Un MCROSS de modelo, estrategia, método y técnica. Implicaciones teórico-metodológicas

Resumen

En la práctica y la investigación educativa se emplean con fines didácticos los términos modelo, estrategia, método y técnica. Sin embargo, en su uso se detectan ciertas equivalencias inadecuadas, las cuales propician incertidumbre de tipo semántico y pragmático al derivar inconsistencia entre los significantes y los referentes instrumentales. Esta divergencia de significados define el problema que conduce al análisis sobre el qué, para qué, cómo fundamentar, conectar y emplear adecuadamente esos términos. El análisis documental da cuenta de las invariantes, los requerimientos teórico-metodológicos y las aristas comunes que podrían conectar o desviar el significado. En base al marco conceptual operativo con significado y sentido presentado en este artículo, se ofrece como referente al Enfoque Histórico Cultural, éste constituye la teoría psicológica y pedagógica para lo concreto pensado de los términos modelo, estrategia, método y técnica.

Palabras clave: MCROSS, paradigma, modelo, estrategia, método y técnica

Introducción

El propósito de este artículo es abordar los fundamentos teóricos y metodológicos que sustentan a los términos modelo, estrategia, método y técnicos, y hacer un acercamiento al significado práctico de estos términos para plantear dar respuesta a los cuestionamientos y exigencias de la práctica educativa y la investigación. En ese sentido, se parte del significado y sentido de paradigma, luego a partir de éste se interpreta el concepto de modelo, que sirve de soporte al análisis del término de estrategia, método y técnica. Luego, se presenta a manera de referencia, al Enfoque Histórico Cultural, base teórica-metodológica para sustentar en lo concreto pensado los términos analizados.

Significado y sentido de paradigma, modelo, estrategia, método y técnica

El paradigma como logro intelectual del hombre sobre el conocimiento permea un marco conceptual referencial con significado y sentido (MCROSS) (Mora, 2005) compartido (reconocido) por cierta comunidad sobre prácticas, valores y creencias científicas, filosóficas, religiosas, económicas, tecnológicas, artísticas y sociales, el cual además de permitir la visión y comprensión del mundo, sirve de puente hacia el cambio paradigmático del avance científico, tecnológico y humano, con descubrimientos que dan cuenta de la solución de problemas en las dimensiones antes señaladas.

El paradigma es el instrumento teórico para la percepción e interpretación del conjunto de cosas de cierto mundo, a través de la organización, visualización e interpretación de múltiples conceptos, esquemas, patrones, modelos o ejemplos que sirven de filtro, base o lente para comprender la realidad y su transformación cultural a partir de un conjunto de convenciones, disposiciones, nociones básicas, principios, reglas y expectativas que proporcionan un equipamiento para pensar, valorar y actuar en la resolución de problemas (Kuhn, 1962; Capra, 1998), a través de un conjunto de conocimientos y saberes que se vale de modelos teóricos emergentes para representar sistemas reales que permiten interpretar la realidad teóricamente (Bunge,1985)

La teoría se fundamenta en el paradigma, es elaborada sobre la base de sistemas conceptuales que se desprenden del análisis con objetos reales o abstractos, el cual propicia la síntesis en el modelo que es una idealización coherente con un sistema de aspectos esenciales para aproximar y explicar teóricamente el comportamiento empírico de una realidad. En ese sentido, en la parte aplicativa de una teoría figura el modelo asistiendo el reemplazo abstracto (simbólico) esencial de una realidad o sistema que puede estar ausente o no, a través de re-presentaciones de las relaciones sustantivas presentes en los fenómenos objetos de intervención.

El modelo teórico constituye la síntesis para la aplicación de la teoría que se manifiesta como los correlatos teóricos (esquemas) de los hechos reales (Moulines,1982). Éste permea un bosquejo de las propiedades dominantes del objeto que representa a algún referente real con un significante, el cual expresa cierto grado de precisión con la mejor aproximación posible de lo que significa en la realidad y no como una réplica de ella, para luego ejecutar con conocimiento teórico la acción.

