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Julio Boltvinik y el fin del capitalismo

Enviado por Iván Jaime Uranga


  1. Resumen
  2. Las revoluciones industriales

Resumen

Inspirado por los artículos del ilustre periodista mexicano Don Julio Boltvinik, comencé a escribir esta monografía. Don Julio Boltvinik tiene la cualidad de ser un gran investigador, sus escritos siempre están documentados, sigue autores líderes de las ciencias sociales-económicas-políticas, en suma es una autoridad intelectual. Don Julio Boltvinik documenta tres revoluciones científico-tecnológicas, de las cuales el considera que la primera y la última se pueden considerar cambios de sistema social-económico-político, mientras la segunda no pasa de ser una evolución del sistema capitalista. Esta discusión es lo más avanzado que yo encontré entre los estudiosos de las ciencias sociales en América Latina, lo que hace a Don Julio Boltvinik ser líder del pensamiento. Encuentro en otros autores mucha herrumbre, ideas congeladas un siglo atrás, mucha crítica a Francis Fukuyama y su teoría del fin de la historia, qué él ya repudió, mientras, sus críticos, en involución, no han hecho otra cosa que seguirla en términos prácticos y glorificar al capitalismo eterno. Don Julio Boltvinik afirma: "Múltiples tendencias anuncian que el capitalismo ha llegado a su fin."

Palabras clave: La Jornada, México, Boltvinik, Capitalismo, Imperialismo, Omecafi, Automatización, Robótica, Cibernética, Informática, Electrónica, Servomecanismo, Fukuyama.

Las revoluciones industriales

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Don Julio Boltvinik nos dice:

"El capitalismo, en su incesante búsqueda de mayores ganancias, revoluciona constantemente las técnicas de producción. Generó la primera revolución industrial en el siglo XVIII centrada en el carbón y la máquina de vapor; y a comienzos del siglo XX, la segunda revolución centrada en el petróleo, el motor de combustión interna, la electricidad y el teléfono. En ambas revoluciones, en la producción industrial, agrícola y minera las máquinas sustituyeron una parte importante del trabajo humano directo. Los trabajadores se volvieron cada vez más supervisores de la maquinaria automática que se basaba, empero, sólo en principios mecánicos, que tienen límites. La Revolución Científica y Técnica que comenzó a finales de la Segunda Guerra Mundial, al introducir la cibernética, la informática, la inteligencia artificial y la robótica, desató una espiral de desarrollo tecnológico que se puede identificar como la tercera revolución industrial, aunque abarca todas las actividades productivas. Lo que ahora remplaza el trabajo humano son complejos de producción autónomos." [1]

Debe haber intelectuales locos que no acepten el inició del sistema social-económico-político, con la 1ª Revolución Industrial iniciada en 1712 con la invención del motor de vapor. Sin embargo, todos los intelectuales más despiertos coinciden en que fue así y está argumentado en grandes obras científico-literarias como un cambio sistémico. Este cambio sistémico dominado por la que Marx llamó la clase burguesa o capitalista, desplazó del poder a la clase feudal o terrateniente.

La primera revolución industrial

La fecha de la 1ª Revolución Industrial puede ser polémica, toda vez que, una cosa es que se invente una máquina y otra que pase a formar parte del modo de producción. Muchos inventos, durante un tiempo, no pasan de ser objetos maravillosos que deslumbran por su creatividad e ingenio. Pero hasta que se inicia el perfeccionamiento y aplicación, como el motor de vapor de James Watt (1774), es cuando se incorporan a la producción causando una revolución.

La gran complejidad del sistema mundo, hace que algunos inventos maravillosos permanezcan dormidos, con aplicación marginal. No obstante, cuando coinciden con la evolución o revolución en otros ámbitos de la ciencia, el arte y la cultura. Provocan un cambio del sistema social-económico-político y el ascenso al poder de la clase social que dirige esa revolución. Bueno, pues esto sucedió en los años 1700.

