Episodios de la marca España de Angelillo de Uixó. Los chonis y sus mascotas
Enviado por Ángel Blasco Giménez
- Los chonis
- El pibur de los chonis
- De cómo y donde pare Rata
- De como los chonis reaparecen de forma extraña
I. Parte. Los chonis
San Antonio, cerca al barrio marginal de texas, territorio chonis, en la localidad de Vall d"Uixó. Silencio de sepulturas en la fría madrugada . Caliente la noche de hogueras, castañuelas,guitarras y juego que se extingue con las palabras del gallo dando fin a los cantos flamencos de los duendes aceitunados, y a los ases de picas de la golfería sin escrúpulos hispánica. Acuden al calor de la manta prestada y la algodonera almohada de aleli con las primeras luces del día de su piso regalado por los payos de los servicios sociales . Piezas de oro por las mesilla para vender, póster de camarón de la isla y del archipiélago en las paredes, crucifijos, tuberías de plomo amontonado junto a cobre de cables eléctricos enrollados en la terraza. La lavadora estropeada y para la chatarra de fondo en la galería. Un pajarillo encerrado frente a la calle donde asoma el paso cebra que nadie respeta, cuelga suspendo en su jaula de un clavo. El pico bajo el ala y los ojos cerrados . Varias navajas automáticas sobre la mesilla del comedor , televisiones de plasma, vídeo consolas, botellas de whisky, fichas de casino, entradas de burdel las Palmeras, la biblia evangelista. Se engalana así la decoración de hogar del chonis faccioso, del andaluz , del castellano emigrante, y del quinqui de texas. . Toda esta gente, o el pueblo llano, o los simples sin formación, son víctimas inocentes de la democracia , la ley de partidos y del fracaso absoluto de la planificación familiar.
Una bombilla hace su luminosa presentación en una caseta de San Antonio. A escasos metros, aun entre sombras queda la ermita .El sacro lugar queda desierto, solo cerca del aljibe, el alma de un sapo croa triste y melancólica. La luna partida asoma su cuerno amarillo que se funde con las farolas. A la lejos, en el horizonte marítimo nace desgastada la aurola roja. Una farandula de etnia hispánica, de pelo dorado cómo el maíz maduro, ojos claros, rostro redondo de queso ; en pijama , yace amancebada con un chonis. A ella la conocen con el nombre de Loliluz. Vive de forma chonis . En 20 año de existencia la farandula que gusta de la vida libre y recorrer locales de ocio ha visto : muertos en accidente de circulación en las madrugadas del domingo regresando de la discoteca . Ha visto ataques epilépticos causados por sobredosis alcohólica. Ha visto amigos que se han quedado pillados para siempre tras un fin de semana en los tugurios de ocio . Ha visto amigas de 14 años embarazadas que han llegado a gestar esos íncubos fruto del mal. Ha visto la incivilización de unos médicos que las han asistido en el parto. Ha visto cómo algún chonis con la corona de Ronal Mac Donals en la cabeza y con confeti sobre el jersey adidas pegaba una paliza a alguna amiga en el parking de un Mac donals por qué no se la quería chupar en el día de su cumpleaños. Ha visto las rebajas del corte inglés, ha visto mercadillos de la calles donde seleccionaba tangas y regateaba por llegar al mejor precio. Ha visto tiendas repletas de móviles de vodafon, orange, movi start. Su mente esta repleta de estos recuerdos. Y con todas estas experiencias vitales es con los que resuelve los problemas del mundo que le rodean.
