- Resumen
- Introducción
- Desarrollo
- José Martí en su pedagogía
- Homenaje
- Conclusiones
- Recomendaciones
- Bibliografía
Problema: ¿Cómo destacar la influencia que ejerció José Martí en la vida y obra de Raúl Ferrer?
Resumen
El presente artículo titulado "José Martí en el magisterio y los versos de Raúl Ferrer", está basado en la presencia del modelo pedagógico del insigne maestro y poeta yaguajayense en quien se definió desde edades muy temprana una ferviente devoción por José Martí, la que demostró durante su fecunda vida; el estudio comienza a partir del testimonio personal del propio Raúl, además se entrevistaron a alumnos, amigos, compañeros y familiares del Primer Hijo Ilustre de Yaguajay, los que dieron fe de la constante admiración que sentía Raúl por Martí, asegurando que no despreciaba ocasión para rendirle tributo, siempre lo tenía presente en su proceder diario. Se realizó una minuciosa revisión bibliográfica, especialmente de las composiciones poéticas publicadas y se comprobó que Raúl es uno de los poetas que más le ha cantado a José Martí. La prolongación del pensamiento y el ejemplo martiano está latente en la vida, obra y acción de Raúl Ferrer. Por la profundidad con que se ha tratado esta temática y la vigencia de las ideas de estos dos maestros, poetas y revolucionarios, los resultados de la presente investigación pueden aplicarse en los programas de estudio de las asignaturas: Ética, Cultura y Sociedad, Apreciación Literaria, Filosofía y Sociedad, Gramática Española, Redacción y Estilo, entre otras, así como al proyecto educativo de la universidad cubana. Tiene como objetivo general, destacar la influencia que ejerció José Martí en la vida y obra de Raúl Ferrer, de forma que favorezca al conocimiento y conservación del patrimonio histórico y cultural del municipio de Yaguajay.
Introducción
"Las grandes personalidades luego que desaparecen de la vida, se van acentuando y condensando; y cuando se convocan a los escultores para alzarles estatuas, se ve que no es ya esto tan preciso, porque como se han petrificado en el aire por la virtud de sus méritos, las ve todo el mundo". (1)
Desde edades muy temprana Raúl Ferrer demostró su devoción martiana lo que se afianzó cada vez más al tomarlo como modelo poético, pedagógico, y revolucionario.
Las virtudes excepcionales de nuestro Héroe Nacional servirían en el Primer Hijo Ilustre de Yaguajay, como fiel continuador de sus concepciones y sus valores; es uno de los poetas que más ha cantado a José Martí. Entre ellos existen múltiples coincidencias, hasta algunos amigos han considerado a Raúl como un héroe verdadero, no de hazañas militares, pero sí de todos los días, es un modelo para el que se sienta patriota y revolucionario, sus nombres se alistan en los que aman y fundan y se oponen al bando de los que odian y destruyen. Es como si existiera una hermandad maternal entre ambos al tener ellos como segundo apellido "Pérez". El pensamiento, la obra y el ejemplo de José Martí y Raúl Ferrer se multiplican en los poetas, pedagogos y revolucionarios cubanos.
La presente investigación tiene lugar en el contexto cultural de Sancti Spíritus, en especial en el municipio de Yaguajay, particularizando en la presencia del modelo martiano en la vida y obra de Raúl Ferrer. La esencia del trabajo se enmarca en destacar la influencia que ejerció José Martí en la vida y obra de Raúl Ferrer.
Al llevar a cabo la revisión bibliográfica se tuvo acceso a las pocas investigaciones referidas al tema en cuestión, ya que lamentablemente se ha investigado muy poco acerca de la presencia del modelo martiano en la vida y obra de Raúl Ferrer.
Se ha seleccionado esta temática precisamente por la importancia que tiene el conocimiento del modelo pedagógico de Raúl Ferrer, como uno de los elementos que definen y configuran su personalidad.
La investigación es conveniente porque sus resultados llenarán un vacío en la profundización y perfeccionamiento del modelo pedagógico cubano.
