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El mercado laboral de la niñez en el Perú. Microeconomía


    1. Aspectos generales sobre el trabajo infantil
    2. Condiciones en las que trabajan los niños
    3. Determinación de la población económicamente activa y su desempeño en este mercado
    4. Programas y políticas para eliminar el trabajo infantil
    5. Conclusiones
    6. Bibliografía

    I. INTRODUCCIÓN

    En el Perú el mercado laboral infantil se presenta cada vez más alarmante, pero esto no sólo se da en países subdesarrollados ni pobres, sino que también se presenta en países desarrollados de Asia, África y la Unión Europea. Estos niños trabajan sin autorización legal y fuera del marco de una actividad o empresa, prácticamente se parte de un modelo de economía de subsistencia, en donde se dedican al comercio ambulante y la venta callejera.

    Las familias pobres tienen una mayor necesidad de que sus hijos trabajen a fin de obtener ingresos que contribuyen a la supervivencia o ingresos complementarios ya que los padres de los mismos se encuentran a menudo desempleados o subempleados. La supervivencia, en países como el nuestro, tiene una mayor prioridad que el desarrollo, y los intereses de los niños trabajadores se miden por la contribución que aporta a la familia y por tanto a su propia supervivencia.

    El presente trabajo pretende analizar el sector en el que se desenvuelven estos niños y las implicancias económicas y sociales que causa el trabajo infantil en el marco general del país.

    II. ASPECTOS GENERALES SOBRE EL TRABAJO INFANTIL

    2.1. Definición del Trabajo Infantil

    La OIT reconoce el trabajo infantil a toda actividad que realizan los niños en el campo de la población, comer o servicios.1

    En un concepto más amplio, éste formula que el trabajo infantil será, en consecuencia, aquel trabajo o actividad económica que es realizado por niños o niñas, es decir, menores de 15 años de edad, cualquiera sea su condición laboral.2

    Giangi Ichibotto, señala que por trabajo infantil debe entenderse cualquier actividad de un menor de edad que contribuye a la satisfacción de las necesidades materiales básicas.3

    Para Verdara resulta más cercano a la realidad definir al trabajo infantil como la actividad laboral realizada entre una edad mínima de ingreso al trabajo y una edad máxima, en que cesa la obligación escolar.

    Además, los autores concuerdan en que el trabajo infantil afecta a los derechos fundamentales que tiene el niño, como el derecho a la educación y a la salud, al bienestar y a la protección contra la explotación.

    2.2. Modalidad de Trabajo Infantil

    2.2.1. Áreas Urbanas

    Existe en nuestro país, una creciente población de niños que trabajan desde muy temprana edad que viven día a día en situación de alto riesgo, tanto físico como moral.

    En las ciudades, las principales actividades infantiles son el trabajo en microempresas y talleres informales, tiendas familiares y a domicilio, así como el trabajo callejero y el servicio doméstico, que es la principal ocupación urbana de aquellos de sexo femenino.

    El número de menores que vemos en las calles dedicándose a diversas actividades aumentan día tras día. Cada vez hay más niños vendiendo periódicos, golosinas, cigarros, niños que cuidan carros, niños que cargan bultos, niños payasos, cantores, cobradores de micros, lustrabotas… cada vez más expuestos a los problemas sociales.4

    En cuanto a nuestro país se observa que en 1993 del total de la PEA infante-juvenil registrada (497 mil), el 54% (267 mil) se ubica en áreas urbanas mientras que el 46% restante (229 mil) habita en zonas rurales. Se ha desplazado el foco de concentración del trabajo de menores de edad en el Perú del campo a las ciudades.

    Esto tiene que ver con el acelerado proceso de urbanización de la sociedad en su conjunto. El Perú de hoy es un país dominadamente urbano. El 705 de peruanos viven en ciudades; por consiguiente, la mayoría de niños y adolescentes también se localizan en zonas urbanas.5

    2.2.2. Áreas Rurales

    Una tendencia preocupante, según O.I.T., es la edad tan temprana en la cual los niños empiezan a trabajar; también este fenómeno se da particularmente en las zonas rurales, donde puede suceder que los niños empiecen a trabajar a los 5 o a los 7 años. Este es un aspecto singularmente grave del problema del trabajo infantil, ya que cuanto más pequeños ingresan al empleo más vulnerables son a los accidentes, la explotación y el maltrato en el lugar de trabajo.6

    La mayor parte de los niños y niñas que trabajan, se encuentran en las zonas rurales, en promedio, alrededor de 60% de aquellos dedicados a actividades económicas. La proporción varía entre 40 y 83.3% en los países de América Latina sobre los que se dispone información.