-Hoy iré al corte ingles a comprarme una blusa- mira el techo Loliluz mientras habla al farandul que se encuentra su lado; de nombre conocidos como el Penas. El engendro de piel morena sin cicatrices, sin callos, sin arrugas,delgado de gimnasio, moreno, con cejas muy pobladas negras con piercings, cara infantil de mancebo de 15 años pese tener 27 años. Su mente esta dominada por la pasión del Yo. Responde a LoliLuz haciendo vacías referencia a algún dios inferior pagano, posiblemente Jesucristo de Galilea :
-Guay, el señor, el señor- da unas palmas de chulería étnica y contempla el móvil de la mesita. Lo ase con su mano ensortijada de anillos de oro. Toca un botón y suena bulerías bulerías de Bisbal. Los dos chonis cantan, sonríen , se lanzan arrumacos . En la distancia pudiera pensare en que son dos humanos de diferente sexo y raza que se aman, pero nada es así. El mundo es una farsa y entre ellos no puede haber amor al carecer de referente morales y una formación técnica superior que les haga competentes en el arte de amar. Él acompaña las bulerías dando frenéticas palmas, ella se carcajea histérica, y el pibur que tiene atado cerca de la puerta de la casa ladra. Al lado de la bestia de diseño hay una perra joven de ojos azules. Arrastra en el comportamiento las maneras de muchas generación de perros abandonado de las que procede. Se inquieta ante el bullicio, filogénesis del abandono. Loliluz, se asoma a la ventana y ve a los animales. Recuerda cuando a adopto a Rata, hace casi un ya un año. < Era mediodía del 2012. Loliluz estaba Nules, entonces no salía con el Penas, si no con el Bakaladilla. Acababa de comer en el chino con unos amigos. Apostaron que encontrarían en los contenedores cercanos del chino algún cadáver descuartizado. Se metieron en el callejón trasero, muy estrecho y oscuro como es normal en el urbanismo de pueblos cómo Nules, Vall d"uixó, Burriana. Pero no fue un muerto lo que hallaron, si no una camada de perros recién parida. Los rollitos de primavera, o quizás el licor de lagarto que habían ingerido en gran cantidad con cocaína, hicieron que los chonis se encapricharan de la camarada que aun tenían los ojillos cerrados. Asomaban los diminutos hocicos de los animales abandonados, chillaban mugrientos y desesperados de forma lastimera entre cartones, tentáculos de pulpo podrido y varias bolsas de basura desgarradas por alguna alimaña hambrienta. Loliluz cogió uno al azar, sin darse cuenta de que era hembra, con todos lo problemas que eso conlleva. El resto fueron cogiendo perritos según gusto. Así fue cómo el animal llego a San Antonio. Vivió aparte, salvaje, al fin y al cabo no había sido comprada cómo el pibur, por lo tanto no tenía valor.
Rata fue cómo la llamaron. Vivía con el estigma del abandono, con el recuerdo del contenedor del chino, con el hedor del pulpo, del pescado podrido, de la placenta, todo ello sobre su pelaje gris. Si, su vida era de Rata, de Mierda. >
La perra ante el bullicio de las palmas y los cantos insoportables de Bisbal y el coro de chonis se escabulle difuminándose entre la avena silvestre y matorrales que rodean la casa. Arrastra una panza enorme de perra paridera.
Voy a preparar un flay- dice levantándose el Penas. Se calza las sandalias de marca adidas y abre un armario lleno de plantas de marihuana. Aspira con poesía, siendo en el único momento del día que el farandul imagina. Sueña en la aspiración < es un día de primavera caluroso. El Penas se encuentra en un pueblo alemán rodeado de un bosque frondoso de robles, abetos. La gente trabaja en paz, cultiva sus pequeñas huertas vestidos de tiroleses, comparten los frutos de la tierra. No hay superficies comerciales, no hay propiedad privada, nadie canta a dios; de hecho hay una tumba en la rotonda del pueblo donde pone:» Dios está enterrado aquí». Todo el mundo es feliz. Suenan dulces flautas, caramillos, tocados por niños arios, su melodía es dulce, invita a la relajación , a la hermandad con el prójimo, al amor. Un señor con flequillo y bigotito pequeño le lleva una piña ecológica y unas flores, se la ofrece al Penas dándole un fraternal abrazo.Hay varios perros en el pueblo,pero los perros no son nazi- piburs. Son San Bernardo, pastores alemanes, que están tumbados y sonríen a la gente. Nadie grita, ni da palmas, ni enciende fogatas por la noches para entonar la música de la delincuencia, la jerga y el crimen: El flamenco. El Penas busca donde meter su tarjeta de crédito master card- a ver si hay suerte y tiene saldo- dice. Busca por todas partes, pero, no hay bancos, ni cajas de ahorros, también percibe que no hay guardia civil.¿ Por qué habría de haber ? Piensa rápidamente el Penas: si todo el mundo es igual a su semejante. Si todo el mundo tuviera las mismas cosas que su vecino, si ondeara en cada lugar donde hay una comunidad de individuos la bandera del amor y de la libertad, la bandera con la hoz y el martillo , no habría guardia civil.>
-Cari, deja de soñar- le dice Loliluz observando al Penas con los ojos en blanco delante la marihuana. No tenemos leche ni café. Habrá que ir a cáritas y cargar. ¿ Iras tu verdad ? Yo tengo que ir al corte ingles a por una blusa, y además he quedado con la Jessy, necesita tangas de recambio para una acampada que va a hacer a las discotecas de Benicassim- le dice la farándula metiéndose un chupa chups en la boca para desayunar. Cierra el farandul el armario de la marihuana, apaga los focos que hacen de sol a esas plantar prisioneras y le chilla nervioso.