Lentamente, al inicio, la clase social feudal comenzó su desplome. A la clase capitalista le llevó 200 años someter totalmente a la clase feudal. No registra la historia el aniquilamiento y desaparición de la anterior clase gobernante, hasta nuestros días hay refugios feudales y su sistema de producción contaminado con otros más modernos permanece, recordando viejas glorias que no volverán.

Sería un desliz intelectual pensar que la persistencia de reductos feudales justificara que el sistema capitalista es el feudalismo reciclado, porque el pago en especie por la renta de la tierra persiste alrededor del mundo y se niega a morir. Los siervos hoy se llaman en México "medieros", porque pagan al dueño del terreno con la mitad de la cosecha por la renta del terreno. Con todo, es un hecho aceptado por consenso general que: "No hay feudalismo reciclado."

Asentar también, que durante el sistema capitalista, la clase social dominante, impuso su manera de ver el mundo en todos los órdenes. El sistema social-económico-político, incluido la ciencia, cultura y el arte obedecieron a los intereses de la clase capitalista.

La 1ª Revolución Industrial logra un cambio sistémico en el mundo, pero a partir de allí, la historia se detiene, de acuerdo a muchos intelectuales de izquierda o derecha, progresistas o conservadores, no volverá haber cambios sistémicos, al menos hasta ahora en que "Múltiples tendencias anuncian que el capitalismo ha llegado a su fin."

Nuestro admirado autor Julio Boltvinik afirma: "la segunda revolución centrada en el petróleo, el motor de combustión interna, la electricidad y el teléfono. En ambas revoluciones, en la producción industrial, agrícola y minera las máquinas sustituyeron una parte importante del trabajo humano directo. Los trabajadores se volvieron cada vez más supervisores de la maquinaria automática que se basaba, empero, sólo en principios mecánicos, que tienen límites." [2]

Don Julio Boltvinik pasa por alto que también en los años 1700 hubo otra revolución John Law con la complacencia del Duque de Orleans[3]llevaron a las finanzas a alturas insospechadas. La moneda de papel, inventada en China, fue introducida en Europa por Law, así como, el perfeccionamiento de conceptos bursátiles que sobreviven hasta nuestros días, entre ellos la idea del Banco Central de un país. Incluso con la venta de acciones de la Lousiana ingenió una de las estafas financieras que sólo sería superada más de un siglo después con los pánicos de las bolsas de valores.

Muchas de las ideas de John Law se adelantaron a su época, estuvieron ahogadas por lo precario de las comunicaciones, la lentitud de los sistemas para hacer operaciones aritméticas y la gestión de bases de datos en forma manual. Tendrían que pasar muchos años y hasta siglos para superar esas deficiencias. No fue su tiempo, la verdadera revolución financiera, tendría que esperar siglos.

La segunda revolución industrial

En la 2ª Revolución Industrial, hay una clase social que se encumbra sobre la clase capitalista, aprovechando algunos de los conceptos de John Law, principalmente los bancos centrales. La asociación del capital financiero y los monopolios de producción capitalista, toman el poder de los Estados-nación, sepultan el concepto liberal de los mercados libres a la competencia.

En 1916, Lenin, escribía: "¡El beneficio de los rentistas es cinco veces mayor que el beneficio del comercio exterior del país más "comercial" del mundo! ¡He aquí la esencia del imperialismo y del parasitismo imperialista! (…) Si tomamos lo que en Alemania se llama industria en el sentido amplio de esta palabra, es decir, incluyendo el comercio, las vías de comunicación, etc., obtendremos el cuadro siguiente: grandes empresas, 30,588, sobre un total de 3,265,623, es decir, el 0.9%. En ellas están empleados 5.7 millones de obreros, sobre un total de 14.4 millones, es decir, el 39.4%; caballos de fuerza de vapor, 6.6 millones sobre 8.8, es decir, el 75.3%; de fuerza eléctrica 1.2 millones de kilovatios sobre 1.5 millones, o sea el 77.2%. (…) ¡Menos de una centésima parte de las empresas tienen más de 75% de la cantidad total de la fuerza de vapor y eléctrica! ¡A los 2.97 millones de pequeñas empresas (hasta 5 obreros asalariados) que constituyen 91% de todas las empresas, corresponde únicamente el 7% de la fuerza eléctrica y de vapor! Las decenas de miles de grandes empresas lo son todo; los millones de pequeñas empresas no son nada." [4]

