Las aventuras de Camilo

INTRODUCCION

A veces sentimos la sensación de que lo pasado no regresa al presente, sin embargo hay momentos de lucidez en los cuales existe una clara evidencia de estar viviendo el pasado, y sentirse dentro de ese letargo es algo conmovedor, porque sacude la estructura cerebral y deja un sabor agridulce de querer repetir la experiencia.

Camilo experimento esa sensación a la edad de 70 años y su primer deseo fue escribir esas experiencias para inmortalizarlas en su Ego, para que no se fueran nunca más y poder tenerlas allí presentes para cada vez que él quisiese consultarlas las tendría a su disposición.

Lo primero que hizo fue dejar que su mente empezara libremente a divagar por el pasado, haciendo escala en cada etapa para escribir lo recordado y volviendo al camino andado cada vez que terminaba de hacerlo. Bajo el cielo no hay nada oculto se dijo y lo vivido es lo vivido; al fin y al cabo, fueron mis actuaciones, no las de nadie que me pueda juzgar porque las dirijo INTRODUCTION Sometimes we feel that the past does not return to this; however there are moments of lucidity in which there is clear evidence of living the past, and feel within that lethargy is something poignant, because it shakes the brain structure and let mixed feelings of wanting to repeat the experience. Camilo experiment that feeling at the age of 60 years and his first wish was to write these experiences to immortalize in his ego, that they should not have them anymore and power were present for every time he wanted to consult the have at their disposal.

The first thing he did was let his mind began to wander freely about the past, stopping at each stage to write the memorable and walked back to the way each time it finished. Under heaven nothing is hidden and life experiences are told is lived, the end of the day were my actions, not anyone to judge me because the address EL AUTOR

TIEMPO DE AMAR

Los Años pasaron presurosos, sin poderlos detener, en el tiempo real y cuando se miden en sueños es dificil, solo queda el sabor de lo vivido Lo que poco recuerda y que más no se le olvida es cuando asistía a la escuela, quizá era la epoca en que los valentones mayores como Alirio, Víctor, Gonzalo, le jugaban malas pasadas quitandole las canicas que ganaba jugando al neto o cuando salían de paseo a la quebrada y en el pequeño estanque se metían todos a chapucear y los más adultos sumergían a los más pequeños en el agua Le gustaba frecuentar el estanque, porque allá bajaban las mujeres a lavar la ropa en la quebrada y las niñas se revolvían en el pequeño charco, Asi tenía tiempo de comparar detrás de los arbustos, muy escondido, las curvilíneas formas de aquellas mujeres y jóvenes y luego comentarlo con los primos que siempre le preguntaban.

También le gustaba las competencias de caballos, cuando los primos traían de la hacienda los Jamelgos; con ellos, competía con su caballo Mariscal, hijo de un pura sangre del ejército de la Caballería de Ipiales, y siempre les ganaba en la recta de los Muriel, de unos 500 metros de largo. En esas lides su padre le acolitaba. Vas a entrenar para ser jinete de Carrera.

Camilo recuerda aquellos años cuando mozo, corría libremente entre los trigales ,montaba a caballo , casaba torcaza y las preparaba de Cena, en la finca de los abuelos, comprada a uno de los Clavijos;aquellos días juveniles llenos de emociones, que parecían interminables cuando su padre le hacía alguna asignación en la Finca: "Mañana debes ir a la cosecha de patatas ,hay que controlar que no quede mal recogida la papa, y hay que tratar de conseguir un buen comprador, para que no haya que almacenarla mucho tiempo en la bodega, más bien que se la lleven fresca en los costales".

Recordaba, como se veía a escondidas con su amiga en los baños de la escuela, Ella era un poco mayor que él, unos cinco años quizá, morena de andares provocativos, exuberante de senos; ahora estaban de vacaciones y nadie aparecía por allá, Asi que era fácil meterse a los baños y buscar las emociones, enredándose en besos y abrazos, pues era su primer amor, y ella le manifestaba estar a gusto, Asi que siempre se desbordaban en la pasión hasta consumarla y como toda pasión pasa cuando se desahoga, Asi ocurrió a esos 15 años. Y cantaba, la locura del Amor se cura solo con un condón.

Pensaba también como con sus amigos capaba al colegio y se marchaban con el loco López, Mokingo, y el Chihuaco a coger moras detrás del Pescadillo. Era una Aventura fantástica: llevar una taza de dos litros de capacidad desde la casa de Mokingo hasta allá, y llevar la libra de azúcar, las tres cucharas para aplastar la mora y batir todo en la morada; luego encaramelarse de moras hasta los bigotes. Pero había algo de cuidado, él Inspector de Menores como se le conocía; un Viejo inspector muy fuerte para correr y caminar, que se sabía los escondederos de los que capaban al colegio y si caías en manos de él, te fregabas, porque eras reportado al Colegio y bajaban tú calificación de conducta Pasarlo bueno era, los días viernes y sábados, cuando se disponía de dinero, que generalmente se sustraía de casa; cada elemento de la Cáfila, la agrupación de cinco amigos, amigos para lo que sea. Los días viernes solían madrugar para estar a la hora del desayuno frente al restaurante de los Amellos, que servían un café con nata y un pan muy sabroso. Se congregaban en las horas de la noche, después de haber realizado los ejercicios y tareas que dejaban en el colegio y pasaban por el parque para reunirse y empezar a planear como se distribuirían para visitar a las enamoradas. Ahora ya alcanzaban los 17 años.

