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La educación de los valores en la educación técnica y profesional

Enviado por alex


    1. Caracterización de los valores en la educación técnica y profesional
    2. Motivo de la actividad
    3. Vías para el fortalecimiento de los valores
    4. Exigencias didácticas para la formación de valores
    5. Conclusiones
    6. Bibliografía

    INTRODUCCIÓN

    La función de los profesores en las escuelas politécnicas no puede estar enmarcada solamente en comunicarle a los alumnos conocimientos técnicos ni desarrollar en éstos habilidades profesionales, sino que deben dedicarse al fortalecimiento de los valores en los estudiantes, según lo establecido en la RM 90/98 "Lineamientos para fortalecer los valores, la disciplina y la responsabilidad desde la escuela".

    Ahora bien, ¿Cómo lograr el cumplimiento de esta tarea?. ¿Qué criterios se deben tener respecto a los valores y cómo fortalecerlos a través del proceso pedagógico profesional de las escuelas politécnicas?

    Estos son algunos de los problemas centrales de la Pedagogía Profesional, teniendo en cuenta que en visitas de Entrenamiento Metodológico Conjunto (EMC) realizadas por este autor a diversas escuelas politécnicas de la provincia Holguín se ha detectado que éstos son, precisamente, algunos de los aspectos más olvidados en el proceso de enseñanzaaprendizaje, es decir, en la clase.

    En un diagnóstico realizado sobre el estado de los valores en los estudiantes de la especialidad Contador del IP "Pedro Díaz Coello", desarrollado en el curso escolar 97 – 98 (Ortiz,1997) se destaca que existen dificultades en su fortalecimiento, específicamente la solidaridad, responsabilidad y laboriosidad.

    En este sentido, 7 de cada 10 estudiantes consideran que la disciplina en el aula es regular, y de ellos, 5 atribuyen esta situación a que el profesor no motiva en la clase. Por otro lado, el 50 % de los estudiantes encuestados no siente satisfacción al resolver las tareas docentes, y sólo el 40 % se considera abnegado en la solución de las mismas, lo cual demuestra poca laboriosidad de los alumnos.

    Asimismo, en 6 de cada 10 clases observadas se apreciaron di ficultades de carácter metodológico para estructurar didácticamente la clase en función del fortalecimiento de los valores.

    Al preguntarle a los alumnos si le gustaba ayudar a sus compañeros, el 50 % responde que un poco, un 20 % responde que le da igual y sólo el 20 % responde que mucho.

    Similares resultados se obtienen al preguntar si se alegran o no por el éxito de sus compañeros. Estos indicadores muestran el bajo nivel de solidaridad de los estudiantes de esta especialidad.

    Los controles de asistencia a clases muestran que el promedio es de un 91 %, indicador que está por debajo en un 4 % del objetivo estatal (95 %).

    En este estudio se señalan también serios problemas en la puntualidad a clases: el 60 % de los estudiantes plantea que esto se debe a que les gusta entretenerse conversando fuera del aula, aspecto que denota falta de responsabilidad.

    Aunque son muchos los contenidos de la especialidad Contador que de una forma u otra pueden contribuir al fortalecimiento de los valores, los controles a clases realizados durante las visitas de EMC realizados a los profesores de dicho centro demuestran que éstos no han explotado suficientemente las potencialidades educativas del contenido de esta especialidad, por el contrario, en su desarrollo ha predominado la transmisión de la información sin promover un pensamiento reflexivo, crítico, que sitúe al estudiante ante dilemas y que conduzca a la objetivización del valor; a pesar de que en el banco de problemas de este centro se declara como priorizado en las investigaciones el problema referido a la educación de los valores en dicha especialidad.

    Esta problemática se ha abordado en visitas de EMC efectuadas a dicho centro y en reuniones metodológicas provinciales con los jefes de departamento, en las cuales se corrobora que es necesario el fortalecimiento de estos valores en los alumnos partiendo de una remodelación del proceso de enseñanza – aprendizaje de cada una de las asignaturas.

    En el país existen sólidos y valiosos aportes a la teoría de los valores, sin embargo, aún es insuficiente la correspondencia existente entre los logros científicos y su concreción en la práctica pedagógica profesional de las escuelas politécnicas.

