El problema de la zona erógena en su versión puntual no me permite hacer aparecer la división, es por eso que rechazo cualquier dimensión geocéntrica o heliocéntrica porque da un centro que es un punto, para estas cosas siempre sirve más ideas kleperianas elípticas, donde hay dos focos. Me resulta difícil aceptar para estas nociones cualquier concepción que sea puntual porque me remite a un uno concéntrico que me desbarata el argumento. Quizás Diana tiene razón, pero si Diana tiene razón todo lo que yo dije está mal, cosa que me perturba un poco.
Pregunta: No, Lacan dijo.
No, no, fue Diana y esto que digo yo de Lacan lo digo yo, porque lo leemos y lo interpretamos y lo contextuamos y lo recontextuamos y tomamos frases y dejamos caer otras. Para una enseñanza tan basta, que son bastantes anaqueles de la biblioteca no hay que creer que Lacan dice, es qué elige uno de lo que dice Lacan que dijo tantas cosas y tantas cosas disímiles, como otros autores muy importantes como Freud, así que mi impresión es qué se recorta de esa enseñanza para decir qué cosa. Yo te estoy planteando algo que en absoluto puede tener la estructura puntual y donde ha quedado localizado en el inconciente es donde más rechazo que Eso pueda decir algo. Quiere decir que en el ejemplo que estaba inventándoles para ustedes antes, el mensaje del inconciente en su dimensión más radical, a la altura del seminario 8, o sea "Subversión del Sujeto", o sea 1960, perfectamente puede ser el bruxismo, y no decenas y decenas de sueños. Es claro que no niego que para llegar al bruxismo haya que hacerlo luego de atravesar un arduo trabajo de analizar muchísismos sueños, lapsus, resolver síntomas, etc, etc. Pero ahí es en el punto más increíble que yo esté diciendo algo, porque ni siquiera tomando las fórmulas anteriores creo que eso es un decir.
Pregunta inaudible.
Que un sujeto lo asuma al menos como pregunta. Por qué yo castañeteo los dientes a la noche, es raro, por qué no lo hago durante el día? Qué significa eso?
Pregunta inaudible.
En qué sentido es un síntoma? Hay muchas versiones del síntoma, si es porque tiene estructura de lenguaje, sí. Es una forma de entender el síntoma en Lacan y así podemos decir que el primero que enseño la teoría del síntoma fue Marx, dice Lacan, porque tiene estructura de lenguaje. O sea algo que se repite e insiste, que implica esta dimensión del inconciente y que alguien se pregunta por ello, y si se pregunta por ello es porque se le presenta como una parte de sí, pero es la parte de sí que menos estamos dispuestos a aceptar que es la parte de sí. No por nada, no sé si ustedes recuerdan que respecto de la estructura del grafo, y con esto termino, la dirección de la cura que plantea Lacan es ir hacia la cadena superior del grafo y es por eso y no por nada que los análisis suelen concluir, no estoy hablando del testimonio, del pase, estoy hablando de análisis comunes, suelen concluir llegando a la pulsión. Aceptan la siguiente fórmula: la noción más oscura del psicoanálisis es la pulsión? Para mí sí, qué quieren que les diga!, pero si les preguntan a 1000 personas que estudian psicoanálisis van a ver que la noción más oscura es la pulsión, porque se cree que es el funcionamiento del cuerpo que da satisfacción a las necesidades corporales que son las ganas de coger y de comer, no es eso, no tiene nada que ver con eso.
Es la más oscura porque es a la que se arriba al final mientras que nosotros creemos que está al comienzo.
Pregunta inaudible.
Inverso al neurótico. El neurótico es que desde el intervalo del deseo, pasando por el fantasma, se va hacia abajo. Mientras que el análisis dice Lacan es: partiendo del deseo, del intervalo, atravesando el fantasma, yendo hacia arriba, que es hacia el estatuto subjetivo de la cadena inconciente de la enunciación, que es la pulsión. O sea, la pulsión en la experiencia psicoanalítica es un punto de arribo porque es el mensaje más radicalmente inconciente, porque es donde yo menos creo que es donde puedo estar hablando. Y es la noción más oscura porque no está al comienzo. Uno tuvo que haberse analizado mucho, y muy exitosamente en el sentido de ir atravesando un más allá, para un más allá del fantasma, para arribar a la pulsión, sino es correcto que sea lo más oscuro, porque no aparece. Es la última localización a la que arriba la experiencia analítica del sujeto del inconciente.
Dejamos aquí.
CLASE NRO. 5
Docente: Lic. ALFREDO EIDELSZTEIN
Esta va a ser nuestra última reunión en torno al tema del inconciente, y por ese motivo, además de presentar los últimos argumentos en torno a la teoría de Lacan al respecto, me pareció oportuno comenzar la reunión haciendo algo así como un delineamiento del recorrido, a ver si llegamos a establecer cuáles son los mojones del recorrido y cuál es el horizonte.
Desde la perspectiva de Freud lo que yo estoy planteando es que en su enseñanza, en la segunda tópica, es el Ello aquel elemento del aparato psíquico que va a recibir todas las propiedades del inconciente. Si me permiten, rápidamente de la Conferencia 31, les leo: "No esperen que acerca del Ello vaya a comunicarles mucho de nuevo excepto que el nombre, es la parte oscura, inaccesible de nuestra personalidad. Lo poco que sabemos de ella lo hemos averiguado al nivel del estudio del trabajo del sueño y de la formación de síntomas neuróticos, y lo mejor: tiene carácter negativo, sólo se puede describir por oposición respecto del yo", con lo cual vean que lo que ya está afirmando es que en las formaciones del inconciente, porque pone como ejemplos los síntomas neuróticos y los sueños, de donde tenemos información sobre el Ello.
"Seguro, las leyes del pensamiento, sobre todo el principio de contradicción, no rige para el funcionamiento del Ello", cosa que conocemos como propiedad del inconciente. "Segundo, en el Ello no hay nada que pueda equipararse a la negación", también conocido por nosotros como una propiedad del inconciente, todo esto está en las páginas 68, 69 y subsiguientes. "En el Ello no se encuentra nada que corresponda a la representación del tiempo. Desde luego el Ello no conoce valorizaciones del bien y el mal, ni moral alguna". Más fuerte todavía, "Parece verdad que la energía de las mociones pulsionales se encuentra en otro estado que en los demás distritos anímicos, es movible y susceptible de descarga con ligereza mucho mayor, pues de lo contrario no se producirían esos desplazamientos y condensaciones que son característicos del Ello", con lo cual hasta las leyes del inconciente directamente, así dicho, pasan a ser propiedades específicas del Ello.
"El yo", página 72, "se ha divorciado de una parte del Ello mediante resistencias de represión, pero la represión no se continúa en el interior del Ello. Lo reprimido confluye con el resto del Ello". Bien, esto es entonces lo que para mí es determinante del progreso de la enseñanza de Freud, y me da la impresión que en ese mismo sentido evoluciona la de la Lacan. Para ello les preparé, me parecía importante hacerlo, un cierto recorrido de la enseñanza de Lacan tomada in toto, respecto del cual hoy la última estación en el recorrido sobre su teoría del inconciente va a ser "Posición del Inconciente", pero respecto de eso les propongo que hasta 1950 Lacan como todos los psicoanalistas postfreudianos, no sé si conocen un poquito la historia de Lacan. Lacan pide ser miembro de la Sociedad de Psicoanálisis más o menos en el 32, comienza su análisis más o menos en la misma época, su primer artículo psicoanalítico es del 36, es "Más allá del principio de realidad", y en el 37 comienza a atender pacientes. Pero del 37 hasta el 50 la posición de Lacan, en cierto sentido es la misma que la de todos los postfreudianos, esto es: operar con la segunda tópica. Los postfreudianos, en general, todos, operan con la segunda tópica. Dos indicaciones para que ustedes puedan contrastar con vuestras lecturas, si esto es cierto o no. Hasta el 50 prácticamente en la enseñanza de Lacan no hay referencias al inconciente. Y por otra parte, todo el interés teórico de Lacan estaba puesto, aunque parezca mentira, y en este sentido es más annafreudiano de lo que se podría suponer, está todo su interés puesto sobre el yo, el estadio del espejo, etc. ,etc., pero el interés teórico de Lacan desde mediados de la década del 30 hasta el 50 está orientado hacia el yo como elemento de la segunda tópica freudiana.
Las cosas cambian a partir del 51, Lacan en el 51 empieza a dictar su seminario privado, o sea que empieza a enseñar psicoanálisis, hasta ahí solamente había publicado artículos y dado conferencias, y comienza los seminarios privados y es a partir del 50, 51 cuando Lacan por primera vez introduce la articulación lingüística – psicoanálisis. Y es a partir de esta articulación donde Lacan se empieza a interesar por el inconciente, es a partir de allí donde él mismo postula un retorno a Freud, retorno a qué de Freud? Recordarán, conocen muy bien todos los primeros seminarios de Lacan, su punto de interés son los sueños, el chiste, la psicopatología de la vida cotidiana, o sea que el retorno de Lacan a Freud a partir de el encuentro de la gran articulación posible de hacer entre lingüística y psicoanálisis es el retorno a la primera tópica freudiana, retorno al inconciente.
Ya a partir del 53 Lacan lo hace con su nuevo paradigma si ustedes quieren, de simbólico – imaginario y real. Para poner un poquito las coordenadas históricas, no hay que olvidar que en el 53 Lacan siendo presidente de la Sociedad de Psicoanálisis de París, renuncia, que es cuando empieza a dar su seminario público, en el 53, es por eso que sus discípulos toman Función y Campo como el Discurso de Roma porque lo consideran fundante de esa posición novedosa en el seno del movimiento psicoanalítico, que es un retorno a Freud en el sentido de retornar a las elaboraciones freudianas en torno del inconciente.
