Maltrato infantil es toda forma de violencia o perjuicio contra niños, lo cual puede afectarles su evolución física o psíquica y les impide alcanzar una emocionalidad y desarrollo sanos. Es una patología social de múltiples consecuencias. Este trabajo determina el grado de información y motivación que tienen los docentes de Educación Básica de Mérida – Venezuela, sobre la importancia del maltrato infantil y sus consecuencias. También demuestra la participación de los maestros en la detección oportuna de éste fenómeno social, dentro de un equipo multidisciplinario; pediatras, médicos de familia, psiquiatras, psicólogos, trabajadores sociales, enfermeras, juristas y en especial los docentes. Es un estudio descriptivo, transversal, se aplicó un cuestionario a maestros de diferentes instituciones educativas de la Educación Básica, con la utilización de un muestreo probabilístico intencional. Se solicitó información a los docentes sobre la percepción que tienen del maltrato infantil y posibles situaciones de riesgo en sus alumnos. El 100% lo considera un tema de importancia; el 61% consideraron que los padres o representantes maltratan a sus niños, de acuerdo con distintos indicadores conductuales, el 65% de los maestros podían manejar situaciones conflictivas de sus alumnos, el 99% manifestó disposición de recibir entrenamiento y orientación especializada. Se concluyó que los maestros manejan conceptos adecuados, además, mostraron gran disposición en la búsqueda de soluciones al maltrato infantil, a pesar de que la mayoría de los encuestados afirmaron no haber recibido orientación básica sobre el tema; sin embargo, pudieron aportar valiosa información, que de ser aplicada, contribuirá a la disminución de este fenómeno universal y silencioso
Palabras claves: maltrato infantil, maestros, educación básica, Mérida.
Abstract
Teachers’ perception of child abuse in basic (primary) school in Mérida city, Venezuela.
Child abuse is considered any form of violence or injury inflicted upon children, which can affect or diminish their physical or psychological evolution, and which hinder them from reaching a healthy development and emotionality. It is an aggression behaviour including all the members of a society through long time ago, therefore becoming a social pathology with many severe consequences. The object of this work is to determine the degree of information and motivation in Basic Education (Primary school) teachers of some schools in the city of Mérida, on the importance of child abuse and its consequences. At the same time to demonstrate the valuable teachers participation in the early detection of child abuse, among a multidisciplinary group including pediatricians, family physicians, psychiatrists, psychologists, social workers, nurses, lawyers, and especially teachers. This is a descriptive, transversal study. A questionnaire was applied to teachers in several Basic Education centers. The sample was chosen by the intentional probabilistic method. The questionnaire asked for information on the teachers’ perception about child abuse and the probability of risk factors among their pupils. The results showed that 100% of the teachers consider the subject as very important; also that 61% of the parents abuse their children according to different behaviour indicators. At the same time, 65% of the teachers think they can handle their pupi1s conflictive situations, and 99% said they wish to receive specialized training and orientation on the subject. We concluded that the teachers have adequate concepts on child abuse, and showed a good will to look for solutions to that problem despite the fact that they have not received basic orientation.
Key Words: Child abuse, teachers, basic education, Mérida, Venezuela.