    Las investigaciones realizadas en la temática afirman con mucha objetividad que la educación valoral no debe ser solamente una asignatura del plan de estudios, sino un objetivo que esté presente en todas y cada una de las clases.

    En la actualidad el Ministerio de Educación (MINED) está estimulando el desarrollo de investigaciones que estén relacionadas con el fortalecimiento de los valores, lo cual se puede lograr empleando técnicas participativas que permitan una mayor actividad y comunicación entre los estudiantes. Este es un requisito indispensable para el logro de este empeño.

    Nadie cuestiona la importancia que tiene el fortalecimiento de los valores, sin embargo aún es insuficiente la preparación que tienen algunos profesores de escuelas politécnicas para que puedan realizar este trabajo con calidad desde las clases de las diversas especialidades técnicas.

    Esto trae como consecuencia que algunos profesores, al no conocer las distintas vías para llevar a cabo esta tarea y no contar con técnicas participativas para activar el aprendizaje de los estudiantes, desarrollan clases que no aportan los resultados esperados desde el punto de vista de la formación valoral.

    A pesar de lo explicado anteriormente se debe destacar que no se conocen trabajos realizados con el objetivo de fortalecer los valores de los estudiantes en las escuelas politécnicas mediante el empleo de métodos activos de enseñanza en las diversas asignaturas.

    De ahí que la estructuración metodológica de la educación de los valores en la formación de técnicos de nivel medio se convierta en un problema científico a resolver por los educadores de este tipo de escuela.

    Este trabajo brinda la posibilidad de que su enfoque teórico – metodológico resulte de interés para los profesores de escuelas politécnicas al ofrecer importantes consideraciones teóricas en el campo del fortalecimiento de valores por la vía curricular y proponer las exigencias didácticas que debe tener en cuenta el docente de la Educación Técnica y Profesional para fortalecer los valores de los estudiantes desde la clase, las cuales devienen en el modelo de actuación pedagógica cotidiana y que el autor ha denominado DECÁLOGO AXIOLÓGICO.

    El autor

    I CARACTERIZACIÓN DE LOS VALORES EN LA EDUCACIÓN TÉCNICA Y PROFESIONAL

    Existen diversas definiciones acerca de los valores, algunos autores lo consideran como el "significado social que se le atribuye a objetos y fenómenos de la realidad en una sociedad dada" (Rodríguez,19,48), otros plantean que es una "energía moral de quien, dominando el temor y las otras tendencias inhibidoras de la acción, se muestra decidido y constante en las situaciones difíciles" (Foulquié,10,403).

    En el Diccionario Filosófico de Rosental y Ludin se plantea que los valores no son más que las "propiedades de los objetos materiales y de los fenómenos de la conciencia social…" (20,477).

    La mayoría de los autores coinciden en afirmar que el valor es "la significación del objeto para el sujeto, o sea, el grado de importancia que tiene la cosa para el hombre que se vincula con ese objeto". (Alvarez,1,73).

    Los valores "caracterizan el significado de uno u otros para la sociedad, para la clase y para el hombre". (Rosental,20, 477).

    "Los objetos materiales constituyen valores de distinto género porque hacia ellos se orientan los diversos intereses (material, económico, espiritual) del hombre". (Rosental,20, 477).

    Ahora bien, "el valor no es objetivo solamente, ni subjetivo, es una dialéctica de los dos elementos" (Alvarez,1,73), y se forma "en el proceso de la actividad práctica en unas relaciones sociales concretas" (Rodríguez,19,48).

    En este trabajo se parte de considerar el VALOR como un reflejo cognoscitivo a través de percepciones, representaciones, conceptos y proyectos de la realidad objetiva en la personalidad del estudiante como una orientación afectivo – motivacional.

    Ejemplo:

    Patria – Realidad objetiva.

    Patriotismo – Reflejo de la realidad objetiva (Patria) en el estudiante.

    El alumno responde a ese valor, es Patriota.

    El valor se forma y se fortalece sólo en la interacción sujeto – objeto y sujeto – sujeto, o sea, en la actividad y en la comunicación. De manera que es necesario fortalecer el intercambio afectivo con los estudiantes, en el aula y fuera de ella.

