La organización de la sociedad en que vivimos requiere que haya producción, salarios y que las personas, materiales y maquinarias se muevan. Con esto como base, es necesario que las cosas sigan en movimiento y evitar los accidentes. ¿Cómo se soluciona esto? La respuesta es que cada uno tome las precauciones necesarias para evitar los accidentes que suceden como consecuencia de los movimientos que son necesarios para realizar el trabajo.
Todos sabemos que, en general, el diseño de los departamentos le corresponde a ingeniería. En algunas ocasiones, se consulta al supervisor cuando hay que diseñar un nuevo departamento o cuando se va a verificar cambios en otros. En estos casos, el supervisor tiene la oportunidad de dar a conocer su opinión sobre la distribución de la maquinaria y de los materiales.
Cuando se moderniza un departamento y se instalan nuevos equipos, se suele cambiar casi siempre el diseño del mismo. Si ustedes tienen alguna idea buena sobre cómo corregir alguna condición insegura en el trabajo, no vacilen en comunicármela, a fin de que yo pueda transmitirla al ingeniero o al departamento de mantenimiento.
Ahora hablaremos específicamente sobre los movimientos y la seguridad en la fábrica. Siempre que se cruzan en el camino de un montacargas o de una carretilla elevadora o de una carretilla de mano, en los cuales se transportan materiales, están corriendo el riesgo de sufrir un accidente. Se tiene un problema de tráfico. Si van caminando tienen que mirar por dónde van, ya que no pueden competir con los vehículos motorizados.
Muchas de las máquinas con las que se trabaja tienen partes en movimiento. Ustedes alimentan a estas máquinas con los materiales y las hacen funcionar para procesar la materia prima. La mayoría de las máquinas tienen resguardos, pero siempre hay peligros que están al acecho. A menos que todas las partes en movimiento estén completamente cerradas, siempre existirá algún peligro.
Cuando trabajen con maquinarias que tienen resguardos, ustedes tienen que complementar la protección que éstos brindan, teniendo cuidado cuando se mueven a fin de evitar lesiones producidas por los puntos de pellizco, de enganche, de corte, de aplastamiento y de rodamiento.
Los puntos de pellizco se presentan cuando dos objetos separados se mueven y convergen en un punto determinado, por ejemplo, los dispositivos de detención de la maquinaria, Ios sujetadores y retenedores.
Los puntos de enganche se presentan cuando los objetos que tienen esquinas puntiagudas, dientes y superficies ásperas están en movimiento, como por ejemplo los taladros y barrenas, ejes estriados, fresadoras y mandriles.
Los puntos de corte están presentes cuando dos objetos, uno de los cuales o ambos pueden estar en movimiento, se cruzan. Los objetos están lo suficientemente cerca uno del otro como para tener una acción de tijera, por ejemplo: cortadoras de papel, dados, cizallas.
Los puntos de aplastamiento están presentes cuando dos objetos, uno de los cuales o ambos están en movimiento, se mueven muy cerca uno del otro o están en contacto. Es posible que no estén tocándose completamente, pero el espacio que queda entre ellos puede producir lesiones por aplastamiento. Como ejemplo de estos puntos tenemos las columnas de los edificios, las paredes y todo objeto fijo o en movimiento.
Los puntos de rodamiento están presentes cuando dos objetos están en contacto y rotan uno hacia el otro, como por ejemplo los cinturones, poleas, las cadenas y Ias ruedas dentadas, las cadenas y los tambores y los piñones y cremalleras.
Es muy corriente que las partes de las máquinas se muevan cuando se está procesando material.
CHARLA N° 112
USO DE LA MAQUINARIA
Todos sabemos que en nuestra fábrica, a fin de cumplir con las metas de producción, algunos trabajadores tienen que trabajar con ciertas máquinas, supuesto, claro está, que están autorizados a manejarlas y, en consecuencia, debidamente entrenados.
Muy raramente ocurre un accidente con una máquina o una herramienta cuando son mantenidas en buenas condiciones y operadas correctamente. Los accidentes ocurren, en general, como resultado de prácticas de trabajo inseguras y de la falta de conocimiento para hacer funcionar la máquina en la forma correcta y con seguridad. En resumen podemos decir que solamente las máquinas pueden ser operadas por quien haya sido entrenado y esté autorizado pare hacerlo.
Las máquinas y las herramientas cuestan mucho dinero y se necesita gente muy experimentada y con conocimiento para repararlas. Un buen operador se enorgullece de su máquina y la trata con respeto. Sabe que si la trata bien logrará un producto de calidad, pero que si le quite los resguardos y tiene una actitud de despreocupación, la máquina puede vengarse quitándole un dedo o la mano.
Como todo trabajador sabe que el usar un equipo cuando no se está autorizado puede causar problemas, no voy a insistir sobre ese, pero sí quiero repetirles que nunca trabajen con una máquina que no conozcan.
Veamos ahora como se debe trabajar en una máquina con seguridad:
1. Siempre hay que vestirse de forma tal que la ropa no pueda ser atrapada por las partes en movimiento. La ropa, mangas, puños, corbatas y alhajas sueltas no deben ser nunca usados cerca de la maquinaria. En ciertos tipos de máquinas los guantes también pueden ser muy peligrosos;
2. Hay que mantener siempre la mente en el trabajo, el soñar despierto puede transformarse en una pesadilla. Hay que evitar las conversaciones que no están relacionadas con el trabajo, ya que las distracciones suelen ser muy peligrosas;
3. A menos que la máquina esté completamente parada y se haya colocado el candado y la tarjeta, no hay que quitar el resguardo; antes de arrancar la máquina hay que asegurarse de que el resguardo se ha colocado nuevamente;
4. No es seguro trabajar en una máquina cuando uno no se siente bien. Hay que informar inmediatamente cualquier problema físico que se esté padeciendo e incluso si se está preocupado emocionalmente;
5. Antes de poner la máquina en funcionamiento hay que asegurarse de que ésta está en buenas condiciones y que todos los resguardos están en su lugar;
6. No hay que tratar de hacer ningún arreglo en la máquina, y hay que informar lo que está sucediendo, a fin de que la persona competente la repare;
7. Las herramientas de corte deben ser mantenidas en buenas condiciones. Si la herramienta está roma, se pueden producir roturas, lo mismo que si se use una presión o velocidad excesivas. Estas roturas pueden dar por resultado cortaduras y pinchaduras dolorosas;
8. Hay que estar seguros de que las paradas, alimentación y velocidad están graduadas adecuadamente. Hay que saber lo que va a suceder antes de poner la máquina en funcionamiento;
9. Cuando se termina de trabajar, hay que quitar las virutas con un cepillo. Si es necesario usar aire comprimido, hay que prestar especial atención a las partículas que pueden salir disparadas. Se debe proteger a los que están cerca;
10. Al aceitar, engrasar, regular, hacer algún ajuste en la máquina, hay que pararla siempre; y,
11. Cuando haya que alejarse de la máquina, aunque sea por un instante, apáguenla.
Hemos mencionado aquí once reglas de seguridad para operar máquinas. Podríamos mencionar muchas otras, pero en este caso tendríamos que referimos a máquinas en particular.
CHARLA N° 113
MOVIMIENTOS GIRATORIOS
En la charla de hoy quiero aprovechar la oportunidad para hablar del peligro de las máquinas u objetos giratorios. Muchas de las máquinas en nuestro taller tienen partes con movimientos rotativos. Hay toda clase de ejes que giran desde velocidades muy altas a muy bajas. Todo lo que gira presenta cierto grado de peligro y por lo tanto posibilidades de lesiones.
La ropa o cabello largo, los cordones de los zapatos, corbatas, pulseras, anillos, pueden ser atrapados en las partes que giran. Las únicas personas que se nos ocurre que no tienen necesidad de protegerse de este peligro son los nudistas y siempre que usen su cabello muy corto. Todos los demás pueden ser atrapados si dejan que la ropa suelta o el cabello toque una parte que gira.
En el pasado, antes de que se hablara de seguridad, los ejes maestros eran un asesino notorio en la industria. Todo era operado por ejes de transmisión y correas. El sistema de ejes estaba lleno de tornillos que sobresalían de 3 a 10 cm. Eran verdaderas trampas para las personas ya que por la rapidez con que giraba el eje, no se distinguían los tornillos. Cualquier parte de la ropa que rozara los ejes quedaba atrapada y la víctima era lanzada contra los alrededores causando muchas veces la muerte.
¿Es aterrador, verdad? Por cierto que lo es y lo era. La única razón por la cual hablamos de esto es para que todos se den cuenta claramente de lo que les puede suceder si son atrapados por un eje. Todavía sucede de vez en cuando. Generalmente hoy en día sucede con ejes pequeños. Alguien tiene una manga suelta que es atrapada en un torno y el brazo que está adentro es posible que no le sea de mucho valor a su dueño en el futuro.
Las partes giratorias se hicieron famosas durante la segunda guerra mundial debido al número de mujeres que perdieron la cabellera. Pocos jefes de planta y aun ingenieros de seguridad, se dieron cuenta de lo fácil que era que el cabello fuera atrapado por partes rotativas. Todo sucedía en cuestión de segundos, el cabello era atrapado y la muchacha se quedaba sin un pedazo del cuero cabelludo, y aun algunas veces el resultado era el cuello quebrado.
