En la historia reciente, el desarrollo se ha convertido en un tema de mucha envergadura puesto que prácticamente ha protagonizado el debate, tanto a nivel nacional como internacional, sobre cómo lograr que los países subdesarrollados (a los que se denomina países del Tercer Mundo) abandonen ese status y que se integren a los países del Primer Mundo. Este debate se pone de manifiesto con el hecho de que muchos teóricos, filósofos, comentaristas de radio y televisión y hasta personas de tanta investidura como los presidentes y jefes de Estado, quienes se reúnen casi todos los años a debatir sobre cómo alcanzar un nivel de desarrollo digno de sus respectivas tierras, han estudiado el fenómeno de desarrollo tratando de encontrar soluciones que contribuyan a que sus países logren llegar a la meta última, esto es, ser desarrollados. Pero, aunque es cierto que en estas cumbres son los jefes de Estado los que han jugado el papel más protagónico en el debate sobre el desarrollo, no menos cierto es que los actores sociales tales como los grupos religiosos, los sindicatos, los partidos políticos, etc. también han ocupado un lugar importante en todo ese debatir sobre el referido tema.
Las soluciones que han surgido como consecuencia de todo ese debate ha sido la implementación de modelos de desarrollo en los países interesados en alcanzarlo. Tal es el caso de América Latina, que se ha visto en la necesidad de ir adoptando distintos modelos cuyo único objetivo es alcanzar el tan anhelado desarrollo y que de esta forma se incremente el nivel de vida de sus ciudadanos(as). Lógicamente, detrás de cada modelo de desarrollo implementado ha existido una estrategia de desarrollo, esto es, el camino que hay que seguir para poder implementar el modelo del que se trate.
Y eso es precisamente lo que pretendemos analizar en este epítome: cuáles han sido las estrategias de desarrollo más relevantes implementadas en República Dominicana y América Latina.
A lo largo de todo este trabajo estudiaremos brevemente en qué consisten cada uno de estos modelos y una descripción de las estrategias de desarrollo más importantes implementadas en Latinoamérica.
También hemos incluido un acápite muy importante en este trabajo que nos ayudará a afianzar los conocimientos que se deriven del estudio de los modelos y estrategias de desarrollo que se esbozan en este trabajo. Dicho acápite es el Acuerdo de Libre Comercio de las Américas (ALCA) en el que han entrado a formar parte muchos de los países de América Latina, incluida la República Dominicana.
El estudio de este último acápite incluye una caracterización del ALCA y la mención de las distintas posiciones que hay en la República Dominicana sobre el tema.
Esperamos que los contenidos incluidos en estos humildes párrafos estén a la altura de las expectativas de nuestros lectores y que los mismos contribuyan a afianzar los conocimientos que pueda tener el amable amigo lector sobre el tema de los modelos y estrategias de desarrollo.
-Las estrategias de desarrollo en América Latina–
- ¿Cuáles son las estrategias de desarrollo más relevantes implementadas en América Latina y a qué diagnóstico se corresponde cada una de ellas?
Antes de entrar en materia, sería de mucha utilidad hacer una distinción entre lo que es un modelo de desarrollo y lo que es una estrategia de desarrollo. Un modelo de desarrollo es la meta última que se persigue al implementar una estrategia de desarrollo. Esto es, las estrategias de desarrollo fungen como el camino que hay que seguir para poder llegar a instalar el modelo de desarrollo que se desee tener en un país determinado.
En América Latina, por ejemplo, se han implementado varios modelos de desarrollo, y cada uno de los modelos implementados ha tenido tras de si a una estrategia.
En general, los dos modelos de desarrollo que han predominado en el escenario latinoamericano han sido el modelo liberal, que se refiere a un proceso de descolonización económica, apertura comercial a los mercados exteriores (que es lo que conocemos como globalización), etc., y el modelo socialista, que básicamente se refiere a la solidaridad y progreso mediante una intervención del Estado en el mercado. Otros de los modelos de desarrollo más importantes implementados en Latinoamérica, derivados en cierta medida de los dos primeros, han sido el modelo sustitutivo de importaciones, el modelo de servicios, el modelo neoliberal y el modelo de desarrollo sustentable ó sostenible.
