El movimiento navista es uno de los tantos que surgen en la época de finales de los cincuenta y sesentas en México pero con importantes diferencias con relación a otros. En el cual la gente de San Luis Potosí, un estado de provincia, se opone por primera vez al control que ejercía el cacicazgo en el gobierno estatal de forma tajante y posteriormente a la imposición del gobierno federal, es una lucha intenta reivindicar la democracia, en la época de dictadura disfrazada, teniendo como su mejor arma la resistencia civil pacifica.
El grupo que encabeza la oposición es conformado por profesionistas y catedráticos de la Universidad de San Luis Potosí, teniendo como figura central al doctor Salvador Nava Martínez, estos grupos buscan una oportunidad de alcanzar cargos públicos importantes sin estar bajo el control del cacique, aprovechando el repudio que sienten hacía Santos grupos como los sinarquistas, comunistas y los partidos de oposición.
A la postre lograron sacar toda influencia de Santos en el estado, pero se toparon con la intransigencia del gobierno federal cuando intentaron alcanzar una gobernatura. El gobierno federal detendría los esfuerzos de Nava y su gente cuando buscaron obtener el puesto de forma democrática, demostrando la farsa que era la democracia mexicana de esos años. El movimiento navista busco el respeto de la democracia con los medios pacíficos que tuvo pero como todo movimiento de esta época sería detenido por medio de la represión y la violencia.
La historia Contemporánea de San Luis Potosí no se puede entender sin uno de los capítulos más importantes de este estado, el que marco un parte aguas en la democracia no solo potosina sino nacional: El movimiento Navista, a pesar de la importancia de este, se ha intentado ignorar y borrar de la memoria colectiva de los potosinos, principalmente en el período de 1958 a 1963, el único medio de comunicación que mantuvo la objetividad en el tema fue el diario nacional La Jornada, pero solo en el año de 1992, en los años sesenta la historia era muy diferente.
El movimiento navista se puede identificar en tres períodos muy específico, en donde su líder el Dr. Salvador Nava Martínez tuvo su máxima participación política en 1958,
1961-63, 1982-83, 85-86 y 90-92. El período intermedio de 19 años en el cual se mantuvo separado del activismo político fue a causa de un escarmiento por parte del gobierno en 1963 contra él y los líderes de su movimiento.
La lucha de los navistas siempre fue inspirada por un solo objetivo, la democracia (entendida como la participación política del pueblo en el estado), la justicia de esta, el respeto al voto y el repudio por quien supuestamente electo, ostentaba el poder de la manera más ruin.
Sin embargo el navismo en ningún momento planteo un cambio radical en la estructura del país, como lo dice Monsivais "El movimiento Navista nunca fue ideológico sino cívico" (Caballero: 1992,11) lo que a su vez le dio más que credibilidad entre sus simpatizantes.
Uno de los puntos más importantes que dejó el movimiento Navista, fue el civismo ciudadano que siempre demostró Nava y sus simpatizantes, nunca dejaron de protestar contra las injusticias que se cometieron, pero no de forma violenta, usando la resistencia civil como su arma, a pesar de que el estado central y sus aliados locales ejercieron contra ellos. Además de este último, otros puntos en los que se sustento el movimiento navista; fue el sostener que el acceso al poder es solamente una vía para el servicio público, no al revés, la participación ciudadana como una necesidad de la democracia y la administración pública al servicio de la comunidad.
Desde la caída del cacique revolucionario Saturnino Cedillo a causa del levantamiento armado que él dirigía, contra el entonces presidente Lázaro Cárdenas; se consolido como el nuevo cacique de San Luis Potosí Gonzalo N. Santos, un representante del antiguo régimen callista, el dominio que ejercía sobre el estado era total, y no era para menos su conocida percepción de moral y su ley de los tres "ierros" (encierro, entierro y destierro) lo respaldaban, esto provoco que desde su estadía como gobernador no soltaría el poder en el estado hasta la llegada de Nava, fue poniendo su gusto una serie de gobernadores peleles, que maneja desde su natal huasteca.
