Exégesis de cierta hipótesis comprobable acerca del posible correlato neuronal de la conciencia subjetiva (página 2)
Enviado por Manuel Fontoira Lombos
¿Hay muchos tipos de neuronas en el cerebro?
Se han descrito diversos tipos de neuronas, según criterios morfológicos y funcionales, pero, en general, y ya desde la época de Meynert, hacia 1.867, los investigadores se empezaron a dar cuenta de que las neuronas, pequeñas diferencias aparte, son todas más o menos iguales, la misma pieza fundamental básica del cerebro por todas sus partes. El cerebro, y en particular la corteza (la sustancia gris externa, la que forma la superficie del cerebro, sus circunvoluciones) consiste en un número relativamente pequeño de tipos celulares repetido del mismo modo sobre toda la superficie un número de veces relativamente grande.
¿Cuántas neuronas hay en la corteza cerebral?
En la corteza tal vez haya entre 10.000.000.000 y 30.000.000.000 de neuronas, unos 14.000.000.000 según estiman Bloom y Fawcett (dato publicado en su Tratado de Histología). Es más, según los especialistas en ésto, la corteza de los mamíferos es similar de unos a otros vista al microscopio, siendo la diferencia más notable entre el hombre y otros mamíferos la cantidad de superficie de la corteza, no otra cosa: el ser humano tiene el cerebro relativamente más grande a expensas de una mayor superficie de corteza, a expensas de más circunvoluciones cerebrales (y a expensas de un mayor volumen cerebral también, claro). Por tanto el cerebro humano es relativamente más complejo, no mejor ni superior, sino más complejo, que es otra cosa.
¿Qué es el sistema nervioso?
El cuerpo está formado por células. En el organismo se distinguen grupos celulares especializados. Las células especializadas iguales entre sí por regla general forman tejidos (incluso a la sangre se la considera un tejido celular, sólo que líquido) y se agrupan de manera organizada en un mismo lugar del cuerpo, y se les denomina órganos, como el hígado, o el músculo, o el cerebro, que son órganos. A su vez, varios órganos con funciones comunes constituyen un sistema orgánico, como es el caso del sistema nervioso, o el sistema excretor (los riñones). El sistema nervioso se divide, para usos prácticos, por ejemplo, clínicos, en central y periférico. El sistema nervioso central se sitúa en el centro del cuerpo, por éso se le llama central, y el periférico en la periferia, por éso se le llama periférico. El sistema nervioso central y el periférico se distinguen por diversas características distintas; una llamativa es que las células de sostén de las neuronas en el sistema nervioso periférico no son las células de la glía, sino otro tipo de células, las células de Schwann.
¿Qué es el sistema nervioso central?
El sistema nervioso central es el tejido nervioso que está dentro de la cabeza (cabeza=cráneo+cara), tejido que se denomina encéfalo.
El sistema nervioso central también es el tejido nervioso llamado médula espinal, que está dentro del canal medular que forman entre sí las vértebras de la columna vertebral (no hay que confundir a la médula espinal con la médula ósea, o tuétano de los huesos, que no es tejido nervioso, sino tejido hematopoyético, o fabricante de sangre).
El encéfalo está formado por cerebro, cerebelo y tronco encefálico.
El cerebro, a su vez, está formado por los hemisferios cerebrales y el diencéfalo.
Los hemisferios son dos, derecho e izquierdo, dado que el ser humano es un animal con simetría bilateral, de tal manera que la parte derecha es algo así como una imagen especular de la parte izquierda, y viceversa. Hay animales con otro tipo de simetría, como las estrellas de mar, que tienen simetría radial. Los hemisferios están formados por la corteza y los ganglios basales o de la base, que son lo que falla, por ejemplo, en la enfermedad de Parkinson.
El diencéfalo está formado por tálamo, hipotálamo, epitálamo, subtálamo e hipófisis. El tronco encefálico está formado por mesencéfalo, protuberancia y bulbo raquídeo. ¿Qué es el sistema nervioso periférico? El sistema nervioso periférico está constituido por las estructuras externas a la piaracnoides, que es una cubierta que rodea al sistema nervioso central. Está formado por los nervios y los ganglios nerviosos (los ganglios nerviosos son "apelotonamientos" organizados de neuronas; el cerebro en el fondo no es más que algo así como un ganglio nervioso más evolucionado y de mayor tamaño). Los nervios son básicamente de dos tipos: somáticos, como los que van a los músculos, y vegetativos, como los que van a las vísceras. Los nervios vegetativos tienen una estructura más primitiva, pero no por ello han sido eliminados todavía por selección natural, a lo largo de la evolución de la especie humana (o de las demás especies con nervios). Los nervios ópticos y olfatorios no pertenecen al sistema nervioso periférico (son la excepción) sino al central, de modo que no están rodeados por células de Schwann, así que estrictamente no son nervios, sino lo que se denomina haces nerviosos, como los otros haces que van de un lado a otro dentro del cerebro.
Los nervios también tienen cubiertas, el epineuro y el endoneuro, que faltan en los puntos en los que los nervios entran en el sistema nervioso central, puntos que reciben el nombre de raíces nerviosas, motivo por el que en los estiramientos traumáticos de los nervios éstos suelen romperse por las raíces; ésto implica que las raíces nerviosas ya están bañadas por el líquido cefalorraquídeo, que es un líquido que baña al sistema nervioso central.
¿Qué es la neurona?
Las neuronas son células del sistema nervioso. Están formadas por un cuerpo, o soma, y por las neuritas, unas prolongaciones largas y finas, que son de dos tipos: axones y dendritas. Las neuronas conducen a lo largo de cada una de ellas, y transmiten de unas a otras, impulsos bioeléctricos que ellas mismas producen con sus descargas. En general, los impulsos bioeléctricos son transmitidos a las neuronas, desde otras neuronas, por las dendritas, y son transmitidos desde las neuronas, hacia otras neuronas, a través de los axones (es decir, la transmisión sigue este sentido establecido en las sinapsis, aunque haya matices y excepciones). En el caso de algunas de las neuronas medulares (de la médula espinal) las neuritas se proyectan hacia la periferia, así que el cuerpo neuronal de estas neuronas pertenece al sistema nervioso central, y las proyecciones, axones o dendritas, al sistema nervioso periférico, por lo que, como se ve, dicha clasificación del sistema nervioso en central y periférico es en parte artificiosa.
¿Qué es un nervio?
Los nervios son cordones macroscópicos (que sean macroscópicos quiere decir que son perceptibles a simple vista, por su tamaño compatible con la vista, al estar su tamaño ajustado a la capacidad del sistema visual). Los nervios están formados por miles de neuritas microscópicas. Que sean microscópicas quiere decir que no son perceptibles a simple vista, por su pequeñez; se requieren microscopios para percibirlas; los objetos de gran tamaño, como las galaxias lejanas separadas por grandes distancias, tampoco son perceptibles a simple vista (harían falta ojos de tamaño galáctico para percibirlas como galaxias a simple vista), las galaxias también caen fuera de la capacidad visual, pero por el otro lado de la escala, y se requieren telescopios para detectarlas, por lo que serían, por decirlo de algún modo, "objetos super-macroscópicos" (¿cómo podría tener sentido para un yo consciente efectivo a escala macroscópica, o cómo podría producirse "ante él" en una secuencia de hechos congruente a escala macroscópica, algo organizado en su mente a escala microscópica a base de interacciones entre neuronas microscópicas?).
En los nervios motores los axones conducen los impulsos bioeléctricos en sentido centrífugo (desde el centro hacia la periferia), desde la médula hacia los órganos efectores, los músculos, por ejemplo. En los nervios sensitivos, dendritas modificadas con aspecto de axones conducen en sentido centrípeto (desde la periferia hacia el centro) las sensaciones hacia la médula espinal. Las neuronas de la médula espinal se conectan a lo largo de la médula a través de sus neuritas con el resto de las neuronas del sistema nervioso central, llegando mediante diversos relevos sinápticos (la conexión entre neuronas se llama sinapsis) hasta la corteza cerebral en sentido ascendente y descendente, y formando bucles retroactivos complejos, como el sistema talamocortical, el sistema corticobulbar, etc.
¿Quién descubrió la neurona?
Dutrochet hizo, en 1.824, la primera mención conocida a la célula nerviosa, a la que más adelante se llamaría neurona. Las llamó "corpúsculos globulares", y las identificó como el origen de la "energía nerviosa" que las fibras nerviosas, que ya se conocían de antes, habrían de conducir. Más tarde se sabría que esa energía nerviosa consistía en energía bioeléctrica. Deiters, hacia 1.825, terminó de caracterizar las partes de la neurona: el soma y sus prolongaciones, las neuritas: axones y dendritas. Las dendritas están ramificadas de manera característica (habían sido descritas por Valentín, a mediados del siglo 19). El axón, prolongación única, había sido descrito por Fontana, en 1.781. El nombre se lo puso a la neurona Waldeyer, en 1.890. Baillarger, por añadir también este dato, describió la estratificación de la corteza cerebral en 1.840.
¿Qué es la teoría neuronal?