La teoría es referencial para el modelo que conduce a una "descripción y una representación esquemática, sistemática y conscientemente simplificada de una parte de la realidad, realizada mediante signos, símbolos, formas geométricas o gráficas y palabras" Willet (1992, p. 33). Esta idea da cuenta que el modelo se apoya en ciertas notaciones, signos o conjunto de símbolos que ejemplifica o representa alguna cosa, en su ausencia, sea ésta del plano externo o del plano interno del sujeto, dando lugar en el caso externo a modelos basado en representaciones conceptuales o en el caso interno a modelos de representaciones mentales.

Los modelos conceptuales como representaciones externas pueden materializarse en forma de modelos matemáticos, construcciones verbales o formulaciones pictóricas, que constituyen herramientas del conocimiento para propiciar la enseñanza–aprendizaje de objetos materiales que permiten la comprensión de sistemas, cosas o fenómenos físicos (materiales y tangibles) (Norman, 1987).

El modelo mental como representación interna es complejo, refleja movimiento y explicita relaciones de dependencia entre los componentes que lo definen porque "es una representación de un estado de cosas (state of affairs) del mundo exterior." (Johnson-Laird, 1983, p.1 y 5) y permite "… explicar los procesos superiores de la cognición y, en particular, la comprensión y la inferencia." (Johnson-Laird, 1983, p. 446-447). Éste ha sido abordado desde la psicología cognitiva (Johnson-Laird, 1983, 1990, Norman 1987; Moreira, 1996) y aplicado pedagógicamente en el proceso de enseñanza-aprendizaje de las ciencias de la educación (Moreira, Greca, y Rodríguez, 2002)

La esencia del modelo no es simplificar o reemplazar la realidad, es reducirla a aspectos no ostensivos de fácil entendimiento, a través de la operación modelización, con referentes simbólicos o el metalenguaje, el cual permite simular las posibles conexiones o lazos entre sus elementos sustanciales que forman un sistema básico para describir, explicar y predecir el comportamiento de un fenómeno natural u objeto del mundo real o artificial, a través de un marco referencial (teórico) y operacional (metodológico).

El significado referencial del modelo remite teóricamente a una situación general de una realidad o parte de ella que se concreta en forma abstracta a través de un artefacto que sirve de prototipo, arquetipo, molde o ejemplo virtual. El significado operativo del modelo, es menos general, contiene algunos elementos claves, pasa por alto los detalles y se simplifica a la representación simbólica como el diseño de esquemas, los cuales permiten visualizar y entender la simulación o modelización que replica de alguna manera algún referente de la realidad (Adúriz-Bravo, 2005; Giere, 1999)

Los significados, antes señalados, dan cuenta de un aspecto conceptual y otro metodológico. La unidad conceptual-metodológica provee una capacidad organizativa, operativa, heurística, explicativa y predictiva sobre la base de una postura teórica, ideológica y científica que permea unidad y movimiento entre los aspectos que guardan relación entre sí. Ésta se construye generalmente por analogías, mecanismo que contextualiza cierta porción de la realidad o mundo, ideas, un fenómeno, objetos materiales o mentales. Una analogía detecta el rasgo o propiedad o regularidad que se materializa con una representación de tipo mental, verbal, material, en un tiempo y lugar históricamente definido.

