ABSTRACT This article introduces a discovery of a double memory register in human mind. The second memory register now discovered is until unknown by science and has different function of the first one well know by science. They are not similar at all. That discover is published here under lights of Epistemology.
Este artigo contém a comunicação científica da descoberta de que há um duplo registro de memória na espécie humana. O segundo registro, ora comunicado ao meio científico, é desconhecido pela ciência e difere do que a ciência, a psiquiatria e a psicanálise conhecem e nominam como memória, até o presente momento.
Tal conhecido registro é um dos registros de memória que tem o ser humano, mas o segundo registro que se distingue completamente do que hoje se conhece como memória, ainda é ignorado por estas ciências.
A descoberta aqui publicada o foi à luz da Epistemologia.
RESUMEN El artículo contiene la comunicación científica del descubrimiento de que hay dos y no solo un registro de memoria en los humanos.
El nuevo registro es desconocido por la ciencia, la psiquiatría, el psicoanálisis, y es muy diferente de lo que estas ciencias conocen con el nombre de memoria (este es solamente uno de los registros de memoria en el hombre y ya se lo conoce bien) hasta nuestros días.
El artículo, como el descubrimiento, se hace descrito a la luz de la Epistemología. Este artículo contiene la comunicación del descubrimiento de que hay dos registros de memoria en los humanos. Como suele suceder en todo descubrimiento, el artículo se fundamenta en la Epistemología.
Así, resulta de utilidad precisar una noción de lo que es Epistemología para hacer más sencillo un mejor conocimiento de la información que sigue. Tal ponencia va también posibilitar que se lo ponga a prueba, como todo en ciencia, bajo las directrices epistemológicas de Karl Popper que voy a exponer. Para la Epistemología son fundamentales las nociones filosóficas de lo que es objetividad y subjetividad y, por tal razón, empiezo mi explicación sobre la Epistemología con estos dos conceptos fundamentales. La conceptualización filosófica de las palabras objetividad y subjetividad fue especialmente trabajada por Kant, que utiliza el nombre objetividad para indicar que el conocimiento científico debe de ser justificable, independientemente del capricho personal.
Una comunicación, un descubrimiento, son objetivos si fueran, en principio, puestos a prueba y tuvieran la comprensión de todos. Dice Kant: "Si alguna cosa tuviera validez para todos los que posean la razón, sus fundamentaciones son objetivas y suficientes". Aplica el nombre "subjetivo" para nuestros sentimientos de convicción (de muchos grados). Tales sentimientos suceden, por ejemplo, en acuerdo con las leyes de la asociación, añadiendo el filósofo que "razones objetivas también suelen actuar como causas subjetivas de juicio, a la medida en que se pueda reflejar sobre tales razones, convenciéndonos de su carácter racionalmente necesario". Karl Popper, a su vez, sostiene que las teorías científicas jamás son enteramente justificables y ni siquiera verificables pero suelen ser susceptibles de ser puestas a prueba.
En consecuencia, la objetividad de las teorías científicas está muy cercanamente relacionada con la elaboración de hipótesis y enunciaciones universales.
Sólo cuando determinados acontecimientos se repiten, de acuerdo con reglas y regularidades, como en el caso de los experimentos que se pueden reproducir, suelen las observaciones ser puestas a prueba -en principio- por cualquiera. En la teoría popperiana, llamada "teoría del Método Deductivo de Prueba", una hipótesis sólo acepta la prueba experimental – y tan sólo después de ser formulada. El trabajo del científico consiste en elaborar teorías y ponerlas a prueba. Quiere decir "que el paso inicial, el acto de concebir, generar o inventar, jamás pide análisis lógico y tampoco es susceptible, lo único que importa es la justificación de validez (el quid juris?, de Kant)" (Popper). Sostiene también que no existe cualquier metodología lógica para concebir nuevas ideas ya que todo descubrimiento contiene "un elemento irracional bien como una intuición creativa, en el sentido que le da Bergson". Más allá de tal punto, Popper sostiene que no hay teorías definitivas en ciencia, en lo que está en acuerdo con Kant, porque el ser en sí mismo, la absoluta verdad es incognoscible y, por lo tanto el conocimiento en ciencia es siempre aproximativo y puede ser cambiado por otro más nuevo.
El error en ciencia es inevitable. En Psicoanálisis, el desarrollo científico no es diferente del de las otras ciencias y, tampoco en este hay desacuerdo con los criterios filosóficos de Kant y Popper. La realidad que el psicoanálisis puede conocer es la realidad de las representaciones psíquicas de la pulsión, pero jamás de las pulsiones en sí mismas.
Freud habló al respecto que "el objeto interno es menos incognoscible de que el mundo exterior… al igual que el mundo físico, el mundo psíquico tampoco necesita ser en realidad tal como nos parece.
