- Introducción
- Objetivos
- Cuidados durante el embarazo
- Cuidados prenatales en el primer trimestre
- Cuidado prenatal en el segundo trimestre
- Cuidado prenatal en el tercer trimestre
- Cuidados pre-natal
- Conclusiones
- Bibliografía
- Dedicatoria
Prologo
Mostrar al público en general que el embarazo es tanto una felicidad como también una adquisición de una responsabilidad muy seria, ya que en el mundo real se toma dicha responsabilidad como algo trivial y de poco valor
Chipana Rodrigo, Anna Lizbeth.
El presente trabajo monográfico de cuidados del embarazo, tiene como finalidad contribuir a disminuir la morbimortalidad materna perinatal, ya que con este estudio estamos demostrando la importancia que tiene la educación prenatal durante el embarazo por parte del personal de salud.
La educación constituye uno de los derechos humanos fundamentales para la embarazada ya que mediante esta se va a transmitir conocimientos sobre el reconocimiento de los signos de alarma del embarazo, parto y el alumbramiento, y la importancia que tiene el parto institucional, con una educación adecuada y oportuna se va contribuir a disminuir las complicaciones materna . La atención de parto en un establecimiento de salud es fundamental ya que requiere la atención de un profesional competente para ello, ya que una mala técnica para extraer la placenta puede ocasionar una muerte materna y a consecuencia de ello se suscita un gran problema social.
Con una adecuada educación que se brinda a la embarazada contribuiremos a que en el Departamento de Puno, se formen niños más humanistas y que siembran la paz.
En cuanto a la importancia y el alcance está demostrado que la educación prenatal, juega un rol importante en la embarazada, ya que mediante ello vamos a tener una menor cantidad de complicaciones durante el embarazo y el alumbramiento y así mismo se tendrá como resultado de una buena educación prenatal niños alegres, buenos que rechazan la violencia, los mismos que han recibido una adecuada educación en el periodo prenatal, mediante la impregnación celular donde el hijo recibe al mismo tiempo que se forma. La educación permanente durante el embarazo sobre los cuidados que debe tener es muy importante, ya que esta en un juego dos vidas tanto como de la madre como del niño por ello se debe cambiar algunas actitudes negativas que tienden las gestantes por otras que son importantes para ella
Fortalecer los conocimientos de la madre gestante. para evitar complicaciones durante el embarazo.
Lograr que la madre gestante practique de los cuidados del embarazo
Determinar que la gestante asuma una responsabilidad responsable.
Mejorar el estado nutricional de la madre gestante
Recibir buen cuidado antes, durante y después de su embarazo puede ayudar a su bebé a crecer y desarrollarse, y a mantenerlos a ambos saludables. Es la mejor manera de asegurar que sus pequeños tengan un buen inicio para una vida saludable.
CUIDADO PRENATAL
Un buen cuidado prenatal incluye una buena alimentación y buenos hábitos de salud antes y durante el embarazo. Idealmente, usted debe hablar con su proveedor de atención médica antes de empezar a intentar quedar embarazada. He aquí algunas cosas que deberá hacer:
Elegir a un proveedor de atención: Será necesario que elija un proveedor para su embarazo y parto. Este proveedor le ofrecerá servicios de cuidado prenatal, de parto y de posparto.
Tomar ácido fólico: Si está contemplando quedar embarazada, o si ya lo está, debe tomar un suplemento con al menos 400 microgramos de ácido fólico todos los días. Tomar ácido fólico reducirá el riesgo de ciertos defectos congénitos.
También debería:
Hablar con su proveedor sobre cualquier medicina que tome. Esto incluye medicinas de venta libre. Solo debe tomar las medicinas que su proveedor considere que es seguro tomar mientras está embarazada.
Dejar de fumar, si lo hace actualmente.
Asistir a consultas y exámenes prenatales: Usted visitará muchas veces a su proveedor durante el embarazo para recibir cuidado prenatal. La cantidad de visitas y los tipos de exámenes que se le harán cambiarán según en qué punto de su embarazo se encuentre:
Cuidados prenatales en el primer trimestre
Trimestre significa "tres meses". Un embarazo normal dura alrededor de nueve meses y tiene tres trimestres.
El primer trimestre comienza cuando el bebé es concebido y va hasta la semana 14 del embarazo. El médico puede hablar sobre su embarazo en semanas, en lugar de meses o trimestres.
Su primera consulta prenatal
Usted debe programar su primera consulta prenatal poco después de saber que está embarazada. El médico o la enfermera obstétrica:
Le sacarán sangre.
Realizarán un examen pélvico completo.
Harán una citología vaginal y cultivos para buscar infecciones o problemas.
El médico o la enfermera obstétrica auscultarán los latidos cardíacos de su bebé, pero no podrán escucharlos. Casi siempre, los latidos del corazón no se puede escuchar hasta al menos la sexta o séptima semana.
Durante esta primera consulta, el médico o la enfermera obstétrica le harán preguntas sobre:
Su salud general.
