Tareas para la educación de la autovaloración de futuros profesionales de Cultura Físca
Enviado por Rebeca Robert Hechavarría
- Resumen
- Introducción
- Desarrollo
- Sistema de tareas educativas para la educación de la autovaloración del profesional de Cultura Física
- Conclusiones
- Bibliografía
Resumen
El presente trabajo es resultado de la tesis doctoral titulado "Estrategia educativa para la educación de la autovaloración de futuros profesionales de Cultura Física", en el mismo se expone un sistema de tareas concebidas para el logro de este fin, a través del cual se contribuye a la integralidad de estos estudiantes, en tal sentido se parte de lo indicado en el modelo del profesional (Plan D) donde se aluden a capacidades tan importantes como el autoaprendizaje que tiene en su base desde nuestra visión la autovaloración.. En el estudio se utilizaron métodos de investigación tales como: la observación, el análisis y síntesis, el sistémico-estructural-funcional, el estudio de caso, criterio de especialistas, la triangulación de datos, elementos de la investigación–acción-participación, y las técnicas incluidas en la referida batería de instrumentos para el diagnóstico de la autovaloración. Los principales resultados se concretan en las transformaciones ocurridas en los estudiantes y grupos.
Summary:
The present work is been from the doctoral thesis titled "educative Strategy for the education of the self of professional futures of Physical Culture", in the same one exposes a system of tasks conceived for the profit of this aim, through as it is contributed to the integralidad of these students, in such sense part of the indicated thing in the model of the professional (Plan D) where are alluded to to as important capacities as the autoaprendizaje that has in its base from our vision the self. . In the study investigation methods were used such as: the observation, the analysis and synthesis, the sistémic- structural-functional one, the study of case, criterion of specialists, the triangulation of data, elements of the investigation-action-participation, and the techniques including in the referred battery of instruments for the diagnosis of the self. The main results take shape in the transformations happened in the students and groups.
Introducción
Constituye una preocupación de los docentes de la facultad de Cultura Física el desarrollar un proceso formativo donde lo educativo se jerarquice, pero sin imposiciones ni acciones forzadas, para no frenar la reflexión del educando y la conciencia de la necesidad de lograr cambios favorecedores del progreso integral del futuro profesional. Se indica en el modelo las características esenciales del egresado de estos tiempos, en el mismo se puntualizó…"tendrá una formación integral, con sólidos conocimientos y habilidades pedagógicas profesionales. Un licenciado con excelentes condiciones ético morales y profesionales y con una visión crítico reflexivo y transformador de los procesos y actividades de Cultura Física en sus ámbitos de actuación. "(135,14)
Asimismo en este plan "D", se señaló un sistema de valores a desarrollar en el estudiantado, de ellos son de interés para esta investigación el humanismo, la justicia, la valentía, la firmeza, la combatividad (135,16) entre otros, al constituir desde esta perspectiva los de relación directa con la autovaloración, pues en la medida en que los valores se consoliden, el sujeto será más sencillo, más tolerante, más humano y en consecuencia más empático, de igual modo si es más seguro también tendrá la valentía política para enfrentar los problemas y defender las verdades con la firmeza necesaria para ello, al combatir todo lo que considere no esté acorde con sus principios de una manera constructiva. Para el logro del presente objetivo se precisa en la estrategia educativa del Instituto Superior de Cultura Física (ISCF) y del INDER los lineamientos fundamentales para la formación de valores.
Apareció una estrategia educativa diseñada para garantizar una entrega pedagógica, frente a la cual debe estar el coordinador de grupo y los tutores, los mismos en el orden educativo son facilitadores o colaboradores con influencia marcada en el proceso de educación de la personalidad. Dicha estrategia para su aplicación no debe concretarse en la entrega de informes a los docentes precedentes, pues requiere de una profundización en las características personológicas de los estudiantes, quienes pudieran tener un mejor seguimiento si el coordinador de brigada transitara junto a ellos desde el primer hasta el quinto año de la carrera.
