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Métodos anticonceptivos (página 2)

Enviado por Romina Aguirre


Partes: 1, 2

 

El útero

Esta cavidad, a la que van a desembocar las dos trompas uterinas, está destinada a alojar al feto. Por ello debe ser muy dilatable y tener una musculatura que se contraiga fuertemente durante el parto.

El útero tiene la forma de una pera invertida, con su abertura en la parte inferior. La parte superior forma una especie de cúpula donde desembocan las trompas, luego se estrecha hasta formar el cuello uterino. Éste es redondeado y sobresale hacia la vagina aproximadamente 1 cm. El útero tiene una longitud aproximada de 7 cm y pesa de 80 a 100 g.

Su pared interna, que recibe el nombre de endometrio, es la capa que se hace más gruesa para recibir el óvulo fecundado y la que se descama durante la menstruación cuando no ha habido embarazo.

La capa interna es el miometrio y está formada por gran cantidad de fibras que circulan en todas las direcciones. Si no hay embarazo esta capa mide 2 cm de grosor, pero durante la gestación aumenta mucho para tener mayor potencia durante la expulsión.

El cuello uterino también cambia durante el embarazo, ya que se hace más blando y dilatable para permitir el paso del bebé.

El ciclo menstrual

Regulado por la actividad hormonal del eje hipotálamohipofisario, tiene una duración aproximada de 28 días, contada desde el primer día de una menstruación hasta el inicio de la siguiente. En una primera fase, la influencia de la hormona foliculoestimulante (FSH) provoca en el ovario la maduración de un folículo primario y su correspondiente óvulo (fase folicular), así como la producción de estrógenos que estimularán la proliferación de la mucosa uterina (fase proliferativa).

Hacia la mitad del ciclo se produce un súbito incremento de la hormona luteinizante (LH)3 que determina la rotura del folículo ovárico y la ovulación. A continuación, se desarrolla el cuerpo amarillo productor de progesterona (fase lútea), hormona que estimula el crecimiento de la mucosa uterina (fase secretoria) en preparación para la posible implantación del óvulo fecundado. Si no se produce la fecundación, al cabo de aproximadamente dos semanas disminuye la secreción de luteinizante y, consecuentemente, la de progesterona, con lo cual se produce el desprendimiento del endometrio y la consiguiente hemorragia menstrual, comenzando un nuevo ciclo.

La vagina

Es un tubo de 8 a 10 cm de largo, que nace alrededor del cuello uterino y se prolonga hacia abajo hasta abrirse entre el orificio de la uretra y el del ano. Su sección transversal no es circular, sino que tiene un orificio en forma de H. Ello se debe a que, además de recibir el pene, por ella habrá de pasar el bebé, por lo que tendrá que abrirse mucho.

Posee una capa mucosa interna y una capa muscular que no es especialmente fuerte. En la primera se produce una secreción que protege contra los microbios. Por ello es mejor no lavar esta parte del cuerpo, para no destruir este mecanismo de defensa.

Órganos genitales externos

Alrededor de la salida de la vagina hay una serie de estructuras que la protegen y facilitan el acto sexual. En su conjunto forman la vulva.

Los labios mayores. Son dos repliegues de piel que limitan la entrada de la vagina. Se unen por delante en el monte de Venus y están recubiertos de vello.

Los labios menores. Se hallan por dentro de los primeros y son más finos, ya que no poseen tanta grasa.

El clítoris. Se halla en el lugar de unión de los labios menores por delante, y es el análogo del pene masculino. Es, por tanto, una estructura eréctil y muy sensible.

El himen. Esta membrana se halla a la entrada de la vagina y es la que se desgarra durante el primer coito. No tapa el orificio completamente, pues debe dejar pasar la sangre de la menstruación. Su superficie es muy variable de unas mujeres a otras: en algunas su rotura provoca una gran hemorragia y dolor, y en otras es prácticamente inapreciable.

Glándulas de la vulva. En la vulva existen dos pares de glándulas destinadas a secretar un mucus que humedece el vestíbulo vaginal. Se trata de los conductos de Bartolino y los de Skene.

2.3 Aparato reproductor masculino

En el sistema reproductor masculino, al igual que en el femenino, existen tres partes: los órganos fundamentales que producen las células sexuales y las hormonas, el sistema de transporte hacia el exterior en el hombre o hacia donde debe producirse la fecundación en la mujer, y los genitales externos, destinados a facilitar la unión entre los dos sexos.

Los testículos

Denominados también glándulas seminales, son órganos productores de espermatozoides y testosterona, que es la hormona masculina. Se encuentran situados en la parte anterior de la región perineal, tienen forma de ovoide, de unos 5 cm de longitud, y se hallan en el interior de una bolsa protectora llamada escroto. Dicha bolsa se sitúa fuera de la cavidad abdominal, por debajo del pene.

Cada testículo se halla además envuelto en una cápsula blanquecina de tejido conjuntivo muy resistente, que envía tabiques que subdividen el interior. Se forman así de 200 a 300 lobulillos, donde se alojan los túbulos seminíferos.

Estos finísimos tubos están enrollados sobre si mismos, ya que si se estirasen alcanzarían hasta 60 m de longitud. Todos ellos desembocan en una fina red, la rete testis, que desemboca en los conductillos deferentes, que se encuentran ya fuera del testículo. Los conductillos deferentes confluyen en el epidídimo, que se continúa por el conducto deferente.

En los túbulos seminíferos se producen los espermatozoides, mientras que en los tabiques de tejido conjuntivo se forma la testosterona.

¿Cómo se forman los espermatozoides?

El proceso de formación de los espermatozoides recibe el nombre de espermatogénesis y tiene varias fases. Las células iniciales se llaman espermatogonias y se reproducen dando muchas células idénticas a ellas. Todas ellas tienen 46 cromosomas, hasta que en su última generación se produce la reducción de este número, que pasa a ser de 23. Tras varias generaciones reproductivas más aparecen los espermatozoides, que ya no son células esféricas, sino que tienen su forma típica. Todo este proceso dura varias semanas.

Los espermatozoides maduros tienen una estructura especializada para nadar por los conductos sexuales femeninos. Poseen una cabeza con un escudo en la parte frontal y con el núcleo. A ella sigue el cuello y la cola, formada por un flagelo que es el encargado del movimiento. La longitud total es de 6 centésimas de milímetro.

La bolsa testicular o escroto

El escroto es una bolsa constituida por una pequeña parte de la pared del abdomen anterior, cuya misión es albergar y proteger los testículos. Por tanto, su estructura va muy ligada a estas dos funciones. Antes del nacimiento y durante la formación del feto, la bolsa escrotal se halla vacía, puesto que los testículos no descienden hasta poco antes del nacimiento.

Debido a su procedencia abdominal, la estructura de las 5 capas, que forman la pared de la bolsa testicular, mantienen una gran similitud con las de la pared del abdomen: la capa vaginal propia, la fascia espermática interna o túnica vaginal común, el músculo cremáster, la fascia espermática externa o fascia cremastérica y la piel del escroto.

