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La mujer Talibana

Enviado por doheckapi


     

    Ensayo sobre la mujer Talibana

    Indice1. Introducción 2. Desarrollo 3. Conclusiones

    1. Introducción

    La situación en Afganistán está empeorando de tal forma que recientemente un editorial del Times comparó el tratamiento que los taliban inflingen a las mujeres, con el que recibieron los judíos en Polonia en el Holocausto. Desde 1996, año en que los taliban tomaron el poder, la relativa libertad de las afganas, que les permitía trabajar, vestir con libertad, conducir o aparecer en público solas, se ha convertido en una pesadilla en la que el más mínimo error puede costarles la vida. No llevar el atuendo adecuado, el famoso burqa -una túnica de la cabeza a los piés con una rejilla tupida a la altura de los ojos- o unos zapatos especiales para no hacer el más mínimo ruido, mostrar incluso accidentalmente parte de un brazo o pasear con un hombre ajeno a la familia, provoca el que sean golpeadas y apedreadas en público, en muchos casos hasta la muerte. Los maridos tienen el poder de la vida y la muerte sobre las mujeres de su familia, especialmente sobre las esposas, pero una banda de enfurecidos callejeros puede arrogarse el mismo derecho si se sienten ofendidos por una actitud que consideren inadecuada. Profesoras, médicas, traductoras, abogadas, artistas, escritoras, son obligadas a abandonar sus trabajos y encerrarse en sus casas. En el caso de no contar con un varón familiar o no estar casadas, están condenadas a morir de hambre o pedir en las calles. No disponen de ningún servicio médico, al estar totalmente prohibido el menor contacto con varones e impedírseles a ellas mismas el ejercicio de la profesión. Esta situación provoca un disparatado nivel de depresión y un alto índice de suicidios, según trabajadores sociales, siendo bien difícil de evaluar por la falta de control. Un reportero occidental que pudo acceder a uno de los escasos hospitales para mujeres existentes describió como , envueltos en sus burqas, encima de las camas yacían cuerpos inmóviles negándose a hablar o comer, consumiendo simplemente el hilo de vida que les quedaba. Muchas otras se han vuelto locas y se las ve acurrucadas en las esquinas con un balanceo perpetuo o llorando. La mujer talibana actualmente vive en mundo liderado por el machismo y la incomprensión, desde el inicio del régimen Talibán ha sido encaminada por una ideología que eleva el poder del hombre sobre todas las cosas terrenales incluyendo a la mujer, que es considerada al igual que un animal o en algunos casos hasta de menor rango. Por tal razón trataremos de dar a conocer la situación de la mujer en Afganistán y las medidas que se están tomando para cambiar este hecho.