Generalmente acompañaban a Camilo a la esquina del movimiento, allí lo dejaban, para que este se reuniese con Lucia, a la cual siempre llamaba mediante una entonación de una canción silvada a manera de Ruiseñor. Por lo general ésta siempre estaba pendiente en la ventana de su casa y miraba por entre las cortinas, La señal de dos veces mover la cortina era que saldría, una sola vez no se podía. La felicidad de Camilo se desbordaba cuando Lucia salía al portal de su casa, allí se daban la cita todas las noches, cuando su padre había salido de paseo con sus amigos a tomarse el cafelito, caminar y darse unas vueltas al parque y regresaba en término de una hora; tiempo en el cual debía repartirse la Felicidad entre besos, abrazos y unas cuantas expresiones románticas, en las cuales se discutían encuentros, salidas, para darse otra oportunidad de amarse.

Mientras tanto, los amigos bajaban a la zona Sur del pueblo, allá estaban las pretendidas y Camilo les alcanzaba para continuar la noche de escaramuzas. Escaramuzas que era necesario realizar, porque todos los encuentros amorosos con las chicas eran a escondidas. La época no permitía que los enamorados se mirasen libremente: en un parque en un cine, en una cafetería; los padres reprendían severamente a las hijas si se descubría el romance.

Cuando esto ocurría, que te dejaban entrar a la casa y visitar a la novia en el portal, los padres eran los primeros en decirte, ten cuidado hijo esos quieren casarte con la fulana de tal y esto incidía en que más tarde abandonabas la novia por temor a caer.

Camilo fue testigo de lo que le ocurrió a su buen amigo, se enamoró, le dieron entrada libre y no tuvo tiempo de sacudir el pescuezo, cuando ya estaba casándose con la muchacha…

Muchas noches, la Cáfila se congregaba en el parque infantil a contar historias o en un lote de terreno frente a la zona de carreteras, se preparaban para hacer gimnasia, y levantar columnas, en las cuales Camilo hacía de base, para que el Oso colocara sus brazos sobre sus manos y este le izara a pulso hasta levantarlo totalmente y sostenerlo sin dejarlo caer, otras veces el Mulo que era el más ágil y liviano era levantado a la altura de 1,70 que era la altura de Camilo.

Camilo por esa época había conquistado una joven de la Capital que fue de visita al pueblo, la muchacha era de tez blanca, sus cabellos castaños y exhibía un buen derrier, alta de estatura, pero estaba bien proporcionada. Ella había conocido a Camilo por referencia de su tío quien a la sazón era el Auditor del pueblo y conocía y era amigo del padre de Camilo .Durante varios días fue asediada por los jóvenes de la ciudad, querían levantarse esa novia para las navidades, para exhibirla durante las fiestas. Ella escasamente salía a pasear en el día y en las noches miraba por la ventana de su casa como se amontonaban sus pretendientes. Un buen día salió al parque de la ciudad con otras amigas y al pasar por la oficina de Auditoria de su tío, se encontró con Camilo que estaba realizando la entrega de declaraciones de renta, documentos que su padre le había encomendado. Fue un flechazo para los dos, se miraron tiernamente y la sonrisa de ella, dio pie para que Camilo esa noche bajara con sus amigos hasta el Hospital y mirar donde vivía Ana María.

Ana María pregunto a su tío sobre el joven de los papeles y este le comentó que era hijo de su amigo, el Industrial, que se conocían por su afición a las peleas de Gallos y le prometió llevarla el próximo sábado para que conociera el pueblito donde se jugaban los gallos y se comía en la Gallera un excelente plato de hornado En la noche, Camilo a sus amigos les comentó sobre su encuentro con la hermosa muchacha y ellos le comentaron que tenía muchos enamorados, que era difícil que le hiciera caso a Él. Pasaron por la mitad de la calle mirando hacia la ventana y Camilo observó que Ella estaba mirando hacia afuera, al pasar hiso un saludo con la mano y la respuesta fue una señal de que se acercara. Dejo a sus amigos caminando y se acercó a la ventana, ella abrió y le dijo el sábado voy con mi tío a los gallos.

El sábado desde temprano Camilo limpio los gallos de su padre y de su socio Guillermo Vela y le pidió a su padre que lo llevara junto con su hermano para ayudarle a cuidar las aves de pelea, a lo cual se sumó su madre que también quería ir de visita donde su cuñada. La familia entera salieron a esos del medio día, allá almorzaron donde la tía y bajaron a la Gallera para mirar las peleas.

