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Manual de la biblia (página 2)

Enviado por José Gómez


Partes: 1, 2

Isaías 40:8

Sécase la hierba, marchitase la flor; mas la palabra del Dios nuestro permanece para siempre.

Esta es otra escritura que nos habla de lo pasajero de las cosas materiales, como hoy están aquí y mañana ya han desaparecido; en contraste con la palabra de Dios que nunca envejece, sino que a través de las generaciones continua vigente, efectiva, y poderosa, que permanece para siempre. Esto nos da a entender, que siempre podemos confiar en ella sin temor, sabiendo que es segura.

2 pedro 1:21

Porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el espíritu santo.

Para aquellos que alegan que no creen en la biblia porque la escribieron los hombres, vean con claridad cómo fue que la biblia realmente se escribió. La biblia se escribió por la voluntad absoluta de Dios, sí, Dios usó a hombres, pero estos hombres fueron hombres santos que Dios mismo inspiró, dándoles las palabras que debían escribir, siendo movidos por el espíritu santo de Dios.

La biblia es un libro que por siglos ha permanecido porque es la palabra de Dios. Algunos en el pasado han intentado destruirla, haciendo quemas masivas de ella, pero nunca la han podido destruir, ni la podrán destruir porque Dios la protege, porque no es palabra de hombre sino palabra de Dios.

1 Tesalonicenses 2:13

Damos gracias a Dios, de que cuando recibisteis la palabra de Dios que oísteis de nosotros, la recibisteis no como palabra de hombres, sino según es verdad, la palabra de Dios.

Aquí el apóstol pablo se alegra dando gracias a Dios de que los oyentes recibieron la palabra con sencillez y fe, aceptándola como lo que es; la palabra de Dios. No es difícil aceptar la biblia como la palabra de Dios cuando hay un corazón dispuesto a hacer la voluntad de nuestro creador.

Éxodo 31:18

Y dio a Moisés, cuando acabo de hablar con él en el monte de sinaí, dos tablas del testimonio tablas de piedra escritas con el dedo de Dios.

Éxodo 32:16

Y las tablas eran obra de Dios, y la escritura era escritura de Dios grabada sobre las tablas.

Aquí tenemos dos referencias del antiguo testamento, cuando Dios mismo dio a Moisés su siervo los primeros diez mandamientos, llamados también el decálogo de la ley, en estas dos escrituras se puede observar claramente como Dios plasmó en ellas por su mismo dedo las palabras de su ley; dejando establecido por siempre que Dios fue quien nos dio su palabra inmutable. Tanto en el antiguo, como en el nuevo testamento, encontramos abundantes referencias de la biblia, como la palabra de Dios, de cómo nos llego, y como hasta aquí Dios mismo la ha preservado.

 

La importancia de la biblia

Lucas 4:4

Jesús, respondiéndole, dijo: escrito está: no solo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra de Dios.

El pan es uno de los alimentos fundamentales del ser humano desde épocas muy remotas. El pan se ha usado como nuestra alimentación diaria por generaciones; y así como el pan físico tiene la virtud de alimentar y saciar el hambre; el pan espiritual, que es la palabra de Dios tiene la virtud de alimentar nuestro hombre espiritual que solo se puede nutrir, fortalecer, y vitaminar con la palabra de Dios.

De allí la inmensa importancia del estudio y conocimiento de la biblia.

En la escritura que acabamos de leer, vemos a nuestro señor jesús en una confrontación con el mismo diablo, quien trata de tentar al señor jesús a hacer cosas que no son correctas, y el señor jesucristo lo encara afirmando que lo mas importante en la vida es obedecer la palabra de Dios, aun sobre nuestras necesidades físicas, y que el pan espiritual de la palabra de Dios es sobre el pan físico que perece. Aquí podemos aprender; que el diablo hará todo lo posible por alejarnos de la biblia.

Porque el diablo sabe que un pueblo que no conoce lo que dice la biblia, es un pueblo fácil de engañar. La biblia misma nos enseña que el engaño será uno de los grandes problemas de los últimos días. Preparémonos para ser una generación de reparadores y restauradores de muros espirituales del siglo veintiuno. Aprendamos y enseñemos lo que dice la biblia.

Efesios 6:17

Y tomad el yelmo de la salvación, y la espada del espíritu, que es la palabra de Dios.

Todo cristiano debe saber que estamos en un conflicto espiritual con el reino de las tinieblas. Este conflicto, o guerra espiritual está basado en las trampas y el engaño que el diablo usa para tratar de destruir la vida de todos aquellos que somos hijos de Dios. Al diablo se le conoce como el engañador, el padre de mentiras, etc. Esto significa que el diablo usará todos sus argumentos, y razonamientos de error para tratar de hacernos caer en sus trampas. Por eso no debemos confiarnos, ni apoyarnos en nuestra propia sabiduría o entendimiento de las cosas; sino en la poderosa inalterable, y gloriosa palabra de Dios.

Pablo nos enseña en efesios, que la biblia es una espada espiritual, eso significa que la biblia es un elemento de defensiva y de ofensiva. Dicho de otra manera, la biblia es la verdad que derriba, destruye, y acaba por completo con todos los argumentos y mentiras que el diablo usa para engañarnos, o desanimarnos.

Por ejemplo: el diablo puede argumentar que Dios no nos ama; pero la biblia dice en: juan 3:16 porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su hijo unigénito. Así que la verdad de Dios derriba la mentira del diablo de que Dios no nos ama.

Este es solo un ejemplo de las diversas formas como podemos protegernos y defendernos de las artimañas de error de nuestro enemigo el diablo, el padre de mentira.

Salmos 119: 105

Lámpara es a mis pies tu palabra, y lumbrera a mi camino.

La vida del hombre está rodeada por caminos de error; por filosofías, conceptos, e ideas destructivas. Es muy fácil desviarse por estos laberintos de confusión. Por esto el escritor de este salmo escribió sabiamente; que la palabra de Dios es lámpara a sus pies. Es decir que cada paso que damos en la vida como creyente cristianos lo debemos examinar a la luz de las santas escrituras, que dejemos que la biblia alumbre nuestro caminar diario, para que las tinieblas del error no nos hagan tropezar. De igual manera nuestra proyección al futuro debe estar iluminada por la palabra de Dios.