    2. Desarrollo

    Analizando profundamente la vida actual de la mujer afgana tendremos que decir están obligadas a llevar una vida infernal bajo los talibanes y esto se refleja en su sufrimiento. Los talibanes tratan a las mujeres peor que a sus animales. De hecho, aunque los talibanes ilegalizaron la tenencia de pájaros y animales enjaulados, encarcelan a las mujeres afganas entre las cuatro paredes de sus hogares. Las mujeres no tienen la menor importancia a ojos de un talibán menos cuando están ocupadas en la procreación, satisfaciendo los deseos sexuales de los varones o haciéndose cargo del pesado trabajo doméstico a diario. Consideramos a los talibán más dañinos e ignorantes que los jehadis- llamada asi la guerra Santa-. De acuerdo con el pueblo afgano, "mientras los jehadis estaban matándolos con pistolas y espadas, los talibanes los están matando con algodón." A continuación daremos a conocer algunas de las restricciones y maltratos contra las mujeres por parte del régimen talibán, estas son: 1- Completa prohibición del trabajo femenino fuera de sus hogares, que igualmente se aplica a profesoras, ingenieras y demás profesionales. Sólo unas pocas doctoras y enfermeras tienen permitido trabajar en algunos hospitales en Kabul. Aunque existen otras posibilidades de trabajo para las mujeres de Kabul en la fabricación de colchas, labores de costura, lavado de ropa y enseñanza del Corán Pero esta situación se inició cuando los talibanes entraron en Mazar-i-Sharif el 24 de mayo de 1997, anunciaron de inmediato que a las mujeres les estaba prohibido trabajar y recibir educación. Al parecer, también se les prohibió abandonar la ciudad. Tras la retirada de los talibanes de la ciudad en junio de 1997, el Departamento de Asuntos Exteriores del Movimiento Islámico Nacional del Afganistán ordenó a las organizaciones de ayuda exterior de Mazar-i-Sharif que dejaran de emplear a mujeres afganas. Según se informó, las órdenes fueron dadas por el Shura (el Consejo) de la Jihad (la Guerra Santa) en la región septentrional del Afganistán (a la sazón no controlada por los talibanes), al frente del cual está el Gobernador de la provincia de Balkh. Ello trajo consigo una reducción de las actividades de los organismos de ayuda internacional. Posteriormente se informó de que únicamente se permitiría a las mujeres afganas trabajar en organizaciones dirigidas por mujeres, o como enfermeras y médicos en los hospitales. Se cree que actualmente tiene empleo sólo el 20% de la fuerza de trabajo femenina del sector de la salud. Analizando con un punto de vista económico, las mujeres en Afganistán constituyen, por lo menos, la mitad de la población del país. Su exclusión del trabajo trajo consigo una serie de consecuencias negativas para la población en general. Si se sabe que durante los últimos 17 años de guerra la subsistencia de las familias afganas ha dependido en gran parte del sueldo de las mujeres, y ahora sin este ingreso el país pasa por hambre y miseria. 2- Completa prohibición de cualquier tipo de actividad de las mujeres fuera de casa a no ser que sea acompañadas de su mahram (parentesco cercano masculino como padre, hermano o marido). Pero si no van acompañadas de su mahram el castigo será aplicado por medio de azotes, palizas y abusos verbales. Tampoco pueden sentarse en el asiento delantero de los vehículos ni tomar taxis sin la compañía de un pariente. 3- Prohibición a las mujeres de cerrar tratos con comerciantes masculinos. 