El combate de la pobreza en el mundo contemporáneo
Enviado por Vanessa Pérez Vázquez, Paula Rama Morales
Reproducción autorizada por APOSTA, Revista de Ciencias Sociales, – nº 21, Octubre 2005 |
- Preámbulo
- Primera parte: La pobreza y su combate: el caso México
- Segunda parte: programas y acciones para el combate a la pobreza: la experiencia internacional
- Epílogo
- Notas y referencias bibliográficas
Resumen: Este texto muestra información completa y documentada sobre la pobreza en el mundo, con especial atención en el caso de México. Analizando las causas y fijándose en la raíz de la cuestión, el autor estudia las diversas acciones y programas que se siguen actualmente para combatir un problema que afecta a muchos millones de personas.
Pero, para combatir la pobreza con eficacia es necesario adoptar otras estrategias.
Palabras clave: Pobreza, desigualdad, programas sociales, Banco Mundial.
Abstract: This text shows complete and documented information about the poverty in the world, with special attention in case of Mexico. Analyzing the reasons and being fixed in the root of the question, the author studies the diverse actions and programs that follow nowadays to attack a problem that affects many million persons. But, to attack the poverty with efficiency is necessary to adopt other strategies.
Key words: Poverty, inequality, social programs, World Bank.
PREÁMBULO
En uno de los análisis más serios e importantes —aunque por desgracia no de los más difundidos— sobre la pobreza, Deepa Narayan analiza las definiciones de la pobreza hechas por la propia población pobre y recogidas en las evaluaciones de la pobreza con la participación de los afectados —los pobres— en diferentes partes del mundo. De ese modo, se revisará en este apartado lo que es la pobreza desde una perspectiva elemental hasta la más amplia posible, yendo desde un diccionario hasta la literatura más especializada que se pudo conseguir, y sin descuidar el enfoque más importante, como quiso hacer Narayan: la de aquellas personas inmersas en esta grave enfermedad social.
Particularmente, la pobreza constituye una enfermedad social, quizá la más grave conocida hasta el momento, pues a partir de ella degeneran muchas enfermedades sociales más: la prostitución, la corrupción, la delincuencia, la violencia y otras más.
Por tanto, su análisis debe encauzarse con sigilo, pues muchos consideran a la pobreza como algo normal. "Pobres ha habido siempre" dicen muchas gentes, lo cual podría ser aceptable si se hablara de un núcleo de pobres como una de muchas minorías, más no así en un mundo globalizado donde el 40% de la población mundial o quizá más se encuentra en la extrema miseria y con la posibilidad de seguir cayendo más allá de lo imaginable y de lo —al menos moralmente— permisible.
Incluso, en las escrituras sagradas de las diferentes culturas no se encuentran antecedentes relevantes sobre el tema de la pobreza. Puede decirse que ni Jesucristo vino a erradicar la pobreza, pese a la gran misión que traía, y eso que se le ha llegado a identificar no sólo como líder espiritual del pueblo judío sino como el primer líder socialista de la historia y hasta como el primer gran defensor de la mujer. Pero pese a ello, no se le identifica como defensor o promotor de los pobres, como —al contrario— sería el caso de Gautama Sidharta, Buda, quien abandonó los lujos de su palacio para vivir la pobreza y dar origen a una de las religiones —o corrientes filosóficas, como se le quiera ver— más trascendentes de la humanidad. Fuera de él, ningún líder político o espiritual ha venido a tratar de erradicar la pobreza.
Se supone —al menos teóricamente— que la economía de libre comercio debería redundar en la obtención de elevadas condiciones de vida para la población mundial.
Sin embargo, la riqueza se ha quedado en las más pequeñas cúpulas empresariales e industriales, reduciendo al resto de la gente a un estado de marginación cada vez más creciente. México no es la excepción. Entonces, ¿de qué sirvió haberse globalizado como nación y haberse abierto al comercio internacional y la inversión extranjera, si los principales personajes de este país —los mexicanos— no han visto ningún beneficio real de esta experiencia?
Pero es menester empezar por el principio. Véase, entonces, lo que es la pobreza, primero en lo conceptual y, después, en lo práctico, en lo real. Al llegar a este punto, se podrá ver que cualquier definición se queda corta si se observa lo que es la realidad —y es viable creer que la mayoría sabemos o hemos sabido lo que es la pobreza, por mínima que ésta fuera—.
PRIMERA PARTE. LA POBREZA Y SU COMBATE: EL CASO MÉXICO
No me pregunten qué es la pobreza: ustedes la han visto frente a mi casa. Miren la casa y cuenten el número de agujeros. Vean mis utensilios y la ropa que traigo puesta. Examínenlo todo y describan lo que ven. Esa es la pobreza.
Un hombre pobre de Kenya, 1997. (Citado por Deepa Narayan en su libro La voz de los pobres: ¿Hay alguien que nos escuche?)