Cualquier problema de salud que tenga.
Anteriores embarazos.
Medicamentos, hierbas o vitaminas que tome.
Si hace ejercicio o no.
Si fuma o bebe alcohol.
Si usted o su pareja tienen trastornos genéticos o problemas de salud hereditarios.
Usted tendrá muchas consultas para hablar sobre su plan para el parto, pero puede analizarlo con su médico o enfermera obstétrica en su primera visita.
La primera consulta también será un buen momento para hablar respecto a:
Comer sanamente, hacer ejercicio y cambios en el estilo de vida mientras esté embarazada.
Síntomas comunes durante el embarazo como fatiga, acidez gástrica y venas varicosas.
Cómo manejar las náuseas del embarazo.
Qué hacer respecto al sangrado vaginal a comienzos del embarazo.
También recibirá vitaminas prenatales con hierro si aún no las está tomando.
Consultas prenatales de control
En el primer trimestre, usted tendrá una consulta prenatal cada mes. Las consultas pueden ser rápidas, pero igualmente son importantes. Está bien si lleva consigo a su pareja o a su acompañante para el trabajo de parto.
Durante las consultas, el médico o la enfermera obstétrica:
La pesarán.
Revisarán su presión arterial.
Examinarán los ruidos cardíacos fetales.
Tomarán una muestra de orina para buscar azúcar o proteína. Si se detecta cualquiera de las dos, podría significar que tiene diabetes gestacional o hipertensión arterial causada por el embarazo.
Al final de cada consulta, el médico o la enfermera obstétrica le dirán qué cambios debe esperar antes de su próxima consulta. Coméntele al médico si tiene algún tipo de problemas o preocupaciones. Está bien hablar al respecto incluso si no siente que sean importantes o relacionados con su embarazo.
Exámenes de laboratorio
En su primera consulta, el médico o la enfermera obstétrica le sacarán sangre para un grupo de exámenes conocidos como pruebas prenatales. Estos exámenes se realizan para encontrar problemas o infecciones a comienzos del embarazo.
Este grupo de pruebas incluye, entre otros:
Un hemograma o conteo sanguíneo completo (CSC).
Determinación del grupo sanguíneo (incluso el factor Rh).
Examen del antígeno viral para rubéola (muestra qué tan inmune es usted a esta enfermedad).
Examen de hepatitis (muestra si usted tiene hepatitis A, B o C).
Examen de sífilis.
Examen de VIH (muestra si usted obtiene un resultado positivo para el virus que causa el SIDA).
Examen de fibrosis quística (muestra si usted tiene fibrosis quística).
Un análisis de orina y un hemocultivo.
Ecografías
Una ecografía (ultrasonido) es un procedimiento sencillo e indoloro. Se coloca una varita que utiliza ondas sonoras sobre su abdomen. Estas ondas sonoras le permitirán al médico o a la enfermera obstétrica observar al bebé.
A usted le deben hacer una ecografía en el primer trimestre para tener una idea de la fecha probable de parto.
Pruebas genéticas
A todas las mujeres se les ofrecen pruebas genéticas para detectar defectos de nacimiento y problemas genéticos, tales como el síndrome de Down o anomalías del cerebro y la columna vertebral.
Si su médico cree que usted necesita alguna de estas pruebas, hable sobre cuáles serán las mejores para usted.
No olvide preguntar acerca de lo que los resultados podrían significar para usted y su bebé.
Un asesor en genética puede ayudarle a entender sus riesgos y resultados de las pruebas.
Hay muchas opciones ahora para las pruebas genéticas. Algunas de estas pruebas presentan algunos riesgos para el bebé, mientras que otras no.
Las mujeres que pueden estar en mayor riesgo de estos problemas genéticos abarcan:
Mujeres que han tenido un feto con problemas genéticos en embarazos anteriores
Mujeres de 35 años en adelante
Mujeres con fuertes antecedentes familiares de defectos de nacimiento hereditarios
En una prueba, su proveedor de atención médica puede utilizar un ultrasonido para medir la parte posterior del cuello del bebé. Esto se llama translucencia nucal.
También se hace un examen de sangre.
Juntas, estas dos mediciones le indicarán si el bebé está en riesgo de tener síndrome de Down.
Si se realiza un examen llamado prueba de detección cuádruple en el segundo trimestre, los resultados de ambas pruebas son más precisos que hacer cualquiera de las dos pruebas sola. Esto se denomina pruebas de detección integradas.
Otra prueba, llamada muestra de vellosidades crónicas (MVC), puede detectar el síndrome de Down y otros trastornos genéticos incluso ya a las 10 semanas de un embarazo.
Un examen más novedoso, llamado prueba de ADN libre de células, busca pequeños fragmentos de los genes de su bebé en una muestra de sangre de la madre. Esta prueba es más reciente, pero es muy prometedora para lograr precisión sin riesgos de un aborto espontáneo.
Hay otras pruebas que se pueden realizar en el segundo trimestre.