-Yo tengo que ir con el kepsu a un trapicheo y luego al toro. Si no hay leche, ni café haber ido tu ayer. A mi no me des ordenes. – le responde tenso por la falta fastidiosa del café con leche para desayunar. Va camino al retrete.
El Penas hace sus necesidades con mucho esfuerzo por la ingesta alarmante de hamburguesas del Mac Donas. A ir a limpiarse se da cuenta de que no hay papel.
-Loliluz ¿no has comprado papel?- le chilla.
Se me paso cari- contesta con una sonrisa bobalicona que él no puede ver.
¿ Y ahora que hago?- pega un puñetazo a la pared y mira inquieto.Un olor turbulento y nauseabundo se apodera de él. Echa una mirada a aquello y siente nauseas. Loliluz se come el último bollicao sin apartar el chupa chups ni guardar una pequeña parte al Penas.
-No se que puedes hacer cari- exclama Loliluz mirando por la casa para darle en su higiene. Encuentra en un rincón la biblia que le regalo la madre del Penas , constituye el único libro de la casa . Se lo entrega para que haga uso de su papel.
La pared tiembla y se queja de los golpes que recibe del Penas, un trozo de yeso cae al suelo. El pibur ladra queriendo meterse en la disputa. La gruesa cadena chirría cómo un grillo. A Loliluz le entra un ataque de pánico y violencia.
Eres una vaga- recrimina el Penas- no vales nada, no eres capaz ni de comprar papel higiénico- sale con los evangelios profanados en una mano, con la otra amenaza, la cisterna llora derramado agua. La tubería se lleva los despojos y se ilustra con pasajes de San Mateo. Ella le tira una silla a la cabeza al farandul bendiciéndole la frente. Este al recuperarse alcanza a darle dos certeras hostias que le cruzan la cara dejando los dedos marcados de rojo que contrasta de forma erótica con su palidez natural . Loliluz le entra la llorona, y él la penetra mientras ella hace pucheros con el chupa chup en la boca. . Bilbal canta todavía : Bulerías, bulerías te quiero vida mía. Un hilo de sangre le recorre el labio a Loliluz y al farándul le asoma un cuerno de fauno sobre la frente. Sus labios se unen, ninguno de los dos, ni siente placer ni apatía, si no una mezcla de ambos estados. Se hace el silencio al terminar de hacer sus necesidades. Ella ya no llora, él enciende la televisión.Ella se pasa el chupa chup al otro lado del moflete.Un presentador da las noticias de cómo el gobierno de Rajoy se tambalea por al corrupción. Bosteza el farandul abriendo la boca en forma de León Marino sin comprender nada de las noticias, con un ligero fastidio de ver a Rajoy . Cambia para ver los cuarenta principales, donde aparece Shakira haciendo de puta de forma muy creíble, baila moviendo alegre las caderas cómo las vacas lecheras de Asturias. Imita el gesto masturbatorio sobre su diminuto tanga y desliza su dedos sobre el chocho, ofreciendo sus lubricaciones vaginales venusinas a su novio en la ficción del vioclib . El novio es un exótico hispano chino, una nueva especie humana que tiene su origen en unas actuaciones del circo Sol en la Plaza del Sol de Madrid.
Oye tía, deberíamos darnos el piro de esta casetucha, hace cuatro meses que no pagamos el alquiler.
¿Volvemos con nuestros padres?