Vías genitales masculinas

Desde el momento de la salida del testículo hasta llegar a las vías genitales femeninas, los espermatozoides deben recorrer un largo camino.

Epidídimo. Recibe los espermatozoides que llegan de los conductos deferentes. Se trata en realidad de otro sistema de conductos enrollados sobre sí mismos, que se halla rodeado de tejido conjuntivo. Los espermatozoides permanecen en el epidídimo unos cuantos días, donde acaban de madurar.

Conducto deferente. Es donde van a parar los espermatozoides que provienen del epidídimo. Tiene una longitud de 50 a 60 cm, y es un tubo de gruesas paredes, con un diámetro total de 3 mm. Dichas paredes están formadas por músculos de fibras enrolladas en espiral, que impulsa los espermatozoides hacia adelante. En su tramo final el conducto deferente recibe los productos fabricados en las vesículas seminales.

Vesículas seminales. Se trata de dos bolsas de aspecto arrugado, de unos 5 cm de largo, que se encuentra una a cada lado de la vejiga de la orina. Van a desembocar a los conductos deferentes, que provienen de los testículos. Su función es producir parte del líquido seminal, que junto con los espermatozoides forma el semen.

Conductos eyaculadores. Constituyen la continuación de los conductos deferentes y pasan por el interior de la próstata, donde vierten sus conductos a la uretra.

Próstata. Es una glándula situada por debajo de la vejiga urinaria, que contribuye con su secreción a formar el semen. Tiene la forma y el tamaño de una castaña. Es atravesada por los dos conductos eyaculadores y por la uretra, que sale de la vejiga.

Glándulas de Cowper. Son glándulas del tamaño de un guisante, que se encuentran por debajo de la próstata. Producen una secreción mucosa que acaba de completar el contenido del semen y que vierte a la uretra.

Uretra. Aunque éste es el conducto de salida de la orina desde la vejiga urinaria, atraviesa la próstata y allí se reúne con los conductos eyaculadores. Así pues, también transporta el semen.

El pene

Es el órgano de salida del semen y el que debe situar los espermatozoides en el interior de la vagina femenina. Tiene forma cilíndrica y en su extremo se ensancha formando el glande, donde se encuentra el orificio de salida. Rodeando al glande se halla el prepucio, que es un repliegue de piel unido a la base del glande pero no a su extremo.

Por el interior del pene pasa la uretra, que se halla rodeada por el cuerpo esponjoso. Por encima de él se encuentran los dos cuerpos cavernosos, que son los encargados e la erección.

Los cuerpos cavernosos están separados por un tabique y formados por numerosas cavidades que se hallan vacías cuando el pene se encuentra en reposo. Cuando se produce una erección, gran cantidad de sangre que proviene de una arteria del pene llena las cavidades. Éstas se hinchan haciendo que el miembro aumente de tamaño y quede erecto, de forma que pueda introducirse en la vagina.

Después de producirse la eyaculación, la sangre vuelve a salir de los cuerpos cavernosos y el pene vuelve a su posición de reposo.

El semen

Es el conjunto de las secreciones de las vesículas seminales, la próstata y las glándulas de Cowper, junto con los espermatozoides que nadan en él.

En cada eyaculación se expulsan unos 3,5 mililitros de semen, que contienen entre 100 y 400 millones de espermatozoides. Éstos pueden sobrevivir hasta 4 días en el interior de los conductos sexuales femeninos. Su viaje hacia destino, que es la parte más alta de las trompas de Falopio, dura de una a tres horas. Por el camino muere una gran proporción de ellos, ya que únicamente un 1% consigue llegar al interior del útero. Sólo uno llega a fecundar el óvulo maduro, si es que lo hay. Por ello, se precisan grandes cantidades de espermatozoides, y los hombres con menos de 50 millones de ellos por mililitro es difícil que puedan tener hijos. Hoy en día, sin embargo, mediante las técnicas de inseminación artificial es posible aumentar la concentración de espermatozoides de un hombre e introducirlos artificialmente en el útero de una mujer.

3. Fecundación

 La reproducción es una función biológica cuya finalidad es la continuidad de las especies. Esto también es válido para todos los seres vivos, incluido, obviamente el ser humano. Sin embargo, es importante señalar que, en nuestra especie, cada individuo tiene un margen de mayor decisión, de manera que la reproducción también puede constituir una opción individual.

El coito o cópula es un tipo de práctica sexual que consiste en la introducción del pene en la vagina y que, desde el punto de vista biológico, está destinado a la fecundación y reproducción.

El espermatozoide debe penetrar en el óvulo pocas horas después de la ovulación, en las trompas de Falopio. La eyaculación consiste en una serie de contracciones de los músculos de la cavidad abdominal que hacen que el semen sea expulsado con fuerza en varios chorros.

El óvulo fecundado, que se llama huevo o cigoto, llega unos días después al útero, donde se implanta y comenzará su desarrollo.

4. Métodos anticonceptivos

 4.1 Definición

Se entiende como anticoncepción los métodos y técnicas que puede emplear una pareja para mantener relaciones sexuales satisfactorias libremente, de forma que el embarazo se produzca en el momento en que ellos lo consideren oportuno. Los métodos anticonceptivos son técnicas concretas para prevenir embarazos no deseados.

El término de anticoncepción, en un sentido más estricto, significa evitar la concepción o fecundación. No obstante, desde un punto de vista practico, estos métodos incluyen todos los procedimientos que existen para evitar la fecundación, la implantación y el crecimiento de la célula huevo.

 4.2 Requisitos al elegir un anticonceptivo para la planificación familiar

  1. Garantizar una protección segura contra un embarazo no deseado.
  2. Carecer de efectos secundarios peligrosos.
  3. Ser aceptable psicológicamente, teniendo en cuenta el necesario equilibrio en una relación sexual armónica.
  4. Ser reversible, porque ninguna persona renuncia con gusto de manera permanente a la posibilidad de reproducirse.
  5. Ser económico.
  6. Que se pueda utilizar fácilmente.

4.3 Tipos de métodos

4.3.1 Métodos naturales

Son los que no se basan en ningún mecanismo físico o químico para evitar el embarazo.

De estos métodos, los únicos recomendables son los que se basan en la continencia periódica, que consiste en no realizar el coito durante los días previos y posteriores a la ovulación. Es decir, que se basan en evitar el coito vaginal durante los días de l ciclo menstrual en que se podría producir la fecundación. En cada ciclo menstrual existe un período fértil durante el cual, de realizarse un coito, podría producirse la fecundación, y un período no fértil, durante el cual la fecundación no es posible. Los óvulos solo se mantienen viables hasta 24 horas después de la ovulación, y los espermatozoides solo pueden sobrevivir hasta un máximo de 72 horas dentro del aparato genital femenino. Así, el período fértil comprende desde tres días antes de la ovulación hasta un día después de ésta, y dura, en total, cuatro días. Por el contrario, el período no fértil se inicia un día después de la ovulación y se extiende hasta tres días antes de la siguiente ovulación, comprendiendo un total de 24 días.