Cada uno de nosotros debemos planear en nuestra vida considerando lo que nos enseña la biblia, de esta manera estaremos construyendo un futuro seguro y confiable. No solamente la biblia es luz a nuestros pies; sino que también es lumbrera a nuestro camino. Es decir que las santas escrituras no solamente nos ayudan a tomar buenas decisiones en las cosas inmediatas sino también nos ayudan a tomar buenas decisiones en las cosas futuras.

Por ejemplo: planear una preparación teológica. Primero calcular el esfuerzo que se necesita para alcanzarlo, confirmar el llamado de Dios. Segundo objetividad del ministerio; es decir tener en claro lo que se desea alcanzar para la gloria de Dios. Todos los hombres de Dios que han tenido éxito ha sido debido a su continuo y fuerte apego a la palabra de Dios.

A continuación veremos el fuerte apego a la palabra de Dios, de hombres, que en medio de la angustia, y la adversidad, confiaron en la palabra de Dios, y obtuvieron grandes victorias.

Salmos 119: 81-88

Desfallece mi alma por tu salvación, mas espero en tu palabra. Desfallecieron mis ojos por tu palabra, diciendo: ¿cuando me consolaras? Porque estoy como el odre al humo; pero no he olvidado tus estatutos. ¿cuántos son los días de tu siervo? ¿cuándo harás juicio contra los que me persiguen? Los soberbios me han cavado hoyos; mas no proceden según tu ley. Todos tus mandamientos son verdad; sin causa me persiguen; ayúdame. Casi me han echado por tierra, pero no he dejado tus mandamientos. Vivifícame conforme a tu misericordia, y guardare los testimonios de tu boca.

Salmos 119: 89-96

Para siempre, oh Jehová, permanece tu palabra en los cielos. De generación en generación es tu fidelidad; tú afirmaste la tierra, y subsiste. Por tu ordenación subsisten todas las cosas hoy, pues todas ellas te sirven. Si tu ley no hubiere sido mi delicia, ya en mi aflicción hubiera perecido. Nunca jamás me olvidare de tus mandamientos, porque con ellos me has vivificado. Tuyo soy yo, sálvame, porque he buscado tus mandamientos. Los impíos me han aguardado para destruirme; mas yo considerare tus testimonios. A toda perfección he visto fin; amplio es sobremanera tu mandamiento.

Estructura de la biblia

La palabra "biblia" viene de un vocablo griego que significa libros; esto quiere decir que la biblia es en realidad una biblioteca en un libro.

Dicho de otra manera, la biblia es un libro compuesto de muchos libros, sesenta y seis en total.

Cuando la biblia fue escrita fue considerado cada uno de sus libros, si eran o no inspirados por Dios, si estaban aprobados por los apóstoles y la iglesia, etc. De esta manera se formó el canon bíblico.

Las biblias católicas incluyen los libros llamados, "libros apócrifos" los cuales no son libros aprobados. Así que la biblia aprobada por la iglesia cristiana es la biblia que contiene solo los sesenta y seis libros.

En mi experiencia y estudio de la biblia por veinticinco años, he preferido la biblia reina valera, traducción de 1960. Esta biblia en mi concepto es la que más se apega a la traducción original, y de la cual el espíritu santo me ha dado testimonio como genuina y verdadera. Por años he disfrutado de su estudio e investigación, por su lenguaje sencillo y práctico.

La biblia fue escrita en un periodo aproximado, de mil quinientos años, por más de cuarenta autores, de los cuales, muchos no se conocían. Estos escritores inspirados por Dios, fueron desde pastores de ovejas y pescadores, hasta doctores y estadistas; pero todos con un mensaje dado por Dios en su tiempo.

A continuación veremos como la biblia fue estructurada por Dios, para darnos su mensaje de justicia y verdad, para cada uno de nosotros.

La biblia está dividida en dos parte principales.

La primera: llamada antiguo testamento, también conocido como antiguo pacto; porque en realidad es el pacto que Dios hizo con su pueblo.

El antiguo testamento contiene treinta y nueve libros, que van desde: génesis, hasta malaquías.

El orden de estos libros sería el siguiente.

1-génesis 2- éxodo 3- levítico 4- números 5-deuteronomio 6-josué 7-jueces 8-rut 9-1 samuel 10-2 samuel 11-1 reyes 12-2 reyes 13-1 crónicas 14-2 crónicas 15-esdras 16-nehemías 17-ester 18-job 19-salmos 2o-proverbios 21-eclesiastes 22-cantares 23-isaías 24-jeremías 25-lamentaciones 26-ezequiel 27-daniel 28-oseas 29-joel 30-amós 31-abdías 32-jonás 33-miqueas 34-nahúm 35-habacuc 36-sofonías 37-hageo 38-zacarías 39-malaquías

El antiguo testamento también esta subdividido así.

A estos libros se les llama, el pentateuco y la ley. Pentateuco: porque son los primeros cinco libros de la biblia. Penta-cinco.

También la ley porque ellos contienen los mandamientos o ley dados por Dios.

Génesis, éxodo, levítico, números, deuteronomio.

A estos libros se les llama históricos, porque ellos relatan las luchas, batallas, victorias y derrotas, del pueblo de israel, también cuentan la historia de los jueces, los reyes y sus gobiernos.

Josué, jueces, rut , 1 samuel, 2 samuel, 1 reyes, 2 reyes, 1 crónicas, 2 crónicas, esdras, nehemías, ester.

Los libros a continuación son llamados poéticos, por su orden literario, y también poético.

Job, salmos, proverbios, eclesiastés, cantar de los cantares.

Ahora vienen los libros llamado profetas mayores. Estos libros se conocen como profetas mayores, no porque ellos hayan sido mejor, o más grandes que los otros profetas, sino porque ellos escribieron más y cubrieron un periodo mayor. Isaías, jeremías, lamentaciones, ezequiel, daniel.

Los libros a continuación son llamados profetas menores, no porque ellos sean insignificantes; sino porque el relato de sus libros es menor.

Oseas, joel, amós, abdías, jonás, miqueas, nahúm, habacuc, sofonías, hageo, zacarías, y malaquías.

La segunda parte de la biblia, es llamada nuevo testamento, o nuevo pacto; porque en esta parte se establece el nuevo pacto que hace jesús con nosotros, los que hemos recibido su sacrificio en la cruz por el perdón de nuestros pecados. Estos son veintisiete libros en total, en este orden.

