Propuesta para desarrollar la motivación hacia la lectura extraclase en los estudiantes de la enseñanza secundaria (página 2)
Enviado por Carmen E Tapia Sánchez
La motivación y la motivación por la lectura
La motivación escolar para su análisis posee tres aspectos fundamentales, a saber, las metas e intenciones con la que los estudiantes asumen las tareas, la competencia percibida y las relaciones afectivo-emocionales de estos (Pintrich y De Groot, 1990)[5].
En relación con la primera, cabe destacar que de acuerdo a los objetivos propuestos por el estudiante, sus fines a alcanzar y sus aspiraciones concretas determinarán en gran modo la motivación para asumir los retos a los que se deba enfrentar en el proceso de adquisición y desarrollo del conocimiento. La competencia percibida está en relación directa al concepto que el estudiante tiene de sí a partir de los propios resultados que ha alcanzado durante todo el proceso formativo, sus logros y deficiencias, sus aciertos y desaciertos, todo lo cual le servirá de medidor a las posibilidades de lo que se propone como meta. No menos importante son las relaciones afectivo-emocionales, en razón a que según el estudiante sea capaz de asumir cada actividad apoyándose en sentimientos de satisfacción y placer por los logros que obtenga, el efecto sobre la motivación será mayor.
La motivación se define como el ensayo mental preparatorio de una acción para animar o animarse a ejecutar con interés y diligencia. Mientras motivo (del latín tardío motivus, relativo al movimiento) tiene como valor etimológico que mueve o tiene eficacia o virtud para mover; causa o razón que mueve algo.
En consecuencia, podremos hablar de motivación por la lectura como el conjunto de factores psicológicos precedentes y eficaces que unido a las necesidades propias del individuo lo animan a realizar la lectura.
Y nos referimos a las necesidades porque no pueden desvincularse las categorías necesidad y motivación al estar dialécticamente interconectadas, a mayores necesidades mayores motivaciones y viceversa.
Por su parte, las necesidades están también en dependencia de las habilidades de ahí la importancia del desarrollo de las mismas.
La formación y desarrollo de las habilidades es un proceso que requiere dosificación y no puede ser espontáneo. Estas se desarrollan en la actividad del alumno por lo que resulta indispensable la correcta organización y selección de las actividades. Se debe tener en cuenta que la actividad está compuesta por acciones y estas por operaciones. Y como consecuencia de la realización sistemática de las acciones se desarrollan las habilidades. No basta solamente tener en cuenta el qué, sino también el cómo enseño. En este sentido se debe tener en cuenta cómo dirigir la actividad, hay que considerar los momentos fundamentales de toda actividad: la orientación, la ejecución y el control.̡ fase orientadora tiene una importancia decisiva en la futura ejecución. En esta fase se orienta el objetivo y lo que el alumno realizará, así como qué acciones ejecutar para poder llegar al resultado de su actividad. El alumno debe conocer qué se pretende y con qué calidad; por tanto, le permite percatarse del procedimiento a seguir para alcanzar el resultado[6](Dr. Tapia Sánchez, 2010) ༯font>
Para que el estudiante desee leer tiene que interiorizar la idea de la utilidad presente y futura de la lectura para él, y cómo esta potenciará su conocimiento del mundo circundante permitiéndole dirigir sus aspiraciones de modo más efectivo.
La motivación por la lectura es una tarea educativa compleja, en razón de que la lectura moviliza numerosos procesos intelectuales, afectivos, intereses, necesidades, habilidades y capacidades. Para la formación de un lector, debe integrarse el desarrollo del pensamiento, la imaginación, la sensibilidad estética y el lenguaje. La lectura debe insertarse en el sistema de motivos internos del individuo, de forma tal, que se obtenga un deseo constante, del alumno, por leer todo lo que le llegue a las manos (Hernández Pérez, 2007).[7]
Asimismo, "el famoso objetivo: despertar el amor por la lectura: ?cómo lo logras? Supuestamente, leyéndoles cosas bellas, pero el maestro también tiene que demostrar que él siente placer; tiene que sentirlo y no sólo decirlo. Un maestro que se puede divertir con el texto que está leyendo, muestra que eso es posible, que puede reír como puede llorar y no por ello está loco. Haciendo eso trasmite una información fundamental a los chicos"[8] (Ferreiro, 1984).
Compartimos la idea del Dr. Marín cuando afirma que "la actividad lectora debe ser totalmente gratuita para que sea placentera para los jóvenes, ya que si se convierte en otro elemento de evaluación y control, pierde sentido para los muchachos. Se debe leer por leer, leer porque sí, leer porque me gusta"[9].