Los ciclos menstruales no duran siempre 28 días, y la ovulación no se produce en todos los casos el día 14 de cada ciclo. Por ello, en la práctica, al emplear estos métodos, el período de continencia o abstención del coito vaginal debe extenderse a unos 6 o 7 días, para garantizar un margen mínimo de seguridad.

Estos métodos poseen la ventaja de ser naturales y resultar económicos, pero requieren un largo período de preparación y entrenamiento y una gran dosis de disciplina. Además, la abstinencia de coito vaginal durante períodos repetidos a menudo comporta trastornos emocionales. Por todo ello, su índice de fracaso es bastante elevado.

Dentro de este tipo de métodos encontramos los siguientes:

4.3.1.1 Método del calendario o método de Ogino

Es el método mediante el cual se puede predecir la fecha de la ovulación teniendo en cuenta las fechas de ovulación de los ciclos precedentes. Este cálculo se realiza apuntando, durante 12 meses seguidos, la fecha del primer día de cada regla, considerándola como el primer día de ciclo menstrual. Para establecer las fechas en que se puede producir el período fértil se resta 18 al número de días que ha durado el ciclo más corto y 11 al número de días que ha durando el ciclo más largo. La primera de las cifras obtenidas es la fecha del ciclo menstrual en que debe comenzar la continencia, y la segunda, la fecha en que acaba el período de continencia.

 4.3.1.2 Método de registro de la temperatura basal

Este método consiste en registrar la temperatura del cuerpo diariamente, y se basa en el hecho de que, durante la ovulación y en los días posteriores la temperatura corporal se incrementa unas décimas por encima de lo normal.

4.3.1.3 Método de Billings

Consiste en observar las características del flujo vaginal a lo largo del ciclo menstrual, y se basa en que en el momento de la ovulación el flujo vaginal es más abundante y líquido que en el resto del ciclo.

 4.3.1.4 Coitus interruptus

Este método consiste en retirar el pene antes de la eyaculación, no se considera un método anticonceptivo, porque ya antes de la eyaculación se expulsa por la uretra un flujo que contiene cantidades importantes de espermatozoides.

Además, puede provocar insatisfacción sexual y frustración, porque requiere un alto grado de control por parte del hombre, y las relaciones sexuales no suelen vivirse como completas.

 4.3.2 Métodos de barrera mecánica o química

Se basan en el empleo de dispositivos y/o sustancias químicas que impiden por una u otra vía, que los espermatozoides penetren en el útero. Los más importantes son el condón o preservativo, el condón femenino, el diafragma y los espermicidas, que se pueden presentar en forma de óvulos vaginales, cremas, geles y aerosoles. Su índice de eficacia es bastante elevado, especial- mente si se emplean conjuntamente los que implican una barrera física con los espermicidas.

 4.3.2.1 Preservativo o condón

Es una funda de látex que se coloca sobre el pene antes de realizar el coito, impidiendo que el semen entre en contacto con el aparato genital femenino.

El preservativo posee varia ventajas como anticonceptivo. En primer lugar, el fácil de emplear, es relativamente económico y no requiere prescripción médica. Además, es un método relativamente eficaz para prevenir embarazos no deseados, especialmente si se utiliza conjuntamente con sustancias espermicidas. Por otra parte, es útil para la prevención de diversas enfermedades de transmisión sexual. En general, esta especialmente recomendado en las relaciones sexuales esporádicas y en los adolescentes.

Los preservativos se mantienen en buen estado durante dos años.

No se deben usar después de su fecha de caducidad, y deben conservarse en un sitio fresco y seco. Se han de colocar antes de que el pene contacte con los genitales femeninos, ya que las secreciones uretrales suelen contener espermatozoides. Para que este sea colocado, el pene debe estar erecto, y el prepucio replegado hacia atrás, dejando el glande al descubierto.

Tras desenrollarlo, el preservativo sea de adherir a lo largo de la superficie del pene sin que se formen bolsas de aire. Los preservativos suelen presentar, en su extremo, un depósito para el semen. Sino existe tal depósito, hay que dejarlos sobresalir un centímetro en la punta. Los preservativos suelen tener incorporadas sustancias espermicidas y lubricantes. No obstante, para aumentar su eficacia, conviene untar el preservativo, el pene y la vagina con crema espermicida, antes de colocarlo. Nunca debe usare vaselina o algún otro lubricante soluble en grasas, que pueden desintegrar el látex.

Los lubricantes deben ser hidrosolubles.

Una vez que ha tenido lugar la eyaculación, se debe retirar el pene de la vagina lo antes posible, para evitar que, al reducir este su tamaño, el preservativo se desprenda y caiga dentro de la vagina.

Por la misma razón al retirar el pene de la vagina, conviene sujetar el condón por su base.

Los preservativos sólo pueden usarse una vez. Así, después de usarlos, hay que tirarlos y, si se desea seguir practicando el coito, debe emplearse uno nuevo.

Beneficios colaterales:

  • Prevención de infecciones vaginales o transmitidas por contacto sexual y, posiblemente, de enfermedad inflamatoria pélvica.
  • Mayor comodidad y placer sexual con los dispositivos lubricados.
  • Inclusión del condón en el juego sexual.
  • Reducción de títulos de anticuerpos en las parejas en que la mujer los produce contra los espermatozoides de su compañero.

4.3.2.2 Diafragma

Es una especie de gorro de látex que se coloca en el fondo de la vagina, cubriendo y obstruyendo la entrada del cuello uterino, y que impide que el semen se introduzca en el útero.

Los diafragmas no son desechables sino que pueden usarse durante varios meses, hasta un máximo de dos años. Existen diversas medidas de diafragmas, que se adaptan a la anatomía de la mujer que los usa, y conviene que sea una especialista quien decida cuál es la medida adecuada para cada persona.

El diafragma es relativamente fácil de emplear y no interfiere en el funcionamiento normal del aparato genital femenino. No obstante, es conveniente que lo seleccione un especialista y que la mujer se someta a un control ginecológico con cierta periodicidad. En general, tiene las mismas ventajas, inconvenientes e indicaciones que el preservativo. Sin embargo, su eficacia es algo inferior, incluso cuando se emplea con espermicidas.

El diafragma debe colocarse antes del coito. Lo ideal es unos 10 minutos antes, y nunca más de 2 horas antes, ya que podría irritar y molestar. Conviene utilizarlo con una crema espermicida, que ha de colocarse sobre la superficie convexa, que es la queda, tras la colocación, mirando hacia la vagina. Para colocar es conveniente que la mujer esté agachada, con las piernas separadas.

Se sujeta el diafragma con una mano, de forma que este quede formando un 8, y se introduce hasta el fondo de la vagina, de manera que cubra el cuello del útero.

El diafragma ha de permanecer colocado un mínimo de 8 horas después de la última eyaculación, porque durante este tiempo aún pueden quedar espermatozoides viables, pero nunca más de 2 días, porque su permanencia favorece el desarrollo de infecciones. Si se desea practicar el coito antas de retirarlo, basta con untar la vagina y el pene con espermicidas.