La elaboración del modelo, depende de la acción prudente, creativa e imaginativa, situada en fenómenos que presenten regularidades transversales, las cuales implícitamente (o explícitamente) dan cuenta de reglas, leyes, principios, comportamientos y otros susceptibles de ser modelizados (Lombardi, 1998; Moulines, 1982). Ésta operación, requiere de la observación, análisis-síntesis, inducción–deducción e inferencia por analogía, intuición, revelación, argumentación e investigación sobre las proposiciones asociadas a los acontecimientos, hechos o fenómenos susceptibles de registro de sus componentes, para ser interpretados, determinar las posibles relaciones lógicas entre ellos, y por aproximaciones sucesivas representarse simbólicamente de manera simple, como un hecho ejemplar o esquema, una maqueta, un gráfico, signo, símbolo,…que exprese sólo lo invariante, en tanto resulte ilustrativo y explicativo (Giere, 1999), de los comportamientos que son difíciles de detectar y explicar en su movimiento el comportamiento de cierta la realidad, con dirección, control y anticipando los nuevos momentos a suceder según la lógica que simula esa realidad.

El concepto de modelo ha sido usado con fines didácticos o científicos, tiene amplio espectro en las ciencias de la educación, por propiciar la interpretación, la reflexión anticipadora, la capacidad de simbolización y representación de lo concerniente al proceso de enseñanza-aprendizaje, constituyendo una de las herramientas formativas más valiosas para mejorar tanto el conocimiento práctico como la teorización de la tarea didáctica (Medina, 2003). En la literatura, el término modelo refiere a modelo educativo, modelo didáctico, modelo de aprendizaje (Joyce y Weil,1985; Polechano, 2001), modelo de enseñanza (Gilbert, Boulter y Elmer, 2000; Joyce y Weil,1985), modelo cognitivo (Izquierdo, 1999), modelo pedagógico (Flórez, 1994), modelo mental (Johnson-Laird, 1983 ) y otros.

Las interpretaciones del término modelo en el campo de la Educación y la Pedagogía, son diversas y algunas de ellas alejadas de los requerimientos de legitimidad, propiciando la simplicidad de su significado en el proceso de enseñanza-aprendizaje, reduciendo lo teórico-metodológico a lo instrumental, que resta importancia a la estrecha relación del modelo con la teoría y el concepto de paradigma, fundamental para la significación teórica-metodológica pilar de su concepción. En ese sentido, un modelo de enseñanza-aprendizaje se consolida teórico-metodológicamente si se sustenta en: (a) concepción de educación, (b) concepción del hombre, (c) concepción de enseñanza, (d) concepción del aprendizaje, (e) concepción de cultura (f) estrategias de enseñanza-aprendizaje, (g) recursos o medios y (h) método de interpretación. Estos requerimientos mínimos están en correspondencia a un paradigma y su finalidad es orientar al modelo en la formación del hombre que se quiere formar, insertado en enfoques pedagógicos coherentes con el contexto histórico social existente.

El marco operativo del modelo es la estrategia, que metodológicamente permite la comprensión, interpretación, transferencia y anticipación de comportamientos relacionados con el proceso de enseñanza-aprendizaje. Ésta inclusión, visualiza la amplitud conceptual del término modelo que es general y la estrategia particular.

El concepto de estrategia deviene del contexto militar, posee la figura del estratega, él prevé las acciones, proyecta, decide, dirige y ordena a sus subordinados el cumplimiento de su estrategia, la cual tiene en su base un plan de acciones con sentido para guiar, orientar y coordinar las operaciones para llegar a una meta. Éste concepto tiene amplia aplicación en la educación, en especial en la formación del hombre.

En el proceso de enseñanza-aprendizaje, se concibe dirigida hacia el logro de un objetivo (meta, propósito o competencia) de aprendizaje, en un tiempo determinado. La estructura metodológica refiere a un sistema que posee un conjunto finito de objetos llamados indistintamente en la literatura como actividades, procedimientos, escenarios, momentos, fases, etapas, acciones, operaciones, reglas, pasos y otros; los cuales están interrelacionados por medio de una trayectoria consciente, intencional, deliberada, dirigida, planificada, organizada, ordenada, optimizada, formalizada, orientada, controlada, evaluada y rectificada; que incorpora con significado técnicas, métodos y recursos como la tarea, para activar el aprendizaje en el contexto social-individual el potencial cognitivo-afectivo y creativo, en tanto canaliza el motivo, el interactuar, la cooperación, la socialización, la reflexión, heurística, adquisición, almacenamiento, retención, recuperación, comprensión y uso de la nueva información, en correspondencia a ciertos métodos y técnicas.