Existe otro modelo de desarrollo implementado en América Latina que, aunque ha sido objeto de grandes debates, esto es, el modelo del Desarrollo Humano, sobre el cuál daremos detalles un poco más adelante, pero ha sido considerado como una gran estrategia para que de una vez por todas los países latinoamericanos logren desarrollarse puesto que sitúa al ser humano como centro del debate. Pero ahora vamos a centrarnos en la explicación de en qué han consistido cada uno de estos modelos, tomando como punto de referencia el caso específico de nuestro país, la República Dominicana.
- ¿En qué consistió el modelo sustitutivo de importaciones, cuáles fueron las causas que generaron su derrumbe y cuáles han sido los modelos de desarrollo que le han sucedido?
El modelo sustitutivo de importaciones empezó a implementarse en República Dominicana a partir de la década del 1930 como consecuencia de un idealismo de que si se disminuye el nivel de importaciones de los bienes y servicios que consume la sociedad a cambio de un aumento de la producción y comercialización interna de esos bienes y servicios, la economía crecería y por ende el nivel de vida de los(as) ciudadanos(as) aumentaría.
Pero dicho modelo no surgió como consecuencia directa de una decisión interna de los países latinoamericanos, sino de un plan preconcebido que tenían las grandes potencias como los Estados Unidos para convertirnos en sociedades consumidoras de sus bienes (por ejemplo, lavadoras, televisores, equipos de música, etc.)
Por ejemplo, en el caso específico de la República Dominicana, antes de implementarse el referido modelo, la economía era de origen agrícola lo cuál, hasta cierto punto, nos hacía independientes económicamente de los países desarrollados.
Pero llegó la década del 1930 y se implementa el modelo sustitutivo de importaciones y los campesinos que tenía parcelas de tierras en las zonas rurales empezaron a venderlas y a abandonarlas para trasladarse a la ciudad y con el dinero que adquirían por la venta de sus tierras se compraban algún vehículo de motor o se dedicaban a alguna actividad que les permitiera subsistir a la vez que se instalaban en sectores marginados de las ciudades. Pero lo que queremos resaltar aquí es que los campesinos empiezan a adquirir una serie de electrodomésticos y equipos, ya citados anteriormente, que no tenían en la zona rural.
Dichos electrodomésticos y equipos eran importados desde las grandes potencias como los Estados Unidos lo cuál convirtió a los países latinoamericanos en sociedades consumidoras de bienes provenientes, precisamente, de esas grandes potencias.
Dicho modelo de desarrollo fracasó debido a que ponía énfasis en el aspecto económico y el número de familias pobres aumentó considerablemente, como es el caso de los grandes cordones de pobreza que se pueden observar en algunos países latinoamericanos.
En realidad, el modelo sustitutivo de importaciones consistía en una sustitución de las importaciones de bienes y servicios por la producción de esos bienes y servicios en el interior de los países que implementen dicha estrategia. Pero más que el comercio interno, a nuestro entender, lo que el modelo sustitutivo de importaciones trajo fue una subordinación económica de los países subdesarrollados a las grandes economías como los Estados Unidos, etc.
Como consecuencia del fracaso de este modelo de desarrollo se implementó, en algunos países latinoamericanos, otro modelo de desarrollo. Esto es, el modelo de servicios.
El modelo de servicios ha tenido mucho éxito en algunos países latinoamericanos debido a que estos brindan servicios tanto a nivel interno como a nivel externo. Por ejemplo, en la República Dominicana, el turismo es uno de los pilares fundamentales de la economía puesto que, gracias a nuestros maravillosos complejos turísticos, a nuestras bellas playas y a nuestro clima tropical, podemos brindar ese servicio de calidad tanto a nuestros(as) ciudadanos(as) como a los turistas, los cuáles generan divisas que coadyuven a que nuestra economía se mantenga en cierta medida estable.
Cabe destacar que todavía hoy en día este modelo de desarrollo se encuentra presente en algunos países latinoamericanos, aunque con posterioridad se han desarrollado otros modelos como el neoliberal, que es el que veremos a continuación.