Según la teoría neuronal, el cerebro está formado por células, por neuronas, individuales, pero conectadas entre sí. Se suele situar su descubrimiento hacia 1.888, aunque se fue gestando poco a poco. El que más hizo por la teoría neuronal fue Ramón y Cajal, que utilizó los conocimientos acumulados por diversos investigadores antes que él, y después aportó innovaciones técnicas y resultados de observaciones propias e interpretaciones propias, caracterizadas, en general, por estar adelantadas a su tiempo, hasta llegar por este camino a ser capaz de demostrar dicha teoría neuronal, que siguió siendo confirmada durante los años siguientes con nuevas observaciones, sobre todo desde el descubrimiento del microscopio electrónico, que permitió terminar de demostrar que las neuronas son células.
De acuerdo con la teoría neuronal el cerebro no consiste en una red continua de fibras, como algunos pensaban antes del trabajo de Ramón y Cajal, como una red telefónica alámbrica, sino que consiste en una red intrincada de neuronas (y otros tipos celulares) que no se tocan en los puntos en que unas neuronas se conectan con otras (dichos puntos son las sinapsis), de modo que el cerebro se parecería más bien a una red de antenas, en parte inalámbrica.
¿Tuvo mérito el trabajo de Ramón y Cajal con el sistema nervioso?
Tan abundantes e interesantes fueron las aportaciones de Ramón y Cajal sobre la neurona, tanto en cuanto a observaciones como en cuanto a innovaciones y razonamientos, que se le considera el padre de la teoría neuronal. Sin embargo, sería interesante recordar a Ramón y Cajal por otros de sus logros también, sobre todo por algo incluso más importante que la teoría neuronal, como pueda ser el hecho de ser también el "padre" o uno de los "padres" de la histopatología, que consiste en utilizar el microscopio para el diagnóstico clínico, ya que esta novedad, este gesto de simplicidad aparente, ha servido para prolongar millones de vidas a lo largo de las décadas siguientes, por ejemplo, mediante algo tan simple como el diagnóstico precoz del carcinoma de cuello uterino, empleando un simple frotis vaginal. Resolver problemas difíciles con gestos sencillos y aparentemente simples; dar respuestas fáciles a preguntas difíciles: he ahí una manera de encauzar la vida.
¿Qué función desempeña el tejido nervioso?
El tejido nervioso procesa información, como cualquier otro sistema de computación: entra información en el sistema, la información se procesa, y sale una respuesta.
La entrada de información en el sistema se produce mediante una transducción en los órganos sensoriales. Una transducción es la transformación de un tipo de energía en otro. En el caso del sistema nervioso, por ejemplo, en la retina del ojo, la energía lumínica es transducida en forma de energía bioeléctrica. El sistema nervioso da respuestas en forma de integración de comportamientos (las respuestas motoras complejas integradas en el sistema nervioso se van a denominar aquí comportamientos, en vez de conductas, siguiendo el consejo que recibí personalmente de mi amigo A. J. Osuna Mascaró, autor del libro El error del pavo inglés, ya que el término conducta retrotrae al conductismo, que es otra cosa).
Los comportamientos así integrados están caracterizados por su rapidez relativa, gracias a la rápida secreción neuronal a corta distancia en las sinapsis y a la rápida conducción de impulsos bioeléctricos a larga distancia a lo largo de las neuritas. La rápida transmisión de una neurona a otra en los puntos de contacto entre ellas (sinapsis) se produce mediante la citada secreción neurohormonal (neurotransmisores), de efecto rápido al ser de acción local en la sinapsis, no a distancia vía sanguínea, como ocurre con el sistema hormonal. ¿Qué es la computación? Un símbolo es una forma organizada con la que se establece un código. El tratamiento de símbolos es la computación, y computar es pensar. La computación tiene como aplicación la solución de problemas, y para éso sirve el cerebro, para resolver problemas, gracias a su capacidad de previsión (de computar supuestos) y de ejecución (de escoger, antes o después, un supuesto para cada caso práctico).
¿Qué es la mielina?
La mielina es una molécula lipídica (los lípidos son las grasas y los aceites, moléculas que se caracterizan por ser insolubles en agua o hidrofóbicas, y por formar sustancias untuosas que tienden a estar en estado líquido a temperatura ambiente en el caso de los aceites y en estado sólido en el caso de las grasas).
La mielina actúa como dieléctrico (aislante eléctrico), y es producida por las células de Schwann que rodean a los axones formando en el caso del sistema nervioso periférico, y por la glía en el caso del sistema nervioso central. La presencia de la mielina en el sistema nervioso tiene como consecuencia un aumento de la velocidad de conducción nerviosa (y por tanto la posibilidad de una mayor velocidad de reacción motora por parte de un ser vivo equipado con estas "armas").
¿Es el sistema nervioso un sistema de computación rápido?
El sistema nervioso es relativamente rápido. De hecho, la rapidez del sistema nervioso podría explicar su éxito en el proceso de selección natural como forma de integrar respuestas motoras rápidas como adaptación al entorno (por ejemplo, para escapar a tiempo de un depredador), pues las sucesivas adaptaciones que presenta el sistema nervioso en los animales, a lo largo de la evolución (conforme van quedando seleccionadas las sucesivas preadaptaciones), como pueda ser el relativamente moderno recubrimiento parcial de los axones de algunos nervios periféricos con mielina en forma de "capas de cebolla", han servido precisamente para acelerar la velocidad de conducción del impulso nervioso a lo largo de los axones (ya que la presencia de este aislante, la mielina, hace que el impulso se conduzca a saltos a lo largo del axón por los nodos –nodos de Ranvier- sin recubrir de mielina que van quedando a lo largo del axón, y por tanto la conducción del impulso bioeléctrico se produce a mayor velocidad), y quizá por este motivo, y otros por el estilo, haya tenido el sistema nervioso éxito evolutivo a lo largo del proceso de selección natural.
¿Qué es la sinapsis?
Las neuronas no conducen los impulsos bioeléctricos entre ellas, sino que los transmiten de unas a otras a través de las sinapsis, esos puntos de unión entre neuronas.
Las neuronas se conectan a través de axones y dendritas por las sinapsis. El término sinapsis lo acuñó Sherrington en 1.897. Las sinapsis son un tipo de unión intercelular especializada, estructuras moleculares que hacen de "puente" entre células y de las que hay varios tipos aparte de las sinapsis. Sherrington profundizó en la noción de sinapsis hacia 1.897. Sinapsis significa unión.
¿Qué dijo Ramón y Cajal sobre la sinapsis?
Ramón y Cajal demostró que las neuronas se relacionan de una en una sin tocarse, siendo su conexión morfofuncional "en contigüidad, no en continuidad".
¿Qué aporía surge a partir de la teoría neuronal de Ramón y Cajal?
La sinapsis es una estructura morfofuncional contraintuitiva, es decir, contraria a la intuición acostumbrada (por ejemplo, a partir de nuestra intuición acostumbrada podemos creer que el sol gira alrededor de la tierra, al ser lo que aparentemente ocurre ante nuestros ojos un día y otro, pero estaremos equivocados; que sea la tierra la que gira alrededor del sol es contraintuitivo). Téngase en cuenta que el proceso de percepción consciente de la realidad en forma de yo consciente se experimenta como un fenómeno, en primer lugar, continuo, lo cual no parece tener que ver, a priori, con unas conexiones neuronales discontinuas en el espacio y en el tiempo. Y también es contraintuitiva, la sinapsis, al ser contraria a la natural tendencia a concebir la propia mente, el yo consciente, como algo propio de una sola mente consciente, única e individual, un solo sujeto consciente por cerebro, un solo yo consciente individual por persona, una subjetividad caracterizada por dos cosas, por ser única e individual (individual significa indivisible), un ente, el yo, a simple vista concreto e irreducible, frente a lo que revela la evidencia: el cerebro, el "dónde y el cuándo del yo", es una multiplicidad de millones de neuronas conectadas sin tocarse: el yo ni es uno, ni es individual, ni es continuo a todos los efectos (y por tanto no lo es en el fondo). ¿Tuvo precursores la teoría neuronal? Freud había intuido y predicho, según parece, la existencia de la sinapsis, y quizá fuera el primero en hacerlo, aunque no lo investigó en el laboratorio, y por tanto no presentó pruebas de su acertada predicción.
His había dado un primer fundamento a dicha teoría neuronal al observar el crecimiento de neuroblastos (células precursoras de neuronas o neuronas inmaduras), en 1.887. La teoría neuronal se oponía a la teoría reticular de Gerlach, de 1.858, la cual defendía la continuidad morfofuncional (como una red telefónica alámbrica) del sistema nervioso.
¿Cómo se descubrió la naturaleza eléctrica del funcionamiento neuronal?
Galvani se dio cuenta del carácter eléctrico de lo que las neuronas hacen hacia 1.780.
Galeno ya había intuido previamente que fuera lo que fuera lo que hicieran los nervios debería ser en doble sentido: sensitivo y motor. Du Bois Reymond desarrolló la biofísica como rama científica de la biología dedicada a investigar estos descubrimientos sobre el carácter eléctrico de lo que las neuronas hacen. El objetivo de la biofísica es medir. Du Bois Reymond descubrió, midiendo la actividad neuronal, la corriente eléctrica que las neuronas conducen a lo largo de sus prolongaciones, y encontró que lo hacen mediante potenciales eléctricos, es decir, "cambios eléctricos transitorios" (en palabras de Cardinali, recogidas en el Tratado de Fisiología humana de Tresguerres), a los que llamó potenciales de acción, hacia 1.848.
