La inteligencia emocional y su influencia en el rendimiento escolar
Enviado por Lic. RICARTE TAPIA VITÓN
- Introducción
- Planteamiento del problema
- Fundamentación teórica
- Hipótesis
- Metodología
- Discusión de resultados
- Conclusiones
- Sugerencias
- Bibliografía
Introducción
La realización del presente trabajo de investigación titulado: "La Inteligencia Emocional y su Influencia en el Rendimiento en el Escolar de los niños y niñas del de Educación Primaria de la Institución Educativa N° 17644 del Caserío de Pueblo Libre; distrito de Namballe; provincia de San Ignacio; región Cajamarca. Tiene como objetivo determinar la aplicación de la Inteligencia Emocional y su Influencia en el Rendimiento en el Escolar, además dar a conocer diversos conceptos referentes a la inteligencia emocional, a si mismo cuales son las bases que le sirven parar mejorar el rendimiento escolar y que permita a los niños y niñas mejorar sus capacidades y actitudes intelectuales. La escuela, ha de formar personas e todas las dimensiones. El docente de educación primaria, utilizara técnicas y diversas estrategias para estimular para inteligencia emocional y mejorar su nivel de rendimiento escolar en los niños y niñas; ya que estos están en pleno desarrollo de proceso bio-psico-social.
El presente trabajo se estructura el planteamiento del problema, donde plantearemos en forma textual lo que vamos a investigar, a la vez tendremos la justificación e importancia del estudio y los objetivos. En el segundo lugar, denominamos fundamentos teóricos, se mostrara la parte conceptual del trabajo de investigación, la hipótesis y de las variables. Y al final tendremos la parte de los resultados de campo obtenidos durante y después de la experimentación de la investigación.
Ricarte
Es evidente que la enseñanza colectiva y simultánea, orientada exclusivamente al conocimiento, y que tradicionalmente ha venido aplicándose desde el siglo XIX ha resuelto con cierto éxito la necesidad humana de desarrollo intelectual, pero no ha encontrado muchas soluciones a los problemas personales que el desarrollo intelectual con lleva, y ésta es la carencia en la que se enfoca la Inteligencia Emocional, que a la vez puede aportar otros principios -desde el mundo de las emociones y los sentimientos para mejorar el aprendizaje.
Profesores deben ser, en todo momento, fundamentalmente educadores, en el más amplio sentido de la palabra, ni jueces ni miembros de un tribunal calificador. Su acción no puede limitarse a sancionar conductas inadecuadas o puntuar fríamente unos conocimientos del alumno, el diálogo profesor-alumno y alumno-profesor es esencial. Entender al alumno como persona, que tiene una dimensión superior al de mero estudiante, es imprescindible para comprender sus problemas y poder ayudarle a resolverlos.
Entonces, Rescatamos, la propuesta de la comisión de Jacques Delor para la UNESCO sobre la Educación hacia el siglo XXI, en la que proponen 4 pilares en los que debe fundamentarse la educación y asumimos como filosofía de nuestro Proyecto:
APRENDER A CONOCER, es decir, adquirir los instrumentos de la comprensión de nuestro entorno.
APRENDER A HACER, para poder influir eficiente y efectivamente sobre nuestro propio entorno.
APRENDER A VIVIR JUNTOS, para participar y cooperar con los demás en todas las actividades humanas.
APRENDER A SER, proceso fundamental que recoge todos los elementos de los anteriores y los interioriza, profundizándolos significativamente para asumirlos de manera consciente en la vida diaria.
En Latinoamérica, están comenzando a desarrollarse algunas iniciativas particulares (México, Chile y Brasil). En Argentina el tema está en pañales. Si nos detenemos en el tipo de educación implantada hace unos años en muchos países en Latinoamérica, podremos observar cómo los profesores preferían a los niños conformistas, que conseguían buenas notas y exigían poco ( de esta forma se estaba valorando más a los aprendices receptivos y los discípulos más que a los aprendices activos).
Pero hemos evolucionado, y para seguir haciéndolo tendremos que asumir que la escuela es uno de los medios más importantes a través del cual el niño "aprenderá" y se verá influenciado (influenciando en todos los factores que conforman su personalidad).
Por tanto, en las escuelas Peruanas también se debe plantear enseñar a los alumnos a ser emocionalmente más inteligentes, dotándoles de estrategias y habilidades emocionales básicas que les protejan de los factores de riesgo o, al menos, que palien sus efectos negativos.
