La Sagrada Eucaristía, Alimento esencial del cristiano

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Llegada la hora Jesús se sentó a la mesa con sus apóstoles, Les dijo: "En verdad He deseado muchísimo comer esta Pascua con ustedes antes de padecer, porque les aseguro, ya no volveré a celebrar hasta que sea la Nueva y Perfecta Pascua en el Reino de Dios". Jesús recibió una Copa, dio gracias y les dijo: "Tómenla y repártanla entre ustedes porque les aseguro que Yo no volveré a beber del jugo de la uva hasta que llegue el Reino de Dios."

Después tomó el pan, y dando gracias, lo partió y se lo dio, diciendo: "ESTO ES MI CUERPO, QUE ES ENTREGADO POR USTEDES. HAGAN ESTO EN MEMORIA MIA." Después, de la Cena, hizo lo mismo con la copa. Dijo: "ESTA COPA ES LA ALIANZA NUEVA SELLADA CON MI SANGRE, QUE VA SER DERRAMADA POR USTEDES". (Lc. 22, 14-20).

Este año 2005 nuestra Madre Iglesia gira en torno al Congreso Eucarístico, desde esa perspectiva nos abocaremos a la esencia e importancia de Nuestra Eucaristía, Centro de nuestra vida cristiana. Hay millares de citas respecto a nuestra Gran Liturgia: Citas de santos, de mensajes entregados a místicos de parte de nuestra Divinidad, mensajes de hombres célebres en la historia de la humanidad, mensajes de nuestra Madre Iglesia con los que aquí comenzamos citando del Catecismo de la Iglesia Católica:

Toda la vida litúrgica de la Iglesia Católica gravita en torno al Sacrificio Eucarístico y los Sacramentos. La Santa Madre Iglesia considera que es deber celebrar la obra de salvación de su Divino Esposo con un sagrado recuerdo. Cuando la Iglesia celebra el Misterio de Cristo hay una palabra que jalona su oración: HOY! Como eco de la oración que le enseñó su Señor y de la llamada del Espíritu Santo. Este HOY del Dios vivo al que el hombre está llamado a entrar, es la HORA de la Pascua de Jesús que es eje de toda la historia humana. Dice San Hipólito:

"La vida se ha extendido sobre todos los seres y todos están llenos de una amplia luz: el Oriente de los orientes invade el universo, y EL que existía"antes del lucero de la mañana" y antes de todos los astros, inmortal e inmenso, el GRAN CRISTO brilla sobre todos los seres más que el sol. Por eso para nosotros, que creemos en EL, se instaura un día de luz, largo, eterno, que no se extingue: LA PASCUA MISTICA.

La Eucaristía que instituyó en el momento de la Ultima Cena, será el memorial" de su sacrificio. Jesús incluye a los apóstoles en su propia ofrenda y les manda perpetuarla. Así Jesús instituye a sus apóstoles, sacerdotes de la Nueva Alianza: "POR ELLOS ME CONSAGRO A MI MISMO PARA QUE ELLOS SEAN TAMBIEN CONSAGRADOS EN LA VERDAD"

En la Eucaristía "compartimos realmente el Cuerpo del Señor, que nos eleva hasta la comunión con El y entre nosotros". La Eucaristía es el Alma del Apostolado. El nombre de Comunión puede aplicarse a todos los sacramentos, porque cada uno de ellos nos une a Dios, pero este nombre es más propio de la Eucaristía, que de cualquier otro, porque ella es la que lleva esta comunión a su culminación.

.Si citamos a San Pablo en Col 15, 35-37, nos expone que en la resurrección nuestros cuerpos serán incorruptibles". – Nuestra participación en la Eucaristía nos da ya "un anticipo de la transfiguración de nuestro cuerpo por Cristo":

Citamos a San Irineo de Lyon: "ASI COMO EL PAN VIENE DE LA TIERRA, DESPUÉS DE HABER RECIBIDO LA INVOCACIÓN DE DIOS, YA NO ES PAN ORDINARIO, SINO EUCARISTÍA, CONSTITUIDA POR DOS COSAS, UNA TERRENA Y OTRA CELESTIAL, ASI NUESTROS CUERPOS QUE PARTICIPAN EN LA EUCARISTÍA, YA NO SON CORRUPTIBLES, YA QUE TIENEN LA ESPERANZA DE LA RESURRECCIÓN.

En la Eucaristía es donde Jesucristo actúa en plenitud para la transformación de los hombres.

Otro santo: San Juan Damasceno: "PREGUNTAS COMO EL PAN SE CONVIERTE EN EL CUERPO DE CRISTO Y EL VINO EN SANGRE DE CRISTO. TE RESPONDO: EL ESPIRITU SANTO IRRUMPE Y REALIZA AQUELLO QUE SOBREPASA TODA PALABRA Y TODO PENSAMIENTO ……..QUE TE BASTE OIR QUE ES POR LA ACCION DEL ESPIRITU SANTO, DE IGUAL MODO QUE GRACIAS A LA SANTÍSIMA VIRGEN Y AL MISMO ESPIRITU, EL SEÑOR, POR SI MISMO Y EN SI MISMO, ASUMIO LA CARNE HUMANA"

"La Sagrada Eucaristía culmina la iniciación cristiana."

Recibir la Eucaristía en la comunión da como fruto principal la unión íntima con Cristo Jesús. En efecto el Señor dice: "Quién come mi Carne y bebe mi Sangre habita en mí y Yo en él.". La vida en Cristo encuentra su fundamento en el Banquete Eucarístico: LO MISMO QUE ME HA ENVIADO EL PADRE, QUE VIVE, Y YO VIVO POR EL PADRE, TAMBIEN EL QUE ME COMA VIVIRA POR MI"

La vida y la resurrección son comunicadas a quién recibe a Cristo. Lo que el alimento material produce en nuestra vida corporal, la Eucaristía lo realiza de manera admirable en nuestra vida espiritual. La comunión con la Carne de Cristo resucitado, "vivificada por el Espíritu Santo y vivificante", conserva, acrecienta y renueva la vida de gracia recibida en el Bautismo. Este crecimiento de la vida cristiana, necesita ser alimentado por la Comunión Eucarística, Pan de nuestra peregrinación, hasta el momento de la muerte, cuando nos sea dada como viático.

La conversión y la penitencia diarias encuentran su fuente y su alimento en la Eucaristía. Pues en ella se hace presente el sacrificio de Cristo que nos reconcilió con Dios; por Ella son alimentados y fortificados los que viven de la vida de Cristo; " es el antídoto que nos libera de nuestras faltas cotidianas y nos preserva de pecados mortales" (Concilio de Trento, 1638 )

El sacrilegio es un pecado grave sobretodo cuando es cometido contra la Eucaristía, pues en este Sacramento el Cuerpo de Cristo se nos hace presente substancialmente.-

LA EUCARISTÍA CONTIENE Y EXPRESA TODAS LAS FORMAS DE ORACIÓN: es la "OFRENDA PURA" DE TODO EL CUERPO DE CRISTO " A LA GLORIA DE SU NOMBRE"; ES SEGÚN LAS TRADICIONES DE ORIENTE Y OCCIDENTE, "EL SACRIFICIO DE LA ALABANZA"

¿QUE ES LA MISA?

"Jesús instituyó el Sacrificio Eucarístico de su Cuerpo y Sangre para perpetuar el Sacrificio de la Cruz y confiar a su Iglesia el memorial de su Muerte y Resurrección: Sacramento de piedad, signo de Unidad, vínculo de Caridad, Banquete Pascual en el cual se come a Cristo, el alma se llena de Gracia y se nos da una prenda de la Gloria Venidera" ( Vaticano ll, Liturgias 47).

La Misa es sacrificio y banquete.-

1.- Es sacrificio. Desde la consagración del pan y del vino, sobre el Altar se ofrece el mismo Cristo que se ofreció en la Cruz. El valor de la Misa es el mismo valor infinito del Sacrificio de la Cruz.