¿A qué se dedican las neuronas?
Cada neurona genera y conduce un impulso eléctrico transmisible cada vez, y a ésto es a lo que se dedica una neurona, básicamente. Dicho impulso transmisible se transmite en un solo sentido a través de un hiato sin retorno: la sinapsis, que actúa como si fuera una válvula en un solo sentido (gracias a que los neurotransmisores sólo se sueltan desde uno de los dos polos de cada sinapsis), lo cual obliga, a escala microscópica, a escala celular, a que se establezca un orden en el funcionamiento del sistema, en oposición al caos que tiende a dominarlo todo, al menos, transitoriamente, y a ciertos efectos en determinada escala con un error despreciable en la práctica.
¿Qué interés podría tener la descarga bioeléctrica de una neurona?
Una descarga es como una unidad de procesamiento por unidad de tiempo, y, por tanto, una medida del cambio en el sistema de procesamiento. Y como se trata un proceso, dicha medida del cambio es un proceso de medición.
Y como dichas descargas internas o señales internas son moduladas desde la periferia, desde los órganos de los sentidos, esas descargas podrían llegar a ser una medida de lo que los sentidos detectan, y, por tanto, una medida de la propia realidad que se detecta, es decir, información sobre la realidad que rodea al individuo consciente. De manera que el fenómeno de la percepción consciente de la realidad, explicado por la actividad neuronal correlativa, podría no ser otra cosa que un proceso de medición peculiar, una medición de la realidad.
¿Es la conducción del impulso bioeléctrico lo mismo que su transmisión?
Si dicho impulso bioeléctrico generado por la descarga de la neurona, el potencial de acción, ha llegado a suponer, por presión del proceso de selección natural a lo largo de la evolución, algo así como un dato informático, algo así como el pitido de una especie de "código Morse interno", utilizado por el encéfalo en su intrincada red neural, en consecuencia una pregunta lógica sería ésta: ¿cómo se transmite dicho impulso de neurona a neurona, si con el microscopio se ve que están separadas justo por donde se han de transmitir una a otra dicha unidad informática? No hay que confundir, por tanto, conducción con transmisión, la conducción ocurre a lo largo de la membrana de la neurona por movimiento de iones a un lado y otro de la membrana, la transmisión ocurre de una neurona a otra a través de la sinapsis. ¿Cómo se salva el espacio de la hendidura sináptica? Desde la época de Du Bois Reymond se le daba vueltas a la hipótesis según la cual el impulso nervioso sería transmitido de una neurona a otra en la sinapsis mediante un mediador químico, es decir, que el impulso, al llegar a la sinapsis, desencadenaría la secreción de una sustancia química, de alguna molécula orgánica que viajaría a través de la hendidura sináptica hacia la siguiente neurona, desencadenando en la siguiente la generación de otro potencial de acción al alterar el flujo iónico transmembrana en esa otra neurona, potencial que sería conducido a su vez hacia la siguiente sinapsis con una tercera neurona, y así sucesivamente.
Las primeras explicaciones convincentes sobre estas ideas las dio Vulpain, hacia 1.866, continuando una serie de investigaciones comenzadas por Claude Bernard hacia 1.857.
A las sustancias químicas que saltan en las sinapsis se las llamó neurotransmisores, y hoy en día ya se han identificado docenas. Fue Elliot, en 1.904, entre otros, quien empezó a dejar claro que los neurotransmisores eran los encargados de la transmisión de las señales a través de las sinapsis.
¿Cuántas sinapsis hay en el cerebro?
Cada neurona puede establecer unas 10.000 sinapsis aproximadamente con las que la rodean, lo cual quiere decir que en el cerebro puede haber, a lo mejor, 300.000.000.000.000 (trescientos billones, o sea, trescientos millones de millones) de sinapsis, trescientos billones de puntos en los que la transmisión sináptica es posible en un instante dado, quedando establecido dicho instante en el que se produce cada transmisión en la escala de las milésimas de segundo (una escala que es microscópica y que es la escala en la que se ajustan los aparatos de medida con los que se miden dichos potenciales bioeléctricos en función del tiempo). En una sinapsis se pueden producir cada segundo unas 50 descargas (50 hertzios, o Hz, o ciclos/segundo), lo cual quiere decir que entra dentro de lo posible que se produzcan 15.000.000.000.000.000 (quince mil billones) de transmisiones de potenciales de acción por segundo en las sinapsis del cerebro.
Ésto no es así de simple en la práctica, pero esta simplificación sirve para hacerse una idea de las magnitudes que alcanza el cerebro en lo que a información se refiere, pues de lo que se está hablando, al hacer referencia a la sinapsis, es del lugar donde supuestamente se codifica esa información mental, pues este procesamiento, este cambio en la estructura morfofuncional del cerebro, este cambio en la forma de la materia del cerebro, esta información, parece ser que es lo que constituye el proceso del pensamiento, que es el tipo de proceso que tiene lugar en este sistema, el cerebro, en particular. ¿Cuál es la velocidad del pensamiento? Helmholtz midió de forma fehaciente la velocidad de conducción de los potenciales de acción a lo largo de los nervios (un nervio es un cordón formado por axones o dendritas, es decir, el axón es una estructura microscópica, y el nervio una estructura macroscópica).
La velocidad de conducción nerviosa, y por ende la posible velocidad del pensamiento, se mide en la escala de los metros por segundo, según observó Helmholtz. Ésto es contraintuitivo, pues el pensamiento parece que surge de manera instantánea a simple vista, y así, por su instantaneidad, no nos parece un fenómeno físico, o al menos no un fenómeno físico clásico, y mucho menos basado en neuronas. Por otro lado, que las neuronas sean efectivas como fenómeno medible en el rango de las milésimas de segundo a escala microscópica también podría parecer a priori incompatible con un pensamiento encuadrado en las décimas de segundo a escala macroscópica, que es el límite aproximado para la capacidad de discriminación del tiempo a simple vista (uno puede contar hasta diez en un segundo como mucho, pero no en una centésima de segundo, y menos aun en una milésima, o hasta mil en un segundo, por la falta de resolución o definición o nitidez a escala macroscópica, desde donde no se puede percibir el tiempo en milésimas de segundo).
¿Qué es la transducción física?
Los ojos, por ejemplo, hacen algo así como transducir energía lumínica, fotones que llegan a la retina, en energía bioeléctrica, potenciales de acción descargados a lo largo del nervio óptico en respuesta al estímulo que suponen esos fotones. Transducir es transformar un tipo de energía en otro. Por ejemplo, un teléfono por cable transduce energía mecánica, el sonido, en energía eléctrica, la que va por el cable hacia otro teléfono.
¿Cómo consigue un mismo cerebro detectar mentalmente en el entorno formas de energía distintas?
El cerebro aprovecha, por ejemplo, tanto la luz como el sonido, formas de energía distintas, en su beneficio, para la transducción de ambos tipos de energía en un mismo tipo de energía, la bioeléctrica.
La electricidad, generada, conducida y transmitida por las neuronas, es bioelectricidad, y se mide en la escala de los microvoltios, que son millonésimas de voltio.
La transducción de dos formas de energía distintas en un mismo tipo de energía, la bioeléctrica, compatibiliza tipos de energía distintos en lo que al procesamiento de dicha información mental se refiere. De modo que la transducción es una parte importante del conjunto de circunstancias que hacen posible la abstracción de información sobre parte de la realidad, su computación, y que la mente sea posible, en definitiva.
¿Qué es la transducción psíquica?
La palabra transducción tiene otra acepción aparte de la de trasducción física, y es la de transducción psíquica. Una orden motora que va del cerebro a los músculos consiste en trenes de impulsos bioeléctricos conducidos a lo largo de nervios motores o eferentes, es decir, centrífugos, conduciendo en el sentido que va desde el cerebro hacia la periferia del cuerpo, hacia los órganos efectores, por ejemplo, los músculos. Dichos potenciales de acción provenían, antes de llegar al cerebro, de nervios sensitivos o aferentes, cuyos impulsos centrípetos fueron asociados e integrados por el camino y siguieron su curso por nervios motores, de modo que los impulsos pasaron de aferentes a eferentes, de entrantes en el sistema a salientes del sistema. Ese paso de la información en sentido aferente- eferente se conoce como transducción psíquica, y, más específicamente, como transducción psicosomática.
¿Qué determina la diferencia entre aferente y eferente?
La diferencia entre aferente y eferente, entre sensitivo y motor, depende de la dirección y sentido de los impulsos, no de su contenido, que sigue siendo información, o dicho de otro modo, una medida de la inversa del aumento de la entropía o desorden en el sistema, tanto en sentido aferente como en el eferente, que es un mismo sentido en ambos casos, sentido ortodrómico. Ortodrómico quiere decir, anterógrado, conducción de dendritas hacia axón en dirección a la sinapsis en la práctica, no al revés. Lo contrario de ortodrómico es antidrómico. El sentido ortodrómico de la conducción nerviosa a lo largo de los circuitos de neuronas queda establecido gracias a que la transimisión sináptica se produce en un solo sentido y empieza en cada neurona en un polo de ésta, porque la conducción por la superficie de cada neurona se produce en todos los sentidos desde el punto de descarga. Es por tanto la transmisión en la sinapsis la que establece un orden (un sentido) en la conducción a lo largo de los circuitos.