Si leemos la historia en el periodo que va 1880 a 1971, encontraremos gobernando el mundo a una clase social que hundió a la clase social capitalista, que de ser amos del mundo, se convirtieron en vasallos, de una clase social imperialista y sus monopolios. Regresando a Lenin:

"Como hemos visto, el imperialismo, por su esencia económica, es el capitalismo monopolista. Con ello queda ya determinado el lugar histórico del imperialismo, pues el monopolio, que nace única y precisamente de la libre concurrencia, es el tránsito del capitalismo a un orden social-económico más elevado." [5]

Los órdenes sociales-económicos más elevados, en todas las ciencias son considerados cambios de sistema o cambios sistémicos. En la ciencia química, los cambios, valga la redundancia, químicos, se consideran cambios sistémicos, porque la sustancia resultante, ya no puede ser llamada de la misma manera, sus características físicas y químicas la hacen una nueva sustancia. ¿Por qué habría de ser diferente en las ciencias sociales?

Si estudiamos la 1ª Revolución Industrial, por apabullante mayoría, todos los estudiosos aceptan que fue un cambio sistémico, la sociedad resultante, ya no respondía a los viejos paradigmas del sistema feudal. ¿Pero qué es paradigma?

"La palabra paradigma, que se compone del prefijo griego para (junto a, alrededor de), y de deigma (modelo o ejemplo), se podría definir como modelo, ejemplo, patrón, arquetipo, esquema forma de organización, marco teórico o conjunto de teorías."[6]El agua destilada es muy mal conductor de electricidad y apaga el fuego, al añadirle 3% de hidróxido de sodio (NaOH), se vuelve conductora de electricidad y, en presencia de 2 electrodos, circulando corriente a través de ella, desprende gas. Ese gas (4H2 + O2) y una pequeña chispa, la flama viaja a 1,511 metros por segundo, provocando una explosión intensa. Ese gas ya no responde a los paradigmas del agua, sufrió un cambio sistémico (químico). Sigue estando compuesto por oxígeno e hidrógeno, pero no es la misma sustancia, aunque, después de la explosión es otra vez agua.

La 2ª Revolución Industrial, de la que nos habla Don Julio Boltvinik y Lenin, es un cambio sistémico, a partir de que la clase imperialista toma el poder, los paradigmas del viejo capitalismo, dejan de corresponderse con la realidad y nuevas reglas rigen lo social-económico-político. El monopolio de la producción y la lucha por monopolizar las materias primas conducirá a dos guerras mundiales, que gana el imperialismo estadounidense. Lenin llama al imperialismo: "un orden social-económico más elevado".

A principios del siglo XX ocurre la Revolución Bolchevique, promotores y contrarios coinciden que dio origen a otro sistema, es decir, impuso un sistema social-económico-político que no podía llamarse capitalismo de ninguna manera, unos lo llamaron socialismo soviético, algunos solo socialismo y hasta en el colmo de la ignorancia, sobre todo detractores lo llamaron comunismo. El imperialismo, el sistema contrario, se paso más de medio siglo persiguiendo "comunistas", hasta convertir el término en peyorativo.

Pero eso ya había ocurrido en la historia, los mercenarios españoles y su jefe el clero vaticano, durante 300 años persiguieron "indios", que en realidad eran nahuatlacas, mexicas y de otras etnias americanas.

Regresando al socialismo soviético, dos guerras mundiales no pudieron destruirlo. La destrucción del sistema socialista soviético vendría en 1991, 30 años después (1971) que el imperialismo declinó por el sometimiento de una nueva clase social llamada Omecafi (oligarquía mafiosa especuladora canalla financiera internacional). Misma que derrotó al socialismo soviético. Pero no nos adelantemos.