4- Prohibición a las mujeres de ser tratadas por doctores masculinos. Como no pueden trabajar, no hay doctoras y, por tanto, no reciben ningún tipo de atención. Si una mujer tiene problemas de salud debe ser atendida por una médica mujer. Si acaso necesita de un doctor la paciente debe estar acompañada por un pariente cercano quien hace las veces de intermediario entre ella y el médico. Las salas de espera de mujeres, tanto en hospitales públicos como en clínicas privadas, deben estar aisladas y debe ser una mujer la persona que da los turnos. La policía religiosa vigila el cumplimiento de estas directivas, tienen amplias facultades desde que los directores de los hospitales no pueden impedirles el ingreso al establecimiento. Por otro lado, los "violadores" son castigados de acuerdo a las normas islámicas. 5- Prohibición a las mujeres de estudiar en escuelas, universidades o cualquier otra institución educativa (los talibán han convertido las escuelas para chicas en seminarios religiosos). Pero a raíz de esto muchas consecuencias se han sucitado, entre las más importantes se pueden destacar las dificultades para crear los programas de información sobre los peligros de las minas terrestres; debido ha que la mayoría de los instructores eran mujeres. 6- Requerimiento para las mujeres para llevar un largo velo (burqa), que las cubre de la cabeza a los pies y si no cumplieran con esta regla recibirán azotes, palizas y abusos verbales contra las mujeres que no vistan acorde con las reglas talibán. Por ejemplo si no ocultan su tobillo sería un motivo. 7- Lapidación pública contra las mujeres acusadas de mantener relaciones sexuales fuera del matrimonio (un gran número de amantes son lapidados hasta la muerte bajo esta regla). 8- Prohibición del uso de cosméticos (a muchas mujeres con las uñas pintadas les han sido amputados los dedos). 9- Prohibición a las mujeres de hablar o estrechar las manos a varones que no sean mahram. 10- Prohibición a las mujeres de reír en voz alta (ningún extraño debe oír la voz de una mujer). 11- Prohibición a las mujeres de llevar zapatos con tacones, que pueden producir sonido al caminar (un varón no puede oir los pasos de una mujer), para ello se han obligado a utilizar a las mujeres un zapato especial que tiene una suela que no hace notar su presencia al caminar. 12- Prohibición a las mujeres de tener presencia en la radio, la televisión o reuniones públicas de cualquier tipo. 13- Prohibición a las mujeres de practicar deportes o entrar en cualquier centro o club deportivo. 14- Prohibición a las mujeres de montar en bicicleta o motocicletas, aunque sea con sus mahrams. 15- Prohibición a las mujeres de llevar indumentarias de colores vitosos. En términos de los talibanes, se trata de "colores sexualmente atractivos". 16- Prohibición a las mujeres de reunirse con motivo de festividades como el Eids cono propósitos recreativos. 17- Prohibición a las mujeres de lavar ropa en los ríos o plazas públicas. 18- Modificación de toda la nomenclatura de calles y plazas que incluyan la palabra "mujer." Por ejemplo, el "Jardín de las Mujeres" se llama ahora "Jardín de la Primavera". 19- Prohibición a las mujeres de asomarse a los balcones de sus pisos o casas. 20- Opacidad obligatoria de todas las ventanas, para que las mujeres no puedan ser vistas desde fuera de sus hogares. 21- Prohibición a los sastres de tomar medidas a las mujeres y coser ropa femenina. 22- Prohibición del acceso de las mujeres a los baños públicos. 23- Prohibición a las mujeres y a los hombres de viajar en el mismo autobús. Los autobuses se dividen ahora en "sólo hombres" o "sólo mujeres". 24- Prohibición de pantalones acampanados, aunque se lleven bajo el burqa. 25- Prohibición de fotografiar o filmar a mujeres. 26- Prohibición de imágenes de mujeres impresas en revistas y libros, o colgadas en los muros de casas y tiendas.