    EDUCACIÓN DE LOS VALORES

    ACTIVIDAD COMUNICACIÓN

    (sujeto-objeto) (sujeto-sujeto)

    Sólo si el estudiante refleja al objeto que le satisface y se orienta afectiva y motivacionalmente hacia él, convierte a ese objeto en un valor.

    Los objetos, teniendo en cuenta que existen independientemente del sujeto, se convierten en valores a medida que el estudiante entra en relación con ellos.

    Ahora bien, el estudiante de escuela politécnica tiene diversas necesidades:

    • Afectivo – motivacionales.
    • Económico – laborales.
    • Morales.
    • Sexuales.
    • Estético – culturales.
    • Socio – políticas.
    • Técnico – profesionales.

    En su interacción con un determinado objeto o persona, el estudiante va descubriendo cómo se relaciona con sus diversas necesidades.

    Surge entonces la actitud hacia ese objeto, persona o institución, en dependencia de cómo esa realidad satisface o frustra sus diversas necesidades.

    El valor es el objeto de la actitud y es un motivo de la actividad.

     NECESIDADES INTERACCIÓN ACTITUD

    (sujeto – objeto)

    (sujeto – sujeto)

    MOTIVO DE LA ACTIVIDAD

    Ejemplos:

    • Ante una pregunta de si es responsable o no, un estudiante puede responder que sí lo es, y, sin embargo, no actuar con responsabilidad ante las tareas estudiantiles.
    • Ante una situación de debate creada intencionalmente en el aula por el profesor, un estudiante puede asumir una posición de honestidad y en la conducta cotidiana ser deshonesto.

    Esto sucede porque el valor en ese sujeto no constituye un motivo de la actividad.

    La esencia del motivo no está en el contenido que el estudiante debe asimilar, sino que está en la significación que tiene ese contenido para el estudiante, lo cual se expresa en un pensamiento con una alta carga afectiva, que es el verdadero motivo.

    La FORMACIÓN DE VALORES, por tanto, consiste en establecer en el estudiante un vínculo íntimo entre el reflejo cognitivo del valor y una carga afectiva que lo convierta en un motivo.

    Para esto es imprescindible tanto la enseñanza, la información, la fundamentación lógica e intelectual de los valores como el despertar vivencias afectivas y acciones volitivas en relación con los valores.

    II VÍAS PARA EL FORTALECIMIENTO DE LOS VALORES

    SITUACIONAL:

    Está relacionada con la exigencia externa, la presión, la amenaza de sanción o la promesa de estímulo, las cuales evocan el cumplimiento de un determinado valor en forma reactiva y situacional, sólo bajo la inmediata y directa presión externa.

    Mediante esta vía se intenta fortalecer valores que regulan la actividad sólo ante la presión externa o ante una determinada situación que compulsa al estudiante.

    ACOMODATIVA:

    Debido a estos estímulos y sanciones, una vez que son apreciados por el estudiante, una vez que éste comprende que el cumplimiento con el valor le permite obtener estímulos o evitar sanciones, conduce a que él se plantee la intención, la meta más o menos estable de cumplir con dicho valor.

    Sin embargo, este valor acomodativo se convierte en una señal, en un conocimiento, en un medio para llegar a fin, en la vía aprendida y eficiente para lograr un estímulo y evitar una sanción.

    AUTÉNTICA:

    Esta vía consiste en que el estudiante elabore activamente la meta de cumplir con los valores independientemente de los estímulos y sanciones, o sea, basado en las necesidades y metas propias, que partan de él.

    Sobre la base personal de la elaboración del valor, éste puede permanecer, fundamentalmente, como un medio hacia un fin, según sea la jerarquía de necesidades del estudiante, pero se favorece que el valor se convierta en un valor por sí mismo, en una necesidad por sí mismo.

    El valor auténtico se expresa en una meta asumida plenamente por el estudiante, que es elaborada personalmente por éste y no responde a estímulos o sanciones procedentes del mundo externo. Estos valores son los más duraderos y estables.

    Los valores situacionales y acomodativos dependen principalmente del mundo externo, o sea, si empleamos solamente estímulos y sanciones el valor puede permanecer simplemente como un aprendizaje cognitivo, como una meta instrumental, y no surgir como una necesidad en sí mismo.

    ¿En qué consiste este proceso interno?

    Consiste en que una necesidad del estudiante encuentre su objeto cumpliendo con el valor.