Santos tenía el control de las fuerzas políticas del estado: el gobernador, los diputados locales, alcaldes, sindicatos afiliados a la CTM y por supuesto la prensa; Santos pagaba doscientos mil pesos al mes para que el periódico local El Heraldo publicara lo que le convenía al cacique, para el año 1950 el único grupo disidente era uno de la Universidad encabezado por Manuel Nava (hermano de Salvador), rector de la Universidad en ese entonces.
La primera fricción que tuvieron los universitarios con Santos fue que el gobernador santista aceptara la autonomía Universitaria aunque hacía años que el gobierno la había aceptado, el hecho al parecer tan insignificante tenía un trasfondo muy diferente, ya que al obtener su autonomía Santos perdía toda ingerencia sobre la Universidad.
Durante el período de rectoría de Manuel Nava (1952-1958) la Universidad fue castigada por parte del gobierno federal al restringirle el presupuesto de manera importante ya que se catalogaba a esta una de las Universidades problemáticas del país por el gobierno federal, Santos ofreció su ayuda a la Universidad la cual recibiría dinero del estado a cambio de entregarle al cacique el control Universitario, esto provoco la indignación del grupo en el que estaba en rectoría y la fractura definitiva con Santos-
El grupo que apoyaba a Manuel Nava como rector era principalmente gente de Medicina e Ingeniería que hasta entonces se había mantenido al margen de la política, el apoyo universitario del que gozaba los llevo a formar en 1958 la Federación de Profesionistas e Intelectuales del Estado (FPIP) encabezada por Salvador Nava, para finales de ese año Salvador Nava y su gente vieron la posibilidad de presentar una candidatura para la alcaldía de San Luis como candidato del PRI. El momento era idóneo para Nava, ya que contaba con el apoyo de la mayoría de la capital potosina y de diferentes grupos políticos del Estado pero principalmente la coyuntura nacional se lo permitía; el año de 1958 era de intensa movilización política en el país encabezándolo el movimiento Ferrocarrilero.
A la candidatura de Nava se le unió gente del PRI que estaba en contra de Santos pero este último movió sus influencias para descartarlo como candidato del partido oficial (cabe decir que Nava en ese momento no tenía ningún problema con la dirigencia nacional del PRI), la Asamblea de Comerciantes e Industriales de San Luis además de uno de los grupos más importantes de San Luis: la Unión Nacional Sinarquista (UNS), simpatizaban con Nava, también se unió el grupo de los miembros del Partido Comunista Mexicano (PCM) de la capital potosina, dirigidos por la fábrica Atlas (comuna obrera) la importancia de estos últimos no es el número de votos que aportaron (que relativamente eran muy pocos) sino lo simbólico de unir a dos grupos completamente extraños como son Sinarquistas y Comunistas por un solo objetivo, vencer al cacique.
Otro importante contingente que estaba con Nava eran algunos sindicatos obreros afiliados a la CTM, Salvador Nava y sus hermanos habían ganado la simpatía de los obreros al dar consulta en algunos casos gratuita a la gente de estos Sindicatos, en la época donde el IMSS apenas aparecía (Calvillo, 1986:21).
El resultado de toda esta fusión de fuerzas políticas fue la creación de la Unión Cívica Potosina (UCP) que el primero de Enero de 1958 presentó la candidatura independiente de Salvador Nava, su campaña se extendió por todo el municipio, y su base política era sencilla; quitar del poder a Santos, que se respetara el voto y desaparecieran los poderes estatales controlados por los Santistas.
El 7 de ese mes se realizaron elecciones municipales, el triunfo favoreció a Salvador Nava frente al candidato del PRI Gutiérrez Castellanos, sin embargo los candidatos de la USP que también habían competido en los distintos municipios solo habían logrado dieciocho alcaldías, solo quedaba un elemento importante en el aparato Santista el gobernador Manuel Álvarez.
Las protestas en contra del gobernador y las amenazas de una huelga general de labores y otra de pago de impuestos, se habían lanzado desde que Nava se encontraba en campaña y se mantuvieron días después de la victoria de Nava, la comunidad exigía la desaparición de los poderes estatales, la renuncia del gobernador y el reconocimiento del triunfo de Nava, de lo contrario se cumplirían las amenazas.