Lo que yo propongo, y en esto no sigo en general a los comentaristas, no porque digan lo contrario, sino porque esto no lo sostienen, no se encuentra esto que yo les estoy proponiendo a ustedes en este seminario, es que a partir del 64, 10 años después, cuando Lacan crea su propia institución psicoanalítica, y deja de ser miembro de la IPA, lo que se produce en Lacan es el mismo movimiento que se registra en la enseñanza de Freud, es pasar el interés del inconciente hacia el Ello, o sea, me da la impresión que el retorno de Lacan a Freud es tan espectacular que hasta sigue su mismo recorrido, vuelve a retomar el origen en el inconciente y como Freud no se equivocó respecto del establecimiento de las coordenadas estructurales, vuelve a llegar al mismo punto donde llegó, que es asignarle al Ello todas las atribuciones del inconciente sistemático, distinguiendo así del Ello los elementos propios al producto de la represión. En Lacan este Ello definido como caos por parte de Freud, pasa a ser la estructura del lenguaje.
Dos o tres indicaciones de este recorrido de Lacan por parte de Lacan, no entro todavía a "Posición del Inconciente" para trabajar su punto de arribo, sino que les propongo 2 o 3 citas de años posteriores, donde Lacan mirando hacia atrás, él mismo marca su recorrido. Página 116 del seminario 11, dice Lacan: "En mi Informe de Roma procedí a una nueva alianza con el sentido del descubrimiento freudiano. El inconciente es la suma de los efectos del habla en un sujeto, a ese nivel en el que el sujeto se constituye por los efectos del significante", con lo cual les propongo que no pierdan de vista: en el retorno la nueva alianza, la nueva alianza que es articular el inconciente con la estructura del lenguaje. En el artículo que llama: "De Roma a Roma", 1968, Lacan dice: "Función y Campo del habla", o de la palabra, es imposible traducirlo sin ambigüedades al castellano, "y del lenguaje en psicoanálisis, tal vez por otros términos. Función del habla o la palabra, Campo del lenguaje, era interrogar la práctica y renovar el estatuto del inconciente", con lo cual vean desde qué perspectiva se retorna a Freud, dice Lacan, con la idea de renovarlo.
Y la última, es de la "Ciencia y la Verdad", página 845 de los Escritos, dice Lacan: "Que la vía abierta por Freud no tenga otro sentido que el yo reanudo: el inconciente es lenguaje, lo que ahora es admitido, lo era ya para mí, como es sabido", Lacan más o menos calcula que lleva 10 años el que sus enseñanzas sean asimiladas por el conjunto de sus discípulos. Con lo cual lo que está proponiendo Lacan es que lo que él ya sabía en ese momento es que el inconciente es lenguaje y la idea que propongo es muy sencilla: si el inconciente es lenguaje, eso es el Ello.
Bien, ahora sí entonces, "Posición del Inconciente". Les propongo considerarlo como un texto del 64, y desde ya les advierto que hay un gran distingo que ahí se establece, esta intervención de Lacan no tenía título, fue la intervención de Lacan en el Congreso sobre inconciente, en el 64 Lacan le dió un título, cuando fue publicado en el libro de la recopilación de Henri Ey ahí no tenía título, se llamaba: Sr. Jacques Lacan, y Lacan cuando lo publica como un escrito dentro de los Escritos lo denomina "Posición del Inconciente". Les advierto que a mí entender, lo más significativo de ese título es "del". Porque implica un cambio en la forma de concebir al inconciente, que por ejemplo le planteo establecer esa diferencia comparando este título con dos títulos anteriores, ellos son: "La Instancia de la letra en el inconciente" y ahí podemos subrayar el "en", en lugar del "del", y también "Subversión del sujeto y dialéctica del deseo en el inconciente freudiano", lo que yo les propongo es que lo que se produce con Lacan a partir de lo que sería el seminario 11, es cuando Lacan empieza a hablar de su noción de inconciente, donde ya directamente dice que las enseñanzas de Freud tienen un verdadero sentido, cuando tienen el sentido que tienen en su enseñanza, deja de Lacan de hablar "en" el inconciente para decir "del" inconciente.
Dos cositas más hay que tener en cuenta de "Posición del Inconciente", y es que "Posición del Inconciente", además de lo que ya dije de distinguirse de en el inconciente, implica dos cosas: primero, que a partir de Freud, preexistiendo la enseñanza de Freud es una cuestión de elección, de ética el si uno asume o no la posición de sostener a lo inconciente, si uno asume o no la posición del inconciente. Pero también, y quizás es a lo que yo más apunte hoy, sin lugar a dudas retomando tu pregunta respecto de lo que había dicho Diana Rabinovich de la estructura puntual que yo te había dado, la pensé muchísimo, revisé muchísimas ideas respecto de la estructura puntual, he encontrado que efectivamente Lacan habla de un corte con estructura de punto, lo llama corte puntiforme y es el punto de intersección de la banda de Moebius en el cross cap. En ese lugar efectivamente, creo que es el único, en la estructura, efectivamente operamos con un punto que tiene la estructura de un corte. No conozco ninguna otra superficie, creo que no existe, de ninguna otra geometría concebible en la cual exista la posibilidad de afirmar que un punto funciona como un corte.
Más bien yo voy a plantear hoy la idea que para el corte que nos interesa hace falta establecer al menos dos, y en realidad voy a tratar de demostrar que son tres elementos, o sea que no puede ser puntiforme, si tuviesen que ser sus elementos puntos, al menos harían falta tres.
Sea como sea, qué posición tiene el inconciente, es la segunda lectura que propongo de posición del inconsciente. En la asamblea tal, tal persona asumió la posición tal, o tal persona asumió la posición de peronistas. La segunda es directamente y más común para nuestras concepciones es el problema tópico, qué posición tiene el inconciente. En la tópica freudiana la posición del inconciente es virtual, así que requiere de un espacio virtual, y en ella esa posición se define por: hay tres campos respecto de los cuales el inconciente es uno separado por una barrera resistente del que es su vecino, el preconciente y a su vez el inconciente se haya separado del tercer campo que es la conciencia por el campo del preconciente. Esa es la posición del inconciente.
Lacan va a proponer otra siendo que Lacan está considerando a la altura de 1964 que todas las atribuciones estructurales del inconciente es lo que en psicoanálisis se denomina Ello, con lo cual vamos a dar la tópica del inconciente sin olvidarnos que inconciente ahora es esencialmente, fundamentalmente el Ello.
Dos o tres citas pequeñas para ir enmarcando el recorrido de "Posición del Inconciente", saben ustedes que Lacan en la presentación de "Posición del Inconciente" lo pone directamente en relación al Discurso de Roma, es como la segunda del Discurso de Roma. Dice allí Lacan que el "inconciente es un concepto forjado sobre la marca de lo que opera para constituir al sujeto". Forjado sobre la marca, no es la marca, es un concepto forjado sobre una marca, qué marca? La marca de lo que opera para constituir, y les propongo que en "Posición del Inconciente" lo que opera para constituir es sinónimo absolutamente de causa, ya que la causa es lo que opera para constituir, lógicamente hablando. Entonces, el inconciente es un concepto forjado sobre la marca de lo que causa al sujeto, si es que hay algo que causa al sujeto, esa causación del sujeto se caracteriza por dejar una marca, el inconciente es un concepto forjado sobre esa marca. Es interesante la idea porque primero, nos quita al inconciente de ser un fenómeno en sí mismo, es un concepto, lo que podríamos pensar como fenómeno más bien es la marca, que deja ese factor causal sobre el sujeto.
Un poco más adelante, aclarando bien las ideas Lacan dice: "El lenguaje es la causa del sujeto", o sea tenemos que el lenguaje causa al sujeto, decir ésto es decir: por qué hay sujetos? A causa del lenguaje, es eso, ni más ni menos, a partir de Freud y luego de Lacan ya podemos decir que eso deja marcas, o sea que no es a la sans facon, es de una manera determinada y esa manera determinada es la que nosotros los psicoanalistas estudiamos. Psicoanálisis es el estudio de las propiedades de esa causación del sujeto por parte del lenguaje.
Tercero. El inconciente, dice Lacan, es lo que decimos. Esto significa varias cosas, Primero, que el inconciente es lo que decimos de él, ya que si la causa del inconciente es el lenguaje, nuestro material, no será más que de lenguaje, quiere decir que si el inconciente es algo, es la materialidad del lenguaje. Quiere decir que el inconciente es lo que decimos, primera acepción de esta fórmula de Lacan bastante cerrada, saben lo que quiere decir el Góngora del psicoanálisis? Góngora es un autor que pertenece a un movimiento que se lo llama culturalismo, si buscan en una buena enciclopedia culturalismo va a decir: que viene de Góngora y sus seguidores, que consiste en lo siguiente: decir cosas muy claras de una manera totalmente oscura. Eso es Góngora y eso es Lacan, sí señor. Y Lacan dice: lo digo en difícil y yo no he leído en Lacan que diga que está mal, a mí me da la impresión que dice: lo digo en difícil y está bien.
Pregunta inaudible.
Y es en la contratapa de los Escritos que le dicen el Góngora del psicoanálisis.
Entonces no pierdan de vista que se trata de cosas muy sencillas y dichas de una manera sumamente oscura y parece que adrede.
El inconciente es lo que decimos, primera cuestión, el inconciente dado que tiene una existencia del lenguaje, es lo que decimos que él es.