El modelo neoliberal propugna porque el Estado tenga una participación mínima en el mercado puesto que, como decía Adam Smith, "el mercado funciona como una mano invisible que promueve el bienestar general" Además, este modelo pone énfasis en la maximización del ingreso.
Dicho modelo ha sido muy cuestionado por los humanistas y sociólogos contemporáneos puesto que el mismo promueve una concentración de los referidos ingresos en un determinado grupo de personas, lo que convierte a la sociedad en una "copa de champagne". Esto es, en la "civilización de la copa de champagne", tal y como nos lo dice Ignacy Sachs en su texto en busca de nuevas estrategias de desarrollo, las riquezas están centralizadas en una minoría de personas que son los dueños(as) de las grandes industrias y empresas y la otra gran mayoría vive en condiciones flagrantes de pobreza. Y todo esto porque este modelo propugna porque el Estado no intervenga en el mercado, entonces, lógicamente, las familias de bajos recursos no estarían protegidas por la legislación lo que provocaría una impresionante concentración de las riquezas en un grupo muy mínimo de personas.
Por esta razón es que recientemente se ha estado debatiendo acerca de la posibilidad de implementar otro modelo de desarrollo, esto es, el modelo de desarrollo humano.
El modelo de desarrollo humano tiene al ser humano como el eje principal de toda la discusión. Este propugna porque se aumente el gasto social en áreas tan importantes como la educación y la salud porque de la única forma que el ser humano puede romper con el círculo de la pobreza es a través de la educación y teniendo un nivel de vida satisfactorio que se refleja, entre otras, a través de una buena salud. Pero para tener buena salud, los seres humanos tienen que tener buena alimentación, etc. lo que conlleva un verdadero gasto social. En fin, en el desarrollo humano, más que preocuparse por el crecimiento económico, lo que realmente importa es el desarrollo del ser humano.
Otro modelo que ha sido implementado en América latina, a raíz de la Conferencia de Río de 1992, es el modelo de desarrollo sustentable ó sostenible. Este modelo de desarrollo pone especial énfasis en la sostenibilidad entre los factores económico, demográfico y ambiental.
El modelo de desarrollo sustentable es un modelo de desarrollo económico y social alternativo, que se basa en satisfacer las necesidades de los hombres y mujeres en armonía con el medio ambiente. De esta manera se garantiza una mejor calidad de vida para las generaciones presentes y futuras. También, con la misma se pretende conseguir una mayor igualdad y un reparto justo de las riquezas.
Es socialmente sostenible porque implica que sea socialmente justo y que los individuos vivan socialmente en paz. La sustentabilidad social exige que el desarrollo económico no produzca catástrofes humanitarias a causa de la marginalidad y la exclusión. Cuando se destruye un sector de la humanidad por ausencia de mecanismos de distribución equitativa de las riquezas, no se está practicando un desarrollo socialmente sostenible.
Es económicamente sostenible porque se sabe distinguir la diferencia entre desarrollo y crecimiento. La diferencia de estos dos conceptos está en que en el crecimiento predomina el cambio cuantitativo de las cifras económicas como el PIB, etc. e implica un incremento de tamaño por acumulación de materiales. El desarrollo, por el contrario, significa expansión de potencialidades, predominando el cambio cualitativo.
Una economía sostenible no puede basarse en un crecimiento cuantitativo sin límites ni puede medirse por la evolución de las ganancias financieras. Lo que interesa en este modelo es el producto de bienes y servicios en el sentido físico y la incidencia que tiene esto en la calidad de vida de los seres humanos, es decir, la economía física. No se hace tanta referencia a la economía real puesto que esta solamente se refiere a la medición monetaria, a lo contable.
Un desarrollo económico per. Cápita implica que la cantidad de bienes y servicios disponibles necesarios crezcan, para que estén al alcance de los que carecen de ellos. Para los que no padecen carencias de necesidades básicas deben procurarse las mejoras de calidad y no de cantidad, sobre todo en cuanto a los bienes durables. En todos los casos, el desarrollo económico sostenible exige que no se sacrifique la calidad de vida de las generaciones del presente ni que se ponga en riesgo la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer su propia calidad de vida.
Es ecológicamente sostenible, es decir, que la tendencia de desarrollo no sea atentatoria contra el tipo de equilibrio dinámico del ecosistema terrestre necesario para la supervivencia de la especie humana.