    Es decir, cuando por el contrario, se aplican estímulos o sanciones, las necesidades actúan sobre los valores como un medio hacia un fin.

    A los estímulos y sanciones este autor les llaman influencias extrínsecas, porque conducen a cumplir con el valor como un medio hacia el fin.

    Las influencias intrínsecas son aquellas que promueven la iniciativa del estudiante para cumplir el valor por sí mismo y no para buscar un estímulo o evitar una sanción.

    No deben formarse valores sólo como conocimientos, como metas instrumentales, como medios hacia un fin, sino como necesidades personales; valores estables y autosustentados, a través del empleo armonizado de las influencias intrínsecas.

    III EXIGENCIAS DIDÁCTICAS PARA LA FORMACIÓN DE VALORES

    En la actividad pedagógica el docente debe tener en cuenta algunas EXIGENCIAS DIDÁCTICAS para el fortalecimiento de los valores de los estudiantes desde la clase, las cuales se convierten en el modelo de actuación pedagógica cotidiana, y que este autor ha denominado DECÁLOGO AXIOLÓGICO (ANEXO # 1):

    1.- PROYECCIÓN:

    Es necesario diseñar una estrategia de trabajo metodológico coherente e integradora. En la estrategia de trabajo metodológico deben estar implicadas todas las asignaturas del plan de estudios y las acciones de todos los docentes. El fortalecimiento de los valores no ocurre en un momento del proceso pedagógico profesional, se logra durante todo el proceso y en cada uno de los componentes.

    El fortalecimiento de los valores no es un momento, es una dimensión estable que abarca un largo período de tiempo. Hacen falta normas de conducta adecuadas pero adquiridas en el amor, en la vida, en el trabajo.

    Un papel decisivo en el fortalecimiento de las cualidades de la personalidad del estudiante de la Educación Técnica y Profesional corresponde desempeñar al profesor y al instructor, quienes deben observar las posibilidades reales de cada situación por separado para fortalecer los valores en los alumnos.

    Sin embargo, su transformación en cualidades estables de la personalidad no puede estar condicionada por una situación aislada, incluso ni por un conjunto de situaciones si no tienen entre sí los nexos necesarios de continuidad.

    El fortalecimiento de los valores de los estudiantes no puede lograrse mediante los esfuerzos de un solo profesor o instructor, sino que se requieren acciones coordinadas de todo el colectivo pedagógico de la escuela politécnica y del colectivo de trabajadores de la entidad productiva.

    El fortalecimiento de los valores incluso atañe a todas las fuerzas sociales de la sociedad: además de las entidades productivas y las escuelas politécnicas, las organizaciones juveniles, políticas y de masas, la familia, la comunidad, etc.

    Esta es una tarea de carácter social general que rebasa los límites de la formación técnica y profesional.

    Por otro lado, las asignaturas de formación general y básicas deben convertirse en un componente importante para el fortalecimiento de los valores en los estudiantes en las especialidades técnicas, de ahí la necesidad de integrarlas a las asignaturas técnicas.

    2.- PROFUNDIZACIÓN:

    Es importante realizar un análisis metodológico profundo en cada una de las unidades de los programas de estudios.

    El perfeccionamiento de los métodos de enseñanza contribuye a fortalecer los valores de los estudiantes, pero esto no resulta suficiente, sino que es necesario emplear los métodos de enseñanza en forma de sistema, con una concepción didáctica desarrolladora.

    3.- DIAGNÓSTICO:

    El profesor debe tener en cuenta las características del grupo de estudiantes, la situación social en que viven, su medio familiar y normas de conducta.

    Para cumplir el objetivo formativo de un determinado tema el profesor utiliza un método general, pero la forma en que lo hace un alumno es distinta a la forma en que lo hace otro.

    En el método, cada alumno manifiesta su propia personalidad, sus gustos, vivencias e intereses y por tanto, modifica relativamente el método general.

    De ahí la importancia de que el profesor tenga una caracterización certera de cada uno de sus estudiantes.

    4.- FUNDAMENTALIZACIÓN:

    El docente debe efectuar los ajustes o adecuaciones correspondientes a los contenidos que se desarrollan, aprovechando sus potencialidades educativas y llevando al aula lo fundamental, lo que no varía, los núcleos básicos del conocimiento, en fin, lo que el alumno no puede dejar de saber.

