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Tratamiento de aguas residuales domésticas en la Provincia de Buenos Aires

Enviado por German Riquelme


Partes: 1, 2

    Prólogo del Autor.

    A los lectores de este trabajo que harán uso de la información contenida en la misma, a vos investigador, estudiante, profesional, trabajador, crítico o simplemente apasionado/a en temas relacionados al presente tengan en cuenta que;

    La evolución de la humanidad misma se ha basado en la transferencia de la información, el conocimiento, la experiencia, la vivencia, los errores y las lecciones aprendidas en la práctica o en la aplicación de los conocimientos, por lo que espero y te pido que contribuyas con esa evolución publicando tu trabajo en la web para que otras personas la puedan mejorar y sea de utilidad a la humanidad. Hoy la web es una herramienta maravillosa gracias a ella tienes acceso a este y otros trabajos de diferentes partes del planeta, sin embargo estimativamente solo el 30 % de los trabajos realizados en el mundo son publicados. Los grades y celebres hombres son en su mayoría los que con una actitud altruista han hecho pública, compartiendo sus conocimientos y descubrimientos.

    Hoy miles de excelentes cerebros y personas han realizado trabajos extraordinarios en los diversos campos de la ciencia permitiendo avanzar pasos agigantados hacia la perfección, sabiendo que en nuestra naturaleza misma tal vez nunca seamos perfectos pero tendemos hacia ella. Sin embargo estos extraordinarios trabajos y conocimientos mueren en algún cajón de escritorio, en la universidad, en alguna empresa, en alguna institución pública o privada, por simple maldad, intereses mezquinos o una ambición desmedida sin sentido.

    Creo firmemente que podemos avanzar o avanzaríamos casi a la velocidad de la luz si todos los trabajos se publicaran sea en medio impreso por lo menos o lo ideal atraves de la web, esto nos daría una potencia extra ahorrando tiempo, energía y recursos, saldríamos del circulo vicioso de reinventar una y otra vez la rueda de repetir cosas que ya se hicieron hace décadas y nos enfocaría a la innovación y mejora de las mismas.

    Por ultimo a los críticos constructivos; tengan en cuenta que nada ni nadie en este mundo es perfecto pero si perfectible además de tu crítica constructiva te pido la solución o el planteamiento de la mejora observada y la publicación de la misma solo así evolucionaremos hazlo tú, pues yo tal vez no tenga fuerzas, tiempo o ya no esté en este mundo para hacerlo, a los malos críticos o críticos destructivos; simplemente si no serás parte de la solución no seas parte del problema y a todos en general en especial a los jóvenes; ten cuidado y nunca te transformes en lo que siempre has criticado, nunca te dejes absorber por el sistema o la generación de idiotas e idiotas funcionales producto colateral del avance, dependencia excesiva y comodidad de la tecnología pues estas ya poco o nada piensan, analizan, sienten.

    1. INTRODUCCION

    En América Latina y el Caribe, actualmente con una población de más de 500 millones de personas, se estima que existen unas 215 ciudades con más de 100000 hab., que son costeras o cercanas a cuencas que desembocan directamente al océano. En ellas, la cobertura promedio regional de alcantarillado es de 77 %, es decir, más de 63 millones de metros cúbicos por día de aguas residuales se colectan y se vierten, de estos solo un 14 % reciben algún tipo de tratamiento y menos del 10% un tratamiento adecuado de forma tal que existe un alto grado de contaminación de ríos, lagos y mares. (CEPIS, OPS 2004).

    El caso de la Argentina es el reflejo de los países de la región, con un 68 % de cobertura de alcantarillado sanitario, sin embargo, no hay equidad en el acceso y uso de estos servicios y existen grandes disparidades entre zonas urbanas y rurales de las diferentes provincias, tanto en lo referente al agua potable como al tratamiento de las aguas residuales.

    La provincia de Buenos Aires con 307.571 km² de extensión, y una población actual (2009) de 15 millones de habitantes es una de las provincias más extensas y pobladas de la Argentina, existe en ella una alta concentración de núcleos urbanos e industriales. La problemática de contaminación de las aguas superficiales y subterráneas provenientes de las aguas residuales domesticas e industriales es una de las causas principales de daños a la propiedad (en combinación con las inundaciones), limitan el uso recreacional al contaminar las playas y producen daños ecológicos a los lagos, y ríos alrededor de las principales áreas urbanas de la provincia. (INDEC, 2001 /AABA, 2009)

    Además, la falta de tratamiento o el tratamiento inadecuado de las aguas residuales altera en muchos casos la calidad del agua de bebida y eleva los costos de los tratamientos de purificación ya que el agua de consumo proviene en muchos casos de los mismos cuerpos de agua en los que son evacuados los residuos cloacales e industriales. La contaminación del agua genera enfermedades de todo tipo, por ello el desafío técnico es proponer soluciones factibles que reduzcan la contaminación y mejoren la calidad de vida de la población.