II. El pibur de los chonis.
Los chonis abandonan poco a poco la casa de Antonio. Una semana siguen allí, otra acoplados entre familiares o amigos. Las casas de conocidos que los adoptan son muchas, las discusiones de escalera frecuentes. Rata queda nuevamente abandonada o semi abandonada. Piensa en esas horas de desesperación en que sera de su camada, de su vida, siente vergüenza y asco de si misma y un profundo desconcierto. Huele inquieta alrededor de la casa. Jura que cuando lleguen los amos los lamerá de arriba abajo para que sepan que los quiere. Intentará conmoverlos. Está atenta al ruido de un motor, rasca bolsas de basura, lloriquea, da vueltas en circulo. Piensa en el destino funesto que le persigue. Su madre fue abandonada, ella nació abandonada en Nules, fue recogida y ahora de nuevo sigue abandonada, y su camada nacerá abandonada. ! Y no puede hacer nada! Al pibur junto con otras cosas vendibles se lo han llevado, pero a ella la han dejado. Es lo único que se han dejado.
El sol ilumina los abruptos picos de las montañas de Vall d"Uixó. Los gallos han terminado de cantar y vigilan de soslayo a las gallinas que se comportan cómo deben.Todo esta en orden. Con esa premisa el gallo puede retirase a descansar mientras ellas hacen lo que mejor saben hacer: poner huevos. Es la madrugada de mitad de febrero, se anuncia caluroso y seco. Las cumbres uxenses son coronadas por alguna humilde carrasca ennegrecida, retorcida y resaca . Las laderas son para el pino, cuya sombra llena de misterios perfumados a mediterráneo las sendas, que terminan en algún pedregal repleto de matorral, llentiscles y abejas silvestres. Por doquier surgen las copas sin forma definida, asimétricas y poco densas que marcan el árbol principal de la campiña de Vall d"Uixó : el algarrobo, con más tronco y rama que hoja, el anciano y decrepito coloso de los bancales que se pudre olvidado sobre paredes de rocas de las montañas o del ribazo. Hacen las piedras una breve queja al caer rodando cuando son chafadas por el senderista. Desempleados de natural tranquilo, gente carente de ambiciones, motivaciones, formación y preocupaciones, que gustan de contemplar la naturaleza en sus largas horas de desempleo subvencionadas por el estado, o incluso sin ningún tipo de subvención, empobrecidos perdidos, pero que no por ello no disfrutan menos que cualquiera de la naturaleza. Esa mañana, abandonan su habitual parsimonia naturista zen para pedir ayuda a la policía. Dialogan varios móviles con las orejas y los labios sonrosados de la policía local, que con el aparato telefónico colgando del cinturón, del que salen auriculares, muy atentos posan profesionales captando las miradas de unos niños que visitan las dependencias.
-Hay un pibur suelto- retumba en la comisario de Vall d"uixó cómo una amenaza contra la seguridad ciudadana. El inspector jefe, el concejal de seguridad y bienestar toma nota y llama a todo cuerpo del reten. Sobre un mapa al revés en una mesa del despacho principal el inspector marca con el dedo, al azar, el punto que los parados senderistas le han señalado.
Con la otra mano toma el café y luego un donut. Los agentes llaman a los cazadores para que les guíen. Con rifles y cantando con los niños la canción del libro de la selva salen al encuentro del pibur. Entre unas rocas asoma el lomo del animal . Un águila sobrevuela la escena chillando. El perro se tumba mirando a los policías y cazadores que van estrechando el circulo. Saca la lengua y respira el perro de laboratorio. Varios infrarrojos marcan el cuerpo del animal que se rasca una pulga. Se levanta y se gira en el momento en el que una ráfaga de tiros se incrusta en al roca donde estaba. La piedra aguanta con resignación estoica.
-Loliluz- le dice el Penas acariciando a Rata que besa sus manos mientras le da de comer-
¿Donde está el pibur?
Lo deje en la calle junto al coche ¿ no lo cogiste tu?- le responde Loliluz bajando junto a Rata.
El Penas hace señal negativa y Loliluz se lanza cómo una loca a Rata atiborrándola de besos.
-Cuanto te quiero Rata, que bonita eres, vas a ser mama. Yo también seré muy pronto.
El animal con el lomo arqueado, la cabeza gacha recibe ronroneando las caricias de la dueña y se duerme entre sus pechos.
-Mi Ratita, mi ratita, no sabes cuanto te quiero. Vas a ser mama. Mua, mua- Otra lluvia de besos embadurna al animal que se siente feliz.
Va Lolilu,z deja a Rata que tenemos que buscar al Pibur.