Segundo, el inconciente es lo que decimos de él trae el problema de la posición de quienes hablamos sobre el inconciente ya que lo que decimos sobre el inconciente pasa a ser equiparable al material del analizante. Si el inconciente es lo que decimos, el inconciente es también lo que decimos del inconciente. Yo hoy con ustedes soy analizante, y ustedes en tanto que Otro son mi analista. Yo estoy un poco fregado que ustedes en esta clase, ustedes con quedarse callados, vieron cuando uno le dice al analista: dígame lo que piensa y se queda callado, y uno piensa qué hijo de puta, yo no puedo quedarme callado así, porque qué boludo que soy, para qué tengo una sesión donde yo no hablo. Es mucho más fácil para el analista quedarse callado que para el analizante. Se imaginan que yo venga y que me sienta inhibido por algún motivo y me quede callado todo el tiempo adelante de ustedes. Seguro que a ustedes les va a provocar mucha incomodidad, y seguro que alguno, que me quiere, que me aprecia, les produciría muchísima incomodidad, pero sin lugar a dudas la barra de la división caería sobre mí, porque uno cuando habla del inconciente necesariamente está produciendo material. Vamos a hacer un test match, acaso ustedes cuando salen de la clase no hablan de mí? No dicen: hoy estaba contento, triste, aburrido, divertido, grosero?
Pregunta inaudible.
Pero se piensa sobre mi, porque lo que digo es material, y es el inconciente. El inconciente es lo que decimos, sólo por esto se justifican las siguientes citas de Lacan de "Posición del Inconciente": "Los psicoanalistas somos partes del concepto de inconciente ya que constituyen el destino". Entonces, primera cuestión, el inconciente implica un decir, es lo que decimos, pero si es lo que decimos, siempre, necesariamente tiene, un destinatario, el destinatario de lo que decimos que es inconciente es el analista. No importa de qué trabaje, no importa las instituciones jerárquicas de las instituciones psicoanalíticas que nos vinculen, no importa el vínculo universitario en que nos hallemos, yo hablando del inconciente necesariamente soy analizante y necesariamente es analista aquel a quien mi decir se dirige. Esto implica tres cosas, primero que inconciente como ya sabíamos por lo que yo cité de Lacan de la vez pasada, se reduce al acto de la enunciación, o sea se ha vaciado totalmente de cualquier índole de contenidos, y es el acto de decir, la enunciación. Un acto vacío de contenidos.
Segundo, implica una posición ética. No se vieron alguna vez llevados ustedes a la posición ética de decirme algo de mí? Ustedes están sentados allí muy calladitos, es muy sencilla vuestra tarea, un lacaniano de la última hora dirían hacen semblante, no sé de qué, de escucharme o de estar, hay muchos que están durmiendo, en la luna de Valencia, no es buen horario el del mediodía, hay mucha modorra… Pero, sea como sea, se ven llevados a la posición de analista, esto quiere decir que están enfrentados a una disyuntiva ética, si me dicen o no me dicen algo, si estiman que me equivoco, no les dan ganas de planteármelo? O más aún no se hacen la pregunta si decírmelo o no? Qué hago, lo dejo decir boludeces? O algo más sencillo.. cometo un lapsus y en vez de decir azul digo blanco, los que no están dormidos se dan cuenta, y se plantean el problema de le digo o no le digo, cómo le va a caer? Le caerá bien o mal, le servirá para seguir haciendo lo que tiene que seguir haciendo? Porque si se lo digo, para qué, no se lo digo porque total se entiende igual, porque ustedes se preocupan por la evolución de mi decir.
"Los psicoanalistas forman parte del concepto de inconciente ya que constituyen el destino". Esta fórmula, la que vacía al inconciente e incluye en el concepto, no del fenómeno del inconciente, yo sé que todos ustedes aceptaban que en el fenómeno de inconciente tenía un lugar el analista, pero ahora estamos hablando del concepto del inconciente, esta noción es la única que permite sostener que la resistencia es resistencia del analista. Para decirlo de una manera clara: es la única resistencia que en el decir sobre el inconciente es resistencia del analista.
Ahora sí, dos grandes citas últimas que voy a trabajar de Lacan para establecer su noción de inconciente, para la próxima ya seguir con el programa tal como estaba planteado. Son, la primera de la página 814 y 815 de "Posición del Inconciente" en castellano.
Pregunta inaudible.
Porque en el acto de decir quien lo puntúa es el destinatario. En la enunciación, quién tiene el poder de puntuar aquello que yo digo? El poder discrecional del oyente, quien escucha. Y si el inconciente es un decir que está destinado a la escucha del analista, la resistencia está solamente en el analista porque es quien lo va a puntuar, podríamos decir que siempre el paciente lo dice.
Pregunta inaudible.
No asume la posición del inconciente. A mí entender puede tener que ver con dos cuestiones. Lacan las vincula a la expresión de "Informar al analista", una es ponerlo en forma o sea que haya padecido la escisión del significante en sí mismo y por otro lado que reciba la formación de las nociones y relaciones de las nociones, si alguien no es informado en este sentido no puede escuchar lo que ni siquiera sabe que existe, como función o cómo se relaciona. Pero si el inconciente es lo que decimos entonces se incluye a quien escucha lo que decimos en la definición. Si el analista está en la misma definición del inconciente entonces toda resistencia es resistencia del analista. Siempre lo dice el paciente, de verdad, el asunto es si hay alguien que asume la posición del inconciente.
La primer cita es un poquito extensa, tenemos tiempo, solamente estas dos vamos a trabajar. Estoy tratando de proponerles, ya saben, la tópica, la nueva tópica para el inconciente que propone Lacan al articular en su retorno a Freud inconciente y lenguaje, que podemos decir que la genialidad de Freud quedó en pie, que Lacan articulando inconciente y lenguaje llega, luego de esa investigación sistemática, al mismo punto que llegó Freud de colocar en el Ello todos los atributos que Freud había asignado primero al inconciente sistemático.
Pregunta inaudible.
No lo planteo yo. Lo que yo planteo es que es así en aquello que yo les propongo de Lacan. O sea que en estas citas que les voy a leer, creo que se favorece muchísimo el que discutamos si es así o no. Yo tengo la impresión que soy bastante hincha pelotas con las citas, o sea que suelo inundarlos de citas. En esta modalidad de vínculo de transmisión de psicoanálisis, no evito pasar por ninguna cita de Freud o de Lacan para sostener aquello que digo que ellos dicen, entonces en lo que yo les traigo que dice Lacan no me cabe la menor duda que Lacan dice lo que yo digo que dice. En otro lugar, podrá decir otra cosa, puede ser, no digo que no. Lo que yo digo es que en esto que dice la lectura que yo hago me parece prudente, al menos me parece transmisible para que la discutamos. Si en otro lugar dice otra cosa no sé.
Pregunta inaudible.
Sabés que yo no sé lo que dijo Diana anoche, no sé por la celeridad con que tendría que resolver.. sino porque no fui.
Pregunta inaudible.
En relación a lo que dijo Diana ninguna porque no sé. En relación a que Lacan pueda decir otras cosas en otro lugar, mi posición es que sí, que Lacan puede decir otras cosas en otros lugares, no me produce ningún tipo de sorpresa. Sí curiosidad para tratar de articularlas.
Pregunta inaudible.
Vas a ver lo que voy a decir dela pulsión es exactamente lo mismo que vos estás diciendo, que la pulsión queda del lado del Ello. Lo dice en "Posición del Inconciente".
Pregunta inaudible.
En Freud es así. Se acuerdan que en el esquema del huevo que está abierto por el lado de abajo, donde se inscribe el Ello, esa apertura del lado de abajo implica el enraizamiento del Ello en las pulsiones, del cuerpo no, lo que llega del cuerpo al aparato psíquico son las pulsiones. El Ello es pulsional en psicoanálisis siempre, desde que Freud habló del Ello es así, y en Lacan también. Ahora, que en el seminario 14 pueda hablar de otra cosa, sí. No adhiero a ninguna posición que respecto de Freud y Lacan diga es así. Es así en qué contexto? Es así que mi madre era el obstáculo para que yo consiga pareja, qué quiere decir para ustedes en psicoanálisis, sobredeterminación? Que es así y que no es así, porque quizás un año después descubras que es por tu padre, y termines el análisis diciendo no, viste que era por mi madre.
El problema es qué estructura tiene cada punto de entrecruzamiento, no adhiero a esas versiones que hacen de verdadero y falso respecto de las articulaciones, hay que ver en qué contexto y hacia dónde se apunta en ese contexto. Me da la impresión que lo yo estoy proponiendo se sostiene. Ahora vamos a ver las citas que traigo que son tomadas al pie de la letra, si efectivamente el interés de Lacan por el inconciente de Freud en lo que él denomina su retorno implican sostener al inconciente de la primer tópica o al Ello de la segunda tópica, en el punto donde yo extraigo de estas citas, que están sostenidas en el recorrido que yo les propuse en la serie de citas de estos textos. Es claro, y me da la impresión que ya deberíamos estar prevenidos, que si tomamos otras citas y articulándolas a otras terceras se puede hacer decir otra cosa y se puede llegar a concluir otra cosa.
Pregunta inaudible.
Mi impresión es que sí. Es claro que hay un progreso enorme en la articulación lógica de los argumentos de Lacan, pero me da la impresión que sí.
Página 814, Lacan se pregunta…
Pregunta inaudible.