Se destaca en el plan "D" la necesidad de desarrollar habilidades para realizar un autoaprendizaje eficaz, capacidad demandante de un autoconocimiento profundo del sujeto, pues así podrá con precisión determinar, qué les falta por aprender, cómo y qué hacer para logarlo de manera consciente y desarrolladora, sin embargo, no se orientan vías para desde lo educativo, favorecer el avance de esta capacidad.
De igual manera en revisiones realizadas a los proyectos educativos no se plantean acciones dirigidas a la educación de la autovaloración, mas, se reconoce por parte de antiguos profesores la existencia de estudiantes con autovaloración inadecuada, que en sus relaciones con los otros propiciaban conflictos y malestares en el grupo y en otros casos se hallaban estudiantes a protegerlos con regularidad, para evitarles fueran humillados y maltratados.
En sentido general la evolución del proceso formativo del profesional de Cultura Física denotó una propensión a una dinámica sistemática, lo cual, implica situar al estudiante como centro del proceso y con ello la preocupación por su perfeccionamiento de manera integral, donde la autovaloración ocupa un papel central .
Desarrollo
Se parte para la determinación y proyección de las tareas de la concepción psicopedagógica del proceso de educación de la autovaloración, la cual se concibe como un conjunto de ideas, conceptos, tareas, y un principio, que en su interrelación lo explican desde lo teórico. Para su comprensión se hace necesario definir algunos elementos importantes, ente ellos Proceso Formativo del Profesional de Cultura Física considerado como un proceso continuo y sistemático de influencias educativas con carácter integrador, en el cual coinciden lo instructivo, lo educativo y lo desarrollador, lo curricular y extracurricular, lo investigativo, extensionista y laboral para provocar transformaciones en lo cognitivo y lo afectivo del estudiantes desde su entrada hasta el egreso, propiciándole las herramientas necesarias para trabajar en cualquiera de las esferas de actuación de esta carrera.
De esta misma forma se precisa que el Proceso de Educación de la Autovaloración (PEA), es el proceso estructurado, articulado, sistemático, flexible y personalizado de autorreflexión, dirigido a la transformación y perfeccionamiento de cualidades y valores. Se sustenta además, en la relación entre aceptación y autoaceptación, permitiéndole al estudiante, desde su autoconocimiento asumir actitudes adecuadas hacia sí mismo, el grupo y las esferas de actuación de la Cultura Física, a través del desarrollo progresivo de su autovaloración. Se caracteriza, además, por ser flexible, tolerante, respetuoso, negociado y vivencial.
A partir de la sistematización del concepto de autovaloración, se definió como autovaloración del futuro profesional de Cultura Física, al proceso de análisis de las particularidades de sí mismo, que parte del autorreconocimiento de sus debilidades, virtudes y potencialidades, no sólo en lo personal, sino también en lo profesional, permitiendo así desde su visión, distinguir para cuál de sus esferas de actuación está mejor preparado y qué hacer para superar las deficiencias limitantes en su actuación dentro del contexto laboral donde lo ubiquen, al mantener un estilo de comportamiento favorecedor del desarrollo de los grupos y equipos deportivos con los que interactúa, al imprimir a su actividad físico-deportiva la seguridad y el carácter crítico y autocrítico
La autovaloración, como ya es conocida puede ser adecuada o inadecuada en el profesional de Cultura Física. Si es adecuada implica:
Poder autocorregir sus errores en lo personal y en lo profesional.
Tomar decisiones a partir de la concientización de sus limitaciones y cuáles de ellas realmente deben y pueden ser transformados.
Confiar en sus propias capacidades y habilidades físicas y mentales para desempeñar con éxito la actividad realizada y en esa medida transmitirle esa seguridad a sus pacientes, estudiantes, comunitarios y deportistas.
Identificar el momento de estar en mejores condiciones para competir o participar en algunas actividades previstas para su formación integral.
Autorreconocerse como hombre sexuado para determinar cuál actividad físico-deportiva pueden ejecutar en correspondencia con esas características.
Distinguir desde su autoconocimiento cómo pueden proporcionar satisfacción plena, recreación a sí mismo y a los comunitarios con quienes interactúa, reconociendo las fortalezas, debilidades, límites y espacios
Tener un nivel de aspiración en concordancia con una fuerte motivación por la Educación Física, el Deporte, la Cultura Física Terapéutica o la Recreación Física.