¿Qué es la causalidad emergente?
El planteamiento de la transducción psíquica como algo que ocurre en sentido ascendente o descendente, de la neurona a la idea, o de la idea a la neurona, no deja de ser una interpretación de la mente basada en la idea de causalidad.
Por un lado se tiene la causalidad emergente, en sentido ascendente, propugnada, por ejemplo, por Mario Bunge.
Por otro lado se tiene la causalidad descendente, que conlleva la idea paradójica de acuerdo con la cual el yo, que podría parecer un mero epifenómeno, sin embargo es capaz, siendo un fenómeno sólo macroscópico (macroscópico y confinado en esa escala macroscópica), de influir retroactivamente en el propio sistema microscópico del que depende fundamentalmente su efectividad. Por ejemplo, se pueden alterar las moléculas del cerebro fabricando fármacos, utilizando el pensamiento subjetivo para ello. Lo que ésto indicaría es que un objeto emergente a escala macroscópica, como el yo, por ejemplo, lo que se pergeña subjetivamente a escala macroscópica, no pertenece a otra realidad, precisamente, sino que es la misma realidad desde otro punto de vista, es decir, desde otra escala. El yo consciente posiblemente tenga que ver con la transducción psíquica, de tal manera que cuando tiene lugar la percepción subjetiva, ésta ocurre a escala macroscópica confinada, lo cual debería tener que ver con la concurrencia temporal de la actividad neuronal correlativa, activándose a la vez para integrarse como un todo a ciertos efectos. Mediante dicha efectividad a escala macroscópica las partes microscópicas, por falta de resolución del sistema de medición, son imperceptibles en la escala macroscópica, y sólo forma parte de la percepción el todo como tal, tal como sea patente a escala macroscópica, un todo integrado (e integral) que por la falta de resolución emergerá no con el aspecto de una multiplicidad de partes (neuronas, sensaciones, u otras partes, según el nivel), sino en forma de un todo que es una forma "borrosa" o "mal enfocada" de esas partes, por ejemplo, la rojez, o el yo. ¿Qué es la medicina psicosomática? La transducción psíquica es el fundamento de la medicina psicosomática, la que tiene en cuenta la influencia de la mente en el cuerpo. Todo acto médico es por tanto un acto de medicina psicosomática también. Por ejemplo, si se entra en un estado mental de gran ansiedad se pueden provocar alteraciones en los órganos. La razón es que los órganos están inervados desde el cerebro, desde donde les llegan axones que se conectan con ellos, de modo que un estado de nerviosismo extremo puede provocar arritmias cardíacas, o una úlcera intestinal, a través de la activación de la inervación vegetativa (axones) que va del cerebro al corazón, o al intestino, por poner dos ejemplos.
Por tanto, denominar psíquica a una transducción no es más que una forma peculiar de hacer referencia a un fenómeno que es físico.
¿Cuántos tipos de neuronas hay?
Hay varias clasificaciones de las neuronas, atendiendo a sus formas, o a sus especificidades moleculares, o en función de otras consideraciones. Por este motivo, se conocen diversos tipos de neuronas, según las distintas clasificaciones. Pero las diferencias entre los tipos de neuronas en los que se han clasificado no son tantas como para obviar que todas hacen más o menos lo mismo: generar, conducir y transmitir potenciales de acción, y en general de manera modulada por otras neuronas (aunque no todo es modulación, por ejemplo: parece ser que la serotonina es un neurotransmisor tanto fásico como neuromodulador, y puede actuar a ambos lados de la sinapsis, y algunas neuronas serotoninérgicas podrían estar respondiendo al estímulo de otros neurotransmisores, además de la serotonina, y ésto referido sólo para el caso de la serotonina; así que, aunque aquí se está planteando el asunto del cerebro de un modo simplificado, no hay que perder de vista su complejidad).
¿Explican las diferencias entre los diversos tipos de neuronas su versatilidad funcional?
No son tantas las diferencias entre los distintos tipos de neuronas como para explicar la versatilidad informática del cerebro. Ramón y Cajal escribió al respecto ya en 1.899: "El tamaño y disposición de las células nerviosas, así como el de sus expansiones, no parece referirse de un modo evidente a determinada modalidad funcional…". Dicho de otro modo y con un ejemplo: las neuronas conectadas con el oído no oyen sonidos porque estén especializadas en la audición, sino por estar conectadas con el oído, y es debido a que el oído es sensible de modo específico a los sonidos, no a otro tipo de modalidad sensorial.
Los sonidos se perciben como sonidos de modo distinto, y la luz como luz, en primer lugar, por las diferentes condiciones iniciales para este proceso, pues los receptores sensoriales para la luz y el sonido son distintos, poseen cada uno una sensibilidad y una especificidad distintas para ese tipo de estímulos (dicho de otro modo: los oídos no responden al estímulo de la luz y los ojos no responden al sonido, no son capaces, pero sí al revés, por éso las neuronas conectadas con el oído sirven para oír y las conectadas con los ojos para ver). ¿Se codifican de modo distinto las modalidades sensoriales distintas? Es lógico suponer que ha de influir todavía más en esta distinción entre las sensaciones luminosa y sonora, aparte de que los receptores sensoriales sean distintos, que además sean distintos los códigos espaciotemporales neuronales correspondientes a luz y sonido que se formen en el circuito de entrada al cerebro con la transducción en los receptores. Dicho de otro modo: los trenes de potenciales de acción que viajan por cada nervio, óptico y auditivo, deberían ser distintos también, y no sólo distintos espacialmente, por el hecho de ir cada uno por una vía espacialmente distinta y con conexiones a sitios distintos, sino también distintos temporalmente, pues debería consistir cada descarga en un patrón de descarga distinto.
El patrón de descarga de los conos de la retina debería ser distinto al de las células sensoriales del oído, dado que son células distintas. Y ésto también influiría en que la sensación de luz y sonido no sean iguales, y se puedan percibir como distintas por ello también. ¿Cómo habrían llegado a ser distintos los códigos para cada modalidad sensorial? Esta supuesta distinción entre los patrones espaciotemporales de descarga neuronal originados, por ejemplo, en la retina (células sensoriales del ojo), camino del nervio óptico, o en la cóclea (células sensoriales del oído), camino del nervio auditivo, habría sido posible, tal vez, por evolución filogenética y ontogenética en este sentido. La filogenia consiste en los cambios entre padres e hijos, y la ontogenia consiste en los cambios en un mismo ser vivo a lo largo de su desarrollo. Estos cambios se deben posiblemente, a su vez, a la aparición de preadaptaciones, cambios orgánicos en la descendencia que empiezan a ser sometidos en los descendientes a la presión selectiva de la lucha por la adaptación y la supervivencia, para, tal vez, lograr convertirse en adaptaciones al cabo de las generaciones.
De modo que si una preadaptación se acompaña de la supervivencia de su poseedor y éste se reproduce y transmite a su descendencia dicha preadaptación, la preadaptación puede terminar convirtiéndose en una adaptación, como pueda ser, por ejemplo, la aparición de los dientes en la boca, que habrán terminado en su momento por servir para masticar, o las plumas en los dinosaurios, que finalmente habrán servido como forma de adaptación al vuelo de las aves, etc. El hecho es que las células de la retina son distintas a las células de la cóclea.
¿Podrían los códigos ser preadaptaciones?
El patrón de descarga a lo largo de una vía nerviosa también se podría considerar una adaptación, pues es algo distinto a lo demás en un organismo sometido a presión selectiva.
Una preadaptación podría haber sido que dichos códigos, por ejemplo, el patrón de descarga de trenes de potenciales de acción por el circuito procedente del ojo y el patrón de descarga a partir del oído, fuesen distintos. Quizá dichas preadaptaciones se hayan visto favorecidas por selección natural por su conveniencia evolutiva, y no es perogrullada, ya que de lo contrario, si la sucesión de hechos no hubiera seguido su curso peculiar a lo largo de millones de años, tal vez no habría surgido la subjetividad al cabo del tiempo.
¿Por qué se producirían preadaptaciones en el sistema nervioso?
El que aparezcan estos cambios con el carácter de preadaptaciones no tendría mucho de particular, ya que a lo que tienden de modo natural los sistemas a lo largo de su evolución, evolución filogenética incluida, es hacia el aumento de la complejidad de los sistemas físicos, sistema nervioso incluido, y el que el patrón de descarga en la vía visual y la auditiva fuesen distintos únicamente sería un reflejo de este aumento de complejidad en un sistema nervioso cada vez más complejo a lo largo de su evolución filogenética, como se observa en general comparando los sistemas nerviosos de animales más antiguos con los de animales más modernos. Además, como la modulación desde los órganos de los sentidos, retina, cóclea, etc., que están formados por neuronas modificadas, posiblemente influirá en el patrón de dichos trenes de descarga por la vía sensorial correspondiente, y como dichos órganos de los sentidos ya son distintos de hecho, pues más a favor de que los patrones de descarga por la vía visual sean distintos a los patrones de descarga por la vía auditiva, por ejemplo, y que por todo ello haya heterogeneidad sensitiva (heterogeneidad que se antoja imprescindible para tener conciencia de algo, ya que la realidad que nos rodea, de la que ser conscientes, es heterogénea).
