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Análisis interrelacionados.

Enviado por Pedro Quiroux


     

    Los conceptos de clase y lucha de clases según Edward Thompson, y el concepto de clase propuesto por Juan Villarreal. Tentativa de explicación de los obreros industriales en la estructura social argentina antes de la dictadura militar, utilizando la categoría de experiencia.

    "…Por clase, entiendo un fenómeno histórico que unifica una serie de sucesos dispares y aparentemente desconectados, tanto por lo que se refiere a la materia prima de la experiencia, como a la conciencia. Y subrayo que se trata de un fenómeno histórico. No veo la clase como una <estructura>, ni siquiera como una <categoría>, sino como algo que tiene lugar de hecho (y se puede demostrar que ha ocurrido) en las relaciones humanas…" (Thompson, E.P., 1977: XIII)

    De esta manera comienza Thompson su explicación de clase, subrayando la categoría histórica, ya que, para él, la experiencia es fundamental para la constitución histórica de la clase. Las surgen sino en la relación de hombres, como producto de la conciencia de clase que surge en un grupo de individuos, que viven experiencias similares, tienen iguales intereses, y se enfrentan con otros mismos grupos antagónicos. Según Thompson, la conciencia de clase es la forma en que se expresan estas experiencias en términos culturales: encarnadas en tradiciones, sistemas de valores, ideas, formas institucionales. Y es en el proceso de lucha de clases donde los individuos viven experiencias similares, enfrentados a otros sectores. Así, en la lucha social, surgen las conciencias de clases y las clases mismas.

    "…si observamos a esos hombres a lo largo de un período suficiente de cambio social, observaremos pautas en sus relaciones, sus ideas y sus instituciones. La clase la definen los hombres mientras viven su propia historia y, al fin y al cabo, esta es su única definición…" (Thompson, E.P., 1977: XV)

    Por su parte, Villarreal recupera el concepto de clase de Thompson asociado a la tradición, aunque lo extiende más, al relacionar el surgimiento de las clases con la historia particular de cada país: según él, las situaciones históricas de cada país determinará el surgimiento de las clases, así como sus peculiaridades. Nuevamente el factor de la lucha de clases y la experiencia que de ella resultan son determinantes para la condición de las clases.

    "…Una clase históricamente situada se gesta como tal a través de un intrincado proceso –que responde siempre a peculiaridades espaciales- de desarrollo económico, de configuración de determinadas relaciones de poder y de recuperación de tradiciones de lucha, organización y conciencia…" (Villarreal, J.: 1985: 224)

    Así, las clases sociales se conforman a través de su participación en las estructuras de la sociedad. Se definen según su participación y lugar en los procesos económicos, será de éstos que surgirá la experiencia que determinará a las clases sociales. Siguiendo estos conceptos, se puede deslumbrar en la sociedad argentina previa al golpe de estado militar de 1976 sectores sociales –clases- definidas: el sector industrial, dentro de las clases populares trabajadoras exentas de los medios de producción, constituían un grupo homogéneo, compacto, que históricamente se había ido formando. Tenían una identidad política uniforme, relacionada con el peronismo, que las había unificado y aglomerado con una serie de políticas del tipo ‘populistas’, logrando una gran coerción y por lo tanto una tradición de conciencia de clase. Dentro de este sector trabajador, los obreros tenían la mayor preponderancia, por ser el sector mejor constituido. Eran clases políticamente activo, cuya participación se clarificaba a través del accionar de los sindicatos. Eran estos sindicatos relacionados al peronismo, los que habían accionado la característica política de estos grupos, al utilizarlos como factor decisivo mediante la movilización.

