La influencia de las vías de ingreso sobre el rendimiento académico y las bajas universitarias en la filial de Ciencias Médicas de Remedios (página 2)
Enviado por Mar�a Margarita Sentmanat Garc�a
A partir del proceso de reestructuración organizativa del Estado y la implantación de un nuevo sistema de dirección económica, se crea en 1976 el Ministerio de Educación Superior (MES) como expresión de la importancia que el gobierno cubano le concede a la enseñanza universitaria y con ello se amplió sustancialmente el número de carreras y de instituciones de educación superior con una mayor distribución territorial, reforzándose el papel de las mismas en el desarrollo socioeconómico del país y de cada provincia.
En la segunda mitad de la década del 80, se desarrolla con un ritmo menor el Sistema de Educación Superior en Cuba, caracterizándose este período por su consolidación y perfeccionamiento. Por ejemplo, se orienta la formación profesional hacia un perfil amplio cuya base le ofreciera al graduado una mejor adaptación a los cambios dinámicos del mundo laboral y en este marco se adapta la estructura de carreras en función de las demandas; se potencia la superación de los grandes contingentes de profesionales que se graduaban y se crea un fuerte sistema nacional de educación posgraduada que diera respuesta a la superación continua de dichos profesionales; comienzan a impartirse los primeros cursos universitarios en la modalidad de Educación a Distancia lo que también marcó un hito en el camino de universalizar la universidad; se fortalece la extensión universitaria a través de diversas formas, así como la evaluación externa y su vínculo con los procesos de autoevaluación institucional.
A partir de finales de la década del 80 y mediados de los 90, la economía cubana recibió un severo impacto por la desaparición de los países socialistas de Europa del Este y en particular de la Unión Soviética, lo que inevitablemente afectó a la educación superior. La política del Estado de preservar los logros alcanzados por la sociedad cubana, determinó que, aunque la matrícula universitaria de pregrado se redujo significativamente, todos los profesores se mantuvieran en sus puestos de trabajo, no se cerró ni un aula ni una carrera, y la Universidad cubana siguió considerándose como un factor esencial para el país, comprometida con su desarrollo. En esta difícil etapa, a pesar de las limitaciones, por ejemplo, se logró defender el modelo de universidad científica, tecnológica y humanista que se había propuesto con un fuerte vínculo entre la docencia de pregrado y postgrado; se continuó con el perfeccionamiento de los planes de estudio y se incrementó la utilización de los métodos activos de enseñanza – aprendizaje; decreció la matrícula de pregrado (1995/1996 unos 135 mil estudiantes), pero creció la matrícula de postgrado (de 60 000 en 1990/1991 a unos 100 000 participantes como promedio anual entre 1994/1995 y 1999/2000); se incrementó el número de maestrías que se ofertaban; la formación de doctores se estimuló y avanzó con cambios apreciables, aumentando además la cooperación internacional en todas las instituciones universitarias.
Para fines de los 90, el inicio de la recuperación económica del país, daría como resultado en el 2000, la conceptualización de uno de los paradigmas actuales de la educación superior cubana: "Universidad para todos durante toda la vida". No obstante, a pesar de existir un incremento en la cobertura para cursar estudios universitarios por parte de la población, se comprendió que todavía resultaba insuficiente y que no se lograba una apertura óptima de las posibilidades reales para que los sectores de la sociedad históricamente menos favorecidos pudieran no solo acceder, sino concluir su formación universitaria con calidad.
Por ello, el presente milenio encuentra el reto de la continuidad del proceso de universalización de la educación superior cubana con una nueva escala cuantitativa y cualitativa de mayor alcance a la de etapas anteriores, que apunta a garantizar incrementos en los niveles de equidad y justicia social al llevar la universidad a todos los rincones del país, a las comunidades donde las personas se desempeñan, elevando la pertinencia de los estudios superiores y el arraigo de los profesionales a su localidad.