    En cuanto a nuestro país, la demanda de mano de obra infantil y adolescentes en el campo es consecuencia del atraso tecnológico rural, la pobreza del suelo, la falta de recursos, la baja productividad, el aumento de las migraciones, l que hace que los menores trabajen desde edades muy tempranas.

    2.3. Evolución del Trabajo Infantil

    Durante la mayor parte de nuestra historia la población creció lentamente debido a las altas tasas de mortalidad prevalecientes. Sólo con los avances de la medicina y la difusión generalizada de la salud pública a partir de mediados de este siglo, las tasas de mortalidad comenzaron a declinar aceleradamente y se dio origen a un período de explosión demográfica sin precedentes.

    El mencionado proceso se inició en la década del cincuenta, según información censal del INEI, la tasa de crecimiento neto de la población peruana se elevó de 1.7% a inicios de los 50’s a 2.0% en 1961, 2.8% en 1981, 2.0% en 1993 y proyectarse a 1.8% hacia el año 2005. Como consecuencia de este proceso el total de la población peruana se ha multiplicado por cuatro en los últimos 50 años.

    El hecho de que en ciertos períodos la población crezca más aceleradamente que lo normal, origina la existencia de cohortes más números que otros.

    Cuando esto ocurre (como entre 1960 y 1980) entonces, aproximadamente 20 años más tarde esos grupos estarán presionando por ingresar como oferta al mercado laboral y, evidentemente, lo harán en condiciones de mayor competencia por los puestos de trabajo que la economía genera. En números absolutos, entre 1990 y 1996 la fuerza laboral en Lima Metropolitana creció en 470,000 personas.

    En el caso del país la baja sensibilidad de la tasa de desempleo a los cambios en el producto se debe al comportamiento procícilio de la fuerza laboral, y al hecho de que al perder su empleo los trabajadores se retiran del mercado. Asimismo, encontramos que la tasa de crecimiento del producto debe ser de al menos 3.31% para que el desempleo no se eleve, debiendo ser de alrededor de un 11% para reducir la tasa de desempleo en un punto porcentual.7

    Si comparamos, 1990 con 1995, año en el que el empleo llegó a su máximo nivel, el crecimiento del empleo fue de 531,000. Así, la fuerza de trabajo en Lima se incrementó en un 20.9%, es decir, un crecimiento anualizado de 2.9%. Durante ese período, el empleo creció a una tasa de 3.1% anual. El número absoluto de desempleados en 1996 respecto de 1990 cayo ligeramente, a un ritmo anual de 0.1%.

    Si bien el desempleo en términos absolutos fluctuó de manera importante, se observa que en 1996, tuvo un nivel similar al de 1990. Debe notarse que las tasas de crecimiento del número de desempleados se ven afectadas por una fuerte caída del número de desempleados en 1991, año que coincidió con un retiro importante de trabajadores fuera de la fuerza laboral.

    La tasa de actividad se mantuvo estable en alrededor de 60%; las excepciones fueron los años 1991 y 1992, cuando ésta descendió a 55.5 y 56.6% respectivamente. La tasa de desempleo tuvo un comportamiento bastante errático habiéndose reducido fuertemente y de manera sorprendente en 1991, el mismo año en que la tasa de actividad tuvo su valor más bajo. El año de más alto desempleo fue 1993 en el que este llegó a 10%.

    Debe notarse que hay dos períodos claramente marcados. Entre 1989 y 1992, el desempleo estuvo estancado en Lima Metropolitana en un promedio de 2’315 mil personas. Dado que cada año se incorporaban en promedio 100,000 personas al acervo de personas en edad de trabajar, la relativa estabilidad del desempleo en los primeros años, así como la reducción en 1991, se explica porque una proporción pequeña de estas personas se incorporaron a la fuerza de trabajo.