    "…El desarrollo en la Argentina de los obreros industriales como clase se fue gestando molecularmente, como proceso de constitución en el interior de un movimiento político que articulaba a industriales orientados al mercado interno, sectores medios pauperizados, intelectuales nacionalistas y grupos militares interesados en un industrialismo que parecía fortalecer la defensa nacional. Existió un dirigente "carismático" como Perón, hubo prácticas de gobierno y una elaboración ideológica adaptativa que recogía fragmentos de concepciones diversas…" (Villarreal, J., 1985: 225)

    Este ascenso del peronismo, con la implicancia del ascenso en la puja política de los obreros industriales, se cernía dentro de un contexto mundial de desarrollo del llamado ‘Estado de bienestar’, caracterizado por un desarrollo industrial interno, con políticas proteccionistas y populistas que devenían en un marcado aumento del bienestar de la población. Será con el advenimiento del liberalismo, que las fuerzas armadas tomarán el poder para a través de políticas económicas y represivas tendrán el objetivo de reestructurar la estructura social, para romper con un frente popular unificado y poderoso, y lograr la homogeneización de las clases financieras, industriales (dirigentes y dueños, no trabajadores) y comerciales, que se encontraban a mitad de la década de 1970 fragmentadas, por poseer intereses heterogéneos que no podían traducir en la dominación política.

     

    Análisis de documentación proveniente de oficinas de la burocracia estatal: reglamentos, comunicados, informes ministeriales, comunicaciones. Relación entre ellos y la caracterización de Max Weber del tipo de dominación legal racional y el lugar que ocupa en el Estado moderno la organización burocrática.

    Según Max Weber, el Estado es la forma política de dominación de la sociedad, entendiendo el término ‘dominación’ como la probabilidad de encontrar obediencia a un poder.

    "…Estado es aquella comunidad humana que, dentro de un determinado territorio (…), reclama (con éxito) para sí el monopolio de la violencia física legítima, (…) es una relación de hombres sobre hombres, que se sostiene por medio de la violencia legítima…" (Weber, M., 1972: 83 – 84)

    Como relación social de hombres, el Estado para subsistir necesita ser acatado, por lo que surgen tres tipos de fundamentos de legitimidad de dominación (tipos ideales de dominación): la dominación tradicional, la dominación carismática y la dominación legal-racional. Estas pueden existir conjuntamente en una sociedad, incluso es raro encontrar a alguna sola. La primera se basa en la costumbre, consagrada por su inmemorial validez. Es ejemplo de éste tipo la dominación llevada por los antiguos patriarcas, o por los señores de la época feudal. En la dominación carismática, aparece un líder, que por poseer ciertas cualidades personales (carisma) logra la sumisión de un sector, que se entrega confiado a sus disposiciones. La autoridad se funda en la creencia de la autenticidad de ese líder, y éste aparece como caudillo, profeta, etc. Por último, la dominación legal racional, es aquella en la que la legitimidad se basa en la ‘legalidad’,

    "…en la creencia en la validez de preceptos legales y en la competencia objetiva fundada sobre normas racionalmente creadas, es decir, en la orientación hacia la obediencia a las obligaciones legalmente establecidas…" (Weber, M., 1972: 85)

