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Wong. Presente en la construcción de la Revolución Cubana


  1. Introducción
  2. Desarrollo
  3. Conclusiones
  4. Bibliografía

Introducción

Una de las formas que los inmigrantes han empleado en todos los tiempos y en todos los lugares es la unión voluntaria en grupos con nexos de afiliación que les permite enfrentar las duras condiciones de vida que les impone residir en medios diferentes al de origen.

La inmigración China de Cuba es la comunidad más destacada y la más numerosa de asiáticos asentados en la isla, llegaron a Cuba antes de la independencia de la república y fueron vendidos como esclavos por contrabandistas inescrupulosos que los reclutaban con contratos engañosos en Manila, para supuestamente trabajar en los campos de caña como obreros libres, pero en realidad el tal contrato no era otra cosa que un papel sin valor legal alguno para el infeliz asiático que sería utilizado como mano de obra forzosa y barata en competencia con los negros esclavos. De ahí viene la popular frase cubana de

"Te engañaron como a un chino".

Pero antes de continuar vale la pena aclarar que era una contrata. Mediante este documento, un chino era prácticamente capturado y encerrado hasta que un barco muy parecido a los negreros, lo conducía a la Isla de Cuba. El documento que permitía el engaño estaba redactado en español y chino, (la mayoría de las veces el infortunado no sabía leer ni escribir), y se le hacia declarar al infeliz:

"… me conformo con el salario estipulado, aunque se y me consta es mucho mayor el que ganan otros jornaleros libres y esclavos de la Isla de Cuba, porque esta diferencia la juzgo compensada con las otras ventajas que ha de proporcionarme mi patrono…"

Realmente, el chino llegaba endeudado a la isla, y cada año esa deuda crecía mas, además de ser maltratado con el látigo y el cepo, al igual que los esclavos.

Han transcurrido 164 años de la migración de los chinos a Cuba, estos venían

bajo la máscara de colonos contratados para sustituir la mano de obra esclava africana en momentos en comenzaba a decaer esta mano de obra barata.

Los chinos de Cuba no quedaron ajenos a esta necesidad y casi desde el mismo tiempo en que los primeros lograron liberarse de su contrata surgen las primeras uniones, inicialmente como un medio de sostenerse mutuamente y como un recurso de resistencia para defender al mismo tiempo sus intereses de grupo y sus derechos.

Las sociedades chinas imitaron, en cierta medida, las estructuras clasistas y sociales de la lejana patria, y por ello fue natural que tendieran a preservar sus tradiciones y elementos socioculturales, aunque es ineludible la influencia de la cultura nativa lo que provoca en alguna medida transformaciones desde el punto sociocultural.

Inicialmente las sociedades eran estrictamente para los naturales y sus hijos "legítimos", es decir aquellos que hablaban el idioma y eran de primera generación.

Con el paso de los años, ante la inevitable merma en la inmigración, así como el resultado de diferentes re-emigraciones, los requisitos comenzaron a perder su rigidez y fueron aceptados descendientes de otras generaciones.

Esta es una característica de las sociedades chinas de Cuba, cuya Comunidad está formada principalmente por descendientes

El legado que comienzan a aportar los chinos al proceso de formación de nuestro pueblo desde 1847 es difícilmente resumible en escasas cuartillas, de todas formas lo que primero solo fueron influencias, ahora se denotan rasgos de la identidad cultural.

Desarrollo

Cuando miles de chinos en su mayoría de la provincia de Guangdong, que llegaron para "mezclar su sangre con la de los cubanos y así, junto a los españoles y africanos, conformar las raíces de la nacionalidad cubana", traídos a Cuba en condiciones de servidumbre como trabajadores brutalmente explotados, se sumaron a la guerra revolucionaria para abolir la esclavitud e independizarse del dominio colonial español.

Los chinos se fueron a la manigua a combatir junto a los Mambises contra el poderío colonial español. Las palabras famosas del general Gonzalo de Quesada, uno de los dirigentes de la guerra cubana de independencia de 1895, de que "no hubo un chino cubano desertor, no hubo un chino cubano traidor". En el monumento de Línea en honor a los chinos que pelearon por la independencia de Cuba aparece:

"Nunca hubo un chino traidor".

