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Estudio de la carta de Pablo a los romanos (página 5)


Partes: 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8

  • Rom 7:5 representa la experiencia pre-cristiana, describiendo un tiempo donde "estábamos en la carne", y explica que la carne produjo "muerte". El versículo 6 se refiere a los cristianos en cuatro tipos: "Pero ahora", "libres", "muertos" (a nuestra antigua vida), y "Espíritu". Los comentaristas están de acuerdo en que el versículo 5 se refiere a los no creyentes y el versículo 6 a los creyentes. Pero este es el punto principal: Rom 7:7-25  explica en mayor detalle el versículo 5 y Rom 8:1-17 el versículo 6. En los versículos del 7-25 vemos cómo el pecado, por medio de la ley, trae muerte a aquellos que están en la carne, y en Rom 8:1-17 vemos cómo el Espíritu les da vida a aquellos que le pertenecen a Jesucristo. Rom 7:5-6  pronostica lo que Pablo está a punto de decir en términos claros

  • ¿Cómo se relaciona 7:14 con el hecho de que Rom 6 enseña una victoria sobre el pecado?

    • 6:14 «el pecado no se enseñoreará de vosotros»

    • 6:2 «hemos muerto al pecado»

    • 6:6 «nuestro viejo hombre fue crucificado»

    • 6"7 «liberado del pecado»

    • 6:11 «consideraos muertos al pecado»

    • 6:12 «no reine, pues, el pecado en vuestro cuerpo mortal»

    • 6:17 «erais esclavos del pecado»

    • 6:18 «libertados del pecado»

    • 6:22 «habéis sido liberados del pecado»

    • El contraste radical entre la agonizada esclavitud 7.14-25 y la liberación en 8.1 implica una conversión y un cambio total en su condición espiritual.

    • 8.1 comienza con «Ahora, pues», que indica un contraste con lo anterior y un cambio del pasado al presente.

    • En 8.1 «pues» indica un resultado de algo que procede.

    • Pero la liberación en 8.1-2 no puede proceder del problema en 7.14-24 y 7.25b.

    • La exclamación en 7.25ª es breve y general para ser el fundamento de 8.1-2.

    • Así que 8.1-2 tiene que referirse al argumento que comienza en 6.1, en particular, a 6.14 y 7.6.

    • 7.14-25 nunca refiere al Espíritu Santo, mientras 8.1 habla del Espíritu 18 veces.

    • 7.14-25 no presenta una persona luchando con el pecado, sino bajo su control. Parece negar el poder de Cristo y del Espíritu Santo en 8.1-4.

    • 7.14-25 presenta alguien que tiene la necesidad de obedecer la ley de Moisés, pero Pablo en 6.1-6 y 7.4-6 dice que los creyentes no están bajo la ley.

    • Algunas expresiones en 7.14-25 contradicen lo que capítulo 6 dice acerca de la liberación del cristiano del pecado: 6.6, 6.11, 6.14, 6.18-22. V.t. 8.2. En particular, «prisionero» en 7.23 contrastado con «liberado» en 8.2.

    • El enlace entre el "yo" y la carne en 7.14, 18, 25. 7.5 dice que los inconversos son los que están en la carne.

    • Las exhortaciones en las cartas de Pablo implican su confianza que sus lectores tienen la habilidad de obedecerlas. Esto va en contra del retrato negativo del cristiano que vemos en posición #1.

    • Argumentos contra esta posición:

    • 7.14-25 está en el tiempo presente. Respuesta: Pablo está usando el presente para mayor impacto.

    • Si el «yo» en 7.14-25 no es cristiano, ¿por qué dice que goza en la ley en 7.22? ¿Por qué busca obedecer la ley en 7.15-20 y la sirve en 7.25? ¿No contradice lo que dice Pablo en 3.11, 8.7? Dos posibles respuestas: Pablo, está hablando de la experiencia de inconversos, las describe desde la perspectiva cristiana. Stott: un creyente del AT.

    • Si es Pablo, parece contradecir lo que Pablo dice de sí mismo en Fil 3.6, Gal 1.14. Respuesta: Pablo no está hablando de sí mismo. Está hablando como un inconverso como si fuera él. Un nuevo convertido cuando considera su vida antes de su conversión puede darse cuenta de conflictos internos y desesperación que no eran tan evidentes en el momento.

    • En otros textos Pablo habla de la mente de los no regenerados como opuesta a Dios Rom 1.28, Efe 4.17, Col. 2.18, 1 Tim 6.5, 2 Tim 3.8, Tit 2.15, pero aquí la mente es un medio positivo Rom 7.22, 25. Respuesta: lo que dice Pablo acerca de la mente humana no es sencilla sino complicada. Pablo no es una canción de una sola nota.

    • Gal 5.16-18 presentan un conflicto interno de los creyentes regenerados. Respuesta: Esta es una mala interpretación de Gal 5.16-18. Este texto habla de la oposición entre la vida de la carne y la vida del Espíritu Santo, y el hecho que un creyente no tiene libertad de hacer lo que le da las ganas.

    • Los otros dos usos de Pablo de la frase «hombre interior» hablan de creyentes 2 Cor 4.16, Ef. 3.16. Respuesta: la frase «hombre interior» no tiene que ser limitada a los creyentes. Cualquiera puede tener un «hombre interior.»

    • 7.25b, que dice lo mismo que 7.14-24, viene después de 7.25ª, que habla de la liberación de Cristo. Respuesta: Pero 7.25b viene después de 7.25b porque Pablo no quiere disminuir la fuerza del contraste con 8.1-4.

    • Porque sabemos[636]. . yo soy carnal[637](7:14) "Sabemos que la Ley es espiritual; pero yo soy carnal, vendido al pecado" "DHH  Sabemos que la ley es espiritual, pero yo soy débil, vendido como esclavo al pecado" "Amplified Bible (AMP) Sabemos que la ley es espiritual, pero yo soy una criatura de carne [mundanos, autosuficiente-carnal], vendido como esclavo al pecado [y servir bajo su control]"

    • Vendido[638]Habiendo sido vendido bajo pecado, que indica un estado o condición. Esto coloca al personaje de este pasaje como uno que no ha sido libre del pecado[639]

    • Vendido al pecado (7:14). Personificado el pecado como un amo, Pablo se presenta a sí mismo como uno vendido al servicio del pecado.

    • Había dicho que en un tiempo vivía sin la ley, pero luego pecó y murió (versículo 9).

    • Explicó que fue el pecado y no la ley el que causó esta muerte espiritual (versículo 13).

    • Entonces dice que como pecador se encontró como uno vendido al amo, el pecado. Usa el tiempo presente, «soy,» en lugar de «era,» porque se representa como tipo de todos los que se encuentran en la esclavitud del pecado[640]

    • Lo que hago, no lo entiendo, pues no hago lo que quiero, sino lo que detesto, eso hago[641]Por la ley no hago lo que quiero (7:15).

    • Porque lo que hago[642]Lo que consigo, lo que obro, lo que produzco.

    • Porque lo que hago, no lo entiendo[643]No entiendo mis acciones porque no concuerdan con mi deseo (7:15).

    • El pecador está consciente de lo que está haciendo, pero no comprende la naturaleza y consecuencias de lo que hace. 1 Tim 1:13; Luc 23:34; Hech 3:17; 1 Cor 2:8.

    • Tres veces la palabra "Hago" aparece en este versículo, pero en el texto griego son tres palabras distintas. «Porque lo que efectúo[644](KATERGADZOMAI, efectuar, acabar, completar), no lo entiendo; pues no practico[645](PRASSO, practicar, hacer) lo que quiero, sino lo que aborrezco, eso produzco[646](POIEO, producir, causar ser).»

    • No hago lo que quiero[647]sino lo que aborrezco[648]eso hago.

    • El verbo quiero significa deseo expreso, es decir, lo que en realidad deseo[649]

    • No hago lo que quiero. Al producir lo que admite ser no deseable o bueno, reconoce que la ley, que demanda una vida de justicia, es buena.

    • Y si lo que no quiero, esto hago, apruebo[650]que la ley es buena. Por el deseo de mi mente apruebo que la ley es buena (7:16).

    • "Estoy de acuerdo[651]Literalmente, hablar juntamente con; por lo tanto, estar de acuerdo, concordar. Esa es la única vez que aparece esta palabra en el NT. El hecho de que Pablo desapruebe sus acciones pecaminosas es una evidencia de que considera que la ley de Dios es buena.

    • Buena[652]Bello, excelente. Implica la belleza moral y excelencia de ley. La palabra significa bueno en un sentido moral.

    • De manera que ya no soy yo quien hace aquello, sino el pecado que mora en mí. El que hace aquello que es contrario a la ley de Dios no soy yo. . . sino el pecado que mora[653]en mí (7:17).

    • Hace[654]Lo que efectúa es porque el pecado mora en él. (El pecado no mora en el cristiano).

    • EL pecado tiene control de la persona en quien mora, como el que mora en una casa tiene control de la casa. Un ladrón puede forzar la entrada para robar, pero no «mora» en la casa. El Espíritu Santo, no el pecado, mora en el cristiano, aunque a veces peca el cristiano; pero el pecado mora en el pecador no regenerado.

    • Esto no disculpa a la persona, porque es responsable por la morada del pecado en sí misma. El punto es que no es la persona solamente, sino la morada del pecado en ella, la que efectúa la ruina. «No soy yo, sino» quiere decir, «no solamente yo».