    El presente trabajo tiene como objetivo general analizar el sistema de tratamiento de aguas residuales domesticas en la provincia de Buenos Aires, mediante una descripción de la situación general de la problemática de los efluentes urbanos y caracterización del sistema de tratamiento de aguas residuales domesticas utilizado en los núcleos urbanos de la provincia.

    2. CARACTERÍSTICAS GENERALES DE LA PROVINCIA DE BUENOS AIRES.

    La Provincia de Buenos Aires es una de las 23 provincias que componen la Argentina. Por la extensión, población y relevancia de sus actividades económicas es considerada una de las más importantes del país, con más de un 37,70% (unos 3/8) de su población total.

    Situada en la región centro-este, limita al norte con las provincias de Entre Ríos y Santa Fe, al oeste con las provincias de Córdoba, La Pampa y Río Negro, al sur y al este con el Atlántico y al nordeste con el Río de la Plata. Enclavada en el nordeste se encuentra la Ciudad de Buenos Aires, que desde 1880 no forma parte de la provincia. La capital de la provincia es la ciudad de La Plata. (CITAB, 2009).

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    Figura 1. División administrativa de la provincia de Buenos Aires. Fuente: Centro de Investigaciones Territoriales y Ambientales Bonaerense CITAB, 2009.

    A diferencia de las demás provincias del país, en la Provincia de Buenos Aires las divisiones administrativas se llaman partidos en lugar de departamentos (Figura 1). Los partidos-municipios cubren todo el territorio provincial, por lo que la provincia utiliza el sistema de ejidos colindantes. En diciembre del año 2007 existían 134 partidos que se distribuyen por la totalidad del territorio provincial. Cada partido corresponde a un municipio y está gobernado por un intendente electo por sufragio popular; el proceso de creación de un partido es mucho más dinámico que en las demás provincias, existiendo en el año 2000 un total de 6 partidos más que en 1990. (CITAB, 2009).

    Con 307.571 km² de extensión, es la provincia más extensa del país, ocupando el 11,06% de su superficie total. El partido de Patagones es el más extenso de la provincia con 13.600 km², y el de Vicente López es el menos extenso, con 33 km².

    Según la proyección de crecimiento demográfico medio, teniendo en cuenta los dos últimos censos nacionales del país (1991 y 2001) su población es de aproximadamente 15 millones de habitantes (al 1/1/2009), con lo cual es la provincia más poblada de la República Argentina. También es una de las provincias con la mayor densidad poblacional, equivalente a 48,05 habitantes por km², sólo superada por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y la provincia de Tucumán. (INDEC, 2001)

    3. ASPECTOS GEOGRÁFICOS

    Desde el punto de vista de la geografía física, la provincia de Buenos Aires se encuentra en el predominio de la llanura pampeana con una inclinación suave hacia el Mar Argentino. Esta planicie está interrumpida por dos pequeños sistemas serranos, el de Tandilia de unos 500 msnm y el de Ventania de unos 1.100 msnm. Su punto más alto es el Cerro Tres Picos con 1.239 msnm y el más bajo Salinas Chicas, a -42 msnm. Su río más extenso es el Salado con 700 km de longitud. (CITAB, 2009).

    3.1 Relieve

    Aunque la totalidad de la Provincia de Buenos Aires está comprendida dentro de la región pampeana, que en su mayor parte es una gran llanura sin desniveles, pueden distinguirse en tal llanura -cubierta mayormente de praderas- diversas subregiones (Figura 2): la pampa ondulada en el sector norte, caracterizada por la presencia de un relieve ondulado con algunas "lomas" o "cerrilladas" originadas en antiguos médanos fosilizados, que conducen el agua de los ríos hacia su principal colector, el río Paraná. (CYTED, 2003)

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    Figura 2. Regiones geográficas de la provincia de Buenos Aires. Fuente: CITAB, 2009.

    La cuenca inferior del río Salado en su mayor parte constituye la llamada "pampa deprimida" por su altitud relativa inferior a la del resto de la región pampeana, lo que da lugar a lagunas como las de Chascomús y Lobos. Aunque no directamente vinculada a la cuenca del río Salado, existe al norte de la sierra de la Ventania una cuenca endorreica con depresión tectónica de igual origen que la de la cuenca del Salado, tal cuenca endorreica es la de las Lagunas Encadenadas del Oeste: Laguna Del Monte, Cochicó, Epecuén (o laguna de Carhué). (GEF/ PNUD, 2003)

    Inmediatamente al sur de la Bahía de Samborombón existe una importante zona de humedales y bajíos llamada en su sector norte "pago de El Tuyú" (tuyú es palabra de origen guaraní y significa: "Tierras blandas", en referencia a cangrejales, bajos pantanosos y lagunas) y en su sector sur pago de "El Ajó", en esta zona se encuentran dos importantes cordones de sierras, las de Ventania y Tandilia.