Ser perseverantes, reflexivos, optimistas y justos, lo que les permitirá atender las diferencias individuales en los grupos escolares, equipos deportivos, salas de rehabilitación y comunidades donde trabajen, además de estimularlos para explotar al máximo sus posibilidades con dignidad, sin petulancia ni humillaciones.
La seguridad en sí mismo les permitirá imponerse automandatos para proponerse y realizar tareas personales y profesionales altas pero cuando con objetividad puedan ser cumplidas.
Si por el contrario la autovaloración es inadecuada se identifica entonces como la visión desacertada que tiene el futuro profesional de Cultura Física de su realidad, en ella no existe una relación consecuente entre lo aspirado y lo logrado, no siempre reconoce con objetividad sus potencialidades, defectos y virtudes por no distinguir con exactitud para cuál de las esferas de actuación está mejor preparado, no aparenta preocuparle qué debe transformar para mejorar su desempeño. En general tienen problemas de relaciones interpersonales en los grupos escolares y equipos deportivos con los que interactúa, así como el uso inadecuado de la crítica y la autocrítica. Este tipo de autovaloración puede ser por exceso (sobrevaloración), y en ese caso se sobredimensionan los elementos ya mencionados, o por defecto (subvaloración), donde ocurre lo contrario.
La autovaloración vista a través de su proceso de educación implica el reconocimiento de etapas, en esencia es educativo y por tanto conllevará al desarrollo de cualidades y valores, así como a la concientización de la transformación oportuna de algunos aspectos negativos de la personalidad.
1. Conocimiento y autoconocimiento de virtudes, defectos y potencialidades.
2. Toma de conciencia de la necesidad de transformación.
3. Socializar los defectos y solicitar ayuda siempre que sea preciso.
4. Valoración de los cambios ocurridos.
Estas etapas que en su avance paulatino describen una espiral a modo de ilustrar los avances que se producen en este proceso de carácter educativo- autoeducativo transitando de un desarrollo guiado al autodesarrollo.
Sistema de tareas educativas para la educación de la autovaloración del profesional de Cultura Física
Las tareas son realizadas en los primeros momentos por los educadores, las que en lo sucesivo van ganado en participación los estudiantes hasta ser ellos solos quienes les den cumplimiento, estas propician la transformación de las actitudes de los sujetos implicados en los diferentes espacios donde interactúan, al producirse a través de ellas se produce junto a la educación un proceso de aprendizaje. No se considera la tarea como la simple realización de una acción para lograr un resultado exigiendo una posición del profesor durante su concepción y realización no solo profesional sino también personal., para determinarlas se tuvo en cuenta como parámetros: Su carácter desarrollador y reflexivo, el aumento de la independencia y creatividad y el alcance del protagonismo adecuado[1]de cada estudiante
Se establece un sistema que incluye tareas de diferentes tipos, para la educación de la autovaloración, ellas son:
1. Autorreflexiva: Concebida para potenciar en el alumno sus saberes cree sus momentos para, meditar, pensar, valorar, enjuiciar y analizar su conducta, sus relaciones con el resto del grupo, con sus coetáneos y profesores y sobretodo sobre su mundo interno.
En esa autorreflexión el estudiante debe determinar sus fortalezas, debilidades y posibilidades reales para conseguir sus metas. Para la ejecución de esta etapa el educador en su labor orientadora propiciará a los estudiantes realizar esta autorreflexión de manera consciente
Se recomienda utilizar las clases y otros espacios para conducir al estudiante a través de interrogantes o colocándolos ante situaciones de conflicto para el desarrollo del pensamiento reflexivo.
2. Autocognoscitiva: Dirigida al conocimiento del sujeto, de sus reacciones emocionales, de su aprendizaje, de sus habilidades, se trata de enseñar al estudiante a aprender a aprender no sólo conocimientos, sino también hábitos y valores para una vez instaurados en sus vidas se conviertan en cualidades. Es importante en su condición de estudiante de una carrera de perfil pedagógico aprender para su vida, y para poder en su futura labor en cualquiera de sus esferas de actuación aplicar lo aprendido por sí solo, de manera independiente.