La sorpresa fue cuando su padre se saluda de abrazo con el Auditor y este le presenta a su sobrina Ana María, hay cruce de manos y ahora, los adultos ingresan a la gallera y los jóvenes se quedan hablando de los gallos .Camilo y su hermano llevan los gallos hasta el lugar habitual donde son guardados en jaulas, invitan a Ana María y se sientan en unos troncos de madera que hay como asientos. Allí dialogan, las miradas se confunden entre los dos, sonríen y esperan un momento de solaz, que les permita decir otras palabras. Ahora ya tenía 18 años A pasado la primera pelea de gallos y los amigos salen comentando, las bondades del ganador, un gallo de Guillermo Vela, que en dos revuelos acabo con la fama de la "Pirula" de los Yandar y buscan a Ana María y a Camilo, y a su hermano, para invitarlos a tomar algo .Guillermo Vela felicita al hermano de Camilo por el excelente entrenamiento dado a su gallo. Pocas veces se había derrotado a la cuerda de Pasto y ahora estaban lográndolo los gallos de Santa Ana. Lucinda la encargada del restaurante es cuñada del padre de Camilo, saluda efusivamente a Camilo y a Ana María, luego les ofrece un plato de Cris petas con frito y gaseosas, los jóvenes agradecen el gesto y se retiran a comer, y es allí que entre bocado y comentario de la comida, se van diciendo cositas maravillosas, que Ana María va guardando en su corazón y de la cual Camilo le pide una respuesta.

En la noche del lunes, Camilo baja con los amigos, ya les ha comentado su aproximación y ellos aún no creen, como es posible que Moncho no lo haya logrado con la pinta que tiene, ni Jorge, ni Oliveros tampoco y tú vas a presumir que va a ser tu novia. Llegado las siete de la noche, la ventana se abre, sale una figura al balcón y entre las sombras se desliza Moncho a hablar con Ana María, ella muy educadamente le dice que está esperando un amigo que no puede atenderlo. Y cuando mira a Camilo en la otra acera le llama y dice: toque a la puerta, que ya le abrirá .Camilo ante la mirada atónita de los demás entra a la casa, el auditor sale dándole una palmada en el hombro.

Camilo recuerda este romance a puerta cerrada, como algo beneficioso, lleno de mucha pasión y de sentir como se desdoblaban los sentimientos cuando los besos son intensos y marcados, Noviazgo que le dio seguridad, le enseño que en la manera como te tratas Asi te aprecian los demás, aprendió comportamiento social; mantuvo su romance unos seis meses, hasta cuando Ana María regresó a la Capital a continuar estudios de Contabilidad y Contaduría públicas.

Camilo siempre fue el dolor de cabeza de su madre, ella se había dado cuenta de lo enamoradizo que era su hijo y de las travesuras que solía hacer, un buen día mientras ella disfrutaba del sol en el patio de la casa, irrumpió un vecino llamando al portón y entro corriendo hacia el interior del patio, buscando a Camilo, estaba bastante enojado el señor Terán, muy disgustado porque Camilo estaba durmiendo con su sobrina en el césped del huerto de su casa. Hubo un enfrentamiento verbal entre los dos y Camilo termino por decirle que ese asunto era de su sobrina que dijo que sí y no de Él. El viejo le advirtió que si continuaba enamorándola o lo miraba aproximarse al muro del huerto de su casa le daría plomo.

La preocupación mayor para la madre de Camilo era Lucia, la novia que tenía su hijo, que con cinco años de noviazgo, las viejas rezanderas le decían a su madre que a lo mejor ya están casados. Lucia o estuvo perdidamente enamorada de Camilo, porque fueron cinco años que resistió de novia; una pareja que se amó profundamente, que por cada año de noviazgo se escribiría un libro y sobre todo llenos de romance y pasión, cada vez que besaba esos labios rojos y provocativos, en el cielo anotaban el fuego que hasta allá llegaba; Lucia por el contrario, no pretendía tal matrimonio alocado, siempre estuvo al lado de Camilo aconsejándole terminar su bachillerato con buenas notas para ingresar a la Universidad, ayudándole a pasar su apuntes de clase y recomendándole terminar sus estudios en el exterior, Asi fuese que estuvieran separados dos años más, fueron unos enamorados que a mucha gente les preocupaban por la constancia y por ser tan especiales en su comportamiento.

Para colmo de males, había dejado a Lucia y ahora tenía una nueva enamorada, una jovencita que conoció en la fiesta de su amigo y se enamoró profundamente, la visitaba frecuentemente en las noches decembrinas, el candor de la joven despertaba sentimientos y pasiones encontradas en Camilo, cada vez que la abrazaba hacia su pecho podía sentir el palpitar de sus senos y se le alborotaba la bilirrubina, la besaba con toda pasión, que se estremecían los dos. Volvía al día siguiente para verla vestida de mujercita y no se atrevía a acariciarla. Camilo al enterarse por su amigo, que ella solo tenía dieciséis años, termino por salir del pueblo antes de que su madre y sus tías se fueran a enterar y lo califiquen de un asaltacunas, pues ya tenía 23 años Llegó a la Capital y se fue directamente al Partenón donde sus amigas a quitarse las penas y confesarse con ellas del despropósito que iba a cometer; pues la historia se repetiría ya que Camilo había conocido a Eva dos años antes en casa y como ella convivía con su tía, termino por enamorarla y no había escapatoria, quedó embarazada. Durante varios fines de semana estuvo atascado en ese infiernillo de conciencia, hasta que volvió a coger el rumbo de los estudios y recordar los consejos de Lucia Finalmente en el mes de noviembre vino a despedirse de sus padres y aprovechó para ir donde Lucia a decirle que quería casarse con ella, que buscaba esa unión como medio de prolongar su noviazgo por dos años más que duraría su estadía en Europa Lucia no acepto casarse, quería saber si realmente la amaba como él decía y que la ausencia no sería impedimento para casarse a su regreso.