Nos agradará descubrir que la rectificación de la percepción interna es menos difícil que la rectificación de la percepción externa y, que el objeto interno, es menos incognoscible que el mundo exterior". "Pero", dice Popper, "toda teoría científica empírica suele ser presentada de tal modo que todos aquellos que puedan dominar la técnica adecuada puedan ponerla a prueba. En caso de que haya rechazo de la teoría, no es suficiente que el sujeto haga su refutación sólo por convicción, en lo que respecta a sus percepciones subjetivas.
Lo que el sujeto debe hacer es formular otra teoría para contradecir la nuestra, añadiendo indicaciones para que seamos capaces de ponerla también a prueba. Si el sujeto deja de proceder así, sólo resta contestarle que haga un nuevo y más cuidadoso examen de nuestro experimento, y que va a repetir más cuidadosamente." Bajo las luces de la Epistemología, voy, por lo tanto, presentar mi teoría de que hay dos registros de memoria muy diferentes uno del otro en los humanos y, a su vez, hacen posible que quienes puedan dominar la técnica adecuada puedan poner mi teoría a prueba.
Por razones didácticas voy dividir mi ponencia, a continuación, en dos capítulos.
CAPITULO 1 Nuestro destino se va construir con el desarrollo de nuestra ontogénesis, como edificación psíquica fantasmal que tiene comienzo en el útero, con impresiones y emociones que vienen desde el inconsciente de nuestra madre. El destino se resguarda en las profundidades de nuestra psique, de tal modo que cada uno de nosotros, dependiendo de como resuelve o no el complejo de Edipo, determina para el propio sujeto, sin saber conscientemente, todo el trayecto de vicisitudes y desvíos que va a recorres por su vida desde ahora.
Esto no está escrito en los astros, aunque muchas veces suele ser previsible a la perfección por astrólogos, cartomantes, videntes paranormales: pero no porque fuerzas del 'além' o almas de "otro mundo", cosas que no existen, vengan para ayudar a los maravillosos videntes. Lo que sucede en estos casos es que ellos tienen la facultad, aún desconocida por la ciencia en cuanto a la fisiología, de hacer la lectura directa del inconsciente (de la persona que los consulta) por el inconsciente del vidente.
Pero es de conocimiento público y universal que tales acertadas previsiones sólo dicen para el consultado lo que va a suceder en su vida y, exactamente son acertadas, porque jamás pueden cambiar el curso del destino del sujeto o su historia. No hay psicoprofilaxis (psicoprofilaxia) para miles de autoconfiguraciones ontogenéticas de la psicogénesis de cada uno de nosotros.
Todo va depender, en cada sujeto, de factores intrínsecos e imponderables de cada niño que llega al mundo, dependen poco o nada de nuestro DNA, una vez que gemelos homocigóticos pueden trazar para cada uno destinos completamente distintos – lo que da una sensación de culpabilidad a los padres y a la familia. En el punto más grande de mi carrera profesional, en el año de 1991, he descubierto la "memoria de los Freitas" (y aquellos que tengan curiosidad sobre por qué que di a tal memoria el nombre de mi familia, les digo que fue por un imperativo categórico, extensamente explicado en mi libro, véase la bibliografía) y la hice pública en la tercera edición de mi libro "Psicofarmacología Aplicada a la Clínica".
La memoria de los Freitas es un descubrimiento psicoanalítico y también una expresión de nuestro destino. Muchas personas pasan toda su vida estrictamente en sus preceptos y límites, pero una pequeña parte de los humanos rompe con estos preceptos y límites, aún así, la influencia de los preceptos sobre estos transgresores va continuar implacable por toda su vida. Aquellos sujetos que viven tan sólo dentro de los preceptos y límites de la Memoria de los Freitas son la mayor parte del pueblo, los que tienen poca inquietud con sus dogmas, los que no sienten la necesidad de generar y buscar un pensamiento genuino, innovador o revolucionario, ni bien alcanzan una diferenciación de sí mismos en relación al conjunto simbiótico de la horda humana en que viven. Se comportan en el mundo como rebaño.
Para tales sujetos hay una tesitura de vida ya determinada, establecida, aprendida y aprehendida en la casa familiar, en la convivencia social, y, en general, pueden tener la garantía de una vida más tranquila, estable, lo que ya esta escrito por aprendizaje en la parte oculta de la psique. Suelen mantenerse en la mediocridad de ser y no necesitan transgredir la Memoria de los Freitas. Esta memoria es la memoria socio-cultural-familiar-cultural-mitica-inconsciente-familiar-ersonal
del sujeto, toda su mitología, su religión y creencias, sus ideales dentro de su tradición y su folclore. Los transgresores no lo hacen por placer y sí por necesidad (inquietud anímica, sensibilidad supramediana). En Brasil existe la conocida historia de la gran compositora Chiquinha Gonzaga, hija de un militar que le prohibió estudiar piano porque los músicos y pianistas en su ciudad eran bohemios, gente que el padre de Chiquinha juzgaba inicua.