Además tiene implicaciones prácticas en la medida que aporta testimonios importantes obtenidos de entrevistas a personas que estuvieron vinculadas a Raúl Ferrer, y de no ser consultadas ahora como fuentes orales podría perderse la posibilidad de hacerlo por diferentes causas y con ello se imposibilitaría el acceso a una información que no puede obtenerse por otras vías. Esta primera aproximación sentará las bases que permitan trabajar mediante otros estudios en la vida y obra de Raúl Ferrer.
El estudio tiene relevancia social por cuanto se pondrá a disposición de los estudiosos e instituciones culturales y educativas del municipio y de la provincia, interesadas en el tema en cuestión, un conjunto de elementos a partir de los cuales se podrá conocer la influencia que ejerció José Martí en Raúl Ferrer.
Tiene valor teórico porque esta primera aproximación sentará las bases que permitan trabajar mediante otros estudios para finalmente escribir acerca de la labor pedagógica de Raúl. Más que resultados conclusivos este estudio sugiere ideas, hipótesis, apreciaciones, recomendaciones, a futuros estudios acerca de la materia en cuestión.
Además es de suma importancia para los educadores yaguajayenses en particular y para el país en general, pues los primeros contarán con un material que les permitirá perfeccionar su labor educativa, y los segundos podrán acercase a la vida y obra de Raúl Ferrer.
Desarrollo
En su proceso de imitación a grandes poetas, escogiendo algunos y desechando otros, Raúl Ferrer va madurando poéticamente; de la poesía española admiró a Gustavo Bécquer, Antonio Machado, Federico García Lorca y Miguel Hernández. Además sentía simpatía por Walt Whitman y destacó su postura martiana alegando que sus maestros siempre fueron martianos, por eso él lo era desde niño. Siempre tenía presente el concepto martiano de que la poseía existe para denunciar lo malo, consideraba que quien quiera quedar como poeta no lo lograría por un sencillo versito, lo hará por un verso trascendente, capaz de mover.
Martí hablaba mucho de la poesía que convence y Raúl se hizo partícipe de esta idea al asegurar que es la que el pueblo lleva en su corazón porque están hablando de él y de su dolor.
Martí consideraba al verso como un arma y al apropiarse de este criterio Raúl escribió:
Mi verso para hacerme una corona
Ni verso de acicate a mis instintos
Ni una mesa de versos
Ni versos para el llanto
¡Mejor los llevo al cinto!
Raúl Ferrer, en un recital de poesía que grabara para entregarlo como regalo a Juan Murillo, maestro intelectual argentino que participó en la Campaña de Alfabetización en Cuba, incluye estos verso destacando que: "Es la poesía que levanta de arriba, la fuerza de la poesía a la que se refería, la gran figura del revolucionario, guía de pensamiento y nuestra acción que era José Martí, de quien los argentinos leyeron tanto en la prensa bonaerense…". (2)
Raúl expresaba que a veces hay quien se sorprende cuando se dice que la poesía en plena evolución es lo primero y aseguraba que ese aprendizaje lo tuvo de sus maestros, de los poetas que había leído y de los grandes poetas que estudió entre los que citaba especialmente a José Martí, considerándolo como hontanar infinito de riqueza, un bosque tremendo, un poeta redondo, lleno de amor a la poesía…p.43 (3).
Los verso que precedieron el triunfo revolucionario y los escritos a partir de lo que Raúl denominó "la luz maravillosa de la patria", materializada la receptividad que en Raúl tuvo, el mensaje de sus modelos poéticos. Es por eso que no se equivocó Enrique Núñez Rodríguez, cuando en la despedida de duelo aseguró que:
"Raúl… viene entre sus amigos a sentarse con los viejos maestros de la historia para contarles, no el viaje aventurero, sino la marcha por la patria por los caminos de la educación y la cultura. Ellos, incluyendo el más excelso de los maestros, José Martí, lo recibirán como a un hijo". (4)
Como a un hijo, sí, porque Raúl veía en Martí al hombre que le brindo enseñanzas poéticas, pedagógicas y revolucionarias, su poesía es el espejo que delata estos sentimientos, sus versos y su magisterio están perneados de las concepciones y el ejemplo martiano.
A propósito "Romance de la niña mala", es un poema que incluye elementos críticos, cuando la poesía, dice:
Para poner al Martí
Que tengo en mitad del aula.