    Por otra parte, la dominación no es llevada a cabo solamente por la persona que se encuentra en la cumbre jerárquica de la sociedad, sino que esta persona se vale de un cuadro administrativo que organiza la dominación. Mientras que en los dos primeros tipos de dominación mencionados el cuadro administrativo responde directamente al líder, siendo formado por éste entre personas de su confianza y súbditos, y quedando así al poder en manos del líder, quien esta íntimamente ligado al cuadro administrativo y por lo tanto a la dominación total; en el tipo de dominación legal racional, el cuadro administrativo, bajo la forma de burocracia al igual que en los otros casos, adquiere un significado superlativo. Aquí, los miembros de la burocracia son totalmente independientes al soberano, y son elegidos basándose en sus saberes, en sus méritos, mediante concursos competitivos; los cargos no son heredables, no son propiedad del titular; existiendo y sobreviviendo incluso ante la sucesión de distintos soberanos con distintas ideas políticas (por ejemplo, en una dictadura funciona la misma burocracia que estaba vigente durante la democracia, siendo esto lo que ocurrió durante el último golpe militar argentino del año 1976). La burocracia, por medio de leyes, transmite normas a la sociedad, legalizando así la dominación, y logra de esta forma la impersonalización de estas normas, obteniendo la normalización de cierto tipo de comportamientos (se observa que el poder no sólo reprime sino que produce). A éstas leyes se somete incluso la autoridad misma, por lo que se obedece al derecho y no simplemente a las prerrogativas de una persona, que es lo que ocurre en los otros dos tipos ideales de dominación. Las actividades de los administradores pertenecientes a la burocracia están delimitadas y definidas, hay niveles de autoridad y jerarquía, hay énfasis en la transmisión de las órdenes por escrito: se cumplen los deberes siguiendo la norma. Éste tipo de dominación es la que funciona en nuestro Estado actual, por lo que la burocracia obtiene un papel muy importante, en la impersonalización de la dominación: todos respondemos a las leyes, actuamos ‘normalmente’, y no reconocemos el poder sino en la indefinida presencia del Estado. Existe una estructura jerárquica que respetar, que se transmite, y que consigue la dominación a otro nivel independientemente de la coacción física. En los documentos del TP N° 5 se pueden ver claramente ejemplos del accionar del Estado para normalizar comportamientos, regulando el comportamiento de las personas, dominando sin tener la necesidad de recurrir a la violencia física, sino simplemente a partir del consenso y la aceptación social que generan las disposiciones que emite su cuadro administrativo, esto es, el poder productivo, no solamente represivo:

    "…QUEDO PROHIBIDA LA DISTRIBUCIÓN, VENTA Y CIRCULACIÓN DE UN LIBRO En todo el territorio nacional quedó prohibida la distribución, venta y circulación del libro "CUENTOS PARA CHICOS TRAVIESOS" (…) sus temas resultan nocivos (…) (Decreto N° 1831/77)…" (TP N° 5: s/d)

    "…Comunicación remitida a los interventores de los canales de televisión, firmada por el Comité Federal de Radiodifusión en el mes de agosto de 1977: (…)Será considerado pernicioso y por lo tanto prohibido para la televisión argentina, el material que incluya (…) algún deterioro en la imagen de los padres; justifique la rebeldía; (…) desvirtúe el sentido del matrimonio en la relación sexual; presente el divorcio como solución. En todos los casos mencionados, deberán conducir a un desenlace positivo que induzca a la comprensión e integración del grupo familiar o social (…), para evitar las incidencias negativas en los niños, (…) ofrezca ejemplos de vida familiar totalmente ajenos a nuestra sociedad, (…) que contenga escenas de amor, de danzas, diálogos o fondos estéticos que no encuadren dentro de un marco de decencia o que connoten lascivia(…); que proponga estilos de vida sexual desacordes con nuestra concepción comunitaria…"(TP N° 5: s/d)

    "…documento de la Secretaría de Prensa y Difusión de la presidencia de la Nación firmado por el capitán de navío Alberto P. Corti: "1. Impulsar la restitución de los valores fundamentales que contribuyen a la integridad social: orden, trabajo, jerarquía, responsabilidad, identidad nacional, honestidad en el contexto de la moral cristiana (…) 7. Actuar firmemente contra el vicio en todas sus manifestaciones…" (TP N° 5: s/d)

    "…Resolución N° 538 (…) entre los objetivos Básicos a alcanzar se encuentran la vigencia de los valore de la moral cristiana, de la tradición nacional y de la dignidad del ser argentino y la conformación de un sistema educativo acorde con las necesidades del país (…) para el cumplimiento de esa alta misión le cabe al Ministerio de Cultura y Educación una responsabilidad de especial significación.(…) 1° – El folleto titulado "Subversión en el ámbito educativo (Conozcamos a nuestro enemigo)" se distribuirá en todos los establecimientos educacionales (…) JUAN JOSE CATALAN Ministro de Cultura y Educación (…) La subversión es toda acción clandestina o abierta, insidiosa o violenta que busca la alteración o la destrucción de los criterios morales y la forma de vida de un pueblo (…) [aparecen detalles de cómo reconocer la subversión en el ámbito estudiantil y cómo combatirla]; la crítica (…) sólo debe responder a la necesidad de consolidar los valores básicos de nuestra civilización, a la luz de: la Constitución y los principios republicano en que se funda; la democracia y sus instituciones libres; el significado trascendente de la ley; la moral pública y privada y el sentido de los derechos y responsabilidades del individuo frente al Estado y la sociedad…" (TP N° 5: s/d)