III. De cómo y donde pare Rata.
Recaredo Centelles, gitano residente en San Antonio, prepara en el ocaso mortecino, borrascoso, con un cielo cargado de nubes rojas que presagian vientos huracanados, un caldo de ortigas con apio. Su hogar, un triste cesaron venido a menos por culpa del paro. Tenía ilusiones de levantar una gran casa, de plantar en un huerto, de ser feliz. Pero hoy contempla cómo su esfuerzo, sus horas de trabajo se tambalean desafiando a la gravedad, con grietas en el techo y ratas por los muebles. Todo ello sacude su conciencia comunista. La indignidad se apodera de él de vivir en esas condiciones y no poder salir de ella por mucho que lo intente. Vall d Uixó es una ratonera proletaria. Su nombre maldito se guarda en los archivos de la guardia civil ,y en la lista B del Ayuntamiento donde el alcalde Óscar Clavell se la ha jurado junto otros fascistas concejales del PP que le acompañan en sus delitos contra la sociedad. El delito de Recaredo: manifestarse por algo que no tiene arreglo, que está perdido: la clase obrera. Mientras los sindicalistas de UGT y CCOO le aplaudían sus manifestaciones cobrando del patrón, él acababa junto a otros mártires fichado. También le ficharon por manifestarse a favor de la agricultura ecológica, por manifestarse contra los abusos de los servicios sociales, las estafas del serfev, por la defensa del patrimonio .Tampoco le ayudo su activismo pro defensa animal denunciando con fotos y vídeos las cacerías de perros abandonados y gatos por parte las elites empresariales y políticas en el termino. En Vall d Uixo, a falta de faisanes, concejos, tórtolas, y el aumento de perros abandonados, se ha puesto de moda batidas de estos animales. Esto le llevo a la lista B del ayuntamiento. Se guarda la lista en una libreta aparte de la libreta contabilidad B . En Vall d"uixó por todas partes hay gente colocada a dedo, trabajadores municipales enchufados, los de la lista A, o los de las preferentes. Hay Agencias de desarrollo local, ADL, repletas de elementos fascistas liberales que difunden a través de cursillos entre discapacitados y trabajadores en paro: ideología de empresa, de competitividad– formación. Obligan a los obreros en paro que acuden al Ayuntamiento en busca de trabajo a reunirse en estos cursos financiados por bancos y ayuntamientos y que son impartidos por psicólogos que le dan consejos cómo : no utilización de redes sociales, no hacer gala de la libre expresión, ni formar parte de sindicatos, ya que esto puede agravar sus condiciones de precariedad laboral. Este es el panorama del que es prisionero . Recuerda Recaredo Centelles esta situación entre toses y lágrimas en el comedor. Sale ahumado cómo un salmón para respirar en la calle. Una cortina de humo blanco le precede. La cocina de leña cargada de ramas de poda verde, al carecer ya de ramas secas, ha provocado un humo denso e irrespirable, hace que hasta las ratas huyan. Y cómo no hay mal que por bien no venga la casa es desinfecta de este modo, así como la cabeza de Recaredo que ha aprovechado previamente para darse un baño gitano que ahuyente las pulgas. Dos perros estornudando le siguen a la calle donde se encuentran con los ojos azules e inmóviles de la perra abandona que aprovecha para entrar y buscar entre el humo algo de comer. Hinca el diente en una rata mareada entre el humo, se escucha un ligero chillido lastimero de la bestia atrapada entre sus fauces . Se ve la sombra del perro comiendo entre el humo blanco que empieza a subir al techo y a escapar por el tiro. Luego escarba entre la basura guardada en bolsas de mercadona. Los chonis bajan con el coche repleto de trastos. Observan con indiferencia a su perra salir de la casa de Receredo y siguen su camino.
– Se van sin ti. Puedes quedarte cómo otros días aquí si quieres. El corral es tuyo- le dice Recaredo que sabe que la perra es de los chonis, adivina el destino de Rata. ¿ Debería denunciarles o decirles algo?- habla para si dudando Receredo con gesto de fastidio mirando texas y las casas de protección oficial donde viven gitanos e inmigrantes andaluces ¿ Para qué habría de hablarles? No sirve de nada. Poco adelantare. El eh tío a mi no me digas nada de la perra, y no me vaciles o te meto con el mechero.- es lo único que saben decir, en voz alta hablando consigo mismo, resuelve el supuesto dialogo sobre la perra con los chonis. El hablar con un subnormal chonis o con un gitano es tan molesto que abandona la idea. El animal en gesto de sumisión se tumba en el suelo. Recaredo le alarga la mano, mira el animal fija la mano con temor e inquietud. Recibe las caricias ronroneando y durmiendo.