Y es así que las instituciones de educación superior cubanas están hoy ante la mayor oportunidad y al mismo tiempo el mayor reto que tal vez hayan tenido que enfrentar en los más de cuarenta años ya de revolución educacional. Al respecto, el Ministro de Educación Superior en este período, Fernando Vecino Alegret planteó también refiriéndose a ese gran reto: "En estos momentos estamos enfrascados en la Universalización de la Universidad. Nos hemos propuesto desde hace casi un lustro una estrategia mayor de enriquecimiento cultural para todo el pueblo".[1]
La etapa actual ha dado en llamarse la Nueva Universidad Cubana, que garantiza, entre otros, la ampliación de las oportunidades de acceso a la universidad y de multiplicación y extensión de los conocimientos a una gran masa de jóvenes y adultos, los cuales por razones diversas no habían iniciado o continuado sus estudios y ahora tienen la posibilidad de culminarlos y ello se convierte en una concreta contribución de la educación superior en la elevación de la cultura general integral del pueblo.
Por tanto, en el período 2000 – 2004 la universidad cubana se consolida en todos los municipios del país y en otras localidades y poblados; para ello se apoya en una gran cantidad de profesionales en ejercicio en cada uno de los territorios y en las instalaciones disponibles con las condiciones mínimas necesarias para el desarrollo de sus actividades, estableciendo una fuerte alianza con instituciones productivas y de servicios y organizaciones del entorno.
El desarrollo vertiginoso hacia la Universalización de la Universidad ha significado enfrentar nuevos desafíos dirigidos a cambiar la concepción tradicional y aplicar un estilo de trabajo más creador, activo y participativo. [2]
En el curso académico 2004-2005, la Universidad Cubana cuenta en su estructura con 64 Instituciones; posee 938 Sedes Universitarias Municipales (SUM) que abarcan los 169 municipios del país; se imparten 94 carreras de pregrado en el ámbito nacional y de ellas 46 en las SUM, lo que significa que territorialmente se ha ampliado sustancialmente la oferta educativa a la población; la matricula alcanza 380 000 estudiantes y de ellos 233 555 están insertados en las SUM; se dispone de más de 27 000 académicos a tiempo completo y más de 82 211 profesionales que trabajan a tiempo parcial como profesores en dichas Sedes y que provienen de los diferentes sectores de la economía y jubilados, cifra que continuará aumentando en los próximos años; más de 400 000 profesionales están cursando actualmente actividades de postgrado.
En el curso académico 2005-2006 alrededor de 500 000 estudiantes se matricularon en la educación superior.
Dentro del extraordinario reto que se le plantea a la Universidad Cubana como parte de sus responsabilidades sociales se sitúa el pleno acceso y la elevación de los niveles de permanencia y de egreso, donde ya se observan los primeros resultados favorables, demostrando que es posible romper los tradicionales esquemas elitistas y excluyentes que sustentan que sólo una pequeña parte de la sociedad puede acceder a una educación superior de calidad, con excelencia académica y pertinencia integral de sus resultados en lo económico, lo social y lo cultural, asumidas con un sentido crítico, renovador y trasformador.
Precisamente en este contexto, vale la pena señalar que para la educación superior cubana la ampliación de oportunidades de acceso y la elevación de los índices de permanencia y egreso, tienen un sentido altamente democrático y de justicia social, sobre todo para aquellos sectores de la población menos favorecidos, defendiendo la aspiración de que todo el que alcance el nivel medio superior y desee estudiar en la Universidad, pueda hacerlo. Este paradigma de la formación de los profesionales en la Nueva Universidad Cubana se refuerza cuando se afirma: "No se puede hablar de libertad ni de democracia, sin igualdad de posibilidades para todos".[3]
Una investigación realizada para evaluar la eficiencia académica en las carreras de Ciencias Médicas (Medicina, Estomatología y Licenciatura en Enfermería) en los Cursos Regulares Diurnos durante el período 1987/88 a 1998/1999 (12 años), considera como indicadores principales la promoción total y la eficiencia académica en el ciclo normal de estudio en cada curso académico, en los Centros de Educación Medica Superior y a nivel nacional.[4]
El estudio acerca de la incidencia de las bajas por insuficiencia docente en la carrera de Medicina (6 años de estudios) en el Instituto Superior de Ciencias Médicas de La Habana durante un período de diez años – desde 1994 hasta el 2004-, señala, entre otros resultados, que los mayores índices de baja se presentan en los primeros años de estudios. En el primer año de estudio se produjo el 44.5 por ciento del total de las bajas; en el segundo año el 16.1 por ciento y desde el tercero al sexto año se comportó en un rango menor (entre el 8 y 12 %). Esto ratifica que precisamente en el ciclo básico de estudio es donde se produce la mayor cantidad de bajas por insuficiencia docente. Se resalta también que en la carrera de Medicina los factores asociados que con mayor frecuencia dieron lugar a las bajas en dicho período fueron la insuficiencia docente (39.4 %) y las licencias de matrícula que alcanzaron el 22.3%. [5]
Otras indagaciones acerca de la evaluación de la eficiencia académica se han realizado a partir de la aplicación del Modelo de Cohorte[6](Cohorte Imaginaria), que ofrece la posibilidad de analizar, tomando como base 27 indicadores, la trayectoria de un conjunto de estudiantes que ingresan al primer año de estudio, en un curso académico determinado, y transitan por el sistema con características específicas hasta que se gradúan o causan baja definitiva. El enfoque utilizado incluye también la valoración de un grupo de expertos sobre los factores de influencias – positivos o negativos – en el comportamiento de los indicadores resultantes.