Goleman, 1995, ha llamado a esta educación de las emociones alfabetización emocional (también, escolarización emocional), y según él, lo que se pretende con ésta es enseñar a los alumnos a modular su emocionalidad desarrollando su Inteligencia Emocional.
Los objetivos que se persiguen con la implantación de la Inteligencia Emocional en la escuela, serían los siguientes:
Detectar casos de pobre desempeño en el área emocional.
Conocer cuáles son las emociones y reconocerlas en los demás
Clasificarlas: sentimientos, estados de ánimo…
Modular y gestionar la emocionalidad.
Desarrollar la tolerancia a las frustraciones diarias.
Desarrollar la resiliencia
Adoptar una actitud positiva ante la vida.
Prevenir conflictos interpersonales
Mejorar la calidad de vida escolar.
Confianza en sí mismo y en sus capacidades
Curiosidad por descubrir
Intencionalidad, ligado a la sensación de sentirse capaz y eficaz.
Autocontrol
Relación con el grupo de iguales
Capacidad de comunicar
Cooperar con los demás
Determinar la influencia de la Inteligencia Emocional en el rendimiento escolar de los niños y niñas de primaria de la Institución Educativa 17644 del Caserío de Pueblo Libre
Identificar nivel de rendimiento escolar a través de la observación emocional que poseen los niños y niñas de educación primaria de la Institución Educativa17644 del Caserío de Pueblo Libre
Identificar el nivel de inteligencia emocional a través de una encuesta de listado a los niños y niñas de educación primaria de la Institución Educativa 17644 del Caserío de Pueblo Libre.
Identificar la correlación que existe entre inteligencia emocional y rendimiento escolar a los niños y niñas de educación primaria de la Institución Educativa 17644 del Caserío de Pueblo Libre
Autoconciencia (habilidad de reconocer y entender nuestras emociones, estado de ánimo…).
Autorregulación (habilidad para controlar o redirigir impulsos y estados de ánimo, pensar antes de actuar).
Motivación (pasión para trabajar por razones que van más allá del dinero y status).
Empatía (habilidad para entender la apariencia emocional de los temas y tratar con las personas de acuerdo a sus reacciones emocionales).
Habilidades sociales (habilidad para encontrar un espacio común y construir simpatía.).
Muestran automotivación
Expresan y conocen sus emociones y reconocen y valoran las de los demás.
Son perseverantes a pesar de las dificultades y obstáculos de la vida.
Poseen autocontrol ante los impulsos y los deseos de compensación emocional.
Tienen empatía y compresión por los otros.
Mantienen la esperanza y el positivismo.
Muestre empatía y comprenda los puntos de vista de los demás.
Haga frente de forma positiva a los impulsos emocionales y de conducta y regúlelos.
Plantéese objetivo positivo y trace planes para alcanzarlos.
Utilice las dotes sociales positivas a la hora de manejar sus relaciones.
Se recomienda a los padres jugar mucho con sus hijos sin utilizar esos momentos para darles instrucciones, sino hacer de ellos momentos compartidos, libres de juicios y presiones.
¿Qué siente usted en esa determinada situación? ¿Y qué sienten sus hijos?
¿Cómo interpreta usted lo que está pasando? ¿Cómo cree que lo interpretarán sus hijos? ¿Cómo se sentiría usted si estuviera en su lugar?
¿Cuál es la mejor manera de hacer frente a esto? ¿Cómo lo ha hecho en otras ocasiones?
¿Qué otras formas pueden existir para solventar el problema? ¿Qué obstáculos podemos prever?
¿Cuándo podremos hablar del asunto, compartir ideas y sentimientos y ponernos en marcha para obtener el éxito como familia?
Por otra parte, el comportamiento más inadecuado por parte de los padres, es:
Ignorar completamente los sentimientos de su hijo, pensando que los problemas de sus hijos son triviales y absurdos.
Darse cuenta de los sentimientos de sus hijos, pero no le dan soluciones emocionales alternativas, y piensan que cualquier forma de manejar esas emociones "inadecuadas", es correcta (por ejemplo, pegándoles).
Menospreciar o no respetar los sentimientos del niño (por ejemplo, prohibiéndole al niño que se enoje, ser severos si se irritan…)
Finalmente nuestra intervención debe ser orientada al logro de los siguientes beneficios de la inteligencia emocional:
Incrementa la autoconciencia.
