La aplicación de métodos para la solución creativa de problemas del área lógico-matemática (página 2)
Enviado por Luz Delia Callo Mamani
El aporte práctico en especial en la práctica docente permitirá poder optar por estos métodos porque el aprendizaje se realiza con la participación de todos los estudiantes y a su vez facilita al profesor en su tarea de orientador y concientizador mediante actividades sencillas. Además permitirá al profesor ser intermediario, diseñador, facilitador, comunicador, coordinador, asesor y evaluador del aprendizaje. El presente estudio es importante porque el rol de los estudiantes es activo y participante, durante las clases aritmética a través de toda la etapa de ejecución y comunicación del trabajo; en cambio el profesor es el qué guía y orienta el trabajo.
Métodos participativos
Los métodos y técnicas participativas, llamados por algunos autores también métodos activos, productivos, problémicos, se definen como las vías, procedimientos y medios sistematizados de organización y desarrollo de la actividad de los estudiantes, sobre la base de concepciones no tradicionales de la enseñanza, con el objetivo de lograr el aprovechamiento óptimo de sus posibilidades cognitivas y afectivas.
Existen diversos métodos participativos, no solo por su origen, sino también por la forma de implementación, las condiciones de realización y los conocimientos o habilidades que se desean desarrollar, pero la base de todos ellos está en la concepción del aprendizaje como un proceso activo, de construcción y reconstrucción del conocimiento por los propios alumnos, mediante la solución colectiva de tareas, el intercambio y confrontación de ideas, opiniones y experiencias entre estudiantes y profesores.
Los métodos, como categorías pedagógicas, mantienen una estrecha relación con los objetivos, los contenidos, la tarea docente y los medios propios de cada disciplina y la disponibilidad de los mismos; por lo tanto, no es ocioso plantear que, a la hora de su selección, es necesario tomar en consideración todas las categorías pedagógicas, para una mayor efectividad de los mismos.
Como aspecto común de estos métodos se destaca la coincidencia en la importancia que se le concede a la actividad que debe desplegar el estudiante, a las tareas que debe llevar a cabo, a las relaciones que se establecen entre los participantes, y a la interacción e influencia mutua para la asimilación de conocimientos, formación de habilidades, de actitudes y de valores.
La actividad mental del alumno juega un papel preponderante en la construcción del conocimiento. El conocimiento construido por el alumno no es pura repetición o reproducción del contenido disciplinar, sino que es una reconstrucción de tipo personal, y esta elaboración estará influenciada por las características de cada sujeto, sus esquemas de conocimientos, el contexto social, las anteriores experiencias educativas, las vivencias personales, las habilidades adquiridas, las actitudes hacia el aprendizaje. Esta reconstrucción está mediada por representaciones mentales personales que evolucionan constantemente. El factor que moviliza esta evolución, en el contexto escolar, es la interacción con otros, que se concreta en diversas modalidades, tales como la imitación, el intercambio y la contrastación de ideas, la discusión.
El método de enseñanza se realiza y verifica en un determinado proceso educativo y éste, a su vez, se produce en el interior de un determinado currículum, en una institución particular, en un país que vive en un tiempo y espacio determinados. Por el carácter ideológico, cultural e histórico que tiene la educación, todo acto que en ella se realice –con independencia de que sea reconocido o no, de forma explícita- tiene una determinada influencia de estos factores, que operan en mayor o menor medida en sus diferentes niveles. Es decir, al acto educativo obedece a determinados fines y propósitos de desarrollo social y económico, responde a intereses sociales particulares, se sustenta en una filosofía de la educación característica, se adhiere a concepciones epistemológicas específicas; tiene en cuenta los intereses institucionales y depende en gran medida de las características, intereses y posibilidades de los sujetos que en ella participan: estudiantes, profesores y directivos.
