- Resumen
- Introducción
- Marco Teórico
- Tipos de Actitud
- Drogas
- Actitud hacia el consumo de drogas
- Antecedentes
- Variables
- Hipótesis
- Metodología
- Análisis e interpretación de resultados
- Conclusiones
- Recomendaciones
- Bibliografía
- Anexos
Resumen
El propósito de este estudio es analizar la relación entre las Variables (sexo, edad, y múltiples definiciones de actitud en la medida que tengan reacciones favorables o desfavorables, hacia el consumo de drogas en los estudiantes de primero, segundo y tercero de ciclo común del Instituto 21 de Octubre de Tegucigalpa. El estudio contó con la colaboración de 88 estudiantes, 52 hombres y 36 mujeres entre la edad de 12 a 18 años. La evaluación se realizó mediante una escala de actitud (Escala Liker). Escala sobre actitudes de los estudiantes del ciclo superior de EGB ante las drogas" de los profs. J. Escámez y B. Martínez (Escámez, J. 1900).
Los resultados de nuestro estudio reflejan que El 95% de los alumnos presenta una actitud desfavorable o negativa hacia el consumo de drogas, mientras que el 5% presenta una actitud favorable.
Introducción
A lo largo de la historia de la Psicología, en especial de la Psicología Social, se han dado múltiples y muy diferentes definiciones de actitud. Así, G. W. Allport define la actitud como "un estado mental y nervioso de disposición, adquirido a través de la experiencia, que ejerce una influencia directiva o dinámica sobre las respuestas del individuo a toda clase de objetos y situaciones con los que se relaciona" (Allport, 1935).
La actitud es "un modo de situarse a favor o en contra de determinadas cosas" (Murphy, Murphy y Newcomb, 1937: en Lamberth, 1989).
Las actitudes cumplen una función de autoestima y de autodefensa, ayudándonos a mantener o realzar nuestros sentimientos de confianza hacia nosotros mismos o a protegernos de información no deseada acerca de nosotros mismos, respectivamente. Las actitudes cumplen a menudo una función de motivación a causar una buena impresión.
Por otra parte se ha definido como droga cualquier sustancia que, al ser consumida por el individuo, afecta el organismo, la mente y la conducta (Organización Mundial de la Salud).
La importancia de este estudio es definir si los adolescentes tienen una actitud positiva o negativa hacia el consumo de drogas en función de su edad y sexo, con la finalidad de que con los resultados obtenidos se pueda concientizar más a los adolescentes sobre este tema y que en los colegios ya sea público o privado se puedan realizar programas de prevención hacia el consumos de drogas.
El presente estudio pretende analizar la actitud de los adolescentes hacia el consumo de drogas.
Marco Teórico
En nuestra sociedad actual a causa de la falta de conocimiento y poco interés hacia esta problemática, ya sea tanto en su aprobación como desaprobación, por lo que nos introducimos en esta temática que muchas personas consideran irrelevante.
ACTITUD
A lo largo de la historia de la Psicología, en especial de la Psicología Social, se han dado múltiples y muy diferentes definiciones de actitud. Así, G. W. Allport define la actitud como "un estado mental y nervioso de disposición, adquirido a través de la experiencia, que ejerce una influencia directiva o dinámica sobre las respuestas del individuo a toda clase de objetos y situaciones con los que se relaciona" (Allport, 1935).
La actitud es "un modo de situarse a favor o en contra de determinadas cosas" (Murphy, Murphy y Newcomb, 1937: en Lamberth, 1989).
Barón (2005) plantea que "los psicólogos sociales generalmente emplean el termino actitudes para referirse a nuestras evaluaciones de prácticamente cualquier aspecto del mundo social, en la medida en que tengamos reacciones favorables o desfavorables hacia temas, ideas, personas, grupos sociales, objetos".
Barón (2005) expone que "la ambivalencia de la actitud hace referencia a que nuestras evaluaciones de objetos, temas, personas, o eventos no es siempre uniformemente positiva o negativa; por el contrario, estas evaluaciones con frecuencia están mezcladas, componiéndose de reacciones tanto positivas como negativas".