¿Por qué sería importante la heterogeneidad de las sensaciones?
Esta supuesta heterogeneidad entre los patrones de descarga de los diversos circuitos de entrada en el cerebro parece importante, ya que la percepción de la realidad debería basarse precisamente en la percepción heterogénea de una realidad que es heterogénea, por lo que si el sistema de codificación de la realidad es lo suficientemente complejo como para ser lo suficientemente heterogéneo, más posibilidades tendrá de lograr algo fundamental para la computación consciente de la realidad, aparte de la heterogeneidad en sí: que la mente sea una representación o un reflejo de la realidad a escala, es decir, el isomorfismo con esa realidad (digresión al margen: ésta podría ser también la explicación de por qué las matemáticas reflejan la realidad: porque hay suficiente complejidad como para que ocurra el hecho).
Si la heterogeneidad del cerebro fuese tanta como para lograr ese isomorfismo, y el cerebro es precisamente un sistema conocido por su complejidad, y a la vez con capacidad para la organización (el orden), dicho isomorfismo podría ser algo a su alcance, y más posibilidades habría de interpretar de la forma más congruente posible, y a escala, la heterogénea realidad (es decir, de percibir que algo cae si cae, por ejemplo). ¿Es importante la codificación? Sin codificación no parece imaginable de qué modo un estímulo podría abstraerse para formar parte de la percepción con carácter abstracto (representativo), pues alguna forma (algún código) se supone que ha de tener dicho estímulo en el cerebro para que a partir de dicha abstracción tenga lugar la percepción del estímulo (su interpretación), es decir, para que tenga lugar, por ejemplo, un proceso de integración de una respuesta motora (un comportamiento) que sea coherente (en el sentido de congruente, o no contradictorio) con el significado de dicho estímulo en el contexto en el que el significado de dicho estímulo sea importante (por ejemplo, el contexto del proceso de selección natural, un contexto cuyo significado tiene sentido a simple vista, a escala macroscópica confinada, una escala en la que tienen sentido cosas como percibir que algo cae si cae; es decir, las neuronas son microscópicas, pero, el significado de lo que ocurre, no; un significado puede ser, por ejemplo: un ciervo huye de un lobo).
La señal transducida que entra en la vía sensorial parece obvio que debe ir codificada (al tener en cuenta cómo funciona el sistema nervioso), con lo cual la transmisión de esta información deberá ser suficientemente sensible, específica, estable e isomórfica como para que se consiga esa congruencia a escala.
La interpretación adecuada y congruente (congruente en determinada escala) de dicha abstracción sobre el objeto del que procede el estímulo parece necesaria, por conveniencia evolutiva (es de suponer que habrá surgido como preadaptación, por ejemplo, que haya una sensación de rojo que por conveniencia evolutiva haya terminado correspondiendo a lo que sea de color rojo y también a la rojez, y no digamos interpretaciones más útiles para la supervivencia, como distinguir lo que es comida de lo que no es comida, etc.).
¿Es el estímulo lo mismo que el objeto externo percibido?
El estímulo no es el objeto externo que se tiene que percibir, por ejemplo, un fotón que llega a la retina no es la manzana de la que procede, sino energía aprovechable como información sobre esa manzana.
¿Cuántos estímulos se procesan cada instante?
El cerebro procesa (asocia e integra) en cada instante información procedente de millones de estímulos diferentes, por ejemplo, millones de fotones, aunque a simple vista parezcan menos al quedar "empaquetados" (sumados, integrados) en una sola imagen única integrada. Ya sólo cada nervio óptico contiene un millón de axones.
¿Cómo consigue ser eficaz el sistema nervioso a partir de tantos estímulos?
La manera de lograr eficacia motora en un sistema tan complejo, con tanta multiplicidad de partes, consiste entre otras cosas en integrar (unir, sumar) toda esa información en paquetes de información, integrándolos en conjuntos que sean efectivos como un todo a ciertos efectos. Ésto supone una pérdida de resolución del sistema, se pierde la capacidad para distinguir las partes microscópicas en detalle, pero a cambio de una necesaria eficacia motora que siga siendo congruente a escala macroscópica. Por conveniencia evolutiva, la pérdida de resolución tiene que compensarse con la eficacia motora, si el sistema es suficientemente complejo como para soportar una evolución en este sentido, y en la práctica así está ocurriendo, porque lo que conviene es huir del tigre, no contar fotones.
¿Qué tendrían que ver la codificación y la selección natural?
La detección del fotón por la retina, y su (presumible) categorización en forma de código específico desde el punto de vista espaciotemporal, hace posible que la información procesada por el cerebro concierna al estímulo, y que por tanto el comportamiento consecuente integrado pueda ser compatible con la realidad a escala, y que también la interpretación subjetiva de la misma pueda ser compatible con la realidad. Por ejemplo, si un objeto cae, no sólo tenderá a verse que cae, también tenderá a percibirse que cae, lo cual poseerá conveniencia evolutiva y posiblemente estará sometido al proceso de selección natural por ello.
¿Qué es un código espacial?
La codificación espacial debe de consistir básicamente en algo así como: dónde está el código y con qué forma espacial, de dónde está viniendo y a dónde está yendo, algo que tiene que ver con lo que se conoce como cartografía cerebral.
¿Qué es un código temporal?
La codificación temporal debe de consistir básicamente en algo así como: cuándo y con qué forma o patrón temporal se distribuyen los potenciales de acción, es decir, con qué distribución de los potenciales de acción y con qué espacios entre ellos a lo largo de la dimensión del tiempo. En el cerebro la codificación probablemente sea espaciotemporal de manera indisoluble.
¿Es necesaria la descodificación para la percepción?
La percepción no debería implicar necesariamente la descodificación de la información mental, pues, mientras la percepción es subjetiva, en el cerebro sigue habiendo lo mismo que antes: neuronas transmitiendo información codificada abstracta, transmitiendo potenciales de acción en forma de códigos representativos e isomórficos. Por tanto, probablemente no haya descodificación de la información en el cerebro durante el proceso del pensamiento subjetivo, a diferencia de lo que ocurre con los ordenadores, que precisan de la descodificación para funcionar.
¿Cómo se organiza la información sensorial en la corteza cerebral?
Diversos investigadores han descubierto que existe una organización columnar de las neuronas en la corteza cerebral, dispuestas en columnas verticales, perpendiculares a la superficie de la corteza sensorial, la visual, por ejemplo. La corteza visual está en la parte posterior del cerebro, o corteza occipital. Se conocen diversos y complejos detalles acerca de la peculiar manera de organizarse las neuronas en este aspecto en particular. Uno de los investigadores de esta organización modular de la corteza ha sido Lorente de No. Una de las conclusiones más interesantes es que la organización de la distribución de la información sensorial en la corteza, la procedente de los órganos de los sentidos, para su procesamiento, en parte es innata y en parte adquirida.
Ésto no choca con la intuición previa de cualquiera al respecto, por ejemplo: para cualquier pediatra es obvio que un bebé recién nacido nace sabiendo parpadear para proteger el ojo cuando se le acerca algo a la cara. ¿Cuál es el papel del tálamo en el proceso sensorial? En lo tocante a la adquisición de una organización espaciotemporal del procesamiento de la información sensorial, ha sido importante descubrir el papel crucial del tálamo como responsable de distribuir dicha información. La información hace relevo en el tálamo antes de dirigirse al lugar de la corteza adecuado y en el momento adecuado, mediante los axones que salen del tálamo hacia diversos lugares de la corteza, estableciendo un patrón regular en la corteza. De hecho, la corteza da la impresión de ser una expansión del tálamo, como si éste fuese una pequeña corteza dentro de la relativamente grande corteza humana. En animales con un cerebro menos evolucionado que el del hombre, y menos complejo, sin corteza (o apenas), y sólo con tálamo en el polo telencefálico, el tálamo es, por decirlo de algún modo, el órgano encargado de ejercer de corteza cerebral.
¿Cuándo se forma la corteza cerebral?
La corteza empieza a formarse en el ser humano a partir de la octava semana de vida embrionaria, por la llegada de oleadas sucesivas de neuroblastos (células precursoras de neuronas), generados por el neuroepitelio embrionario, que emigran hacia los hemisferios para ir formando la corteza ya desde esa temprana etapa de la vida del ser humano.
¿Qué es la telencefalización?
En animales que desde el punto de vista filogenético ya desarrollan corteza cerebral por encima del tálamo, es la corteza cerebral la que va asumiendo progresivamente algunas funciones del tálamo, y las neuronas que quedan "tapadas" por debajo de la corteza cerebral van asumiendo, conforme se les superponen otras estructuras más evolucionadas, funciones que corresponderían a las que estaban a su vez por debajo de ellas. La corteza toma el control enviando impulsos hacia el tálamo y las demás estructuras con las que se conecta mediante los correspondientes axones.
