Introducción
El siguiente trabajo tiene como objetivo principal estudiar, analizar y valorar la Importancia de Conocer sobre los Objetivos del Milenio en el Medio Ambiente.
Estos objetivos se crearon a través de la Declaración del Milenio, principal producto de la Cumbre del milenio, en la cual se estableció un conjunto de objetivos que sentaron las bases de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), a saber:
1. Erradicar la pobreza extrema y el hambre.
2. Lograr la enseñanza primaria universal.
3. Promover la igualdad de género y el empoderamiento de la mujer.
4. Reducir la mortalidad de los niños menores de 5 años.
5. Mejorar la salud materna.
6. Combatir el VIH/SIDA, el paludismo y otras enfermedades.
7. Garantizar la sostenibilidad del medio ambiente.
8. Fomentar una alianza mundial para el desarrollo.
En este sentido, para el desarrollo del objetivo 7 se trazaron una serie de metas e indicadores que tenían que cumplir los países firmantes del acuerdo.
Cada Objetivo se divide en una serie de metas, un total de 18, cuantificables mediante 48 indicadores concretos. Por primera vez, la agenda internacional del desarrollo pone una fecha para la consecución de acuerdos concretos y medibles.
En este trabajo realizado a partir del tema sobre la Importancia del Objetivo de Desarrollo del Milenio No. 7: Garantizar la sostenibilidad del Medio Ambiente. Es por tanto, que metodológicamente esta investigación se realiza a partir del método bibliográfico, analizando las diversas informaciones obtenidas. El cual contiene una hoja de índice, introducción, propósitos de la investigación, objetivos generales y específicos, desarrollo, conclusión y bibliografía.
Utilizamos este método para profundizar en la teoría de varios autores, establecidos en el informe del año 2010, donde hemos recopilado informaciones previas dadas por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), dirigidas para la obtener conocimientos sobre la Importancia de los Objetivos del Milenio en el aspecto de Medio Ambiente.
Propósitos de la Investigación.
Cada uno de nosotros requiere para desenvolvernos en nuestra profesión, adquirir conocimientos los cuales nos ofrezcan herramientas para realizar determinadas labor. Es por tanto que esta investigación de carácter documental, por lo cual utilizamos varios libros citados en la bibliografía.
Objetivo General.
Valorar la Importancia de Conocer sobre los Objetivos del Milenio en el Medio Ambiente.
Objetivos Específicos:
Definir los Conceptos sobre los Objetivos del Milenio en el Medio Ambiente.
Identificar como esta fundamentada la Ética de la ciencia.
Establecer cuales son los desafíos principales de la Etica de la Ciencia
CAPITULO I
Los objetivos del milenio en el aspecto de medio ambiente
1.1.- Objetivos de Desarrollo del Milenio Informe 2010.
Prólogo.
La Declaración del Milenio en 2000 representó un hito en cuanto a cooperación internacional, pues inspiró objetivos de desarrollo que han mejorado las vidas de cientos de millones de personas en todo el mundo. Diez años después, los líderes del mundo se reunirán otra vez en la sede de las Naciones Unidas en Nueva York para analizar los avances, evaluar los obstáculos y las brechas existentes, y acordar estrategias y acciones concretas para alcanzar los ocho Objetivos de Desarrollo del Milenio para 2015.
Los Objetivos representan las necesidades humanas y los derechos básicos que todos los individuos del planeta deberían poder disfrutar: ausencia de hambre y pobreza extrema; educación de buena calidad, empleo productivo y decente, buena salud y vivienda; el derecho de las mujeres a dar a luz sin correr peligro de muerte; y un mundo en el que la sostenibilidad del medio ambiente sea una prioridad, y en el que tanto mujeres como hombres vivan en igualdad. Los líderes mundiales también han prometido forjar una alianza de alcance mundial en pos del desarrollo, para así lograr esos objetivos universales. En este informe se muestra cuántos avances se han logrado. Pero quizás lo más importante sea que se muestra que los Objetivos son alcanzables cuando las estrategias, políticas y programas de desarrollo son de interés nacional y tienen el apoyo internacional de agencias para el desarrollo. Al mismo tiempo, resulta claro que las mejoras en las vidas de los más pobres han sido inaceptablemente lentas, y que algunas de las ganancias que tanto ha costado obtener, están siendo erosionadas por las crisis medioambiental, económica y alimenticia.