Para que esto sea posible deben cumplirse estos requisitos esenciales de la sostenibilidad ecológica:
- Las tasas de uso de los recursos renovables – tierra, aire, bosques, peces– , no deben exceder sus respectivas tasas de regeneración.
- Las tasas de uso de los recursos no renovables – combustible fósil, elementos minerales de alta pureza, agua fósil del subsuelo- , no deben exceder la tasa a la que se desarrollan sus sustitutos renovables.
- Las tasas de emisión de agentes contaminantes no deben superar la tasa a la cual los mismos puede ser reciclado por el medio ambiente.
Finalmente, es políticamente sostenible porque implica que la dinámica del sistema social, económico y ecológico no genere tensiones conflictivas acumulativas de descontento, que conviertan en disfuncional, para la sociedad, al sistema político y desemboquen en la inestabilidad política.
- De los modelos de desarrollo implementados en la República Dominicana, ¿cuál es el que más resultados ha dado?
Ya hemos analizado los distintos modelos y estrategias de desarrollo que han sido implementadas en América Latina. Pero, ¿cuál de estos modelos de desarrollo es el que más resultados ha dado en el caso específico de la República Dominicana?
Nosotros creemos que en nuestro país, pese a haberse implementado diversos modelos de desarrollo, el que más resultado ha dado es el modelo neoliberal. O sea, no estamos diciendo que el modelo neoliberal sea el mejor de todos, sino, que la economía dominicana está sostenida por las grandes franquicias internacionales que se instalan en el país. Por ejemplo, está el sector de las zonas francas que se enmarca dentro de lo que es el modelo neoliberal puesto que las empresas que se instalan en las zonas francas son franquicias internacionales que vienen al país, lo cuál refleja que en nuestro país también está presente una apertura a los mercados internacionales. Pero el modelo neoliberal se pone de manifiesto en nuestro país no solo a través de las zonas francas, sino, a través de las grandes cadenas de comida rápida que se encuentran presentes y las grandes tiendas por departamentos que están provocando la salida del mercado de muchas pequeñas empresas locales y familiares lo que, por desgracia, provoca que aumente la desigualdad social y la pobreza.
Nosotros estamos conscientes de que el modelo neoliberal ha contribuido a aumentar la brecha entre ricos y pobres y a aumentar el nivel de pobreza de nuestro país, pero lamentablemente es el que ha estado presente en los últimos años.
También hay que reconocer que hasta cierto punto el modelo de servicios ha estado presente en nuestro país y ha tenido resultados, pero no ha tenido el auge ni ha contribuido a un crecimiento del Producto Interno Bruto en la misma magnitud con que lo ha hecho el modelo neoliberal. Pero no necesariamente un aumento del PIB se relaciona con un aumento de la calidad de vida de nuestros(as) ciudadanos(as).
En fin, en materia económica, el modelo neoliberal es el que más resultados ha dado en la República Dominicana, pero en materia social no ha contribuido más que en aumentar el número de familias pobres de nuestro país.
Sin embargo, tenemos fe en que el modelo de desarrollo humano sería una excelente alternativa para solucionar, o por lo menos controlar, algunos de los dilemas de desigualdad social y pobreza que se encuentran presentes en nuestra sociedad y en algunas sociedades latinoamericanas. Dicho modelo de desarrollo humano debe estar acompañado, a nuestro entender, de una "Tercera Vía". Esto es, más que centrarnos en los conceptos de socialismo y neoliberalismo, lo que debemos hacer es dejar que el mercado produzca los bienes y servicios a la vez que procure la maximización del ingreso, mientras que el Estado debe ocuparse de redistribuir dichas riquezas velando por una mayor equidad en la distribución de las mismas, que es lo que personajes como Bill Clinton y Tony Blair han promovido.
Creemos que si se logra implementar esta estrategia, tal vez logremos tener el nivel de vida que nosotros nos merecemos.
- Reflexiones sobre las expectativas de desarrollo de la República Dominicana.
- ¿Es posible a corto plazo?