Algunas veces la electricidad estática presta su ayuda a esta clase de incidentes. Tal vez la persona usa un pullover de lana o en el caso de las mujeres, una falda sobre una prenda interior sintética lo cual representa un peligro cerca de los ejes. Esta combinación puede generar electricidad estática, el cabello se carga eléctricamente y es atraído por cualquier parte metálica. Debido a esto, tanto las mujeres como los hombres con cabello largo deberán usar gorras o redecillas en lugares donde haya ejes.
También deberán evitarse combinaciones de ropa que produzcan electricidad estática.
Es difícil de convencer a la gente que los ejes relucientes pueden atrapar la ropa. Pero los récords muestran que así es (los ejes sucios y herrumbrosos son aún más peligrosos). Yo personalmente conozco de un caso. Se trata de un mecánico que notó que su ayudante estaba secando el eje bien pulido de una pequeña bomba que estaba en funcionamiento. El mecánico le llamó la atención al hombre, el cual respondió: "¿atraparme este eje? Va demasiado lento, casi ni puede atrapar sus desperdicios". Sin embargo ocurrió. Atrapó no sólo desperdicios sino dos dedos del ayudante, los que se quebraron antes de que el mecánico pudiera detener la bomba.
Los récords de accidentes demuestran que cualquier eje o parte que gira puede atrapar la ropa o el cabello que lo toca. Muchas veces los trabajadores se han apoyado en los ejes o cualquier otra parte que gira sin que les haya pasado nada y le perdieron el respeto. Pero cualquier día puede suceder que la ropa quede atrapada y la víctima no tenga escape. El resultado puede ser huesos rotos, piel y ligamentos destrozados y aun un cráneo fracturado.
Espero que de ahora en adelante todos tengan presente, al acercarse o trabajar con máquinas u objetos que giran, lo que hoy se ha dicho y sean lo suficientemente precavidos como para no cometer fallos que pueden costar partes del cuerpo y hasta la vida.
CHARLA N° 114
DESATASCANDO UNA MÁQUINA
Algunas veces una máquina puede atascarse ya que un pedazo de material está en la posición incorrecta.
Todos ustedes han recibido instrucciones sobre lo que deben hacer cuando esto les pasa con su máquina —qué equipo usar y a quién acudir para pedir ayuda si la necesitan.
También se les ha dicho lo que no deben tratar de hacer—qué deben dejarle al mecánico, qué resguardos dejar en su lugar, etc., etc.
Las cosas que se les ha dicho que deben hacer han sido pensadas por gente que tiene conocimiento.
Los que se ocupan de estos problemas se han dado cuenta de que si ustedes tratan de hacer las cosas que se les ha dicho que no hagan lo único que se están buscando son problemas.
Por ejemplo, para algunas clases de prensas troqueladoras los operadores tienen unas varas de metal blando para desatascarlas. Estas están hechas generalmente de aluminio o bronce y lo único que sucederá será que se aplastarán si son agarradas entre las matrices. Si el operador usa la vara de acuerdo a las instrucciones, no se lesionará. Aquélla puede ser empujada por debajo o a través del resguardo, pero las manos del operador estarán protegidas.
Pero imaginémonos que no puede desatascar la máquina. Supongamos que cree que podría hacerlo con unas pinzas o un destornillador. Para llegar al punto del atascamiento tiene que levantar el resguardo, que se le ha dicho que debe mantener en su lugar. Es posible que desatasque la máquina, pero ¿qué sucederá si la prensa se pone en movimiento en ese momento?
El troquel bajará sobre el destornillador, el que está hecho de acero duro; una o las dos matrices se quebrarán y los fragmentos de acero volarán en todas las direcciones. Las posibilidades de que el operador no sufra lesiones son muy pocas.
(Supervisor: dé un ejemplo de su departamento que ilustre la protección de desatascar en la forma correcta y el peligro de hacerlo en la forma incorrecta).
Algunos de ustedes estarán preguntándose ¿qué haremos si queremos desatascar una máquina en la forma en que nos lo han indicado y no podemos hacerlo?" La respuesta es muy simple y clara—si siguiendo las instrucciones que se le han dado no se puede desatascar la máquina pidan ayuda. Acudan al supervisor, al mecánico o a mantenimiento, quienes están entrenados y autorizados para resolver este problema.
Lo importante es recordar esto —desde el momento que ignore las instrucciones está en peligro. Sabemos que el método que se le ha indicado para desatascar una máquina no siempre es efectivo. Pero preferimos que una persona capacitada se haga cargo del problema en lugar que usted empiece a hacer experimentos y corra el riesgo de sufrir un accidente serio.
Es importante recordar los tres puntos simples de todo atascamiento:
Primero, usar el método y el equipo que se le ha indicado;
Segundo, no haga nada más de lo que dicen las instrucciones, en particular no quite los resguardos o diapositivos de protección que se le ha indicado que no debe sacar; y,
Tercero, si el procedimiento que se le ha enseñado no es efectivo pida ayuda.
CHARLA N° 115
PUNTOS DE PELLIZCO
Hoy hablaremos de un equipo que tiene un récord de accidentes, o mejor dicho de lesiones, muy malo. Todos los años tritura manos y brazos no sólo en las fábricas sino también en los hogares y en la agricultura, y de vez en cuando, llega a matar. Estamos hablando de los equipos que tienen rodillos. Cuando dos rodillos en movimiento convergen, el peligro está presente.
Estos puntos de pellizco no parecen peligrosos, sobre todo si los rodillos se mueven suavemente, pero si la mano, un dedo, la manga de la camisa se acercan demasiado, el rodillo puede atraparlos y llevárselos. Estos equipos son especialistas en aplastar lo que se les pone en el camino.
Mucho es lo que se ha hecho para diseñar resguardos que protejan estos puntos de pellizcos; en algunos casos puede lograrse la protección ideal, pero en otros no es tan fácil. (Aquí el supervisor puede dar ejemplos de equipos de este tipo que se utilicen en las operaciones de la empresa).
Sin embargo, no existe ningún motivo para que los trabajadores se lesionen con estos equipos, pero sí deben aprender a evitar las lesiones, deben aprender a trabajar con seguridad. Posiblemente no haya otro equipo en el cual sea tan importante observar siempre las reglas de seguridad.
En lo que queremos poner énfasis es en que siempre que haya puntos de pellizcos, existe un peligro.
La importancia de tener en cuenta la seguridad, tanto en el hogar como en el trabajo, se hace más evidente cuando se trabaja con equipos de este tipo. Muchas son las amas de casa que han sufrido la trituración de los dedos con las máquinas de lavar ropa que funcionan con rodillos. Los niños también figuran en estas estadísticas. Aun los esposos que han decidido ayudar a su esposa han sufrido esta clase de accidentes.
Cuando estas lavadoras de ropa funcionaban manualmente, el peligro no era tanto, porque en cuanto se sentía que los dedos eran atrapados se podía detener la máquina inmediatamente, ya fuese que la estuviese operando la misma persona u otra. Pero el peligro aumentó cuando los fabricantes empezaron a ponerle motores, y muchos no les pusieron unos dispositivos de seguridad. Con el correr de los años, se inventó un mecanismo mediante el cual cuando una mano era atrapada, el rodillo de arriba quedaba suelto antes de que pusiera sobre ella presión suficiente como para triturar los huesos. Quien disponga de máquinas de este tipo, deberá tomar muchas precauciones cuando las está utilizando.
Las máquinas para doblar metal y arrollarlo, de vez en cuando también se apoderan de una mano. Muy pocas veces están resguardadas, ya que el resguardo interferiría con el punto de pellizco y en consecuencia con el trabajo. La mejor protección es mantenerse a bastante distancia de los puntos de pellizco. Siempre que sea posible, deberá idearse algo a fin de que nadie pueda acercarse demasiado. El entrenamiento en seguridad, así como el desarrollo de sentido de precaución y protección son también muy importantes.
A pesar de los problemas que presentan estos equipos, no existe ninguna razón para que los que tienen que operarlos se lesionen. Como a dijimos anteriormente, a los que pueden protegerse deben colocárseles un resguardo. Los que trabajen con ellos deben tomar precauciones adicionales. Los dispositivos de seguridad deben ser mantenidos en condiciones óptimas.
Los puntos de pellizco dejarán ser peligrosos si se los trata con respeto y se toman todas las precauciones necesarias.
El problema con los padres, decía una niña pequeña, es que cuando nos lo dan ya son demasiado viejos para cambiar sus hábitos. Lo mismo decía un supervisor de los trabajadores.
CHARLA N° 116
¡RESPETEN LOS RESGUARDOS!
Desde principios de este siglo, Ios avances tecnológicos han venido desarrollándose de una forma cada vez más precipitada. Alguien dijo en alguna ocasión que todos los que hemos nacido en este siglo "somos los hijos del progreso''. Nadie dude a estas alturas que estemos viviendo en tiempos de gran progreso. Especialmente en los últimos 30 años hemos visto un gran avance en la actitud de la gerencia en el campo de la prevención de accidentes.
Hay dos cosas sobresalientes que son evidencia de este avance. Una esta relacionada con el equipo y la otra con el programa. Con respecto al equipo, vemos diariamente los cambios que se han realizado en dispositivos de protección, Ios cuales han sido aplicados a todas clases de maquinaria para protegernos, especialmente a ustedes, que tienen que trabajar directamente en contacto con ella. Hoy día, cuando recibimos un nuevo equipo, lo recibimos ya con toda clase de protección. Y en relación con los programas, es grande la evidencia de que nuestra gerencia cada año emplea más tiempo y dinero para educarnos en el tema de la prevención de accidentes y evitar así que nos podamos lesionar. Incluso nuestra alta gerencia esta verdaderamente interesada en el tema de la prevención de accidentes, y esto sale a relucir continuamente en las discusiones que tienen a nivel departamental, donde se discuten y tratan todos los informes de accidentes y la forma en que se puede prevenir que ocurran otros similares. Como se suele decir, Ia seguridad tiene que venir desde arriba; y les aseguro que en esta planta viene desde allá arriba.