Favorece el equilibrio emocional.
Fomenta las relaciones armoniosas.
Potencia el rendimiento escolar.
Aumenta la motivación y el entusiasmo.
Otorga capacidad de influencia y liderazgo.
Mejora la empatía y las habilidades de análisis social.
Aumenta el bienestar psicológico.
Facilita una buena salud.
Brinda defensas para la reacción positiva a la tensión y al stress.
1. La narración, la representación y la comprensión de cuentos e historias de personajes, fantásticos o reales, lejanos o próximos a la vida del niño, son una oportunidad para vivenciar y aprender sobre los sentimientos humanos. Los personajes se presentan como seres felices, alegres, que controlan sus reacciones en beneficio personal y de los demás. Los niños pueden descubrir qué aspectos o situaciones hacen que estos personajes se sientan como lo hacen; cómo los sentimientos son los que motivan sus comportamientos, bien de una manera correcta o bien desproporcionada y cómo resuelven los conflictos que presenta la historia. La literatura, según los defensores de la inteligencia emocional, es probablemente una de las áreas escolares que mejor puede incidir en las habilidades afectivas.
2. Los contenidos artísticos, pintura, música y teatro desempeñan también una función relevante en esta línea. El niño, en el dibujo y la pintura, proyecta sus sentimientos, desajustes emocionales y la interpretación cognitiva que tiene sobre su vida emocional. La música le exige regular los ritmos y adaptar de su estado de ánimo a las diferentes melodías. Finalmente, en el teatro el niño proyecta su energía emocional, su seguridad personal y su creatividad al expresar sus sentimientos.
3. Hay autores, tales como Mayer y Salovey (en prensa), que defienden la necesidad de elaborar programas psicopedagógicos de intervención específica directamente conectados con la inteligencia emocional al igual que existen programas para la mejora de las capacidades cognitivas. En estos momentos, los esfuerzos de los investigadores
Ponemos en el lugar del alumno.
Preguntarle y escucharle.
No reprocharle que tenga emociones negativas. La tristeza es tan natural como la alegría.
Ayudarle a identificar y canalizar sus emociones.
Enseñarles a controlarlas.
Incentivar su curiosidad.
Corregirle siempre que cometa faltas y decirle que no cuando haya que decírselo.
Premiar sus logros y alimentar su motivación.
Fijarle pequeñas metas y estimular su deseo de lograr algo.
Aprendizaje por ensayo y error: Incluye principalmente el aspecto de respuestas al patrón emocional. Los niños aprenden por medio de tanteos a expresar sus emociones en formas de conductas que les proporcionan la mayor satisfacción y abandonan las que les producen pocas o ninguna. Esta forma de aprendizaje se utiliza a comienzos de la infancia.
Aprendizaje por Imitación: Afecta tanto al aspecto del estímulo como al de la respuesta del patrón emocional. Observar las cosas que provocan ciertas emociones a otros; los niños reaccionan con emociones similares y con métodos de expresiones similares a los de las personas observadas, que por lo general es su entorno familiar inmediato.
Aprendizaje por Identificación: Es similar al de imitación en que los niños copian las reacciones emocionales de personas y se sienten excitados por un estímulo similar que provoca la emoción en la persona imitada.
Condicionamiento: Significa aprendizaje por asociación. En el condicionamiento, los objetos y las situaciones que, al principio, no provocan reacciones emocionales, lo hacen más adelante, como resultado de la asociación.
Adiestramiento o aprendizaje con orientación y supervisión: Se limita al aspecto de respuesta del patrón emocional. Se les enseña a los niños el modo aprobado de respuesta, cuando se provoca una emoción dada. Mediante el adiestramiento, se estimula a los niños a que respondan a los estímulos que fomentan normalmente emociones agradables y se les disuade de toda respuesta emocional. Esto se realiza mediante el control del ambiente, siempre que sea posible.
Emociones intensas: Los niños pequeños responden con la misma intensidad a un evento trivial que una situación grave.
Emociones que aparecen con frecuencia: Los niños presentan emociones frecuentes, conforme al aumento de su edad y descubren que las explosiones emocionales provocan desaprobación o castigos por parte de los adultos.
Emociones transitorias: El pasó rápido de los niños pequeños de las lágrimas a la risa, de los celos al cariño, etc.