Mateo, marcos, lucas, juan, hechos, romanos, 1 corintios, 2 corintios, gálatas, efesios, filipenses, colosenses, 1 tesalonicenses, 2 tesalonicenses, 1 timoteo, 2 timoteo, tito, filemón, hebreos, santiago, 1 pedro, 2 pedro, 1 juan, 2 juan, 3 juan, judas, apocalipsis.

El nuevo testamento también esta subdividido de la siguiente manera.

Hay cinco divisiones que establecen la categoría de cada grupo de libros.

Primero viene el grupo de los llamados evangelios. La razón fundamental porque se llaman evangelios; es porque en ellos se describe claramente el evangelio de nuestro señor jesucristo; esto es decir, la vida y obra completa de jesús, y su labor redentora. Este es su orden. Mateo, marcos, lucas, juan.

Le siguen los libros históricos, que en realidad es uno solo. Este libro relata con precisión la formación, y el desarrollo de la iglesia primitiva; hechos.

Luego continúan las cartas paulinas. Estas reciben este nombre para identificar a su autor, que fue el apóstol pablo.

Significativamente este es el hombre que más contribuyó en la formación de los escritos del nuevo testamento.

Romanos, 1 corintios, 2 corintios, gálatas, efesios, filipenses, colosenses, 1 tesalonicenses, 2 tesalonicenses, 1 timoteo, 2 timoteo, tito, filemón.

Ahora vienen las cartas generales, llamadas así por la variedad de autores que las escribieron.

Hebreos, santiago, 1 pedro, 2 pedro, 1 juan, 2 juan, 3 juan, judas.

El último libro es el llamado profético; por su alto contenido de eventos finales. Este es el libro de revelaciones o apocalipsis.

¿Por qué estudiar la biblia?

Juan 5: 39

Escudriñad las escrituras; porque a vosotros os parece que en ellas tenéis la vida eterna; y ellas son las que dan testimonio de mí.

El señor jesucristo nos hace un importante llamado; escudriñad las escrituras. Esto quiere decir que hay algo en ellas que debemos descubrir.

Jesús nos dice; escudriña, profundiza en la lectura de la palabra, toma tiempo suficiente para meditar y reflexionar en ellas, porque en ellas hay vida eterna.

Así como un buscador de tesoros excavaría, y ahondaría, en lo profundo de la tierra para encontrar tesoros, así nosotros también, como buscadores de preciosos tesoros espirituales, debemos esforzarnos para excavar lo más profundo posible para encontrar la sabiduría de Dios.

El atraso, y estancamiento espiritual, de muchos cristianos hoy, se debe al muy poco conocimiento de la palabra de Dios. Cuando el hijo de Dios enfrenta problemas, luchas, y adversidades, es entonces que las respuestas se hacen necesarias, y la biblia tiene todas esas respuestas que necesitamos para cada uno de nuestros problemas o interrogantes.

El señor jesús termina diciendo en esta escritura de juan; y ellas son las que dan testimonio de mí. La palabra de Dios escrita, nos ayuda a conocer a Dios, descubrir cosas nuevas de él, como su carácter, naturaleza, personalidad, etc.

Todo esto nos ayuda para entenderlo, y para aprender a confiar en él siempre.

Proverbios 2:1-5

Hijo mío, si recibieres mis palabras, y mis mandamientos guardares dentro de ti, haciendo estar atento tu oído a la sabiduría; si inclinares tu corazón a la prudencia, si clamares a la inteligencia, y a la prudencia dieres tu voz; si como a la plata la buscares, y la escudriñares como a tesoros, entonces entenderás el temor de Jehová, y hallarás el conocimiento de Dios.

El sabio salomón escribe con el deseo de alcanzar nuestro corazón con su palabras, que son de Dios; diciendo; si recibieres mis palabras.

Recibir la palabra de Dios, indica una actitud dócil del que la recibe, también muestra humildad al desear recibir esa palabra.

Hoy necesitamos esa humildad para sacrificialmente pasar tiempo leyendo y estudiando la biblia.

Me duele ver como la gente de hoy abandona y olvida el estudio de la palabra de Dios.

Hoy por hoy, la gente está más interesada en que algún profeta le dé una palabra, en vez de buscar esa palabra por sí mismo a través de la lectura y meditación de la biblia.

La razón es; porque ya no existe el sentido de sacrificio y de esfuerzo en el cristiano de hoy; pero si seguimos así, esto nos llevará al fracaso total.

No podemos vivir la vida cristiana separada del conocimiento de lo que nos enseña la biblia.

Hoy también se cometen muchos errores por ignorar los principios de la palabra de Dios; como profecías erróneas, decisiones equivocadas, abusos, excesos, y religiosidad extrema.

 

Recuerdo que en mis comienzos como cristiano, y predicador, fui a una gran convención, donde estarían, predicadores y evangelistas de renombre; mi ilusión era grande, mis expectativas de recibir conocimiento eran inmensas, sin embargo al terminar esa convención yo me sentía defraudado; el conocimiento que yo deseaba recibir, no lo encontré; y recuerdo como si fuese hoy; me fui al hotel donde estaba hospedado, me recosté en la cama, y escuche tal claro y tan audible la voz de Dios; que me dijo, "¿quieres conocerme?… Búscame a ¡mi! Yo te enseño".

Ese fue el momento crucial, y definitivo que marco mi vida para siempre. De allí en adelante me abstuve de andar de campaña, en campaña, de buscar al profeta, de correr a tanta convención y seminario; y dediqué más tiempo, mucho más tiempo, para buscar yo mismo a Dios, y conocerlo; a través de la oración y el estudio profundo, y la lectura de la palabra de Dios.

Eso es lo que me ha formado, y ayudado también, para que yo pueda discipular, capacitar, y enseñar a otros. La biblia nos dice, en proverbios 2: que busquemos, la prudencia, y la sabiduría de Dios; como quien está buscando a un tesoro de gran valor; y ciertamente la sabiduría de Dios sobrepasa el de las piedras preciosas, el oro, o la plata que podamos tener.

El conocimiento de Dios, es lo que establece al hombre, es lo que nos da sentido de propósito, y razón para vivir. Esforcémonos, venzamos todo obstáculo, para obtener ese bien preciado, que es el conocimiento de Dios.

 

Oseas 4: 6

Mi pueblo fue destruido, porque le faltó conocimiento. Por cuanto desechaste el conocimiento, yo te echaré del sacerdocio; y porque olvidaste la ley de tu Dios, también yo me olvidaré de tus hijos.