    En la cuenca alta del río Salado, justo donde la Pampa Deprimida se encuentra con la Pampa Ondulada Alta, se encuentran las lagunas de Junín: Gómez, Mar Chiquita y El Carpincho. Dos sectores de la Provincia de Buenos Aires "no" corresponden netamente a la región pampeana: el sector extremo meridional ubicado al sur del río Colorado que es ya perteneciente a la Patagonia Argentina, y el sector extremo noreste que corresponde fisiográficamente y ecológicamente a la Mesopotamia Argentina, más conocido desde el siglo XX como el Delta del Paraná o simplemente "El Delta". "El Delta" es un territorio formado por muchas islas fluviales, de escasa altitud, pantanosa, cubierta densamente por selvas marginales que son una continuación de la selva tropical sudamericana. (GEF/ PNUD, 2003).

    3.2 Clima

    El clima predominante es el templado pampeano (Figura 3). Presenta veranos templado- calurosos e inviernos frescos, precipitaciones suficientes y vientos predominantes del este y del noreste. Las áreas orientales son más húmedas porque se producen las mayores precipitaciones (algo más de 1.000 mm anuales), concentradas de octubre a marzo. Hacia el oeste el clima es más árido; las precipitaciones oscilan entre los 400 y 500 mm anuales. (Di Risio, et al. 2003)

    En función de la presencia de los Hemiciclos Húmedo o Seco, las isohietas se corren 300 km o más. Llueve durante casi todo el año principalmente en verano. Hay épocas en las que llueve más de lo habitual, entonces los arroyos, ríos y lagunas se desbordan inundando grandes extensiones de tierra, esto es particularmente grave para las zonas bajas como en el centro y el este de la provincia donde se han construido canales artificiales para ayudar al escurrimiento de las aguas hacia el rio de la Plata. La región pampeana bonaerense se ve afectada por vientos como la Sudestada que viene del océano (en los meses fríos) y el Pampero o Viento Sur que atraviesa la Patagonia (en los meses cálidos), proviniendo del Anticiclón Antártico. (Fernández Cirelli, 2000)

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    Figura 3. Areas climáticas de la provincia de Buenos Aires. Fuente: Centro de Investigaciones Territoriales y Ambientales Bonaerense CITAB 2009.

    4. HIDROGRAFÍA

    4.1 Aguas Superficiales

    Los ríos y arroyos que surcan la provincia de Buenos Aires no son caudalosos, y desembocan en el Río de la Plata o en el Océano Atlántico (Figura 4). Desde el punto de vista hídrico, el rasgo más saliente de la provincia lo constituyen los lagos, lagunas, pantanos, barrancos y cañadas (Fernández Cirelli, 2000).

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    Figura 4. Hidrografía de la Provincia de Buenos Aires. Fuente: CITAB 2009.

    Las lagunas pueden ser tanto permanentes como temporarias, y aunque sin gran profundidad, las primeras tienen formas bien definidas. Comúnmente nacen en antiguos lechos de ríos y se conectan entre sí como por ejemplo las que pertenecen al Sistema de Chascomús o de las Encadenadas. Otras tienen origen en movimientos de suelo o agentes erosivos, o se encuentran contenidas por dunas o por el amplio suelo de conchillas. El agua en general proviene de lluvias y afluentes o ríos subterráneos. Si el manantial fluye del suelo a través de sedimentos salinos, las aguas de la laguna que las contiene así se tornan, como es el caso de las lagunas de Carhué y Guaminí (CITA).

    Los terrenos anegadizos o lagunas temporarias se distinguen de las permanentes por aparecer como producto de las grandes lluvias, y por carecer de contornos bien definidos y estar sobre terrenos bajos e impermeables. Las cañadas se asemejan a los terrenos anegadizos, la diferencia es su emplazamiento. Son poco profundas y se encuentran ubicadas entre elevaciones. Generalmente poseen abundante vegetación acuática en la superficie y bajo el agua, lo cual crea magníficas condiciones de vida animal. (Fernández Cirelli, 2000)

    También importantes ríos tienen parte de su recorrido en la Provincia de Buenos Aires: el río Paraná y su continuación el estuario llamado Río de la Plata, y los ríos Colorado y Negro; de hecho la provincia con su actual territorio mantiene los accesos de las principales cuencas fluviales argentinas. El río Salado de la región pampeana suele recibir el nombre de "Río Salado Bonaerense" ya que casi la totalidad de su cauce (700 km de longitud), se encuentra dentro de la jurisdicción bonaerense aunque sus fuentes se encuentren en el extremo sur de la Provincia de Santa Fe, corre a través de una gran depresión de 80.000