La explicación, radica en 164 años de continuidad revolucionaria en Cuba. Los chinos participaron masivamente en las batallas del siglo 19 por la independencia y la abolición de la esclavitud y de todo tipo de servidumbre. En los años 30 participaron en el ascenso revolucionario contra la dictadura de Machado.

En septiembre de 1960 Cuba fue el primer país de Latinoamérica en romper relaciones diplomáticas con Taiwán y reconocer a la República Popular de China.

Si bien está creciendo en Cuba el interés en la cultura y las artes que los inmigrantes chinos trajeron a la isla, así como el orgullo en esta rica historia, el mundialmente célebre barrio chino de La Habana, antes el más grande de América Latina, ya no se parece a lo que era antes. Lo que distingue a Cuba de todos los demás países, es la eliminación de la discriminación y la casi completa falta de prejuicios contra los cubanos de ascendencia china estando presentes en todos los ámbitos de la vida social hasta los niveles más altos del gobierno y en otras esferas.

Los chinos en Cuba se han agrupado en varios tipos de asociaciones: territoriales, corporativas, políticas, de ayuda mutua y patronímica. Las primeras fueron La Unión (Kit Yi Tong), y Los Hermanos ((Heng Yi Tong), que datan de 1867 y 1868 respectivamente.

Las sociedades territoriales agrupan a los nacidos en la misma región o aldea. Las corporativas a propietarios con fines de mutua protección ante la competencia. Las sociedades patronímicas son instituciones tradicionales basadas en la organización clánica por vía patrilineal característica de la aldea china.

Su principio es la asociación derivada de la familia extendida y agrupa a los chinos que se definen como descendientes de un antepasado común. Todavía existen en Cuba diez de estas:

Yi Fung Toy Tong (apellido Yi) On Ten Tong (apellidos Bu, León, Cheng y Hung) Wong Kon Ja Tong (apellido Wong) Jong Sai Li (apellido Li) Lung Con Cun Sol (apellidos Lau, Kuang, Chiong, y Chiu) Chi Tack Tong (apellidos Eng, Chao, Choi y Yun) Soy Jo Jon (apellido Lam) Sue Yu Tong (apellido lui, Kong y Fong) Chang Weng Chung Tong (apellido Chang) Chang Luen Kong Sol (apellidos Jan, Joy y Chie).

La Wong Kong Ja Chi Chi Sol, nombre por el que va a ser bautizado en un inicio esta asociación, se crea exactamente en Mayo del 1914 por el ciudadano chino Wong Cheng Wo, quien según cuentan los miembros actuales de la institución, ocupó importantes cargos en las Juntas Directivas de algunas sociedades ya fundadas, fungiendo también como administrador de extinto periódico chino "WAH MAN SION PO".

Desde su arribo a Cuba, y junto a algunos paisanos, habían hecho algunos intentos por crear una especie de grupo en el que se congregara a los chinos descendientes del apellido Wong que, según refieren algunas fuentes, constituían un número significativo.

De acuerdo a los diferentes tipos de sociedades que se crearon, esta asociación responde a los patrones de una sociedad clónica o patronímica, en la que el apellido paterno constituye el principal nexo de afiliación entre sus socios. A diferencia de muchas, como por ejemplo la Lung Kong (que agrupa en su seno a los miembros de 4 familias, "la Wong"- nombre por el que afectuosamente es conocida por todos – solo va agrupar a los apellidados por Wong.

Además, y respondiendo a otra tipicidad de las de tipo patrilineal, los lazos de hermandad descansan sobre el culto y la veneración a una figura generalmente de la historia o la leyenda china, que en este caso corresponden a Wong Xi Quiong.

Como casi todos las sociedades chinas creadas en La Habana y en el resto del país, la manutención de fondos estaban respaldados por donaciones y el pago de las cuotas mensuales de sus asociados, lo que no le dio la posibilidad desde un inicio de contar con una sede propia, obligados en el mayor de los casos a rentar algunos inmuebles para sesionar. En la medida en que creció la membresía o la situación económica les permitió, pudieron adquirir un inmueble propio.

El reglamento es uno de los documentos más importantes que emite cualquier institución dentro de la sociedad, pues es el encargado de darle el verdadero sentido de miembros activos a toda institución en el medio en el que se desarrolla. Además, en él se recoge todas las características que la hacen única y específica.