Pero su alma, su creatividad y su música reclamaban por crecer y, cada vez, la vida familiar le parecía más extraña; lo que a su familia le parecía lo mejor ella lo sentía como frivolidad. Su cuerpo y su alma estaban, según su forma de ver, como una golondrina prisionera en un vivero lujoso. A temprana edad, poco más de 20 años, al final del siglo XIX, Chiquinha rompe con su padre (quien jamás la reconoció nuevamente como hija) y se va a vivir a un cabaret, donde se estudiaba música y piano, con sus amigos y afines, sin jamás tener vida promiscua, con muchas privaciones materiales.
El reconocimiento social llegó en su vejez, cuando ya era conocida como una de las mayores compositoras de música clásica brasileña, pero el reconocimiento más grandioso lo tuvo post-mortem: hasta hoy Chiquinha Gonzaga es festejada como una de las más importantes creadoras de música en Brasil. Su familia la dejó en absoluto abandono hasta el final de su vida. Curiosamente, no hay brasileño que recuerde de quien era el padre de Chiquinha, o su madre o sus hermanos o su familia: ellos están igualmente muertos, pero Chiquinha, por su creatividad fue inmortalizada.
Cuando se rompe por la izquierda con la memoria de los Freitas, no hay como volver a sus cánones otra vez. En las personas en que hay esta ruptura, el sujeto trasgresor tiene que generar para sí mismo y para el mundo, rediseñar otros medios y métodos, otros paradigmas, otros ideales que van a ser perseguidos, otra manera que le ayude a no sucumbir a el caos consecuente al abandono de patrones socio-cultural-familiares, educativos pre-establecidos en el transcurso de muchas generaciones, que tienen por objeto "encuadrar" el rebaño para que se pueda ser posible la vida en sociedad (la mediocridad del encuadramiento como rebaño es necesaria, ya que sin las normas inconscientes las masas humanas promoverían la barbarie y la autodestrucción: la memoria de los Freitas es, pués, una necesidad humana en esta pre-historia del humanismo en que vivimos).
Para los sujetos que hacen la ruptura por la izquierda, el acto de crecer pasa a ser una tarea ardua y compulsiva !ah! estos príncipes y princesas de la soledad. El sujeto bien adaptado a la Memoria de los Freitas vive, generalmente, sin grandes inquietudes en el alma y sus ambiciones van coincidir con las de su medio socio-cultural, razón por la que son aceptados y queridos en sus comunidades. Tales personas suelen enriquecer en dinero, escalar puestos en la gran empresa, en las carreras políticas o religiosas, como pueden -la mayor parte- habitar la población de baja renta, todavía. Todos estos derroteros de que hablé son los sujetos comunes del pueblo y en su mayoría son, lo que podemos, llamar de "personas normales". Para los que rompen por la izquierda con la memoria de los Freitas, sucede, inexorablemente, la hostilidad familiar y social: el sujeto pasa a ser mirado como extraño, expugnable, extravagante, incluso "loco". Todo este malestar que molesta a la familia y al medio social hace nacer desde el medio y desde la familia una reacción de ataque, y el objetivo (inconsciente) de esta reacción es forzar al sujeto a volver a los cánones de la Memoria de los Freitas (lo que es imposible), ya que el trasgresor se pregunta sobre dogmas y valores sociales vigentes, lo que amenaza la homeostasis del rebaño. Un gran artista o un compositor talentoso va experimentar extrañeza ante lo que ayer le parecía familiar y va empezar a preguntar y a cambiar su forma de ver el mundo. Entonces, hay que pagar el precio por ser diferente, para que pueda convivir aceptablemente y en armonía en el medio social que aún le será hostil.