    III. CONDICIONES DEL TRABAJO INFANTIL

    3.1. Trabajo Infantil en Condiciones Extremas

    La extracción de minerales, la fabricación de ladrillos y la explotación sexual infantil son algunos de los trabajos a los que se sometan diariamente casi 1.5 millones de niños en Perú, según informes del Ministerio de Trabajo. Las ocupaciones de estos menores comp0renden desde el trabajo en minas o basureros hasta la elaboración de ladrillos y otras actividades más nocivas para su integridad física, psicológica y moral, como el trabajo doméstico o la explotación sexual.

    Un ejemplo de un caso de trabajos extremos infantiles es el ocurrido en Santa Filomena, una comunidad minera artesanal ubicada en la región Ayacucho en la sierra peruana. La historia de este caserío comienza en la segunda mitad de los años ochenta, cuando algunos hombres de las zonas más golpeadas por la violencia terrorista, la crisis del campo a principios de los años noventa, llegaron allí con la finalidad de obtener un poco de oro para el sustento de sus familias.

    Desde entonces Santa Filomena se ha convertido en un caserío minero de 1500 habitantes de los cuales el 47% son niños; que al inicio de la intervención eran en su gran mayoría, trabajadores. En Santa Filomena los niños trabajaban por las mismas razones que los hacen los niños de casi todos los centros de minería artesanal del Perú, llaméense estos Ananea, la Rinconada, Sandia y Huaypatuhe o Madre de Dios. Porque sus padres son muy pobres, porque no existen escuelas. Las que hay son de muy baja calidad, porque el Estado no está presente en sus comunidades o porque predominan en sus familias patrones culturales que conciben al niño como "un adulto pequeño", como una fuerza de trabajo que es necesario poner a producir más temprano que tarde.

    3.2. Explotación Infantil

    "En el Perú, unos 50,000 niños trabajan en actividades rewlacionadas con la explotación del oro y manipulan mercurio a diario sin protección alguna. La mortalidad allí es significativa", los niños mineros trabajan bajo las condiciones más insalubres imaginables: mueren por asfixia, aplastados en derrumbes o por el avance inexorable de la silicosis, una enfermedad que corroe sus pulmones por la inhalación de sílice.8

    La expresión "formas extremas de trabajo infantil" abarca la totalidad de formas de esclavitud y afines a ésta, como la venta y el tráfico de niños, el trabajo forzoso u obligatorio, la servidumbre y la vinculación laboral por deudas, la utilización, contratación u oferta de niños en actividades ilegales como la prostitución y la producción de pornografía o las actuaciones pornográficas, así como la realización de cualquier otro tipo de actividades se lleven a cabo, pueden poner en peligro la salud, la seguridad o la moral de los niños, por lo que la utilización o la intervención de estos en tales actividades no debe permitirse bajo ningún concepto.

    El convenio exige la adopción de medios encaminados a erradicar las formas extremas de trabajo infantil y garantizar una aplicación eficaz, incluida la determinación de sanciones penales, así como prevención, el abandono de la actividad laboral y la rehabilitación. El trabajo infantil es la causa principal de explotación y abuso de los niños en el mundo de hoy.

    Un paso importante en la presentación es una propuesta de adopción de nuevas normas de la OIT encaminadas a la eliminación inmediata de las formas extremas de trabajo infantil. Se ha solicitado una nueva norma que permite determinar las áreas de acción prioritarias a escala nacional e internacional en la lucha contra este problema. Aunque el número de ratificaciones del convenio Nº 138 ha aumentado en los dos últimos años, algunos estados miembros siguen considerando que es demasiado complejo y detallado para lograr una aprobación universal en un futuro próximo.