La fiebre de una gripe incipiente empieza a subirle a la cabeza de Recaredo y entra en la casa aun con humo seguido de sus dos perros. El comedor queda abierto para que se ventile. El tiempo ha empezado a cambiar ese día, un ola de frío acaba de entrar. Los ojos le escuecen, la garganta también y siente un profundo frío, un frío que le duele. Va a calentar leche, pero no le queda gas y leña tampoco tiene. Sobre la estufa queda el caldo a medio hacer de ortigas y apio que sorbe sin ganas. Se tumba entre espasmos y escalofríos. La tos ya no por el humo, si no de gripe empieza a apoderarse de él, de sus pensamiento que le sacuden estertorosamente. Piensa en la muerte. Los ojos se le cierran poco a poco. Rata siente unas profundas contracciones, entra por la rampa que lleva la corral de la casa de Recaredo. Llega a la leñera vacía, empieza a girar sobre si misma desconcertada dilatando. Los perros de Recaredo le anuncian el nacimiento.
IV De como los chonis reaparecen de forma extraña.
Dos días y dos noche dura la agonía, el martirio del gitano comunista con gripe de Recaredo Centelles. Su nobleza, su modestia, su respeto al semejante, su aguante al sufrimiento, al dolor, le permite aguantar dolores, las toses, los vómitos, las fiebres. Lo hace de la mejor forma posible:en soledad y paz, ayudando a su curación. Apenas tiene alimentos, y eso también es bueno para la sanación. En dos días no habla con ningún ser humano, ni prueba apenas alimentos. Su sentido de lo publico es tan grande que no va al médico para que no le acusen de que gente cómo él acaba con la seguridad social. Al tercer día resucita. Al salir se encuentra en el corral que hay tras la casa a Loliluz y unos amigos haciendo fotos a los perritos de Rata.
-¿Pero quien sois, y que hacéis en mi casa?- les pregunta con la boca reseca, el pelo encrespado, blanquecino de enfermedad. Reconoce vagamente a la chonis, es su ex vecina de arriba. Su gesto de saludo le tranquiliza. Recaredo saca la mano de la camisa donde siempre lleva una navaja.
-Estamos con la perrita- le dice ella asombrada de la pregunta.
– Ha parido 8 señor, son preciosos. Me voy a llevar uno ahora- responde una chica con cresta, tatuajes, tacones de aguja. Tiene gesto de éxtasis y felicidad en el rostro. La perra tiembla por el circo en torno a ella, ve cómo sus perritos son tocados y pasados de mano en mano. Emite conductas de estrés. Sus mamas le cuelgan lecheras, su cuerpo días atrás gordo ahora parece una mojama.
-Vamos a ver. Fin del circo este. Aquí no tenéis permiso de entrar. La perra ¿ no era tuya?- pregunta furioso a Loliluz Recaredo quitándole el perro de la mano de la panky.
Abre la boca la panky para protestar y Recaredo se adelanta:
Hasta que la perra no los destete no te lo puedes llevar, se moriría. ¿ Que le vas a dar tu de mamar?- mira las tetas pequeñas de la panky.
-Pues mi hermana dio de mamar a un negro cuya madre había muerto y vivió. Ahora el negro sale con dos amigas mías.- replica la panky.
-Estoy seguro que el negro estará bien alimentado, pero a este perro, ni el negro, ni tu hermana, ni tus amigas le vais a dar de mamar. Déjalo bonita con su madre y ven su quieres a por el dentro de unas tres semanas- dirigiéndose a LoliLuz que hace fotos y vídeos de la camada que sube a internet. Y tu irresponsable. ¿ Te llevas la perra que tanto quieres?
No, no puedo, ahora vivo junto a mi pareja en un piso con nuestros padres y no podemos tenerla-
– ¿Sabes que esto es abandono de perro, y es un delito?
Eh tío, ¿ de que vas? no la han abandonado. La perra no les hacia caso. Ella la recogió en Nules y le ha dado de comer, ¿ más que eso que se puede hacer?- con tono chulo, un chonis vestido con sudadera de adidas, chandal nike , gafas de sol de pera, se rasca una barba bien arreglada.