Todas las que tomé hoy son de "Posición del Inconciente", primero yo les había propuesto para hoy "Posición del Inconciente" y seminario 11 peor me dio la impresión que no hacía falta, que "Posición del Inconciente" daba bien la posición de Lacan. Y segundo me pareció muy interesante, estoy revisando un texto que no sé si conocen, es de un español, Fuentes o algo así, que escribió un libro sobre un análisis crítico de los Escritos de Lacan, se llama "Los escritos de Jacques Lacan", es espléndido, tomó todos los escritos de Lacan de los Escritos y los comparó con la versión original de todas esas conferencias, clases y estableció las diferencias, Lacan corrigió una enorme cantidad… Por ejemplo, no aparece significante hasta antes del 50 y en textos anteriores Lacan lo corrigió, con lo cual sin saberlo, te confunde muchisimo porque parece que Lacan ya tenía la teoría del significante y no es así. Este tipo tiene la teoría de que los Escritos son un libro, que hay un libro de Lacan, porque los refundió en algo que es una articulación homogénea de un uno, en general no es lo que suelen sostener los comentaristas de Lacan, que sostienen que Lacan nunca escribió un libro, y este tipo dice que Lacan sí escribió un libro y lo demuestra con una investigación espléndida, entonces con el texto de la publicación original pone la parte donde está la diferencia, en la columna de al lado pone el texto de la versión como está en los Escritos, destacado en negritas cómo está dicho una cosa y cómo está dicho en la otra, y después en castellano, en la página siguiente, cómo sería en castellano la versión original y cómo sería la versión de los Escritos, así que es un trabajo magnífico, lo estoy estudiando, es muy aburrido estudiarlo, porque es como leer la guía de teléfonos, pero da mucha información si uno necesita esa información. Y ahí justamente dice que "Posición del Inconciente" , extractó cómo presenta cada escrito y lo pone directamente en relación al Discurso de Roma y entonces revisé y me pareció que Lacan mismo al poner "Posición del Inconciente" y llamarlo "Posición del Inconciente", poner como causa el lenguaje y remitirlo al discurso fundante de este retorno a Freud que es el discurso de Roma, abarcaba indicado por Lacan, este período de una manera totalmente categórica.
Todas las citas que doy son de "Posición del Inconciente" por todos estos motivos.
Este libro es de Siglo XXI y está publicado desde hace dos años.
"Posición del Inconciente", página 814, Lacan se pregunta por la metáfora y la metonimia y se pregunta: "Pero aquí nos regresa legítimamente la pregunta; son éstos efectos de lenguaje, o efectos de habla?", saben que es imposible traducir habla o palabra, parole en francés tiene en castellano habla o palabra. Entonces Lacan se pregunta si las leyes del inconciente son efecto de palabra-habla o de lenguaje? Vamos a ver lo que dice. Salteo un parrafito. "Si se la vuelve hacia lo que nos pone en juego", si la pregunta se la vuelve hacia lo que nos pone en juego, "a saber, el sujeto, la alternativa se propone como disyunción", o una cosa o la otra se propone como disyunción lógica. Y dice: "Ahora bien, es ciertamente esa disyunción misma la que nos da la respuesta, o más bien es al llevar al Otro a fundarse como el lugar de nuestra respuesta, dándola él mismo bajo la forma que invierte su pregunta en mensaje, cómo introducimos la disyunción efectiva a partir de la cual la pregunta tiene un sentido".
Lacan dice: metáfora y metonimia son efectos de parole o de lenguaje? Esta pregunta sólo adquiere sentido si se la dirigimos hacia aquello que nos interesa que es el sujeto, si la dirigimos hacia el sujeto entonces lo que se produce es la dimensión del Otro. Si aparece la dimensión del Otro entonces la pregunta se convierte en mensaje. Vamos a almorzar o vamos a pasear con el coche?, le podría decir yo a una de las chicas aquí presentes después de esta clase. Esa pregunta es pregunta o es mensaje? Es un mensaje que estoy dando, es un lance, pero lance ya es un mensaje, un tipo muy peculiar de mensaje, un lanzazo.
Lacan dice que si se la remite al sujeto, lo que se produce automáticamente es que ya tenemos Otro, y si tenemos Otro la pregunta se convierte en mensaje, esto es: tiene un sentido. En el caso, un lance es el sentido.
Si inconciente fuese algo que tenemos al nacer, porque el aparato psíquico es así y si dentro del aparato psíquico hay una localidad que se llama inconciente y el inconciente tiene sus propiedades, entonces estas propiedades son de nacimiento, se podría decir, es como decir: por qué tenemos glóbulos blancos y glóbulos rojos? Porque es así. Con lo cual, lo que Lacan está diciendo es quitarlo de ese terreno, de cómo son las cosas, sino que dice que la pregunta misma, para que adquiera un sentido, hay que plantearla para que adquiera sentido la pregunta, entre el sujeto y el Otro.
Dada esta estructura, entre el sujeto y el Otro, dice Lacan: "El efecto de lenguaje es la causa introducida en el sujeto. Gracias a ese efecto no es causa de sí mismo, lleva en sí el gusano de la causa que lo hiende. Pues su causa es el significante sin el cual no habría ningún sujeto en lo real. Pero ese sujeto es lo que el significante representa, y no podría representar nada sino para otro significante", es la única vez que en los Escritos está la definición del sujeto. Un significante en tanto tal no significa nada, "a lo que se reduce por consiguiente el sujeto que escucha". Entonces el sujeto es un significante, que representa algo frente a otro, también significante, y solamente frente a otro significante puede llegar a significar algo sino no significaría nada. Qué es un sujeto? Si fuese un significante no sería nada.
Ahora, lo que advierte Lacan es que quien escucha se reduce a Otro significante, el sujeto es lo que un significante representa frente a otro, también significante, por ejemplo yo aquí sería docente, que es un significante que me representa, frente a ustedes concebidos también por el significante como alumnos, si no estuviese el otro significante yo no sería docente, si hoy no hubiese venido ninguno yo no sería docente.
Y entonces Lacan dice: "Al sujeto pues no se le habla", por qué? Porque no hay quién le hable, porque el otro pasa a ser un significante. Antes hablamos del poder discrecional del oyente, el oyente fue reducido a un significante, entonces no hay quién le hable al sujeto. "Ello", (entre comillas), "habla de él, y ahí es donde se aprehende", el sujeto se aprehende donde Ello habla de él, "y esto tanto más forzosamente cuanto que, antes de que por el puro hecho de que "ello" se dirige a él desaparezca como sujeto bajo el significante en el que se convierte, no era absolutamente nada". Qué es ello? Lacan dice que no hay quién le hable, ello habla de él. Ello, o eso, es ese significante en su asociación al otro significante. Yo como docente soy un significante, como soy un significante, no un signo, docente no significa nada, sólo me significa a mí en relación a otro significante. Docente de la Universidad de Buenos Aires, ahí ya empieza a significar algo ser docente, por ejemplo no cobrar un peso.
Pregunta inaudible.
Esperá, porque estamos haciendo una presentación diacrónica, para la estructura del corte todavía nos hace falta un paso lógico más. Ahora, si a mi me representa un significante, el Otro también está representado por un significante, quiere decir que con toda otra persona con quien yo entre en relación, para mí estará representado por otro significante, un significante en relación a lo que yo soy como significante, o sea una mujer no será madre, no estará representada por el significante madre si yo no soy hijo para ella, hijo de ella, será la madre de mi amigo, yo no le diría mamá. Quiere decir que el Otro queda reducido a un significante también. El vínculo que tenemos entre él y yo está dado por la relación que guardan entre sí esos dos significante que me representan, cada uno en relación con otro significante.
Lo que Lacan dice es que si el sujeto es un significante, el sujeto no habla, porque un significante no habla. El problema es que si el Otro es un significante no habla tampoco, el inconciente es el discurso del Otro, lo que está diciendo Lacan es que el Otro no habla porque es un significante. Entonces lo que va a decir es que Eso habla de él, eso es esos dos significantes despersonalizados, porque los significantes no son personas, y qué dicen? Dicen en función de cuáles son esos significantes y la relación que tienen.
"Al sujeto pues no se le habla. "Eso" habla de él". No es exactamente lo mismo que el inconciente es el discurso del Otro. Está acentuando las tintas hacia otra cuestión acá. Y ahí es donde se aprehende, ahí es donde ustedes podrían decir respecto de sí mismos, no, yo ahí no quiero estar. Eso que se diría de mí, yo no. Alguno de ustedes podría haber estado tentado de afanar, y quizás pensaron: pero, me pueden meter en cana… No, no afano nada. Mientras que a otros eso le puede resultar indiferente y a otros eso le puede resultar super tentador, a los que les gusta el riesgo.
Uno se aprehende ahí, sería: Profesor de la U.B.A. de Psicología y Psicoanalista de la ciudad de Buenos Aires va en cana por afanar tres pañuelos Cristian Dior en la aduana, Pata Villanueva que se afanó un perfume en un Free Shop, y fue en cana, cualquiera de nosotros se puede ver muy tentado en un Free Shop de manotear un perfume, no me van anegar, pero qué hacemos nosotros? No nos gusta, no aceptamos aprehendernos en esa articulación significante, tal es un ladrón, entonces no afanamos.
"Al sujeto no se le habla. "Ello" habla de él, ….. nada?. Entonces Lacan dice que se aprehende allí porque antes de que Ello hable, él bajo el significante que lo representa era nada, así que no se puede aprehender allí. Cuando los dos significantes se articulan, pueden ser 3, 4, 5, una cadena significante completa, ahí es donde uno se aprehende y es ahí porque antes que uno se aprehenda allí no era nada. Interesante para todos aquellos que se hacen problema con la evolución, cómo puede ser que era un chico antes de ser paciente y venga a contar lo que le pasaba de chico, qué era antes? Nada, antes que Ello hable de él él no es nada, aunque le competa a un significante, niño, bebé, numero de documento, pero hasta que no se produzca una articulación no significa nada. "Pero ese nada se sostiene gracias a su advenimiento, ahora producido por el llamado hecho en el Otro al segundo significante". Lo que Lacan dice es que ese nada se sostiene o sea que no es que deja de ser nada porque Ello habla de él y el sujeto se aprehende. Lo que pasa es que ahora pasó a ser nada entre los dos significantes entre los cuales queda él articulado, es otra nada que la nada de estar bajo un significante. O sea, que este nada transformado permanece.