Ante las fuertes presiones que ejercían la ciudadanía antes de la elección, el 21 de Noviembre el gobernador huyó a la capital del país para recibir ordenes del centro, posteriormente el jueves 27 estallaba la huelga en San Luis que ya se anticipaba, la paralización de todas las actividades económicas por parte de la industria y del comercio organizado, en los días posteriores la ciudad estaba desierta, el único movimiento que se registraba era el de las manifestaciones contra Santos y el movimiento del ejército.
Desde que había comenzado las manifestaciones antes de la fecha de las elecciones, el ejército de la doceava zona militar se había situado cerca de las manifestaciones, de manera vigilante por si se perdía el control, estuvieron presentes en las elecciones pero no tuvieron otro papel que el de resguardarlas, posteriormente durante los días de huelga se limitaron a ser meros espectadores. Los navistas temían la presencia del ejército por una posible represión si las manifestaciones se tornaban violentas, pero temían más el control que ejercía Santos sobre el general encargado de la zona militar.
El movimiento llegó a su clímax, a principios de Diciembre, cuando un niño fue asesinado por un policía en el momento en que este se encontraba en una manifestación a favor de la liberación de personas que se oponían a Santos. Para estas fechas la huelga se había extendido a 30 municipios del Estado, el gobierno federal no tuvo más opción que negociar con Nava y dar un golpe importante al cacicazgo.
Unos días más tarde se alcanzaba el éxito se anunciaba que Álvarez pedía licencia para abandonar su cargo y el gobierno federal prometía poner un gobernador interino que se encargaría de limpiar toda influencia santista. El encargado de negociar era el reciente Secretario de Gobernación de Adolfo López Mateos, Gustavo Díaz Ordaz (cabe señalar que el movimiento navista siempre simpatizó con López Mateos, desde la campaña de la UCP mostró el apoyo al candidato del PRI) quién buscaba que Nava levantará la huelga y tranquilizara el movimiento; ya que cada día que pasaba se volvía una amenaza para el control del gobierno, en propias palabras el Secretario de Gobernación "para poder controlar era necesario canalizar el movimiento a través de instituciones otorgándoles lo que exigían para posteriormente sin tanta presión recuperar el control de los mecanismos del poder local con los opositores o sin ellos " (Calvillo,1986:46).
Las negociaciones fructificaron, la huelga se detuvo, los habitantes potosinos podían regresar con normalidad a sus trabajos como se reactivaría la industria y el comercio. Se reconoció el triunfo navista y se eliminaron los restos del gobierno de Santos, otras instituciones que tuvieron que eliminar a santistas fueron el ejército, en donde fue removido de su cargo el comandante de la doceava zona militar y sustituido por el Gral. Alberto Zunho Hernández, el grupo que también cayó con la transición fue el de los líderes sindicales pagados por Santos, la CTM escogió nuevos dirigentes antes que perdiera fuerza en el estado.
El ayuntamiento navista (1959-1961) comenzó labores al año siguiente, rápido se vieron reflejadas acciones que ningún otro político santista había logrado, se comenzaron proyectos de infraestructura en todos los barrios y colonias de San Luis, en buena parte por la Administración Navista y la liberación de cuotas como lo comenta Calvillo "Se dejo de pagar cien mil pesos mensuales a Gonzalo N. Santos lo que libero mucho presupuesto" ese tipo de cuotas era para que la alcaldía tuviera el respaldo del cacique, Nava no lo necesitaba.
Otro importante acierto en el período navista fue publicar diariamente el balance de los recursos locales y su distribución, además de señalar los avances de la Administración a través de un programa de radio semanal, cabe señalar que esta era l primera vez que se realizaba algo parecido, lo que provoco el apoyo generalizado a Nava y el aumento de la popularidad del mismo. Los grupos que ahora apoyaban a Nava no eran sinarquistas o comunistas sino la mayoría de la población.
Después de la caída del gobernador Álvarez, el gobierno tuvo que tomar importantes decisiones, por un lado UNC exigía que el nuevo gobernador interino debía ser un hombre de comprobada moral y preferentemente de extracción navista, estaba claro que esto era lo idóneo para ellos, por su parte los partidarios del PCM propusieron a Martínez de la Vega quien mantenía ideas más cercanas a las suyas, la UCP no tuvo problemas en aceptar a de la Vega como nuevo gobernador interino e inclusive le mostraron su apoyo.