Así mismo Rodríguez (1991) distingue tres componentes de las actitudes:
• Componente cognoscitivo: para que exista una actitud, es necesario que exista también una representación cognoscitiva del objeto. Está formada por las percepciones y creencias hacia un objeto, así como por la información que tenemos sobre un objeto. Los objetos no conocidos o sobre los que no se posee información no pueden generar actitudes. La representación cognoscitiva puede ser vaga o errónea, en el primer caso el afecto relacionado con el objeto tenderá a ser poco intenso; cuando sea errónea no afectará para nada a la intensidad del afecto.
• Componente afectivo: es el sentimiento en favor o en contra de un objeto social. Es el componente más característico de las actitudes. Aquí radica la diferencia principal con las creencias y las opiniones.
• Componente conductual: es la tendencia a reaccionar hacia los objetos de una determinada manera. Es el componente activo de la actitud.
Las actitudes son estructuras psicológicas no innatas, sino aprendidas, formadas y desarrolladas en la persona a través de su interacción con el medio circundante. Son, pues, resultado de la socialización, en primera instancia al menos, de los significados e interpretaciones de la realidad, en interrelación con la propia personalidad, y cumplen una serie de funciones (Triandis, 1974; Rokeach, 1979; Escámez, 1986a; Ortega, 1986; Payá, 1997)
Las actitudes cumplen una función de autoestima y de autodefensa, ayudándonos a mantener o realzar nuestros sentimientos de confianza hacia nosotros mismos o a protegernos de información no deseada acerca de nosotros mismos, respectivamente. Las actitudes cumplen a menudo una función de motivación a causar una buena impresión.
Por otro lado para explicar la relación entre actitud y conducta Barón (2005) menciona la teoría de la acción razona, dicha teoría sugiere que:
La decisión de comprometerse en una conducta particular es el resultado de un proceso racional en el cual se consideran las opciones de la conducta, se evalúan las consecuencias o resultados de cada una y se llega a una decisión de actuar o no. Esta decisión se refleja entonces en las intenciones conductuales, las cuales influyen fuertemente en la conducta (Ajzen, 1980 y Fishben, 1991).
Rodríguez (1991) plantea que "las actitudes pueden resultar positivas o negativas, según faciliten u obstruyan la manera que la persona tiene de afrontar su realidad en cada momento de su vida".
Las actitudes son la disposición con que afrontamos la realidad en todo momento, pudiendo siempre elegir qué tipo de actitud adoptaremos ante tal o cual evento. Las actitudes marcan pautas de comportamiento no sólo individual, sino que grupal. Una actitud negativa es como un virus, "infecta" a los que están alrededor en el sentido de que son altamente imitables. Afortunadamente, las actitudes positivas también son "virulentas", en el sentido que también es imitable por todos nosotros.
Tipos de Actitud
1) Actitud Emotiva
Cuando dos personas se tratan con afecto, se toca el estrato emocional de ambas. Esta se basa en el conocimiento interno de la otra persona.
El cariño, el enamoramiento y el amor son emociones de mayor intimidad, que van unidas a una actitud de benevolencia.
2) Actitud Desinteresada
Esta no se preocupa, ni exclusiva ni primordialmente, por el propio beneficio,Sino que tiene su centro de enfoque en la otra persona y que no la consideraComo un medio o instrumento, sino como un fin.
Está compuesta por 4 cualidades: Apertura, Disponibilidad, Solicitud y Aceptación.
3) Actitud Manipuladora
Solo ve al otro como un medio, de manera que la atención que se le otorga tiene como meta la búsqueda de un beneficio propio.
4) Actitud Interesada
Puede considerarse como la consecuencia natural de una situación de Indigencia del sujeto: cuando una persona experimenta necesidades Ineludibles, busca todos los medios posibles para satisfacerlas; por ello, ve también en las demás personas un recurso para lograrlo.
5) Actitud Integradora
La comunicación de sujeto a sujeto, además de comprender el mundo interiordel interlocutor y de buscar su propio bien, intenta la unificación oIntegración de las dos personas.
Actitudes Positivas y Negativas
Las actitudes pueden resultar positivas o negativas, según faciliten u obstruyan la manera que la persona tiene de afrontar su realidad en cada momento de su vida. Así una actitud positiva al enfrentar una nueva tarea en el trabajo y de dificultad mayor, sería por ejemplo el considerarla una oportunidad de desarrollo laboral, de ser más especialista en lo que hace, de demostrar que aprende en poco tiempo y lo hace bien, un reto a las propias capacidades etc.