La ignorancia espiritual, de las santas escrituras, ha sido la razón del fracaso del pueblo de Dios a través de los tiempos.

La razón porque, eva no pudo resistir la tentación fue porque no recordó la palabra de Dios correctamente; al añadir que no debían de "tocar" el árbol del conocimiento del bien y el mal.

También david cuando quiso traer el arca del pacto, murió un hombre llamado uza; ¿porqué? Porque no lo estaba haciendo de acuerdo a la palabra de Dios.

Y así podría enumerar otros casos, como cuando se eligió a matías, como apóstol para reemplazar a judas, echando suertes; cuando todos sabemos que es Dios quien escoge a los hombres.

Samuel también se equivocó al pensar que Dios escogía según la apariencia física; pero el tuvo que aprender que Dios escoge según el corazón.

Desafortunadamente hoy en día ocurre el mismo fenómeno. Se escogen personas equivocadas para ocupar puestos que les pertenecen a otros.

Hay congregaciones cristianas que no llevan rumbo, ni dirección, porque su líder no tiene, o tiene muy poco conocimiento de la biblia. No porque no pueda tener conocimiento; sino porque no quiere pagar el precio para tener ese conocimiento.

Oseas, nos dice claramente, sin error de equivocación; que el pueblo fue destruido porque le faltó conocimiento.

Cuando falta el conocimiento todo lo demás está destinado a fallar. Imagínense ustedes a un noé construyendo una arca con madera económica… su arca no hubiera soportado la fuerza del diluvio.

Por eso el señor jesucristo dijo: el que oye mis palabras y las pone por obra, le compararé a un hombre prudente que edificó su casa sobre la roca.

Es tiempo de edificar ministerios sobre la roca, es tiempo de construir iglesias sobre la roca, es tiempo de fundamentar la sociedad, y el mundo sobre la roca, de la palabra de Dios.

El ministerio, o sea, los sacerdotes, en el tiempo de oseas, descuidaron el aprendizaje, y la enseñanza de la palabra de Dios, de tal manera que fueron destruidos por el enemigo; y algo muy importante también es ver, que un pueblo, o ministerio, sin conocimiento, no es útil a Dios.

Dios le dijo: yo te echaré del sacerdocio; eso significa, que dejarían de ser ministros de Dios.

La iglesia, los pastores, y el pueblo de Dios en general, tenemos que entender, que perderemos mucho si descuidamos, el estudio de la biblia, y la enseñanza de ella al pueblo de Dios, y al mundo.

Dios además les dijo: yo también me olvidare de tus hijos. ¿es Dios cruel? En ninguna manera.

Simplemente, que el resultado de olvidar, y abandonar la biblia, acarrea consecuencias desastrosas.

Oseas 5:8

Tocad bocina en gabaa, trompeta en rama: sonad alarma en bet-aven; tiembla oh benjamín.

El llamado a volver a la palabra de Dios, es mas urgente que nunca.

Dios mando tocar bocina, trompeta, y alarma; sobre la tierra en el tiempo de oseas. Declarando el gran pecado del pueblo de israel, al haber abandonado, y olvidado la palabra de Dios. Hoy la trompeta de Dios, ha comenzado a sonar una vez más, el sonido de alarma comienza a cubrir la tierra, anunciando el descuido de la iglesia del siglo veintiuno, y sus líderes, de la palabra de Dios. Hoy usted puede escuchar sermón, tras sermón, mensaje, tras mensaje, y en su mayoría todos carecen de substancia de la palabra de Dios.

Mucho grito, mucha emoción, pero poca, esencia y contenido. Esto está causando que los creyentes de hoy, tengan convicciones muy superficiales; que son de tropiezo para sus propias vidas.

Yo como predicador evangelista; con una pasión profunda por las almas, me indigna ver como muchas personas abandonan la carrera cristiana, y nadie las busca, y a nadie le importan; esto es porque no hay amor, ni entendimiento de lo que realmente significa, el evangelio de jesucristo, la vida cristiana, o el ministerio.

Es tiempo de cambiar pueblo de Dios, el fin de todas las cosas se acerca, y lo único que importa al final de la vida es nuestra riqueza espiritual.

El mayor desafío esta frente a nosotros… hagamos contar esta nuestra gran oportunidad.

 

Isaías 1: 3

El buey conoce a su dueño, y el asno el pesebre de su señor; israel no entiende, mi pueblo no tiene conocimiento.

Aquí tenemos otra escritura, en otro libro, en otro lugar; pero que se refiere al mismo problema; la falta de conocimiento.

Isaías fue un profeta, que vivió en una de las épocas de oro de judá, cuando la prosperidad y la abundancia reinaban, como hoy en nuestro día. Pero escaseaba el conocimiento de la palabra de Dios como hoy. Todo el mundo corría tras la riqueza material, olvidando la espiritual.

Todo el pueblo procuraba su bien económico, a costo del abandono y descuido de la palabra de Dios. Hasta que un verdadero profeta, declara el mensaje de Dios. Diciéndoles; el buey conoce a su dueño; un torpe animal de carga y trabajo, está ahora siendo ejemplo para mostrar al pueblo de judá su gran erro: olvidarse de Dios y descuidar su palabra.

Amigos, esto parece ser una réplica exacta de lo que ocurre hoy.

Dios dice: israel no entiende, mi pueblo no tiene conocimiento.

Hoy el tema de la prosperidad económica y material, predomina en los púlpitos cristianos, se ha vuelto tan popular que casi es un pecado para muchos no predicar de él; pero la prosperidad del alma, el conocimiento de Dios, y el estudio de la biblia se están convirtiendo en temas obsoletos.

¿será que Dios tendrá que usar al buey, y al asno una vez mas para enseñarnos un lección?

Jeremías 9: 23-24

Así dijo Jehová: no se alabe el sabio en su sabiduría, ni en su valentía se alabe el valiente, ni el rico se alabe en sus riquezas. Más alábese en esto el que se hubiere de alabar: en entenderme y conocerme, que yo soy Jehová, que hago misericordia, juicio y justicia en la tierra; porque estas cosas quiero, dice Jehová.

Jeremías, uno de los profetas más valientes del antiguo testamento; declara uno de los mensajes más contundentes que el mundo antiguo podía escuchar.