Todo este proceso se conoce como telencefalización. En el ser humano, como tiene corteza, la corteza ejerce funciones que en animales sin corteza ejercen estructuras subcorticales (por ejemplo, en animales sin neocórtex asume esas funciones el nidopallium, como explica Antonio J. Osuna Mascaró en su libro El error del pavo inglés, p. 211-12, al referirse al comportamiento de cierta especie de cuervos). La corteza cerebral es como una expansión del tálamo, por lo que sigue conectada al tálamo de modo preciso en sentido ascendente, lo cual ha hecho posible que el tálamo actúe también a modo de organizador de la corteza, al haber impulsos que van, necesariamente, del tálamo a la corteza. Por tanto, en el sistema nervioso hay diversos circuitos retroactivos, de ida y vuelta, en "bucle".
¿Es la distribución somatotópica de la corteza un ejemplo de telencefalización?
La distribución somatotópica de la información sensorial por la corteza no está establecida así porque el tálamo lo haya decidido, sino porque, aunque se le ha colocado encima la corteza, el tálamo no ha desaparecido, ni ha dejado de funcionar, ni se ha desconectado de la corteza, sino que se han añadido conexiones nuevas sin que desapareciesen las viejas, y surgen funciones modernas (como pueda ser el pensar racionalmente) sin que desaparezcan las primitivas (como pueda ser el pensar irracionalmente) que a su vez pasan a ser modernas también al no desaparecer. La distribución somatotópica consiste en que la información sensorial de cada parte del cuerpo se dirige a una parte de la corteza en particular, como si dicha distribución dibujase un homúnculo (hombrecillo) en la corteza, que se conoce como homúnculo de Penfield.
¿Hay distribución somatotópica en el tálamo también?
El tálamo está a medio camino entre la mayoría de los órganos de los sentidos y la corteza, e insertado somatotópicamente en este entramado de vías neurales, de ahí que se pueda organizar de ese modo la distribución de información sensorial por la corteza también.
En el tálamo también se dibuja un homúnculo. A cada zona del tálamo le corresponde una zona precisa del cuerpo, de modo que sobre el tálamo el cuerpo está representado como en un mapa geográfico, o topográfico, no de cualquier manera. La razón para que ésto sea así es fácil de intuir: si un axón va desde un punto de la piel hacia el tálamo, y se conecta tras los relevos pertinentes con una zona precisa del tálamo, pues se conectará precisamente con esa zona, no con otra, de ahí que esa zona adquiera carácter somatotópico. Hay distribución somatotópica también en otras partes del encéfalo, por ejemplo, en la corteza motora, en el cerebelo, en la retina (bueno, como me ha pedido que aclare mi amigo Manuel Fernández Bocos, autor del libro El misterio de la creación, en la retina no se dibuja un homúnculo, pero hay ya una distribución retinotópica de la información), etc. ¿En qué consiste el procesamiento de la información mental en el cerebro? En la corteza la información sensorial es procesada hasta llegarse a la interpretación (percepción) de la misma (por ejemplo, información sensorial sobre el color de algo, su forma, su brillo, su movimiento, etc., que está siendo procesada en el cerebro por diversas vías, termina dando lugar, al integrarse dicha información en un todo, en una sola red neural, a la percepción de algo en concreto, como pueda ser una bola de billar roja).
El procesamiento de la información en el sistema nervioso, el proceso mental, consiste posiblemente en la asociación y la integración de dicha información mental, consiste en la asociación e integración, en definitiva, de objetos mentales, por ejemplo: la asociación de la información sobre brillo, forma, etc. de un objeto, y su integración para que tenga lugar la percepción específica de la imagen de una manzana, o, por ejemplo: la asociación específica de las letras S, O y L, y su integración, para dar lugar a la palabra SOL (obsérvese la notación empleada y la nueva mención a la propiedad de la especificidad). La información sensorial será asociada e integrada, por tanto, para dar forma, por ejemplo, a un objeto abstracto, un objeto mental, que represente, en una escala congruente, lo que el individuo esté viendo con sus ojos en ese momento, tal y cómo necesite percibirlo por conveniencia evolutiva en ese momento.
¿Para qué estaría sirviendo el procesamiento de información mental, desde el punto de vista de la evolución de las especies?
La integración de un objeto mental macroscópico, que representa de manera congruente algo macroscópico de la realidad del entorno, servirá en algún momento del proceso mental como interpretación de la realidad, lo cual quiere decir que dicho objeto abstracto representativo podrá ser utilizado para integrar un comportamiento (con tendencia a ser) convenientemente congruente con dicho objeto macroscópico externo (por ejemplo, si uno ve un tigre, tenderá a interpretar, es decir, a percibir, que es un tigre, y pondrá "pies en polvorosa"). Ésta es una de las razones por las que se considera que el objeto abstracto será una interpretación de la realidad a escala. De este modo, al percibir una manzana se podrá proceder a comérsela, por ejemplo.
¿Cómo se puede saber que la percepción está teniendo lugar?
Un comportamiento congruente será, precisamente, una manera de confirmar objetivamente, con un error más o menos despreciable, si está teniendo lugar una interpretación de (parte de) la realidad, es decir, a través de un comportamiento motor congruente se pone de manifiesto que la percepción está teniendo lugar. Y si dicho cerebro es capaz también de la subjetividad, entonces, la interpretación y consecuente percepción de la realidad se manifestará no sólo como un comportamiento consciente congruente a escala, sino también como una percepción subjetiva de la realidad, o sea, ya no sólo en forma del comportamiento consciente de un individuo, sino también de manera efectiva en la práctica en la forma de un yo consciente de la realidad objetiva que resulta patente como el ilusorio ente que aparentemente pergeña tal o cual comportamiento. Estas dos maneras de manifestarse la percepción pueden ir juntas o por separado.
¿Qué diferencia hay entre una interpretación de la realidad manifestada mediante percepción subjetiva y una interpretación manifestada mediante un comportamiento consciente?
De esa manera de manifestarse la efectividad de la percepción, la subjetividad, parece que sólo puede haber una detección objetiva de la misma: la de cada individuo, o dicho de otro modo, un individuo no puede percibir el proceso de percepción subjetiva de otro.
En cambio, dos individuos distintos sí que pueden percibir un comportamiento motor consciente, propositivo y congruente, de un tercer individuo que revela el que ese tercer individuo está llevando a cabo una percepción consciente de la realidad.
¿Es percepción y sensación lo mismo?
La percepción de la realidad en la práctica equivale a la interpretación de la información sensorial. La información sensorial al principio no es percepción, sino sensación, de hecho no se manifiesta como comportamiento visible ni como percepción subjetiva mientras no haya una interpretación de la misma a lo largo del proceso, que en el caso del cerebro requiere una asociación e integración de suficiente complejidad como para que sea posible la interpretación de lo que se ve, oye, etc., en algún momento del proceso.
¿Qué tiene de particular la percepción subjetiva, el yo o sujeto consciente?
La percepción subjetiva implica o conlleva obligatoriamente que la información sensorial objeto de la percepción constituya un todo, de algún modo, y a ciertos efectos (ya que el yo es patente como algo único e individual); en su caso, al efecto de la efectividad de la subjetividad, lógicamente.
De modo que en el caso de la subjetividad, el procesamiento implica que el objeto mental integrado debe ser efectivo en determinada escala, la escala macroscópica confinada, como un objeto integrado que posea de manera característica entidad única e indivisible (individual) a ciertos efectos en la práctica y con un error despreciable.
¿Cómo ve el ojo?
La retina es una capa de células del ojo, en su polo posterior, que son neuronas del cerebro que se han instalado en el ojo a lo largo de la evolución sin perder la conexión con el cerebro, y que han evolucionado modificándose hasta transformarse en células fotosensibles o sensibles a la luz. Los fotones de luz que entran en el ojo excitan a la retina. Los fotones son transducidos por las células de la retina, que son neuronas modificadas, en impulsos bioeléctricos. En cierto modo se puede decir que el ojo es una parte del cerebro, dado que la retina está formada por neuronas. Cuando se contempla el fondo del ojo en una consulta médica se está mirando directamente a parte del cerebro. El fondo del ojo se explora con el oftalmoscopio, artilugio inventado por Helmholtz. Los fotones desaparecen al ser absorbidos por la retina, así que lo que se procesa en la vía visual acerca de esos fotones han de ser códigos que recreen una representación que abstraiga a esos fotones, y de manera distintiva.
¿Cómo distingue el cerebro la luz de otras señales, como el sonido, si todo se transduce en señales bioeléctricas?
Las señales externas probablemente se representarán de manera distinta en los circuitos neurales, en primer lugar, al ser transducidas en receptores distintos, pues el ojo es distinto al oído, por ejemplo.
La distribución somatotópica (el código espacial), por ejemplo, la retinotópica, también ayudará, probablemente, a que dicha distinción de cada señal se conserve. En tercer lugar, los potenciales de acción procedentes de la retina que representen a los fotones (el código temporal) probablemente sean también distintos al resto de los trenes que circulan por el cerebro, de ahí que pueda en la práctica haber una representación específica de esos fotones, algo que será crucial para que a la hora de interpretar esos fotones se los perciba a ellos distintamente, no a otra cosa de manera confusa. No obstante, ha de haber numerosos límites a esta capacidad de procesar diversas señales como distintas; por ejemplo: recuérdese que no siempre es posible distinguir diferentes tipos de edulcorantes a partir de su sabor dulce. Sin embargo, el margen de error para la percepción es suficiente como para percibir la multicolor realidad con un grado suficiente de complejidad tal que resulte útil para apañárselas a la hora de interpretarla de manera eficaz y conveniente a escala en la práctica.