    • Y yo sé que en mí, esto es, en mi carne, no mora el bien; porque el querer el bien está en mí, pero no el hacerlo.

    • Tengo la capacidad de querer el bien que Dios exige en la ley (7:18).

    • No tengo la capacidad en mi carne de hacer el bien que Dios exige en la ley (7:18).

    • «No el hacerlo[655]es decir, «el efectuar el bien no lo hallo» (traducción literal). Pablo hace distinción entre el hombre interior y la carne. De por sí la carne no es mala ni buena. La parte del hombre que es un conjunto de apetitos y pasiones, que conducen al pecado cuando la mente planea y ejecuta cosas o maneras no legales. Toda persona tiene el deseo de hacer el bien, pero no va a evitar el pecado para vivir una vida pura sin la gracia de Dios en Cristo. Para enfatizar este punto, Pablo se presenta como tal persona, bajo la ley, pero sin la redención que hay en Cristo

    • Porque no hago el bien[656]que quiero, sino el mal[657]que no quiero, eso hago. Hago lo contrario de lo que deseo en la mente (7:19).

    • Y si hago lo que no quiero, ya no lo hago yo, sino el pecado que mora en mí.

    • El pecado que mora en mi es el que en realidad hace lo contrario de lo que deseo en la mente (7:20).

    • Morar: La idea es la de habitar habitualmente como la persona vive en una casa.

    • Así que, queriendo yo hacer el bien, hallo esta ley: que el mal está en mí. El mal que está en mí impide que haga lo que quiero (7:21).

    • Porque según el hombre interior, me deleito[658]en la ley de Dios; El hombre interior quiere cumplir la ley de Dios (7:22). El interior es la sede de la mente y la voluntad. Se deleita en la ley buena de Dios, aunque no la practica siempre.

    • Pero veo otra ley en mis miembros, que se rebela contra la ley de mi mente, y que me lleva cautivo a la ley del pecado que está en mis miembros. La carne se rebela contra la ley (7:23)

    • "Otra[659]ley" Esta es "la ley del pecado."

    • "La ley de mi mente" es la ley de Dios dirigida a la mente del hombre. Por la mente (el hombre interior), Dios busca controlar a la persona con su ley. Cuando se nos permite experimentar el nuevo nacimiento, realiza un cambio en nuestra mente y empieza a escribir su ley en nuestra mente y corazón (Heb. 8:10), por lo que, en cierto grado, ya podemos distinguir entre lo bueno y lo malo, sabemos y comprendemos lo que es agradable al Señor. Es por esa razón que la ley de los miembros encuentra oposición en nuestro ser para llevarnos cautivos al pecado como cuando estábamos apartados del Señor

    • Se rebela[660]contra la ley de mi mente

    • Que me lleva cautivo[661]a la ley del pecado que está en mis miembros[662]Esta condición, según el versículo 14, se llama "vendido al pecado" porque es la condición en que uno es siervo del amo, el pecado. Sigue a la ley del pecado.

    • El clamor 7:24:  ¡Miserable de mí! ¿Quién me librará de este cuerpo de muerte? 

    • La respuesta 7:25: ¡Gracias doy a Dios, por Jesucristo Señor nuestro! Así que, yo mismo con la mente sirvo a la ley de Dios, pero con la carne, a la ley del pecado

    «NINGUNA CONDENACIÓN»

    • El capítulo comienza con una declaración de victoria presente: "Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús". Continúa con la derrota de cada uno de los enemigos que se oponen, y culmina con la declaración de la victoria final, expresada con el enunciado que demuestra que nada ni nadie "nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús, Señor nuestro" (v. 39). Es como ser llevados atados al carro triunfal de Crist

    • o el gran vencedor. Se asemeja al desfile de la victoria, llevado a cabo por un conquistador invicto, que puede proclamar en las palabras del himno, "no queda un enemigo, ni habrá otra lucha"

    • El capítulo 8 puede dividirse en cinco subdivisiones que se refieren a distintos aspectos de la vida en el Espíritu[663]

    • (1) Su dinámica (8:1-11),

    • (2) Su relación familiar (8:12-17),

    • (3) Su esperanza futura (8:18-25),

    • (4) Su seguridad (8:26-30) y

    • (5) Su canto de victoria (8:31-39).

    • Lo que podría haber condenado al hombre era la ley. De Rom 7 aprendimos que el cristiano está LIBRE DE LA LEY POR HABER MUERTO A ELLA. Ninguna condenación hay, porque ha sido librado de la ley.

    • Hemos sido LIBRADOS DEL CUERPO DE MUERTE. Es cierto que, mientras está en el cuerpo, peca de vez en cuando. No es perfecto porque, aunque quisiera hacer el bien, el pecado lo domina a veces y el resultado es el pecado. Su cuerpo está destinado a muerte, pero ahora, en Cristo, aún este cuerpo de muerte vivirá otra vez porque aquel que es justo por la fe está libre de la muerte. Ninguna condenación hay para el espíritu o el cuerpo de esta persona.

    • Dios no excluye a nadie que desea pertenecer a él y cumple las condiciones establecidas por Dios. La condición que identifica a las personas que no sufren condenación es que "Están en Cristo Jesús".

    • No es suficiente, entrar en Cristo para estar libre de la condenación divina. Es necesario dejar de andar "Conforme a la carne" y andar "Conforme al Espíritu".

    • Esto no significa que si falla en un punto que será condenado. Esto fue el sistema de la ley. El nuevo pacto no es así. Andar conforme al Espíritu significa que uno lucha contra los deseos pecaminosos de la carne y somete su voluntad a la voluntad del Espíritu Santo. Es el principio de "Andar en luz" 1 Jn 1:7. No es practicar el pecado, pero tampoco es ser perfecto en su obediencia. Es vivir la verdad 1 Jn 1:6; Jn 3:20,21.

    • 1. "Ahora[664]pues [ligado con el capítulo anterior], ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús" (v. 1), es un término legal que equivale a decir que no hay ningún gravamen, ninguna hipoteca del pasado que pueda ensombrecer la realidad de esta liberación plena.

    • a. La palabra ahora, que contrasta una situación presente con una anterior.

    • b. Puede referirse a la situación antes y después de la muerte y resurrección de Cristo[665]o a la situación antes y después de la conversión[666]

    • c. La palabra pues[667]representa una partícula de transición lógica que indica que lo que se va a decir en el capítulo 8 es la consecuencia lógica del argumento previo ("en consecuencia[668]

    • d. Se puede relacionar con el argumento inmediatamente previo[669]pero parece mejor pensar que se refiere a todo el argumento previo de la epístola que en el capítulo 8 va llegando a su culminación. A la luz de lo dicho en los capítulos 1 al 7, se puede afirmar que no hay ninguna condenación

    • 2. Ninguna condenación: Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en[670]Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu[671](8:1) No es que hay motivo de acusación, porque sí lo hay. No dice que no han hecho nada por lo que merezcan ser condenados, porque si lo han hecho y merecen la condenación. "Ninguna condenación hay"[672]. Estar en Cristo significa estar libre de condenación y de la ira de Dios, libre de la esclavitud del pecado, libre de la ley, libre de la muerte.

    • a. Ninguna El texto griego la palabra ninguna es la primera de la oración y recibe un énfasis especial; el sentido es que no pesa sobre las personas indicadas absolutamente ninguna clase de condenación; este término traducido condenación parece referirse no tanto a la sentencia, sino al castigo

    • b. Condenación[673]Este término  no es usado con frecuencia en la LXX, pero refleja la maldición de no obedecer Det 27:26. Literalmente significa "castigo como resultado de una sentencia judicial." Es el término legal forénsico opuesto al de justificación

    • c. Los que están[674]en Cristo Jesús.

    • i. La condición que identifica a las personas que no sufren condenación es que "están en Cristo Jesús". El es la solución de Dios para el problema del pecado. Cristo satisface la ira de Dios. Cristo vence el pecado. Cristo quita la ley. Cristo venció la muerte. Si estamos en Cristo Jesús, somos victoriosos sobre los poderes que Satanás quisiera usar para destruirnos.

    • ii. Esta expresión, frecuente en el NT, indica la relación personal entre el cristiano y Cristo. Significa más que depender de él o ser nada, más que su discípulo. Implica una unión diaria y viviente con Cristo Jn 14: 20; 15: 4-7. Juan describe esta unión con estar "en él" 1 Jn 2: 5-6, 28; 3: 24; 5: 20. Pedro de estar en Cristo 1 Ped. 3: 16; 5: 14. Pablo la aplica a iglesias Gal 1: 22; 1 Tes 1: 1; 2: 14; 2 Tes 1: 1 e individuos 1 Cor 1: 30; 2 Cor 5: 17; Efe. 1: 1. Jesús muestra la intimidad de esta unión mediante la parábola de la Vid y los pámpanos Jn 15: 1-7[675]

    • d. Los que viven. Una vez que ha entrado en Cristo, la vida tiene que conformarse a los deseos del Espíritu de Dios que están escritos en la Biblia. En todo lo que piensa, dice y hace, debe pensar, hablar y actuar de acuerdo con los principios que el Espíritu presenta.