"Efecto de lenguaje por nacer de esa escisión original, el sujeto traduce una sincronía significante en esa primordial pulsación temporal que es el fading constituyente de su identificación. Es el primer movimiento". El sujeto nace de la escisión original, del primer par de significantes que le correspondan.
Por qué sincronía significante? Porque sólo se aprehende en ello cuando se produce la articulación entre los dos, no es primero uno, luego otro, cuando es uno en relación sincrónica al Otro, ahí el sujeto. Se aprehende en esa sincronía.
Fading porque para poder identificarse a un significante y que eso signifique algo eso tiene que articular ese significante a un significante, quiere decir que se produce una sincronía entre identificación y fading. En la misma medida que nosotros nos identificamos a un significante, en esa misma medida nos desvanecemos como sujetos, en la misma medida en que aparecemos como sujetos, porque para que un significante me represente, como un significante en tanto tal no significa nada, hace falta que se articule a otro, esto no quiere decir que haya alguien que pueda posicionarse en la vida evitando la aparición de ese segundo significante y se quede petrificado a ese primero, pero no es la estructura normal. La estructura normal es que el sujeto nace en la sincronía entre identificación y fading que es el hecho de nacer en la articulación entre un significante y otro, en la medida en que nace entre un significante y otro y es como otro significante como aparecerá el otro sujeto, entonces ya allí lo tenemos como ello, ello habla.
Pregunta inaudible.
"Pero ese nada se sostiene gracias a su advenimiento, ahora producido por el llamado hecho en el Otro al segundo significante".
Tiene el estatuto de definir que los elementos de lenguaje para el ser humano son significantes, no signos, si fuesen signos, un signo remite a una cosa, un signo llama a una cosa. Un significante llama a otro significante. Eso es.
Pregunta inaudible.
En la definición de significante, si el significante deja de llamar a otro significante, hasta convendría empezar a pensar si no convendría llamarlo de otro manera, por ejemplo signo, me da la impresión que para este caso ésto que dice mi paciente tiene más la estructura de un signo que la estructura de un significante. Ser un cacho de carne que puede recibir el significante bebé, cualquier persona que reciba en relación a ese significante el de "madre", se verá llamado por ese significante. Para dar una versión propedéutica total, por qué un bebé te hace hacer algo por él? Salvo que seas el padre, entonces digas: el bebé llora, no hacemos nada. Sólo hacés el codazo de despertador. Por qué una mujer atiende un bebé? Porque está representada ella por un significante, y el bebé la toma a ella como otro. Mi bebé la toma a ella por el significante madre, si el bebé llora es un llamado a ella, depende qué significante represente a esa cosa, ese significante si es un significante, es el llamado a otro significante, la articulación entre esos dos significantes, Lacan dice: Eso habla.
Pregunta inaudible.
Sí, ahí está la pulsión.
"Efecto de lenguaje por nacer…. Es el primer movimiento. Pero en el segundo, toda vez que el deseo hace su lecho del corte significante en el que se efectúa la metonimia, la diacronía (llamada "historia")", y pone historia entre comillas, "que se ha inscrito en el fading retorna a la especie de fijeza que Freud discierne en el anhelo inconciente (última frase de la Traumdeutung). Este soborno segundo no cierra solamente el efecto del primero proyectando la topología del sujeto en el instante del fantasma; lo sella, rehusando al sujeto del deseo que se sepa efecto, o sea lo que es por no ser otra cosa que el deseo del Otro". Vamos a pasar al comentario de la segunda parte.
Lo que tenemos es: metáfora y metonimia, son efecto de palabra o de lenguaje? Yo salteé el párrafo donde Lacan decía que tomaba estas nociones de Saussure y tomándolas de Saussure no hay que perder de vista que para Saussure palabra implica diacronía y lenguaje implica sincronía, con lo cual lo que está en juego aquí es si metáfora y metonimia son propias de la diacronía o de la sincronía, eso es lo que está en discusión. Lo primero que planteó Lacan es que el advenimiento del sujeto, aquello que pusimos en relación directa con el Ello, corresponde a un hecho sincrónico, como tal causa del lenguaje, porque el lenguaje está constituído por significantes, si estuviese constituído por otros elementos sería distinto aquello con lo que nos encontramos.
Para Lacan metáfora y metonimia, las leyes como nosotros las conocemos del inconciente tienen por un lado una íntima articulación con el lenguaje, esto es con la sincronía, esto es con el inconciente concebido como Ello habla. En este sentido no hay nadie que diga nada. Si ustedes quieren perfectamente se localiza allí la roca viva o el ombligo del sueño. . En este momento de advenimiento, el que haya sido ese significante al que se identificó en relación (por ser significante) a otro significante, que es a lo que se redujo el Otro, lo sumió el sujeto en su advenimiento, ya que antes no era nada, a que Ello hable de él. Este Ello habla de él tiene estructura temporal sincrónica, esto es: está totalmente separado de la historia, esto es sin historia. El segundo movimiento que Lacan propone concebir: el segundo cierra el primero, o sea que lo dijimos al principio es la primer parte de un movimiento que incluye al segundo, Lacan lo pone en relación a la palabra, y dice que dado que el deseo toma por lecho a la metonimia, serán los términos precisos que cayeron en la cadena significante los que dará la fijeza del deseo vía la articulación del deseo con el fantasma. Esto quiere decir que: "Este soborno segundo no cierra solamente", o sea que lo cierra, "Proyectando la topología del sujeto en el instante del fantasma; lo sella, rehusando al sujeto del deseo ….deseo del Otro". En este sentido, en esta segunda acepción, en que el sujeto está en la diacronía, que es la forma en que Lacan nos propone concebir a la historia, no acepta la historia como tal sino como diacronía significante, allí donde Lacan dice que adquiere estatuto de deseo en su relación al fantasma, porque ahí es donde el sujeto no se sabe que está fijado al deseo del Otro.
Entonces, por un lado tenemos que Ello habla en el sentido sincrónico, en que el sujeto cae, por la identificación al significante, en el fading del intervalo entre dos significantes en una pulsación sincrónica.
Por el otro lado, articulado, este proceso se cierra, en este lado obvio que el sujeto no sabe, porque él se aprehende donde Ello habla, o sea donde no es él el que habla pero tampoco es donde el Otro habla. Esto es Ello habla.
Del otro lado, el proceso se cierra, en la fijación del deseo en el instante del fantasma. Esta fijación, dice Lacan, corresponde a la diacronía, con lo cual si la fijación corresponde a la diacronía hay un desarrollo de Lacan con el tema que yo traía aquí en la pizarra, donde tenemos fijación, porque tenemos 1, 2, 3, otra vez 2, pero es otro dos, vuelta a uno. En esta dimensión lo que tenemos es fijación a uno. Si hay fijación en la diacronía, la estructura de la diacronía tiene que tener estructura de círculo porque para que en la diacronía se pueda decir x está fijado a ye, sólo se puede decir en la medida en que se pueda afirmar otra vez ye, pero para que se produzca otra vez ye, la estructura de la cadena tiene que ser de círculo, porque si es ye sin la estructura de círculo es otro ye. Aproveché las letras de la Carta Robada porque ahí es muy evidente que el 2 de arriba es distinto al 2 de abajo, pero al uno que se vuelve el mismo.
Entonces, por un lado tenemos, que el efecto de estructura de lenguaje, que es Ello habla del sujeto.
Y por otro lado tenemos la fijación en la diacronía, que es donde el sujeto no sabe en qué medida está determinado por la palabra del Otro.
Aquello a lo que se fija en términos de deseo es a las palabras del Otro, significantes que se pueden remitir a una cadena significante, como nosotros concebimos la historia, Lacan plantea que la historia es diacrónica, y en esto sí tenemos entonces al discurso del Otro. Con lo cual por un lado, Ello habla, pero ni el sujeto ni el Otro saben eso que se dice, porque ninguno de ellos lo dice, la sincronía.
Por el otro lado la diacronía, donde tenemos que el sujeto no sabe, o sea es inconciente respecto a la determinación de los términos de su deseo, que son las palabras del Otro.
Vamos a la segunda cita.
Pregunta inaudible.
No entiendo por qué decís permanencia.
Pregunta: Cómo sabe si no es?
Justamente por eso lo que determina la concepción del inconciente, para quitarlo del mundo de las cosas, que me parece es lo que vos querías ya que si fuese una cosa sería una entelequia, es la posición. Sin posición no hay inconciente. Si alguien te toca el timbre y te dice: escúcheme, no puede ser que a mí me pase siempre lo mismo?! Ahí tenés alguien que está posicionado respecto de ese Ello, sin esa posición ni vale la pena hablar. Pero, no te das cuenta que no te conviene hacer de vuelta, no te acordás las últimas 6 veces que has intentado esos negocios maravillosos que solamente a vos se te ocurren… le dice la mujer que tanto lo ama, y él le dice: no, no, vas a ver que esta vez lo tengo bien pensado, le voy a dar a Carlos para que él, y lo recagaron… Pero eso que se dice, Ello habla, no tiene existencia alguna si no hay posición. Con lo cual no vale la pena ni siquiera que se lo digas. Lo que no tenés que olvidar es que para tener al sujeto del inconciente también tenés que posicionarte vos, ya que vos podrías hacerlo desaparecer en el sentido de que ni siquiera se puede posicionar en esa perspectiva. Vos le podrías decir: pero piense bien esta vez, está seguro que Carlos no lo va a cagar? Carlos es un tipo bárbaro! Ah, bueno. Si uno se posiciona así no hay sujeto del inconciente. El sujeto del inconciente no es algo que alguien le puede ir a decir a alguien, te vuelve a leer: "Al sujeto no se le habla", y vos me estabas planteando esa misma pregunta, quién habla cuando habla el sujeto? Nadie si no hay una persona, persona de carne y hueso, que se hace una pregunta por ello, o que hace una demanda por ello, a partir de esa posición puede advenir el sujeto del inconciente siempre y cuando encuentre al destinatario porque sin destinatario tampoco. Por eso es tan importante sustituir el "en" por la posición, porque si el inconciente está en un lugar, ni siquiera nos podemos plantear estas preguntas que son tan interesantes y de incidencia tan directas en la clínica, porque son el posicionamiento de alguien. Vean que tenemos un lugar para las personas, que sufren, que padecen, son aquellos que se posicionan en relación a este efecto articulado de la estructura sincrónica y de la cadena.