El mundo posee los recursos y los conocimientos necesarios para asegurar que hasta los países más pobres, o incluso aquellos que se enfrentan a grandes obstáculos como enfermedades, aislamiento geográfico o conflictos civiles, puedan tener a su alcance los ODM. El logro de estos objetivos requiere la participación de todos. No alcanzarlos podría multiplicar el riesgo mundial de inestabilidad, enfermedades epidémicas o degradación del medio ambiente. Sin embargo, alcanzar los objetivos nos situaría en dirección a un mundo más estable, más justo y más seguro. Miles de millones de personas confían en que la comunidad internacional haga realidad la gran visión representada por la Declaración del Milenio.
"Cumplamos esa promesa".
Ban Ki-moon. Secretario General, Naciones Unidas
1.2.-Cumpliendo la promesa.
A cuatro años de la fecha establecida para el alcance de los Objetivos de Desarrollo del Milenio, los dirigentes mundiales se reunirán de nuevo en la sede de las Naciones Unidas para llevar a cavo una evaluación exhaustiva del progreso conseguido, y diseñar todos juntos una estrategia para acelerar el cumplimiento de los ODM de aquí al 2015. Muchos países están progresando, incluidos algunos de los más pobres, demostrando así que el establecimiento de unos claros objetivos colectivos para luchar contra la pobreza, efectivamente da resultados. Por cada vida salvada gracias al establecimiento de un marco cuantitativo con plazos determinados de cumplimiento, se puede decir que los ODM han valido la pena. Sin embargo, las promesas incumplidas, los recursos inadecuados, la irresponsabilidad y la insuficiente dedicación a la consecución de un desarrollo sostenible han constituido déficits en muchas áreas, muchos de ellos incrementados por la crisis económica y financiera mundial. No obstante, los datos y los análisis que se presentan en este informe proporcionan una clara evidencia de que las intervenciones específicas, si se apoyan con una base financiera y un compromiso político adecuados, producen un rápido progreso en muchos sectores. Desgraciadamente, los individuos más pobres, los que no tienen educación o los que viven en zonas remotas, todavía no han recibido las condiciones necesarias para poder mejorar sus vidas.
1.3.-Reducción de las diferencias.
A pesar de que se han conseguido importantes avances, estos son irregulares y, si no se hace un esfuerzo importante, muchos de los ODM probablemente no se cumplirán en muchas regiones. Los nuevos y no tan nuevos desafíos amenazan con ralentizar el progreso en ciertos sectores, o incluso eliminar algunos de los avances obtenidos hasta el momento. Los grupos más vulnerables de población, aquellos que han contribuido los que menos al problema del cambio climático, son quienes están sufriendo más sus efectos. El riesgo de muerte,minusvalía y pérdidas económicas debidas a desastres naturales está aumentando a nivel mundial y se concentra en los países más pobres. Los conflictos armados siguen siendo una de las principales amenazas para la seguridad humana y para el avance hacia la consecución de los ODM. Gran cantidad de refugiados permanecen en campos con pocas oportunidades de mejorar sus vidas. En 2009, 42 millones de personas habían sido desplazadas por conflictos o persecución, entre ellos, cuatro quintos estaban en países en vías de desarrollo. El número de personas subnutridas continúa aumentando, mientras que el lento avance hacia la reducción del hambre en el mundo se ha detenido o incluso revertido en ciertas regiones entre 2000-2002 y 2005-2007. Aproximadamente uno de cada cuatro niños menores de 5 años padecen de insuficiencia ponderal, principalmente a causa de falta de alimentos, mala calidad de la comida, servicios de saneamiento, agua y salud inadecuados, y condiciones precarias de higiene y alimentación. Se estima que 1,4 mil millones de personas todavía vivían en condiciones de pobreza extrema en 2005. Además, los efectos de la crisis financiera global probablemente persistirán: las tasas de pobreza serán algo mayores en 2015 o incluso más en 2020, de lo que hubiesen sido si la crisis no se hubiese producido. La igualdad de género y el empoderamiento de la mujer son ODM claves, y condiciones esenciales para superar la pobreza, el hambre y las enfermedades. Sin embargo, los avances a este respecto han sido lentos en todos los aspectos: desde la educación hasta el poder de decisión política.