Además para que el desarrollo de la motivación a la lectura sea realmente efectivo es imprescindible desechar toda actividad sobre la base de las improvisaciones, hay que acudir a los métodos y procedimientos necesarios para su realización partiendo de un diagnóstico inicial que permita al profesor conocer quiénes leen, y quiénes no lo hacen, así como qué se lee o qué se leería. Asimismo, el profesor debe determinar con exactitud la base bibliográfica con la que se cuenta a los efectos de garantizar el acceso real y efectivo de los estudiantes a los libros.
Propuesta de actividades para el desarrollo de la motivación hacia la lectura extraclase
Como parte de las actividades motivadoras a la lectura el profesor puede desarrollar las siguientes:
Actividad # 1: Creación de la minibiblioteca.
La creación de la minibiblioteca constituye una actividad esencial para el desarrollo de la motivación hacia la lectura. No puede ser confundido el papel de la biblioteca central del centro estudiantil con la minibiblioteca a crear en el aula, ni existirán objetivos contrapuestos en el funcionamiento de la una con relación a la otra. La minibiblioteca debe ser el escalón inicial para la posterior utilización de la biblioteca escolar de un modo más eficaz y duradero.
Actividad # 2: Elección de libros que serán leídos,
Esta actividad debe desarrollarse ofreciendo siempre la posibilidad al estudiante de que elija sus propias lecturas en función de sus intereses y capacidades. En otras palabras, el profesor puede presentar a los estudiantes una lista de libros con posibilidades de ser de interés para los estudiantes, pero esta lista tendrá espacios libres para que los estudiantes puedan colocar o sugerir los libros que ellos consideran que deben formar parte de la misma. Se fijará un día del mes para que los estudiantes se manifiesten sobre sus experiencias con las lecturas realizadas, realicen una nueva selección o sugieran cambios a la lista de libros precedentes.
Actividad # 3: Las estrategias de animación,
Una vía importante para motivar a los estudiantes a las lecturas extractase lo pueden ser el empleo de las estrategias de animación mediante la cual el profesor podrá realizar la audición de cuentos, presentación de libros, lecturas dialogadas, dramatizaciones de cuentos, etc. No es necesario el empleo de medios sofisticados, las actividades pueden ser desarrolladas a partir de la utilización del pensamiento creador de los estudiantes y las iniciativas del profesor.
Actividad # 4: El Libro viajero,
El profesor creará un libro cuyo contenido será elaborado por los propios estudiantes quienes incorporarán cada página escribiendo sus experiencias literarias, sus comentarios sobre obras leídas y sus propias creaciones literarias. Este libro puede convertirse en parte de las memorias del grupo durante todo el curso escolar.
Actividad # 5: El juego de roles:
Según Muñoz Molina: "La literatura nos enseña a mirar dentro de nosotros y mucho más lejos del alcance de nuestra mirada. Es una ventana y también un espejo. Quiero decir; es necesaria. Algunos puritanos la consideran un lujo. En todo caso es un lujo de primera necesidad"[10]. Y para lograr que "este lujo de primera necesidad" exista es necesario el lector, quien es "una persona que lee cuando lo necesita, y que puede hacerlo porque domina las técnicas y habilidades lectoras"[11].
El llamado Juego de Roles reviste una gran utilidad en la enseñanza de la Literatura y como vía importante para motivar a los estudiantes a la lectura extractase.
La temática de los juegos de roles es infinita, debido a que depende de la capacidad imaginativa del profesor, especialmente, y de los alumnos quienes tienen que decidir y desarrollar las actividades de aprendizaje (Baquerizo, 2007)[12].
Asimismo el juego de roles motiva al aprendizaje y permite crear un ambiente de enorme participación en el diálogo o debate posterior, sobre todo cuando el grupo se mantiene implicado en lo que se dramatiza, (Dr. Chinchilla Rodríguez, 2009)[13].
Entre las actividades motivadoras a la lectura que pueden ser enmarcadas dentro del juego de roles tenemos:
a.-Reunión entre personajes:
Esta actividad puede ser desarrollada a partir de las obras estudiadas en clase, o simplemente, orientar la lectura de otras obras literarias por parte de los estudiantes de acuerdo a sus gustos y preferencias. El estudiante seleccionará un personaje y profundizará en sus características, su historia, su papel en la obra. Una vez reunidos todos los estudiantes a los efectos de realizar la actividad, el aula quedará organizada de forma circular. Cada estudiante narra las vivencias de su personaje en la misma medida en que escuchó o escuchará la de sus compañeros.
b.-Entrevistando a un personaje:
El profesor pedirá a algunos estudiantes que lean determinada obra literaria y que seleccionen un personaje sobre el que deben hablar al resto de sus compañeros de aula. Para desarrollar la actividad, el aula puede ser organizada como un panel periodístico donde los estudiantes previamente seleccionados se sentarán frente al resto y estos le realizarán preguntas sobre los personajes que ellos asumen.
c.-Rescribiendo la obra literaria:
Mediante esta actividad, el profesor pedirá a los estudiantes que seleccionen una obra literaria y dentro de ella a un personaje. Posterior a la lectura individual, cada estudiante debe proponer al colectivo cómo, dónde y por qué rescribiría algunas apartes de la obra.