Este mensaje habla de la importancia de conocer y entender por sobre todas las cosas que son de valor, o importantes para el hombre.

Como la sabiduría, la valentía, o la riqueza. Estas cosas podrán tener algún valor; pero nunca se compararan a la gloria de conocer y entender a un Dios tan sublime como el nuestro.

Salomón dijo de él: Dios mío tu eres tan sublime que los cielos de los cielos no pueden contener tu gloria.

La sabiduría del hombre puede ser buena; pero no le ha podido ayudar para resolver los problemas sociales. El crimen, la corrupción aumentan cada día. ¿dónde está la sabiduría para resolver estos problemas? De igual manera la valentía del hombre es inútil, para pelear contra la muerte, o una enfermedad terminal.

También la riqueza económica, y material. ¿cuánta gente rica hay que tienen una mansión, pero no un hogar? ¿cuánta gente rica hay que pueden comprar la mejor comida del mundo; pero no pueden disfrutarla?. Por eso no podemos jactarnos de ello.

Jeremías dice: más alábese en esto el que se hubiere de alabar. Hay algo en lo que el hombre sí se puede gloriar; y esto es, en el conocimiento de Dios.

¿cuántas personas vemos hoy, aferradas a una falsa religión? Luchando por causas inútiles, ¿por qué? Por la ignorancia de lo que dice la palabra de Dios.

Pero, aun peor; ¿cuántas congregaciones cristianas están sumidas en el legalismo, la tradición y carnalidad? ¿por qué causa? Lo mismo; una inmensa falta de conocimiento de lo que dice la biblia de Dios.

Hoy muchos cristianos fornican, y adulteran, ignorando las terribles consecuencias de esos pecados. ¿por qué? De igual manera, la falta de conocimiento de la palabra de Dios.

Hoy vivimos en la era de los grandes descubrimientos, la medicina avanzada, la computación, y la informática; pero la sociedad en sí, vive en un negro oscurantismo acerca del conocimiento del Dios que creo los cielos y la tierra.

Hoy por hoy, la gente conoce de política, economía, la farándula, etc, etc. Pero, no conoce de Dios.

La gloria verdadera de un pueblo, individuo, o nación, de acuerdo a Dios; es, entenderle a él, y conocerle; que él es el que salva, sana, y libera. Que en él está la sabiduría y el conocimiento para gobernar a las naciones; que él posee la solución a la problemática humana.

Dios nos invita hoy, a que hagamos una reevaluación de nuestra vida, y consideremos si estamos haciendo bien las cosas de la manera en que vamos; o si necesitamos hacer ajustes drásticos hoy. Comencemos una campaña masiva, multitudinaria, de enseñanza bíblica: no solo para el pueblo de Dios; sino también para el mundo. Creo firmemente que los cambios más grandes para la humanidad comienzan con el saber quién es Dios. Es por ello que debemos estudiar la biblia, porque en ella se revela la naturaleza y el carácter de Dios, en ella también encontramos las leyes, o reglas de conducta que el estableció para beneficio y bienestar del hombre en general. No se puede ser un buen esposo, una buena esposa, o un buen hijo, si se desconoce el plan de Dios para la familia. No se puede pastorear una congregación, si se ignora el propósito de Dios para la iglesia; de igual manera no se puede gobernar a un pueblo si no se tiene la sabiduría de Dios dada en su palabra. Es urgente comenzar una labor de educación bíblica a nuestros pueblos, antes de que termine por destruirse la fibra moral de la gente. Podemos ver hoy; como los valores del respeto, la moral, la integridad, y honestidad, se han olvidado. Esto es porque el ser humano se vuelve cada día más insensible y egoísta. La razón inequívoca es la falta de conocimiento de Dios. Si cada hombre supiera, que es responsable ante Dios de sus actos, y si supiera que un día dará cuenta a Dios de sus acciones; entonces cambiaría, sería diferente; su manera de vivir y de actuar sería responsable. Este es el poder que posee la palabra de Dios; la biblia. Poder para cambiar, poder para transformar, poder para regenerar. Sí hay esperanza para el mundo… esa esperanza está, en enseñarles la palabra de Dios.

¿Cómo estudiar la biblia?

La biblia es una fuente de conocimiento inagotable. Cualquier libro se puede leer una, dos, y hasta tres veces; pero, después de eso, aquel libro se volverá aburrido y monótono.

En cambio, la biblia se pude leer por años y siempre nos dará un conocimiento, fresco y renovado. La pregunta es: ¿porque? La razón es sencilla; porque la biblia es la palabra de Dios. La biblia es el único libro que posee la virtud de dar vida al que lo lee. La biblia no es solo un libro con palabras; la biblia es un libro con palabras que dan vida.

Nuestro amado señor jesús dijo:

Juan 6:63 el espíritu es el que da vida; la carne para nada aprovecha; las palabras que yo os he hablado son espíritu y son vida.

Eso nos indica el gran poder que posee la palabra de Dios. La biblia nos ayuda, dándonos aliento, fortaleciendo nuestra fe, afirmando nuestra esperanza. Por eso podemos decir que la biblia es un libro con vida.

En la biblia, a la palabra escrita se le conoce como: logos; es decir, allí esta, escrita, dentro de la biblia; esperando ser leída por alguien; y de pronto, cuando esa palabra se lee, enseguida se convierte, en lo que se llama; rhema: es decir; la palabra que da vida a quien la lee.

Permítame darle un ejemplo: digamos que usted tiene algún problema, y no sabe cómo resolverlo, o enfrentarlo; entonces usted va a su biblia y comienza a leer: de pronto se encuentra con una palabra, frase, o escritura, que cobra vida, y eso da solución a su problema. A esto me refiero cuando digo que la biblia tiene vida.

 

Permítame contarle un poco de mi formación bíblica. Primero; cuando yo nací, ya mi madre era cristiana. Eso quiere decir que desde mi infancia he escuchado la predicación y enseñanza de la biblia. A la edad de veintidós, o veintitrés años, ya estaba enseñando una clase de escuela dominical, y una clase vespertina llamada unión de preparación.

Por años fui formando una gran biblioteca, bíblica. Que va desde biblias de estudio, concordancias, diccionarios, hasta compenDios exegéticos, y teologías bíblicas.

