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Los valores humanos en la actividad Física del adulto mayor (página 2)


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Encontramos en ellos el patriotismo, amistad, solidaridad, compañerismo y en menor medida la voluntad y autoestima dado porque a medida que viven más, suelen ocurrir desvinculaciones, con el trabajo, los hijos se van a vivir a otro lugar, familiares, amigos que fallecen, muchos no aceptan esta realidad, pero estas son etapas inevitables en la vida de los seres humanos. Ser adulto mayor no significa no poder aportar a la sociedad, quedar para cuidar de los nietos, deberes del hogar, simplemente sentarse a leer el periódico o tejer, significa aceptar que estamos vivos. Encontramos como las principales enfermedades: obesidad, hipertensión, artritis artrosis, reuma, enfermedades cardiovasculares, diabetes mellitus. Les gusta realizar ejercicios al aire libre y en el horario de la mañana, que se utilicen diversos juegos en las clases, realizar actividades recreativas en compañía de sus nietos, los juegos de mesa y de mayor preferencia el domino. La participación en las actividades físicas es pobre con relación a los que están inactivos. La participación de los técnicos de cultura física es inestable pues cada cierto tiempo lo cambian. Tienen conocimiento sobre la importancia de la práctica del ejercicio físico los que asisten al círculo de abuelos pues se sienten mejor, sin embargo es necesario brindar mayor información a todos en general asistan o no a realizar actividades físicas.

Acciones realizadas:

  • Charlas: El médico de la familia en conjunto con el profesor ofrece información detallada sobre la importancia de su incorporación a la sociedad y sobre todo a la actividad física. Teniendo en cuenta el resultado del chequeo a las enfermedades que padecen. Incluyendo principalmente a los abuelos que no participan en las actividades físicas.

De esta forma damos el primer paso elevando la autoestima, sociabilidad, voluntad, responsabilidad, para buscar y cultivar relaciones con las personas que le rodean y que siempre han sido parte de su vida en común, aquellas que esperan obtener de ellos sus experiencias, compartir intereses mutuos e ideas para encaminarlos hacia un fin, independientemente de las circunstancias personales de cada uno, venciendo las dificultades, los contratiempos, mejorando su estado de ánimo general.

  • Visitas: Se realizaran a todos aquellos que no están vinculados a la actividad física por una causa u otra. Es importante la preocupación del círculo de abuelos por aquellos miembros que se encuentran enfermos.

En este caso lograremos fomentar el valor de la autoestima, solidaridad, ayuda mutua, compañerismo, brindando apoyo en momentos difíciles. Si el anciano ha sufrido algún trauma que le imposibilite caminar o que tenga que permanecer en silla de ruedas, se trasladará las clases al menos una vez a su casa o se responsabilizará a alguna persona ya sea del círculo, el profesor o la enfermera que lo lleve y realice los ejercicios que pueda o al menos que participe en la actividad, pues estas personas se sienten inferiores a los demás, se les da autoridad sobre sí mismo ante sus gustos y caprichos, iniciativa para proponerse y alcanzar metas altas, carácter estable y sinceridad a toda prueba.

  • Actividades recreativas: Visitas a museos, viajes a la playa en compañía de algunos familiares, excursiones, celebración de cumpleaños colectivos, participación en tablas gimnásticas, los campismos, cine-debates y otras actividades programadas por el INDER.

Autoestima, compañerismo, camaradería, voluntad, amistad, a través de las relaciones interpersonales, compartiendo momentos de alegría y placer que les hará olvidar todos sus problemas y disminuirá el estrés ocasionado por el quehacer cotidiano.

  • Actividades Artesanales y Culturales: Planificar encuentros entre los abuelos creadores. Organizar festivales culturales.

De esta forma son capaces de perder el miedo a presentarse ante los demás, fomentando la autoestima, voluntad, perseverancia, apoyo mutuo, aprovechando su creatividad y experiencia como guía, pues su conocimiento del mundo, de la vida y de la gente es una fuente invaluable para tomar decisiones y seguir adelante.

  • Juegos pasivos: También llamados juegos de mesas, son de la preferencia de los abuelos, como el Dominó, Parchís, Damas y Ajedrez. Se pueden organizar campeonatos ínter círculos de corta y larga duración.