    Observando estas citas, se ve cómo el Estado, no desde la coerción física, sino desde un conjunto de normas legalizadas, dispone qué leer, qué ver en la televisión, qué estudiar, desde la impronta de un conjunto de valores que impone a la sociedad, normalizando comportamientos, y logrando que su poder la atraviese. Por su parte, la sociedad acepta estas normas por provenir de la burocracia estatal, ese ámbito legal e impersonal que la domina en todo momento. Y al respecto de la dominación ejercida desde el derecho, por la burocracia, Foucault dice que

    "…Por dominación [entiende] las múltiples formas de dominación que pueden ejercerse en el interior de la sociedad (…). El sistema de derecho, el campo judicial, son los trámites permanentes de relaciones de dominación, de técnicas de sometimiento polimorfas. El derecho visto [desde el lado] de los procedimientos de sometimiento que pone en marcha…"(Foucault, M., 1980: 142)

    Así, la burocracia cumple un papel fundamental para la dominación en el Estado.

     

    Bibliografía

    Codato, Adriano N. y Perissinotto, Renato M.: El Estado como institución Una lectura de las "obras históricas" de Marx. En: Revista Crítica Marxista, N° 13, Boitempo Editorial, Campinas, Brasil, octubre de 2001. Traducción de la cátedra.

    Foucault, Michel: Lección del 14 de enero de 1976; En: Microfísica del Poder, La Piqueta, Madrid; 1980.

    Foucault, Michel: Vigilar y castigar. Nacimiento de la prisión, Siglo XXI, México, 1988. Capítulo: Los cuerpos dóciles.

    Marx, Carlos: Las luchas de clases en Francia de 1848 a 1850, Anteo, Buenos Aires, 1973.

    Radcliffe-Brown, A.R.: Prefacio. En: Fortes y Evans-Pritchard, Sistemas políticos africanos, International African Institute by the Oxford University Press, Londres, 1949. Traducción de la cátedra.

    Santos, Boaventura de Sousa: El Estado, el derecho y la dominación política. En: Neufeld, Grimberg, Tiscornia, Wallace: Antropología Social y Política. Hegemonía y poder: el mundo en movimiento, EUDEBA, Buenos Aires, 1998.

    Thompson, E.P.: La sociedad inglesa del siglo XVIII: ¿Lucha de clases sin clases? En: Tradición, revuelta, y conciencia de clase. Estudios sobre la crisis de la sociedad preindustrial, Barcelona, Editorial Crítica, 1989.

    Thompson, E.P.: Prefacio. En: La formación histórica de la clase obrera inglesa, Laia, Madrid, 1977.

    Villarreal, Juan: Los hilos sociales del poder. En: Crisis de la dictadura Argentina, Siglo XXI, Buenos Aires, 1985.

    Weber, Max: La política como vocación. En: Ensayos de sociología contemporánea, Planeta, Buenos Aires, 1972.

    TP N° 3 "Una jornada de clases en el Curso Preparatorio para Agentes, Escuela de Suboficiales y Agentes ‘Crio. Villar’, Policía Federal Argentina", extraído de la Tesis de Licenciatura en Ciencias Antropológicas, Mariana Sirimarco (FFyL. UBA, año 2000).

    TP N° 5 Selección de documentos de la dictadura argentina de 1976.

    Apuntes de Clases Teóricas. Material de Cátedra. Mimeo*.

    Apuntes de Clases Teórico-Prácticas. Material de Cátedra. Mimeo*.

     

    Pedro B. Quiroux