Por paradójico que parezca, con el pasar de los años (a veces post-mortem) ganará compensaciones y reconocimientos, pero generalmente muy tarde en la vida. Ganan para sí mismos los lujos de una mayor riqueza espiritual, más allá de dejar un legado más rico para el edificio de la humanidad. La memoria de los Freitas es también una fuente de conocimiento de nuestra pre-historia y, en tal sentido, no puede ser despreciada. Por ejemplo, el los sueños, en la regresión hipnótica, en las rememoraciones verdaderas -aunque explicadas con teorías espurias y llenas de errores- que suelen aparecer en las denominadas "terapias-de-vidas-pasadas" (que de nada son útiles precisamente porque su fundamentación teórica es bizarra), en gesticulaciones y comportamientos "involuntarios" (inconscientes) que el sujeto reproduce en su cotidianidad o en cualquier época de su vida (reacuérdese la Gradiva, de Jansen, analizada por Freud), o al hacer movimientos coreográficos con las manos o el cuerpo, o comportarse con gesticulaciones, temperamento, carácter, iguales que los de su bisabuelo o bisabuela que jamás conoció (características muchas veces atávicas).o una compulsión para una pseudo-enfermedad en los miembros inferiores que empiezan en una cierta edad en la vejez, muy frecuente en algunas generaciones de familias que he acompañado en mi clínica, a las que hago registro genealógico, de tal forma que el descendiente remoto, sus hermanos, y otros familiares congeneracionales dejan de caminar sin patologías o razón médica detectable:
Es un comportamiento de completa imitación, algunas veces atávicamente, de sus ancestros, de modo inexplicable, inconsciente, predominantemente averbal, hasta por parte de antepasados que el sujeto siquiera conoció, muy remotos en el tiempo. Esta transmisión inconsciente de códigos comportamentales y de destinos fue reconocida por Freud como fenómeno natural en la psique humana. Dijo Freud en el Capítulo V de su libro "Esbozo de psicoanálisis", una de sus últimas obras, que "los sueños traen a la luz un material oculto, originado no sólo en la vida adulta de quien sueña, sino también en su infancia olvidada. Somos obligados a considerarlos como parte de una herencia arcaica que un niño trae al mundo, antes de cualquier experiencia propia, influenciada por las experiencias de sus antepasados. Hemos descubierto la contrapartida de este material FILOGENÉTICO (el resaltado es mío) en las leyendas mas arcaicas y en costumbres que han sido sostenidas por años, de generación en generación, sin contacto temporal. De tal manera que los sueños constituyen una fuente de la pre-historia humana que no se puede menospreciar".
En tal declaración, Freud reconoció el fenómeno de la transmisión de códigos inconscientes comportamentales transgeneracionales y socio-culturales entre generaciones que ni siquiera tuvieron contacto temporal, pero también podemos observar, con igual transparencia, su error teórico craso, absurdo para los conocimientos de la ciencia actual. Para Freud, la fijación de la memoria de costumbres, recuerdos y códigos comportamentales transmitidos por nuestros antepasados sería FILOGENÉTICA, lo que significa, repasada de las vivencias de generaciones antiguas PARA Y POR EL DNA. El padre del psicoanálisis no estaba sólo cuando pensaba así, Jung también.
La Ley de la Herencia de Caracteres Adquiridos de la Teoría de la Evolución de Jean-Baptiste Lamarck aún tenía seguidores, lo que incluía la teoría de la degeneración de Lamarck, de la que Freíd hizo una defensa en sus obras completas. Freud siempre fue un adepto de Lamarck y abominaba la Teoría de la Evolución, de Charles Darwin (Freíd habla de Darwin de manera elogiosa y respetuosa en su obra, pero tan solamente con la lucidez de su razón. El padre de la psicoanálisis habló el nombre de Darwin muchas veces en el cuerpo de sus obras completas, pero de la misma manera que los católicos hablan todos los días de Poncio Pilatos en el CREDO: el nombre de Darwin está en su obra pero no tiene ninguna función: no hay una sola interpretación en los casos clínicos de Freud y tampoco en su océano de introspecciones, contenido en sus obras completas, que hayan sido intuidos con matices subjetivos de la teoría darwinista. Tiene una explicación. La teoría darwinista jamás fue abrazada por Freud porque supuestamente (hasta hoy) es una profanación de las escrituras sagradas judaicas, que dicen que Dios creó a Adán y a Eva en el Paraíso. Y Freud siempre fue solidario con respecto a las tradiciones judaicas, tanto en lo que está correcto como en lo que no.
Hoy, cualquier niño de curso elemental no va a aceptar explicaciones lamarckistas, ni el mismo Freud las aceptaría si estuviera vivo hoy. Es necesario que yo dedique un párrafo a esto porque desde 1991 vengo experimentado la oposición en exposiciones verbales de ideas con varios psicoanalistas, judíos y no judíos, por mi afirmación de que Freud abominaba EMOCIONALMENTE de Darwin y mantenía su soporte teórico en Lamarck para (inconscientemente) dar protección a la cultura judía. Incluso ya fue llamado antisemita!