Hay accidentes que eran muy comunes hace muchas décadas, pero que ya apenas se producen debido a que la maquinaria viene protegida con resguardos y otros dispositivos de protección. Tales equipos se diseñan con mucho cuidado y cuestan más naturalmente, pero esos dispositivos se pagan por si solos al reducirse significativamente los accidentes y los costos que estos acarrean. Todos los dispositivos de protección, especialmente los resguardos, se han construido para proteger nuestra salud, sin disminuir el nivel de producción. No hay duda, por lo tanto, que se han dado pasos agigantados para hacer nuestro trabajo más seguro.
A pesar de esto, cuando a veces ando por entre las máquinas, observando la situación en que operan, observo que no siempre ofrecen el grado de protección que deberían. Por qué? Por que hay algunos que, por razones mal entendidas, quitan los resguardos intencionalmente, para aumentar el nivel de protección o para trabajar con más comodidad. Por muy buenas intenciones que se tengan para hacer esto, esta solución no tiene la menor justificación. Los resguardos se han instalado en los equipos y maquinaria para que funcionen siempre con ellos.
Y si un resguardo se rompe o daña, es responsabilidad del operador de la máquina comunicármelo inmediatamente para que sea reparado lo antes posible, pero no antes de haber parado la máquina y haber puesto un letrero en el que se diga 'máquina averiada'.
Recuerdo que hace unos años un individuo se introdujo en la línea de tráfico en una planta y fue golpeado brutalmente por un tractor. Debido al golpe el individuo se lesionó gravemente un pie. En la investigación del accidente informó que él ni había visto ni había oído que se acercaba el tractor. Efectivamente, tras hacer un examen más detallado de las condiciones del tractor, se comprobó que la bocina del tractor no había funcionado durante el último mes. Tras esto, se le responsabilizó al operador del tractor de la lesión que sufrió su compañero de trabajo. El operador debiera haber comunicado que la bocina no funcionaba tan pronto como observó este defecto. Sin embargo, continuó operando el tractor durante un mes, sin siquiera comunicar a su supervisor del defecto que tenía. Pero lo curioso de este accidente es que también se responsabilizó del mismo, a otros compañeros de trabajo del operador que conocían el defecto que tenia el tractor pero que no se lo comunicaron a su supervisor inmediato. Aunque en muchas situaciones la bocina no es esencial, en este caso narrado el sonido de la bocina pudo haber evitado que el trabajador perdiera un pie. En consecuencia, el tractor estuvo operando durante un mes de una forma insegura.
Quizá este otro caso nos ayude a comprender un poquito mejor la importancia de trabajar siempre con el equipo en perfectas condiciones. En una ocasión un trabajador de un departamento de construcción tuvo un ataque epiléptico. Perdió su equilibrio, y al caer extendió su brazo derecho. La mano se introdujo en una rotura que se había producido en el resguardo de una mezcladora de concreto. Se pueden imaginar cómo terminó su mano! Esa mezcladora se debía haber retirado de servicio en cuanto se observó que se había dañado el resguardo, porque ya no estaba en condiciones de ofrecer la seguridad que los ingenieros habían diseñado para él.
En cuanto observen que un resguardo está dañado, que una máquina no tiene el resguardo debido o incluso que alguna parte de una máquina que vino sin resguardo debería estar protegida, quiero que me lo comuniquen cuanto antes. Nuestra gerencia tiene un interés especial en proteger su salud y su vida.
CHARLA N° 117
NO PODEMOS GANARLE A UNA MAQUINA
Los accidentes en las máquinas producen, casi siempre, lesiones graves y dolorosas. Por eso, hay un hecho que todo aquel que trabaje en máquinas que corten, moldeen o modelen, deben tener constante mente en su mente. Este hecho es que la máquina no necesita sino un mordisco. Un solo mordisco y queda perdida una mano o un dedo, en un instante, una fracción de segundo. Ese puede ser el caso de una punzadora por ejemplo.
Probablemente se esté pensando que una punzadora no puede lesionar si no coloca la mano debajo del pitón. Esto es correcto, naturalmente. Y también es probable que pueda agregar a este pensamiento, otro: "ni en el golpe hacia abajo" Este ya no es muy correcto. Si la energía está cerrada y la disposición es tal que la máquina se pueda caer porque el piso no puede descender, estarían terriblemente equivocados al poder su mano abajo, no importa cual sea la posición para el golpe.
El gran peligro en pensar que el golpe hacia arriba es seguro está en que ustedes pueden tentarse en alcanzar a tiempo, particularmente alguna pieza se sale un poco de posición. El pisón trabaja rápido. Si su regulación del tiempo es un poquito retardada, si es un poquito lento en sacar la mano, pum! Otra mano destrozada. Tendremos otro lisiado. Otro trabajador que ha perdido parte de su futuro, lo mismo que su familia y sus hijos. Si los tiene. ¡ Mal negocio, muy malo!.
La punzonadora es solamente uno de los muchos tipos de equipo a los que los trabajadores trataran de ganarle. Y esto radica en el hecho de que a nadie le gusta cometer errores. Si se dan cuenta que han alimentado mal una pieza en una máquina, es casi natural que traten de agarrarla y enderezarla antes que se arruine. Tal vez pueden hacerlo a veces, muchas veces. Lo que hay que destacar aquí es que no hay nadie que pueda hacer esto siempre, todas las veces sin fallar alguna. Nadie tiene músculos y nervios y control como para no fallar nunca. Cualquiera que trate de ganarle en rapidez a una máquina en acción está haciendo al peor de las apuestas. Es la mano del trabajador, contra que?, díganmelo .
Esto es verdadero para toda clase de mecanismos en acción: giratorios, cortantes o deslizantes, de sujeción interna, de rosca moldeadores o curvadores. Esto lo vemos en y fuera del trabajo. Si yo armara una trampa de ratones con un billete de a dolar y le dijera a alguno de ustedes que agarrara el billete antes de que la trampa cayera, es seguro que cuando la trampa se cerrara muchos me harían pure, porque saben que recibirían un fuerte golpe en los dedos. No valdría la pena sufrir ese dolor y sus consecuencias por un dólar. Solo un tonto, que piensa que puede ser más rápido que la trampa y salirse del área de peligro antes de que se cierre lo haría.
Sin embargo, la misma persona que no le aceptaría a uno la apuesta de la trampa, puede tomarse el riesgo de ajustar o aceptar una máquina en movimiento o quitar una pieza antes de que la prensa se cierre, o colocar sus manos muy cerca del punto de operación.
Hay un número de cosas muy importantes que recordar cuando se trabaja alrededor de maquinarias de fuerza mecánica. Nunca traten de aceptar o ajustar un equipo mientras esté en movimiento. Si ustedes van a hacer ajustes que requieren colocar sus manos u otras partes del cuerpo en un área de peligro, asegúrense que esté cortada la corriente o cerrada de manera que nadie pueda hacer arrancar la máquina.
No quite una guarda a menos que la máquina esté completamente quieta, con su tarjeta cerrada y asegúrese que la guarda se reemplaza antes de volverla a poner en movimiento. En muchas operaciones que requieren alimentación manual cerca de un área de peligro, se usan aparatos especiales, para mantener las manos lejos. Por ejemplo, el que maneja una cierra, utiliza una estaca para empujar y a los operadores de prensa a menudo se les suministran pinzas o alicates de metal suave. Si el trabajo requiere tales utensilios para el manejo del equipo, úsenlos. No esperen que haya que recordarles que deben usarlos o se excusen alegando que es incómodo o difícil de manejar. Como ustedes son los que están en las máquinas mayor tiempo, son ustedes los que deben conocer mas sus peculiaridades y como tratarlas mejor que ninguno.
A veces se necesita una pareja de hombres para operar una sola máquina. En la mayoría de los casos este equipo esta controlado de tal manera que ambos hombres puedan despejar antes de que la máquina arranque. Sin embargo, hay veces que este no es el caso. En este caso asegúrense que han entendido bien las señales. Este es un juego en que la pérdida puede ser tan grande que es mejor entender bien las señales desde la primera vez.
Por supuesto, cuando ustedes trabajan en una máquina, sería carecer de todo buen sentido usar ropa suelta, corbatas, anillos, u otros objetos que puedan ser cogidos en una parte movible. Tenemos que admitir que no podemos ganarle a una máquina. No le demos ninguna ventaja. Es un juego en que se lleva todas las de perder y que la pérdida constituirá una tragedia para nosotros y para quienes dependen de nosotros
CHARLA N° 118
GUARDAS
Las guardas que se han instalado en nuestras máquinas son para protegerlos a ustedes, siempre y cuando se las mantenga en su sitio y ustedes operen las maquinas de acuerdo con las instrucciones. Si lo hacen así estarán protegidos contra accidentas en las máquinas.
Hay dos maneras de burlarse de las guardas. Cada una de ellas podrá derrotar al propósito para el cual fueron diseñados. Pero si ustedes tratan de burlar las guardas, recuerden que es su propio pellejo que están engañando.
La primera, es no volver a colocar las guardas que se han quitado para permitir reparaciones, aceitar o ajustar la máquina.
La mejor guarda tanto ahora diseñada por un ingeniero no tiene ningún valor fuera de la máquina. Y la máquina cuyas guardas han sido quitadas es para ustedes una amenaza tan mortal como si nunca hubiera tenido guardas.