Las anteriores influencias no dejan de ejercer su acción aún en los más pequeños actos que ocurren en el aula, aunque no seamos totalmente conscientes de ello. De aquí que, al seleccionar para su profundización, un componente de este proceso, no podemos dejar de tener en cuenta su unidad, vínculo y nexos con el resto. De esta forma, si queremos alcanzar correctamente los objetivos que nos hemos propuesto, al seleccionar y emplear un determinado método de enseñanza, es necesario basarnos, de forma exacta, en el papel que éste desempeña en el proceso en su conjunto.
Los métodos mantienen una estrecha relación, por lo tanto, con los objetivos, los contenidos, las tareas docentes y los medios propios de cada asignatura, así como con la disponibilidad de los mismos. La tarea del docente consiste, en el momento de la preparación del programa de la asignatura y la planificación del proceso, en considerar y concretar los siguientes aspectos:
? Función de la asignatura en el Plan de Estudios, los vínculos que tiene con el perfil del egresado y con otras asignaturas del plan.
? Objetivos generales a lograr, formulándolos en forma de acciones que el estudiante ejecutará en función de los requerimientos de su perfil y de las exigencias de otras asignaturas del plan de estudios.
? Asumir una determinada estructuración de los contenidos según los criterios de sistematización, generalidad y secuencia.
? Organizar el proceso docente de modo que se respete la secuencia de las acciones del ciclo cognoscitivo de cada unidad lógica o tema.
? Seleccionar los métodos que más se ajusten al contenido de las acciones a formar, considerando las condiciones en que se realiza la actividad, el número de estudiantes y la base material de estudio con que se cuenta.
? Incorporar momentos de regulación y control del aprendizaje por parte del estudiante.
Características básicas de los métodos participativos
Resulta necesario aclarar que las visibles ventajas del uso de los métodos participativos en la enseñanza han creado en algunos maestros la ilusión de que se trata de instrumentos que, por sí mismos, garantizan el éxito del proceso de enseñanza-aprendizaje. Es bueno insistir en lo injustificado de esta idea ya que se trata únicamente de procedimientos, cuya utilización será efectiva en la medida que se ajusten a los objetivos planteados, a los contenidos a abordar, a las características del grupo de alumnos, a las condiciones específicas de su utilización, y en dependencia, también, de la habilidad del profesor para aplicarlos. No son recetas que pueden aplicarse mecánicamente en diferentes condiciones y circunstancias; su utilización exige del maestro un trabajo de reflexión, imaginación y creatividad para seleccionarlos, modificarlos o, incluso, crear sus propias técnicas.
No obstante, resulta evidente que, con la utilización de los métodos y técnicas participativas se logra una mayor y más rica interacción entre los alumnos y éstos y el profesor, lo que contribuye, no sólo a lograr aprendizajes más significativos, sino también a desarrollar en los sujetos que componen el grupo, habilidades relacionadas con la posibilidad de discutir y defender puntos de vista, escuchar y valorar otros criterios, analizar diferentes experiencias, entre otras, y valores como la cooperación entre compañeros, la actitud crítica y autocrítica, la responsabilidad ante las tareas.
En relación con lo mencionado anteriormente, se pueden distinguir las siguientes características fundamentales de los métodos participativos.
1. La enseñanza no se concibe solo como vía de asimilación de conocimientos, sino también como recurso para la solución de problemas.
2. Se estimula la búsqueda de la verdad, a través del trabajo conjunto de indagación y reflexión, aproximando la enseñanza a la investigación científica.
3. Se promueve la capacidad reflexiva de los estudiantes, ya que se hace un mayor análisis de los problemas y se utiliza la verbalización.
4. Se socializa el conocimiento individual, enriqueciéndolo y potenciándolo en el conocimiento colectivo.
5. Se contribuye a desmitificar la figura del docente, rompiendo modelos paternalistas de educación.
6. Se ayuda a la constitución del grupo, al establecimiento de relaciones interpersonales y a un mayor conocimiento mutuo.
Existe una gran variedad de métodos y técnicas participativas y múltiples variantes de los existentes, lo que permite el empleo de éstos, en diferentes niveles de enseñanza y materias de estudio, de acuerdo a las condiciones que se tengan y las características del grupo de estudiantes.