Homenaje a la compañera de mi vida, quién construyó sobre la roca y levanto un Hogar Eterno-Quién hizo posible mi Felicidad, Progreso y Prosperidad.

Homenaje a Lucia, La Gran Amiga, Quien Propicio el viaje a Europa con sus consejos.

EL VIAJE

Terminado sus estudios Universitarios básicos, ahora junto con dos venezolanos compañeros de estudio de su hermano, se disponía a viajar a Europa, se hecho suerte si viajaba en avión o en Barco, saliendo favorecida esta última opción: primero porque el viaje duraba un mes; se conocería varias ciudades donde atracaba y desembarcaba el barco, segundo era un mes de alimentación y alojamiento que se ahorraban de Europa.

Ya en el puerto Camilo subía con sus maletas al barco, cuando observó que por las escaleras descendían tres mujeres, una de ellas de blusa blanca y Jeans azules, muy hermosa, que produjo un momento de sorpresa al verla bajar. Posteriormente, cuando ya se habían instalado en el barco, en los camarotes de Proa; ya que sus billetes eran de clase turista, estaban los tres en el mismo camarote con baño independiente .Entonces se acercaron a la hora de la Cena al Comedor de Clase turista y les fue asignada la mesa de entrada, que daba frente a un largo espejo, desde donde se divisaba todo el comedor y los viajeros.

Allí volvió a sorprenderse Camilo, cuando al levantar su mirada al espejo, observó que dos mesas más allá se encontraba la joven que descendió por la escalera, estaba con los mismos blue jeans, pero esta vez en compañía de unas monjas, y otras tres mujeres jóvenes. Camilo, que a la sazón ya era amigo de una Señora Española , que viajaba de Bogotá a Madrid, le comentó si esas jóvenes serían novicias o turistas, a lo que Carmelita decidió averiguar para el próximo día comentarlo.

La noche a bordo del Satrustegui, era muy cómoda hasta pasar por la zona de la Guajira, donde se mezclan las aguas con un fuerte oleaje, lo que hace que el barco se mueva cabeceando de proa a popa, y en ese movimiento, muchas personas no soportan el efecto que produce en el estómago y se marean de estómago, otros tienen mareo de cabeza al sentir la borrachera del vaivén.

Esta fue la razón para que la joven española desapareciera del Comedor durante dos días, tiempo que aprovechó Camilo con Carmelita para visitarla y desearle mejoría; así fue como supo que realmente se llamaba Almudena, que era de Madrid y que había estado de vacaciones en Puerto Rico por dos años, que ahora regresaba a su casa.

En el barco, hay muchos distractivos, puedes reclinarte en una mecedora sobre cubierta y dedicarte a leer una buena novela, o escuchar música en el bar, tomando una cerveza o un vinillo, o salir a disfrutar de la piscina, donde se exhiben unos cuerpazos de mujer, que corresponden a una Dominicana, una Norte Americana y una Mexicana y otras cuantas señoras que viajan con sus esposos y familia. En horas de la noche en el Bar se instala un Bingo, donde concurren los pasajeros a probar suerte; Camilo y los venezolanos, también asisten, porque unas pesetas más aumentarían el presupuesto de viaje.

Después de jugar el bingo, un grupo de andaluces y suramericanos que les gusta la rumba, se alistan en la cubierta del barco para entonar canciones y bailar un poco al vaivén de una noche de calma chicha. Tocan guitarras, maracas y palmas para entonar Sevillanas, y canciones de la moderna España.

Ya han transcurrido diez días de viaje por el Océano Atlántico, tres después de arribar a la Guaira Venezuela y recoger carga y pasajeros rumbo a España. Es tiempo para que el Capitán del barco informe que habrá una fiesta en los salones de Primera clase, donde está invitada toda la tripulación del barco como los pasajeros. Esa noche todos visten su mejor vestido, y se inicia la fiesta con un Vals que lo inicia el Comandante del Barco con una señorita que ha escogido como su pareja de baile, luego los demás oficiales hacen lo mismo con las turistas y finalmente los matrimonios salen a bailar. Se brinda al iniciar la fiesta con Champan rosado y luego se continua con Whisky. La tripulación esta alborotada con la presencia de una Bailarina Dominicana, la Joven Norte Americana y la Mexicana, salen frecuentemente a bailar, hasta que se despide el Capitán para continuar con sus deberes de navegación del Barco, de tal manera que quedan solo los pasajeros, la fiesta continua hasta la dos de la madrugada, tiempo en el cual se acaba la venta de licor.

Camilo ha bailado con La mexicana y con Almudena que son las que bailan Pasodobles y cumbias y uno que otro Merengue. Ha sido el tiempo en el cual más se ha aproximado a Almudena y le ha manifestado que le gusta mucho. Qué ojala cuando lleguen a Madrid puedan continuar con su amistad.