2.- Es banquete. Es realmente doble ya que en la Misa se nos ofrece el banquete de la Palabra y el Banquete Eucarístico. Nos alimentamos con la Palabra de Dios escuchada en las Lecturas Bíblicas y con la Sagrada Comunión que contiene realmente el Cuerpo y la Sangre de Cristo.

Fines de la Misa. Son cuatro: adoración a Dios, agradecimiento por sus beneficios, reparación por nuestros pecados, petición por nuestras necesidades espirituales y corporales.

Institución de la Misa. La instituyó Nuestro Señor en la última Cena el Jueves Santo y, el Viernes Santo en la Cruz se consumó el Sacrificio.

Actores de la Misa. El principal actor es Cristo. El sacerdote preside la celebración y consagra. Los fieles ofrecen con el sacerdote en la función que a ellos corresponde.

Obligación de participar en la Misa. Todos los católicos desde los siete años están obligados a participar en la Misa todos los Domingos y fiestas de guardar. Deben asistir no sólo porque sea una obligación, sino porque es una manera de demostrarle a Dios nuestro amor y de enriquecer nuestras almas con los frutos de la Misa.

Quienes han comprendido la Misa tratan de oírla diariamente.

División de la Misa. Hay en ella dos partes distintas que forman un todo: Liturgia de la Palabra y Liturgia Eucarística.

En la liturgia de la Palabra hablamos con Dios y escuchamos su Palabra.

En la Liturgia Eucarística participamos en la gran Oración Eucarística dentro de la cual se realiza la Consagración.

La Sagrada Comunión recibida por el sacerdote es parte integrante de la Misa. Los fieles traten de comulgar en la Misa por ser la participación más efectiva de ella.

El Concilio Vaticano ll nos dice: "Los cristianos no asistan a este Misterio de Fe como extraños y mudos espectadores, sino que, comprendiéndolo bien a través de los ritos y oraciones, participen consciente, piadosa y activamente en la Acción sagrada." (Const.de Liturgia,48).

De la Fundación Verge de la Gleva desde Barcelona, España, el profesor J. Cuadrupani hace la siguiente referencia acerca de la Eucaristía:

1-La Misa.- En la Misa se renueva el mismo sacrificio que Jesucristo consumó en la Cruz; y no hay otra diferencia sino que el Sacrificio de la Cruz fue con derramamiento de sangre, y el de la Misa es incruento.

2.-Con este Incruento Sacrificio se satisfacen cuatro deberes que nos obligan para con Dios, según Santo Tomás: a) honrarlo por su grandeza y majestad; b) satisfacer por los pecados cometidos; c) dar gracias al Señor por los beneficios recibidos; d) suplicarle por las necesidades.

3.- La Misa es de valor infinito, porque encierra los Méritos Infinitos de Jesucristo. Sin embargo, sus efectos son, limitados, a saber, en proporción "de la mayor o menor devoción de quien celebra, o hace celebrar, o asiste a la Misa."

" El mar, dice San Agustín, encierra aguas inmensas; con todo, cada cual participa más o menos de dichas aguas, según el tamaño mayor o menor del vaso con que la saca." Las aguas inmensas contenidas en el mar representan los inmensos méritos de Jesucristo contenidos en la Misa; el vaso más o menos grande, la mayor o menos devoción del que toma parte en el sacrificio.

4.-Conviene, pues, asistir a él devotamente, y aunque sea plausible un número mayor de Misas, es más plausible, una mayor devoción en aquellas Misas a las que asistes.

5.-Antes o al mismo momento de empezar la Misa, hágase un brevísimo acto de viva y afectuosa contricción, a fin de purificar más aquel corazón que debe asistir y participar del gran sacrificio del Dios de la pureza.

6.- Hacia el fin del sacrificio, o al tiempo de la consumación, conviene que te ofrezcas a ti mismo y tus cosas a aquel Jesús que por ti se ha ofrecido al Eterno Padre. Se puede hacer también la Comunión Espiritual, como más guste.

7.-En cualquier especial necesidad, o al celebrarse la fiesta de alguno de nuestros principales santos o santas protectoras, estará bien que hagamos celebrar alguna Misa a algún sacerdote de reconocida piedad, o a quien conoce nuestras necesidades, a fin de que rece más fervorosamente por nosotros……

Haremos referencia ahora, a algunos de los párrafos del texto alusivo a una charla dada por el padre Manuel Hernández de las Islas Canarias España, en la Parroquia Santa Gema el año 1999, que fue publicada en la Revista informativa ESPERANZA DE MEDJUGORE: La Eucaristía como Centro del Culto Católico y expresión de la voz de Dios para con los hombres.:

"Vamos a contemplar la Eucaristía bajo tres dimensiones tres aspectos:, como Presencia de Cristo en Ella, como Sacrificio y como Alimento. Reconozco que no voy a decir nada nuevo, sólo intento expresar y recordar ideas que todos tenemos, pero que, a veces de tanto saberlas no las vivimos o llegan a no impresionarnos e impactarnos.

"Vamos, por lo tanto a reflexionar en la Eucaristía como Sacrificio, que luego vamos a vivir en la Santa Misa y en la plática de la misma, nos vamos a fijar en la Eucaristía como alimento del alma. "

"Decíamos antes, que somos los seres más dichosos del mundo porque tenemos a Cristo con nosotros. Generalmente acudimos a Cristo a pedirle cosas; acudimos a Dios a pedirle cosas, "concédeme tal gracia, concédeme tal otra, que yo obtenga tal beneficio." Todos sabemos que generalmente nuestra oración es más de petición que de acción de gracias. ¿No creen ustedes si en lugar de buscar cosas a través de Jesús, buscáramos a Jesús, no tendríamos todas las cosas?. Si en lugar de preocuparnos tanto y gastar tanto tiempo, en pedir cosas materiales o espirituales, dedicáramos ese tiempo a buscar a Jesús, a meter a Jesús dentro de nuestro corazón tendríamos todo. "Entremos en materia con la Presencia de Cristo en la Eucaristía!, en el sacrificio, en el alimento.

En un momento dado, en todo el mundo, se está leyendo el mismo Evangelio. ¿Cómo comienza la Misa?, En todas partes igual. Con un acto penitencial reconocemos nuestros pecados…..

"Después de las lecturas, ¿Qué decimos al Señor?. Quédate con los pobres, quédate con los enfermos. Quédate con el Papa , quédate con los que no tienen trabajo. Eso es lo que pedimos.- En el momento del Ofertorio, el sacerdote ofrece el pan y el vino. Es un momento crucial de la Misa. Porque es en ese momento que tú tendrías que ponerte en la Patena como una hostia pequeñita y también a tu hijito y a tu madre y a aquellos pobres, los de Kosovo, los que están muriendo de hambre, por allá por Africa, Asia. ¡Tantas necesidades!. Es el momento de ponerlas en la Patena, porque hermanos tengan en cuenta una cosa, tu oración o la mía, la escuchará o no la escuchará Dios, pero la oración de su Hijo es infalible!!!. La escuchará siempre!.!Jesús en cada Eucaristía se queda con nosotros.!

¡Amemos la Eucaristía!

¡Recibámoslo cada día en nuestro corazón!"

Hasta aquí llega parte de la exposición del Rev. P Manuel Hernández, que vive en Palmas de la Gran Canaria, España y que asesora al Consejo Directivo de Centro de paz CODI y que tuvo la amabilidad de acompañarnos en varios encuentros del Centro María Reina de la Paz, en Chile.-

Ahora citaremos un texto de Don Gabriele Amorth (de Medjugore, Turín):

"Cuando el Concilio Vaticano ll habló de la Eucaristía, no pudo menos que definirla como "Fuente y Culmen de toda la vida cristiana". El Padre no se nos podía entregar más que dándonos al Hijo. Jesús no podía darnos más que darse asimismo.- Veamos como la Eucaristía expresa el culmen del amor de Jesús por nosotros, considerando en sus tres aspectos fundamentales:

1.- ES SACRIFICIO.- "Este es MI Cuerpo que es entregado por vosotros…. ésta es mi Sangre derramada por vosotros"

2.-ES EL ALIMENTO DE LA VIDA NUEVA.- "MI carne es Verdadera Comida…MI Sangre es Verdadera Bebida".