Mientras una actitud negativa al enfrentar la misma nueva tarea, en otra persona puede quedar reflejada en el auto- reflexión "¿¡más trabajo!? Esto no me gusta", o "se están aprovechando de mi buena voluntad".
De modo que las actitudes son la disposición con que afrontamos la realidad en todo momento, pudiendo siempre elegir qué tipo de actitud adoptaremos ante tal o cual evento. Entonces, aquí quiero decir que desde la perspectiva de las actitudes, estas importan más que la situación en particular, debido a que van a determinar de manera significativa los resultados que vamos a tener en esa situación.
Por supuesto que los buenos resultados no se logran sólo con buenas actitudes, hay allí conocimientos, habilidades, experiencia acumulada, entre otros factores. Pero si no está la actitud adecuada, y más bien esta tiene características adversas, es muy difícil que las personas logren trabajar juntas hacia mejores soluciones, y menos poder disfrutar los éxitos alcanzados. ¿Por qué? Porque las actitudes marcan pautas de comportamiento no sólo individual, sino que grupal. Una actitud negativa como un virus "infecta" a los que están alrededor en el sentido de que son altamente imitables. Afortunadamente, las actitudes positivas también son "virulentas", en el sentido que también es imitable por todos nosotros.
Las personas como los equipos de trabajo necesitan encontrar la actitud adecuada para alcanzar sus objetivos y metas, como también identificar aquellas que los alejan de sus propósitos. Jack Welch, ex CEO de General Electric y líder entre los gurúes de la administración moderna de empresas, sostiene que una actitud negativa a través del tiempo va deteriorando la confianza que se ha construido entre las personas que conforman el equipo humano de una empresa, de modo que esta confianza se va debilitando hasta desaparecer junto con el equipo, y por tanto, la capacidad que el equipo tenía para alcanzar resultados de excelencia o superiores, también se ve severamente dañada. Entonces, las actitudes afectan los resultados de una empresa, y como no, de la gestión personal más allá del trabajo.
Bajo esta perspectiva, todos estamos llamados a reconocer y advertir con qué actitudes andamos por el mundo, y qué consecuencias están trayendo sobre nuestras vidas y las de los demás.
Drogas
La Organización Mundial de la Salud ha definido como droga cualquier sustancia que, al ser consumida por el individuo, afecta el organismo, la mente y la conducta.
Es necesario aclarar que la palabra "droga", en su significado más amplio, incluye todos los medicamentos; así, decimos que "se está desarrollando una nueva droga para el SIDA o para el cáncer", sin que nos estemos refiriendo a drogas psicoactivas, o sea, a drogas que actúan especialmente en el cerebro de las personas.
Clasificación de las Drogas:
1) Por Su situación jurídica:
1. Drogas Legales: Son aquellas que la sociedad ha determinado que puedan ser vendidas y consumidas legalmente, como el tabaco y las bebidas alcohólicas.
2. Drogas Ilegales: Son aquellas que la sociedad considera prohibida su venta y consumo, siendo penado por la ley. Como la marihuana y la cocaína entre otras.
Drogas Legales
Cigarrillos
"Aunque el tabaco contiene miles de sustancias, la nicotina es la que más frecuentemente se asocia con la dependencia porque es el componente psicoactivo y causa efectos observables sobre el comportamiento, como cambios en el estado de ánimo, reducción del estrés y mejoras en el rendimiento. Los efectos conductuales asociados con la nicotina, producidos al fumar, incluyen estimulación, mayor atención y concentración, aumento de la memoria, reducción de la ansiedad y supresión del apetito.
El Tabaco se consume principalmente en forma de cigarrillo. La principal característica y objeto de acción de fumar, es el humo de tabaco. El humo de tabaco posee una composición compleja; sus constituyentes pueden ser divididos en cuatro categorías principales: La Nicotina, Alquitranes, Irritantes y Monóxido de Carbono.
Alcohol
"El alcohol se produce por la fermentación del almidón o azúcar que se encuentra en diversas frutas y granos. Las bebidas alcohólicas tienen diferentes cantidades de alcohol en ellas. La cerveza contiene generalmente 5% de alcohol, el vino de 12% a 15% de contenido de alcohol y los licores fuertes alrededor de 45% de alcohol. El alcohol es una sustancia que se consume en mayor cantidad en el mundo y NO es SOLAMENTE un problema de adultos. Se estima que la mayoría de estudiantes de los últimos grados del bachillerato han consumido una bebida alcohólica, a pesar de la edad legal permitida para el consumo que está entre los 18 a 21 años de edad.