Recaredo lo mira con desprecio y repugnancia. Sus ojos se miran con ganas de pelea.
-Nosotros no la abandonamos. La verdad es que nunca nos hacia caso, cuando íbamos a acariciarla huía. Si nos hubiera obecido la tendríamos.
– A mi siempre me ha hecho caso- responde Recaredo de forma seca. Pues a mi no- balbucea Loliluz.
¿ Y que vais a hacer con los perros? – pregunta Recaredo intuyendo que por ahí la conversación no va a ir a ninguna parte.
Los daremos, son muy bonitos- responde ella entusiasmada. Largo de aquí- hace la señal de que se vayan Recaredo.
La comisión de mala gana se va. La perra se mete en la leñera con sus crías sobadas. Los perros de Receredo han quedado detrás del asunto. No se han atrevido a bajar a ver los cachorros por miedo a que la madre les ataque aunque están inquietos.
El día transcurre con parsimonia. Consigue ir al supermercado y hacer las primeras compras. Poco a poco su cuerpo va cogiendo templanza y el resfriado queda cómo un recuerdo. Ahora la confusión nace de los acontecimiento sufridos.
-¿ Por qué todo el mundo aquí es subnormal? Estoy rodeado de gilipollas. Menuda pandilla de anormales- pega comiendo un puñetazo sobre la mesa el bueno de Recaredo. El caldo de la sopa se desborda cómo su paciencia. Se puede superar un cáncer, se puede superar el sida, se puede superar la muerte de un hermano y un madre en el mismo día, se pude superar el desempleo, la pobreza, se pude superar una lapidación, pero, ¿ Se puede superar vivir en un barrio donde tus vecinos son chonis , colorros rumis,o hijos de inmigrante andaluces, castellanos o extremeños? No no no no, no, no, no, eso no se puede aguantar.
Al día siguiente tras ir al pueblo a comprar, a la vuelta se encuentra de nuevo a Loliluz y unos amigos suyos en su casa haciendo fotos, jugando con la perra cada vez más estresada.
– Largo de aquí o llamo a la policía- les grita agarrando un palo.
La perra sale junto el grupo y se lanza al ataque de un perro salchicha que hace trizas en un instante. Le lanza una dentella en mitad de su cuerpo, luego otra en la oreja, otra en la cabeza, en las nalgas. El pobre sangrando por los cuatro costados mira a su dueño , un homosexual, para que le ayude. La visión del perro salchicha repleto de sangre, el horror de los ladridos, la espuma de Rata saliendole de la boca hace que el homosexual pierda el sentido. Cae el suelo. Unas personas que pasean por el lugar enseguida acuden a auxiliar al herido. ¿ De quien es ese perro salvaje?- preguntan. Los chonis señalan a Recaredo y se largan.
-No, no es mía esa perra, es de ellos. La perra se mete en el corral.
La policía acude y detienen a Recaredo.
-Alcalde ¿ Se encuentra bien?- le preguntan frotándole sales minerales.
¿ Y fufu?- pregunta el buen hombre recobrando el sentido poco a poco y empezando a recordar. Observa sentado en le suelo a Fufu hecho picadillo. En la verja de la casa ve los ojos azules de Rata . Pierde otra vez el conocimiento.
A Receredo se lo llevan esposado, y junto a sus antecedente de anti sistema consiguen convencer al juez de que le imputen intento de asesinato al alcalde empleando un perro entrenado, fracasando gracias a la pericia de Fufu al que condecoran con la medalla de la policía local póstuma al valor.
-¿ Que hacemos con todos estos libros ?- pregunta Loliluz al Penas.
-A ver, que raros, el capital, el manifiesto comunista, Malatesta- que cosas más raras leía este tío. No me extraña que este en prisión- Ríe el Penas ojeando los libros del comedor de Recaredo. Su perros, los que antes vivían libres y felices junto a su amo ahora están atados de una cadena en el pequeño huerto que hay tras la casa esperando que vayan a hacer con ellos los nuevos dueños. El Penas y Loliluz han ocupado la casa mientras Recaredo cumple 30 años de prisión por tentativa de asesinato al Alcalde y maltrato animal .
Angelillo de Uixó.
Autor:
Ángel Blasco Giménez