La tercera revolución industrial

¿Múltiples tendencias anuncian que el capitalismo ha llegado a su fin? Sí, pero hace más de 100 años. Los que nacimos en los años 50"s, vivimos el auge y caída del sistema imperialista y nunca vivimos en el sistema capitalista.

Para estudiar el sistema imperialista y la revolución científica que ocurrió en él, habría que establecer la diferencia entre automatización mecánica y automatización con cibernética.

La automatización mecánica logra la multiplicación de la fuerza de los seres humanos, se auxilia de la electricidad, neumática y la hidráulica, en 90 % de los equipos mecánicos automáticos, el cerebro del mecanismo es el ser humano. Ejemplos de estos sistemas son: los frenos de potencia de los autos; la dirección hidráulica; los trascabos; las palas mecánicas. En estos sistemas los grados más altos de automatización se alcanzaron en la industria textil e impresión, dónde llegó a desarrollarse la retro-alimentación[7]mecánica, eléctrica, neumática e hidráulica.

En la automatización cibernética[8]encontramos incorporada la electrónica, que en muchas máquinas automáticas son capaces de sustituir funciones del cerebro humano y superarlo. ¿Exagero? Ejemplo, un robot cajero automático, en milisegundos, lee los datos del cliente, consulta una base de datos de millones de registros, procesa una transacción bancaria y la registra en la base de datos. Ese único cajero, realiza en segundos, lo que cien o más personas podrían hacer y lo realiza con mayor precisión. La robótica puede que no predomine sobre el ingenio y la creatividad de los seres humanos, pero en numerosas tareas, lo supera con demasía, no a un ser humano, sino a miles o millones (la súper-computadora).

Vayamos a la 3ª Revolución Industrial, que concentra y sistematiza conocimientos desde los años 1700, particularmente en la cultura financiera, hasta conocimientos posteriores a la 2ª Guerra Mundial. Don Julio Boltvinik nos dice:

"La Revolución Científica y Técnica que comenzó a finales de la Segunda Guerra Mundial, al introducir la cibernética, la informática, la inteligencia artificial y la robótica, desató una espiral de desarrollo tecnológico que se puede identificar como la tercera revolución industrial, aunque abarca todas las actividades productivas. Lo que ahora remplaza el trabajo humano son complejos de producción autónomos." [9]

Vuelve Don Julio Boltvinik a menospreciar la revolución financiera. Por experiencia propia, las empresas manufactureras fueron más resistentes a la automatización cibernética, que las empresas financieras y bancarias. Era lógico, las financieras y bancarias entendían de tasa interna de retorno, de valor presente neto, de precio máximo actual, de valor de oportunidad, etc.

La revolución de la automatización cibernética me tocó venderla, fui pionero, en proponerla como un bien intangible, directamente al o los mandos más altos de las empresas, dueños, presidentes, directores y gerentes. Se daba por descontado que técnicamente iba a funcionar, prevalecía la decisión financiera. Todas las empresas tienen una tasa interna de retorno, las inversiones se hacen, buscando que todos los bienes que se compran, tengan una tasa interna de retorno superior a la media normal de la empresa en cuestión. ¡La automatización superaba la tasa media de retorno de la mayoría de las empresas!

El mundo de las finanzas y bancario, con más comprensión de las variables financieras, fue pionero en instalar las computadoras más potentes, los primeros robots (cajeros), entrar de lleno a la revolución de las comunicaciones electromagnéticas vía satélite. No es gratis que fuera la clase social que, tarde o temprano, tomó el dominio del mundo e impuso el sistema social-económico-político que respondía a sus intereses.

Era una clase social que ya tenía poder, abierta a los avances científico-técnicos, en una palabra revolucionaria, que tenía alto grado de consciencia de clase, que al mando de la revolución científica de los años 70"s y 80"s, más basadas en la inteligencia que en la violencia, se impuso a las demás clases sociales que no estuvieron en posibilidades de disputarle el poder.