Otros, menos radicales dicen que Freud adoraba a Darwin: mis preciados lectores, basta sólo con leer a Ernest Jones, el insuspecto Ernest Jones, en las paginas de mi bibliografía para hacer callar los insultos que he recibido hace trece años! Pienso que Freud se hace inestable cada vez que escucho a un psicoanalista argumentar tales horrores ortodoxos y dogmáticos en contra de mi descubrimiento. La investigación sobre la transmisión de códigos entre generaciones, comentada por Freud, jamás tuvo ningún seguimiento (no se habla de eso) por parte de los psicoanalistas porque muchos son ortodoxos y, lo que es peor, dogmáticos. Elegir a Freud para leerlo como la Biblia es un insulto al padre del psicoanálisis que jamás pidió un rebaño y tenía horror de fanáticos – dogmáticos! Ortodoxia psicoanalítica bien como dogmatismo psicoanalítico = memoria de los Freitas adentro del propio psicoanálisis. Quién fue más heterodoxo con sus propias ideas, quien insatisfecho con la primera teoría creó la segunda, fue Freíd mismo, y fue él quien me inspiró hacer este artículo. Pero no imaginan mis lectores cuanta incomprensión he recibido! Igualmente, no voy sucumbir al dogma. Mi teoría suele ser refutada (y espero que lo sea) más por los criterios de Karl Popper. No con base en la ortodoxia psicoanalítica, Porque, sin pruebas que la refuten, estoy convencido de tener la razón. Por otros caminos, en el vacío teórico dejado por Freud, los espíritus pasarán a "explicar" tal "memoria-de-vidas-pasadas" con una teoría absurda. La teoría de los espíritus es común, hoy, entre los "terapeutas-de-vidas-pasadas" en todo el mundo, y proliferan tal como las distintas sectas evangélicas dentro y fuera de Brasil, haciendo victimas. Creen estos "terapeutas", todos espiritistas, que en la configuración de la sección de "terapia-de-vida-pasada" almas de "otro mundo" bajan en el cuerpo y el espíritu del paciente, hipnotizado o no, lo que entonces, puede explicar los recuerdos de épocas remotas, anteriores al día de nacimiento de los pacientes.
Tal teoría no necesita refutación, por lo bizarra. Pero el fenómeno, ya percibido por Freud, de recuerdos que el sujeto tiene de hechos que son anteriores a su nacimiento es un hecho de la naturaleza, sucede y reclama una explicación. Lo que hice al nombrar (crear) la noción de memoria de los Freitas fue refutar, de acuerdo con los criterios epistemológicos de refutación de Karl Popper, las dos teorías descritas, la de Freud y la de los espíritus, trazando una nueva teoría contradictoria a aquellas y ofreciendo al lector medios para refutarla. El concepto y la constelación de proposiciones que componen la memoria de los Freitas, todavía, no se agota acá.
En verdad, frente a este asunto de memoria entre generaciones no convivientes apelando a la atención pública, pero esto es tan solamente un tema un tanto periférico de mi descubrimiento. Otros aspectos más relevantes y más importantes voy abordar en el Capítulo 2 de este ensayo, para dar un tiempo para que el lector pueda respirar. Muy borrosos, he de afirmar que los recuerdos de hechos que pasan más allá en el tiempo la época del nacimiento del paciente, por lo que observo en mi clínica, no se refieren solamente a familiares consanguíneos, lo que sepulta definitivamente la hipótesis de transmisión por el DNA. Y tales recuerdos pueden ser interpretados y decodificados en la configuración del psicoanálisis. Cuando el psicoanálisis, decodifica e interpreta la memoria de los Freitas, cambia el destino, y después de esto, no hay cartomante o vidente paranormal que pueda hacer previsiones sobre lo que sucederá en el futuro de un paciente bien analizado. Otras consecuencias de mi descubrimiento, dichas antes, ya que cuando publiqué la 3° edición de mi libro aún no lo había percibido, es que sólo hay receta de psicoanálisis para aquellos que rompen por la izquierda con la memoria de los Freitas.
Es cruel psicoanalizar un paciente, aunque neurótico, bien adaptado a la memoria, ya que el psicoanálisis (bien hecho) va a hacerlo romper con la memoria y será fuente de sufrimiento para el paciente, muchas veces sin la fuerza creativa necesaria para reordenar el caos que surge del psicoanálisis, con el apoyo del psicoanalista todavía. La indigencia del espíritu, la adaptación a la mediocridad son, por lo tanto, contraindicaciones absolutas para la práctica del psicoanálisis. Los sujetos que rompen con la memoria de los Freitas por la derecha – psicópatas, dementes, esquizofrénicos con sintomatología negativa (las formas hebefrénicas y catatónicas por ejemplo), las esquizofrenias crónicas, la deficiencia mental – el psicoanálisis es una hipótesis que debe ser definitivamente separada, una vez que en tales sujetos no hay como crear y reordenar el caos por la introspección y las interpretaciones., provocando un rompimiento imposible por la izquierda con la memoria de los Freitas. Para tales pacientes hay terapias alternativas que no molestan el inconsciente y son bien indicadas. Otra consecuencia de mi descubrimiento, que tampoco había percibido cuando hice la tercera edición es que en los sicóticos que rompen por la derecha (esquizofrenia hebefrénica, o la forma catatónica de la molestia, psicosis crónicas), en la demencia o ciertos sicóticos oligofrénicos, solo hay dos antipsicóticos (neurolépticos) de 2° generación que ayudan a tratar: la quetiapina -la mejor de todos- y la amisulprida, el haloperidol, bien como otros antipsicóticos de 2° generación como la olanzapina, la risperidona, la clozapina, por ejemplo, no solo no ayudan a tratar como hacen agravar estos cuadros mórbidos.