Las transformaciones que se vienen produciendo en la educación superior cubana, a partir de la introducción de nuevas valoraciones sobre la equidad y la justicia social, han provocado profundos cambios en los conceptos relacionados con el pleno acceso a los estudios superiores.
Como ya ha quedado expuesto con anterioridad, en la actualidad tiene lugar una nueva etapa en los estudios universitarios, cualitativamente superior, que redimensiona y amplía la misión de la universidad y que se caracteriza por cambios que transforman las concepciones tradicionales de los procesos sustantivos y a la vez incorpora todo lo ya alcanzado, dando lugar al surgimiento de una Nueva Universidad, acorde con los requerimientos sociales.
Al respecto, se asevera que la idea del pleno acceso, permanencia y egreso de la educación superior cubana supone continuar identificando nuevas posibilidades, utilizando para ello las fortalezas encontradas en el proceso de llevar la universidad a todos los municipios del país, así como a otras localidades donde residen o trabajan las personas que cursan esos estudios. Así el Dr. Juan Vela Valdés, Ministro de Educación Superior planteó que "… la educación superior cubana ha ganado mayor pertinencia. Ante todo, porque se están creando las condiciones para que la distribución de la matrícula universitaria se corresponda mejor con las proyecciones de desarrollo del país. Es más pertinente, asimismo, porque se ha ampliado significativamente el acceso a la universidad" [7]
Uno de los retos mayores de la universalización en su nueva etapa es lograr la permanencia y la culminación de estudios de los estudiantes, que en su gran mayoría estudian y trabajan, fundamentalmente en programas sociales que se han desplegado en el último quinquenio. En tal sentido, se ha diseñado un modelo pedagógico que permita enfrentar dicho reto. Este modelo se desarrolló a partir de la experiencia acumulada en los estudios a distancia tradicionales en Cuba y de las condiciones materiales mínimas requeridas, buscando combinar las nuevas tecnologías con la mayor economía de recursos, aprovechando toda la infraestructura ya creada por la Revolución en los diferentes territorios. El modelo resultante pudiera enmarcarse en la nueva corriente conocida como "blended" que comienza a imponerse internacionalmente y ha sido fruto de la labor integrada de los principales Organismos de la Administración del Estado con responsabilidad en los estudios de tercer nivel, o sea los Ministerios de Educación Superior (MES), Educación (MINED), Salud Pública (MINSAP) y el Instituto de Deportes, Educación Física y Recreación (INDER), concebido de forma sustentable, a partir de las posibilidades reales de nuestro sistema educativo; de modo que asegure un nivel equivalente al de los Cursos Regulares Diurnos y con una alta racionalidad en el uso de los recursos humanos y materiales básicos requeridos.
El proceso de formación está concebido para ser desarrollado en las cabeceras municipales, y localidades donde residen los que estudian. Para lograrlo, se ha requerido de una estrecha cooperación entre las universidades y las autoridades territoriales, de modo que todos participen, con igual grado de compromiso, en la búsqueda de las mejores soluciones.
Muy vinculado con el concepto de universalización, como se ha señalado anteriormente, está la creación de las Sedes Universitarias Municipales (SUM), a partir de las instalaciones que reúnen las condiciones adecuadas para ello. En este sentido, resulta decisiva la comprensión de que los recursos humanos, físicos y materiales fundamentales para el desarrollo de dichas Sedes son los que ya existen en cada uno de los territorios.