Aspectos Metodológicos:
Una vez seleccionada la actividad que se desarrollará por medio del juego de roles, el profesor debe explicar con exactitud cómo se realizará la misma; la explicación debe incluir la motivación, las reglas organizativas y el modo en que la misma será evaluada. Sin que la evaluación constituya un medio para que el estudiante considere la actividad de la lectura extraclase como otra carga docente más, en tal sentido la evaluación estará orientada específicamente a los fines de autorregulación para que el estudiante sea capaz de autocorregirse los errores que cometa.
Del mismo modo en que el profesor enseña a observar, analizar, comparar, describir, etc., deberá enseñar a los estudiantes a valorar y controlar, que no es más que enseñarlo a analizar los resultados y deficiencias, lo que tiene un gran valor formativo[14](Dr. Tapia Sánchez, 2010)
Por su parte, el profesor en conjunto con los estudiantes deben definir el modo en que los estudiantes se seleccionan para los roles literarios.
Tampoco debe faltar el trabajo preparatorio de la actividad que estará determinado por la investigación histórica acerca del autor, la obra, los personajes, etc.
Especial cuidado debe tener el profesor al seleccionar los medios y materiales para la actividad (fotos, recortes periodísticos, medios de reproducción, etc.) para lograr que todos los estudiantes tengan iguales posibilidades de participación.
Actividad # 6:Un libro desconocido:
Para el desarrollo de esta actividad el profesor debe seleccionar un libro que pueda ser de interés para todos los estudiantes. Una vez en el aula, el profesor comenzará presentando el contenido de la obra sin mencionar el nombre el libro ni su autor, cuando haya despertado suficientemente la atención de los educandos acerca del tema, entonces develará esa información. No se debe narrar el final de la obra, esta parte de la actividad será orientada como trabajo individual al concluir la clase y sus resultados serán objeto de debate durante el próximo encuentro.
Actividad # 7: La historia de un libro:
Cada libro tiene una historia precedente y es esa historia un posible resorte para acercar a los estudiantes al libro. El profesor debe buscar libros cuyos antecedentes históricos muestren matices capaces de llamar la atención de los alumnos. Presentará a estos últimos la historia sobre el surgimiento de la obra y los motivará del tal modo a la lectura, del mismo modo solicita a los estudiantes que busquen libros con aspectos históricos interesantes y que los traigan para compartir en colectivo. Esta actividad es posible combinar con otra que exponemos a continuación.
Actividad # 8: Más allá del libro:
Esta actividad se apoya en la búsqueda de información a través de revistas, periódicos, boletines, diccionarios, etc. Tiene como propósito que los estudiantes busquen información sobre la historia de determinada obra, pero su vez sirve para crear el hábito en los estudiantes de ampliar su horizonte de búsqueda y satisfacciones como lector.
Actividad # 9: Cuéntame cómo pasó:
Muchas obras literarias narran episodios sumamente interesantes sobre la historia, las artes, la ciencia, etc. Una importante forma de motivar la lectura en los estudiantes es por medio de este tipo de obras. El profesor aprovechando una efemérides solicita a los estudiantes que lean libros, revistas, periódicos donde puedan aparecer narraciones relativas a estos hechos y en consecuencia, el día señalado los estudiantes manifestarán de modo oral cuáles fueron las enseñanzas adquiridas en relación con tales acontecimientos. Esta actividad fortalece en los estudiantes su creencia en cuanto a las amplias posibilidades cognoscitivas que sobre los más disímiles aspectos de la vida la lectura podrá ayudarlos.
Por supuesto, las actividades que hemos propuesto a los efectos de desarrollar la motivación por la lectura en los estudiantes de la enseñanza secundaria no son suficientes, ellas están en dependencia del imprescindible carácter creador del profesor y la entusiasta participación de los estudiantes hacia quienes en definitiva están dirigidas estas acciones.
Si queremos encontrar las vías más adecuadas para desarrollar la motivación de nuestros estudiantes hacia la lectura no puede soslayarse la necesidad de un diagnóstico inicial que permita conocer con exactitud las características individuales de cada estudiante, sus metas, intereses, preferencias y necesidades. Con este diagnóstico habremos iniciado el camino para saber hacia dónde y cómo debemos trabajar.
Es importante mantenerse siempre sobre la base de que el estudiante interiorice la importancia del por qué lee y para qué le sirve la lectura como parte de una respuesta a su presente espiritual en cada momento.
Del mismo modo corresponde a los educadores desempeñar un papel importante a través de su ejemplo incorporándose el mismo a la condición de lector activo. Los estudiantes deben ver al educador como un aliado en el disfrute de la lectura y no como quien los obliga a leer.