Si tienen que quitar una guarda, vuélvanla siempre a colocar en su puesto tan pronto como el trabajo que exigió quitarla se haya terminado. No opere una máquina ni permita que otro la opere sin la guarda.
No crean que hablo por el gusto de oírme a mí mismo. En época de nuestros abuelos rara vez, tenían guardas. Y en esa época el índice de accidentes era terrible. Los inválidos, cojos, mancos, tuertos eran una visión común en cada fábrica. El sitio favorito para un empresario de pompas fúnebres estaba justamente al pie de la puerta de las fabricas.
Las guardas de las máquinas jugaron un gran papel en detener esta carnicera, ¡la vida que ha de salvar la guarda de su máquina es la suya!
Hay otra manera de burlarse de las guardas y poner su vida en peligro mortal es la de tratar de imaginarse una manera de ganarle a las guardas. Hay algunas guardas diseñadas de manera que la máquina no puede ser operada a menos que sus manos estén retiradas. Para alguno de estos aparatos pueden hacerse inoperantes a fuerza de tretas.
Cada vez que veo un trabajador tratando de engañar una guarda, pienso sobre los artificios que alguna gente se inventa para cometer suicidio. Cualquier artificio para burlar una guarda es igual.
Recuerden esto: Los interruptores de límite y otros aparatos de seguridad se construyeron para evitar que ustedes puedan matarse o lesionarse. Cuando traten de engañarlos, cuando traten de burlarlos, no se están ayudando a si mismos, si no que están ayudando a destruirse a si mismos.
Y recuerden esto también. La compañía no ha puesto las guardas y otros aparatos de seguridad en sus máquinas porque quiera retardar su trabajo. La compañía está tan interesada en la eficiencia del trabajo como ustedes mismos, probablemente más interesada.
Así que una guarda parece que retarda la producción un poco (lo que probablemente no es cierto) La guarda está allí para su beneficio, es un aparato diseñado para evitar que ustedes pierdan sus dedos, sus manos o su vida.
Use las guardas que se les suministran, siempre, y den gracias a su buena suerte que trabajen en una época en que se construyen guardas para su protección.
CHARLA N° 119
USO NO AUTORIZADO DE MAQUINAS
Deseo hablar hoy de algo que me preocupa bastante. Se trata de la operación de máquinas sin autorización. Quiero decir que alguien opere una máquina o una pieza de equipo sin tener el debido permiso y sin tener nada que ver con ello.
Claro que este no ha sido un problema en nuestro departamento, pero quiero que todos conozcan mis sentimientos a este respecto y quiero que entiendan cuan serio y peligroso puede ser.
Les contaré una historia.
En cierta empresa importante el ayudante de un tractorista era un joven vivaz y seguramente deseoso de aprender, pero irresponsable y caprichoso. Cuando el tractor estaba parado, gustaba de tomar los mandos y ponerse a moverlos en la forma en que le veía hacer a su conductor. El jefe de seguridad le llamó la atención y le prohibió terminantemente hacer esto. Sin embargo, la advertencia cayó en saco roto y el muchacho muy pronto olvidó la prohibición que se le había impuesto. Era tan fácil manejar el tractor según lo había visto.
Pasaron algunos días y en alguna ocasión, estando en pleno trabajo, el tractorista hizo un alto en su faena y se arrimó a un sitio fresco para tomar agua, dejando el motor en marcha para continuar su oficio. Pues nuestro inexperto y travieso ayudante aprovecho para subirse a la máquina y ponerla en movimiento y, naturalmente, se encontró con un monstruo al cual fue incapaz de dominar, lanzándose por un precipicio que lejos le produjo la muerte y el daño completo del tractor. Una vida perdida y miles de dólares deshechos en un momento de irreflexión.
Hay cientos de historias de este mismo estilo que podríamos citar aquí en apoyo de mi tesis.
En nuestro caso concreto el adiestramiento de un hombre para operar una máquina toma semanas de instrucción y práctica. Y se me hace muy duro creer que haya una persona que pueda imaginarse que puede operar una máquina sin tener las debidas instrucciones y el necesario entrenamiento. Además de la posibilidad de lesionarse y aún de perder la vida, está la probabilidad de dañar la máquina y perjudicar a un compañero trabajador.
La maquinaria y el equipo pertenecen a la compañía, y ninguno tiene el privilegio de usar u operar una máquina a menos que se le haya asignado específicamente para hacerlo. No podemos tener ninguna duda en cuanto a esto. Es peligroso para ustedes, y una violación de los reglamentos de la empresa. En esto necesito la ayuda de ustedes. Una violación a cualquiera de los reglamentos afecta a todo nuestro departamento no tengamos un accidente porque alguien se lesione, operando equipo sin el permiso necesario.
CHARLA N° 120
EL ALMACENAMIENTO ADECUADO EVITA ACCIDENTES
La charla de hoy quiero dedicarla al almacenamiento adecuado de productos y materiales, pero desde el punto de vista del bienestar personal. Quiero decir, el almacenamiento que facilite nuestro desenvolvimiento y movimiento a través de la planta sin causarnos lesiones o provocarnos accidentes. Cuando almacenamos y colocamos materia les inadecuadamente estamos crean do un peligro y aumentado grandemente la posibilidad de lesionarnos porque más tarde o más temprano lo que se ha hecho de forma incorrecta causará trastornos y traerá malos resultados.
Debemos almacenar los materiales y productos pensando en dos criterios: nuestro propio bienestar y la disposición adecuada de los productos. Vale decir que debemos hacer las pilas de materiales de acuerdo con el peso, el tamaño y el uso que se le da al material, poniendo por ejemplo, los más pesados abajo y los más livianos arriba. Los bultos o paquetes más grandes abajo y los más pequeños arriba. También tenemos que tener en cuenta los materiales que usamos con mayor frecuencia porque sería totalmente ilógico que los pusiéramos debajo de los que usamos con menos frecuencia. Por lo tanto lo que quede arriba será lo que usamos más frecuentemente.
Después de haber clasificado los materiales o paquetes según su peso, tamaño y uso tenemos que colocarlos en sitios adecuados, lo que significa que no debemos almacenarlos en los pasillos donde puedan interrumpir el paso de personas o vehículos de la planta. Debe tenerse especial cuidado en no colocarlos delante de puertas y salidas de emergencia. En otras palabras, no podemos almacenar los materiales en cualquier lugar ni donde primero se nos ocurra o donde sea más fácil en ese momento.
Asimismo no debemos olvidar que es necesario identificar los productos o materiales e indicar el grado de peligrosidad de su contenido con letreros de precaución ya que esto proporciona orden y más importante aún, protección para nosotros mismos. Los productos o paquetes que estén dañados se deben almacenar por separado, nunca junto con los que están en buenas condiciones debido a que de esta forma prevenimos que se dañen los demás, que provoquen derrames y suciedad o que se produzcan golpes y lesiones al caerse al suelo.
En algunas ocasiones tenemos que hacer pilas de materiales diferentes o bultos y paquetes de distinta naturaleza porque no existe suficiente material del mismo tipo para hacer pilas separadas. En estos casos debemos escribir en la parte exterior del bulto o paquete el nombre de lo que contiene para así poder identificar el material fácilmente sin necesidad de abrirlo. Además, de este modo se pueden colocar los materiales convenientemente pensando en la frecuencia con que se los usa.
Las pilas de materiales no deben ser muy altas por varias razones. Entre ellas tenemos en primer lugar, que las pilas altas no son prácticas porque no podemos alcanzar los materiales que están arriba desde el suelo sino que necesitamos subirnos en escaleras y esto hace el trabajo más lento y complicado. En segundo lugar, porque las pilas muy altas pueden inclinarse a un lado u otro debido a la poca estabilidad lo que puede crear el peligro de derrumbe que, por consiguiente, puede golpear y lesionar, a veces gravemente. Y en tercer lugar porque si la pila se derrumba pueden dañarse o romperse los materiales, cosa que implica pérdidas materiales innecesarias que pueden llegar a ser cuantiosas.
Cada uno de los puntos que hemos tratado contribuye al bienestar general de todos los que trabajamos en esta planta ya que al almacenar los productos y materiales adecuadamente estamos previniendo accidentes. No es mucho el esfuerzo que se requiere para ello, solamente es necesario realizar el trabajo correctamente, según las normas establecidas y con un poco de sentido común, así estaremos cumpliendo con nuestro trabajo y además con la prevención de accidentes.
CHARLA N° 121
CILINDROS DE GAS COMPRIMIDO
Los cilindros de gas comprimido son difíciles de manejar. Son pesados y lisos, por lo que se dificulta el agarrarlos; tienen válvulas que pueden dañarse con facilidad y, al estar llenos de gas bajo presión, pueden causar muchos problemas si uno se suelta en el taller.
Ha habido muchos casos de lesiones, muertes y daños a la propiedad causados por los cilindros de gas comprimido al transformarse en proyectiles de alta velocidad cuando escapa gas de los mismos, al romperse el cuello debido a un manejo incorrecto.
Muchos son los casos conocidos en que el cilindro destruye lo que encuentra a su paso llegando a lugares de la fábrica como son las oficinas, laboratorios, etc.
Si hay que mover un cilindro a una distancia corta lo mejor será inclinarlo un poco y hacerlo rodar sobre la base, pero nunca hay que arrastrarlo sobre el piso. Cualquier manejo brusco que raspe o corte la superficie del cilindro puede ser la causa de un accidente más adelante.