Esta experiencia empírica de los colegas psiquiatras va a confirmar (todavía no recomiendo que lo experimenten más), pero es un hecho clínico observado por quienes escribe libros y artículos sobre psicofarmacología desde 1981. Entretanto, el haloperidol o los antipsicóticos tradicionales, bien como los otros antipsicóticos de 2° generación que no sean la quetiapina y la amisulprida son de valor y ayudan a tratar, con eficacia similar a los otros (la elección debe ser hecha teniendo solamente en cuenta el perfil de efectos adversos) a los esquizofrénicos y otros sicóticos que tienen síntomas productivos (delirios y alucinaciones predominantemente), como en la forma paranoide de la esquizofrenia, en la manía, pero estos pacientes generalmente rompen por la izquierda con la memoria de los Freitas. También en estos pacientes el psicoanálisis es generalmente bien indicada como técnica de investigación del inconsciente, siendo terapéutico. El psicoanálisis, en los que rompen por la izquierda suele decodificar e interpretar la memoria de los Freitas y es el camino que conozco para modificar el destino porque envía un rayo de luz en las regiones oscuras de la mente. Antes de que algún lector pregunte que cuando yo hablo de romper por la izquierda y romper por la derecha pueda tener cualquier motivación de ideología política, la respuesta es no. En mi libro hay un grafico publicado con cuadrante cartesiano de abscisas y ordenadas, en diedro, con proyección en épura, en el plano, de la figura espacial que he visualizado de la memoria de los Freitas, con el ojo del observador y proyector puesto en perpendicular (90°) relativamente al plano cartesiano, puesto abajo de la imagen espacial y sobre el centro de la figura. En esta proyección aparece la imagen plana de la memoria de los Freitas centralizada en el cuadrante cartesiano.
Las dolencias de que he hablado como un rompimiento creativo están proyectadas a la izquierda de la imagen central de la épura de la memoria, y el rompimiento destructivo es visualizado a la derecha de la épura de la memoria. Todo eso es Geometría Descriptiva. Es igual como sucede cuando se va estudiar un tórax por rayos X: no se hacen radiografías del pulmón en tres dimensiones, pero si la épura (y no deja de ser épura) de la figura espacial del pulmón que se desea estudiar, que es mirada en el plano de la película radiográfica. Así también ocurre con la tomografía o la resonancia magnética: nos sería imposible trabajar con resonancia magnética de una imagen espacial del cerebro, por ejemplo, tenemos que traerla al plano, en épura.
CAPITULO 2 En el capitulo anterior he hablado sobre la memoria de hechos sucedidos antes de nuestro día de nacimiento, que se aprende y se aprehende desde el útero materno y después del nacimiento en la casa familiar y en el medio social. He dicho que esta memoria es inconsciente e imposible de evocarse conscientemente sin ayuda especializada, y hace el amoldamiento de nuestro comportamiento cotidiano, creencias, errores, aciertos, en nuestras relaciones con el prójimo; esta memoria proviene del aprendizaje informal, la llamé memoria de los Freitas y de ella hacen parte los recuerdos de hechos que preceden nuestro nacimiento.
Esto es solamente un aspecto periférico de una constelación de complejidades que dan forma a la memoria de los Freitas; hay otros mucho mas importantes, aún cuando no tengan el mismo interés en la curiosidad del hombre. Todavía su utilidad y su descubrimiento son una nueva adquisición de la Ciencia y acá voy a revelarlos. El fenómeno de recuerdos de hechos anteriores a venir al mundo fue primeramente observado por Freud, pero la investigación se paralizó porque Freud afirmaba que la transmisión de memoria inter generaciones no contemporáneas era hecha por los gametos, lo que vale decir, por el DNA, lo que es una teoría inaceptable hoy. Pero Freud tenía su entorno cultural en una época donde el Lamarckismo era muy fuerte, aún cuando la teoría de la Evolución, de Charles Darwin, ya fuera conocida.