El estudio de la biblia, es hoy, una pasión para mí. No fue fácil al comienzo, ya que no estaba acostumbrado a una disciplina de estudio tan rigurosa como la de ahora. Recuerdo que al leer, pronto, me daba sueño y cansancio. Pero, poco a poco aprendí la disciplina del estudio.

Lo que a mí me motivó a estudiar, fue la vergüenza; si, aunque usted no lo crea; la vergüenza que sentía, de no haberme preparado cuando tenía que dar el estudio bíblico. Recuerdo como me sentía en aquel momento, cuando estaba frente a un grupo de gente, atentos, listos, y dispuestos; para recibir la enseñanza; y que pena, que yo ni siquiera había leído el estudio.

Recuerdo: comenzaba, a tartamudear, balbucear, las ideas no concordaban, y finalmente al terminar me sentía un fracasado, lleno de vergüenza: todo por no haber estudiado como era mi responsabilidad.

Hoy hay muchos pastores, y predicadores que hacen lo mismo; no se preparan: lo malo es; cuando esta costumbre se convierte en un hábito.

Amigos debemos ser asiduos estuDiosos de la palabra de Dios porque su recompensa es incomparable.

 

Una persona que no estudia la biblia, siempre vivirá una vida mediocre. Un predicador, o maestro bíblico, que no estudia la biblia, siempre será un comunicador mediocre.

Lo peor del caso es; que, no solamente se hacen daño a sí mismos, sino que dañan también a los demás.

No hay como un predicador bien preparado, un maestro de escuela dominical bien estudiado. Su predicación, o enseñanza será un deleite para los oyentes.

La biblia dice:

Daniel 12: 3

Los entendidos resplandecerán como el resplandor del firmamento; y los que enseñan la justicia a la multitud, como las estrellas a perpetua eternidad.

Amigos; hay una gran recompensa, para los que predicamos y enseñamos la palabra de Dios.

La biblia dice: que los entendidos resplandecerán. La gloria de los entendidos, es conocer a Dios, saber su palabra, e instruir a otros en ella.

Hay un resplandor hermoso en los entendidos, que estudian y enseñan la palabra de Dios a los pueblos.

Existe una gran multitud en el mundo hoy, que necesita conocer la palabra de Dios. Presidentes de naciones, necesitan la sabiduría de Dios para gobernar, matrimonios necesitan conocimiento para sobrellevar su relación, jóvenes necesitan conocimiento para enfrentar la vida, pastores necesitan conocimiento, para edificar la iglesia del señor.

¿Quién les enseñará? Solo usted y yo podemos hacerlo, si nos esforzamos a cumplir con esta nuestra responsabilidad.

Ahora sí, entraremos de lleno en el: ¿cómo estudiar la biblia? La biblia se estudia con el fin de entenderla, y a su vez, para poder explicarla a otros.

Así que hay diversas formas, o métodos de estudio, pero la meta es la misma comprenderla para poderla explicarla. Lo único que hace el método es facilitar el estudio, y hacerlo mas provechoso. Así que; examinaremos algunos de estos métodos a continuación.

Nota: no pretendo conocer, o saber todos los métodos, o formas de estudio, pero los que conozco se los compartiré con el mejor gusto.

Primer método: a este le llamaré; estudio por contexto bíblico.

Es muy importante que cuando estudiemos, o leamos la biblia, siempre lo hagamos dentro de su contexto.

Contexto bíblico significa: leer la idea o pensamiento de la escritura completo. De principio a fin. Por ejemplo: en gálatas 5- 16 al 26 la biblia habla de las obras de la carne y las obras del espíritu; pero después, en el capítulo 6: 1 cambia el tema a otro enfoque. También en capítulo 5: del 1 al 15 gálatas habla de otro tema. Así que es muy importante buscar donde comienza el tema y donde termina. Cuando se lee así, se está leyendo dentro del contexto bíblico. ¿porqué es importante leer dentro del contexto bíblico? Porque de esta manera nunca nos desviaremos de la verdad de la biblia.

Aun cuando solo se nos pide en la congregación que leamos una escritura, debemos aprender a leer dentro de su contexto. Para que el que oiga, entienda.

Segundo método: es palabra por palabra. Este método es bastante práctico, y se aprende mucho. Por ejemplo se escoge la palabra: fe, o la palabra amor.

Estas palabras tienen un significado, y para poder entenderlo, hay que estudiar a través de la biblia, donde y como se usa esa palabra. Esto nos dará una idea precisa de lo que significa.

Otro ejemplo la palabra amor: en la biblia a veces se refiere al amor de Dios, otras al amor entre hermanos, también al amor del esposo a la esposa, etc, etc. Si leemos con detenimiento, y estudiamos esas palabras, nuestro conocimiento aumentara considerablemente. Este es uno de los métodos que mas uso en mis estuDios.

Otro ejemplo; es la palabra fe. En hebreos 11: 1 la biblia explica que es la fe. La fe es la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve.

A la luz de esta escritura vemos que la fe es la seguridad interna de lo que esperamos, y es la convicción absoluta de lo que no se ve. Aquí la fe tiene que ver con seguridad y confianza. De esta manera el estudiante bíblico podrá aprender, para poder enseñar.

Además se puede estudiar el significado de las palabras en un diccionario de español. Esto me ha ayudado mucho en lo personal.

También se pude leer el significado de la de la palabra en el griego, o hebreo, si se cuenta con un diccionario bíblico. Recomiendo a todo estudiante de la biblia, que compre, un diccionario bíblico, una concordancia bíblica, y un buen comentario de la biblia. Yo le sugiero lo siguiente: biblia reina valera 1960, diccionario vila escuain, el comentario matew henry 13 tomos en uno, y un diccionario de español.

El tercer método: es estudiar la biblia por temas. Este estudio es parecido al que acabamos de ver; pero este es mucho más amplio.

Estudiar la biblia por temas, es tomar un tema y estudiarlo a fondo. Por ejemplo: el tema del pecado, se comienza por estudiar cual es su significado, luego se procede a ver donde se originó, porque se origino, cuáles son sus consecuencias, la solución al pecado, etc.

Este tipo de estudio bíblico, no solo aumentara nuestro conocimiento, sino que también nos establecerá en la sana doctrina de las escrituras. Hoy existen diversas herejías por la mala interpretación de la biblia. Otro temas, sería el de la santidad, el perdón, la justicia, la gracia, el cielo, el infierno, etc.