En cualquier caso, se hace necesario que tanto el profesor como los estudiantes conozcan y observen determinadas reglas de trabajo en grupo para lograr éxito con el empleo de estos métodos, ya que, aunque no todos implican trabajo grupal, en la mayoría de ellos existirá algún momento en el cual se realiza un intercambio de opiniones, criterios y experiencias. Las exigencias más importantes durante el trabajo en grupos son las siguientes:
Creación de una atmósfera distendida, de un clima agradable de trabajo, que propicie la libre expresión y el intercambio de opiniones, criterios y experiencias de todos los participantes.
Todos los integrantes del grupo deben conocer, comprender y aceptar los objetivos del trabajo, al igual que debe haber una correcta distribución de tareas y contenidos entre los miembros.
Las aportaciones de cada miembro del grupo deben ser acogidas con respeto.
Las discusiones que surjan deben concretarse a determinadas cuestiones, criterios u opiniones, y nunca sobre personas.
Las decisiones finales deben ser adoptadas colectivamente, por consenso.
Hay diversas clasificaciones de los métodos participativos, entre las que se encuentra la siguiente:
Métodos que contribuyen a favorecer el trabajo en grupo.
Métodos que propician la asimilación de conocimientos.
Métodos para la solución creativa de problemas.
Métodos participativos para la solución creativa de problemas
El desarrollo del pensamiento creador de los futuros profesionales es uno de los principales objetivos que se plantea actualmente la educación. Llevar a la práctica este propósito implica romper con muchos esquemas, hábitos y formas de trabajo consolidados por la tradición. Se trata, por lo tanto, de fomentar el desarrollo de habilidades y capacidades que permitan la adquisición de conocimientos por los propios estudiantes y su utilización en situaciones nuevas de forma independiente y transformadora.
Los métodos y técnicas específicas que tienen entre sus objetivos romper esquemas y generar nuevas formas de enfocar problemas, así como estimular el pensamiento divergente, de forma deliberada y efectiva, son numerosos. Estas técnicas tienen una amplia gama de utilización, desde los primeros grados de la enseñanza primaria hasta los estudios universitarios y de postgrado. El entrenamiento en estas técnicas, de modo continuado y sistemático, contribuye a que el pensamiento lateral se convierta en un hábito, en una actitud mental que se aplique cotidianamente a las situaciones y problemas de la vida.
Entre los métodos y técnicas más utilizadas para lograr los objetivos anteriores se encuentran las siguientes:
GRUPOS NOMINALES:
Se recomienda para identificar las variables críticas de un problema o situación específica y para establecer prioridades. Comienza con una generación de ideas, por escrito, de forma individual, de todos los integrantes del grupo, acerca de la pregunta o problema presentado, para seguir con un registro de todas ellas, bajo la guía del profesor u otra persona seleccionada. Este registro se hace, garantizando que todos los participantes expresen sus criterios, sin realizar objeciones a ninguno. Posteriormente, los participantes tienen la posibilidad de explicar y argumentar las ideas generadas. Seguidamente, cada participante debe seleccionar un número determinado de ideas, con las que se encuentra más identificada, o las que considere más importantes, para finalmente realizar una votación y una tabulación que determine las prioridades. De esta forma se garantiza la participación de todos los miembros del grupo y la evaluación de las mejores ideas.
TORMENTA DE CEREBROS:
También llamada lluvia o torbellino de ideas. Tiene similitud con la técnica anterior, aunque en este caso, por lo general, se le pide al grupo que genere ideas de forma oral, que respondan a la solución de un problema o pregunta planteado, pidiéndoles que no evalúe, ni sus ideas, ni las de los demás y que esté atento para perfeccionar las ideas de otros. En esta técnica es necesario que esté bien claro para el grupo el problema que requiere solución, por lo que se debe discutir bien antes de pasar a la generación de las ideas, para comprobar que ha sido comprendido por todos. Se aconseja una etapa de calentamiento para lograr una atmósfera adecuada que propicie que las ideas fluyan libremente, lo que se puede lograr planteando una situación o idea muy sencilla, que requiera que los miembros del grupo aporten sus criterios. Como en el caso anterior, también se realiza una tabulación de las ideas esenciales, a partir de la votación de los participantes.