¿Qué es una señal?
Una señal es un cambio en la magnitud de un parámetro físico dado a lo largo del tiempo dentro de un sistema, y que por tanto se convierte en un fenómeno detectable. En una medición se busca la señal, que por tanto se distingue del ruido de fondo y de lo que se conoce como "artefactos", que son otras señales pero que no son las buscadas, se parezcan o no a las buscadas.
¿Cómo se procesa una señal en el sistema nervioso?
De manera simplificada en el sistema se identifica un emisor, la neurona A, un canal, la sinapsis, y un receptor, la neurona B de un circuito neuronal A-B dado (obsérvese la notación empleada para indicar el circuito neural). B detecta la señal de A, que se convierte en señal para B en el momento en que B responde al potencial de acción de A y no a otra magnitud física que actúe como posible señal. Esta discriminación por parte de B de la señal adecuada al receptor, la procedente de A y no otra, indica la especificidad del receptor para esa señal.
¿Es la señal transmitida en un circuito neural idéntica a la señal externa, a un fotón, por ejemplo?
La información que se transmite en una sinapsis no se identifica con el estímulo, no son idénticos, no son una misma cosa. El estímulo es una cosa, y el potencial de acción con el que se correlaciona es otra cosa, no se identifican, no coexisten en un solo ente, la respuesta no se identifica con el estímulo, sino que la respuesta identifica al estímulo, al representarlo con especificidad.
¿Es conveniente identificar al estímulo con especificidad?
La respuesta neuronal a un estímulo, al ir cuantificada y codificada, al ser isomórfica y representativa, al ser sensible y específica del estímulo, y al ser coherente (en el sentido de congruente o no contradictoria) y compatible desde cierto punto de vista (por ejemplo, compatible en cuanto a que la respuesta es verdadera a la vez que el estímulo), identifica al estímulo, da cuenta de él. Como la forma de identificarlo es estable en el sistema (el rojo se diría que se percibe como rojez una y otra vez, y el ojo de uno es aproximadamente el mismo cada vez que ocurre), en la práctica ésto es lo mismo que decir que, con un error despreciable, la respuesta identifica al estímulo tal como parece ser a cierta escala, dicho de otro modo: lo conoce tal como parece ser que es a determinada escala; por ejemplo, una pelota de fútbol se percibe que es redonda, y, si se observa su huella en la arena de la playa, también se observa que dicha huella es redonda, de modo que probablemente la pelota de fútbol se percibe redonda porque así parece ser que es a escala macroscópica confinada.
Además, desde el punto de vista evolutivo parece conveniente percibir una pelota de fútbol redonda en vez de cuadrada a simple vista, dado que es redonda, y no digamos percibir a un predador como predador. ¿Qué quiere decir que la identificación de un estímulo es específica? En general, y dentro de un margen de error aceptable en la práctica a ciertos efectos, la respuesta neural ha conseguido a lo largo de la evolución no confundir a su estímulo con otra cosa al representarlo; ésto es lo que se quiere decir con lo de que la respuesta es específica. Por ejemplo, en el caso de la retina es fácil de entender, son células fotosensibles por definición, adaptadas a responder a la luz por tanto, son células excitables pero específicas para responder ante fotones.
La célula fotosensible además no permanece impasible ante su estímulo, no puede permanecer impasible, al ser una célula excitable; ha de hacer algo al respecto si le llegan fotones, al ser excitable y responder específicamente ante la llegada de fotones (de modo que además de la especificidad también es importante la sensibilidad del sistema). ¿Es importante la estabilidad? No sólo hay visión porque la retina responda a los fotones, también hay visión porque la retina sigue ahí con aspecto de retina en determinada escala durante el tiempo necesario para que el acto de ver y el resto del proceso sea efectivo en determinada escala. La materia conocida en la escala elemental conocida, la escala en la que se aplica la mecánica cuántica, parece ser que es estable en cierta medida, y sus formas macroscópicas, clásicas, también parecen serlo a ciertos efectos y con un error despreciable en la práctica. Se desconoce si hay vinculación causal entre esa estabilidad de las partículas elementales y la estabilidad de las formas macroscópicas que percibimos a simple vista, o si dicha estabilidad de lo macroscópico es otro fenómeno emergente correlativo más, o si se trata, la vinculación de ambos fenómenos, de una analogía sin sentido.
Por tanto, la estabilidad de lo macroscópico podría ser una manifestación a escala de la interacción de lo microscópico, no un efecto de la estabilidad de lo microscópico, o no (este asunto de la explicación de lo emergente todavía es algo sometido a debate entre los científicos, por ejemplo, últimamente se está investigando lo que se ha dado en llamar relatividad de escala, que tiene que ver con este tipo de problemas; por supuesto que el objetivo de estas investigaciones no será sólo, es de suponer, encontrar la explicación de esa vinculación entre lo pequeño y lo grande, sino que se trata sobre todo de saber de qué modo se logra esa similitud entre lo pequeño y lo grande, por ejemplo, que lo grande sea precisamente estable al igual que lo pequeño, o que la luna siga una órbita alrededor de la tierra de un modo parecido a cómo un electrón sigue algo así como una órbita alrededor del núcleo atómico, o que una galaxia gire en espiral como el agua que se va por el sumidero).
¿Es compatible el cambio con la estabilidad?
La interacción sistemática de las partes y el cambio en el estado morfofuncional de éstas a escala microscópica no parece ser incompatible con la estabilidad del sistema como un todo a escala macroscópica en ciertos casos. Por ejemplo: el cambio del contenido de la mente no es incompatible con la estabilidad de la propiedad de la subjetividad; dicho en sentido figurado: un sujeto consciente sigue siendo ese sujeto, sigue conservando su identidad como yo, aunque a cada instante que pase piense en una cosa distinta… y no hay por qué dar por hecho que ésto tendría que ocurrir así necesariamente, pero ocurre, así que no estaría de más una explicación.
¿Quién explicó la estabilidad de la materia?
Parece ser que fue Schrödinger el que explicó la estabilidad de la materia con su ecuación del electrón, al demostrar que la materia, por ejemplo, los electrones, tienden hacia su estado de energía mínima, de ahí entre otras cosas, parece ser, que aparentemente no se esté desintegrando toda la materia del universo en este momento, por ejemplo.
¿Tienden las neuronas a un estado de energía mínima también?
Las neuronas no son partículas elementales, pero, a su manera, y en su escala, también se diría que de algún modo recrean ese proceso de tendencia hacia un estado de mínima energía, es decir, a enfriarse todo lo que puedan oxidando su glucosa, y ésto, en cierto modo, quizá podría tener que ver, o quizá no, con la estabilidad de los circuitos durante el tiempo suficiente como para que se verifique su efectividad como sistema de computación suficientemente organizado, a pesar de la tendencia fundamental al desorden del sistema. Tenga o no relación directa la estabilidad fundamental de la materia con la estabilidad de los circuitos neurales, el caso es que la estabilidad de los circuitos neurales es importante para su efectividad como circuitos neurales. Dicho de otro modo: un sujeto no podría tener la ilusión de identidad como sujeto si no durasen esos circuitos el tiempo suficiente como para que tenga lugar dicha ilusión (y aun a sabiendas de que "en cien años todos calvos"). ¿Había intuido Ramón y Cajal la importancia de la estabilidad del cerebro a gran escala? Que la estabilidad relativa del cerebro a gran escala venga ya favorecida desde la escala microscópica lo intuyó en su momento Ramón y Cajal, anticipándose a su época. En 1.899 a Ramón y Cajal le publicaron en Valencia, en la editorial de Pascual Aguilar, un Manual de Histología normal, en el que dejó escrito lo siguiente en su página 620: "… La duración de las células nerviosas debe ser larguísima pues jamás se descubren en los centros nerviosos de los adultos señales de kariokinesis ni de destrucción celular. Quizás esta particularidad esté relacionada con la persistencia de los recuerdos y con la conservación durante toda la vida de la noción de nuestra personalidad". Está claro que Cajal posiblemente intuía, por ejemplo, cómo es que se recuerda el nombre de pila de uno durante tanto tiempo.
¿Cuántos tipos de receptores hay en la retina?
En la retina hay distintos tipos de células receptoras, o, mejor dicho, fotorreceptoras. Son neuronas modificadas. Se conocen como conos y bastones. Los conos están especializados en la visión en color, y los bastones en la visión en blanco y negro. Los bastones son más sensibles al movimiento que los conos. Los conos están especializados en la visión en detalle. Entre los conos hay también tres tipos celulares en función del tipo de color que detectan preferentemente, en función del color al que muestran mayor sensibilidad. Se puede hablar, en términos groseros, de conos rojos, verdes y azules.
La continuación de las sinapsis a partir de los conos hacia el cerebro incluye varias sinapsis de relevo, y varias neuronas por tanto. El circuito llega hasta la corteza cerebral occipital, en la parte posterior del cráneo, donde continúa el procesamiento de la información visual en el camino hacia la percepción.
¿Qué influencia en la percepción tendrá el que haya receptores distintos en la retina?