    • e. Los que no andan conforme a la carne (8:1). La versión RVR- 1960 añade: "los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu". Pero esta frase no tiene aquí el apoyo de los mejores manuscritos y parece que ha sido copiado de 8:4 donde sí tiene el apoyo de la evidencia textual. La frase se omite en las versiones que dependen de un mejor texto griego como el caso de la RVA[676]

    • f. Conforme[677]al Espíritu[678]Aparece solamente 5 veces en los capítulos 1 al 7 y 8 veces en los capítulos 9 al 16, pero aparece 21 veces en el capítulo 8, más que en cualquier otro capítulo de la Biblia[679]Retoma el derramamiento de Rom 5:5 para mostrar que la vida de santidad que Dios demanda en el capítulo 6 es la vida de Cristo. Sólo el Espíritu de Cristo puede hacer posible y real su vida en el creyente[680]

    • i. En el cap. 7 vimos la inutilidad de querer vivir la vida de santidad por el esfuerzo propio. Querer cumplir la ley es un paso atrás en el camino de fe comenzado con la justificación. Conduce al fracaso expresado en el "miserable de mí", que representa la inutilidad del esfuerzo del "yo mismo". La respuesta a "¿quién me librará de este cuerpo de muerte?" de 7:24 ya ha sido dada con "gracias a Dios, por Jesucristo Señor nuestro" (7:25).

    • ii. La vida de victoria es posible gracias a Jesucristo y a su obra redentora. Y—para concluir con la exposición doctrinal sobre la vida resucitada—el "como" de la santificación. Cómo funciona, cuál es su dinámica, cómo podemos apropiarla en la vida cotidiana. De qué manera los valores de la vida de fe funcionan en medio de la putrefacción y muerte que nos rodean.

    • 3. Librado[681]de la ley del pecado y de la muerte. (8:2). "Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte"

    • a. Librado[682]Pablo dice que la ley del Espíritu d" vida lo ha salvado, ¨refiriéndose al tiempo de su conversión[683]El verbo en griego es, un aoristo que ¨sugiere un acto de libertad hecho de una vez y para siempre en la salvación[684]

    • b. Librado por la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús (8:2). La frase la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús puede ser interpretada en el sentido[685]"el Espíritu de vida", vale decir, "el Espíritu que da vida[686]Es importante entender cómo esta ley libra de la ley que condenaba a muerte.

    • i. El evangelio es una ley diferente del sistema legal de la Ley. No depende de la capacidad humana sino de la capacidad divina.

    • ii. No está basada en las obras de justicia que hace el hombre sino en la obra de la justificación que hizo Jesús.

    • iii. Bajo la Ley se confiaba en el cumplimiento, pero bajo esta ley se confía en Jesucristo y en lo que Él cumplió en la cruz.

    • iv. Con Su vida y muerte Jesucristo cumplió lo que la ley requiere y canceló la deuda humana.

    • v. Habiendo terminado con la Ley, resucitó y ascendió a la diestra de Dios para ser mediador de un nuevo pacto.

    • vi. Bajo esta ley estamos libres de la exigencia de la perfección que fue parte de la ley de Moisés y de todo sistema legal.

    • vii. Bajo esta ley hay "Perdón de pecado". La paga del pecado es muerte, pero Cristo ya pagó por nosotros y bajo esta ley, ofrece la vida eterna en Él. De esta manera la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús ha librado de la ley del pecado y de la muerte.

    • c. La ley del pecado y de la muerte. Es de esta ley que hemos sido librados por el evangelio.

    • i. Esta ley del pecado esclaviza al que se esfuerza por cumplirla. Sin embargo, no puede ni salvar ni santificar[687]

    • ii. La ley de Moisés no pudo vencer esta ley. Gen 2:17; Eze 18:20; Rom 6:23.

    • iii. Siendo que todos pecamos, estamos condenados a la separación eterna de Dios Rom 5:12.

    • iv. Todos los hombres estaban condenados bajo esta ley.

    LA LIBERTAD DE LA LEY HIZO POSIBLE EL CUMPLIMIENTO DE LA JUSTICIA DE LA LEY  Lo que era imposible para la Ley, por cuanto era débil por la carne, Dios, enviando a su Hijo en semejanza de carne de pecado, y a causa del pecado, condenó al pecado en la carne,4 para que la justicia de la Ley se cumpliera en nosotros, que no andamos conforme a la carne, sino conforme al Espíritu (8:3,4).

    • 1. Porque lo que era Imposible[688]para la ley (8:3). El verbo es el adjetivo adunaton, el cual significa "imposible" Heb 6:4,18; 10:4; 11:6, y significa también "sin fuerzas" Dios ha hecho lo que la ley no podía hacer; ha condenado al pecado, y por lo tanto, el cristiano puede vencer el poder del mal y viva una vida triunfante en Cristo.

    • a. El porqué introduce la razón de la declaración del versículo 2 con respecto a la liberación del creyente. Lo que la ley de Moisés no podía hacer y lo que ninguna ley puede hacer, Dios ha hecho. El fracaso de la ley se debía a que estaba "condicionada por la debilidad de la naturaleza humana". La falla no estaba en la ley sino en la carne, la naturaleza pecaminosa humana[689]

    • b. La ley moral, buena en sí misma, no tuvo el poder para que dejáramos de ser lo que éramos en Adán, pecadores sujetos a la ley del pecado y de la muerte.

    • c. La carne, la naturaleza pecaminosa, no podía por su debilidad natural, cumplir la ley. O sea que no pudo generar un principio que venciera la ley del pecado y de la muerte

    • d.  Dios ha hecho lo que la ley no podía hacer; ha condenado al pecado, y por lo tanto es posible que el cristiano venza el poder del mal y viva una vida triunfante en Cristo. ¿Por qué era imposible para la Ley?

    • 2. Por cuanto era débil[690]por la carne[691]

    • a. La ley señala el camino, pero no capacitaba para que camine por él. La debilidad de la ley por la impotencia del hombre. La ley no posee el atributo de perdonar y conducir a la obediencia; puede mostrar la transgresión y la rectitud y ordenar obediencia Rom 3: 20; 7: 7.

    • b. Por lo tanto, la ley de Dios no puede ser culpada porque no alcance resultados que no le corresponde[692]Dios lo hizo posible para nosotros.

    • 3. Dios, enviando a su Hijo (8:3). "Su propio Hijo"[693].

    • a. El adjetivo "Propio" destaca la relación entre el Padre y el Hijo Rom 8: 32; Col. 1: 13 que describe al Hijo como "Su amado Hijo", "El Hijo de su amor"

    • b. Por medio de dos eventos Dios arregló el problema de la condenación:

    • i. Por el nacimiento de Su Hijo entre los hombres como hombres.

    • ii. Por la muerte de Su Hijo como sacrificio por los pecados de los hombres.

    • 4. En semejanza[694]de carne de pecado. Fil 2:7-8.Pablo es enfatiza la realidad de la encarnación de Cristo y, señalar que cuando asumió la naturaleza humana en forma real y plena, no dejó de retener su naturaleza divina[695]

    • a. Como ser humano Jn 1:14; Heb 2:14. Si hubiese venido revestido con su gloria no podríamos haber soportado su presencia. Por lo tanto, en su amor y propósito, No retuvo…el ser igual a Dios. Sino que se despojó de sí mismo [se vació de sí mismo] tomando condición de siervo, haciéndose semejante a los hombres"[696] Fil 2: 6-7

    • 5. A causa del pecado Heb 13:11,12; 2 Cor 5:21; 1 Ped 2:24. "Concerniente al pecado"[697]. La conjunción "Y" indica la relación con la frase precedente. Dios envió a su Hijo en la semejanza de carne de pecado y en relación con el pecado. "A causa del pecado" se traduce "Como ofrenda por el pecado[698]

    • a. Para pagar por el pecado.

    • b. Para librar del pecado.

    • c. Versiones que traducen "como ofrenda por el pecado" o "Como ofrenda [en cursiva, palabras añadidas] por el pecado[699]"en reparación por el pecado[700]"como víctima por el pecado[701]"como víctima por el pecado[702]"como sacrificio por el pecado[703]"Para pagar por el pecado". "Para librar del pecado".

    • 6. Dios. . . condenó[704]al pecado en la carne (8:3).

    • a. Lo que se logró mediante el envío del Hijo en la carne es la condenación del pecado. Y "condenó" abarca la sentencia y su ejecución. En Jesús Dios ha pronunciado una sentencia de condenación contra el pecado y ha llevado a cabo el castigo anticipado por la sentencia. Como dice Morris, un edificio condenado no se usa más, y su demolición es parte inevitable de la sentencia de condenación[705]

    • b. El castigo de Dios por el pecado cayó en su Hijo. Aunque no cometió pecado, se hizo pecado por nosotros 2 Cor 5:21. En Cristo, Dios condenó el pecado; castigó al pecado; y Dios libra del pecado y la muerte.

    • 7. El propósito de Dios: para que la justicia de la ley se cumpliese[706]en nosotros (8:4).

    • a. La exigencia de la ley que el pecado tiene que ser castigado se cumple en el sacrificio de Cristo.

    • b. La exigencia justa de la ley que el hombre debe vivir una vida de justicia se cumple mediante el poder del Espíritu Santo quien opera en los que están en Cristo: la santificación.

    • c. "Fuera realizada" o "Fuera satisfecha". Dios envió a su Hijo para que los hombres pudieran ser capacitados para cumplir con las exigencias de su ley.