Nosotros sabemos que Sigmund Freud, escritor de "El futuro de una ilusión" se distanció mucho, intelectualmente, de las posiciones y dogmas religiosos, pero para ello el peso mítico de este aspecto evolucionista darwiniano, por ser judío, inconscientemente le fue imposible de vencer y Freud no alcanzó distanciarse, en este particular, AFECTIVAMENTE, de su cultura judía, de tal manera que este aspecto afectivo se quedó en un PUNTO INATINGIDO. Voy aprovechar el concepto de punto intangible como marca de la cultura y de la tradición regional, familiar y personal de cada uno de nosotros, para explicitar la tradición a la que llamé memoria de los freitas. Lo que llamé memoria de los Freitas es nuestra instancia mítica. ¿Qué es un mito? Los mitos son cuentos que no se consigue desmentir, decodificar o reducir con el curso normal del pensamiento y con la evocación de la memoria común, ya que los mitos no son conscientes. Son relatos de origen popular, no reflexivos, en la mayoría de las veces retratando fuerzas de la naturaleza o creencias tan ilógicas como omnipresentes y activas en nuestra cotidianidad, escondidas en el lado oscuro de nuestra psique: hombres lobo, ideas de que "ojo grande" y envidia de otros tienen "energía" contra nosotros infortunio (sin mirar la razón científica de que la envidia no tiene energía ninguna, tanto en la concepción de la Física clásica, de Newton, como de la Física Quántica, y por ser solamente un sentimiento inherente al sujeto que lo siente, de ella padece y solo hace mal al envidioso)
El raciocinio crítico sucumbe a los mitos porque los mitos, siendo inconscientes, no son susceptibles de examen por la razón y tampoco a ella llegan, por más inteligente y perspicaz que sea la persona. Estos son aprendidos inconsciente e irracionalmente. Puedo decir también que el mito es una verdad de la que el sujeto inconscientemente se cree poseedor, que no es establecida por la razón. Su decodificación es difícil pero posible mediante el psicoanálisis y la dificultad está anclada en el hecho de que no podemos evocar los recuerdos de la memoria común. Muchas veces es difícil decodificar la propia enunciación, que puede ser intensamente vivida por el sujeto, sin que esto se perciba siquiera de cómo es que su propio mito se enuncia. Como he dicho, los mitos son cuentos que no podemos desmentir, descubrir, decodificar o reducir por las vías normales del pensamiento y tienen un carácter universal; la humanidad, la región, la familia o la propia subjetividad del sujeto (mitos personales). ¿Y ahora? He dicho que los mitos son cuentos y que hay en su trasmisión, por generaciones, un aprendizaje informal! El lector ha de preguntar: ¿entonces quién cuenta estos cuentos? A esta pregunta voy contestar con un caso clínico del propio Freud, sobre un pasaje de su libro "análisis de la fobia en un niño de cinco años", el conocido caso del pequeño Hans.
En la introducción, primera parte del texto, cuenta Freud que Hans, a los tres años y medio de edad fue visto por su madre tocando con la mano su propio pene. Ella lo amenazó con las siguientes palabras:"si usted hace eso nuevamente voy llamar el doctor A para que le quite su 'pipi'". Como podemos ver, esta pequeña historia, tan universal, que sucedió entre Hans y su madrecita – y todos nosotros ya presenciamos madres y personas adultas amenazando niños con esta misma amenaza, sin saber que están propagando un trágico mito inconsciente – contiene una codificación inconsciente mítica que la madre de Hans no conocía su significado, codificación que le fue transmitida por sus ancestros y que ella retransmitió a su hijo. Exactamente por no tener conciencia del enunciado del mito que estaba retransmitiendo a su hijo, ella lo hizo de manera incompleta y falseada.
En la verdad, no era el doctor A que estaba presente en el inconsciente de la madre de Hans cuando ella ha retransmitido a su hijo una amenaza aprendida inconscientemente con sus propios ancestros. Este material, incompletamente verbalizado dio a Hans munición para la formación de uno de sus mitos, el mito de la castración. Entre las lagunas que quedan en aquello que es transmitido por las generaciones anteriores, entre las lagunas de aquello que es retransmitido incompleta y falseadamente, entre las lagunas de aquello que el niño o la niña pueden aprehender con sus propias palabras (único instrumento simbólico de que disponen para construir su mirada de mundo) y fantasías que encuentran sobre lo que observan en sí mismos y en el mundo exterior nacen los mitos, todos los mitos, estos tapaojos del pensamiento humano. Nuestros mitos más primitivos y más universales son nuestras protofantasías, la de seducción, la de castración y la de la cena primaria. Son ellas fantasías sobre el origen y no fantasías presentes desde el origen (como imaginaban Freud, Jung y muchos psicoanalistas aún hoy, residuos del lamarckismo, que imaginaba, adentro del psicoanálisis, que las protofantasías ya venían desde el origen, provenientes de los gametos – DNA). Y que en la verdad, son solamente fantasías creadas por las representaciones simbólicas a través de impresiones y experiencias inconscientes, y, por lo tanto, fantasía que todos nosotros creamos como edificaciones simbólicas en la ontogénesis – desarrollo que depende de la cultura – si fueran fantasías por herencia de DNA (filogenéticas) como pensaban Freud y Jung, ¿Cómo iba a poder el psicoanálisis mitigar efectos mitológicos desestructurantes? Mitos desestructurantes, tanto cuanto mentirosos son aquellos que las personas tienen de que la envidia o su "ojo grande", o el odio de otros pueden tener una "energía" que hace mal a la persona envidiada.