El cuarto método: es los personajes bíblicos. En este estudio, se toma a una persona como pedro, y se estudia, quien era pedro, donde vivía, que hizo, como era su carácter, que puedo aprender de él, etc., etc. El objetivo al estudiar los personajes bíblicos, es conocerlos tanto como sea posible; para aprender valiosas lecciones de cada uno de ellos.

Por ejemplo; de la vida del rey david, podemos aprender que fue un hombre que amó a Dios con todo su corazón, sin embargo la tentación le hizo caer, causándole muchos dolores. De la vida de este amado personaje podemos aprender lo especial que el fue.

David fue un joven valiente, con un amor especial para Dios, un verdadero adorador, y aunque pecó, su arrepentimiento fue sincero y genuino. Aprendemos de él, lo que realmente es el arrepentimiento; en el salmo 51; cuando el pide piedad a Dios. Se puede ver su intenso dolor por haberle fallado a Dios.

El quinto método: es estudiar libro por libro.

Cada libro de la biblia encierra un mensaje en sí. Por ejemplo el libro de isaías relata una de las épocas de rebelión del pueblo de israel. En este libro vemos con claridad el llamado de Dios a su pueblo, a que se torne a él, vemos como Dios le enseña cual es su pecado, y le invita al arrepentimiento. También les advierte del peligro de la desobediencia, y la rebelión.

Todo este contenido no solo nos enseña lo que allí pasó, sino también lo que Dios espera de nosotros como su pueblo, y como sus hijos. Cuando se estudia un libro completo se alcanza a comprender bien, el mensaje del escritor.

Se da uno cuenta de los detalles del libro, por ejemplo cuando la biblia dice que Dios no apaga el pabilo que humea. Significa que mientras hay fe y confianza en Dios, aunque los problemas, o el enemigo nos hayan querido apagar; Dios aun tiene misericordia de nosotros y el volverá a encender el fuego de nuestra esperanza.

Otro ejemplo sería el de los evangelios. Mateo, Marcos, Lucas, y Juan. Cada uno cuenta la vida de nuestro señor jesucristo, pero cada libro en particular cuenta cosas específicas del señor Jesús y su obra. Esa es otra razón porqué estudiar la biblia libro por libro.

Otro ejemplo clave, es las cartas de pablo. Ellas contienen un alto contenido doctrinal. Por ejemplo en romanos pablo hace la diferencia entre la ley y la gracia de Dios. Y con claridad nos muestra esas diferencias, que cuando las estudiamos con detenimiento no hay lugar para el error.

Este conocimiento nos afirma en la verdad de Dios.

 

El sexto método: se le llama estuDios por símbolos. La simbología bíblica está por todos lados, desde génesis, hasta apocalipsis.

Este es un estudio que también disfruto mucho. El titulo, simbología: quizá intimide a algunos; pero esto es relativamente sencillo.

Símbolo es toda aquella figura que representa algo. Por ejemplo: la biblia habla de nuestro señor jesús, como el cordero de Dios que quita el pecado del mundo. Este pasaje bíblico se refiere; que así como el cordero en el antiguo testamento era ofrecido por el pecado del pueblo entonces: así también jesús es ofrecido como un cordero por el pecado del mundo. Así que si estudiamos sobre el sacrificio del cordero en el antiguo testamento podremos también comprender el sacrificio de nuestro señor jesucristo en la cruz.

Otro ejemplo es el escudo de la fe. Si se estudia en un diccionario bíblico, como era el escudo del saldado romano, en el tiempo de pablo, entonces también se entenderá la función del escudo espiritual de la fe. El escudo del soldado romano era principalmente para protegerse de las flechas de sus enemigos. Así que el escudo de la fe nos sirve para protegernos de los dardos, o flechas que el diablo lanza contra nuestra mente y corazón.

¿cómo funciona? Cada vez que venga un pensamiento diabólico a mi mente, yo debo rechazarlo con la fe en la palabra de Dios. Este método pedagógico es altamente bueno, ya que deja ejemplos imborrables, a cada uno de nosotros.

El séptimo método: es el estudio por parábolas.

Las parábolas son enseñanzas que se dan, por medio de un ejemplo de algo. Nuestro señor jesús fue quien sobresalió dando estas enseñanzas.

En los evangelios le llaman al señor jesús; "rabi": que significa maestro.

Algunas de esas parábolas son: semilla de mostaza, las diez vírgenes, el buen pastor, el buen samaritano, etc, etc. Hoy vamos a usar como ejemplo; la parábola del sembrador.

En marcos 4: 1- 20 encontramos esta enseñanza.

El señor jesús dijo: el sembrador salió a sembrar; y al sembrar, aconteció que una parte cayó junto al camino, y vinieron las aves del cielo y la comieron. Otra parte cayó en pedregales, donde no tenía mucha tierra; y broto pronto, porque no tenía profundidad de tierra. Pero salido el sol, se quemó; y porque no tenía raíz se seco. Otro parte cayó entre espinos; y espinos crecieron y la ahogaron, y no dio fruto. Pero otra parte cayó en buena tierra, y dio fruto, pues brotó y creció, y produjo a treinta, a sesenta, y a ciento por uno. Entonces les dijo: el que tiene oídos para oír, oiga.

Primero: el sembrador es el que predica la palabra. Segundo: el terreno donde cae la semilla es el corazón del hombre. Tercero: los lugares donde cae la semilla son las circunstancias que enfrenta la gente para que la palabra de Dios no de fruto. Cuarto: la semilla, o palabra que produjo fruto en el corazón del hombre dispuesto a vencer.

Al estudiar ordenadamente cada uno de estos puntos, podremos obtener el máximo provecho de esta enseñanza tan especial; que es la parábola. Además nos capacitaremos para enseñar a otros.

Algo importante que he aprendido en mi vida de estudio bíblico; es: que nada de lo que uno estudie se perderá, sino que se aprovechara en un momento u otro.

El valor de la biblia

La biblia es el libro más valioso del mundo. Nunca jamás habrá otro libro como este. Si analizáramos verdaderamente el valor de las santas escrituras, nos sorprenderíamos.

A través de la historia, hombres y mujeres, han tenido que pagar un alto precio para preservar estas escrituras. Algunos murieron en el fuego, otros atormentados en castigos, otros desposeídos y perseguidos. Todos ellos defendieron los manuscritos originales; para que ahora nosotros podamos tener la biblia.