Además, un gran porcentaje de adolescentes se pueden calificar como "bebedores problema", esto significa que alcanzan a embriagarse, tienen accidentes relacionados con el consumo de alcohol o tienen problemas con la ley, con familiares y amigos, problemas escolares o problemas con la pareja debido al alcohol. Estos adolescentes se consideran alcohólicos o dependientes del alcohol, lo que significa que experimentan síntomas de abstinencia cuando tratan de dejar o disminuir la bebida y beben compulsivamente a pesar de las consecuencias negativas.
Tranquilizantes sin prescripción medica
"Se consumen generalmente por prescripción médica con el objeto de reducir la ansiedad y angustia en algunos pacientes, para el tratamiento de tensión y para inducir el sueño. Se administran vía oral en pastillas y cápsulas. El problema surge cuando no se emplea adecuadamente o durante periodos muy prolongados.
Hay situaciones en relación al abuso y dependencia a tranquilizantes. La primera de ellas se da en personas que por alguna condición médica comenzaron un tratamiento y por distintos motivos lo continúan en el tiempo mucho más allá de lo que justifica su enfermedad. Otras personas abusan completamente de los tranquilizantes. Es decir, las consumen con fines recreativos y por último están las personas que son dependientes a otras sustancias y buscan los tranquilizantes con doble fin. Para mitigar los efectos no deseados de otras drogas como sustituto cuando no las pueden conseguir.
Los tranquilizantes son los terceros medicamentos más prescritos en el sistema público de salud. La mayoría de ellos pertenecen al grupo de las benzodiacepinas, fármacos con un riesgo cierto de adicción y efectos no deseados, como por ejemplo, la sobre sedación y su interacción con otras sustancias.
Estimulantes sin prescripción médica
"Los estimulantes son sustancias que intensifican la actividad cerebral, ocasionan un aumento de la agudeza mental, combaten el sueño, producen una sensación de energía incrementada y, a dosis elevadas, estados de excitación extrema.
Entre las sustancias estimulantes se encuentran las anfetaminas, la cocaína, la estricnina, el café, el té, el chocolate, bebidas de cola, bebidas energéticas y la nicotina. Esta última combina efectos estimulantes y depresores, por lo que la consideraremos en forma separada.
Las consecuencias del abuso de estimulantes pueden ser peligrosas. Aunque su uso tal vez no lleve a la dependencia física y al síndrome de abstinencia, los estimulantes pueden ser adictivos en el sentido de que las personas comienzan a usarlos compulsivamente. Cuando se toman dosis altas de algunos estimulantes repetidamente durante un corto período de tiempo, se pueden producir sentimientos de hostilidad o de paranoia. Además, el uso de dosis altas de un estimulante puede ocasionar que la temperatura del cuerpo suba peligrosamente y causar latidos irregulares del corazón. También existe la posibilidad de un fallo cardiovascular o convulsiones letales
Drogas Ilegales
Marihuana
La Marihuana también llamada Cannabis, Moña, Mota científicamente conocida como Cannabis Sativa, es una mezcla verde o gris de flores secas cortadas en trocitos de la planta del cáñamo cannabis sativa, que generalmente se fuma en forma de cigarrillo. Los efectos a corto plazo del consumo de la marihuana incluyendo problemas con la memoria y el aprendizaje, percepción distorsionada, dificultad para pensar y resolver problemas, perdida de la coordinación y un aumento en el ritmo cardiaco, ansiedad y ataques de pánico.
Los consumidores actuales de marihuana frecuentemente suelen tener los mismos efectos en los pulmones que los fumadores de tabaco, efectos en la frecuencia cardiaca y la tensión arterial, en el embarazo y muchos otros ¨.
La Marihuana es una de las drogas ilícitas de mayor circulación y consumo entre jóvenes estudiantes ya que su presentación es muy similar a la del cigarrillo pudiéndose ocultar fácilmente en una cajetilla de cigarros, papel de arroz, etc.