Para conseguir los ODM será necesario centrar la atención en los sectores más vulnerables. Hay que establecer políticas
adecuadas para eliminar las desigualdades existentes entre ricos y pobres, entre los habitantes de zonas rurales y urbanas y entre
aquellos que sufren discriminación por sexo, edad, minusvalía o grupo étnico.
• En todas las regiones en vías de desarrollo, los niños de zonas rurales tienen más posibilidades de sufrir insuficiencia ponderal que aquellos de zonas urbanas. En América Latina y el Caribe, así como en algunas partes de Asia, estas
diferencias han aumentado entre 1990 y 2008.
• Las diferencias entre ricos y pobres siguen siendo enormes. En Asia meridional, el 60 por ciento de los niños procedentes de las zonas más pobres pesan menos de lo que deberían; mientras que en los hogares más ricos, esta cifra asciende solamente al 25 por ciento.
• En las regiones en vías de desarrollo, las niñas nacidas en el 20% de hogares más pobres tienen 3,5 veces más posibilidades de permanecer sin escolarizar que las niñas de los hogares más ricos, y 4 veces más probabilidades que los niños de los hogares más ricos.
• Incluso en los países en los que casi se ha alcanzado la educación primaria universal, la mayoría de los niños excluidos son aquellos con minusvalías.
• La salud materna es uno de los temas en los que las diferencias entre ricos y pobres son más evidentes. Mientras que en los países desarrollados casi todos los partos son atendidos por médicos cualificados, en los países en desarrollo menos de la mitad de las mujeres reciben estos servicios al dar a luz.
• Las diferencias son especialmente notables también en lo que respecta al acceso a cuidados sanitarios durante el embarazo: en los hogares más ricos, las mujeres tienen 1,7 más posibilidades de ser examinadas por lo menos una vez antes de dar a luz por personal sanitario cualificado, que las mujeres de los hogares más pobres.
• La falta de educación es uno de los principales obstáculos para la mejora de las condiciones de vida. Por ejemplo, la pobreza y las desigualdades en el acceso a la educación perpetúan los altos porcentajes de embarazos adolescentes, poniendo en peligro la salud de las jóvenes y limitando sus oportunidades de prosperidad social y económica.
• El uso de métodos anticonceptivos es cuatro veces mayor consecución de muchos de los ODM. Las diferencias entre las zonas rurales y urbanas son enormes: solo un 40 por ciento de la población rural tiene acceso. Mientras un 77 por ciento de la población que vive en el 20 por ciento de los hogares más ricos tiene acceso a instalaciones de saneamiento mejoradas, esta proporción es sólo del 16 por ciento en los hogares más pobres.
1.4.-Mirando hacia el 2015.
La Declaración del Milenio es la promesa más importante que jamás se ha hecho a las personas más vulnerables del mundo. Las responsabilidades que se derivan de la Declaración han generado un nivel sin precedentes de compromiso y colaboración para mejorar las vidas de miles de millones de personas, y para crear un ambiente que contribuya a la paz y la seguridad mundial. Los Objetivos de Desarrollo del Milenio todavía se pueden conseguir. La pregunta clave hoy en día es cómo acelerar el ritmo de progreso que hemos presenciado durante la última década. La experiencia de estos últimos diez años ofrece suficientes ejemplos de estrategias eficaces, y proporciona las herramientas necesarias para conseguir los ODM para el 2015. La Cumbre sobre los Objetivos del Milenio que tendrá lugar en Septiembre será la oportunidad perfecta para que los líderes mundiales puedan traducir
2.- El Objetivo 7- "Garantizar la sostenibilidad del medio ambiente".
La tasa de deforestación muestra signos de remisión, pero sigue siendo alarmantemente alta. Su meta es incorporar los principios del desarrollo sostenible en las políticas y los programas nacionales e invertir la pérdida de recursos del medio ambiente. La deforestación global, principalmente la conversión de bosques tropicales en tierras para cultivos, está ralentizándose, pero continúa a un ritmo muy alto en muchos países. Durante la década pasada, se eliminaron aproximadamente 13 millones de hectáreas de bosques en todo el mundo, que fueron destinadas a otros usos o se perdieron año tras año por causas naturales, mientras que en la década de los 90 la pérdida fue de 16 millones de hectáreas anuales. Los ambiciosos programas de forestación puestos en marcha en varios países, combinados con la expansión natural de los bosques en algunas regiones, han agregado anualmente más de 7 millones de hectáreas de nuevos bosques. En consecuencia, la pérdida neta de bosques en el período 2000-2010 se redujo a 5,2 millones de hectáreas por año, una pérdida menor que los 8,3 millones de hectáreas anuales que se perdieron en 1990-2000.