Las respuestas reflejan la individualidad: En todos los recién nacidos es similar, pero gradualmente dejan sentir las influencias del aprendizaje.
Cambio en la intensidad de las emociones: Las emociones que son muy poderosas a ciertas edades, se desvanecen cuando los niños crecen, mientras otras, anteriormente débiles, se hacen más fuertes.
Emociones que se pueden detectar mediante síntomas conductuales: Los niños pueden no mostrar sus reacciones emocionales en forma directa; pero lo harán indirectamente mediante la inquietud, fantasías, el llanto, las dificultades en el habla, etc.
Detectar casos de pobre desempeño en el área emocional.
Conocer cuáles son las emociones y reconocerlas en los demás
Clasificar sentimientos, estados de ánimo.
Modular y gestionar la emocionalidad.
Desarrollar la tolerancia a las frustraciones diarias.
Prevenir el consumo de drogas y otras conductas de riesgo.
Adoptar una actitud positiva ante la vida.
Prevenir conflictos interpersonales
Mejorar la calidad de vida escolar, familiar y comunitaria
Aprender a servir con calidad.
Orientación Familiar en el contexto de familias disfuncionales o mononucleares, producto de la migración, del individualismo o cultura light.
Percepción de necesidades, intereses y problemas de los niños, en concordancia con las necesidades, intereses y problemas del medio inmediato (familia y escuela) y mediato (barrio, comunidad, etc.).
El establecimiento de un clima emocional positivo, ofreciendo apoyo personal y social para aumentar la autoconfianza y autoestima de los niños que se atiende en el aula de clases
Ayuda a los niños a establecerse objetivos personales con sujeción a sus proyectos de vida.
Facilitación de los procesos de toma de decisiones y responsabilidad personal.
La orientación personal del niño que propenda su desarrollo emocional.
Confianza en sí mismo y en sus capacidades
Curiosidad por descubrir
Solución de problemas familiares y escolares
Intencionalidad, ligado a la sensación de sentirse capaz y eficaz.
Autocontrol
Relación con el grupo de iguales
Capacidad de comunicar
Cooperar con los demás y trabajar en equipo
CONFIANZA. La sensación de controlar y dominar el propio cuerpo, las sensaciones que se experimentan y la comprensión del mundo; la sensación del niño de que lo más probable es que no fracase en lo que se propone, y de que los adultos serán amables.
CURIOSIDAD. La sensación de que descubrir cosas es algo positivo y conduce al placer.
INTENCIONALIDAD. El deseo y la capacidad de producir un impacto, y de actuar al respecto con persistencia. Esto está relacionado con una sensación de competencia, de ser eficaz.
AUTOCONTROL. La capacidad de modular y dominar las propias acciones de maneras apropiadas a la edad; una sensación de control interno.
RELACIÓN. La capacidad de comprometerse con otros, basada en la sensación de ser comprendido y de comprender a los demás.
CAPACIDAD DE COMUNICACIÓN. El deseo y la capacidad de intercambiar verbalmente ideas, sentimientos y conceptos con los demás. Esto está relacionado con una sensación de confianza en los demás y de placer en comprometerse con los demás, incluso con los adultos.
COOPERATIVIDAD. La capacidad de equilibrar las propias necesidades con las de los demás en una actividad grupal.
La escolarización de las emociones se llevara a cabo analizando las situaciones conflictivas y problemas cotidianos que acontecen en el contexto escolar que generan tensión (como marco de referencia para el profesor, y en base a las cuales poder trabajar las distintas competencias de la inteligencia emocional.
Por último, vamos a puntualizar que para que se produzca un elevado rendimiento escolar, el niño debe contar con 7 factores importantes:
De este modo, El nuevo concepto que da respuesta a éste y otros interrogantes es la Inteligencia Emocional, es una destreza que nos permite conocer y manejar nuestros propios sentimientos, interpretar o enfrentar los sentimientos de los demás, sentirnos satisfechos y ser eficaces en la vida, a la vez que crear hábitos mentales que favorezcan nuestra propia productividad. Por eso es cuanto a los niño de la Institución Educativa N° 17644 del Caserío de Pueblo Libre, presenta deficiencias en la conducta, son impulsivos, no miden las consecuencias de sus actos, no obedecen, no se preocupan por sus tareas y tienen bajo rendimiento escolar, la cual es preocupante para el desarrollo de sus capacidades y actitudes en el proceso intelectual y emocionalmente como personas para el futuro.