Al comenzar su mandato Martínez de la Vega intentó sacar la influencia de Santos del gobierno pero después se vio rodeado de un grupo de santistas en su equipo de trabajo. Para finales de 1960 Nava había adelantado su informe de gobierno donde anunciaba que sería el último porque se retiraría de su cargo, el 10 de enero de 1961 declara públicamente sus intenciones por competir para la gobernatura postulándose como precandidato del PRI, el primero en ponerse en su contra fue de la Vega, algunos consideran esta acción un producto de los celos de este por la incapacidad de gobernar frente a la figura de Nava, quien contaba con el respaldo de la población, otra posible causa del descontento con Nava, era la crítica que realizaba el gobernador bajo el argumento que Nava simpatizaba con corrientes tradicionalmente enemigas de la revolución.
Desde que principió la carrera política de Nava, nunca dejó de pertenecer al partido oficial, las circunstancias lo habían llevado a conseguir la alcaldía con un partido independiente, y sin embargo confiaba en que el sistema de elección interna del PRI le diera la candidatura por San Luis.
A Nava lo habían propuesto por algunos amigos que tenía en el PRI, y contaba con todo el respaldo que logró durante su estancia en la presidencia municipal. Sin embargo las noticias que le dio el general Alfonso Corona del Rosal eran claras
-Doctor usted no va ser candidato del PRI para la candidatura
del estado
-general usted se ha de estar equivocado de estado, porque en
en San Luis Potosí, todavía no se realizan las convenciones del
partido
-pues, no, doctor, con convenciones o sin ellas usted no será
el candidato del partido, aunque las ganara… porque además
tener el voto de las personas se necesita otra cosa…
(Caballero: 1992, 56)
Después de la entrevista que sostuvo Salvador Nava con el presidente del Comité Ejecituvo Nacional de PRI, quedó muy claro para el doctor, que las formas con las que se escogía a los candidatos al interior del partido no se basaban en preceptos democráticos, como Nava pensaba, la democratización al interior del PRI no era una opción, tendría que luchar por la gobernatura por sus propios medios como lo había hecho años atrás.
Las cúpulas del partido oficial decidieron lanzar en contraposición a Nava, como candidato a la gobernatura de San Luis Potosí al profesor Manuel López Dávila, de quien poco se sabía por el periodo de ausencia en el estado, López Dávila había hecho carrera política en Chihuahua y no en San Luis.
Nava por su cuenta tuvo que registrarse como candidato independiente, su candidatura no recibió de la UNS y PCM organismos que lo habían apoyado en la campaña del 58, desde que Nava se encontraba en la alcaldía varios de los grupos que lo habían llevado al poder no le reiteraron su apoyo para la gobernatura, sin embargo las bases de estas agrupaciones políticas si estaban con Nava además de importantes sectores como: obreros, campesinos, profesionistas, industriales, amas de casa, comerciantes, etc.
Estos grupos se le habían unido durante su estadía como alcalde y su popularidad se extendía por todo el estado. Así se estaba conformando el movimiento Navista, un grupo heterogéneo de diversas corrientes políticas y de los distintos sectores.
El ejército había llegado de nueva cuenta a la capital potosina días atrás de las elecciones, para supuestamente mantener la paz; el verdadero objetivo del ejército era proteger al candidato del PRI contra los intentos de agresión en su contra, ya que el repudio por el nuevo candidato del PRI no se dejó esperar a días de comenzada su campaña, era irónico que el ejército tuviera que proteger al candidato de los propios votantes y aun así tener la elección asegurada.
En julio de 1961 se realizaron las elecciones para gobernador, y los resultados parecían claros, una victoria para Nava como había ocurrido en el 58, sin embargo no fue así, más del sesenta por ciento de la población votantes registraba sufragio por López Dávila, solamente en la capital de San Luis se había reconocido una mayoría de votos para Nava pero en los demás municipios no, se había registrado un fraude electoral más en los anales de PRI, las noticias de quema de boletas y la desaparición ánforas electorales corroboraban lo anterior, en algunos casos el mismo ejército ayudó a la desaparición de los votos, todo indicó que el poder central no permitiría el ascenso de Nava a la gobernatura.