El método es el medio fundamental en los procesos de dirección del proceso de enseñanza-aprendizaje o en el proceso de investigación, da la trayectoria para un proceso ordenado de acciones u operaciones que devienen de la concepción de estrategia. Es una lógica instrumental fundamentada con el sentido de la razón que ofrece el camino concreto o los pasos necesarios para alcanzar el objetivo (meta, competencia) o interpretar alguna realidad.

El método se entreteje con la estrategia, traza el camino y la estrategia justifica el qué, para qué, cómo y por qué de todas las acciones, para que estas tengan significado y sentido. Este encaje, justifica la presencia del método en toda estrategia, por indicar el camino o guía con orden para ejecutar acciones u operaciones y en lo tardío alcanzar un resultado previsto en la práctica pretendida por la estrategia.

El método ofrece un camino para llegar a un fin, mas no es su competencia cómo recorrerlo. Esta interpretación distingue el ámbito metodológico entre técnica y método, porque "El método traza el camino y la técnica muestra cómo recorrerlo" (Nérici, 1980, p. 36). Sin embargo, tienen en común la realización de procedimientos, que en términos vigotskianos son eslabones para realizar acciones u operaciones particulares y completa la forma de asimilación del contenido de acuerdo a ciertas condiciones e intenciones del contexto en que se desarrolla (Labarrere, 1988).

En general, las técnicas y métodos son herramientas con sentido y significado instrumental, respectivamente, dentro de un proceso de encaje con otros recursos metodológicos para fortalecer la organización, la interacción y concientización del cómo recrear y transformar las nuevas prácticas canalizadas en un proceso consciente de apropiación-asimilación del conocimiento, objeto de la estrategia. En esa dirección, esos recursos, son vías, procedimientos y medios sistematizados de organización y desarrollo de la actividad con el fin de lograr el aprovechamiento óptimo de sus posibilidades cognoscitivas y afectivas (Viñas, 1999), insertados en la reflexión, la comunicación, la interacción, la cooperación, el aprendizaje con significado, el espíritu investigativo, la independencia cognoscitiva, la creatividad, y el autoaprendizaje; dirigidos a promover actitudes favorables hacia el conocimiento, el desarrollo de los procesos lógicos del pensamiento, la adquisición y producción de conocimientos, formación y desarrollo de habilidades, los valores y actitudes, y otros aspectos intervinientes del conocimiento no específico.

Recapitulando lo dicho sobre los términos de paradigma, modelo, estrategia, método y técnica, se concluye la existencia de un orden de inclusividad entre ellos que va de lo general (paradigma) a lo particular (técnica). Éstos, en sistema, crean, validan o consolidan nuevas visiones de mundo, y sobre la base del MCROSS antes explicitado, a manera de ejemplo, se presenta una síntesis de lo concreto pensado de esos términos con el Enfoque Histórico Cultural, el cual constituye uno de los enfoques teórico-metodológicos de vanguardia para el desarrollo integral del ser humano.

Una mirada de los términos paradigma, modelo, estrategia, método y técnica en el Enfoque Histórico Cultural (EHC)

El EHC constituye un conjunto de ideas fundamentado en la concepción materialista-dialéctica de la psique que aboga por una lógica dialéctica, sistémica y compleja que se opone al reduccionismo del paradigma epistemológico de la simplicidad y se aproxima cualitativamente al paradigma de la complejidad (Castellanos, 2004 ; Rodríguez, 2010). Este enfoque ofrece una concepción del hombre, de la educación, del proceso de enseñanza-aprendizaje, su finalidad así como el modo en que debe organizarse y realizarse el mismo.

