- El argot
- El lunfardo
- El lunfardo y el estrato social reflejados en la música a través del tiempo
- El Tango
- Argot Francés
- Parallélismes entre le Lunfardo et l’Argot
- Conclusión
- Bibliografía
1- Introducción
La historia de nuestro continente es una historia de cambios, de afluencias extrañas. Desde la llegada de Cristóbal Colón a esta parte del planeta fuimos influenciados por pueblos lejanos. Esta conquista y colonización comenzó en Centroamérica y se extendió hacia el sur.
Españoles y portugueses establecieron en todo el territorio un sistema de gobierno caracterizado por la trascendente participación e influencia de la Iglesia Católica. Esta dejó profundas huellas sobre todo en la conversión de los indígenas a la cultura y religión hispánicas, el afianzamiento de un sistema educativo común y la creación de otras instituciones clericales.
A pesar de la diversidad racial, se desarrolló un sistema homogéneo donde los funcionarios reales gobernaban y los criollos constituían el pueblo. Los indígenas, negros y mestizos eran esclavos y carecían de derechos. Esta situación se mantuvo con escasas modificaciones hasta la decadencia de los imperios español y portugués; debido principalmente a la revolución industrial y al espíritu de la Ilustración.
Las ideas liberales precipitaron la emancipación latinoamericana.
Fue entonces cuando la influencia de Inglaterra se hizo sentir en todo el continente. Comenzando ésta a partir de la Revolución Industrial. Las nuevas ideas capitalistas fomentaron una clase obrera urbana que se vio acrecentada por la llegada de gente del interior a Buenos Aires y también por una gran ola inmigratoria.
Haciendo un paréntesis, debemos decir que nuestro país se caracteriza por su ser cosmopolita. Ese abrazo a todos los pueblos del mundo ya proclamado desde el preámbulo de nuestra Constitución Nacional:… "Y para todos los pueblos del mundo que deseen habitar el suelo argentino".
Esta apertura cultural ideada por Alberdi y confirmada por los constituyentes del ’53 fue puesta en marcha en la segunda mitad del siglo XIX.
Si bien hubo afluencia de inmigrantes en todo el territorio argentino, la mayor concentración se produjo en la ciudad de Buenos Aires.
Los inmigrantes llegaron principalmente desde España, Italia, Francia, Suiza, países de Europa del este. Aportaron su idiosincrasia y sus modismos culturales.
En este trabajo me abocaré a tratar de establecer un paralelismo entre nuestro lunfardo y el argot francés.
2. El argot
Podríamos definir al argot como un conjunto de frases o palabras utilizadas por personas del mismo grupo social o cultural que se encuentran socialmente integradas, característica esta que lo diferencia de la germanía.
Por lo general, son los grupos profesionales quienes crean su propio argot (policías, médicos, profesionales del deporte, periodistas). También tienen su propio argot los drogadictos, los gitanos, diferentes sectas o religiones, los jóvenes en general. La ideología y la actitud social de estos grupos se ven reflejada en las palabras que integran esta manera de hablar. Los límites entre argot, jerga y populismos son borrosos, y hasta poseen palabras o expresiones compartidas.
Algunas palabras del argot pueden tener una aceptación tan amplia que pasan o se integran al habla general. Incluso son incluidas en los diccionarios. El argot aporta una gran cantidad de sinónimos para nombrar cosas en la vida diaria. Se forma de acuerdo a diversas reglas:
Morfológicamente, se utiliza la apócope o la abreviación de palabras (profe, tele, etc)).
También se agregan prefijos o sufijos (re-bueno, re-lindo, hiper-grande).Los neologismos también son fuente de palabras.
El uso del argot se ha vuelto cada vez más aceptado.
En otras épocas se lo consideraba inculto, pero luego fue visto como parte de la lengua e incorporado hasta en algunas creaciones literarias.
Entre las lenguas occidentales más ricas en producción de argot se encuentran el español, el italiano, el francés, el alemán, el inglés y el Romaní (o lengua de los gitanos).
3–El lunfardo
3. a. Definición
El lunfardo es el argot porteño (característico de la ciudad de Buenos Aires), cuyos orígenes se encuentran en la germanía (delincuencia) y que luego pasaron a otros sectores colindantes (cárceles, policía, prostitución).
José Gobello en su libro Aproximación al lunfardo nos explica porqué no considera al lunfardo como una lengua: no posee una gramática propia ni tampoco una sintaxis definida. Está claro que no se puede hablar en lunfardo. Al ser solo una nomenclatura, un conjunto de palabras (5.000 aproximadamente), este lenguaje solo puede superponerse a una gramática y una sintaxis castellana, reemplazando palabras por otras de origen lunfardo.
Su definición de lunfardo es bastante clara: "Vocabulario compuesto por voces de diverso origen que el hablante de Buenos Aires emplea en oposición al habla general". En su diccionario de 1990, este autor define al lunfardo como "un repertorio de términos traídos por la inmigración, durante la segunda mitad del siglo XIX y hasta el estallido de la Primera guerra mundial, y adoptados por el pueblo bajo de Buenos Aires, en cuyo discurso se mezclaban con otros de origen campesino, quechuismos y rusismos que corrían ya en el habla popular".
El uso del lunfardo es plenamente conciente, uno sabe que existe la palabra mujer, sin embargo prefiere utilizar ‘mina`.
3. b. Formación
Las palabras lunfardas no sólo son sinónimos de palabras del español, sino que son sinónimas entre sí (una gran proporción están referidas al sexo, al delito, a la comida, a las diferentes partes del cuerpo, a la ropa, a la bebida); lo que imposibilita su uso exclusivo con fines comunicativos. El lunfardo se caracteriza por:
*Palabras inventadas (‘atorrante/ a torrar’)
*Palabras por continuidad o deslizamiento de sentido (‘esta muy crudita’)
*Derivación (‘amurar’)
*Inversión de grafías (hablar al ‘verre’)
*Deformación o troncación (‘malevo’)
*Adición (‘endeveras’, ‘emprestar’)
Página siguiente |