Los conos, al ser distintos, tal vez sean la puerta de entrada en el cerebro de algo así como tres tipos de información distintos, quizá al menos tres códigos neurales distintos, tres trenes de potenciales de acción con un patrón espaciotemporal distinto, uno por color. Y la clave de dicha supuesta diferencia entre esos tres posibles códigos podría estar ya en la transducción entonces (al tratarse de tres fotorreceptores distintos), en las diferencias en las condiciones iniciales del proceso sistemático subsecuente (ésto recuerda al asunto del efecto mariposa).
¿Influirá el efecto mariposa en la percepción?
La evolución de un sistema depende de las condiciones iniciales. Un cambio al inicio, por ejemplo, un código distinto para cada tipo de cono, supondrá posiblemente una influencia en la diversidad del resultado final, tal vez una percepción de cada color distintamente. Quizá ésto no sea el mismo caso que lo que se conoce como efecto mariposa, pero hay analogía con ese efecto. El sistema que procesa la información procedente de la retina, las neuronas del cerebro, son bastante iguales entre sí, gracias a lo cual pueden procesar dicha información de manera sistemática y coherente (congruente), toda ella a base de trenes de potenciales de acción formando patrones espaciotemporales. Pero las células fotorreceptoras, las condiciones iniciales, son significativamente distintas entre sí, con lo cual la información entrante podrá ser heterogénea, y así será posible que se fundamente la percepción de la heterogeneidad del entorno a partir de un sistema neural relativamente homogéneo.
¿La retina ve?
El procesamiento de la información visual, el acto de ver, empieza ya en la propia retina, lo cual quiere decir que el procesamiento de la información mental no ocurre sólo en la corteza cerebral, sino que ocurre en todo el sistema nervioso central, incluido el subcortical también. ¿Es consciente el procesamiento subcortical? Si se le está llamando a este procesamiento subcortical procesamiento de información mental, se está dando por hecho, y por tanto afirmando, que dicho acto de ver, aunque todavía no sea percepción, y por tanto no haya todavía una experiencia consciente subjetiva (un yo consciente percibiendo algo), probablemente es un acto que se puede considerar consciente aunque no subjetivo, de modo que esa información probablemente es consciente, aunque todavía no se puede considerar que lo sea para un sujeto, para un yo consciente.
Ésto tiene que ver con algo obvio: tiene que ver con el hecho de acuerdo con el cual uno no es consciente de todo lo que "se cuece" en su mente, por ejemplo, si uno pretende calcular cuál es el resultado de sumar 2+2, es evidente que el cerebro realiza el cálculo, pero que desde el punto de vista del yo el resultado, 4, surge de manera instantánea y automática sin necesidad de que el yo realice el cálculo "personalmente", aunque dicho resultado sí ha sido obtenido mentalmente, y por tanto conscientemente, aunque no de manera subjetiva. ¿Es subcortical lo mismo que subconsciente? Subcortical significa por debajo de la corteza. No hay que confundir subcortical y subconsciente.
Subconsciente se definirá en este ensayo como consciente pero no subjetivo. Como el término subconsciente de forma convencional parece querer decir no consciente, el término subconsciente resulta engañoso, por lo que aquí no se utilizará, y a la información que se considere consciente pero no subjetiva, se la denominará consciente pero no subjetiva, que parece más lógico.
¿Se procesa información mental no subjetiva en la corteza?
Es probable que las estructuras corticales procesen información subjetiva y no subjetiva a la vez, pues la subjetividad posiblemente no incluya a toda la corteza, sino a zonas cambiantes de la corteza, y de la corteza de asociación sobre todo, o exclusivamente, aunque no se sabe a ciencia cierta. Es más, se sospecha, por ejemplo, por algunos tipos de hallazgos clínicos, que podría haber una subjetividad subcortical rudimentaria también, talámica, por ejemplo, que tal vez se haga patente cuando la corteza deja de funcionar.
¿Cómo se ven los colores?
En la retina hay dos tipos de células fotorreceptoras: conos y bastones. Los conos son menos sensibles a la luz, por lo que sirven para ver de día, y los bastones más sensibles a la luz, por lo que sirven para ver de noche o con poca luz, ya que con mucha luz los bastones se saturan y no sirven para ver, en cambio con mucha luz funcionan mejor los conos, porque son menos sensibles a la luz (un defecto, un error, la menor sensibilidad de los conos frente a los bastones, se aprovecha en beneficio propio por conveniencia evolutiva).
La visión en color depende de los conos. En cada tipo de cono hay un tipo distinto de pigmento. Cada tipo de pigmento reacciona con un tipo distinto de frecuencia luminosa, fotones de frecuencia distinta; el color depende de la frecuencia. En la retina hay cuatro tipos de pigmentos, parece ser: el constituido por la molécula fundamentalmente proteica llamada rodopsina en los bastones, y otros tres tipos de pigmento en los conos. Cada pigmento presenta un pico de absorción de fotones peculiar, un máximo de absorción en determinadas frecuencias (aunque la absorción se produce en un rango de frecuencias). La rodopsina presenta un pico de absorción en los 496 nm (nanómetros), y los otros tres pigmentos en los 419 nm, 531 nm y 558 nm (estos datos han sido obtenidos por Dartnell y publicados en el Tratado de Fisiología humana de Tresguerres). Los conos se suelen llamar tradicionalmente receptores azules, verdes y rojos, aunque dichos picos de absorción correspondan al violeta, al verde-amarillo y al amarillo.
La teoría tricromática de la composición de la visión, tras el descubrimiento de los tres tipos de conos, fue propuesta por Thomas Young en 1.801 (Young también desarrolló por la misma época el concepto de energía). Dicha teoría fue después modificada por Helmholtz. Según esta teoría, los colores, las sensaciones de color, se consiguen mezclando las tres longitudes de onda citadas, variando su intensidad. Por tanto, la respuesta es transducida de manera proporcional a dicha intensidad, de modo que posiblemente se codifiquen la longitud de onda y su intensidad. ¿Cómo se codifican los colores? Quizá se trate de una codificación temporoespacial.
La codificación temporal tal vez consista en la modulación de la frecuencia de descarga de los trenes. El modulador sería el estímulo, que influiría en la modulación de la respuesta al estímulo, es decir, en cambios en la frecuencia de descarga de los fotorreceptores al llegar el estímulo (nótese que los fotorreceptores no descargan al llegar los fotones, sino que ya están descargando, y la llegada de los fotones lo que hace es alterar el patrón de descarga).
La codificación espacial tal vez consista, entre otras posibilidades, en detalles como que a mayor intensidad de luz incidente haya más neuronas implicadas en la respuesta sensitiva, mayor campo de respuesta, fenómeno conocido como reclutamiento neuronal. Este esquema básico probablemente sea más complejo (y aun más absurdo desde el punto de vista de un supuesto diseño inteligente) en la práctica, como se va descubriendo conforme se profundiza en la fisiología de la vía visual. ¿Es posible experimentar sensaciones subjetivamente? Al percibir algo subjetivamente ese algo ha sido interpretado. Por ejemplo, no se percibe el color rojo, sino que se percibe que algún objeto es rojo. De modo que es posible que no haya tal cosa como sensación subjetiva, sino que sólo sea posible la subjetividad de la percepción. Por ejemplo, en el caso de las sensaciones tal vez sólo sea posible la percepción subjetiva de una sensación si la sensación es patente en la forma de un yo que experimenta una sensación. De manera que cuando una persona afirma, por ejemplo, que nota una sensación de dolor, lo que está teniendo lugar probablemente sea la percepción de una sensación de dolor.
Así que la información sensorial de por sí probablemente no podrá ser subjetiva sino se completa el proceso de percepción, momento del proceso en el que probablemente ya sea posible la emergencia de la subjetividad. ¿Es una sensación subjetiva por ser consciente? Un análisis intuitivo prosaico sobre el fenómeno de la conciencia lleva fácilmente a concluir que la conciencia emerge en el mismo momento en que emerge la subjetividad, dado que intuitivamente lo más fácil es achacar al yo consciente, en exclusiva, la propiedad de la conciencia, y no al resto del sistema nervioso también. De ahí a concluir, siguiendo la vía fácil, esa vía según la cual es el sol el que gira alrededor de la tierra, que subjetividad y conciencia son lo mismo no hay más que un paso.
Pero puede que no sea tan fácil definir todo ésto, pues una sensación no subjetiva, por poner un ejemplo, ya podría ser considerada información consciente, pues, por ejemplo, la sensación de rojo que llega a la subjetividad y emerge de manera patente con forma de rojez debería ser lo mismo que previamente era no subjetivo: un tren de potenciales de acción correlativo, peculiar y específico (este tipo de información no subjetiva probablemente ya puede servir para integrar un comportamiento consciente al margen de la subjetividad en algunos casos). La cualidad de la rojez es algo más que se añadiría a la sensación de rojo al emerger la subjetividad de manera sobreañadida en el sistema durante la evolución del sistema en ese sentido (y complicándolo un poco más: si la rojez es patente como tal en el momento en que en la práctica lo es para el yo consciente, y no antes, y dado que el yo carece de concreción, la conclusión obvia es que el yo y la rojez son lo mismo, la rojez sería el sujeto en ese momento; ésto es algo difícil de captar a la primera, pero se seguirá incidiendo sobre esta idea a lo largo del ensayo; la idea es la siguiente: sujeto y objeto mental son una sola cosa).
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