No hay que tratar de llevar un cilindro con las manos ni aun cuando sea manejado por dos hombres. Hay que usar una carretilla o algún dispositivo especial, tampoco habrá que Ievantarlo con un electroimán o con una eslinga.
Los cilindros deben ser tratados con suavidad. Tienen la apariencia de ser sólidos y fuertes, pero un cilindro que se deja caer sino se rompe y se transforma en cohete salvaje, puede quedar con un área débil por la cual puede escapar gas.
Los cilindros tienen que ser manejados y movidos de forma que se eviten todos los golpes innecesarios.
Alguna vez alguien se tienta y usa los cilindros de gas como rodillos o para sostener algo. Esto no debe hacerse nunca. Los cilindros no deberán usarse para ninguna otra cosa que para almacenar gas.
Siempre hay que pensar que cualquier cilindro de gas está lleno. Algunas veces se piensa que está vacío y que por lo tanto es seguro, pero hay que recordar que puede haber quedado presión suficiente como para crear problemas,
Algunos cilindros tienen tapones fusibles, es decir, aberturas cerradas con un poco de metal que funde a bajas temperaturas. En los cilindros de acetileno el punto de fusión es de alrededor del punto de ebullición del agua. Si en alguna oportunidad hay que derretir una válvula congelada en uno de estos cilindros, habrá que usar agua caliente, no hirviendo y siempre agua, nunca, bajo ninguna circunstancia habrá que usar una llama para calentar la válvula o el cilindro.
Si el cilindro tiene una pérdida hay que sacarlo inmediatamente afuera, a algún lugar alejado de las llamas o chispas e informarme a mí inmediatamente. Hay que colocar Ietreros llamándole la atención a los trabajadores para que no fumen en ese lugar. Generalmente es mejor dejar la válvula un poco abierta a fin de que el gas salga gradualmente.
Aun si un cilindro no tiene una pérdida es mejor mantenerlo alejado de las chispas, metal fundido, corrientes eléctricas o calor o llamas fuertes. Es correr un riesgo muy grande y provocar los desastres, el dejar cilindros de gases comprimidos cerca de una fuente de calor.
CHARLA Nº 122
COMO LEVANTAR PESOS
Claro que ustedes se imaginan ya de qué clases de pesos se trata, hablemos pues de algo que todos tenemos que hacer alguna vez en nuestro trabajo o en la casa: levantar cosas pesadas. La gente siempre sufre lesiones al hacer esto. Pero no hay ninguna razón válida para ello.
Si aprendemos a levantar apropiadamente, podemos disminuir el número de lesiones en la espalda. Se nos ha enseñado que debemos levantar con los músculos de nuestras piernas y no con los de nuestra espalda. La razón para esto es una simple cuestión de anatomía. Podemos hacer una gran cantidad de trabajo, incluyendo el levantamiento de cargas pesadas, todo lo que debemos hacer es tomar en consideración la forma como está constituido nuestro cuerpo, si deseamos realizar nuestra labor sin lastimarnos, busquemos que es lo que sucede realmente cuando no lesionamos la espalda levantando pesos excesivos o de manera a equivocada.
Si ustedes se tocan la espalda, pueden sentir la curvada columna de su espinazo. Este espinazo o columna vertebral está construido por una gran cantidad de pequeños huesos apilados uno sobre otro. Cada huesillo descansa sobre la parte superior de un disco que es redondo y esponjoso como un tacón de caucho y actúa como un amortiguador de choques. Los huesos están asidos entre sí con ligamentos y hay músculos adheridos a los huesos, también, de manera que podamos moverlos.
Si un hombre trata de levantar demasiado o levanta en forma equivocada, hará que haga mucho esfuerzo en su espalda y puede hasta romper estos músculos o ligamentos. Por ejemplo, si trata de levantar algo muy pesado para él, puede estirar los músculos de su espalda. Si se dobla sobre su cintura para levantar algo pesado, puede hacer mucho esfuerzo sobre sus ligamentos en la parte baja de la espalda.
Doblando sus rodillas, permite que los fuertes músculos de las piernas reciban mayor parte del esfuerzo, evitándose que todo este esfuerzo recaiga sobre los ligamentos y músculos de su columna vertebral.
Se levanta así:
(Sr. Supervisor: Póngase en cuclillas, con su espalda recta, luego párese levantando una caja, esta caja deberá llevarse previamente si no hay una disponible en el lugar de la charla).
Así los músculos de nuestras piernas llevan casi todo el peso. Noten que he mantenido la espalda recta. En esta forma el trabajo de levantar pesos recae sobre los músculos de las piernas y no sobre los de la espalda.
No existe ninguna regla que nos indique cuánto peso puede uno levantar con seguridad. Tal vez una equivalencia a nuestro propio peso, pero haciéndolo en forma correcta. Variamos mucho de tamaño y fortaleza y, por tanto, la cantidad que podamos levantar también varía. Así, pues, nuestro mejor conocimiento es probar el peso antes de levantarlo, entonces debemos conseguir ayuda o usar algún método para reducir el peso que tengamos que levantar cada vez. Es, realmente, una materia de juicio.
Usando los músculos de nuestras piernas y manteniendo nuestra espalda recta, podremos retirar el esfuerzo de nuestras espaldas y probando el peso antes de levantarlo podremos evitarnos el levantar cosas excesivamente pesadas para nosotros.
El cuerpo humano es una pieza maravillosa de maquinaria. Está diseñado para hacer cosas como levantar cosas pesadas, pero como cualquiera otra maquinaria hay que manejarla correctamente.
El levantamiento de pesos produce muchas lesiones: la caída de las cosas que se tratan de levantar sobre nuestros pies o los del vecino; pincharnos los dedos; lacerarnos las manos; hernias y dolores en la espalda.
Recuérdenlo y háganlo calmadamente. Coloquen sus pies para quedar bien equilibrados. Sitúense de manera que levanten directamente hacia arriba con sus pies. Doblen las piernas, mantengan la espalda recta. Prueben su fuerza: si no se sienten bien echen una mirada de nuevo, puede ser que su manera de agarrar o pararse es equivocada; tal vez sea un trabajo para dos hombres. Usen sus cabezas y no sufrirán lesiones. Los accidentes en el levantamiento de pesos son completamente evitables.
CHARLA Nº 123
APILAMIENTO DE MATERIALES
Cuando ponemos materiales en una pila, la idea principal es que permanezcan así hasta que necesitemos quitarlos. No queremos que una pila o parte de ella se derrumben y caiga sobre la cabeza o los pies de alguien.
Para asegurarnos que la pila se va a mantener allí arrumada, hay cuatro puntos esenciales a seguir:
1. La pila debe tener una base segura.
2. Debe tener una altura segura.
3. Los objetos deben estar aherrojados a ella.
4. Debe haber espacio para moverse alrededor de la pila.
1. Una base segura. Una base segura para una pila significa una superficie a nivel, plana y sólida. Si el piso o el suelo donde se va a construir la pila no es sólido, plano y a nivel, deben colocarse como bases una estibación o soportes, o pilones de madera, sólidamente apoyados y a nivel.
2. Una altura segura. La altura segura es aquella que no llegue tan alto que permita que la pila quede inestable y se incline o se voltee. Quiere decir también que sea lo suficientemente baja, de manera que la pila no sobrecargue el piso sobre el cual está colocada.
(Sr. Supervisor: obtenga los datos y diga cuál es el límite de peso para los pisos de su almacén o depósito y cuán altos pueden apilarse ciertos materiales sin exceder ese límite).
Una altura segura quiere decir, además, que el material no puede apilarse sino hasta cerca a las 18" de cualquier cabeza de rociador (sprinkler) para no interferir la acción de riego en caso de fuego.
3. Aherrojar los materiales. Aherrojar los objetos dentro de la pila significa que se deben cruzar si es posible o usar traviesas entre las capas del arrume, u otros medios para evitar la inestabilidad dentro de la pila. Para adentrarnos en este asunto tenemos que tomar los hechos y hablar sobre diferentes clases de objetos.
Los sacos, por ejemplo, deben cruzarse y apilarse con sus tocas hacia dentro de la pila. Cuando la pila alcance una altura de un metro y medio, más o menos, es más seguro poner las capas más altas en la parte de atrás a ir elevándolas escalonadamente; al quitar los sacos debe procederse en la forma contraria, quitando los de las partes más altas y conservando la forma de la pila.
Los cuñetes y barriles es más seguro apilarlos sobre sus extremos que sobre los lados. Es conveniente hacer una estibación sobre la parte alta de cada fila ates de colocar otros encima. La pila debe construirse en forma triangular, quedando cada cuñete o barril sobre el borde de dos barriles o cuñetes debajo de él.
Los barriles vacíos pueden apilarse sobre sus costados en forma de pirámide de cuatro lados. Deben acuñarse en los extremos de cada fila de abajo.
Cuando las cajas no tienen una longitud exactamente dos veces su ancho, es difícil cruzarlas. En este caso es conveniente poner estibaciones entre las filas cada segundo o tercera de ellas.
4. Espacio para moverse alrededor. Espacio para moverse alrededor de la pila significa que los pasillos alrededor de la pila deben ser lo suficientemente anchos para permitir que los trabajadores lleguen hasta la pila o permitir que los carros contra incendio u otro equipo puedan moverse alrededor de la pila sin chocarse contra ella.
Este asunto del espacio alrededor de la pila también quiere decir que no deben sobresalir estaciones o polines de la pila, de manera que puedan causar tropezones a un infortunado trabajador que se arriesgue por allí.