Los días transcurrieron con sus noches, la calma del Atlántico permitía hacer veladas nocturnas, donde los grupos de andaluces participaban en los jolgorios, y disfrutar de la brisa del mar en una noche de luna es algo maravilloso, los pulmones se llenan de aire puro así como los sentimientos se vuelven más claros y más románticos Ha llegado la Noche buena abordo y en esta ocasión el barco hará su segunda escala en Cádiz, la ciudad blanca, las angostas calles contrastan con los balcones llenos de flores a cada lado, los bares permanecen abiertos y las personas deambulan por las calles celebrando el nacimiento de Jesús, Camilo ha salido del barco en busca de una botella de Brandy para festejar con los venezolanos la nochebuena, el bar del barco se cerró a las doce de la noche razón por la cual Camilo y su compañero están en las calles de la ciudad comprando algo de comer y el Brandy. Al regresar los andaluces todavía están en cubierta entonando canciones y rumbas, allá se unen ellos hasta el amanecer, que es una noche bastante fría, pues el invierno ha entrado a España y las temperaturas del Mediterráneo no sobrepasan de los 15 grados.

Finalmente desembarcaron en Barcelona, allí se encontraría con su hermano y con los amigos, cosa que se dio ya a las seis de la tarde cuando todos los pasajeros habían abandonado el barco. Camilo Aprovechó para despedirse de Almudena, tomar la dirección de su casa en Madrid y comentarle que en los primeros días de enero tendría que presentarse a estudiar al Instituto. La estadía en Barcelona fue corta, pasaron con los amigos, los venezolanos se quedaban allí para estudiar Ingeniería Textil.

El 8 de enero Camilo se puso en contacto con Almudena, le solicito el favor de ayudarle a buscar una pensión en Madrid, donde llegar a alojarse y que quedase cerca al Instituto. Se encontraron en la estación de Atocha, de allí ella le llevó a la residencia, la dueña una soltera amiga de Almudena acepto darle alojamiento, comida y lavado de ropa y estaba a seis cuadras de distancia del Instituto, cosa que agradeció camilo, pues así se ahorraba lo del transporte diario.

Camilo comenzó a frecuentar a Almudena, la chica que le había impresionado en el barco y ahora estaba a su alcance para poderla cortejar, lo cual lo hacía con invitaciones a Cine a bailar a Pasapoga y a salir a las piscinas en tiempo de verano. Pasados tres meses ya eran novios y ahora Camilo debía acudir al instituto Español de Oceanografía: Mañana y tarde; en horas de la noche salían a pasear por Madrid, visitar parques, el zoológico y conocer la Familia de Almudena, a quienes frecuentaba con asiduidad, dado la empatía desarrollada con un Tío de ella llamado Luis, quién trabajaba como Inspector de sanidad en España y debía viajar en razón de su cargo por muchas provincias y conocía muchas historias de España y siempre compraba los mejores Jamones Pata negra ,los mejores Chorizos de cantimpalo ,la Chasina y solían comerlos cuando Camilo los visitaba.

Culminado el primer año, Camilo debía embarcarse en un Crucero de Prospección Oceanográfica, a bordo del "Tufiño", un buque Oceanográfico de la Real Armada Española y debería recorrer las siete islas de Canarias, realizando estudios sobre la riqueza faunística y pesquera, la calidad de sus aguas .Asi que se embarcó en compañía de un Peruano, dos Argentinos, bajo la dirección Científica de don Nicanor Menéndez un Oceanógrafo Físico y de J Mascareño oceanógrafo coinvestigador del Instituto de Islas Canarias En Madrid, los alumnos becarios, habían recibido entrenamiento en análisis químico de aguas, así que estaban con el adiestramiento adecuado, solo que esta vez lo harían en tres turnos de trabajo: a Cesar el Peruano le correspondía de 6Am a 12M a Luis el argentino le correspondía de 12M a 6 Pm; a Scaglia el otro Argentino de 6PM a 12 PM y a Camilo el turno de 12PM a 6AM durante la primera semana, luego cambiaria al de 6am, y así sucesivamente hasta terminar las seis semanas de embarque.

Durante los primeros cinco días el mar estuvo muy apacible, se podía trabajar tranquilamente sin ninguna zozobra, pero a partir de la segunda semana frente al Sahara Español, comenzaron las tormentas y el mar se puso picado, de tal manera que Luis se la pasaba mareado todo el tiempo, en Enfermería, Cesar de vez en cuando se mareaba y don Nicanor debía recurrir a Camilo que no se mareaba, para reemplazarlos cada vez que estaban enfermos. Esto proporcionó de una gran experiencia en el trabajo practico a Camilo, razón por la cual Don Nicanor tomó a Camilo como de auxiliar suyo y le enseñaba la traficación de variables, la predicción de corrientes, estudio de aguas profundas, cambios en la velocidad del sonido; Asi trascurrieron las seis semanas, y luego viajaron en Avión desde Santa Cruz de Tenerife a Madrid.

Cada vez que podía acercarse a una Isla lo hacían y desembarcaban un día para conocerla, una experiencia muy agradable que permitía conocer más de las costumbres de los Canarios y de su Historia.