3.- ES PRESENCIA CONSTANTE– "ME quedaré con vosotros hasta el fin de los tiempos".

Propongo a los lectores algunas breves consideraciones sobre la Eucaristía, Sacrificio- Sacramento- Presencia , para que cada uno se interrogue con sentido práctico: ¿Qué es para mí el Sacrificio de la Misa?. ¿Qué es para mí el Sacramento de la Comunión?. ¿Qué es para mí la Presencia continua de Jesús en todos los Tabernáculos del mundo?….

"Asisto a la Misa: Jesús se está inmolando por mi, hasta este punto me ama, El sabe que aquel es el único Sacrificio digno del Padre, el único Sacrificio capaz de expiar mis pecados:" Haced esto en memoria mía" no es un solo recuerdo, sino una realización; es hacer presente el único Sacrificio de la Cruz. Es Jesús vivo y resucitado que se ofrece continuamente al Padre por nuestra salvación. ¿Cómo asisto a Misa, con qué compromiso?

. Hace 26 años fui a ver la Padre Pío. No hay duda de que el P. Pio, en cada Misa revivía la Pasión del Señor. En ellas su participación era cada vez más cruenta; y a menudo con derramamiento visible de sangre que brotaba de sus estigmas.

Ya que tocamos el tema del Padre Pío, y saliendo algo del contexto de Don Gabriele, que estamos citando, me referiré a palabras textuales del Padre Pío con respecto a la Sagradas Eucaristía:

"La Misa- dijo una vez a un hijo espiritual- es Cristo en Cruz, con María y Juan a los pies y los Angeles en adoración. Lloremos de amor y adoración en esta Contemplación". Los miles y miles de peregrinos que asistían a sus Misas, quedaban para siempre impresionados……

"He asistido a muchas misas del P. Pío"- dice la célebre escritora polaca, María Winoska-pero ninguna era igual a otra- Era rigurosamente fiel a las normas litúrgicas, sus gestos eran de una sobriedad maravillosa, se notaba que no actuaba sólo. Presencias Invisibles lo envolvían….

" Al rezar el "Santus" gruesas gotas de sudor le caían de la frente y le inundaban el rostro por los sollozos". La atención de los presentes estaba muy concentrada, en especial cuando al Padre, él elevaba la Sagrada Hostia y el Cáliz, porque todo el mundo podía mirar sus manos perforadas. Con frecuencia hilitos de sangre le corrían a lo largo de los dedos, mientras una sonrisa afloraba en sus labios y su mirada se posaba con gran ternura sobre la Hostia Consagrada.

" El que hubiera tenido dudas sobre la Presencia Real de Jesús en la Hostia Consagrada, no la seguiría teniendo después de haber asistido a la Misa del Padre Pío."

Dice un sacerdote: "Durante varios días asistí a la misa del P. Pío al lado del Altar y no perdí ni un gesto. Yo había celebrado miles de Misas, pero al mirarlo, me sentía un pobre sacerdote, porque el P. Pío hablaba realmente con Dios en cada instante de la Misa, podría decir que luchaba con Dios, como Jacob. Por eso uno entiende lo que él decía al Padre Benito: "Tengo hambre y sed de recibir a Jesús, que falta poco para que me muera de angustia y, precisamente porque no puedo estar sin unirme a Jesús, muchas veces aunque con fiebre, me veo obligado a ir a alimentarme de su Cuerpo". –

" Sollozaba en el altar. Lloraba por el pecador que prefiere su pecado a su alma preciosa. Lloraba por la sangre de su Dios, derramada en vano por tantos infieles. Lloraba por la creación profanada y por los corazones que se cierran a la gracia de Dios. Lloraba, en fin, porque Cristo lloró….. De ahí su sed de penitencia reparadora.

" Una hija espiritual le preguntó un día como podía estar parado durante toda la Misa si tenía los pies adoloridos por las llagas y él respondió: ¡"Hija mía , durante la Misa no estoy de pie, estoy suspendido con Jesús en la Cruz."!.- Al bajar del altar decía: " Yo bajo del Monte Calvario".- ¿Qué decía el Padre Pío sobre la Misa y la Confesión?: ¡¡"SI LOS HOMBRES CONOCIERAN EL VALOR DE LA SANTA MISA, LA POLICIA TENDRÍA QUE ESTAR SIEMPRE EN LAS PUERTAS DE LAS IGLESIAS PARA MANTENER EL ORDEN POR LA GRAN CANTIDAD DE GENTE QUE ASISTIRIA".!!

" Un día en la confesión el P. Pío preguntó a un penitente: "Cuántas veces has faltado a Misa el Domingo?" ¿Cómo puedo recordar padre, cuántas veces?. Han sido muchas. "¿Cuántas veces has faltado desde la última confesión?".- "Pero padre no lo puedo saber"- " ¡Bueno, vete de aquí y vuelve cuando hayas recordado cuantas veces has faltado!" Y lo despidió sin darle la absolución.-"…….

"Una vez – cuenta Serafina Sarro– me confesé con el P. Pío y con una cierta desenvoltura le dije:- "Padre, yo el Domingo falto a la Misa con frecuencia, incluso no tengo ganas de ir y me pesa".- "¿ Ah, sí, – le contestó el Padre – Y yo tampoco tengo ganas de darte la absolución.¡Vete!".Y cerró la ventanilla..

Con esta alusión cierro el paréntesis referido al Padre Pío, en la biografía escrita por el padre Ramón Ricciardi, en la cual este Santo nos hace ver la esencia de la Sagrada Eucaristía y como en Ella está presente realmente la Santísima Trinidad, Jesús mismo, la Santísima Virgen, los ángeles , los santos y en un momento dado hasta nuestros queridos difuntos por los que oramos…… Para escribir sobre la Santa Eucaristía era imposible dejar de referirnos al Padre Pío…….

………..Siguiendo con el texto de Don Gabriele Amorth: "Nosotros no somos el Padre Pío, pero hay maneras de participar en la Misa con algo nuestro.-¿Qué recomendar a los fieles, que sentimientos sugerirles cuando asisten a la Misa?.- Sugerir el ofrecimiento de si mismos, aceptando la situación concreta y cotidiana de su vida, salud , trabajo, circunstancias o dificultades particulares.

La Eucaristía es el alimento del cristiano, o sea de quien vive en Cristo. Es fortaleza, es consuelo, es gracia puesto que incluso nos da al Autor de la Gracia.. Asistamos a Misa a menudo, mejor todos los días o al menos el Domingo.- ¡Cuántas sanaciones materiales y espirituales han tenido lugar ante Jesús Eucarístico; y cuántas decisiones tomadas, vocaciones, iniciativas apostólicas e iluminaciones recibidas!.- A menudo buscamos consejo a diestra y siniestra: quizás se recurre a un astrólogo, a un sanador, a un carismático y no se acude a Jesús .-

Terminamos aquí con la alusión a Don Gabriele…..

El hijo de Dios (los cristianos), como todo ser humano necesita alimento, no sólo para conservar la vida sino que también para crecer y tener la fuerza y la energía para vivir. También el hijo de Dios (nosotros) necesita alimento espiritual que le dé fuerza y energía para vivir la vida cristiana…. Cristo ha querido ser el alimento para sus hermanos; y así se hace presente en el Sacrificio repetido de la Cruz, lo recibimos en las especies de Pan y Vino transformados en el Cuerpo y la Sangre de Cristo, a través de la Consagración…….

……..En el Plan Pastoral del año 2000, año del Jubileo, se hizo mucho hincapié en la profundidad de la Eucaristía, una de las exposiciones fue :

La Eucaristía.- Esta invitación a la comunión con Dios y entre nosotros se actualiza permanentemente en el Sacramento de la Eucaristía. Por eso la Eucaristía será el tercer gran contenido a transmitir, profundizar y celebrar en este año jubilar. En la Eucaristía , Jesucristo nos ofrece su vida y nos constituye en comunidad de hermanos y hermanas al compartir su Cuerpo y su Sangre.