Hay decenas de diferentes tamaños y formas de cosas que deben apilarse, pero todo puede apilarse para que permanezca, si recordamos los cuatro puntos de apilamiento seguro:
– Una base segura.
– Una altura segura.
– Objetos aherrojados dentro de la pila.
– Espacio para moverse alrededor de la pila.
CHARLA Nº 124
DESCARGA DE VAGONES Y CARROS
Descargar un vagón cerrado, una plataforma o un carro son todos trabajos muy parecidos. Se tiene que trabajar con cartones, cajas y cosas de todos los tamaños, formas y pesos. He aquí algunas reglas para descargar cualquiera de ellas en forma segura.
Si están trabajando en un vagón cerrado, la primera cosa, naturalmente, es abrir la puerta. Hay tres cosas que debemos observar:
1. Asegúrese que la puerta esté debidamente encarrilada en la parte alta, de manera que no pueda caerse cuando ustedes vayan a abrirla.
2. Nunca pongan sus manos en la orilla delantera de la puerta, en el extremo del carril o en el golpeador de la puerta. Use las manijas y agarradores. Esto si no quiere que se le atasquen los dedos.
3. Abrase la puerta unos cuantos centímetros y obsérvese la carga para asegurarse que nada se está apoyando sobre la puerta y está listo para caer sobre usted y apártese de la abertura conforme rueda la puerta hacia atrás.
Las plataformas y carros deben colocarse en escuadra al muelle o descargadero. Las ruedas deben acuñarse.
Si es un vagón cerrado o una plataforma lo que está descargando colóquese siempre una plancha como puesto sobre la abertura entre el muelle y el carro y para subsanar las diferencias de nivel. Use una plancha apropiada y asegúrese que quede fuertemente sujetada.
Cuando todo esté listo, la puerta abierta, la plancha colocada, y asegurada, inspeccione la carga. Planee cómo la va a sacar. Naturalmente que ustedes van a trabajar de arriba abajo cuando hay varias hileras. Desde el principio hasta el fin tenga cuidado con los durmientes. Quiero decir las cosas que están paralelamente apoyadas por alguna otra. Los objetos largos parados en un extremo son los pernos. El durmiente puede no apoyarse en la cosa siguiente que se está planeando mover, pero puede suceder que cuando ustedes muevan el objeto siguiente, la pieza que está soportando al durmiente se mueva también y pueda venirse encima de uno.
Un paquete puede haber sido jalado parcialmente fuera del arrume en tal forma que esté listo para caer. Algunas cosas paradas sueltas pueden ser inestables y caerse con cualquier sacudida o empujón.
Mantenga, pues, una gran vigilancia todo el tiempo. Esté alerta contra cualquier cosa que se pueda convertir en un engañabobos.
Levantar con seguridad, cargar y apilar son importantes, pero sobre esto, hemos hablado (o hablaremos) en otra ocasión.
CHARLA N° 125
MANEJO SEGURO DE CILINDROS DE GASES COMPRIMIDOS
No hace mucho miraba un trabajo de construcción y noté algo que me preocupó muchísimo. Vi un cilindro de oxígeno y uno de hidrógeno conectados con reguladores y mangueras a una antorcha de soldadura. Lo que me hizo mirar dos veces el equipo fue el hecho de que estuviera en una zona muy congestionada. Había albañiles echando concreto, otros con carretillas, plomeros moviendo tubería pesada y un montón de otras actividades.
Me sentí incómodo estando tan cerca de esos cilindros de gas. Tenía la sensación de que en cualquier momento un accidente podría convertir esos cilindros en bombas de propulsión a chorro.
Recordé algo que sucedió, de carácter muy grave. Un tanque de acetileno fue chocado accidentalmente, golpeó con otro y se rompió la válvula. A causa del escape de gas, el tanque voló como un avión a chorro. Pasó a través de una puerta, golpeó a un carro que se encontraba a unos 50 metros los atravesó por el baúl y salió por el parabrisas sin perder velocidad, pasó a través de la pared de una casa a unos 150 metros de donde arrancó y finalmente paró. Afortunadamente no había nadie en su camino. Hubiera matado a alguien si le hubiera golpeado.
Claro que ustedes no tienen porque golpear y arrancar una válvula y causar que salga en barrena rompiendo paredes para sufrir un accidente. Todo lo que tienen que hacer es dejar que un cilindro se ruede sobre una de sus espinillas para que queden fuera del trabajo, con una pierna partida, por un par de meses. Como quiera que lo miren los cilindros de gas son artículos marrulleros para manejar y almacenar. Hay que estar alertas cada segundo. Es posible que ustedes conozcan las normas para el manejo de cilindros en forma segura, pero una corta revisión nunca sobra. Veamos pues:
1. Maneje cada cilindro de gas como si estuviera lleno. "Yo no sabía que estaba cargado" es una excusa muy pobre, como lo es para un accidente de un revolver.
2. Nunca maneje cilindros con guantes que tengan aceites o grasas.
CHARLA Nº 126
ESPECIALIDAD DE LEVANTAMIENTOS
(Sr. Supervisor: para mantener más interesados a los hombres consiga un saco lleno, una caja, un tubo largo, una hoja de metal, una hoja de vidrio, para demostrar como los levanta mientras habla).
- SACOS
El material en sacos puede levantarse fácilmente si se utiliza el antiguo un dos. Un agarren las esquinas opuestas, enderecen su espalda y eleven su peso directamente con sus piernas, descansándolo contra sus piernas y el vientre, tan pronto se enderecen. Dos: Balanceen el saco hacia arriba al hombro, de manera que descanse sobre el costado inclínense hacia adelante, permitiendo que la espalda tome parte del peso y abracen el peso poniendo sus manos en la cadera.
Para dejar el saco, hagan lo contrario. Bájenlo a las piernas, luego dóblenlas y bajen el peso.
- CARTONES
Agarren los cartones y cajas diagonalmente de las esquinas opuestas. Inclínense hacia adelante y levanten ya saben con que.
- TUBOS Y BARRAS
El material largo necesita un hombre en cada extremo. Cuando se está equilibrando un objeto largo, se puede formar una verdadera confusión con los extremos oscilantes. Las cosas largas son un transporte de dos personas y ambos hombres deben usar el hombro del mismo lado. Si ambos arrancan con el pie izquierdo, no tendrán necesidad de ejecutar una danza para ponerse el paso.
- HOJAS DE METAL
Para hojas de metal usen guantes de cuero o con inserciones de metal. Cuando haya bultos grandes de hojas metálicas, usen un carro o una mulita para levantar y transportar.
- VIDRIO
Puede suceder que algunos hombres hayan recogido un vidrio roto o en malas condiciones sin lesionarse, pero la mayoría se corta gravemente al manejarlo mal. Empecemos con sus manos, que deben estar cubiertas con guantes o protectores de cuero. Protéjase sus antebrazos y muñecas con mangas largas de cuero. Úsense mandiles o delantales de cuero o lona y guardas para proteger sus pies y sus tobillos. Lleve una sola hoja cada vez, a menos que sean pequeñas.
Levanten cada hoja cuidadosamente con la palma hacia fuera. Hay que colocarla hacia afuera de los brazos, donde los pedazos puedan caer si algo llega a romperse. Mantenga un buen agarre en la parte alta de la hoja con la otra mano para darle estabilidad.
Deje el vidrio en planchas para los expertos. Dos hombres que sepan lo que están haciendo pueden mover planchas pesadas con seguridad si usan eslingas de lonas y mantienen la cabeza, el cuello y los hombros entre ellos y el vidrio.
Es conveniente estar despierto en el trabajo aunque las cosas que se estén transportando parezcan livianas. Puede ser que el peso sea ligero, pero si se trata de levantar cuando está torcido, es casi seguro que pronto se encontrara sentado en una mecedora.
CHARLA N° 127
LO SABÍA PERO………….SE LE OLVIDÓ
QUE CLASE DE SALVAVIDAS se podría inventar para proteger a las personas que se olvidan de las cosas? Ocurren tantos accidentes a personas que conocen como trabajar, pero que olvidan el entrenamiento de seguridad! No podemos olvidar la seguridad ni tan siquiera un momento pues es precisamente en un momento que pasa un accidente. Los archivos están llenos de casos de accidentes que ocurrieron a los que olvidaron.
Un trabajador llegó a su casa y el empezó a contar a su esposa e hijos sobre la reunión de seguridad en que había participado esa tarde, en la que había aprendido la forma correcta de levantar objetos pesados. El le explicó a la familia como los músculos de las piernas y los muslos, deben hacer el esfuerzo y no los músculos de la espalda, que la naturaleza no formó para que hicieran grandes esfuerzos. Unos días mas tarde, este mismo trabajador llegó a la casa con un dolor en la espalda y no le quedó más remedio que confesar que había levantado una carga en forma incorrecta. La consecuencia fue que tuvo que estar en cama varios días y la esposa le tuvo que explicar a los vecinos y compañeros de trabajo, que él sabía como hacerlo pero que se le había olvidado.
En otro caso un químico, con muchos años de experiencia práctica, encendió un fósforo para mirar dentro de un tanque de ácido sulfúrico. En el momento en que lo hacía se dio cuenta del peligro e instintivamente cerró los ojos y se tapó la cara con las manos, justamente en el momento en que una llamarada le daba en la cara. El accidente pudo haberle causado la pérdida de la visión. El informe del accidente, entre otras cosas decía "Al olvidarse del riesgo……"
Veamos otro caso: Este individuo estaba limpiando el patio, hizo una pila con todas las hojas secas y vertió un vaso de gasolina sobre ellas para quemarlas; como las hojas estaban húmedas no se prendieron y entonces él se acercó y probó con el encendedor – Pufff. Cuando el médico terminó de vendarle la cara solo quedó un pequeño agujerito para que pudiera ver. Sin embargo, esta persona tuvo la suerte de no perder la visión. Desde luego que él conocía el peligro!, pero se le olvidó.