Ese "que tengo en mitad del aula", es una critica que Raúl hacía a los maestros que siempre estaban hablando del Rincón martiano, le parecía tan ridículo en un momento que Martí le hacía falta a la Patria, que la gente quisiera tenerlo arrinconado, a los rincones iban a parar los trastos, en la escuela de Raúl, Martí estaba situado al centro, él veía mucha infelicidad en la idea de los rincones martianos, en su parecer eso daba la impresión de que no se sentían seguros de las cosas buenas que Martí les había enseñado.
Siempre Raúl decía que esa poesía respira el ambiente de su escuela.
"ROMANCE DE LA NIÑA MALA".
Hay otro poema, lo escribió en 1939, cuando todavía ni despuntaban los albores de una lucha tremenda, por eso cada vez que el autor lo repetía se emocionaba al recordar la discriminación racial en los años 40, fragmento del poema:
Y mi amigo Antonio,
Mi amigo negro
Que se sienta junto
Conmigo.
Lo quiero
Porque van tres años
De estudio y juegos.
Hay un poema que especialmente revela el amor que sentía por los niños al igual que José Martí. En estos versos define la ideología del niño, el modo de ser que tienen y la forma de solidarizarse. El poema se titula: "EL NIÑO", y en una de sus estrofas dice así:
A un niño triste lo senté en mis piernas,
Y el niño se distrajo con el hilo del viento.
"Monologo del maestro ante el niño", constituye una autocrítica del maestro frente al alumno, en él hace referencia a "la rosa blanca de José Martí".
En 1945 escribió unas décimas para un concurso convocado por los vendedores de guayabera, dedicados a esta prenda de vestir tan elegante y tan cubana, en aquellos tiempos no obstante ser una prenda llamada campesina, el hombre de campo no podía disfrutarla por razones económicas.
En ellos hace referencia a la patria que deseaba José Martí.
-Eso, si la patria fuera
Como la quiso Martí,
Porque Patria es un mambí
¡De machete y guayabera!
Al conmemorarse los cien años de lucha, escribe el soneto "El asalto", entregándole vida a José Martí.
La poesía de Raúl Ferrer se caracteriza por el optimismo, el entusiasmo y la profunda admiración a José Martí.
José Martí en su pedagogía
Desde que se inicia como maestro cívico rural en la Escuelita de Narcisa, su labor pedagógica estuvo permeada por el profundo sentimiento martiano que en él había fructificado. Sus alumnos todavía aseguran que nadie ha enseñado la vida y obra de Martí como lo hizo él, los incentivaba para que estudiaran. El maestro –poeta descubre que desde el punto de vista artístico los alumnos tenían serias dificultades, no sabían cantar, ni recitar; traían al aula viejas y tristes canciones que hablaban de desgracias humanas y otras historias, Raúl comienza a componer versos en función de su laboreo pedagógico y les enseñaba clásicos de la poesía martiana para niños "Los zapaticos de rosas", "Los dos príncipes".
Cada 28 de enero se hacían fiestas en la escuela, enseñaba juegos a sus alumnos en los que incluía frases y anécdotas martianas, se las ingeniaba y hasta en algunas actividades deportivas incluía el pensamiento de Martí.
El 19 de mayo se realizaban actos donde se hacían recuentos sobre la vida y obra de José Martí, Raúl intercambiaba conocimientos con sus alumnos, especialmente las cartas de Martí a su madre y otros aspectos relevantes porque a decir verdad en cada momento les hablaba de Martí.
En la biblioteca de la escuela estaban los 24 tomos de las obras completas de José Martí, porque como decía Raúl –"su escuela era pobre pero con muchos libros".
Desde 1948 hasta 1954, Raúl se desempeñó como maestro en el Colegio Bautista de Yaguajay, José Razo Rondón, uno de sus alumnos cuenta: "En el aula, para pasar la lista, al contestar había que decirle un pensamiento de Martí y cuando no se lo sabían, los dejaba de pie toda la clase, de esta forma incentivaba a los alumnos a conocer la obra del maestro (15 de noviembre de 2004).
Esta fue una de las iniciativas concebidas por Raúl en el año 1953 para homenajear a José Martí en su aniversario.