    Para que el contenido objeto de asimilación se convierta en una herramienta para el fortalecimiento los valores, no puede estar al margen del estudiante, tiene que ser significativo para él, tiene que estar relacionado con las necesidades del alumno.

    5.- CIENTIFICIDAD:

    Es imprescindible enfrentar a los estudiantes a situaciones concretas donde tengan que demostrar con su conducta lo correcto a hacer, donde tengan que asumir una posición al respecto.

    En este sentido, eliminar la dicotomía que aun se manifiesta en la práctica escolar entre teoría y práctica adquiere una importancia de primer orden.

    6.- ACTIVACIÓN:

    Convertir al estudiante en un participante activo y protagonista de cada acción, y no en un receptor pasivo es una tarea impostergable del docente contemporáneo.

    Esto está dado en que el contenido puede tener distintos niveles de valoración por parte del estudiante, por lo tanto, las relaciones afectivas que el estudiante alcanza con el objetivo contribuyen a establecer la escala de valores que ese objeto tiene para el estudiante, lo cual se logra precisamente en la relación entre el contenido y el método.

    Dicho de otra manera, el valor que el estudiante le asigna a un objeto determinado depende en gran medida de la relación afectiva que establece con éste, y esta relación afectiva depende a su vez del modo en que el profesor destaque la significación que posee el objeto para el estudiante, o sea, del método de enseñanza empleado.

    Los métodos activos de enseñanza deben emplearse tanto en la escuela politécnica como en la entidad productiva, tanto en actividades docentes como extradocentes, extraescolares, productivas y de investigación; sólo así contribuirán al fortalecimiento de los valores en los estudiantes.

    Los métodos de enseñanza deben emplearse en forma de sistema, con una concepción didáctica desarrolladora, que estimule el análisis, razonamiento, argumentación y obtención de conclusiones políticas, promoviendo un enfoque personológico y reflexivo, centrado en el estudiante, que favorezca un cambio cualitativo en las normas de conducta de los estudiantes.

    7.- PROBLEMATIZACIÓN:

    El profesor de asignaturas técnicas debe desarrollar habilidades para plantear y resolver situaciones problémicas de la vida cotidiana y de la ciencia que estudian.

    Otras dos importantes expresiones del fortalecimiento de valores en el proceso de apropiación del conocimiento profesional son el planteamiento de problemas, a partir de lo estudiado, y la problematización y cuestionamiento de los propios contenidos que se estudian y de la vida cotidiana.

    La solución de problemas es para muchos autores la vía principal por la que se manifiesta el fortalecimiento de los valores.

    Es necesario plantearle al estudiante tareas atractivas y significativas para resolver en la clase y fuera de ella, ya que "si la lógica inicial es la lógica productiva, mediante las soluciones de problemas, la que forma valores es la lógica creativa, mediante la solución del problema, quizás de un solo problema, pero que exige una lógica investigativa para su solución". (Alvarez,1,47).

    Ahora bien, ¿Resolver problemas en grupos o de manera individual?

    Las condiciones en que desarrolla sus valores el individuo concreto en la vida real, productiva, económica y financiera de la empresa no son, por regla general, las que caracterizan a los grupos constituidos para la solución de problemas en el aula.

    No obstante, la inserción de las técnicas para la solución de problemas en grupo, en el marco de la escuela politécnica, puede contribuir al fortalecimiento de los valores, y además, puede constituir un importante factor de motivación hacia el propio proceso de educación.

    El docente debe enseñar a plantear problemas de la vida cotidiana, no enseñar soluciones, respuestas. Es más importante la pregunta que la respuesta, hay que hacer interrogantes a los alumnos.

    8.- MOTIVACIÓN:

    Es muy significativo para la eficacia del proceso de fortalecimiento de valores que el docente logre implicar al estudiante en su propio proceso de aprendizaje profesional.

    Los estudiantes deben ir recibiendo progresivamente responsabilidad sobre su propio aprendizaje profesional.

    Ellos necesitan llegar a darse cuenta que sólo pueden educarse y aprender si lo hacen por sí mismos y que fortalecerán sus valores en la medida en que se impliquen a sí mismos, activa y voluntariamente, en el proceso pedagógico profesional.