    • 8. Los que no andamos[707]conforme a la carne. Literalmente "Andar de aquí para allá", implica conducta habitual, que se puede traducir "Seguir una conducta". Rom 6: 4; 2 Cor 5: 7; 10: 3; Efe. 2: 10; 4: 1.

    • 9. Los que andamos conforme al Espíritu. Rigen su conducta de acuerdo con los dictados y conducción del Espíritu, que mora en su interior (vers. 9).

    LOS QUE SON DE LA CARNE NO CUMPLEN LA JUSTICIA DE LA LEY Los que son de la carne piensan en las cosas de la carne; pero los que son del Espíritu, en las cosas del Espíritu. 6 El ocuparse de la carne es muerte, pero el ocuparse del Espíritu es vida y paz, 7 por cuanto los designios de la carne son enemistad contra Dios, porque no se sujetan a la Ley de Dios, ni tampoco pueden; 8 y los que viven según la carne no pueden agradar a Dios (8:5-8).En esta sección, y en la siguiente, Pablo responde a la pregunta de Rom 7:24. El hombre puede servir a la ley de Dios (7:25) por medio del Espíritu Santo. Pero la liberación total de la presencia del pecado, no ocurrirá hasta la resurrección. El Espíritu Santo es la garantía de tal suceso (glorificación = cuerpo nuevo[708]

    • 1. Porque los que son de la carne piensan (8:5). Pensar significa dedicarles interés, que sean su propósito, y el objeto de su afecto. Es la palabra ocuparse en 8:6 y designios en 8:7.

    • a. Porque los que son. Indica naturaleza, por lo tanto se refiere a personas no creyentes.

    • b. Piensan[709]en "Ponen la mente en[710]"esforzarse por" "pensar en", "ocuparse de". "Fijar el corazón en algo o alguien[711]Medita en ellas. No pasan por su mente sino que medita sobre lo carnal en vez de lo espiritual. En el NT puede significar "pensar" o "sentir" o ambos. Otras alternativas de traducción son "se preocupan por[712]"aspiran a[713]Morris nota que es el mismo verbo que Jesús usa en su reprensión de Pedro en Mat 16:23: "porque no pones la mira en las cosas de Dios, sino en las de los hombres[714]Indica la perspectiva, el enfoque que uno emplea en su evaluación e interpretación de las cosas y en sus decisiones[715]

    • c. El verbo denota la acción completa de los afectos y la voluntad y la razón. Toda la actividad mental de los que «son de la carne» está puesta en la complacencia de los deseos carnales.

    • 2. Las cosas de la carne. Son las obras de la carne Rom 8:13; Gal 5:16,19-21,24. El modo de pensar (según la carne o el Espíritu) se manifiesta en las cosas a las cuales se dedica tiempo. Las cosas que se practican en la vida cotidiana. Las cosas que emocionan, que motivan, que absorben la energía.

    • 3. Porque el ocuparse[716]de la carne es muerte (8:6). "La manera de pensar de la carne". "Las tendencias de la carne» Significa que su intención es cumplir los deseos de la carne. Por tanto, busca la oportunidad de satisfacerse en las cosas de la carne.

    • 4. Porque los designios[717]de la carne son enemistad[718]contra Dios

    • a.  "Tendencias de la carne, manera de pensar de la carne" Isa 55:8,9; Prov 14:12.

    • b. Es traducido como intención de la misma raíz del término que se usa en el versículo anterior y ha dado lugar a variantes de traducción: "aspiración[719]"preocuparse por[720]Cranfield dice que el término contrasta la mente de la carne y la del Espíritu. En ambos casos indica la perspectiva, eso es, los presupuestos, valores, deseos y propósitos[721]

    • 5. Porque no se sujetan[722]a la ley de Dios (8:7). En la terminología militar significa sujeción a órdenes. El tiempo presente sugiere una insubordinación continua. La mente que se ocupa de las cosas de la carne revela su hostilidad contra Dios mediante una continua desobediencia.

    • 6. Porque no pueden sujetarse a la ley de Dios (8:7). El no sujetarse a la ley de Dios no se debe a la falta de voluntad en los que son de la carne sino la falta de capacidad: no pueden Rom 7:18; Gal 5:17.

    • 7. No pueden agradar[723]a Dios (8:8). Y Con esta palabra no comienza una conclusión o consecuencia emanada del vers. 7, sino se repite el vers. 7 en forma diferente y personal. Se podría parafrasearse: "La mente carnal es enemistad contra Dios. . . y los que están en la carne no pueden agradar a Dios"[724].

    • 8. Ser de la carne significa: Confiar en y seguir las inclinaciones naturales de nuestra humanidad. La carne incluye pensamientos, voluntad egoísta y la capacidad humana 1 Cor 2:14,15.

    • 9. Porque piensan en las cosas del Espíritu (8:5). ). Estos son creyentes que han experimentado el nuevo nacimiento. Es traducido como: "los que se dejan dirigir por el Espíritu", piensan en las cosas del Espíritu "tienden a lo propio del Espíritu". Ellos tienen la perspectiva de las cosas que les da el Espíritu. Cranfield señala que cuando el término usado aquí aparece en la construcción "pensar las cosas [ideas] de otro" el sentido es "tener la opinión del otro", "estar del lado del otro", "ser del partido del otro[725]

    • a. Ser del Espíritu significa: Confiar en y seguir las inclinaciones del Espíritu Santo. En esta comparación entre carne y Espíritu, el Espíritu incluye: Sus pensamientos divinos, Su voluntad divina y Su capacidad divina. (Su intención es conforme a la voluntad de Dios – Rom 8:27

    • b. Las cosas del Espíritu son: Sus instrucciones que guían Rom 8:14; 1 Cor 2:12-14; Gal 5:18, en contraste con los pensamientos. Sus deseos o intenciones Rom 8:26; Gal 5:17, en contraste que la voluntad egoísta. Su fruto Gal 5:22,23, en contraste con las obras de la carne. Su capacidad divina Rom 8:13 en contraste con la propia capacidad humana.

    • c. Pensar según el Espíritu se manifiesta en: Las cosas a las cuales dedicamos nuestro tiempo. Las que practicamos en la vida cotidiana. Las cosas que emocionan. Las cosas que motivan o que son la pasión de nuestras vidas. Las cosas a las cuales nos entregamos.

    • 10. Porque el ocuparse del Espíritu es vida y paz[726](8:6). Dos frutos positivos de dedicar su mente y su vida a la voluntad del Espíritu en vez de su propia voluntad egoísta (la carne).

    LOS QUE SON DEL ESPÍRITU CUMPLEN LA JUSTICIA DE LA LEY (8:9-13).

    Pero vosotros no vivís según la carne, sino según el Espíritu, si es que el Espíritu de Dios está en vosotros. Y si alguno no tiene el Espíritu de Cristo, no es de él. 10 Pero si Cristo está en vosotros, el cuerpo en verdad está muerto a causa del pecado, pero el espíritu vive a causa de la justicia. 11 Y si el Espíritu de aquel que levantó de los muertos a Jesús está en vosotros, el que levantó de los muertos a Cristo Jesús vivificará también vuestros cuerpos mortales por su Espíritu que está en vosotros. 12 Así que, hermanos, deudores somos, no a la carne, para que vivamos conforme a la carne, 13 porque si vivís conforme a la carne, moriréis; pero si por el Espíritu hacéis morir las obras de la carne, viviréis. (8:9-13).

    • 1. Mas vosotros no vivís según la carne, Es decir, no se vive como si fuera no creyente.

    • a. Es decir, no se vive como si fuera no creyente, una persona que no posee la presencia del Espíritu Santo.

    • b. Vivís: Literalmente "No estáis". Estar en la esfera de, o dentro de la potestad de la carne[727]

    • 2. Podemos vivir según el Espíritu (8:9). Vivimos conforme a la voluntad y el poder del Espíritu. Se menciona tres veces el Espíritu, en una referencia a la Trinidad. Vivir según el Espíritu (Santo) es posible porque el Espíritu de Dios (Padre) mora en el creyente. A su vez el que no tiene el Espíritu de Cristo (Hijo), no pertenece a Él y es por lo tanto un incrédulo bajo condenación[728]Jn 3:36.

    • 3. Si es que el Espíritu de Dios mora[729]en vosotros. El hecho es que el Espíritu Santo mora en los que pertenecen a Cristo 1 Cor 6:19,20.

    • a. Si[730]no es una frase condicional, sino afirmativa, que expresa una ralidad y debe traducirse "Puesto que[731]

    • b. Una persona que no tiene el Espíritu de Cristo no pertenece a Cristo, no es creyente. Porque Dios así sella o autentica a Sus hijos. Cuando uno cree en Cristo recibe el don del Espíritu Santo Efe 1:13,14; Jn 7:38,39; 14:16,17; Hech 2:38; 5:32.

    • c. Significa que dejar de vivir según la carne es posible para todo cristiano. De hecho el dejar de practicar el pecado es una de las evidencias de ser cristiano, el ser de Cristo 1 Jn 3:6-10.

    • 4. Pero si Cristo está en vosotros, El cuerpo en verdad está muerto a causa del pecado. A pesar de estar el cuerpo…muerto a causa del pecado

    • a. La referencia a la resurrección del cuerpo indica que habla de la muerte física debido al pecado Rom 5: 12. Los que han nacido de nuevo están sujetos a la muerte, la que se ha transmitido desde Adán. Pero debido a que el Espíritu mora en ellos, esperan la resurrección y la vida eterna Rom 8: 11[732]

    • b. El muerto el cuerpo, está destinado a muerte. Es un cuerpo mortal Rom 8:11; 6:12 en contraste con el espíritu del cristiano que vive ahora y seguirá viviendo eternamente.