Su base filosófica es el materialismo dialéctico e histórico, el cual parte del historicismo que origina los procesos psíquicos a partir del desarrollo de la sociedad, y que la psiquis humana es el resultado de la historia social de su construcción (Mora, 2005), por lo que su teoría fluye en una concepción materialista-dialéctica de la psique, la cual es inherente al hombre como ser material, (que tiene un cerebro), pero a la vez como un producto social, resultado del desarrollo histórico de la humanidad. Materialista en el sentido que para examinar el desarrollo del pensamiento cognitivo debemos proceder a un análisis histórico, el cual permite examinar las condiciones y la trayectoria que produjeron el estado actual de un objeto. Dialéctico porque está centrado en el razonamiento, argumentación, exposición y confrontación de contrarios en el trabajo del desarrollo cultural (usando herramientas para transformar el objeto) como la base de todo conocimiento humano; asimismo, se centra en el vínculo inseparable actividad-comunicación, como categorías psicológicas para explicar el desarrollo humano.

Para explicar cómo ocurre el proceso de formación del pensamiento teórico, este enfoque teórico se apoya en el método de desarrollo histórico-lógico del conocimiento y el método de la lógica dialéctica, los cuales conducen el estudio considerando su historicidad en el movimiento que caracteriza al pensamiento en el proceso de la obtención del conocimiento científico. La exigencia fundamental del método dialéctico es abarcar en la investigación el proceso de desarrollo de alguna cosa en todas sus fases y cambios, desde que surge hasta que desaparece, es lo que significa en esencia descubrir su naturaleza, su esencia, ya que sólo en movimiento el cuerpo muestra lo que es (Vigotsky,1987) en la ascensión de lo abstracto a lo concreto pensado Davidov (1986).

El EHC, se fundamenta con un conjunto de figuras que abordaron el origen y desarrollo del psiquismo, al papel de la conciencia, la cuestión del aprendizaje y su modelación, entre otros. Figuras como L.S. Vigotsky, a A.N. Leontiev, A.R. Luria, V.P. Zeigarnik, P.Ya. Galperin, A.V. Zaporoshetz, Talízina, entre otros, los cuales realizaron importantes contribuciones en esta teoría.

Entre los modelos resultantes en esta teoría, figuran la concepción del proceso de conocimiento del enfoque histórico cultural, los momentos estructurales y funcionales de la actividad, el modelo de organización de la actividad cognoscitiva del estudiante, y la formación de las acciones mentales. Tomando en consideración estos modelos, se elaboró científicamente el concepto MCROSS y su estrategia didáctica (Mora, 2005) que se expone a continuación.

La estrategia didáctica MCROSS, tiene como referentes conceptuales y operacionales más importantes, el concepto MCROSS, la concepción de enseñanza, aprendizaje, relación alumno-profesor, momentos de la estrategia, principios psicológicos y pedagógicos, concepción de enseñanza-aprendizaje y las operaciones didácticas. En ese sentido, la estrategia se concibe para que el mismo estudiante elaborare bajo la coordinación, orientación, dirección del profesor y la ayuda de sus compañeros de aula, un Marco Conceptual Referencial Operativo con Significado y Sentido (MCROSS) del objeto de conocimiento. En ese sentido la estrategia es un sistema de acciones u operaciones, que se planifican, ejecutan, controlan, evalúan y rectifican, todo ello, dirigido a la creación, consolidación y reconstrucción retrospectiva en el proceso de formación de un MCROSS cognitivo y cultural, para ello tiene en cuenta principios, métodos científicos y los distintos componentes del proceso de enseñanza –aprendizaje (Mora, 2005).