El síndrome de maltrato infantil es un fenómeno complejo de la sociedad, conocido desde todos los tiempos, con características especiales, puesto que puede envolver a cualquier grupo socioeconómico, aún cuando se acentúa en los estratos más bajos de la población
Este síndrome, visto en toda su dimensión, no permite una definición exacta que logre precisar los acontecimientos surgidos en cada situación donde están involucrados los estados y sus gobiernos, así como las familias más vulnerables en la sociedad
El concepto de maltrato infantil, abarca el abandono, el abuso sexual, el maltrato emocional y la explotación laboral, entre otros. Según datos de la UNICEF, citado por Loredo (1994), existen en Latinoamérica alrededor de 117 millones de personas que viven en la miseria y de ellas 75 millones son niños. En Venezuela, la situación es muy semejante, a pesar de las acciones gubernamentales en la atención de este fenómeno social de pobreza crítica, de marginalidad moral y espiritual. De esta forma el maltrato infantil se convierte en una patología social y universal, que tiene implicaciones multicausales y connotaciones médicas, culturales, jurídicas, políticas, religiosas y educativas. Su incidencia y prevalencia en la población son de carácter destructivo, creando así un deterioro bio-psico-social creciente, donde no solo está el agresor y el agredido, sino un contexto familiar deteriorado y una sociedad cargada de injusticia social y violencia, con alto índice de analfabetismo, situación determinante en la mayoría de los casos, dada que la educación y la sensibilización de los padres o representantes sobre la equivocada percepción de lo que es un niño, son elementos potenciales en la génesis de este problema
La realidad, antes descrita, obliga a las autoridades competentes a hacerse planteamientos serios y reflexiones profundas, y darle prioridad a la solución o control de este fenómeno, así como orientar programas de protección a la mujer y al niño en todas sus etapas. Por lo tanto, será necesario crear grandes proyectos a corto y largo plazo y dedicar recursos adecuados para la solución progresiva de este problema. Para esto es menester invertir cuantiosos recursos en la atención educacional y médico-sanitaria de la población, de manera de alcanzar en este sentido logros en los aspectos esenciales para el desarrollo y la calidad de la vida, en especial de la población infantil y lograr una reducción sustancial del maltrato infantil y por ende garantizar un sano desarrollo evolutivo, en el ámbito escolar, además, en la competencia social y emocional del niño
En este sentido, Loredo 1994, afirma que el maltrato infantil es una manera extraña y extrema de lesiones no accidentales, deprivación emocional del menor o cualquier modelo de agresión sexual ocasionados por los padres, parientes cercanos o adultos en estrecha relación con la familia. Al mismo tiempo, Puga 1997 (citado por Meneghello 1997) considera el maltrato infantil como producto de la vida moderna, donde predomina la cultura de la violencia y sus implicaciones desvirtuadas en la formación ética y moral del niño y el adolescente
Por lo anteriormente expresado, la prevención de este mal social se debe fundar en los métodos más acertados, porque es en la edad infantil cuando se sientan las bases psíquicas y espirituales que se necesitan para formar jóvenes confiados en sí mismos, emocionalmente estables y capaces de vivir plenamente y desarrollar existencias significativas
Por esto se debe vigilar su respeto, dignidad y autoestima, de manera de fomentar un sólido sentido del valor humano
De igual manera el Síndrome del Niño Maltratado (SNM), según Baeza 1986 (citado en el Boletín Médico del Hospital Infantil de México de 1990), señala que es toda lesión física, sexual y emocional, infligida a un niño por un adulto, ya sea por descuido, negligencia o premeditación
Dada la diversidad de criterios y de distintos autores, es posible separar las múltiples formas de síndrome de maltrato o abuso infantil, según lo afirma Tieles 1998, ya que permite tener una visión más exacta de la dimensión de este problema y el comportamiento en distintas regiones, para tener una vía idónea para evaluar la detección y alcanzar una prevención adecuada desde múltiples líneas de acción. De aquí que este autor, lo clasifica en: Maltrato Infantil, de forma general y Maltrato Infantil, de forma particular. Desde luego, ambos grupos están interconectados, porque inciden en la estabilidad de las familias y sus aspectos económicos, sociales, psicológicos, culturales y organizativos
En la forma general, afecta a grandes núcleos de población en un país o una comunidad. Aquí la acción debe estar dirigida a prestar asistencia, tal como apoyo a las familias y en especial a la mujer y al niño. Esto es la consecuencia inmediata de la desasistencia por parte del gobierno y el Estado, cuyas estructuras socioeconómicas permiten las desigualdades entre los diferentes grupos de población y sus expresiones están dadas por: pobreza, insuficiencia médico-sanitaria, analfabetismo y en la deficiencia estructura educacional, dentro de un contexto creciente de violencia y drogadicción