Para lograr el cumplimiento de esta tarea los profesores deben orientar actividades complejas, integradoras para el crecimiento de la independencia cognoscitiva de los estudiantes, en función de determinar sus insuficiencias académicas e intelectuales y desde su autoconocimiento trazar sus propias vías para alcanzar el conocimiento deseado.
3. Participativa: Tiene especial importancia en la educación de la autovaloración que el sujeto se signifique en la actividad donde se desenvuelve su personalidad, porque es ahí donde lo conocen y valoran. Si se tiene en cuenta como condición necesaria para lograr la participación (según la concepción de la Educación Popular) el querer, poder y saber se entiende la relación de esta con la autovaloración, dada en la relación establecida entre el progreso de la autovaloración con la exactitud con que determinen cómo y donde participar y en la efectividad de la misma.
4. De autonomía: Es considerada como la voluntad y la capacidad de tomar decisiones y de asumir la responsabilidad de las decisiones tomadas. Esta cualidad se logra a través de vivencias del hombre durante toda su vida y significa el tomar decisiones con independencia absoluta, al asumir la responsabilidad personal de lo aprendido.
Se hace necesario colocar al estudiante ante situaciones donde estén presentes varias alternativas educativas y de aprendizaje para, de forma reflexiva, determinar cómo aprender más y autoeducarse mejor, al realizar las transformaciones necesarias para mejorar su comportamiento, esto sólo puede lograrse al tener conciencia de sus posibilidades y recursos subyacentes.
Para atender lo individual y lo grupal el profesor debe lograr que el estudiante:
a. Sea independiente y busque sus propias vías para su autoeducación.
b. Compare e intercambie sus experiencias de aprendizaje y educación con sus compañeros.
c. Participe activo y con dinamismo en clases y otras actividades extradocentes y extraescolares.
d. Tome conciencia sobre una posible transformación o perfeccionamiento, así como el proceso a seguir para lograrlo.
5-.Proyectiva: Permite al futuro profesional planificar su futuro, a partir de objetivos de mayor alcance, son las anticipadas al futuro imaginario, debe integrarse lo personal y profesional en los proyectos de vida, se elaboran a partir de los intereses, necesidades, motivos, características de la edad y personológicas de cada estudiante. Es importante insistir en la necesidad de su carácter desarrollador, permitiendo a cada estudiante asumir la tarea a nivel individual y grupal, de este modo se tienen en cuenta sus limitaciones y potencialidades. No sólo se determina lo que el estudiante puede hacer o no, sino las ayudas necesarias para alcanzar sus objetivos.
Tal como se observa en las tareas no se cumplen con la misma intensidad en todos los momentos de desarrollo de la estrategia, ni en las mismas etapas por las que atraviesa el Proceso de Educación de la Autovaloración en su devenir, es por eso que las tareas ubicadas en los círculos más cercanos al vértice están delineados con líneas continuas, indicando que estas tareas son para desarrollarlas en un primer momento, las que están en un segundo momento aparecen ubicadas en los círculos dibujados con líneas discontinuas y las más complejas previstas para cumplir en un tercer momento están delineadas con líneas de puntos..
Conclusiones
La concepción psicopedagógica elaborada contentiva de ideas, definiciones, principio, y componentes está dirigida a lograr desde el autoconocimiento de los sujetos implicados su autoeducación, esta constituye la base teórica de la estrategia educativa propuesta para la educación de la autovaloración, la cual contiene cinco etapas en las que se planifican acciones relacionadas con la complejidad de las tareas que son desarrolladas en determinados espacios.
Bibliografía
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13 Arredondo G., V (1996) Desarrollo histórico de la formación de profesores universitarios. Análisis y evaluación de experiencias. México. Patria. SEP y Nueva imagen.
Autoras:
Dra.C Rebeca Robert Hechavarría
MSc Ana Rosa Daudinot Munive
[1] ota de la autora: Se asume en esta teoría en relación directa con la autovaloración adecuada. Se ha dado en llamar así a la asunción de un rol principal que no implique impertinencia, ni charlatanería sino que sea el resultado de una personalidad madura que asume en cada contexto lo que realmente se aviene al momento y la ocasión, siendo admirado y respetado por todos.