Sus principales representantes son:
Contaminación del Agua: La contaminación del agua es el grado de impurificación, que puede originar efectos adversos a la salud de un número representativo de personas durante períodos previsibles de tiempo. Se considera que el agua está contaminada, cuando ya no puede utilizarse para el uso que se le iba a dar, en su estado natural o cuando se ven alteradas sus propiedades químicas, físicas, biológicas y/o su composición. En líneas generales, el agua está contaminada cuando pierde su potabilidad para consumo diario o para su utilización en actividades domésticas, industriales o agrícolas.
Para evitar las consecuencias del uso del agua contaminada se han ideado mecanismos de control temprano de la contaminación. Existen normas que establecen los rangos permisibles de contaminación, que buscan asegurar que el agua que se utiliza no sea dañina. Cada país debe tener una institución que se encargue de dicho control.
La provisión de agua dulce está disminuyendo en el ámbito mundial, 1200 millones de habitantes no tienen acceso a una fuente de agua potable segura. Las enfermedades por aguas contaminadas matan más de 4 millones de niños al año y 20% de todas las especies acuáticas de agua fresca están extintas o en peligro de desaparecer.
El agua puede ser contaminada por agentes patógenos, como bacterias; desechos que requieran oxigeno para biodegradarse; sustancias químicas inorgánicas; sedimentos o materia suspendida (partículas del suelo que enturbian el agua; sustancias radiactivas.
Diversas enfermedades son producidas por la ingesta de agua contaminada, como la Enteritis[7]la fiebre tifoidea[8]la salmonelosis[9]entre otras.
Contaminación del aire: La contaminación del aire es la que se produce como consecuencia de la emisión de sustancias tóxicas. Puede causar trastornos tales como ardor en los ojos y en la nariz, irritación y picazón de la garganta y problemas respiratorios. Bajo determinadas circunstancias, algunas substancias químicas que se hallan en el aire contaminado pueden producir cáncer, malformaciones congénitas, daños cerebrales y trastornos del sistema nervioso, así como lesiones pulmonares y de las vías respiratorias. A determinado nivel de concentración y después de cierto tiempo de exposición, ciertos contaminantes del aire son sumamente peligrosos y pueden causar serios trastornos e incluso la muerte. La polución del aire también provoca daños en el medio ambiente, habiendo afectado la flora arbórea, la fauna y los lagos. La contaminación también ha reducido el espesor de la capa de ozono. Además, produce el deterioro de edificios, monumentos, estatuas y otras estructuras.
El aire puede ser contaminado por dióxido de carbono, Monóxido de carbono, los clorofluocarbonos (presentes en los desodorantes de ambientes), el plomo, el óxido de nitrógeno, etc.
Contaminación del suelo: es la presencia de compuestos químicos hechos por el hombre u otra alteración al ambiente natural del suelo. Esta contaminación generalmente aparece al producirse una ruptura de tanques de almacenamiento subterráneo, aplicación de pesticidas, filtraciones de rellenos sanitarios o de acumulación directa de productos industriales. Los químicos más comunes incluyen derivados de petróleo, solventes, pesticidas y otros metales pesados. Éste fenómeno está estrechamente relacionado con el grado de industrialización e intensidad del uso de químicos. En lo concerniente a la contaminación de suelos su riesgo es primariamente de salud, de forma directa y al entrar en contacto con fuentes de agua potable. El insecticida puede mantenerse por 10 años o más en los suelos y no se descomponen. Se ha demostrado que los insecticidas órgano clorados, como es el caso del DDT, se introducen en las cadenas alimenticias y se concentran en el tejido graso de los animales. Cuanto más alto se encuentre en la cadena -es decir, más lejos de los vegetales- más concentrados estará el insecticida. Aparte de los anteriores efectos comentados de forma general, hay otros efectos inducidos por un suelo contaminado: Degradación paisajística: la presencia de vertidos y acumulación de residuos en lugares no acondicionados, generan una pérdida de calidad del paisaje, a la que se añadiría en los casos más graves el deterioro de la vegetación, el abandono de la actividad agropecuaria y la desaparición de la fauna. Pérdida de valor del suelo: económicamente, y sin considerar los costes de la recuperación de un suelo, la presencia de contaminantes en un área supone la desvalorización de la misma, derivada de las restricciones de usos que se impongan a este suelo, y por tanto, una pérdida económica para sus propietarios.