Tras extraerlo, el diafragma debe lavarse con agua y jabón neutro, comprobando que este íntegro. Si es así, se entalca y se conserva en un lugar fresco y seco para usarlo la próxima vez. En caso contrario, se ha de adquirir uno nuevo.

Ventajas:

  • No interfiere la lactancia.
  • Puede insertarse de 2 a 6 horas antes del coito.
  • Se evita la ingestión diaria de comprimidos.
  • No altera los procesos metabólicos o fisiológicos.
  • Los beneficios colaterales del empleo consiste en cierta protección contra enfermedades de transmisión sexual y contra el desarrollo de displasia cervical.

Efectos secundarios y complicaciones:

  • Prurito, ardor o inflamación del tejido vaginal, por alergia al látex, el caucho o a la jalea o cremas espermicidas.
  • Posible dificultad en las evacuaciones o alteración del tamaño de las heces; asimismo, hemorroides cuando el dispositivo ejerce presión sobre el colon descendente a través de la pared vaginal, a causa de su gran tamaño.
  • Dolor por tejido vaginal o episiotomía no cicatrizados cuando el dispositivo se coloca demasiado pronto después de parto a término.

Contraindicaciones:

  • Alergias al caucho o a los espermicidas.
  • Antecedentes de infección recurrente de vías urinarias.
  • Anomalías de las vías genitales a causa de musculatura débil, con prolapso uterino; cistocele, rectocele y disminución del tono vaginal, casi siempre en multíparas.
  • Útero fijo en retroflexión o retroversión.
  • Falta de tiempo o de personal capacitado para ajustar el diafragma e instruir a la paciente sobre su uso.
  • Antecedentes de síndrome de shock tóxico.
  • Incapacidad de la mujer para aprender a insertar y retirar el diafragma.
  • Falta de medios y de intimidad para la inserción, la higiene, o de un sitio apropiado para guardar el dispositivo.
  • Musculatura vaginal muy tensa que impide la inserción del diafragma.
  • Escotadura por detrás del pubis demasiado superficial para dar apoyo al reborde del diafragma.

4.3.2.3 Capuchón cervical

Se trata de un dispositivo de caucho blando, en forma de capuchón, que se ajusta firmemente sobre el cuello uterino e impide el paso de los espermatozoides. Es más profundo y de menor diámetro que el diafragma, y se mantiene en su sitio por efecto de vacío.

El capuchón debe llenarse hasta la mitad con jalea espermicida para mejorar su eficacia, puede ser más difícil de colocar y extraer que el diafragma y se considera de eficacia semejante a la de este último.

Contraindicaciones:

  • Falta de personal capacitado para colocar el dispositivo e instruir a la paciente sobre su empleo.
  • Alergia al caucho o a los espermicidas.
  • Anomalías anatómica del cuello uterino o de la vagina.
  • Incapacidad de la mujer para aprender la técnica de inserción.
  • Infecciones cervicales o vaginales.
  • Frotis de Papanicolau anormal.
  • Antecedentes de síndrome de shock tóxico

4.3.2.4 Compresa anticonceptiva vaginal

Se trata de compresas de colágeno natural o material sintético en las que se incorpora un agente espermicida. La compresa tiene la forma de una pequeña almohadilla, en uno cuyos lados presenta una depresión cóncava para que se ajuste al cuello uterino, mientras que en el reverso dispone de una tira que facilita la extracción del dispositivo. Además de sus propiedades espermicidas, actúa como barrera cervical y atrapa los espermatozoides.

Antes de su introducción, la compresa debe humedecerse con agua. El dispositivo brinda protección durante 24 horas, período durante el cual puede repetirse el coito varias veces sin tomar más precauciones, aunque conviene complementar el método con el añadido de espermicidas. A las 24 horas se extrae y se desecha.

La compresa anticonceptiva vaginal se considera de eficacia similar a la del diafragma, aunque tal vez sea menor.

Contraindicaciones:

  • Alergia al espermicida o al poliuretano.
  • Anomalías de las estructuras pélvicas que dificultarían su colocación, retención o extracción.
  • Incapacidad de la mujer para colocar o extraer el dispositivo.
  • Incapacidad de recordar la manera de emplearlo.
  • Antecedentes de síndrome de shock tóxico.
  • Colonización vaginal por Staphylococcus aureus.

4.3.2.5 Las sustancias espermicidas

Son productos farmacéuticos que tienen la propiedad de inmovilizar o destruir los espermatozoides y que, tras introducirse en la vagina, impiden que éstos se mantengan viables y penetren en el útero.

Las sustancias espermicidas que se presentan en forma de óvulos, tabletas vaginales, gel, crema y aerosol, deben introducirse en la vagina entre algunos minutos y una hora antes del coito. Siempre debe leerse atentamente el prospecto del producto, ya que su forma de empleo y la duración de su efecto son variables. Por lo general, su efecto dura entre 30 y 120 minutos. Tras la eyaculación, debe dejarse pasar un espacio de dos horas, como mínimo, antes de lavarse la vagina, de manera que su efecto se mantenga el máximo tiempo posible.

Los espermicidas tienen la ventaja de ser completamente inocuos y de fácil manejo. La única desventaja que poseen es que, a veces, producen una sensación de quemazón, tanto en el varón como en la mujer. Su eficacia es mediana, pero muy buena cuando se usa conjuntamente con los preservativos, y buena cuando de emplea junto con el diafragma.

4.3.3 Métodos de acción sobre la fisiología humana

Los métodos fisiológicos actúan modificando los procesos fisiológicos que regulan la fecundación y implantación, y son los más eficaces. Entre estos métodos se encuentran el dispositivo intrauterino o DIU, los anticonceptivos hormonales, y la esterilización femenina y masculina.

4.3.3.1 Dispositivo intrauterino o DIU

Este dispositivo también conocido como "espiral", es un elemento de pequeñas dimensiones que se insertan dentro del útero y que impide que el embarazo prospere.

Todavía no se conoce con total exactitud el mecanismo de acción del DIU. Sin embargo, al parecer, el DIU actúa como cuerpo extraño dentro de la cavidad uterina, frente al cual la mucosa de este órgano reacciona mediante una inflamación que no ocasiona molestias a la portadora, pero impide que la célula huevo se implante.

La colocación de DIU es un procedimiento muy sencillo que lleva a cabo el especialista. No obstante, antes de recurrir a este método anticonceptivo, la mujer ha de someterse a un examen ginecológico, en el que se descartan diversos trastornos que podrían contraindicarlo, como infecciones, hemorragias o tumores.

El DIU no está indicado en todas las mujeres. En general, es más recomendable en las que ya han tenido hijos, porque lo toleran mejor. Sin embargo, hay una gran diversidad se modelos, algunos de ellos especialmente recomendados para mujeres que aún no se han quedado embarazadas.

Entre las ventajas del DIU destaca que es un método anticonceptivo de acción muy prolongada, ya que sólo debe sustituirse dos a cinco años, que no actúa fuera de útero, a diferencia de los anticonceptivos hormonales, y que no es un método anticonceptivo irreversible, a diferencia de la esterilización. Por otra parte, el DIU obliga a las mujeres portadoras a someterse a controles ginecológicos periódicos y, en muy contados casos, da lugar a complicaciones de cierta gravedad. El DIU esta considerado como el método anticonceptivo más eficaz, después de la esterilización y los anticonceptivos hormonales.