Cuándo llamar al médico
Llame a su proveedor si:
Tiene sangrado o cólicos.
Tiene mayor flujo vaginal o con olor.
Tiene fiebre, escalofríos o dolor al orinar.
Tiene alguna pregunta o inquietud respecto a su salud o al embarazo.
Cuidado prenatal en el segundo trimestre
Trimestre significa tres meses. Un embarazo normal es de alrededor de nueve meses y tiene tres trimestres.
El médico le puede hablar acerca de su embarazo en semanas, en lugar de meses o trimestres. El segundo trimestre comienza en la semana 14 y va hasta la semana 28.
Consultas prenatales de rutina
En el segundo trimestre, usted tendrá una consulta prenatal cada mes. Las consultas pueden ser rápidas, pero todavía siguen siendo importantes. ESTÁ BIEN llevar consigo a su pareja o a su acompañante para el trabajo de parto.
Las consultas durante este trimestre serán un buen momento para hablar sobre:
Síntomas comunes durante el embarazo como fatiga, acidez gástrica, venas varicosas y otros problemas comunes
El manejo del dolor de espalda y otros dolores y molestias durante el embarazo
Durante las consultas, su proveedor:
La pesarán.
Le medirán su abdomen para ver si su bebé está creciendo como se esperaba.
Revisarán su presión arterial.
Algunas veces, se tomará una muestra de orina para analizar si contiene azúcar o proteína. Si se detecta cualquiera de éstas, podría significar que tiene diabetes gestacional o hipertensión arterial causada por el embarazo.
Al final de cada consulta, su proveedor le dirá qué cambios puede esperar antes de su próxima consulta. Coméntele a su proveedor si tiene algún problema o inquietud. ESTÁ BIEN hablar respecto a cualquier problema o inquietud, incluso si usted no siente que sean importantes o relacionados con el embarazo.
Pruebas de laboratorio
Pruebas de hemoglobina. Miden la cantidad de glóbulos rojos en la sangre. Muy pocos glóbulos rojos sanguíneos pueden significar que usted tiene anemia. Esto es un problema común en el embarazo, aunque fácil de corregir.
Examen de tolerancia a la glucosa. Verifica si hay signos de diabetes que puedan comenzar durante el embarazo. En este examen, el médico le dará un líquido dulce. Una hora más tarde, se le sacará sangre para verificar los niveles de azúcar sanguíneo. Si los resultados no son normales, usted tendrá un examen de tolerancia a la glucosa más prolongado.
Detección de anticuerpos. Se hace si la madre es Rh negativo. Si usted es Rh negativo, puede necesitar una inyección llamada RhoGAM alrededor de la semana 28 del embarazo.
Ecografías
Usted debe someterse a una ecografía (ultrasonido) alrededor de la semana 20 del embarazo. Una ecografía es un procedimiento sencillo e indoloro. Una varita que usa ondas sonoras se coloca en su vientre. Las ondas sonoras les permitirán al médico o a la enfermera obstétrica observar al bebé.
Esta ecografía se utiliza normalmente para evaluar la anatomía del bebé. Se visualizarán el corazón, los riñones, las extremidades y otras estructuras.
La ecografía puede detectar anomalías fetales o defectos de nacimiento aproximadamente la mitad de las veces. También se utiliza para determinar el sexo del bebé. Antes de este procedimiento, piense si quiere o no saber esta información y coméntele sus deseos a al proveedor que realiza la ecografía con anticipación.
Pruebas genéticas
A todas las mujeres se les ofrecen pruebas genéticas para detectar defectos de nacimiento y problemas genéticos, tales como el síndrome de Down o anomalías del cerebro y la columna vertebral.
Si su proveedor piensa que usted necesita alguna de estas pruebas, hable sobre cuáles serán las mejores para usted.
Asegúrese de preguntar acerca de lo que los resultados podrían significar para usted y su bebé.
Un asesor en genética puede ayudarle a entender sus riesgos y resultados de las pruebas.
Hay muchas opciones para las pruebas genéticas. Algunas de estas pruebas conllevan algún riesgo, mientras que otras no.
Las mujeres que pueden estar en mayor riesgo de estos problemas incluyen:
Mujeres que han tenido un feto con anomalías genéticas en embarazos anteriores
Mujeres de 35 en adelante
Mujeres con fuertes antecedentes familiares de defectos de nacimiento hereditarios
La mayoría de las pruebas genéticas se ofrecen y se analizan en el primer trimestre. Sin embargo, algunas se pueden llevar a cabo en el segundo trimestre o se hacen parcialmente en el primero y segundo trimestres.
Para la prueba de detección cuádruple, se le extrae sangre a la madre y se envía a un laboratorio.
Se realiza entre las semanas 15 y 22 del embarazo. Es más exacta cuando se hace entre las semanas 16 y 18.
Los resultados no diagnostican un problema o enfermedad. En vez de esto, les ayudarán al médico o a la enfermera obstétrica a decidir si se necesitan más pruebas.