Así en el 6to Congreso Internacional de Educación Superior, Universidad 2008, el Dr. Juan Vela Valdés significó que "la universalización de la educación superior en los municipios no ha producido un debilitamiento del sistema, ni una disminución de la exigencia académica. La universalización ha propiciado una toma de conciencia mayor en la comunidad universitaria de la necesidad de cambiar todo lo que deba ser cambiado para garantizar la calidad que la sociedad espera de sus instituciones de educación superior." [8]
El modelo pedagógico se centra en el aprendizaje de cada estudiante y lo concibe sobre la base de tres componentes principales:
1. El sistema de actividades presenciales.
2. El estudio independiente.
3. Los servicios de información científico-técnica y docente.
Es importante reiterar que en la concepción de la nueva universidad hay que destacar la labor del tutor como guía y facilitador y que una característica que ha distinguido la Educación Superior cubana ha sido la formación integral de nuestros jóvenes para lograr el desarrollo armónico tanto en la formación humanística, política e ideológica, expresión del compromiso con la Revolución y el socialismo.
En el pasado curso escolar la retención escolar concluyó en 98,6 % y una promoción general en ordinarios de 94,8 %; subiendo en el primer extraordinario al 99,0 %.
El curso 2005-2006 incorpora en las Tecnologías de la Salud los perfiles de Laboratorio Clínico, Imagenología, Administración y Economía de la Salud, Atención Estomatológica, Servicios Farmacéuticos y Prótesis con subsedes en los municipios de Caibarién y Camajuaní, además de continuar la carrera de Enfermería con el nuevo modelo pedagógico de primero a tercero y quinto año, más un tercer y cuarto año de curso para trabajadores, mientras que Medicina continúa de primero a sexto año. A manera general aprobaron en examen ordinario 99,5 % y en extraordinario el 99,7%.
En el 2006-2007 contamos en la Filial con 10 perfiles de las Tecnologías de la Salud, o sea, este curso no tenemos el perfil de prótesis, sin embargo además de contar con todos los años de las carreras de Enfermería y Medicina, se incorpora la carrera de Estomatología con un tercer año, obteniéndose una promoción en ordinario de 96,8 % y en extraordinario del 100%, con una retención del 92,3 %.
El curso 2007-2008 mantiene los 10 perfiles de las Tecnologías de la Salud como el anterior al igual que todos los años de las de las carreras de Enfermería y Medicina, además de incorporar a Estomatología un primer y cuarto año, y la carrera de Sicología con un primer año de nuevo modelo pedagógico. Este curso que contó con una matrícula inicial de 685 estudiantes logró según los datos ofrecidos por Secretaría Docente una retención del 96,7 % con una promoción general en ordinario del 94,2 % y en extraordinario del 96,6 %.
Es significativo aclarar que cada curso a partir del 2003-2004 se gradúan de técnicos básicos los estudiantes de las carreras de Enfermería y de las Tecnologías después de concluir su primer año graduándose hasta el momento 384, y desde el curso 2005-2006 hasta la fecha técnicos de estas carreras 212.
Con la universalización de la enseñanza en el municipio de Remedios se graduaron por primera vez en el curso 2007-2008, 75 profesionales formados en nuestra sede universitaria de las licenciaturas de Enfermería y de las Tecnologías de la Salud en : Gestión de la Información en Salud, Higiene y Epidemiología, y Rehabilitación Social y Ocupacional, lográndose la formación de profesionales integrales de las ciencias médicas capaces de ofrecer un servicio de calidad dentro y fuera de Cuba.
Conclusiones
1. El desarrollo histórico de la educación superior cubana se remonta a mediados del siglo XVII con una tendencia a la escolástica, siendo el presbítero Félix Varela quien en la segunda mitad del siglo XIX promueve una enseñanza científica y experimental.
2. A principios del siglo XX, la enseñanza universitaria recibió una importante influencia del insigne cubano Enrique José Varona, quien transformó el proceso de enseñanza en Cuba difundiendo la función social de la educación.