Sudamérica y África sufrieron la mayor pérdida neta de bosques en el período 2000-2010, algo menos de 4 millones y 3,4 millones de hectáreas por año, respectivamente. En las regiones desarrolladas, en el año 2000 Australia sufrió una pérdida muy grande, debida en parte a una intensa sequía y a incendios forestales. Asia, por el contrario, durante la década pasada registró una ganancia neta de unos 2,2 millones de hectáreas anuales gracias principalmente a los programas de forestación de gran escala llevados adelante en China, India y Vietnam. En total, durante los últimos 5 años estos tres países han expandido sus áreas boscosas en casi 4 millones de hectáreas anuales. Sin embargo, la rápida conversión de bosques en tierras para otros usos continúa en muchos otros países de la región.
En 2007 las emisiones globales de dióxido de carbono (CO2) volvieron a aumentar, llegando a los 30 mil millones de toneladas métricas, lo cual equivale a un crecimiento del 3,2% respecto al año anterior, y a un incremento del 35% respecto al nivel de 1990. Las emisiones más altas per cápita siguen produciéndose en las regiones desarrolladas; unas 12 toneladas métricas de CO2 por persona y por año en 2007. En las regiones en vías de desarrollo ese valor fue de 3 toneladas métricas por persona, mientras que en África subsahariana se registró el valor regional más bajo: 0,9 toneladas métricas. Desde 1990 las emisiones por unidad de producción económica cayeron más del 26% en las regiones desarrolladas, y un 11% en las regiones en vías de desarrollo.
Se espera que las cifras de 2008 muestren un leve cambio en esta tendencia: según la edición 2009 de "World Energy Outlook", publicado por la Agencia Internacional de Energía, se esperaba que en 2008 la tasa de crecimiento de las emisiones globales de CO2 hubiera disminuido como consecuencia de la crisis económica global y que las emisiones globales podrían haber caído entre 2008 y 2009. Pero las mismas estimaciones también sugieren que esa disminución durará poco: después de la recuperación económica, esta agencia predice que las emisiones globales retomarán su crecimiento y que, por "referencia", se calcula que para el 2020 superarán en un 65% los niveles de 1990. Tal crecimiento es insostenible e incrementaría.
2.1.-El éxito sin precedentes del Protocolo de Montreal demuestra que una acción concluyente sobre cambio climático está a nuestro alcance.
Consumo de todas las sustancias que destruyen la capa de ozono ("ODS"), 1986-2008 (miles de toneladas métricas) y reaprovisionamiento del Fondo Multilateral del Protocolo de Montreal, 1991-2011 (Millones de dólares de EEUU) A 16 de septiembre de 2009, 196 participantes habían ya firmado el Protocolo de Montreal, lo cual lo convirtió en el primer tratado de la historia que logró ratificación universal. Ahora todos los gobiernos del mundo están legalmente obligados a dejar de utilizar las sustancias que destruyen la capa de ozono ("ODS") según el cronograma definido en el Protocolo. Este año (2010) marca el comienzo de un mundo virtualmente libre de los ODS más usados, lo cual incluye los clorofluorocarbonos y los halones.