1.1.- ENUNCIADO
Educar usando como base la Inteligencia Emocional es algo fundamental puesto que no enseñamos únicamente conceptos, tan importantes son los procedimientos y las actitudes en los que dichos conceptos van adquiriéndose para mejorar el nivel del rendimiento escolar en los niños. Por lo cual nos hacemos la interrogante ¿Cómo influye la Inteligencia Emocional y su Influencia en el Rendimiento en el Escolar en los niños y niñas de educación primaria de la Institución Educativa N° 17644 del Caserío de Pueblo Libre?
1.2.- OBJETIVOS
OBJETIVO GENERAL:
OBJETIVOS ESPECÍFICOS:
1.3.- JUSTIFICACIÓN
Por que hoy en día se aboga por la libre expresión, Conocimiento, comprensión, acto de entender. Sentido en que se puede tomar un pronunciamiento, un dicho o una expresión. Por eso es que la educación emocional es importante para los niños ya que de ello hace que los actúen de una forma espontanea; por eso, es prioritario fomentarlos. La cual se impartirá en medida que beneficiara a los alumnos del cuarto grado "D" de la institución educativa en mención a desarrollar su inteligencia emocional para mejorar su rendimiento escolar de los niño; convirtiéndose en una tarea necesaria en el ámbito educativo y la mayoría de los profesionales consideran primordial el dominio de estas habilidades para el desarrollo evolutivo y socio-emocional y principalmente para el proceso de aprendizaje en los alumnos
2.1.- ANTECEDENTES DEL PROBLEMA
En el nivel primario no hay antecedentes de proyectos sobre la Inteligencia Emocional y su Influencia en el Rendimiento en el Escolar en los niños y niñas.
2.2.- TEORÍA CIENTÍFICA
2.2.1.- INTELIGENCIA EMOCIONAL
El término Inteligencia Emocional fue utilizado por primera vez por Peter Salovey de Harvard y Jonh Mayer de la New Hampshire, como la capacidad de controlar y regular los sentimientos de uno mismo y de los demás y utilizarlos como guía del pensamiento y de la acción.
Se concreta en un amplio número de habilidades y rasgos de personalidad: empatía, expresión y comprensión de los sentimientos de control de nuestro genio, independencia, capacidad de adaptación, simpatía, capacidad de resolver problemas de forma interpersonal, habilidades sociales, persistencia, cordialidad, amabilidad y respeto.
Componentes de la Inteligencia Emocional: Son cinco:
2.2.2.- PORQUE ES IMPORTANTE LA INTELIGENCIA EMOCIONAL
En muchas culturas, hace bien poco, se potenciaba la represión y el bloqueo de las emociones. Desde pequeños se instruía a los niños para mostrar sus sentimientos en público, bajo amenazas de hacer el ridículo y quedar en evidencia. Hoy en día se aboga por la libre expresión, dado lo ventajoso que para el ser humano. El proceso de la educación emocional es largo en su inicio es fundamental el no quitar importancia ni juzgarlas expresiones de los niños hacen de una forma espontanea; por el contrario, es prioritarios fomentarlos. Cuando uno no transmite lo que ocurre puede que el cuerpo lo traduzca en forma de dolores o de alguna otra somatización.
Según Daniel Goleman, las personas emocionalmente inteligentes desarrollan una serie de actitudes:
2.2.3.- COMO PONER INTELIGENCIA A LAS EMOCIONES
Si analizamos esta regla podemos obtener cinco principios. Sea consciente de sus propios sentimientos y de los de los demás:
2.2.4.- APLICACIONES DE LA INTELIGENCIA EMOCIONAL A LA EDUCACIÓN
La inteligencia emocional es una capacidad involucrada en los contextos más próximos al ser humano, como son la familia, la escuela, el trabajo y otros lugares en general. Nosotros nos centraremos únicamente en los ambientes familiar y escolar porque son las dos realidades que fundamentalmente comparten la responsabilidad de hacer crecer al niño en la inteligencia emocional.
a.- EL CONTEXTO FAMILIAR.