Cocaína
"La cocaína es un estimulante sumamente adictivo que afecta directamente al cerebro. Esta droga ha sido llamada la droga de los años ochenta y noventa por su gran popularidad y uso extendido en esas décadas. Sin embargo, no es una droga nueva. En realidad, la cocaína es una de las drogas conocidas de más antigüedad. La sustancia química pura, el clorhidrato de cocaína, se ha abusado por más de 100 años, y las hojas de la coca, de donde se obtiene la cocaína, se han ingerido por miles de años.
La cocaína es el estimulante de mayor consumo en el mundo, es en realidad el prototipo de las drogas estimulantes. En altas dosis es capaz de producir un estado de excitación eufórica e inclusive experiencias alucinatorias. Estas propiedades son bien conocidas por los consumidores habituales de la droga que los han llevado a una gran dependencia.
Inhalables
"Los inhalables, son sustancias que tienen la propiedad de volatizarse a temperatura ambiente debido a que su punto de ebullición es bajo. Por sus propiedades psicoactivas se les utiliza para alterar el estado mental de las personas que las consumen, puesto que se volatilizan a la temperatura ambiente, la mayor parte de las veces se administran por vía de la inhalación.
Los inhalables actúan rápidamente como si fueran inyectados a la sangre. Los efectos de los inhalables son nauseas, estornudos, tos, hemorragias nasales, sensación y aspecto de cansancio, mal aliento, falta de coordinación y pérdida del apetito.
Drogas duras y blandas
La diferencia entre una droga dura y una droga blanda es que aquella causa una adicción y/o una dependencia física y psíquica, mientras que una droga blanda solamente causa una sola adicción y/o dependencia, la cual puede ser a nivel psíquico solo o físico solo.
Drogas duras: la cocaína, los opioides (morfina, heroína, etc.), el alcohol, o las anfetaminas son comúnmente descritas como drogas duras.
Drogas blandas: el término es aplicado generalmente a los derivados del cannabis (marihuana, hachís, etc.), a la cafeína, etc. Por lo general el término se aplica a sustancias cuyo consumo no conlleva patrones de comportamiento social desadaptativos.
Charles G. Morris y Albert A. Maisto (2005) Hace referencia de los estados alterados inducidos mediante droga psicoactiva, es decir, mediante sustancias químicas que cambian el estado de ánimo y las percepciones.
Por su efecto sobre el organismo, especialmente el cerebro, se clasifican en: "depresores, estimulantes y alucinógenos". (Charles Morris 2007) A pesar de no ser tan rígidas, la división ayuda para organizar nuestro conocimiento acerca de ellas.
Depresores: Son sustancias químicas que representan la conducta y el pensamiento al agilizar los impulsos nerviosos o reducir su rapidez. En términos generales el alcohol, los barbitúricos y los opiáceos producen efectos depresores.
Estimulantes: Las drogas clasificadas como estimulantes cafeína, nicotina, anfetaminas y cocaína tienen usos legítimos, pero se prestan a ciertos abusos porque producen sentimientos de optimismo y de energía ilimitada. El café y los cigarrillos contienen potentes drogas que alteran la mente. Aparte de sus efectos físicos nocivos, comparten muchas características de las "drogas más serias" que hemos venido examinando. La cafeína se encuentra en el café, en el té, en el cacao pertenecen a una clase de drogas denominadas estimulantes de xantina.
Alucinógenos: Los alucinógenos incluyen la dietilamida del acido lisérgico, la mezcalina, el peyote, la psicolobina y la fenciclidina. Muchos de los alucinógenos ocurren en formas naturales como por ejemplo los hongos y otras plantas de esta familia. En su forma natural comparten una historia muy antigua con otras drogas que alteran la conciencia.
Actitud hacia el consumo de drogas
Caritas Española (1971) hace referencia de que por lo general las actitudes se configuran en el individuo a partir de la socialización que ha sido objeto la cual no es solo experiencias ya aprendizaje propio; es también y en gran parte cultural: ambiente, instrucción, adoctrinamiento religioso, influjo familiar, etc.
Schoeck Helmut (1973) expone que las ¨actitudes no nacen solamente de unos contenidos de conciencia racionales perceptibles para el individuo y su observador, sino también de los procesos emocionales que legan hasta el campo físico de la personalidad. Una gran antipatía acompañada de sentimientos de aversión, frente a una determinada categoría de personas, puede ser considerada como actitud¨.