EL MCROSS se conceptualiza como un conjunto de conocimientos, habilidades, necesidades, motivos y formas de actuar y pensar del estudiante en relación con el objeto del conocimiento tratado de manera de satisfacer una necesidad de su formación profesional. A través de la estrategia didáctica es dinámico, se desarrolla en forma de espiral en tres momentos: creación, consolidación y reconstrucción retrospectiva. La creación MCROSS es el momento inicial de configuración del grupo como objeto y sujeto de formación en relación a la apropiación del objeto. La consolidación es un momento grupal e individual, en el marco de la actividad-comunicación que genera un movimiento de elaboración en el sujeto individual del MCROSS del objeto de estudio y la reconstrucción retrospectiva es el momento espiralado en el marco de la actividad-comunicación que hace consciente al estudiante y al grupo del proceso histórico-lógico de la asimilación del MCROSS del objeto tratado.

La enseñanza dirige el desarrollo del estudiante-grupo, se concibe sobre la base del proceso de orientación del aprendizaje del estudiante por parte del profesor, quien propicia las condiciones y crea las situaciones de aprendizaje en las que el estudiante se apropia de los conocimientos y forma las habilidades y motivos que le permiten una actuación responsable y creadora. En cambio el aprendizaje tiene su génesis en el proceso de construcción por parte del sujeto que aprende de conocimientos, habilidades y motivos de actuación, y se produce en condiciones de interacción social, en un medio sociohistórico concreto sobre la base de la experiencia individual y grupal que lo conduce a su desarrollo personal, bajo la relación interactiva y creativa de la unidad profesor-alumno.

En la relación profesor-alumno, la función principal del profesor es la de guiar, coordinar y orientar el proceso de aprendizaje del estudiante, tomando en cuenta sus motivos, intereses y potenciando sus posibilidades de desarrollo. El estudiante es considerado sujeto y objeto de su propio aprendizaje, asume una participación protagónica y responsable de su propio proceso de formación, bajo principios rectores de la estrategia.

Los principios psicológicos refieren a la unidad actividad-comunicación, al tránsito del plano interpsicológico al intrapsicológico, la unidad afectivo-cognitivo, la trama vincular como fuente de desarrollo del estudiante, la interrelación enseñanza-desarrollo y la unidad grupo-individuo. Los Principios Pedagógicos consideran al estudiante como sujeto y objeto de su desarrollo; el desarrollo del grupo como sujeto de la actividad de enseñanza y aprendizaje; el profesor como coordinador, orientador y dirigente del proceso de enseñanza-aprendizaje; la unidad dialéctica entre teoría y práctica; la enseñanza desarrolladora, y el carácter formativo y educativo de la evaluación.

Sobre la base de los principios anteriores, se asume como sustento teórico-metodológico principal de la estrategia, la concepción de enseñanza-aprendizaje, siguiente: actividad social compartida, desarrolladora, potenciadora, espiralada, comunicativa, y transformadora entre profesor-estudiante, de nuevas formas de pensar, sentir y actuar en relación a un MCROSS de aprendizaje; que consiste en un sistema de acciones u operaciones en su forma material, materializada, verbal externo e interno, mediada por un proceso de reflexión y elaboración conjunta, en su relación dialéctica, que permite superar con significado y sentido a la contradicción, entre lo viejo y lo nuevo, en el proceso de apropiación consciente de un MCROSS de aprendizaje; orientado hacia el pleno desarrollo cognitivo-afectivo, la producción y reproducción del conocimiento mediante el cual el estudiante asimila los modos sociales de actividad y de interacción, así como los fundamentos científicos del conocimiento bajo condiciones de orientación, control, rectificación e interacción social en un contexto socio-histórico-concreto.

La instrumentación de la estrategia es conducida por las operaciones didácticas de planificación, ejecución, control, evaluación y de rectificación, de tal manera que el grupo y el estudiante tomen conciencia de sí, de sus acciones, creencias, necesidades y habilidades, a través del otro. La planificación constituye para el profesor el eje rector de la estrategia con significado (desde lo psicológico) y sentido (desde lo didáctico). La ejecución consiste en un sistema de acciones y operaciones sobre el objeto en su forma material, materializada, verbal externo e interno, mediada por la tarea y el uso del lenguaje, el cual promueve un proceso de reflexión y elaboración conjunta, en su relación dialéctica con el proceso de apropiación de un MCROSS. El control, sigue la marcha de la acción que permite confrontar los resultados obtenidos con los modelos dados o comparar lo que se realiza con lo que se proyecta. La evaluación tiene un carácter formativo, se da durante el proceso de ejecución en los distintos momentos de la apropiación del MCROSS y valora en qué medida se logran los niveles de apropiación del objeto tratado, sobre la base de los indicadores establecidos. Finalmente, el momento de rectificación remedia, en buena medida, lo no previsto en la planificación y la realidad de la ejecución.