El desarrollo de las habilidades implicadas en la inteligencia emocional, al igual que otras muchas comienzan en el hogar, principalmente a través de interacciones adecuadas entre padres, hijos y hermanos. Los miembros de la familia ayudan a los niños a identificar y etiquetar las diferentes emociones y conectarlas con las situaciones sociales más próximas. Esta transcendental tarea, con frecuencia, no se realiza de una manera. Este rol de los padres en el proceso de evaluación inicial del niño debe continuar a lo largo de todos los años de la educación. Escuela y familia deben funcionar especialmente de manera conjunta en los primeros años de escolarización. La evaluación no sólo afectará al resultado exclusivo de las actividades de observación y análisis de los profesores, sino también producirá un diálogo continuado entre éstos y los padres. Dialogo que generará nuevas propuestas educativas coherentes y eficaces para enriquecer el proceso de desarrollo global del niño, meta última de educadores y padres.
b.- EL CONTEXTO ESCOLAR.
El contexto escolar ofrece múltiples situaciones en las que es necesario tener en cuenta la relevancia de los factores cognitivos emocionales, tales como el papel del maestro, el diseño curricular y las actividades concretas dentro del aula, entre otras.
c.- EL ROL DEL MAESTRO.
La interacción entre padres e hijos, cuando el niño comienza la educación infantil, es transferida, en parte, a la relación que se genera entre profesor y alumno. El profesor asume el rol de los padres y pasa a ser el modelo casi absoluto de la inteligencia emocional del niño, de ahí la importancia de vigilar y regular, por parte del profesor, el tono afectivo que rodea su comunicación con los alumnos. En los primeros años la fuerza de la interacción entre profesor-niño adquiere tal relevancia que sin ella le resultaría difícil al niño crecer en la inteligencia emocional por carecer de experiencias mediadas de aprendizaje afectivo.
El educador, además de ser un especialista en todo lo que se refiere a la estimulación del aprendizaje, a la organización del currículo y a la creación de un ambiente de desarrollo de capacidades, será un mediador esencial de las habilidades emocionales en el niño. Debe seleccionar, programar y presentar al niño aquellos estímulos que modifiquen su trayectoria emocional, le hagan sentirse bien consigo mismo y capaz de regular las múltiples reacciones emocionales.
d.- DISEÑO CURRICULAR
También las habilidades de la inteligencia emocional pueden ser estimuladas desde el Diseño Curricular Básico. La incorporación de estas capacidades en los Proyectos de la Educación Infantil está siendo una realidad, tanto por parte de los teóricos de la inteligencia emocional como por parte de las autoridades educativas, caso de nuestro país, que han sabido valorar la importancia del dominio de las habilidades emocionales. Así nos encontramos que entre las capacidades propuestas por el actual Diseño Curricular. Todas ellas involucradas en el concepto de inteligencia emocional que hemos descrito en los párrafos anteriores. Sólo la actuación conjunta sobre estas capacidades ayudará al logro de un desarrollo armónico del alumno.
e.- ACTIVIDADES DE AULA.
La presencia de la inteligencia emocional en las tareas que se realizan dentro del aula es total. Todo lo que el educador ofrece a los niños, el proceso de elaboración y la respuesta de los mismos están impregnados de connotaciones emocionales. Por destacar algunas actividades específicas mencionamos:
Se dirigen precisamente hacia el diseño de materiales y hacia la preparación de un marco de referencia formativo para los educadores. En un futuro no lejano podremos disponer de estos logros, fruto de años de investigación y reflexión.
2.2.5.- COMO EDUCAR LA INTELIGENCIA EMOCIONAL
A la hora de educar emocionalmente debemos tener en cuenta una serie de pautas para poner en práctica con nuestros alumnos:
2.2.6.- CONDICIONES PARA UN BUEN DESARROLLO EMOCIONAL
Los estudios de las emociones de los niños han revelado que su desarrollo se debe tanto a la maduración como al aprendizaje y no a uno de esos procesos por sí solo. La maduración y el aprendizaje están entrelazados tan estrechamente en el desarrollo de las emociones que, algunas veces, es difícil determinar sus efectos.
Describimos a continuación estos dos aspectos:
a) Papel de la Maduración: El desarrollo intelectual da como resultado la capacidad para percibir los significados no advertidos previamente y el que se preste atención a un estímulo durante más tiempo y la concentración de la tensión emocional en un objeto. El aumento de la imaginación, la comprensión y el incremento de la capacidad para recordar y anticipar las cosas, afectan también a las reacciones emocionales.