    • c. La causa de la muerte física es el pecado. No se trata de los pecados de uno porque mueren niños inocentes que nunca pecaron. Es el pecado que entró en el mundo por Adán Gen 3:19; 1 Cor 15:21,22.

    • a. El espíritu vive, a causa de la justicia. (8:10). La causa de la vida del espíritu es la justicia. Es la justicia revelada en el evangelio Rom 1:16,17; 3:21-26. Aspectos de la frase el espíritu vive requieren comentario.

    • i.  #1, el texto original no dice "vive" sino "vida".

    • ii. #2, no hay acuerdo con respecto a si la palabra pneuma se refiere al espíritu humano o al Espíritu Santo, si se debe escribir "espíritu[733]o "Espíritu[734]Cranfield presenta evidencia suficiente para entender que aquí se refiere al Espíritu.

    • iii.  Parecen tener razón los que traducen "el Espíritu es vida". Esto es cierto por la justicia del creyente, eso es, su justificación. El creyente ha recibido el Espíritu como promesa de su resurrección futura; él es el Espíritu que da vida (8:1). La referencia no es a la vida espiritual que el Espíritu trae en la conversión como sería el caso al traducir "espíritu", sino a la resurrección futura del creyente. Se puede comparar la traducción de NVI de 1 Cor 15:45: "Así está escrito: "El primer hombre, Adán, se convirtió en un ser viviente"; el último Adán, en el Espíritu que da vida[735]

    • 5. Y si el Espíritu de aquel que levantó[736]de los muertos a Jesús mora en vosotros, el que levantó de los muertos a Cristo Jesús. (8:11) Se plantea como una realidad en la vida de todo creyente. El verbo en el texto griego es que traducido puede ser ¨despertar, llamar o resucitar¨,[737] entonces nos dice que, Dios así como resucitó a Jesucristo así también resucitará a los creyentes en Él

    • 6. Dios, vivificará[738]nuestros cuerpos mortales por su Espíritu (8:11). La resurrección de Cristo es garantía de la resurrección de los creyentes 1 Cor 6:14; 15: 20-23; 2 Cor 4: 14; Fil 3: 21; 1 Tes 4: 14.

    • a. Aunque el cuerpo es mortal, destinado a muerte física, en Cristo este cuerpo está destinado para vida por medio del poder del Espíritu de Dios.

    • b. Es el Espíritu de aquel que levantó de los muertos a Jesús (8:11). Como la muerte de Jesús es la base para que el espíritu viva, su resurrección es la base para que el cuerpo sea resucitado 1 Cor 15:20-24

    • c. El Mismo Espíritu se encarga de la resurrección (8:11).

    • 7. Podemos vivir en vez de estar destinados a morir (8:12,13).

    • a. Así que. Pablo ha hablado de que no hay condenación para los que están en Cristo, y viven de acuerdo a la ley del Espíritu. Debido a esto, «deudores somos, no a la carne, para que vivamos conforme a la carne» (Rom 8:12), sino para vivir conforme al Espíritu[739]

    • b. Deudores[740]Debido a la presencia del Espíritu, estamos bajo obligación de vivir de acuerdo con los dictados del Espíritu[741]

    • c. Porque no somos deudores[742]somos no a la carne para vivir conforme a ella (8:12). El creyente no está en deuda con la carne. ¿Por qué? Porque el creyente ya no está sujeto a esa carne[743]

    • d. Porque si vivís conforme a la carne, moriréis (8:13). Se emplea una construcción más enfática. Es practicar las obras de la carne Gal 5:19-21.

    • e. Porque si por el Espíritu hacéis morir las obras de la carne, viviréis (8:13). Hacer morir significa dejar de practicar estas obras Gal 5:24; Col 3:5-10. El verbo está en presente, lo que indica un proceso continuo

    • f. Las obras de la carne: "Las prácticas del cuerpo". Se refiriere a las acciones del cuerpo en su tendencia moral, proclives hacia el mal.

    HIJOS DE DIOS (8:14-17)

    • 1. Porque todos los que son guiados[744]por el Espíritu de Dios son Sus hijos (8:14). "Todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, son hijos de Dios" No es una imposición en el sentido de la relación de un esclavo a su amo, sino de hijo a Padre.

    • a. Son guiados "Están siendo guiados". El verbo en presente indica una acción continua. Esta obra del Espíritu es constante. El poder guiador del Espíritu Santo se describe como que conduce, pero que no fuerza. El Espíritu guía por medio de la Palabra que el Espíritu instruye en el camino de la justicia.

    • b. Son Sus hijos[745]La palabra hijo significa ¨hijos adultos o hijos mayores de edad¨.[746]

    • 2. Pues no habéis recibido el espíritu de esclavitud[747](8:15). "Pues no habéis recibido el espíritu de esclavitud para estar otra vez en temor, sino que habéis recibido el Espíritu de adopción, por el cual clamamos: «¡Abba, Padre!» «Espíritu de esclavitud» indica mentalidad de esclavo. Pablo enseña que Cristo vino y rompió toda esclavitud. Este era un espíritu de temor.

    • a. "No recibisteis". Puede entenderse como una referencia al comienzo de la vida cristiana, cuando el creyente es reconciliado, justificado. Gal 4: 56

    • b. El espíritu de esclavitud[748]Expresa la disposición de ánimo, hábito o estado sentimental, la expresión podría traducirse: Reconocimiento de esclavitud, sensación de servidumbre, espíritu servil"[749].

    • c. De otra manera estaríamos otra vez en temor[750]Por medio de la muerte de Cristo ya no estamos sujetos a "servidumbre" por el "temor" de la muerte. El nos ha librado del "imperio de la muerte" que tenía el diablo Heb 2:14,15

    • 3. Al recibir el Espíritu Santo, recibimos el espíritu[751]de adopción[752](8:15). La adopción significaba que el adoptado era hijo legítimo, heredero legal, del que lo adoptaba. Desde ese instante, y en adelante, el uno era considerado padre y el otro hijo, con iguales vínculos como los vínculos de sangre[753]

    • a. Los que hemos recibido el Espíritu Santo son adoptados por Dios como hijos suyos. Adopción[754]Según las leyes romanas respecto a la familia, el padre de familia tenía absoluta autoridad y control sobre la familia. Cualquiera que fuera la edad del hijo, el padre seguía teniendo autoridad sobre él. La adopción era un proceso elaborado. El adoptado adquiría:

    • i. Quedaba desligada de sus derechos respecto a su familia anterior, y gozaba de los derechos de su nueva familia, como hijo de sangre.

    • ii. El nacimiento de otros hijos no alteraba su posición y derechos en la casa del padre adoptivo.

    • iii. Las deudas anteriores del hijo adoptivo quedaban canceladas. Se consideraba que no tenía ninguna conexión con su pasado, y eso incluía sus deudas.

    • iv. El hijo adoptivo llegaba a ser hijo absoluto de su padre adoptivo.

    • v. El nuevo padre no podía desheredarlo, no venderlo. La relación era permanente[755]

    • vi. En la familia de Dios el hijo adoptivo tiene las mismas bendiciones, privilegios y derechos que el Hijo natural (8:17).

    • b. Por el cual clamamos[756]¡Abba[757]Padre! Si no hubiéramos recibido el espíritu de adopción no tendríamos el derecho de clamar a Dios como Padre nuestro.

    • i. Clamar: Significa gritos que expresan profunda emoción, el término se usa unas 40 veces en los Salmos para referirse al acto de clamar a Dios en oración; es una expresión de sentimientos fuertes.

    • ii. Abba significa Padre en una forma muy familiar; como el niño que clama papi. Es la forma de dirigirse a Dios que Jesucristo empleó en Getsemaní Mar 14:36).

    • 4. El Espíritu mismo confirma que somos hijos de Dios (8:16). " El Espíritu mismo da testimonio a nuestro espíritu, de que somos hijos de Dios".

    • a. Da testimonio[758]Su testimonio es que somos hijos de Dios. Es el mismo testimonio de Gal 4:6.

    • b. Juntamente con nuestro espíritu. Algunas versiones traducen "Se une a nuestro espíritu[759]La convicción del espíritu del creyente de que es hijo de Dios depende del testimonio del Espíritu Santo de que sí lo es: Nadie puede llamar a Jesús Señor, sino por el Espíritu 1 Cor 12: 3. Y nadie puede llamar Dios al Padre sino por el mismo Espíritu Gal 4: 6.

    • i. La palabra griega se compone de dos palabras: Juntamente con y dar testimonio. Significa que el Espíritu da testimonio juntamente con nuestro espíritu no a nuestro espíritu[760]Se requieren dos testigos para confirmar algún testimonio Det 19:15; Mat 18:16; 1 Tim 5:19.

    • 5. Los hijos de Dios somos también herederos (8:17). "Y si hijos, también herederos; herederos de Dios y coherederos con Cristo, si es que padecemos juntamente con él, para que juntamente con él seamos glorificados".

    • a. Herederos[761]de Dios. De las bendiciones prometidas Col 1:5; 1 Ped 1:4; Det 18:2; 32:9; Sal 73:25,26.