La amniocentesis es un examen que se hace entre las semanas 14 y 20:
Su proveedor introducirá una aguja a través del abdomen hasta el saco amniótico (bolsa de líquido que rodea al bebé).
Se extrae una pequeña cantidad de líquido y se envía a un laboratorio.
Cuándo llamar al médico en el segundo trimestre
Llame a su proveedor si:
Tiene cualquier tipo de signos o síntomas que no sean normales.
Está pensando en tomar cualquier medicamento nuevo, vitaminas o hierbas.
Tiene algún sangrado.
Ha aumentado el flujo vaginal o si éste tiene olor.
Tiene fiebre, escalofríos o dolor al orinar.
Tiene cólico o dolor abdominal bajo moderado o intenso.
Tiene alguna pregunta o inquietud respecto a su salud o al embarazo.
Cuidado prenatal en el tercer trimestre
Trimestre significa tres meses. Un embarazo normal es de nueve meses aproximadamente y tiene tres trimestres.
El médico puede hablar de su embarazo en semanas, en lugar de meses o trimestres. El tercer trimestre va de la semana 28 a la semana 40.
Espere aumento de la fatiga durante este tiempo. Mucha de su energía corporal está encaminada a apoyar a un feto en rápido crecimiento. Es común sentir la necesidad de reducir sus actividades y su carga de trabajo y descansar un poco durante el día.
La acidez gástrica y el lumbago son también quejas comunes en este momento en el embarazo. Cuando usted está embarazada, su aparato digestivo se vuelve lento. Esto puede causar acidez gástrica. Además, el peso extra que está cargando ejerce presión sobre los músculos y las articulaciones.
Es importante que siga:
Comiendo bien, incluyendo verduras y alimentos ricos en proteínas con frecuencia y en pequeñas cantidades.
Descansando según sea necesario.
Haciendo ejercicio o dando paseos casi todos los días.
Consultas prenatales de rutina
En su tercer trimestre, usted tendrá una consulta prenatal cada 2 semanas hasta llegar a las 36. Después de eso, verá a su proveedor cada semana.
Las consultas pueden ser rápidas, pero todavía siguen siendo importantes. Está bien si lleva consigo a su pareja o a su acompañante para el trabajo de parto.
Durante las consultas:
La pesarán
Le medirán su abdomen para ver si su bebé está creciendo como se esperaba
Revisarán su presión arterial
Le tomarán una muestra de orina para buscar proteína urinaria si tiene hipertensión arterial
Su proveedor también le puede hacer un examen pélvico para ver si su cuello uterino está dilatándose.
Al final de cada consulta, el médico o la enfermera obstétrica le dirán qué cambios puede esperar antes de su próxima consulta. Coméntele a su proveedor si tiene algún problema o inquietud. ESTÁ BIEN hablar al respecto incluso si siente que NO son importantes o relacionados con su embarazo.
Exámenes de laboratorio y ecografías
No hay otras pruebas de laboratorio o ecografías (ultrasonidos) de rutina para cada mujer embarazada en el tercer trimestre. Ciertas pruebas de laboratorio y exámenes para vigilar al bebé se pueden hacer para las mujeres que:
Tengan un embarazo de alto riesgo, como cuando el bebé no está creciendo.
Tengan un problema de salud, como diabetes o presión arterial alta.
Hayan tenido problemas en un embarazo anterior.
Estén pasadas de tiempo (embarazo de más de 40 semanas).
Revisar el movimiento de su bebé
Entre las citas, usted tendrá que estar atenta a qué tanto se está moviendo el bebé. A medida que se acerca a la fecha probable de parto, y el bebé crece más, usted debería notar un patrón de movimiento diferente del que tenía antes en su embarazo.
Usted notará períodos de actividad y períodos de inactividad.
Los períodos de actividad serán sobre todo movimientos de rodar y retorcerse y unas cuantas patadas muy duras y fuertes.
Aún debe sentir al bebé moverse con frecuencia durante el día.
Esté atenta a los patrones de movimiento del bebé. Si de repente, el bebé parece estar moviéndose menos, consuma un refrigerio y luego acuéstese durante unos minutos. Si aún así no siente mucho movimiento, llame al médico o a la enfermera obstétrica.
Llame a su proveedor en cualquier momento que tenga alguna inquietud o pregunta. Incluso si piensa que se está preocupando por nada, es mejor estar segura y llamar.
Cuándo llamar al médico
Llame a su proveedor si:
Tiene cualquier tipo de signos o síntomas que no son normales.
Está pensando en tomar cualquier medicamento nuevo, vitaminas o hierbas.
Tiene algún sangrado.
Tiene aumento del flujo vaginal con olor.
Tiene fiebre, escalofríos o dolor al orinar.
Tiene dolores de cabeza.
Tiene cambios o puntos ciegos en su visión.
Rompe fuente.
Comienza a tener contracciones regulares y dolorosas.