    IV. DETERMINACIÓN DE LA POBLACIÓN ECONÓMICAMENTE ACTIVA Y SU DESEMPEÑO EN ESTE MERCADO

    4.1. Comparación de la PEA por Edades

    Del total de la población infantil y adolescente, es decir, la que se encuentra entre 6 y 17 años de edad, el 5.7% corresponde a los niños de 6 a 11 años, el 49.3% a los adolescentes de 12 a 17 años. Por otro lado, del total de varones de 6 a 17 años que en términos absolutos llegan a 3 millones 481 mil personas, los niños de 6 a 11 años constituyen el 51.1% y los varones de 12 a 17 años son el 48.9%. La composición de la población femenina de 6 a 17 años, que llega a 3 millones 433 mil niños y adolescentes, presenta proporciones similares.

    Fuente: Visión del Trabajo Infantil y Adolescente en el Perú, 2001. INEI.

    El 26.5% de la población de 6 a 17 años realiza actividades económicas. Un grupo de estos se dedica solo a trabajar, dejando de lado su capacitación, lo que les perjudicará en el futuro, pues en el ámbito laboral estarán en desventaja.

    La tasa de actividades es un indicador que mide la participación de la población en el mercado laboral, sea en condición de ocupado o desocupado. Esta, en el caso de la población infantil y adolescente refleja una creciente participación en actividades económicas, debido a factores demográficos, sociales, económicos y culturales.

    Se estima en el 2005 una mayor participación en el mercado laboral de la población comprendida entre los 6 a 17 años que alcanzará al 31.8%. Este incremento es mucho mayor en el grupo de niños entre 6 y 11 años cuyo crecimiento se ajusta más a una línea de tendencia que presenta un crecimiento potencial.9

    En los últimos 8 años, la participación de la población de 6 a 17 años pasa de 7.9% a 2.6%, es decir, mientras que en 1993, por cada 100 personas de este grupo de edad, alrededor de 8 se encontraban en el mercado laboral, en el 2001 fueron 27 y en el 2005 fue alrededor de 32 personas que a temprana edad se insertan en el mercado laboral.

    Fuente: Instituto Nacional de Estadística e Informática, 2001.

    Del total de la población ocupada de 6 a 17 años de edad, el 42.4% son niños de 6 a 11 años, es decir, 842 mil personas están en condición de ocupados en la fase precoz de la vida. Esta población presenta un mayor riesgo a los efectos relacionados con el trabajo, por ejemplo, aumentan los riesgos por accidentes y dolencias propias del trabajo propio que desarrollan (vendedores ambulantes, cargadores de bultos, etc.), por la poca experiencia, inmadurez física y psíquica. Los adolescentes ocupados constituyen el 57.6%, que en términos absolutos representan 1 millón 145 personas entre 12 a 17 años.

    4.2. Estudios de la PEA por Sectores Laborales

    Un rasgo general del trabajo infantil es la concentración de ocupaciones en actividades no tecnificadas, intensivas en mano de obra, en empresas; con familiares y con poca o ninguna remuneración.

    En el área urbana las actividades en las cuales se inserta la población de 6 a 13 años son más diversas; el 43.1% ayuda en el negocio de la casa o de un familiar, el 32.7% en la chacra o pastoreo de animales y el 10% como trabajador doméstico, realizando labores de servicios que serían una extensión de sus actividades y responsabilidades hogareñas. También realizan otras ocupaciones como la venta ambulatoria de golosinas, frutas y otros artículos (6.8%), ayudantes en la elaboración de productos para la venta (5.9%), y cargadores de bultos, ladrillos, etc. (.6%).

    Las ocupaciones desarrolladas por los adolescentes de 14 a 17 años son más diversificadas que las de los niños. Tres cuartas partes del total de adolescentes ocupados se desempeñan como peones de labranza en (48.7%) vendedores en kioscos y mercados el (11.6%), trabajo doméstico el (86%), y tejedores, ayudantes de mecánica al (7.0%).

    En un análisis por sexos, los adolescentes varones ocupados representan el 55.8% que en términos absolutos representan alrededor de 429 mil personas y el porcentaje de mujeres es el 44.2%.

    Entre las ocupaciones a la que más se dedican los adolescentes varones se encuentra el peón de labranza (9.0%) y al comercio al por mayor (8.0%), que en conjunto representan al 73% de la población ocupada. Las ocupaciones de los adolescentes están más orientados al servicio en casa de terceros (18.3%), comercio al por mayor y menor (20.2%) y al servicio de lavado y limpieza (5.7%).