Una vez llegados a Madrid, quedaba la segunda parte, el procesamiento de la información recolectada, cosa que se hacía manualmente, dado que en esa época no existían los modernos ordenadores y las variables Oceanográficas eran calculadas a mano y graficadas sobre papel milimetrado de un metro de ancho y 1,5 de largo, sobre el cual se colocaban los puntos de muestreo y se volcaban los datos encontrados, realizando curvas de variación vertical y horizontal. Los alumnos que participaban en este procesamiento, junto al equipo de investigadores del Instituto trabajaban en parejas y a Camilo le tocaba hacerlo con Don Nicanor, jefe de la expedición; cada día después de terminar una parcela, salía Camilo en busca de Almudena, le llamaba por teléfono y salían a pasear o a mirar una película, se atiborraban de bolsas de papa frita para pasar mirando la película. Llegó el tiempo en el cual Camilo debía presentar, su plan de tesis, para poder graduarse en Colombia como Licenciado en Ciencias del Mar y fue cuando se redujeron las salidas con Almudena, ya que ésta debía colaborarle con las traducciones que el hacía, en las que debía trabajar como Secretaria pasando apuntes y trascribiendo las traducciones: El noviazgo había fortalecido los lazos de unión entre los dos, ahora había pedido formalmente la mano a la Abuela y al hermano de Almudena y se frecuentaba la Familia los días domingos.

Terminado los estudios teóricos, Don Nicanor y demás jefes de Departamento del Instituto certificaron los estudios realizados y dieron visto bueno a la tesis realizada para ser presentada y sustentada en Colombia.

Un 26 de Abril fue fijada la fecha de boda de la pareja y les correspondió casarse en la misma Parroquia que lo había hecho Simón Bolívar el Libertador; por lo cual el día de la boda fue registrada la ceremonia en el libro de matrimonios de los Suramericanos que se casan en esa parroquia. Los padrinos firmaron la partida matrimonial y Camilo con Almudena formaron su hogar en Madrid.

El 28 de Abril, zarparon nuevamente a bordo del Satrustegui, rumbo a Colombia, pasando su Luna de Miel durante un mes de Navegación por todo el Mar Caribe.

EL REGRESO A EUROPA

Habían pasado 45 años desde la primera visita que Camilo realizo a Europa .las ciudades habían cambiado, empezando por el aeropuerto, aquéllos espacios reducidos de ayer, ahora eran grandes moles de cemento armado con grandes ventanales y sofisticados sistemas de movilización y transporte. El primer punto de arribo fue Madrid, la ciudad de donde se divisa el cielo. una ciudad que había crecido desproporcionadamente en forma vertical, sin embargo aún conservaba las viejas calles y aposentos del ayer, aquéllos bares donde muchas veces concurrió con los amigos a disfrutar de una cerveza o un chato de vino habían cambiado de dueño o habían sido sustituidos por locales comerciales, las pastelerías donde se disfrutaba de esa bocados tan esquistos , algunos todavía existían pero la mayoría desaparecieron como sus dueños, el arte del antiguo panadero cedió a la modernidad del nuevo pastelero que ahora disfrutando de la tecnología hacia alarde de preparar los pasteles, los bizcochos y los dulces en pocos minutos.

Los bares y terrazas de Gran Vía, abren en verano y cierran a altas horas de la tarde, todo era entusiasmo, por aquí se veían correr los críos con sus padres que salían a caminar y tomarse un cafecito o visitar la casa de los churros para deleitarse de un excelente chocolate con porras o con churros y si el presupuesto alcanzaba entrar a los bares de puerta del sol a disfrutar de una caña con un delicioso aperitivo, pedir una ración de gambas, una de mejillones al natural o unos calamares en su tinta..

El gobierno de aquella época, el "Generalísimo" no permitía que se hablara de política en los bares y no existían casas de diversión, si las había eran clandestinas, así que rumbear al estilo Suramericano era difícil aquí, debías en todo caso abandonar las viejas costumbres y ceñirte a las nuevas impuestas por un gobierno absolutista. Cierto es que por las noches podías salir a altas horas de la noche y nadie se metía contigo, aquí no habían los atracadores de madrugada que deambulaban por las calles de Bogotá, Quito o Lima. La ciudad se mantenía muy limpia, no existían las bellas durmientes de la calle Gravina ni de Puerta del Sol, ni los vagos tumbados en las aceras de esta zona central, podías caminar con toda tranquilidad, entrando a los almacenes, comprando lo que quisieras sin la expectativa de que alguien te está mirando como quitarte la cartera o darte el jalonaso al bolso.

El encuentro casual en los bares entre suramericanos y españoles era algo que te dejaba buen sabor, las personas siempre estaban muy atentas a tu forma de hablar y de expresarte, después de una ronda siempre estaba la siguiente, no existía esa xenofobia que se ve en la actualidad, empezando que los bares eran atendidos por españoles, andaluces, gallegos, extremeños, etc. y por lo tanto era muy extremada la atención, cosa que producía una reacción inmediata en los clientes cuando terminaban de tomar el café, beber la cerveza o el tinto y dejar la propina. Ahora esa atención ha decaído mucho, por más que los empleados tratan de sacar una sonrisa, se observa la fuerza que tienen que hacer para lograr alcanzarla.