    Km2 frecuentemente inundable, lo que ha causado grandes pérdidas a la producción agropecuaria. Gran parte del caudal del río Salado es aportado subterráneamente por el "brazo norte" del río Quinto, que discurre sobre la superficie durante los períodos húmedos formando un gran arco que ingresa en la provincia de Buenos Aires y confluye superficialmente en el río Salado en las proximidades de la ciudad de Bragado. La cuenca del río Salado posee otros tributarios importantes, como el Vallimanca, el Tapalqué y el de las Flores, todos procedentes de las sierras bajas del centrosur (sierra de Olavarría, sierra de Azul, sierra de Balcarce, sierra de Tandil). El río Salado bonaerense es por su parte tributario del Río de la Plata. (GEF/ PNUD, 2003).

    Existen otras pequeñas subcuencas del Río de la Plata como las del Arroyo del Medio, o los ríos Baradero, Luján, Reconquista, Río de la Matanza etc., gran parte de los caudales de estos cursos de agua permanentes, pese a su escaso recorrido, se deben a afloramientos del acuífero Puelche. En cuanto a los tributarios directos hacia el Océano Atlántico también estos forman gran cantidad de pequeñas cuencas casi paralelas entre sí destacándose el río Quequén, el arroyo Claromecó, el Quequén Salado, el Sauce Grande y el Naposta. (GEF/ PNUD, 2003).

    4.2 Aguas Subterráneas

    Los dos principales acuíferos sobre la cual se asienta gran parte del área de la Provincia de Buenos Aires son: el acuífero Pampeano o Epipuelche de donde se extrae el agua utilizada en zonas rurales; es el acuífero de menor profundidad y mayor contacto con las aguas superficiales mientras que a mayor profundidad se ubica el acuífero Puelche, de donde extraen agua potable las principales ciudades ubicadas en la provincia, este acuífero contiene aguas de mejor calidad pero cuyo riesgo de contaminación es cada vez mayor. (Auge, 2004.)

    5. GEOLOGÍA DE LOS SEDIMENTOS QUE CONTIENEN A LOS ACUÍFEROS.

    La región presenta una marcada monotonía en su condición geológica superficial, hecho que tipifica a los ambientes llanos, una de las características distintivas de la geología de estos ambientes es la escasa deformación tectónica, particularmente de las unidades más modernas, lo que se traduce en una posición estratigráfica subhorizontal. Sobre rocas cristalinas del macizo de Brasilia, se asienta una gruesa capa formada por polvo llevado por el viento desde las regiones montañosas del oeste que constituyen el loees pampeano, asi como los sedimentos marinos producto de las transgresiones marinas cenozoicas. En la Figura Nº 5 se observa el perfil geológico del suelo y la ubicación de los dos acuíferos sobre la cual se asienta la provincia de Buenos Aires. (Auge, 2004.)

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    Figura 5. Perfil geológico y ubicación de acuíferos importantes. Fuente: Auge, 2004

    Los sedimentos Postpampeanos (Pleistoceno superior – Holoceno), cuyo espesor varía entre pocos centímetros en la Llanura Alta y unos 25 m en la ribera del Río de la Plata, están constituidos por arcillas y limos arcillosos y arenosos de origen marino, fluvial y lacustre, acumulados en ambientes topográficamente deprimidos (Planicie Costera, valles fluviales y bañados o lagunas). Poseen muy poca capacidad para transmitir agua por lo que actúan como acuitardos o acuícludos. Además, existe una notable correspondencia entre el Postpampeano y la presencia de agua salada en el perfil, aún en las unidades más profundas (Pampeano y Arenas Puelches). (Auge, 2004.)

    Otra unidad geológica es el Pampeano (Pleistoceno medio – superior), también denominado Sedimentos Pampeanos, se localiza por debajo del Postpampeano en la Planicie Costera y subyace a la cubierta edáfica en la Llanura Alta, está formado por limo arenoso de origen eólico (loess) y fluvial, con abundante plagioclasa, vidrio volcánico y CO3Ca (tosca). El espesor del Pampeano está controlado por los desniveles topográficos y por la posición del techo de las Arenas Puelches, variando entre extremos de 50 m en la Llanura Alta y la superficie en la costa del Río de la Plata, donde fue totalmente erosionado. La trascendencia del Pampeano radica en que actúa como vía para la recarga y la descarga del Acuífero Puelche subyacente y también para la transferencia de sustancias contaminantes, generadas principalmente por actividades domésticas y agropecuarias, como los nitratos. La sección superior del Pampeano contiene a la capa freática y su base está formada por un limo arcilloso de unos 6 m de espesor medio que lo separa del Puelche, otorgándole a este último un comportamiento de acuífero semiconfinado. En la zona rural cultivada, la falta de aislación del Pampeano, hace que los pozos capten en forma conjunta a éste y al Acuífero Puelche. El agua contenida en el Pampeano es del tipo bicarbonatada sódica y cálcica, con salinidades inferiores a 1 g/L en la Llanura Alta, pero con incrementos notorios en la Planicie Costera. (Auge, 2004.)