Entonces les propongo de esta cita oponer palabra y lenguaje, diacronía y sincronía, y del lado de palabra y diacronía poner deseo, en el sentido de la determinación y la ley, a distinguir, de los que yo les propongo poner del otro lado también, pueden hacer una flechita como yo hice, que junte deseo y fantasma. Y les propongo hacer otra del otro lado, lenguaje y sincronía que remite al inconciente como Ello donde les propongo colocar la causa.
En la cita que sigue, así como deseo le pusimos como una flecha fantasma les voy a proponer poner al Ello, Ello habla, una flecha dirigida a pulsión. Si no tienen otras preguntas hasta aquí, seguimos con lo otro.
Pregunta: La diacronía, que es la metonimia, dice Lacan que el deseo no es articulable en ningún lugar de la cadena metonímica, está articulado en ella, pero no es articulable, entonces por qué lo de la flechita deseo en la metonimia… (inaudible.)
No me queda claro si vos estás presentándome por qué lo articula así Lacan o lo estás tomando como una articulación mía?
Respuesta: Yo creo que es lo que vos decís, yo lo entendí así.
Bien, es una discusión que se abre sumamente interesante y de incidencias clínicas enormes. Hay dos posiciones respecto del deseo, no más, dos. Una que lo considera sinónimo de la metonimia, no articulable e infinito, teoría del deseo bastante común entre los lacanianos, pero es así porque somos los que más teorías del deseo tenemos, teoría amada por las histéricas, que siempre, descubriendo esta posibilidad de entender así elementos de la estructura se sujecionan notablemente a ellos, entonces sostienen por ejemplo: cómo yo me voy a jugar por ésto si ésto no es, aquello no es y lo de más allá no es tampoco, es una teoría que tipifica casi la posición clínica de la histeria. Otra posición es la de Lacan, esta que adopta en la clínica la modalidad histérica la vez pasada les propuse una cita que exprofeso traje: Lacan diagnostica que es la posición neurótica, hacer del deseo algo infinito. Otra dice que el deseo no es articulable pero está articulado.
Definimos por deseo un más allá de toda demanda, es el más allá de toda demanda, con lo cual nunca podríamos llegar a decir del deseo, porque cada vez que lo dijésemos vía la demanda no podríamos evitar que se produzca nuevamente un más allá de esa demanda. Ahora, el problema de dejarlo sólo en el punto donde el deseo no es articulable es que me deja en una posición absolutamente irresponsable respecto de mi deseo porque como es ésto ni es aquello, da lo mismo que siga la facultad o me ponga un kiosquito, da lo mismo que me quede en Buenos Aires por mi amada o me vaya a hacer mis estudios a Harvard, porque no es ni Harvard ni mi amada, como no es nada seguro que no son ninguno de ellos dos, con lo cual da lo mismo. Esta es, me da a mí la impresión, la trascendencia del argumento ético por parte de Lacan.
Respecto del deseo, implica, como en el truco: una es verdad y la otra es truco, envido y truco, cuál elegís? Que esté articulado está diciendo que tu deseo tiene marcas precisas, indelebles, son indelebles esas marcas de tu deseo. Se constituyen por palabras del Otro, que son tales y no cualesquiera otras, que hacen tener para cada elección que un término sea verdadero y otro que sea mentiroso. Cuidado con esto, no se olviden que nuestros pacientes son jugadores de este juego, de este ajedrez, mucho mejor jugados que nosotros, así que cuidado con lo que decimos porque tiene una sutileza. Yo estoy diciendo que el deseo tiene una fijeza, es lo que le permite decir a Freud en el último párrafo de la Interpretación de los Sueños que el deseo es indestructible. Por qué? Porque está connotado por la palabra del Otro, ese encuentro particular que cada uno de nosotros tiene con un otro particular que nos connota, que nos marca en nuestro deseo, con marcas específicas. Esas marcas específicas hacen que el acto del deseo pueda ser verdadero o falso. Según mi deseo yo debía quedarme, según mi deseo yo debía irme. Para el Hombre de las Ratas, según su deseo, y ahí viene la sutileza clínica, no estoy diciendo que él necesariamente se deba casar con alguna de esas dos mujeres, la amada Gisella o la hija del primo empresario de la madre, lo que yo estoy diciendo es que su deseo hace haya un acto que es verdadero y otro respecto de la misma elección que es falso, pero guarda porque quizás la elección era no casarse con ninguna de las dos brujas y el deseo marcaba para él en ese momento solterito y sin apuro. No digo que los dos términos explícitos, cuando un sujeto vacila, tenga que ser necesariamente uno de estos dos, verdaderos. Lo que digo es que la verdadera disyunción, la verdadera pregunta tiene una respuesta que es verdadera, que es el acto, y tiene otra que es la falsa y que es no el acto. Cuál es la del acto? Aquella que apunta en la asunción del deseo y el deseo tiene sus marcas, que no lo pueda saber antes, que no lo pueda decir nunca del todo, que siempre lo pueda establecer sólo apres coup, no quiere decir por eso que mi deseo no tenga un acto que sea verdadero y otro que sea falso. O sea, no es que el deseo no sea articulable, esa es una cara del deseo. La otra que yo acabo de presentar aquí, quizás en uno de los lugares más claros donde Lacan lo dice en los Escritos, es que el deseo es lo fijo. Las histéricas aman, aman, que el deseo sea la nada, no es ni esto ni lo otro, no quieren ser amas de casa, no quieren ser psicólogas, no quieren ser novias, ningún significante quieren, porque ellas saben muy bien que ninguno es, es lo que se conoce en la clínica como la excepción histérica, que es decir respecto de todo significante: no, no es este significante, ya que yo me localizo en la nada de la metonimia que me hace siempre ir de uno a otro, a otro, y ninguno es. No es eso lo que estamos diciendo. No es eso lo que afirma el psicoanálisis respecto del deseo. Por ejemplo de vuelta el caso del Hombre de las Ratas donde Freud le corta el tratamiento, lo vuelve a mandar a su ciudad donde estaba su problema, porque para el deseo de ese analizante esa ciudad tenía una connotación de verdad, o sea no podía hacer el acto de su deseo en Viena, no dice cuál era la ciudad por los secretos propios del caso, pero supongan que fuese Stuttgart, el deseo marcado era que en Stuttgart era donde estaba implicado su acto. El no lo podía decir pero sí lo podía interpretar. Te acordás cómo es la cita completa? Para decirlo elípticamente, que el deseo no es articulable pero está articulado. El "Para decirlo elípticamente" es la posibilidad que todos tenemos respecto del deseo.
Queda siempre una maniobra retórica posible respecto del deseo, por ejemplo: interpretarlo, yo interpreto que mi deseo va por este carril y que no va por aquel otro. Si el deseo fuese lo mismo que la metonimia seríamos todos una manga de irresponsables, porque nada tendría valor de verdad. Y me da la impresión de que justamente porque Lacan articuló el deseo a la metonimia facilitó esta posible interpretación del deseo, equiparar deseo a metonimia, es justamente la chantada, deja al sujeto en posición de chanta, ni esto ni lo otro, es lo mismo, la que venga, porque no será eso. Mientras que estamos argumentando que no es articulable, si fuese articulable sería satisfacible y no lo es, pero si esta articulable.
Y lo que yo planteaba es que del lado de la palabra, del lado de la diacronía, esta dimensión del deseo que aparece es la fijeza, no por nada el sostén del deseo lo da qué del fantasma? Saben cómo definió Lacan al fantasma? El instante del fantasma. Por qué el fantasma tiene la estructura de una película detenida? Por la fijeza del deseo. El fantasma sólo puede funcionar como velo pero también como superficie de proyección, sostén y soporte del deseo, si inscribe esta dimensión de fijeza. O sea, es absolutamente no metonímico el fantasma, que levanten la mano los que tienen un fantasma que les cambia. Las fantasías con las que nos pajeamos siempre son las mismas siempre fantasías estúpidas, es que esa es la estructura, que tiene que ser así, porque responde al sostén del deseo que tiene una propiedad que es su fijación, fijación a las marcas que dejó en la diacronía la palabra del Otro. Es claro, hace falta decirlo, que como esas marcas tienen la estructura de significantes, en tanto tal lo que dijo de mamá de mí, en tanto tal no significa nada, o sea no es destino. Serás doctor, aunque haya sido esa estrictamente la frase, no es destino porque tienen que ver qué quiere decir? Yo estoy a punto de cagar a mi madre, es una confesión, porque mi mamá quería que yo sea doctor y yo soy psicólogo y vieron que para las mamás que quieren que su hijo sea doctor no es lo mismo que sea psicólogo, pero estoy haciendo un doctorado. Ni ella ni yo podíamos saberlo, porque cuando yo hice psicología no había doctorado, pero doctor en psicología es una forma de interpretar el doctor. Respeté esa marca, y guarda, es quizás lo que explica que haya hecho el doctorado, sino para qué. Cuál sería la respuesta verdadera respecto de hago el doctorado? Por qué para qué me sirve un doctorado, a mi edad, empezar de vuelta, para colmo hay que pagar? Cuál es la respuesta del analista? Qué es para vos un doctorado? Ah, no sé la verdad no sé, cómo sigue? Qué se ocurre con doctor? Ahí tienen una forma de encontrar esa marca indeleble porque esas marcas son indelebles de la palabra del Otro respecto de mi deseo. Cómo inscribe esta palabra del Otro al Otro? Ya he decidido no pasar a la segunda cita, y explotar bien este tema. Dice: "Este soborno…. lo sella", en francés como en castellano es cerrar y marcar, poner un sello, todos estamos sellados, es mentira lo que se dice que somos tabulas rasas, es mentira, todos tenemos sellos, el asunto es qué posición tenemos nosotros respecto de esos sellos.