En la primera carta reglamentaria perteneciente a la Wong, y según los miembros actuales de la dirección de la institución, quedó establecida la conformación de una Junta Directiva compuesta por los cargos tradicionales: Presidente, Vice-presidente, Secretario y Tesorero.

De igual forma, un elemento a resaltar fueron los requisitos necesarios para la incorporación a la sociedad, en el que se estipuló de manera inviolable ser chino natural o descendiente, así como tener el apellido Wong. De esta manera se ratifican los objetivos de su existencia como grupo: reafirmarse como una etnia.

Con el transcurso de los años, el trabajo de la sociedad iba en ascenso, siempre dirigido a lograr una mejor atención para con sus asociados, logrando reunir, según cuentan algunos, con cerca de 1600 miembros.

La culminación en el año 1929, de la construcción del panteón de la sociedad en el Cementerio Chino va a ser el antecedente de un conjunto de acciones que la dirección va a desplegar y que van a tener su cristalización en el año 1944 cuando, con Hin Sun, Chock Cham, Chiok Jun, Tan Lap, Chou Kion, Wang Yut, Tung Fan y otros, se crea un Frente Especial de Colaboración Benéfica de la sociedad WONG KONG JA TONG.

La creación de este frente tenía como objetivo primordial brindar medicamentos a enfermos, ayuda económica a miembros desamparados, darle un tratamiento decoroso en caso de fallecimiento así como ofrecer una atención esmerada a todos sus congregados en general. Esta creación bajo la tutela de la Junta Directiva constituyó un acicate para que muchos chinos y descendientes se sintieran atraídos por el trabajo que se estaba desarrollando y decidieran pertenecer a la sociedad.

La sociedad China Wong Kong Ja Tong es una sociedad patronímica que agrupa a chinos naturales y descendientes de apellido Wong, su razón social es ser una Institución de Instrucción y Recreo, manteniendo el acerbo cultural y atención de ayuda a sus socios.

Se hará referencia algunos de los valerosos chinos, o descendientes con apellido Wong que han aportado valientemente sus acciones a la revolución cubana sin importarle el precio a cobrar; su vida.

Wong, Liborio

Liborio Wong (Wong Song o Sen) obtuvo los grados de capitán, era medico botánico de una dotación cercana a Manzanillo y ayudante del Mayor General dominicano Modesto Díaz, participó en importantes acciones e insatisfecho con el Pacto de Zanjón, pasó a las ordenes del General Antonio Maceo y junto a el termina la guerra.

Aparece en Las Villas y zona oriental.

Sio Wong, Moisés

Moisés Sio Wong (Shao Jun Jiang) General Nació en San Pedro Mayabon 1939 ,provincia Matanzas, siendo hijo de padre chino y madre cubana, fue un militar cubano consagrado a la revolución con su característico pausar al hablar enigmático característico del chino ,fue General del Ejercito ,miembro del Buro Político del Partido Comunista de Cuba.

Sus actividades revolucionarias comienzan con Antonio Ñico López y Gerardo Abreu. Participa en los combates de Casas de Piedra, hasta que creó la Columna 8 Ciro Redondo en las Mercedes con la que fue parte de la invasión de Oriente a Occidente.

Fallece el 11 de Febrero 2010 victima de una penosa enfermedad.

Wong, Raul ( Wang Yue –Yao)

Nacido en Joi Shan (Tai shan), Guandong. Es mas conocido por Chitoy. Llego a Cuba en 1954 desde Hong Kong a Guanabacoa donde trabajaba con su tío en un pequeño Tren lavado de ropa, era opuesto a la tiranía batistiana. Este revolucionario chino guanabacoense el día 3 de abril de 1997 dejó de existir físicamente, pero su ejemplo siempre está presente, ya que su vida la consagró a la Revolución y al MININT (Ministerio del Interior). Fue fundador de la Milicia China y después pasa al MININT. Por su iniciativa propia, mandó a confeccionar la primera bandera de la República Popular China que enarboló por primera vez en Cuba en el edificio del Casino Chong Wah. Estuvo movilizado desde el 31 de diciembre de 1960 hasta el 31 de mayo de 1961, participó en la Lucha contra Bandidos en la Sierra del Escambray con el Bon (Batallón) 2615 del MININT y durante 25 años fue miembro de la PNR destacado en la Unidad Municipal de Guanabacoa, ha sido condecorado con distintas medallas y distinciones, siendo ascendido a Sargento de Primera. Participó apagando el fuego iniciado por la contrarrevolución en la Tienda La Época el 5 de abril de 1961.