Ventajas:

  • No requiere la toma periódica de medicamentos (como la píldora), ni ninguna maniobra cada vez que se practica el coito(como los métodos de barrera)ni aprendizaje alguno.
  • No tiene efectos colaterales generales, ya que actúa a nivel local.
  • Tiene una elevada eficacia, con un índice de fracasos cifrado actualmente en el 0,5-2%.

Desventajas:

  • No es totalmente efectivo durante el primer mes de la colocación, por lo que se requiere otro método complementario en este período.
  • Pueden provocar hemorragias menstruales más prolongadas y abundantes, así como sangrado no menstrual.
  • La mujer debe controlar la situación del DIU después de cada menstruación (mediante palpación del hilo vaginal), ya que puede modificarse su posición o ser expulsado.
  • Es necesario cambiar el dispositivo periódicamente (la duración es de 1-2 años para los DIU con progesterona, y de hasta 4-5 años para el resto).
  • Puede dar lugar a complicaciones: infecciones genitales. Enfermedad inflamatoria pélvica, perforación uterina.

Señales de peligro:

  • Ausencia o retraso del período menstrual.
  • Dolor abdominal o pélvico.
  • Fiebre, escalofríos.
  • Hemorragias abundantes, coágulos, manchas de sangre en la ropa interior, periodos menstruales intensos.
  • Ausencia del hilo vaginal del dispositivo intrauterino o percepción de un objeto duro en el cuello uterino.
  • Flujo vaginal abundante, fétido o peculiar.

4.3.3.2 Métodos hormonales

Dentro de ellos los más utilizados son los anovulatorios (impiden la ovulación) de administración oral, denominados popularmente"píldora"anticonceptivas combinadas contienen estrógenos y progestágenos en diversas proporciones, que brinda la posibilidad de seleccionar entre distintas variedades. Su mecanismo de acción consiste en alterar la secreción hipofisaria de las hormonas gonadotróficas que regulan el ciclo ovárico, de tal modo que se suprime la ovulación. Además de sus efectos anovulatorios, entre otras acciones, los estrógenos interfieren la movilidad de las trompas de Falopio y el eventual trasporte del óvulo, mientras que los progestágenos modifican las características del moco cervical, así como la eventual capacitación y el trasporte e implantación del óvulo en el endometrio.

Beneficios colaterales:

  • Disminuye la frecuencia de la anemia ferropriva: un 50% menor que en las no usuarias.
  • Reduce el flujo menstrual.
  • Disminuyen los casos de enfermedad inflamatoria pélvica.
  • Reducen la incidencia de mastopatía benigna.
  • Disminuye la incidencia de quistes ováricos benignos.
  • Protege contra el embarazo ectópico.
  • Disminuye la incidencia de artritis remautoide.
  • Disminuyen el riesgo de cáncer endometrial.
  • Reduce los cólicos menstruales.
  • Disminuye la duración del período menstrual.
  • Regula los periodos menstruales.
  • Elimina el dolor intermenstrual.
  • Disminuye el temor al embarazo.
  • Puede ser útil para tratar el acné, los quistes ováricos y la endometriosis.
  • Puede incrementar el placer sexual.
  • Disminuye la tensión premenstrual.

Factores que deben considerarse en la elección del anticonceptivo oral:

  • Las mujeres menores de 30 años de edad, sin contraindicaciones.
  • Las pacientes mayores de 35 años, que fuman, no deben usarlos, independientemente de su estado de salud.
  • Deben emplearse inicialmente píldoras que contengan 35 mg o menos de estrógenos.
  • Las mujeres con contraindicaciones relativas o posibles que insisten en usar la píldora deben consultar al médico.
  • La paciente debe recordar que es indispensable tomar la píldora todos los días.
  • Las creencias culturales o religiosas pueden producir ambivalencia sobre el empleo de la píldora.

Contraindicaciones absolutas:

  • Tromboflebitis, trastornos tromboembólicos, enfermedad vascular cerebral, enfermedad coronaria; antecedentes de estos trastornos o alteraciones que predisponen a sufrirlos.
  • Alteraciones notables de la función hepática.
  • Diagnóstico o sospecha del carcinoma de mama.
  • Diagnóstico o sospecha de una neoplasia dependiente de estrógenos, en especial carcinoma endometrial.
  • Hemorragia genital anormal sin causa diagnosticada.
  • Diagnóstico o sospecha de embarazo.
  • Ictericia obstructiva del embarazo.
  • hiperlipidemia congénita.
  • Obesidad en fumadores mayores de 35 años de edad.

Contraindicaciones relativas:

  • Migrañas.
  • Hipertensión.
  • Liomioma uterino.
  • Operaciones planeadas: debe suspenderse la toma, de ser posible, un mes antes de la operación, para evitar un mayor riesgo de trombosis postoperatoria.
  • Epilepsia.
  • Enfermedad de las células falciformes.
  • Diabetes mellitas.
  • Inmovilización de miembros inferiores o lesiones importantes en pierna por debajo de la rodilla.
  • Edad: 45 años o más; o bien, 40 años o más si hay un factor de riesgo para el desarrollo de enfermedad cardiovascular.
  • Alteraciones del funcionamiento hepático durante el último año.

Posibles contraindicaciones:

  • Terminación del embarazo durante los últimos 14-15 días.
  • Aumento ponderal de 4,5 kg o más mientras la paciente estaba tomando la píldora.
  • Ciclos menstruales irregulares.
  • Perfil sugerente de problemas de ovulación y esterilidad.
  • Alteraciones cardíacas o renales.
  • Trastornos que dificulten a la paciente seguir las instrucciones sobre la ingestión de la píldora.
  • Alteración de vesícula biliar o colecistectomía reciente.

Señales de peligro:

  • Dolor abdominal intenso, que puede indicar colecistitis, formación de un coágulo, adenoma hepático o pancreatitis.
  • Dolor intenso en el tórax o taquipnea, que puede indicar embolia pulmonar o infarto de miocardio.
  • Cefalalgia intensa, que puede ser signo de accidente vascular cerebral, hipertensión o migraña.
  • Problemas visuales, como visión borrosa y fosfenos o ceguera, que pueden señalar accidente vascular cerebral, hipertensión u otros problemas vasculares.
  • Dolor intenso en pantorrilla o muslo, que puede indicar la formación de un coágulo en una vena de la pierna.