Así, los niños llegan a responder estímulos ante los que se mostraban indiferentes a una edad anterior. El desarrollo de las glándulas endocrinas, es esencial para la conducta emocional madura. El niño carece relativamente de productos endocrinos que sostienen parte de las respuestas fisiológicas a las tensiones. Las glándulas adrenales, que desempeñan un papel importante en las emociones, muestran una disminución marcada de tamaño, poco después del nacimiento. Cierto tiempo después, comienzan a crecer; lo hacen con rapidez hasta los cinco años, lentamente de los 5 a los 11 y con mayor rapidez en la pubertad hasta llegar a la juventud.
b) Papel del Aprendizaje: Hay cinco tipos de aprendizaje que contribuyen al desarrollo de patrones emocionales durante la niñez. Seguidamente se explican esos métodos y el modo en que contribuyen al desarrollo emocional de los niños.
Podemos decir entonces que tanto la maduración como el aprendizaje influyen en el desarrollo de las emociones; pero el aprendizaje es más importante, principalmente porque se puede controlar. También la maduración se puede controlar hasta cierto punto; pero sólo por medios que afectan a la salud física y por medio del control de las glándulas cuyas secreciones se ven estimuladas por las emociones.
El control sobre el patrón de aprendizaje es una medida tanto preventiva como positiva. Una vez que se aprende una respuesta emocional indeseable y se incluye en el patrón del niño, no sólo es probable que persista, sino que se haga también cada vez más difícil de modificar a medida que aumente su edad.
Como ejemplo citaremos la frecuente motivación negativa que brindamos los padres a nuestros hijos en la ingestión de alcohol o consumo de drogas o cigarrillo en su presencia. Los niños lo miran como natural: si sus padres lo hacen, ¿Por qué ellos no ?
El aprendizaje negativo puede persistir incluso hasta la vida adulta y necesitar ayuda profesional para modificarse. Por esto se puede decir con justicia que la niñez es un "período crítico" para el desarrollo emocional, en donde la familia, la escuela y la comunidad tenemos un papel fundamental.
Rasgos característicos de las emociones de los niños:
2.2.7. LA INTELIGENCIA EMOCIONAL EN LA ESCUELA
Si nos detenemos a analizar el tipo de educación implantada en años atrás, podremos observar cómo los profesores preferían a los niños conformistas, que conseguían buenas notas y exigían poco (de esta forma se estaba valorando más a los aprendices receptivos más que a los aprendices activos), y de hecho respondiendo a las ideas de alienación que se implantaba en nuestra educación y por tanto en nuestra sociedad, de ir siempre por la "Ley del menor esfuerzo" (Parece aberrante esta afirmación pero a lo largo de nuestra tarea docente hemos verificado en muchas instancias estas prácticas).
De este modo, no era raro encontrarse con la profecía autocumplida en casos en los que "el profesor espera que el niño saque buenas notas y éste las consigue", quizá no tanto por el mérito del niño en sí, sino por el trato que el profesor le daba en la calificación de sus tareas, pruebas, etc. También se encontraban casos de desesperanza aprendida, producida por el modo en que los profesores respondían a los fracasos de sus estudiantes.
Este orden de cosas ha cambiado o deberían cambiar, pues los docentes nos debemos comprometer en que la escuela sea la formadora de personas inteligentemente emocionales, creativas y productivas.
Hoy, con la apertura del mercado global, necesitamos desarrollar soluciones desde las aulas de clase hacia las necesidades de producción de nuestra gente, respetando nuestras raíces culturales y nuestra identidad, pero tolerando lo foráneo, adaptándonos en lo posible con rapidez a los cambios que se dan en la ciencia y la tecnología y por tanto en la sociedad.
Para lo cual, se debe replantear el currículo escolar o por lo menos el de aula en el que se brinde herramientas académicas básicas como el manejo efectivo del lenguaje, el trabajo empático y en equipo, la resolución de conflictos, la creatividad, el liderazgo emocional, el servicio productivo
La educación de las emociones denominada "Alfabetización Emocional" (también, escolarización emocional), pretende enseñar a los niños a modular su emocionalidad desarrollando su Inteligencia Emocional.