    Una condición esencial para que el estudiante fortalezca sus valores es precisamente el carácter activo con que él aborde su proceso de preparación técnica y profesional.

    Otro de los cometidos de la educación valoral sería, pues, el de explicar a los estudiantes que es necesaria una determinada actitud para el aprendizaje y la educación: el alumno debe saber que de él se espera una colaboración para el fortalecimiento de sus valores.

    El estudiante debe ser considerado sujeto del proceso de aprendizaje profesional; de manera que él esté consciente del papel que debe jugar en su propio aprendizaje y educación y de la necesidad que tiene de fortalecer sus valores.

    Si el estudiante no está implicado en algún grado en la materia, en el proceso de aprendizaje profesional, en la especialidad que estudia, que ésta tenga algún sentido para él, difícilmente se puedan fortalecer sus valores.

    El estudiante deber estar implicado en la actividad concreta, productiva, económica, financiera, para que desarrolle sus valores. Cuando se hace algo por el gusto propio, por placer, porque se está motivado, entonces se obtendrá un comportamiento adecuado, pero si se le da una dimensión externa, entonces puede afectar la conducta. De ahí que sea importante trazar estrategias metodológicas que motiven al estudiante, que lo impliquen en el proceso.

    9.- DISCUSIÓN:

    En la escuela politécnica es un imperativo crear un ambiente que estimule el desacuerdo y provocar la duda en el alumno. Es necesario utilizar el desacuerdo de manera constructiva, desarrollando el contenido profesional con un enfoque problémico.

    El docente debe provocar la duda en el estudiante, así como el cuestionamiento y la insatisfacción con los resultados productivos, económicos y financieros de las empresas del territorio, con vistas a la transformación cualitativa de la conducta cotidiana de los estudiantes.

    Hay que estimular un comportamiento activo y transformador de la realidad, impulsar el cuestionamiento, la movilidad y el cambio de lo existente, de lo tradicional y convencional, y estimular de una manera especial la corrección y transformación de la realidad productiva y de servicios.

    El docente debe apoyar y estimular el enfrentamiento a los obstáculos que impiden la concreción de las ideas nuevas y la búsqueda de las vías para eliminarlos consecuentemente.

    "Es cierto que el escolar va a opinar de algo que se supone no conoce; sin embargo, las vivencias, los intereses y las intuiciones de los alumnos con frecuencia son sorprendentemente útiles si, por supuesto, se les permite exponerlos. Pero sobre todo, el grado de compromiso es mucho mayor". (Álvarez,1,145).

    10.- INVESTIGACIÓN:

    El profesor de hoy debe formar hábitos y practicar técnicas que lleven al descubrimiento, a la investigación y al estudio. Las técnicas de investigación son las que preparan para la autoeducación. Esto implica que el profesor o el instructor debe ser capaz de adentrarse junto a sus alumnos por caminos técnicos desconocidos también para él.

    El docente no debe ser autoritario ni asumir una posición de poder; por el contrario, debe manifestar amplitud de criterios, ser flexible, aceptar las ideas de los alumnos, aun cuando éstos piensen diferente a él; no imponer su criterio y permitir la libre expresión de ideas, luchar por eliminar o atenuar los obstáculos y resistencias que surjan en el grupo o en algún estudiante.

    CONCLUSIONES

    Para fortalecer valores no sólo basta conque constantemente se le informe a los alumnos la necesidad de actuar correctamente y mantener una conducta adecuada ante las demás personas, es necesario además motivar a los estudiantes por el estudio, prepararlos para la vida, para el trabajo, para el cambio y la transformación, para lo cual es necesario argumentar, demostrar y persuadir, desde la clase.

    El empleo del Decálogo Axiológico es una vía que favorece el fortalecimiento de los valores de los estudiantes de especialidades técnicas, específicamente la responsabilidad, solidaridad y laboriosidad.

    Educar de esta manera permite desarrollar y robustecer la confianza del alumno en sí mismo, así como darle seguridad, elementos importantes en el fortalecimiento de valores auténticos y estables en los estudiantes.

    La propuesta metodológica puede ser utilizada en todas las especialidades de la Educación Técnica y Profesional, e incluso, algunos componentes del Decálogo Axiológico son válidos para otros niveles de educación.

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    ANEXO # 1

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    Dr. P. Asist. Alexander Luis Ortiz Ocaña