    En vista de las enormes atrocidades cometidas por el régimen Talibán, que han convertido Afganistán en un verdadero infierno para las mujeres. Las aberrantes violaciones que se cometen hoy en día contra los derechos de la mujer y la cruel guerra civil no han dejado más alternativa a la mayoría de mujeres que la mendicidad o la prostitución. Las intolerables condiciones en las que se ven las mujeres han provocado un aumento del índice de suicidios por autoinmolación, a lo largo y ancho del país aunque especialmente al oeste de Afganistán. Casos como estos se han visto a diario por ejemplo el 24 de abril del año 2000, Laida Omid de 20 años, hija de Hidar Karin, se quemó a sí misma con petróleo para escapar de las miserias que la habían rodeado durante años. Se encontraba en su casa, en Herat, en la calle Dr. Abdul Rizzaq, cerca del Mehria High School. Su familia la llevó al hospital de la ciudad, pero no había ni médico ni el equipo sanitario adecuado. Luego fue trasladada a Irán, aunque era demasiado tarde para salvar a Laida de las quemaduras que ella misma se había infligido. Aquel mismo día, otra mujer afgana, la mujer del director Noor Ahmed, se quemó a sí misma con petróleo en la calle Wool Company de Herat. La joven esposa pudo ser salvada por su familia pero las quemaduras fueron muy graves. Son el recuerdo de los horrores que la llevaron a este final. Por otro lado tenemos el caso de una mujer que fue quemada viva por su marido, esto sucedió un 25 de octubre de 1999. La esposa se llamaba Salehah y tras una discución con su marido Adbul, éste vertió gasolina sobre el cuerpo de su mujer y le prendió fuego. Cuando los vecinos se enteraron de la pelea, entraron en su casa y encontraron el cuerpo abrasado de Salehah, con las manos y piernas atadas. Inmediatamente, la llevaron al hospital. Allí, Salehah dijo a los doctores y a los vecinos que su marido la había atado, le había dado una paliza y le había prendido fuego. Murió en el hospital dos días más tarde. Su marido aprovechó la confusión y se escapó con sus dos hijos antes de que el funeral tuviera lugar. Se encuentra en paradero desconocido. Al haber trabajado para la Servicio de Inteligencia del régimen Talibán, se sospecha que está siendo protegido por ellos. Salehah Askarzadah, hija del ex-general Seyyed Yaghub Khan, de Chahardehi, en Laghman, había nacido en 1972 en Kabul y era licenciada en Económicas. Antes de la subida del régimen Talibán, trabajó para el Banco de Desarrollo de la Exportación.Se había casado con Abdul-Rahman tres años antes y habían tenido un hijo y una hija. Otro caso que sucedió el 17 de noviembre de 1999 fue la ejecución de una mujer llamada Zarmeena, madre de siete niños que fue hallada culpable por asesinar a su esposo con un martillazo en la cabeza, la ejecución se hizo pública para dar a conocer el poderío de los talibanes sobre cualquier conducta que rompa con las reglas impuestas. Esto se llevó acabo en el estadio deportivo ante la concurrencia de hombres , mujeres y niños..muchos de los cuales estaban emocionados porque antes no se había ejecutado a una mujer en público y desde pequeñlos se crea esta conciencia que los hace pensar que esta correcto. Así como este caso, hasta la presente fecha se ha realizado cuatro ejecuciones pero ninguna ha sido televisada o dado a conocer al público exterior porque no desean implicarse con este gobierno. Durante dos décadas el pueblo afgano y en especial la mujer ha sufrido el terrible cambio que ha propiciado el gobierno del terror y se sienten relegadas y despojadas de todos lo que tenían anteriormente por ello se han ido tomando las medidas para terminar con estas acciones pero no reciben apoyo y tan solo queda que por medio de comunicaciones escritas como sus revistas sean expuestas sus ideas para lograr conseguir nuevamente su libertad Por ello han surgido algunas organizaciones o instituciones como: Amnistía Internacional (AI) o afganas como HAWCA (Asistencia Humanitaria para Mujeres y Niños de Afganistán) o RAWA (Asociación Revolucionaria de las Mujeres de Afganistán). El testimonio de Orezala Ashraf ha sido de gran importancia, ella es la fundadora de la organización HAWCA para ayudar a las afganas. Su labor es denunciar la situación que esta ocurriendo , y por esa razón viajo a España para relatar los hechos dramáticos de la vida de una mujer afgana y de esta manera hacerla pública. Por otro lado , a partir del año 1977 se ha creado RAWA, que es una organización política independiente de mujeres afganas en lucha por los derechos humanos y por la justicia social en Afganistán. Las fundadoras fueron un grupo de mujeres intelectuales bajo el sagaz liderazgo de Meena, que fue asesinada en el año 1987 en Quetta, Pakistán, por agentes afganos de la entonces KGB con el consentimiento de la banda fundamentalista de Gulbuddin Hekmatyar. El objetivo de RAWA era involucrar al mayor número posible de mujeres afganas en actividades sociales y políticas encaminadas a conseguir los derechos humanos para las mujeres y contribuir a la lucha por el establecimiento de un gobierno basado en los valores democráticos y laicos en Afganistán. Dicha asociación durante estos años a tratado a mejorar la vida de la mujer mediante la fomentación de los derechos humanos que todos debemos recibir pero el régimen fundamentalista taliban ha tratado de impedirlo y cada vez se vuelve más estricto. Pero esto no ha detenido la lucha y por ello han realizado numerosas actividades que ayudan a las mujeres que han sido maltratadas a darles un refugio en Pakistán o dando soporte a sus familias. También buscan la incorporación de la mujer a la sociedad y por ello en los refugios se busca formarlas intelectualmente para contribuir con la causa y generar ingresos para sus ayudas y a la vez desarrollarse . Pero estas actividades se han truncado por la falta de apoyo de otras instituciones internacionales que no prestan su apoyo a la causa por temor a ir contra las tradiciones que tiene esta sociedad; por ello se han avanzado lentamente pero aun continúan con su lucha.