    Las Arenas Puelches (Plio-Pleistoceno), constituyen una secuencia de arenas cuarzosas sueltas, medianas y finas, blanquecinas y amarillentas, con estratificación gradada. Se sobreponen en discordancia erosiva a las arcillas de la Formación Paraná y constituyen el acuífero más importante de la región por su calidad y productividad. Las Arenas Puelches son de origen fluvial, ocupan en forma continua unos 92.000 km2 en el subsuelo del NE de la Provincia de Buenos Aires y se extienden también hacia el N en la de Entre Ríos y hacia el NO en las de Santa Fe y Córdoba. En la zona, el techo del Puelche se ubica entre 20 y más de 50 m de profundidad y su espesor varía entre aproximadamente los 20 y 30 m.Todos los pozos del servicio de agua potable de La Plata y alrededores captan este acuífero, que también se aprovecha para riego y para la industria, con producciones individuales entre 40 y 160 m3/h, de agua bicarbonatada sódica, con una salinidad total menor a 1 g/L. En la Planicie Costera, la salinidad del Puelche aumenta notablemente, superando en algunos casos 20 g/L (Punta Lara), con agua clorurada sódicos.

    Formación Paraná (Mioceno superior), es la base del acuífero puelche, tiene origen marino, subyace al Puelche y está integrada por dos secciones de características disímiles. La superior, netamente arcillosa, de tonalidad verdosa dominante y con fósiles marinos, se desarrolla entre 63 y 154 m de profundidad y la inferior, más arenosa y calcárea desde 154 hasta 297 m. (Auge y Hernández 2002)

    6. DINÁMICA DE LOS ACUÍFEROS

    La comunicación entre ambos acuíferos se esquematiza en el perfil hidrogeológico de la figura Nº 6, esta conexión se da través del acuitardo, que permite que el Puelche se recargue por filtración vertical descendente, en aquellos sitios donde el Pampeano presenta mayor potencial hidráulico (divisorias subterráneas), o se descargue por filtración vertical ascendente, donde presenta menor potencial hidráulico que el Puelche (zonas de descarga). En definitiva, este funcionamiento con comunicación hidráulica vertical, deriva en potenciales muy similares entre ambos acuíferos, similitud que también caracteriza a la salinidad y a la composición química de sus respectivas aguas.

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    Figura 6. Perfil hidrogeológico de la región. Fuente: Auge, 2004

    El proceso de filtración vertical descendente, también permite el pasaje de nitratos y otras sustancias contaminantes desde el Pampeano al Puelche, a través del acuitardo que los separa, es decir que el espesor del acuitardo y del Pampeano sobrepuesto, ejercen poca incidencia en la vulnerabilidad del Acuífero Puelche. El factor que mayor incidencia tiene en la vulnerabilidad de este acuífero, es la diferencia de potenciales hidráulicos respecto al Pampeano, específicamente cuando el potencial hidráulico de este último, supera al del Puelche. Respecto a la vulnerabilidad por contaminación, los ámbitos más afectados son los urbanos. (Auge, 2004.)

    7. MONITOREO, HIDROLÓGICO Y CALIDAD DE AGUAS

    En la Argentina no existe un mecanismo institucional que coordine la adquisición y disposición de información hidrológica, existiendo una diversidad de organismos estatales propietarios de estaciones de medición con diferentes objetivos. Esto da lugar a una distribución espacial heterogénea de las estaciones hidrometeorologicas e hidrológicas, con datos dispares almacenados en distintas instituciones estatales. (GEF/ PNUD, 2003).

    En lo que respecta al monitoreo de calidad de aguas la cantidad de información generada también se encuentra dispersa en diferentes Organismos estatales, Universidades y Organismos de Ciencia y Técnica como ejemplo, algunos de ellos son: Instituto Nacional del Agua (INA), Sub Secretaria de Política Ambiental de la Provincia de Buenos Aires, Servicio de Hidrografía Naval (SHIN), Comité Ejecutor del Plan de Gestión y de Manejo de Cuenca Hídrica Matanza- Riachuelo, Unidad de Coordinación del Proyecto Rio Reconquista (UNIREC), Ente Tripartito de Obras y Servicios Sanitarios (ETOSS), Organismo Regulador de Aguas Bonaerenses (ORAB), Subsecretaria de Puertos y vías navegables, Subsecretaria de Recursos Hídricos de la Nación, Comisión Administradora del Rio de la Plata (CARP), Universidades Nacionales e Instituciones del Consejo Nacional de Ciencia y Técnica (CONECET), Aguas y Saneamiento Argentino (AYSA), entre otras.