La forma particular del maltrato infantil se corresponde con núcleos familiares con características especiales dentro de la comunidad, donde los niños son las víctimas principales. Son familias disfuncionales o padres desajustados que no se adaptan socialmente. En ello son frecuentes los conflictos conyugales, baja escolaridad, alcoholismo y conflictos intrafamiliares en general
La importancia de este tema radica en el maltrato que recibe un niño tiene graves consecuencias sobre su desarrollo evolutivo. Esto puede llegar a determinar el éxito o el fracaso del futuro ciudadano y recordando una frase de la Asociación Murciana de Apoyo a la Infancia Maltratada, cuyo fin es la prevención de esta patología (AMAIM 1996), "Detrás de un niño maltratado hay siempre una persona que daña y otra que calla"
En este sentido, Meneghello 1997, cita que el maltrato infantil ha existido siempre y que el niño ha sido objeto de crueles castigos. Este autor indica que no es una enfermedad de la pobreza, sino de la humanidad, por esto es necesario una revisión en conjunto de todos los factores que inciden en este fenómeno y por ende el entorno familiar, porque es aquí donde se genera este trastorno, por tanto hay que considerar la estructura y funcionalidad del núcleo familiar
Manifestaciones clínicas del niño maltratado, La violencia infantil se presenta en distintas formas clínicas, de acuerdo con Puga 1997 (citado por Meneghello 1997), abarca una amplio espectro, siendo la más frecuente la forma física, dada por lesiones cutáneas como hematomas, lesiones cefálicas, oculares, fractura de cráneo. Otras muy frecuentes y responsables de la mayoría de las muertes son las lesiones viscerales, sobre todo las abdominales. Otro aspecto muy importante, corresponde al orden emocional, denominándose "fenómenos de deprivación", donde el maltrato no se expresa solo físicamente, sino se debe al descuido, falta de atención en todo lo referente a la vida de relación del niño, especialmente en los aspectos educativos. Es así como este tipo de maltrato puede conllevar a daños muy profundos y con efectos muy graves y que al mismo tiempo son difíciles de diagnosticar (porque los golpes no están por fuera).
Por esto Loredo 1994, señala que los efectos del maltrato emocional de los niños pueden ser tan devastadores corno los del maltrato físico y éstos no se originan en la mala conducta del niño, sino en los problemas psicológicos de los adultos. Por lo antes dicho este síndrome no puede pasar por alto de ningún observador que esté en contacto con el niño, llámese médico, psicólogo, docente, etc., ya que se trata de un mal humano que ha adquirido proporciones sorprendentes, según datos de la UNICEF 1997.
Una nueva era en pro de la infancia
La Organización Panamericana de la Salud, basada en las normas y metas de la Convención de los Derechos del Niño (1989) y la Cumbre Mundial sobre la Infancia, de 1990, convocó a la Primera Reunión del Grupo de Consulta Regional sobre el Maltrato Infantil. Entre las conclusiones, según Tieles 1998, se define al maltrato infantil como "Toda conducta de un adulto con repercusiones desfavorable en el desarrollo físico, sicológico o sexual de una persona menor". Afirma Tieles que se trata de un problema polifacético y multicausal, cuyo tratamiento debe plantearse en una plenaria multidisciplinaria y realizar una investigación científica de sus componentes
De esta forma, se pone de manifiesto, la noble labor del docente en todos sus ámbitos, y se convierte en una figura principal en la detección e identificación oportuna de situaciones particulares en el contexto escolar. El docente es el principal observador de comportamientos psíquico-conductuales, y por esto Landsheere 1977, resalta la importancia psicopedagógica en función de los intereses del niño e indica que se debe hacer de esto una fundamentación educativa, "ya que de obtener un hombre sabio, importa hacer de él previamente una persona emocionalmente sana". Por esto la misión del docente en esta tarea es de trascendencia, sin límites, en especial por ser un "vigía" de la salud física – mental de sus educandos. De ahí la gran responsabilidad, como lo señala Highet 1982, '"…fácil en ciertos aspectos y difícil en otros". La parte más fácil es la rutinaria, pero la trascendente está en la transformación de la mente, moldear una personalidad, templar una voluntad, señalar un camino, al mismo tiempo brindar la incomparable felicidad de haber ayudado a forjar un ser humano" y CorKille, 1983, dice que el trato que se le da al niño define la propia imagen, esto es su autoestima elevada. Se conocen casos de individuos que, cuando niños, tuvieron las peores relaciones posibles con sus padres, y que, pese a todo, son hoy gente exitosa
Pero los atributos externos del éxito no son índices seguros de paz interior. Por todo esto los niños necesitan experiencias vitales que prueben que ellos son valiosos y dignos de que se los ame y porque son ellos los protagonistas principales del siglo XXI
El objetivo principal del presente trabajo es identificar como se expresa el maltrato infantil en el desarrollo emocional y funcional del niño en su ambiente escolar, analizar la actitud del docente hacia la identificación y manejo de situaciones que indique maltrato en sus alumnos y, a su vez, determinar las acciones de los docentes hacia el representante sobre posibles conductas maltratadotas (tabla 1).