Hoy en día, la República Dominicana se encuentra en un estado de subdesarrollo debido en parte a la subordinación económica, política militar y cultural que tiene de los grandes países desarrollados como Estados Unidos, Europa, Japón, etc. Sin embargo, el estado de subdesarrollo en el que nos encontramos se debe también a la propia cultura dominicana.
Recordemos que en la cultura dominicana no existen valores éticos que nos permitan desarrollarnos como país. Esto es, en nosotros no prima una conciencia de lo que implica el desarrollo. Por ejemplo, no nos importa tirar basura a las calles sabiendo que esto repercute impositivamente en el medio ambiente. Pero a la vez, en nuestro país no están ninguno de los cuatro ejes que determinan el desarrollo de un país, como son una fortaleza de la nación que se refleja a través de las débiles, ineficientes e ineficaces instituciones gubernamentales que tenemos y a través de la virulenta corrupción de la que hacen gala algunos de nuestros políticos y funcionarios de Estado. Además, los partidos políticos, en vez de velar por los intereses de la nación, más bien procuran desacreditar, desde la oposición, las obras que realiza el partido de gobierno sin importar si dichas obras son necesarias para la sociedad. Realmente no hay señal más diáfana de que tenemos un Estado débil.
En igual magnitud, en nuestro país no existe una sostenibilidad del proyecto de nación, no tenemos objetivos claros y, lo peor de todo, no existe una redistribución de las riquezas lo que coadyuve a que la brecha entre ricos y pobres se amplíe.
Pero estos ejes determinantes del desarrollo no están presentes en nuestra sociedad no porque en nuestro país exista una barrera que impida que las brisas del desarrollo entren a aliviar los dolores que padecen la gran mayoría de nuestros(as) ciudadanos(as), sino, porque en la ciudadanía no existe un pensamiento social de colectividad ni cooperación social, sino de intereses particulares. En los(as) dominicanos(as) no prima una conciencia de las vicisitudes que conlleva alcanzar el desarrollo, lo que demuestra que en nosotros(as) también ha habido una gran cuota de responsabilidad en el por qué no somos un país desarrollado.
Creemos que alcanzar el desarrollo no será posible en el corto plazo puesto que esto conllevaría un cambio de actitud nacional y que en nosotros(as) prime un sentido de responsabilidad social y de ética nacional, que es lo que tienen la gran mayoría de los ciudadanos(as) de los países desarrollados.
Esto es un cambio que no se producirá de la noche a la mañana, sino, que es cuestión de tiempo y de que en nosotros(as) exista una capacidad de aprendizaje social que nos permita darnos cuenta de que no estamos siendo dirigidos por nosotros(as) mismos(as), sino, por el gran coloso del norte.
Y a nuestro entender, esto implica un largo proceso que no permitirá que en el corto plazo nos desarrollemos.
B) ¿Qué condiciones son necesarias para que la República Dominicana alcance el desarrollo económico y social deseado?
Como dijimos anteriormente, para que en un país haya desarrollo tienen que estar presente cuatro condiciones básicas ya referidas en el acápite anterior. A nuestro entender, para que nuestro país alcance el desarrollo económico y social deseado deben producirse un cambio de actitud generalizada en los dominicanos y dominicanas que permita la incorporación de esos cuatro ejes. Esto es, debe existir un sentido de responsabilidad social en todos(as) nosotros(as).
Pero en igual medida, debemos cambiar el modelo y la estrategia de desarrollo que se encuentra presente en nuestra sociedad, la neoliberal.
En cambio, debemos adoptar el modelo de desarrollo humano sostenible para que exista un desarrollo económico cuyas riquezas sean redistribuidas a toda la sociedad a través del gasto en educación, en salud, en la mejora de los servicios básicos, etc.
Sólo cuando se presenten estas dos condiciones básicas, entre otras más, en nuestro país podrá existir el verdadero desarrollo, esto es, el desarrollo humano sostenible.
Si se produce un cambio de actitud en los ciudadanos(as) de nuestro país e inculcamos una responsabilidad social en toda la sociedad, creemos que sí es posible que dichas condiciones sean creadas.
Sólo es cuestión de tiempo y de trabajo arduo, pero lo podemos lograr.