Así como ocurrió durante el cambio del capitalismo al imperialismo, los miembros más listos de la clase anterior, pudieron convertirse en miembros de la nueva clase social dominante, pero fue una minoría, se requería desarrollar nuevos talentos, entender nuevas tecnologías y tener una nueva visión del mundo.

"A medida que la automatización comienza a eliminar puestos de trabajo en una cada vez más amplia gama de industrias y ocupaciones, claramente sus impactos no van a ser mantenidos en secreto… A medida que un porcentaje cada vez mayor de la población esté expuesto a la evidencia directa de la pérdida de empleos, mucha gente va a empezar a experimentar niveles elevados de estrés y preocupación. Frente a esto, los individuos tomarán la acción obvia: reducirán su consumo, tal vez de manera espectacular, y tratarán de ahorrar más en previsión de un futuro muy incierto. Si, en algún momento de las próximas décadas, hubiera una coalición de creencias que sugieran que los empleos podrían no estar disponibles, o que serían muy difíciles de obtener, podríamos claramente ser arrojados a un escenario muy oscuro: una dramática espiral económica descendente se precipitaría casi seguramente." [10]

Algunas de las ciudades más prosperas de la era imperialista, hoy son las que tienen mayor pobreza. La premonición de Martin Ford se hizo realidad. Ver figura 3.

Don Julio Boltvinik en el documento periodístico, cita a Jeremy Rifkin:

"…capacidades analíticas avanzadas, algoritmos, inteligencia artificial (IA) y la robótica están remplazando el trabajo humano tanto en las industrias manufactureras, como en las de servicios, y en los sectores del conocimiento y de entretenimiento, lo que lleva al prospecto muy real de liberar a cientos de millones de personas del trabajo en la economía de mercado en la primera mitad del siglo XXI" [11]

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La producción que durante la vida de Karl Marx era llevada a cabo por la clase social proletaria, ahora la hacen máquinas. Cientos de millones de personas directo al desempleo. Según Rifkin, fueron eliminados 22 millones de empleos de 1995 a 2002, mientras la población mundial crecía 30% (alrededor de mil 600 millones).

Desde la era del capitalismo los seres humanos libres que sobreviven vendiendo su fuerza de trabajo, que Marx llamó proletarios, dependen del salario para consumir las mercancías para su subsistencia. Hoy 200 millones de trabajadores del planeta, que ahora tienen menos prole, están en el desempleo, como dicen los libros sobre la pobreza, sobreviven con menos de 2 dólares diarios. El mercado se está quedando sin consumidores, los inventarios de las tiendas siguen aumentado. Hay mayor cantidad y variedad de mercancías, pero los clientes han disminuido drásticamente y la tendencia a la baja permanece.

Las líneas automáticas de producción, algunas totalmente robotizadas, muchas trabajan por debajo de su capacidad de producción. Estas líneas están en constante adición en calidad y cantidad, lo que constituye un cambio sistémico, pero el margen de utilidad disminuye. La apuesta de los monopolios es el exterminio de la competencia. Lo cual ocurre, año con año, millones de empresas pequeñas van a la quiebra.

"No hay nada más poderoso que una idea a la que le ha llegado su tiempo" (Víctor Hugo)

El 13 de agosto de 1971, Nixón abandona "temporalmente" el tratado de Bretton Woods y renuncia el patrón oro como soporte del dólar y nace la moneda fiduciaria soportada por deuda, a partir de entonces, la Omecafi avanzaría en la toma del poder del globo. Se inicia una revolución en la cultura financiera, la revolución electrónica incide: en la informática que despega a gran velocidad; las comunicaciones electromagnéticas; la automatización y la robótica. No hay manera de negar que estas revoluciones significaran un cambio en cantidad y calidad en los órdenes social-económico-político del mundo. La Omecafi, como todas las clases sociales que han tenido el poder en el mundo, aprovechó y estuvo a la altura, para encabezar, desde el poder, estas revoluciones y otras como: la biotecnología, la genética y la nanotecnología. No podemos negar que sea una clase revolucionaria.