La ejecución de la estrategia se realiza a través de la tarea, la cual en su plano interno se sistematiza siguiendo las bases orientadoras de la acción (BOA), que sirven de métodos para la formación de las acciones mentales, entre ellas se encuentran la BOA 2 y 3 (Galperin, 1988). La BOA 2 es concreta, completa y preparada, contiene modelos de la acción y de su producto, con todas las indicaciones de cómo ejecutar la acción correctamente con un nuevo material. En cambio la BOA 3 es general, completa e independiente, se le da un método general (principio de la actividad) al alumno para que lo transfiera o traduzca y genere casos particulares siguiendo una relación relativamente invariable. Estos métodos se entretejen, oportunamente con otros métodos y técnicas. Entre los métodos figuran: de discusión con sus variantes (discusión plenaria, en grupos pequeños, Phillips 66, discusión reiterada, conferencia, confrontación, mesa redonda y panel), de situaciones con sus casos (situación, conflicto, familiarización progresiva con el caso), de incidentes (sencillos, programado simple y programado complejo, laberinto de acción), juego de roles, simulación y problémico (exposición problémica, conversación heurística, búsqueda parcial e investigativa). Entre las técnicas: de rejilla, de concordar discordar, de palabras claves y aprendizaje en parejas, de presentación, expectativas, encuadre, el riesgo, reformulación, abanico de roles, juego cara a cara y escribe tres palabras, otras (Colectivo de autores, 1998).

Finalmente, el MCROSS de modelo, estrategia, método y técnica, en el marco de la actividad nos ofrece el aspecto concreto pensado sobre estos términos, los cuales permiten en sistema materializar una propuesta didáctica para la enseñanza-aprendizaje siguiendo una dinámica transformadora y desarrolladora, que es considerada en la estrategia didáctica presentada, la cual en la práctica propicia niveles de autonomía, autorregulación, autocontrol e independencia siguiendo la espiral dialéctica en su proceso de asimilación.

A manera de conclusión, el modelo como una herramienta intelectual tributa al paradigma para abordar los problemas educativos, estableciendo el vínculo entre el análisis teórico y la intervención práctica, con vista a la transformación de la realidad o en su defecto generar nuevas ideas para la creación de nuevas herramientas de intervención, a través de estrategias, métodos y técnicas que integran un sistema con funciones metodológicas diferentes y se conjugan como una red compleja y rica de representaciones u operaciones ubicadas en numerosos órdenes y conectadas entre sí según las necesidades de la investigación y la propia actividad. Esta integración con significado y sentido, minimiza la incertidumbre conceptual y metodológica sobre esos términos, la cual reduce la confusión sobre sus significados, propiciando un uso adecuado en el proceso de enseñanza-aprendizaje y permitiendo la comprensión del mecanismo del conocimiento. En esa dirección, lo concreto pensado del MCROSS tratado que ofrece el EHC, constituye una fuente teórica y metodológica valiosa para el diseño de investigaciones implicadas en el desarrollo humano, la enseñanza y el aprendizaje. En ese sentido, la estrategia didáctica MCROSS sirve de referente para combinar con significado y sentido pedagógico los métodos y técnicas participativas. Ésta materialización de los términos modelo, estrategia, método y técnica, dan cuenta del alcance local y global de ellos.

Referencias

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Autor:

Ángel Mora

UNEG