Sin duda, la biblia nos ha llegado a un precio de sangre. Cuando la leemos y estudiamos, estamos dando honra a aquellos que sacrificialmente dieron sus vidas para nuestro beneficio; porque querían que tuviésemos la palabra de Dios en nuestras manos. Ellos soñaron con tener una impresión escrita de las escrituras, pero no la tuvieron.

En la china ahora mismo hay muchos hermanos que no tienen una biblia. Ellos solo tienen pequeñas porciones de las escrituras, ya que no hay manera de obtener una biblia. Y nosotros; que diremos de nosotros: tenemos la capacidad, no solo de tener una biblia en casa, sino hasta dos o tres. Pero ¿las escudriñamos? ¿las estudiamos? ¿las leemos? Estas son preguntas que debemos contestar hoy.

¿cuánto valoramos la palabra de Dios? ¿cuánto tiempo dedicamos a estudiarla? Porque, el progreso y avance del cristianismo en el mundo depende en gran parte de nuestro conocimiento bíblico.

En hechos 6: 7 dice: y crecía la palabra del señor, y el número de los discípulos se multiplicaba en jerusalem.

¿cuál es el valor práctico de las escrituras? En josué 1:8 dice: nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en el, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien.

Literalmente podemos ver aquí; que el éxito en nuestra vida depende del apego que tengamos a la biblia. Dios le dijo a josué, que nunca se apartara de su boca el libro de la ley. Es decir: que cuidara de enseñarla, y aprenderla.

La disciplina era ardua: medita en la ley de día y de noche. La palabra de Dios debe ser tal, que esté grabada en nuestros corazones. Esa palabra debe ser nuestro alimento diario, para que no se nos pase por alto ningún detalle de ella. A josué se le dijo: para que guardes y hagas conforme a todo lo que en el está escrito.

Josué debía observar cuidadosamente todos los pormenores de la ley, sin pasar por alto ninguno.

El tenía que guiar a una gran multitud; como líder, josué necesitaba la sabiduría de la ley de Dios. La misión de dirigir al pueblo fracasaría; si josué no cuidaba de guiarse por la ley de Dios. Así que el éxito o fracaso de cada uno de nosotros dependen de nuestra obediencia o desobediencia a la palabra de Dios. En la última parte de este versículo; Dios le dice a josué: porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien.

Termino con esto: si realmente queremos que todo lo que hagamos prospere; entonces debemos saber, entender y practicar todo lo que nos enseña la biblia.

El amor por la biblia

Hechos 6:7 y crecía la palabra del señor, y el número de los discípulos se multiplicaba grandemente en jesuralen; también muchos de los sacerdotes obedecían a la fe.

La iglesia primitiva fue una iglesia de firmes convicciones, ellos no escatimaron esfuerzo alguno en diseminar la palabra de Dios por todo el mundo antiguo.

Muchos de esos creyentes, pagaron con su propia vida, por dar testimonio de esa palabra viva, y eficaz. Esto significa que la biblia llegó a nuestras manos por el sacrificio de nuestros hermanos.

Su sangre es testigo de su deseo de dar a conocer esa palabra a todo hombre. Ellos nos heredaron la biblia con amor; por eso debemos amarla con todo nuestro corazón, y aun estar dispuestos como ellos, a dar nuestra propia vida por ella.

El amor a la biblia debe ser algo natural y espontáneo en nosotros. La biblia es la única verdad que puede cambiar al mundo. La ideologías humanas de ayer y de hoy, solo hunden mas y mas al hombre en su error; es tiempo de levantarnos, y proclamar la palabra de Dios al mundo, es tiempo de dejar el egoísmo, la avaricia, el materialismo, la vanidad, y carnalidad. Es tiempo de hacer sonar la trompeta de la verdad de Dios al mundo, porque el fin de todas las cosas se acerca.

Ya pronto nada va a importar; solamente lo que hayamos hecho por Dios. Aprendamos la palabra, declaremos la palabra, enseñemos la palabra. Que se repita lo que logró la iglesia primitiva, pero en proporciones mayores para la gloria de Dios. El mundo te necesita, el mundo te espera, no tardes.

Salmos 19:7-10 la ley de Jehová es perfecta, que convierte el alma; el testimonio de Jehová es fiel, que hace sabio al sencillo. Los mandamientos de Jehová son rectos que alegran el corazón; el precepto de Jehová es puro, que alumbra los ojos. El temor de Jehová es limpio, que permanece para siempre; los juicios de Jehová son verdad, todos justos. Deseables son más que el oro, y más que mucho oro afinado; y dulces más que miel, y que la que destila del panal.

Salmos 119:103 ¡cuán dulces son a mi paladar tus palabras! Más que la miel a mi boca.

Salmos 119: 127 por eso he amado tus mandamientos más que el oro, y más que oro muy puro.

Salmos 119:72 mejor es la ley de tu boca que millares de oro y plata.

Salmos 119:111 por heredad he tomado tus testimonios, porque son el gozo de mi corazón.

Salmos 119: 129 maravillosos son tus testimonios; por tanto, los ha guardado mi alma.

Salmos 119:143 aflicción y angustia se han apoderado de mí, mas tus mandamientos fueron mi delicia.

Salmos 119:162 me regocijo en tu palabra como el que haya muchos despojos.

Salmos 119: 165 mucha paz tienen los que aman tu ley y no hay para ellos tropiezo.

Conclusión

Espero con todo mi corazón, que este manual bíblico, sea de gran bendición en su vida. Mi propósito es darle una ayuda práctica y sencilla para que su estudio de la biblia se vuelva más provechoso y emocionante.

La razón que he escrito este manual es por la gran necesidad que tenemos el pueblo de Dios en conocer la biblia.

Por años he visto la falta de personas idóneas para enseñar en las congregaciones. Sí hay muchos predicadores; pero muy pocos maestros.

Se que si instruimos a nuestra gente en la palabra de Dios; entonces podremos avanzar en nuestra labor de evangelizar y alcanzar al mundo.

Este es nuestro momento decisivo, esta es la hora de actuar. Hagamos contar nuestra oportunidad; porque el fin se acerca, ¡cristo viene pronto!

 

Habacuc 2:2

Y Jehová me respondió, y dijo: escribe la visión, y declárala en tablas, para que corra el que leyere en ella.

 

 

Evangelista José Gómez

USA

Partes: 1, 2
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