Raúl Ferrer fue uno de los promotores de un concurso infantil sobre la vida y obra de José Martí. Sus alumnos participaban en las veladas y cenas martianas.
En las aulas donde Raúl impartía clases no faltaban las imágenes de las principales personalidades de la historia de Cuba.
Como profesor de Historia tenía un estilo muy personal, pues encomendaba a cada uno de sus alumnos a impartir durante varias clases una especie de conferencia sobre la vida y obra de Maceo, Martí, Agramante, Céspedes y Gómez entre otros, así los obligaba a profundizar en el conocimiento sobre los héroes de guerra y los principales acontecimientos históricos.
Guiaba a sus alumnos para que realizaran profundos análisis de los versos del José Martí fundamentalmente desde el punto de vista humanista, porque siempre los recitaban de una manera rutinaria sin verdadero significado.
Enfatizaba en que a pesar de ser José Martí el Apóstol de la independencia había alcanzado también un lugar cimero como poeta, escritor y periodista en un mundo intelectual hispano y otras lenguas, si su obra fuera traducida algún día. Les citaba ejemplo de "La Edad de Oro", los "Versos sencillos" y sus crónicas periodísticas cuando fue corresponsal de prensa en el diario "La Nación".
A pesar de que los alumnos de Raúl en el año 1953 recibían la enseñanza primaria, les leía crónicas martianas sobre sucesos acaecidos en Norteamérica que despertaban enorme interés en ellos, pues las clases de historia que Raúl impartió este año se llenaron de la intensidad de su fervor martiano.
Las adivinanzas fue otro de los recursos utilizados por Raúl:
Un bigote negro.
Una frente ancha.
Amó mucho a los niños.
Y murió para la patria.
Cuando Raúl dijo esta adivinanza en el aula, todas las manos se alzaron para responder, de ese modo motivó la clase de escritura, indicó a sus alumnos que hicieran una composición que se titulara "Martí amó mucho a los niños". Esa misma semana ellos aprendieron un canto a Martí que había sido compuesto por el maestro.
María de los Ángeles (Coco), una de sus discípulas recuerda la letra de una canción que Raúl compuso cuando fue su maestro:
Nosotros somos la esperanza del mundo
Cantemos nuestro himno para ti
Nosotros somos los que sabemos querer
Te queremos con fe viva ¡oh Martí!
¡Oh! Martí, Apóstol, Maestro, poeta peregrino
De fulgente visión, la esperanza del mundo.
Los que sabemos querer, te queremos
Te entregamos cual flor el corazón. (5)
Fernando Luis Sánchez, otro de sus alumnos, recuerda que cuando ellos entraban al aula, antes de comenzar las clases, cantaban una canción que comenzaba así:
28 de enero del 53
Ha nacido un niño,
Pero un niño que es la raíz
De un bosque de rosa y de laurel… (6)
La admiración de Martí por Maceo estaba presente en Raúl, en no pocas ocasiones les hablaba a sus alumnos de estas dos personalidades de la historia de Cuba.
Como José Martí, Raúl fue un maestro de maestros.
Homenaje
Desde edades muy tempranas Raúl Ferrer sintió una devoción martiana, en una ocasión expreso:
"Yo fui martiano desde que nací, porque los maestros míos siempre eran martianos, entonces la Escuela Pública está muy ligada a José Martí, en mis años de Escuela Pública conocí a Martí y entonces me sabía los versos sencillos". (7)
En su proceder siempre se hizo acompañar de las ideas de José Martí, Raúl veía en él al hombre que lo preparó para la vida lo que revelaba en el eterno homenaje que le tributó hasta los últimos días de su vida.
En 1946 ocupa la presidencia de la Asociación José Martí en Yaguajay, cada 28 de enero hacía que su pueblo natal se vistiera de gala, la Sociedad Instrucción y Recreo nombrada Círculo Martí era la sede de las veladas martianas que con mucho esmero él preparaba para celebrar el natalicio del Apóstol, en varias ocasiones comprometió a intelectuales y artistas de renombre nacional para que vinieran a Yaguajay, entre ellos a Raquel Revuelta, el Indio Naborí, Onelio Jorge Cardoso y de forma especial el dúo de las Hermanas Martí que concurrieron al acto realizado en el año 1953, aquella brillante velada dejó un recuerdo memorable para los yaguajayenses, pues se considera que esa noche Raúl Ferrer pronunció el más profundo discurso de su vida como presidente de la institución "José Martí", a diferencia de otras ocasiones que traía a un orador.
