad Historia y Ciencias Sociales, que imparte las asignaturas Economía Política I y II en la Universidad de Holguín. Investigo en el campo de las Ciencias Pedagógicas, desarrollando específicamente la temática: La Formación de valores en la educación superior. Me encuentro cursando una maestría en Desarrollo Social en FLACSO( facultad Latinoamérica de Ciencias sociales) de la Universidad de la Habana y un Doctorado en Ciencias Pedagógicas en la Universidad de la provincia de Holguín. Este trabajo que les envío es un resultado de ambas y formará parte de ambas tesis de investigación.