    En la Tabla Nº 1, se citan organismos estatales involucrados en la operación de estaciones de medición hidrológica y/o Meteorológicas.

    Organismos

    Estación Hidrológica

    Estación Meteorológica

    Agua Superficial

    Agua Subterránea

    Subsecretaria de Recursos Hídricos

    SI

    NO

    SI

    Servicio Meteorológico Nacional (SMN)

    SI

    SI

    SI

    Prefectura Naval Argentina (PNA)

    SI

    NO

    SI

    Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA)

    NO

    SI

    SI

    Servicio de Hidrología Naval

    SI

    SI

    NO

    Instituto Nacional del Agua (INA)

    SI

    SI

    NO

    Dirección de Hidráulica de la provincia de Buenos Aires

    SI

    SI

    NO

    Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero (INIDEP)

    NO

    NO

    SI

    Fuente: GEF/ PNUD, 2003

    8. PROBLEMÁTICA AMBIENTAL DE LOS EFLUENTES URBANOS EN LA PROVINCIA DE BUENOS AIRES.

    Los problemas de abastecimiento de agua se centran tanto en la calidad como en la cantidad, al ser una de las provincias más densamente poblada e industrializada de la Argentina, existe en ella una alta concentración de núcleos urbanos, que se han desarrollado al amparo de las actividades agropecuarias. Estas ciudades en su mayoría disponen sus efluentes en los cuerpos de agua vecinos, que pueden ser tanto ríos de llanura, de diferentes caudales, lagunas o al propio Océano Atlántico.

    Según proyecciones del INDEC (2001) para el año 2009 y datos de AYSA (2009), el 47% (7050000 habitantes) de los habitantes de la provincia de Buenos Aires tiene acceso a la red de desagüe cloacal y el restante 53 % (7950000 habitantes) utilizan otras formas de eliminación (31% en cámara séptica con pozo ciego, 22 % sólo en pozo ciego, y un 0.3 % en hoyos, excavaciones, etc.), estas otras formas de disposición de efluentes aumentan los riesgos de contaminación de las napas freáticas.

    Además, debe señalarse que aproximadamente solo el 15 % de las aguas conducidas por la red cloacal, recibe algún tipo de tratamiento, y menos del 10 % recibe un tratamiento adecuado. Debido a la capacidad de las actuales Plantas de Tratamiento, se depura una escasa proporción de los efluentes. Para aumentar la cobertura de de tratamiento a un 60 %, en general se necesitaría una inversión aproximada de 1500000 mil dólares anuales hasta el año 2015. (CEPIS /OPS, 2004)

    Según la ley provincial de Buenos Aires N° 11 459, los establecimientos industriales se clasifican en tres categoría, las de primera categoría que incluyen aquellos establecimientos que se consideran inocuos porque su funcionamiento no constituye riesgo o molestia a la seguridad, salubridad e higiene de la población, ni ocasiona daños a sus bienes materiales ni al medio ambiente. En las de segunda categoría, se incluyen aquellos establecimientos que se consideran incómodos porque su funcionamiento constituye una molestia para la salubridad e higiene de la población u ocasiona daños graves a los bienes y al medio ambiente y las de tercera categoría que se refieren a establecimientos que se consideran peligrosos porque su funcionamiento constituye un riesgo para la seguridad, salubridad e higiene de la población u ocasiona daños graves a los bienes y al medio ambiente

    Más de tres mil empresas de distintas categorías , se han ubicado estratégicamente cerca de algún curso de agua y vuelcan a diario y desde hace años sus residuos tóxicos o no tóxicos, sólidos o líquidos, sin ningún tipo de tratamiento o con tratamiento insuficiente. Por ejemplo, las industrias farmacéuticas, químicas y petroquímicas aportan el 30% de la contaminación, la industria de las bebidas alcohólicas y curtiembres el 3%. A estos volcamientos se agregan los efluentes cloacales. En conjunto, los ríos y arroyos reciben a diario un promedio de 368.000 metros cúbicos de residuos industriales, esto es más que el caudal mínimo promedio de la mayoría de los ríos de la zona, y constituye una peligrosa carga contaminante (Herrero 2006).