Una peculiaridad de las actitudes es que tienden a la generalización, es decir se hacen extensivas a sensaciones o hechos que se asemejan o se parecen muy poco a las sensaciones que primitivamente la originaron. Así, una actitud de aversión a la droga como tal se hace extensible al consumidor, al grupo de amigos e incluso a toda una generación joven.
En general las investigaciones realizadas sobre Actitudes de la población ante las drogas concluyen que: un 77% la mayor parte de la población manifiesta una actitud de claro rechazo ante el mundo de las drogas. El 17% se manifiesta de acuerdo, y alrededor del 6% muestra una actitud de duda y cierta inseguridad de sus actitudes. En los más jóvenes, se detecta una clara actitud de tolerancia con respecto al mundo de las drogas como fenómeno social, si bien aquelas actitudes que se acercan más a la experiencia de consumo ya difieren en poco respecto de la población general. Las actitudes favorables a las drogas aparecen muy vinculadas a las imágenes positivas ¨normales¨ de los habituales consumidores de drogas, y al propio consumo de drogas. A mayor asiduidad en el consumo de drogas, mayor reforzamiento y afirmación de las actitudes favorables hacia las drogas.
Los individuos que obtengan puntuaciones por debajo del puntaje 66 tendrán una actitud negativa, los que por el contrario obtengan una calificación mayor a este puntaje tendrán una actitud positiva. El 95% de los alumnos presenta una actitud desfavorable o negativa hacia el consumo de drogas, mientras que el 5% presenta una actitud favorable.
A mayor edad hay un descenso en las medias de actitud hacia el consumo de drogas en los estudiantes. Sin embargo, este descenso no es significativo. Todos los grupos tienen medias similares a un a=0.05.
Los adolescentes entre 12 y 14 años tienen una actitud significativamente más favorable hacia el consumo de drogas en comparación a los adolescentes de 15 a 18 años a un nivel de significancia del 5%, sin embargo, ambos grupos poseen una actitud negativa hacia el consumo de drogas.
Alvarenga, Enio; Portillo, Ronmel (2000). La edad de inicio en el consumo, para las drogas es entre 14 y 17 años. Según la Investigación de Conocimientos, Actitudes y Practicas Sobre Fármaco dependencia en los Estudiantes.
No existe diferencia significativa entre la actitud de los hombres y mujeres respecto al consumo de drogas a un nivel de significancia del 5%, sin embargo, ambos grupos poseen una actitud negativa hacia el consumo de drogas.
Los datos obtenidos sobre la influencia negativa del consumo de drogas en el rendimiento académico coinciden tanto hombres como mujeres ya que en los hombres un 48% se muestra totalmente de acuerdo en que las drogas afecta su rendimiento académico, mientras que en las mujeres un 47% se muestra totalmente de acuerdo en que las drogas afecta su rendimiento académico.
Los datos obtenidos sobre la influencia negativa del consumo de drogas afecta la actividad deportiva se presentan en las mujeres como una discrepancia ya en un 33% de la muestra de mujeres se muestra de acuerdo y a la misma ves un 33% se muestra en desacuerdo en que las drogas afectan su actividad deportiva, mientras que los hombres un 65% muestra una actitud negativa ya que se muestra totalmente de acuerdo en que las drogas afecta su rendimiento académico.
Los resultados arrojan que tanto para los hombres como para las mujeres la presión social no es un factor determinante en el inicio de consumo de drogas ya que ambos están totalmente en desacuerdo. Los hombres representan un total de 61% mientras que las mujeres representan un 58% en totalmente en desacuerdo.
Los resultados arrojan que los hombres presentan una actitud más favorable que las mujeres ya que los hombres presentan un 33% de actitud favorable mientras que las mujeres se muestran indecisas con un 31% en que las drogas no generan dependencia.
Los resultados muestran que los hombres como las mujeres tienen una actitud favorable hacia el consumo ya que un 62% de los hombres están en totalmente en desacuerdo que las drogas no perjudican su salud, mientras que las mujeres en un 57% están en totalmente desacuerdo que las drogas no perjudican su salud.