    En conclusión, la población ocupada de 6 a 17 años, entre las principales ocupaciones son: trabajadores agropecuarios, vendedores al por menor y vendedores ambulantes. También tienen una relativa importancia las ocupaciones de limpiadores, lavaplatos, lavapisos y personal doméstico. En la población ocupada de 6 a 11 años, tanto en varones como en mujeres, la ocupación predominante, con más del 83% lo constituyen los trabajadores agropecuarios. En los varones adicionalmente destacan los vendedores al por menor y los vendedores ambulantes.

    En los adolescentes de 12 a 17 años ocupados, el nivel de dispersión de la ocupación es más amplia que los niños, desempeñándose en ocupaciones como las antes mencionadas que concentran al 75.0% de los varones ocupados de 12 a 17 años. Estas mismas ocupaciones concentran el 89.6% de las mujeres adolescentes ocupadas, porcentaje influenciado por la mayor participación como vendedor al por menor y personal doméstico.

    V. PROGRAMAS Y POLITICAS PARA ELIMINAR EL TRABAJO INFANTIL

    5.1. Papel de las Instituciones

    A continuación se detallarán las funciones de las instituciones (en este caso, los ministerios) que ofrecen programas para atender los problemas de estos niños.

    5.1.1. Ministerios

    Ministerio de Trabajo y Promoción Social.- El cual tiene como función velar y supervisar el cumplimiento de las normas legales laborales. A través de esta institución, se impulsa el Programa de Capacitación Laboral Juvenil, por el cual se quiere facilitar la inserción laboral de jóvenes de escasos recursos económicos a través de acciones específicas de capacitación y experiencia laboral, que responda a los requerimientos del sector productivo.

    Por ejemplo, han habilitado un Programa llamado Pro joven, por el cual se capacita a niños y jóvenes mediante una formación técnica y laboral, para que luego se reinserten con mejores posibilidades al mercado laboral. Por lo tanto, hay una reducción de la inactividad y del desempleo en este grupo. También, publican estadísticas y anuncios acerca del mercado laboral. Creo que esta institución podría unirse a otros organismos o llevar a cabo más convenios con otras entidades para erradicar el trabajo infantil.

    Ministerio del Interior y Policía del Niño y Adolescente.- Por el cual un grupo de la Policía Nacional, lleva a cabo un programa de organización de niños trabajadores denominado Colibrí, en algunos distritos de la capital (La Molina, Surco, Cercado). Así, se busca desalentar este trabajo obligado por padres y/o familiares. Por este medio, se trata también de que éstos no consuman drogas tampoco.

    Ministerio de Educación.- Por medio del cual, los niños y adolescentes que trabajan y tienen acceso a la escuela mediante programas regulares en horarios diurnos, nocturnos y vespertinos. Entre las razones por las cuales las niñas, niños y adolescentes no asisten a un centro de enseñanza priman los problemas de índole económico (40.9%) y el poco interés que tienen en aprender (16.2%).10 Se puede añadir que la asistencia escolar de niños trabajadores (de 6 a 11 años) es casi el doble que la de los adolescentes que trabajan.

    El Estado lo que debería hacer es promover la educación universal y obligatoria, dependiendo de las condiciones económicas y de vida de toda la población.

    Ministerio de Promoción de la Mujer y del Desarrollo Humano.- El cual se encarga del diseño e implementación de políticas y programas dirigidos a la niñez y adolescencia, particularmente la que se encuentra en condiciones de riesgo. Es el Órgano de Atención Integral al Niño y Adolescente. Promueve la plena vigencia de los derechos de la niñez y la adolescencia, en el marco de los diferentes instrumentos de política señalados por el Gobierno, a través del Ministerio.

    Tiene un marco por el cual se establecen los derechos de éstos niños, sancionando así actos que vayan en contra de su dignidad y salud.

    5.1.2. Municipios

    Muchas municipalidades ya están tomando de las repercusiones que está acarreando el trabajo infantil. Así, las DEMUNAS (Defensorías Municipales del Niño y Adolescente) tienen como función proteger y promover de los derechos que la ley reconoce a los niños y adolescentes; por lo tanto, permite clasificar información específica sobre las circunstancias, causas y características del Trabajo Infantil, y brindar una asistencia jurídica y social a los niños y adolescentes trabajadores.