Wong, Ercio .Natural de la Provincia Kwongtung

Procedencia obrero, trabajaba en la bodega en San José de las Lajas, junto a su padre. Se incorpora a la clandestinidad desde muy joven, fue jefe de Célula del Movimiento 26 de Julio, por su propia voluntad ingresa en el MININT, participó en el Primer Festival de la Juventud y los Estudiantes celebrado en Berlín en 1951.

Fue fundador del MININT y de los Órganos de la Seguridad del Estado. Caracterizándolo la modestia y sencillez, fue condecorado con distintas medallas y distinciones, siendo ascendido a Teniente Coronel .

El día 7 de Agosto de 1991 dejó de existir físicamente, pero su ejemplo siempre está presente, pues su vida la consagró a la Revolución y al MININT (Ministerio del Interior).

Wong, Roberto. Milicia china

Roberto Wong (Huáng Chagqing) – Jefe de escuadra.

Wong, Virgilio. Milicia china

Virgilio Wong (Huáng Shufang) – Jefe de escuadra.

Wong, Angel

Angel Wong o Ledo (Huáng Chengzhi)

Wong, Chong

En la comunidad china en Cuba existían cuatro periódicos impresos, que se editaban tres en el barrio chino y uno en Santiago de Cuba, el de mayor circulación era el de Wah Man Sion Po ( Hua Mín Sheng Bào)

Siendo su director el señor Wong Chong Wod (Huáng Chong hé), dedicado principalmente a ofrecer informaciones mercantiles y crónicas de las sociedades chinas. Radicaba en la calle Amistad No. 420, en la planta baja del Casino Chong Wah.

Wong, Guillermo

En la década del 40 al 50 existían 3 emisoras habaneras, donde salían al aire música de la opera cantonesa y un noticiero radiofónico de 30 minutos, transmitiendo en la lengua Guangdogdesa (cantonesa), por los locutores chinos Guillermo Wong (Huáng Yúnqí) y Angel Hunjan (Wù Zhuozhang), el primero salía por la emisora CMCK y era patrocinado por la compañía Sabatés anunciando el jabón Llave y el segundo por la COCO que anunciaba el jabón Candado de Crusellas y Compañía.

El señor Wong representaba la política del Guómíndang y el señor Hunjan Zhigongdang, los cuales transmitían las noticias y comentarios relacionados con el conflicto bélico, sin señalar la corrupción y la traición del gobierno de Jiang Jieshe, y así como las crónicas y notas sobre las actividades en las que se agrupaban los paisanos en frecuentes ocasiones para escucharlos.

Wong, Joseito ( Huang)

Invasión con la columna del Che, integro, Columna 8 Ciro Redondo, natural de Fomento, Las Villas

Wong, Mariano, (Huáng Píngfang)

Milicia china- Jefe del 3er Pelotón.

Jose Wong ( Huang Tao Bai) Natural de Guang zhou.

Wong llegó a Cuba a principios de la década de 1920, residiendo en la calle Clavel No. 61 entre Nueva del Pilar y Lindero, Cerro; dedicándose a la venta ambulante de viandas y hortalizas con una carretilla. Wong trabajó además de operario de cajista litográfico en el periódico Hoy Men Kon Po (Kai Ming Gong Bao) que tenia tendencias liberales y era el órgano del Partido Republica de China de Cuba (Zhigongdang).

Fue compañero de Julio A. Mella y Carlos Baliño, en el mes de julio decenas de obreros y estudiantes eran detenidos y acusados de comunistas por criticar al gobierno y no cejó el Presidente Machado en sus macabros planes, pues hasta tierras mejicanas envió a sus sicarios para asesinar el 10 de enero de 1929 a Julio Antonio Mella.

En ese mismo año de 1929, se creó el periódico clandestino Grito-Obrero Campesino (Gong Nong Hu Sheng) cuya publicación mimeografiada era mensual y José Wong era su editor y redactor, estando la sede en la calle Zanja No. 62, primer piso entre Galiano y Rayo.