Este caso que vamos a relatar es extremadamente común, se trata de dejar objetos en las escaleras, quién no sabe que es peligroso? El informe dice:
"Un asistente colocó una barra sobre el peldaño de la escalera en la que trabajaba. La barra sobresalía unos 45 cm. Al poco rato se bajó de la escalera y, cuando subió de nuevo, el extremo de la barra lo golpeó en la cara rompiéndole los espejuelos y lesionándole un ojo. Y tenemos otro caso de "él lo sabía pero se le olvidó".
Cuantos casos y cuantas muertes hay que achacarle anualmente al olvido?
Despertémonos, más vale que usemos nuestra agudeza en todo momento y recordemos lo aprendido en el entrenamiento. Ese asunto del olvido no conduce a nada bueno, el único resguardo que se puede usar contra el olvido es la vigilancia, una mente alerta que actúe como guardián de nuestra seguridad y nuestras vidas.
Una mente aguzada, en un cuerpo vigoroso y saludable, es nuestra mejor defensa. Mantengamos nuestro cuerpo en buenas condiciones y nuestra mente alerta de manera que nunca sea necesario decir : "El lo sabía pero se le olvidó"
CHARLA N° 132
ROPAS PROTECTORAS
En cada una de estas charlas de 5 minutos hay generalmente un aspecto relacionado con la prevención de accidentes que trato de recalcarles. Si logramos implantar en nuestra mente algunas de estas ideas y dejar que influyan sobre nuestro modo de actuar, reduciremos a un mínimo, donde trabajemos, el número de lesiones incapacitantes.
Hoy quiero hablarles sobre la ropa protectora y los equipos que se diseñan para nuestro uso personal. Empezaré por decirles que el no usarlos, o el abusar de ellos, es una de las razones por la que los trabajadores siguen sufriendo toda clase de lesiones incapacitantes que podrían evitarse sencillamente siguiendo unas reglas básicas.
Aunque no podamos decir que estos accidentes son debido totalmente al descuido, esta afirmación se acerca mucho a la realidad. A veces, sin embargo, son consecuencia directa de la ignorancia. Es una forma de descuido que condenaríamos seguramente si lo viéramos en cualquier persona, pero no lo hacemos cuando lo vemos en nosotros mismos.
Si cualquiera de nosotros tuviera que salir a caminar en medio de una tormenta de una noche fría de invierno, nos abrigaríamos con la ropa más apropiada. Nos prepararíamos para esa situación. Aquí, en nuestros áreas, diariamente nos enfrentamos a muchos peligros y sin embargo no usamos la ropa adecuada para protegernos. Todos ustedes conocen su trabajo y saben lo que necesitan para protegerse en el desempeño del mismo. Todos saben que en trabajos donde hay partículas voladoras y líquidos peligrosos es necesario protegerse con anteojos protectores. Donde se manejan objetos pesados es necesario llevar zapatos con punteras de acero. Un soldador eléctrico tiene que llevar un casco equipado con un vidrio oscuro para proteger sus ojos de las luces cegadoras y de las chispas de los arcos eléctricos, si quiere evitar las lesiones en las que incurren los trabajadores que no llevan la protección necesaria.
Nuestra ropa protectora puede ser simplemente guantes para proteger nuestras manos, botas de goma, un traje de amianto, un cinturón de seguridad o cualquier otro de los muchos equipos de protección que existen, depende de la necesidad.
Supongamos que hiciéramos un inventario de todas las protecciones que habitualmente llevan los trabajadores que realmente las necesitan. ¿Cuántos de ustedes pensarían que esa ropa protectora es peligrosa? Seguramente ninguno, y en cambio muchos de ustedes actúan como si así lo fuera, y trabajan sin valerse de la protección que ofrecen.
Yo no estoy aquí representando a un fabricante de ropa de protección o tratando de venderles nada. Estoy aquí simplemente para decirles que paga el estar preparados. Paga porque las estadísticas demuestran que los trabajadores que llevan habitualmente protección sufren muchas menos lesiones que los que no la llevan.
Sabemos que cuando una regla dicta que en un trabajo se lleven anteojos de protección, ese requerimiento es para nuestra protección y para la protección del departamento. En cambio nos olvidamos muchas veces y dejamos los anteojos en el armario o descansando sobre nuestra frente y no sobre nuestros ojos.
El hecho de que no les insista continuamente en que los usen, no es una señal de que no se los aconsejo. Simplemente lo hago porque no quiero estar encima de ustedes continuamente y quiero dejarles a su propia iniciativa. Nosotros—los supervisores—asumimos, muchas veces, erróneamente, que el interés en su protección les conducirá a protegerse con los equipos que necesitan.
Quiero pedirles que cada uno de ustedes piense detenidamente sobre los riesgos a que se exponen diariamente. A continuación repasen los artículos de que disponen y vean si no hay algo, alguna ropa, algún equipo protector, que podría estar usando para protegerse contra ese peligro.
Y para terminar, y como resumen, quiero que recuerden siempre este eslogan: Usen la ropa protectora— no abusen de ella. Puede salvarles un ojo, un pie o incluso la vida.
CHARLA N° 133
PROTECCIÓN PERSONAL
Siempre se ha dicho que el ser humano aprende "a golpes". Los niños aprenden a caminar cayéndose y golpeándose. Un país aprende a dictar buenas leyes después que ha tenido que vivir bajo males. El trabajador nuevo y sin experiencia, aprende su trabajo cometiendo errores.
Lo dicho hasta ahora se aplica también al equipo de protección. Detrás de cada equipo protector que se use en esta mina hay una historia de sangre, dolor y muerte — que quizás no sucedió aquí, pero sucedió en alguna otra parte.
Tomemos la protección de la vista. Durante varios siglos los trabajadores de cientos de oficios diferentes sufrieron lesiones en los ojos. Miles de trabajadores perdieron sus ojos a causa de esas lesiones. Estos hombres capaces y lo suficientemente fuertes para trabajar, se transformaron en mendigos como consecuencia de los accidentes de trabajo. Los hombres trataron de aprender a realizar su trabajo con la mayor seguridad posible, pero sin embargo las lesiones en los ojos continuaban sucediendo.
A lo largo de varias décadas al comienzo de la era industrial, muchos trabajadores perdieron su vista, hasta que finalmente alguien decidió inventar los anteojos protectores pare evitar estas lesiones. Es posible que algunos de ustedes se hayan reído alguna vez de este inventor, pero a través de los años se ha podido comprobar que Ios trabajadores que usan protección ocular sufren muchos menos accidentes en los ojos que aquéllos que no la usan. La idea de proteger la vista se ha ido arraigando más v más y hoy día existe una gran variedad de protectores pare la vista, cada uno diseñado para prevenir lesiones en determinados trabajos.
El ser humano aprende muy lentamente, pero a través de los siglos ha aprendido mucho y nosotros tenemos la ventaja de poder aprender de los errores cometidos por los demás y no tener que aprender de los nuestros.
No tenemos que esperar a que un compañero pierda la vista; demasiados la han perdido ya para esperar un ejemplo más que nos demuestre la necesidad de protección. Nosotros podemos beneficiarnos sin tener que pagar el precio de sufrimientos o aun de ceguera.
Lo que hemos dicho de protección para la vista se aplica también los zapatos de seguridad y a los cascos. Miles y miles de pies machucados y cráneos destrozados, ha sido el precio pagado por la raza humana para aprender la necesidad de protegerse, tanto la cabeza como los pies y para conocer los distintos dispositivos que brindan ese tipo de protección. El precio pagado ha sido bastante alto—lo que nosotros tenemos que hacer es recibir los beneficios.
Lo que se ha dicho sobre los protectores para los ojos, Ia cabeza y los pies se aplica a cualquier otra protección personal que deba llevarse o usarse. Cada uno ha sido diseñado por personas que han estudiado el problema y que han visto cómo muchos trabajadores han muerto, se han mutilado o lisiado en accidentes. Estos hombres se han propuesto detener la pérdida de vidas humanas y de la salud. Ellos se han preocupado por probar los dispositivos y mejorarlos. Tuvieron que mejorar los equipos de seguridad cuando alguien pagó con su sangre y sus sufrimientos.
Cuando se les indique que deben usar equipo de protección personal, en lugar de quejarse, agradezcan que les ha tocado vivir en un período industrial en que no se escatiman esfuerzos para proteger la vida de los trabajadores, y que trabajan en una operación en la que la gerencia pretende por todos los medios posibles que ustedes usen siempre la protección personal adecuada.
CHARLA N° 134
PROTECCIÓN PARA LA CABEZA
El otro día me llamó la atención la frase de un anuncio que me ha servido de inspiración para la charla de hoy. La frase decía así: 'No se le ocurra perder su cabeza". Me puse entonces a pensar que, en realidad, con ciertas y determinadas limitaciones, casi todo el mundo puede trabajar o ser útil de alguna forma a pesar de que le falte un dedo, una mano o una pierna. Pero sin cabeza, nadie puede vivir. Es obvio entonces que la protección de esta parte de nuestro cuerpo es un tema de mucha importancia, por lo que he decidido tratarlo hoy.