A continuación introducimos un acápite que nos ayudará a comprender por qué el modelo de desarrollo presente en República Dominicana y en algunos países latinoamericanos es el neoliberal. Esto es, traemos a colación el Acuerdo de Libre Comercio de las Américas.
- Características del Acuerdo de Libre Comercio de las Américas (ALCA).
El ALCA es un acuerdo de libre comercio que pretende la formación de un área de libre comercio entre 34 países de América Latina y el Caribe (Estados activos de la OEA). Para el 2005 este acuerdo estará establecido con el fin de eliminar progresivamente las barreras al comercio e inversión en la región. De esta manera se aspira fomentar el crecimiento económico de las Américas, ofreciendo a las empresas de todo el continente una oportunidad de expansión privilegiada con la reducción de las barreras arancelarias, el establecimiento de reglas más claras y previsibles en materia de comercio, el ofrecimiento de normas de protección a los inversores y facilitación al acceso a nuevos mercados.
Los temas comerciales en discusión entre representantes oficiales de los gobiernos de los 34 países participantes son:
- Acceso a mercados;
- Inversión;
- Servicios;
- Compras del sector público;
- Solución de controversias;
- Agricultura;
- Propiedad intelectual;
- Subsidios,
- Derechos compensatorios;
- Política de competencia.
Los principios de las negociaciones son:
- Los tratados serán congruentes con la normativa de la Organización Mundial del Comercio,
- Todos los países participarán en todas las partes de los acuerdos, o sea, los países no tienen la opción de participar sólo en algunas provisiones de los acuerdos.
- Y finalmente, el acuerdo final se elaborará sobre la base de los acuerdos regionales existentes en la región; tales como la Comunidad Andina y el Mercado Común del Sur (MERCOSUR).
- ¿Cuáles son las distintas posiciones que hay en la República Dominicana sobre el ALCA?
En nuestro país hay varias posturas sobre el ALCA. Existe un convencimiento bastante generalizado. El ALCA se ha convertido en una esperanza que anima a gran parte de la comunidad dominicana. Muchos piensan que nos beneficiaríamos bastante al formar parte de este acuerdo puesto que se estimularía el desarrollo económico de la República. Además, ayudaría a promover otros propósitos como una mejor asignación de los recursos, la introducción de economías de escala, estimulación de la competencia en el interior y fuera del país, entre otras. Sin lugar a dudas, lo que están de acuerdo con el ALCA consideran que sería la salvación del país porque piensan que sólo mediante la concertación y la unión entre las naciones de América Latina y el Caribe es como se puede hacer frente a los retos de un mundo cada vez más globalizado.
Pero existe otro grupo que no ven al ALCA como una forma de integración, sino como un mecanismo que causaría una profundización en el neoliberalismo que existe actualmente y que provocaría un nivel de dependencia y de subordinación al primer mundo aun mayor de la que actualmente tenemos. Los que ven esta otra cara de la moneda se basan en que la crisis económica y social que existe en Latinoamérica, incluyendo a nuestro país, generada por la aplicación diligente de políticas neoliberales. Por tanto, el ALCA no ayudaría en nada a nuestro país porque la misma pretende profundizar en las mismas políticas neoliberales que han generado año tras año un crecimiento insuficiente.
La pequeña minoría que piensa de esta manera visualiza al ALCA como un proyecto norteamericano para crear un Acuerdo de Libre Comercio entre la economía de Estados Unidos, la más poderosa del mundo, y las economías latinoamericanas y caribeñas, que son subdesarrolladas y endeudadas. O sea, un proyecto para que el primer mundo afiance su hegemonía sobre la región latinoamericana.
Nosotros nos circunscribimos en la corriente negativita sobre las repercusiones que tendrá el ALCA en la República Dominicana. Esto así porque está comprobado históricamente que los Tratados de Libre Comercio no contribuyen más que a subordinar a los países subdesarrollados a las grandes potencias mundiales, lo que en nada nos beneficia. Los tratados de libre comercio fungen como las trabas que nos colocan los países desarrollados, en este caso Estados Unidos, para mantener su hegemonía económica, militar, política y hasta cultural en el globo terráqueo.
Nosotros no apoyamos una firma de ese tratado de libre comercio puesto que la experiencia pasada en México y en otros países subdesarrollados, que han firmado acuerdos de libre comercio con Estados Unidos, ha sido horrorosa.