Las manifestaciones a favor de Nava comenzaron días posteriores a los resultados de la elección, un nuevo movimiento de resistencia civil había comenzado, el movimiento navista ya no peleaba contra el cacicazgo en el estado sino frente a la imposición que ejercía el gobierno central en el estado y en todo el país. Durante los meses siguientes la ciudad fue sido literalmente sitiada por el ejército; soldados y tanques llegaban con la orden de mantener la paz, en comunicado de prensa el ejercito prohibía estrictamente cualquier tipo de manifestación, a lo que Nava contestó desde el periódico disidente "Tribuna" como una afrenta contra la libertad de expresión.
Días antes de la toma de poderes del nuevo gobernador, el 15 de septiembre se celebraban paralelamente dos fiestas populares por la conmemoración de la independencia de México, en la jardín publico de Tequisquiapan se encontraba la gente de Nava y en la plaza pública de armas se encontraba la fiesta oficial del gobierno, las dos resguardadas por el ejército, cerca de la media noche comenzó una balacera en plaza de armas, personas disparaban desde una cafetería a la multitud y el ejército contesto el fuego.
El gobierno federal responsabilizó a los navistas de la provocación, los verdaderos responsables de comenzar la refriega fueron hombres de exgobernador de la Vega quienes intentaban desprestigiar a Nava y sus gente.
Al día siguiente se aprehendieron cerce de 50 líderes de la oposición además de ser destruido el periódico Tribuna por el ejército, entre los últimos detenidos del día se encontraba el doctor Nava, todos los hombres arrestados fueron mandados inmediatamente al campo numero 1 del ejército en la ciudad de México, y semanas después a la carcel federal de Lecumberri. Nava regresaría a San Luis Potosí hasta el día 15 de octubre después de ser liberado por la falta de pruebas, durante las siguientes dos años las manifestaciones y la resistencia civil continuó, asó como las aprehensiones de navistas.
En febrero de 1963 Nava volvió a ser detenido junto con otros líderes, pero en esta ocasión fueron golpeados y torturados, esta vez la resistencia pacifica no pudo contra la imposición de un gobierno central a través de la fuerza.
El navismo no volvería a tomar fuerza durante los siguientes 19 años, hasta la reaparición de Nava como líder de la oposición, la historia se volvería a repetir, primero Nava obtendría la alcaldía de San Luis y después sería candidato a la gobernatura de una alianza entre todos los paridos políticos contra el PRI, al final de las elecciones comenzaría la resistencia civil a causa de un presunto fraude, pero esta vez no detuvo a Nava el ejército sino un carcel terminal.
El movimiento navista durante los años 1958-1963, tiene importantes características que lo hicieron en su momento adelantado a su época, por un lado dejó huella como el primer movimiento político que se realizaba en el interior del país a favor de la democracia, se logro que un pueblo como el potosino se movilizara y se volviera un sujeto importante en la toma de decisiones, demostró que la resistencia civil si es una forma de hacer respetar la libertad y las ideas, pero sobre todo demostró que los mexicanos ya estaban preparados para afrontar una verdadera democracia y que las reformas políticas en materia de democracia eran necesarias.
El movimiento navista en este periodo logró cosas muy importantes como quitarle el control a Gonzalo N. Santos, gran cacique del estado, para desaparecer de una buena vez el poder del cacicazgo que imperaba desde la revolución, los navistas también lograron conquistar la alcaldía de San Luis frente a tantas dificultades y con la fuerza dela resistencia civil pero era una tarea imposible vencer al PRI en las elecciones de gobernador.
Nava demostró ser un buen líder, pero no por tener un gran carisma sino porque representaba a toda la población que había sido apolítica como él y por lo tanto sin la corrupción del poder. Ate su figura se congregó las más distintas fuerzas políticas y la población en general, su movimiento ciudadano marcaría esta época de dictadura disfrazada, como la de una lucha por la democracia.
Granados Chapa, Miguel Ángel (1992), ¡Nava sí, Zapata no¡, México, Grijalbo.
Calvillo, Tomás (1986), El navismo o los motivos por la dignidad, San Luis Potosí
Estrada, Antonio (1992), La grieta y el yugo, San Luis Potosí.
Caballero, Alejandro (1992), Salvador Nava, las ultimas batallas, México, La Jornada, Serie Disidencias.
Fabián Eduardo Chávez García