".. lo sella, rehusando al sujeto del deseo que se sepa efecto de palabra", porque rehusa que se sepa efecto de palabra? Porque es la palabra de Otro no la de uno. "… o sea lo que es por no ser otra cosa que el deseo del Otro". Por qué el deseo del Otro, porque tenemos la palabra del Otro? Porque si a esta pregunta la pasamos a disyunción y nuestra relación es con la pregunta en relación al sujeto, o sea si nosotros nos preguntamos respecto del doctor: hago el doctorado o no hago el doctorado? Cómo lo puedo pensar yo? Porque ya encontré el doctor.. ah!, no lo puedo creer, mi mamá siempre me decía…. Ahora cómo respecto de ese doctor puedo encontrarle un sentido? Es comienzo de la clase de hoy. Haciendo de la pregunta, si la remito al sujeto, un mensaje del Otro. Remitir al sujeto en este caso es mi mamá como sujeto. Con lo cual ahora mi pregunta es: mi mamá me dijo que sea doctor, ya sé de dónde viene toda esta miércoles!… Hay una canción de Jorge Schuscheim, Schuscheim debe ser doctor, era un viejo cantante de baladas que decía que la mamá quería que él fuera doctor, era una ciruja, un hipie, tocando la guitarra. Cómo resuelvo yo el sentido de esta marca inscripta en mí que es doctor? Haciendo de la pregunta un mensaje en relación al Otro como sujeto, eso significa preguntarte por el deseo del Otro. Mi mamá me decía que yo sea doctor, pero, cómo sigue? Cómo puedo avanzar yo? Si no sería un sello, chau. Por qué ella quería que yo fuera doctor? Porque quería que yo esté bien. Ah!, entonces no hay problema, si yo quiero estar bien. Adquiere un sentido, pero para que adquiera un sentido hay que plantearla a Otro donde ya aparece la vieja formulación de Lacan: esto es lo que me dices, pero qué es lo que quieres? Qué sentido tiene lo que tú me dices? Para lograr esto hay que hacer la pregunta, remitirla al Otro como sujeto para que como pregunta adquiera el estatuto de mensaje y como mensaje cobre un sentido, porque si mi mamá quiere que yo esté bien es una cosa, ahora si quería que yo fuera como el padre de ella, como mi abuelo que fue toda la vida un fracasado, no. No quiero ser como mi abuelo. Adquiere sentido con lo cual uno puede posicionarse. Eso está inscripto en la lógica del deseo tal como se plantea aquí que no lo plantea Lacan del lado de que la hiancia sincrónica, que es donde nosotros colocamos al objeto causa del deseo, sino que en esta articulación está vinculado a la fijación, que es lo que permite la ética de mi pregunta y mi acto, sino no lo hay.
Bueno vamos a dejar aquí, voy a decidir si retomamos ésto o no la próxima, o si seguimos con el programa original.
Clase Nro. 6
CLÍNICA Y FORMALIZACIÓN.
Docente: Lic. ALFREDO EIDELSZTEIN
Pregunta inaudible.
Hoy vamos a trabajar la noción de corte, le vamos a dar dos acepciones, una estrictamente combinatoria y otra topológica, así que me parece que si a vos te parece podríamos dejar el curso de la clase a ver si es respuesta a tu pregunta, en caso que no lo sea podrías reiterarla al final. Hay más preguntas?
Bueno, el plan de trabajo para la reunión de hoy, vamos a ver si lo podemos cumplir, es trabajar lo que quedó pendiente de la vez pasada, la segunda cita de "Posición del Inconciente", articularla por un lado a algunas afirmaciones del seminario 11 y por el otro, respondiendo al pedido del público, a la Lógica del Fantasma. De hecho fue un hallazgo, yo tuve la oportunidad por vuestro insistente pedido, que no tuve otra solución que tomarlo como mensaje hacia mí, de leer en estas dos semanas La Lógica del Fantasma. También afortunadamente gracias a uno de ustedes pude leer las clases de la profesora Rabinovich, y pude darle a lo que traigo hoy, una clase bastante interesante, yo estoy bastante contento con los hallazgos. Me da la impresión igualmente que varias cosas de las que me preguntaron de lo que dijo Diana y de lo que dije yo tiene que ver con lo que ustedes escucharon de lo que dijo Diana, no con lo que leyeron. Por ejemplo, en torno a tu pregunta de la zona erógena como punto de goce, lo dice sólo una vez en la primera, y luego dice que el objeto a es punto de goce, no la zona erógena, y lo dice varias veces. Con lo cual creo que es esa la elaboración que hay que tomar como definitiva de las elaboraciones de Diana, al menos en función de lo escrito, de las clases esas que no están corregidas por ella.
Pregunta inaudible.
Y claro porque para entornar un punto, es imposible entornar un punto con un punto, eso les resulta evidente no?
Pregunta inaudible.
Otra cosa que puede funcionar como respuesta respecto a lo que vos planteas hoy y lo que planteabas la vez pasada, te acordás que tu pregunta de la vez pasada era: es así?, me da la impresión que si uno revisa, y creo que hay que tenerlo en cuenta por muchas cuestiones que yo descuidé, y es que la mitas de ustedes participan del curso con la Profesora Rabinovich y que para colmo participan de él 12 horas antes de este, porque son los jueves, así que ni siquiera puedo confiar en que se olviden por el pasaje de la semana, y yo había descuidado eso y me preocupé muchísimo por la mitad de ustedes que son no del programa, y no veo motivo para hacer eso que es descuidar la otra mitad. Si uno lee, con lo cual no incluyo la de anoche que no tuve oportunidad de leerla, si uno lee las tres clases que hay de la Profesora Rabinovich, que son creo que si uno las lee, prácticamente es una de las pocas personas en el mundo que pueden dar clases así, es un fenómeno. Se nota por cada renglón que no hay nada que sea así, léanlas, no digo lo que ella dice, no sé lo que ella dice, pero sí lo que queda desgrabado en el papel de lo que ella dice, es que todo es un va y viene permanente, no sé a ustedes, a mí un poquito me angustia.
Y eso que no leíste la de ayer.
Pero se notaba cómo venía, con lo cual contestaría que nada es así, especialmente me da la impresión que en la última parte de la enseñanza de Lacan, en los últimos 10 años casi casi no hay nada que sea, me da la impresión que Lacan se encarga de poner a cada uno de los términos en un sistema simultáneo de múltiples articulaciones, que dejan claramente dicho a nivel de la enunciación, no del enunciado, que no hay ningún enunciado que sea así, eso es justamente el problema que hay con la segunda parte de la enseñanza de Lacan, que es imposible entender nada porque nada es entendible ya que todo está en permanente movimiento según las articulaciones que se le van planteando.
Me da la impresión que igualmente hay en paralelo a ello un esfuerzo teórico que es posible de sostener y que hace a cierto más allá de eso y es el intento de trazar algo así como las grandes vías que ese recorrido podría llegar a tener, es claro que implica un trabajo de descuidar los detalles, uno pierde de un lado pero gana del otro, eso me parece que Lacan lo enseña con toda claridad y me da la impresión que no es un esfuerzo que haya que dejar de hacer junto con el Otro, digo desde la perspectiva de la formación del analista. Hay dos dimensiones de la práctica del analista, no todo el mundo se encarga de ambas por igual, mi impresión es que hay ciertas tendencias en el lacanismo de encargarse de una de las dos, y es tomar cada sesión de un mismo paciente como caso por caso, que está muy bien porque uno nunca puede llegar a saber qué puede venir cuando le tocan a uno el timbre y abre la puerta aún con un paciente que uno viene atendiendo equis cantidad de años porque uno no sabe qué pudo haber sucedido entre la última entrevista y ésta, qué encuentros puedo haber tenido, con lo cual uno tiene que estar abierto lo suficiente como para encontrar un paciente distinto. Mi impresión es que esta posición rescatada muy fuerte por las enseñanzas de Lacan, ha quedado casi como hegemónica con lo cual los analistas se quedan muy pegados con lo que el analizante dice esa vez, con lo cual aparece un problema y es que se carece absolutamente desde esa posición, de las condiciones mínimas como para hacer un cálculo de la dirección de la cura, porque de dónde se viene y hacia dónde se va es algo en paralelo, particular, pero no es lo mismo que lo que se dice cada vez. Porque si todo es lo que se dice cada vez, es imposible dirigir nada hacia ningún lugar, ni siquiera una entrada en análisis que ya hay una dirección que debe operar el analista y que no alcanza con su apertura a lo que aparezca vez por vez, condición necesaria para que aparezca lo nuevo, si el analista ya sabe quién es su paciente, ya sabe lo que le pasa, ya sabe lo que padece y ya sabe cómo se va a curar, nunca va a aparecer nada nuevo de la índole de lo inconciente como sorpresa en ese tratamiento, pero si tratamiento es solamente la apertura a lo nuevo es imposible hacer de eso, a partir de eso, con eso, un cálculo en la dirección de la cura que implica el establecimiento del vínculo como vínculo analítico, la resolución sintomática y la cura como disolución del vínculo analítico, eso es imposible de hacer porque las cosas no van hacia allí, per se las cosas no van hacia allí. Las cosas van hacia allí si las dirige un analista.