Pero para comprender más los por qué de la contaminación, debemos fijar la vista hacia el pasado del hombre: "[…]el conjunto que conforman los seres vivos con los elementos inertes de la naturaleza funciona desde hace aproximadamente 5000 millones de años en perfecta armonía. La aparición del hombre sobre el planeta es relativamente nueva, comparada con la de otros seres vivos. […] Hoy en día el hombre cree que el planeta tan solo es una fuente de recursos interminables […]"[10]. Este modo de pensar quizás surgió a partir de la Revolución Industrial, que aconteció Inglaterra durante el siglo XIX. El carbón mineral y los materiales radiactivos comenzaron a tener uso como catalizadores para la producción de manufacturas en serie, iniciando un proceso de contaminación que aumentaría cada vez más. Antes de éste período, la destrucción ambiental era menor, debido a que la producción de manufacturas artesanales no requería catalizadores tan potentes, la tala era menor y se desconocían elementos tóxicos como el arsénico.
Lo que debemos comprender es que éste proceso ya esta en marcha, y solo nosotros podemos impedir que se devore a nuestro planeta. Ni nos quedamos "en el molde", nosotros sufriremos las consecuencias por nuestros actos. Padeceremos trastornos biológicos, nos quemaremos con los rayos ultravioleta del sol, nos empaparemos de lluvia ácida, nadaremos en basura… ¿Existe algo más desastroso y denigrante? Si, tal vez haya algo, nuestra enorme venda, que nos prohíbe ver que estamos "al borde del precipicio"[11], o nuestra equivocada idea de que el mundo tiene vida eterna. ¡Despertemos! Colonizar el planeta Marte es una solución bastante utópica, pero juntos podemos hacer algo para vencer a la adversidad…
Durante el capitulo primero y caracterizaremos uno de los mas graves efectos de la contaminación: La ruptura de la capa de Ozono; y trataremos de dar una explicación psicológica al no cuidado del medio ambiente.
CAPÍTULO PRIMERO
La capa de ozono: el antibronceante de la tierra
Seguramente usted ha ido o conoce a alguien que alguna vez visitó la playa o la rivera de un rió en verano, con un sol y un calor intensos. Seguramente también, para no degradar su piel usó un bronceador, que lo protege de la exposición directa a los rayos del sol. A pesar de los recaudos que tomó, el sol siguió molestándolo, pero ya no le quemaba. Ahora imagine que no es usted sino la Tierra la que se expone al sol. Si no tuviera bronceador se quemaría y resecaría, pero afortunadamente lo tiene… es la capa de ozono.
La capa de Ozono, como su nombre lo dice, está formada íntegramente por el ozono, un gas que se forma cuando la luz ultravioleta del sol se encuentra con el oxígeno de la atmósfera terrestre. La molécula de ozono está formada por tres átomos de oxígeno. A temperatura ambiente, el gas ozono tiene un olor acre, y es incoloro, pero en grandes concentraciones puede volverse ligeramente azulado. El color azul del cielo se debe precisamente a la presencia de éste gas. Si se aspira ozono en grandes cantidades, se vuelve tóxico para el organismo y puede provocar la muerte. Se descompone rápidamente en presencia de oxígeno a temperaturas mayores de 100º C y en presencia de catalizadores como el dióxido de manganeso, a temperatura ambiente.
