El Papel del Maestro de Inglés en el PEA de la Actividad Verbal (página 2)
Enviado por Alina Medina Valdés
Vigotsky asume una nueva posición en la relación enseñanza y desarrollo que tiene una importante repercusión en la psicología del desarrollo y en la pedagogía. A diferencia de las corrientes predominantes en su época que identificaban la enseñanza con el desarrollo, los separaban de forma desigual o intentaban combinarlos, Vigotsky considera que el papel rector en el desarrollo psíquico del niño corresponde a la enseñanza, que ésta en su fuente, que lo precede y conduce y que la enseñanza es desarrolladora sólo cuando tiene en cuenta dicho desarrollo. Por tanto la enseñanza no necesita esperar a que el estudiante haya alcanzado determinado nivel de desarrollo para que pueda aprender algo, lo importante es precisar si en el sujeto existen las posibilidades para este aprendizaje.
Para Vigotsky la Escuela debía ser transformadora de la sociedad e incidir en el desarrollo de la personalidad y el Profesor debía ser guía y orientador, que convirtiera en realidad las potencialidades de la zona de desarrollo próximo del alumno, que provocara en él avances que no sucederían nunca de forma espontánea. Por otro lado el educador junto a otros miembros del grupo social actuarían como mediadores entre la cultura y el individuo. Igualmente, el maestro de lengua extranjera debe perfeccionar los métodos y forma de enseñanza y organizarlos de manera que permitan un máximo aprovechamiento de las capacidades cognoscitivas de los estudiantes y desarrollen sus posibilidades de trabajar de manera independiente preparándolos para adquirir conocimientos por sí mismos así como para aplicarlos de manera original y creadora.
Las ventajas de su teoría están en que para él la educación debe estar dirigida a la formación de la personalidad. Formar el hombre para la vida en sociedad. Y este es precisamente el objetivo general de la enseñanza de lenguas extranjeras, que está determinado por el fin de nuestra sociedad:
– formar a las nuevas generaciones y a todo el pueblo en la concepción científica del mundo, es decir, la del materialismo dialéctico e histórico; desarrollar en toda su plenitud las capacidades intelectuales, físicas y espirituales del individuo y fomentar en él elevados sentimientos y gustos estéticos; convertir los principios ideo-político y morales comunistas en convicciones personales y hábitos de conducta diaria.
La Teoría de la Actividad Verbal se basa en la Teoría General de la Actividad formulada por Vigotsky y sus discípulos, la cual constituye el punto de partida de la psicología marxista. La misma consiste en lo esencial en considerar el habla como una actividad. Toda actividad humana está dirigida a alcanzar un objetivo, el que a su vez de determina por un motivo o por un sistema de motivos. La actividad además incluye las fases de planificación u orientación, la de realización y la de control de los resultados. En el aprendizaje de lenguas extranjeras, la formación de las acciones y operaciones verbales pasa por las siguientes etapas:
– Actividad consciente (atención a la forma y al significado del material lingüístico).
– Control consciente (autoverificación de que se ha utilizado la forma correcta y se ha comprendido bien).
– Actividad automatizada (ejercitación).
– Dominio de la expresión espontánea.
Desde el punto de vista didáctico, la comprensión de estas relaciones es de gran valor, ya que permite al profesor de idiomas llegar a la esencia del fenómeno con que ha de trabajar.
La actividad verbal se compone de cuatro aspectos, en los cuales se realiza: la audición, la expresión oral, la lectura y la escritura. De ellos, dos –la audición y la lectura– son receptivos y dos – la expresión oral y la escritura- son productivas. La actividad verbal consta de habla interior y habla exterior. El habla exterior es la realización externa del lenguaje. El habla interior se manifiesta como una fase de la planificación en la actividad teórica y práctica. Los procesos de lectura, audición, escritura y expresión oral están relacionados con el funcionamiento del habla interior, caracterizándose cada uno por un grado distinto de fluidez. En la enseñanza de cualquiera de estos aspectos de la actividad verbal es indispensable formar las imágenes audiomotoras del material lingüístico, sin lo cual no es posible vocalizar internamente. Esto fundamenta la necesidad de que los estudiantes realicen ejercicios orales a fin de lograr la automatización de la actividad verbal, ya que uno de los indicadores del dominio del habla en una lengua extranjera es precisamente la fluidez del lenguaje interior. De acuerdo con el papel de la actividad verbal en el proceso del pensamiento, al enseñar lenguas extranjeras es necesario tener en cuenta lo siguiente:
El proceso del pensamiento es igual en cualquier lengua.
El pensamiento se forma y se formula con la ayuda de la lengua materna.
La tarea de la enseñanza de un idioma extranjero es la de trasladar el contenido del material lingüístico del exterior (textos, diálogos, etc.) al interior, a su forma psicológica de operaciones mentales, es decir que la tarea no es enseñar a pensar, sino enseñar a pensar en la lengua extranjera, enseñar los diversos modos en que se forman los conceptos en esa lengua. Se trata, en fin de enseñar un código que es nuevo para el estudiante, pues aunque los conceptos sean iguales en todos los idiomas, los campos semánticos de las palabras con que se enuncian no coinciden de un idioma a otro.