Amistad, compañerismo, voluntad, pues estos les hace mantener un estado de ánimo apacible y sosegado aún en las circunstancias más adversas, sin exaltarse o deprimirse, encontrando soluciones a través de una reflexión detenida y cuidadosa, sin engrandecer o minimizar los problemas.

  • La clase: Variedad en los ejercicios, juegos motivacionales, juegos calmantes y juegos que desarrollen movimientos pero que no impliquen acciones excitantes ni grandes esfuerzos.

A través de ella se combinan diferentes valores, amistad, voluntad, autoestima, compañerismo, ayuda mutua, sociabilidad, patriotismo, con la comunicación que es indispensable para procurar y mantener las buenas relaciones en todos los ámbitos de nuestra vida, particularmente en la familia, el trabajo y con las personas más cercanas a nosotros. Entender y hacerse comprender, para facilitar la convivencia y la armonía con los demás.

Hay personas que mantienen una actitud positiva ante la sociedad, sus desempeño laboral es meritorio, son estables y a través de los años cultivan valores que los hace ser ejemplo ante los demás, sin embargo cuando les llega la jubilación no se encuentran preparados para enfrentar la situación, caen en un estado depresivo y sobre todo su autoestima decae notablemente. Lo mismo ocurre cuando sufren algún trauma por determinada enfermedad, sienten miedo y se tornan torpes.

Todas estas acciones fueron encaminadas a fomentar los valores en aquellos que se encierran en si mismos y se quedan en su casa distanciados de los demás en inactividad como si su mundo se derrumbara y su interacción social no tuviese ningún significado, creen que la práctica de ejercicios físicos queda para los más jóvenes.

Una precisión importante la hace el filósofo cubano José Ramón Fabelo Corzo, quien señala:

"Valor humano es la significación esencialmente positiva que poseen los fenómenos y objetos de la realidad, no cualquier significación, sino aquella que juega un papel positivo en el desarrollo de la sociedad".

Los círculos de abuelos son actividades grupales que le permiten una vida social activa donde a través del ejercicio físico, actividades manuales, artísticas y recreativas se aspira a transformar la soledad y la falta de adaptación al proceso de envejecimiento, marginación, depresión e inactividad, pues en las actividades físicas y fuera de ellas no solo se recrean sino que también se fomentan los valores de esa personalidad que responde a diferencias individuales de su mundo psíquico ya que por ley natural de la vida el ser humano pasa por diferentes etapas de desarrollo y en correspondencia con ello se desarrollan y fomentan sus valores humanos lo cual no se realiza de forma espontánea, es el profesor en conjunto con los diferentes factores el encargado de dar participación, nuevas responsabilidades y a través de sus clases lograr la autonomía, la integración al grupo, nuevas motivaciones, incremento de autoestima y mayor seguridad de si mismo con la particularidad de que estos valores sean aceptados por el mismo anciano.

De 32 abuelos que asistían a los círculos en estos momentos contamos con 62, se realizaron actividades programadas en conjunto con los diferentes factores, se incluyó el trabajo con la familia y la comunidad, se elevó el valor de la autoestima fomentando los demás con ayuda del plan de acción, se observa una gran satisfacción y bienestar entre ellos , se sienten mejor preparados física y mentalmente para enfrentar el proceso de envejecimiento, logrando incorporar una abuelita con discapacidad visual total, y una de 89 años, se incrementó la participación del sexo masculino que era pobre, se le brindó curso de superación a los técnicos y se logró estabilidad en los mismos, pues este es un factor importante en el trabajo con los abuelos pues también influye en su estabilidad.

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CONCLUSIONES

  • El plan de acciones aplicado contribuyó a fomentar los valores humanos en la tercera edad vinculándolos a los círculos de abuelos esencialmente.

  • Se logró incorporar a 30 adultos mayores que no asistían a las actividades físicas y recreativas, mostrando gran motivación y sobre todo satisfacción emocional.

  • Fomentando y potencilizando los valores humanos en la tercera edad también elevamos su calidad de vida.

  • Se elevó además en gran medida los valores de las personas que se relacionan con los abuelos, tales como, la familia, amigos, y la comunidad en general.

 

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Autor:

Lic. Elida Balbuena Imbernón

Lic. Ana Pons Núñez.

Facultad de Cultura Física.

Las Tunas.

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