Profundizar en el Sacramento de la Eucaristía supone renovar su celebración vinculándola a la vida cotidiana y viviendo la participación en Ella como encuentro profundo con el Señor, acogida de su Gracia y comunión entre nosotros. De igual forma la Eucaristía ha de ser fuente de solidaridad y amor eficaz a los hermanos que sufren, ya que, en palabras del Vaticano ll " la renovación de la alianza arrastra a los fieles a la apremiante caridad de Cristo".

-La Celebración del Congreso Eucarístico ( internacional, nacional y local), así como el redescubrimiento de la adoración Eucarística y de diversas formas de piedad eucarística ayudarán a vivir este año intensamente eucarístico.

Debemos seguir con una catequesis sistemática sobre el Santo Sacrificio de la Misa, porque nos damos cuenta que muchos bautizados " asisten" y no "participan" en profundidad en el Misterio Eucarístico. Nos preguntamos porque después de dos años de Catequesis tantos niños de Primera Comunión dejan de venir al Templo el "Día del Señor". Muchos que "van a Misa", no entienden los signos, gestos y actitudes y las principales palabras que se están realizando desde el Altar y más quizás de lo que se dice desde el Ambón. Es verdad que muchos reconocen que ahora "participan" más que antes en las Celebraciones Eucarísticas; "viven" su Misa.

De aquí vemos la importancia de los cursos o talleres sobre "LITURGIA" que pueden pedirse a la Vicaría: Area Formación airea Espiritualidad y Liturgia o en las Parroquias y Capillas.

Nos alegra saber como la mayor parte de la Asamblea Dominical recibe con fe y respeto la Sagrada Comunión.

La Iglesia . más que nunca recomienda a los fieles la Comunión habitual y frecuente, aún diaria. Creemos, sin embargo, necesario recordar oportunamente las condiciones para recibir digna y concientemente el Cuerpo del Señor, como la posibilidad de comulgar en la mano como se hacía durante los primeros siglos. Fomentar la hermosa y caritativa costumbre de llevar la Comunión a casa de los enfermos. Cada Parroquia necesita un buen número de "Ministros extraordinarios de la Eucaristía".

Debemos acostumbrarnos a una frecuente "Comunión Espiritual" que nos permite vivir durante el día en unión íntimo con Cristo en la Eucaristía. Muy especialmente la debemos recomendar a las personas que no pueden recibir sacramentalmente el Cuerpo de del Señor……..-

Cita de la lll° Conferencia General del Episcopado Latinoamericano, Documento de Puebla, el año 1979, con presencia del Papa.

Ref. la Eucaristía.- La Liturgias, como acción de Cristo y de la Iglesia, es el ejercicio del Sacerdocio de Jesucristo, es Cumbre y Fuente de la vida eclesial. Es encuentro con Dios y los hermanos; Banquete y Sacrificio realizado en la Eucaristía; Fiesta de Comunión Eclesial, en la cuál el Señor Jesús, por su Misterio Pascual, asume y libera al Pueblo de Dios y por él a toda la humanidad cuya historia es convertida en historia salvífica para reconciliar a los hombres entre sí y con Dios. La Misa es también, la fuerza en el peregrinar, a fin de llevar a cabo, mediante el compromiso transformador de la vida, la realización plena del Reino, según el plan de Dios. El hombre es un Ser Sacramental, a nivel religioso expresa sus relaciones con Dios en un conjunto de signos y símbolos..-

La celebración Eucarística, centro de la sacramentalidad de la Iglesia y la más plena presencia de Cristo en la humanidad, es Centro y Culmen de toda la Vida Sacramental…………..

…………………En otra oportunidad, escribe un sacerdote, el padre Stanislao,: "¿Sabes, cuál es el valor de la Misa?":

Hace muchos años en la ciudad de Luxemburgo, un capitán de la guardia forestal, se entretenía en una animada conversación con un carnicero, cuando una señora ya mayor entró a la carnicería que necesitaba un pedazo de carne, pero no tenía dinero para pagarle."Un pedazo de carne, pero ¿cuánto me va a pagar por eso?", preguntó el carnicero. La señora le respondió " perdóneme no tengo dinero, pero iré a misa por ud. Y rezaré por sus intenciones". El carnicero y el capitán eran buenos hombres pero indiferentes a la religión y se empezaron a burlar de la respuesta de la mujer..

"Está bien – dijo el carnicero- entonces ud. Va a ir a misa por mí y cuando regrese le daré tanta carne como pese la Misa".- La mujer se fue a Misa y regresó. Cuando el carnicero la vio, cogió un pedazo de papel y anotó la frase "ella fue a Misa por ti" y lo puso en uno de los platos de la balanza, y en el otro plato colocó un pequeño hueso. Nada sucedió e inmediatamente cambió el hueso por un pedazo de carne. El pedazo de papel pesó más.

"Los dos hombres comenzaron a avergonzarse de lo sucedido, pero continuaron. Colocaron un gran pedazo de carne en el plato de la balanza, pero el papel seguía pesando más. Entrando en desesperación, el carnicero revisó la balanza, pero todo estaba en perfecto estado. "¿qué es lo que quiere buena mujer, es necesario que le dé una pierna entera de cerdo"? preguntó. Mientras hablaba colocó una pierna entera de carne de cerdo en la balanza, pero , el papel seguía pesando más.

Fue tal la impresión que se llevó el carnicero que se convirtió en ese mismo instante y le prometió a la mujer que todos los días le daría carne sin costo alguno. El capitán dejó la carnicería completamente transformado y se convirtió en un fiel asistente de misas todos los días. Dos de sus hijos se convertirían más tarde en sacerdotes, uno de ellos jesuita y el otro del Sagrado Corazón. El capitán los educó de acuerdo a su propia experiencia de fe. Luego advirtió a sus dos hijos que "deberán celebrar Misa todos los días correctamente y que nunca deberán dejar el sacrificio de la Misa por algo personal".

El padre Stanislao, quien fue el que me contó todos los hechos acabó diciéndome " yo soy el sacerdote del Sagrado Corazón, y el capitán era mi padre."!…….

………..Podrían ser tantas las pruebas, testimonios y citas que podríamos exponer para dar fe de que en la Santa Eucaristía está la Presencia real de Jesucristo, que realmente ni el más ateo, podría ponerlo en duda …….

LA SANTA MISA, es el Acto más Grande,! más Sublime! y más Santo!, que se celebra todos los días en la Tierra. Nada hay más sublime en el mundo que JESUCRISTO, nada más sublime en JESUCRISTO QUE SU SANTO SACRIFICIO EN LA CRUZ !!!!

MISA, CENA Y CRUZ son un mismo Sacrificio, con razón decía San Bernardo:"más merece el que devotamente oye una Misa en Gracia de Dios, que si diera todos sus bienes para sustento de los pobres".

"Oir una Misa en vida o dar una limosna para que se celebre, aprovecha más que dejarla para después de la muerte"( San Anselmo).

GRACIAS OBTENIDAS POR ASISTIR A LA SANTA MISA

1.- La Misa es continuación del Calvario.

2.- Cada Misa vale tanto como la vida, sufrimiento y muerte de nuestro Señor Jesucristo, ofrecidos en sacrificio.

3.- La Santa Misa es el acto de desagravio más poderoso para expiar los pecados.

4.-A la hora de la muerte, el consuelo más grande del alma consistirá de las Misas oídas en vida.

5.-Cada Misa bien oída nos acompaña hasta el Tribunal Divino, suplicando perdón.

6.-En la Santa Misa, según el fervor con que se asiste, se puede disminuir en grado mayor o menor, la pena temporal debida por los pecados.

7.- Al asistir devotamente a la Santa Misa se rinde el más grande homenaje a la Sagrada Humanidad de Nuestro Señor.

8.- En la Santa Misa, Nuestro Señor Jesucristo, ofrece expiación y desagravio por muchas omisiones y negligencias nuestras.

9.- En la Santa Misa, Jesucristo perdona los pecados veniales que todavía no se han confesado. Además se disminuye el poder de Satanás sobre el alma.

10.-Al asistir a la Santa Misa, se proporciona a las almas del Purgatorio, el alivio más grande que sea posible.