El ozono fue descubierto en 1785 por el físico holandés Martinus van Marum trabajando con maquinas electrostáticas, en las cuales percibió el olor de un gas hasta ese entonces desconocido. En Mayo de 1840 el químico alemán Christian Schonbein lo nombro ozono, que deriva del griego Ozein[12]El Ozono puede producirse artificialmente mediante un generador de ozono, pero hasta ahora resulta imposible reinstalarlo en la estratosfera, donde se ubica la capa de ozono. Tiene un interesante uso industrial como precursor en la síntesis de algunos compuestos orgánicos, y sobre todo, como desinfectante (depuradoras). Tambien fue utilizado como terapia médica durante la Primera Guerra Mundial, sobre las heridas de guerra al descubrir que estas cicatrizaban mejor y más rápidamente que las tratadas con los métodos habituales de la época.
Su principal propiedad es ser un fuertísimo oxidante, sin embargo, es mas conocido por su papel crucial en la atmósfera.
El ozono atmosférico se encuentra en su estado más puro, y su mayor concentración se encuentra aproximadamente a los 25 km de altura sobre el nivel del mar.
Como dijimos anteriormente, el ozono cumple un papel fundamental en la atmósfera: actua como depurador del aire y sobre todo como filtro de los rayos ultravioletas procedentes del Sol. Sin ese filtro la existencia de vida en la Tierra totalmente imposible.
Sin embargo, cabe aclarar que el ozono no es de hierro, sino que es un gas, que posee cierta fragilidad y puede ser descompuesto por la llegada de agentes extraños. Los gases utilizados en la industria del frió (heladeras, aire acondicionado, etc.) y en los aerosoles son compuestos químicos formados por cloro, flúor, carbono e hidrógeno. En las fábricas de electrodomésticos, éstos componentes son utilizados para limpiar los circuitos de televisores y computadoras. Todas esas sustancias pueden contaminar el aire, permaneciendo en las capas bajas de la atmósfera hasta por 70 años, tiempo mas que suficiente para que entre en contacto con la estratosfera. Una vez allí, la luz ultravioleta puede liberar el cloro que contiene y éste puede descomponer la capa de ozono. A medida que disminuye la concentración de ozono en la atmósfera, llega mas radiación ultravioleta a la Tierra, perjudicando el crecimiento y el desarrollo de plantas y animales, provocando enfermedades de la piel de los seres humanos, etc. Los elementos deteriorantes del ozono tienen un gran efecto sobre la retención de calor en la atmósfera, contribuyendo a aumentar la temperatura del planeta.
Durante años, los científicos han medido la concentración de ozono en la atmósfera de la Antártica y descubrieron que a partir de 1980 fue descendiendo su cantidad. Esto da lugar a los "Agujeros de Ozono", que aparecen periódicamente cada primavera. Sobre la Antártica, la pérdida de ozono llega al 70 %. Se cree que la aparición de éstos agujeros fue propiciada por el uso de aerosoles y refrigeradores.
Los gobiernos del mundo, concientes sobre la gravedad de la situación, firmaron en 1987 el Protocolo de Montreal[13]Muchas de las sustancias empleadas en aromatizantes y heladeras hoy en día podrían ser reemplazadas fácilmente por elementos alternativos. Aunque las medidas asociadas al protocolo de Montreal han reducido las emisiones de elementos deteriorantes, el efecto de esta reducción sobre el agujero de ozono aún no es estadísticamente significativo. Un trabajo de Newman en el año 2006 preveía que la recuperación total no se produjese hasta el año 2050, y que la recuperación parcial se alcanzará recién en el 2024.
Repasemos ahora las consecuencias de la exposición a rayos ultravioletas(UV), que de seguro ocurrirá algún día, si el adelgazamiento de la capa de ozono no se detiene: Básicamente, los UV destruyen el ADN[14]Producen también graves afecciones en los seres humanos, tales como cáncer de piel, cataratas oculares y disminución en el sistema inmunológico. En las plantas, los UV alteran la fisiología y el desarrollo vegetal, alterando su forma y la distribución de los nutrientes, y poniendo en riesgo su supervivencia. Debemos tener en cuenta que todos los ecosistemas dependen de las plantas, por su capacidad de absorción del dióxido de carbono y la liberación de oxígeno. Los UV provocan también daños a las criaturas marinas, como peces y fitoplancton, reduciendo sus poblaciones. Una de las consecuencias más grandes de la ruptura de la capa de ozono es la alteración del ciclo del carbono, contribuyendo al proceso del calentamiento global. Este calentamiento podría producir, a la larga, una mayor probabilidad de incendios, el derretimiento de los casquetes y glaciares(provocando a su vez inundaciones), la modificación de las áreas climáticas(que cambiaría la distribución de los ecosistemas), una elevadísima contaminación del aire y del agua e intensas sequías. Aún mas a la larga, el planeta se hará "inhabitable".