Esto es tan solamente un ejemplo de entre miríadas. Si fuéramos hasta la razón y el conocimiento de la ciencia, los mitos caerían uno a uno por tierra al primer examen. Los mitos sólo sirven a la perpetuación de los dogmas y a la manutención del espíritu de rebaño, generalmente provocan miedo y tienen la función social de complementar a las leyes civiles y religiosas, siendo más poderosos que esos porque no son verbalizables, son impuestas por la memoria de los Freitas e inmunes al raciocinio crítico y a la libertad de opinión, y tienen como función primordial no permitir que el sujeto medio transgreda "normas" establecidas socialmente y, por lo tanto, tienen eficacia en impedir una barbarie, aún mayor de la que hoy presenciamos en todo el mundo El descubrimiento de la memoria de los Freitas y la posibilidad que se abre para pasar sobre ella (que habita en la parte oscura de la psique y cuyos subproductos ensombrecedores, castradores, tiránicos e impositivos proliferan como lobos en la oscuridad) rayos de luz, permiten el alivio y la liberación de todos nosotros de los grilletes que nos cercenan los pasos del desarrollo anímico, deshacen nuestra ignorancia sobre las verdades de la naturaleza y ayudan en el sentido de hacer que nuestra vida sea más productiva, libre, descontrariada y prolífica, sin miedos absurdos e irracionales. En estos días sólo una pequeña parte de los pueblos logran romper por la izquierda con la memoria de los Freitas, y no lo hacen por elección, lo hacen por disconformidad, sufrimiento. Pero cuando hay tal rompimiento el sujeto crea todas las obras que edifican el confort y el progreso de la humanidad: todos nosotros vivimos en los hombros de estos gigantes. La inmensa mayoría de la población tiene necesidad de quedarse en la memoria de los Freitas por toda su vida, ya que la civilización no edificó un instrumento menos cruel para garantizar a la masa la necesaria humanización sin valerse de instrumentos coercitivos; y no sólo sufrimos de la memoria de los Freitas para que no haya toda clase de delitos, crímenes horribles: aún carecemos de Código Penal, policía, Fuerzas Armadas! La humanidad aún está en la pre-historia del humanismo. Tan solamente los muy grandes de espíritu perciben la coerción que la Memoria de los Freitas representa y rompen por la izquierda, para crear. Pero si toda la humanidad hiciera el rompimiento, sin los mismos recursos creativos de estos super-hombres, resultaría en un desastre.
1. Jones, Ernest – Vida e Obra de Sigmund Freud, IMAGO ED. Vol.2, páginas de 301 a 313, Título X – Biología, Río de Janeiro, 1975. 2. Kalmus, H. – Genetics, Pelican Ed., London, 1948. 3. Lamarck, Jean Baptiste – Philosophie Zoologique, Librairie Reinwald, Schleideir Frères Editeurs, Paris, 1907. 4. Freitas, Ednei – psicofarmacología Aplicada à Clínica, EPUB ED., 3° Edição, páginas de 3 a 47, Río de Janeiro, 2000. 5. Freud, Sigmund – Análise de uma fobia em um menino de cinco anos, IMAGO ED., Edição Standard Brasileira, Vol. X, Río de Janeiro, 1975. 6. Freud, Sigmund – Os instintos e suas vicissitudes, IMAGO ED., Edição Standard Brasileira, Vol.XIX, Río de Janeiro, 1975. 7. Freud, Sigmund – (1937-1939) – Esboço de Psicanálise, IMAGO ED., Edição Standard Brasileira, Vol XXIII, páginas de 169 a 210, más especialmente la página 193, Río de Janeiro, 1975. 8. Kant, I. – (1781). Critique of pure reason, in The Transcendental Doctrine of Method, N. Kemp Smith Ed., Capítulo II, seção 3, página 645, England, 1933. 9. Popper, Karl – A lógica da pesquisa científica, Ed. Cultrix, páginas de 46 a 49 e 106, São Paulo, 1989. 10. Popper, Karl – Conhecimento Objetivo, Ed. Itatiaia, páginas de 152 a 158, Belo Horizonte, 1975.
Ednei José Dutra de Freitas
Ph.D. Psiquiatra, Psicoanalista, Miembro Titular de la International Psychoanalytical Association (Londres) y de la Sociedad psicoanalítica de Río de Janeiro (Brasil), Ex-Profesor de la facultad de Medicina de la Universidad Estadual del Río de Janeiro (UERJ-Brasil) en las disciplinas de psiquiatría y Psicología Médica, Miembro Titular de la Sociedad Brasileña de Médicos Escritores, autor del libro PSICOFARMACOLOGIA APLICADA À CLINICA, 3° edición, Editorial EPUB, Río de Janeiro, 2000.