Estamos convencidos de que nuestro país es subdesarrollado lo cuál, indefectiblemente, no permite que nos adentremos en el marco de la globalización con éxito, precisamente, por las trabas que nos ponen nuestros "países amigos".
Una firma de dicho acuerdo sería contribuir significativamente a un aumento de la pobreza de nuestra sociedad por lo cuál no podemos permitir, como sociedad, que nuestros gobernantes tomen decisiones que puedan comprometer el futuro de las generaciones por venir.
Hemos hecho una revisión breve sobre las distintas estrategias y modelos de desarrollo que han sido implementados en América Latina, y muy especialmente en la República Dominicana, lo cuál nos permite llegar a la conclusión de que probablemente el único modelo que por su estrategia puede verdaderamente coadyuvar a la erradicación, o por lo menos disminución, de la pobreza y la desigualdad social con que se vive en República Dominicana y en Latinoamérica es el modelo de desarrollo humano sostenible. Esto así porque pone especial atención al ser humano como centro de estudio y los demás modelos centran toda su atención en el dilema de cómo hacer que la economía crezca y cómo preservar el medio ambiente para que las generaciones por venir tengan derecho a disfrutar de la misma calidad de vida con que hemos vivido nosotros(as).
También hemos llegado a la conclusión de que para que en nuestro país haya desarrollo, en primer lugar, debe producirse un cambio de actitud nacional para que en nosotros(as) exista un espíritu de responsabilidad social que nos permita mirar los intereses de la sociedad más que los intereses individuales. Lógicamente, este cambio será cuestión de tiempo y de un proceso de concientización nacional que tal vez, en el largo plazo, permita que logremos pasar a formar parte de los países del primer mundo.
En otro aspecto, nosotros no estamos de acuerdo con la firma del Acuerdo de Libre Comercio de las Américas puesto que ello, supuestamente, dará alivio económico a nuestro país, pero aumentará la pobreza y desigualdad social, por lo cuál no podemos permitir que los inquilinos de la casa de gobierno actúen irresponsablemente con respecto al futuro de la sociedad.
El desarrollo se logra a través de un proceso de integración de todos los sectores de la sociedad en un esfuerzo unánime por alcanzar dicho estado, y cuando en nuestra país se produzcan esos cambios e introduzcamos los cuatro ejes determinantes del desarrollo, entonces ese glorioso día podremos decir que por fin somos un país desarrollado y por ende disfrutamos de un nivel de vida satisfactorio.
Los modelos de desarrollo implementados en América Latina, y muy especialmente en la República Dominicana, son el modelo sustitutivo de importaciones cuya estrategia consistió en una sustitución de las importaciones de bienes por la producción interna de dichos bienes y fracasó porque ponía énfasis en el aspecto económico más que en el factor humano, lo que provocó que la brecha entre ricos y pobres se ampliara. Otro modelo implementado fue el modelo de servicios que todavía hoy se encuentra presente en algunos países de Latinoamérica. Seguido de este modelo está el modelo neoliberal que propugna por una intervención mínima del Estado en el mercado y representa una vuelta al Liberalismo de la escuela económica clásica. Luego sigue el modelo de desarrollo sostenible que consiste en mantener un equilibrio entre los factores económico, demográfico y ecológico y, por último, está el modelo de desarrollo humano que tiene al ser humano como centro de toda la discusión sobre el desarrollo.
Como consecuencia de la implementación del modelo neoliberal en la República Dominicana, que es el que actualmente está vigente, es que dicho país está a punto de entrar a formar parte del ALCA, lo cuál traerá más pobreza puesto que dicho acuerdo es una traba más que nos ponen los países como Estados Unidos para mantener su hegemonía económica, militar, política y hasta cultural en los países subdesarrollados.
Datos del autor
Pío Elías Díaz Liranzo.
Estudios realizados: Estudios primarios y secundarios, English as a foreign language, curso técnico de informática (Word, Excel, Access, Internet, Power Point). Actualmente cursando el octavo trimestre de Administración de Empresas en el Instituto Tecnológico de Santo Domingo (INTEC).