Antecedentes
Ortega Ruiz Pedro (1993) de la Facultad de Educación de la Universidad de Murcia de España han analizado las actitudes con respecto al consumo de drogas, utilizado el "cuestionario escala sobre actitudes de los estudiantes del ciclo superior de EGB ante las drogas" de los profs. J. Escámez y B. Martínez (Escámez, J. 1900). La estructura del cuestionario aparece dividida en seis categorías o conjuntos actitudinales en función de la información que se quiere obtener:
1. Las drogas no perjudican la salud, 2. Presión social para el consumo de drogas, 3. Las drogas no generan dependencia., 4. Efectos placenteros del consumo de drogas., 5. El consumo de drogas no perjudica para la práctica del deporte y el rendimiento escolar., 6. Tolerancia-aceptación social del consumo de drogas.
Los sujetos que conformaron la muestra del estudio eran un total de 5.263 alumnos del total de la muestra se distribuyen casi por igual entre ambos sexos, con una ligera diferencia a favor de los varones (el 57.8% son varones y el 42% son mujeres).
De los datos de este estudio se desprende una estrecha asociación entre sexo y actitudes hacia la droga, mostrándose más favorable los chicos en porcentajes altamente significativos, resultados que vienen a confirmar los obtenidos en otros estudios (Ortega y Mínguez, 1990).
Los resultados globales nos muestran una población que desconoce en un porcentaje elevado
(25.8%) las dificultades para dejar el consumo de drogas. Si a este dato se añade que el 17.2% no tiene aún una posición tomada o se declara indiferente, se pone aún más de manifiesto una clara situación de desprotección de los alumnos de E.G.B. frente al fenómeno de la droga. Asimismo, nos parece elevado el porcentaje (20.3%) de los alumnos que afirman que las drogas no tienen incidencia negativa en la práctica del deporte. Por lo que a la aceptación de las drogas se refiere, los porcentajes obtenidos alcanzan niveles más bien bajos (14.9%), singularmente las drogas ilegales (8%). El carácter doméstico y uso habitual en todas las clases sociales del tabaco y alcohol facilita su aceptación y no inclusión en la categoría de las drogas. No obstante, el porcentaje de aceptación de las mismas es, en cierto modo, bajo (16.15% y 18.9% alcohol y tabaco respectivamente). Estos datos revelan una creciente aceptación del consumo de alcohol en la población joven. En nuestro estudio (Ortega y Mínguez, 1990) el porcentaje de alumnos de BUP-FP que manifiesta actitudes positivas hacia el alcohol se sitúa en el 28.7%, no registrándose aumento alguno respecto al tabaco. Estos datos deben constituir para todos un serio motivo de reflexión. Es cierto que los niveles de aceptación de las drogas son bajos, por ahora. Sin embargo, las posiciones de "comprensión" o "tolerancia social", de desconocimiento de la dependencia que el consumo de drogas genera, reflejadas en este estudio, ponen de manifiesto la existencia de un colectivo considerable de alumnos, carentes de los recursos o conocimientos necesarios que les permitan afrontar, con garantías de éxito, el rechazo de un mundo supuestamente feliz que la droga les ofrece. Preocupación especial nos merece el colectivo de alumnos de poblaciones marginales: mayor presión social y mayor comprensión o tolerancia del consumo de drogas, aunque, todavía no se haya traducido en un aumento significativo de las actitudes favorables hacia las mismas.
Variables
V.D. ACTITUD.
D.O.: Se aplicará el "cuestionario escala sobre actitudes de los estudiantes del ciclo superior de EGB ante las drogas" dividida en seis categorías o conjuntos actitudinales:
(Ver Anexos)
1. Las drogas no perjudican la salud.
2. Presión social para el consumo de drogas.
3. Las drogas no generan dependencia.
4. Efectos placenteros del consumo de drogas.
5. El consumo de drogas no perjudica para la práctica del deporte y el rendimiento escolar.
6. Tolerancia-aceptación social del consumo de drogas.
V.I. CONSUMO DE DROGAS.
D.O.: Aplicar el cuestionario para averiguar la actitud, sexo y edad.
Variables de Contraste
Hipótesis
H1: La actitud de los estudiantes hacia el consumo de drogas es favorable. (80% esperado).
H2: La actitud de los estudiantes difiere significativamente en relación a la edad.
H3: Los adolescentes entre 12 y 14 años tienen una actitud más favorable hacia el consumo de drogas.
H4: Los adolescentes del sexo masculino mostraron una actitud más significativa hacia el consumo de drogas que las mujeres.
H5: Los adolescentes del sexo masculino en la edad de 12 a 14 años presentan una mayor actitud favorable o están totalmente de acuerdo que el consumo de drogas afecta su rendimiento académico, que las mujeres de 12 a 14 años. (Ítem 22).