    5.1.3. ONG’s

    Las Organizaciones no Gubernamentales encargadas del Trabajo Infantil tienen como objetivo un futuro sin trabajo infantil, impulsan proyectos mediante los cuales se desalienta este trabajo y promueve la preocupación social.

    Uno de los principales problemas que afrontan las ONGs en cuanto a trabajo infantil es la posibilidad de concretar las propuestas, debido principalmente a la falta de recursos de carácter financiero y técnico suficientes. Algunas de éstas cuentan con el apoyo económico de agencias extranjeras. Pero, el problema más relevante es la carencia de relación entre el Estado y las ONGs ya que no existe una interacción entre las ONGs y las entidades estatales para compartir experiencias y juntar esfuerzos.

    Hay algunas ONG’s que están a favor del trabajo infantil pues valoran al niño trabajador y al trabajo como medio de desarrollo de éste. La clave es la coordinación, por medio de la cual se construirá una base para proteger a la niñez en alto riesgo. Se trata de acabar con la pobreza, modificando sus causas, cambiando profundamente la organización económica y las relaciones económicas internacionales

    Las ONG’s constituyen una luz de esperanza para cientos de miles de niños esclavos. Dentro de las ONG’s más conocidas tenemos:

    • Red por un futuro sin trabajo infantil.
    • Instituto de Salud y Trabajo (ISAT).
    • Acción Solidaria para el Desarrollo (Cooper Acción).
    • Grupo Iniciativa por los Derechos del Niño (GIN).
    • Marcha Global contra el Trabajo Infantil – Perú.
    • Grupo Iniciativa por los Derechos del Niño (GIN).

    5.2. Programas IPEC en el País

    El Perú es integrante del Programa Internacional para la Erradicación del Trabajo Infantil (IPEC. Sistema de Información de la OIT) desde 1996, por medio del cual se establecieron programas como:

    • Programa de Erradicación del Trabajo Infantil en la Minería Artesanal de Sudamérica.
    • Programa de Erradicación del Trabajo Infantil Doméstico en Hogares de Terceros en Sudamérica.
    • Programa Subregional IPEC.

    Dentro de estos Programas de Acción, se realizaron actividades como:

    • Erradicación de la explotación sexual infantil en el Callao II Fase. (08.07.02 al 07.07.03).
    • Prevención y Erradicación del Abuso y de la Explotación en el Trabajo Infantil Doméstico, Cusco, Perú. (01.03.02 al 30.09.03.
    • Prevención y Eliminación del trabajo Infantil Doméstico en Hogares de Terceros en Cajamarca, Perú. (01.03.02 al 30.09.03).
    • Enredándonos para desenredar. Redes de servicios para la prevención, atención y erradicación del trabajo doméstico, de niñas y adolescentes, en hogares de terceros. (01.08.02 al 31.11.03).
    • Erradicación progresiva del trabajo infantil en el caserío minero artesanal de Santa Filomena, Ayacucho. (01.03.01 al 30.04.02).
    • Erradicación progresiva del trabajo infantil en el asentamiento minero artesanal de Mollehuaca III Fase-Arequipa. (16.04.01 al 15.04.02).
    • Erradicación progresiva del trabajo infantil en el asentamiento minero artesanal la Rinconada, Puno. (06.06.01 al 06.06.02).
    • Campaña Nacional de Sensibilización frente al Trabajo Infantil en el Sector de la Minería Artesanal en Perú. (01.08.01 al 01.02.02).
    • Diseño de una propuesta comunicativa común contra el Trabajo Infantil. (01.12.01 al 31.10.02).
    • Acción contra el Trabajo Infantil a través de la Educación. (06.02.01 al 31.12.01).
    • Fortalecimiento Educativo en el mercado de Abastos de la Parada. (1997-1998).
    • Recursos pedagógicos y retención escolar en Colegios Fe y Alegría.
    • Programa de Erradicación Progresiva del Trabajo Infantil en las Ladrilleras Huachipa. (01.02.99 al 01.02.00).
    • Erradicación progresiva del trabajo infantil urbano en el centro de Lima a través de la formación integral de los niños trabajadores. (01.06.99 al 28.06.00).