Pasear por la gran Vía y entrar a los almacenes era parte del paseo turístico, podías escoger entre mil cosas que llevarte para tu País, quizá como suvenir o como recuerdo de tu estadía, y allí era donde funcionaba la atención de los dependientes, las mujeres españolas y los jóvenes españoles, no escatimaban tiempo mostrándote las cosas que tu indicabas, sea que las comprases o no, siempre había una sonrisa en sus rostros y el ánimo de venderte lo que te ofertaban; hoy en día puedes estar parado frente al mostrador mucho tiempo, que si están ocupados en otros menesteres no te atienden ni te insinúan comparar tal o cual objeto Los Sudamericanos que en ese tiempo venían a España era en busca de conocimientos, o ampliación de ellos, muy pocos eran los que se dedicaban a buscar trabajo, esto quiere decir que los españoles no veían al inmigrante como competidores sino como turistas o personas de vestir extraño y de expresiones poco entendibles. A pesar de hablar el mismo idioma, había expresiones con significado diferente. Sí un Colombiano ingresaba a un Bar en la mañana en busca de un desayuno y pedía Un Perico le podían pasar un café cortado, Pararse en la barra frente al de la máquina de café y pedirle un tinto, se sorprendía cuando le pasaba un vino tinto…Desde que la Real academia incluyó en su último diccionario las expresiones idiomáticas de centro y Suramérica, podía decirse que los cultos saben más del castellano latinizado, sin embargo hoy día siguen siendo expresiones fuera del contexto Español Una de las cosas que más llamaba la atención al suramericano, era el Metro: un sistema masivo de transporte que en la década de los 60 era un sistema que la gran mayoría de los españoles utilizaba tanto en Madrid, como en Barcelona, siempre los vagones estaban llenos y muy pocos asientos quedaban vacíos. Hoy, causa extrañeza montar en un coche vagón, si lo tomas a horas pico están llenos y si lo tomas a horas laborables; es muy poca la población española la que lo utiliza, se ven más ojos rayados, mujeres con turbantes y faldas largas, muchos prototipos suramericanos: argentinos, chilenos, bolivianos, peruanos, ecuatorianos, colombianos y muchos centroamericanos y si eres un poco más acucioso puedes distinguir los marroquíes y los Africanos. Los españoles, ahora tienen su coche privado y pasean en el con su familia, razón por la cual no van en Metro. Viajar en Autobús era otra cosa, ahora los españoles que mercan en los distintos barrios lo utilizan, de lo contrario son los inmigrantes los que se movilizan en el para llegar a su trabajo o regresar a casa en horas de la tarde.

Cuando visitabas las librerías, así como las joyerías, los dependientes te observaban y se acercaban para decirte si estabas interesado en algún libro o joya, bajaban medio anaquel de libros con el fin de satisfacer tu curiosidad, fogueabas libros y los separabas para su posterior adquisición, era el momento cuando una de las asistentes te decía?? si tú no lo puedes comprar lo puedes llevar a crédito, déjame tu pasaporte para tomar tus señas, dinos donde vives y allá ira el cobrador cada fin de mes?? .Quién era honrado , tomaba dicha confianza y daba sus datos exactos y siempre se tuvo este sistema de crédito; sin embargo, fueron apareciendo aquellos que presumían de ser astutos y sagaces y hacían el "tumbe", cambiaban de señas para que nunca diera con ellos el cobrador y en las joyerías pasaba lo mismo: lo hacían cuando ya se marchaban de regreso a su País, razón por la cual ,los españoles dejaron de creer en los Suramericanos.

Llegada la época de las vacaciones, los madrileños se lanzaban en hordas a las piscinas y centros de recreación que tenía la ciudad, los más adinerados salían a vacacionar a las playas del Mediterráneo, algunos jóvenes salían a ganarse unos cuantos dólares de recolectores de fruta a Inglaterra, o a hacer el verano trabajando en bares y hoteles de la costa. Las zonas verdes de las piscinas eran las preferidas para darse un tumbón de tres horas expuesto al Sol, con el fin de ganar un buen color o bronceado, todos los fines de semana podías observar familias completas disfrutando del chapuzón Así como se gozaba visitando los Light Club o salas de fiesta, donde se presentaban variedades, el consumo de tabaco y bebidas era muy mesurado, no se observaban los borrachos a los que se está acostumbrado en Sudamérica. Las mujeres que atendían en el Molino Rojo donde existía un verdadero Show artístico, era maduritas, acostumbrados a mirar las jovencitas de 18 a 25 años en los Cabarets Suramericanos aquí se encontraban muy pocas. Si querías conseguir algo clasificado, entonces debías visitar a Perico Chicote Algo curioso era que las Iglesias y parroquias no eran tan frecuentadas como en Quito, Lima o Bogotá, contrario a lo que se pensaba, allá existía un fervor religioso exagerado comparado al de Madrid, se decía que los curas o sacerdotes eran pagados por el estado. Quizá así las iglesias dejarían de meterse en la política

¿PORQUE VIAJAR A EUROPA?