TÉCNICAS DE DE BONO:
Son técnicas de amplia utilización, que ejercitan al grupo de estudiantes en la generación de ideas sobre la base de sus conocimientos y experiencias, para el análisis de problemas y la búsqueda de soluciones creadoras, novedosas y acertadas. Contribuyen al desarrollo de la reflexión y la expresión oral. Pueden utilizarse de forma independiente o como parte de otros métodos. Entre estas técnicas se encuentran:
a) La técnica P.N.I.: permite considerar los aspectos positivos, negativos e interesantes sobre un problema. Amplía el enfoque de cualquier situación, ya que permite considerar las ideas desde diferentes puntos de vista. Se pueden colocar tres pancartas o establecer tres columnas en un pizarrón y luego pedir a los estudiantes que emitan sus juicios sobre la cuestión que se analiza.
b) Técnica C.T.F.: considerar todos los factores. Se recomienda su uso cuando es necesario definir una situación o problema que implica múltiples aspectos o factores a tener en cuenta, para tomar decisiones acertadas. Lo que se pretende con esta técnica es que el grupo de estudiantes considere todos los factores que pueden influir en un problema, antes de tomar la decisión final. El profesor puede concluir con un análisis total del problema.
c) Técnica C y S: consecuencias y secuelas. Esta técnica implica mirar hacia el futuro y prever los resultados de una acción o plan. Su intención es ampliar el enfoque más allá del efecto inmediato de dicho acción. Los resultados más inmediatos son las consecuencias y los de más largo plazo serán las secuelas derivadas de la acción.
d) Técnica O.P.V.: otros puntos de vista. Es un esfuerzo deliberado por comprender y aceptar el punto de vista de otras personas, ampliar la percepción de un problema, ayudar a enfocar una situación de modo diferente. Permite tomar conciencia de que el enfoque de un asunto por otra persona puede ser totalmente diferente al nuestro y ser igualmente válido.
Cuándo y cómo utilizar los métodos participativos
Aunque la utilización de los métodos participativos dependerá, en gran medida, y como ya se ha señalado anteriormente, de diversos factores, relacionados con los elementos didácticos de la asignatura o unidad docente que se seleccione, existen algunas características que no deben ser obviadas.
La teoría de P. Ya. Galperin define diferentes etapas de los momentos funcionales de la actividad de estudio, de gran valor por las posibilidades que brinda para su instrumentación pedagógica.
La primera etapa, que debe mantenerse a lo largo de toda la actividad de estudio, es la motivacional. Aunque pueden existir motivos externos lo suficientemente fuertes como para incidir positivamente en la calidad del aprendizaje, ésta se garantiza realmente cuando la actividad de estudio está regulada por motivos internos.
La segunda etapa es el establecimiento de la base orientadora de la acción, en la que el alumno obtiene los conocimientos sobre el objeto de estudio y sobre la actividad a realizar, las acciones y operaciones que la componen, y el orden de su realización. En este momento el estudiante sólo obtiene un conocimiento inicial de la actividad, pues la asimilación de la misma únicamente tendrá lugar a través de su realización por el propio alumno y no mediante la observación de las acciones de otras personas.
En estas dos primeras etapas, que pueden enmarcarse con la denominación de Fase Preparatoria, se recomienda el empleo de métodos de enseñanza basados en problemas y la vinculación de la asignatura con el entorno, la cotidianidad, para crear en el alumno la necesidad del aprendizaje; así como la combinación de los métodos problémicos, explicativos y de elaboración conjunta para la creación de la base de orientación. Las tareas deben originar una disposición favorable hacia el objeto de asimilación, mediante la ejemplificación y descripción de la actividad.