11.- Una Misa bien oída durante la vida, será de más provecho, que muchas que se ofrecieran para su reposo después de la muerte.

12.- Por asistir a Misa, el alma se preserva de peligros, desgracias y calamidades, que de otro modo hubieran sucedido. Además se abrevia o reduce la duración del Purgatorio.

13.- Cada Misa bien oída obtiene para el alma, un grado mas elevado de gloria en el cielo.

14.- En la Misa, se recibe la bendición del sacerdote que Nuestro

Señor ratifica en el Cielo.

15.-En la Misa se arrodillan entre la multitud, los santos ángeles que están presentes en actitud de profunda reverencia durante el sacrificio adorable de la Santa eucaristía.

16.- En la Santa Misa se recibe bendiciones para todos los bienes y empresas temporales.

En la Eternidad, realizaremos plenamente el gran valor de haber asistido a la Santa Misa diariamente. REZAD POR LOS SACERDOTES PARA QUE OBTENGAN LA GRACIA DE OFRECER LA SANTA MISA CON SANTO AMOR Y REVERENCIA……

………..Dice Eugenio lll, Papa: "más aprovecha para la remisión de la culpa y de la pena, es decir, para la remisión de los pecados, oír una Misa que todas las oraciones del mundo"……

…………Con la Misa se tributa a Dios más honor, que el que pueden tributarle todos los Angeles y Santos del cielo. Puesto que el de éstos, es un honor de criaturas, más en la Misa, se le ofrece su mismo Hijo Jesucristo, que le tributa un Honor Infinito.(San Alfonso María Ligorio).

Con la asistencia a la Misa, rindes el mayor homenaje a la Humanidad Santísima de Nuestro Señor Jesucristo. Durante la Misa , te arrodillas en medio de una multitud de Angeles, que asisten invisiblemente al Santo Sacrificio con suma reverencia…..

……………. Al respecto, podemos citar un extracto de uno de los mensajes dados por Nuestra Señora a Nancy Fowler, una vidente, en los años 1993 en Conyers, USA.:

Nancy le ha dicho a la gente a menudo: "si quieren estar presente en una aparición, ¡asistan a Misa!. Ella le dice a la gente las palabras que la Santísima Madre le comunicó: "no hay mayor gracia en la Tierra que la Santa Misa". Nancy explica como la mayoría de sus visiones diarias ocurren con una visión de un Angel arrodillado y de frente al Tabernáculo ante la presencia Eucarística de Jesús. También les dice a los peregrinos como la "Misa es totalmente viva", con ángeles y santos, y que no ve " ningún asiento vacío en la Misa." Nancy dice haber visto en la Consagración, la Hostia en las manos del sacerdote resplandeciendo de una Luz Radiante y una luz que irradia del interior y alrededor del Cáliz. El Cáliz queda completamente envuelto en luz.

"En la Misa se ve aparecer a Cristo Resucitado y volverse uno con el sacerdote. Dice que no importa quien sea el sacerdote, ni cual sea su personalidad. No importa si le gusta o no el sacerdote. Cuando está en el Altar celebrando Misa, es JESÚS, el Sumo Sacerdote. Nancy habla con frecuencia sobre la Presencia Real de Jesús en la Eucaristía: "El Señor me está diciendo verdaderamente que es su Cuerpo y su Sangre. No es un signo ni un símbolo, sino es Jesús. Nancy cree que la Misa y la Eucaristía deben ocupar el primer lugar en nuestras vidas. En una entrevista después de la aparición del 13 de Mayo de 1993 Nancy habló sobre la Misa y la Sagrada Eucaristía:

"La Misa es un evento totalmente vivo. Nada sobrepasa las Gracias de la Misa. Una visión no lo hace… Jesús está presente y vivo en la Misa. He sido bendecida al ver a Cristo Glorificado en forma espiritual, aparecer y hacerse uno con el sacerdote, envuelto en un aura de luz. Justo esta mañana en Misa mientras rezaba durante la elevación de la Hostia Consagrada, cuando el sacerdote dijo " en unidad de Espíritu Santo", la Hostia resplandeció con una gran luz, una luz que no tiene comparación con ninguna otra luz en la tierra .No se puede negar esta luz . Daría mi vida por Jesús de esta manera. Sé que entiendo, y rezo por aquellas personas que no creen en el Jesús Eucarístico. Necesitan muchas oraciones, ya que Nuestro Señor está realmente vivo. Es en verdad su Cuerpo y su Sangre, su Alma y su Divinidad. Si no van a Misa no ven a Cristo Resucitado. El sacerdote en ese altar es Cristo, y es Jesús quien se ofrece al Padre.

"Veo ángeles todos los días y los veo presente en el Tabernáculo. Tienen manos, tienen alas y visten ropas blanca como Cristo, y están de frente al Tabernáculo. No están frente a una caja vacía. Hay Alguien que está muy presente allí. Hay muchas visiones de luces que proceden del Tabernáculo.

"Esto sé y creo: no hay nada mayor que la Santa Misa". Ojalá pudiera decirle a cada uno de los católicos descarriados,: ¡ve, regresa a la Iglesia, regresa a la Misa. Ve y reconcíliate con el Sanador, el Médico Divino. Ve a Jesús. Ve, El te aguarda!. Sabes que Nuestra Madre, la Santísima Madre está allí para ayudarte.- Toma su mano. Te aseguro que Ella sólo hará una cosa: te acercará más a Jesús."…!Nancy dice sobre la curación: nos acostumbramos tanto hacer que otros oren por nosotros, o este sacerdote o aquel, que nos olvidamos del Gran Sanador Jesús. Necesitamos prestar mayor atención al Jesús Eucarístico, e ir a Misa. Tanto Nuestro Señor como la Bienaventurada Madre han dicho que no hay lugar donde se den más gracias que en la Misa.. EL MÁXIMO LUGAR PARA LA CURACIÓN ES LA MISA. Jesús está allí esperando que nosotros L.e amemos, Le adoremos y Le demos gracias.,

Nuestra Madre Amantísima ha dicho: "Debéis alimentar continuamente vuestras almas con la Vida de MI HIJO. La Vida de MI HIJO es Su Cuerpo, Su Sangre, La Misa, Los Sacramentos y Las Palabras de MI MIJO".

Jesús dice: "Yo Me ofrezco a Mi mismo al Padre por Uds. Y por toda la humanidad".

"YO Soy el Camino, La Verdad y La Vida esa es la vida Eterna. Yo Soy el Autor de la Vida. El Camino, La Verdad y la vida equivalen a la Vida Eterna. Miren a cada uno de ellos individualmente. Vayan por mi Camino Uds. Camino, Uds. Encontrarán la verdad. Eso es vida.. vivan mis Palabras. Eso es vida. TOMEN MI CUERPO Y MI SANGRE. Eso es mi vida.

………..Apartándonos un poco de Nancy, cuya visión es realmente una Maravilla, continuamos con descripciones y detalles reales, místicos y espirituales de este Sacramento . un Paso al Paraíso……

………."…A la hora de tu muerte, tu mayor consolación serán las Misas que hayas oído durante tu vida. Cada Misa que oíste, te acompañará al Tribunal Divino, y abogará para que alcances el perdón.

"Con cada Misa, puedes disminuir el castigo temporal que debes por tus pecados, como anteriormente lo mencionábamos en las Gracias de la Misa., en proporción al fervor con que la oigas.

"Con cada Misa aumentas tus grados de gloria en el cielo. En ella recibes la bendición del sacerdote, que Dios ratifica en el Cielo. Santa Teresa suplicaba un día al Señor, le indicara cómo podía pagarle todas las mercedes que le había dispensado y le contestó:" oyendo una Misa"

"Todas las buenas obras del mundo reunidas, no equivalen al Santo Sacrificio de la Misa, porque son obras de los hombres. Mientras que la Misa es Obra de Dios. En la Misa, es el mismo Jesucristo, Dios y Hombre Verdadero el que se ofrece al Padre para remisión de los pecados de todos los hombres y al mismo tiempo le rinde un Honor Infinito"(el Santo Cura de Ars)……

………………El Calvario fue el primer Altar, el Altar verdadero, después todo el Altar se convierte en el Calvario.