Me da la impresión que nada es así aunque sí me parece que se podría hacer el intento de tratar de establecer un cierto más allá de cada una de las articulaciones que Lacan da y que son tan difíciles de asir y para colmo, y creo que es en eso que Diana es un fenómeno, tan difíciles de articular entre sí, porque todos nosotros tenemos un sistema enorme de frases que recordamos de Lacan pero no sabemos cómo, no cómo utilizarlas porque son de utilidad automática, uno pesca una y ya a la tarde la estás usando, no sabés cómo pero ya la estás usando, el problema es que no tenés la menor idea de cómo articularla con otras frases y saber esa articulación, no es otra cosa.
Igualmente me da la impresión que entonces, desde la perspectiva del "es así" la respuesta sería siempre no, en Lacan nada es así porque todo está en permanente sistema de articulación y distinción, pero permanente, lo que sí me parece es que el gran delineamiento que es muy rico, conjuntamente con la lectura de los puntos en los que la enseñanza se desarrolla, tratar de establecer. Desde esa perspectiva hoy traigo la siguiente versión: que la distinción tan neta que Lacan hace a partir del seminario 14 entre el Ello y el inconciente, para mí, sólo es razonable que él la haga, porque la pregunta es por qué la hizo, esa mañana se desayunó con que había un chabón que se llamaba Augustus de Morgan que tiene la doble, la dualidad que el aplica a el cogito cartesiano que es, qué pasó ese día?, por qué Lacan se fija en el 14 a hacer eso? Es una pregunta que a mí me parece que tiene cierto valor porque es justamente una de las grandes dificultades en leer a Lacan es que uno no tiene a veces mucha.., la sensación de estar entendiendo de por qué viene este párrafo después de este otro párrafo o por qué viene este seminario después de tal otro seminario, a veces parece que no tiene nada que ver con lo que venía hablando. Con el seminario 14, no sé si lo han leído, muchas veces la gente va a algún seminario o cursos sobre Lacan para no leerlo más, van por ejemplo con Juanqui a ver el seminario 12 y lean el 10 y el 14, y el 12 no lo leen más porque lo están trabajando con Juanqui. Así que no sé si están leyendo ustedes el seminario 14, el seminario 14 tiene una virtud: da la sensación de que uno entra a un Lacan distinto, como que todo rompió, vieron cómo destaca muy bien Diana que alienación dejó de contar con separación, dónde está separación? Chau, ya fue. Y por qué el cogito es o no soy o no pienso si nunca lo trabajó así, por qué ahí aparece eso? Habla de la pulsión sadomasoquista todo el tiempo, todo el tiempo, otra cosa nueva, por qué se llega a eso, de dónde viene, o sea qué problema teórico tiene que resolver para que la solución sea esa?
Yo propongo, una idea bastante estúpida, de que si hay un esfuerzo conceptual de ir a buscar a campos tan remotos como la ley de la dualidad de Augustus de Morgan, que no quiebra en dos el movimiento de la lógica simbólica moderna, no sé si ustedes tienen la sensación de que la ley de la dualidad es la revolución copernicana en la lógica, es un elemento más, más aún Augustus de Morgan es famoso no por eso sino por su noción de universo de discurso, ni siquiera es tan conocido por eso, ese libro de él que se llama Lógica simbólica ni siquiera se consigue, no se lo lee, es un detalle, que le sirve a Lacan para distinguir entre Ello e inconciente. Y Lacan se pone en la tarea de distinguir Ello e inconciente por algo muy sencillo: se le juntaron. Y lo que yo estoy tratando de señalarles es que efectivamente se le juntan, y es porque se le juntan por lo que él empieza a decir no, quizás esta dualidad me permita exponer distinciones en el campo de la clínica que si autorizo la unificación de ambos términos hay distinciones en la clínica que se pierden.
Cuáles son las que se abren? Qué es lo nuevo que se articula con "yo no soy o yo no pienso"? Qué cobra un alcanza novedosísimo en psicoanálisis lacaniano?, lo que pasa es que ustedes son poslacanianos, cuando ustedes advienen al lacanismo ya están todos los seminarios, con lo cual para ustedes está todo in toto de alguna manera. Pero, qué es lo que se empieza a pensar de una manera muy novedosa a partir del seminario 14? Sin lugar a dudas el acto. Y la distinción entre Ello e inconciente, qué dimensiones del acto le permiten a Lacan escribir, distinguir? Quizás Diana no llegó a eso… Pasaje al acto y acting out. En la historia del movimiento psicoanalítico no es del lacanismo pasaje al acto y acting out, es de los otros, no es de Lacan, pero recién Lacan con la noción de acto, que hoy vamos a trabajar y con eso voy a intentar responder a tu pregunta, la noción de acto y una nueva distinción entre Ello e inconciente, o sea no es así, o sea hasta el 14 nunca había hecho esa distinción, lo que yo creo es que se le impone la distinción o se le favorece hacer una distinción porque él ha llegado a concluir que no es lo mismo.
La distinción entre pasaje al acto y acting out que hasta ahí eran casi totalmente patrimonio de la escuela inglesa, recién Lacan con esta articulación es capaz de hacer incluir algo que no entraba y no entraba en la clínica de los psicoanalistas lacanianos hasta el 66, porque trabajaban con la palabra porque trabajando con la palabra no había forma de hacerlos entrar y entran con esta novedosísima distinción, muy difícil de articular a Freud, se acuerdan que el problema de Lacan es que para Freud el sueño es egoísta, o sea en los términos que están viendo con Diana Rabinovich, el sueño siempre se refiere al je, siempre el sueño es je, eso es Freud a la letra. Eso en Lacan no se puede seguir sosteniendo con la nueva articulación que da de Ello e inconciente a partir de aplicar la ley de Augustus de Morgan al cogito cartesiano.
A partir de allí lo que yo les propongo es que se verifica a partir del 63, 64, 65, una confluencia neta entre inconciente y Ello, que para colmo me parece muy interesante destacar como ya lo hicimos veces pasadas, porque es la misma tendencia, el mismo movimiento que tiene en la enseñanza de Freud donde todas las propiedades del inconciente sistemático terminan siendo a partir de la segunda tópica propiedad del Ello.
Primer punto general, queda abierto obviamente un espacio para preguntas, no hay nada más interesante para mí que las preguntas, así que podemos seguir ya mismo con preguntas de ustedes, pueden interrumpirme cuando quieran, o podemos al final de esta clase hacer una ronda de preguntas.
Si no hay preguntas ya entonces les propongo la última cita de "Posición del Inconciente" trabajada desde la clase 11 de la Lógica del Fantasma que lleva por fecha 22 de febrero del 67, es esa famosa donde está la definición de acto y donde está Verleunung, una de las frases más destacadas de ese seminario y dos páginas del seminario 11.
Les leo la cita de "Posición del Inconciente", es larga, van a tener que tener un poquito de paciencia. Página 817: "Nuestro seminario no era donde ello habla, como llegó a decirse en broma", la broma era que en el seminario de Lacan: "ello habla", o sea no se entiende un carajo, ni qué dice, ni siquiera se sabe quién habla, ello habla. Lacan toma esa chiste pero lo transforma en lo siguiente: "Suscitaba el lugar desde "ello" podía hablar, abriendo más de un oído a escuchar lo que, por falta de reconocerlo, hubiera dejado pasar como indiferente. Y es verdad al subrayarlo ingenuamente por el hecho de que era esa misma noche a menos que fuese justamente la víspera cuando lo había encontrado en la sesión de un paciente, tal auditor nos maravillaba de que hubiese sido, hasta el punto de hacerse textual, lo que habíamos dicho en nuestro seminario". Lacan dice que lo que él decía en el seminario suscitaba que ello hable, tanto que él se maravillaba y que discípulos de él se maravillaban de que sucediese lo siguiente: que a partir del seminario que Lacan daba, un paciente de un discípulo de Lacan decía eso mismo en la sesión siguiente o lo había dicho en la sesión de la víspera del seminario, con lo cual Lacan lo que está diciendo es que suscitaba el lugar donde ello podía hablar en el sentido de que abriendo la cabeza de los que participaban en el seminario se podía escuchar que ello hablaba, no el inconciente, ca parle, que es una expresión de Lacan de bastantes años antes de esto.
"El lugar en cuestión es la entrada de la caverna respecto de la cual es sabido que Platón no guía hacia la salida, mientras que puede uno imaginar ver entrar en ella al psicoanalista", esto lo comentamos el año pasado, lo volvemos a comentar rápidamente ahora para quienes no conozcan lo que es quizás la metáfora más famosa de la filosofía antigua. La caverna de Platón es así: una persona mirando hacia el fondo de la caverna, que tiene tras sus espaldas un fuego que destella luz, entre el fuego y la persona mirando hacia el fondo de caverna se pasan figuras, detrás mío se pasan figuras que habiendo una luz detrás de las figuras, esas figuras reflejan sombras sobre el fondo de la caverna, para Platón esa es la metáfora de la realidad, donde todos somos engañados por falsas figuras inexistentes. Para Platón la posición de la sabiduría del filósofo es dar media vuelta y salir hacia la realidad real. Esta metáfora de la caverna de Platón, sin saberlo porque son bastante brutos en general, es la posición de los psicoanalistas posfreudianos no lacanianos en general. Siempre creen que su paciente está mirando el mundo de sus fantasías y lo que él tiene que hacer es que den media vuelta para que miren la realidad, eso es el psicoanálisis que en general se practica hoy en el mundo desde hace bastantes décadas. Lacan dice que por el contrario el psicoanalista tiene la posición contraria de la del filósofo, o sea entrar a la caverna.
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