A través del proceso seguido, los países en vías de desarrollo han demostrado que, con la asistencia debida, tienen la voluntad y la capacidad de participar plenamente en el esfuerzo global de proteger el medio ambiente. De hecho, con el apoyo del Fondo Multilateral del Protocolo de Montreal, muchos países en vías de desarrollo han superado las metas de reducción del uso de ODS. Entre 1986 y 2008, el consumo global de ODS se redujo en un 98%. Y de 1990 a 2010, las medidas de control del Protocolo de Montreal sobre producción y consumo de tales sustancias habrán reducido las emisiones de gases de efecto invernadero en un total de 135 gigatoneladas de CO2. Esto es equivalente a 11 gigatoneladas al año, cuatro a cinco veces la reducción establecida en el primer período de compromiso del Protocolo de Kioto (acuerdo vinculado a la Convención de la ONU sobre Cambio Climático). Las partes del Protocolo de Montreal están analizando ahora las formas de usar el vigoroso régimen de puesta en práctica del tratado para lograr beneficios de cambio climático aún mayores. Sin la acción gestada por el Protocolo de Montreal y la Convención de Viena, los niveles atmosféricos de las sustancias que destruyen la capa de ozono podrían multiplicarse por 10 para el 2050. La exposición resultante a la radiación ultravioleta del sol produciría hasta 20 millones de casos más de cáncer de piel y 130 millones de casos más de cataratas; también produciría daños en el sistema inmunológico humano, en la fauna silvestre y en la agricultura. Para la mayoría de la población, el tiempo que insumiría sufrir una quemadura por sol disminuiría enormemente, debido al incremento del 500% en la radiación ultravioleta, que daña al ADN.
2.2.-El mundo no ha alcanzado la meta de 2010 de conservación de la biodiversidad, con posibles consecuencias muy graves.
Su meta es Reducir la pérdida de biodiversidad, alcanzando, para el año 2010, una reducción significativa de la tasa de pérdida. Si bien se han logrado algunos éxitos en la conservación de la biodiversidad, y si bien la situación podría ser peor sin la meta de 2010, la pérdida de biodiversidad continúa implacablemente. Se sabe que hay 17.000 especies de plantas y animales en peligro de extinción. Según las tendencias actuales, la desaparición de especies continuará durante el presente siglo, con un mayor riesgo de producirse cambios profundos en los ecosistemas y la consiguiente erosión de los beneficios para la sociedad. A pesar del aumento de las inversiones en planificación y medidas de conservación, los principales causantes de la pérdida de biodiversidad (alto consumo, pérdida de hábitat, especies invasivas, contaminación y cambio climático) aún no han sido enfrentados con el rigor necesario. La biodiversidad es vitalmente importante para el bienestar humano, porque sostiene una amplia gama de ecosistemas de los cuales depende la vida. Miles de millones de personas, incluyendo muchas de las más pobres, necesitan directamente de diversas especies de plantas y animales para su sustento y, a menudo, para su propia supervivencia. La irreparable pérdida de biodiversidad también obstaculizará los esfuerzos para satisfacer otros ODM, especialmente los relacionados con pobreza, hambre y salud, pues aumentará la vulnerabilidad de quienes tienen menos recursos y reducirá sus opciones de desarrollo.
2.2.1.-Los hábitats de las especies en peligro no están siendo adecuadamente protegidos.
Aunque casi el 12% de las tierras del planeta y casi el 1% de los océanos estén protegidos, otras áreas cruciales para la biodiversidad del mundo no están todavía adecuadamente protegidas. En 2009 sólo la mitad de las 821 ecorregiones terrestres del planeta (grandes áreas con combinaciones características de hábitats, especies, suelos y paisajes) tenían más del 10% de sus áreas protegidas. Según la Convención sobre Diversidad Biológica, un décimo de las áreas de todas esas ecorregiones debería haber estado bajo protección en el 2010. Sí que se han logrado avances en áreas clave para la biodiversidad, pero no con la suficiente rapidez. En 2007, el 35% de los 561 sitios de Alianza para Extinción Cero y el 26% de las 10.993 Áreas Importantes para Aves estaban completamente protegidas, lo cual es un incremento significativo del 25% y 19%, respectivamente, respecto a las cifras de 1990. Los sitios de la Alianza para Extinción Cero albergan más del 95% de la población mundial de una especie "en peligro crítico" o "en peligro", según la definición de la Lista roja de la Unión Internacional para la Conservación de especies amenazadas. Las Áreas Importantes para Aves son sitios cruciales para la conservación de las aves del mundo. La protección de todas esas áreas contribuiría significativamente a la meta de la Convención sobre Diversidad Biológica, para salvaguardar áreas de importancia particular. Sin embargo, en la actualidad más de los dos tercios de todos esos sitios están desprotegidos o sólo protegidos de forma parcial. Además, si bien ciertas áreas están oficialmente "protegidas", eso no significa que estén administradas adecuadamente o que la cobertura provista sea suficiente para conservar eficazmente hábitats y especies cruciales.
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