CUANDO ESTE EN SU EMBARAZO
Hable con su proveedor sobre los distintos exámenes que se le practicarán durante el embarazo. Estos exámenes pueden ayudar a su proveedor a ver cómo se está desarrollando el bebé y a detectar cualquier problema con su embarazo. Los exámenes pueden incluir:
Ecografías para ver cómo está creciendo su bebé y ayudar a establecer una fecha de nacimiento estimada
Pruebas de glucosa para detectar diabetes gestacional
Ecocardiografía fetal para revisar el corazón del bebé
Amniocentesis para buscar defectos congénitos y problemas genéticos
Prueba de translucencia nucal para buscar problemas con los genes del bebé
Análisis en busca de enfermedades de transmisión sexual
Exámenes de tipo de sangre como Rh y ABO
Según sus antecedentes familiares, puede elegir hacerse pruebas de detección de problemas genéticos. Hay muchas cosas que debe pensar antes de realizar pruebas genéticas. Su proveedor puede ayudarle a decidir si esto es lo mejor para usted.
Si usted tiene un embarazo de alto riesgo, podría ser necesario que consulte a su proveedor con mayor frecuencia, y que se realice exámenes adicionales.
QUÉ ESPERAR DURANTE EL EMBARAZO
Su proveedor hablará con usted sobre cómo manejar las molestias comunes del embarazo como lo son:
Náuseas del embarazo
Dolores de espalda, de piernas y otros dolores que se presentan en el embarazo
Problemas para dormir
Cambios en la piel y el cabello
Sangrado vaginal en las primeras etapas del embarazo
No hay 2 embarazos iguales. Algunas mujeres tienen síntomas leves, o muy pocos síntomas durante el embarazo. Muchas mujeres trabajan durante todo el término y viajan mientras están embarazadas. Otras podrían necesitar disminuir sus horas o dejar de trabajar. Algunas mujeres requieren reposo en cama durante algunos días o posiblemente semanas para tener un embarazo saludable.
POSIBLES COMPLICACIONES DEL EMBARAZO
El embarazo es un proceso complejo. Si bien muchas mujeres tienen embarazos normales, pueden presentarse complicaciones. Sin embargo, presentar una complicación no quiere decir que no tendrá un bebé saludable. Más bien, significa que su proveedor la vigilará de cerca y cuidará especialmente de usted y de su bebé durante el resto de su término.
Las complicaciones comunes incluyen:
Diabetes durante el embarazo (diabetes gestacional).
Hipertensión durante el embarazo (preclamsia). Su proveedor hablará con usted sobre cómo cuidarse si tiene preclamsia.
Cambios prematuros o pre término en su cuello uterino.
Problemas con la placenta. Es posible que cubra el cuello uterino, que se aleje de la matriz o que no esté funcionando tan bien como debería.
Sangrado vaginal.
Trabajo de parto prematuro.
Que su bebé no esté creciendo bien.
Que su bebé presente problemas de salud.
Pensar en los posibles problemas puede ser atemorizante. Pero es importante estar al tanto de manera que pueda informar a su proveedor si nota síntomas inusuales.
TRABAJO DE PARTO Y ALUMBRAMIENTO
Hable con su proveedor sobre lo que puede esperar durante el trabajo de parto y el alumbramiento. Puede comunicar sus deseos preparando un plan de parto. Hable con su proveedor sobre lo que debe incluir en su plan de parto. Puede querer incluir cosas como:
Cómo desea manejar el dolor durante el trabajo de parto, incluso si desea o no recibir un bloqueo epidural
Sus sentimientos sobre la episiotomía
Qué sucedería si requiere una cesárea
Sus sentimientos sobre un parto asistido con fórceps o con ayuda de ventosas
Quién desea que esté con usted durante el parto
También es buena idea hacer una lista de las cosas que debe llevar al hospital. Empaque una maleta con anticipación para tenerla lista cuando comience el trabajo de parto.
Conforme se acerque la fecha esperada para el parto, notará ciertos cambios. No siempre es fácil notar cuándo comenzará el trabajo de parto. Su proveedor podrá decirle cuándo es momento de visitarlo para hacerse un examen o dirigirse al hospital para el parto.
Hable con su proveedor sobre lo que sucede si supera la fecha esperada de parto. Según su edad y factores de riesgo, su proveedor podría tener que provocar el parto entre la semana 39 y la semana 42, aproximadamente.
Una vez que comienza el trabajo de parto, puede utilizar una serie de estrategias para sobrellevarlo.
QUÉ ESPERAR LUEGO DEL NACIMIENTO DE SU BEBÉ
Tener un bebé es un hecho emocionante y maravilloso. También implica mucho trabajo para la madre. Usted necesitará cuidarse en las primeras semanas luego del alumbramiento. El tipo de cuidado que necesitará dependerá de cómo dio a luz a su bebé.
Si tuvo un parto vaginal, probablemente pasará 1 o 2 días en el hospital antes de irse a casa.