La tercera etapa, primera de la Fase Ejecutiva, tiene lugar en el plano material o materializado. En ella el alumno resuelve las tareas realizando la actividad de forma externa, desplegando todas las acciones y operaciones que la componen con el auxilio del objeto real o de su materialización. La etapa materializada requiere un estadio inicial de trabajo individual del alumno y en acción compartida con el profesor, en la que las diferentes variantes de la enseñanza basada en problemas son las que más se adecuan. No se descarta el empleo de métodos grupales o participativos que contribuyan a la asimilación de los conocimientos, tales como situaciones o de simulación, siempre que se tenga en cuenta lo antes señalado.
Las tareas deben presentarse fundamentalmente en forma gráfica o simbólica, cuando no sea posible trabajar con el objeto real o su representación, es decir, deben ser tareas de contenido objetal en las que la acción se desarrolle de forma desplegada. Desde esta etapa deben plantearse a los alumnos tareas de tipo lógico, psicológico y con una forma de presentación directa e inversa, si se pretende que las habilidades de la asignatura se formen con un alto nivel de generalización.
En la cuarta etapa, etapa verbal o del lenguaje externo, los elementos de la actividad deben presentarse en forma verbal (oral o escrita) y se debe exigir al alumno una expresión verbal, para que las acciones se traduzcan a una lógica conceptual y se generalicen, aunque aun no están completamente automatizadas ni reducidas. Esta etapa es propicia para el empleo de métodos grupales que contribuyan a la asimilación y a la solución creativa de problemas.
Las tareas deben conducir al uso del lenguaje oral y escrito. Deben contribuir a la formación de las habilidades y cualidades con un buen nivel de generalización, mediante la transformación de la acción de su forma objetiva a su forma conceptual en el lenguaje; a la concienciación al emplear el lenguaje con fines de comunicación y argumentación del proceso de solución de las tareas y sus resultados; y a la independencia debido a que es el alumno quien valora la acción y la realiza sin apoyo externo.
La quinta y última etapa es la mental, en la que la actividad se automatiza y se reduce rápidamente para convertirse, al final de la misma, en un hecho del pensamiento. Aquí el trabajo del alumno debe ser individual y se recomienda emplear preferentemente métodos problémicos. Por otro lado, las tareas deben ejecutarse sin ayuda, pues se supone que en esta etapa el alumno es capaz de orientarse por sí mismo en el problema para darle solución, ya que debe poseer desarrollados los niveles de generalización y reflexión necesarios para ello. Deben incluirse tareas similares a las de las etapas anteriores, tareas de mayor complejidad que impliquen relaciones más numerosas y profundas, y tareas que exijan una solución creativa.
La correcta selección y utilización de los métodos y técnicas participativas demanda una sustentación en una concepción teórica y metodológica de la educación, que propicie el cambio en los papeles tradicionales de profesor y alumno y del propio proceso de enseñanza-aprendizaje. En este caso, el profesor deviene en coordinador del grupo y ejerce una función reguladora y estimuladora del aprendizaje grupal. Además del dominio de la materia que imparte, que se someterá a permanente prueba por la mayor participación activa de los estudiantes, se precisa del profesor que conozca las características específicas, ventajas y limitaciones de los métodos que utilizará.
Por otro lado, la utilización exitosa de los métodos y técnicas participativas, requiere de profesor y estudiantes la observación, durante la actividad, de las reglas de trabajo en grupo que, aunque de fácil explicación y comprensión, pueden debilitarse durante el desarrollo de la actividad. En este sentido, es importante no sólo darlas a conocer en el momento inicial, sino que su cumplimiento debe ser controlado durante todo el proceso.
Son indiscutibles las ventajas de estos métodos, en contraposición a los métodos expositivos de la enseñanza tradicional, pero no es ocioso insistir en el hecho de que se trata de instrumentos que, por sí mismos, no garantizan el éxito del proceso docente, sino que hace falta considerarlos dentro del complejo sistema del proceso de enseñanza y aprendizaje.
En muchas ocasiones consideramos que cambiando el método de enseñanza, el componente pedagógico mas relacionado con el proceso de aprendizaje, se debe lograr una modificación sustancial en éste. Sin embargo, el método debe concebirse como el procedimiento mediante el cual se organiza la actividad del sujeto, de modo de lograr la reconstrucción personal del conocimiento a través de su participación en tareas o problemas directamente vinculadas con el objeto de estudio y que respondan a una realidad profesional, pero nunca descuidando los restantes atributos del sistema.