Instrucciones para la paciente en el empleo de anticonceptivos orales:

  • Iniciar el uso del primer envase de píldoras de una de las siguientes 3 formas:
    • Tomar la primera píldora del envase el primer día del sangrado menstrual (primer día del ciclo)
    • Empezar el primer envase el domingo siguiente al inicio del período, se esté sangrando o no. Este método garantiza que no se producirán pérdidas por privación (hemorragias menstruales) durante los fines de semana.
    • Iniciar el primer envase el quinto día del período menstrual.
      • Emplear un método anticonceptivo de refuerzo (espermicidas, condones o diafragma) cada vez que se tenga actividad sexual durante el primer mes de ingestión de la píldora.
      • Tomar la píldora aproximadamente a la misma hora cada día, para conservar uniforme la concentración sérica de hormonas.
      • Si en alguna ocasión e omite la administración de una píldora, hay que tomarla tan pronto se descubra el olvido sino ha pasado ya demasiado tiempo.
  • Si no han pasado más de 12 horas de la hora de administración habitual, el método no pierde eficacia.
  • Si han pasado más de 12 horas, continuar con la siguiente píldora a la hora habitual, teniendo en cuenta que la eficacia del método puede reducirse, lo que aconseja reforzarlo con otros procedimientos complementarios durante el resto del ciclo.
    • Si pasa un día sin tomar la píldora, consultar en el prospecto del producto la conducta a adoptar. Por lo general se continúa con la siguiente, y se aconseja emplear un método de refuerzo hasta que se halla terminado el envase.
    • Si se omiten 2 o3 tomas seguidas, es posible que se produzca ovulación y embarazo.
  • En algunos casos en que se olvidan 2 tomas puede seguirse la pauta, aunque es necesario emplear un método de refuerzo hasta que se haya terminado el envase.
  • Si se omiten 3 tomas consecutivas, debe iniciar de inmediato un segundo método anticonceptivo y desechar las píldoras que hayan quedado en el envase. Iniciar un nuevo envase el domingo que siga a la omisión de 3 o más píldoras, aunque se esté sangrando, y continuar con el método de refuerzo hasta que hayan pasado 2 semanas con el nuevo envase. Si ha menudo ocurren omisiones, en especial durante varios días, será mejor pensar en otro método de control de la natalidad.
    • Cuando se han estado tomando correctamente las píldoras y no se presenta un período menstrual, es poco probable que haya embarazo, por lo que puede iniciarse un nuevo envase en el momento indicado. En ocasiones falta algún período menstrual cuando se toman anticonceptivos, aunque en caso de duda debe consultarse al médico.
    • Si se ha omitido la toma de una o más píldoras y no se inicia el ciclo menstrual, debe suspenderse la ingestión. Conviene empezar otro método de control natal y efectuar una prueba de embarazo.
    • Si ya han faltado 2 períodos después de ingerir los anticonceptivos correctamente, se deberá efectuar una prueba de embarazo.
    • Se ocurre el embarazo mientras se está tomándola píldora, habrá un pequeño riesgo de que el lactante sufra trastornos congénitos, según sea el producto empleado. Algunos médicos recomendarán el aborto, aunque muchos otros no.
    • La administración de la píldora puede producir inicialmente efectos secundarios menores, como nauseas, cefalalgia, hemorragia por supresión, hipersensibilidad mamaria o flatulencia. Estos síntomas son resultado de las hormonas contenidas en la píldora y suelen desaparecer en uno a tres meses. Si persisten, quizá se requiera cambiar el anticonceptivo.
    • Si se presenta una enfermedad que curse con vómitos y diarrea durante varios días, debe recurrirse a un método de refuerzo hasta el siguiente período menstrual.
    • Si ocurre una hemorragia leve durante 2 o más ciclos, es conveniente cambiar de preparación. Se debe consultar al médico.
    • Si se desea el embarazo, es necesario suspender la ingestión del anticonceptivo. Lo mejor será dejar pasar varios meses en los que ocurran ciclos menstruales espontáneos antes de embarazarse, lo cual garantiza el reestablecimiento de la menstruación normal antes de que empiece el embarazo. Por tanto, es conveniente usar un método distinto de control de la natalidad durante los 3 meses siguientes a la interrupción de la anticoncepción oral.
    • Nunca debe pedirse píldoras a otra persona ni compartir las propias. Las mujeres que no se han sometido a exploración ni han recibido instrucciones sobre el uso de anticonceptivos orales y los signos de peligro pueden tener contraindicaciones para la ingestión de éstos, de las que no está enterada la persona que los comparte.
    • Si se ingresa en el hospital o consulta al médico por cualquier motivo, debe informarse al personal que se está tomando anticonceptivos.
    • Muchos médicos recomiendan a las mujeres que toman la píldora "descansar" por un tiempo de este tipo de tratamiento. Esta práctica da por resultado muchos embarazos no deseados, y no se ha demostrado que disminuyan los efectos secundarios o las complicaciones.
    • Si se fuma más de 15 cigarrillos al día, deben conocerse las señales de peligro que se presentan con la combinación de tabaquismo e ingestión de comprimidos. El uso concurrente de otras medicaciones puede reducir la eficacia del comprimido o de aquellas. Entre estos fármacos constan los siguientes: anticonvulsivantes, fenobarbital, rifanpicina, antibióticos, antiácidos, sedantes, hipnóticos, fenotiacinas, tranquilizantes, insulina e hipoglucemiantes orales, corticosteroides y antihistamínico.
    • Si la vaginitis por candida es un problema crónico, un anticonceptivo oral con alto contenido de progestágenos puede incrementar su incidencia.

4.3.3.2.1 Minipíldora

Este tipo de anticonceptivo contiene sólo progestágenos que se administran de manera continuada a bajas dosis. Se han ideado para las mujeres que experimentan intensos efectos secundarios relacionados con los estrógenos y para las que los mismos están contraindicados. Actúan modificando las características del moco cervical y dificultando el ascenso de los espermatozoides. La tasa de fallos en mujeres que toman la" Minipíldora" es 2 a 3 veces mayor que las de aquellas que siguen un régimen con anticonceptivos orales combinados.

Ventajas:

  • La pueden tomar mujeres que con la píldora de formulación combina han desarrollado efectos secundarios atribuibles a los estrógenos.
  • Pueden consumirla mujeres del grupo de 35 a 40 años que desean la anticoncepción oral.
  • Mitiga los síntomas de dismenorrea.
  • Pueden tomarla mujeres que amamantan.
  • Se toma todos los días, por lo que es difícil que se olvide su administración.
  • Puede reducir el riesgo de infección pélvica.

Desventaja:

  • Es menos eficaz que los anticonceptivos orales combinados.
  • Produce efectos secundarios (primordialmente alteración del patrón de sangrado menstrual).
  • Requiere el empleo de un método de refuerzo durante los 3 primeros meses.
  • Se asocia con una mayor incidencia de vaginitis por monilias o por candida.

Contraindicaciones:

  • Todas las contraindicaciones absolutas para los anticonceptivos orales combinados.
  • Hemorragia genital anormal sin causa diagnosticada.
  • Menstruación irregular.
  • Antecedentes de embarazo ectópico.
  • Antecedentes de cáncer del aparato reproductor.