¿Qué sucedió con las demás clases sociales? Se mantuvieron detrás. Muchos poderosos administradores y dueños de las empresas imperialistas que dominaron el mundo, no estuvieron a la altura y fueron jubilados. La Omecafi es muy elitista, usualmente no admite oportunistas, es la clase más poderosa que ha existido en la historia del mundo y la menos numerosa, ellos, sus allegados y operadores más cercanos, en la cima de la pirámide del poder, no son más del 1% de los seres humanos del planeta.

La Omecafi al igual que todas las clases explotadoras que han existido antes que ella, cuenta con sus ministros, los tiene económico-financieros, políticos y militares, en su círculo cercano. En el primer escalón, de arriba hacia abajo de la pirámide del poder están los económico-financieros, cuenta con 147 presidentes y 513 consejeros de corporaciones, son los que por su poder plenipotenciario, son elegibles al poder supremo; Luego, en el segundo escalón, vienen los presidentes de las instituciones con relevancia internacional: FMI, BM, FED, BCE, Altos mandos financieros y cabilderos de alto rango (como Black Rock). En el tercer escalón, están los que ya se pueden considerar la alta jerarquía de los mercenarios: Presidente y Congresistas de EEUU; comando militar EEUU/OTAN. En el cuarto escalón, se encuentran 1,380 presidentes de corporaciones Multinacionales financieras, industriales y militares; bolsas de valores; gobiernos imperialistas (Europa y Japón); agencias de espionaje; medios de comunicación masiva; ONG"s multinacionales. En el quinto escalón: universidades de finanzas; líderes de opinión de trascendencia internacional; mercenarios intelectuales; 3,800 presidentes de empresas multinacionales más importantes. En el sexto escalón: Gobiernos nacionales que actúan como mercenarios y sicarios; falsos empresarios traficantes de influencias; políticos; banqueros; altos mandos del clero y militares; delincuencia organizada de cuello blanco y alta delincuencia común y administradores de empresas multinacionales pequeñas. En el séptimo escalón, la base de la pirámide nos encontramos, 6,930 millones de personas, 99% de la población: trabajadores, comerciantes, campesinos y empresarios pequeños, estudiantes, profesionistas, clero bajo, delincuentes comunes, soldados rasos, policías, desempleados y millones de personas funcionales al sistema en pobreza media y extrema.

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Autor:

Iván Jaime Uranga Favela

 

[1] Boltvinik, Julio. “Múltiples tendencias anuncian que el capitalismo ha llegado a su fin/XII”. En Economía Moral, periódico La Jornada, México, 13/03/2015.

[2] Ibidem.

[3] El rey Luis XV de Francia tenía 5 años y gobernaba Felipe II, Duque de Orleans. http://es.wikipedia.org/wiki/John_Law#El_sistema_de_Law_.281715-1720.29

[4] Lenin, Vladimir. “Imperialismo: fase superior del capitalismo.”

[5] Ibidem.

[6] Leer más: /trabajos98/vigencia-y-alcance-paradigmas-filosoficos-y-cientificos/vigencia-y-alcance-paradigmas-filosoficos-y-cientificos#ixzz3UOYWXVLP

[7] Retro-alimentación: señal o señales que provienen de sensores que detectan errores permisibles en la salida de un proceso y regresan al principio del proceso para ajustarlo. Todos los procesos automáticos funcionan en base al error permisible o banda de error.

[8] Cibernética: Ciencia que estudia los sistemas de comunicación y de regulación automática de los seres vivos y los aplica a sistemas electrónicos y mecánicos que se parecen a ellos.

[9] Boltvinik, Julio. “Múltiples tendencias anuncian que el capitalismo ha llegado a su fin/XII”. En Economía Moral, periódico La Jornada, México, 13/03/2015.

[10] Ford, Martin, The Lights in the Tunnel, Acculant Publishing, EU, 2009, citado por Julio Boltvinik.

[11] Rifkin, Jeremy. The Zero Marginal Cost Society. Pelgrave, EU, 2014. Capítulo 8, p.121