No hay en el mundo lengua con que poder expresar la grandeza y el valor de la Santa Misa. Si la verdad es que Cristo se ofrece al Padre Eterno todos los días en la Santa Misa por la salvación de los hombres, por la salvación de todo el mundo ¿ vamos a dejarlo sólo?…

Busquemos la media hora diaria para unirnos a Jesús en la Santa Misa, para adorar al Padre y darle el honor que se merece, para darle gracia por tantos favores recibidos, para aplacar su ira irritada por tantos pecados y darle plena satisfacción por ellos e implorar Eucaristícogracia y misericordia para todos los hombres del mundo, en fin, para agrandar el Cielo y hacer más gloriosa la Pasión de Cristo.

A ti, que tanto te gusta hacer el bien ¿ vas a dejar pasa diariamente la ocasión de unirte a la obra más grande que se realiza en la Tierra por el mismo Cristo?. Lee ,piensa y medita muchas veces esta INVITACIÓN del Señor, la Santísima Trinidad y ten presente siempre que, Amor con amor se paga..

Nuestro Salvador en la última Cena instituyó el Sacrificio Eucarístico de su Cuerpo y de su Sangre, para perpetuar por los siglos el sacrificio de la Cruz y la fuerza de su Resurrección. El sacerdote de ambos Sacrificios- el de la Cruz y el de la Eucaristía- es Cristo, Sacerdote Eterno, ya que el presbítero actúa en el nombre y la persona de Cristo. Y la víctima del Sacrificio es también, la misma: Cristo crucificado. Por eso la Santa Misa se define como la Renovación Incruenta cuando el propio Jesús "parte el Pan"con los discípulos que encontró en el camino de Emaús.

A través del Sacrificio Eucarístico de su Cuerpo y de su Sangre, el Salvador perpetúa por los siglos, hasta su vuelta, el Sacrificio de la Cruz, y confía a su Esposa, la Iglesia, el Memorial de su Muerte y Resurrección, Sacramento de Piedad, Signo de Unidad, Vínculo de Caridad, Banquete Pascual, en el cual se recibe como alimento a Cristo por medio del que el alma se llena de Gracia y se nos da una prenda de la gloria venidera.

Por tanto, la Iglesia, con solícito cuidado, procura que los cristianos no asistan a este Misterio de fe como extraños y mudos espectadores, sino que, comprendiéndolo bien a través de los ritos y oraciones, participen conciente, piadosa y activamente en la acción sagrada, sean instruidos con la Palabra de Dios, se fortalezcan en la mesa del Señor, den gracias a Dios, aprendan a ofrecerse a si mismos al ofrecer la Hostia Inmaculada no sólo por manos del sacerdote, sino conjuntamente con él; se perfeccionen día a día por Cristo Mediador de la unión con Dios y entre sí, para que, finalmente, Dios sea todo en todos.

La Eucaristía es una Celebración en que la Comunidad Cristiana, presidida por el sacerdote, recuerda a Jesús y repite lo que El hizo en la Ultima Cena con sus discípulos. Ella se estructura en dos partes principales:

1.- La liturgia de la Palabra, con las lecturas, la homilía y la oración universal .

2.- La liturgia eucarística, con la presentación del pan y del vino, la consagración y la comunión.

Eucaristía quiere decir Acción de Gracias, porque en este acto damos gracias a Dios, como Jesús lo hizo en la Ultima Cena. También se llama Cena del Señor o más comúnmente Misa. También damos gracias al Señor porque el Sacrificio Pascual de Jesús nos abrió el camino de la redención.

Se ha dicho que la Eucaristía es el Acto más importante de la Vida Cristiana; Ella es una señal de la presencia de la Iglesia en un sector; donde hay Comunidad Cristiana debe celebrarse la Eucaristía.

Por excepción pueden realizarse celebraciones dominicales sin sacerdote – cuando las circunstancias lo obligan- y para ello, la Iglesia ha preparado ciertos ministros laicos (los diáconos) para que celebren las llamadas ADAP (Asamblea Dominical en ausencia del Presbítero) en las cuales la celebración se centra en la Mesa de la Palabra más que en la Mesa de la Eucaristía( o Altar) ya que los laicos no están autorizados a efectuar la Consagración, que es el rito central de la Eucaristía.

La Celebración Eucarística es mucho más que un recuerdo de lo que hizo Jesús en la Ultima Cena; es un recuerdo vivo. En la Misa se repite el Sacrificio de Jesús, pues la Hostia y el Vino consagrados son auténticamente el Cuerpo y la Sangre de Cristo, es Jesús mismo, por eso se lo trata con sumo respeto, porque se entiende que en las especies consagradas está la Presencia Real de Nuestro Señor Jesucristo. El misterio Eucarístico es un artículo de fe; sólo a través de la fe, los cristianos aceptamos y creemos que el pan y el vino consagrados son Jesús mismo, vivo y presente en el Sacrificio de la Misa.

La Comunión, es decir , el acto de comulgar, de consumir el Cuerpo de Cristo nos hace sentirnos unidos a El y a nuestros hermanos, pues comunión significa común- unión, o sea , la unión con la comunidad de hermanos en Cristo. Podría decirse, pues , que la celebración de la Misa es una comida en familia, como lo fue la Cena de Jesús con sus Apóstoles. La Comunión debe recibirse siempre en "Estado de Gracia",(Reconciliación, Confesión) y jamás en pecado; Ella además debe acrecentar nuestra unión íntima con Cristo, nos purifica de los pecados pasados y nos previene de los futuros, borra los pecados veniales, nos incorpora más y más a la Iglesia y nos concede un anticipo del Cielo.

—La Celebración de la Misa es pues, al recordar el sacrificio de entrega que Jesús hizo por nosotros , es la Celebración de que la esperanza que El trajo no puede fallar, que la muerte, el egoísmo y la maldad, no triunfarán al fin; que un día los hombres seremos hermanos y Dios será Padre de todos.!…….

"LA LOCURA DEL AMOR DE DIOS"

La Eucaristía hace presente la Redención aquí y ahora para todos aquellos que la reciben con sincero corazón.

La Eucaristía desarrolla un papel muy importante en la vida diaria de la fe, en especial para la familia cristiana. Podríamos afirmar que el Misterio Eucarístico es la más sorprendente invención divina; porque se manifiesta la genialidad de una sabiduría que es simultáneamente como una locura de amor. Con frecuencia admiramos la genialidad de ciertos inventos humanos, los cuales reflejan sensacionales signos de inteligencia y de habilidad.

La invención divina de la Eucaristía se coloca en un nivel infinitamente superior, porque está destinada a penetrar más profundamente en nuestra existencia humana.

La Eucaristía no es simplemente uno de los siete sacramentos de la Iglesia. Pertenece ciertamente a la Economía Sacramental y no puede hacer sombra al valor del Bautismo o a los demás sacramentos Sin embargo posee una excelencia única , siendo el sacramento en el que no sólo nos es dada la Gracia, sino el "Auto"r mismo de la Gracia. En ella se manifiesta la Persona de Cristo del modo más inmediato y actual. ¿ Cómo no ser sorprendidos por la Palabra del Divino Maestro?:

"Esto es mi Cuerpo y este es el Cáliz de mi Sangre", ¿ Cómo no admirar el camino elegido por una sabiduría soberana para ofrecer una Presencia de Carne y Sangre, que según nuestro modo de pensar no habría podido ser más que el recurso de un pasado ya transcurrido?. ..Allí, donde nosotros no podemos ver más que el pan y el vino, estamos colocados en cambio, ante la afirmación de esta Divina y por ello Santificadora Presencia.

¿Cómo no asombrarse del hecho de que Aquel que es Dios se ofrezca como alimento y bebida a quienes son sus mismas criaturas

Por su parte, el tal abismal abajamiento y la tan impactante humildad, nos confunden. El que es el Señor se pone enteramente a nuestra disposición, a nuestro servicio.

¿Cómo no preguntarnos porqué el Divino Redentor que consumó su Sacrificio en la Cruz y lo concluyó con el triunfo de su Resurrección, ha querido que su Ofrecimiento se repitiese sin límites de tiempo en la celebración Eucarística?.