    3. Conclusiones

    En esta sociedad islámica tan extremista, no hay manera de conocer con certeza cual es el índice de suicidios, pero voluntarios estiman que el índice de suicidios entre mujeres ha incrementado significativamente ya que no pueden encontrar la adecuada medicación para tratar tan severas depresiones y prefieren acabar con sus vidas que vivir en tales condiciones. Las mujeres viven temiendo por sus vidas por la mínima conducta inadecuada.Como no pueden trabajar, aquellas sin familiares varones o sin maridos se están muriendo de hambre o están mendigando en las calles, incluso las que tienen doctorados. Casi no hay ayudas médicas para mujeres y la mayoría de los voluntarios, en protesta, han abandonado el país, llevando medicinas, psicólogos y otras cosas necesarias para tratar las depresiones que sufren las mujeres. En uno de los pocos hospitales para mujeres, un reportero encontró cuerpos casi sin vida encima de las camas, envueltas en su burqua, sin ganas de hablar, ni de comer, ni de hacer nada, simplemente están dejando pasar la vida lentamente. Otras se han vuelto locas y se encontraban agachadas en las esquinas, balanceandose continuamente o llorando, muchas de ellas por miedo. Cuando se acabe el poco medicamento que le queda, un doctor tiene pensado dejar a estas mujeres delante de la residencia del presidente como una forma de protesta pacifica.– Viven en un mundo extraño que las hace reinas del hogar, pero las encierra entre cuatro paredes, sin educación, independencia o voz propia. Según la ley de Mahoma registrada en el Corán, la mujer no es en absoluto igual al hombre porque ellas son la imagen del alma, mucho más irracionales, frágiles y proclives a la imaginación que los hombres; diciendo que "la mujer es una flor que deber permanecer en la casa, en agua, para que el hombre al volver huela su perfume". El presidente del Consejo de Ulemas (clérigos) de Kandahar declaró: "en otros países se obliga a las mujeres a trabajar pero en el nuestro los hombres sirven a las mujeres y las mujeres permanecen en el hogar", pero en realidad ¿ Esto favorece a la mujer ?, por el contrario, se ve a los hombres con poder absoluto sobre la vida y muerte de sus familiares de sexo femenino, quedando ellas a merced de su "dueño".-

    Por todo lo que ocurre, la situación de las mujeres y las niñas en Afganistán es sumamente grave, debido a la aplicación en el país de la política no declarada de discriminación entre los sexos, y exige una estrecha vigilancia sobre la situación de los derechos humanos. Para tratar de cambiar la vida que llevan las mujeres afganas se debe empezar a dar a conocer el hecho, muchos país que se encuentran alejados de este país no tiene conocimiento de lo que sucede y tal vez ni piensan que una forma cruel de ir contra los derechos humanos de libertad y expresión se estén dando en este siglo. Pero nuestra realidad es otra y como personas que somos debemos buscar apoyo para que las organizaciones que han surgido es este país puedan cumplir con su meta, que es la libertad de sus mujeres y niñas en todos los sentidos. Otra forma de apoyo es cooperar con la labor de las Naciones Unidas para promover los derechos humanos de las mujeres y las niñas mediante un compromiso constructivos en el plano local ha dado resultados bastante buenos, estudiando las oportunidades de un trabajo constructivo a nivel de la comunidad mediante la ejecución de proyectos a ese nivel. Los talibanes, deben poner fin sin tardanza a todas las violaciones de los derechos humanos de las mujeres y las niñas y adoptar medidas urgentes para garantizar la derogación de todas las medidas legislativas y de otra índole que discriminen contra la mujer; la participación efectiva de la mujer en la vida civil, cultural, económica, política y social en todo el país; el respeto del derecho de la mujer a trabajar, y la reincorporación de las mujeres a sus empleos; el derecho de las mujeres y las niñas a recibir educación sin discriminación; la reapertura de las escuelas y la admisión de mujeres y niñas a todos los niveles de la educación; el respeto del derecho de la mujer a la seguridad personal y el enjuiciamiento de los responsables de agresiones físicas a mujeres; y el respeto de la libertad de circulación de la mujer y de su acceso efectivo y equitativo a los servicios necesarios para proteger su derecho al nivel más alto posible de salud física y mental. Se sabe que esto no se lograra de inmediato pero mientras más rápido tomemos conciencia de ello, mayor será su repercusión y solución para lo que acontece con ellas.

     

     

     

    Autor:

    Roxana Buendía Jessica Martínez Katharine Párraga