    • b. Coherederos[762]con Cristo. Gozaremos de la gloria eterna que Cristo heredó al volver al Padre. Parte del plan de Dios es que Jesucristo sea el primero entre muchos hermanos Rom 8:29,30. Enfatiza la seguridad de recibir la herencia. El ser hijos y herederos de Dios descansa sobre la relación con Cristo. Él ya ha entrado en la plena posesión de su herencia, y el hecho de ser coherederos es una garantía de la posesión efectiva de la nuestra[763]

    • c. Si es que padecemos[764]juntamente con él. Se usa tres palabras compuestas cuyo prefijo es la preposición "Con". Los cristianos son "coherederos con" o herederos juntamente; Sufrimos con" o juntamente; y somos "Glorificados juntamente".

    • i. Debe ser sufrimiento con Cristo 2 Tim 2: 11-12. La vida de Cristo es ejemplo para el creyente.

    • ii. Sufrir con él significa sufrir por causa de él y del Evangelio 1 Ped. 4: 13.

    • iii. Sufrir con Cristo significa luchar contra la tentación, de modo que como él fue perfeccionado "Por aflicciones" Heb 2: 9-10, 18 lo seamos nosotros.

    • iv. A medida que aumente su diferencia con el mundo vendrá hostilidad mayor Dan 12: 10.

    • v. Es requisito para ser coherederos y ser glorificados con El, no es ganar el derecho a la bendición de Dios por medio del sufrimiento. Es ser fiel a Cristo resultará en el padecimiento Mat10:16-39; 2 Tim 1:7,8; 2:3; 3:10-13; 4:5.

    • d. Juntamente con él seremos glorificados[765]No siempre tendremos que sostener la lucha entre carne y Espíritu. Viene el momento cuando estaremos libres de este cuerpo con todas sus debilidades.

    Libertados de la corrupción del cuerpo (8:18-39)

    INTRODUCCIÓN

    1. Pablo introdujo la bendición de la resurrección a la incorrupción eterna como parte de la libertad de Dios por medio de la fe en Cristo. No se trata de una bendición aislada de las otras presentadas sino la culminación de la vida de libertad que recibimos en Jesucristo.

    2. Es la esperanza de la gloria de Dios (5:2).

    3. Es la promesa de que seremos salvos por su vida (5:9).

    4. Es la esperanza de ser en la semejanza de su resurrección (6:5).

    5. Es la confianza que Dios vivificará nuestros cuerpos mortales por su Espíritu que mora en nosotros (8:11).

    6. Es la promesa de ser coherederos con Cristo (8:17).

    7. Es la seguridad de ser glorificados juntamente con Cristo (8:17).

    LA ESPERANZA GLORIOSA DE LOS HIJOS DE DIOS Tengo por cierto que las aflicciones del tiempo presente no son comparables con la gloria venidera que en nosotros ha de manifestarse,   (8:18). En un sentido, no somos salvos completamente porque vivimos en un mundo caído y en un cuerpo que es parte de él. Pablo personifica a la creación para expresar el mismo sentir que tenemos dentro de un cuerpo que padece[766]

    • 1. Pues tengo por cierto[767]que las aflicciones[768]del tiempo presente. La palabra se traduce "piensas" Rom 2: 3, "concluimos" Rom 3: 28, "pienso" 2 Cor 11: 5 y "pretendo" Fil 3: 13. Pablo inicia el párrafo sobre la esperanza cristiana refiriéndose a los padecimientos (v. 18) que han sido mencionados en el versículo anterior. No es una opinión o suposición; equivale a decisión. Estas son para el tiempo presente en absoluto contraste de la eternidad.

    • 2. Por causa de nuestra esperanza soportamos las aflicciones del tiempo presente (8:18). Pablo no presenta ideas ilusorias. Presentó la verdad, reconoce que los sufrimientos son inevitables. Están presentes todo el tiempo[769]

    • 3. No son comparables[770]No se trata de algo que a penas vale la pena. No hay comparación adecuada.

    • a. Leve // Peso

    • b. Momentánea // Eterno

    • c. Se ven // No se ven

    • d. Temporales // Eternas

    • 4. Tengo por cierto: No hay duda alguna.

    • 5. Las aflicciones son inevitables para los hijos de Dios.

    • a. Hay aflicciones que brotan de nuestra participación en esta creación caída. Rom 8:20.

    • b. También hay sufrimientos que vienen debido a nuestra relación con Jesucristo Jn 15:18-25[771]

    • 6. La gloria[772]venidera que se manifestará[773]incluye:

    • a. La victoria gloriosa sobre la muerte física en la resurrección.

    • b. La exaltación gloriosa al cielo.

    • c. La vida gloriosa y eterna que gozaremos en la presencia de Dios.

    LA REALIZACIÓN DE NUESTRA ESPERANZA GLORIOSA

    ES EL ENFOQUE DE TODA LA CREACIÓN porque el anhelo ardiente de la creación es el aguardar la manifestación de los hijos de Dios. 20 La creación fue sujetada a vanidad, no por su propia voluntad, sino por causa del que la sujetó en esperanza. 21 Por tanto, también la creación misma será libertada de la esclavitud de corrupción a la libertad gloriosa de los hijos de Dios.22 Sabemos que toda la creación gime a una, y a una está con dolores de parto hasta ahora. (8:19-22).

    • 1. Porque el anhelo ardiente[774]de la creación. Esta palabra significa es "aguardar con cabeza levantada"; implica un desviarse de todo lo demás y fijar los ojos en un solo objeto. Sugiere esperar con la cabeza levantada y los ojos fijos en ese punto del horizonte desde el cual se espera que venga el objeto.

    • a. El mundo natural se representa como una persona que tiene la vista y el corazón fijados con concentración y anticipación en otra persona que observa acercarse poco a poco de lejos. Anhela intensamente su llegada, pero solo puede esperar.

    • b. Este anhelo es por la llegada del momento cuando los hijos de Dios sean revelados en toda su gloria en contraste con las aflicciones que sufren y la creación en este tiempo. (8:23,25; 1 Cor 1:7; Fil 3:20; Heb 9:28).

    • 2. La creación[775]En las escrituras se describa a la naturaleza como capaz de ser consciente Det 32: 1; Isa 35: 1; Ose. 2: 21-22[776]Es una personificación del mundo natural.

    • 3. La manifestación de los hijos de Dios (8:19)

    • a. Aguardar[777]Gr. palabra que aparece ocho veces en el NT, Rom 8: 23, 25; 1 Cor 1: 7; Gal 5: 5; Fil 3: 20; Heb 9: 28; 1 Ped 3: 20[778]Significa esperar algo con anhelo concentrado y expectativa, con la atención completamente separada de lo demás.

    • b. La manifestación[779]literalmente la revelación.

    • c. La condición de los hijos de Dios en el presente no es su condición permanente. Viene el día cuando será revelada Col 3:3,4 cuando seamos transformados en semejanza de la gloria de Cristo 1 Jn 3:1,2; Col 3:4; 1 Cor 1:7; 2 Tes 1:6-10; 1 Ped 1:3-9,13; 4:12,13; 5:1.

    • 4. La creación fue sujetada a vanidad (8:20).

    • a. Vanidad[780]Esta palabra expresa carencia de propósito, frustración, lo que desvanece las expectativas.

    • b. Sujetada[781]La flexión del verbo indica que esta sujeción ocurrió en un momento específico, cuando Adán cayó en pecado. La transgresión produjo consecuencias que se propagaron a todo el mundo.

    • c. Incluye la corrupción material y el sufrimiento y deterioro que lo caracteriza.

    • 5. La sujeción de la creación no fue por su propia voluntad, sino por causa del que la sujetó en esperanza[782](8:20).

    • a. La sujeción de la creación a la vanidad fue decisión de Dios. Esta situación se produjo no por elección de la creación "no por su gusto[783]sino por decisión de "aquel que la sujetó", una referencia a Dios y no a Adán o a Satanás como han sugerido algunos comentaristas[784]

    • b. La sujeción no es permanente porque Dios la sujetó en esperanza. No hay movimiento ecológico que pueda volver al mundo a la incorrupción, pero Dios que la sujetó a vanidad promete librarlo de esta maldición.

    • 6. La esperanza de la creación es que ella será libertada[785](8:21).

    • a. Libertada de la esclavitud de corrupción. Será efectuada mediante la destrucción de los elementos actuales 2 Ped 3:10-12; Apoc 21:1,4; 22:3. Libertada a la libertad gloriosa de los hijos de Dios.

    • b. Dios creará un nuevo mundo caracterizados por la gloria e incorrupción que gozarán los hijos de Dios.

    • c. El cuerpo que los hijos de Dios será diferente del cuerpo terrenal. Será incorruptible, glorioso, poderoso y espiritual 1 Cor 15:42-44. Y la nueva creación en su libertad sea de la misma naturaleza: incorruptible, gloriosa, poderosa y espiritual.

    • 7. La creación gime[786]a una (8:22). A causa de la caída. Por causa del pecado la muerte entró en el mundo y adquirió su dominio. Esto hace referencia a la humanidad, y todo cuanto vive en el mundo. Pero eso no quiere decir que el estado presente será su estado final, el cielo nuevo y la tierra nueva gozarán de una perfección[787]Gemir es una expresión audible que señala la angustia emocional de la persona por una experiencia o situación difícil o dolorosa Hech 7:34; Heb 13:17; 2 Cor5:2,4.

    • 8. La creación a una está con dolores de parto hasta ahora (8:22).