El presente trabajo se desarrolló en quince instituciones educativas del área metropolitana de la ciudad de Mérida, Venezuela, con una muestra de 221 docentes de un universo de 454. La investigación que se realizó fue de tipo descriptivo, correlacional y de corte transversal, donde se evaluó el grado de información y motivación de los educadores de Educación Primaria. El instrumento utilizado fue una encuesta diseñada especialmente para esta investigación y constó de diecisiete preguntas, de las cuales dos preguntas abiertas, dos de selección y trece preguntas cerradas de complementación dirigida. A los educadores de las instituciones seleccionadas aleatoriamente, se les explicó previamente los fines de la investigación y sus posibles programas de intervención
Los resultados de las encuestas indican que el 71% de los docentes corresponden a instituciones educativas que se encuentran en el área urbana, mientras que el 29% restante se distribuyen en el área rural
Con respecto al sexo de los docentes encuestados, se obtuvo que el 97% corresponde al sexo femenino y el 3% al masculino. Esta distribución es relevante en este estudio, puesto que existe una mayor disponibilidad en la mujer docente de identificar oportunamente situaciones de riesgos como maltrato en sus alumnos por la condición inherente de ser madres
Dada la pregunta ¿Qué entiende usted por maltrato infantil?, se obtuvieron varias modalidades, donde el 31 % de los conceptos emitidos incluyeron el maltrato físico, como definición básica; el 25% incluyó maltrato verbal; el 17% indicó maltrato social. El 100% afirmó que era un tema de gran importancia porque es un problema frecuente y de repercusión social.
Tabla 1. Distribución de la opinión de los docentes sobre la relación del maltrato con los aspectos emocionales y funcionales del niño en el aula.
En la tabla 1 se muestra la relación del maltrato infantil con el desarrollo emocional y funcional del niño y se observa que más del 20% señaló esta relación como generadora de problemas de conducta y bajo rendimiento escolar.
En cuanto a la opinión de los docentes, 61 % considera que en sus aulas hay niños que supuestamente son maltratados. Del mismo modo se interrogó sobre qué elemento suponían situaciones de abandono de sus alumnos por parte de los representantes y el 26% indicó que éstos no asisten a las reuniones y el 31% muestran actitudes violentas cuando se entrevistan con el docente. De igual modo, 64.71% de los docentes consideraron poder manejar las situaciones conflictivas de sus alumnos (Figura 1). El 99% de los docentes encuestados afirmaron que el maltrato infantil sí era prioridad social, y el 26,83% (tabla 3) señaló que se debe formar a los niños en adultos sanos emocionalmente, porque son el futuro del país. En cuanto a la opinión de los docentes sobre si es posible prevenir el maltrato infantil, el 99% afirmó que sí, el 23.44% sugirió que la forma más conveniente es ofrecer orientación, charlas, talleres, convivencias con la comunidad (tabla 4). El 98,64% de los docentes desea recibir instrucción sobre este tema y el 36% indicó que necesita orientación en los aspectos de las consecuencias del maltrato infantil. De la muestra de 221 docentes encuestados, el 90,50% señaló no haber recibido la debida información sobre el tema.
En la tabla 2 se aprecia que el 21,44% opinan no saber conducir esta situación y el 17,1% consideraron la alternativa de conversar con los padres y representantes.
DISCUSIÓN
En los últimos tiempos se considera que abusar del menor no solo consiste en golpearlo físicamente, sino abarca una amplia gama de hecho destructivos que lesiona el bienestar emocional. En este trabajo partimos del supuesto de que el docente es un recurso valioso dentro de un equipo multidisciplinario, el cual debe ser aprovechado, tanto por su experiencia como por sus necesidades de actualización. En todo caso se presume, tal como se estableció en la hipótesis, que un alto porcentaje, tiene conocimientos y disposición favorable para la identificación y prevención del maltrato infantil, lo cual se correspondió con los resultados obtenidos en las múltiples respuestas que ofrecieron los educadores. Igualmente se percibe un concepto bien orientado sobre el tema, señalando modalidades, que coinciden con las concepciones de algunos autores, (Loredo 1994, Tieles 1998, Finkelhor 1988), cuando afirman que el maltrato es físico, social, emocional y sexual, entre otros. Al mismo tiempo se observó, tal como suponíamos que el 100% de los docentes considera que es un tema prioritario, de importancia social y que debe ser detectado oportunamente.