Resultados y discusión
El resultado final está constituido por el promedio de las tres dimensiones (Razonamiento y demostración, comunicación matemática y resolución de problemas) lo cual nos mostrará y validará nuestra hipótesis planteada de la aplicación de métodos para solución creativa de problemas en base a nuestra variable independiente sobre nivel de aprendizaje de los estudiantes e interpretara nuestro objetivo principal.
En el sistema de evaluación que se aplicó, hacemos descripción del desempeño de los estudiantes en función de: la valoración cuantitativa de sus conocimientos y la estimación cualitativa de las variables, seleccionadas por la capacidad de razonamiento lógico que exige el curso en base al contexto del diseño curricular.
En la evaluación de la aplicación de métodos para la solución creativa de problemas del área de lógico-matemática, presentamos el diagnostico inicial y final del grupo control y del grupo experimental:
CUADRO Nº 1
Evaluación inicial y final del rendimiento académico del grupo control
CATEGORIA | GRUPO CONTROL(pre test) | GRUPO CONTROL(post test) | ||
fi | pi | fi | Pi | |
Excelente Bueno Regular Deficiente Crítico | 8 10 10 8 4 | 20 25 25 20 10 | 9 8 10 10 3 | 22.5 20 25 25 7.5 |
40 | 100% | 40 | 100% |
En la evaluación inicial del grupo control, el 10% de los estudiantes obtienen un calificativo de crítico y un 20% deficiente, se infiere que en este porcentaje de estudiantes existe dificultades muy marcadas para la resolución de ejercicios de Lógico-matemática, debido a que el profesor a estado dirigiendo el proceso de enseñanza aprendizaje con metodologías que no desarrollan ni fomentan la participación de los estudiantes sino al contrario simplemente recepcionan los conocimiento del profesor. Seguidamente el 25% de los estudiantes de este grupo obtienen un calificativo de regular y bueno. Este porcentaje representa 20 estudiantes que resolvieron problemas con cierta dificultad que esencialmente respondieron ejercicios que tienen poca dificultad para su resolución. Un 8% obtuvieron el calificativo de excelente el cual representa 8 estudiantes del total, este grupo de alumnos resuelvieron con éxito la totalidad de ejercicios, debemos resaltar que el proceso de aprendizaje se desarrolla con metodologías tradicionales.
Después de desarrollar temas de Lógico-matemática(MCM, MCD, adición, sustracción, multiplicación y división con números decimales) con métodos tradicionales debido a que este grupo se le controlo de esa manera, en la evaluación final se encontró los siguientes resultados: el calificativo que obtiene mayor porcentaje es regular y deficiente con un 25% que suma representa 20 estudiantes en comparación con el evaluación inicial de este grupo el porcentaje de deficiente ha aumentado, entonces aquí podemos observar claramente el porque del bajo rendimiento académico de los estudiantes del sexto de primaria. Otro de los porcentajes que se reduce es el calificativo de bueno con 20% y aumenta el de excelente con 22.5% si bien cierto hay una leve mejora del calificativo de excelente pero no es significativo porque sólo representa un solo estudiante.
Con ello se demuestra que no existe una formación de la autorregulación de la actividad individual con ayuda de formas cambiantes de colaboración entre todos los estudiantes.
También debemos indicar que este grupo de estudiante han mejorado la parte de razonamiento y demostración que tiene que ver con el manejo de la información teórica de los diferentes temas de lógico-matemática, en cambio lo referente a resolución de problemas no ha tenido mayor mejora debido a que con metodología utilizada por el docente no permite la participación de los estudiantes ni mucho menos ellos pueden compartir información.