    Muchos de los proyectos después de ser evaluados, dieron como resultado un impacto positivo en la sociedad. En mi opinión, existe una alta concentración del gasto público en el sector salud infantil en Lima, pero el problema es que hay menores recursos para las regiones donde la pobreza es mayor. Muchos, responsabilizamos a la pobreza como causa principal de este problema. Si bien el trabajo infantil perjudica la salud, creo que para no seguir teniendo altas tasas de estos indicadores, debemos arrancar el problema de raíz.

    En estos casos, se sacrifica la dignidad y salud de los niños para enriquecer a algunos pocos (ya sean sus padres, familiares o alguien que manifieste poder sobre ellos y que vean esta actividad con fines de lucro).

    Los organismos internacionales proponen amplios recetarios que plantean poco impacto porque contemplan al niño aislado de la estructura de relaciones internacionales que en última instancia es la causa de su explotación.

    Por otra parte, la ratificación de tantas declaraciones, no garantiza su cumplimiento, no hay sanciones si se infringen, etc. Es decir, hay reglas si, son su marco legal, pero como podemos observar, no se cumplen.

    Efectivamente, hay personas para las que el trabajo de los niños es bueno porque les ayuda a ganar algo para salir al menos de la calle. Naturalmente estas personas lo consideran bueno para los hijos de los demás. Para los propios, sostienen que los pequeños deben ir a la escuela y vivir en un ambiente estimulante, pero lastimosamente no todos pensamos ni vivimos en las mismas condiciones.

    Me llamó la atención una opinión de una alta mandataria de la OIT, pues dice que si se elimina el trabajo infantil, se estará promoviendo la prostitución infantil. Coincido con ella, pero en cierto grado porque la eliminación sabemos que se dará en forma gradual y dependiendo de la situación del país. Los niños pueden encontrar otro trabajo (es más probable que no perciban la remuneración que esperan, pero será mayor que lo que percibían en las calles) pero no creo que pongan en riesgo su salud ni integridad (física ni moral).

    Hay muchas ONG’s, pero su tarea más valiosa consiste en rescatar y rehabilitar a miles de niños sometidos a condiciones inhumanas de trabajo y explotación, pero muchas veces ésta acción es mucho más lenta comparado al crecimiento de la proporción de niños que trabaja.

    El Gobierno debe proporcionar y reforzar la educación universal y obligatoria, con escuelas de calidad y adaptadas a las circunstancias de todos, con programas creativos, flexibles y que enseñen conocimientos útiles para la vida y la comunidad.

    Pienso que para quienes el trabajo infantil es rentable deben ser obligados a poner fin a esta práctica y a ayudar a reparar el daño que han causado en estos niños. Deben, además contribuir económicamente a la plena rehabilitación y educación de los niños/as que trabajan y se les debe imponer el máximo de sanciones por explotar a los niños. El gobierno también debe promover y apoyar campañas a favor del derecho a la educación (asegurando la educación básica pública).

    VI. CONCLUSIONES

    • La pobreza es una de las causas que da origen al mercado laboral infantil y hace que ésta aumente y perdure por más tiempo.
    • El Estado debe proponer una legislación adecuada y centrada en el mercado laboral infantil y debería hacerla cumplir obligatoriamente.
    • Las condiciones extremas en las que trabajan estos niños, hace que muchos de ellos sufran enfermedades, infecciones, quemaduras y hasta muerte.
    • El trabajo infantil hace que el retraso escolar, o la pérdida de años de educación se traduzca en una cantidad inferior del capital humano disponible en una sociedad.
    • La mayoría de niños, niñas y adolescentes pertenecen a la población económicamente activa sin importarles las condiciones y riesgos a los cuales se enfrentan.
    • Para acabar más rápido con este problema, debemos apoyarnos todos, por lo tanto, se debe, sensibilizar a la opinión pública sobre la situación, consecuencias y alternativas frente al trabajo infantil.

    VII. BIBLIOGRAFÍA

     

    Realizado por:

    Gloria Alison Reátegui Noriega