Es posible que muchos de los lectores opinen que lo mejor es viajar a EEUU, China, Japón, Kuwait ,que allá es donde está la tecnología, o que por lo menos se aprende Ingles, que se puede comprar ropa y equipos de alta tecnología y actualizados.: Sin embargo, para Camilo existen sobradas razones para viajar a Europa, la cuna de la cultura está allá y que mejor manera de aprovechar este viaje para darse un refresco cultural, por ejemplo: La mayoría de los turistas, se atiborran de fotografías y videos de parques, playas, sin embargo, existen lugares para visitar, donde muy pocas personas concurren: son: las bibliotecas antiguas y los archivos de Indias, los museos, allí Camilo puede pasar horas enteras :observando pinturas y esculturas o fojeando libros y documentos; y es necesario saber extractar de entre empolvados documentos las verdades del pasado y quitarse un poco la capa de ignorancia Histórica.

Otras veces a la sombra de un toldo en un buen bar, escuchando música, por ejemplo algunas sevillanas, se concretan las musas para pensar en un tema especial y escribir unas cuantas páginas que se puedan compartir con los lectores.

LA ESCLAVITUD

Esta vez, en su estadía en Madrid, ha escogido un tema muy particular: LA ESCLAVITUD, lo poco que se sabe es por los escritos de los historiadores Latinos, que se basan en otros autores, a eso le llaman consulta bibliográfica, entonces porque no, buscar directamente en las fuentes y ampliarlo con los escritos modernos .De igual forma lo hará en Barcelona, en Londres.

Camilo recuerda de su juventud por los años 1960, cuando conoció la primera pareja de negros, los había llevado su padre desde Barbacoas, querían trabajar en la sierra, uno en las labores del campo y la otra en las labores de la casa junto a la Señora que le enseñaría a cocinar los platos del altiplano y justamente fueron colocados donde unos vecinos del barrio. Había desarrollado muy buena empatía con los dos dada su cercana edad, 16 y 25 la de ellos. Recordaba su situación frente al clima frío como se agazapaban por la tarde buscando abrigo alrededor del fogón de la cocina cuando se encontraban en la finca; su vestir ligero usado en Barbacoas, había cambiado por pesados trajes de paño, que ahora les había comprado el patrón; comían en la noche mucho dulce y agua panela con queso, para subir la temperatura y estar en forma. Venancio llamaba el hombre y Yadira la mujer. Siempre se veían contentos y trataban de ser amorosos con sus patrones, pues su situación económica había cambiado; cuando les invitaban a visitar o regresar a Barbacoas corría a esconderse; allá pasaban muchas necesidades. Ahora podían enviar a los padres algunas cosas, especialmente carne serrana (salada), queso y alguna ropa que les regalaban los familiares de los patrones. Así vivieron bastante tiempo hasta que se independizaron, Venancio se casó y tenía su pequeña huerta, Yadira se fue a acompañar al joven Ernesto a Bogotá para que terminara sus estudios y allá tuvo un hijo.

Cuando Camilo estuvo en Tumaco por los años 1990, llamaba su atención: que la etnia negra presentaba unos 4 fenotipos: uno de nariz ancha; otro de cabellos enroscados largos; otro de tez muy oscura; otro de color cobrizo. Le extrañaba en particular: el encuentro entre ellos, parecía como que a uno en particular los demás le prestaban cierta importancia. Esto hablaba de su origen, porque no toda la etnia negra procede del mismo lugar, razón por la cual ahora en este viaje podría salir de dudas con el tan llamado tráfico de negros.

En su consulta encontró que el fenotipo negro, generalmente se divide en cinco grupos, tres de ellos centrales sudanés, nilótico y somalí, y otros dos relacionados pigmeo y khoisán, mientras que el grupo denominado bantú es una mezcla de varios tipos centrales y relacionados.

Por el estudio del ADN mitocondrial y el cromosoma Y, se infiere que la humanidad procede de África y que por tanto los primeros representantes de Homo sapiens presentarían una morfología similar a poblaciones negras actuales, sobre todo en lo referente a la coloración de piel, que más tarde se iría aclarando como adaptación a lugares donde la incidencia de los rayos solares es inferior a la que se da en África, si bien no implica descartar que pudiera haber un oscurecimiento en algunas poblaciones.

Se cree que el grupo humano negro central tal y como se conoce hoy probablemente no tiene más de 20.000 años de antigüedad y que sólo en los últimos 3.000 años ha colonizado toda África, desplazando o arrinconando a pigmeos y khoi-san.

Contrariamente a los estereotipos de la antropología, la gran mayoría de los pueblos negro africanos conocían la agricultura desde al menos 5.000 años y la metalurgia del hierro desde no menos de 2.000. El pastoralismo y la caza recolección, fueron economías minoritarias en África al menos desde un milenio antes de la era cristiana.

Los primeros escritos en los que se tiene constancia de la presencia de esclavos en una gran civilización es en Mesopotamia durante la época sumeria, si bien muy limitada, pero existió. En el Antiguo Egipto un número de esclavos suficiente como para tener cierta importancia social se dio solamente en algunos periodos, especialmente en el Imperio Nuevo. El origen de los esclavos provenía de las conquistas y no existía una regulación jurídica sobre los mismos.