    LA REALIZACIÓN DE NUESTRA ESPERANZA GLORIOSA ES EL ENFOQUE DEL ANHELO DE NOSOTROS MISMOS QUE TENEMOS LAS PRIMICIAS DEL ESPÍRITU "Y no sólo ella, sino que también nosotros mismos, que tenemos las primicias del Espíritu, nosotros también gemimos dentro de nosotros mismos, esperando la adopción, la redención de nuestro cuerpo, 24 porque en esperanza fuimos salvos; pero la esperanza que se ve, no es esperanza; ya que lo que alguno ve, ¿para qué esperarlo? 25 Pero si esperamos lo que no vemos, con paciencia lo aguardamos". (8:23-25).

    • 1. No sólo ella. Los cristianos junto con la creación, suspiran anhelando el tiempo cuando su adopción será completa y sus cuerpos sean transformados.

    • 2. Nosotros mismos. La repetición tiene el propósito de dar énfasis[788]

    • 3. Las primicias[789]del Espíritu (8:23). La vida no está libre de sufrimientos. Ya tenemos la redención de nuestro espíritu. En el futuro, la adopción será completa, teniendo "la redención de nuestro cuerpo" Rom 8:23.

    • a. Tenemos: Ahora el Espíritu Santo mora en nosotros.

    • i. Primicias[790]La idea es que después de estos primeros frutos, habrá más.

    • ii.  Las "Primicias del Espíritu" deben entenderse como los dones del Espíritu Santo y mediante la transformación del carácter Gal 5: 22-23 Pablo usa el término traducido "las primicias" 7 de las 9 veces que aparece en el NT 11:16; 16:5; 1 Cor 15:20, 23; 16:15; 2 Tes 2:13; Sant. 1:18; Apoc 14:4. Se refiere a la práctica en el AT de traer al templo como ofrenda a Dios la primera parte de la cosecha Exo 22:29; Lev 23:10, 11; Num 18:12; Det 18:4. Por una parte, representaba la consagración de toda la cosecha y, por otra parte, era el anticipo del resto de la cosecha[791]

    • b. El Espíritu Santo en nosotros se identifica como anticipo de las bendiciones que recibiremos en aquel día y la seguridad que las recibiremos 2 Cor 1:22; 5:5; Efe 1:13,14. Morris señala que la frase "que tenemos las primicias del Espíritu" traduce un participio (literalmente "teniendo las primicias del Espíritu") que puede entenderse de dos maneras: "porque tenemos" o "aunque tenemos". Según Morris las dos ideas son ciertas en la experiencia del creyente[792]

    • c. Nosotros también gemimos dentro de nosotros mismos Gemimos porque estamos sufriendo en este mundo Rom 8:18. ¿Por qué gime? Ya que «hemos recibido el espíritu de adopción» Rom 8:15, y somos hijos de Dios, y coherederos con Cristo. Sin embargo, todavía no se ha recibido esa herencia. Lo que ha recibido es su espíritu en calidad de anticipo y garantía de la gloria venidera[793]

    e.Esperando la adopción. Está relacionada con la relación legal con Dios. La recepción del Espíritu Santo nos identifica como hijos de Dios con derecho de ser herederos de Dios 8:15-17; Gal 4:5-7; Efe 1:4-14.

    f.La redención de nuestro cuerpo. La herencia concluye en la redención de nuestro cuerpo.

    g.En esperanza[794]fuimos salvos (8:24,25). La esperanza, aunque diferente de la fe 1 Cor 13: 13 es inseparable de ella.

    La ayuda divina para lograr nuestra esperanza gloriosa (8:26-39)

    La ayuda del Espíritu Santo  De igual manera, el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad, pues qué hemos de pedir como conviene, no lo sabemos, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles. 27 Pero el que escudriña los corazones sabe cuál es la intención del Espíritu, porque conforme a la voluntad de Dios intercede por los santos. (8:26-27).

    A pesar de los padecimientos de la era presente (v. 18), de los gemidos de la creación (v. 22) y de los creyentes (v. 23), la presencia del Espíritu es la garantía que asegura la consumación final de la redención (v. 23). Y, aunque seguimos viviendo en la era presente con sus aflicciones, hay seguridad de la eficacia de la oración a pesar de nuestra flaqueza (vv. 26, 27); además, hay seguridad del obrar eficaz de Dios en absolutamente todas las variadas experiencias de esta vida para lograr su propósito final[795]

    • 1. El Espíritu Santo intercede en oración porque conoce la dificultad que tenemos para entender nuestros sentimientos y deseos. Él interpreta los gemidos de nuestro ser al Padre[796]

    • a. De la misma manera (8:26). O "en la misma forma". Es la ayuda del Espíritu como motivo de ánimo para esperar en medio de los sufrimientos, la gloria que será revelada. Ambos, la esperanza y el Espíritu Santo, sostienen. El Espíritu de Dios se une con nosotros y con el mundo en el anhelo de que se complete nuestra salvación[797]

    • i. No solamente tenemos las primicias del Espíritu para animarnos y darnos confianza que algún día gozaremos de la redención de nuestro cuerpo.

    • ii. De la misma manera tenemos otra ayuda del Espíritu Santo en nuestra lucha diaria mientras estamos en este mundo.

    • b. Nos ayuda en nuestra debilidad[798](8:26). La debilidad es: qué hemos de pedir como conviene, no lo sabemos. "De igual manera, el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad, pues qué hemos de pedir como conviene, no lo sabemos, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles"

    • i.  Ayuda[799]Gr. "hacer frente juntos", por lo tanto, "ayudar [a alguien]", "estar al lado de [alguien]". Se compone de una raíz que significa "tomar, recibir" y dos prefijos, uno de las cuales significa "con" y el otro, "frente a". Robertson sugiere el cuadro de dos personas, una de las cuales viene a ayudar al otro a llevar un tronco poniéndose en la otra punta del tronco. Este verbo aparece en Luc. 10: 40, donde Marta le pide a Jesús que envíe a María para que le ayude en su trabajo. No dice que quita las debilidades, sino que ayuda y da fuerzas para vencer 2 Cor 12: 8-9.

    • ii. Pedir[800]como conviene[801]O "como es necesario". Debido al nuestra visión limitada, no sabemos si lo que pedimos será lo mejor. Dios sabe el fin desde el principio; por lo tanto, las oraciones deben expresar sumisión a la voluntad divina. Mat 26: 39; Jn 12: 27-28.

    • iii. Aunque conocemos la revelación de la voluntad de Dios en Su Palabra, a veces no sabemos lo que Dios desea en determinada situación. 1 Cor 2:10.

    • iv. Sabemos lo que queremos, pero a veces no sabemos lo que necesitamos. En otras ocasiones creemos saber qué pedir, pero nos equivocamos Det 3:23-26; 2 Cor 12:7-10. En estas ocasiones de ignorancia, tenemos la ayuda del Espíritu Santo.

    • v. El Espíritu Santo conoce el futuro y la voluntad de Dios y sabe cómo comunicar sus intenciones al Padre.

    • c. La ayuda es: el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos[802]indecibles[803]

    • i. El Espíritu Santo agarra el problema con nosotros contra el enemigo. El se para a nuestro lado contra cualquier problema, dándonos la seguridad de resolverlo y salir bien al final.

    • ii. No dice nada a nosotros; no escuchamos nada y no sentimos nada cuando intercede. Se comunica con Dios a favor nuestro.

    • iii. La palabra "Indecibles" aparece solo aquí en el NT y ha sido interpretada de dos maneras. Que se refiere a lo trascendental de los gemidos; no pueden expresarse en el idioma común del hombre "gemidos inefables[804]O que se refiere a gemidos "que no pueden expresarse con palabras[805]

    • iv. Es inaudible lo que comunica el Espíritu. El verbo "gemir" se emplea para describir los suspiros de Jesús cuando curó al sordomudo Mar 7: 34, y los sentimientos del cristiano que ansía el día de la redención Rom 8: 23

    • d. La intercesión del Espíritu "Precisamente el Espíritu viene en auxilio de nuestra debilidad[806](8:26,27). En medio del sufrimiento, cuando no sepamos cómo (ni para que debemos de) orar, no hemos de desesperarnos. El Espíritu está ayudándonos a vivir en este mundo[807]

    • e. Intercede[808]Esta es la única vez que aparece este verbo compuesto en el NT. Es la raíz común para "interceder" reforzado con un prefijo que recalca la acción de interceder a favor de otro[809]La forma simple aparece 5 veces Hech. 25: 24; Rom 8: 27, 34; 11: 2; Heb 7: 25, significa "encontrarse con", "estar de acuerdo con", y por lo tanto, "suplicar". La palabra más larga, destaca la idea de "en favor de él". La obra del Espíritu Santo es impulsarnos a orar, enseñarnos lo que debemos decir y hablar por medio de nosotros Mat 10: 19-20; Rom 8: 15; Gal 4: 6

    • f. El Espíritu y nuestra ignorancia "qué hemos de pedir como conviene[810]"no lo sabemos[811]Hay una oración que el Espíritu Santo hace al Padre. Y no lleva expresiones verbales, que se expresa con gemidos indecibles, y solo el Espíritu Santo le puede comunicar al Padre. Además, el Espíritu Santo "escudriña los corazones," y por consiguiente, "sabe cuál es la intención del Espíritu." Así, "conforme a la voluntad de Dios intercede por los santos" Rom 8:27[812]

    • i. El que escudriña[813]los corazones[814]sabe cuál es la intención del Espíritu (8:27): Dios no tiene problemas para saber lo que el Espíritu tiene en mente porque Él sabe lo que hay en todo corazón.