Si no actuamos ahora, nuestra descendencia padecerá las inclemencias y consecuencias de nuestras acciones. ¡No les dejemos como herencia un mundo destrozado y perdido! Es un compromiso que todos debemos asumir…
CAPÍTULO SEGUNDO
¿Por qué no cuidamos el medio ambiente?
Cuando caminamos por la calle, entramos a un edificio público o visitamos una plaza, nos angustia ver basura tirada por doquier, pero nos impacta el observar a las personas (muchas de ellas jóvenes) arrojar el envoltorio o envase del producto que están consumiendo, o la colilla encendida de un cigarrillo. Entonces, nos preguntamos ¿Por qué nosotros, los humanos, no nos damos cuenta que cuidar el medio ambiente es cuidar nuestro futuro? ¿Qué pasa en la cabeza de las personas para que tengan tal ceguera y no se den cuenta que están al borde de la destrucción? ¿No será éste un antecedente del Apocalipsis?
En las escuelas y talleres de capacitación se habla de las ventajas de cuidar el ambiente, y se incentiva a las personas a hacerlo… pero no es suficiente. Parece ser que nuestra naturaleza está en contra de la naturaleza.
Podríamos echarle la culpa a la tecnología, pero ésta fue creada por nosotros mismos, y la contaminación que provoca es causada por el mal uso que la damos.
Culpemos entonces a los grandes magnates de los recursos naturales, que han ganado miles de millones con la destrucción de los ecosistemas de nuestro planeta, y que se niegan a perder su dinero y poder reemplazando los elementos contaminantes por otros alternativos. Pero no debemos olvidar que nosotros aceptamos ese "dominio" que los magnates ejercen sobre nuestras vidas, comprando sus productos y trabajando en sus industrias. Si nos reveláramos contra esta hegemonía, seguramente los forzaríamos a cambiar.
No, las respuestas a las interrogantes que nos hicimos al comienzo del capitulo no están en el contexto económico, sino que debemos buscarlas en el contexto social y cultural.
Comencemos indagando desde las relaciones más simples y básicas: la familia. La familia es está constituida por un grupo de personas que viven juntas y están ligadas por vínculos afectivos[15]Lo que quizás usted no sepa es que dentro de la familia, mas precisamente cuando atravesamos la etapa de la infancia, los seres queridos más allegados y más fuertemente vinculados a nosotros (generalmente nuestros padres) nos transmiten determinados ideales, cosmovisiones o cualidades que nos permiten estimar las acciones o cosas como positivas o negativas: los Valores. Los valores humanos constituyen una guía que orienta el pensamiento y la conducta de las personas en una dirección que favorece su desarrollo e integración, aportando felicidad y bienestar. Permiten el desarrollo del potencial de cada individuo y su integración en la sociedad de la que forma parte[16]Así como de chicos nos decían: "No cruces la calle sin mirar para los dos lados", también nos retaban cuando tirábamos basura a la calle o el patio. Según Iván Pavlov[17]tanto los seres humanos como los animales tienen la capacidad de reaccionar a determinados estímulos de una manera especial, una vez que han sido condicionados con un premio o un castigo que se le impondrá luego de la realización (o no) de determinada acción.