1.1 Concepto de pobreza
Una definición de diccionario indica que por pobreza se entiende "necesidad, estrechez" y "carencia de lo necesario para el sustento de la vida" así como situación de "falta o escasez". Además, el concepto de pobreza equivale a "indigencia, miseria, penuria y mezquindad" [1]. Aquí, es importante distinguir el hecho de que muchas personas ligan el concepto de pobreza como sinónimo de marginación, y en sentido estricto son complementarios pero, de ninguna manera, equivalentes. Por ejemplo, miseria significa "estrechez y falta de lo necesario" [2], según el Diccionario Porrúa de la Lengua Española.
Asimismo, indigencia quiere decir "falta de medios para alimentarse, vestirse, etc." [3], en tanto que marginación significa algo distinto. Al respecto, José Silvestre Méndez dice que "a causa de la marginación, la desigualdad social y la deficiente infraestructura de los servicios médicos, varios millones de mexicanos no tienen acceso a servicios permanentes de salud" [4]. Por ende, pobreza implica escasez o falta de satisfactores elementales en términos de lo necesario, lo básico y lo indispensable. En cambio, marginación significa ausencia o falta de acceso a servicios públicos, empleos, comunicaciones, etc. Generalmente, marginación y pobreza van de la mano, aunque no es regla general y mucho menos un fenómeno común aleatorio.
Por ejemplo, puede haber comunidades que están alejadas de los centros urbanos y que, consecuentemente, carezcan de determinados servicios o tecnologías —que pueden ir desde el agua potable y drenaje hasta comunicación televisiva o radial—, y que no necesariamente estén pobres. En cambio, una población urbana puede ser extremadamente pobre —las llamadas ciudades perdidas son un ejemplo— y, sin embargo, no se encuentran marginadas ya que pueden acceder a servicios públicos y tecnologías diversas —como las de entretenimiento, por decir un ejemplo—.
En el sitio web del Banco Mundial, esta organización financiera señala que "la pobreza es hambre", que "la pobreza es falta de techo bajo el cual resguardarse. La pobreza es estar enfermo y no poder ser atendido por un médico. La pobreza es no poder ir a la escuela y no saber leer. La pobreza es no tener trabajo, tener miedo al futuro y vivir día a día. La pobreza es perder a un hijo debido a enfermedades relacionadas con el agua impura. La pobreza es impotencia, falta de representación y libertad" [5].
La pobreza —según Deepa Narayan— "se define comúnmente como la falta de lo necesario para asegurar el bienestar material, en particular alimentos, pero también vivienda, tierras y otros activos. En otras palabras, la pobreza entraña una carencia de muchos recursos que da lugar al hambre y a privaciones físicas" [6]. Además, Deepa Narayan establece algunas conclusiones importantes sobre lo que es la pobreza desde un enfoque conceptual:
1. Las definiciones de la pobreza se centran en la dificultad de obtener alimentos y de ganarse la vida. Sin embargo, lo que resulta notable es la medida en que la dependencia y la falta de poder y de voz se perfilan como los aspectos básicos de la forma en que los pobres definen la pobreza.
2. La falta de poder y de voz son factores que también influyen en el aumento de la sensación de vulnerabilidad y en la incapacidad de la población pobre para protegerse de las conmociones.
Ahora sí, quizá haya un poco más de posibilidades de comprender lo que es y significa la pobreza, más allá de los conceptos y las definiciones.
1.2 El estudio de la pobreza
Deepa Narayan indica que para saber qué es lo que ayuda a aliviar la pobreza, lo que funciona o no funciona, o que cambia a través del tiempo, la pobreza se tiene que definir, medir y estudiar; a veces, incluso, vivir. Como la pobreza tiene varias dimensiones —añade Narayan— se tiene que mirar a través de varios indicadores, niveles de ingresos y consumo, indicadores sociales y más recientemente indicadores de vulnerabilidad de riesgos y acceso socio-político.
La pobreza empezó a ser estudiada científicamente desde hace algunos pocos años. En su obra La voz de los pobres: ¿Hay alguien que nos escuche? (Banco Mundial, Washington, 2000) —la cual ha sido toral para esta investigación—, Deepa Narayan hace las siguientes conclusiones, mismas que, si bien no son definitivas, pues se trata de una de las pocas obras en la materia, sí resultan contundentes toda vez que las realizó en el centro del fenómeno, es decir, en los países pobres, con la gente pobre, y no en un escritorio o frente a una computadora. Estas son sus conclusiones [7]:
· Muchos factores se conjugan para hacer que la pobreza sea un fenómeno con múltiples facetas estrechamente relacionadas entre sí.
· La pobreza se define comúnmente como la falta de lo necesario para asegurar el bienestar material, en particular alimentos, pero también vivienda, tierras y otros activos. En otras palabras, la pobreza entraña una carencia de muchos recursos que da lugar al hambre y a privaciones físicas.