¡Si el ofrecimiento del Calvario era ampliamente suficiente para obtener la salvación y la gracia para todos los hombres!

¿Porqué debía buscar una Nueva Presencia en la asamblea cristiana?

Para todos estos motivos de asombro y para todas estas preguntas hay una sola respuesta: en la Eucaristía todo deriva de un Amor Extremo, precisamente del amor Divino: porque Dios es Amor.

Oremos con convicción y amor: ¡ Bendito y alabado sea el Santísimo Sacramento del altar!!…….

Ya hemos dicho que la Eucaristía es un Sacrificio, el Sacrificio de Cristo por todos, un Don del cielo para todos. En el Altar el sacerdote ofrece el Don Supremo, el Don más Precioso, a Jesús mismo. Es el propio Jesús quien en ese momento dice:" Tomad y comed todos de él, porque este es mi Cuerpo"

Hemos olvidado que Jesús está real y verdaderamente presente en la Sagrada Eucaristía. Pensemos que hermoso es poder recibirlo con el corazón puro y arrepentido, libres de cualquier atadura .Que alegría siente el Señor cuando vamos a Misa y nos acercamos a recibirlo. La Santa Misa es tan importante… y nosotros nos damos cuenta de la gracia que tenemos en Ella. Nuestras lágrimas nos abren el corazón para ver lo que no veíamos, para amar como nunca antes amamos.

Pero para poder vivir la Santa Misa, debemos prepararnos. Llegar con anticipación a la Iglesia, a fin de disponer de tiempo para hacer oración y pedirle al Señor que prepare nuestro corazón para el encuentro con El. Hay que participar activamente en la celebración , con gestos y con palabras.

Al término de la Misa no salgamos apresuradamente. Quedémonos algún tiempo todavía adorando a Dios que está en nuestro corazón. Démosle gracia por todos los dones que nos da y especialmente por el don mas grande de todos: la Presencia Real de Jesús en la Eucaristía.

Adorémosle en silencio, démosle oportunidad para que nos hable al corazón. De ese modo Jesús podrá sanar nuestras heridas y llenarnos de fortaleza y amor……….

…………….Fresia Castro , escritora y periodista chilena, que indaga en las profundidades espirituales, hace la siguiente reflexión en su libro El Cielo está abierto:-"Jesús dijo en su época: " Este es mi Cuerpo, esta es mi Sangre, beban y coman todos de Él"- mientras mostraba la copa, al tiempo que agregaba: "Hagan esto en memoria mía"-

Era el recordatorio ceremonial (ceremonia = los actos que recuerdan el rito, sin que sea necesario conocer las leyes de ese orden), a través del rito (rito = orden – correcto orden, en sabiduría, del uso de las energías), de la Eucaristía, que permitiría a la humanidad mantener el vínculo a través de la voluntad externalizada de comunión hasta que los tiempos fueran cumplidos para ejecutarlo desde sí mismo."-

Hasta aquí la cita de la periodista…..sin tratarse de una obra totalmente cristiana, encuentro contundente su reflexión…………..

………………..En el Manual Oficial de La Legión de María, maravillosa obra redactada para guiar a la Legión de María que es una Asociación de Católicos, que con la aprobación correspondiente, han formado la Legión para servir a la Iglesia en su perpetua luchas contra el mundo y sus fuerzas nefastas acaudillados por Aquella que es Bella como la luna, Brillante como el sol, y- para el maligno y sus secuaces- Terrible como un ejército en orden de batalla: "María Inmaculada", Medianera de todas las gracias.

Como. decíamos, en este Manual apreciamos lo siguiente:

-"Anhelo con vivas ansias que la Comunión diaria, tan provechosa para el alma y tan grata para Dios, se propague por la Divina -Gracia entre todo el pueblo cristiano" (san Pío X, decreto del 3 de Junio de 1905). Y quien dice Comunión diaria por lo mismo dice Misa diaria.

"Esta propaganda no será tanto una obra particular en sí cuanto una parte integrante de toda actividad legionaria, el legionario ha de tenerla siempre en su intención y ha de tratar de conseguirla con denuedo".

"Vemos como la Eucaristía- Sacrificio y Sacramento-, es por la abundancia de los tesoros que encierra, cifra perfecta de todo cuanto la Cruz ofrendó a Dios y consiguió para los hombres.

Es a un mismo tiempo la Sangre del Calvario y el Rocío de Cielo: la Sangre que clama pidiendo Misericordia, y el Rocío Vivificante que da la vida a la planta mustia y caída.

Es nuestro rescate y nuestra bendición; la vida y el precio de ella. Ni valió más la Cruz, ni la Cena, ni las dos juntas; ambas se prolongan en la Eucaristía, henchidas de todas la esperanzas del género humano.

Por eso se llama a la Misa "El Misterio de nuestra fe" y, con razón: no sólo porque en Ella queda resumido todo el dogma cristiano, el dogma de nuestra ruina en Adán y nuestra rehabilitación en Jesucristo, sino también – y principalmente- porque mediante la Misa se continúa entre nosotros aquel drama, aquella acción heroica por la que fue llevada a cabo la obra de nuestra excelsa restauración y el sobreabundante resarcimiento de nuestras anteriores pérdidas.

No es una simple repetición a modo simbólico: realiza realmente entre nosotros lo que realizó Jesucristo mismo" ( De la Taille, El Misterio de la Fe.)

Deberíamos proponernos siempre como fin el descubrir a los que están fuera de la Iglesia los tesoros encerrados en la Eucaristía. Y para ello no hay nada mejor que presentarles la Doctrina de la Eucaristía, compendio y cifra de cuanto es capaz la generosidad Divina. Muchos en su época dudaron:"¿Cómo puede éste darnos a comer su carne?(Jn. 6. 60-52). He aquí la objeción que, brotada de labios de algunos de ellos mismos discípulos de Jesucristo, ha seguido resonando a través de los siglos, y todavía resuena, causando a los hombres una pérdida infinita.

A aquellos discípulos, casi se les podría perdonar su incredulidad, pues no habían comprendido todavía "Quien Era" propiamente El que estaba entre ellos.., Pero, ¿qué es lo que nubla las inteligencias de algunos que profesan la Divinidad de Cristo, y por consiguiente, su infinito poder?

¿No ven que dirigirse solemnísimamente a una pobres gente y decirles: "Esto es mi Cuerpo", dando a sus palabras una significación contraria- No, esto no es mi Cuerpo-, seria engañarlos miserablemente?. Pues eso es lo que quieren achacar a nuestro Señor algunos de los que se llaman cristianos. ¡Parece inconcebible!.

Mediten pues, la incontrastable lógica de Pascal: "Si el Evangelio dice la verdad, y si Jesucristo es Dios, ¿dónde está la dificultad en admitir la Presencia Real de Cristo en la Eucaristía? ¡Cómo aborrezco en el alma la necedad de aquellos que pretenden sostener lo contrario!……

……………….El reto de una idea tan sobrecogedora como las Eucaristía no puede aceptarse con indiferencia. Presentar insistentemente a la reflexión de los hermanos separados esta gloria soberana de la Iglesia forzará a sus mentes a tener en cuenta su posibilidad; y, si se logra eso, los más dignos empezarán a razonar dentro de sí: " Si esto es verdad, ¡qué enorme es mi perjuicio en este momento!". Y. De la mano con este sentimiento, , vendrá su primer gran deseo de participar en plenitud de la fe verdadera.