El 29 de mayo de 1930, cuando estaban en la sede del Comité Central del PCC en la clandestinidad, que se encontraba en el domicilio del dirigente tabacalero Joaquín Valdés Hernández, en Campanario No. 213 entre Carmen y Figuras, a causa de una delación fueron sorprendidos y arrestados por agentes de la policía secreta: Filomeno Rodríguez Abascal, Joaquín Valdés Hernández, el español José Rego López, el polaco Otto Moldy, (Fabio Grobart); entre los detenidos se encontraba el Militante Comunista José Wong (Huáng Táobái); que no pertenecía a dicho Comité Central y solo entró a recoger una propaganda. Fueron enviados a la prisión del Castillo del Príncipe.

El dictador Machado ordenó al jefe de ese penal, Teniente Díaz Galup que asesinara a Wong. Para cumplir su cometido fue incomunicado, lo que fue protestado por Fabio Grobart y José López. El 13 de agosto, fue ejecutado en la celda en que se encontraba con el verdugo Romero y otro criminal.

Wong se defendió, hasta que dominado a golpes fue estrangulado con una sábana. Su cadáver fue desaparecido, supuestamente para evadir el examen forense. Con solo 32 años su nombre entró en la larga lista de mártires que lucharon contra la tiranía y el imperialismo.

Ha sido una breve reseña de nuestros hermanos que dieron su razón de vida a la Revolución Cubana. Así pues la Comunidad China y sus descendientes han sido un ejemplo vivo del espíritu combativo y de su integración a las causas más justas de la Nación Cubana; donde participaron a lo largo de toda la Isla, en la lucha armada en las montañas y en la clandestinidad, manteniendo los principios de no claudicar a la revolución.

Con los relatos de Choy, Chui y Sío Wong en Nuestra historia aún se está escribiendo: La historia de tres generales cubano-chinos en la Revolución Cubana. El libro fue publicado en español y en inglés por la editorial Pathfinder y en chino por la Editorial de Propiedad Intelectual en Beijing, aprendemos sobre la participación de los cubano-chinos en la lucha revolucionaria que culminó con la victoria de 1959 y pasó a la revolución socialista en América.

Los tres ocuparon importantes responsabilidades de dirección en misiones internacionalistas cubanas en África y otros lugares, llegando a general en las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Cuba y asumiendo altas responsabilidades en el gobierno.  

Conclusiones

Para siempre han quedado aquí los monosílabos y sonoros apellidos, los ojos rasgados y ágiles llegados con esta migración que ha venido a entregar una cara más al prisma de nuestra nacionalidad.  Sin embargo, la esencia última de estos hombres sigue siendo un misterio, velado por una cortina tenue pero infranqueable, hecha de aromático humo de sándalo. Algo hay, más allá, que los chinos siempre reservan, como el preciado tesoro de su identidad. Algo existe, milenario y muy asiático, que han sabido guardar con celo incorruptible.

 El barrio chino de La Habana, vive todavía el enigma, guardado en el corazón de unos emigrantes sin retorno, nuestros hermanos durante tantos años. Antes, decir "Tienes a un chino atrás" significaba que te habías puesto fatal. Que la suerte te había abandonado. Algo así como una desgracia detrás de la otra. Pero los tiempos han cambiado.

Hoy tener un "Chino atrás" representa todo lo contrario porque la China de ahora es toda una potencia mundial. Aquel gigante dormido del que nos hablara Napoleón Bonaparte al decir:

"No lo despierten que cuando se levante del sueño, seremos nosotros los que no podremos dormir".

Bibliografía

1- Julio Gerardo Hun Calzadilla. Las sociedades chinas en Cuba: Escudo y Sostén.

2- Martin Koppel. Evento en sur de China aborda chinos en Cuba.

3- Max Lesnik . Ahí viene el chino. La habana, 2004 (world data service).

4- Juan Mesa Díaz. Un chino en la corte del Rey Olofi .Casa de las Américas

La Habana, junio del 2000.

5- Mercedes T. Crespo Villate. Jose Wong .

6- Pan Wu en Villa Clara. Chinos en la revolución cubana. Guerras siglo XIX.

7- María Teresa Montes de Oca Choy. Los chinos en las guerras libertarias de Cuba.

8- ___________________________ Los Chinos en Cuba. Una Mirada a 164 Años de su Llegada.

9- Leonardo Padura Fuentes. El viaje más Largo.

 

 

Autor:

Mercedes Lina Wong Torres.