La comprensión de la actividad verbal esclarece una serie de problemas tales como la retención de palabras, la asimilación de los fenómenos gramaticales y la relación entre el aprendizaje de la lengua materna y la extranjera.
Analicemos los componentes de la Actividad Verbal y el papel del maestro:
1. Audición. 2. Expresión oral. 3. Lectura. 4. Escritura.
Las cuatro habilidades fundamentales que deben ser adquiridas en el aprendizaje de cualquier lengua están en correspondencia con los componentes de la Actividad Verbal y son: a) La habilidad de comprensión auditiva. b) La habilidad de expresión oral. c) La habilidad de leer. d) La habilidad de escribir.
Le corresponde al maestro de idiomas dirigir el proceso docente teniendo en cuenta que para el aprendizaje correcto de una lengua extranjera las cuatro habilidades deben estar integradas, ya que el desarrollo de una de ellas refuerza el dominio del resto y debe estimular el esfuerzo personal de los estudiantes para hacerlos hablar, escribir o leer.
El término comprensión auditiva significa ¨ audición con comprensión ¨ o bien
¨ comprensión del habla oral. ¨ La lengua oral (que incluye la comprensión auditiva y la expresión oral y es a la vez objetivo, contenido y vehículo de enseñanza de la pronunciación, la gramática y el vocabulario) es un proceso bilateral. El objetivo del desarrollo de esta habilidad es crear en los alumnos en primera instancia el llamado oído fonemático, y continuar desarrollándolo a través de todos los años de estudio. Por oído fonemático se entiende el reconocimiento del sistema de sonidos de la lengua extranjera y la identificación del significado que porta cada elemento del sistema. Por lo tanto, hay que enseñar a los alumnos ante todo a reconocer los sonidos de la lengua extranjera como algo distinto a los de su lengua materna (No obstante, debe tenerse presente que ésta no es la única condición, pues es necesario también enseñar al alumno a articular los sonidos, a reproducir los patrones de entonación y a imitar el ritmo y las pausas características de la lengua que aprende), y después a identificar el significado de cada uno. Es decir, que los alumnos deben aprender a escuchar correctamente la lengua extranjera, para que sean capaces de: pronunciar correctamente; comprender la comunicación oral en diversos grados de profundidad, según los objetivos del curso y el tiempo disponible; leer y escribir con mayor facilidad en la lengua extranjera. Para ello el maestro debe ofrecer un modelo de audición original siempre que sea posible, de lo contrario su autopreparación debe ser esmerada para que se presenten con calidad sonora todos los sonidos que se trabajen. La palabra del maestro, fluida, con variedades de matices, tonos, inflexiones, estimula la escucha. La tarea del maestro es conducir sesiones sistemáticas de audición guiada, con el objetivo de entrenar a los alumnos para que lleguen a ser capaces de escuchar correctamente la pronunciación de la lengua extranjera. Crear actividades que guíen el proceso durante la audición y que sirvan para evaluar la comprensión que han alcanzado los estudiantes.
Para que el maestro emplee métodos efectivos al enseñar la expresión oral, ha que tener presente que la expresión es siempre una producción de algo nuevo y no la reproducción de lo hecho anteriormente. Es necesario conocer los mecanismos psicolingüísticos que deben desarrollarse:
El mecanismo de combinación consiste en la formación por parte del hablante, de combinaciones de palabras y oraciones cuando el que habla utiliza en combinaciones nuevas los componentes que conoce. El desarrollo de este mecanismo se logra mediante la sistematización y la continuidad de los contenidos lingüísticos en los programas. El profeso debe proponerse desarrollar en ellos una pronunciación que se aproxime lo más posible a la de los hablantes naturales del idioma que aprenden.
El mecanismo de anticipación ha venido desarrollándose en el que habla en la fase de la formación de hábitos y habilidades, por lo que en la aplicación debe haber logrado fluidez en el habla, ya que el alumno ha creado el mecanismo de preparar toda la estructura que va a enunciar, en el nivel de su lenguaje interior.
El mecanismo de retroalimentación consiste en que el alumno evalúe la comprensión de su mensaje, percibiendo las señales de retroalimentación. El maestro debe desarrollarlo conscientemente en el aula, empleando diversos recursos, tales como la utilización de microsituaciones en las que participen los alumnos, que se vean obligados, por una parte, a improvisar (a crear espontáneamente) y en consecuencia, a responderle al interlocutor.
La habilidad de leer constituye un medio para reforzar las otras tres habilidades.