Uno de los equipos de protección personal más importantes en la industria, es sin lugar a dudas el casco protector. Estoy seguro que muchos de ustedes han oído, y quizás hasta presenciado, algún caso donde un trabajador ha estado a punto de perder la vida, pero que gracias al casco protector se ha salvado.
En esta charla vamos a hablar del casco en sí, de los peligros que pueden dañarlo y de su cuidado y mantenimiento, de lo cual depende que su función pueda cumplirse cabalmente llegado el caso. La vida útil del casco depende no sólo de las condiciones normales que nos rodean en nuestro ambiente de trabajo, sino también de otros factores, como pueden ser el calor, el frío, productos químicos, rayos ultravioletas, etc.
El casco, como lo sabe la mayoría de ustedes, consiste básicamente de dos componentes, la coraza—que es el casco sólido—y la suspensión interior, formada por la banda ajustable y la copa de cocos. (Se recomienda que el supervisor tenga en sus manos un casco durante la charla para que los trabajadores entiendan mejor lo que explica). Ambos componentes son de mucha importancia, no nos pueden proteger el uno sin el otro. Ambos necesitan una inspección y un mantenimiento regular.
El casco, como ven, es rígido y fuerte. Esa rigidez, además de aminorar la fuerza de los impactos, hace que cualquier objeto punzante que caiga contra la coraza, sea desviado.
Una cosa de la que tenemos que cuidarnos, es de las rajaduras o arañazos en el casco, por muy pequeños que sean. Si ustedes observan algunas de estas señales en su casco es imperativo que lo reemplacen por otro nuevo. Por experiencia se sabe que estas pequeñas rajaduras o arañazos son el principio de rajaduras mayores. Si el casco ha sufrido el impacto de cualquier objeto ya sea cuando lo estábamos usando o cuando no, debe ser inspeccionado antes de volver a usarlo.
Hablemos ahora del sistema de suspensión. Esta banda ajustable interior que les muestro es tan importante como la cubierta exterior del casco, o sea la coraza. Los beneficios son obvios, ya que el casco se mantiene a la distancia adecuada gracias al ajuste de esta banda. Todos sabemos lo importante que es este espacio entre el casco y nuestra cabeza. De esta forma, el aire puede flotar en ese espacio.
El propósito principal de las correas de la copa es crear espacio suficiente pare absorber la energía de un golpe. Pero para ello es imperativo que las correas se mantengan en sus condiciones óptimas.
Más de una vez he tenido que llamar la atención a alguno de ustedes, porque he notado que tienen la mala costumbre de colocar guantes, cajetillas de cigarrillos, u otros objetos en la parte interior del casco. Esto es una práctica peligrosa ya que se anula el espacio de absorción de energía de los golpes y no podrá protegernos en caso de un accidente.
Otra cosa, no pinten nunca el exterior ni el interior del casco, ni siquiera pare poner sus iniciales, todas las pinturas contienen ciertos solventes que pueden ser destructivos pare el material de que está hecho el casco. Si quieren identificar sus cascos, pueden usar alguna cinta adhesiva pegada a alguno de los costados del casco.
Para terminar, quiero pedirles a todos que periódicamente, revisen sus cascos, la parte interior y la parte exterior, no sean descuidados con este equipo. Todos tenemos varios órganos que pueden ser remplazados en nuestro cuerpo, tenemos varios dedos, dos piernas, dos brazos, pero sólo tenemos una cabeza. Asegurémonos, pues, de que la cuidamos, sin ella no somos nada.
CHARLA N° 135
¿OIRÁ USTED TAN BIEN MAÑANA?
"¿ Cómo están María y los niños?", usted pregunta a un compañero de trabajo durante la hora del almuerzo. Su amigo le mira con ojos vacíos, se rasca la cabeza y contesta: "Bueno, dicen que va a llover esta tarde". Ahora el que tiene un vacío en la mirada es usted. Se acaba de enterar de que su amigo no oye bien. ¿Es esto el resultado de exposición prolongada a ruido en el trabajo? Usted piensa acerca del ruido que le rodea constantemente.
Estemos conscientes de ello o no, el ruido nos rodea casi constantemente. Este problema no es nuevo. La pérdida de audición industrial fue diagnosticada ya entre los caldereros ingleses en el año 1830. Hoy día, millones de trabajadores en todos los países del mundo tienen problemas de audición que están directamente relacionados con el ruido ocupacional.
Creo que todos debemos estar conscientes de los problemas que el ruido puede crear en nuestra salud. Los problemas crónicos más comunes incluyen: dolores de cabeza, presión alta de la sangre, aumento de ansiedad, mala vista y pérdida de la audición. Pero una resonancia de alta frecuencia también puede dañar los sistemas cardiovasculares, respiratorio y nervioso central.
El ruido además contribuye a una baja moral, pérdida de la concentración, pérdida de productividad, ausentismo e insatisfacción con el trabajo que se realiza diariamente.
Muchos expertos en ruido nos dicen que los seres humanos nos acostumbramos fácilmente al ruido; y eso es un grave problema. En verdad, nos podemos adaptar a un ruido alto o molesto, pero eso no significa que no nos seguirá haciendo daño. Las máquinas y equipos con los que trabajamos todos los días y que producen sonidos fuertes y molestos pueden llegar a causarnos problemas en la audición.
Como ustedes comprenderán, yo no tengo el tiempo para ir constantemente recordando a cada uno de ustedes que deben ponerse la protección auditiva necesaria. Más de una vez, en nuestras charlas hemos comentado sobre la necesidad de trabajar siempre con protección auditiva. Esta recomendación no la damos sólo por darla, sino porque la gerencia de nuestra empresa está interesada en que los trabajos que realizan no sean la causa de que algún día pierdan su audición.
Los dispositivos de protección auditiva son esenciales sobre todo en áreas de ruidos muy altos. A veces algunos de ustedes me han comentado que esos dispositivos les producen incomodidad; y en esos casos yo he hecho lo posible por tratar de solucionar su problema. Si alguna vez ustedes utilizan un tapón auditivo, por ejemplo, que no les disminuye el ruido al que están expuestos o que les produce molestias, comuníquenmelo por favor lo antes posible para que solucione el problema.
Y en aquellas ocasiones en que deban comunicar algún mensaje a uno de sus compañeros y éste no les oiga porque tiene su protección auditiva puesta, háganle señas para que vaya con ustedes a un área retirada donde puedan comunicarle el mensaje después de haberse quitado la protección.
Y todos ustedes tienen la responsabilidad de revisar regularmente su equipo de protección auditiva. La inspección regular es muy importante. Si un dispositivo no protege debidamente, puede a la larga producirles un problema, sin ustedes sospechar que su audición se está deteriorando.
A continuación quiero recordarles brevemente 3 cosas más que podemos hacer para reducir el ruido que nos rodea:
· Inspeccionar todas las máquinas regularmente, y arreglar aquellos equipos que funcionan con demasiado ruido.
· Realizar los trabajos ruidosos cuando haya poca gente en las cercanías.
· Apagar las máquinas ruidosas cuando no se las esté operando.
Debemos siempre recordar que el ruido nos envuelve constantemente. Y no sólo aquí en nuestro trabajo, sino también en nuestros hogares y en la calle. Muchas veces podemos oír tan bien la televisión y la radio si bajamos un poco el volumen. Incluso algunos de los artefactos caseros que utilizamos pueden funcionar mejor y hacer menos ruido si los mantenemos en perfectas condiciones de funcionamiento. Y también podemos decir a nuestros niños que no se comuniquen gritándose de un extremo a otro de la casa. "Si el ruido en cualquier lugar puede ser infernal, el silencio también puede ser oro", como lo dijo alguien en una ocasión.
Como les he dicho antes, uno de los objetivos de nuestra empresa es mantener nuestras operaciones al nivel más bajo de ruido; pero esto no lo podemos lograr, como ustedes lo saben, en todas las ocasiones. Por esa razón, les recomiendo que utilicen siempre su protección auditiva, sobre todo en aquellas ocasiones en que de lo contrario su audición podría dañarse. Seria muy triste que llegara un día en que ni siquiera pudiéramos oír las risas de nuestros niños.
CHARLA N° 136
LOS OJOS
Hoy he decidido tratar el tema de uno de los órganos más valiosos y maravillosos de nuestro cuerpo humano: los ojos.
La vista es uno de los sentidos más necesarios para nuestro desempeño en la vida. Si nos pusiéramos a hablar de todas las ventajas que tenemos con el don de la vista, sería interminable. Basta sólo con cerrar los ojos y pensar que tenemos que vivir toda la vida en ese estado de oscuridad, para comprender de inmediato su utilidad incalculable. (El supervisor puede pedir a los presentes que cierren los ojos por unos segundos). Traten ver cuántas cosas podrán hacer y a cuántos lugares podrían ir en esas condiciones. Creo que esa prueba es suficiente demostración del valor incalculable de nuestros ojos.
Ahora bien, ¿cuidamos suficientemente y protegemos totalmente a nuestros ojos?
La naturaleza nos ha dotado con diferentes defensas para proteger nuestros ojos:
· Pestañas. Se ocupan de capturar el polvo o las pequeñas partículas para que éstas no lleguen a nuestros ojos;
· Cejas. Sirven como un cojín protector para detener, entre otras cosas, el sudor para que no llegue a los ojos;
· Lágrimas. Tienen la función de lubricar los ojos y limpiarlos de cualquier partícula extraña que llegue hasta nuestros ojos; y,
· Pupilas. Se contraen para proteger los ojos de las luces intensas.
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