Los objetivos que se persiguen con la implantación de la Inteligencia Emocional en la escuela, serán los siguientes:
Para conseguir esto se hace necesaria la figura de un nuevo Profesor, con un perfil distinto al que estamos acostumbrados a ver normalmente y que aborde el proceso de "Alfabetización Emocional" de manera eficaz para sí y para sus estudiantes. Para ello es necesario que él mismo se convierta en modelo de equilibrio de afrontamiento emocional, de habilidades empáticas y de resolución serena, reflexiva, creativa y justa de los conflictos interpersonales, como fuente de aprendizaje ejemplar para sus estudiantes. Este nuevo Profesor debe saber transmitir modelos de afrontamiento emocional adecuados a las diferentes interacciones que los niños tienen entre sí.
Por tanto, no planteamos solamente la existencia de un Profesor que tenga un conocimiento óptimo de las Áreas y/o Asignaturas que dicte en el aula de clase, sino que además sea capaz de transmitir una serie de valores y desarrolle competencias a sus estudiantes, como la Competencia Emocional.
Funciones que tendrá que desarrollar el nuevo Docente:
La escolarización de las emociones se llevará a cabo analizando las situaciones conflictivas y problemas cotidianos del contexto familiar, escolar y comunitario, que generan tensión y propiciar el desarrollo de las competencias emocionales en los niños.
Por último, vamos a puntualizar que para que se produzca un elevado rendimiento escolar, el estudiante debe contar algunos factores importantes en el ámbito intra y extra escolar:
De este modo, debemos resaltar que para una educación emocionalmente inteligente lo primero será que los padres y maestros de los futuros niños escolarizados proporcionen ese ejemplo de Inteligencia Emocional, para que una vez que éstos comiencen su educación regular, estén provistos de un amplio repertorio de esas capacidades emocionalmente inteligentes.
2.2.8.- LA INTELIGENCIA EMOCIONAL EN EL RENDIMIENTO ESCOLAR
La buena disposición de un niño o un adolescente, en la escuela, depende del más básico de todos los conocimientos, el de CÓMO aprender. Todos ellos relacionados con la Inteligencia Emocional:
2.2.9.- CÓMO ESTIMULAR LA INTELIGENCIA EMOCIONAL EN LOS NIÑOS
La inteligencia emocional o CE, no se basa en el grado de inteligencia de un niño (CI, coeficiente intelectual), más bien en lo que alguna vez llamamos características de la personalidad o simplemente carácter. Algunos estudios han descubierto que las capacidades sociales y emocionales pueden ser aun más fundamentales para el éxito en la vida y la felicidad de las personas que la capacidad intelectual. En pocas palabras, tener un CE elevado puede ser más importante para tener éxito en la vida que tener un CI elevado medido por una prueba estandarizada de inteligencia.
La Inteligencia Emocional no se refiere exclusivamente a las emociones, sino a cómo integrar éstas con las cogniciones y los actos. La idea es poner inteligencia a las emociones.
Por lo tanto puede ser definida como: la habilidad para percibir, evaluar, comprender y expresar emociones, y la habilidad para regular estas emociones que promuevan el crecimiento intelectual y emocional.
Es una destreza que nos permite conocer y manejar nuestros propios sentimientos, interpretar o enfrentar los sentimientos de los demás, sentirnos satisfechos y ser eficaces en la vida, a la vez que crear hábitos mentales que favorezcan nuestra propia productividad.
Otras habilidades que caracterizan a la Inteligencia Emocional son: suficiente motivación y persistencia en los proyectos, resistencia a las frustraciones, control de los impulsos, regulación del humor, desarrollo de la empatía y manejo del estrés.
Para estimular el desarrollo de la inteligencia emocional en nuestros niños, en primer lugar, debemos conocer y aceptar las individualidades de nuestros hijos, y así poder reconocer las debilidades y fortalezas que posea cada uno. Por otra parte, es de vital importancia comprender que el ambiente, tanto familiar como escolar influye significativamente (positiva o negativamente) en el rendimiento escolar.
2.2.10.- INFLUENCIA DE LA INTELIGENCIA EMOCIONAL EN EL RENDIMIENTO ESCOLAR
Para Natalia Sastre, el niño que desarrolla su inteligencia emocional posee confianza en sus capacidades personales e intelectuales, se relaciona correctamente y es capaz de comunicar lo que quiere, piensa y siente; está motivado para explorar, para conocer cosas nuevas.
Factores, todos estos, que influyen en el rendimiento escolar. La psicóloga Gema Theus, destaca que el rendimiento escolar del estudiante depende del más fundamental de todos los conocimientos: aprender a aprender. Y enumera los siguientes objetivos a reeducar como clave fundamental:
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