Durante los años que se desempeñó como maestro de la Escuela Pública, donde impartía clases para adultos, organizaba cenas martianas en la esquina de Martí y Zayas en Yaguajay, brindaban vino y alimentos ligeros, pues lo esencial de esta actividad era la fecha: 28 de enero.
Conclusiones
Se puede afirmar que la presencia de José Martí es constante en la poesía de Raúl Ferrer, de forma reiterada aparece su nombre envuelto en imágenes, metáforas, símiles, es casi un símbolo. Además las concepciones poéticas y pedagógicas de Martí están siempre presentes en el proceder de Raúl, otra muestra de su profunda devoción martiana es que no despreciaba momento, ni ocasión para rendirle homenaje y evocar su nombre.
En Raúl Ferrer se sintetizan y revitalizan los mejores valores humanos, revolucionarios, poéticos y pedagógicos de José Martí.
José Martí y Raúl Ferrer, entre otras personalidades valiosas, por la vigencia de su pensamiento y su obra constituyen modelos a imitar en la actual coyuntura internacional, excepcionalmente como poetas y pedagogos.
Recomendaciones
Continuar profundizando en el estudio de este tema.
Divulgar el contenido de esta investigación a través de matutinos y otros medios de difusión.
Insertar este trabajo en el proyecto educativo de la Universidad cubana.
Establecer coordinaciones con el MINED a fin de que se apliquen, en las diferentes enseñanzas, los métodos que el maestro y poeta yaguajayense utilizaba para enseñar la vida y obra de José Martí.
Informar a la Dirección de la Sociedad Cultural José Martí en la provincia de la existencia de este trabajo.
Bibliografía
1- González González, Rosa Ana. "Los Duendes Descalzos". Ediciones Luminarias. Sancti Spíritus, 2002.
2- Martín García, Olivia. "Esta ansiedad por contarlo". Ediciones Matanzas, 2001.
3- González González, Rosa Ana. "Raúl Ferrer, obra y perspectiva" (Inédito).
4- Ferrer Pérez, Raúl. "Viajero sin retorno". Bolsilibro Unión. UNEAC. Ediciones Unión, La Habana. 1979.
5- Ferrer Pérez, Raúl. "Décima y Romance". Editorial Letras Cubanas. Ciudad de la Habana. 1981.
6- Ferrer Pérez, Raúl. "El retorno del maestro". Editorial Gente Nueva. La Habana. 1990.
7- Ferrer Pérez, Raúl. "Espejo de paciencia". Poema I. La Habana, 1990.
8- Colectivo de autores. Cronología de Raúl Ferrer Pérez. Ciudad de la Habana, Cuba, 1998.
Otras fuentes.
1- Entrevista a Raúl Ferrer Pérez, La Habana, 1990 (Inédita).
2- Testimonios de alumnos y amigos de Raúl:
Sergio Quiñones.
José Razo Rondón.
Oscar Milián.
María de los Angeles García.
Fernando Luís Sánchez.
Citas.
1- Diccionario Martiano.
2- Recital de poesía que Raúl Ferrer dedicó a Juan Murillo, maestro intelectual argentino.
3- Martín García, Olivia. "Esta ansiedad por contarlo", p43.
4- Palabras de Enrique Núñez Rodríguez en la despedida de duelo de Raúl Ferrer Pérez.
5- Entrevista oral realizada a María de los Ángeles García.
6- Entrevista oral realizada a Fernando Luís Sánchez.
7- Entrevista oral realizada a Raúl Ferrer en 1990.
Autor:
Reinaldo Enrique Ojeda González.
Licenciado en Estudios Socioculturales.
Centro laboral: Teatro Principal de Sancti Spíritus.
Municipio: Sancti Spíritus.
Cargo: Subdirector general.
Enviado por:
Kenialiss Solenzal Hernandez