Si tuvo una cesárea se quedará en el hospital por 2 o 3 días antes de irse a casa. Su proveedor le explicará cómo cuidarse usted sola cuando regrese a casa conforme se recupera.
Si usted es capaz de amamantar, hacerlo tiene muchos beneficios. También puede ayudarle a perder el peso que subió durante el embarazo.
Téngase paciencia mientras aprende a amamantar. Puede llevar 2 o 3 semanas descifrarlo. Hay mucho que aprender, como:
Cómo cuidar sus senos
La posición del bebé para amamantarlo
Cómo superar cualquier problema con el amamantamiento
Extracción y almacenaje de leche materna
Cambios en la piel y el pezón a causa del amamantamiento
El mejor momento para amamantar
Si necesita ayuda, hay muchos recursos disponibles para las mamás primerizas.
CUÁNDO LLAMAR AL PROVEEDOR DE ATENCIÓN MÉDICA:
Llame a su proveedor si está o cree que está embarazada y:
Toma medicinas para diabetes, enfermedad de la tiroides, convulsiones o presión arterial alta.
No está recibiendo cuidado prenatal.
No puede manejar las molestias comunes del embarazo sin tomar medicinas.
Podría haber estado expuesta a una infección de transmisión sexual, a químicos, a radiación o a otras sustancias tóxicas.
Consulte a su proveedor inmediatamente si está embarazada y tiene:
Fiebre, escalofrío o micción dolorosa
Sangrado vaginal
Dolor abdominal intenso
Traumatismo físico o trauma emocional grave
Ruptura de fuente (ruptura de membranas)
Poco o ningún movimiento del bebé en la segunda mitad de su embarazo
Es importante que la futura madre reciba cuidado prenatal tan pronto sepa que está embarazada (o si es posible antes de concebir); las visitas médicas periódicas durante el curso del embarazo son vitales tanto para la madre como para el bebé. Por lo general, durante el primer trimestre se requiere un chequeo médico mensual. A continuación se indica lo que se puede esperar durante la primera visita prenatal.
Después de que una prueba sanguínea confirme el embarazo, el médico realizará un examen físico completo. También hará una historia médica detallada y evaluará los posibles riesgos del embarazo. Se deben responder con sinceridad todas las preguntas relacionadas con el estilo de vida. Por ejemplo:
¿Bebe vino, cerveza u otro tipo de bebida alcohólica? De ser así, ¿con qué frecuencia y cuánto? ¿Fuma? ¿Cuánto? ¿Toma medicamentos de algún tipo o consume drogas ilegales? ¿Cuáles? ¿Se ejercita con regularidad? ¿Qué tipo de ejercicio realiza? Con una idea clara y completa de la historia médica de la madre y de su estilo de vida el médico puede proporcionar el mejor cuidado posible, por lo que es importante no omitir detalles, ni siquiera los más embarazosos.
El médico indicará una prueba sanguínea para determinar el factor Rh. Aunque no es frecuente, cuando la madre tiene un factor Rh diferente al del feto se puede producir incompatibilidad Rh, la cual puede ocasionar enfermedades graves y hasta la muerte del bebé. Este trastorno se puede prevenir si se lo detecta a tiempo. El médico también pedirá análisis de sangre para detectar signos de exposición a sífilis, rubéola, hepatitis y posiblemente VIH. Otras pruebas de laboratorio que se realizan son análisis de sangre para detectar infecciones o diabetes y un cultivo cervical para verificar que no estén presentes enfermedades de transmisión sexual tales como gonorrea y clamidia.
Es posible que el médico también indique algunas pautas acerca de la nutrición durante el embarazo. Además de advertir sobre los peligros del consumo de alcohol, cafeína y tabaco, puede recomendar una mayor ingesta de proteínas, calcio, hierro y líquidos. Debido a que es difícil obtener cantidades suficientes de ciertos nutrientes, como el ácido fólico, es posible que el médico recomiende tomar vitaminas prenatales diariamente para ir por terreno seguro.
A menos que una condición de salud lo impida, por lo general el médico recomendará el ejercicio. Las buenas condiciones físicas durante el embarazo ayudan a la futura madre a mantener su capacidad aeróbica, resistencia muscular y flexibilidad, además de prepararla para el maratón del trabajo de parto y el parto. A muchas mujeres les gusta practicar yoga, natación y caminatas rápidas durante todo el embarazo. Sin embargo, este no es el momento de comenzar un nuevo programa de ejercicio riguroso. La mujer que no ha estado ejercitándose con regularidad debe consultar con su médico para que le sugiera un plan de ejercicio seguro que comience lentamente.
La mujer como futura mamá debe tener algunos cuidados durante el embarazo, para ello debe seguir todos los consejos de su médico y realizar todos los análisis que sean necesarios.
Además de seguir todos los consejos del ginecólogo y someterse a las pruebas que sean necesarias, es aconsejable que las embarazadas utilicen prendas de vestir holgadas y zapatos cómodos, sin tacón alto. Durante el embarazo, pasee diariamente y beba mucho líquido. No deberá realizar viajes largos, pero si existe la necesidad, trate de descansar unos 10 minutos por cada 90 de viaje.