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    Figura 7. Establecimientos industriales. Fuente: Herrero, 2006

    Por otro lado, la empresa AySA, (Agua y Saneamiento Argentino) principal responsable de la provisión de agua potable y saneamiento en la provincia de Buenos Aires, estimó que fluyen 2.300.000 de m3 de aguas negras sin tratar -por día- hacia el río de la Plata. A ellas, se suman 1.900.000 de m3 diarios de descargas industriales del Área Metropolitana de Buenos Aires. En el caso de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, y de las ciudades costeras de la provincia, la repercusión principal recae en que las normas de calidad del agua ambiental se exceden constantemente de la franja de los 300 metros continuos a la costa del río de la Plata, impidiendo el uso recreativo (por insalubre) de las playas que antaño fueron tan importantes para sus habitantes.

    Casi toda el agua que se consume o utiliza, proviene de los mismos cuerpos de agua en los que son evacuados los residuos cloacales e industriales. La concentración de diversos elementos contaminantes –metales pesados, bacterias, nitratos, hidrocarburos, etc.- que se encuentran en lagos, lagunas y ríos de la provincia de Buenos Aires, superan ampliamente las cifras consideradas peligrosas. Dada la falta de tratamiento de los mismos, la población termina consumiendo agua potable de calidad dudosa o a un alto costo de purificación. (Herrero 2006).

    La Argentina no posee en general medidas de control adecuadas para el tratamiento y disposición de aguas servidas, residuos peligrosos sólidos y desechos industriales o domiciliarios, que finalmente terminan contaminando cuerpos de agua superficiales y subterráneos. Aunque sí cuenta con abundante información sobre la presencia de contaminantes y su impacto sobre cuerpos de agua que se encuentran afectados por aguas servidas, con intensos procesos de eutrofización debido a la falta de depuración. (GEF/ PNUD, 2003).

    El mayor problema está en las áreas urbanas donde la carga de contaminantes es habitualmente mayor. Según datos de Lombardo 2007, una de cada cuatro camas de un hospital está ocupada por pacientes que tienen enfermedades contraídas por el agua. La contaminación del agua genera enfermedades de todo tipo, no sólo infecciosos. El agua transporta elementos traza y sustancias tóxicas que pueden bioacumularse en los organismos vivos y transferirse a través de la cadena alimenticia hasta los productos de consumo humano, poniendo en riesgo la salud.

    La contaminación de las aguas superficiales provenientes de las aguas residuales industriales y de aguas negras sin tratar es una de las causas principales de daños a la propiedad (en combinación con las inundaciones), pérdidas de espacios para recreación y daños ecológicos alrededor de las principales áreas urbanas y de varios lagos interiores. Además produce pérdidas económicas en la exportación de peces, moluscos, crustáceos, etc., al no cumplir con las normas internacionales de calidad en el uso del agua. (SAGPyA, 2002).

    Un ejemplo de la contaminación es la zona de la cuenca Riachuelo-Matanza en la Provincia de Buenos Aires, con sus 2.240 kilómetros cuadrados y sus tres millones de habitantes, de los cuáles sólo el 45% posee cloacas y el 65% tiene agua potable (1.700.000 personas utilizan pozos negros o cámaras sépticas). Los lodos del Riachuelo poseen grandes concentraciones de cromo, cobre, mercurio, cinc y plomo. Las mayores concentraciones de cromo y plomo se encontraron en los límites de los municipios de Avellaneda y Lanús en la Provincia de Buenos Aires. (ACUMAR, 2008)

    Hidrocarburos como el benceno, naftaleno, antraceno y tolueno, entre otros, abundan en las aguas y aparecen en los sedimentos de los ríos y arroyos cercanos a destilerías e industrias petroquímicas como las que se encuentran en los cursos de agua del área Beriso-Ensenada, en el interior de la provincia de Buenos Aires. (Herrero 2006).

    8.1 Contaminación de Aguas subterráneas

    En las zonas urbanas y rurales del noroeste de la Provincia de Buenos Aires, el acuífero Puelche, reconocido como uno de los más grandes del mundo y del cual se abastece cerca del 60 % de la población de la provincia ya sea para consumo directo, para riego o para uso industrial, presenta diferentes niveles de contaminación con nitratos y bacterias coliformes. La sección superior (llanura alta) es la más afectada por residuos de todo tipo que se descargan en grandes volúmenes en los ríos y lagunas en los cuales la posibilidad de contaminación química y microbiológica y de eutrofización aumenta debido a que tienen capacidad limitada de autodepuración, por otra parte, la interconexión de dichos cuerpos de agua facilita la transferencia del posible problema de contaminación local hacia otras regiones, pues el agua puede transportar sustancias asociadas con los pozos ciegos, los basurales y los nitratos residuales (Momo, et al. 2008).