Instrucciones para el uso:

  • Empezar a tomar la píldora el primer día del siguiente período menstrual.
  • Tomar un comprimido diario sin interrupción; no dejar pasar un solo día ni dejar de ingerir para "descansar".
  • Tomar la píldora a la misma hora todos los días, para conservar una concentración hormonal uniforme.
  • Emplear un segundo método de control de la natalidad como mínimo durante los 3 primeros meses de ingestión de la píldora y durante la parte intermedia del siguiente ciclo.
  • Si se omite la ingestión de una píldora, tomarla tan pronto como perciba la falta e ingerir la siguiente a la hora usual. Usar un método de refuerzo hasta el siguiente período.
  • Si no se presenta una hemorragia menstrual durante 45 días, a pesar de haber ingerido todos los comprimidos, conviene hacer una prueba de embarazo.
  • La duración de los ciclos menstruales puede variar, lo mismo que la intensidad de la hemorragia menstrual; pueden aparecer manchas de sangre en la ropa interior; por último, quizá falten periodos menstruales (sin embarazo) si sobreviene dolor abdominal intenso mientras se está ingiriendo el anticonceptivo, hay que consultar de inmediato al médico.
  • No olvidar efectuar cada mes el autoexamen de la mama.
  • Es necesario volver a consulta de vigilancia después de terminar el tercer envase. En ese momento, la paciente recibirá prescripción por un año y bastará con que acuda a revisiones anuales. Debe solicitar asistencia de inmediato si experimenta alguna de las señales de peligro o cree que el comprimido está causando problemas.

    1. Anticonceptivos inyectables

    Consiste en una inyección intramuscular de hormona progestágena que se aplica cada 3 meses. Actúa a nivel del cuello uterino, espesando el moco cervical y además inhibiendo la ovulación. Tiene una seguridad del 98%. Tiene la ventaja de que no es necesario estar recordando de tomar una pastilla diariamente ni altera el acto sexual, pero generalmente trae alteraciones en el ciclo menstrual, con irregularidades por 6 meses; además la fertilidad se recupera recién después de 8 a 10 meses de suspendida su administración. Es un método anticonceptivo que requiere ser muy bien explicado para poder tenerle confianza, especialmente por la irregularidad menstrual que provoca..

    Forma de uso:

    • La primera inyección debe aplicarse al primer día de la menstruación.  Se presentara una menstruación 1 o 2 semanas despuès de está primera inyección.
    • Las siguientes aplicaciones se realizaran cada 30 días, con una variación de 3 días antes o 3 días después de la fecha calculada.
    • La aplicación es por fecha calendario y no por el sangrado menstrual.
    • Si se aplica después de 33 días de la inyección anterior no se tendrá protección contraceptiva. Es necesario usar un método adicional hasta la nueva aplicación.
    • La aplicación lenta evitara efectos adversos.
    • No realizar masaje en el sitio de aplicación para no aumentar su absorción.

    Contraindicaciones:

    • Jaqueca con síntomas neurológicos focales.
    • Embarazo.
    • Lactancia en puerperio menor de 6 semanas.
    • Cáncer de seno.
    • Antecedente o presencia de tromboembolismo o accidente cerebro vascular.
    • Antecedente o presencia de cardiopatía isquemica o valvular complicada.
    • Hipertensión arterial severa.
    • Hepatitis activa o tumor hepático maligno.
    • Diabetes con duración mayor de 20 años o con complicaciones vasculares.

    Ventajas:

    • Seguros y sumamente eficaces
    • Reversibles
    • Fáciles de usar (No requieren una rutina diaria.)
    • No interfieren con el acto sexual
    • Tienen efectos beneficiosos que no se relacionan con la anticoncepción

    Desventajas:

    • Efectos secundarios comunes (especialmente sangrado menstrual irregular o manchado durante los primeros tres meses)
    • No protegen contra las ETS/VIH

    Efectos secundarios posibles:

    • Sangrado irregular o prolongado
    • Manchado
    • Dolores de cabeza
    • Náuseas
    • Sensibilidad mamaria anormal
    • Aumento de peso
    • Cambios del estado de ánimo
    • Acné
    • Amenorrea

    Causales de retiro:

    • Jaqueca o migraña
    • Alteraciones visuales.
    • Signos de tromboflebitis
    • Hipertensión arterial.
    • Inmovilización prolongada.
    • Seis semanas antes de una cirugía mayor.
    • Embarazo
    • Trastorno menstrual severo.

    4.3.3.2.3 Píldora de la mañana siguiente

    En realidad este no es un método anticonceptivo ya que no impide la concepción sino que provoca la expulsión del huevo recién fecundado. Llamada también la píldora del día después o anticoncepción de emergencia, está compuesta por una combinación de estrógenos y progestágenos o sólo progestágenos. Esta píldora se toma en dos dosis luego de la relación sexual sin protección o rotura del condón. Este anticonceptivo de emergencia debe recibirse antes de que se cumplan las 72 hs. posteriores a la relación sexual sin protección, de acuerdo al esquema indicado en el prospecto adjunto y bajo supervisión médica. Son mucho más potentes que los anticonceptivos anovulatorios habituales. La alta dosis hormonal, altera el endometrio (capa interna del útero), impidiendo su

    implantación. Tiene una seguridad anticonceptiva del 75%, y sólo actúa para esa oportunidad, se deben tener recaudos hasta la nueva menstruación. Puede causar como efectos colaterales náuseas, cefaleas y mareos. Actualmente está en medio de una controversia por no considerarse un método anticonceptivo y en muchos países está prohibida su venta.

    4.3.3.2.4 Esponja vaginal

    Consiste en una esponja de poliuretano que contiene una sustancia espermicida y se inserta en la vagina antes de la relación sexual. Debe dejarse en la vagina por lo menos 6 horas después de la relación. La efectividad varía entre el 60% y el 80%. Tienen la ventaja de ser descartables. Pocas veces provocan alergia por el espermicida. 

    4.3.3.3 Esterilización quirúrgica

    Es una técnica quirúrgica destinada a impedir la procreación, que puede practicarse en el hombre o en la mujer.

    Es un método anticonceptivo irreversible, y por ello se indica en personas que definitivamente no desean tener más hijos o en mujeres de más de 35 años de edad, momento a partir del cual resulta cada vez de más riesgo el embarazo. Por otra parte, es el método anticonceptivo más eficaz, ya que: su índice de fallos es casi inexistente.

    4.3.3.3.1 Esterilización femenina o ligadura de trompas

    La esterilización femenina corresponde a la interrupción de la luz de las trompas de Falopio, mediante ligadura con grapas o clips, sección o cauterización, de tal modo que se impida la migración del óvulo hacia el útero. Todos estos métodos se efectúan mediante acceso en la cavidad pélvica por la pared abdominal o por el fondo del saco vaginal posterior.

    La ligadura de Trompas abdominal

    • Minilaparotomía. Es un procedimiento que puede efectuarse bajo anestesia local a través de una incisión abdominal; requiere cerca de 20 minutos y se puede efectuar después del parto. La recuperación es rápida, y la mujer es dada de alta en pocas horas.
    • Ligadura tubaria laparoscópica. Se introduce un laparoscopio bajo anestesia general hacia el interior de la pelvis, para observar los órganos. Las trompas se cierran por cauterización, ligadura o pinzamiento con bandas o grapas. La recuperación es rápida, con una tasa de complicaciones muy baja.