CUADRO Nº 2
Evaluación inicial y final del rendimiento académico del grupo experimental
CATEGORIA | GRUPO EXPERIMENTAL(pre test) | GRUPO EXPERIMENTAL(post test) | ||
Fi | Pi | fi | Pi | |
Excelente Bueno Regular Deficiente Critico | 6 10 12 8 4 | 15 25 30 20 10 | 22 14 4 0 0 | 55 35 10 |
40 | 100% | 40 | 100% |
En la evaluación inicial del grupo experimental y de acuerdo a las respuestas emitidas por los estudiantes de este grupo se tiene un razonamiento regular porque representa el 30% de los estudiantes. De este grupo el 15% que son 6 estudiantes obtuvieron el calificativo de excelente y el 25% tienen un calificativo bueno. Se infiere que los estudiantes tienen dificultades en el razonamiento y en la resolución de problemas sin embargo presentan cierta capacidad en la comunicación matemática, la explicación podría deducirse que ellos también han sido formados con metodologías tradicionales que no favorece la actividad de ellos mucho menos participar en el desarrollo de las actividades de aprendizaje.
Luego de aplicar métodos que fomentan la solución de creativa de problemas como: grupos nominales, tormenta de ideas, antiéxito, de bono, PNI y CTF. En Los métodos mencionados se aplicaron durante un trimestre el área de Lógico-Matemática (MCM, MCD, adición, sustracción, multiplicación y división con números decimales) por razones de la presente investigación y se desarrollo la evaluación final teniendo el siguiente resultado: El 55% obtienen un calificativo de excelente que representa 22 estudiantes y bueno el 35% que son 14 estudiantes, se observa que el aumento es significativo. Lo que indica que cuando los alumnos participan de manera individual o grupal en la adquisición de información y luego lo aplican, al mismo tiempo compartiendo opiniones mejoran sus aprendizajes paulatinamente en los aspectos de razonamiento y demostración, comunicación matemática y resolución de problemas.
A partir de estos datos se deduce que los estudiantes a medida que van compartiendo información y habilidades en la resolución de ejercicios de Lógico-Matemática van superando las dificultades que tienen debido a que la metodología que se aplica para la enseñanza aprendizaje exige la ayuda mutua y el intercambio de experiencias.
Cabe destacar que tan solamente el 10% obtuvo el calificativo de regular que en suma es 4 estudiantes de la totalidad. Se infiere que los estudiantes que estaban en el nivel deficiente y crítico han superado la capacidad de resolución de problemas
Llama la atención el hecho que ningún estudiante obtiene el calificativo de deficiente y crítico. A partir de ello y observando la evaluación inicial, se infiere que a medida que se aplica los métodos participativos para la solución creativa de problemas de Lógico-matemática los estudiantes van mejorando sus aprendizajes porque ellos participan en este proceso incluso aquellos estudiantes que anteriormente tenían dificultades en el aprendizaje superan con éxito las dificultades porque el ambiente social y los métodos obligan a que participen activamente conjuntamente con sus compañeros ello lo demuestra los resultados.
Conclusiones
A partir de los resultados se puede inferir que:
1. La enseñanza que el maestro imparte incide directamente en el proceso de desarrollo de cada estudiante, estas deben estar constituidas en base a los esquemas curriculares dentro de un sistema educativo.
2. La aplicación de métodos participativos para la solución creativa de problemas planteados en esta investigación, ha puesto de manifiesto que es muy necesario que los maestros dominen, porque así mejorarán el nivel de enseñanza.
3. Esta investigación refleja, como mejoró el nivel de rendimiento de aprendizaje de los estudiantes. Por lo tanto el efecto que produjo la aplicación de los métodos participativos para la solución creativa de problemas en temas de Lógico-Matemática, en los estudiantes del sexto de primaria, fue positiva en especial para aquellos que tenían dificultades, así como lo demuestra el cuadro Nº 2.
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* Rodríguez, F. y colaboradores. Enfoques y Métodos para la Capacitación a Dirigentes. Ed. Pueblo y Educación. La Habana. Cuba. 1990
Autor:
Lunar Calsina Quispe
Lucio Edmundo Mullisaca Estofanero
Faustino Cayra Uscamayta
Yenny Torres Ccasa
Zoraida Aurora Tisnado Vargas
Percy Calsina Quispe
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