El niño está íntimamente conectado a la madre tanto física como emocionalmente. La gestante no sólo transmite lo que ingiere a su feto, sino también emociones y sentimientos. Como ambos comparten endorfinas (sustancias químicas que producen la sensación de bienestar), el bebé también experimenta las emociones de su progenitora. Por eso es tan importante que la madre se sienta tranquila y relajada. Los sentimientos positivos pueden inducir en su hijo sensaciones igualmente placenteras.
La madre debe realizar actividades con las que realmente disfrute, ha de dedicar tiempo para cuidarse e iniciar un estilo de vida saludable lo antes posible.
Después de dar a luz al bebé, la madre sigue bajo el control del personal médico que, en caso de ser necesario, continuará asistiéndola para aliviar el dolor. La madre y el bebé suelen permanecer en el hospital un par de días hasta recuperarse.
HIGIENE FÍSICA
Higiene mental Entendemos por higiene mental de la mujer gestante la preparación psicológica positiva, esperanzada y optimista ante su embarazo, aceptando las limitaciones de su estado y colaborando conscientemente en todos los aspectos del mismo hasta llegar al parto. Ciertamente, la embarazada sufre algunos trastornos propios de la gestación que constituyen inconvenientes muy superables, en especial con la ayuda del tocólogo y su consejo.
Algunas mujeres sufren problemas psicológicos derivados a su deformación física o de la ansiedad ante el acontecimiento que se aproxima. Unos y otros deben desecharse racionalmente.
Conviene, por lo tanto, rechazar durante el embarazo las situaciones conflictivas, los disgustos, depresiones de ánimo, exceso de trabajo, preocupaciones, etc., situaciones que, en algún caso, podrían llegar a provocar un aborto o malformaciones del feto.
HIGIENE DURANTE EL EMBARAZO
Enfermedades como el acné, rosácea, dermatitis de contacto, liquen urbe plano , eritema modoso y psoriasis pueden modificarse. Las infecciones cutáneas pueden ser más frecuentes o severas. Respecto al Lupus eritematoso sistémico, si está en remisión al menos 3 meses antes de la concepción y la paciente no tiene compromiso cardíaco o renal, se prefiere el uso de ácido tricloroacético al 50%, criocirugía, electrocoagulación o vaporización por las Erupción polimorfa del embarazo (E.P.E.). Esta es la dermatosis más frecuente de la gestación, afectando a una de cada 200 – 240 embarazadas.
Existe una clara relación entre la distensión abdominal y el comienzo del cuadro clínico. Es más frecuente en primigestas apareciendo al final del 3 trimestre y se resuelve espontáneamente post-parto (días o semanas).
Embarazos siguientes.
Se presenta como una erupción papulosa, pruriginosa, con tendencia a agruparse, distribuida en la superficie extensora de las extremidades, dorso de manos y pies, con signos de gramaje. No representa riesgo materno-fetal.
Si la madre está infectada por el HIV hay probabilidades de que el niño (durante el embarazo o la lactancia) se infecte también.
Estudios e investigaciones han demostrado que si antes del cuarto mes de embarazo se puede detectar que la madre tiene SIDA, baja a un 3% el riesgo del contagio al feto. A las mujeres que se les ha detectado el virus y son controladas y tratadas tienen poco riesgo de transmitir el virus a sus bebés durante la gestación.
MEDICACIÓN Y EMBARAZO
Se debe tener precaución con el uso de medicación durante el embarazo (lo mismo sucede en la lactancia), ya que pueden presentarse complicaciones y anormalidades en el feto; por ejemplo: síndrome de abstinencia neonatal, parto en pre término, daño cerebral del feto, bajo peso al nacer, crecimiento intrauterino retardado.
La mujer embarazada debería hacer lo imposible por no fumar y tratar de que su entorno tampoco lo haga (al feto le produce tanto daño que fume la madre como alguien del ambiente). El fumar puede provocar diferentes reacciones en el feto: como bajo peso, nacer prematuro, problemas de aprendizaje, incluso aborto natural o muerte infantil repentina.
El café y el alcohol también deberían dejar de ser consumidos. Hay que tener en cuenta que el feto es más susceptible en el primer trimestre de embarazo. Cualquier medicación que se utilice en el embarazo debe ser indicada por el médico. Solo debe administrarse en el caso de que los beneficios de la misma compensen el posible riesgo
NUTRICIÓN DURANTE EL EMBARAZO
La nutrición previa al embarazo es importante para mejorar la fertilidad y evitar malformaciones, pero además la mujer que tiene una carencia antes de la gestación es difícil que la supere una vez ha quedado embarazada. Es probable que el problema se mantenga o agrave, lo que puede perjudicar el curso y el resultado del embarazo.