· Las definiciones formuladas por la propia población pobre revelan importantes aspectos psicológicos de la pobreza. Los pobres tienen una profunda conciencia de que su falta de voz, poder e independencia los expone a la explotación. Su pobreza los hace vulnerables a un trato grosero, humillante e inhumano por parte tanto de los particulares como de los funcionarios públicos a quienes acuden en busca de ayuda. Los pobres también hablan del dolor que les produce el verse obligados a quebrantar las normas sociales y no poder mantener su identidad cultural participando en sus tradiciones, festejos y rituales. Esta incapacidad de participar plenamente en la vida de su comunidad lleva a la desintegración de sus relaciones sociales.
· La falta de infraestructura básica —en particular caminos (en las zonas rurales), medios de transportes e instalaciones de abastecimiento de agua— es un problema de importancia crítica. En los países de Europa oriental y la antigua Unión Soviética, donde los inviernos son muy crudos, el hecho de que no haya servicios eléctricos cuyo costo pueda afrontar la población es motivo de gran preocupación.
· Con frecuencia hay gran temor a las enfermedades debido a que llevan a muchas familias a la miseria, porque no hay suficientes servicios de salud y el costo de los existentes es elevado, y las personas enfermas no pueden ganarse la vida.
Aunque se considera que la alfabetización es importante, la actitud respecto de la escolarización es mixta: en ciertos casos se le atribuye un gran valor, pero a menudo no se considera como un factor pertinente para las vidas de los pobres.
· Los pobres centran su atención en los activos más bien que en los ingresos, y consideran que su carencia de activos físicos, humanos, sociales y ecológicos está vinculada a su vulnerabilidad y susceptibilidad a los riesgos.
Respecto a que la pobreza es un fenómeno polifacético, ello se comprende mejor desde la perspectiva de la sociedad —o comunidad— que la padece y su circunstancia particular. Así, las diferentes culturas y sociedades suelen vincular a la pobreza con factores como la sequía, el aumento de precios y la inflación, la falta de activos materiales. Sin embargo, el criterio común aplicable es que la pobreza incide en la escasez de los elementos necesarios para alcanzar determinado bienestar material, a saber, lo necesario, lo básico y lo indispensable, en donde lo necesario podría ser alimentos, bienes materiales y techo; lo básico, alimentos y techo, y lo indispensable, alimentos.
Ahora bien, "la pobreza nunca se produce debido a la falta de un solo elemento, sino que es consecuencia de múltiples factores relacionados entre sí que inciden en las experiencias de la gente y sus definiciones de la pobreza" [8]. Así, a la escasez o ausencia de lo necesario, lo básico o lo indispensable —esta fórmula es de elaboración personal— se une la falta de oportunidades de ingreso (empleo formal, informal o subempleo), las pandemias (enfermedades consideradas problemas de salud pública), las guerras, etc. y muchos otros factores, ya sean de manera individual o de manera aleatoria.
Además, la pobreza no es igual de sociedad a sociedad o de nación a nación; por ejemplo, en un país como Somalia —donde la hambruna es la regla— que incluso como México —donde al menos hay lo indispensable para subsistir, aunque se trate sólo de tortillas con sal, según vox pópuli—. Sin embargo, incide en lo mismo, o sea, la ausencia de los satisfactores de esos requerimientos de lo necesario, lo básico o, cuando menos, lo indispensable. Pero, se suele creer que marginación es lo mismo que pobreza, cosa errónea y que redunda en una mala interpretación del fenómeno que motivó el presente estudio, pues ya se explicó que no necesariamente son un fenómeno común aleatorio. No obstante, cuando marginación y pobreza se encuentran juntas, hacen estragos mortales en la vida y en la calidad de vida de la población.
Y además, y para finalizar esta sección, no es igual la pobreza de sociedad a sociedad o de nación a nación, dependiendo de sus respectivas aspiraciones de vida. Por ejemplo, en países como los de África o el Sudeste Asiático tener lo básico —techo y alimentos— es una aspiración bastante regular. En cambio, en países como México, tan influidos por el llamado "estilo de vida americano" —y más concretamente el norteamericano, tan lleno de lujos e imágenes ostentosas—, hacen que sus sociedades aspiren a lujos medianos como muebles, aparatos eléctricos, cierto guardarropa y un coche a la puerta, en el más sencillo de los casos, aun cuando la alimentación sea bastante sencilla —por no llamar raquítica—.
1.3 Características de los programas de combate a la pobreza en México
Los programas de combate a la pobreza en México tienen los siguientes ejes fundamentales, de acuerdo con información proporcionada en un reporte del Centro de Análisis e Investigación Fundar A. C. Dichos ejes son los siguientes [9]:
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