Al ejercitarla repasan los sonidos y las grafías, el vocabulario y la gramática, fijan la ortografía y el significado de las palabras y frases, y en general perfeccionan su manejo del idioma. Mientras más lee un estudiante más retiene el material lingüístico, lo que le facilita comprenderlo cuando lo escucha, y le mejora su expresión oral y escrita. Sin el dominio de la lectura el manejo de la lengua extranjera se pierde en gran medida si se vive fuera del medio lingüístico en que se habla. Representa el único aspecto de la actividad verbal que se puede continuar de modo independiente durante toda la vida. La misma requiere de la realización de operaciones mentales tales como el análisis, la síntesis, la inducción, etc., para poder interpretar y comprender la información escrita. El maestro debe guiar a los estudiantes a observar las correspondencias sonido-grafía, a encontrar los significados de las ideas, a responder preguntas de comprensión, a analizar las relaciones establecidas. Esta actividad reproduce los procesos mediante los cuales aprendieron a leer en su lengua materna, por lo que les ayuda a mejorar y fortalecer los hábitos y habilidades que puedan tener en grado deficiente en ésta cuando transitan por las cinco etapas de la enseñanza-aprendizaje de la lectura. El aprendizaje de la lectura debe comenzar por el aprendizaje de la escritura.
Para la generalidad de las personas la escritura constituye la habilidad de uso menos frecuente. No obstante, la ejercitación escrita es una vía muy eficaz para asimilar la lengua, porque el trabajo frecuente y variado ayuda al alumno a fijar la gramática y el léxico. Además, la correlación que se establece entre el sonido y la grafía mientras escribe le ayuda a desarrollar la habilidad de leer. Se deben enseñar primero los patrones ortográficos más regulares de cada sonido, evitándose la presentación de excepciones en la etapa inicial. El contenido de las prácticas de escrituras debe basarse sólo en el léxico que los alumno hayan aprendido oralmente, y la ejercitación sistemática debe tener los siguientes elementos: grafemas, palabras-clave, adquisiciones globales, ortografía gramatical y elementos de puntuación.
El maestro debe enseñar el sistema gráfico de la lengua extranjera señalando analogías y diferencias con el de la lengua materna, utilizar procedimientos inductivos al hacer las correcciones de los errores y utilizar diversos medios de enseñanza para ejercitar la escritura y establecer las diferencias entre el código oral y el escrito.
En la enseñanza de idiomas la vía didáctica idónea para que los alumnos se sientan intrínsecamente motivados es que el material lingüístico de cada unidad del programa esté contextualizado También es necesario que ese material se ejercite en forma comunicativa y que se aplique en situaciones que exijan la comunicación.
Conclusiones
En la actualidad la didáctica debe tener en Vigotsky un paradigma, acudiendo como él a métodos acordes con la época, que correspondan al desarrollo del interés cognoscitivo de los estudiantes; así como a la formación de su identidad nacional y de una cultura general integral.
Las cuatro habilidades fundamentales que deben ser adquiridas en el aprendizaje de cualquier lengua están en correspondencia con los componentes de la Actividad Verbal. Es responsabilidad del maestro de lengua extranjera conducir el proceso docente-educativo aplicando los procedimientos que se requieran atendiendo a las particularidades del estudiantado.
– En la enseñanza de idiomas la vía didáctica idónea para que los alumnos se
sientan intrínsecamente motivados es que el material lingüístico de cada
unidad del programa esté contextualizado.
Bibliografía
– Antich de León, Rosa, et al, Metodología de la Enseñanza de las Lenguas Extranjeras, Editorial Pueblo y Educación, La Habana, 1986.
– Colectivo de autores. Tendencias Pedagógicas Contemporáneas. Dpto. de
Psicología y Pedagogía. CEPES. Universidad de la Habana. 1995.
– Danilov, M. A. y M. N. Skatkin, Didáctica de la Escuela Media, Editorial de Libros para la Educación, Ciudad de La Habana, 1981.
– Documento en formato digital: . Capítulo XII: El enfoque histórico-cultural: su contribución a una concepción pedagógica contemporánea. Por Teresa Sanz Cabrera y María Emilia Rodríguez Pérez.
– Documento en formato digital: Enfoque Histórico-Cultural y de la Actividad-1. A propósito de la enseñanza de la historia de Vigotsky y el desarrollo de los conceptos. Por Humberto Alejandro Manente.
– Institutos Superiores Pedagógicos, A Course in English Lexicology, Editorial Pueblo y Educación, Ciudad de La Habana, 2002 (En inglés)
– N. V. Savin, Pedagogía, Editorial Pueblo y Educación, Ciudad de La Habana,
1976.
-Soporte Magnético Facilitado por la Universidad de Matanzas para el Curso
Didáctica Universitaria. Matanzas. 2006.
– Vigotsky. La construcción histórica de la psique. Por Enrique García González.
– Vigotsky. Teoría de la Formación por Etapas de las Acciones Mentales.
Autor:
Autora:
Lic. Alina Medina Valdés
Lic. Ana Elvira Quesada Sotolongo
Curso: 2006- 2007
Página anterior | Volver al principio del trabajo | Página siguiente |