3. A partir del triunfo revolucionario el Estado cubano ha dado una alta prioridad a la educación como premisa fundamental para impulsar el desarrollo económico-social y en particular la formación de una cultura general integral en la población, que se materializa en el sistema universitario con la municipalización de la enseñanza propiciándose la creación de la Filial de Ciencias Médicas de Remedios en el año 2003
Bibliografía
1. Almuiñas Rivero, J. L. y otros. El Modelo de Cohorte: Un Instrumento de Evaluación. Revista Cubana de Educación Superior. Vol. 14. No. 2, 1994
2. Carreño, R, y otros. Eficiencia Académica en las Carreras de Ciencias Médicas y Centros de Educación Médica Superior. MINSAP. 2000.
3. Castro Ruz, F. Discurso pronunciado en el acto organizado para honrar a los mártires del 13 de marzo de 1957. Escalinata de la Universidad de La Habana, 1969
4. ———————– Intervención en el II Taller sobre Universalización de la Educación Superior.. Enero 2002. Universidad de La Habana. Periódico Granma, 5 de enero de 2003.
5. ———————-Discurso Acto de graduación del Curso de formación emergente de técnicos de la salud del Instituto Politécnico Salvador Allende Periódico Granma, 18 de septiembre de 2003.
6. Centro de Estudios para el Perfeccionamiento de la Educación Superrior Cubana. Estudio sobre las bajas y repitencia en la Educación Superior. La Habana. 2003.
7. Delgado García, G. Cuaderno de Historia de la Salud Pública. Editorial Ciencias Médicas. La Habana. 1996.
8. Hernández D. y otros. Análisis de la Variable Eficiencia Académica que justifica un cambio planificado en el Proceso Docente Educativo en el Instituto de Ciencias Medicas de la Habana". IV Taller Sobre Didáctica Universitaria. 2004.
9. Ministerio de Educación Superior: La Universidad en la Batalla de Ideas. Informe del Curso 2003-2004. Editora ENPSES. 2004.
10. ——————————————. La Nueva Universidad Cubana.
11. República de Cuba. Abril 2005. Ministerio de Salud Pública. Instrucción 43/ 2004. Área de docencia e investigaciones. 2004
12. .—————————————–. Reglamento para la organización del proceso docente educativo en los centros de educación médica superior . República de Cuba. 1988.
13. Vecino Alegret, F. La Universidad en la construcción de un mundo mejor. Conferencia Magistral en Congreso Universidad 2004.
14. Vela Valdés, Juan. La nueva universidad: necesidad histórica y responsabilidad social. Conferencia en Acto inaugural Congreso Universidad 2008..
Autora:
Lic. María Margarita Sentmanat García.
Filial de Ciencias Médicas de Remedios.
[1] Sede Universitaria: Orientada al desarrollo de actividades propias de la educación superior en áreas o territorios, en atención a sus objetivos pudiendo llegar a transformarse en otra entidad de mayor complejidad como Instituciones o Centros Universitarios. Tiene un carácter dependiente de una Institución Universitaria. Tomado de la Monografía IESALC UNESCO: La Educación Superior de Cuba en la década del 90. Editorial Félix Varela, La Habana, 2002.
[2] Filial Universitaria: Tiene un carácter dependiente a otra institución universitaria y por los niveles de servicio que debe prestar no necesariamente debe evolucionar hacia otro tipo de institución. Idem.
[3] Vecino Alegret, F.: La Universidad en la construcción de un mundo mejor. Conferencia Magistral en Congreso Universidad 2004. Feb 2-4. 2004.
[4] Ministerio de Educación Superior: La Universidad en la Batalla de Ideas. Informe del Curso 2003-2004. Editora ENPSES. 2004.
[5] Castro Ruz, Fidel: Intervención en el II Taller Nacional sobre Universalización celebrado el 18.1.2002 en el Palacio de Convenciones, Ciudad de La Habana. Tomado de las notas elaboradas por el Ministerio de Educación Superior
[6] Carreño, R., Salgado Lourdes. Eficiencia Académica en las Carreras de Ciencias Médicas y Centros de Educación Médica Superior. MINSAP. 2000.
[7] Hernández D. y J. L. Almuiñas Análisis de la Variable Eficiencia Académica que justifica un cambio planificado en el Proceso Docente Educativo en el Instituto de Ciencias Medicas de la Habana". IV Taller Sobre Didáctica Universitaria. 2004.
[8] Almuiñas Rivero, José L., Romero Sotolongo, B, García del Portal, J.: El Modelo de Cohorte: Un Instrumento de Evaluación. Revista Cubana de Educación Superior. Vol. 14. No. 2, 1994.
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