Con respecto a las observaciones de los docentes sobre la relación del maltrato con la funcionalidad escolar, manifestaron que se expresa fundamentalmente en problemas de conducta y bajo rendimiento escolar. En un 99% los docentes
señalaron el fenómeno como un problema prioritario a resolver, y estos destacaron muy especialmente que es un problema grave, urgente que debe resolver el Estado venezolano para formar ciudadanos sanos emocionalmente. Esto se corresponde con lo señalado por Papalia 1992, cuando cita que todo abuso en el niño con frecuencia tiene consecuencias graves a largo plazo. De aquí que se hace imperativo establecer estrategias y voluntad política sobre estos aspectos críticos, en función de una sociedad cada vez más violenta, y actuar sistemáticamente en todas sus instancias, como el individuo, familia, comunidad, etc., para así tener una visión conjunta del problema en su totalidad, dentro del contexto jurídico, económico, culturales y educativas (Convención de los Derechos del Niño, UNICEF 1997), donde todos los sectores señalados tienen un nivel de compromiso y responsabilidad ante la magnitud de esta patología social.
Los educadores también afirmaron que este problema se puede prevenir en el contexto escolar, mediante acciones dirigidas a los padres y representantes para informarlos, formarlos sobre las implicaciones y consecuencias que conlleva maltratar a un niño. En este sentido, Landesheere 1977, destacó la labores del docente como agente facilitador y orientador en la prevención de estos problemas sociales, sin la intención de suplantar al psicólogo, etc. Por esto el docente va a verse progresivamente urgido de ejercer una acción preventiva y comunitaria de gran valor.
En este mismo orden de idea, el 99% de los educadores, manifestaron la necesidad de recibir información y orientación sobre este tema y qué hacer en circunstancias delicadas que comprometa su actuación. A esto se refieren Leif y Delay, 1965, quienes señalan que se debe preparar eficazmente al maestro de la enseñanza común en los aspectos básicos de la vida emocional en edad escolar
De todo lo expuesto se considera que los docentes sí tienen una alta motivación y disposición de conocer más sobre el tema, por sus limitaciones conceptuales y operativas, dada a la falta de orientación especializada para así hacer de ellos auténticos agentes multiplicadores de acciones preventivas y defensores de los derechos del niño.
La mayoría de los docentes posee conceptos bien definidos sobre Maltrato infantil. Los educadores presentan alto grado de motivación sobre el tema de maltrato infantil.
Los maestros señalan que le maltrato infantil es un tema de importancia porque es un problema frecuente y de graves consecuencias. Los docentes afirmaron que, en su mayoría, que es un tema prioritario, multidisciplinario y de competencia especial del Estado venezolano
Más de la mitad de los educadores encuestados, demuestran actitud favorable para detectar y manejar situaciones de maltrato que se presentan en sus alumnos
Casi la totalidad de los docentes encuestados consideran que le maltrato infantil es un tema de importancia a enseñar en las escuelas porque esto permite que los niños conozcan sus derechos
Los educadores sostienen que más de la mitad de los niños que son maltratados en su contexto familiar, tienen problemas de conducta, bajo rendimiento escolar y trastornos emocionales
Los maestros manifiestan que existen elementos indicativos en los padres y representantes que les permiten sospechar que son padres maltratadores
Menos de la mitad de los docentes consideran que una de las formas de prevenir el problema del maltrato infantil es creando escuelas para padres, ya que es una necesidad social
La mayoría de los educadores encuestados declararon estar dispuestos para dictar charlas a los padres y representantes sobre la importancia y consecuencia del maltrato infantil
Casi la totalidad de los maestros encuestados manifestaron la necesidad de recibir capacitación sobre le tema por parte de especialistas
La mayoría de los docentes afirmaron no haber recibido información sobre el tema de maltrato infantil. Sin embargo, los docentes encuestados demuestran disposición y actitud favorable para contribuir a disminuir esta patología social
* Parte de la Tesis de Especialista del segundo autor.
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Pedro José Salinas y Nilda Campos
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