En poblaciones desarrolladas, la anorexia y el control extremo del peso corporal, así como el padecimiento de obesidad y el excesivo consumo de tabaco, cafeína y alcohol, pueden condicionar una disminución de la fertilidad. Por otra parte, las deficiencias en ácido fólico, vitamina A, C, D, E, B1, zinc, selenio, yodo, calcio y hierro han sido señaladas como las responsables de algunos casos de infertilidad, que se solucionaron al corregir la carencia.() Pero todas las mujeres en edad de tener hijos pueden tomar medidas para aumentar sus probabilidades de tener un bebé sano, aún antes de concebir.
Algunas de estas precauciones serían someterse a una visita médica antes de quedar embarazada, adoptar un estilo de vida sano y cuidar la alimentación.
Y es que el mejor momento para comenzar a seguir una dieta saludable es antes de quedar embarazada. El primer paso para alimentarse debidamente consiste en prestar atención a los alimentos que constituyen su dieta diaria e introducir aquellos cuyas necesidades van a estar aumentadas durante los meses que dura la gestación con el fin de aumentar las reservas corporales.
NUTRICIÓN PREVIA Y DURANTE EL EMBARAZO
El embarazo es una etapa delicada desde el punto de vista nutricional, ya que las necesidades de nutrientes son elevadas y difíciles de cubrir y, por otra parte, los efectos de los desequilibrios pueden tener repercusiones más graves que en otras etapas de la vida y afectar, no sólo a la madre, sino también a su descendiente.
No conviene llevar a cabo dietas restrictivas o limitantes que no satisfagan los requerimientos nutritivos básicos. De igual modo, se deben evitar las situaciones de ayuno, tanto el ayuno temporal como las dietas exentas de hidratos de carbono, ya que pueden provocar situaciones que son perjudiciales para el feto.
PAUTAS PARA ALIMENTARSE BIEN
Recomendaciones generales de la dieta
Las recomendaciones que una mujer embaraza debe seguir son las siguientes:
Tenga en cuenta que "comer bien" no significa ni comer mucho ni comer basándose en alimentos caros.
Todos los alimentos tienen un lugar en la dieta: varíe al máximo la alimentación, incluyendo todos los grupos básicos de alimentos y dentro de cada uno de ellos, alimentos de distintos tipos (fruta, verdura, etc.) Seleccione los alimentos en función de su calidad y no de la cantidad, por el mayor aumento de las necesidades de proteínas, de ciertas vitaminas y minerales, en comparación con las energéticas, sobre todo en el primer trimestre.
Fraccione la alimentación en varias tomas (entre 4 y 6) a lo largo del día, con el fin de reducir las posibles molestias digestivas, conseguir un mejor control de la glucemia y no desequilibrar su dieta.
Coma despacio, masticando bien los alimentos, en ambiente relajado, tranquilo, evitando distracciones (TV, radio, etc.) y ordenadamente: comience por el primer plato, después el segundo y por último el postre.
Vigile el consumo de fruta. Además de vitaminas contiene azúcares sencillos que pueden favorecer el aumento de peso. No más de 4 al día.
Evite el consumo de alcohol. Disminuye el aprovechamiento de ciertos nutrientes (proteínas, hierro, vitaminas del grupo B, calcio…), aporta calorías vacías y su abuso puede provocar malformaciones en el feto.
Beba abundante líquido a lo largo del día, preferentemente fuera de las comidas para evitar molestias estomacales.
En el caso de mujeres que sigan pautas alimentarías alejadas del equilibrio anteriormente propuesto (dieta vegetariana, macrobiótica ) será conveniente el asesoramiento con profesionales sanitarios expertos en temas de alimentación (dietistas – nutricionistas), para revisar con meticulosidad el consumo habitual de alimentos y ver la manera de combinar los distintos alimentos con el fin de reducir el riesgo de déficit nutritivos.
Primera.- Ante la sospecha de embarazo, además del control médico periódico, la mujer debe adoptar algunas precauciones básicas, evitando exponerse a sustancias y agentes perjudiciales.
Segunda.- Desde el momento de la concepción, la mujer experimenta transformaciones en su organismo y se empiezan a manifestar los primeros síntomas del embarazo. Por lo que tiene que tiene que tomar actitudes positivas para evitar complicaciones.
Tercera.- La nutrición previa al embarazo es importante para mejorar la fertilidad y evitar malformaciones, pero además la mujer que tiene una carencia antes de la gestación es difícil que la supere una vez ha quedado embarazada. Es probable que el problema se mantenga o agrave, lo que puede perjudicar el curso y el resultado del embarazo.
Cuarta.- El desarrollo del feto varía mucho en los tres trimestres del embarazo. Por lo que la gestante debe asumir actitudes positivas.
Quinta.- La nutrición adecuada dará como resultado un recién nacido sano y bien nutrido
Sexta.-El uso de medicamentos durante el embarazo presenta complicaciones y anormalidades en el feto, provocando que l feto crezca con anomalías o se provoque un aborto espontáneo.
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