    Ligadura de trompas vaginal

    • Colpotomía. Se efectúa en multíparas hospitalarias o en pacientes ambulatorias. Con anestesia general o local, el cirujano efectúa una incisión en el fondo del saco posterior para alcanzar con el cauterio las trompas de Falopio. El procedimiento requiere aproximadamente una hora.
    • Culdoscopia. Con un endoscopio se obtiene el acceso hacia las trompas a través del saco posterior. Por lo general, culdoscopia y culdotomía han sido reemplazadas por la minilaparotomía o la laparoscopia abdominal, que es un procedimiento más seguro y confiable.
    1. Esterilización masculina o vasectomía.

    La vasectomía parcial bilateral es un procedimiento quirúrgico sencillo y constituye el método más fácil y seguro de esterilización quirúrgica. La intervención se realiza mediante una incisión en el escroto, en ambos lados, y produce esterilidad al interrumpir la continuidad de los conductos deferentes e impedir que se eliminen espermatozoides en el semen de la eyaculación.

    El procedimiento se efectúa con anestesia local y requiere menos de 30 minutos. Es indispensable informar al paciente que no quedará estéril de inmediato, puesto que los conductos deferentes contienen espermatozoides de uno a tres meses y no serán eliminados antes de unas doce eyaculaciones. Durante este período puede producirse un embarazo si no se toman precauciones, por lo que es necesario recurrir a otro método anticonceptivo. Pasado ese lapso, se practica un análisis de semen, y si está libre de espermatozoides, se concluirá que la esterilización es completa. La reversibilidad del procedimiento depende en gran medida de la técnica empleada. Sólo se logra en el 18 al 60% de los intentados.

    5. Notas periodísticas

    Alerta EEUU a quienes usan parche anticonceptivo

    MÉXICO, Distrito Federal (SUN)

    El llamado de atención lanzado en Estados Unidos sobre los riesgos para la salud que conlleva el uso del parche anticonceptivo, ha hecho que algunas mujeres piensen en cambiar de método. El Centro Latinoamericano Salud y Mujer (Celsam) les recomienda que como primera medida consulten con su médico para explorar las opciones que existen y que ofrecen protección contra embarazos no planificados. Todo esto tiene una razón de peso, pues la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés), indicó que existe la posibilidad de un incremento de los riesgos para la salud asociados al uso del parche anticonceptivo. Y es que hizo una revisión y ajuste en la información de las etiquetas del mismo debido a que encontró que las mujeres que usan este método están expuestas a 60% más de estrógeno en comparación con la píldora tradicional. Es decir, que este método, de acuerdo con la FDA, contiene proporcionalmente una dosis de 50 mcg como lo tenían las primeras píldoras que salieron al mercado hace décadas, y actualmente ya hay nuevas alternativas con dosis mucho menores de estrógenos. En este delicado escenario, afirma el doctor Samuel Santoyo Haro, coordinador del Celsam, “es importante que las mujeres que usan el parche anticonceptivo no entren en pánico. De todas maneras para aquellas que deseen cambiar de método, lo importante es que consulten con su médico para que las oriente y les indique la mejor alternativa, que les permita seguir teniendo una sexualidad responsable con los menores riesgos''''. El experto gineco-obstetra y profesor en la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de México dice que existen otras opciones para el control natal como son la píldora anticonceptiva de baja dosis, anticonceptivos inyectables de aplicación mensual de baja dosis, implantes, dispositivos intrauterinos, inclusive el método endoceptivo liberador de levonorgestrel, los cuales ofrecen beneficios adicionales y con alta eficacia por arriba de 99%. " Los nuevos anticonceptivos de baja dosis garantizan que la mujer pueda utilizarlos, ya que tienen perfil de tolerabilidad y buen control de ciclo y también cuentan beneficios adicionales no anticonceptivos, impactando positivamente en su calidad de vida'', asegura Santoyo Haro. Insiste en que nadie debe entrar en una etapa de pánico, por la decisión de la FDA, además de que un ginecólogo puede ayudar a despejar dudas. Pero en tanto se toma una decisión, el doctor Santoyo ofrece algunas recomendaciones a la mujer que tiene dudas sobre si debe seguir usando el parche como método anticonceptivo: – Si cree que está en riesgo al estar expuesta a niveles más elevados de estrógeno con el parche anticonceptivo, no se despegue el parche y continúe utilizándolo como hasta ahora. Si se despega, no tenga relaciones sexuales pues no estará protegida contra un embarazo. – Visite a su médico cuanto antes para que le indique si el parche la expone a riesgo adicional. – Si decide no utilizar el parche, infórmese sobre otras opciones anticonceptivas que respondan a sus necesidades y tipo de vida. – Explore junto a su médico las opciones disponibles para mantener una sexualidad responsable y evitar los embarazos no planificados. – Cumpla las recomendaciones realizadas por su médico, sea constante y continúe con el uso de su método anticonceptivo con el fin de evitar embarazos no planificados. Las mujeres deben saber que el Celsam es una asociación civil sin fines de lucro cuyo objetivo es contribuir a mejorar la salud sexual y reproductiva de la mujer y su pareja, mediante la divulgación de información, orientación y educación. Tiene presencia en la mayoría de los países latinoamericanos, cuenta con un comité científico formado por médicos líderes de opinión como gineco-obstetras, biólogos de la reproducción, investigadores, endocrinólogos y sicólogas, y con un comité técnico conformado por organizaciones gubernamentales. Además cuenta con un Centro de Atención telefónica: 01 800 3170 500 y 5627 7090 y 91, el servicio es gratuito y confidencial.

    6. Conclusión

    Tras haber analizado todos los métodos anticonceptivos individualmente, en líneas generales hemos comprobado que los mismos no solo buscan evitar la concepción sino que también incluyen todos los procedimientos que existen para evitar la implantación y el crecimiento de la célula huevo o cigoto.

    Por esta razón, desde nuestra perspectiva, consideramos a la mayoría abortivos, ya que la vida comienza desde la concepción (fertilización del óvulo por el espermatozoide), y todo lo que interfiera la implantación del óvulo debe ser considerado un abortivo. Una mujer está embarazada porque ha ocurrido la concepción, no porque se haya efectuado la implantación. Esta distinción es importante; porque de la correcta definición de este término dependen muchos de los temas médicos y éticos que se tratan actualmente.

    El impedir que la concepción ocurra se llama contracepción. Cualquier acción causada por un fármaco o dispositivo después de que la concepción haya ocurrido no puede ser llamada una acción anticonceptiva, su descripción biológica exacta sería "abortivo".

    No existiría problema alguno si estos métodos únicamente tuvieran como finalidad impedir que el espermatozoide fecunde al óvulo

    7. Bibliografía

    • Gran Enciclopedia Interactiva Siglo xxi.
    • Enciclopedia Fundamento Temática Ilustrada. Oriente. Barcelona, 1998.
    • Manual de enfermería. Oceano.
    • www.lacronica.com

     

    Enviado por:

    Romina Aguirre

    PAÍS: ARGENTINA

    CUIDAD: La Plata

    FECHA REALIZACIÓN: 18 mayo 2006

    Partes: 1, 2
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