H 6: Los adolescentes del sexo femenino en la edad de 15 a 18 años presentan una mayor actitud favorable que los hombres de 15 a 18 años que el consumo de drogas afecta su actividad deportiva. (Ítem 5).
H 7: Los adolescentes del sexo masculino presentan una actitud más favorable que las mujeres o están totalmente de acuerdo que la presión social es un factor importante en el inicio del consumo de drogas. (Ítem 2).
H 8: Los adolescentes del sexo masculino presentan una actitud más favorable que las mujeres en que el consumo de drogas no genera dependencia. (Ítem 8).
H 9: Los adolescentes entre los 12 y 14 años del sexo masculino presentan una mayor actitud favorable que las mujeres en que, el consumo de drogas no perjudica su salud. (Ítem 19).
Metodología
PARTICIPANTES
Los sujetos que componen la muestra de estudio son estudiantes de primero, segundo y tercero de Ciclo Común del Instituto 21 de Octubre de Tegucigalpa siendo un total de 318 estudiantes, elegidos mediante un muestreo no probabilístico intencional. Del total de la muestra 52 son hombres y 36 son mujeres.
INSTRUMENTO
Para el conocimiento de las actitudes hacia el consumo de drogas en la población estudiada nos hemos servido de la técnica del cuestionario o auto informe. En concreto, hemos utilizado el "cuestionario- escala sobre actitudes de los estudiantes del ciclo superior de EGB ante las drogas" de los profs. J. Escámez y B. Martínez (Escámez, J. 1900). La estructura del cuestionario aparece dividida en seis categorías o conjuntos actitudinales en función de la información que se quiere obtener:
1. Las drogas no perjudican la salud (ítems: 1, 9,13, 15, 17, 19).
2. Presión social para el consumo de drogas (ítems: 2, 12, 14, 21).
3. Las drogas no generan dependencia (ítems: 7, 8, 10)
4. Efectos placenteros del consumo de drogas (ítems: 4, 6, 16).
5. El consumo de drogas no perjudica para la práctica del deporte y el rendimiento escolar (ítems: 5, 11, 22).
6. Tolerancia-aceptación social del consumo de drogas (ítems: 3, 18, 20).
(Ver Anexos).
PROCEDIMIENTO
1. Definición del problema.
Se estableció como problema de estudio la actitud de los adolescentes hacia el consumo de drogas.
2. Elaboración del marco teórico.
Se recopilo información proveniente de libros e investigaciones encontradas en internet.
3. Elaboración de hipótesis.
Se elaboraron Hipótesis en base a la información descrita en al marco teórico.
4. Aplicación del instrumento.
Se aplico el instrumento en el colegio 21 de Octubre, a estudiantes de primero, segundo y tercero de Ciclo Común con previa autorización del director y consejeros del centro de estudios. A los estudiantes se les específico que su participación en la investigación era de forma voluntaria, todos los sujetos fueron libres de llenar el cuestionario y a todos ellos se les informó de la confidencialidad de sus respuestas.
5. Tabulación de los datos.
Se ingresaron los datos del instrumento al programa estadístico SPSS 17.
6. Análisis e interpretación de resultados.
Con los resultados obtenidos de la tabulación del instrumento se pudo aceptar o rechazar las hipótesis elaboradas con anterioridad.
7. Elaboración y presentación del informe.
Análisis e interpretación de resultados
H 1: La actitud de los estudiantes hacia el consumo de drogas es favorable en un 80%.
Actitud Hacia El Consumo De Drogas | ||
N | 88 | |
Media | 45.26 | |
Desv. típ. | 12.000 | |
Mínimo | 25 | |
Máximo | 84 | |
Percentil 50 | 42.50 |
Los individuos que obtengan puntuaciones por debajo del puntaje 66 tendrán una actitud negativa, los que por el contrario obtengan una calificación mayor a este puntaje tendrán una actitud positiva. El 95% de los alumnos presenta una actitud desfavorable o negativa hacia el consumo de drogas, mientras que el 5% presenta una actitud favorable.
Hipótesis 2:
H 2: La actitud de los estudiantes hacia el consumo de drogas difiere significativamente en relación a la edad.
H02: La actitud de los estudiantes hacia el consumo de drogas no difiere significativamente en relación a la edad.
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