    • 2. Conforme a la voluntad de Dios intercede por los santos (8:27): Esta es la petición perfecta que El puede hacer porque conoce lo que Dios desea. "Pero el que escudriña los corazones sabe cuál es la intención del Espíritu, porque conforme a la voluntad de Dios intercede por los santos".

    • 3. La ayuda de la providencia divina (8:28) R. A. Torrey[815]declaró que el v. 28 es "una almohada mullida para un corazón cansado". Cuando se agota la capacidad de sufrir o de comprender el por qué de una dificultad, todavía podemos encontrar alivio y descanso en este "sabemos". La experiencia nos lleva muchas veces a declarar "no sabemos" (v. 26), pero en este caso el "sabemos" no se refiere a la experiencia sino al conocimiento que por la fe tenemos acerca de to revelado en cuanto a la benefactora providencia de Dios[816]

    • a. La confianza: Sabemos[817]No hay duda debido a lo que Dios ha revelado Su obra y gracias a la intercesión del Espíritu Santo conforme a la voluntad de Dios.

    • b. La bendición: Todas las cosas les ayuda[818]a bien. No dice que todo sale bien, porque ese no es el caso. Lo que dice es que todas las cosas, sean positivas, sean enfermedades y tragedias, a la larga al hijo de Dios le ayudan a bien[819]

    • i. Sunergeo significa "obrar juntamente" Mar 16:20; 1 Cor 16:16; 2 Cor 6:1; Sant 2:22. Y verbo está en la forma singular. Por tanto, el texto no dice literalmente que todas las cosas obran juntamente a bien sino que "él" obra juntamente todas las cosas a bien.

    • ii.  Se refiere a la obra providencial de Dios de obrar en todo lo que sucede en la vida de Sus hijos con un fin: bien. Por eso, la NVI traduce, "Dios dispone todas las cosas para el bien de quienes lo aman[820]Otras versiones aceptan a Dios como sujeto pero traducen el verbo de manera diferente "él coopera en todo para su bien[821]

    • iii.  No quiere decir que suceden cosas buenas o agradables en la vida del cristiano.

    • iv.  No quiere decir que todo acontecimiento o situación tiene una solución agradable.

    • v.  Quiere decir que, suceda lo que suceda, la confianza es que Dios lo puede usar para el bien de Sus hijos. Pero hay que tomar en cuenta que bien que Dios tiene en mente. Su meta es que seamos hechos conformes a la imagen de Su Hijo (8:29), no que estemos cómodos o saludables en esta vida.

    • vi.  En el contexto de las aflicciones del cuerpo, Dios no está prometiendo librar a Sus hijos del padecimiento, sino que promete usar estos padecimientos para nuestro bienestar espiritual Rom 5:3-5; 2 Cor 12:7-10; Sant 1:2-4.

    • c. Los recipientes:

    • i. Los que aman[822]a Dios Los que aman a Dios lo hacen porque Él los ha salvado según su plan y elección. La esperanza de Rom 8:17-25 de llegar a la santificación completa (glorificación) es segura. Lo que Dios comienza, lo termina[823]

    • 1.  Esta frase aparece primero en el texto y tiene énfasis especial. Todo lo que se dice después está referido a estas personas. Cranfield afirma que tiene un trasfondo en el AT y aparecen en el NT Mar 12:30, 33; Luc 10:27; Jn 5:42; 1 Cor 2:9; 8:3; Sant. 1:12; 2:5; 1 Jn 5:1, 2[824]

    • 2. Este es el requisito para recibir la bendición de Dios Mat 22:36,37; 1 Cor 2:9; 8:3.

    • 3. Este amor se manifiesta en la obediencia a los mandamientos Jn 14:15,23; 1 Jn 5:3; 2:15.

    • ii. Los que conforme a su propósito[825]son llamados.

    • 1. Dios llama a la salvación, mediante la santificación por el Espíritu y la fe en la verdad 2 Tes 2:13,14.

    • 2. El propósito es que seamos glorificados Rom 8:29-30; Efe 1:3-14.

    • 3. Tenemos que sujetar nuestras vidas al propósito que Dios ha establecido. El ha puesto los límites y debemos acomodarnos a Su propósito y aceptar Su llamado.

    EL PROCESO DE ETRNA SEGURIDAD "A los que antes conoció, también los predestinó para que fueran hechos conformes a la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos 30 Y a los que predestinó, a estos también llamó; y a los que llamó, a estos también justificó; y a los que justificó, a estos también glorificó".  Rom 8:29-30

    • 1. La acción divina: Predestinó[826](8:29). Todos los verbos están en tiempo pasado, aunque una de ellas se realizará en el futuro. Pablo escribe en tiempo pasado porque Dios es eterno, y Él ya tiene todo hecho 2 Cor 1:19 20. Dios vive en un eterno presente, mientras estamos sujetos al tiempo, con su pasado, presente y futuro[827]

    • 2. Los recipientes: A los que antes conoció[828](8:29) El anticipado conocimiento de Dios. La palabra significa conocer íntimamente. Quiere decir amar o escoger. Gen 4:1; Jer 1:5; Am 3:2; 1 Cor 8:3; 1 P. 1:20[829]

    • a. Las palabras "Antes conoció, o de antemano conoció" Habla de una relación especial con la implicación de que Dios las escogió antes de la fundación del mundo para tal relación[830]

    • b. Este es el primer paso en este proceso. Los demás están basados en lo que Dios conoció de antemano.

    • c. Debido a no tomar en cuenta el anticipado conocimiento de Dios, personas no entienden cómo Dios puede predestinar y al mismo tiempo dejar que decidamos. Rom 8:27; Heb 4:13; Isa 46:10; Sal 139:4,16.

    • d. Conocer los pensamientos, actitudes, acciones y reacciones de antemano no significa que Dios obliga a pensar o actuar de determinada manera. Pero sí hace que sea posible que Dios obre de manera providencial sin violar la libertad para lograr Su propósito divino.

    • e.  La predestinación está fundada en lo que Dios conoció de antemano. Dios obró El de acuerdo con su "Presciencia" 1 Ped 1:2. Y pudo escribir nombres en el libro de la vida "Desde la fundación del mundo" Apoc 17:8; Rom 11:2.

    • 3. Los predestinó[831](8:29,30). Significa predeterminar, decidir de antemano, poner límite u horizonte.

    • a. Significa que Dios ha puesto ciertos límites sobre nuestra vida en la tierra, límites espirituales.

    • i. Dios predestinó la manera de llegar a ser adoptados hijos suyos: tiene que ser por medio de Jesucristo Efe 1:5.

    • ii. Dios predestinó un plan para salvarnos: el evangelio de Cristo 1 Cor 2:7,8. Dios decidió antes de crear el mundo, que iba a salvar a los hombres por medio del mensaje de la cruz.

    • 4. Dios predestinó bendición eterna para Sus hijos, los que El antes conoció: para que fuesen hechos conformes[832]a la imagen[833]de su Hijo. El Padre predeterminó que los que le aman (8:28) sean transformados a la semejanza de Jesús Fil 3:20,21; 1 Jn 3:2.

    • 5. Para que él sea el primogénito[834]entre muchos hermanos:

    • 6. Los llamó[835]Dios llama por medio del evangelio 2 Tes 2:14,15; Gal 1:6[836]

    • 7. Los justificó[837]Los absolvió; los declaró inocentes, sin culpa por los pecados que cometieron. Rom 3:21-28; 4:1-12

    • 8. Los glorificó[838]Dios desea que el ser humano goce de la gloria eterna

    • 9. Esto sucedió en la mente o propósito de Dios antes de la fundación del mundo. Quedó establecido que los que aman a Dios son conocidos por Dios 1 Cor 8:3. Quedó establecido que serán glorificados y entrarán en la gloria como coherederos con Jesucristo. Con este fin los llamó por medio del evangelio y los justificó por medio de la fe en Jesucristo cuando murieron con El en el bautismo.

    EL FAVOR DE DIOS ¿Qué, pues, diremos a esto? Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros(8:31). Lo expuesto ha sido para hacer enfatizar que Dios está por nosotros, y no permitirá que nada interrumpa su plan de salvación en la resurrección. Para quitar cualquier posibilidad de que algo o alguien interfieran en ese proceso, elabora una serie de preguntas[839]

    • 1. ¿Qué, pues, diremos[840]a esto?

    • 2. Dios es por nosotros. Quien ataca el derecho de un creyente, ataca a Dios y su justicia. Así que, no hay posibilidad de sacar al creyente de su camino a la gloria[841]

    • 3. ¿Quién contra nosotros? Hay muchos contra nosotros pero en vano se oponen porque Dios es por nosotros. Por esta razón somos más que vencedores.

    • 4. La prueba irrefutable de la ayuda de Dios El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿cómo no nos dará también con él todas las cosas? (8:32).

    • a. Dios no escatimó[842]ni a su propio Hijo.

    • b. Dios lo entregó por todos nosotros.

    • c. ¿Cómo no nos dará[843]también con él todas las cosas? Habiendo sacrificado ya a Su Hijo por nosotros, cualquier otro favor que necesitemos no le cuesta.

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