Se deben seleccionar textos que estén sintonizados o acordes a los intereses y necesidades de las edades de los estudiantes a quienes se les enseña.
La actividad de lectura debe ejercerse sobre la base de la libertad de selección por parte de los estudiantes para que no la aprecien como otra carga docente en su largo calendario escolar.
Por último, los medios de evaluación para estas actividades deben ser tan flexibles como sea posible para evitar en los estudiantes el efecto psicológico de un resultado impositivo.
Baquerizo, A (2007). Técnica del juego de roles. http//www.isph.edu.pe/Materiales%20educativos/Juegos%%20de%roles.pdf.
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Ferreiro, Emilia. Cultura escrita y educación, México, F.C.E.
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Marín Marín, Dr. Álvaro. Propuesta de modelo didáctico para el fomento de la lectura recreativa en la secundaria.
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Muñoz Molina, Antonio. La disciplina de la imaginación, en: ?Por qué no es útil la literatura?, por Luis García Montero y Antonio Muñoz Molina, Ediciones Hiparión, Madrid, 1994, segunda edición.
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Tapia Sánchez, Dr. Juan Enrique."Currículo Flexible: Propuesta para el aprendizaje autónomo (VI)."Editum.org 4 Enero 2010. 23 Junio 2010tp://www.editum.org/Curriculo-Flexible-Propuesta-para-el-apredizaje-autonomo-VI-p-3346.html
[1] Tapia Sánchez, Dr. Juan Enrique. "Currículo Flexible: Propuesta para el aprendizaje autónomo (VI)." Editum.org 24 Enero 2010. 23 Junio 2010
[2] Tapia Sánchez, Dr. Juan Enrique. “Currículo Flexible Propuesta para el aprendizaje autónomo (I)”. Editum.org 20 de Enero 2010. 17 Junio 2010 http://www.editum.org/Currículo-Flexible-Propuesta-para-el-aprendizaje-autónomo-I-p-328.html
[3] Rinaudo, Dra. María Cristina et al.”Motivación para el aprendizaje en los alumnos universitarios”. Revista Electrónica de Motivación y Emoción. España, Volumen IX, Número 22 http://reme.uji.es/artículos/número22/article2/texto.html.
[4] Tapia Sánchez, Dr. Juan Enrique. “Currículo Flexible Propuesta para el aprendizaje autónomo (I)”. Editum.org 20 de Enero 2010. 17 Junio 2010 http://www.editum.org/Currículo-Flexible-Propuesta-para-el-aprendizaje-autónomo-I-p-328.html
[5] Pintrich y De Groot. A. (1990). Motivational and self-regulated learning components of classroom academic performance. Journal of Educational Psychology, 82, 33-40
[6] Tapia Sánchez, Dr. Juan Enrique. "Currículo Flexible: Propuesta para el aprendizaje autónomo (II)." Editum.org 21 Enero 2010. 23 Junio 2010 .
[7] Hernández Pérez, Adapmerys, Luis Hernández Mollineda y Albertina Pérez Olivera. Reflexiones en torno a la motivación por la lectura de textos pertenecientes al género lírico. http://www.sabetodo.com/contenidos/EkEylVkuFpCXwTcuDR.php
[8] Ferreiro, Emilia. Cultura escrita y educación, México, F.C.E. Pág. 214
[9] Marín Marín, Dr. Álvaro. Propuesta de modelo didáctico para el fomento de la lectura recreativa en la secundaria. http://www.umass.edu/complit/aclanet/A_Marin.html
[10] Muñoz Molina, Antonio. La disciplina de la imaginación, en: ?Por qué no es útil la literatura?, por Luis García Montero y Antonio Muñoz Molina, Ediciones Hiparión, Madrid, 1994, segunda edición, p.57
[11] Marín Marín, Dr. Álvaro. Propuesta de modelo didáctico para el fomento de la lectura recreativa en la secundaria. http://www.umass.edu/complit/aclanet/A_Marin.html
[12] Baquerizo, A (2007). Técnica del juego de roles. http//www.isph.edu.pe/Materiales%20educativos/Juegos%%20de%roles.pdf. P.1
[13] Chinchilla Rodríguez, Dr. Emilio. Jugando con personajes literarios. Revista Educación 33 (1), 33-39, Pág. 34, ISSN 0379-7082, 2009
[14] Tapia Sánchez, Dr. Juan Enrique. "Currículo Flexible: Propuesta para el aprendizaje autónomo (II)." Editum.org 21 Enero 2010. 23 Junio 2010
Autor:
Lic. Carmen Elena Tapia Sánchez
Pedagoga, Cuba
Lic. María Antonia Tapia Sánchez
Pedagoga, Cuba
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