La fe en la Eucaristía hará que los falsos conceptos y prejuicios que habían entorpecido la inteligencia y oscurecido la contemplación de las cosas celestiales, se derritan como nieve bajo el sol; y quien hasta el presente había andado en tinieblas, ahora, rebosando el corazón de gozo, exclamará: lo único que yo sé es que antes estaba ciego y ahora veo (Jn. 9,25)……

A continuación los invitamos a observar y reflexionar la inmensa importancia y misión de "La Santísima Virgen María, Hija del Padre, Madre de Jesús y Esposa del Espíritu Santo, Madre de la Iglesia y Madre Nuestra, en nuestra vida y principalmente en la Santa Eucaristía:

………………En la gran Obra:"A los Sacerdotes Hijos Predilectos de la Santísima Virgen", Nuestra Señora da el siguiente mensaje al sacerdote italiano Padre Stefano Gobbi: – "Secundad mi acción que tiende a transformaros interiormente para haceros a todos sacerdotes según el Corazón Eucarístico de Jesús. Jesús, como está en el Cielo, así también se halla en la tierra realmente presente en la Eucaristía, con su Cuerpo, su Sangre, su Alma, su Divinidad."

"Su reino glorioso resplandecerá sobretodo en el triunfo de Jesús Eucaristía, porque la Eucaristía volverá a ser el corazón y el centro de toda la vida de la Iglesia.

"Jesús en la Eucaristía volverá a ser el vértice de toda vuestra oración, que debe ser oración de adoración, de acción de gracias, de alabanza y de propiciación.

"Jesús en la Eucaristía volverá a ser el centro de toda la acción litúrgica, que se desarrollará como un himno a la Santísima Trinidad, a través de la perenne función sacerdotal de Cristo, que se actúa en el Misterio Eucarístico.

"Jesús en la Eucaristía volverá a ser el centro de vuestras reuniones eclesiales, porque la Iglesia es su templo, su casa que ha sido construida sobretodo para que pueda resplandecer en medio de vosotros su Divina Presencia.

"Hijos predilectos, desgraciadamente en estos tiempos las tinieblas han oscurecido también el Tabernáculo: en torno a él hay tanto vacío, tanta indiferencia, tanta negligencia .Cada día aumentan las dudas, las negaciones y los sacrilegios.

"El Corazón Eucarístico de Jesús es herido de nuevo por los suyos en su propia Casa, en el mismo lugar donde ha puesto su Divina Morada entre vosotros.

"Volved a ser los adoradores perfectos, los Ministros fervientes de Jesús Eucarístico, que por medio de vosotros, todavía sigue haciéndose presente, todavía se inmola y se da a las almas."-

"Llevad a todos a Jesús en la Eucaristía: a la adoración, a la comunión, a un amor más grande.

"Ayudad a todos a acercarse a Jesús Eucarístico de una manera digna, cultivando en los fieles la conciencia del pecado, invitándolos a acercarse a la Comunión sacramental en estado de gracia, educándolos en la confesión frecuente y advirtiéndoles que la confesión es necesaria a quien se halla en pecado mortal para recibir la Sagrada Eucaristía.

."Yo misma colmaré el gran vacío en torno a mi Hijo Jesús presente en la Eucaristía.

" Formaré una barrera de amor en torno a su Divina Presencia.

"Yo misma a través de vosotros, hijos predilectos, que quiero colocar como una guardia de amor en torno a todos los Tabernáculos de la tierra."- Este mensaje de Nuestra Señora fue entregado al Padre Gobbi, para todos los sacerdotes del mundo en San Miguel (Archipiélago de las Azores el 23 de junio de 1979, en la fiesta del Corazón inmaculado de María…………

………………..El siguiente texto está tomado de la obra de Tesniére,"Nuestra Señora del Santísimo Sacramento": -"María es Nuestra Señora del Santísimo Sacramento." Ella recibe en su condición de Dispensadora Universal de las Gracias el pleno y absoluto dominio sobre la Eucaristía, y sobre todas las gracias allí atesoradas.

" Como este Sacramento es el más poderoso medio de la salvación, y el más sabroso fruto de la Redención que nos dio a comer Jesucristo, el oficio de María es hacer que conozcan y amen en El a su Hijo. A Ella le pertenece extenderlo por el mundo entero, a multiplicar las iglesias e implantarlas entre los infieles; defender la fe en este Misterio contra los herejes y los incrédulos.

"Obra de María es también prepararnos para comulgar, movernos a visitar el Santísimo Sacramento frecuentemente y a velar ante El sin cesar. Pues Maria es la Tesorera de todas las Gracias contenidas en la Eucaristía: de todas cuantas conducen a este Sacramento y de todas las que fluyen de El".-

Termina la cita de Tesniére sobre este punto………..

………………¡Que precioso capítulo el que encierra nuestra encíclica! Está todo el Tránsito de Perfume Mariano, porque la Virgen María es su protagonista. Podríamos aplicar a la Eucaristía la frase que dice Isaac de su hijo Jacob: "el olor de mi hijo es como el de un campo lleno de flores". Campo de flores es la Eucaristía y así lo muestra nuestra encíclica: la flor verde de la esperanza en la unión de los cristianos, la flor multicolor del modo como la Iglesia trata la Eucaristía en sus diversas liturgias…., tantas y tantas flores, tantos y tan variados perfumes… Pero como uniendo y embalsamando a todos ellos se percibe el Perfume Azul de María. Quizás de propio intento, ha dejado el Papa para el final este capítulo dedicado a al Virgen María y su relación con la Eucaristía.

Si queremos descubrir la relación íntima que une Iglesia y Eucaristía, no podemos olvidar la figura de la Virgen, por cuanto Ella es Madre y modelo de la Iglesia.

María aparece estrechamente unida a la Eucaristía por haber ofrecido su Seno Virginal para la Encarnación del Verbo. Ella abrió plenamente su ser para que fuese habitado por Dios.

Si no sabemos con certeza si la Virgen asistió en el Cenáculo a la Ultima Cena, si nos consta que Ella tomaba parte en la oración común, tal como aparece días antes de Pentecostés; y, por supuesto, María tomaría parte con los demás fieles en la Fracción del Pan que se celebraba con asiduidad en la primitiva generación cristiana.. Para María- nos dice la encíclica– "recibir la Eucaristía debía significar para ella como si acogiera de nuevo en su Seno el Corazón que había latido al unísono con el suyo y revivir lo que había experimentado en primera persona al pie de la Cruz.

Pero más allá de su participación el Banquete Eucarístico, la relación de María con la Eucaristía la podemos contemplar a partir de su actitud interior. Podemos decir con el Papa que María fue una Mujer Eucarística con toda su vida. Ella vivió una Eucaristía anticipada, una especie de Comunión Espiritual, de deseo y de ofrecimiento.

María vivirá en Caná misteriosamente como un anticipo de la Eucaristía. Aparece allí como la madre de los pobres la que adivina una carencia. Esta carencia del vino, esta pobreza de los esposos nos hace pensar en la Eucaristía, que es la pobreza de Dios. Las personas tenemos derechos y obligaciones, el pan es la pura obligación, no tiene derechos-¿tienes hambre?, comes el pan; ¿no la tienes?, dejas el pan , tiras el pan……..

Dios ha querido hacerse Pan para el hombre, se ha puesto al servicio del hombre.

"María –concluye el capítulo sexto- está presente con la Iglesia, y como Madre de la Iglesia, en todas nuestras Celebraciones Eucarísticas…..Por eso, el recuerdo de María el la Celebración Eucarística es unánime, ya desde la antigüedad, en las iglesias de Oriente y Occidente".

En efecto, María que acogió en su seno al Don de Dios– Jesucristo ahora con su plegaria ayuda a la Iglesia a acoger el Sacramento del Don la Eucaristía. Esto se expresa muy bien en el Rito Etiópico, donde se dice antes de la Consagración: "Oh! Virgen que hiciste madurar LO que nosotros vamos a comer e hiciste brotar LO que vamos a beber!…….

Y después de la Consagración: Oh! Pan que viene de Ti, Pan que da la vida y la saluda a quien la come con fe!…… Oh! Cáliz que viene de Ti, que hace brotar la Sabiduría y es Vida para aquellos que lo beben con fe.!

Tanto en las liturgias orientales, siempre más ricas y exhuberantes, como en la liturgia romana, más sobria aparece el recuerdo de la Virgen María que nos la hace presente en la celebración de nuestras Eucaristías.( texto extraído de " María mujer eucarística, Saboreando el Misterio de la Eucaristía del P. Ernesto Postigo, S.J., publicado en el documento La Palabra, de la Legión de María).

Partes: 1, 2

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