Esta teoría se llama Condicionamiento, y es la causa del cumplimiento de las órdenes y consejos que nos imponen. Así, cuando nos retaban por ensuciar el patio, no lo volvíamos a hacer para no ser regañados de nuevo. Allí está el punto, los valores que nos transmiten nos condicionan y nos permiten reconocer entre lo que está bien y lo que está mal, pero una alteración en esos valores provocaría una confusión en nuestra mente: creeríamos que lo malo es bueno y que lo bueno es malo. La alteración en los valores podría entonces explicar éste desinterés generalizado sobre la naturaleza, su importancia y su cuidado. Estos sanos valores fueron reemplazados por otros que responden a la cosmovisión de la sociedad actual, ligada a la tecnología y el capitalismo. La sociedad de consumo privilegia la adquisición de manufacturas por sobre la supervivencia de los seres naturales, y éste deplorable ideal ha afectado a las últimas generaciones. Los adultos comenzaron entonces a permitir el arrojo de basura en la vía pública por parte de los niños, e incluso empezaron a fomentarlo. También, con el surgimiento de las piletas públicas, aconsejaron a sus hijos que orinaran en el agua, quizás sin suponer las graves consecuencias de ello. Jamás creyeron que esos "consejos" afectarían a la escala de valores morales de las personas, y a su vez éstas se los transmitirían a sus amigos o allegados, y así sucesivamente. Tal vez por eso a las personas que intentan convivir en relativa "Paz" con su entorno se las llama "Jipis" o "Ñoños". La cosmovisión y la sociedad actual rechazan ese tipo de conducta.
Muchas otras personas que no han sido afectadas por ésta tendencia, la imitan pensando que es lo correcto, y usan como Censura Psicológica[18]la idea "Todos hacen lo mismo" o "Nadie usa el cesto de basura, ¿Por qué lo voy a usar yo?". Sin dudas, se trata de un intento por encajar en la sociedad, y volverse personas comunes y corrientes, un concepto bastante errado de "igualdad".
Partiendo de ésta teoría, estos pensamientos nos están hundiendo cada vez más, y cuando nos demos cuenta, será demasiado tarde…
Bibliografía consultada
a) "Ecología EGB"- segunda edición (corregida), paginas 111 y 112, de Jorge A. Ratto. Editorial Marymar, Buenos Aires, Argentina.
b) Enciclopedia Ilustrada Clasa, Capitulo primero, páginas 3, 47, 81, 83, impreso en Colombia por Cultural Librería Americana S.A., año 2000.
c) Diccionario Enciclopédico Vastus (Reconstruido), Editorial Sopena Argentina S.A., Buenos Aires. Impreso en 1973.
d) es.Wikipedia.org
Autor:
Mariano Gorosito Porfilio
[1] Fuente: Diccionario enciclopédico Vastus, 1973, Editorial Sopena Argentina S.A., Buenos Aires-Argentina
[2] Muy pobre, insuficiente.
[3] Objetos inanimados, sin vida. Una roca, por ejemplo.
[4] Seres vivos, como plantas, hongos, animales, etc.
[5] Seres que están formados por más de una célula.
[6] Conjunto de ecosistemas característicos de una zona determinada.
[7] Inflamación del Intestino delgado.
[8] Enfermedad infecciosa que produce fiebre e inflamación de los órganos.
[9] Enfermedad infectocontagiosa cuyo principal síntoma es la gastroenteritis aguda.
[10] Frase extraída de la enciclopedia General Clasa. (Detalles en la bibliografía)
[11] Frase extraída de la película "El día que la tierra se detuvo", que tiene una trama relacionada con el descuido del hombre.
[12] Oler, captar con el olfato, sentir.
[13] Protocolo por el cual los Estados se comprometen a prohibir el uso de elementos deteriorantes del ozono antes de finalizar el siglo XX.
[14] Macromoléculas necesarias para la vida y la reproducción. Contiene además las características esenciales de cada raza e individuo.
[15] Fuente: Diccionario Enciclopédico Vastus, 1973
[16] Fuente: www.humaniza.org
[17] Iván Pavlov: sociólogo y psicólogo ruso (1849-1936.
[18] La censura psicológica es una frase o idea que las personas utilizan para que la realidad sea menos dolorosa. En otras palabras, es una suerte de consuelo interno, o autoayuda.
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