    En algunas zonas del conurbano bonarense, densamente poblado, el agua del acuífero Puelche presenta concentraciones de nitratos hasta tres veces superiores a los límites permitidos. En ningún caso las plantas depuradoras son suficientes, los tratamientos que debieran efectuar las empresas antes de volcarlos a los cauces son entre deficientes e inexistentes. El conjunto de residuos incluye metales pesados, compuestos orgánicos e inorgánicos. La contaminación de las aguas subterráneas debe considerarse como el problema de contaminación más importante de la Argentina, más que nada debido a la exposición a los riesgos de salud de una gran parte de los hogares -incluyendo una gran proporción de los de bajo recursos- que dependen del agua subterránea para sus necesidades diarias (Tolcachiex, 2007).

    Una de las áreas críticas en cuanto a la contaminación del agua subterránea es la zona Metropolitana de Buenos Aires, por la gran cantidad de gente afectada y por la baja cobertura de infraestructura en algunos municipios. La principal fuente de contaminación son los pozos negros (ya sean pozos ciegos con o sin cámara séptica) y, en menor medida, las aguas residuales industriales. Dichos vertidos, asumiendo una dotación conservadora de 200 litros por habitante (aunque en la realidad son más de 300) por día, resulta 9 veces mayor que la infiltración natural producto de la lluvia, estas aguas poseen generalmente alta carga bacteriológica y de nitratos (Auge, 2007).

    El volumen de agua afectada por contaminación difusa con nitratos (NO3), es del orden de 300 hm3, lo que implica algo más del 10% de la reserva del Acuífero Puelche en la Llanura Alta (2830 hm3). Esta contaminación proviene del Pampeano, por filtración vertical descendente, a través del acuitardo, (como se menciono en la dinámica de los acuíferos). El Pampeano a su vez recibió y recibe la carga contaminante de pozos sépticos y pérdidas en la red cloacal (Tolcachiex, 2007).

    La totalidad del ejido urbano cuenta con red para evacuación de efluentes cloacales, pero la mayor parte del periurbano no. Para que el agua de red cumpla con la norma de potabilidad respecto a NO3, considerada por la Ley Provincial Nº 11.820, dentro de los componentes que afectan directamente a la salud y que exige un contenido inferior a 50 mg/L, se procedió a mezclar el agua subterránea con la proveniente del Río de la Plata, que normalmente posee menos de 10 mg/L. De esta forma se practica un aprovechamiento conjunto del recurso subterráneo y superficial, reduciendo el ascenso del agua freática, que ha ocasionado serios inconvenientes en algunas zonas urbanas de la provincia de Buenos Aires. En parte de la zona metropolitana de la provincia de Buenos Aires se procedió a reemplazar el agua subterránea con la del Río de la Plata, debido al alto tenor en nitratos (NO3) que presentaba la primera. (AySA, 2009)

    La falta de desagües cloacales y el mal manejo del agua en el Gran Buenos Aires a partir de 1992, hicieron que el agua freática, que a principios de la década del 90 se encontraba entre los 15 y 20 m de profundidad, comenzara a ascender rápidamente, para alcanzar el nivel del suelo, en partidos del Conurbano de la provincia como: Tigre, San Fernando, San Isidro, Vicente López, San Martín, Tres de Febrero, Morón, La Matanza, Lomas de Zamora, Lanús y Quilmes. Actualmente el problema es grave pues afecta a más de 2 millones de habitantes, con agua freática contaminada aflorando en amplios sectores del Conurbano de Buenos Aires. La solución más efectiva sería promover la extensión de servicios de saneamiento y agua potable a los barrios de bajos ingresos y áreas suburbanas que actualmente no lo reciben, así se evitaría la posible generación de enfermedades y epidemias que se transmiten a través del agua contaminada como: diarreas estivales, hepatitis, fiebre tifoidea, cólera, disentería, amebiasis, etc. (Auge, 2007)

    8.2 Problema ecológico global, más allá de la provincia de Buenos Aires

    Los efluentes urbanos que son arrojados sin previo tratamiento van directamente a algún río o al litoral marino causando la contaminación de sus aguas y la proliferación de agentes patógenos. Cuando las aguas residuales domésticas se vierten sin tratamiento previo a los cuerpos de agua, suelen contaminarse con altas concentraciones de bacterias, virus y parásitos, lo cual crea un grave problema no sólo a la salud de los habitantes sino a los ecosistemas acuáticos.

    Las aguas residuales vertidas por las ciudades situadas cerca del litoral, entre ellas las ciudades de la provincia de Buenos Aires afectan las playas y se suman a los factores contaminantes que causan la progresiva desaparición del fitoplancton, conformado por plantas muy pequeñas que flotan en la superficie, primer eslabón de la cadena alimenticia acuática y actor principal del equilibrio climático. (CEPIS/OPS, 2006)

    Las bacterias y microbios que se vierten al mar a través de los desagües se mantienen por largo tiempo en las aguas y arenas de las playas, además de convertirlas en focos infecciosos que amenazan a estos ecosistemas y a la salud humana.

    Partes: 1, 2
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